1- Que características tiene un HD

2- Que diferencia existe entre un disco de 3.5 y uno de 2.5

3- En que consiste la capacidad de un disco duro
4- Desarrolle una tabla para explicar el espacio que ocupan los diferentes tipos de
archivo en un disco duro
5- Que es la velocidad de giro y como se mide
6- Que problemas genera la velocidad de giro
7- Que es la velocidad de respuesta
8- Que es velocidad de transferencia y en que se diferencia de la velocidad de
respuesta
9- Que es velocidad es la mas importante, la velocidad física o la de interfaz
10- Que es el sistema de particiones
11- -Como afecta la memoria cache el rendimiento de un disco duro
12- Que es la interfaz y como afecta al momento de comprar un disco duro
13- Que es PATA y como funciona
14- Que peculiaridades presenta PATA
15- Que es SATA
16- Que peculiaridades presenta SATA
17- Que es SATA1 y a qué velocidad trabaja
18- Qué diferencia existe entre SATA1 y SATA2
19- Que es la conexión en caliente en un sata
20- Es posible conectar un SATA2 a una conexión de MB con soporte sata1, si y no
porque
21- Elabore un cuadro en el cual se defina las características , ventajas y desventajas
de RAID 0, 1 Y 5

Las características de un disco duro son básicamente las siguientes:

 Tamaño físico etc

 Capacidad
 Velocidad de giro
 Velocidad de respuesta
 Velocidad de transferencia
 Caché
 Interfaz
  Tecnologías asociadas

Todas estas características están interrelacionadas y por lo tanto acaban mezclándose en

algún punto por lo tanto dicha división se podría haber hecho de otra forma, pero cada
redactor tiene su forma de expresarse.

Tamaño: El tamaño de un disco duro es básicamente lo que ocupa físicamente todo el

dispositivo, básicamente tenemos dos tamaños muy extendidos y luego otros menores o que
no tenemos tanto acceso a ellos. Los discos duros por excelencia de un ordenador son los de
3,5" y son aquellos que se instalan en los ordenadores de sobremesa, son los que tenemos
la mayoría de usuarios y los más económicos.

Seguidamente tenemos los discos duros de 2,5" que son los que se montan en ordenadores
portátiles, son algo más lentos, caros y con menos capacidad. A partir de ahí hay modelos de
1,8" para ordenadores ultraportátiles y medidas más pequeñas para varios dispositivos
electrónicos como pueden ser reproductores de MP3, PDAs, consolas, etc, etc... Esta medida,
en pulgadas es el valor de ancho del disco duro y no todos los discos duros tienen porque
tener las mismas medidas en alto o largo.

Como ejemplo y desde hace tiempo hay discos duros que caben en una "CompactFlash",
e incluso se hablaba de discos de Toshiba en tamaño "SD" de 0,85".

Generalmente para mantener compatibilidad no hay muchas variaciones, pero en 3,5" como
mínimo hay dos alturas distintas que influyen muy poco en su uso práctico y en el caso de
los portátiles sí que hay distintas alturas: cada vez son más delgados y es posible que un
disco duro de portátil algo antiguo termine por no caber en el espacio que requiere un
portátil actual o incluso una caja externa para discos duros. Habitualmente los discos son
siempre de la misma longitud.

Capacidad: la capacidad es el dato más común de los discos duros e indica la cantidad de
datos que podemos almacenar en ellos, actualmente contamos su capacidad por Gigabytes y
las cifras actuales rondan los 100GB para portátil y las 500GB para sobremesa. Hay modelos
de hasta 1.000GB (o 1TB) en sobremesa. La cifra actual de capacidad sin pasarse de precio
se sitúa a 300-320GB en sobremesa, aunque para uso puramente ofimático los discos de
120GB y 160GB son más que suficiente. Para portátil ya no vemos menos de 40GB y hay
modelos de 160GB. Gracias a la tecnología de grabación perpendicular, que explicaremos un
poco más adelante se ha llegado a estas últimas cifras y los fabricantes esperan ampliar
mucho más este punto, por lo que pronto estas cifras quedarán obsoletas.

