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PEM EN PEDAGOGÍA Y TÉCNICO EN ADMÓN.

EDUCATIVA
E120.10 ADMINISTRACIÓN I
LIC. AURELIO ESAÚ RAMÍREZ FLORES

PRINCIPIOS DE HENRY FAYOL


Henri Fayol, ingeniero, empresario e industrial de la última mitad del Siglo XIX y de los primeros
años del XX, realizó estudios y publicó sus tesis sobre la dirección y administración de
empresas.

Tras los tremendos cambios que habían producido, en los últimos cien años, tanto las
Revoluciones Francesas como la Revolución Industrial y la aparición del primer capitalismo
liberal, emerge (como algo totalmente nuevo) la empresa como lo que sigue siendo hoy, una
organización de personas y bienes económicos que produce o vende bienes o servicios.

Una parte esencial de cualquier empresa es su alta dirección, las personas que diseñan la
propia empresa (sus objetivos, procedimientos, cultura y política), implementan ese diseño a
través de la gestión y, por último, revisan y comprueban los resultados que se obtienen para
realizar los cambios y mejoras necesarias.

Para elaborar métodos y medios de esta actividad de dirección y gerencia surgieron, a lo largo
de los Siglos XIX y XX, diversas teorías y estudios entre los que vamos a destacar aquí los del
americano Frederick Winslow Taylor. En 1916 Henri Fayol publicó su libro “Administración
Industrial y General” gracias al cual es conocido como el padre de la administración
empresarial hoy en día.

La empresa debe cumplir una serie de funciones para realizar sus objetivos, de carácter
técnico, comercial, financiero, contable, de seguridad y administrativo. Según Fayol, estas
últimas funciones, las administrativas, son las que deben coordinar y sincronizar a las cinco
anteriores, por lo que son la parte más importante de su libro en el que nos habla de 14
principios de administración.

✓ Unidad de mando

Un empleado de la empresa debe responder, recibir órdenes e informar a un único superior.


Si son varias las personas que dirigen y ordenan a un trabajador se produce el desorden y
mermará la disciplina, eficiencia, productividad y rentabilidad de la empresa.

Para ello la empresa debe contar con un organigrama en el que se fijen de manera clara las
cadenas y líneas de mando en la empresa, existiendo una cabeza en la alta dirección y
transmitiéndose la autoridad de manera vertical.

✓ Autoridad y responsabilidad
Cada directivo de la empresa, en cualquier nivel, debe tener una autoridad que esté
perfectamente equilibrada con sus responsabilidades.

Si alguien tiene autoridad muy por encima de su responsabilidad en la organización abusará


de esa autoridad y si tiene que responder muy por encima de la autoridad se sentirá frustrado
y no podrá realizar bien sus cometidos.

Debemos hacer una distinción entre autoridad y poder, este último es la capacidad de hacer
cosas mientras que la autoridad se refiere al derecho a hacerlas.

✓ Unidad de dirección

Todas las actividades de la empresa que tengan una misma naturaleza y un mismo objetivo
deben estar dirigidas por un mismo mando y sujetas a unos mismos principio y procedimiento.

Así, el departamento como marketing, producción o administración tendrán, cada uno de ellos,
un único superior jerárquico y estarán sujetos, también cada uno de ellos, a unos mismos
procedimientos y políticas.

✓ Centralización

En una estructura totalmente centralizada la cabeza de la organización tiene toda la autoridad


y poder mientras que en una descentralizada esas funciones de autoridad y poder se reparten
y comparten entre los distintos mandos y secciones.

Una centralización absoluta tendría el problema de que los directores subalternos no tendrían
ninguna autoridad para desarrollar sus funciones

Por otro lado, una absoluta descentralización hace que la dirección de la empresa no tenga
autoridad ni poder para controlarla.

En la práctica no existen de manera absoluta ninguna de las dos: debe haber un equilibrio
entre centralización y descentralización para que la empresa funcione.

✓ Subordinación del interés particular al general

Existirán en la organización los intereses de las personas que allí trabajan y los de la propia
empresa; se debe dar prioridad a estos últimos porque, de no hacerlo así, la organización
colapsará.

✓ Disciplina

No puede la organización sobrevivir sin disciplina, debe existir respeto a las normas y
procedimientos de la empresa.
Lo mejor sería la autodisciplina, pero si no la hay entonces la disciplina debe ser forzada
mediante órdenes, sanciones y premios.

Los encargados y gerentes de cada sección de la empresa deben tener capacidad de liderazgo
para imponer ese respeto.

✓ División del trabajo

La empresa se organizará y dividirá entre personas y departamentos; la división supone


especialización y ésta supone eficiencia, lo que es importante para la productividad,
rentabilidad y eficacia del negocio.

Lo ideal será conseguir que en cada puesto de trabajo esté la persona más capacitada y
adecuada para sus funciones por su formación, experiencia profesional y aptitudes.

✓ Orden

Orden en las cosas: cada cosa en su lugar y un lugar para cada cosa. Es importante saber
dónde está todo y no tener que perder tiempo buscando cosas.

Orden en las personas u orden social: se busca que esté el hombre adecuado en la función y
lugar adecuados. Todo en la empresa debe estar en su sitio para poder aprovechar al máximo
los recursos.

✓ Jerarquía

En la empresa existirá una línea de mando (o cadena escalar) que va desde la alta dirección
hasta los puestos más bajos. Todo el mundo debe tener muy claro quién es su superior y quién
su subordinado. Esta jerarquía supone una buena comunicación y no debe romperse.

Sin embargo, a veces es necesaria una acción rápida que puede suponer saltarse esta línea
de mando y ponerse en comunicación directa con jefes superiores al nuestro: esto debe estar
previsto y regulado.

✓ Justa Remuneración

Es necesario tener una buena política de remuneración a las personas que trabajan en la
empresa, adecuada a los servicios que prestan, a su experiencia y capacitación profesional.
La remuneración tiene un importante componente económico, pero también existe una parte
de la remuneración no económica (respeto, promoción, formación, etc.). El resultado de
gestionar bien las retribuciones a los empleados será una mejor productividad y calidad de sus
servicios.

✓ Equidad

Es una combinación de justicia y bondad, su utilización por la dirección de la empresa crea un


mejor ambiente de trabajo e, incluso, devoción de los empleados.
✓ Estabilidad del personal

Cada trabajador debe tener el tiempo necesario para adaptarse y aprender a desempeñar bien
su cometido y, una vez que ha conseguido esa adaptación, tener una posición tranquila y
estable para realizar sus tareas. No es una buena política estar renovando personal
continuamente.

✓ Iniciativa

La dirección o gerencia debe permitir e, incluso, fomentar que los trabajadores realicen su
propia planificación personal de sus tareas y su puesta en práctica. Deben asumir los
trabajadores que, en esta planificación, se van a cometer errores.

El fomento de la iniciativa individual producirá una mayor satisfacción del personal y buenas
aportaciones al negocio.

✓ Trabajo en Equipo

No es sólo el fomento de trabajar en equipo sino la creación de un espíritu de cuerpo en el que


los trabajadores se sientan integrados y motivados por unos objetivos comunes. Esto creará
un mucho mejor ambiente de trabajo.

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