Este modelo, además, afirma que el diseño del curriculum no es un asunto técnico o
profesional, sino –primariamente- un asunto de política cultural. La propuesta del
modelo crítico es la de someter todo a crítica y que los actores educativos tomen
conciencia de la realidad para establecer líneas de acción y transformarla
Para esta perspectiva “El eje del currículum es el contexto, las necesidades y
demandas sociales como necesidades de formación de los grupos destinatarios y deben
ser las prioridades del mismo y en el que el rol del formador es el de concienciador de la
situación del alumnado y un agente socio-educativo del cambio de la comunidad u
organización en la que está ubicado”. Para el modelo socio-crítico, el currículum es un
instrumento de cambio social, entendido como un posicionamiento ideológico y de
compromiso con la transformación social y la lucha contra la desigualdad frente a la
concepción del currículum como transmisión y reproducción ideológica y social. De
esta forma el diseño y su desarrollo se convierte en un diseño abierto que debe ser
reconstruido, según se va desarrollando constantemente en base a los datos que se van
recogiendo durante esta experimentación.
a) Los grupos destinatarios: Para este modelo, el eje del currículum y su desarrollo
son los grupos destinatarios, entendidos como grupos sociales y culturales, cuyas
necesidades no son sólo de carácter formativo, sino también de emancipación y
participación activa respecto a un entorno socio-tecnológico y económico, planteando
la necesidad de concienciar a los grupos destinatarios de su situación para que luchen y
salgan de la desigualdad y la marginación o comprometerse con los elementos de un
servicio público de calidad, a través de la formación, como un instrumento muy potente
para esa finalidad.
En este modelo el currículum y los proyectos formativos deben tener como punto de
partida estas necesidades y los grupos destinatarios y configurar su eje de diseño y
desarrollo del mismo.
b) Los objetivos: Estos son coherentes con sus posicionamientos y tienen una gran
carga ideológica, es decir, se persigue la emancipación y concienciación de la formación
como un instrumento contra la desigualdad y la marginación. De esta forma los
objetivos serán de transferencia e impacto de la formación que se desarrolla a un
contexto socio-político y tecnológico y se definirán en términos de capacidades a
desarrollar como concienciarse, analizar críticamente, transferir y aplicar los
conocimientos a nuevas situaciones complejas (creatividad y resolución de problemas),
o elaborar, definir o gestionar estrategias alternas, etc).
d) La metodología: Esta suele ser de tipo grupal, pero no simplemente con el objetivo
de generar unas relaciones afectivas o de desarrollar determinados roles que fomenten
y potencien la autoestima, sino que por el contrario, el grupo se convierte no sólo en un
grupo potencial de desarrollo cognitivo, sino también en un grupo de presión de
acuerdo con sus intereses, ideologías y utilización posterior de los conocimientos. De
este modo configuran un tejido socio-relacional con alto nivel de implicación y
capacidad de toma de decisiones en los alumnos participantes sobre diferentes
aspectos: desarrollo de la clase, elementos del currículum y criterios de evaluación. Las
metodologías estratégicas más utilizados serán la definición y análisis de situaciones
para definir variables y estrategias de intervención alternas.
https://www.youtube.com/watch?v=IPgdBai7HxY