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CONTENIDO

- Leyes de India
- Decreto Orgánico del 26 de marzo de 1.874
- Ley Avellaneda 1.597/1.885
- Ley 4.699/1.907
- Ley 13.031/1.947
- Ley 14.297/1.954
- decreto-ley 477/1.955
- Decreto 6.403/1.955
- Ley 14.467/1.958
- Ley 14.557/1.958
- Decreto Reglamentario 1.404/1.959
- Ley 17.604/1.967
- Ley 17.245/1.968
- Ley 17.778/1.968
- Decreto Reglamentario 1.617/1.969
- Decreto 8.472/1.969
- Ley 20.654/1.974
- Ley de Facto 22.207/1.980
- Decreto Penal 154/1.983
- Ley 23.068/1.984
- Ley 23.114/1.984
- Decreto 101/1.985
- Decreto 2.461/1.985
- Ley 23.569/1.988
- Ley 23.930/1.991
- Decreto 160/1.991
- Decreto 990/1.991
- Ley 24.049/1.992
- Decreto 438/1.992
- Ley 24.195/1.993
- Decreto 506/1.993
- Decreto 1.075/1.993
- Decreto 1.610/1.993
- Decreto 2.282/1.993
- Decreto 2.330/1.993
- Decreto 2.427/1.993
- Decreto 2.568/1.993
- Resolución 1.069/1.993
- Decreto 256/1.994
- Decreto 529/1.994
- Resolución 240/1.994
- Resolución 263/1.994
- Resolución 129/1.994
- Ley 24.521/1.995
- Decreto 268/1.995
- Decreto 499/1.995
- Decreto 173/1.996
- Decreto 576/1.996
- Decreto 455/1.997
- Resolución 1.807/1.997
- Decreto 705/1.997
- Resolución 1.168/1.997
- Decreto 081/1.998

Recopilación de las Leyes de Indias, mandados a imprimir y publicar por la Majestad


Católica del Rey Don Carlos II.
Tomo I, Libro I.

TITULO XXII:

De las Universidades y Estudios Generales y particulares de las Indias.

Ley I. Fundación de las Universidades de Lima, y México.

Para servir a Dios nuestro Señor, y bien público de nuestros Reinos conviene, que nuestros
vasallos, súbditos y naturales tengan en ellos Universidades y Estudios generales donde
sean instruidos y graduados en todas las ciencias y facultades, y por el mucho amor y
voluntad, que tenemos de honrar y favorecer a los de nuestras Indias, y desterrar de ellas los
temores y la ignorancia, creamos, fundamos y constituimos, en la Ciudad de Lima de los
Reinos del Perú y en la Ciudad de México de la Nueva España, Universidades y Estudios
generales, y tenemos por bien y concedemos a todas las personas, que en las dos dichas
Universidades fueran graduados que gocen en nuestras Indias, Islas y Tierrafirme del Gran
Océano de las libertades y franquezas de que gozan en estos Reinos los que se gradúan en
la Universidad y Estudios de Salamanca, así en el no pecar, como en todo lo demás y en
cuanto a la jurisdicción fe guarde la Ley XII de este título.

Ley II. Que en las Universidades particulares se guarde lo dispuesto para cada una.

En las Ciudades de Santo Domingo de la Isla Española, Santa Fe del Nuevo Reino de
Granada, Santiago de Guatemala, Santiago de Chile y Manila de las Islas Filipinas, está
permitido que haya Estudios y Universidades, y que se ganen cursos y den grados en ellas
por el tiempo que ha parecido conveniente, para lo cual hemos imperado (sic) de la Santa
Sede Apostólica Breves y Bulas, y les hemos concedido algunos privilegios y
preeminencias: Mandamos, que lo dispuesto para los dichos Estudios y Universidades se
guarde, cumpla y ejecute, sin exceder en ninguna forma, y las que fueren por tiempo
limitado, acudan a nuestro Real Consejo de las Indias a pedir las prorrogaciones donde se
proveerá lo que fuere conveniente, y no las teniendo, cese y se acabe el ministerio de
aquellos estudios, que así es nuestra voluntad.
Ley III. Que las Universidades guarden sus estatutos estando confirmados por el Rey, y los
Virreyes no los puedan alterar ni revocar sin justa causa y dando cuenta al Consejo.

Ordenamos y mandamos que las Universidades de Lima y México, sus Rectores, Doctores,
Maestros, Ministros y Oficiales guarden los Estatutos que nuestros Virreyes del Perú y
Nueva España les hubieren dado, siendo por Nos confirmados y no revocados por las Leyes
de este título, entretanto que no mandaremos otra cosa, y por ellos gobiernen, rijan y
administren todo lo que tocan las dichas Universidades y sus Estudios, y que los Virreyes
no los puedan dispensar, alterar ni mudar sin justas y legítimas causas, y dándonos cuenta
en nuestro real Consejo de las Indias; y todos nuestros Jueces y Justicias, de cualquier
grado y calidad que sean así, lo cumplan y ejecuten.

Ley IV. Que la elección del Rector en Lima se haga cuando por esta ley se dispone.

Mandamos, que se haga la elección de Rector y Consiliarios (sic) en la Universidad de San


Marcos de Lima, el último día del mes de junio, por la tarde, guardando en lo demás la
forma y estilo que se ha observado, conforme a sus constituciones, no estando
especialmente revocadas por Nos.

Ley V. Que los Virreyes no impidan a las Universidades la libre elección de Rectores y
Catedráticos y dar grados.

Los Virreyes del Perú y Nueva España, no impidan a las Universidades y Estudios
Generales de Lima y México, la libre elección de Rectores en las personas que les
pareciere, y deben proveer las Cátedras y conferir los grados de letras a los que conforme a
los Estatutos por Nos confirmados, se deben dar, y los guarden y cumplan.

Ley VI. Que en la Universidad de Lima sea el Rector un año Eclesiástico y otro Seglar.

Por cuanto se nos ha hecho relación, que por una de las constituciones, que tiene la
Universidad de Lima, se ordena, que el Rector de ella sea un año de los doctores Seglares
del Claustro, y otro año de los Doctores y Maestros eclesiásticos, y siempre se ha usado
hacer la elección alternativamente en esta forma, con la cual ha sido, y es bien regida y
gobernada: mandamos, que se guarde y cumpla lo que cerca de lo sobredicho está
ordenado, entretanto que Nos proveyéremos otra cosa, y si los Virreyes entendieren, que
resulta algún inconveniente, nos envíen relación dirigida a nuestro Consejo de Indias, para
que se provea en él, y provea lo que convenga.

Ley VII. Que los Oidores, Alcaldes y Fiscales no sean Rectores.

Mandamos, que los Oidores, Alcaldes del Crimen, y Fiscales de nuestras Audiencias Reales
de las Indias, no pueden ser, ni sean Rectores de las universidades en el tiempo que
ejercieren sus oficios, aunque sean graduados en ellas.

Ley VIII. Que los Rectores de las Universidades de Lima y México puedan traer dos negros
lacayos con espadas.
Damos licencia, y facultad a los Rectores de las Universidades de Lima y México, para que
por el tiempo que lo fueren pueda cada uno traer dos negros lacayos con espadas, y nuestras
justicias no les pongan embargo, ni impedimento alguno, que así es nuestra voluntad.

Ley IX. Que el Rector nombre Alguacil, que sea uno de los de Corte.

Otrosí cada uno de los dichos Rectores de las Universidades de Lima y México, puedan
nombrar un Alguacil de Corte, o Gobierno, con cien pesos ensayados de salario, como por
el Gobierno de Lima está ordenado, y los dos pesos, que tienen de señalados de los grados
de Licenciados, sean cuatro pesos de a ocho reales, por la obligación de asistir las noches
de los exámenes secretos, y la que no asistieren pierdan los dos pesos para la casa de la
Universidad.

Ley X. Que el decano de las Universidades se dé al Doctor más antiguo, aunque sea Oidor.

Ordenamos y mandamos, que el Doctor más antiguo en la facultad de Cánones, sea decano
de las Universidades de Lima y México, aunque sea Oidor de nuestras Audiencias, que en
las dichas ciudades residen.

Ley XI. Que en la Universidad de Lima sea uno de los Consiliarios del Colegio Real.

Uno de los Consiliarios Bachilleres, que por las Constituciones de la Universidad de Lima
se eligen cada año, sea Colegial del Real Colegio Mayor de San Felipe, y San Marcos de
aquella ciudad.

Ley XII. Que los Rectores de las Universidades de Lima, y México tengan la jurisdicción,
que por esta ley se declara.

Ordenamos y mandamos que los Rectores de las Universidades de Lima, y México, y por
su ausencia los Vicerectores tengan jurisdicción en los Doctores, Maestros y Oficiales de
ellas, y en los Lectores, Estudiantes y Oyentes, que a ella concurrieren, en todos los delitos,
causas y negocios criminales que se cometieren e hicieren dentro de las Escuelas de las
Universidades, en cualquier manera tocantes a los Estudios, como no sean delitos en los
que haya que haber pena de efusión de sangre, o mutilación de miembro, u otra corporal; y
en los demás delitos, que se cometieren fuera de las Escuelas, si fuere negocio tocante, o
concerniente a los Estudios, o dependientes de ellos; o pendencia de ello, o de palabras, que
alguno de los Doctores, Maestros o Estudiantes tengan con otro, sobre disputa, o
conferencia, o paga de pupilaje, u otra cosa semejante, en estos casos los Rectores, o por su
ausencia los Vicerectores puedan conocer también de los dichos delitos. Y porque el
principal fin porque les concedemos esta jurisdicción, es la reformación de vida y
costumbres de los Estudiantes, y que vivan corregidos y virtuosamente, para mejor puedan
conseguir la pretensión de sus letras: Mandamos que asimismo puedan conocer de los
excesos, que los estudiantes tuvieren en juegos, deshonestidades y distracción de las
Escuelas, y los puedan castigar y corregir con prisiones, o como mejor pareciera que
conviene, y también puedan corregir y castigar las inobediencias , que los Doctores y
Estudiantes tuvieren con los Rectores en no cumplir y guardar sus mandatos en razón de los
Estudios, Constituciones y Ordenanzas de ellos, dentro y fuera de las Escuelas, conozcan
las demás Justicias Ordinarias de Lima, o México privativamente. Y concedemos poder y
facultad a los Rectores y Vicerectores, para que en los casos contenidos en nuestra ley,
puedan conocer conforme a derecho, leyes de estos Reinos de Castilla, y de las Indias,
Estatutos y Constituciones de dichas Universidades, fulminar y substanciar los procesos,
prender los culpados, sentenciar las causas, imponer penas ordinarias, o arbitrarias, y
mandarlas ejecutar conforme a derecho, y si las partes apelaren para ante los Alcaldes del
Crimen de Lima, o México, les otorguen las apelaciones, habiendo lugar de derecho; y en
los delitos en que se haya de dar pena ordinaria de mutilación de miembro o efusión de
sangre, u otra corporal , siendo cometidos dentro de las Escuelas, los Rectores, o
Vicerectores por su ausencia, pueden solamente prender los delincuentes, hacer
información del delito, y remitir el preso con los autos al Juez, que en la causa previniere, y
no habiendo prevención, al que los Rectores, y Vicerectores pareciere. Todo lo cual pueden
hacer, no habiendo prevenido en estas causas por otro Juez. Y mandamos a todas nuestras
Justicias Reales, que no perturben, ni impidan a los dichos Rectores, o Vicerectores la
jurisdicción, que por esta ley les concedemos, y la guarden y cumplan, pena de dos mil
pesos de oro al que lo contrario hiciere para nuestra Cámara y Fisco.

Ley XIII. Que en cuanto a las preeminencias del Maestre-Escuela, se guarde en México lo
ordenado en Lima por el Virrey Don Francisco de Toledo.

Nuestra merced y voluntad es, que los Virreyes de Nueva España, en cuanto a la
preeminencia del Maestre-Escuela, hagan guardar, y guarden en la Universidad de México
lo que en la de San Marcos de Lima ordenó Don Francisco de Toledo nuestro Virrey, que
fue del Perú y estuviere confirmado, o concedido por Nos, y no se haga novedad.

Ley XIV. Que los que recibieren grados mayores, hagan la profesión de la Fe.

Conforme a lo dispuesto por el Santo Concilio de Trento y Bula de la Santidad de Pío IV de


feliz recordación, los que en las Universidades de nuestras Indias recibieren grados de
Licenciados, Doctores y Maestros en todas las Facultades, sean obligados a hacer la
profesión de nuestra Santa Fe Católica, que predica y enseña la Santa Madre Iglesia de
Roma; y asimismo nos han de jurar obediencia y lealtad, y a nuestros Virreyes y
Audiencias Reales en nuestro nombre, y a los Rectores de tal Universidad, conforme a los
Estatutos de ella.

Ley XV. Que el que se hubiere de graduar jure la opinión pía de Nuestra Señora, estando
jurada por la Universidad.

Mandamos, que en la Universidad, que así lo hubiere votado, ninguno pueda recibir grado
mayor de Licenciado, Maestro ni de Doctor en Facultad alguna, ni aún el de bachiller en
Teología, si no hiciere primero juramento en un libro Misal delante del que le ha de dar el
grado, y los demás, que asistieren, de que siempre tendrá, creerá y enseñará de palabra y
por escrito haber sido la siempre Virgen María Madre de Dios y Señora Nuestra, concebida
sin pecado original, en el primer instante de su ser natural, el cual juramento se pondrá,
como lo hizo, en el Título, que del grado despachare, y si sucediere haber alguno, lo cual
Dios nuestro Señor no permita, que rehusare hacer el juramento, le será por el mismo caso
denegado el grado, y el que se atreviera a dársele, incurra por el mismo caso en pena de
cien ducados de Castilla para la casa de la Universidad, que no lo denunciare ante el rector.
Y fiamos tanto de la devoción de todos para con la Madre de Dios, que nunca sucederá el
caso de obligar a la ejecución de las penas.

