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1.1.

ESTRÉS
Considere la situación que se muestra en la figura 1.1. Un peso descansa
sobre la parte superior de un pilar. Debido al peso, una fuerza está actuando
sobre el pilar, mientras que el pilar reacciona con un igual, pero a la inversa
fuerza dirigida. El pilar en sí es apoyado por el suelo. De ahí la fuerza que
actúa en el la parte superior del pilar debe actuar a través de cualquier sección
transversal del pilar.
El área de la sección transversal en a) es A. Si la fuerza que actúa a través de
la sección transversal es denotado F, entonces el esfuerzo σ en la sección
transversal se define como:

La unidad SI para el estrés es Pa (= Pascal = N / m2). En la industria del


petróleo, "campo petrolífero" unidades como psi (libras por pulgada cuadrada)
todavía se usan ampliamente, de modo que uno necesita ser familiarizado con
ellos. Consulte el Apéndice B para obtener una descripción general de algunos
factores de conversión.
El signo del estrés σ no está definido únicamente por la física de la situación, y
tiene por lo tanto se definirá por convención. En mecánica de rocas, la
convención de signos establece que las tensiones de compresión son positivas.
La razón histórica de esto es que las tensiones tratadas en mecánica de rocas
son en su mayoría compresivas. La convención de signos no causa problemas
cuando se usa constantemente, pero es importante recordar que la convención
de signos opuestos es la opción preferida en algunas otras ciencias que
involucran elasticidad, y que también es ocasionalmente utilizado en mecánica
de rocas.

Como la ecuación (1.1) muestra, la tensión se define por una fuerza y una
sección transversal (o más generalmente, una superficie), a través de la cual
actúa la fuerza. Considere la sección transversal en b). La fuerza actuar a
través de esta sección transversal es igual a la fuerza que actúa a través de la
sección transversal en
a) (descuidando el peso del pilar). Sin embargo, el área A de la sección
transversal en
b) es menor que A. Por lo tanto, la tensión σ = F / A en b) es mayor que la
tensión en a), es decir, la tensión depende de la posición dentro de la muestra
estresada. Yendo aún más lejos, podemos dividir el sección transversal en a)
en un número infinito de subsecciones A, a través de las cuales una infinita la
pequeña parte F de la fuerza total F está actuando (Fig. 1.2). La fuerza F puede
variar de uno subsección a otra. Considere una subsección i que contiene un
punto P. El estrés en el el punto P se define como el valor límite de Fi / Ai
cuando Ai va a cero, es decir:

Eq. (1.2) define la tensión local en el punto P dentro de la sección transversal


en a), mientras que la ecuación. (1.1) describe el estrés promedio en la sección
transversal. Cuando se habla del estado de estrés en un punto, nos referimos
implícitamente a tensiones locales.
La orientación de la sección transversal con respecto a la dirección de la fuerza
también es importante.
Considere la sección transversal en
c) en la figura 1.1, con el área A. Aquí la fuerza ya no es normal a la sección
transversal. Entonces podemos descomponer la fuerza en un componente Fn
que es normal a la sección transversal, y un componente Fp que es paralelo a
la sección (Fig. 1.3).
La cantidad
se llama estrés normal, mientras que la cantidad se llama el esfuerzo cortante.
Por lo tanto, hay dos tipos de tensiones que pueden actuar a través de una
superficie, y la magnitud de cada uno depende de la orientación de la
superficie.

