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El mago: Un joven que se encuentra de pie ante una mesa, sobre la mesa

aparecen varios elementos que representan las espadas, copas y oros, el gran sol que
aparece detrás de su silueta representa la fuerza y calidez que le acompaña e incluso una
fuerza superior que le guía y le protege, está de suerte puede conseguir lo que se
proponga y como colofón TIENE TODOS LOS INSTRUMENTOS NECESARIOS
PARA HACERLO.

Sus manos sostienen una varita y una copa, ésta varita es conocida como la
varita mágica y lo ayudará a obtener todo lo que se proponga.

El mago posee un sombrero sobre su cabeza con forma de ocho simboliza el


signo del infinito, el símbolo de las energías cósmicas y la vida universal. Se identifica
con: Habilidad, espontaneidad, elocuencia, inicio de nuevos proyectos exitosos.

La sacerdotisa: Observamos a una mujer sentada en un aposento con cara


relajada pero al mismo tiempo demuestra sabiduría, posee en sus piernas apoyado un
libro con lo que nos indica que es una persona paciente que le gusta aprender, y es capaz
de utilizar su tiempo en una actividad mental, es consciente de que a veces para
conseguir nuestros deseos no debemos hacer ningún movimiento, solo debemos saber
esperar, y otorgarle tiempo al tiempo, es conocedora de asuntos ocultos y además es
capaz de dar sabios consejos, la carta no denota una acción concreta con lo cual
entendemos también que es una carta de espera y serenidad, en la lámina observamos en
su corazón el signo del ying-yang, aludiendo equilibrio y armonía, nos alerta, NO
TODO LO BUENO ES TAN BUENO NI LO MALO TAN MALO, así que siempre
hay que estudiar de manera profunda cualquier situación. Se refleja a una mujer que
estudia con detenimiento la situación antes de tomar alguna decisión.

Podemos asociarla, con inteligencia, asuntos ocultos, intuición, empatía, y nos


invita a proyectar nuestra confianza y satisfacción hacia los aspectos de nuestra vida.
Nos predice buenas relaciones y comunicación; en ella predomina el color azul
simbolizando la pureza y espiritualidad.
La emperatriz: Una mujer sentada en su trono nos habla de estabilidad y
fuerza. Habilidad para resolver problemas y dificultades, observamos detrás de ella el
sol que resplandece y la nutre de inteligencia y calidez. Tiene alas de ángel lo que
refleja su espiritualidad y la búsqueda de los asuntos divinos dentro de su mundo
material.

Posee en sus manos herramientas como son el cetro y el escudo que le ayudan a
abrirse paso y a pulverizar obstáculos, podría representar a una esposa, una madre o a la
idealización de mujer independiente que todos soñamos.

Posee sobre su cabeza una corona lo que nos indica que ha conseguido sus
deseos y ahora es el momento de sentarse a disfrutar de su triunfo, refleja su autoridad
sobre la situación, nos habla de mejora, progresos logros, incluso de fecundidad
femenina con términos felices.

Nos anuncia prosperidad, sensualidad y belleza, momentos alegres y altamente


productivos.

El emperador: Nos representa a un hombre, de pie apoyando su fuerza en


una sola pierna, lo que nos sugiere que esta relajado pero al mismo tiempo alerta y
preparado por si tiene que defenderse, inteligente y fuerte, pero muchas veces negado al
cambio.

Sus ropas nos reflejan riqueza y vanidad, y algunas veces ostentación,


autosuficiencia, valor y firmeza, representa liderazgo, y nos recuerda que el poder está
dentro de nosotros mismos, nos muestra el camino hacia el interior, nos habla de que los
problemas se solucionan y que evolucionan.

Individuo que está predispuesto a ser responsable y coherente. Tiene en su mano


un cero igual que la emperatriz, lo que nos indica que tiene poder de lo terrenal y es
capaz de influir en los pensamientos y acciones de las personas de su entorno, es un
líder nato.