Ley XVI. Que los grados se den por el Maestre-Escuela en la Iglesia Mayor.

Ordenamos, que los grados de las Universidades de Lima y México, se den en la Iglesia
Mayor de aquellas Ciudades, y los den los Mestre-Escuelas en nuestro nombre, a los cuales
por ahora nombramos por Cancilleres.

Ley XVII. Que dé el vejamen el Doctor más moderno de la Facultad, y no le excuse sin
causa, ni le dé fin sin ser visto primero.

En los grados de Doctores de todas las Facultades, dará el vejamen el Doctor más moderno
de aquella facultad, que fuere el grado; y estando legítimamente excusado, pase al siguiente
en antigüedad, con orden del Rector, el cual declara si la excusa es bastante; y declarando
no serlo, y notificándolo una vez, al que se excusare, si no le quisiere dar, pierda la propina
de aquel grado para la casa de la Universidad; y pareciendo al Rector, que hay necesidad de
ver el vejamen, antes de que se de en público, lo podrá hacer por sí mismo, o remitirlo a
quien le pareciere, para que lo vea, censure y corrija, el cual lo firme, declarando lo que se
debe quitar; y el Doctor que dijere más de aquello que diere por escrito, y se aprobare,
pierde la mitad de la propina, que por dar el vejamen ha de llevar para la casa de la
Universidad.

Ley XVIII. Que el examen secreto de los Licenciados entre los Examinadores, que por ley
se declara.

Ordenamos y mandamos, que los examinadores Doctores, que se han de hallar en los actos
secretos de las Facultades de Teología, en las Universidades de Lima y de México, se
vayan reduciendo de dieciséis, como fueren saliendo los que están ya graduados, respecto
de tener ya derecho adquirido, y que en ellos sean preferidos los Catedráticos Doctores, y
luego los más antiguos, y que en las demás Facultades en que de preferente hay poco
número de Doctores y Maestros, por ahora no se haga novedad, y para adelante no excedan
de doce y que los que se gradúen de nuevo sean recibidos, y entren con calidad de que no
han de concurrir en el examen secreto, hasta que por antigüedad se incluyan en este
número.

Ley XIX. Que los Oidores, Alcaldes de Crimen, y Fiscales entren por Supernumerarios en
los exámenes.

Mandamos, que los Oidores, Alcaldes del Crimen y Fiscales de nuestras Reales Audiencias
de Lima y México, que por tiempo se graduaren, o incorporaren a sus Universidades, hayan
de entrar y entren a los exámenes secretos de Licenciados Supernumerarios a los dieciséis
Doctores, que está mandado asistan totalmente a los exámenes, y no se hayan de rebajar los
dieciséis del número, lo cual lo haya de entender y entienda con los que de nuevo se fueren
incorporando, y graduando, sin innovar los que están ya graduados, o incorporados, y por
antigüedad están inclusos en el número y asimismo con declaración, de que cuando los
Oidores, Alcaldes de Corte y Fiscales, que de nuevo se graduaren, o incorporaren, fueren
optando antigüedad, y a título de ellas les perteneciere entrar en los exámenes, como uno de
los dieciséis no entren por supernumerarios, sino incluso en los números de los dieciséis,
por el derecho de la antigüedad que les perteneciere, porque tan solamente, se ha de
entender el privilegio, de entrar, creciendo el número, con los que no les perteneciere por
antigüedad; y que si entraran, habían de quitar esta preeminencia a los Doctores más
antiguos.

Ley XX. Que al examen secreto de Licenciado no se halle quien no tenga voto.

En el examen secreto de Licenciado de cualquiera Facultad, al tiempo de votar, y del


razonamiento y conferencia, que el Rector debe hacer, y del escrutinio, no se halle presente
Doctor, ni Maestro alguno, que no tenga voto en aquel grado y examen, aunque sea de la
misma Facultad, y aunque haya entrado por huésped se salga al mismo tiempo.

Ley XXI. Que en los exámenes secretos arguyan los Catedráticos, o Doctores más
modernos.

Ordenamos y mandamos, que en los exámenes secretos del grado de Licenciado en todas
las Facultades arguyan cuatro Catedráticos de la Facultad, Doctores de el Claustro, los
cuales entren Supernumerarios, solamente para el efecto, la vez que les cupiere la suerte de
argüir, mientras no tuvieren antigüedad, o se ofreciere el caso en que puedan entrar en el
número de los dieciséis, prefiriendo a los más antiguos y entraran a argüir por este orden:
En los grados de Teología, el de Prima, Vísperas, Sagrada Escritura, y Segunda de
Vísperas: En los grados de Cánones y Decreto, los de Prima de Cánones y leyes, Vísperas
de Cánones y Decreto, y a falta de cualquiera; después de estos, el de Vísperas de Leyes, y
el de Instituta: en los grados de Artes, los tres Catedráticos, comenzando desde el más
antiguo Catedrático, aunque sea el menos antiguo en el grado, y en caso que falte algún
Catedrático, dos, o más, por enfermedad, ausencia, o justa causa, de suerte que no haya el
número de cuatro, no se admiten los sustitutos, y en este caso arguyan los Doctores más
modernos, que se entiende de los que entran al examen, y solamente los que fueren
menester para llenar el número de los cuatro, y suplir la falta de Catedráticos, guardando
entre sí solamente la antigüedad de el grado.

Ley XXII. Que el examen no se vote por segunda vez, pena de nulidad del grado.

En los exámenes secretos no se pueda votar por segunda vez, ni hacer segundo escrutinio,
aunque se diga por alguno, o algunos de los que hubieren votado, que se erraron en el votar,
y el grado que se diere por segundo escrutinio, sea en sí ninguno.

Ley XXIII. Que al votar no se muestren los AA. Ni las RR. So pena de esta ley.

Mandamos, que al tiempo de votar en los grados de Licenciados en cualquier Facultad, para
que se haga con la entereza debida, se guarde secreto y no se muestren las AA. ni RR. Que
cada uno echare, por los inconvenientes, que se siguen; y el Rector lo haga cumplir, pena
de que el que votare en público, o diere su letra para que otro la eche, pierda la propina de
aquel grado, y luego allí se ejecute, aplicada para la casa de la Universidad, y el votar sea
poniendo las jarras de plata, que para esto hay apartadas sobre una mesa, y levantándose
cada uno a votar, para que con esto se guarde el secreto debido.

Ley XXIV. Que el Colegio Real, que no lo hubiere sido dos años, no goce del privilegio del
grado.

Declaramos, que ningún Colegial pueda gozar del privilegio de graduarse por la mitad de
las propinas y derechos concedido al Real Colegio Mayor de la Ciudad de Lima, que por lo
menos no hubiera asistido en él como tal Colegial dos años continuos. Y porque de algún
tiempo a esta parte se ha concedido este privilegio a algunas Becas, que sustentamos en el
Colegio de San Martín, que está a cargo de los Religiosos de la Compañía de Jesús de la
dicha Ciudad, declaramos asimismo, que no puedan gozar del dicho privilegio los que por
lo menos no hubieren tenido dos años continuos una de las becas, a que está concedido,
aunque con otra haya asistido muchos años en el mismo Colegio.

Ley XXV. Que el privilegio de graduarse por la mitad, no se entienda en la cena o en la


comida.

Otrosí declaramos, que el privilegio de graduarle por la mitad de las propinas y derechos en
todos los grados y Facultades de que gozan en la Universidad de Lima los hijos de
Doctores, Maestros y Catedráticos de ella, y los Colegiales de el Real Colegio Mayor de
aquella Ciudad, y algunos Colegiales, que como dicho es, sustentamos en el Colegio de San
Martín, no se entiende en la cena y comida, por esto se ha de depositar, y pagar por entero.

Ley XXVI. Que ninguna persona tenga lugar entre los Doctores y Maestros en actos
públicos, ni secretos.

Nuestros Virreyes no den licencia, consientan o permitan, que ninguno sea admitido, ni
tenga lugar, ni asiento entre los Doctores y Maestros de las Universidades en los paseos,
actos públicos, ni secretos de examen, aunque sean Doctores, Maestros, o Licenciados por
otras, o tengan cualquier oficio, o cargo nuestro, ni puedan dispensar el Rector, ni todo el
Claustro, si no fuere con Obispo, Oidor, Alcalde, o Fiscal de nuestra Real Audiencia de la
misma Ciudad.

Ley XXVII. Que los Oidores, Alcaldes, o Fiscales, que se incorporen, paguen la propina,
como los demás.

Mandamos, que los Oidores, Alcaldes del Crimen, y Fiscales de nuestras Audiencias de Las
Indias, que se incorporaren en algunas de las Universidades de ellas, paguen las propinas
como los demás.

Ley XXVIII. Que los Oidores, Alcaldes y Fiscales en las Universidades tengan el lugar,
que por la antigüedad de sus grados les perteneciere.
Ordenamos y mandamos, que en las dos Universidades de Lima y México en todo lo que
tocare a los grados y cosas del Claustro, y en lo demás a los Oidores, Alcaldes y Fiscales de
las Audiencias, que residen en las dichas Ciudades, y son y fueren graduados de Doctores
de las mismas Universidades, se les guarden las antigüedades de los grados de Doctores,
que tuvieren por ellas en todos los actos que concurrieren con los demás Doctores, y por
razón de los oficios y plazas de Oidores, Alcaldes y Fiscales no tengan más prelación de la
que por antigüedad de sus grados les compete.

Ley XXIX. Que el Colegial de San Felipe, que regentare la Cátedra de su Colegio, tenga
asiento con el Claustro en actos públicos.

El Colegio Real de San Felipe de la Ciudad de Lima es de los principales que tenemos en
las Indias, y un Colegial suyo lee ordinariamente la Cátedra de él en la Universidad de San
Marcos, con la cual está unido, e incorporado en la forma en que consta por su fundación:
Mandamos, que el Colegial, que la leyere y regentare, pueda tener y tenga en todos los
actos públicos en que la Universidad concurriere, lugar y asiento con el Claustro de ella, y
en esto no se le ponga impedimento.

Ley XXX. Que no se suplan cursos para grados a los Estudiantes.

Mandamos que nuestros Virreyes, Presidentes y Audiencias no dispensen en ninguna forma


con los Estudiantes de las Universidades en suplirles los cursos que les faltaren para los
grados de Bachilleres y Licenciados, que se les hubieren de dar en ellas, y que los cumplan
enteramente.

Ley XXXI. Que se guarde el auto de Gobierno sobre la dotación de Cátedras, y salarios de
la Universidad de Lima.

Por auto del Gobierno del Perú están señaladas y dotadas las Cátedras de la Universidad de
Lima, y salarios de los Ministros de ella, en esta forma: La de Prima de Teología en
ochocientos pesos ensayados; la de Vísperas de Teología en seiscientos pesos ensayados; la
de Sagrada Escritura en seiscientos pesos ensayados: la Segunda de Vísperas en
cuatrocientos pesos ensayados; la de Prima de Cánones en mil pesos ensayados; la de
Vísperas de Cánones en seiscientos pesos ensayados; la de Decreto en seiscientos pesos
ensayados; la de Prima de Leyes en mil pesos ensayados; la de Vísperas de Leyes en
seiscientos pesos ensayados; la de Instituta en cuatrocientos pesos ensayados; la de la
lengua de los Indios en cuatrocientos pesos ensayados; al Capellán doscientos cuarenta
pesos ensayados; la de Bedel Mayor cuatrocientos pesos ensayados, todos de la dicha plata
ensayada de a doce reales y medio el peso; Ordenamos y mandamos, que así se guarde y
cumpla.

Ley XXXII. Que en la Universidad de los Reyes se funde una Cátedra de Prima de
Teología en la Religión de Santo Domingo.

Porque es muy justo y conveniente conservar a la Religión de Santo Domingo en su crédito


y autoridad, y que públicamente se profese y enseñe la doctrina de Santo Thomas de
Aquino, y por nuestra especial devoción erigimos y fundamos de por nuestro Patronazgo
Real en la Universidad de la Ciudad de los Reyes una Cátedra de Prima de Teología de
propiedad, de la que hacemos merced a la Orden de Santo Domingo para siempre jamas,
para que los Religiosos, que son, o fueren de ella, la lean, regenteen, gobiernen y posean,
siendo, como ha de ser, igual, y una misma en todo a la de Prima de Teología principal,
que al presente hay en la dicha Universidad, y la ha de leer a la misma hora el que la
regentare en distinto General, que hay en ella, donde se tienen los actos, enseñando en
ambos una misma materia, y teniendo los Estudiantes de la Facultad de Teología
obligación a cursar, así en esta nueva Cátedra, como en la otra, y sea preciso cursar en cada
una un curso, y los otros dos, a que están obligados por las Constituciones, sean voluntarios
en cualquiera de las Cátedras, advirtiéndolo así el Notario de ella al principio de cada un
año, para que conste al Catedrático donde cursaren los estudiantes, y les dé la certificación,
que se acostumbra, y puedan acudir a todo lo demás, que les toca en la Universidad, y ser
graduados. Y mandamos, que el Religioso, que regentare la dicha Cátedra, haya de gozar, y
goce de las honras y prerrogativas concedidas al Catedrático de Prima de Teología, que ya
estaba fundada, y también sea igual en la opción, y todo lo demás, a las Cátedras de Prima
de Cánones y Leyes, y ha de ser graduado, o se ha de graduar de Licenciado y Maestro en
Teología por aquella Universidad, conforme a las Constituciones de ella, y cumplirá sus
Estatutos y Ordenanzas precisa y puntualmente, sin contravención alguna. Y ordenamos,
que para hacer elección del religioso, que ha de regentar esta Cátedra, que fundamos y
dotamos, se junten, e intervengan nuestro Virrey del Perú, el Arzobispo de la Iglesia
Metropolitana de la Ciudad de los Reyes, el Oidor más antiguo de nuestra Real Audiencia,
que en ella reside, y el Provincial, que por tiempo fuere de la Orden de Santo Domingo en
aquella Provincia, estando ausente en partes remotas, vote en su lugar el Prior del Convento
de nuestra Señora del Rosario de la dicha Ciudad, y nombren el Religioso más hábil, y
suficiente, y en cuya persona concurrieren mas partes, calidades y requisitos de virtud,
letras y ejemplos, nacimiento, buena vida y otras, sobre que estrechamente encargamos a
todos la conciencia, y al religioso que fuere elegido se le dé la posesión de esta Cátedra,
teniendo las dichas calidades; y el claustro, Rector y Conciliarios de la Universidad le
reciban y admitan, para que la regentee y lea, de la misma forma, que el que tuviere la otra
Cátedra de Prima de Teología en un lugar general distinto, sin ponerle dificultad, ni
embarazo alguno. Y porque nuestra voluntad es, que esta Cátedra tenga y goce el mismo
estipendio que la otra, ordenamos y mandamos a nuestros Virreyes del Perú, que den las
órdenes convenientes, para que de efectos extraordinarios, que no pertenezcan a nuestra
Real Hacienda, o de lo precedido, y que procediera de las tercias partes de vacantes de
Obispados, se de y pague al claustro, Rector y Conciliarios de la Universidad, o a la
persona, que nombraren, la cantidad de dinero, que por testimonio del notario de ella
contare haber valido la otra Cátedra de Prima de Teología, para que se pague el estipendio
de esta Cátedra, y los Oficiales de nuestra Real Hacienda cumplan las órdenes, que en
razón de esto les dieren.

