Dios contesta por su fidelidad

Sal 65:5 Fielmente respondes a nuestras oraciones con imponentes obras, oh Dios
nuestro salvador. Eres la esperanza de todos los que habitan la tierra, incluso de los
que navegan en mares distantes. NTV

Introducción
Es la fidelidad de Dios que Él nos oye y atiende a nuestras suplicas. Es la
fidelidad de Dios que se comunica con nosotros y nosotros con él por medio de
la oración. Hebreos 10:19. Toda dificultad, problema y crisis está en las manos
de Dios para poder orar y clamar a él.

I. La fidelidad de Dios a la oración da esperanza. Mateo 21:22

“…Y todo lo que pidiereis en oración, creyendo, lo recibiréis…”

Pero por su fidelidad hacia nosotros, nos da esperanza al responder.

¿Estás a punto de darte por vencido escogiendo creer todas las mentiras y
circunstancias que te presenta Satanás, en cambio de creer las verdades y
Promesas de Dios? ¿Has perdido la esperanza en Dios tú Señor?
Si pones toda tu esperanza en el Señor, confiarás en Él completamente para
tu vida, tu salud, tu matrimonio y lo que nos debe motivar es la esperanza en
la fidelidad de Dios que atiende a nuestras oraciones.

II. La Fidelidad de Dios a la oración da seguridad. Lucas 11:8-10

“…Y yo os digo: Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá.
Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le
abrirá…”

La oración a Dios está en nuestra fe, en lo que yo creo. Y por supuesto que
creemos en la fidelidad de Dios que nos oye, esto nos produce seguridad y
confianza en saber que él nos escucha.
La oración nos comunica paz, seguridad, confianza. Nos ayuda a crecer en la fe
y en nuestra adhesión a Jesucristo. Nos da fuerzas para luchar contra el mal.
Nos hace abiertos y disponibles para Dios.

III. La fidelidad de Dios a la oración da confianza. 1 Juan 5:14

“…Y esta es la confianza que tenemos en él, que, si pedimos alguna cosa
conforme a su voluntad, él nos oye…”

Puedes acercarte con toda confianza, con toda seguridad, con toda la certeza
posible que Dios nuestro Padre te oye. No tengas miedo, temor por algo que
hayas hecho o posiblemente cometido. Es la fidelidad de Dios que nos
mantiene con plena confianza de acercarnos a Él, con toda libertad.
Es muy natural y humano que tengamos temores. Sin embargo, el Señor no
solo quita el temor, sino que nos da valor y la fortaleza para vencer.

Conclusión
Deposita en Dios toda ansiedad, problema, dificultad en las manos de Dios, tu
clamor y oración tiene respuesta, no desistas ni desmayes. ¡animo!