Su mano apoyada en el cinto también denota aires de superioridad, desde su


posición parece creer que tiene todo bajo control y que es capaz de cambiar cualquier
suceso que no sea de su agrado.
Prevé que al fin recogeremos los frutos de nuestra cosecha.

El éxito ha llegado.

El sumo sacerdote: Analizamos a un hombre anciano con larga barba y


sentado. Su mano derecha está a la altura del pecho, otorgándoles bendiciones a los
fieles que están delante de él.

Su mano izquierda sostiene la triple cruz, que nos habla de razón, generosidad,
imaginación, sentimiento, renuncia y la capacidad de tomar decisiones con suficiente
madurez y entrega.

Tiene un rostro dulce y comprensivo y se encuentra cómodamente sentado


después de haber recorrido un largo camino y haber encontrado su tranquilidad. La
estrella de David que observamos detrás, significa compromiso y lealtad.

Identificamos esta carta con la protección, calma y equilibrio búsqueda de


espiritualidad y de verdad interior.

Los enamorados: Este arcano nos habla del amor en su aspecto más
profundo, de sensualidad y del deseo, así como también habla de la necesidad de elegir.

En la lámina observamos a un joven en medio de dos mujeres, una más joven


que representa la pasión en el amor o los deseos reales de nuestro corazón, la fuerza e
intensidad de los anhelos, la otra mujer mayor representa el deber, el amor de una madre
o de una responsabilidad el pensamiento, y el pensamiento lógico, sobre ellos, vemos a
cupido el ángel del amor apuntando con su flecha al joven, por lo que lo vemos
atormentado y forzado a tomar una decisión aunque se encuentra muy bien de ambos
lados.

Es muy probable el inicio de un amor, es necesario tomar una decisión. Habla de


retos y pruebas que debemos aprender a sobrellevar. Los opuestos se complementan
perfectamente pero tenemos la capacidad nosotros mismos de discernir hacia donde nos
queremos dirigir, el color amarillo que predomina en esta carta nos habla de la fuerza y
el poder que encontramos dentro de nosotros mismos.
El carro: Se refiere a movimientos, proyectos que se inician, mudanzas e
incluso viajes, habla de una situación que parecía estancada o congelada que al fin se
mueve hacia el éxito.

Está representado por un joven, vestido elegantemente y con una preciosa


armadura, también lleva un cetro simbolizando su poder, el joven no conduce el carro
con riendas, ya que el solo con su voluntad lo lleva hacia delante sin necesidad de
fuerza física, su armadura lo protege de falsedades y tentaciones.

Nos habla de la necesidad de establecer claramente nuestras metas y hacia donde


queremos dirigirnos.

Observamos a un hombre inteligente y seguro que se dirige hacia el éxito, por


muy largo y difícil que sea el camino. Es el momento de seguir nuestro camino sin
detenernos por nada ni por nadie.

Las cosas avanzan, se encaminan es una carta de acción y movimiento de éxito


conseguido como fruto del esfuerzo realizado.

La justicia: Este arcano demuestra, fuerza, valor, equilibrio, claridad de


pensamiento, serenidad y sobre todo justicia como tal, se reconocen los esfuerzos
realizados, al fin encontramos comprensión, es una carta que nos habla de reposo, de
necesidad de esperar como sucede con la justicia terrenal que suele ser lenta pero
segura.

En la imagen podemos observar a una dama que lleva una corona que denota su
rango, está sentada, esperando, con comodidad denotando su paz y confianza, su espada
determina su rango real, y la balanza lealtad y equidad.

En esta carta encontramos pensamientos y sentimientos. Momento indicado para


realizar negociaciones y tratar temas de papeleos, nos recuerda que toda acción genera
una reacción y que siempre hay algo más.
El ermitaño: En esta imagen observamos a un hombre mayor, con un
candil en la mano, un bastón en la otra y en soledad, la expresión de su cara denota
angustia y sacrificio, en medio de la noche camina hacia su retiro, su aislamiento para
pensar, está en búsqueda de un camino.