Ley XXXIII. Que se acrecientan y sitúan dos Cátedras de Medicina en la Universidad de


Lima.

Es nuestra voluntad acrecentar y dotar en la Universidad de Lima dos Cátedras de


Medicina, una de Prima, con seiscientos pesos ensayados, de a doce reales y medio el peso,
de salario en cada un año, y otra de Vísperas, con cuatrocientos, situados en lo que
procediere del Estanco del Solimán. Y mandamos a los oficiales de nuestra Real Hacienda,
u otras cualquier personas en cuyo poder entrare su procedido, que les den y paguen a los
Catedráticos a los tiempos, y como les ordenaren nuestros Virreyes del Perú.

Ley XXXIV. Que los Virreyes no depositen las Cátedras, y las dejen proveer, conforme a
estatutos.

Sucediendo vacar alguna de las cátedras en las Universidades de Lima, o México,


mandamos, que nuestros Virreyes no las den en deposito, y las dejen proveer, conforme a
los estatutos.

Ley XXXV. Que las Cátedras y Ministros de la Universidad de Lima se paguen de los
novenos, que se señalan.

Mandamos, que las Cátedras de la Universidad de Lima, y los salarios de los Ministros
referidos en la ley XXXI. De este título, se paguen de los novenos, que nos pertenecen en
las Iglesias Metropolitanas y Catedrales, por la forma y cantidades siguientes; en los
novenos de la Metropolitana de la dicha Ciudad de Los Reyes ocho mil pesos de a ocho
reales; en los de la Catedral de Trujillo mil pesos de a ocho reales; en los de la Ciudad del
Cuzco trescientos cuarenta y tres pesos de a ocho, y seis reales; en los de la Catedral de la
Ciudad de Quito dos mil pesos de a ocho; en los de la Metropolitana de las Charcas dos mil
pesos; en los de la Catedral de la Ciudad de La Paz seiscientos veinticinco pesos de a ocho;
en los de la Catedral de la Ciudad de Guamanga cuatrocientos sesenta y ocho pesos de a
ocho, y seis reales; en los de la Catedral de la ciudad de Arequito cuatrocientos sesenta y
ocho pesos de a ocho, y seis reales, que todos suman y montan catorce mil novecientos y
seis pesos, y dos reales, de a ocho reales el peso, con los cuales se ha de pagar la dotación
de las Cátedras y salarios de los Ministros de la dicha Universidad.

Ley XXXVI. Que a la Universidad de México le paguen los tres mil pesos situados en la
Real Casa en lo procedido de arbitrios, como solían estar en los derechos de la Veracruz.

Por hacer bien y merced a la Universidad y Estudios generales de la Ciudad de México, y


que los naturales se ejerciten en virtud y letras, y sean graduados, les concedimos tres mil
pesos de oro de Minas de renta, librados en los derechos, que se cobraren en la ciudad de la
Veracruz, para reparo de los caminos y obra de aquel puerto. Y porque la dicha
consignación ha salido incierta, mandamos a nuestros Virreyes, o a las personas a cuyo
cargo estuviere el Gobierno de la Nueva España, que sitúen a la dicha Universidad los
dichos tres mil pesos de oro de Minas en nuestras Casa Real de México en lo procedido de
los arbitrios, que últimamente se mandaron ejecutar en aquellas provincias, los cuales se les
paguen en cada un año por los tercios de él, con las condiciones, y en la forma que se
debían pagar en los derechos de la Veracruz, en virtud de la merced hecha, y en su lugar.

Ley. XXXVII. Que lo que se cobrare de Cátedras y Ministros, se ratee entre todos.

Ordenamos y mandamos, que lo que fuere cobrando de rentas de Cátedras y Ministros, se


ratee entre todos, y de cualquier parte que se cobre, o envíe, y en cualquier cantidad que
sea, el Contador de la Universidad haga la distribución de ella pro rata, y en lo dicho no
haya ventaja entre los Catedráticos y Ministros, sino igual respectivamente al salario que
cada uno tuviere.

Ley. XXXVIII. Que las Cátedras se provean conforme a esta Ley.

Ordenamos, que todas las Cátedras se provean por oposición, como fueren vacando: la de
Prima de Teología, Cánones y Leyes en Propiedad; y las demás de Teología, Cánones y
Leyes por cuatro años, y las de Artes y Filosofía.

Ley XXXIX. Que las Cátedras se provean por oposición y votos.

Mandamos, que las Cátedras, que vacaren, se provean por oposición y votos, en la forma y
como estuviere ordenado por las Constituciones de la Universidad donde vacaren.

Ley XL. Ley que da forma en la provisión de las Cátedras de Lima y México.

Para Obviar los inconvenientes, que la experiencia ha mostrado, es nuestra voluntad y


mandamos que se provean las cátedras de Lima y México en la forma siguiente: Cuando
vacare la Cátedra, después de haber leído los Opositores a ella, han de votar para su
provisión los Arzobispos de Lima y México, que por tiempo fueren, cada uno en su
Diócesis: el Oidor más antiguo de aquellas Audiencias; el Inquisidor más antiguo; el Rector
de la Universidad, el Maestre-Escuela y el Dean de la Iglesia; el Catedrático de la Facultad
que fuere de la Cátedra, que se proveyere; el Doctor más antiguo de dicha Facultad, y en
caso de estar vacío el Decanato de aquella Iglesia, ha de votar en su lugar el Dignidad
Inmediato en antigüedad; y si sucediere ser Rector el Doctor más antiguo, ha de entrar el
que fuere inmediato a él, y en caso de proveerle la Cátedra de Prima, ha de ser voto en ella
el Catedrático inmediato, no siendo opositor; y siéndolo, se ha de votar con los demás que
quedaren, en que él no ha de entrar, y este escrutinio se ha de hacer secretamente en dos
cántaros: en el uno se echará el voto del Catedrático, que se proveyere; y en el otro las
cédulas, o habas, en que no se da voto.
Las juntas para votar estas Cátedras se harán en las Casas de estos Arzobispos, presidiendo
ellos, y el Oidor a quien tocare, ha de preceder en el asiento al Inquisidor, y si este no
asistiere, enviará su voto por escrito, cerrado y sellado con todo secreto, para que se eche
con los demás, de suerte que no pueda haber, ni tener noticias por los que votaren, hasta
que hayan salido del cántaro. Y rogamos y encargamos a los dichos Arzobispos, y
mandamos a todas las personas, que han de concurrir a votar las Cátedras, que procuren,
con el mayor cuidado que pudieren, y por los mejores medios, que sea posible, inquirir e
informarle de los más beneméritos, para obtenerlas; y los autos y diligencias que sobre esto
se hubieren de hacer, han de pasar ante el Secretario del Claustro y Universidad, y así se
guarde y cumpla todo lo referido precisa e indispensablemente, y no se altere, ni
contravenga en ninguna forma, sin embargo de otra cualquier cosa anterior, por expresa que
sea.

Ley XLI. Que asistiendo algún Oidor al acto de votar Cátedra, no prefiera al Rector, ni le
apremie a que vaya a su casa a dar los puntos.
Mandamos, que cuando se ofreciere y conviniere que alguno de los Oidores de nuestras
Reales Audiencias de Lima, o México asista y se halle presente en ocasión de votar las
Cátedras de las Universidades fundadas en aquellas Ciudades, no prefiera en el lugar y
asiento al Rector , ni le apremie a que vaya a dar los puntos con ningún pretexto, ni
preeminencia de que se pueda valer.

Ley XLII. Que los catedráticos no se ausenten sin causa y licencia, so la pena de esta ley, y
forma de ella.

Ordenamos y mandamos, que de aquí adelante cualquiera que fuere Catedrático no pueda
hacer ausencia por más de dos meses en tiempo que sea lectivo, con licencia del Rector, ni
sin ella, y pasados los dos meses, sin esperar, ni ser necesario más citación, ni llamamiento,
se le espere otros quince días más para que en ellos pueda venir a excusarse y la excusa que
diere se vea por el Rector y Claustro convocado, señaladamente para este caso, y en él se
vote, y si pareciere justa la causa, se admita y pueda dar mas tiempo de dilación; y no
pareciendo serlo, se vaque (sic) la Cátedra, y se provea y pueda ser opositor aquel a quien
se quitó, y en esto lo que la mayor parte votare, se excuse irremisiblemente, y en otro
Claustro no se pueda variar, ni alterar, y de lo dicho tan solamente se exceptúan los que se
ausentaren por servicio nuestro, y con licencia del Virrey, o de quien gobernare,
interviniendo en la dicha causa del Real Servicio, o por bien, o negocio de la misma
Universidad, que en estos dos casos, o de enfermedad, podrá el Rector, y el Claustro dar
licencia para más tiempo de dos meses.

Ley XLIII. Que la cátedra de el proveído en Oficio, o Beneficio, que requiera residencia,
vaque.

Mandamos, que si algún Catedrático fuere proveído en prebenda o Beneficio Eclesiástico o


Plaza de Audiencia Real, u otro oficio, que requiera ausencia o residencia, dentro de ocho
días de cómo lo aceptare, se entiende queda vaca la Cátedra que tenía, y baste por
aceptación haber mudado de hábito el promovido a Plaza de Audiencia Real en cualquier
parte; y en lo eclesiástico haber sido proveído, o recibido el título de cualquiera de las
dichas cosas, se tenga por aceptación, dexación, y vacante de la Cátedra, sin otro algún
acto, salvo si en los ocho días siguientes, a los primeros no renunciare el tal Oficio, o Plaza,
que entonces podrá retener la Cátedra y los dos términos no se puedan prorrogar.

Ley XLIV. Que los Catedráticos enseñen el Misterio de la Limpia Concepción de Nuestra
Señora.

Encargamos y mandamos, que cuando los Catedráticos lleguen a tratar, o leer materias en
que suele leerle la cuestión de la Limpieza de la Serenísima Virgen María Nuestra Señora
en su Concepción, no la pasen en silencio, y especialmente lean y prueben cómo fue
concebida sin pecado original en el primer instante de su ser natural, pena de perder la
Cátedra, y los cursos que tuvieren los Estudiantes, que no denunciaren ante el Rector, el
cual, hecha información del caso, dé cuenta al Claustro, y ponga edictos de Oposición a la
Cátedra, y el que la perdiere por este causa no pueda ser admitido a la oposición.
Ley XLV. Que los Virreyes nombren personas, que averigüen y castiguen a los que
sobornan, y son sobornados en los votos de Cátedras.

Porque es justo desarraigar tan perjudicial vicio, como sobornar votos en oposición de
Cátedras: Mandamos, que antes que se de la Cátedra por vaca, ni comiencen a leer los
opositores, nuestros Virreyes de Lima y México nombren una persona, que de oficio
averigüe quien son los que cohechan, o son cohechados, o los que dan, o reciben, aunque
sean cosas de comer, o beber en poca, o mucha cantidad, de forma que así los opositores,
como los votos tengan entendido la averiguación y castigo, que se ha de hacer contra ellos,
y se consiga la plena libertad en el votar a favor del más digno: y asimismo hagan, que se
averigüen y castiguen cualquier monopolios, conciertos, o ligas, que se hicieren entre los
opositores, a fin de acomodarse, y dar lugar los unos a los otros, y en particular los dichos
Virreyes tengan cuidado de procurar, que el prelado de la Ciudad, ni ningún Eclesiástico, ni
Ministro de la Audiencia, ni otras personas poderosas se apasionen, ni soliciten votos, ni
hagan ruegos para que se vote por ninguno, sino que los dejen a su entera y plena libertad, y
si además de los medios referidos se les ofrecieren otros, que les parezcan más eficaces y
convenientes, lo ejecuten tan precisamente, que los delincuentes sean castigados, y den
ejemplo a los demás.

Ley XLVI. Que en las Universidades de Lima y México y Ciudades donde hubiere
Audiencias Reales haya Cátedras de la Lengua de los Indios.

La inteligencia de la Lengua General de los Indios es el medio más necesario para la


explicación y enseñanza de la Doctrina Cristiana, y que los curas y sacerdotes les
administren los Santos Sacramentos. Y hemos acordado, que en las Universidades de Lima
y México haya una Cátedra de la Lengua General, con el salario, que conforme a los
Estatutos por Nos aprobados le pertenece, y en todas las partes donde hay audiencias y
cancillerías, se instituyan de nuevo, y den por oposición, para que primero que los
Sacerdotes salgan a las Doctrinas, hayan cursado en ellas, y al Catedrático le den en cada
un año cuatrocientos ducados en penas de Cámara, donde no tuviere otra situación, y no los
habiendo, en penas de Cámara, se le paguen de nuestra Casa Real. Y Ordenamos, que así se
ejecute.

