Está en la página 1de 36

“AÑO DE LA LUCHA CONTRA LA CORRUPCIÓN E IMPUNIDAD”

FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIA POLÍTICA


ESCUELA PROFESIONAL DE DERECHO

LA ACCIÓN DE REVISIÓN
 ASIGNATURA : DERECHO PROCESAL PENAL II

 DOCENTE : Hermogenes Lima Chayna

 INTEGRANTES : BENITES CARDENAS CARLA

CALDERON PEÑA ANGIE JOYCE

LLAMCCAYA SANCHEZ MARIELA LEONOR

CARDENAS VALERA, ANTHONY JOAO

 CICLO : VII

 TURNO : NOCHE

 FECHA : 05 de noviembre del 2019

PUCALLPA – PERU
Dedicatoria

A Dios todopoderoso por iluminar mi diario caminar la nuestros padre por el Apoyo
constante e incondicional al querer forjarnos un futuro mejor.

Agradecimiento

A la UAP, casa de estudios que nos acoge e imparte conocimientos para poder forjarnos
como futuros profesionales, a los docentes quienes con sus enseñanzas nos forjan un futuro
mejor, a nuestros padres por el pilar que nos sostiene en esta meta.
CAPITULO I
1. Aspectos generales

1.1 Impugnación de la cosa juzgada


El NCPP, siguiendo la línea tradicional del proceso penal nacional, acepto la revisión

de sentencias firmes de condena a favor de un reo (art. 439 NCPP). Como se sabe, la cosa

juzgada prioriza el valor seguridad jurídica –que da pie al principio de verdad formal– al
excluir un ulterior proceso penal cuyo objeto sea idéntico al del proceso en aquella se

produzco. Empero, atendiendo al valor justicia material –que se deriva dela verdad histórica

de los hechos enjuiciados y de la rectitud de su enjuiciamiento [CALDERÓN/CHOCLAN] –

reconoce la posibilidad de impugnar una sentencia firme, de eliminar su eficacia y posibilidad

un nuevo pronunciamiento sobre el mismo objeto procesal, a partir de un entendimiento de su

carácter excepcional y restrictivo.

Resulta realmente singular dar comienzo al estudio de una institución con el debate

sobre sí se debe apoyar su supervivencia o su eliminación no solamente del cuerpo de leyes

particular a que pertenece sino aún como institución jurídica en sí, y este debate es

particularmente encarnizado en cuanto se refiere al recurso de revisión en el procedimiento

penal.

Veremos en primer lugar la tesis que sostiene la incontrovertibilidad del principio de

la cosa juzgada y nos ocuparemos a continuación de la contraria que se apoya en la

consideración de la primacía de los derechos humanos.

1.1.1 La tesis de la incontrovertibilidad de la cosa juzgada.-El equilibrio deseable en

toda sociedad exige que el fallo de las controversias judiciales reúna fundamentalmente dos

características, en primer lugar que sea la fiel expresión de la verdad con lo que se asegura la

justicia y en segundo lugar que tenga la estabilidad definitiva e inconmovible que garantice a

dicha sociedad la no perturbación de un fallo legalmente justo.

Pero como los Jueces son seres humanos y por lo tanto susceptibles de equivocarse

aún en los casos más evidentes, la característica de verdad, en realidad no viene a ser sino una

presunción de verdad, pero no por eso se debe dejar de garantizar su permanencia definitiva

como base en la forma ya expuesta que sostiene el orden adecuado en toda sociedad.
A estos dos efectos se refiere J. Acero cuando afirma que se les debe calificar como

positivo y negativo. Positivo sería en cuanto a que por la presunción de verdad de lo discutido

principian con la sentencia irrevocable las medidas definitivas de ejecución y negativo por

cuanto viendo el segundo efecto de la cosa juzgada “la voluntad de la ley de que así quede”

se impide para lo sucesivo la renovación del juicio. A la cosa juzgada considerada en esta

forma se le ha elevado a una

Categoría extraordinaria. Su inmovilidad debe permanecer a través del tiempo

intocada e intocable. La posibilidad de la existencia de un error queda, para los sostenedores

de esta tesis, aplastada y reducida a polvo por la seguridad que proporciona al mantenimiento

del orden social. ¿Qué puede significar el perjuicio probadamente injusto causado a un

individuo si la sociedad se mantiene, y el orden no se perturba? La verdad en este caso sólo lo

es en cuanto la ampara el principio “res iudicate pro veritate habetur”. La inviolabilidad de la

cosa juzgada debe mantenerse aún cuando no corresponde a la realidad.

Su exposición como presunción de verdad, la afirma Pothier al decir que “la autoridad

de la cosa juzgada hace presumir verdadero y equitativo todo lo que está resuelto en la

sentencia”. Es pues una presunción juris et de jure. Un ordenamiento y explicación de las

razones para mantener la inmutabilidad de la cosa juzgada nos ayudará a clarificar la

exposición de esta doctrina.

En primer lugar se afirma que el remedio para evitar el mal causado por una decisión

equivocada se encuentra en el establecimiento de los grados de jurisdicción que sirven de

prevención y cuya constitución más complicada a medida que se avanza en los grados

garantiza la exactitud del fallo final y por ende su justicia.

Pero conviene tener presente que “la reiteración del debate como único remedio

procesal sólo está garantizada en determinadas condiciones de calma y discusión” (J. Acero).
Y es natural que así sea, la calma es el elemento necesario, ·el catalizador preciso que facilita

el mejor estudio de los asuntos a decidir y la discusión es el aporte múltiple de ideas

expuestas desde los puntos de vista más opuestos y que contribuyen con indudable eficacia al

mayor acierto en la solución dada. Es harto conocido el principio que dice “resultará mejor

ordinariamente lo. Meditado y decidido por dos o más veces que lo expresado a primera

impresión”, se sopesan mejor los argumentos, se entienden mejor las razones, se sale más

fácilmente del error, se encuentran mejores soluciones y se llega a más seguros acuerdos.

En segundo lugar se afirma que es preciso evitar el daño que causaría la perpetuación

de los litigios. Esta afirmación sólo es cierta en cuanto se aprecie que la perpetuación de los

litigios causa efectivo daño. Pero, ¿podría alguien afirmar que la reapertura de un juicio

terminado con sentencia pasada en autoridad de cosa juzgada, debido al hallazgo de pruebas

fehacientes que evidencien indiscutiblemente la inocencia de un condenado causa un daño

inevitable?, un daño irreparable? Y por último enuncian su más formidable argumento

condensado en esta frase, "la inmutabilidad de la cosa juzgada es necesaria a fin de dar

certidumbre y estabilidad a los derechos".

Efectivamente, se debe partir de una base lo suficientemente sólida como para que

asegure a perpetuidad los derechos adquiridos por declaración del Juez. La irrevocabilidad de

las sentencias es garantía del honor personal, de la seguridad del patrimonio y más aún de la

libre libertad si cabe la expresión. Todo medio tendente a lograr este fin será bien acogido y

debe procurarse su inclusión y amparo en la maquinaria destinada a proteger la armónica

convivencia humana.

