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en el planeta.
Como en todas las civilizaciones conocidas hubo alguna forma de manifestación musical, la
historia de la música abarca a todas las culturas y épocas.
La música de una determinada sociedad está estrechamente relacionada con otros aspectos
de su cultura, como la organización económica, el desarrollo tecnológico, las tradiciones,
las creencias religiosas, etc.
En un sentido amplio, la música nace con los seres humanos, ya que según algunos estudios
estaba presente mucho antes de la migración de los primeros grupos que dejaron África
hace más de 50 000 años.
Sumario
1 Origen de la música
2 La música en la antigüedad
o 2.1 Clasificación de instrumentos musicales primitivos
3 La música en la Edad Media
4 La música en el Clasicismo
5 La música en el Romanticismo
6 Postromanticismo
7 La música del siglo XX
8 Desarrollo en la tecnología
o 8.1 Música electrónica
9 Fuentes
Origen de la música
La música tiene su origen en la búsqueda de lenguaje, esto es en la necesidad de
comunicación, las teorías etnomusicológicas formuladas sobre todo a partir del último
tercio del siglo XIX que han tenido que ampliar significativamente en nuestra centuria el
marco cronológico a la hora de determinar la antigüedad del fenómeno musical del hombre:
su capacidad de distinguir diferentes alturas de sonido y la facultad de proceder a la
ordenación de estos, nos remontan a hace unos 40 000 años, cuando el Homo Sapiens era
capaz de imitar los sonidos de la naturaleza y diferenciarlos de los que constituían la
estructura de su lenguaje, fue entonces con el llamado Homo musicus cuando comenzaron a
perfilarse las primeras expresiones musicales asociadas a un hecho colectivo, rituales
funerarios, cacerías y ceremonias vinculadas a la fertilidad, formaban parte de una
cotidianidad de la que la música había entrado a formar parte por derecho propio.
Es probable que el primer instrumento musical fuese la propia voz humana misma, que
puede emitir una gran variedad de sonidos, desde cantar, tararear y silbar hasta hacer clic,
toser y bostezar. En cuanto a otros instrumentos musicales, en 2008 los arqueólogos
descubrieron una flauta de hueso con cinco agujeros en la cueva Hohle Fels, cerca de la
ciudad de [[Ulm (Alemania).[1][2] Se considera que tiene aproximadamente 35 000 años.
Tiene una boquilla en forma de V y está hecha con el hueso del ala de un buitre.[3]
Se considera que el instrumento musical más antiguo del mundo es la flauta de hueso
encontrada en el sitio arqueológico de Divje Babe ―a 84 km al oeste de Liubliana
(Eslovenia)―, que no fue producida por homo sápiens sino por neandertales.[5] Se trata del
fémur de un oso de las cavernas (extinguido hace 25 000 años) y data de hace entre 50 000
y 60 000 años.
La música en la antigüedad
Es aquella en la cual las manifestaciones musicales del hombre consisten en la
extereorización de sus sentimientos a través del sonido emanado de su propia voz y con el
fin de distinguirlo del habla que utiliza para comunicarse con otros seres.
Los primeros instrumentos fueron los objetos o utensilios o el mismo cuerpo del hombre
que podían producir sonidos.
Uno de los primeros instrumentos: la flauta (en un principio construida por un hueso con
agujeros).
En el Período Patrístico apareció la Era Cristiana y la Era Media, en esta última la Historia
de la música se encuentra íntimamente ligada a la forma en que se desarrolló la liturgia
cristiana, ya que se consideraba a la música el vehículo por medio del cual los sacerdotes
elevaban la palabra a Dios.
Entre el año 374 y el 397, san Ambrosio reunió aquellos signos que debían ser aceptados en
un credo antifonario naciendo así el canto ambrosiano. Entre el 540 y el 604 san Gregorio
Magno recopiló himnos eliminando los que tenían origen popular o pagano, dando
nacimiento al canto gregoriano. Desde su nacimiento la música cristiana fue una oración
que se tenía que cantar con devoción tal como lo decía San Pablo “Cantando a Dios con
vuestro corazón”, así pues el texto es la razón de ser del canto gregoriano ya que “el que
canta reza dos veces”.
La música en el Clasicismo
La música en el Romanticismo
La palabra Romántico comenzó a utilizarse hacia mediados del siglo XVI. En los últimos
años del siglo XVII, comienza como una reacción contra el clasicismo.
A medida que avanza el siglo XIX, hay una gran influencia, que va creciendo, cada vez
más, de la literatura en la música: en Alemania los poemas de Wolfgang Von Goethe y
Friedrich Von Schiller, fueron utilizados por Schubert, Schumann, Brahms, etc., para
producir una de las manifestaciones musicales-poéticas más importantes de todos los
tiempos, el Lied Alemán. Asimismo escritores franceses y británicos fueron los
inspiradores de diversas obras de Beethoven, Berlioz, Verdi y otros.
También aparece el drama musical. Hay un sentido profundo y definitivo del “colorido”
sonoro, lo que permite enriquecer el vocabulario musical con los medios que transforman y
amplían el arte sinfónico de los tiempos modernos.
El siglo XIX será el siglo del piano, gracias a sus posibilidades polifónicas, sonoras y de
virtuosismo extraordinario.
Postromanticismo
Los finales del siglo XIX, y los comienzos del siglo XX fueron testigos de las últimas
etapas del romanticismo, y de la transformación del lenguaje romántico en el nuevo
lenguaje musical. Este movimiento se produjo principalmente en Alemania. Sin embargo
dos fuerzas desafiaban la posición musical en Alemania. Una era el nacionalismo, y la otra
era el surgimiento de una nueva escuela de composición en Francia. Los últimos treinta
años del siglo XIX fueron relativamente pacíficos en Europa, el comienzo del siglo XX se
caracterizó por un creciente desasosiego social y un aumento de la tensión internacional: la
primera guerra mundial (1914-1918). En el reino de la música hubo tensiones e inquietudes
similares, y durante estos años, concluyó el período clásico-romántico.
Uno de los rasgos característicos de este período en Alemania fue una resurrección del
interés por la ópera sobre el cuento de hadas.
Mientras tanto en Italia aparecen una serie de músicos que incorporan a su música, nuevos
objetos sonoros: la incorporación de ruidos. Esta corriente se llamó Futurismo y afecto
tanto a la música como a la literatura y al arte. El futurismo pone como punto de partida el
ruido, no el sonido. En Francia mientras tanto, surgió paralelamente el Bruitismo (del
francés Bruit, ruido), que parte de ese mismo punto.