Ley XLVII. Que a los Doctores y Maestros Catedráticos se les de casa tasada, y por su
dinero cerca de las Escuelas.

Nuestros Virreyes den las órdenes y despachen los mandamientos necesarios, para que a los
Doctores y Maestros Catedráticos de las Universidades de Lima y México se les den
posadas por sus dineros, como fueren tasadas cerca de las Escuelas.

Ley XLVIII. Que el salario de los Preceptores de Gramática no se paguen de la Real


Hacienda.

Mandamos a los Virreyes y Gobernadores, que en caso de nombrar Preceptores de


Gramática para algunos pueblos de sus jurisdicciones, no hagan pagar, ni paguen los
salarios de nuestra Casa Real, y ordenen, que sean moderados, y los Preceptores personas
competentes y naturales de estos nuestros Reinos, y de nuestras Indias, y fe paguen de
tributos de indios vacos, o de otros efectos, que no sean de la Real Hacienda.

Ley XLIX. Que en México haya Cátedra de las Lenguas de la Tierra la cual se de por
oposición a Clérigos, o Religiosos de la Compañía de Jesús, y por ellos Religiosos no se
oponen, nombre el Virrey quien los examine aparte.

Teniendo consideración a lo mucho que conviene, que en la Ciudad de México de la Nueva


España haya Cátedra para que los Doctrineros sepan la lengua de sus Feligreses, y los
puedan mejor influir en nuestra Santa Fe Católica: Ordenamos, que el Virrey funde, e
instituya en la Universidad de la dicha Ciudad una Cátedra, en que se lean y enseñen
públicamente las Lenguas de que los Indios usan más generalmente en aquella Provincia,
haciendo elección de Catedrático en concurso de Opositores, y admita solamente a los
Clérigos y a los Religiosos de la Compañía de Jesús, y no a otra ninguna Religión. Y
porque los Religiosos de la Compañía no pueden oponerse a Cátedras, ni entrar en
concurso, el Virrey nombre persona aparte, que examine a los que quisieren regentarla, y
nombre la Compañía: y para que el Catedrático tenga congrua bastante, le señale
cuatrocientos ducados en cada un año, y nos de aviso de la ejecución.

Ley L. Que no se den grados en el Convento de Santo Domingo de la Ciudad de los Reyes.

Los Virreyes del Perú provean, que en el Monasterio de Santo Domingo de la Ciudad de los
Reyes no se den grados mayores ni menores en ninguna de las facultades, que se leyeren
dentro, o fuera de sus Estudios.

Ley LI. Que los Religiosos de la Compañía de Jesús puedan enseñar en su Colegio de la
Ciudad de los Reyes la lengua Latina y otras, a las horas que se declara, y los Estudiantes
no ganen curso; ni se gradúen en sus Estudios.

Es nuestra merced y voluntad que los Religiosos de la Compañía de Jesús puedan leer
libremente en su Colegio de la Ciudad de los Reyes de el Perú a todas horas Gramática,
Retórica, y la Lengua de los Indios, y las demás lenguas que quisieren. Y asimismo puedan
leer las demás facultades a las horas que en la Universidad se leen las que vulgarmente se
llaman Catedrillas, como no lean las mismas materias, y a las horas que se leen las Cátedras
de propiedad, no puedan leer, ni lean facultad alguna más que solamente las de lenguas. Y
declaramos, que también son Cátedras de propiedad las de Artes, que se leen en la
Universidad por las mañanas, para que en ellas puedan cursar los Estudiantes, y que estos
cursos basten para poderse graduar, haciendo los actos, que se disponen por los Estatutos, y
que para graduarse en Teología han de acudir a las Escuelas a cursar, y hacer los demás
actos necesarios, y para graduarse en Artes han de cursar en Simulas, Lógica y Filosofía las
horas de la mañana, que en las Escuelas se leyeren estas facultades, y que en las de el dicho
Colegio de ninguna ciencia se ha de ganar curso para poderse graduar.

Ley LII. Que no se ganen cursos, ni den grados en el Colegio de la Compañía de Jesús de
México.
Mandamos, que lo proveído sobre que en el Colegio y Escuelas de la Compañía de Jesús de
Lima no se gane curso, ni gradúe, se entienda y guarde en el Colegio de la Ciudad de
México de la Nueva España, y que en él no se den grados ningunos.

Ley LIII. Que los Religiosos de Santo Domingo en Filipinas puedan leer Gramática, Artes
y Teología.

Con licencia de el Ordinario y Gobernador de las Islas Filipinas, y Acuerdo de nuestra Real
Audiencia de ellas, los Religiosos de la Orden de Santo Domingo en la Ciudad de Manila
fundaron un Colegio, donde se lea Gramática, Artes, y Teología, en que pusieron dos
Religiosos de cada facultad, y veinte Colegiales Seglares, de que ha resultado y resulta
grande provecho a la juventud, predicación del Santo Evangelio, y enseñanza de los hijos
de vecinos: Mandamos, que por ahora, y entretanto que no ordenaremos otra cosa, usen los
dichos Religiosos de la licencia que el Gobernador les dio para fundar el Colegio, y leer en
él las dichas facultades, y que esto sea y se entienda sin derogar, ni perjudicar a lo que está
ordenado acerca de semejantes fundaciones para que no se hagan, ni comiencen, sin
expresa licencia nuestra, lo cual se ha de guardar en todas nuestras Indias sin excepción
alguna.

Ley LIV. Que la Cátedra de Latinidad de Santiago de Chile se funde en el Convento de


Santo Domingo, y se paguen de Almojarifazgos.

Porque está mandado, que en la Ciudad de Santiago de el Reino de Chile se funde una
Cátedra de Gramática, para que la juventud de él pueda aprender Latinidad, y al que la
leyere se le den en cada un año de nuestra Real Casa cuatrocientos y cincuenta pesos de
oro, y no se puso en ejecución por falta de Preceptor, y han ofrecido los Religiosos de
Santo Domingo de aquella Provincia, que en el Convento de su Orden habrá siempre gratis
lección de Artes, Filosofía, y casos de conciencia, y nos suplicaron, que atento a su
necesidad, fundaremos, e instituiremos la dicha Cátedra de Gramática en el dicho
Convento, porque en él habría siempre Preceptor muy suficiente, que la lea, y se les pagase
el salario de los derechos de Almojarifazgo: Mandamos al Gobernador de la Provincia de
Chile, que no estando proveída esta Cátedra en alguna persona, provea, que se instituya en
el Convenio de Santo Domingo, por el tiempo que fuere nuestra voluntad, y los Oficiales de
la Real Hacienda paguen el salario de ella señaladamente de lo procedido de
Almojarifazgos.

Ley LV. Que los Religiosos de Santo Domingo de Quito lean en su Convenio la Cátedra de
la Lengua.

Habiéndose mandado instituir y fundar Cátedras de la Lengua de los Indios en las Ciudades
principales de las Indias, se ordenó, que en la de San Francisco de Quito la tuviesen los
Religiosos de la Orden de Santo Domingo, los cuales por orden de nuestra Real Audiencia
la leyeron en su Convento, y después la hizo trasladar a la Iglesia Mayor, y de ello no
resultó ningún buen efecto, antes muchos inconvenientes: Declaramos, y es nuestra
voluntad que entretanto que la Orden de Santo Domingo tuviere merced nuestra, para que
los Religiosos de ella lean la dicha Cátedra, la tengan en su Convento como antes estaba. Y
mandamos a nuestra Real Audiencia, que contra ello no vaya, ni pase en ninguna forma.
Ley LVI. Que los Prelados no den Orden Sacerdotal sin aprobación de el Catedrático de la
Lengua.

Rogamos y encargamos a los Arzobispos y Obispos de las Indias, y a los Cabildos


Sedevacantes, y a los demás Prelados de las Religiones, que no ordenen de Sacerdotes, ni
den licencia para ello a ningún Clérigo, o Religioso, que no sepa la Lengua General de los
Indios de su Provincia, y lleve fe, y certificación de el Catedrático, que leyere la Cátedra de
que ha cursado en lo que se debe enseñar en ella, por lo menos un curso entero, aunque el
Ordenante tenga habilidad, y suficiencia en la facultad, que la Santa Iglesia y Sagrados
Cánones mandan.

Ley LVII. Sobre diferentes puntos, que se han ofrecido acerca del gobierno de la
Universidad de Lima.

Habiéndose tenido noticia en nuestro Real Consejo de Indias por diferentes cartas e
informes de algunos puntos tocantes a la reformación de la Universidad de Lima, fuimos
servido de ordenar al Conde de Castellar, Virrey del Perú, que formase una Junta de tres
Oidores de aquella Audiencia, los que eligiese, y de el Rector, Maestre-Escuela, y un
Doctor, los cuales viesen lo propuesto en los papeles referidos, y con noticia de todo, y de
lo dispuesto por las Constituciones de la Universidad, proveyese del remedio conveniente
en cada uno, y diese cuenta de lo que ejecutase, en cuyo cumplimiento formó esta junta; y
hallándose presente y conferido sobre cada uno de los puntos se acordó lo que pareció
convenir; y visto por Nos, lo aprobamos y confirmamos con las declaraciones y
limitaciones contenidas en esta nuestra ley.
En cuanto al primero, sobre que el Rector de la Universidad se elija por dos años, y no
pueda haber reelección: Pareció a la Junta, que se observe lo dispuesto por la Constitución
quinta de la universidad, Cédulas nuestras, y costumbre, que ha habido desde su elección,
de elegirle por otro, como se ha observado, siendo el Rector a propósito para el cargo.
En cuanto al segundo, de que la elección de Rector no sea por alternativa, y puedan ser
elegidos Clérigos y Seculares, Doctores graduados en Teología, Cánones, y Leyes,
excluyendo a los Médicos, Artistas y Religiosos, pareció que se guarde la Constitución
sexta, y costumbre observada en esta razón para excluir a los graduados en Medicina y
Artes, cuando la ley de la Universidad admite a todos absolutamente, y se guarde al estilo
de la Universidad de no hacer elección en los Regulares.
Y en cuento el tercero, sobre que la Universidad no concurra a los Claustros, porque siendo
más de ciento los Doctores y Maestros, se causa confusión, y bastaría hacerse con el
Rector, Vicerector, Consiliario Mayor y Catedráticos, en que pareció, que los Claustros
tocantes a las cuentas, que deben dar los Rectores y Mayordomos de la Universidad, que
requieren conferencia y determinación judicial, se formasen del Rector, Consiliarios y
Catedráticos Juristas, hasta el número de diez, y si faltasen Catedráticos, supliesen este
número los Doctores más antiguos, y en este Claustro se feneciesen y acabasen las cuentas:
y en las materias gobernativas, y en todo lo demás de libramientos extraordinarios de
cantidad considerable, concurriese todo el Claustro, como hasta ahora, guardándose las
Constituciones y estilo.
En cuanto al cuarto, sobre que los Estudiantes Gramáticos no se admitan a matricular en la
Universidad para las facultades mayores, con solo cédula del Maestro de Retórica,
Religioso de la Compañía de Jesús, y que el Rector y Catedrático de Prima de todas
facultades, los vuelvan a examinar con AA. y RR. y no admitan Mellizos, Zambos, Mulatos
y Cuarterones, con que no los admitirán a Ordenes los Obispos, en que pareció, que se
observase el estilo de la Universidad, reducido a que dos Examinadores Catedráticos
nombrados por el Rector, después de la aprobación del Maestro de Retórica, vuelvan a
examinar a los Estudiantes Gramáticos, y hallándolos suficientes, se admitan con las firmas
del Rector, y ambos Examinadores: y en cuanto a la exclusión de los Mestizos, Zambos,
Mulatos y Cuarterones se observe la Constitución.
Y en cuanto al quinto y sexto, que divide las Cátedras entre el Clero Secular y Religiones,
pareció, que no era conveniente la división, porque impedía la emulación, y pudiera
impedir el ascenso a los más eminentes, y convenía, que se observase la Constitución y
costumbre de la Universidad, de que se admitan todos generalmente a la oposición.
En cuanto al séptimo de que los Religiosos de la Orden de Predicadores se examinen para
las Cátedras, leyendo en la Universidad como los demás Opositores, pareció, que se
observase lo dispuesto por la Ley XXXII de este título y que se den las Cátedras aplicadas a
esta Religión, en cumplimiento de la dicha ley, con que no parece preciso el nuevo examen.
En cuanto al octavo, sobre que se mude la forma observada en el votar las Cátedras, por
excusar sobornos, ruidos, alborotos, escándalos y otros inconvenientes, pareció, que se
debía dar nueva forma a la provisión de Cátedras. La cual vista y considerada por Nos,
ordenamos y mandamos, que se excluya (como queda excluido) el Virrey del Perú de tener
de votar en la provisión de Cátedras, y que se guarde y observe en cuanto a esto lo que está
dispuesto por la Ley XL de este título, en que se dio la forma que se debe observar en las
dos Universidades de Lima y México en la provisión de Cátedras, y no se conceda voto al
Virrey; pero sucediendo el caso de vacar algunas, estando gobernando el Arzobispo las
Provincias del Perú, podrá votar en su provisión, como Arzobispo, y no como Virrey.
Y en cuanto al noveno, sobre que no se hagan incorporaciones, sin que haya precedido el
examen, que disponen las Constituciones para el grado de Licenciado, pareció, que los
graduados en las Universidades de Salamanca, Alcalá, Valladolid y Bolonia, hayan de ser
admitidos a la incorporación sin examen alguno; porque en estas Universidades son
rigurosos los que se hacen; pero las de todas las demás no puedan admitirse sin examen en
la forma observada en la dicha Universidad de Lima para los grados de Licenciado.
Y en cuanto a los diez y once; que miran a que los puntos de el grado de Licenciado sean de
veinticuatro horas, y asistan todos los Catedráticos, que son Examinadores; al mismo
tiempo de tomar los puntos, por excusar los fraudes, que suelen hacerse, y las propinas de
los que no asistieren se acrezcan a los que concurren, pareció, que se guarde lo dispuesto
por las Constituciones, y lo observado por la costumbre, porque en los exámenes referidos
no es inconveniente que las lecciones sean de noche, respecto de que en ellas no suceden
disturbios, ni alborotos, y que se alguna vez acontecen, nacen de las oposiciones, y de los
que concurren con los Opositores, y por la misma Constitución se halla prevenido, que a los
puntos asistan los Catedráticos, que deben argumentar en el examen, en que se procede con
rigor y observancia de las Constituciones, y legalidad, y no hay causa para introducir
novedades.
Y en cuanto a que se acrezcan las propinas a los interferentes, se observe la Constitución,
añadiendo, que el Catedrático y Examinador, que no asistiere, pierda la propina
correspondiente al acto, en que no interviene: la cual se aplique a la Casa de la Universidad,
sino es que conste de legítimo impedimento, enfermedad, u otro grave, por certificación
jurada de Médico, o testigos examinados con juramento; y si se entregare la propina al que
faltó sin estas circunstancias, se le hará cargo de ella en la cuenta, que hubiere de dar al fin
del oficio.
En lo que toca al punto once, sobre la aplicación de las propinas de los que no asistieren,
aprobamos lo acordado por la dicha Junta, con calidad de que la propina de el Doctor, u
otro, que no asistiere, no se aplique a la Casa de la Universidad, y se vuelva al interesado.
Y en cuanto al doce, sobre que los Examinadores no excedan del número diez y seis, que se
componga de los Catedráticos, Ministros de la Real Audiencia, Doctores, y en su defecto,
de los más antiguos; pareció; que se guarde lo dispuesto por las Constituciones antiguas y
modernas; y en su conformidad se admitan por Supernumerarios los dichos Ministros, que
fueren graduados para mayor autoridad del acto.
Y en cuanto al trece y catorce, sobre que no se den los puntos para las Cátedras de Prima a
las doce de la noche, ni se permitan juntas, ni acompañamientos a los Opositores,
inhabilitando al que los tuviere; pareció, que los puntos se diesen por la mañana, como se
observa, guardando la costumbre. Y porque nuestra voluntad es, que el dicho Acuerdo se
guarde, cumpla y ejecute, conforme se limita y declara por esta nuestra ley, ordenamos y
mandamos a los Virreyes y Audiencia de Lima, y rogamos y encargamos al Arzobispo, que
para su puntual observancia den las órdenes convenientes, y no permitan que se
contravenga con ningún pretexto; y así se guarde, sin embargo de otra cualquier Ley, o
Constitución:
• Que los Clérigos y Religiosos no sean admitidos a Doctrinas sin saber la lengua de los
Indios, que han de administrar, Ley XXX título VI de este libro.
• Que los Inquisidores no den mandamientos contra las Universidades, sobre grados;
contra Estatutos, ni se entrometan en materias de gobierno; Ley XXIX número XXI
título XIX de este libro.
• Que los Virreyes informen del estado de las Universidades y Colegios, Ley IV título
XIV libro III.
• Que los Catedráticos de Prima de Medicina de las Universidades de México y Lima
sean Protomédicos, Ley III título VI libro V.