La dificultad aparece en el límite marcado por la lucha entre ese derecho común que

tiene la sociedad como tal y los derechos individuales que tiene cada miembro de la

colectividad como persona y los que se les quiere hacer aparecer como en una oposición
irreductible, en una especie de antagonismo infranqueable, siendo así que la misma esencia

de su naturaleza les hace no sólo perfectamente coherentes sino que como veremos después

no cabe colisión entre ellos si se les analiza a la luz de su real sustancia y de sus elevados

fines. Para terminar la parte referente a la sustentación de esta posición doctrinaria daremos

una rápida visión a la cosa juzgada y sus fundamentos en general.

Dice Alcalá Zamora que el objeto del proceso es la obtención de una sentencia con

autoridad de cosa juzgada, y que la cosa juzgada debe entenderse en dos sentidos. Uno,

formal, que garantiza su inimpugnabilidad y otro, material, que asegura su indiscutibilidad.

La impugnación debe tener pues una razón de orden formal, respecto de la sentencia materia

de ella y la nueva discusión debe versar sobre la materia de ella, sobre su fondo. Tenemos

pues que la imposibilidad de impugnar y de volver a debatir sobre una sentencia le da la

autoridad de cosa juzgada. Conviene aquí señalar la diferencia entre sentencia que es

ejecutoria y cosa juzgada, pues suelen ser confundidas. La diferencia estriba en que ciertas

decisiones que no han quedado firmes pueden ejecutarse, como por ejemplo sucedería con la

libertad provisional, pedida a pesar de la apelación pendiente. En cuanto a lo que se debe

entender por la autoridad de la cosa juzgada, ella consiste en hacer presumir verdadero y

equitativo todo lo que está resuelto en la sentencia; se trata pues de una presunción juris et de

jure (Pothier).

Recordando lo que hemos expuesto anteriormente sobre los efectos de la cosa

juzgada que son el positivo, presunción de verdad de lo discutido y el negativo, impedimento

para la renovación del juicio, debemos anotar una observación al respecto que servirá de

referencia para la sustentación de la tesis contraria, y es que lo que concluye con la cosa

juzgada es toda discusión o contradicción en el mismo proceso. Además, analizando los

requisitos de la cosa juzgada recordemos también que la identidad de causa reclamada se

refiere al hecho jurídico (o jurigeno según otros), fundamento del derecho ejercitado y en lo
penal debe entenderse como identidad del hecho delictuoso y no simplemente de su

denominación legal.

Naturalmente los partidarios de esta doctrina son los antiguos maestros seguidores de

un sistema legalista frío e imperturbable, cultivadores de una sumisión irrestricta a lo

decidido por la cosa juzgada. Pothier en realidad va muy lejos al decir que "una sentencia

pronunciada en última instancia y en juicio contradictorio, tiene una autoridad de cosa

juzgada estable y perpetua". Es hora que pasemos a la posición opuesta que hemos dicho

conocemos con el nombre de la tesis de "la primacía de los derechos humanos".

1.1.2 La tesis de la primacía de los derechos humanos.- Partiendo del momento del

conflicto aparente entre los derechos de la colectividad y los derechos de los miembros que la

integran, podemos definir esta tesis como la que afirma que no existe dicho conflicto entre

ambos derechos por cuanto un estudio de sus naturalezas nos lleva a afirmar el

escalonamiento o jerarquía que existe entre ellos y en el cual el valor más alto lo representan

los derechos inmanentes de la persona: honor, libertad, vida. El "animal social" que afirmaba

Aristóteles no lleva en sí un reconocimiento de supremacía de la forma de vida que es la

sociedad sobre las personas que la integran, sino todo lo contrario, expresa la aceptación de la

vida en sociedad como el mejor medio del perfeccionamiento de sus componentes y como

medio que es, está jerárquicamente en un grado inferior en lo que respecta a los derechos que

ambos puedan tener. Luego si el interés de la sociedad se quiere hacer aparecer que está en

mantener la perpetuidad e inviolabilidad de la cosa juzgada, debe estar subordinado al interés

del individuo que la forma y que no reclama sino el respeto y la garantía de sus derechos,

imprescindibles, al honor, a la libertad y a la vida, para lo cual la institución de la revisión

llena los requisitos estrictamente necesarios.


El equilibrio pedido por Ferri entre los derechos individuales y sociales es falso y no

resuelve el problema, la jerarquización de ellos en la forma expuesta y con la limitación de

una estricta justicia es más real y menos dificultosa. Mayores ventajas por ser más cierto

ofrece el orden jerárquico que el equilibrio cuya ruptura, fácil por las fuerzas que operan en

este caso, traería el caos insalvable.

Pero hemos hablado de un conflicto aparente y esto se debe a que en realidad no

existe tal conflicto por cuanto ambos derechos para ser tales no pueden estar en oposición y

ello es verdad si razonamos sobre la jerarquía de derechos de que hablamos de la cual

sacamos la conclusión que el justo interés del individuo no puede redundar sino en un

beneficio para la colectividad. Además, jurídicamente no existe la oposición insalvable entre

la cosa juzgada y el recurso de revisión.

El tratadista Laurent cuyos estudios sobre la autoridad de la cosa Juzgada son

ampliamente reconocidos afirma sin vacilaciones que “el recurso extraordinario no es

obstáculo a la cosa juzgada”. “La ley dice J. Acero, al hablar de la irrevocabilidad de la cosa

juzgada sólo puede referirse a una inatacabilidad relativa dentro de la jurisdicción local, por

agotamiento de recursos “ordinarios y comunes, pero no de los extraordinarios ni de distinto

fuero”.

Y añade Chiovenda: “La posibilidad de recursos como el de revisión que son mera

posibilidad a plazo incierto y resultado remoto no tiene fuerza para poder aplazar la eficacia

de lo ya decidido” y de ello desprendemos la falta absoluta de antagonismo entre el recurso

de revisión y la veneración de la cosa juzgada. Es una posibilidad hipotética, tanto como lo es

la posibilidad del error judicial que le dá origen. El error es patrimonio humano y la

infalibilidad es patrimonio divino. “El objeto de la sentencia que está sujeta sólo a tales

eventos, como el de la revisión, añade Acero, está normalmente destinada a servir de un


modo definitivo como afirmación de la voluntad de la ley”. Ahora bien, ¿toda la sentencia

tiene autoridad de cosa juzgada? Sólo la parte dispositiva de ella tiene tal categoría, y prueba

de esto, siguiendo a Acero, está en que el “Juez cuando razona no representa al Estado, lo

representa en cuanto afirma su voluntad”. No es posible pues justificar la aplicación a

“outrance” de la cosa Juzgada, los requisitos para su revisión comprueban esto y son: la

fundamentación en hechos y la salvaguarda de los derechos individuales y sociales.

Profundizando un poco en los medios de impugnación aparecen sólidas y claras

razones en favor de la tesis que sostenemos. La escuela italiana por boca de Florián define

como medio de impugnación: “el acto del sujeto procesal orientado a anular o a reformar

jurisdiccionalmente una resolución anterior mediante un nuevo examen, total o parcial de la

causa por el mismo Juez u otro diferente o un juez superior”. No dá esta definición el motivo

por el cual el sujeto procesal se decide a pedir la anulación o reforma de la resolución.