Nos sugiere que es necesario tomar cierta distancia para reflexionar y dar el
siguiente paso, debemos tener calma.

El camino hacia el aprendizaje es largo, pero una vez que llegamos podemos
incluso guiar a otros con nuestra luz, debemos ser más humildes y aceptar que es
importante ayudar y reconocer nuestros errores para continuar en paz y armonía.

Esta carta nos habla de paciencia y calma aunque las cosas parecen ir lento
estamos en el proceso y esta tensa calma es parte del mismo.

La rueda de la fortuna: Esta imagen nos muestra una mezcla de varios


elementos humanos y animales, lo cual viene a explicarnos que es momento de
cambios.

La situación se mueve hacia algún lado, puede ser bueno o malo según las cartas
que la acompañen, aunque partiendo de la base que todos los movimientos son buenos
es una carta positiva y que nos habla de cambios y mejoras.

La imagen con alas que aparece en la parte central superior de la lámina, con su
espada afilada, domina la rueda, lo cual nos recuerda que es el hombre el creador, el que
domina su propio destino.

Habla de sucesos inesperado de cambios, es importante estar preparados y


aceptarlos tal y como vienen, generalmente cambios beneficiosos avances y buena
fortuna.

La fuerza: En la imagen observamos a una mujer joven, que introduce sus


manos dentro de la boca de un león, este se lo permite sin poner mayor resistencia, la
joven posee sobre su cabeza un sombrero que tiene forma de ocho al revés lo que es
símbolo del infinito, nos demuestra que la fuerza mental es más importante que la
fuerza física, y que no debemos desesperar, hasta lo más difícil podemos lograrlo con
nuestra fuerza mental e inteligencia, hay que ser pacientes, y confiar en nuestras propias
habilidades.

Es posible dominar las pasiones, los vicios y las tentaciones que nos atormentan,
con nuestra voluntad.

Indica que tenemos la capacidad de enfrentarnos a algo y luego apartarlo de


nuestra vida.

El colgado: En esta carta observamos a un hombre que esta de cabeza


colgado a dos árboles, esta sostenido del pie derecho por una especie de cuerda atada a
los árboles. Su expresión es tranquila relajada como si no estuviera sufriendo o como si
aceptase sin más su situación, no pone resistencia.

Nos habla de sacrificio, de inestabilidad de miedos y de sacrificio, del temor que


representa que el amor no sea correspondido.

Es la imagen de cambio que conlleva a un sacrificio, para obtener mejores cosas


en todos los sentidos.

Debemos comenzar a ver las cosas desde otro punto de vista, ponernos un poco
en el lugar de los demás, saber dónde nos encontramos para entender hacia donde nos
dirigimos.

La muerte: En esta lámina se nos representa la figura de un esqueleto que


lleva en su mano una guadaña, va avanzando por el suelo de color negro, lleno de
miembros de cuerpos y plantas, nos habla del materialismo y del corte de lazos,
evolución, cambios, fin de un ciclo e inicio del otro, que está representado por las
plantas.

El esqueleto corta lo que no nos sirve ni nos ayuda, lo superficial se elimina, y


deja germinar y crear nuevas situaciones.

SE NOS LIBERA DEL PASADO, podemos salir adelante, en un nuevo


comienzo, nuevas oportunidades y cambios favorables, renovación y purificación.
La templanza: Observamos a una mujer de semblante tranquilo y alegre
que sostiene en sus manos dos jarras desde la que fluye líquido multicolor que nos
indica comunicación, serenidad y armonía.

Los asuntos se resuelven, avanzan, carta favorable de esperanza, serenidad y


unión. La promesa de que la vida cambia y se renuevan las energías, todo evoluciona y
sigue adelante.

Dominio sobre nosotros mismos, capacidad para mediar en asuntos, hay


reconciliaciones y felicidad, tenemos la respuesta dentro de nosotros mismos, hay
relación favorable entre necesidad y satisfacción.

