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CANCIÓN PAGANA

Cantaré mi canción pagana


haré lo que tenga ganas,
no me preguntarás porqué
y si me buscas a la madrugada
y en mi casa no hay nada
es porque me ahorqué.
Me fui, junto a todos los dolores,
yo vi la vida,
pero no sentí ninguno de sus colores.
Ay ay, mi canción pagana
haré, haré lo que se me dé la gana,
porque ya no me importa nada...
Cantaré el himno a los piojos,
iré al frente, contra los cañones, como un soldado,
mi gorro está todo agujereado,
y caminaré lo que ningún hombre caminó hacia ningún lado,
ni siquiera por todo el oro,
todo-el-oro.
No pensaré en nada, mi nariz huele tan marrón,
mis ojos son vidrio,
gato y dragón de sangre ¡tengo tanta hambre!
y por más que beba y trague
no puedo saciar
sólo sé esperar, todo me sabe mal.
Espero debajo de un zaguán, las baldosas frías…
Antigua visión de la mañana,
de la nada una mujer verde se echa encima mío,
yo sólo siento frío
ya no me importa si nada es mío…
Oigo a la fuente de la ciudad revolverse,
todo el mundo es blanco
la mujer verde se introduce dentro de mi cuerpo
mis cantos son para mi tropa de muertos,
cactus en el desierto,
esta mañana me despierto y nada es cierto,

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sólo apenas que atestiguo mi barba al viento,
todo lo que digo lo siento, todo es un cruel invento.
Y nada es bárbaro
y yo no soy tu amigo
yo sólo estoy siendo proyectado
y no me darás tu abrigo.

LA ALFOMBRA

En el viejo hervidero de sangre


la campana se murió, y quedó llorando.
Pedazos de río se llevan la sangre a otras ciudades
manchando gárgolas y niños.
¡Procesión de ensueño, al paso de galopantes revoluciones!
La multitud festiva cosecha sangre
la acompañan las viejas, en grueso batallón
con la condición errante: malabaristas de vino
pedantes, asesinos…
Toda esa sangre grasienta y herética oculta
las verdades feroces, o las expone.
El palacio ocioso, la curtiembre, las antiguas almacenes
los hostales llenos de hojas…
El rio va lavando
manos y cuchillos.

Y el prostíbulo lleno de rosas,


las terrazas llenas de amantes.

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NOCTURNO

Negra belleza es la tristeza…

Que con la sutileza del arpa

nos harta.

¡Más cuánto abarca esa plebeya,

que es la ignota estrella

que guía las viejas barcas!

Tiempo atrás, del lado del ocio,

ella fue mi ángel sucio…

Del más denso pantano partimos

cabalgando el nebuloso cielo repleto de vino.

Por el odio a Dios, y a las cosas comunes

nos quisimos.

EPITAFIOS

El ruido rojo de la tarde

desemboca en bélico estruendo en la campana invisible,

el árbol está triste,

la mujer se está desvistiendo.

¡Oh gimiente desvarío de la fresca ola de plata

que azota el joven cuerpo!

Siento recorrer en las montañas,

en ligera marcha,

calamidades, arrebatos, cabellos sin atar

¡Extremidades veloces como el destino!

A veces, cuando me acuesto y floto

percibo frescas olas

frescas como lo que recién nace.

Y entre los arbustos hay

Dioses muertos.

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NOCTURNO II

Hay algo mal en el hombre

ese asqueroso roedor de sangre en místico basural

prolongará para siempre

el inevitable final

el invencible final.

Ese aristócrata gran imbécil de Dios me debe el cielo.

Porque yo no tengo la culpa

nena, te juro, yo no tengo la culpa.

TIEMPO VIEJO, CARAVANA

Viejos años de sodomía


ya han sido
cariños y venganzas, colección de extravagancias
al cielo han partido.
Diga usted amiga, si no recuerda,
aquella canción que gritábamos, hoy decís en vano
en los caminos polvorientos.
Plagados de monumentales cisnes plateados
fuimos perdiendo.
Viejos años de sinfonías, de carrocerías llenas de sexos
un infierno de vigilias muertas te debí
y caricias sueltas.
No, no hablaré del sonido de las puertas
no me conmueven, despiertan
del sueño, despiertan
en un sillón de cuero flotando en el lago
en una canoa con un enjambre de Brugmansias
esperan con ansias
la mente muerta.

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METAFÍSICA

Si fui inseguro nunca fue de la magia


o de la tierra
o de los guijarros montados uno arriba del otro.
Nunca fui inseguro del agua,
nunca tuve vergüenza del viento.
Sólo atestiguo a las rotas baldosas de mármol
roídas por enormes raíces doradas que suben a algún cielo
por supuesto, nunca desconocido por mí.

EL BALCÓN AZUL

Embebido por el fuego violeta (amante del opio)

risueño labrador de desatinos

en el barco de libido

he vivido.

Recostado en las trincheras

acorazado, perseguido.

Embebido por las humaredas de viejas chimeneas suizas

fui pordiosero en Ibiza,

y asesiné - con facón en mano - a diez soldados

y mis deudas he saldado

pero no con el amor

pero no

con el amor.

Embebido por las luces - y por el vapor.

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EXAMEN

El corazón, he aquí, azotado por la impiedad del pasado

el amor ya agotado,

vibra en otras personas.

Y los vemos cabalgar con brillante crin

junto a un ejército de palomas

hartos de gloria…

Parecen poseer la clave del amor

la virtud del sabio, la energía del niño

contrastando aún más mi corazón repulsivo al cariño.

Pero contra la cruel daga de Dios

yo he masticado del Nilo

y fui apuñalado por cientos de flores,

flores invisibles que ni los peores magos han sentido.

CEMENTERIO

Soy una brusca raíz

amalgamada por los dolores.

Bebo el vino de la calavera

mientras me siento a fumar en la escalera

veo a las dionisiacas formas que bailan.

Tengo eclipsada la mente.

Grandes piedras dentro del breve corazón,

canto mi canción: amaba a una mujer, no recuerdo su nombre

mate a mi madre y a mi padre

soy un paria, no tengo patria ni hermano;

fui haciéndome incisiones en el cerebro por todo el camino en blanco

y sangro

y sangro

aúllo en el techo la mitológica canción del prado.

- El mundo estaba colmado de noches sinfónicas.

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EBRIEDAD DE UN MAÑANA

Adorada joven de cerebro roto

¡Te busco en los caminos mustios,

te celebro pero no estás conmigo!

Yo era tu perseguido

y caminábamos al cementerio.

¡Qué alucinaciones demenciales

como lluvia diaria de flores

acechaba nuestro vivir cotidiano!

Desde que me diste tu mano…

Y hurtábamos almacenes,

hambrientos sin refugio

nuestro vivir alabanzas al plenilunio.

Qué condecorado se encontraba el cielo…

Qué callado se encontraba dios…

Y así íbamos nos dos

por los caminos del desconsuelo.

durmiendo en el frío suelo

cantando una canción.

Una mañana, cuando me despierte, y no te vea aquí…

¡No, eso no pasará!

Suficiente con la juventud,

suficiente con la ingrata dosis de niñez que se me ha brindado

y la enorme cantidad de fuerza que dios alejó siempre de mí.

Viviré de sonrisas o ataré mi cuello,

mataré y deformare hasta que algo me parezca bello.

Pero nunca en este país de fantasmagorías.

Lejos de las charcas

dejadas en un sendero viejo y maltrecho

iremos en tren, será otoño

y descansaré entre tus pechos.

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OJOS DE TEMPRANO IMBÉCIL

Me recosté en el herbazal junto a mi mujer


en los campos desplegados, y en su mano inventé un mundo.
Descansé junto a mi amor en el pasto travieso,
y siendo el niño muerto que come nueces y maldice en voz alta invoqué a mi amo y mi señor.
Desperté del lado de unos árboles de avellanas,
el diablo - besada ya mi frente por sus labios tempestuosos -
sembró la duda para siempre en mí,
y así encontré el reposo.
Crucé mi propio puente colgante a la medianoche
los helechos altos y su sobrio movimiento me indicaron donde realizar el aquelarre.
En todas las fiestas fui el joven triste y separado,
me sentaba en los rincones tan sólo a contemplar.
Me importaron pocas cosas en mi corta vida
abrir mi herida
y meter gusanos
y que no quedé ningún rastro de que fui un humano.
***
Pobre el destino del solitario,
es una piedra cualquiera
dejada en cualquier lado.

EL AMO INDISCUTIBLE DEL UNIVERSO

Defecar ah, las horas pasan

suave bravío de altamar, estoy encendiendo cigarros que luego tiro a la pileta

esta es tu vida, así está este mundo, no hay nada que hacer

sólo cagar-fumar-acariciar el lecho de nuestra ternura mediante la soledad.

Música-cagar-beber-músicacagar.

8
LA MUERTE EN VANO

Temprano en el prado
me han sepultado.
me abandonó mi novia
se murió mi madre.
Por el llorar llueve,
y las ramas
prolongadas hacia el centro de la tierra
viajan.
Temprano en el prado fui duramente sepultado,
y apenas seguía vivo
me enterraron respirando aún.
Me ahorco mi padre,
me metieron preso.
Por la senda dura
me arrastré a la tumba
y mis pisadas ruidoso otoño
en la ciénaga me acomodo y duermo.
Temprano en el viejo prado fui sepultado
cerca del rio,
cerca de la iglesia
Lucifer me reclama, y me desentierra con su pala
aquí está el condenado
¿saben por qué?
¿saben el nombre del cuento?
Nació para ser muerto.
Me apedrearon en la plaza pública
mi madre me abandonó en la calle
mi padre era un alcohólico
un día me amenazó con una botella rota
y me hizo sangrar el cuello.
Mi único amigo fue un perro.
Soy la desgracia
uso este insulso vestido con lunares
embaracé a mi sombra
nadie me ama, tampoco me importa.

9
LA VIDA EN VANO

Del verano sesenta once

del carnaval de ebrias mariposas apagadas

hasta la tela enredada de la bermeja Julieta

que espera inquieta al hombre mermelada.

Y de los pajaritos enlistados al servicio militar.

Cada vez que pronuncian tu nombre con J. o con H.

nunca me importa mientras que las lenguas estén siempre ungidas,

siempre limpias.

Un tren a santa Sicilia se pierde, en un burdel se olvida.

Carmela tenía un horror primaveral que le sonreía

y ella sabía, y ella sabía.

Por su parte, Estefanía, dibujaba bajo el hechizo de las Ménades un paraíso de la cólera

enlutado con abismos cercenados

y diamantes enfurecidos;

cada cloaca infernal se pudrió en su boca de cereza moribunda,

y en los glúteos de sirena maldita dejé mi mordedura.

Del verano, y del carnaval, y cuando las hordas

tocan cítaras en el bosque

y los caballeros nos buscan en el destierro.

Sangra mi facón, es el canto de las tropas.

Es el canto de la zorra y de la coneja loca,

en el centro de una ciudad de rocas.

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GUARDARÁ ALGO

Bueno sería asesinar a alguien sólo para conquistar tu cuerpo


conquistarlo entre la nieve, la nieve en mi boca, mi boca seca, mantel de seda.
Bueno sería asesinar a alguien y enterrarlo
y que el búho me delate, y ver los barrotes de la celda gélidos
como un sarcófago, sarcófago de piedra, de piedra caliza.
Bueno sería que tu boca naciera unida a mi boca
tan sólo por un capricho de dios y danzar entusiasmados
jugar el juego para perderlo, sentid esa bohemia, vosotras luciérnagas enfermas que me crearon
y araron en mi cara como lo harían con el cedro, aquí todo es muy serio.
Alejandra se fue muy lejos, a un país de primavera
y su cabello de enredadera caja musical fortuna o arrogancia de las flores
lejanos y perpetuos sembradíos de colores.

NOCTURNO III

Ardores y espectáculos, relámpagos en el poniente


¡Calcinan mi médula hoy los densos licores!
de pronto me veo ensimismado en los placeres voluptuosos de opiáceos varios
la vida pasa sin nada de certidumbres…
Me rasco contra una tumba
en la mano colgando la indispensable botella
los cabellos sueltos despeinados por el viento
la cara al sol…
¡Sí, tengo merecida fama de holgazán!
He allanado el camino a futuros holgazanes.
Meneando tu mano - acabarás tu mano.
Comprando el infierno - irás al infierno.
¡Oh rigores plateados de los negros ojazos de Helena,
azotaré, junto con el diablo, su menudo culo con unas cadenas!

11
MONTE DE VENUS

Nunca abandones mi cara de lisiado.


