Está en la página 1de 5

Lecciones de redacción para magistrados y funcionarios judiciales

Lección Nº 48
(Módulo Nº 13: referencias bibliográficas, notas, citas y otros elementos paratextuales)

En esta lección desarrollaremos la cuestión de las citas y el modo de citar.

En su artículo “Cómo citar en los escritos profesionales y académicos”, Fernando


M. Toller y Juan Cianciardo sostienen que el tratamiento correcto de las fuentes (como
libros de doctrina, sentencias publicadas, artículos de diferentes tipos de publicaciones,
etc.) en los trabajos jurídicos tiene una incidencia fundamental en la calidad y
corrección del trabajo que se presenta.
Pero lograr ese tratamiento correcto de las fuentes no es sencillo. Como señalan los
autores mencionados, a veces en el trabajo profesional del juez, del funcionario y del
abogado se privilegia la argumentación en sí y se descuida a la cita. En ocasiones se
parafrasea una opinión ajena de un modo incorrecto o se transcribe textualmente una
afirmación sin aclarar la fuente.
Las consecuencias negativas de citar de manera defectuosa, según Toller y
Cianciardo, son varias. Por un lado, el texto que contenga citas y notas incorrectas
aparecerá deslucido. Además, consideran que:
“En segundo lugar, mientras un trabajo con citas correctas es un servicio al lector,
uno con citas y notas incorrectamente dispuestas dificultará su lectura y comprensión por
parte de quien quiere acceder al conocimiento o información y entorpecerá la distinción
entre la reflexión propia del autor y el aporte de las fuentes que ha utilizado.1”
Por otra parte, un criterio central a la hora de citar, como sostienen los autores
mencionados, es elegir la información que se transmite según el valor de los
argumentos expuestos. En este sentido, no debe seleccionarse la cita por la autoridad de la
persona aludida o el respeto que pueda generar su nombre, sino por la pertinencia de la
intervención en el propio texto, por los conceptos sustanciosos que aportan las ideas de otro
especialista.
Asimismo, es importante señalar que, si bien existen diferentes modos de citar que
son aceptables, una regla básica es conservar el sistema elegido a lo largo del texto. Con
respecto a eso, Toller y Cianciardo afirman: “Una vez que se ha optado por un régimen de
citas, debe respetarse ese régimen en todo el trabajo”2.

1
Cianciardo, Juan y Fernando M. Toller, “Cómo citar en los escritos profesionales y académicos”, La Ley, Nº
237, 2006, p. 1-2.
2
Ibíd., p. 2.
Distintos modos de citar
Podemos analizar distintos modos de citar si tomamos en cuenta las citas que
realizamos en el texto del apartado anterior.
La segunda cita, indicada por la llamada de nota número 2, se hizo del siguiente
modo: “Una vez que se ha optado por un régimen de citas, debe respetarse ese régimen en
todo el trabajo”2. La llamada se colocó después de las comillas y antes del punto.
Otra posibilidad es colocar la llamada después del punto: “Una vez que se ha optado
por un régimen de citas, debe respetarse ese régimen en todo el trabajo”.2

En cuanto a la primera cita, en los casos en que se cita un fragmento de más de tres
líneas, hay varias posibilidades.
a) Una opción, que utilizamos en el apartado anterior, es escribir la cita entre comillas,
en un párrafo aparte, con el mismo tipo de letra que el resto del texto pero utilizando un
interlineado mayor:
“En segundo lugar, mientras un trabajo con citas correctas es un servicio al lector,

uno con citas y notas incorrectamente dispuestas dificultará su lectura y comprensión por

parte de quien quiere acceder al conocimiento o información y entorpecerá la distinción

entre la reflexión propia del autor y el aporte de las fuentes que ha utilizado.1”

Si se transcribe más de un párrafo, cada uno deberá escribirse con sangría y comillas
al inicio, para señalar que la cita continúa.
b) Otro criterio que se puede adoptar es escribir con un tipo de letra más chica en
párrafo aparte (dejando un espacio antes y después de la cita) pero sin comillas, con el
mismo interlineado y los mismos márgenes. Además, es posible colocar la llamada de la
nota después del punto:

En segundo lugar, mientras un trabajo con citas correctas es un servicio al lector, uno con
citas y notas incorrectamente dispuestas dificultará su lectura y comprensión por parte de quien
quiere acceder al conocimiento o información y entorpecerá la distinción entre la reflexión propia
del autor y el aporte de las fuentes que ha utilizado.1

c) Una tercera posibilidad es escribir con un tipo de letra más chica en párrafo aparte
(dejando un espacio antes y después de la cita), sin comillas, con el mismo interlineado
pero con márgenes menores. También la llamada de la nota puede colocarse antes del
punto.
En segundo lugar, mientras un trabajo con citas correctas es un servicio al lector,
uno con citas y notas incorrectamente dispuestas dificultará su lectura y comprensión por
parte de quien quiere acceder al conocimiento o información y entorpecerá la distinción
entre la reflexión propia del autor y el aporte de las fuentes que ha utilizado1.

Reiteramos que resulta fundamental conservar el mismo sistema de citado a lo


largo del trabajo. De este modo, le ofreceremos al lector una organización coherente del
texto y una forma sencilla de acceder a las fuentes consultadas.

Para tener un panorama completo del uso de notas, citas bibliográficas y


bibliografía, ver las lecciones anteriores de este módulo, las lecciones 46 y 47.

Próxima lección:
En el siguiente email continuaremos con el análisis de este tema.

Para tener en cuenta:


(En esta sección planteamos algunos errores o dudas frecuentes en el uso de ciertos
términos)

El perito, ¿resuelve o dictamina? Dictamina


Hacer un dictamen es dar una opinión. Esa es la tarea del perito, que analiza y
brinda una opinión fundamentada. Pero quien resuelve, en el sentido aconsejado por el
experto o en otro, es el juez.

Bibliografía:
AA.VV., Talleres de lectura y escritura. Textos y actividades. (Semiología), Buenos Aires,
Eudeba, 1998.

Alvarado, Maite, Paratexto, Buenos Aires, Oficina de Publicaciones del CBC. Universidad
de Buenos Aires, 1994.
Belluscio, Augusto C., Técnica jurídica para la redacción de escritos y sentencias. Reglas
gramaticales, Buenos Aires, La Ley, 2006.

Cianciardo, Juan y Fernando M. Toller. “Cómo citar en los escritos profesionales y


académicos”, La Ley, Nº 237, 2006, p. 1-2.

García Negroni, María Marta, Laura Pérgola y Mirta Stern, El arte de escribir bien en
español. Manual de corrección de estilo, Buenos Aires, Santiago Arcos, 2004.

Hall, Beatriz, Ricardo Santoni y Mirta Stern, Comunicación verbal y escrita. Introducción
a la expresión oral y escrita. Aspectos gramaticales, textuales y discursivos del discurso
académico, Buenos Aires, LEUKA, 2000.

Labrada, Pelayo Ariel, “III.- Los errores más comunes”, en Terminología Forense [en línea],
http://www.terminologiaforense.com.ar/princip.htm [consulta: 15 de agosto de 2010].

Mizraji, Margarita y otros, Corrección de estilo. Normas básicas, Buenos Aires, Sintagma
Ediciones, 1995.

Real Academia Española, Diccionario Panhispánico de Dudas, Madrid, Espasa-Calpe,


2005.

Real Academia Española, Nueva gramática de la lengua española. Manual, Buenos Aires,
Espasa, 2010.

Consultas:
Si quiere realizar consultas o desea hacer sugerencias, puede enviar un mensaje a la
dirección de correo: sgaldos@csjn.gov.ar.

Recomendación:
Cuando tenga dudas de orden gramatical o necesite información sobre el uso de
alguna palabra o expresión, le recomendamos consultar en Internet el Diccionario
panhispánico de dudas. Se encuentra disponible en la siguiente Página Web:
http://buscon.rae.es/dpdI.

Responsable Lecciones de redacción


Sebastián Galdós (Licenciado en Letras - UBA)
sgaldos@csjn.gov.ar
Centro de Información Judicial
Corte Suprema de Justicia de la Nación
Tel. (54) 11 4370-4600 int. 4576
Talcahuano 550
Ciudad de Buenos Aires
Argentina

También podría gustarte