Barranquilla, Abril 5/18.

Tema: NO VIVIR DE ILUSIONES SINO DE REALIDADES

Texto: Proverbios 13: 11. "Las riquezas de vanidad disminuirán; Pero el que
recoge con mano laboriosa las aumenta."

Hoy vemos que el libro de los proverbios son palabras llenas de sabiduría, son
experiencias propias que el pueblo ha tenido con Dios y con la vida.

Muchos de nosotros andamos pensando que el dinero es el camino para la

felicidad, pensamos que si nos ganamos la lotería, le vamos a comprar una casa a
la madre, al hermano o al mejor amigo, andamos prometiendo en dar y ayudar a
los demás y pensamos en mejorar nuestro nivel de vida, en cambiar de casa y de
estrato social, etc.

Pero todo eso es ilusión, y la realidad es que tenemos un empleo donde ganamos
de pronto el salario mínimo o un pocos más, pero no nos alcanza porque somos
malos administradores de lo poco o mucho que devengamos.

La ilusión no deja que avancemos en la vida y siempre permanezcamos

estancados y de pronto hasta fracasados, perdiendo el tiempo, perdiendo las
oportunidades de ser felices, con nuestra pareja, gozar a nuestros hijos, vivir en
paz y tranquilidad, compartir días de piscinas con nuestra familia en armonía. Etc.

Jesucristo nos dice -No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín
corrompen, y donde ladrones minan y hurtan; sino haceos tesoros en el cielo,
donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan.
Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón- Mateo 6:
19 - 21. Así que debemos ser conformes con lo que tenemos y mejor es hacer
tesoros en el cielo, ser felices con nuestra familia, compartiendo y viviendo con
gozo y alegría, es el deseo de nuestro Padre Celestial.

EL DINERO NO DA LA FELICIDAD

Pruebas de que el dinero no da la felicidad

LAS MEJORES COSAS SON GRATIS.

Abrazar, Sonreír, Los amigos, La familia, La tranquilidad, La felicidad, La paz, Los

buenos recuerdos, Amar.

NIVEL DE FELICIDAD

EL DINERO NO ES LA SOLUCIONA TODOS LOS PROBLEMAS

Gastar dinero en juegos de azar

Dios y las riquezas
(Lc. 16.13)

24Ninguno puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al

otro, o estimará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las
riquezas.