Está en la página 1de 3

EL IDEALISMO FILOSÓFICO

El idealismo es la familia de teorías filosóficas que afirman la primicia de las ideas o


incluso su existencia independiente. Un sinónimo es el inmaterialismo. Del idealismo
existen dos variantes principales: el objetivo y el subjetivo.1 El idealismo filosófico, por
lo tanto, afirma que la realidad que se encuentra fuera de la propia mente, no es
cognoscible en sí misma, ya que el objeto del conocimiento humano siempre es
construido por la actividad cognoscitiva.
El idealismo es la posición filosófica que afirma que el mundo exterior es una idea
procedente de la mente del hombre o de un ser sobrenatural. Es una posición
filosófica antigua que se considera que se inició con Platón. Su enfoque es
racionalista, tiene la tendencia a considerar el razonamiento deductivo como único
método de conocimiento. Este método parte de los enunciados universales para llegar
luego a proposiciones particulares.
La verdad, la cual tiene carácter absoluto existe independientemente del individuo.
Por su naturaleza misma, algunos idealistas asignan excesiva importancia a los
aspectos intelectuales y se ocupan poco de los problemas físicos.
El idealismo, por lo tanto, se opone al materialismo, una doctrina que sostiene que la
única realidad es la materia. Los idealistas subjetivos creen que la entidad en sí es
incognoscible, pero la reflexión permite aproximarse al conocimiento. Para los
idealistas objetivos, en cambio, el único objeto que puede conocerse es aquel que
existe en el pensamiento del sujeto. Es posible distinguir, de acuerdo al idealismo,
entre el fenómeno (el objeto que es conocido tal como aparece frente a los sentidos) y
el noúmeno (el objeto tal como sería en sí mismo). La realidad está compuesta por el
contenido de la conciencia del sujeto: por lo que percibimos y no por lo que es.
Variantes y características
Idealismo objetivo
El idealismo objetivo sostiene que las ideas existen por sí mismas y que sólo
podemos aprenderlas o descubrirlas. Representantes del idealismo objetivo son:
Platón (realismo idealista o platónico), Leibniz, Hegel, Bolzano, Dilthey y Frege.
Idealismo subjetivo
El idealismo subjetivo sostiene que las ideas sólo existen en la mente del sujeto: que
no existe un mundo externo autónomo. Representantes del idealismo subjetivo son:
Descartes (en ocasiones), Berkeley, Kant, Fichte, Mach, Cassirer y Collingwood.
La principal característica del idealismo subjetivo es que todo gira alrededor del sujeto
cognoscente (ser pensante que realiza el acto del conocimiento). Existen, a su vez,
dos variantes. La versión radical sostiene que el sujeto construye el mundo: no
existen cosas por sí mismas sino que sólo existen cosas para nosotros
(constructivismo). Según esta concepción, la naturaleza no tiene existencia
independiente, lo cual entra en desacuerdo con todo lo que sabemos sobre el mundo
antes de la aparición de los seres humanos.2 En cambio, la versión moderada «afirma
que las cosas son del color del cristal con que se miran».
La ciencia y la tecnología no aprueban ninguna versión del idealismo, pues ambas
suponen el mundo externo y por eso lo exploran y lo modifican.
El simple aserto de que las ideas son importantes no lo califica de idealista. Casi
todos los materialistas y realistas admiten la existencia e importancia de las ideas,
solamente niegan su auto existencia.
Platón consideraba que el hombre ideal o modelo que debe formarse es el filósofo
que ama la sabiduría, la busca, se esfuerza por alcanzarla; el hombre que contempla
las ideas y se recrea en ellas. Para Aristóteles, la educación debe buscar la formación
de un hombre prudente y virtuoso que sea feliz. El hombre feliz es el que ha
desarrollado al máximo sus potencialidades; el que ha desarrollado su esencia
racional y se dedica a la búsqueda de la verdad, a la contemplación de las ideas, al
estudio de la filosofía, la física, las matemáticas.
San Agustín representa la máxima expresión de la filosofía educativa idealista
cristiana.Para Kant, su filosofía tiene un enfoque moral. Para él, el fin debe ser la
formación del carácter moral del estudiante. Debe formar al individuo para que actúe
de acuerdo con lo que le dicta su conciencia racional. El fin último de la educación
debe ser la búsqueda de la perfección moral tanto individual como socialmente.
Para Santo Tomás, educar conlleva adquirir conocimientos y formar el carácter. La
adquisición de conocimientos contribuye al desarrollo de la capacidad intelectiva del
hombre. Así el hombre llega a ser filósofo. La formación del carácter contribuye a la
realización de las potencialidades espirituales del hombre. Así llegará a ser virtuoso.
Educar, pues, implica actualizar las potencialidades inherentes en la inteligencia y en
el alma.
John Locke sostenía que los fines de la educación debían ser cuatro: la virtud, la
sabiduría, la buena crianza (buenos modales, templanza, evitar vicios), el aprender a
aprender. El verdadero aprendizaje es el desarrollo máximo de la razón, de las
actitudes y destrezas. La educación debe contribuir a la formación del carácter moral
del estudiante y en el desarrollo pleno de la inteligencia dibujo, taquigrafía, anatomía,
legislación, filosofía natural, psicología, inglés y francés.
En filosofía, Idealismo designa las teorías que —en oposición al Materialismo—
sostienen que la realidad extra mental no es cognoscible tal como es en sí misma, y
que el objeto del conocimiento está preformado o construido por la actividad
cognoscitiva.