Mi alma fue perturbada por el turbio rio de mi imaginación pornográfica
culparé a las hormonas
y saltaré el alambrado.
Las chicas,
quiero hablar de las chicas;
las chicas son criaturas representables en pinturas del renacimiento
todas las que conozco son acaudalas y jamás se fijarían en mí
yo soy feo-sucio-triste-pobre
perverso y borracho
y navego en un planeta que no es el mío,
me equivoqué al nacer, denunciaré a mi madre por eso.
Nunca abandones mi sexo
yo, con ese cuerpito juvenil, y de nena que descubre su cuerpo
me haría un festín con lo peor de mí.
Sería tan sucio…
Lamería tu ano tan frenéticamente que te quedarías sin él
hasta quedar como un monte liso
sin margaritas y sin abedules
es una lástima que te gusten todos esos chicos comunes.
Te haría tanto sexo oral que te irritaría esa vagina tan púdica
tan rosita, tan inocente
en pleno descubrimiento sensorial
Suave… Depilada…
Imagino el paraíso…
Nada de paz,
pura perversión y drogas duras.

12
UNA TARDE

A Mathilde - astro de porcelana partido al medio -

compañera de un lobo.

A esta amiga del tedio cuyas manos resplandecen en mi sien,

siendo yo el flautista oscuro,

colgantes mis pies desde el árbol.

A Julieta - y su rojizo pelo vuelto al mar -

su cerebro no encontrará nunca más la gula intensa como la encontró conmigo,

en las altas noches de sodomía,

y los elfos, jadeantes en su círculo a su potestad

su nube, y su corona, sangrarán.

Es este beso partido de Mathilde que regala

encintado de flores a una viuda negra.

¡Festejemos entonces, querida, la desaparición de esos proclamadores de la santidad!

A propósito, en razón de la muerte de cualquier árbitro celeste,

nos fuimos a incendiar iglesias al pueblo,

por el bosque,

escapamos en estruendosas carcajadas,

hambrientos, mendigando pan en los caminos

¡Oh harapos, seguirán siendo los reyes,

mutilaremos en nuestro corazón cualquier expectativa de rédito!

Así, en unión sexual con Lucifer, amo y señor,

con las manos llenas de sangre y sonrientes

el cura degollado por impostor fue.

Serás, mi amiga y mi reina, el despropósito porque yo abrace y celebre cada año

el día en que has llegado.

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DIECISIETE

No estoy solo,
en mi cabeza tengo un estéreo
no lloro
sólo me entrego al misterio.
Incluso cuando quiero llorar
los árboles se desnudan con sus mejores frutas;
y me divierto estúpidamente.
No estoy solo
tengo un estéreo en mi cabeza
apenas me levanto
me dice
que hacer.
Grito y nadie me escucha porque grito adentro;
me siento dentro del juego
¿por qué todos se van y yo me quedó?
Bailo en la oscuridad,
bailo frente a un papiro
escupo al amor, y me derrito, sintiéndome solo.
Miércoles, no haces más que desvelar.
Bolsillos flacos y humos todo el tiempo
y quiero saber
si te puedo morder.
Bailando en el silencio,
enamorándote.
Ella es un pequeño cactus
pincha, hiere, exhala sangre
es feliz apoyada sobre la ventana
un pajarito feliz, tazón de ron y una jaula por siempre abierta
es una rata sonriente, y le va a gustar esta canción
porque la escribí pensando en su vestido
y como era cuando tenía cinco y era inocente.
Bebí hasta dormir y nada me importó
salvo la maldita canción del barco
y el jodido Jazz.
Estribor de petunias claras rociadas por anfetaminas doradas

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tu boca de campana resaltada por la tediosa velada.
El mundo es naranja mientras vuelo en paz
y todo lo demás se corroe
me baño en el aire del crimen
y rompo mi garganta silbando la canción
ve detrás del telón
eludiré al guardia mientras corres detrás del telón.
Y la primavera,
y la nostalgia,
y que obscena y divertida que eras cuando tenías diecisiete.

DESTINO DE MANIQUÍ

La vi una tarde con la mano imbécil


enterrada
los leves humores humeantes y diezmados
la palma de la mano roja.
Entre las estepas silenciosas, con la frente delatora
me fui lejos de las zarzas espumosas
y del viejo canto de las tristes locomotoras.
La mano arrogante colgaba del féretro
que compramos a la señora Amelia, en el centro.
Con el hueco de las mejillas colmadas de lluvia
parecía un maniquí.

ENSUEÑO A LA MENTE

Las mentes son galerías grisáceas y ventosas


con terciopelos en las paredes
nada hay sino plateado, andamios y relojes, escaleras de roble sin estanterías.
No hay cristales, horrible hogar burgués con alfombra en la entrada
florero de tulipanes infames y canastillas de frutas.

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ALUCINACIONES

Dosis de soledad ¡Dimensiones!


¡Oh, estoy drogado! Yo he vivido en oraciones mágicas
Jóvenes amadas hacen de teológicos páramos infantiles
malabares en el cielo. y nunca fui adulto tipo, hombría de hombres.
Yo no estoy aquí II
oh, yo no estoy Podré ser un tigre drogado toda la mañana
oh, cada vez que un humano sale de compras diré a las hojas, diré a los bichos
un dios con poderes en la tierra puedo estar drogado cuando yo quiera
deposita monedas cuando yo quiera.
en la alcancía del fin del mundo. Vengan lucideces
¡y que feliz estoy a sacudirme el pelo
aunque no importe! vengan arbustos, vengan tsunamis
Veo cosas y quizás sea malvado ámenme, llénenme la almohada de cartas.
besar de esta forma, y con esta boca. Querré que me perdonen luego de arruinar ansias
I de plasmar horrorosos panoramas
Oh bandoneones mágicos, a personas prometedoras.
alturas mágicas Estoy succionando las raíces de las flores
circunstancias, váyanse estás demasiado entusiasmada
evasiones ¿Qué hacen aquí? demasiado catastrófica
mástiles con aves con banderas, te veo lucir
llenas de ápices, oh dioses en mi sangre bellos atuendos.
calores, naveguen III
móntense en el aire sucio No pararé de sentirme loco
me escabulliré lapidariamente me verás rodar en verdes colinas
entre súcubos, ritos, animales seré vulgar, un completo desertor.
dejen salir lo auténtico Diré gracias solo cuando quieran matarme
recuerden, andaré sus curvas
quizás mueras, seré burdo con ella
acabarás extrañamente sola levantaré paredes, renunciaré al gusto
en tus paraísos continuos roto, navegar tus veredas debe ser como intuir.
Errante. Errante. Errante.

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IV

Malas mujeres de ojos violetas


arañas, arpegios
malas mujeres de ojos regios.
Gatos de negra fábula, tacones, maldades
como austeros en el mar
pianos, y oh estíos y su paliza
sois claros y vagos
suspiros de las gárgolas.
Veo piedras violetas
pajarracos carmesíes
veletas de barcos, oh terrenos vastos femeninos
estoy harto de bañarme en perfumes.

CANCIÓN PARA UN AMIGO DEMENCIAL

Rito mágico que consiste en orinar a un amigo desnudo luego de hacerlo ingerir plantas picantes para que
se caliente como una estufa y nuestra orina produzca vapor en su piel caliente, hirviendo.
Ese vapor debe ser encerrado en una tetera de cristal para luego ventilar con el mismo a los espíritus y
que se produzca un intercambio de valores: el espíritu entra a la tetera y el vapor es expulsado hacia afuera.
El espíritu que es introducido a la tetera se convierte en músico natural, y su música es pronunciada en
cualquier lugar que el mago camine, encerrando así, más espíritus para desarrollar más amplitud sonora
al pasar; hasta convertirse en luz
***

Canción para un amigo que navega en un porro gigante.


Carta abierta a su vida y a su mundo para los años futuros (de guerra y de improbabilidad)
que abrirán gajos en sus ojos para hacerlos llorar.
Y mientras ese barco de papel se moja con la lluvia y rompe contra el asfalto, dentro de una casa
hay una fiesta de gala con chicas muy lindas que quieren navegar. -

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AL SER Y AL NO SER

A veces me escrudiña y sabe decirme:


sufro, querido, como un bosquejo al que se le cae una ciudad sombría encima.
Hablé con el viento, dice que soy volátil, que me quemaré ¿querido, crees tú eso?
Del precipicio ha nacido - profesa el rubor de lo perfecto:
las flores que crecen en medio del pavimento agrietado, el agua del Ganges,
la madera rechinante; ella misma.
Y yo le enseño todas mis lastimaduras: presumo todas mis llagas.
¡Oriente! ¡Algún alba te amaneceré! - Escucha la cima de mi limbo, querida.
Este es el jarro que yo traigo, amada.
Cuencos de leche de cabra endulzada con miel, que salgas de tu consolado ayuno.
¿Qué sueño, que hemorragia se atreve a despertarme de mi descanso entero?
Gorgoteo como una inocencia sin sepulcro, que sientas el día que amanece en tu corazón, que sientas.
Que vayas al horizonte, al horizonte de tu corazón.
Allí se alimenta un ave, no la guardes, amanece en el huerto, amanece en las flores, extiende tu mano.
Celebro, querida, como en un triunfo infinito, uno que no es estéril.
El triunfo del Espíritu sobre Todo.
Y me visto de gala, igualmente harapiento, pero este baile es mío, es mi fiesta solitaria.
A veces me escrudiña y sabe decime: sufro, querido, como una cáscara que es despegada,
la cáscara a nadie sirve.
El ciervo vino hasta mí, y solo dejó para mí el callo, la costra, jardín lleno de apuros.
Y yo le respondo: querida, a veces recurro al espejo, y veo mi rostro, no es ceniciento,
no es ámbar, no es vulgo, no es mutado.
Sufrí el bestial hechizo de la espuma borracha, de la uva que se fermenta contra el sol ¡espera ser muerta!
fui siempre pasajero, en umbrales, nunca llego a destino, eterno viajar.
Sufro, si querida ¡sufro! Como el prisma, como el pez que vuela cuando la garza lo junta,
como el peregrino sin casa, solo el sol tengo.
Debo explicaciones a cien enemigos que son Yo, atrás de la caverna, yo les digo que ya pasarán,
los días del mal respiro. Jamás complacería a más fantasmas.
¡Que se desintegren! ¡nadie ama a aquello que no puede ser, oh no, piedad, no!
Atrás de la comedia, como un espectáculo de joyas, cenáculo de barbaridades, floreció un regocijado niño
sin ánimos de ver al venado, al cruce, al símbolo con manchas, que se quedó en silencio, como dormitando
en dulces sueños de majestuosidad.
¡Trance, niño, trance!
¡cuando el cielo y la tierra se separen como novios enemistados mi prisma,
hombre de trabajos serios, se quebrará!

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¡Junto con su llanto la tortuga se quitará de su casa, más velozmente su andar será lento!
Entonces el perro me acercará su hocico, confiándome, como locos.
Volveré, por promesas, a mi prado sin cerca pintada. Mendigo, descalzo cruzaré por el túnel.
Arriba me espera la verde colina sola, campo de girasoles, bosque con puentes colgantes, templos en ruinas,
los desperdicios de la historia, ríos de pensamiento.

Ay mi mi mi, ¡por ti he llorado tantas ternuras!... he llenado baldes en tu nombre.


Y vi luces, pero las escapé. Pude haberme ido ¡pero soy muy frágil!
Ay mi mi mi, mis momentos y mis amigos, mis cosas flotando en una danza del tiempo ¡lloro! ¡lloro mucho!
Te amo pero me arrepiento de hacerlo. Sueño contigo cuando no estoy contigo. Te amo en secreto.
¡Ay mi mi mi! Nadie llorará tanto como yo, te lo juro, nadie sentirá tanto como yo ¡te lo juro!
Veo mis cosas, nuestras andadas tan hermosas, hay una voz, ah, ah, una voz que dice que me aburriré fácil,
ay, pero no quiero dejarte, creo que no hay nadie más deshonesto como yo ¡amo mentir! ¡lloro! ¡lloro ríos!
Me quedo estupefacto noches enteras contemplándote, mientras caen pétalos de fuego blanco y los abrazo y
río de pura histeria. Hay cosas que no podré superar.
Ay mi mi mi, vociferaciones demasiado bajo, abrazos besos y ternuras, de humanos, de niños y de ancianos.
¡Qué perdido estoy en tus fantasías!
II

A lo que está presente como el fuego: de ti bebo tu leche, fatal, bajo tu ala, me siento un ruiseñor,
y me enamoro rápido, todo el tiempo recolecto, sueños de azahar.
A ti hermoso valle florido, que te veo corriendo montes eternos campos verdes inamovibles,
te amo y lo haré siempre.
Yo te acuné despacio, nunca naciste, jamás te vi morir. Yo te guardo en un cajón de recuerdos sin dolor,
como sábanas cálidas del primogénito amor.
A ti te llevo impregnado por todas partes ¡y por tu culpa! ¡sí! ¡por tu culpa!
Estoy en el medio de la guerra con miedo y espantado, y estoy bebiendo soles desde un río.
Por ti he renunciado y tengo trabajo aún. Por ti soy todo esto, que se me cae, se resbala, lo transpiro,
no puedo dejar de irradiarlo.
Me hiciste tan triste… me hiciste tan idiota. Te odio. Te admiro. Te contemplo. Te amo.
Te destruyo y te construyo, como castillos de arena, me divierto haciéndolo, me gustaría poder acariciarte
como terciopelo, seguramente seas un farol, o una mañana ¿te divierte?
Porque yo soy muy serio, pero ah, por ti esta pena y por ti esta alma. ¿Qué es esta sonrisa?
Te extraño, y te busco, y te respiro. Estás en todas partes, en cada lugar en el que veo.
¿Qué hiciste con mi corazón, que aún todo agujereado, sigue en marcha
y se desnuda con risas de jardín sin odio?