TITULO XXIII:
De los colegios y seminarios.

Ley I. Que se funden Colegios Seminarios, conforme al Santo Concilio de Trento, y los
Virreyes, Presidentes y Gobernantes los favorezcan y den el auxilio necesario.

Encargamos a los Arzobispos y obispos de nuestras Indias, que funden, sustenten, y


conserven los Colegios Seminarios, que dispone el Santo Concilio de Trento, Y mandamos
a los Virreyes, Presidentes y Gobernadores, que tengan muy especial cuidado de favorecer,
y dar el auxilio necesario, para que así se ejecute, dejando el gobierno y administración a
los Prelados; y cuando se ofrezca que advertirles, lo hagan, y nos avise, para que se provea,
y de la orden, que pareciere conveniente.

Ley II. Que en los Seminarios se pongan las Armas Reales y puedan poner las de los
Prelados.
En los Colegios Seminarios se pongan nuestras Armas Reales, ocupando el lugar más
preeminente, en reconocimiento del Patronazgo Universal, que por derecho y autoridad.
Apostólica nos pertenece en todo el Estado de las Indias; y permitimos a los Prelados, que
puedan poner las suyas en lugar inferior.

Ley III. Que para los Seminarios sean preferidos los que se declaran y que personas no se
han de admitir.

En la provisión de sujetos, que han de hacer los Prelados para Colegiales de los Seminarios,
prefieran en igualdad de méritos a los hijos y descendientes de los primeros descubridores,
pacificadores y pobladores de aquellas Provincias, gente honrada, de buenas esperanzas y
respetos, y no sean admitidos los hijos de oficiales mecánicos, y los que no tuvieren las
calidades necesarias para Orden Sacerdotal y provisión de Doctrinas y Beneficios.

Ley IV. Que de los Seminarios asistan cada día cuatro Colegiales a los Divinos Oficios, y
en las Fiestas seis.

Porque las principales rentas de que se sustentan los Seminarios, están situadas en las de las
Iglesias Catedrales, encargamos a los Arzobispos y Obispos, que ordenen y hagan, que de
los Seminarios asistan a las Iglesias todos los días cuatro Colegiales, y en las Fiestas
solemnes seis, para que sirvan en ellas a los Divinos Oficios, no obstante que algunos
Seminarios estén a cargo y administración de cualquier Religioso.

Ley V. Que para nombrar personas en los Seminarios, y visitarlos el Prelado, se acompañe
conforme al Santo Concilio de Trento.

Por el Santo Concilio está dispuesto, que cuando los Obispos nombraren sujetos, para que
sean recibidos en los Colegios Seminarios; y cuando los visiten, se acompañen con dos
Capitulares, que el Cabildo nombrare: Mandamos a los Prelados de nuestras Indias, que así
lo guarden, cumplan y ejecuten; y los Virreyes, Presidentes y Gobernadores dejen la
nominación y elección de los Colegiales y personas, que tengan a cargo los Colegios, a
disposición de los Prelados.

Ley VI. Que los Virreyes y Prelados presenten y propongan para las Doctrinas a Colegiales
de los Seminarios, y otros Colegios, y en iguales méritos sean preferidos.

Los Virreyes, Presidentes y Gobernadores presenten para las Doctrinas a Colegiales de los
Seminarios, y otros Colegios de sus distritos, teniendo las partes de habilidad y suficiencia,
que disponen las leyes de nuestro Patronazgo Real, y en igualdad de calidades los prefieran
a otros Opositores, que no hubieren sido Colegiales. Y rogamos y encargamos a los
Prelados Eclesiásticos, que en las proposiciones de sujetos hagan lo mismo.

Ley VII. Que los tres por ciento, que se rebajan a los Religiosos Doctrineros de la Orden de
San Francisco para les Seminarios, sean en dinero, y no en especie.

Mandamos a nuestros Oficiales Reales del Perú, que rebajen de los estipendios con que
acuden a los Religiosos Doctrineros de la Orden de San Francisco los tres por ciento, que
conforme a la Ley XXXI título XV de este libro han de haber los Seminarios, en dinero, y
no en especie, y con la restante cantidad acudan a los Religiosos.

Ley VIII. Que en el Colegio de San Martín de Lima asistan dos Colegiales de cada
Seminario, que fundaren los Prelados, y graduados de Bachiller, se vuelvan, y entren otros.

Ordenamos y tenemos por bien, que de cada uno de todos los Colegios Seminarios, que
conforme a la disposición del Santo Concilio de Trento han fundado y fundaren los
Arzobispos y Obispos de las Iglesias Metropolitanas y Catedrales de las Provincias del Perú
y Tierrafirme, desde Cartagena a Chile, y Río de la Plata, nombren los Prelados, o sus
Cabildos en Sedevacante, dos Colegiales, a los cuales envíen al Colegio de San Martín de
la Ciudad de los Reyes, para que en él estudien hasta recibir el grado de Bachiller en la
Universidad de aquella Ciudad, y habiéndole obtenido, los muden y puedan nombrar los
prelados, o Cabildos Sedevacantes otros dos en su lugar, con calidad de que nunca han de
concurrir más de dos Colegiales de un Seminario, y se sustenten de las rentas de los
Seminarios de donde fueren enviados, y de esta suerte gocen de educación y doctrina en los
Estudios de las ciencias. Y mandamos al Rector, y Colegiales del Colegio de San Martín,
que reciban a los que así fueren enviados, sin ponerles impedimento.

Ley IX. Que pone las calidades, que ha de tener el Rector del Colegio de San Felipe de
Lima.

Mandamos, que para ser Rectores del Colegio de San Felipe y San Marcos de la Ciudad de
los Reyes; los Colegiados de él hayan de ser Colegiales actuales: y que lo hayan sido dos
años: y teniendo veintitrés de edad: estén graduados de Bachiller, o Licenciados en
Teología, o Derechos Canónico, o Civil: la elección sea hecha por el Gobierno: y dure el
oficio un año, que ha de comenzar desde el día de San Felipe.

Ley X. Que en cuanto a ser los Colegiales de San Martín de Lima Teólogos, o Juristas, se
cumpla la intención del Rey, y guarde la Constitución.

A Nos se ha hecho relación, que habiéndose acostumbrado desde la fundación del Colegio
de San Martín de la Ciudad de los Reyes, que todos los Colegios profesen la Sagrada
Teología, por lo mucho que importa que los naturales de aquellas Provincias la estudien,
para que se ocupen en la extirpación de las idolatrías, y se ha introducido admitir en él
Legistas, y Canonistas: Mandamos a nuestros Virreyes del Perú, que cumplan con nuestra
intención en lo que toca a la presentación de estas Becas, en la forma que las acostumbran
proveer, guardando y haciendo guardar la Constitución de el Colegio.

Ley XI. Que sean favorecidos los Colegios fundados para criar hijos de Caciques, y se
funden otros en las Ciudades principales.

Para que los hijos de Caciques, que han de gobernar a los Indios, sean desde niños
instruidos en nuestra Santa Fe Católica, se fundaron por nuestro orden algunos Colegios en
las Provincias del Perú, dotados con renta, que para este efecto se consignó. Y por lo que
importa, que sean ayudados y favorecidos, mandamos a nuestros Virreyes, que los tengan
por muy encomendados, y procuren su conservación y aumento, y en las Ciudades
principales del Perú y Nueva España se funden otros, donde sean llevados los hijos de
Caciques de pequeña edad, y encargados a personas Religiosas y diligentes, que los
enseñen, y Doctrinen en Cristiandad, buenas costumbres, policía y Lengua Castellana, y se
les consigne renta competente a su crianza y educación.

Ley XII. Que el Colegio y Hospital de Mechoacán sean del Patronazgo Real.

Declaramos, que pertenecen a nuestro Patronazgo Real el Colegio de Españoles, Mestizos e


Indios, para que estudien Gramática, y el Hospital de pobres enfermos de la Ciudad de
Mechoacán de la Nueva España, y aceptamos la cesión, que en nuestra Real Corona hizo el
Fundador, porque los Estudiantes y pobres sean más favorecidos, y administrados.

Ley XIII. Que el Colegio de San Pedro y San Pablo de México sea a cargo de la Compañía
de Jesús, y de el Patronazgo Real.

Encomendamos y encargamos el gobierno y administración del Colegio de San Pedro, y


San Pablo de México a la Compañía de Jesús y sus Religiosos, reservando para Nos, y los
Reyes nuestros sucesores el Patronazgo de él, y es nuestra voluntad, que los Virreyes de la
Nueva España presenten los Colegiales, conforme a nuestro Patronazgo Real, para que
estudien Artes y Teología.

Ley XIV. Que se guarden las Ordenanzas del Colegio de los niños pobres de México, y sea
bien administrado.

En la Ciudad de México está fundado un Colegio, donde se recogen muchos niños pobres
Mestizos, y se les enseña la Doctrina Cristiana y buenas costumbres, procurando, que no se
críen viciosos y vagabundos. Y porque le hemos hecho algunas mercedes, y es nuestra
voluntad, que esta obra se continúe y aumente cuanto fuere posible, mandamos a los
Virreyes de la Nueva España, que hagan guardar las Ordenanzas dadas a este Colegio el
año de mil quinientos cincuenta y siete, y tengan particular cuidado de avisarnos el estado
en que se halla, y si los que en él concurren aprovechan en buena doctrina y costumbres, y
reconociendo alguna falta, o descuido, lo remedien y hagan recoger todos cuantos niños
Mestizos hubiere, y ordenen se tome la cuenta a los que la debieren dar de lo que se ha
distribuido, y con que órdenes, y cobren los alcances, y lo gasten en lo más necesario y
provechoso al Colegio.

Ley XV. Que el Colegio de San Antonio del Cuzco preceda al de San Bernardo.

Declaramos y mandamos, que en todos los actos públicos y particulares, y otras


cualesquiere concurrencias debe preceder y preceda el Colegio seminario de San Antonio
de la Ciudad de Cuzco al Colegio de San Bernardo, que en aquella Ciudad por orden y
provisión del gobierno se cometió y encargó a los Padres de la Compañía de Jesús. Y
rogamos y encargamos a los Religiosos, que no dejen de admitir a las lecciones y estudio
de su Colegio por esta causa a los del Seminario de San Antonio.
• Que los Virreyes visiten cada año el Colegio de las niñas de México, y le favorezcan en
la forma que se ordena, Ley XVIII título III de este libro.
• Que los Religiosos Doctrineros contribuyan para los Seminarios, Ley XXXV título XV
de este libro.
- Decreto orgánico elaborado por Juan María Gutiérrez, Pedro Goyena y José María
Moreno.