1.1.1. El tensor de estrés.


Para dar una descripción completa del estado de estrés en un punto P dentro
de una muestra, es necesario identificar los esfuerzos relacionados con las
superficies orientadas en tres direcciones ortogonales.
Los esfuerzos relacionados con una superficie normal al eje x pueden
denotarse σx, τxy y τxz, representando el esfuerzo normal, el esfuerzo cortante
relacionado con una fuerza en la dirección y, y el esfuerzo cortante relacionado
con una fuerza en la dirección z, respectivamente. Físicamente, solo habrá
Un esfuerzo cortante asociado con esta superficie. Sin embargo, la orientación
del esfuerzo cortante tiene para identificar, y esto se hace más
convenientemente identificando sus componentes yy z: τxy y τxz. Del mismo
modo, los esfuerzos relacionados con una superficie normal al eje y se denotan
como σy, τyx y τyz, mientras que las tensiones relacionadas con una superficie
normal al eje z se denotan como σz, τzx y τzy. Por lo tanto, hay nueve
componentes de tensión relacionados con el punto P:
La expresión (1.5) se llama tensor de estrés. Da una descripción completa del
estrés estado en el punto P.
Asociando el primer índice con la cara normal y el segundo con la dirección de
la fuerza, es una cuestión de elección, similar a la convención de signos. Como
resultado, uno verá lo contrario convención utilizada en una serie de obras, p.
Landau y Lifshitz (1986). Además, debido a la simetría del tensor de tensión
(ver más abajo), la convención no tiene importancia práctica.
A veces es conveniente denotar el tensor de estrés con un solo símbolo, por
ejemplo
σ.
Así σ significa implícitamente la colección de componentes de tensión dada por
(1.5). El estrés el tensor también tiene un significado físico definido: si rˆ es un
vector unitario, la expresión |
σ · ˆr |,
representa el esfuerzo total (normal y cortante) en la dirección de rˆ.
Sin embargo, no todos los nueve componentes del tensor de estrés son
independientes. Considera un pequeño cuadrado del plano xy, como se
muestra al actuar sobre el cuadrado son se muestra en la figura. El cuadrado
está en reposo, por lo tanto, ninguna fuerza de traslación o rotación

neta puede actuar sobre él. Si bien ya no se garantiza la fuerza de traslación,


ninguna fuerza de rotación requiere que
τxy = τyx (1.6)
Del mismo modo, se puede demostrar que
τxz = τzx (1.7)
y
τyz = τzy (1.8)
Las relaciones (1.6) a (1.8) son generales y reducen el número de
componentes independientes del tensor de tensión (1.5) a seis.
Aunque es práctico para muchos propósitos, la notación utilizada en (1.5) no es
muy conveniente para los cálculos teóricos. Para tales fines, la siguiente
notación es frecuentemente utilizado: ambos tipos de tensiones (normal y
cortante) se denotan σij. Los subíndices i y j pueden ser cualquiera de los
números 1, 2, 3, que representan los ejes x, y y z, respectivamente. El primero
el subíndice (i) identifica el eje normal a la superficie real, mientras que el
segundo subíndice (j) identifica la dirección de la fuerza. Así, de la figura 1.4,
vemos que σ11 = σx, σ13 = τxz,
En esta notación, el tensor de tensión (1.5) se convierte en

donde hemos usado explícitamente la simetría del tensor de estrés. Véanse los
apéndices C.4 – C.7 para una discusión de cómo cambian los componentes del
tensor como resultado de un cambio de coordenadas.

1.1.2. Ecuaciones de equilibrio.


Además de las fuerzas que actúan sobre la superficie de un cuerpo, también
puede haber fuerzas que actúan en cada parte del cuerpo mismo. Tales
fuerzas se llaman fuerzas corporales. Un ejemplo de una fuerza corporal es
gravedad. Denotaremos por fx, fy y fz los componentes de las fuerzas del
cuerpo por unidad de masa actuando en el punto x, y, z de un cuerpo. Según la
convención de signos, fx es positivo si actúa en la dirección x negativa, y de
manera similar para fy y fz. Como ejemplo, considere un pequeño parte del
volumen V de un material con densidad ρ. Si z es el eje vertical, la fuerza del
cuerpo debida
La gravedad que actúa sobre este pequeño volumen es ρfz V = ρg V, donde g
es la aceleración de gravedad.
Las fuerzas del cuerpo generalmente dan lugar a gradientes de estrés. Por
ejemplo, un elemento en una formación no solo está sujeto a la fuerza de
gravedad, sino que también debe soportar el peso de la formación encima. Por
lo tanto, el estrés total aumenta al aumentar la profundidad.
Para que un cuerpo estresado permanezca en reposo, se requiere que todas
las fuerzas que actúan sobre el cuerpo cancelar. Este requisito produjo un
conjunto de requisitos de simetría para el tensor de tensión.
(Ecs. (1.6) a (1.8)). Además, produce un conjunto de ecuaciones para los
gradientes de tensión.
Estas ecuaciones se llaman ecuaciones de equilibrio.
Considere el paralelepípedo que se muestra en la figura 1.5. Las fuerzas que
actúan sobre este cuerpo en el dirección x son

Sumando las ecuaciones. (1.10) a (1.13) y dividiendo por x y z, encontramos


que el requisito para las fuerzas en la dirección x para cancelar es equivalente
a

Del mismo modo, para las fuerzas en las direcciones y y z encontramos

Eqs. (1.14) a (1.16) son las ecuaciones de equilibrio en términos de tensiones.