19
¿Qué hiciste que ya ni respirar puedo? Por ti no tengo patria, tengo nauseas todas las noches,
tengo insomnio, te busco por todas partes, te encuentro por todas partes.
Nunca te entenderé, y suena gracioso. ¡Ay como te amo mientras tus dientes expulsan brillo!
Qué cosmogónico ídolo te parió, yo te tuve acurrucada y te cuidé como pude.
Nadie va a hablar mal de ti mientras yo esté presente.
Me haces llorar, me haces temblar ¿por qué a mí y no a otro? Porque me dejaste en esta sucia ruta con frio…
Todos son fantasmas, oh cielo incandescente, te adoro y te escucho en un eterno eco del cosmos.
A veces cuando me quedo en silencio siento que estás aquí a mi lado.
Y te hablo, en voz baja, no quiero que nadie te torture, que inmutable, que paradójico,
que poco circunstancial. ¿Por qué lo abarcas todo?
Dolores de cabeza me das, mis tripas por ti están todas revueltas, tengo como un vértigo en el pecho,
creo que es la claridad o lo es todo.
Es que he sido designado a escribirte cartas cosmonáuticas, lejos, en medio del viaje, y llegaré más tarde,
estoy varado, aquí, en tu juguete de niño lleno de paz. Tu cuerpo no se halla en ningún lado, o mi cuerpo está
situado sobre o bajo el tuyo. ¡Dejo de buscarte y te atrapo! ¡Te gusta escurrirte, me haces mal!
Todo esto para mí es irreal, recibí muchas bromas, ¿Por qué tal graduación de absurdos?
Me gustaría que una tarde te sientes junto a mí y me lo expliques todo, o que abras mis ojos y lo introduzcas
todo: el principio, el final, el arriba y el abajo, el silencio y el ruido.
Todo en una imponente cachetada que no me dejé ser nunca más el mismo.

JOVEN BLANDO

En un lugar muy lejano - lo único que salvaba era la sensación, de que era un corazón lo que estaba
sangrando; oh, estabas lista para impresionar. Los ojos te brillaban.
Las manos temblaban por la ansiedad; no podías disimularlas ganas de escapar.
Me gustaría tener un manual de como tapar este maldito hueco, con aquel campanilleo esporádico
y vacacional que chorrea de tus pupilas.
Estoy realmente seguro que todavía existe algún lugar habitable donde tener tiempo para olvidar.
Y aunque les hayas dicho a todas esas personas que es viernes y que tu corazón palidece sin enamorarse,
todas esas palabras no significan nada cuando quedan recuerdos por crear.
Y quiero verte largándolo todo cuando tu alma sueña con viajes interminables muy lejos de casa
y con el éxtasis sentimental pero casi siempre es químico.
Espero que nos vean caminando de las manos en año nuevo; no hiciste difícil de creer
(que el romance absoluto se puede lograr en estos días).

20
SENTIMIENTO JUVENIL

Creo que amo a alguien, y soy miserable, y tengo sueños, que se rompen y sienten la pena de tres días
consecutivos que no dejaron de ser días y por la vida, nosotros sabemos, aun, como se debe llorar,
y la manera correcta de cómo hacerlo, y los pasos a seguir para no parecer idiotas haciéndolo.
O llorar, y dar lástima, pero no como para que alguien nos tenga lástima, sino como estrategia y con

delicadeza, como la piel de una mujer, ellas saben algo de eso.


Sé que los días están todos los días, y que tengo tiempo para eso, como para volverme loco o volverme
loco pero disfrutar de mi locura.
No hay quien comparta un poco de su locura, o quizás uno ya tiene mucha de esa cosa como para
"cargársela" a otra y existe algo así como una sobredosis, y desde luego no tiene connotaciones positivas.
El asunto es que hay ciertas mujeres, con almas juveniles y gestos parecidos a su alma, jovialmente te
agradan y jovialmente ir de fiesta donde no hay fiesta es como descansar sin necesidad de morir, y suena
hermoso. Entonces, desde la penumbra, nosotros, espeluznantes tristes, de una decadencia considerable
y corazones atosigados como montañas que suben y que bajan, y cuando hablo de bajar es bajar profundo,
exageradamente, y cuando hablo de subir es dar saltos, de altitud considerable.
Creo que amo este tipo de cosas, y quiero embarrarme en diferentes tipos de pantanos, pero merecérmelos a
cambio de lo que dije hace tiempo y repito desde siempre: sé que hay mujeres con tonos joviales que sonríen
como si todo les sorprendiese, que se despiertan junto a uno pero uno antes les dice algo que les otorgará
ofrendas a su comicidad o sentido del amor, y las vísperas por las que los individuos pasan se tiñen de
tonalidades de sus profecías de días sin opresión, y la liberación que parece lejana pero puedo sentirla cuando
sueño con blancuzcas damas de una cátedra dudosa, que ocasionan la diplopía y la perdición en caprichosas
formas de hacerme llorar, soñando con veranos en noches y mares que son calmos pero dañan nuestro
espíritu pero en un sentido contradictorio, quiero decir que causan estragos en nuestra pobre alma, que es
como la arena amarilla de los mares en las noches y hemos de sentir mucho más las ansias de liberación y la
necesidad de viajar diez años en trenes a vapor y entender el porqué de todo esto, y, y, y, muchas otras cosas
más que podrían desesperarme.
Pero quiero sentir el frescor de todos los pastizales húmedos en mis pies.
Quiero sentir todos los vientos de todas las direcciones golpeando contra mi cuerpo desnudo totalmente.
Siento molestarte pidiéndote todas estas cosas como si no pudiese hacerlas solo.
Supongo que vivir es todo lo que quería y aquí estamos.
Y ahora bien, ¿qué hay de nuevo?

21
I

E. Epojé: como Pitágoras o como Lucrecio, desde Ámsterdam hasta las ruinas Mayas, y las placas
arquitectónicas rugiendo en el tren interestelar. Tu corazón entregándose a los vicios.
Un pie que se agita por las angustiosas probabilidades. Las mujeres-droga poblaban los prados de Virgilio,
se decidían más frecuentemente por las cátedras decimonónicas.
¡Escuchar los albatros esperanzados por nadie! mis lagañas de primavera sobre una flota carguera.
Suave concordia y suave nuevamente. Han de gustarme las almas ceremoniales, el ímpetu de una actriz
desubicada, su corazón está incrustado en una voraz amalgama, las luciérnagas de la noche alumbran
su respaldo y se desvanecen al contacto. Las minucias, oh, percibirlas, como la perfidia elocuente, en los
arbustos machacados, un decibelio arriba del modelo atómico, un perro que volverá a su casa empapado.
No los quieras cuando no te ofrecen. Recomendar: recomendación. Soy yo-o tal vez no- tu estructura
molecular-tu rostro-empecinado a morir-por una sola botella-cuando en la ciudad todos los
mercados duermen. Camino mucho. Bajo el sol. Camino. Y vago. Vago. Vago. Vago. No tengo (ni tenemos)
(ni existe) otra opción. Trabajo como un perro. Camino bajo el sol. Cuarenta grados: bajo el sol. Vago. Vago.
Vago. Bebo por pura recompensa. No hay descanso; deberías aceptarlo. En la aceptación no pueden hallarse
disgustos y ellos son necesarios para hidratar tu intranquilidad latente, es un hámster que corre y solo
consigue quedarse atrapado en su rueda, siempre juega el mismo juego, se tropieza con él y con su cara, ese
hámster siempre fue un animal demasiado estúpido, creo que jamás lograré entender nunca tanta estupidez
junta, tanto morbo de todo tipo, que se burla, y que gira, y que baila, y que resplandece y que no para de
estar sometido a la movilidad. Oh las parodias demasiado exageradas ya, chiste trágico, regurgitándose a sí
mismo, saliendo en forma de heces por cuarenta esfínteres que segregan cerveza por sus alrededores,
desaparezco, oh, soy mucho peor que tu mórbida obsesión-psicopatía-peculiar-peculiaridades- de crearte
problemas que solo existen en tu fantasma u erudito oasis de chinas hermafroditas y trabajar con esmero en
aumentar tu infelicidad día tras día hasta tragarte y vomitarte y repetir el proceso hasta que la caída a tierra
sea suficiente para accionar como un místico o un hombre estrafalario que se volvió loco y no logra
diferenciar cosas de pensamientos. El pensamiento es ruido: hay mucho ruido fuera.
El pensamiento tiene átomos y edifica celdas y comprime procesos neuronales que dan origen a un desorden
patológico o a desentendimientos sexuales que pueden traducirse en: pérdida involuntaria de la identidad
personal: Falsificación de testimonios tangibles: Remordimientos con situaciones ridículas que nunca
gozaron de protagonismo o animación vital en el plano de la existencia material. Estoy muy encerrado.
Quiero que me dejen tirado por ahí. Empeñado en amarte como la dicción impronunciable se manifiesta por
una tendencia natural del espíritu y crea una multitud de espectadores (que es ella misma corroborándose
fragmentada en un millón de partes equitativas). Soy un gurú de la escritura súper embotellador de cosas al
azar, escuchad la resonancia de mis alaridos de libertad, aquí, escribiéndote -libertad- enroscando mis manos
de mujer que lava platos en tu cuello con perfumes que están de moda, si, deberías fumar un poco de esta
cosa. Ayer salí de un lugar oscuro, estaba aterrado.
Ahora, de nuevo, volviendo a su psiquis – usted me entiende - nosotros nos entendemos. Somos hombres
mayores ya, llevamos cúmulos de maldición autosustentable en mente y en cuerpo. Usted sabe de qué estoy
hablando, no podrá escapar de mi feroz insistencia.
Logre ser insoportable como la vida, usted apenas lo insinúa. Juro que lo sabrá. SER

22
INSOPORTABLE COMO LA VIDA. ¿Algo más? ¿Algo apenas, digo, un poco más fuerte?
Está mal. Es moralmente incorrecto. Es satánico. Mal, mal. Todo eso que hiciste: un fracaso.
Esto es tuyo: te encierro, te encierro. Críticas, Juicios, adjetivos, estereotipos, reclamos, consejos,
acusaciones, sabiduría, sabiduría (toda objetiva), esto es así, aquello es así: si me contradicen hay más
opresión espiritual. Tu corazón debe ser un viejo flaco asustado y retorcido, está retorcido y babeando
en un rincón de la casa, se mea encima, se revuelca en su meada, tu corazón es un pedazo de tiniebla con vida
propia que pasea por la casa. Fue intensamente sometido a todo lo que le dijeron que era, y que parecía,
y lo convencieron. Escribo como un idiota desafortunado porque es lo único en donde puedo rascarme el culo
en medio de toda esa gente con grasa y con sudor. TODO-ES-DROGA. Yo, yo, yo dando vueltas y vueltas:
es como mi cuna de caca, es mi infierno hecho a medida; yo, yo y yo siempre, mi preciosa y sucumbida
“desmedidamente no sabe a nada”

METAFÍSICA I

Veo a las interesantísimas


torres del alma
como una primavera molida
sabe a desdicha reutilizada.
Maldigo todo lo que lleve el nombre de Dios
maldigo tus labios
que son hermosos
no deberían ser tuyos
deberían ser de los conejos
que cruzan puentes marrones oblongos y largos.
Deberían estar en revistas porno,
folletos mojados, lluviosos.
Estoy harto de las caras divertidas
bocas que hablan todo el tiempo, que dicen cosas como:
¡Qué loco que está el clima!
Mi boca, por insensata y divina dice:
odio cuando las cosas lindas florecen
me recuerda a todo lo que no puedo obtener porque vive adentro de mí.
He soportado todo lo que un hombre tipo puede soportar
y por eso tú ven aquí con tu graciosísimo letrero de te amo pero no me obligues,
estoy cortando flores con la muerte
y veo películas, y como chocolate.