Departamento de Gobierno.
Buenos Aires, marzo 26 de 1874

DECRETO.

No estando aún dictadas las leyes orgánicas y reglamentarias de la instrucción secundaria y


superior; y siendo absolutamente necesario colocar a los establecimientos que hasta ahora
dispensan exclusivamente aquellas enseñanzas, en condiciones de poder llenar los objetos y
fines que la Constitución le asigna, el P.E. sin perjuicio de las disposiciones que contenga la
ley y de acuerdo con las leyes establecidas en el art. 207º de la Constitución acuerda y
decreta:

Título I.
Del Consejo Superior

Art. 1º. El actual Rector de la Universidad continuará por cuatro años en el ejercicio de su
cargo con arreglo a las disposiciones del presente decreto.

Art. 2º. El consejo superior de la Universidad se compone del Rector, de los decanos y de
dos delegados de cada una de las facultades,

Art. 3º. Corresponde al consejo superior:

1. Dictar los reglamentos que exijan el orden y disciplina de todos los


establecimientos de educación dependientes de la Universidad.
2. Vigilar el cumplimiento de los planes generales o parciales de estudio, que
adoptaren las facultades para la enseñanza superior o secundaria de su resorte.
3. Ejercer la jurisdicción superior, policial y disciplinaria que las leyes y
reglamentos le acuerdan, estableciendo las penas correccionales que crea
necesarias para reprimir las faltas que pudiesen cometer los empleados o
alumnos de la Universidad o de los Establecimientos de educación secundaria.
4. Adoptar las medidas de urgente necesidad relativas a la moralidad o higiene que
sean requeridos en la Universidad o establecimientos de su dependencia y dictar
todas las resoluciones que sean necesarias en los casos no previstos por las leyes
o reglamentos vigentes

5. Decidir en última instancia todas las cuestiones contenciosas resueltas en 1ª


Instancia por una de las facultades relativas al régimen y orden de los estudios.

6. Suspender y destituir a los Profesores y Empleados dependientes de la


Universidad conforme con lo dispuesto por las leyes y Reglamentos vigentes.
7. Dirigir y reglamentar la administración de los fondos de la Universidad y
Establecimientos de su dependencia.

8. Proponer la creación de nuevas Facultades y cátedras, reglamentar la expedición


de matrículas y diplomas y fijar los derechos que puedan cobrarse por ellos.

9. Examinar los presupuestos de gastos que cada facultad deberá formar y


remitirlos al P.E. con su aprobación; para que este los someta a la sanción
legislativa.

10. Examinar las cuentas que anualmente deberá rendir cada Facultad de la
administración de los fondos que le corresponden y remitirlos con su aprobación
al P.E. a los efectos que determine la ley.

11. Nombrar un Secretario general y los empleados que sean necesarios para el
servicio de la Secretaría del Consejo.

12. Mantener relaciones con las corporaciones científicas extranjeras, proponiendo


el canje de publicaciones.

13. Aceptar las herencias, donaciones y legados que se dejen a la Universidad o a


cualquiera de las facultades.

14. Acordar la compra y venta de bienes muebles y raíces que se adquieran o


enajenen por el interés de la Universidad.

Art. 3º. Bis. El Rector es el Presidente del Consejo en cuyas deliberaciones tendrá voto
decidiendo además en caso de empate.

Art. 4º. El Rector es el representante legal de la Universidad y a él corresponde entenderse


con las autoridades, corporaciones o empleados en la República y en el extranjero.

Art. 5º. Además de las facultades que el reglamento del Consejo le confieran, corresponde
al Rector vigilar por el cumplimiento de todas las disposiciones sobre instrucción
secundaria y superior, dirigiendo las comunicaciones y entablando las gestiones que creyera
oportunas.

TITULO II
De las facultades.

Art. 6º. La Universidad se compone de las siguientes facultades:

Humanidades y Filosofía.
Ciencias Médicas.
Derecho y Ciencias Sociales.
Matemáticas.
Ciencias Físico Naturales

Art. 7º. Cada facultad se compone de miembros académicos y de miembros honorarios,


presidida cada una, por su respectivo decano.

Art. 8º. Los miembros académicos hasta el número de nueve en cada facultad serán
nombrados por primera vez por el P.E. En lo sucesivo cada facultad nombrará los
miembros académicos y honorarios en la forma que determinen las leyes y reglamentos.

Art. 9º. El empleo de profesor en cualquiera de los ramos científicos no induce la calidad de
miembro de la facultad respectiva.

Art. 10º. El número de miembros académicos de cada facultad no debe exceder de quince,
pudiendo ser indefinido el número de miembros honorarios.

Art. 11º. Para ser miembro académico de cada una de las facultades se requiere: 1) Título
académico científico expedido por una universidad o corporación científica que acredite
haber completado los estudios correspondientes a la facultad respectiva. 2) Haber rendido
las pruebas científicas que las facultades determinarán en sus Reglamentos. Los miembros
Académicos que fijen su residencia fuera de la provincia o que se ausenten de ella por más
de seis meses serán considerados como miembros honorarios, mientras dure su ausencia de
la provincia.

Art. 12º. Cada facultad podrá funcionar en una casa especial en la cual se colocarán las
oficinas, clases y útiles de su dependencia.

Art. 13º. Cada facultad será presidida por su respectivo Decano y tendrá para el servicio de
los asuntos de su recorte un Secretario y uno o más Oficiales de Secretaría, según fuese
necesario.

Art. 14º. Todos los miembros así Académicos como honorarios de cada Facultad, podrán
concurrir a sus deliberaciones, pero sólo tendrán voto los miembros Académicos.

Art. 15º. Corresponde a las Facultades:


1. Elegir a sus miembros y empleados.
2. Designar cada año de su seno las personas que deben componer las comisiones
examinadoras, pudiendo formar parte de estas comisiones los miembros
honorarios residentes en la provincia.
3. Adoptar los planes de estudio y formar los programas en los ramos científicos de
su competencia.
4. Nombrar de entre sus miembros académicos los dos delegados que deben
integrar el Consejo superior universitario.
5. Nombrar los profesores titulares e interinos.
6. Determinar las reglas necesarias a la recepción de exámenes y pruebas.
7. Fijar las condiciones de admisibilidad de los alumnos.
8. Administrar los fondos que le corresponden, rindiendo cuenta al Consejo
superior.
9. Presentar al Consejo el presupuesto anual de gastos.
10. Proponer al mismo toda medida conducente a la mejora de los estudios o
régimen de las Facultades que no estén comprendidas en sus atribuciones
privativas.
11. Decidir en 1ª instancia toda cuestión que se refleja al orden de los estudios,
concesión de matrículas, administración de fondos y cumplimiento de sus
deberes por parte de los profesores. Toda cuestión que se refiera al régimen
interno y disciplinario de las clases o establecimientos dependientes de la
universidad, será dirimida en 1ª instancia por el Rector o el Director del
establecimiento con apelación para ante el Consejo superior universitario en la
forma que determinen los respectivos reglamentos.
12. Nombrar comisiones que vigilen la marcha de los establecimientos públicos de
su dependencia.
13. Examinar los textos y trabajos científicos que se presenten y expedir los
informes que les pidan el P.E., el Consejo Superior o las demás autoridades del
país.
14. Presentar al Consejo Superior por medio del Decano una memoria anual sobre
los trabajos de la Facultad, sobre el estado de los ramos de su asignatura y sobre
las reformas que deben introducirse.
15. Formar los reglamentos necesarios para el régimen interno de la Facultad, la
administración de los fondos, la rendición de pruebas y exámenes y
cumplimiento de los deberes y funciones de los empleados de su dependencia.
16. Cada Facultad establecerá además las condiciones y pruebas científicas que
deban exigirse a los que hayan de ser nombrados miembros académicos u
honorarios.

TITULO III
De las elecciones de los cargos universitarios

Art. 17º. El empleo de Rector de la Universidad y el Decano de cada Facultad durará cuatro
años pudiendo ser reelegidos indefinidamente.

Art. 18º. La elección de Rector se hará en reunión de todas las facultades y por mayoría de
la asistencia o a lo menos de la mitad mas uno de los miembros académicos de todas las
facultades.

Art. 19º. La elección de los Decanos se hará por la Facultad respectiva en la misma forma
que la del Rector.

Art. 20º. La elección del Secretario general y de los Secretarios de las facultades se hará en
la misma forma, por el Consejo Superior y por cada Facultad.

Art. 21º. El reglamento interno del Consejo Universitario y cada Facultad determinará la
forma de la elección de los demás empleados.

Art. 22º. En falta o ausencia del Rector desempeñará sus funciones el Decano más antiguo
o el de mayor edad si no hubiera preferencia por razón de antigüedad.
El Decano presidirá también el Consejo cuando se trate de un asunto decidido por el Rector
en 1ª instancia.
En falta o ausencia del Decano desempeñará sus funciones el académico más antiguo o en
su defecto el de mayor edad.

TITULO IV
Disposiciones generales

Art. 23º. Una vez constituido el Consejo Superior, procederá a formar el reglamento
interno y el correspondiente al orden y disciplina de los establecimientos dependientes de la
Universidad.

Art. 24º. Cada una de las Facultades procederá del mismo modo a dictar su reglamento
interno y los demás que sean necesarios para llenar cumplidamente las funciones que la
Constitución y este decreto le atribuyen, procediendo igualmente a formar su respectivo
presupuesto de sueldos y gastos para ser sometido en oportunidad de la legislatura de la
Provincia.

Art. 25º. Cada una de las Facultades existentes no podrán tener mas empleados que los
autorizados por la Ley del presupuesto vigente

Art. 26º. Los profesores y demás empleados de la Universidad continuarán en el


desempeño de sus cargos mientras la legislatura no apruebe este decreto o dicta la ley
orgánica de la instrucción secundaria o superior.

Art. 27º. Sométase a la aprobación de la Honorable Legislatura este decreto, con el mensaje
correspondiente, publíquese y dese al registro oficial.

ACOSTA. AMANCIO ALCORTA. LEOPOLDO BASAVILBASO


LEY 1.597. ESTATUTOS DE LAS UNIVERSIDADES NACIONALES

Art. 1º. El Poder Ejecutivo ordenará que los Consejos Superiores de las Universidades de
Córdoba y de Buenos Aires, dicten sus estatutos en cada una de estas Universidades,
subordinándose a las reglas siguientes:

1. La Universidad se compondrá de un rector, elegido por la Asamblea


Universitaria, el cual durará cuatro años, pudiendo ser reelecto; de un Consejo
Superior y de las Facultades que actualmente funcionan, o que fuesen creadas
por leyes posteriores. La Asamblea Universitaria es formada por los miembros
de todas las Facultades.
2. El Rector es el representante de la Universidad; preside las sesiones de las
Asambleas y del Consejo; y ejecuta sus resoluciones. Corresponde asimismo al
Rector el puesto de honor en todos aquellos actos de solemnidad que las
Facultades celebren.
3. El Consejo Superior se compone del Rector, de los decanos de las Facultades y
de dos delegados que éstas nombren. Resuelve en la última instancia las
cuestiones contenciosas que hayan fallado las facultades, fija los derechos
universitarios con la aprobación del Ministerio de Instrucción Pública, y dicta
los reglamentos que sean convenientes y necesarios para el régimen común de
los estudios y disciplina general de los establecimientos universitarios.
4. Cada Facultad ejercerá la jurisdicción política y disciplinaria dentro de sus
institutos respectivos, proyectará los planes de estudios y dará los certificados de
exámenes en virtud de los cuales la Universidad expedirá exclusivamente los
diplomas de sus respectivas profesiones científicas, aprobará o reformará los
programas de estudios presentados por los profesores, dispondrá de los fondos
universitarios que le hayan sido designados para sus gastos, rindiendo una
cuenta anual al Consejo Superior, y fijará las condiciones de admisibilidad para
los estudiantes que ingresen en sus aulas.
5. En la composición de las Facultades entrará por lo menos una tercera parte de
los profesores que dirigen sus aulas correspondiendo a la facultad respectiva el
nombramiento de todos los miembros titulares. Todas las Facultades tendrán un
número igual de miembros que no podrá exceder de quince.
6. Las cátedras vacantes serán llenadas en la forma siguiente: la Facultad
respectiva votará una terna de candidatos que será pasada al Consejo Superior, y
si este la aprobase será elevada al Poder Ejecutivo quien designara de ella el
profesor que deba ocupar la cátedra.
7. Los derechos universitarios que se perciban, constituirán el “fondo
universitario”, con excepción de la parte que el Consejo Superior asigne, con la
aprobación del Ministerio para sus gastos y para los de las Facultades.
Anualmente se dará cuenta al Congreso de la existencia e inversión de los
fondos.

Art. 2º. Los Estatutos dictados por los Consejos Superiores con arreglo a las bases
anteriores serán sometidos a la aprobación del Poder Ejecutivo.
Art. 3º. La designación de los profesores se hará por el Poder Ejecutivo, a propuesta de las
Facultades respectivas.

Art. 4º. Comuníquese, etcétera.

25 de junio de 1885.
LEY 4.699 (560).

Universidad Nacional de La Plata: aprobación del convenio con la provincia de


Buenos Aires para su establecimiento (R. N. 1.905, t. III, 2º, p. 2535).

Art. 1º – Apruébase el convenio celebrado entre el Poder Ejecutivo de la Nación y el de la


provincia de Buenos Aires, con fecha 12 de agosto de 1905, sobre establecimiento de una
universidad nacional en la ciudad de La Plata, con la supresión de las palabras “los cuales
tendrán validez en toda la República”, en el art. 20.

Art. 2º – Autorizase al Poder Ejecutivo para hacer de rentas generales y con imputación a
esta ley, los gastos que requiera la instalación y funcionamiento de la referida universidad,
mientras ella no sea incorporada al presupuesto general de la Nación.