Alcalá Zamora la define como “actos procesales de las partes dirigidos a obtener un

nuevo examen total o limitado a determinados extremos, y un nuevo proveimiento acerca de

una resolución judicial que el impugnador no estima ajustada a Derecho, en el fondo o en la

forma, o que reputa errónea en cuanto a la fijación de los hechos”.

El desarrollo de esta definición agota las posibilidades de los medios de impugnación

y casi escapa por su extensión y detalle a las características de una definición, pero es

completa si no breve. Observamos que el presupuesto general es un perjuicio, un daño

causado a las partes v que según el mismo Alcalá Zamora para la escuela italiana se trata de

un gravamen.

La definición dada por los alemanes es más simple en su expresión dá la idea de la

institución en su esencia y no con el desmenuzamiento del profesor español. Para ellos “es un
medio jurídico (Rechtsmittel) de que disponen las partes para que el posible error o injusticia

cometido por el juzgador sea subsanado.

Dos ejemplos más nos harán ver que si las palabras son distintas, la idea es casi única

a través de las diversas definiciones. Wetzell sostiene que recurso "es la pretensión de una

parte para que se modifique una resolución judicial que dada su posición respecto de la parte

contraria le resulta desfavorable".' Y por último otros, usando la terminología española

(citados por Alcalá Zamora) opinan por definirlos corno "remedios legales mediante los

cuales la persona afectada por una decisión judicial puede impugnarla corno equivocada", la

expresión "remedios legales" caracteriza al lenguaje jurídico español y tipifica esta

definición.

El "error", la "injusticia", "la disposición desfavorable", y la "equivocación" que son

la base de estas definiciones tienen su fundamento en la falibilidad humana y esa es la razón

de ser de los medios impugnativos, falibilidad que la aumenta o en todo caso la engendra, la

ignorancia, el error, la violencia, la ofuscación, etc., y por lo tanto clama por todo un sistema

que asegure o cuando menos regule la normal evacuación de decisiones justas en lo posible.

Tienden pues a obtener esta seguridad y el clima de "calma y discusión" que la favorece, los

diversos medios imaginados en la evolución jurídica procesal del mundo entero. Y así,

someramente, vernos que se preocupan los pueblos por una buena elección de jueces, con

características morales intachables, que se origina la recusación que ampara contra los jueces

sospechosos de parcialidad, que se crean los tribunales colegiados para la primera instancia

los que aportan la garantía de un opinión basada en la suma de pareceres fundados, y por

último el sistema impugnativo en general que hemos analizado rápidamente.


Corno el recurso de revisión está dentro del sistema impugnativo en general

revisaremos rápidamente los alcances de éste y el problema de su extensión que es vital para

el estudio a fondo de la revisión.

El objeto o finalidad del proceso no es perpetuar estados de incertidumbre jurídica

sino por lo contrario, poner fin a ellos, luego la via impugnativa no puede durar

indefinidamente. El problema surge en la fijación del límite.

El gran tratadista Carnelutti lo enfoca certeramente al preguntar "entre la necesidad de

certeza por un lado y la de justicia por el otro, ¿cuál es el límite?"

Históricamente han habido dos criterios: "el de la doble conforme y aún de la triple

conforme que fue reemplazado y eliminado por el segundo o sea el de la "superior

prevaleciente" que tiene corno punto de partida la irreforrnabilidad de la resolución por parte

del juzgador que la dictó. Pero la trasmisión del juicio del inferior al superior se hace

mediante un medio de impugnación que hace reaparecer el problema al preocuparnos con la

extensión ilimitada de recursos. La certeza absoluta reclamada por Voltaire se hace imposible

ante

las consideraciones de la falibilidad humana; a mi parecer, la admisión ilimitada de

recursos se encuentra restringida únicamente por la paralela cantidad de requisitos y

condiciones para plantearlos y que culminan con la revisión. Generalmente corno condiciones

para el otorgamiento de recursos se establece que sólo se pueden utilizar en el número

establecido en la

1.2 fundamento, definición, naturaleza jurídica, notas esenciales y principios.

1.2.1. Fundamento

La revisión –en tanto medio de rescisión de sentencias firmes– no se sustenta

en la existencia de nulidades procesales en la sentencia o en el procedimiento que la


presidió. Tampoco se basa en errores en el acto del juzgar, en el fallo, a partir de los

materiales probatorios aportados al proceso; no entra discutir si la sentencia fue

correcta o incorrecta.

Su fundamento radica en la necesidad de reforzar la consolidación y preservación de

derechos y principios tales como la defensa, presunción de inocencia y tutela judicial

efectiva [DÍAZ] . A partir de allí, mediante la revisión, se procura, a la vista

fundamentalmente de circunstancias que no han sido tenidas en cuenta por el

juzgador, que la sentencia puede rescindirse por ser esencialmente injusta

[CORTÉS] , pero ha de basarse en otros hechos, actos o elementos de prueba –

distintos del material de conocimiento apreciado por tribunal–, de tal entidad que, de

haber constado en la causa, el resultado habría sido distinto [GÓMEZ ORBANEJA].

1.2.2. Definición

Es una acción de impugnación autónoma, que se puede interponer sin

limitación de plazo y da lugar a un proceso especial, de naturaleza excepcional y

restrictiva, sustenta exclusivamente motivos especialmente tasados por la ley que

evidencien la injusticia de una sentencia firme de condena y tiende, por ello, a que

prevalezca sobre ella la verdad material –formal y materialmente válidas–, ver

injustas.

El artículo 44.1 NCPP, correctamente, dispone que de estimarse la demanda de

revisión se declarará sin valor la sentencia motivo de la impugnación. No es que la

sentencia se anule dado que está no sólo es firme –lo que implica imposibilidad

jurídica de pedir y obtener anulación, al haber parecido la posibilidad de hacerlo–,

sino también es una sentencia perfectamente válida y eficaz. Se trata, entonces, de una

sentencia injusta, en atención a causas sobrevinientes al fallo como consecuencia de


nuevos datos aportados en el proceso revisión, por lo que técnicamente lo que se

produce es una rescisión de; carece de valor porque se rescinde.

1.2.3. Naturaleza jurídica de la revisión de la Sentencia penal.

la doctrina científica establecido qué recurso extraordinario de revisión de

Sentencia no es un recurso, pero al mismo tiempo no establece con claridad cuál es la

naturaleza procesal que tiene este recurso. Algunos procesalistas le asigna la revisión

penal la calidad de remedio excepcional contra una sentencia firme en autoridad de

cosa juzgada e injustamente dictada. otros asigna una naturaleza indefinida de

“acción independientemente que da lugar a un proceso cuya finalidad es reincidir

sentencias condenatorias firmes e injustas” para determinar en nuestra sistemática

jurídica nacional la naturaleza y alcance de la revisión penal, es necesario

previamente analizar desde los conceptos vertidos por otros procesalistas sobre el

término “proceso recurso extraordinario y revisión”. Del análisis de estos conceptos

nos permitirá arribar a una solución de la problemática planteada.

1.2.4. Notas esenciales

Son cuatro.