23
PARANÓICO

Azul la vi temblar a la tonta flor,


¿qué seré yo? ¿qué seré yo?
Es esta lastimadura que no me deja de arder
mi pena retoza, va conmigo a las montañas
me urge darle de comer.
¿qué seré yo? ¿qué seré yo?
No soy mejor, no soy peor que ella
que ella apunta a su vanidad
difunta parece más bella.
Me conozco: un mentiroso
acaricio el arcoíris ¡la gloria!
acaricio el hedor y suplico reposo
musitarme: ¡escorias!
¿qué seré yo? ¿qué seré yo?
Es esta mañana que se monta a mí
y que acusa a las madres,
si esto es la cordura ¡que me la regalen!
Tejedor de fantasmagorías
ese Amo al que vosotros llamáis La Mente:
de ánimas, de Maldiciones, ¡suertes!
¡Voy a dormirme contra la corteza
y que la mariposa me despierte!
Yo que fui ave, hijo de la quejumbre
¿No hay retozo: de piedra,
de alga, que en sueños no se transforme?
¡Estoy cavando un pozo para mi risa!
Que huele a calcinado caldero de riquezas
¡Oh cenizas!

24
I
Caer en el amor otra vez luego de aquel día agitado
será como la náusea desearía asirme al hachís.
dorada ¿Hay mujeres en la ciudad?
cátedra de todo lo que chilla Ellas dirán: (metales exóticos)
y se asemeja al óbito, servidos en furiosos jarabes
al rumor de hadas. ¡que arda yo como un maldito
Este es el asco que cargo. supremo cadáver!
La culpa de ser un bastardo. ¿Es mejor evitar la vara o avivar la flauta?
Vuelvo, sosiego, centellas de aura Oh furias, comed de mis rumores
me he construido una jaula que en los más negros hervores
he sabido enorgullecerme de nada. se cocine la planta
Ahora me ven tirado ¡más ampollas en mi carne levantan!
borracho, lapidado, con la piel gris

III
Que las tenues noches de difuntos amargores
sean soportadas por los embrutecidos olores
de machacados y crudos licores.
¡Eso es, ternuras, yo danzo!
da placer mezclar el amo con el asno.
¿Sentiste lo que es beber metal hirviente a espasmos,
presenciar la aparición de Erasmo?
No hay nada que yo ame
que no sean los harapos haraganes
que el veneno gane.
Junten todo el oro y díganme ¿cuánto vale?
Aborrezco a las arrugas
que encima de todo sudan, y transpiran leches
de enormes barriles de roble franco
de vino para meterse.

25
LUDMILA

Ludmila, piel de clorofila,

ilumina las resinas de mi alma

y en su corazón de caparazón

el anciano ratón desayuna en calma.

Me dejaste de gustar cuando te fuiste con ese marinero

ojos de arrogante imbécil

que no era yo entonces obviamente estaba mal

pedazo de animal, te odio.

Ludmila piel de opio

muy tempranamente fui tu novio

y te cantaba tangos

y nunca estaba sobrio

y nunca me tomaste enserio.

De algún drama frío y serio,

de película en blanco y negro - nací

y fuiste para mí,

al igual que la milonga,

una pena lunga

cuando nunca más te vi.

TE IRAS POR TODAS PARTES

Oriunda de la noche

eres como una mariposa contra mi ventana

traes junto a ti al reproche

vestida de gala, eres noctívaga, traes también mis ganas.

En el amargo opio de tu frente habita el saber

que alguna vez bien pude beber.

Herética, te presentas al poeta malsano

luciendo honorable tu inmunda cicatriz

¡Y eres meretriz de un porte inhumano

la que trae con su corte y en su mano al sabihondo hachís!

26
VALORES

Corazón: Maldición de Maldiciones como una estatua y es temprano,


mente, oh, díganmelo: la tortura. el día comienza de azul
Eso que vosotros decís Egoísmo para ir al bosque de la montaña.
mejor está decirle masturbación. Todas las mujeres dicen
¿Utopías? Eso que se materializa que mi capricho me pone correas
en agonía, niña, que me encarcelaste. dirigiéndome al infierno
¿Qué podrías decir acerca de arar? en efecto, me estoy yendo a su infierno
No es la cuestión, la raíz se halla que padece el agrietamiento en los ojos
como una vertiente en una caverna como las líneas que se forman en la arena
la raíz cae como una liana tendida y como la arena soy que estoy amarillo
esconde su secreto ermitaño. marrón y seco
Ahora tu desciendes, y muy pocas veces el mar me alcanza
dices ser la hembra que da la cátedra para rejuvenecerme.
estás amando que te rindan culto

II

¿Quién dijo que la Vida debería llamarse Vida


y no Espera?
y a eso que nombraron muerte
yo le digo ¡DIOS! ¡MI DIOS ENFERMO!
¡PUTO DIOS! ¡ENAMORADO!
No entiendo porque no te entregabas a la muerte
¿Acaso te tenías cariño?
Te compadecías como si fueses una mujer también el hombre
que la besa y la acompaña a dormir.
Me gusta cuando las flores del cerezo caen.
A mis locuras yo les dije Mis Amores.
Y a la pobreza la vi pasar y es ella
¡Mi diosa, mi reina, mi bestia!
Me ocupé de desfragmentarme
como una fruta de esas que tienen gajos
desprecié al confort, todo tipo de bellezas comunes
casas de verano, automóviles, noticias,
innovaciones, toda prisión que sustentara aflicciones

27
alabé al fango, a la mosca, al ogro y a la esfinge
me sentí como en casa entre escuadrillas de marginados
disociados, apartados y estanques de ojos
profundos
como el cristal o como el cuarzo.
La autoridad me enoja como la ignorancia
violenta, no entiendo los banquetes
las opiniones, me deshago en el sentido común.
El infierno es un cuento dulce.
He dicho: el premio es vivir,
todo lo restante
es plástico que salta y da alaridos
es nunca llegar a ningún lado y eso es interesante.
En mi vocabulario al mundo se le dice
lugar en donde uno está condenado
a expresar su verdad y pasearla por las calles
con pobres, y con ricos, y con guerras.
Y mientras caminamos podemos ver
niños girando, mujeres y perros,
sitios en donde sentarse a ver
el mar, puestas de sol con águilas y peces saltando,
quitándose del agua el humano es como un pez loco,
lleno de amor y lleno de odio.
III

Pero yo estoy lleno de vacío, como un fuelle


y estoy herido, una herida que llevo a todos lados
y no me preocupa parar de sangrar
este dolor es mi ángel, en la madrugada, desde las colinas
cualquiera puede ver como llega saltando sobre los techos.
No soy totalmente ordinario
tengo sangre
puedo sangrar con estilo, deberías venir a ver
tal vez algún día aprendas a hacerlo como yo.

28
ALUCINACIONES MARINERAS

Sosiego de la antipatía en la calle de primavera,


las flores muestran su verdor absoluto y yo me encuentro contento.
La risa se me fue en una barca, digo: oh dolor,
volverá con mujeres embarazadas que fueron abandonadas por marineros vigorosos.
Me sorprenden pensando en mi cabaña de madera
que revelaron mi intimidad, me sorprenden sumergido en mis pensamientos.
No siento sorpresa de darme cuenta que soy un ser que siente y que piensa.
Supongo débilmente que a veces me avergüenzo de ser humano,
y eso de tener un trabajo, un papel cotidiano y de poder hablar.
La misma vergüenza que uno siente cuando se están enseñando los genitales.
Mi risa fue sepultada en el cementerio de animales,
ancianos con paraguas grises se quedan constelados planeando cortejar a mi mujer,
aunque estén flácidos recordaran que yo no fui humano, yo fui estrés.
Yo di de qué hablar. Fui asunto serio. Yo fui cosa de otro planeta.
Mi risa se fue con quinceañeras hijas de padres psicólogos o profesores de facultad,
yo estoy sucio soy adolescente y soy pobre y la vida me encanta.

GRIEGO

Cerca del horrible pozo donde resido

se halla la paz.

Cerca del orificio que hice en mi cráneo

soy coetáneo

del delirio.

¡Ah, yo sé que avecinan los lirios,

los zafiros y los fuegos sobre y contra el mármol!

Es que te he amado tanto…

Y seguirán pasando siglos.

29
ÓPERA NEGRA

Yo le grito ¡regresa!
Y ella me grita ¡tristeza!
Mis alegrías son esas…
Voy a tirarme del puente
¿o ya estaba ausente?
Ella me grita ¡regresa!
Yo le grito ¡tristeza!
¡tristeza! ¡tristeza!
¡me abandonaste!
Oigo un grito que dice regresa
yo sola te deje sola, si, como una cachorra
en la puerta de un idiota
tantos días escuchando ópera
ella quiso hacer poesía con el arcoíris.
Ahora que volviste puedo
preguntarte sobre tu aventura
en estaciones
mi corazón lo hizo un arquitecto
que estaba ebrio.

EL OTRO
No pienses en mí
soy sólo un pobre diablo vestido de payaso
tomando café y fumando faso.
No pienses en mí
soy sólo un pobre hombre que duerme en una hamaca
siempre con resaca.
No pienses en mí, muchacha
soy sólo un pobre hombre desempleado
que en la vida, por obra de un Sátiro, quedó varado.
Y fumaré del tabaco, y volveré a llenar mi vaso
tan acostumbrado al fracaso…
No pienses en mí, dulces diecisiete
soy tan sólo un pobre hombre orinando en un balde.
No pienses en mí, no me condenes, no alimentes mi existencia
déjame que sangre.

30
CUALQUIER CORAZÓN ARDIENDO EN CUALQUIER PARTE
Cualquier corazón ardiendo en cualquier parte
es mera decoración del ser,
porque ser un ser es ser
cualquier corazón ardiendo en cualquier parte.
Se parte o está sonámbulo
es nunca un deportista,
nunca un almacén en mediodía
es una jauría de todos sodomizando a una sola nada
es una congregación de diminutos todos
como un papel adhesivo sobre un abismo sin nombre de una
unánime nada absoluta
amo que todo sea nada porque ello me salva
de la vergüenza de ser cualquier cosa
que pueda ser humillada por cualquier otra cosa.
Cualquier corazón ardiendo en cualquier parte
es sufrir o no sufrir todo el tiempo
y no sufrir es el clásico sentate y fuma, lisentzumí.
Es todo el tiempo ser un ángulo escondido en la esquina del macrocosmos
si despego el espacio del espacio vacío en blanco
o de ningún color puedo contemplar a
cualquier corazón ardiendo en cualquier parte.
Cualquier corazón ardiendo en cualquier parte seguramente es
huir para siempre de nuestros padres esquizofrénicos
refugiarnos en tibias vaginas voladoras
o adentro de nuestro intestino mientras dos mil años de guerra prosiguen
el mundo es un microondas o un acelerador de partículas
las células están envejeciendo, y yo estoy entretenido muriéndome desde que nací
porque cada minuto nuevo es también un minuto que se me quita
del pecho abierto, no me asfixio todavía, voy a ir a ver una puesta de sol justo ahora.
Podría ser mejor pero también podría ser peor,
entonces no tengo derecho a quejarme o a celebrar
el hecho de que todo esto no tenga sentido alguno
y que yo me niegue a dárselo me hace sentir el puto amo
yo debería celebrar esto: Cualquier Corazón Ardiendo en Cualquier Parte.

31
FIESTAS, EXOTISMO, LOCURAS VARIAS

Chicos impuros se derriten entre tus tangas de hilo conmovedor


oh, estabas entusiasmándote
tu ser: una orgía de calumnias celestes como el aprendiz de la oz
que da yugo al cúmulo, menos al opio, a la raíz tonta.
Remolinos de escoria tu Ser; tu andar; las piedras en tus bolsillos
y tu pesadez, tu danza, tu vagina navegadora
en la popa hay pipa y tabaco de hebra
el ritual de siempre es revolcarse en la mierda.
Aprended; a vomitar la luz
de maldito niño pagano, de cristal quebradizo,
el auge se festeja (en tus nalgas)
mi Dios enfiestado con lencería de ópalo.
Soy el imbécil de la colina frutal y mi pelo multicolor
se sacude con el viento sonriente
al son de la espada clavándose en tu vientre.

