En la naturaleza existen pocos animales que sean capas de buscar y
elaborar su propio alimento, estas lo realizan pecoreando en un radio no mayor a 1,5 a 2 km de distancia de su colmena, La apicultura como buen se conoce es el arte de la explotación y manejo de las abejas, pues es esta práctica es fundamentar aprender a manejar los ciclos y las necesidades alimentarias de las abejas, ya que en la mayoría de explotaciones apícolas se comercializa en mayor medida los alimentos de las abejas como la miel y la jalea, los cuales son fundamentales en la alimentación de las abejas, de ahí que se debe regular su extracción para no dejar la colmena sin alimento y por ende garantizar la salud y la vida en la colmena. Sumado a esto tenemos otros factores externos como los factores ambientales como lo es el cambio climático el cual está cambiando las reglas del juego. Cada vez son más frecuentes las sequias y las lluvias torrenciales, lo que dificulta a la abeja encontrar una entrada de néctar y de polen para la fabricación de alimento. Por estas razones es preciso estar alerta a las carencias nutricionales de la abeja y el impacto sobre su salud.