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GOBIERNO BOLIVARIANO DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA DEFENSA


UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL DE LAS FUERZAS ARMADAS
UNEFA ARAGUA – CINU 2605 D1

Darlyn V. Santana G. C.I.: V-27.866.065

Análisis de Capítulo I:
PERSONALIDAD, PERSONALIDAD BÁSICA E IDENTIDAD NACIONAL

En primer lugar, la pregunta fundamental de todo ser humano es el propósito de su


existencia, la identidad, ¿quién soy?, ¿para qué nací?, preguntas que están estrechamente
relacionadas. En este mismo sentido, previo a la constitución de una sociedad, la misma
debe asumir una identidad, por ejemplo, nadie crea una empresa sin antes pensar el
propósito o función de la empresa, sin pensar antes en su nombre. Hecha la observación
anterior se tiene que, la personalidad es una combinación de nuestra identidad más las
características específicas que nos distinguen como personas.

Además, el carácter de un individuo es formado por el entorno social al que está


expuesto durante su desarrollo a lo largo de toda su vida; mientras que el temperamento es
algo innato, son rasgos y cualidades con las cuales esta persona nace. Dadas las
condiciones que anteceden, existen cuatro tipos de temperamento: colérico, sanguíneo,
melancólico y flemático. Resulta oportuno aclarar que, la personalidad engloba tanto al
temperamento como al carácter. En relación con este último, las creencias, valores,
conductas, actitudes y motivaciones de una persona son altamente influenciadas por su
entorno social.

Cabe agregar que, la cultura es la suma de una conducta aprendida y los resultados de
la conducta cuyos elementos que la integran se comparten en una sociedad. Como puede
observarse, en cuanto a la personalidad básica, en cada civilización los padres educan a sus
hijos de acuerdo a la forma que ellos consideren correcta, a su vez sus hijos imitan rasgos
similares de sus padres. No obstante, en la educación no solamente influyen los padres, sino
también toda persona que tenga un contacto directo con el niño. En este mismo orden y
dirección, la personalidad básica se refiere al comportamiento de una sociedad en sí misma.

En efecto, la identidad del venezolano es la combinación del temperamento y el


carácter en su personalidad básica. Es evidente entonces que, las costumbres nacen de un
conjunto de hábitos compartidos. Aunado a esto, el concepto de nación se va construyendo
en la medida que las comunidades adquieren conciencia de la herencia histórica. Según se
ha visto, la identidad nacional es el sentido de pertenencia respecto a la historia, territorio en
común, elementos socioculturales, lenguaje, creencias, costumbres, valores, conductas e
instituciones sociales que comparten los miembros de un país.

Sobre la base de las consideraciones anteriores, la identidad nacional en sí, es un


resultado de un arduo proceso de formación cultural y enseñanza, desde la educación en
casa, hasta cuando un niño va a la escuela, todos los conocimientos que adquiere sobre su
país es lo que forma y solidifica su identidad nacional o sentido de pertenencia, desde el
conocimiento de tradiciones, costumbres, hábitos y modismos que son característicos de un
venezolano. Ante la situación planteada, se realizaron varias encuestas a los venezolanos,
donde aparentemente los resultados eran favorables en cuanto al conocimiento de íconos de
Venezuela, como Simón Bolívar; Sin embargo, cuando se formularon preguntas más
detalladas muchos no tenían conocimiento del pensamiento del Libertador; otros fueron
interrogados en cuanto al escudo nacional y sus respuestas resultaron negativas. También
se cuestionó a los individuos sobre el significado de la figura de Guaicaipuro y un 28,8% de
las personas encuestadas no sabían y sólo el 7,4% lo asoció con “Resistencia heroica contra
la conquista”.

En este propósito, el conocimiento de los venezolanos respecto a su origen, historia,


tradiciones, costumbres, música, creencias y demás, es muy escaso, o más bien muy
superficial, teniendo unas raíces débiles que fundamentan su identidad como ciudadanos
venezolanos. Después de lo anterior expuesto, la identidad del venezolano debe ser
fortalecida mediante la educación y formación cultural ya que, de acuerdo a estudios que se
han realizado, las cifras de venezolanos que conocen en profundidad su historia, cultura y
sus tradiciones no es muy alta; es decir la ignorancia de las costumbres, hábitos, tradiciones,
historia entre otros, afecta gravemente la identidad nacional venezolana en su plenitud. Por
lo tanto, es imprescindible reforzar el sistema educativo para garantizar la adquisición del
conocimiento cultural de los venezolanos y así, poder afirmar su identidad nacional.

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