SENSACIÓN

Ay, caluroso desdén de la noche calurosa


paseos en moto por el cementerio
árboles y formas derritiéndose.
¡Ay la noche y sus hijos bebiendo en el patio!
Un monstro devora a un hijo,
hundirse debe ser como entender.
La frutilla del camino, colina arriba por el sendero del ciprés
escucha las aves y bebe el vino
escucha esta tarde roja que se desparrama…
El oro aulló en montes de hambre
y el frio era una dama
que trajo pan y unas naranjas; se feliz.

32
DILEMA DEL BOSQUE ROJO

Todo seguirá mal


como siguen esas chicas sin ropa
entre los arbustos con el pelo recogido
viendo embarcaciones de elohims
hundidas entre gatos submarinos
que escapan corriendo de todos nosotros
oh, es que es la luz estroboscópica
que les recuerda a infancias temerosas sin navidades circunspectas
como un arcoíris que chorrea su color y pierde a sus hijitos arcoíris
que se marchan hacia Europa o a Sumeria a buscar trabajo
se deslizan como aguas que corren a las alcantarillas
lloran colores hasta quedar grises.
Chicos banales en zona centro
uno dos, uno dos, te lo estoy contando
caras tristes en la ciudad grande
como grandes son los ojos del caballo
vigilando escotes voladores del más allá,
y al final perderás uuuuuuu uuuuu uuuu uuu uuh.
Estás entusiasmada con tu nuevo amor
los veo en blancos bancos de parque en noches alborotadamente fumadoras
como en las películas
pero es mentira porque la realidad es menos atractiva.
Sé que te gustaría revolcarte desnuda en el pasto
y sentir su frescor
rodar colina abajo y reír mucho
mientras el bosque se agita saludándote
pero mañana hay que volver al trabajo
y no es tan bueno pensar en el bosque mientras no estamos en él.
Quizás cumplir sueños sea asesinar tortugas y zorros
herir niños y mariposas.
Pero de una montaña florida, rodeada por hongos y cabañas como de cuentos
hay un pájaro bebiendo de un hilo de agua
que cae de una cascada y es tarde.

33
CIUDAD SOLITARIA

Este es un lugar
en donde el amor sale llorando a buscar problemas
y estos les arrojan basura y otras cosas.
Y las personas gritan y aseveran
que la suerte está durmiendo con los perros.
Alguien puede tener un sueño o dos
pero no duran más que un par de años
porque no saben guardarlos como un tesoro precioso
entonces sangran dentro de una caja.
Cuando la estatura del alma es pulida
y uno canta sus problemas afuera
el bosque gime pero nadie entiende nuestros secretos.
Todo parece ser grande afuera de nuestro vestíbulo
aunque a veces cuando pretendo salir termino como el amor
que se sube a automóviles de desconocidos
y ellos lo rompen y se encargan de desgarrarlo.

GLORIA DE UN LUGAR

San Marcos
botellas rotas desparramadas por el piso
orgía descomunal y deforme de aromas
todo el alcohol que puedas tomar
tu culo va a explotar en un dulce baño público.
Oh San Marcos
idiotas musculosos que controlan tu bebida
místicos, artistas hasta en la sopa
artesanías divagando en tu cosmos frutal.
Monte y más monte
chicas bisexuales por todas partes
toda la hierba que puedas fumar,
festival hasta la muerte
fumar hongos, tirarte de un precipicio
soleado oasis fiestas de año nuevo.
Oh estúpido San Marcos
todos son tus amigos.

34
SENSACIÓN II

Trabajar escuchando Nina Simone todo el día


la vida es la vida.
Soñar que soy feliz, que me voy muy lejos
y que tengo cosas interesantes para contar
mi voz será un ave sobre un piano
que canta hasta las tres de la mañana y no para de arder.
Soñar que me suelto el pelo y que puedo gritar
lanzándome desde un árbol y rompiéndome la cara
quiero ver tu cara de aprobación que se prostituye en todos lados.
Me gustaría ser salvaje y tener bolas para evitar toda esta amargura
aunque no puedo evitar dejar de sentirme feo
al lado de las cosas relucientes que aman el comercio
y yo prefiero irme a algún lugar donde pueda ser mucho más estúpido
y nadie me diga nada
simplemente estar en un bote,
horas
en un bote
pero siempre es mañana.
Fui la cascará de una nuez, a martillazos
rodé y ese era mi cerebro
un pariente lejano al que no puedo escribir,
a mí todas las madres me odian
entonces no tengo otra cosa más que silbar.

MAMBAJE
Una polilla, en la noche, aletea contra tu ventana ¿no te recuerda al misterio?
En cuanto tu tabaco se disolvió, y el incienso ¿no te remontan a las oscuras montañas?
Sé que existen hilos que unen a las mariposas con el fuego, o a una serpiente con el espíritu.
¿Lloras tú de soledad cuando las arboledas se mueven con el viento azul?
Los cuerpos de las mujeres para mí son como himnos,
y el suelo y las baldosas tienen gusto a pesadas bromas.

35
EL LARGO ADIOS

Cabalgué el ozono inspirado por las hechicerías de los ermitaños,


el amor para mí fue sepultar quijadas de la mente oliendo concentradas plantas silvestres
y su embriaguez de plata y de almizcle.
Partí sin muchedumbres en la plaza, solo, a mi entierro prematuro, con una ceremonia de rosas;
había mujeres de la aristocracia con hermosos abanicos rojizos de cabaret.
El amor ha sido malo conmigo
yo te detesto, Dios, por muchas razones,
la primera es por haberme abandonado en este mundo,
la segunda es porque puedo, las demás me las reservo.
Me dejaste varado, con las Sotanas ahorcándome,
dejándome junto al erizo, no tuve yo la orca del noble juez
el vigor de la juventud lo arrojé por la ventanilla, me reí, yo, de la multitud poco sosegada.
Hastiado, te espero, compañera de guerra, que estás lejos,
estás llorando estás llegando a los brazos de un brujo loco,
tengo muchas marcas en los brazos ¿ves?
Las sucias profecías dicen, que estás hablándome, nuestros caminos van a impactarse
¡Oh! ¡Y de verdad que lo sabré!
Los días pasan y yo noto que todo es cruel
los desasosiegos humanos obedecen el mismo patrón
todas las horas son
horas para llorar.
Necesitaría tu espejo, ah pequeña brújula de bolsillo, bestial distribución de las certidumbres.

***

Pereza mía que decaigo por la filosofía.


El rumor del valle me soporta
el aroma a pasto mojado
recorre por mi aorta, mi mente me ahorca.
Qué desgraciado soy, digo,
mientras camino pateando el aire.
En las caminatas nocturnas.
La confabulación en la que estoy incluido
me hizo convertir en un recluido.
Los romances me abrieron las puertas de las caricias
y las puertas de la esquizofrenia
y no supe decidir cuál más me premia.

36
Que alguaciles mórbidos en la puerta de mi ser,
estoy simplemente harto de ellos, de sus trucos, de sus guerras putas.
Mucho más harto estoy de ti.
Oigo rumbos.
Escucho la daga en el pescuezo, la soga atosigante, el proyectil a mi garganta.
Guadañas sucias del verdugo carnicero,
pedazos de tripa dentro de un cenicero.
El verdín resbaloso en el que me caí
dice mucho más de mí.

***
Oh, cuando la mente pase frente a mi casa
estaré esperando, detrás de un árbol
atento con mi rifle.
Buscaré corriendo muchas piedras con que atizarle
rodar tantas vueltas por el piso con el cráneo podrido de tanto pensar
no es peor que ver esas ciudades humeantes paraísos suaves de rituales de tripas,
muchas vertebras cayendo desde un grasiento edificio.
No entiendo a las palomas
que recurren a refugiarse en las iglesias oh, los campanarios están llenas de su podrida hez.
Si yo mirará por las hendijas,
te vería desnuda, te vería desnuda.
Si yo acudiera al diablo pediría cigarros y no la inmortalidad.
Si te viera desnuda insultaría a Buda,
con trivialidad.
¿Qué infierno se rebalsa sobre ti?
hoy que amaneces con la boca podrida de tanto fermentar, de tanto maldecir.
Y hoy tempranamente mercaderes me golpearon con una vara,
ellos prohibieron que jugara.
Por qué solo recibo limosnas, pero dentro de irrompibles ostras.
Por qué solo atraigo las moscas y furiosas plagas de langostas.
Cansado de ti estoy intangible habitáculo inhabitable
que tu parla es parir al demonio envuelto en sangre y prostituirlo a los dos meses y medio,
cocerlo en ollas, con hierbas hechiceras, abandonarlo en un basural y prenderlo fuego.
He venido de muy lejos,
a disparar con mi entrecejo.
Hay cosas que no quiero,
tus cosas, tu vino, tu cuero.

37
PAGANISMO

Luego de un debate filosofal, la diosa festejó mi calma; y así llamo a la comarca: ¡mundos, oh mundos!
Os divierte el citar atrofiando miradas de brutos maniquíes del amor. Os gobierna la mujercita que muestra
un pedazo de sus piernas. ¿Quiénes pasan, de mano en mano, el brebaje acalorado?
Oh, y por qué las ciénagas nunca curan, solo terminan de sepultar. Mucho más cansado estoy de que
hagáis hablarme en este tono, y de esta forma.
¡Tan transgredida estoy que ladro mucho antes de arrancar! Formas, y qué si sé de formas, formas:
enormes, oblongas, presuntuosamente rectangulares, ovaladas como hay muchas.
Enfermo de la mente estoy, señora, y quiero cambiar, amar a esa piedra, amar a ese hombre, aunque
los demonios den besos a la burbuja en la que vivo.
¡Mundos sin oráculos, deseo mundos de polvo, mundos con adoraciones! ¡mundos de aromas,
y de piezas de piano! Sin humanos en la plaza, allí el tesorero de los cantos místicos.
Escucha lo que dice ¡niño, eres sólo un hueso!
Y muchas historias de felicidad, como las de pequeños que sueñan; cabañas sobre el árbol,
dulzuras danzantes y bravuras. Ambigüedades.
No muy temprano desperté y solo quise morir ¿estaba despierto o durmiendo aún?
Seguro que dormía, pero, ¿quién me soñaba? Atrocidades soy, muchos relámpagos guardados en caja.
Cajas musicales. Amores fatales. Susurros devastadores. Rumores en el bosquejo, fantasmas en él,
dormid por nosotros. Ah, por qué el ser celeste me disgusta tanto como ser naranja.
Por qué exprimo este rezo, y te lo canto dormida, viajante.
Oh pasajeros cuando perdáis el turno, todo está deslizándose en trineo, a tus labios rojos de mujer tonta,
a tus labios rojos de mujer exótica.
Tambores en la selva, Sabbaths y curaciones. Bailes alrededor de hogueras y esas cosas.
No digo más y si digo menos lo digo todo, lo digo todo. ¡Juro escupirlo!
Y poder ser obsceno en este momento debería ser como Ser, y solo eso quisiera, oh, ¡quiero que me lo des!
¡Rápido! ¡con animosidad! Qué oscuras siglas me permitieron nombrarte, me permitieron danzarte.
Este asco de joven es un asco de hombres. Este asco de joven es el asco de hombres.
Tantas lunas vi yo, con las sensaciones tuestas de uvas, ahí en una boca derritiéndose, para mi calvario.
Qué agonías de vampiros pasé, qué quejumbrosidades. Que si las alimento todas, les creo corpus
y les regalo aliento y relajaciones.
Tantos soles anduve yo, con desajustada ropa, vagando en círculos muy largos, todo el tiempo entre
amistades inadmisibles. Qué certeza de inmortales, esto hacerle el amor al tiempo sin destinos amorosos,
sin corazones en la playa.
Las canciones que yo canto, son para pocos, son para tantos.
Sé, por ejemplo, de a momentos, que vuelvo del trabajo, al aposento familiar, y en mis canastos no traigo
francos, ni siquiera provisiones traigo: lo que traigo es una nueva y vieja sabiduría: ¡regulación de voces!
¡regulación de voces! Esto es dar de comer en boca a los tigres feroces.
Los miedos son proyectiles de pensamientos que atacan. Maldigo al pensamiento desde el día en que nació.
En el vientre de la mente, allí, apelmazado, parece risueño ¡pero no! Parece inocente ¡pero no!