A. En una acción de impugnación autónoma que da lugar a un proceso distinto.

El accionante plantea una pretensión diferente –puesto que los que solicita es

la revisión del proceso en virtud de hechos nuevos–, por lo que se está ante un

proceso con un objeto diferente, un novum [VESCOVI]. Es, en todo caso, un

proceso, al menos en sentido formal, pues no es un verdadero proceso de

parte [GÓMEZ COLOMER]. Así lo ha reconocido el NCPP al denominarla

“Acción de revisión”

B. Tiene un marcado carácter excepcional y restrictivo, al suponer un quebranto

de la cosa juzgada material. En tal virtud,sólo puede afirmarse la injusticia de


la sentencia impugnada por encima del valor seguridad jurídica pero sobre la

base de determinados motivos, legal y tácitamente previstos –constituye un

verdadero numerus clusus–, en particular por causa de hechos falsos o hechos

nuevos, novedosos y siempre de carácter decisivo, con exclusión de todo

posible vicio in iudicando de iure (así, por ejemplo, casación Argentina,

SalaII, n.°317, sentencia de 01-02-95), lo que limita el poder de revisión del

supremo tribunal.

La corte suprema, aceptan esta característica básica de la revisión, ha

declarado, “la acción de revisión, por su propia naturaleza excepcional

destinada a hacer primar el valor justicia sobre la seguridad jurídica, sólo

destinada a hacer firmar el valor de justicia sobre la seguridad jurídica, sólo

procede cuando se acredite la comisión de conductas antijurídicas que hayan

podido influir causalmente, solo procede cuando se acredite la comisión de

conductas antijurídicas que hayan podido influir casualmente, directa o

indirectamente, en la sentencia, paseando su premisa de hecho, o cuando se

prueba la existencia de hechos nuevos –por cualquier medio de prueba– que

venga con posterioridad a evidenciar la equivocación del fallo […]” (ejecutoria

suprema n.° 50-2004/ Lima, de 27-05-05)

C. Su objeto de esta circunscripto a sentencias firmes de contenido condenatorio

pasar a autoridad de cosa juzgada –decisiones sobre el fondo con carácter

definitivo– (Art.439, § I, NCPP). sólo interesa que se trate una sentencia

condenatoria: esta puede imponer una pena, una medida de seguridad o,

incluso, disponer la dispensa de pena o reserva del fallo (art. 62 CP); no es

relevante que la pena haya sido cumplida o extinguida.


No está permitida la revisión de sentencias absolutorias, en cuyo caso se opta

por la primacía del valor seguridad jurídica –no hay, sí afirma, equivalencia

entre condenar a un inocente y absolver a un culpable–; además, protegería al

imputado y absuelto el principio de interdicción de la reforma peyorativa

[CLARIÁ] o, con más fuerza, la interdicción de la persecución penal múltiple

[SUAY]; prima siempre el favor defionasis o el favor libertatis visto tanto

como principio general inspirador del proceso cuánto como criterio normativo

de aplicación directa aplicable en el ámbito de la libertad individual

[VÁZQUEZ SOTELO]. Está al margen de la revisión penal la cuestión civil,

sin perjuicio de que el éxito de la cuestión penal comprenda aquella

[MManzini

D. Apunta a la primacía del valor justicia material. 1. No está sometida a un

régimen de caducidad. 2. Admite proceso de rehabilitación en caso fallecido

los condenados. 3. Puede intentar se (i) no sólo para afirmar la inocencia

–“revisión total”–, tanto en sentido propio:ajenidad o no relevancia punible de

su intervención (inexistencia del hecho o que el condenado no lo cometió, o

que falta totalmente la prueba en qué se basó la condena [LEVENE]), como

para acreditar la presencia de una causa de extinción de responsabilidad penal

–el término “inocencia” ha de entenderse no sólo como no quería o no

participación en el hecho delictivo sino que se extiende a todos los puestos en

los que el condenado que no fuese realmente responsable [CONDE

PUMPIDO, y, por ejemplo, STS de 20-02-03]; sino también (ii) para variar el

título de colmena y con la sanción impuesta –te entienden el sentido favorable

al condenado, qué es lo que se denomina “revisión parcial”– . No cabe, por

consiguiente, para aminorar la pena basa en el mismo título condenatorio en


función a la existencia de una actuación genérica y específica sin relevancia

típica o a un supuesto exención incompleta, cómo sería la disminución de la

capacidad de culpabilidad [ROXIN]. En el caso de fallecido no cabe revisión

total.

1.2.5. Principios que rigen la acción

Son cinco

A. Principio de verdad y justicia: La decisión materia de revisión se presume

cierta y legal, además justa y verás por encontrarse con sentido y con calidad

de cosa juzgada, por lo que se encuentra protegida por el principio de

seguridad jurídica, de tal manera que juicio crítico debe ser exigente para

declarar que el sentenciado no es compatible o no corresponde a la verdad

material lo real.

B. Principio de taxatividad: Sólo procede por las causales expresamente previstas

en la ley, sin que sea posible que no se encuentre contemplas analógicamente.

En síntesis, no es factible aludir a cuestiones diversas a las señaladas en la ley

para obtener la revisión de la sentencia. Los supuestos de revisión son

numerus clausus, aunque la jurisprudencia ha venido flexibilizando su

interpretación para dar solución sentencias notoriamente injustas (STSE,de 13-

03-99)

C. Principio de la limitación: Comprende una doble proyección: (i)limitada por

las causales expresamente previstos en la ley, por tanto el juez no podrá salirse

de este marco y, (ii) limitar contenido de la demanda de revisión, por lo que

quieren absolver a la acción de revisión podrá pronunciarse por causales

invocadas o desarrolladas en la demanda.


D. Principio de autonomía: El demandante deberá proponer los fundamentos a

cada causal en forma y separada, con la finalidad de comprender la pretensión

del demandante y así evitar la confusión en el juez de la causa.

E. Principio de trascendencia: los fundamentos de la demanda tienen que

encaminarse a quebrantar el fallo condenatorio en los términos y causales

establecidas en la ley. Además es necesario que la prueba aportada, tenga

incidencia para hacer valor la causal que invoca [PAVÓN].

CAPITULO II

2. Sujetos y órgano judicial de la revisión

2.1. sujetos de la promoción de la revisión

El artículo 440 NCPP reconoce a los que están legitimados para instar al órgano

jurisdiccional la demanda de revisión –promoción es equivalente a la interposición–. El

NCPP no condiciona la petición de revisión a una autorización previa.

El primer término está el fiscal supremo en lo penal y el condenado. En segundo

lugar, se reconocen dos supuestos: 1. Si el condenado fuera incapaz, el legitimado para

hacerlo sería un su representante legal. 2. Si el condenado hubiera fallecido o si estuviera

imposibilitado para hacerlo, por su cónyuge, sus ascendientes, descendientes o hermanos, en

ese orden –no como, sino iure propio–; está excluido el tercero civil.

La representación del condenado es precisa: el recurrente deberá demostrar que es el

único autorizado por la ley para demandar el revisión. La ley define un orden de prelación y,

por tanto, es ese orden que debe respetarse. En caso de conflicto, sin duda desde la

perspectiva del derecho a la tutela jurisdiccional debe primar, en principio, el interés de quién

quiere iniciar la demanda. la imposibilidad del condenado está referido tanto a razones de

salud –enfermedad o discapacidad– cuánto meramente situacionales: lejanías, problemas de


comunicaciones, ausencia con presunción de fallecimiento, etcétera; en este caso, sus

parientes interviene en calidad de sustitutos procesales.