Principios y variantes

Las distintas variantes de idealismo postulan distintos principios que modelan y


conforman nuestra imagen del mundo de una manera determinada:

La entidad en sí de lo real permanece en principio incognoscible, aunque la reflexión


permita aproximarse asintóticamente a un conocimiento más refinado, en las teorías
del idealismo subjetivo o trascendental.
En el caso de las teorías del idealismo objetivo, esta doctrina epistemológica se
complementa con la teoría metafísica de que el objeto conocido no tiene más realidad
que su ser pensado por el sujeto; mediante la autoconciencia de éste, la verdadera
esencia del objeto se devela como la actividad subjetiva de pensamiento como algo
real y no abstracto.
La definición que antecede corresponde, dentro de las escuelas filosóficas, al
idealismo alemán y en concreto a Kant. No obstante Kant es al mismo tiempo
materialista, pues contempla la existencia del mundo exterior, independientemente del
hombre, cognoscible para éste, aunque no en su totalidad; la cosa en sí es para Kant
un residuo del idealismo. El objeto del conocimiento es, y es una perogrullada,
conocer, y ello no es una actividad exclusiva del hombre. Esta oposición formal o
académica, que de suyo se comprende, oculta sin embargo la esencia de la filosofía,
es decir, la relación entre el ser y el pensar; dualismo entre ambos o identidad. ¿Es el
mundo "real" como lo muestran nuestros sentidos? o ¿es parte sí, parte no? ¿Puede
el hombre conocer la cosa en sí de Kant; la esencia de la materia?

El idealismo distingue, por lo tanto, entre


El fenómeno (del griego φαινομαι, fainomai, "mostrarse" o "aparecer"), que es el
objeto en tanto que es conocido (como "aparece" frente a los sentidos y la
inteligencia),
Y el noúmeno (del griego νοεω, noeo, "comprender" o "inteligir"), que es el objeto tal
como sería en sí mismo.
La realidad para el idealismo no consistirá en aquello que está frente al sujeto como
algo dado que existe por sí mismo, sino en aquello que está en el sujeto como "un
contenido de su conciencia"
Características
Las características principales de este movimiento, resumiendo, son:
No conocemos las cosas tal y como son en sí (noúmeno), sino lo que aparece
(percibimos) aquí y ahora (fenómeno).
El sujeto construye, al menos en parte, el objeto: para Kant el sujeto es activo en el
sentido de que influye en lo conocido a partir de sus estructuras aprióricas y de los
procesos que en ellas descansan.
El conocimiento es independiente de la experiencia, porque los objetos del
conocimiento son los juicios a priori.
Pero al conocimiento sólo se puede llegar a través de la experiencia porque el objeto
del conocimiento son los juicios sintéticos.

Representantes e influencia posterior


Filósofos idealistas fueron:
Immanuel Kant, desarrollador del idealismo alemán;
Los neokantianos;
Y los precursores de tres variantes del idealismo:
Idealismo subjetivo de Johann Gottlieb Fichte,
Idealismo objetivo de Friedrich Wilhelm Schelling
Idealismo absoluto de Georg Wilhelm Friedrich Hegel, así como las distintas escuelas
hegelianas.

Varias formas de teoría científica (sobre todo el esencialismo de Pierre Duhem, el


falsacionismo de Karl Popper y el constructivismo) son idealistas en distinta manera y
grado.
En un sentido radicalmente distinto, se denomina a veces idealismo a la teoría
platónica de que las Ideas (la forma inteligible de las cosas, comparable a la esencia
en el sentido aristotélico del término) existen separadamente de los objetos en un
mundo inteligible.

Conclusión
En la historia del transcurso del pensamiento filosófico el idealismo es una variante
fundamental de esa historia. Es la actitud del filósofo que no se conforma con lo que
en apariencia, "hay". Postula mejor una realidad superior inextricablemente ligada a la
estructura intrínseca de la conciencia humana.
No es en modo alguno la actitud espontánea de la existencia individual. Es una actitud
a la que trabajosamente se ha llegado en la historia, y a la que no muchos hombres
pueden acceder, chocando con la dificultad de encontrar en la conciencia, un
mediador, entre objeto y sujeto.

También podría gustarte