Art. 3º – A los efectos de la ley de montepío civil, los empleados de la provincia de Buenos
Aires que, con motivo del convenio, pasasen a depender de la Nación, serán considerados
empleados nacionales, a contar de la fecha de sus respectivos nombramientos,
computándose sus servicios prestados a materia vigentes en ella.

Art. 4º – Comuníquese, etc.

Sanción: 19 de setiembre de 1905.


Promulgación: 25 de setiembre de 1905.
LEY N° 13.031 - Establece un nuevo régimen universitario (Bol. of., 4/11/947).

TITULO I

De la universidades

CAPITULO I

De las funciones, tareas, organización en general y capacidad jurídica de las


universidades

Art. 1º - (Objetivos). Las universidades tienen a su cargo la enseñanza en el grado


superior, la formación de la juventud para la vida. para el cultivo de las ciencias y para el
ejercicio de las profesiones liberales, debiendo actuar con sentido social en la difusión de la
cultura para el prestigio y engrandecimiento de la Nación. Cuentan para ello con la
autonomía técnica, docente y científica que se les confiere por la presente ley y con el pleno
ejercicio de su personalidad jurídica.

Art. 2º - (Funciones). Son funciones de las universidades de las cuales no podrán


apartarse:
1ª Afirmar y desarrollar una conciencia nacional histórica, orientando hacia esa
finalidad la tarea de profesores y alumnos;
2ª Organizar la investigación científica y preparar. para la ulterior dedicación a ella, a
los que tengan vocación de investigadores, capaces por su aplicación, inventiva, sagacidad
y penetración, de hacer progresar las ciencias, las letras y las artes;
3ª Acumular, elaborar y difundir el saber y toda forma de cultura, en especial la de
carácter autóctono, para la conformación espiritual del pueblo;
4ª Estimar el estudio y desarrollo de la ciencia aplicada y las creaciones técnicas,
adaptándolas a las necesidades regionales;
5ª Preparar para el ejercicio de las profesiones liberales, de acuerdo con las necesidades
de la Nación, los adelantos técnicos mundiales y las transformaciones sociales, otorgando
los títulos habilitantes con carácter exclusivo;
6ª Crear un cuerpo docente dedicado exclusivamente a la vida científica y a la
enseñanza universitaria, de suerte que cada escuela y cada facultad tengan la obligación de
formar sus propios profesores e investigadores especializados;
7ª Ofrecer una educación informativa y formativa, disciplinando el esfuerzo
autodidáctico, el espíritu indagativo y las cualidades que habilitan para actuar con
idoneidad, patriotismo y dignidad moral, en la profesión y en la vida pública y privada;
8ª Correlacionar las formas del saber propendiendo a la cultura general de la juventud
como base o complemento de la especial o técnica;
9ª Propiciar y establecer la enseñanza práctica y la docencia libre, paralela a los cursos
regulares, la que podrá extenderse a disciplinas no previstas en los planes de estudio. Estos
cursos comprenderán además de las asignaturas obligatorias, otras optativas o libres;
10a. Establecer una permanente vinculación entre ellas y con otras instituciones
culturales argentinas y extranjeras;
11a. Elaborar, conforme con las exigencias científicas y sociales, los planes de estudio
de las respectivas facultades, escuelas, y cursos especiales, en lo universitario y en los de
especialización, procurando que exista la mayor unidad y coordinación entre los planes de
estudios similares, sin perjuicio de la diversificación impuesta por las características
regionales;
12a. Crear y sostener institutos de investigación, cursos de perfeccionamiento o de
especialización, para profundizar el estudio o aprovechamiento de las riquezas naturales de
la zona del país donde tuviera su centro de acción cada universidad;
13a. Reunir antecedentes y proponer soluciones para los diversos problemas económico
sociales de la Nación;
14a. Divulgar las investigaciones científicas, fueren o no sus autores profesores
universitarios y aunque no hubieran sido realizadas en instituciones oficiales;
15a. Fomentar el desarrollo de publicaciones y actividades dedicadas al examen de
cuestiones científicas, sociales, jurídicas, económicas, literarias y artísticas en general.

Art. 3°- (Personería jurídica). Las universidades poseen plena capacidad jurídica para
adquirir, vender y administrar toda clase de bienes, así como para demandar y comparecer
en juicio. Su representación compete al rector, quien podrá delegarla y otorgar, en su caso,
los poderes necesarios.

Art. 4° - (Funciones específicas). Las universidades no deberán desvirtuar en ningún caso


y por ningún motivo sus funciones específicas. Los profesores y los alumnos no deben
actuar directa, ni indirectamente en política, invocando su carácter de miembros de la
corporación universitaria, ni formular declaraciones conjuntas que supongan militancia
política o intervención en cuestiones ajenas a su función específica, siendo pasible quien
incurra en transgresión de ello, de suspensión, cesantía, exoneración o expulsión según el
caso. Esto no impide la actuación individual por la vía legítima de los partidos políticos,
pero, en ese caso, actuarán como simples ciudadanos y no en función universitaria.

Art. 5° - (Integración). Integran las universidades:


a) Las facultades, sus escuelas y respectivas cátedras, departamentos,
seminarios, institutos y secciones destinadas a la enseñanza teórico-práctica;
b) Los establecimientos que funcionan actualmente dentro de la jurisdicción
universitaria y los que se incorporaren posteriormente bajo la misma dependencia;
c) Los establecimientos privados, municipales, provinciales o nacionales, que
fueren puestos bajo la jurisdicción universitaria por la autoridad respectiva.

Art. 6° - (Cátedras). La cátedra es la unidad docente básica de la universidad. Estará bajo


la dirección del catedrático, de quien dependerá el personal auxiliar, encargado de
transmitir los conocimientos para la formación de técnicos y profesionales de las carreras
universitarias.
Las cátedras que alcancen un alto grado de evolución y perfeccionamiento en la técnica de
la investigación científica, que cuenten con materiales y personal idóneo para esas tareas y
que produzcan trabajos originales o trascendentes, podrán ser transformadas en institutos.

Art. 7° - (Institutos). El instituto es la unidad universitaria para la investigación científica.


El catedrático que se encuentre al frente del instituto ascenderá a la categoría de director del
mismo. La universidad propenderá a que sus institutos correlacionen la enseñanza y la
investigación científica de modo tal que la docencia universitaria tenga su fuente natural en
la investigación directa y profunda de la realidad.

Art. 8°- (Departamento). El departamento es la unidad de coordinación de las


investigaciones científicas sobre una misma materia. La agrupación funcional de institutos,
cátedras y centros de investigación afines, al margen de las respectivas actividades
docentes, constituyen un departamento. Será dirigido por un jefe designado por rotación
periódica entre los directores de institutos o catedráticos integrantes del departamento. Los
institutos, cátedras o centros de investigación, que reunidos formen un departamento,
pueden pertenecer a la misma o a distintas facultades e inclusive tener su sede en otras
universidades. La organización departamental es optativa de cada universidad o facultad.

CAPITULO II

Del gobierno de la universidad

Art. 9° – El gobierno de la universidad estará a cargo del rector y del consejo


universitario

A) Del Rector

Art. 10º. – (Designación). El rector será designado por el Poder Ejecutivo y durará tres
años en funciones.

Art. 11º. – (Requisitos). Para ser rector se requiere: ser ciudadano argentino, haber
cumplido 30 años de edad y 10 años de diplomado; poseer el título máximo de la facultad
nacional correspondiente o ser profesor titular o adjunto confirmado.

Art. 12º. – (Deberes y atribuciones). Sin perjuicio de las demás funciones que le impone y
otorga la presente ley y las que le asignen otras disposiciones legales, el rector tendrá los
siguientes deberes y atribuciones:
1° Representar legalmente a la universidad;
2° Designar las personas que llevarán la representación oficial de la universidad;
3° Convocar al consejo universitario a reuniones ordinarias y extraordinarias,
expresando en la convocatoria los asuntos a tratarse;
4° Firmar los títulos, diplomas, distinciones y honores universitarios;
5° Proponer a los consejos directivos de las facultades las ternas para la designación de
decano de las mismas;
6° Resolver las cuestiones que ni se hallen expresamente reservadas al consejo
universitario o a las autoridades de las facultades;
7° Dirigir la administración de la universidad, pudiendo recabar de las facultades y
demás institutos de la universidad los informes que estime conveniente;
8° Vigilar la contabilidad de la universidad y tener depositados a su orden los fondos
universitarios;
9° Decretar en el presupuesto de la universidad y autorizar los demás que el consejo
ordene;
10º. Nombrar y remover al personal de la universidad, cuya designación y remoción no
corresponda al consejo universitario o a las facultades de acuerdo con el art. 123 de la ley
12.961 y su reglamentación;
11º. Adoptar las medidas necesarias y urgentes para el buen gobierno de la universidad,
dando cuenta de ello al consejo universitario;
12º. Ejercer la jurisdicción policial y la disciplina en primera instancia, en el asiento
del rectorado y del consejo;
13º. Conceder las licencias o permisos en los casos señalados por las reglamentaciones
pertinentes;
14º. Publicar durante el primer trimestre de cada año, una memoria que consigne la
tarea docente y la gestión administrativa realizada en el período anterior.

Art. 13º. – (Voto del rector). El rector tendrá voz y voto en las decisiones del consejo,
prevaleciendo el suyo en caso de empate.

Art. 14º. – (Incompatibilidad). El cargo de rector es incompatible con cualquier otra


actividad pública excepto la docencia en la misma universidad, o la de conferenciante,
investigador, autor o miembro de academia, institución, social, literaria o cultural.

Art. 15º. – (Retribución). El rector recibirá como única retribución. la cantidad de cuatro
mil pesos moneda nacional (m$n 4.000) mensuales En el caso de ser profesor, percibirá
únicamente el sueldo de rector.

A) Del Vicerector

Art. 16º. – (Funciones, requisitos y retribución). El vicerector ejercerá las funciones del
rector en ausencia, renuncia o impedimento de éste, o las que el mismo, expresamente y
mediante la oportuna comunicación, le delegare. Para ser elegido vicerector se requerirán
las mismas condiciones que para ser rector. Percibirá para gastos de representación, la suma
de quinientos pesos moneda nacional (m$n 500) mensuales.

B) Del Consejo Universitario

Art. 17º. – (Constitución). El consejo universitario estará constituido por el rector, que lo
precederá, y por los decanos y vicedecanos de cada facultad.

Art. 18º. – (Atribuciones). El consejo universitario tendrá las siguientes atribuciones. sin
perjuicio de las demás que se le acuerdan en esta ley:
1a Ejercer la jurisdicción superior universitaria y resolver en última instancia las
cuestiones contenciosas que hayan fallado el rector o las facultades, con excepción de
aquellas atribuidas expresamente por esta ley a las facultades;
2a Proponer al Poder Ejecutivo la creación de nuevas facultades;
3a Dictar los reglamentos convenientes para el régimen común de los estudios y
disciplina general de los establecimientos universitarios;
4a Aprobar los planes de estudio a propuesta de las respectivas facultades;
5a Acordar por iniciativa propia o a propuesta de las facultades el título de doctor
honoris causa, o de miembro honorario de la universidad, a las personas que sobresalieren
por sus obras, estudios o trabajos de investigación;
6a Decidir en última instancia las cuestiones sobre validez o equivalencia de títulos,
diplomas, estudios, asignaturas, honores y distinciones universitarias que hubieran sido
resueltas por los consejos de las facultades;
7a Acordar por iniciativa propia o a propuesta de las facultades la creación de nuevas
escuelas e institutos;
8a Proyectar el presupuesto anual y aprobar las cuentas presentadas por el rector, y la
inversión de los fondos asignados a la universidad, las facultades y demás establecimientos
universitarios;
9 a Resolver lo conducente al ejercicio de la personería jurídica de la universidad;
10a. Dictar su reglamento interno y las ordenanzas necesarias para la buena marcha de
la institución;
11a. Aprobar o devolver observadas a las facultades, las ternas formuladas por éstas
para la provisión de cátedras titulares, así como las reglamentaciones que dicten aquéllas
para la designación de profesores adjuntos, extraordinarios y honorarios. El consejo
universitario sólo tiene facultad para considerar el aspecto formal de las ternas y las
objeciones morales a los candidatos, nunca el orden de los nombres ni la competencia
científica y didáctica que son privativos de cada facultad;
12a. Elegir un vicerector entre sus miembros, que durará tres años en funciones;
13a. Fijar las épocas de inscripción y los aranceles universitarios, estos últimos ad
referéndum del Poder Ejecutivo;
14 a. Aceptar las herencias con beneficio de inventario, y los legados o donaciones que
se dejen o hagan a las universidades o a las facultades o establecimientos que las integren;
15a. Vender, con autorización del Poder Ejecutivo, los bienes inmuebles, títulos y
valores pertenecientes a la universidad;
16a. Modificar a propuesta de las facultades, las escuelas que las integren y sus títulos
universitarios, como asimismo fijar por su sola decisión las proporciones en que éstas
estarán representadas en los consejos directivos;
17a. Revalidar los diplomas expedidos por universidades extranjeras, de acuerdo con
las leyes y con los tratados internacionales previo estudio, en cada caso, del valor científico
y jerarquía de la enseñanza impartida por las mismas y consideración que merecen sus
títulos;
18a. Ejercer las facultades disciplinarias que determina esta ley y los reglamentos que
se dictaren;
19a. Reglamentar, a propuesta de las facultades, las incompatibilidades para el ejercicio
del cargo de profesor, según se exija o no dedicación exclusiva;
20a. Aprobar las reglamentaciones que dicte cada facultad sobre sus respectivas
carreras docentes o científicas.

C) De la Secretaría General de la Universidad

Art. 19º. – (Designaciones). La Secretaría General de la Universidad estará a cargo de un


secretario y un prosecretario designados por el rector, que deberán tener título universitario
nacional. Las funciones permanentes del secretario o del prosecretario, además de las
consignadas en esta ley, serán las que se establezcan en la reglamentación correspondiente.
Art. 20º. – (Atribuciones). El prosecretario general deberá actuar como secretario en las
comisiones del consejo universitario y llevar un libro de actas de las mismas; refrendará,
además, todas las resoluciones del consejo universitario y del rector.