En efecto, el art. 440 NCPP hace referencia a la legitimidad en la causa,en cuya virtud

el proceso debe llevarse a cabo por los sujetos expresamente señalados o autorizados en la ley

para el ejercicio de la acción: los que integran la relación jurídica material: el fiscal y

condenado –de ser el caso, también el actor civil–. en el caso de no presentar la demanda de

uno de los dos últimos, quién lo hace por el condenado debe encontrarse en los supuestos del

apartado 2 del artículo 440 del aludido código: condenado incapaz, condenado fallecido o

condenado imposibilitado, en cuya virtud para el primer caso debe promover la demanda su

representante legal, y en otros dos supuestos, su cónyuge, sus ascendientes, descendientes o

hermanos, en ese orden [REV. SENT.(NCPP) N°150-2004/Ancash].

2.2. Órgano judicial

El sujeto de la decisión varía según se trate del juicio rescíndete o del juicio rescisorio.

En el primer caso, en la sala penal de la corte suprema ( ar.441.1 NCPP). En estos casos el

NCPP –siguiendo la tradición nacional –insiste en la competencia originaria de la corte

suprema, que en todo caso reflejaría un patrón de concentración de causas en alto tribunal que

pone en peligro su eficacia como cortés reguladoras de jurisprudencia. Más allá qué tal

misión muy bien podría encargarse a las cortes superiores, tal vez se explicaría la decisión

legislativa el denominado “mito del fallo” –de la cosa juzgada– penal, en virtud del cual

parece que la renovación del proceso constituye un acontecimiento de excepción, qué sacude

uno de los fundamentos del proceso, de manera que su posibilidad debe ser vigilada por el

supremo órgano jurisdiccional [CARNELUTTI].

En el segundo caso –juicio rescisorio– variará, pues es posible que esté lo realice la

misma sala penal de la corte suprema, siempre que no se requiera una audiencia o juicio para
la actividad probatoria, o el juzgado penal competente –unipersonal o colegiado– si es que se

necesite la realización de un juicio oral.

CAPITULO III

3. Motivos de revisión

3.1. Alcances

En el artículo 439 NCPP reconoce 6 motivos expresos y específicos y de procedencia

de la revisión; se trata de un numerus clausus. No cabe extenderlos por vía interpretativa o

analogía, aunque es posible ensanchar o flexibilizar los supuestos legalmente previstos para

dar cobertura a aquellos casos en que la sentencia dictada es notoriamente injusta, por

haberse acreditado la inexistencia de responsabilidad penal de quien la misma aparece

condenado [DÍAZ].

La revisión sirve, por regla, sólo al examen de los fundamentos fácticos de la

sentencia, aunque él NCPP reconoce un supuesto de error jurídico, cuando la ley penal fue

declarada inconstitucional o se inaplicó –se discute los supuestos en que se declaró

inconstitucional una determinada interpretación de la ley– (art.439.1,2 y 4 NCPP); y (ii) que

la novedad del elemento de la prueba se debe referirse no al momento de la posibilidad de

adquirirlo, si no hay de la efectiva decisión de él, por otro lado, un sector de la doctrina

considera que los elementos de prueba propuestos deben considerarse nuevos, aunque

hubiesen ofrecidos por la defensa en el debate, pero no hubieran sido considerados por el juez

me fueron valorados en la decisión cuya revisión se pide;la novedad no desaparece por el

hecho de que los elementos y existieron durante el procedimiento y fuera posible producir los

en aquel procedimiento (así, por ejemplo, casación Argentina, sala IV , sentencia n.°2400, de

20-06-01)
Los motivos de revisión son:

 Inconciliabilidad de sentencias.

 Duplicación de sentencias.

 Hechos o medios de pruebas falsos o fraudulentas

 Nuevos hechos o pruebas.

 Condena por delito contra por el juez –delitos judiciales–.

 Inconstitucionalidad de la ley penal

3.2. Motivos específicos

3.2.1. Inconciliabilidad de sentencias

Son tres los requisitos exigibles:

1) Que se haya dictado dos o más sentencias, distintas entre sí, enjuiciado

en un mismo hecho.

2) Que dichas sentencias sean firmes y contradictorias –contraste

evidente, absoluta imposibilidad de que coexistan ambas conclusiones

fácticas con evidente lesión al principio lógico de no contradicción–

3) que hayan resultados condenadas dos o más personas por un delito que

no haya podido ser cometido más que por una sola. Así por ejemplo se

condena a una persona por qué se cometió el delito en lugar de tener un

lugar determinado mientras que otra sentencia llega a la conclusión de

que en el mismo tiempo el condenado se encontraba en otro lugar; o,

cuando una de las sentencias establece que el hecho punible sólo pudo

cometerse por una sola persona y la otra condena a varios [PALACIO].

Pese a la dicción de la norma es posible que una de las sentencias sí

absolutoria, pues lo esencial es la inconciliabilidad de fallos penales.


La prueba que permite el contraste es otra sentencia penal firme, condenatoria o

absolutoria, por el mismo delito –o, mejor dicho, hecho procesal o sucesos históricos objeto

de imputación y condena o absolución– dictada con posterioridad. el contraste entre ambas

decisiones importa la imposibilidad de hacer que coexisten dos sentencias penales que tiene

por fundamento esencial de la declaración de culpabilidad la determinación de hechos

inconciables entre sí; lo que se afecta son las reconstrucciones de hechos, mi suerte que uno

no puede estar en presencia de la otra –este último deriva de principio de trascendencia–

[CASO ANTAURO HUMALA: REV. SENT. N.° 4-2014, de 18-03-15]

Se trata pues el juicio histórico de las sentencias en pugna, no del juicio jurídico. Por

ello lo demás, en los casos de pluralidad de personas en el mismo suceso histórico es posible,

según su nivel de intervención y del diferencial análisis de la imputación objetiva y subjetiva

atinente a cada uno de ellos, es posible niveles distintos de subsunción típica. Lo que importa

es comparar la reconstrucción de los hechos en ambas sentencias y de su contraste fluya que

son contradictorias mutuamente y que no es viable armonizarlas. no es posible la revisión

cuando la contradicción sólo está en la diversa interpretación de la ley, ya que no se admite

revisión por motivos de derecho [MANZINI].

El motivo de la inconciliabilidad de sentencias firmes cuando procesalmente se

menciona el vocablo “delito”, se refiere a un hecho procesal o suceso histórico subsumible en

uno o varios tipos legales –no hay un delito de concreto o tipo legal, desde las perspectiva

material– [CASO ANTAURO HUMALA: REV. SENT. N.° 4-2014, de 18-03-15]

3.2.2. Duplicación de Sentencia

Se justifica en la superación de la vulneración de la garantía constitucional ne

bis un idem. A diferencia de motivo anterior, no se requiere de sentencias qué se


refieren a distintas personas por el mismo hecho. comprende al mismo individuo que

es condenado en dos sedes jurisdiccionales por el mismo hecho punible.