Podemos decir que aproximadamente un usuario normal con Windows XP utilizará entre 5 y
15GB de disco duro para el Sistema operativo y programas, quizá hasta 20GB. El resto de
espacio ocupado serán los datos y juegos. Los datos de texto no ocupan prácticamente nada,
los correos depende de si hay ficheros adjuntos, pero podemos calcular hasta 2GB de correo,
aunque Outlook puede tener problemas a partir de ficheros de 1GB y es conveniente ir
separándolos o borrando los antiguos. Las fotos, dependiendo de la calidad ocuparán desde
500KB hasta 2MB por cada, por lo que tampoco es de lo más relevante y al cabo de un par
de años tendremos quizá 10GB ocupadas por ellas. Lo que realmente ocupan son canciones
(de 3MB a 10MB) películas (De 600MB a 5GB) y juegos (de 1GB a 8GB). Estos datos son
muy aproximativos.

Velocidad de giro: Los platos del disco duro van girando a una velocidad. Dicha velocidad
se mide en RPMs y mayormente estamos con tecnología de 7.200 RPMs, hace años
abandonamos los de 5.400 RPMs para sobremesa y el cambio fue notable (y los que tengan
más memoria también recordarán los de 4.200 RPMs en sobremesa). En gama alta podemos
encontrar los discos duros Western Digital Raptor de 10.000 RPMs y para uso profesional
tenemos discos SCSI de hasta 15.000 RPMs. En portátil podemos ver aún discos de 4.200,
muy comunmente los de 5.400 RPMs y algunos de 7.200. La velocidad de giro es
fundamental para que un disco duro vaya rápido ya que a cuanto más vueltas por minuto
más veces pasarán los datos que tenemos en el disco por nuestro cabezal y por lo tanto irá
más rápido.

Platos y cabezal de un disco duro

La velocidad de giro significa aumentar el calor generado, el ruido generado y la posibilidad

de fallos, así como el consumo, por ello hay que poner más calidad en los componentes para
mejorar estos puntos y los avances han sido bastante lentos en este aspecto, hoy en día
todo sobremesa es de 7.200 RPMs. Aunque los Raptor de 10.000 son muy buenos y de gran
calidad, tienen un precio y una capacidad poco interesantes (36, 74 y 150GB), los usuarios
que disponen de ellos principalmente tienen el S.O. y programas más usuados en ellos y
luego otro disco duro para almacenar los datos "grandes".

La velocidad de giro es una característica fundamental en el rendimiento de un disco duro,

aunque en ciertas épocas, como ahora mismo, la mayoría de alternativas funcionan a la
misma velocidad y tenemos que buscar más datos para diferenciar los productos.

Velocidad de respuesta: O también tiempo de respuesta, es el tiempo que tarda nuestro

disco duro en encontrar y empezar a servirnos los datos, está íntimamente ligado con la
velocidad de giro, pero hay varias tecnologías para mejorar este aspecto. Básicamente se
traduce en el tiempo que tendremos que esperar entre que damos un click a un icono o
fichero hasta que este se pone en funcionamiento, una vez se empiezan a transmitir los
datos, ya es más relevante la velocidad de transferencia. Digamos que haciendo tareas
ofimáticas, administrando ficheros, trasteando con el S.O. la velocidad de respuesta es
bastante importante pero una vez decidimos copiar toda una carpeta o una película, a otro
lugar del disco duro o a otro disco, lo que interviene es la velocidad de transferencia.

Velocidad de transferencia: Es la velocidad con la que el disco duro nos transmite los
datos una vez localizados, también está íntimamente relacionado con la velocidad de giro,
pero hay distintas tecnologías que mejoran o intervienen en este aspecto del rendimiento del
disco duro. Cuando más rápida sea la velocidad de transferencia más rápido se copiaran los
ficheros de un sitio a otro. Siguiendo lo que comentábamos en el último punto podríamos
generalizar mucho diciendo que en ficheros grandes importa la velocidad de transferencia y
en ficheros pequeños importa el tiempo de acceso.