38
Ah, diosas, vosotras que posáis para que yo retrate cuerpos, nada importa ya que vosotras seáis geishas o
Huríes.
Moriré, si, digo, moriré. Moriré un día de sol, entre un grupo de mujeres celtas, bebedoras de sangre,
o mutiladoras de miembros. Pero hawaianas con el torso moreno y semidesnudo quiero, abanicándome con
hojas de elefante, esas jovencitas admirables, que traen cocteles a la reposera del joven moribundo,
qué dulces son, qué poco amables, qué corazones luminosos con sentencias de maridos avergonzados.
Vampirismos sexuales, vaho de gusanos come cerebros. Truenos, danza danza danza exótica.
Hum, debo apaciguar el ritmo.
Digo:
Amores de maremotos en flotas bestiales

papeles carmesíes de las mujeres espectrales.

Una noche, como cualquier otra

los esqueletos fuman resquebrajadas ostras.

Recuerdo, en mi garganta
el abismo de las plantas
que del espíritu amamantan.

Recuerdo mujeres veloces, pícaras,

asesinas, sabelotodo,

que te dejarían en la ruina porque sí

dejan una honda estela violeta, o algo que viene a mí.

Por qué violento al éter

consumiendo mi propia mente,

sumando ingredientes.

¿Por qué no soy más inteligente

y termino ya el juego?

Es que siempre quiero extraer todo el jugo.

Muy cansado estoy de hembras dementes

y de portales de gente.

Las vociferaciones, el golpe del tambor,

arriba, abajo por los costados, me tiene harto, cansado.

Quisiera, al menos, entre la vegetación

encontrar la total abstracción

y en mi vientre hacer nacer un mundo

pero muy harto estoy de ser un vagabundo

de las estrellas, de los escorpiones del desierto

39
que moriré un día y nada será cierto.

Si al menos pudiese yo asesinar al Dios que me hizo ser maldito

me masturbaría en las estelas,

me masturbaría en paraísos de mitos.

Algunas veces estoy cerca de las bestias como tigres, osos, serpientes y tarántulas

¡quisiera poder yo escanciar de vinos rojos y violetas mi putrefacta médula!

para reconocer cielos y amores de películas.

Y aquí estoy de nuevo, flotando en el infinito espacio vacío

durmiendo desde el nacimiento nunca ocurrido del cosmos.

Durmiendo siempre, junto a los heliotropos.

¿Ven a ese niño que se mezcla con plantas?

Flota en el espacio, envuelto en sus mantas.

Los ojos tienen antigüedades inimitables

los ojos que dormitan, no son apacibles,

son parecidos al fauno tocando flauta,

contra un bodi, al costado del cristal de un rio nórdico

hay piedras,

hay calma de piedras.

La natura está teniendo sexo.

Bufones, ustedes no sabrían sobre mi deseo de lamer sapos, arrugar mi ceño, infringir las leyes y
hacer reventar fiestas ácidas. ¿Hablar de poesía? Sería, por lo que sé, hacer sonar mis nudillos,
por eso no hablo de ruiseñores, ni hablo de brillos. Es muy difícil meter el océano en vuestros baldes.
A veces quiero, al menos, comparar una flor clavada en el monte, con los cuernos alevosos de un pardo
bisonte; nada de eso, digo, todo es disfraz o es cielo marino. Lo llamo: ¡espíritu, espíritu!
Yo te conozco, y supe de ti cuando sobre mi casa el cielo y la tierra fueron mezclados, desde ese día que
quedé medio tarado. ¿Así que no importa? Nunca, nunca, esa toz, ¡mujeres! Manténganse en la raya
¡drogas, lo orgiástico del amor, ceremonias de anochecer! Sé controlarlas (mentira).
Mi mundo se reduce al mundo mismo, entonces no tengo que gastar mi energía en vaho de abismos.
¿Qué resuelve el pensamiento, uno, o mucho tiempo de ellos, que no haya sido resuelto ya?
Eso que dicen pensar solo debería usarse para la supervivencia ¡vomitar el recuerdo! ¡vomitar en matorrales!
¡vomitar en fiestas con bonitas adolescentes peligrosas! Vomitar de una manera mucho más lujuriosa.
Mi mundo, ah, canto a mi mundo: mi mundo se va con psicópatas en rehabilitación, con prostitutas del
sentimiento, con filósofos ensangrentados, se va con herederos de indios viejos, se encuentra en el amazonas,
y en la ciudad con jóvenes drogadictos, llenos de ganas de explotar.
Conozco todas las malicias, y sus formatos.

40
QUE MORIR SEA COMO PUDRIRSE EN EL MÁS HERMOSO AMOR .
No quisiera meterme en sitios oscuros, no quisiera acicalar un mendrugo.
Verdugos en la tarde. Pianos, pianos infinitos… inhóspitos.
Vergeles mágicos, felinos flotantes.
Murciélagos hubieron en mi vida, archipiélagos, sitios a donde no se puede llegar.
¡Y ahora cáscaras, demagogia!
Ay de burdeles que hubieron en mi mente, muy flagelado estoy, y solo un perro me identifica
¿por qué razón habría de creer? Deseo ver morir a todo lo que no sea, deseo ver morir a Dios.
Conozco cada una de las sombrías recetas del amor; podría mencionarlas todas.
No hay tiempo para ello, es vanidad.
Tertulias, mis queridos; tertulias. Velas: musical del insomnio. Humo fanfarrón, llenándonos de hechizos.
Por momentos, tú artista incondicional, que no es tuyo, porque es de sus locuras y de un mundo irreal.
Todas las cosas me atraviesan, soy como un fantasma, la sombra de un perro viejo, que escupe sangre.
Roedor del vino.
Perro de las calles amargadas.
Perro antiguo.
La piedra filosofal de todo silencio: que morir sea pudrirse.
Ahora iré a ver solo corazones, desnudos, no mirar lo de siempre: evolución, involución.
¿Qué es lo adecuado? Muchas ideas para una sola cosa. Simplemente veré solo corazones.
No más opiniones acerca de lo inmencionable del amor.
Se de rituales lujuriosos que te lavarían la cabeza:

Demonios divertidos de perfumes preferidos.

Ninguno de ellos arrepentido.

Amor de ángel vicioso

tiene el asco hermoso

de nunca estar decidido.

Hay venenos amables, de encantos de infiernos mutantes y salvajes prados de calma.

Nadie está cuerdo cuando ama.

41
A LA ANTESALA DE LA LOCURA:

He dado las gracias a la locura por irse con otros tipos menos sensibles que yo.
¿A dónde se fueron todas esas palabras de amor que dijimos hace mucho tiempo atrás?
No sé porque odio a los arcoíris, cuando trazan un largo cielo hondo.
¿Qué estás haciendo ahora con tu vida?
¿Pensas que caminas hacia delante, hacia atrás, o que das vueltas en círculos?
Una nena que se llame Galaxia, y que use tacos altos.
Una vez tomé al amor de las patas y lo di vuelta, y así le dije:
¿Ves? A esta fiesta sólo se entra con invitación, los pájaros adivinan, que estoy invitado.

CARTA A MI ESCASO GENIO

A mi genio pobre:
obra de algún Dios de mustia misericordia,
que es un panal de abejas siempre aturdido.
Es esta barcaza, ebria sobre las olas, llena de chicas locas y estupendas
¿podrías oler sus perfumes siquiera?
Porque estuve lanzando dardos supremos, casi todo el tiempo,
y ninguno de ustedes me importan ya,
les enviaré un telegrama para avisarles, que están siendo frotados contra mis testículos.
El espíritu es estar drogado por toda la existencia,
y si podrías sentirlo serías idiota pensando que las drogas del mundo son mejores que esa.
Al fin y al cabo vale más la pena irse de aquí y dejar sólo una figura hundida en el sillón
en el que pasabas horas fornicando, meditando, o viendo tele; no importa que hacías,
pero estabas allí, todos te vimos.
Ey, mi amor, yo sé, yo sé que duele,
pero no le pidas al pez que vuele.

42
POEMAS DE VERANO PARA UNA ADOLESCENTE DORMIDA

(labor fotográfica y musical, cuando menos poética)

Ella me enrola como a un cigarro


hace jugo de mí,
le puso mi nombre a un planeta.
Ella vive en mi ropero,
debajo de mi cama,
la veo en las baldosas.
Uh, escuchen la canción de tribu
ella me ama ella me ama.
Escuchen a su señor, estoy despierto,
estoy encendido
Ella dice que me veo pálido.
I
Conocí a una chica
ella nunca me quiso decir su nombre
era un tanto seria, pero se enamoró
y supo hacer muchas estupideces por amor.
Entonces vino una vez el otoño y nosotros no sabíamos más que hacer
pero la quise, oh oh, la quise.
II

Me gusta una chica que está loca

y su cerebro falla por los pelos revueltos hasta la nuca

ella va a morir de risa en festivales interminables

y alfombras voladoras que nadie limpia,

está bien esconder

toda la basura abajo.

Puedo ver su alba interna enrojecer de hambre

su cerebro se separa de ella y

empieza a insultarme.

Empieza a llover.

43
III
Extraño a esa Diosa con guitarra quebrada
y cara de que se ha ido.
Extraño su adulterada libertad, extraño sus hilos.

Alguna tarde me verá sobrio

y no entenderá de que se trata este nuevo cuento,

y ahí va de nuevo, y ahí va de nuevo.

Está: ella, febrero inundado, es tímida,


es pálida.
Amaría poder hablarle a sus ojos
y escupirle tiernas criaturas de jardines hermosos.

IV

Vi a un ángel depravado

confiaba en ella y ella confiaba en mí.

Estuvimos atrapados en una espiral de mi cerebro fantasioso

amores que se derriten

y enchastran la alfombra.

Estuve sonrojado por un ángel depravado,

yo digo la verdad a ella,

ella me dice la verdad a mí.

Todo está metido dentro de una lámpara dorada.

Todo está metido dentro de la sensación.

44
V

Ella es el amor envuelto en cintas azules, bajo lluvia oliendo el aroma a la tierra mojada

inmensos pinos, inmensos.

Pequeña adolescente blanca y sencilla, delicadamente monstruosa.

Hechicera; es árabe, es celta, es india, es oriental,

es de otros mundos,

tiene cientos de quiebres;

ella se parece a los acantilados.

Y se va, se va por el camino de tierra

sube la montaña. Hay agua.

Tiene ganas de dormir.


Siempre está fastidiada.
Siempre escupe plagas, es un demonio, niña-ángel.
Lleva el festejo, rompe las cosas, le gusta ser carnal.
Ella quisiera saber,
donde desembocan los ríos,

ella quisiera beber,

quisiera amar desvaríos.

VI
Ella:
figura inusitada que pasea por la cocina mueve un muslo en aquel rincón

vuelve dando bufonescos brincos.

Un tren hacia el sur, se va, se va

despide humo,

y los árboles están rojos, y naranjas

ella empieza a llorar.

45
VII

Que tu amor sea irrefutable,

sé que irías libre

vas a descalzarte para poner los pies en el agua.

Lejos de la selva la gente parece sentirse mal

y así va de nuevo,

y así cargo tu cuerpo después de

verte muy borracha

vas, cargada, o arrastrada,

vamos a dormir bajo un árbol.

VIII
Sólo a veces siento que la tristeza es sincera
Trayendo hondos cántaros de agua hechos de barro
sus manos blancas, las veo, puedo oler el perfume del roble
puedo ver que siempre usa un vestido.
Me gusta cuando me dejan solo sentado
en la escalinata
con todo el tiempo para mirar el mundo
nada importa ya más que jugar a arrojarnos del puente.
Todo está feliz, todo está quieto.
Una bandada de ángeles me pregunta si quiero vivir o si quiero morir
Les respondo no sé.
La realidad se difumina.

46
IX
Agarro un ojo tuyo es azul

Y lo desprendo, y los desprendo.

Agarro un ojo tuyo y le voy quitando las ganas de amar.


Agarro un ojo tuyo y lo pongo contra los míos.
Agarro un ojo tuyo y deshilo, deshilo, voy a deshilar.

SIEMPRE QUISE MORIRME APLASTADO POR CVIEN MUJERES DESNUDAS


Cuántas mujeres…
Yo siento que el mundo me espera
dentro de esta cruel enredadera
que es la mente
veo pasar a la gente
y a las chicas con sus cortas polleras
amo todo…
Ya no odio a Dios.
Prefiero el cielo.
Prefiero ser bañado por antiguos ríos santos
y en mi vaso de cerveza ver la verdad
que me regalen la eternidad, nunca comprarla.
En cuanto a la vida ¿A dejado de ser una burla?

47
CALVARIO

Despierto con un dulce sabor raro en mí

y empiezo a ver botellas

fusiladas.
Todo un campo de ellas,

sin tumbas

solo tu mirada.