Tenga en cuenta que en el notación alternativa (mostrada en la ecuación (1.9)
para las tensiones, y con x1 = x, x2 = y, x3 = z),
Estas ecuaciones toman una forma particularmente simple:
1.1.3. Tensiones principales en dos dimensiones.
Para orientaciones especiales del sistema de coordenadas, el tensor de tensión
tiene un aspecto particularmente simple. Formar. Para revelar esta forma,
inicialmente estudiaremos las tensiones en dos dimensiones. Esto es más que
solo un ejercicio académico; Muchos problemas de interés práctico son
efectivamente bidimensionales.
Considere los esfuerzos normales (σ) y de corte (τ) en una superficie orientada
normal a un general dirección θ en el plano xy, como se muestra en la figura
1.6. El triángulo de la figura está en reposo, como que no actúan fuerzas netas
al respecto. La cancelación de fuerzas implica que:

Mediante la elección adecuada de θ, es posible obtener τ = 0. De la ecuación.


(1.21) vemos que esto sucede cuando:

Eq. (1.22) tiene dos soluciones, θ1 y θ2. Las dos soluciones corresponden a
dos direcciones.
Para lo cual el esfuerzo cortante τ desaparece. Estas dos direcciones se llaman
los ejes principales de estrés.
Las tensiones normales correspondientes, σ1 y σ2, se denominan tensiones
principales, y son encontrado al introducir la ecuación. (1.22) en la ecuación.
(1.19):
Es conveniente elegir la notación tal que σ1 σ2. Por lo tanto, en la dirección θ1,
que identifica un eje principal, el esfuerzo normal es σ1 y el esfuerzo cortante
es cero. En el dirección θ2, que identifica el otro eje principal, el esfuerzo
normal es σ2 y la cizalla
El estrés es cero. Los ejes principales son ortogonales.

1.1.4. Círculo de estrés de Mohr


A menudo es conveniente reorientar el sistema de coordenadas de modo que
el eje x sea paralelo a el primer eje principal y el eje y paralelos al otro.
Entonces las tensiones σ y τ en un
La dirección general θ relativa al eje x se convierte, a partir de las ecuaciones.
(1.19) y (1.21):

Al trazar los valores correspondientes de σ y τ en un diagrama (Fig. 1.7a),


obtenemos un círculo llamado El círculo de Mohr. El radio del círculo es (σ1 -
σ2) / 2 y el centro está en el punto (σ1 + σ2) / 2 en el eje σ.
Las tensiones σ y τ en cualquier dirección θ (Fig. 1.7b) corresponden a un
punto en el Mohr circulo. De la figura 1.7a se ve que el mayor valor absoluto
para el esfuerzo cortante es (σ1 - σ2) / 2 y ocurre para θ = π / 4 (= 45 °) y θ =
3π / 4 (= 135 °). El círculo de Mohr es una herramienta muy útil en el análisis
de condiciones para falla de rocas, como se verá en el Capítulo 2.

1.1.5. Tensiones principales en tres dimensiones.


Ahora moviéndonos a tres dimensiones, primero tenemos que decidir cómo
identificar una dirección en espacio. Esto puede hacerse por los cosenos de
dirección (véase también el Apéndice C.6):
Los ángulos αx, αy y αz son los ángulos entre nuestra dirección elegida y las
direcciones x-, y- y ejes z, respectivamente (Fig. 1.8). El vector rˆ = (lx, ly, lz) es
un vector unitario en el dirección. Tenga en cuenta que siempre tenemos

Las principales tensiones se pueden encontrar resolviendo para σ la ecuación


determinante (ver
Apéndice C, en particular el Apéndice C.2.12 en la página 449):

Las tres soluciones de esta ecuación son las tensiones principales σ1, σ2 y σ3.
Las soluciones están organizados convencionalmente de modo que σ1 σ2 σ3.
La dirección cosenos l1x, l1y y l1z identificando el eje principal correspondiente
a σ1 se encuentran resolviendo las ecuaciones:

Los ejes principales correspondientes a σ2 y σ3 se encuentran de manera


similar al sustituir el subíndice 1 por 2 y 3, respectivamente, en las ecuaciones.
(1.32) - (1.34).
Si el sistema de coordenadas está orientado de modo que el eje x sea paralelo
al primero, el eje y paralelo al segundo, y el eje z paralelo al tercer eje principal,
el tensor de tensión tiene la forma particularmente simple:
Las tensiones σ y τ en una dirección general l1, l2, l3 en relación con este
conjunto de ejes de coordenadas están determinados por las ecuaciones:

1.1.6. El estrés de Mohr circula en tres dimensiones


La construcción de Mohr es, naturalmente, más complicada en tres
dimensiones que en dos dimensiones, y no se tratará en detalle aquí. Las
características básicas de la construcción son mostrado en la figura 1.9. Si lx =
0 (dirección en el plano yz), se ubican las tensiones σ y τ

en el círculo pequeño que abarca desde σ3 hasta σ2. Si lz = 0 (dirección en el


plano xy), σ y τ se encuentran en el círculo que abarca desde σ2 a σ1 y,
finalmente, si ly = 0 (dirección en el xz-plane), σ y τ se encuentran en el círculo
grande que abarca desde σ3 hasta σ1. Para todos los demás direcciones, σ y τ
se encuentran dentro de las áreas sombreadas.

1.1.7. Invariantes de estrés


El tensor de estrés es un tensor de segundo orden. Al cambiar a un conjunto
rotatorio de coordenadas ejes, los componentes del tensor de tensión cambian.
Sin embargo, como se discutió en el Apéndice C,
Algunas propiedades del tensor de tensión permanecen sin cambios. El más
simple de estos es la media estrés normal

que equivale a 1/3 de la traza de la matriz (vea la página 447). El estrés normal
medio es así
Una invariante de estrés.
También existen otras combinaciones de tensiones que son independientes de
los ejes de coordenadas.
Por supuesto, cualquier combinación de invariantes de estrés también será
invariante de estrés. Los invariantes de estrés comúnmente utilizados son:

1.1.8. Estrés desviatorio


La tensión normal media σ¯, definida en la ecuación. (1.38), esencialmente
causa una compresión uniforme o extensión. Las distorsiones, por otro lado,
son causadas esencialmente por las llamadas tensiones desviatorias. El estrés
desviador (también llamado desviador de estrés o desviación de estrés) la
terminología no es consistente en la literatura) se obtiene restando el medio
normal estrés de los componentes normales del estrés:

Invariantes de desviación de estrés similares a las invariantes de estrés


definidas en las ecuaciones. (1.39) - (1.41), están dados por:

Los invariantes J1, J2, J3 y sus combinaciones son independientes de la


elección de ejes de coordenadas. Aparecen invariantes de la desviación del
estrés, p. en criterios de falla, ya que estos debe ser independiente de la
elección de ejes de coordenadas (para materiales isotrópicos).
Hay muchas formas diferentes de escribir los invariantes de la desviación del
estrés. Ver página 463 para algunas expresiones útiles
A menudo se encuentran diversas variantes de los invariantes de estrés, en
particular los parámetros q y r, que están relacionados con los invariantes
básicos como

Para un estado de tensión en el que dos de las tensiones principales son


iguales (σ2 = σ3), las expresiones se simplifican a
q = | σ1 - σ3 | (1.48)
y
r = σ1 - σ3 (1.49)
q se utilizará ampliamente en el Capítulo 2.

Interpretación geométrica de los invariantes del estrés


desviatorio.
Los invariantes de tensión desviatoria tienen una interpretación geométrica
directa en el espacio de tensión principal, como se ilustra en la figura 1.10. Eq.
(1.46) es la ecuación de un círculo centrado en σ¯, con la orientación normal a
lo largo del eje hidrostático σ1 = σ2 = σ3. Así la distancia desde un punto (σ1,
σ2, σ3) en el espacio de tensión principal al eje hidrostático es

Se puede demostrar además que el ángulo ϑ, llamado ángulo de Lode,


indicado en la figura 1.10, es dado por los invariantes como

(Tenga en cuenta que dado que arccos es una función de valores múltiples, el
ángulo de Lode se calculó a partir de la ecuación (1.51)
No es único. Si uno elige la rama principal de los arcos, el resultado estará en
el rango 0 ° a 60 ° incluso si el estado de tensión real corresponde a otro valor).

1.1.9. Las tensiones octaédricas


Un plano normal a la dirección (1, 1, 1) en el espacio de tensión principal se
llama octaédrico plano, un plano π o un plano desviador.
El esfuerzo normal y el esfuerzo cortante en este plano a veces se llaman
octaédricos.
Esfuerzo normal y el esfuerzo de corte octaédrico, y están dados por
Tenga en cuenta que la tensión normal en la dirección igualmente inclinada a
los ejes de tensión principales es por lo tanto igual al estrés medio.

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