Velocidades máximas del interfaz

Hay alguna noticia que apunta a que existirá pronto un estándar Sata 2.5 e incluso una
nueva revisión 2.6. Cuando se confirme más información ya saldrá publicado en una
noticia en esta web.

Velocidad de interfaz vs. velocidad física: Un aspecto que lleva a confusión y que
trataremos en el apartado del interfaz es la velocidad de este, normalmente cuando se nos
anuncia la velocidad de un disco duro se da la velocidad máxima del interfaz o sistema de
conexión entre el disco duro y nuestra placa base, pero en el 99% del tiempo quien manda
es la velocidad física con la que es capaz de funcionar el disco, es decir los platos del disco
en servir estos datos al chip que luego nos los enviará hacia el sistema. Normalmente no se
nos da la velocidad física real de un disco duro y sería un dato muy deseable aunque difícil
de calcular ya que depende del uso que hagamos, la fragmentación de los datos, etc...

En la tabla que vemos arriba aparecen los datos de velocidad máxima de cada interfaz
interno que conocemos, le acompañan las velocidades del bus utilizado, cuantos dispositivos
se pueden conectar a cada puerto y la longitud máxima de los cables. Aparecen los datos del
bus Sata-3 que sale comentado en la wikipedia, aunque de momento no tenemos un anuncio
claro de que vaya a ser implementado en ningún dispositivo ni confirmación de que esté
ratificado.

Tamaño de la caché: La memoria caché se inventó para distintos componentes

informáticos y su propósito es tener allí datos que se consultan a menudo y que sean
servidos de forma mucho más rápida que de donde deberían estar, esto ocurre tanto en
procesadores como en los discos duros, aunque de formas bastante distintas. Los tamaños
habituales de las memorias cache del disco duro son 2MB (ya descatalogados) 8MB, 16MB y
pronto 32MB.

Aparte del tamaño la velocidad de dicha memoria sería interesante, pero no es un dato que
se nos proporcione fácilmente, la memoria caché tiene una velocidad de acceso y
transferencia muy superior a lo que es el acceso físico a los datos del disco duro, por lo que
si lo que pedimos está en la caché estaremos de enhorabuena y tendremos los datos mucho
más rápidos. El coste de la memoria cache es lo que impide que se pongan más cantidades y
a partir de ciertas cifras las diferencias se diluyen.

Actualmente tenemos los discos de 8 y 16MB de caché, siendo recomendables los segundos,
aunque las diferencias reales serán difíciles de apreciar y dependerá del momento, está claro
que una copia de una película no importa la caché, pero si el S.O. o el programa que
estamos utilizando consulta muy a menudo un dato y este está en la caché, perderemos
menos tiempo.

Con el crecimiento del tamaño de los discos duros los últimos modelos de más capacidad
empiezan a incorporar hasta 32MB de caché, por ejemplo en la serie Barracuda 7200.11 de
Seagate observamos que las capacidades de 500 y 750 GB tienen dos modelos: el de 16 y el
de 32MB de caché, el modelo de 1TB de momento sólo está en 32MB. Así si vemos
diferencias de precio entre dos HDs 7200.11 del mismo tamaño es posible que estemos ante
modelos con distinta cantidad y vale la pena apuntarse el modelo en concreto para saber
exactamente lo que compramos.

El defecto de la caché es que es volátil y por lo tanto cuando se apaga la corriente sus datos
son eliminados, por ello cuando se apaga un disco duro, este tiene energía durante
suficientes milisegundo o incluso décimas para almacenar esos datos. Si el apagón es de
golpe o hay un reset, podemos perder esos datos, si eran una copia para consultar más
rápidamente lo que había en el disco no es problema, pero si estábamos modificando
ficheros o copiando algo podemos perder lo último.

Interfaz: Este es otro punto muy importante o básico para adquirir un disco duro, el interfaz
de conexión de este tiene que ser compatible con nuestra placa base, sino no podrá
funcionar. Y ya menos importante hay la velocidad de transferencia de este interfaz.