3.2.3. Hechos o medios de pruebas falsos

En este motivo exige que un elemento de prueba –se trata de un hecho objetivo

aportado por un medio de prueba concreto– carece de valor probatorio por cuatro

razones: falsedad, invalidez, adulteración o falsificación (testigo perjuro, documento

falso o adulterado, actualidad que contiene datos inexistentes, etcétera). Ahora bien,

los centrales que se trata de un elemento de prueba que fue decisivo para la condena,

esto es, comprende todos los casos en que, mediante un juicio razonable de

posibilidad, puede afirmarse que, de no haberse producido tales situaciones –falsedad,

falsificación, invalidez o adulteración– la condena anterior no habría tenido lugar [j].

No hace falta, como en otros códigos, b que esta situación haya merecido una condena

firme; la falsedad, adulteración, etcétera, determinante del fallo condenatorio, puede y

debe demostrarse en el procedimiento de revisión.

El artículo 439 n.°3 de nuevo código procesal penal exige medios de prueba

falsos, inválidos, adulterados o falsificados. Este motivo, empero, no se refiere a un

cuestionamiento de la propia prueba que obra en el expediente, a partir de un análisis

distinto al efectuado por el órgano jurisdiccional en sede declarativa y de condena,

para restarle valor jurídico procesal. Este motivo se refiere a la exigencia de que este

documento o acta sea falso o carezca de un requisito esencial para su validez desde

una perspectiva formal, lo cual requiere un aporte probatorio específico, no un

razonamiento alternativo acerca de su valorabilidad. este último juicio es propio del

juez del proceso declaratorio de condena no de revisión. La falsedad, invalidez,

adulteración o falsificación requiere de un fallo judicial o de una prueba autónoma a

la actuación o documento cuestionado de que revele ese defecto formal que le reste
valor jurídico y haga ilícita su incorporación en el acervo probatorio [REV.SENT.

NCPP (calificación) n.° 277-2014, de 20-03-15]. La alegación de la insuficiencia de

pruebas, de un error de juicio del tribunal de mérito, no importa un motivo de

revisión, en este motivo ayude a acompañar pruebas u ofrecer con principios de

sustento positivo que acrediten, a partir de ellas, la falsedad o invalidez de una prueba

de cargo. La falsedad o invalidez de un testimonio no se acredita por el hecho de que

falten elementos de colaboración, sino porque positivamente se demuestre que se trata

de un medio de prueba viciado por falsedad –fluye un dato que no es compatible con

la realidad de lo acontecido– o nulidad –el acto jurídico– procesal que lo contiene

tiene un vicio interno que revela su ineficiencia jurídica– (REV. SENT .

(CALIFICACIÓN) n.° 172-2015/Arequipa, de 28-08-15]

3.2.4. Nuevos hechos o medios de prueba

Ese motivo que, por su amplitud, es el más significativo y alegado. Tiene el

carácter de una cláusula abierta, que incluso puede comprender a los demás motivos

[MORENO CANTINA]. Significa que los hechos –en tanto elementos de prueba– o

los medios de prueba –o, mejor dicho, medios de valoración [LEONE] –que fundan la

revisión, anulen o eliminen el efecto incriminador de los que corren en la causa

originaria, poniendo de relieve un error claro y manifiesto ocasionado por el

desconocimiento de estos nuevos datos, cuya presencia hubiera cambiado el signo de

las valoraciones y conclusiones judiciales. No es preciso que los hechos se produzcan

con posterioridad a la condena, puede ser anteriores o coetáneos;lo relevante es que

no han de haber sido de conocimiento al tiempo de dictarse la sentencia y no pudieron

ser tenidos en cuenta por el tribunal [CALDERÓN/CHOCLÁN]. Es evidente,

asimismo, qué se requiere que la demanda se sustente en hechos nuevos, no es una

interpretación errónea de las pruebas practicadas en el proceso originario. El juicio de


relevancia se formulan o sólo con el mérito exclusivo de la prueba sino también de su

integración o correlación con los demás recaudos probatorios existentes ya en la

causa, a partir de los cuales pueden concluirse que tienen fuerza suficiente para anular

las incriminaciones que fundaron la sentencia objeto de imputación [IRAGORRI].

No es un hecho nuevo el cambio jurisprudencial, aunque la jurisprudencia

constitucional y ordinaria española, en algún caso, opinó lo contrario y se mostró

favorable a utilizar este motivo para favorecer al reo (STC n.° 111/1993, y SSTS

623/1998 y 176/1999), pese a que posteriormente el fallo plenario 24-06-99 negó esa

posibilidad. Tal supuesto, sin embargo, constituye en su caso tema para un incidente

de ejecución. es de precisar que la declaración notarial de la agraviada quien ha

declarado en el proceso no sería una prueba nueva. En este caso, no existe, pues, nada

nuevo que merece continuar con el trámite del proceso de revisión penal (REV.

SENT . (CALIFICACIÓN) n.° 172-2015/Arequipa, de 28-08-15]

3.2.5. Condena por delito o por contra el juez

En otro supuesto propter falsa. Son delitos judiciales que ha merecido una

condena firme. Esos delitos eran aquellos cometidos por el juez (prevaricato, cohecho,

abuso de autoridad) o contra el juez (secuestro, amenazas, coacciones ). O sus

familiares, el requisito, por lo demás exigible en todos los motivos de revisión, es el

carácter decisivo del mismo. En el presente caso se requiere que el delito en cuestión

determinó la condena.

3.2.6. Inconstitucionalidad de la ley penal

Este motivo es una excepción a la regla de la revisión, circunscripta al examen

de los fundamentos fácticos, pues se concentra en los denominados “errores jurídicos”

derivados de la aplicación de una ley inconstitucional. Una vez que el tribunal

constitucional las declara inconstitucionales o la corte suprema la sin aplique por ese
mismo vicio de origen, Los afectados con su aplicación tiene expedida la vía de la

acción de revisión. La ley cuestionada ha de ser el sustento del fallo condenatorio –no

necesariamente debe tratarse de una ley penal, aunque es imprescindible que se

integré de modo necesario el injusto o algún extremo que justifique el juicio de

culpabilidad, cómo configuración fáctica o jurídica–.

CAPITULO IV

4. Procedimiento

4.1. Acto de interposición

La demanda de revisión, tal como la califica el NCPP, debe cumplir –en tanto aporte

técnico presentado con la intervención de un abogado– un conjunto de requisitos legales, que

han sido establecidos en el artículo 441 NCPP. Dicho norma , en el apartado 1 prevé dos

requisitos necesarios y uno protestativo. Los requisitos necesarios son:

 La determinación precisa de la sentencia objeto de revisión, con indicación del

órgano judicial que la emitió, y

 La invocación puntual de la causa o motivo de revisión que se hace valer y,

adicionalmente, la referencia específica y completa de los hechos en que se

funda y de las disposiciones legales que los sustentan.