Las cosas fluyen espiritual y materialmente.

El diablo: Una figura mezclada, que tiene senos de mujer, pies de animal,
representa la mezcla lo impuro, los vicios y excesos, lo anormal o que ha perdido la
coherencia, sentado sobre un pedestal rojo.

Las alas intentan dar un toque de espiritualidad.

Posee también un extraño casco, que nos indica su gran inteligencia y la luna
india oscuridad y falta de claridad en los asuntos en los que interviene.

Esta carta nos refleja pasiones, sexualidad sin amor, deseos físicos, vínculo
materialista, egoísmo.

La torre: Esta carta nos habla de crisis, separación, inestabilidad,


observamos en la lámina dos figuras que caen, dos representaciones humanas que se
precipitan de la torre que se destruye se caen bases fuertes, creencias sólidas.

Nos augura cambios dramáticos, diferentes puntos de vistas, rupturas,


separaciones físicas y mentales, angustia y desasosiego, además, habla de cambios
repentinos e inesperados que nos producen dolor, pero que a la larga, producirán a su
vez situaciones favorables para la vida del consultante.

Una toma de conciencia obligada a la realidad de la vida, respecto a situaciones


que estaban mal en nuestra vida y que no nos queríamos dar cuenta.

Nos advierte sobre cuidado con las caídas o tropiezos.


La estrella: Una mujer joven desnuda, que está de rodillas en la orilla de un
río o un caudal de agua lo que representa la vida misma, ella tiene en sus manos dos
vasijas una de la que fluye un líquido azul y la otro rojo, representando la roja búsqueda
de la espiritualidad, los sentimientos, la pasión, imaginación, deseo físico, y la azul, la
razón, la inteligencia, la fuerza y la serenidad.

Ella posee todo lo necesario para ser feliz, pureza, ilusión, verdad y juventud.
Representa esta carta muchas puertas que se abren hacia las alegrías esperadas, así como
también nos habla de fecundidad y progreso de la mujer.

Nos habla de felicidad de consecución de metas y sueños de realización y


entrega. Este arcano nos aconseja disfrutar de todas las oportunidades que nos presenta
la vida.

La luna: En esta carta podemos observar en la parte central, dos perros que
ladran a la luna, lo que nos recuerda que los animales muestran cambios según las
etapas de la luna, y el hombre también es capaz de experimentar estos cambios.

Representan materialismo, y espiritualidad respectivamente, están frente un


charco de agua quieta, que a su vez tiene dentro un cangrejo, y otra luna que nos
recuerda al signo cáncer, vemos dos mundos paralelos, no solo lo que vemos es lo que
existe, siempre hay más aunque no sea visible ante una primera mirada.

Habla de pasividad ahora no es el momento de actuar, si no de observar, habla


también de probabilidad de embarazo, es una carta femenina, debemos estar alerta pues
podrían engañarnos, también se refiere a la inestabilidad.

El sol: Representa siempre amor, calidez, afecto, felicidad, sus rayos de todos
los colores, nos habla de gran cantidad de oportunidades, buen momento para acuerdos
nuevos inicios, felicidad en las relaciones.

El muro que está a sus espaldas nos cuenta que los obstáculos del pasado ya han
sido superados, ahora están en el momento de disfrutar.

Armonía y afecto capacidad para trabajar en equipo así como también de crear
nuevas cosas, indica, plenitud éxito, alegría y buena suerte.

Las dos personas representadas en la carta nos hablan del amor universal.
El sol también nos indica buen momento para ventas.

El juicio: En esta imagen podemos observar en la parte superior, un ángel


con una trompeta y en la parte de abajo una especie de reunión, una pareja parece estar
frente a otro individuo, como si estuvieran escuchándolo, o esperando aprobación del
mismo.