Y si nos ponemos a hablar del interfaz aquí tenemos un elemento de marketing y posibles
confusiones que sería interesante aclarar:

PATA: Es el interfaz que hemos estado utilizando durante muchísimos años el cual ha ido
sufriendo renovaciones para mantenerlo al día. La P es de Parallel y significa que los datos se
envían en paralelo a través de su cable. Un interfaz paralelo por lógica debería ser más
rápido que lo mismo en serie, pues se pueden transmitir más datos de una sola vez, no
obstante la informática o mejor dicho las comunicaciones nos demuestran que no siempre es
así. A partir de la revisión a UDMA 66 se requirió que los cables de datos pasasen de 40 a 80
hilos para añadir 40 cables de señal de tierra para que el aumento de velocidad de los datos
no degradara la fiabilidad de estos... Así vimos como se llegó al modo UDMA 133, no
soportado por todos, si no nos falla la memoria fue exclusivo de Maxtor, antes de ser
absorbida por Seagate. Pablo nos comenta y demuestra con ejemplos que Samsung e
Hitachi también dispusieron de discos ATA-133. Aún con todo podemos decir que el máximo
soportado por todos los chipsets y discos duros es el UDMA 100. Más que suficiente aún a día
de hoy.

La cifra que acompaña el UDMA es la capacidad de la velocidad de transferencia del interfaz,

así con los discos PATA hemos llegado a la velocidad máxima de 133MB/s, algo que aún no
ocupan los discos duros más rápidos del mercado.

El interfaz PATA tiene otras peculiaridades como es que se pueden conectar hasta dos
dispositivos en cada canal y por lo tanto cable de datos. Para evitar conflictos y sepa de
donde vienen y a donde van esos datos hay que configurar una unidad conectada a este
interfaz como maestro y la otra unidad como esclava. Pueden combinarse discos duros y
unidades ópticas en estos canales aunque siempre han habido recomendaciones de situar el
dispositivo más rápido como maestro y también se ha sugerido que las grabadoras fueran
Master, así era habitual tener un Disco duro Master en un canal y una grabadora Master en el
otro canal, así los lectores u otros discos duros se configuraban como esclavos de cada canal.
Esto ha conllevado a confusiones para los usuarios menos expertos y en algunos casos a
incompatibilidades entre dos dispositivos conectados al mismo canal. Como anécdota
podemos comentar que el nombre de maestro y esclavo fue duramente criticado por ser
"racista" y se propuso quitar esa nomenclatura, el paso a otro interfaz como ha sido el SATA
ha evitado seguir discutiendo por este punto.

Los cables PATA tienen sus limitaciones de longitud y en los últimos años, cuando empezaron
los problemas de calor dentro de las cajas de ordenador, se criticó su habilidad para obstruir
el flujo de aire del interior de la caja, de eso y también por estética surgieron los cables PATA
redondeados, ya fuese creados de fábrica o hechos por el propio usuario siguiendo, por
ejemplo una guía publicada en esta misma web hace muchos años.

SATA: El interfaz SATA, S-ATA o Serial ATA es el que tenemos hoy en día ya que el proceso
de migración que empezó en la época de las nForce 2 y los Athlon XP o Pentium 4 de su
época ha sido lento y mucho menos traumático que otros cambios de interfaz de nuestro
equipo como pueden ser los de la memoria de SDRAM a DDRAM o la actual DDR2 o el
cambio de las VGAs AGP a PCI Express. El motivo del cambio gradual y menos problemático
ha sido que ambas conexiones han podido coexistir en la misma placa base y no se han ido
quitando puertos PATA hasta que no se han estandarizado los discos duros SATA.