La demanda debe ser autosuficiente, pues ha de permitir identificar la sentencia objeto de

revisión, que se invoca y, esencialmente, las razones fácticas y jurídicas que razonablemente

justifiquen la necesidad de la rescisión del fallo cuestionado, otro requisito, esta vez,

protestativo, en la pretensión indemnizatoria, cuyo monto debe precisarse, a fin de instar sea

la prueba correspondiente.
Integra, asimismo, el cuerpo de la demanda las solicitudes probatorias correspondientes. Los

apartados 2 y 3 del artículo 441 NCPP regulan este aspecto,el demandante acompañará copia

de las sentencias expedidas en el proceso de revisión demanda –a partir de ellas el tribunal

podrá advertir, prima facie la corrección o veracidad objetivo inicial de las afirmaciones del

autor acerca del fallo que cuestiona–, así como la prueba documental correspondiente– salvo

que no pueda adjuntarla, en cuyo caso indicará el archivo donde se encuentra–.también

ofrecerá los demás medios de prueba sin duda, pertinentes y útiles, que acredite la verdad de

sus afirmaciones, se tratara como es obvio, de prueba testimonial pericial y las demás

previstas, en lo pertinente y útil, en el TÍTULO II los medios de prueba de la sección segunda

la prueba del libro segundo la actividad procesal del NCPP.

4.2. Acta de calificación

4.2.1. Juicio de admisibilidad y procedencia

Artículo 443 apartado 1 del nuevo código procesal penal, en esta fase del

procedimiento, corresponde supremo tribunal examinar si la demanda de revisión

interpuesta reúne los requisitos de admisibilidad y procedencia fijados los dispositivos

anteriores y en lo pertinente, regulado por los artículos 426 y 427 del código procesal

civil, por ser la ley procesal común [REV. SENT. (NCPP ) n.° 150-2014/ Ancash].

No cabe duda,a partir de la expuesto que el primer paso de la sala penal suprema,

luego de recibir la demanda revisión, es examinar su admisibilidad y procedencia, sin

necesidad de traslado algúno.el tribunal de revisión debe verificar el cumplimiento de

los presupuestos de acción de impugnación, –genéricamente– son los mismos que

rigen para todo recurso impugnatorio. El acto de impugnación, la demanda en sí

misma, por imperio del artículo 443.1 NCPP, se analiza con especial cuidado –la

clasificación, sin embargo, me está destinada a realizar estimaciones probatorias en

establecer comprobaciones que, según la estructura del proceso, están reservadas al


juicio oral: causales de admisibilidad [ROXIN]–es importante entender que como el

proceso de impugnación que puede surgir del ejercicio de la acción revisora necesita

el concurso de las diversas partes, será del caso de identificar a las partes de la causa

cuestionada –que tendrán derecho a participar en este proceso–y proporcionan

información razonable de su ubicación a efectos del emplazamiento correspondiente.

El articulo 4414 del NCPP, autoriza al tribunal a instar al demandante la

subsanación de los presupuestos procesales subsanables y de los requisitos de la

demanda que falten precisar -deber procesal de asistencia del tribunal[ROXIN]-. A

este efecto ese evidente que le concederá un plazo judicial – la ley no fija un tiempo

preciso: no lo hace el articulo 146 NCPP-. El incumplimiento de este requerimiento,

determina el rechazo de la demanda por inadmisibilidad y el archivo de las

actuaciones(art.426 in fine CPC). Es de precisar que la subsanación solo es dable si es

posible superar la vulneración del requisito de inadmisibilidad [Rev.Sent.(NCPP)n.º

119-2014/Ucayali]. Est resolución debe ser motivada y, para garantizar un juicio

meditado y colegiado en un tema vinculado al derecho de acción, de relevancia

constitucional, requiere votación por unanimidad. No esta previsto contra esta

decisión, por ser emitida por el Superemo Tribunal y en función a la votación

calificada que exige, recurso alguno contra ella. Además, no causa estado, por que

salvados los motivos formales de desestimación liminar puede proponerse de nuevo.

Si el juicio de admisibilidad es positivo asi lo declara la Sala igualmente por

auto fundado irrecurrible.

De conformidad con el articulo 472 del CPC corresponde, en esta misma fase

del recurso, el juicio de procedencia. Los motivos de improcedencia se encuentran,

globlamente en el articulo antes citado; y son los siguientes:

 El demandante carezca evidentemente de legitimidad para obrar.


 El demadante carezca evidentemente de interés para obrar.

 Carezca de competencia.

 No existe conexión lógica entre los hechos y el petitorio. Esta causal se

configura cuando lo expuestos en la demanda no guardan relación o

son incompatibles con el objeto de pretencion[HINOSTROZA].

 El petitorio fuese jurídica o físicamente imposible. Esta causal alude a

dos supuestos: i) jurídicamente imposible y ii) físicamente imposible.

El primero se refiere a la no adecuación o no correspondencia del

petitorio con el marco legal existente o contrario o incompatible con

este. La segunda determina la imposibilidad de satisfacer lo

peticionado en la demanda por ser contraria a las leyes

[HINOSTROZA].

 Contenga una indebida acumulación de pretensiones.

4.2.2. Efectos

El articulo 442 NCPP consagra el efecto no suspensivo de la acción de revisión. La

interposición de la demanda no suspende la sentencia ejecutoriada. Su suspensión, sin

embargo, será posible solo en el extremo de la libertad del imputado que esta

sufriendo pena privativa de libertad efectiva.

4.3. Actos de Sustanciación

Admitida la demanda de revisión se llevan a cabo 3 pasos procedimentales básicos:

traslado, actuación probatoria y audiencia de revisión.

4.3.1. Traslado

Como consecuencia del principio de bilateralida, la demana debe ser puesta en

conocimiento de las partes del proceso objeto de revisión. El n.º 2 del articulo 443

NCPP solo menciona al fiscal o condenado, en su caso pero es dable, si las razones de
la revisión no son exclusivamente personales, correr traslado a las demás partes:

coimputados, agraviados, actor civil y tercero civil. Es evidente la necesidad de este

traslado y posibilidad de intervención por que la sentencia de revisión, eventualmente,

puede afectarlos- en especial, a las contrapartes-.

El Tribunal no solo correrá traslado de la demanda para determinar si las copartes o

contrapartes introducen formal oposición a la misma y deciden participar en las

actuaciones- el escrito que, en su caso, presenten debe ser, igualmente, autosuficiente

e incluir, si correspondiera, las solicitudes probatorias correspondientes-. Además,

desde ya, por razones de economía procesal, solicitara el expediente del que deriva la

revisión y pedirá la prueba documental instada por el demandante. la incorporación

del expedidente del que deriva la revisión permitirá, en su dia, analizar la prueba

actuada que aprecio el Tribunal en cuestión, asi como también advertir el concurso de

las partes que se constituyeron el proceso originario para que, previa citación, puedan

intervenir en el proceso de revisión.

4.3.2. Actuación probatoria

Cumplido el traslado se abre el momento probatorio del procedimiento de revisión,

cuyo plazo es de 30 días improrrogable. Es propiamente una fase instructora

[PALACIO] y, por tanto, las reglas de actuación no son del juicio oral- que exigen

audiencia única y concentrada de pruebas-, sino las de la investigación preparatoria-

diligencias actos específicos, reservados y discontinuos, aunque informados por el

principio de contradicción- aunque dirigida por el Supremo Tribunal- la Sala, para

esta fase, puede nombrar entre sus miembros a un Juez Supremo-. La determinación

de los medios de convicción corresponde a la Sala y su concreta actuación al Juez

Supremo designado al efecto. De estas actuaciones, tendientes a determinar si las


afirmaciones del recurrente en revisión son verdaderas, se levantará el acta

correspondiente, que desde luego deben cumplir los requisitos del articulo 120 NCPP.

