Es una actividad diaria de todas las personas. Y así como es
importante en las relaciones personales, lo es también en las organizaciones.
En el ambiente de trabajo, una persona interactúa con sus
compañeros, superiores, clientes, etc. De igual manera, recibe información, da o recibe instrucciones y se coordina con equipos de trabajo. Todas estas tareas y relaciones involucran la comunicación, de ahí la importancia de lograr una buena comunicación en las organizaciones laborales. Desarrollo La comunicación es responsabilidad de cada empleado de la institución. Todos participan de ella (el presidente, personal de línea, etc.). La comunicación efectiva con empleados, clientes, accionistas, vecinos de la comunidad y otros públicos es esencial para la empresa. Las relaciones con la gente se establecen al comunicarse efectivamente con ellos.
En las organizaciones existen relaciones comunicativas tanto con el
ecosistema interno como con el externo en que se desenvuelve la empresa. Por eso se clasifican dos Niveles de Comunicación Empresarial:
• Interna: la que se da en el universo mismo de la organización, de la
empresa con sus empleados.
• Externa: la que se da en el universo de la sociedad, de la empresa
hacia el público en general, sus clientes potenciales y proveedores. Importancia de las relaciones humanas en el trabajo Las relaciones entre los empleados y la gerencia tienen un valor sustancial en cualquier lugar de trabajo. Las relaciones humanas se refieren al proceso de formación de los empleados, atendiendo a sus necesidades, fomentando una cultura de trabajo y la resolución de conflictos entre los diferentes empleados o entre empleados y directivos. Entender algunas de las formas en las que las relaciones humanas pueden afectar a los costes, la competitividad y la sostenibilidad a largo plazo de un negocio económico, contribuyen a subrayar su importancia.
Fundamentos
Las relaciones humanas en el lugar de trabajo son una parte
importante de lo que hace que un negocio funcione. Los empleados a menudo tienen que trabajar juntos en proyectos, comunicar ideas y proporcionar la motivación para hacer las cosas. Sin una cultura de trabajo estable y acogedora, pueden surgir retos difíciles tanto en la logística de la gestión de los empleados y en la línea inferior. Las empresas con centros de trabajo de acoplamiento y una mano de obra bien formada son más propensas a retener y atraer empleados calificados, a fomentar la lealtad entre los clientes y más rápidamente se adaptan a las necesidades de un mercado cambiante.
Motivación y productividad
Las relaciones laborales son una fuente de motivación de los
empleados, lo cual es importante para mantener la productividad. Los empleados que están interesados en su trabajo y en el bienestar de los demás empleados tienden a ser más productivos que los que no lo son. Esta productividad paga evidentes dividendos financieros para la empresa, ya que se pueden hacer más cosas en menos tiempo y con menos costes. Construir relaciones, tanto el reconocer el valor de un empleado en la empresa como la preocupación por sus necesidades, a menudo lleva mucho tiempo. La falta de comunicació n en el trabajo La falta de comunicación en la empresa genera desinformación, y el hecho de trabajar desinformado provoca desconocimiento de dónde se producen los fallos o quiénes los generan, haciendo así que estallen los conflictos. Si los mensajes no llegan a los receptores a tiempo o no se envían los suficientes mensajes, surgen los problemas y los malentendidos. Una buena comunicación en el ámbito laboral es uno de los pilares fundamentales de la motivación. Un empleado que tiene la posibilidad de expresar sus opiniones se siente escuchado y por lo tanto, valorado. Los empleados motivados sienten una mayor fidelización hacia la organización, y esta es una de las claves para retener a los mejores talentos y para optimizar la productividad. A medida que la empresa es más grande, mayor es la importancia de la buena comunicación en la empresa para mantener a todos los empleados enfocados en los mismos objetivos.
¿A qué afecta la falta de comunicación en
la empresa? La falta de comunicación entre los empleados de los distintos departamentos es una realidad en todas las empresas, pero hay que conseguir evitarla. El hecho de que los trabajadores no conozcan las labores de los demás departamentos provoca conflictos interdepartamentales ya que no entienden la urgencia de ciertas tareas de facturación, ni las consecuencias de no recibir los documentos necesarios para la facturación a tiempo.
La falta de comunicación interna provoca resentimiento y frustración
entre los trabajadores de una organización. La comunicación fluida debe partir desde arriba. Debe existir un líder que articule de forma clara y concisa, que todo el mundo entienda, la visión y los objetivos que deben perseguir todos unidos. La falta de motivación daña las relaciones, el humor y por tanto, la productividad. Si un empleado se siente identificado con la empresa y siente que su trabajo está reconocido, aumentará su productividad ya que aumentará su confianza en sí mismo y con ello su satisfacción profesional y personal.
Cuando existe una mala comunicación interna se producen retrasos en la planificación de los proyectos, al tener que rehacer o repetir tareas o incluso rehacer la planificación entera. La comunicación es vital para la gestión de proyectos y la planificación de toda la empresa. Como tener una buena comunicació n en el trabajo Tener una buena relación con tus compañeros de trabajo es un elemento clave para el bienestar en el entorno laboral. Por eso, es esencial que las cuides. Pasamos 8 horas diarias en nuestro puesto de trabajo y gozar de una buena relación con los compañeros es mucho más agradable y contribuye más a nuestra motivación y productividad que no tenerlas. Pero, ¿cuál es la actitud a adoptar para tener buenas relaciones laborales con los compañeros? Actitudes a adoptar con tus compañeros de trabajo: - La comunicación es la base de toda buena relación de trabajo. Para evitar conflictos y trabajar de manera más eficiente, tener una buena comunicación es fundamental. - Respeto. Vital, en la vida laboral y fuera de ella. Escucha las opiniones de tus compañeros y respétalas. Nunca menosprecies la manera de pensar de otros o sus ideas porque, si lo haces, se acabará generando un clima de inseguridad en el que los demás no compartirán sus ideas por temor a no ser respetados. - Responsabilidad. Responsabilízate de tu trabajo. Fomentar las buenas relaciones con tu entorno laboral pasa por ser un buen compañero y, para eso, es necesario que te responsabilices de tu trabajo y sepas trabajar en equipo. Responde frente a las tareas asignadas y esfuérzate en hacerlas bien porque, si no, podrías estar afectando al trabajo de otros y esto acabará por estropear las relaciones. - Comprensión. Errar es de humanos y todos cometemos fallos alguna vez. Si detectar un fallo en el trabajo de un compañero, sé comprensivo y házselo saber en privado. Háblalo personalmente con él y, si se puede solucionar hablándolo, evita reportarlo a un superior. - Rumores y temas sensibles. Los rumores son fuente de un gran número de malentendidos. Aléjate de cualquier rumor que esté circulando y, sobre todo, evita extenderlo. Asimismo, procura mostrarte aséptico respecto a temas conflictivos como política, religión, dinero, educación… Como ves, son pautas tan aplicables al entorno laboral como a nuestra vida personal. Sin embargo, a veces el día a día, la carga de trabajo y el estrés hacen que nos olvidemos de estas reglas de convivencia tan sencillas.