Tiempo de mirar dentro de nosotros mismos si estamos satisfechos con los actos
cometidos y en caso de no ser así, perdonarnos y seguir adelante.

Se descubren nuevos intereses y situaciones, hay evoluciones y cambios


favorables, encuentros con grupos de personas, reuniones y fiestas, MOMENTOS
FELICES, nos augura resolución de asuntos y disolución de asuntos del pasado.

El mundo: Esta carta nos predice felicidad y belleza, consecución de metas,


vemos en la parte central a una mujer que sujeta una varita y un bastón lo cual nos
indica que es capaz de cambiar todo su destino y convertirlo en lo que ella desea.

Está dentro de una corona de laurel que representa el mundo, la tierra, las cuatro
figuras que se observan en los extremos de la lámina, representa la armonía de todos los
elementos, el agua, el aire, el fuego y la tierra, tenemos la llave, podemos dominar el
mundo, representa perfección, equilibrio seguridad consecución de metas, fortuna, amor
y compromiso.

Es una carta altamente positiva que nos augura éxito, felicidad y reconocimiento.

Nos habla de PERFECCIÓN, todo está en nuestras manos, al fin ya no


dependemos de nadie y posibles viajes exitosos.

El loco: Este arcano tiene una gran particularidad en el tarot de Balbi, porque
no está numerado como en el resto de los Tarots, en su imagen vemos un joven que
posee sabiduría inmadurez, e inocencia, tiene rapidez de acción y movimiento tiene la
capacidad de hacer las cosas bien sin detenerse demasiado a analizarlas.

Sobre sus hombros lleva una mochila, lo que nos hace intuir que no tiene ningún
tipo de apego material y se marcha con lo que para él es lo más necesario, es capaz de
empezar de nuevo y arriesgarse, no quiere ni tiene ataduras en ningún sitio.
Le gusta renovarse y cambiar, nos habla de la necesidad de arriesgarnos de dar
un paso más, aunque no parezca muy seguro.

El perro que le intenta detener se muestra agresivo y fuerte, sin embargo al loco
no le importa, ha decidido hacer su camino sin detenerse por nada que no sea su propio
deseo.

Nos asegura un viaje, un inicio hacia algo desconocido pero favorable.

TIRADA DE LA PIRÁMIDE CON EL TAROT BALBI


Esta tirada se utiliza para elegir entre varias opciones o decisiones importantes,
por ejemplo, si tiene que optar entre un trabajo y otro, entre dos personas o entre dos
deseos. Los pasos a seguir para realizar la tirada son:

Mezcle bien las 22 cartas del Tarot de Balbi (sólo los Arcanos Mayores).

Extienda las cartas de Tarot y elija 10 aleatoriamente.

Colóquelas en la posición correspondiente en forma de pirámide, la primera


carta lideriza la pirámide, las dos siguientes en una línea posterior, la siguiente línea la
forman 3 cartas y la base será constituida por cuatro perfiles que serán representados por
las últimas 4 cartas.

Dé vuelta las cartas en el mismo orden que fueron extraídas.

Lo que significa cada carta en la tirada es:

Carta 1: Nos explica el problema. Alude a la pregunta realizada por el


consultante.

Carta 2: Muestra los impedimentos que se presentan en la vida del consultante y


lo que le interfiere para solucionar el problema.

Carta 3: Indica lo que está a favor del consultante.

Carta 4: Habla del pasado del consultante en relación con la pregunta que ha
hecho.

Carta 5: Muestra el estado de ánimo del consultante en el presente inmediato,


también sus expectativas y anhelos.

Carta 6: Indica los deseos del consultante, aun y si están ocultos.

Carta 7: Guía hacia una solución del problema.

Carta 8: Muestra el futuro, si se acepta la solución propuesta en la carta de tarot


número 7.

Carta 9: Revela el porvenir del que consulta si no se acepta la guía u orientación


del cartomante (carta 7).
Carta 10: Resultado final. Aporta datos para que el consultante defina su
situación o resuelva el problema.

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