Extraño ser, tu corres en cielos donde

todos los vicios fatales son posibles,

veo pinchazos botellas cortadas

bestia enferma, ibas a apuñalar a alguien con eso

veo ropa toda tirada en el suelo,

baba en las almohadas.

Te veo mirar a la nada como si vieras solo un reflejo.

Me quedo mirándote.

II

El tabaco y veladas con ella


armoniosos sedantes de estrellas
que la diosa trajo
¡y tanto me ha pegado que me distrajo!
sus bofetadas son claves para hendirse en naves que se incrustan en tu ojo
¡y como sabe ella que el tensor está flojo!

48
PROSTIBULARIO

Escribí toda la noche el poema del amor,


dedicado a cien chicas distintas e iguales
mientras derramaba vino y las polillas se posaban en mi boca.
Nunca sentí tanta desdicha junta
nunca sentí tanto amor.
Los barcos en fila se fueron, me gusta estar alcoholizado
me gusta pensar en chicas que no existen.
Y bebo toda la noche pero todo es fugaz
que poca gracia me hace todo.
Y esas chicas inmortales que me ven sucio y retraído
no les intereso
saben de alguna manera extraña que soy demasiado libre
y desde luego que eso da asco
ninguna de ellas me invitaría a ver el mar
pero yo lo veo sin necesidad de verlo, me quedo en mi pieza
me tomo medio cajón de cervezas
empiezo a levitar.
Ciertas evanescencias una vez me dijeron que debía tener cuidado conmigo
y tenían razón, no sé qué es esta euforia, no sé qué soy yo, mato tiempo, mato
quisiera poderte conmover.

I
Cuando las zarzas no humean,
y todas las botellas siguen esperándome en el mercado, pienso:
debo componer el poema de la agresividad,
dar tumbos en la noche, recoger mi cuerpo de un charco.
Es esta tonta alegoría de emparentar niñas desdichadamente mágicas
de las cavernas, con jadeantes licores finos que hacen retumbar cientos de tambores.
Me vuelvo hacia mí y sonrío,
Debo dejar de todo eso solamente el pescuezo.
Solo, en absoluta soledad.

49
II
Escribí toda la noche el poema del amor sucio, del deseo y su naufragio
y las manos me sangraban
dije está bien, pero las verdades nunca son buenas y sólo pueden decirse de noche.
Sólo sé que escribí el poema
de la devastación.
Todas las chicas dicen que debo tranquilizarme un poco,
y me traen unos calmantes hechos a mi medida
todas ellas creen que saben pero no saben de la juventud
toda atragantada.
¿En algún momento se termina?
El día empieza de azul
todavía hay luna, es llena
y las zarzas se agitan en la madrugada
huele a absolutamente todo
es el aroma del existir.
Como pesados
y constantes ataques de nervios
oigo a las jaurías ladrar,
todo está callado.

III
Iluminado, una mañana, sospechando de la felicidad

envuelto por figuras misteriosas,

retumbando metido dentro de mil colores,

yo tengo la sensación de escupir sangre por los ojos

y veo demonios por el techo.

Todas las mañanas son mañanas para mirar.

Iluminado, jugando el juego a diario

yo miro al dolor y a la soledad

como pelusas de diente de león volando en el parque

y me siento a beber tragos contra una tumba

50
para mí todo hecho de la misma cosa.
¡Olvido! Es…
Otoño y sabor a ruido de hojas,
claveles
rojos paisajes pasionales
olor a avellanas arrojadas en la tierra del bosque.

IV
Del lugar en el que vengo todo es azul brujo
cristal rechinante, espejo de agua fresca
blanco de estrellas
collar de estrellas.
Siento, junto con la noche, que todo es sólo un resplandor de voces que brillan
dentro de un inmenso bosque y su rumor de invierno silencioso.
Me quedo sobre el acantilado,
viendo el aquietado y hondo lago azul y las aves que allí pasan;
las zarzas se agitan y yo suspiro
estoy con las raíces de las flores
podridas
tan sólo cadáveres que se internan en las grietas de las palmas de mis manos.
Están hundiéndose, como la emoción.
Esta noche en que todo lo amarillo es la maravilla que alumbra,
y el gozo de un canto mudo lloriquea en medio de una sombra alargada
veo a la luna, una noche,
con los pelos revueltos, enloquecido, aúllo, me arrodillo;
Hago todo lo posible por morir.

51
V
Dormité dentro de una cueva
y el mundo era dorado, y ardía.
Vi a los enormes peces voladores.
Me olvidé de decirte que te amo
y que no me gusta lo que veo
no me gusta lo que veo.
A mí me gustan los puentes en los camposantos infinitos.
Fui parido por las estrellas
y el trigo crujía
todo fue apocalíptico deleite del horror de la mañana
empecé a vomitar las palabras de amor.
Y los dedos me temblaban.
Y no me gusta lo que veo
y no sé porque tus ojos son tan rojos
y no sé porque mi barba es tan azul.
Voy, entre los castillos,
empapado por las lágrimas,
arrojando piedras a las ventanas multicolores de los feligreses,
lanzando mi cabeza debajo de las ruedas de todas las carretas.
Voy, borracho de ajenjo
con un hacha sentada en mi hombro
haciendo círculos en el bosque
juntándome con una manada de lobos
los pelos revueltos,
el
amor
intacto.
Vagabundo, apuñalado por mil
ángeles;
haciéndome enemigo de todos los hombres del mundo
saltando en las praderas,
nena; quiero que escuches
las confesiones de un hombre roto.

52
VI
Cada cierto tiempo da vueltas el mundo
y me encuentro en un escenario harto familiar para mí:
una odiosea de botellas partidas y una odisea de besos.
Ella se desviste o pasea por la calle con suaves ataques de nervios.
Ceremoniosamente se despierta conmigo en el campo
el pan amado
nadie
es dueño
de nada.
Ella se levanta y maldice, camina por el pasillo y dice:
“todo, todo, desde el principio hasta el final una malinterpretación”
La oigo y es una nota musical, una flor del desencanto,
me hace creer que estoy viviendo una realidad alternativa, una vida paralela.
Aborrecido de lo común salgo a buscar un veneno amigable.
Voy a pronunciar las palabras de amor.

VII
Arco iris dentro de templos
prados con estatuas
la belleza enfermó, pero todo el calor está en la sonrisa del perro viejo, el dolor eterno.
Veo un océano de gente.
Me extraño de mí me extraño de los perros viejos
barcas oxidadas, hice un pacto con el hambre y el aroma matutino
¡Mi amor alcanzó la desfiguración etérea!
Todos los conjuros no sirvieron conmigo,
tengo hierbas no tengo amigos.
Arcoíris dentro de templos:
estoy con una amiga, corroído por las hiedras
enterrados, bajo tierra.
En el rio antiguo veo piedras
con musgo, empiezo a alabarlo
empiezo a tentarme con tu cuerpo, empiezo a cantar al anochecer.
Y todo el mundo duele y sufre mientras hay:
prados sobre templos.
Casas, chimeneas, puentes colgantes, lugares para mirar.
Y caminar de las manos y enamorarnos, matar al océano de gente,
todo es luminoso, todo es éxtasis.
Todo es euforia todo es un Aullante Paraíso del Demonio.

53
INCONGRUENCIA E INSOMNIO

Tardé tiempo en ver rojos árboles,


canoas blancas, campamento de ladrillos deteriorados,
mausoleos infinitos.
Me enojé con tus relieves, al sentirlos fríos,
simplemente canté melodías para que me recordasen.
Estaba yo, ungido, vomitando sangre, al lado de una silla de enfermería
donde estabas postrada, o fue sólo un sueño.
Éramos pobres, gente demasiado culta.
Sólo recuerdo que tenías el pelo negro, largo, te enroscabas y decías:
“estoy mugrienta de vida, necesito pasar las últimas
horas de vida velando por mi embriaguez”
Nunca me gustaron esas paredes amarillas con puertas blancas
de madera liviana, con ese olor a que todo es humano.
Yo tenía siempre en mi bolsillo una petaca exclusivamente para el olvido
dedicada a los malos días
de sol.
Me desperté, no estabas enferma, estabas al lado mío,
te levantaste, miraste por la ventana y dijiste: estar viva y no estar aquí mismo
es como padecer fiebre, querido, cuando estoy enferma, no quiero existir
quisiera que Él me pregunte qué es lo que prefiero ¿no soy libre al final?
Me desperté y no estabas enferma,
observo con atención sus almendradas nalgas,
está semidesnuda…. Está contra el ventanal…
Todo esto me remonta a una vieja historia cerca de mi madre,
afuera nevaba, nunca había visto yo la nieve, tocado, olido incluso;
quise salir a hundir mi cara en todo ese blanco….
Me encontraba hambriento de vida,
ella no me lo permitió.
Le cuento mi memoria a mi amada y ella me dice
¡qué tonto! Estamos soñando, mira, desperta.
Esa voz me supo interesante, no era su voz,
ante tal incongruencia despierto, y era un niño, y estaba mi madre, y estaba la nieve.
No estaba yo en el lugar y en el momento exactos.

54
I
Ciertamente en mis sueños, y también en la realidad, conocí a una chica que era muy natural,
muy omnipresente. Ella deliraba que estaba metida adentro de un cubo, pero yo le señalaba al cielo
diciéndole que creía que estaba metida en un círculo.
En aquel circuito (de las incertidumbres, de las razones momentáneas) ella solo veía un arroyo,
y yo le indicaba como despertar de un sueño, le hablaba de mis viajes astrales que experimentaba cuando era
un niño. Podía yo tener todo el tiempo del mundo para obsequiarle libros para que ella me quiera acariciar.
Una vez, señalando a mi pecho, su dedo se hundió y ella nunca más volvió a ver a su dedo.
Ciertamente yo herí con acusaciones al lecho de rosas, ella me suplicaba que parase, pero yo no me detuve
y unas láminas de aquellas flores empezaron a sangrar y de entre el centro que se encontraba cerrado una
criatura extraña blandió su queja, y no fue suficiente difuminar con la vista que se posó frente a nosotros
y lo vi con claridad: el amor.
El amor nos rogó que nos sentáramos y que callemos. Yo seguía planeando el modo de hacer entender a mi
amada que la mente es una cosa, y que las opiniones y las vociferaciones que allí retumban son otras.
Aquella impresión de amor sujetaba de su piel elástica y transparente a un tumor grumoso que arrastraba sin
remedio, aullaba porque se lo extirpásemos, y luego instantáneamente como una vorágine temimos porque
explotara, y finalmente reventó empantanando todo el recinto de fluidos, y pudimos ver que de allí salía con
dificultad un embrión espantoso color sangre con venas hinchadas verdes, podíamos distinguir de su aspecto
flaco y contorsionado una viscosidad que le rodeaba como una aureola.
Mi susto se había potenciado deliberadamente y mi amada escapó a despedazar a esa bestia deforme,
mientras gritaba - ¡Esa es la mente! ¡Esa es la mente! ¡Es nuestra oportunidad! ¡Apaliémosla!
Corrió rumbo al huerto y de allí trajo el hacha, y hundió la cuchilla del hacha unas siete veces en la
cabeza babeante de aquel engendro de la aberración, mientras decía:
¡Uno! Por la locura. ¡Dos! Por el idiota de Caifás. ¡Tres! Por el fin del mundo.
¡Cuatro! Por la creación alterable. ¡Cinco! Por el que no sufre cambios.
¡Seis! ¡Por la hipocresía! ¡Siete! ¡Por la apariencia, por la enfermedad, por la cólera infinita!
En verdad diré que esa cosa era un bastardo, la más osada fealdad, y en su baile primitivo las flores chillaban
y nosotros no somos condescendientes ante un ser como ese, en verdad nuestro gozo fue insuperable al ver el
filo luminoso que se extinguía dentro del cráneo con formaciones ovoides y puntiagudas, era el cráneo del
mal, era el encéfalo de la tercera dimensión.
Desperté del sueño. Estefanía me amaba y se preocupó por los gritos feroces que arremetí aquella tarde
ungida de flores rosas, que flotaba en un ritmo de pálpito y una vez más estábamos metidos en la
contemplación.
Le expliqué a Estefanía ¡dulce Estefanía! Que aquello que ella deseaba matar no era la mente, eran sus
vestiduras. La omnipresencia con lencería erótica, la omnipresencia con lencería erótica; fue todo lo que
Estefanía me respondió, y desapareció en el jardín lleno de arcadias y regresó con frutos rojos y morados,
con sus manos estrechas señalando la sombra de un Cebil quiso que nos sentáramos a descansar allí hasta
que el ocaso intelectual nos inundase, nos dormimos abrazados contra el respaldo de aquel árbol
y allí murió la filosofía.