Las evidencias que deben practicarse no son solo las propuestas y admitidas por el

demandante, sino las solicitadas y aceptadas por las demás partes, asi como las

propuestas de oficio por el órgano jurisdiccional (art.443.3NCPP), lo que revela que

esta fase esta informada por el principio de investigación oficial y no de aportación de

partes cuyo carácter por consiguiente es de instrucción, no de juzgamiento-la Sala

penal por consiguiente, tiene facultades autónomas de investigación, al cumplir a

traves de algunos de sus miembros, siempre dentro del ámbito fijado en los distintos

dispuestos legalmente previstos [ D’ALBORA]-, justifica esta opción legislativa las

exigencias imperativas de justicia material y la suma gravedad institucional que

entrañan la posible recision de un fallo firme.

4.3.3. Audiencia de revisión

Culminada la fase probatoria o de instrucción dela causa-sea por actuación de las

diligencias correspondientes o por culminación del periodo fijado legalmente: 30 días

-,la Sala deberá dictar el auto de citación a la audiencia de revisión y emplazar a todas

las partes apersonas. Es imperativa la presencia del demandante- fiscal o de la defensa

del imputado, según el caso-, pues si no concurre, salvo que exista motivo justificado,

se declara la inadmisibilidad de la demanda.

La instalación de la audiencia está condicionada a la presencia del demandante-del

representante técnico en el caso del imputado-. La Ley no impone el concurso de las

demás partes para la instalación y celebración de la vista, cuya presencia sin duda es

importante pero no condiciona su instalación. La audiencia, en este caso, es el espacio

de discusión oral del conjunto de aporte probatorio que se logro reunir y de su

relevancia jurídica de cara a la fundabilidad de la revisión impetrada.


La audiencia se inicia con la precisión de los términos de la demanda y de la

prueba actuada. A continuación, se procede a la exposición de los alegatos orales,

primero, de quien interpuso la demanda, luego de las copartes y finalmente de las

contrapartes. Si el imputado asiste a la audiencia o, en su defecto, el familiar mas

cercano, podrá ser uso de la palabra. Con ese paso se da por terminada la audiencia

para la expedición de la sentencia de revisión, cuyo plazo de emisión es de 20 días. El

fallo se lee en audiencia pública, que se citara al efecto, conforme a la regla del juicio

de apelación (art 443.5 NCPP).

4.4. La sentencia de revisión

La sentencia de revisión puede ser estimatoria o desestimatoria, y se notifica a todas

las partes del proceso originario. Es irrecurrible: no hay otra instancia a la que se pueda

acudir.

4.4.1. Sentencia desestimatoria

Se emite cuando los fundamentos de la demanda de revisión carecen de sustento.

Es decir, la actividad de instrucción no ha permitido encontrar “confirmación

suficiente” de que la sentencia cuestionada, en función a las actuaciones realizadas ex

post y bajo una lógica objetiva, presenta serias dudas de corrección jurídica. Esto

significa, conforme a la jurisprudencia constitucional alemana (BVerfG NStZ 90,

499), que no es necesaria la prueba plena de las fundamentaciones presentadas.

[ROXIN]. El motivo en que se basa la revisión ha de quedar justificado con un nivel

de seria probabilidad y los elementos de convicción incorporados a la causa deben

confirmar que será posible, de realizarse un nuevo enjuiciamiento, un sentido

diferente de la conclusión del fallo originario.

La denegatoria de la revisión, o la ulterior sentencia confirmatoria de la anterior-la

que se dicte en el juicio rescisorio-, no impide una nueva demanda de revisión,


siempre que se funde en otros hechos o pruebas. No hay preclusión, pero se

condiciona a que los elementos aportados sean diferentes.

4.4.2. Sentencia estimatoria

Esta rescinde el fallo cuestionado, lo que determina que se declarará sin valor-por

la regla de iura novia curia no es determinante la calificación del motivo invocado por

el demandante pues el tribunal puede derivar su análisis al motivo que legalmente

corresponda-. Con esta decisión se agota el iudicium rescindens. Sin embargo, es

posible que esta misma sentencia incorpore, acumulativamente, un iudicium

rescissorium, en la medida en que no sea necesario para decidir sobre el fondo del

asunto un nuevo juicio oral, el cual por lo demás es la regla general: corresponde al

juez de merito, al juez penal-unipersonal o colegiado- a quien corresponda según las

reglas de competencia preestablecidas, realizar el nuevo juicio oral y expedir el juicio

rescisorio que corresponda, absolutorio o condenatorio.

La rescisión podrá ser con o sin reenvió. La opción por una u otra alternativa estará

en función a la naturaleza de la causa objeto de decisión y/o al nivel o entidad,

cualitativa y cuantitativa, de los elementos de convicción acopiados- si la situación

probatoria permite inequívocamente renunciar al juicio oral por superfluo en el caso

concreto-. Así, por ejemplo, un caso evidente de sentencia de revisión

acumulativamente rescisoria será cuando el condenado ha muerto, en que el juicio

oral siempre esta excluido.

La fase rescisoria de la revisión, el juicio rescisorio que tiene lugar en el Juzgado

Penal competente, por imperio del art. 444.2 NCPP, si bien se tramitara conforme a

las reglas respectivas, se sujeta a una particularidad y una limitación: el ofrecimiento

de prueba y la sentencia no podrán fundarse en una nueva apreciación de los mismos

hechos del proceso, con independencia de las causales que tornaron admisible la
revisión. No se puede desconocer las nuevas actuaciones que dieron lugar a la

revisión y estas deben valorarse con el conjunto de la prueba actuada en el nuevo

juicio conforme a las reglas que rigen la actividad probatoria.

Son dos los efectos de la sentencia desestimatoria: 1. La condena sufrida se

computa cuando en el juicio rescisorio se dicte nueva sentencia de condena. 2. Si en el

juicio rescisorio se dicta sentencia absolutoria, los que fueron condenados y los

herederos en su caso, con arreglo al art. 444.3 NCPP, tienen derecho- si lo hubieren

pedido en la demanda de revisión- a la indemnización por daños y perjuicios por

concepto de error judicial, a la vez que se les que, necesariamente, se les devolverá los

pagos hechos por concepto de reparación civil y multa [CORTES]. Es evidente que la

indemnización procedera si el imputado no contribuyo con su actuación al error

judicial, como atinadamente señala, por ejemplo, el art.487 del CPP de la Nación

Argentina.

BIBLIOGRAFÍA

- DERECHO PROCESAL LECCIONES; CESAR

SAN MARTIN CASTRO / ACCION DE

REVISIÓN/ pag. 758


WEBGRAFIA

- LA REVISIÓN DEL PROCEDIMIENTO

PENAL; GUILLERMO VELAOCHAGA

MIRANDA

También podría gustarte