La arteriola eferente lleva sangre del

glomérulo. Debido a su diámetro

menor al de la arteriola aferente,
crea una resistencia al flujo
sanguíneo, produciendo un respaldo
de sangre que crea una mayor
presión en la cavidad glomerular. 
La arteriola aferente lleva sangre
hacia el glomérulo del nefrón

Las arteriolas aferente y eferente regulan la presión de los

capilares glomerulares y peritubulares. 
Las arteriolas aferentes son musculares, gruesas y cortas y
cada una origina un glomérulo. Llevan sangre al glomérulo.
La arteriola aferente lleva sangre hacia el glomérulo del
nefrón 

Arteriola eferente.- Las arteriolas eferentes se forman de

una convergencia de vasos capilares del glomérulo. La
arteriola eferente lleva sangre del glomérulo. Debido a su
diámetro menor al de la arteriola aferente, crea una
resistencia al flujo sanguíneo, produciendo un respaldo de
sangre que crea una mayor presión en la cavidad
glomerular. 
Los capilares glomerulares desembocan en la arteriola
eferente, que origina una segunda red capilar, los capilares
peritubulares, alrededor de los túbulos de la nefrona. Las
arteriolas aferentes forman los capilares del glomérulo. A la
salida del glomérulo, los capilares convergen en la arteriola
eferente.