55
CARMEN AURORA

Mi bestia bebé, mi oro dulce


se llama Carmen Aurora
aureola
jazmín con una gota de agua.
Es jardín oscuro plagado de cintas rojas
gente sin cara, con corbatas, yendo al trabajo bajo la lluvia.
Las hienas la atacan,
ella me dice que nunca vio a alguien odiar tan fuerte
ella dice que me lleva la muerte.
Aurora: oasis femenino, vagina subliminal
volando en un coche cuántico.
Es actriz porno
es escritora de libros,
es monstro horroroso y deforme que se oculta tras biombos;
vive con diecinueve gatos.

INCONGRUENCIAS NOCTURNAS

Estoy harto de decir que los días de sol


¡oh nena, extraño mi niebla! carrusel blanco alrededor mío girando en un desacuerdo.
Todo parece exactamente como un sueño ¿y qué es exactamente un sueño?
las cosas bellas de este mundo no me hacen desear,
y no puedo llorar por mentir por decir que estoy harto de decir que los días de sol
¡oh nena, extraño mi invierno! y gritos…
pero estoy embrujado por mi estupidez, pero estoy…
temblar ya no es para mí temblar… cortar…
¿y qué es exactamente una pesadilla?
Nada es verdad, nada es tan divertido, dibujando en el sol
no me importa que nada tenga importancia ¡nena, extraño mi otoño!
y todo es una broma.
Por favor, una vez, gira a la izquierda, por una sola, por una sola persona, y luego pregúntame
¿por favor, porqué, un día una sola persona, un día?
una sola persona haga girar mi cerebro y pregúntame ahora porque lloro o porque río
mi cabeza besó el suelo, oh por favor, date la vuelta y dime por favor,
dime está vez porque río o porque lloro, llueve arena y una vez date la vuelta a la izquierda
para no aniquilar mi cerebro.

56
COSAS RARAS

Diosa del bosque, comunicándose con ardillas


levantando templos de roca, cantando alabanzas,
eternamente en la arena es triste pero las fiestas son tristes
y un batallón de pájaros dorados exhala el humo rosa y caluroso aliento espiritual,
ella tuvo un romance con un árbol.
Ah, la patria desconocida,
el trueno de hielo que son sus ojos un eterno pozo de agua de manantial
de rocío matinal y con sus pies sin calzados, oh, una vida de dejarse llevar
volar en la infinita y apasionada urbe de la conciencia,
oh diluirse y expulsar rayos;
qué más da, todo esto ha sucedido antes y que le sobrevenga un rito
y un viaje en el que desnuden todos los aromas,
en el que todos los frascos sean convidados.
Cuando me enamore de nardos y bese el piso orando a las nubes olientes a naranjos
tú dime como controlar mi clima, mi estilo,
mis puntadas en el cerebro
oh, todavía no he enloquecido pero tu dime como… ¡cómo!
Y recordar la canción, y sonreír y no hacer promesas a tu corazón
y salir a caminar por la arena y unir las manos.
Ey, esto es entre la aparición y yo.
Tengo que salir y tomar aire,
salir a volar entre los edificios muertos,
pero cada mañana recuerdo la canción.
Un día volveré, cuando ella esté llorando y el oro se haya ido y sea sólo un jugador,
jugar, jugar y recordar la canción.
Nena, te dije ey vamos a un viaje cruel al cementerio… del recuerdo…
¿y qué es ser cuerdo?

57
MÚSICA DEL CRUJIR DEL PASTO

Bajo mi ala estelar tengo todo lo que necesito,

tengo el frío que me enseña como una navaja resplandeciente, tengo el sol ¡padre!

Escupiéndome en la boca

calentando cada roca.

Sólo pienso en chicas desnudas

y en tabaco en hebras.

Me gusta estar en la sala de estar de mi ser,

todo el día disparándome en la cien,

nena, lo que te preocupa no es el viento, no es la luna

¿dónde reside tu queja, es un espejo de la bruma?

Nena, lo que te preocupa son los

castillos azarosos, callejones peligrosos, amantes monstruosos,

pero tú eres, bajo tu ala misteriosa, casi un ser de la mitología

¡así que vamos, vamos, quiero escuchar


ahora de tu lengua tus excitantes herejías!
***
Sé que vendiste al buen Baco tu energía,

y tu esperma fatal,

y cansado de esperar te echaste a caminar,

y viste dragones,

y sentiste a la vida morirse en tu corazón

pero de allí broto una flor,

con un candado

¿estarás enamorado?

eso significa haber perdido la razón.

Quisiera que nos convirtiéramos

en una hermosa lápida cubierta de flores,

o en una ruina encontrada sin nada,

tan sólo viento, piedras.

58
Debo aceptar que ya nunca jamás escucharás la música

te irás huyendo,

nena, nunca te volveré a llamar dentro de un café

fuiste mala pero eso me hizo bien,

todo lo demás es cuestión de tiempo.

Y caminaré por los pasillos

y el tiempo se volverá verde,

música del crujir del pasto.

***
¡Oh tuve pudor del enamoramiento!

todos los hechizos me parecían insanos

perfumes en mezcolanza con venenos.

Y ardía en mi ser,
una orquesta de animales marinos.
Oh, nunca volverás a rascarme cuando esté sucio,
descuartizado,
nena nunca volverás a volar en el humo de mis cigarros,
jamás querrás pensar en mí,
y en las divinidades,
y en los ancianos,
y en los ratos podridos, los niños aburridos.
Todos los climas torcidos.
En el pensamiento deformado...
Nena, lo debí haber aceptado;
ahora la vida se abalanza a mí como un viejo con un puñal brillante,
como los ojos de una pantera, danzante
y escaparé a otro planeta,
y correré en tus alucinaciones
música del pasto violento
música del viento.

59
PERRA CÓSMICA

Aquí estoy yo
parido por una perra cósmica
perseguido por las abejas.
Mi infancia fue un cúmulo de desgracias caóticas,
mi estado actual es el pasado muerto
a fuerza de hermosos narcóticos saltarines
en insuperables campos rosados y esponjosos.
Toda mi vida es un mal criterio.
Toda tu vida es una mala decisión.
Estás esperando siempre
que la vida te sorprenda y cambie tu destino
que te muestre que hay bondad, que te muestre su lencería
pero estamos siempre volviendo a la perra cósmica;
cachorros abandonados en un espacio mayor.
La vida es la vida y esa criatura misteriosa sigue retroalimentándose
sin fin de tus ideas de un mal negocio
de tu sábado marrón.
Entonces nunca nadie tocará tu puerta para decirte
"soy lo nuevo, vengo a hacerte feliz"
Todos conocen muy bien las reglas del juego.
Todos salen a correr con canastos de madera por el campo.
***
Cansado de esperar sólo en función de entretener a la mente,
me siento en una silla,
contemplo la pared: impotente ante todo.
Enciendo un cigarrillo;
sigo siendo yo.

60
PUEMAS DEL BULÍN INMORTAL
Feca, mate amargo y tabaco
¿Te acordás hermano?
Sudando cocó por los sobacos…
Manyando el escolazo de Dios
del que me hablabas vos…
El faso y el Pernod te hacían filosofar
¡Hay que darle un castañaso a ese charlatán
que quiso bautizarme de gil sin ser tal.
Compadropa fulero y querido
has quedao en la lona por las falopas y el vino
de tanto campanear el cuento
el cuento jamás resuelto…
Dios es ese compadrito al que se le paga
y ni te pianta el vuelto.

II
De un biabaso te faje los tres meses de alquiler
viejo maula vos sabes que no me quisiste bancar
y porque vos manyas que me la juego bien
te voy a cantar la carta, vas a tener que escuchar.
Vos querés suponer gagá fayuto
que soy más rante que esos rantes que van en grupo
Y me das todo el cartel de chabón vicioso y haragán
Y tenés al otro compadrón que se afana en botonear.
Me ves bien curda ¡Y te esgunfia la milonga!
Del eterno meta y ponga…
Vos cayás ante el batuque
pero a mi naides me engrupe
con la mirada lunga.
Te pedí nomás bancame una semana
vos me mirás y envidiás porque recordás
tus viejos tiempos de rana
me dejaste en la calle, me diste macanas
pero tenés a tu fulana
rezando padres nuestros
a hijos de los otros
y porque soy chabón pulenta me batiste a la cana
¡Pero cuando salga te dejo tuito roto!

61
III
Bandoneón, vas con el linyera
manyas a la papausa, sos del corazón.
Y en el cuore palpito el convento
y todos mis inventos nacieron en la pensión.
Sueño loco, hoy me angustia
saber que se fue y que nunca más volvió.
Usted, bandoneón, me quejo su merced
hasta le bato que por poder volver a conocerlo
jamás intente desmentirlo
yo volvería a nacer.

CARTAS
Año desconocido.
Un hombre avanza por la línea de fuego.
Arrasan la capital los bombardeos,
la noviecita está en Buenos Aires
el hermano y la hermanita quién sabe dónde.
Silbando pasa un hombre de mente brillante
por entre los cadáveres y los cuerpos oxidados,
mientras el barco parte olvida el viejo puerto muchacho.
Aún me cabalga el oído lo que el silbó
ahora que pernocto en galpones
viviendas de cucarachas y roedores
exiliado, hombre, viejo buen muchacho.
Un oficial puso a un francotirador a que me vigilara
la noviecita está en Buenos Aires,
sensual puerto de catacumbas donde arriban buques y leopardos,
el francotirador, su frente sudaba lo que olvidó
el hermano y la hermanita están refugiados, donde el viento sopla.
Buen muchacho, vive en la trinchera
hace las compras con un arma en cada mano,
come mucho, es un buen muchacho.
Buenos Aires tuvo el delirio de que arribé en otra parte
cuando levantó su ancla no sabía que yo no levanté la mía
anudada a mi corazón.

62
III
Año desconocido.
Hay granjeros titubeantes
que si los escondimos aquí, yo no sé, los vi marcharse corriendo
hacia los bosques, hacia los prados.
El hombre desnudo y loco pasó hambre al modo italiano,
piensa en mudarse de planeta mientras masca hiedras secas y se tapa con un manto rojo.
Los chicos no tendrán regalos, no habrá cumpleaños
mejor, dice la señora, mientras le cortan un brazo.
Vienen las sequías, oh si, a los chicos ya no les parece divertido morir de sed, jugar a morir de sed.
El matungo es manso y poderoso,
tiene una mirada bondadosa y cuida muy bien sus palabras al hablar,
menciona el dolor y lo bien que hace, menciona la guerra, dice, por su culpa estamos varados aquí
el cura violó a mi madre mis hijos no querrán ser montados.
El esclavo negro es pisoteado en un pajonal,
su padre fue bien colgado de las bolas
el amor no funciona, no es para nosotros.
Usted devora y no se pregunta quien sufrió, ah sí, deberíamos, dice
y se va a dormir
y la vida pasa.

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LOS AÑOS FUERON CARCOMIENDO
Un hombre, lánguido en la cama
y la estirpe de su seso batallaba, batallaba.
Afuera un fecundo y risueño templo de rosas
el viejo lánguido abre sus fosas
desconoce el empeño
que puso.
Para qué, dice.
Jamás comprenderá, pobre viejo
todas esas redadas inútiles desde su más blanda infancia
hasta su más costrudo esqueleto que es el supuesto hoy.
La gente habla de un hoy,
el viejo abre sus fosas, arma un cigarro (lleva décadas haciéndolo)
mientras duda de ese hoy
clava su mirada entre ceja y ceja a ese hoy
jura próximas venganzas a ese hoy.
¡Duda de tu duda decía la madre de un viejo amigo!
Cuando no era un viejo y era un joven con hormonas y con celos y con ¡esperanzas!
Para qué, dice él, lo acompañarán en su decir - otros.
Hasta el fondo de su calumnia (que es prudentemente erótica)
Y la lejana letanía sacrílega que él menciona o relee de algún francés opiómano,
no deja, no abandona ese utilitario para qué.
Hay algo horrible en ese hoy…
Yo simplemente lo sospecho, pero hay algo horrible en ese hoy…
Y la estirpe de su seso batallaba y batallaba.

ANOTACIONES

La Gente: Dime tu, querida


¿Acaso tu lengua puede pronunciar una palabra más ordinaria que esa?
Gente… apenas pueden sentir;
es como besar a un tonto, en la frente, demasiado alto para él.
La gente, dime, ¿no estás cansada de la gente?
Por donde caminan los veo llevar consigo al ruido
yo soy el único al que podrías amar,
entre todas esas multitudes podrías diferenciar mi brillo.
No escuches a la gente.

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