(Fragmento)
Y disparé, precipitado,
E imperturbable ritmo,
En la fe en Él su inconstancia en mí,
Para todas las cosas rápidas para la rapidez que puedo demandar;
E imperturbable ritmo,
….......................................................
¡Ay!, tú no sabes
"El Sabueso del Cielo” (The Hound of Heaven) es un poema centrado en la búsqueda de un pecador por
un Dios amoroso. Escrito en un estilo noble y digno que expresa sentimientos profundos, se clasifica
como una oda. Apareció por primera vez en “Poemas”, una colección de obras de Francis Thompson,
publicado en 1893.
El orador está huyendo de Dios, como lo hacen muchas personas atrapadas en el mundo. Pero Dios lo
persigue. Aunque consciente del amor de Dios por él, el orador continúa corriendo, creyendo que
someterse a Dios significa renunciar a los placeres mundanos.
El orador va de un lugar a otro e incluso de los problemas de "la puerta de oro de las estrellas" en su
esfuerzo por escapar de su perseguidor. Él ruega porque el amanecer sea breve para que la oscuridad
pueda llegar a ocultarlo. Le pide a la noche que lo cubra. Pero Dios todavía le persigue, diciendo: “Nada
acoge, al que no se ampare en mí".
Cuando el orador ve a unos niños, piensa que lo animan. Pero no encuentra refugio con ellos. En su
lugar, oye la voz de su perseguidor:
Una trompeta suena desde las almenas de la eternidad a través de la niebla en la confusión del tiempo.
Luego sigue una voz fuerte: "¡He aquí que, todas las cosas se te escaparon, por cuanto tu te me
escapaste" Se solicita al orador si se ha ganado el amor de otro ser humano, entonces responde,
¡Ay!, tú no sabes
Salvame, sólo a mí? Dios explica que lo que Él tomó del orador, los placeres que le llevaron en la
dirección equivocada, que no pretendía herirlo, sino para ayudarlo a encontrar su camino hacia el
camino correcto. La felicidad que crees que has perdido, Dios dice, no se pierde sino que "almacenala
para ti en casa."
El orador se pregunta si la tristeza que siente no es más que la sombra proyectada por la mano de Dios a
través de él. Dios le dice que la felicidad que buscaba huyó se fue siguiéndolo todo el tiempo.
Thompson estudió teología católica en el Ushaw College en Durham, y luego medicina en Manchester,
aunque no culminó estos estudios. En 1885 se instaló en Londres con el objetivo de ser escritor. Toda su
vida estuvo marcada por la pobreza, por una profunda religiosidad, y por su adicción al opio.
Su obra literaria influenció notablemente a Jules Supervielle y al joven escritor J. R. R. Tolkien. (Notas
biograficas tomadas de Wikipedia)