Las unidades ópticas han resistido mucho más, aunque el motivo no ha sido técnico sino las
pocas ganas de los fabricantes de sacar modelos SATA. Será durante este 2007 que veremos
sustituir los lectores y grabadoras PATA por sus homólogos SATA, de hecho ya hay en el
mercado unidades SATA a un precio casi idéntico a las unidades PATA y en lo que a chipsets
se refiere Intel ya ha abandonado el soporte nativo PATA y si compramos alguna placa base
con chipset Intel y vemos que tiene algún conector PATA es gracias a un chip específico,
otros fabricantes de chipsets sólo dan soporte nativo a un único canal y podemos decir que
es cuestión de meses ver desaparecer dicho soporte nativo en los chipsets, que no de las
placas base gracias a chips específicos, pues aún a día de hoy el parque de unidades ópticas
PATA es del 99%.
 Conectores SATA de una placa base

Como hemos comentado en la parte del interfaz PATA, el SATA tiene un enfoque totalmente
distinto y se basa en enviar los datos en serie, pero de una forma mucho más seguida y
rápida que en el interfaz PATA, al enviar muchos menos datos a la vez por el cable tenemos
menos tasa de errores y podemos aumentar su frecuencia. Así la primera revisión del
interfaz SATA consigue una velocidad máxima de transferencia de 150MB/s. Ahora mismo ya
está totalmente establecida la segunda revisión de este interfaz, que simplemente duplica la
velocidad de transferencia, es el SATA2 o SATA 300. Finalmente vemos que ya se empieza
ha hablar del SATA 3 que volverá a aumentar la velocidad de transferencia, pero la realidad,
al menos de momento, nos demuestra que aún no hemos ocupado el ancho de banda ni del
mejor PATA, por lo que los cambios de interfaz entre SATA 1, 2 y 3 son prácticamente
inapreciables con nuestros equipos.

La velocidad de giro de los discos duros no ha podido evolucionar tan rápidamente e impide
que se puedan leer o escribir los datos de un disco duro de forma tan rápida, sin embargo
hay partes que sí que notan esta mejora, como son los accesos a la cache o cuando
montamos un RAID de discos duros que sí que pueden llegar a saturar las primeras
revisiones de este interfaz, aunque realmente y como siempre en la informática primero
crean la novedad y el marketing y hasta pasados unos años no empezamos a aprovechar
dichas capacidades, justamente cuando ya han salido una o dos revisiones más.

Conector de un cable de datos SATA

El interfaz SATA sólo permite un dispositivo por cable, por lo que han tenido que poner más
conectores en las placas base, no obstante los cables son mucho más pequeños y menos
molestos, tanto para la instalación como para el flujo de aire. El hecho de que no se puedan
conectar dos dispositivos en el mismo cable también ha reducido los problemas de
configuración, conflictos y el tener que colocar dos unidades muy juntas porque tenían que
utilizar el mismo cable. También permite la conexión en caliente de los dispositivos, algo no
imprescindible para los usuarios domésticos pero que en algún caso puede ser práctico.

Conector de Corriente SATA

También se puede comentar que los primeros discos duros SATA llevaban 8MB de cache
mientras que los mismos en PATA llevaban 2MB, así se incentivó a los usuarios a cambiarse
de interfaz ya que notaban un ligero aumento de rendimiento, el cual no era gracias al
interfaz sino a la cache extra montada estratégicamente y sin que se comentara mucho. Aún
a día de hoy podemos encontrar discos duros PATA, SATA y SATA2 en el mercado, aunque la
diferencia de precio es insignificante y recomendamos coger SATA de cara al futuro y no
quedarnos sin interfaz para el disco duro con la próxima placa base que adquiramos.

Para terminar nos faltaría comentar que en una placa SATA 2 podemos montar un disco
duros SATA 1, pero en una placa SATA 1 podemos tener problemas para que funcione un
disco SATA 2, es por ello que tienen un jumper o selector para configurarlo como SATA 1. Os
mostramos una foto y os recomendamos que le deis un repaso a vuestra configuración pues
muchos discos duros SATA 2 vienen por defecto con el jumper para que se comporten como
SATA 1 y evitar problemas de compatibilidad. Naturalmente no se notará el cambio, pero a
nadie le gusta infrautilizar su hardware.

También se puede comentar que los Hitachi SATA-2 el modo SATA-2 se configura mediante
el software del fabricante y por defecto también vienen como SATA-1.