Art. 21º. – (Atribuciones). El prosecretario general deberá actuar como secretario en las
comisiones del consejo universitario; tendrá a su cargo el despacho de los institutos y
establecimientos dependientes del consejo universitario y refrendará todas las resoluciones
del rector, dictadas para esas dependencias.

TITULO II

De las facultades

Art. 22º. – (Gobierno). El gobierno de la facultad estará a cargo del decano y un consejo
directivo, constituido por el decano y diez consejeros, que se designarán de entre los
profesores de la respectiva facultad.

Art. 23º. – (Duración). El decano o los consejeros durarán tres años en sus funciones no
pudiendo estos últimos ser reelectos, sino con intervalo de un período.

A) Del Consejo Directivo y de la elección de Decano

Art. 24º. – (Proporciones). Cuando una facultad esté formada por más de una escuela el
consejo universitario fijará la proporción de consejeros con que cada una de ellas estará
representada en el mismo.

Art. 25º. – (Voto secreto). La elección de los consejeros se efectuará en comicios de


profesores, quienes votarán personalmente en forma secreta, las listas de candidatos que los
electores depositarán en dos urnas distintas; una reservada a los profesores titulares, que
votarán, de entre ellos, por siete candidatos a consejeros titulares e igual número de
substitutos; y otra, para los profesores adjuntos, que votarán en la misma forma que los
titulares, pero solamente por cuatro candidatos a consejeros y otro número igual de
sustitutos.
Los consejeros que dejen de ser profesores, cesarán inmediatamente en el ejercicio de este
cargo.

Art. 26º. – (Escrutinio y proclamación). El escrutinio y proclamación de los candidatos


elegidos los harán el decano, el vicedecano y el consejero titular de más edad.

Art. 27º. – (Elección del decano). Los consejeros elegidos se reunirán bajo la presidencia
del de mayor edad que sea profesor titular y elegirán, a su vez por el voto de la mayoría, al
decano de la terna enviada por el rector de la universidad. Si la elección recayera en un
profesor (titular o adjunto) que no formara parte del consejo, quedará eliminado de hecho el
consejero, (profesor titular o adjunto, según sea la categoría del electo) que al ser elegido
obtuvo menor número de votos. Si dos o más se encontrasen en estas condiciones, la
eliminación se hará por sorteo, manteniendo siempre la proporción señalada en el art. 25º.
Art. 28º. – (Consejeros sustitutos). Las vacantes de consejeros titulares que se produzcan
antes de la fecha de renovación, serán llenadas por sorteo, que se realizará entre los
consejeros substitutos de titulares o de adjuntos, según sea la vacante producida y
manteniendo la representación de las escuelas.

Art. 29º. – (Desintegración y acefalía). Si por sucesivas vacantes o ausencias quedara


agotado el número se consejeros sustitutos, el consejo directivo –aun en minoría- designará
de entre los profesores, según sea la vacante, al que deba llenarla para completar el período.

Art. 30º. – (Quórum). Las sesiones del consejo directivo se realizarán con el quórum de
siete consejeros, y sólo podrán ser presenciadas por los profesores, por periodistas y por no
más de quince estudiantes de la misma facultad, de acuerdo con la reglamentación que dicte
oportunamente cada una de ellas. Las sesiones serás secretas, cuando así lo resuelva el
consejo o el decano, en casos de excepción.

Art. 31º. – (Consejo departamental). En aquellas facultades constituidas por


departamentos, el consejo estará integrado por un representante de cada uno de ellos, sin
exceder el número indicado en el art. 24 y manteniéndose la proporción de dos tercios de
titulares y en tercio de adjuntos, en la misma forma que lo establece el art. 25.

Art. 32. – (Atribuciones). El consejo directivo tendrá las siguientes atribuciones:


1º Designar decano de entre la terna presentada por el rector;
2º Designar vicedecano de entre sus miembros;
3º Confeccionar y modificar los planes de estudios de las carreras o cursos especiales,
aprobándolos en primera instancia y establecer, en cada caso, con la aprobación del consejo
universitario, cuáles deben ser las cátedras que exijan de los profesores titulares una
consagración exclusiva;
4º Proponer y aprobar la creación de institutos o cursos de investigación;
5º Organizar las actividades que para el fomento de la cultura en general, sean atinentes
a cada facultad;
6º Proponer al consejo universitario, por resolución adoptada por dos tercios de votos,
la designación de profesor titular en cátedra vacante, al profesor titular en cátedra vacante,
al profesor titular de la misma materia o materia afín, de otra universidad del país; como
asimismo proponer a la universidad la designación de los profesores extraordinarios en la
respectiva facultad;
7º Dictar el reglamento de la facultad y las ordenanzas necesarias para la buena marcha
de la enseñanza o de la investigación científica;
8º Decidir en primera instancia las cuestiones contenciosas referentes al orden de los
estudios, condiciones del ingreso, pruebas de promoción y cumplimiento de los deberes de
los profesores, y en única instancia las cuestiones que se susciten en la aplicación del inc.
10;
9º Elevar al gobierno de la universidad de acuerdo con el procedimiento establecido en
la presente ley, las ternas de profesores titulares propuestos por las comisiones asesoras y
designar los profesores de las demás categorías;
10º. Apercibir y suspender a los profesores por faltas en el cumplimiento de sus
deberes;
11º. Pedir al Poder Ejecutivo, por intermedio del rector, la separación de los profesores
titulares o elevar sus renuncias. Remover a los demás profesores y decidir sobre sus
renuncias;
12º. Proyectar el presupuesto de la facultad;

Art. 33º. – (Incompatibilidades). Los miembros titulares del consejo directivo no podrán
desempeñar empleos rentados dependientes de la universidad, con excepción de los cargos
de directivos y docentes. Tampoco podrán ser nombrados para cátedras, dirección, empleo
o comisión rentada, creados durante su mandato, hasta después de dos años de fenecido
este. Los aspirantes a cátedras ya existentes, podrán presentarse al concurso, previa
renuncia como miembros del consejo directivo.

B) Del Decano

Art. 34º. – (Requisitos).Para ser decano se requiere ser ciudadano argentino, haber
cumplido treinta años de edad y ser profesor titular, honorario o adjunto confirmado, de la
respectiva facultad.

Art. 35º. – (Duración). El decano durará tres años en su cargo, y en caso de separación,
renuncia o muerte, el nuevo decano será designado por el tiempo que faltare para completar
el período.

Art. 36º. – (Voto del decano). El decano tendrá voz y voto en las decisiones del consejo,
prevaleciendo el suyo en caso de empate.

Art. 37º. – (Gastos de representación). El decano percibirá como gastos de representación


la suma de mil pesos moneda nacional (m$n 1.000) mensuales.

Art. 38º. – (Facultades). Son atribuciones y deberes del decano:


1a Convocar y presidir las sesiones del consejo directivo;
2a Representar a la facultad en sus relaciones con las demás autoridades universitarias y
corporaciones científicas;
3a Firmar, juntamente con el rector, los diplomas universitarios y certificados de
reválida;
4a Dar cuenta mensualmente al consejo directivo de la falta de asistencia de los
profesores a las aulas, de las pruebas de promoción y elevar al rector una relación de las
mismas;
5a Cumplir y hacer cumplir las resoluciones de los consejos universitarios y directivo;
6a Expedir concesiones de ingreso, permisos y certificados de promoción, con arreglo a
las ordenanzas del consejo universitario y del consejo directivo;
7a Acordar a los profesores licencias que no excedan de 45 días y nombrar y separar
por sí a los empleados cuya designación no corresponda al consejo directivo;
8a Ejercer la vigilancia de la enseñanza, de la administración y de la jurisdicción
policial y disciplinaria dentro de la facultad;
9a Designar al secretario de la facultad, el que tendrá que ser egresado de la misma;
10a. Rendir cuenta de la inversión de fondos;
11a. Fijar las épocas de examen, número de turnos y orden de los mismos;
12a. Despachar definitivamente todos los asuntos de trámite, con el simple dictamen de
la comisión respectiva del consejo directivo, salvo discrepancia, en cuyo caso el asunto será
tratado por el propio consejo.

Art. 39º. – (Incompatibilidades). El decano tendrá las mismas incompatibilidades que el


rector.

C) Del Vicedecano

Art. 40º. – (Duración y funciones). El vicedecano durará tres años en funciones. Ejercerá
las del decano durante la ausencia o impedimento de éste, o las que el mismo expresamente
y mediante la oportuna comunicación le delegare. En caso de vacancia del vicedecano, el
consejero que lo sustituya completará el período.

Art. 41º. – En caso de ausencia, renuncia o fallecimiento del vicedecano en ejercicio del
decanato, interino el consejero profesor titulas de mayor antigüedad.

TITULO III

De los Profesores

Art. 42º. – (Categorías de profesores). Las universidades tendrán cuatro categorías de


profesores: titulares, adjuntos, extraordinarios y honorarios, no pudiendo crearse nuevas
categorías.

Art. 43º. – (Equivalencias). Si por los estatutos de algunas universidades, reglamentarios


de la Ley 1.597, se hubiera adoptado otra nomenclatura y concepto respecto de las
categorías de profesores, las facultades establecerán las adaptaciones y equivalencias
correspondientes, de acuerdo con la presente ley.

A) Profesores titulares

Art. 44º. – (Autonomía de la cátedra). Los profesores titulares tienen a su cargo la


dirección y ejercicio de la enseñanza teórico-práctica de su asignatura y el desempeño
autónomo de la cátedra, bajo su exclusiva responsabilidad.

Art. 45º. – (Requisitos). Para ser designado profesor titular se requiere ser ciudadano
argentino y poseer el título o diploma universitario.

Art. 46º. – (Concurso). Los profesores titulares serán designados por el Poder Ejecutivo
de la Nación, de una terna de candidatos elevada por la universidad, previo concurso de
méritos, aptitudes técnicas, títulos antecedentes y trabajos.

Art. 47º. – (Dedicación). El profesor titular está obligado a dedicar el máximo de su


tiempo a las tareas de investigación y docencia. No podrá defender intereses que estén en
pugna, competencia o colisión con los de la Nación, provincias o municipios, salvo los
casos de defensa de intereses personales del profesor, su cónyuge, ascendientes o
descendientes, siendo pasibles, si lo hicieren, de suspención, cesantía o exoneración.

Art. 47º bis – (Simulación de funciones). El profesor titular no podrá desempeñar


simultáneamente la función docente y la de cualquier otra actividad pública.

1) De la formación de las ternas

Art. 48º – (Comisión asesora). El consejo directivo de cada facultad designará, en cada
caso, una comisión asesora compuesta por tres miembros sorteados entre un mínimo de
diez profesores titulares de la misma materia, si los hubiere, y de las materias afines a la
cátedra, de la misma facultad o de otras universidades, si no alcanzare a integrarse con los
de aquella.
El orden de afinidad entre las materias se establecerá con carácter permanente por las
facultades al aprobar los respectivos planes de estudio.

Art. 49º. – (Elevación de la terna). La comisión asesora elevará al consejo directivo de la


facultad una terna por orden de méritos, títulos, antecedentes y trabajos, la que quedará
sujeta a las siguientes condiciones:
a) El consejo directivo de la facultad podrá observar el aspecto formal de las
ternas, variar su orden o integrarlas en forma distinta a la propuesta por la comisión
asesora, requiriéndose para esto último dos tercios de los votos de la totalidad de
sus miembros;
b) La terna será elevada a la universidad, que juzgará sobre los aspectos
formales del concurso. En caso de que el consejo directivo hubiere modificado el
dictamen de la comisión asesora, elevará un informe fundado al consejo
universitario, exponiendo los motivos y antecedentes que determinaron la
modificación de la terna;
c) La universidad después de aprobar la terna la elevará al Poder Ejecutivo
juntamente con los siguientes antecedentes:
1º El dictamen de la comisión asesora;
2º Títulos universitarios de los candidatos, indicándose los institutos que los hayan
expedido y fecha de su otorgamiento;
3º Obras y publicaciones de aquellos, consignándose en primer término, las relativas
a la materia del concurso;
4º Datos de la libreta de enrolamiento y del servicio militar;
5º Empleos y cargos que desempeñen o hayan desempeñado en la administración
nacional, provincial o comunal, y, en su caso, las jubilaciones de que gocen;
6º Copia autorizada de las actas de las sesiones del consejo directivo y del consejo
universitario, en que se hubiere tratado la terna.

Art. 50º. – (Requisitos para figurar en terna). – Para figurar en terna se requieren
antecedentes morales inobjetables, ser egresado con cinco años por lo menos de antelación,
poseer diploma universitario nacional y haber acreditado aptitudes docentes y trabajos
científicos en la correspondiente especialidad o en materia de íntima conexión con ella. El
título de profesor adjunto se tendrá en cuenta en forma preferente al configurar la terna. La
actividad científica y docente del candidato deberá ser continua y comprobada mediante
publicaciones y cursos que se estimarán no sólo por el número sino también y en primer
término, por el mérito intrínseco. A los concursantes que no fueran profesores adjuntos, la
respectiva facultad podrá exigirles una prueba complementaria.

Art. 51º. – (Formación de la terna). Las ternas para profesor titular deberán formarse
previo dictamen escrito y fundado de la comisión asesora del consejo directivo.

Art. 52º. – (Inscripción extraordinaria). Hasta diez días después de cerrado el concurso,
podrá proponerse al consejo directivo, por cuatro consejeros y con la conformidad del
interesado, la inscripción en el mismo de toda persona de relevante y notorio prestigio
científico, en cuyo caso, para ser considerado por la comisión asesora, necesitará contar con
la aprobación del consejo directivo por las dos terceras partes de sus votos.

Art. 53º. – (Opción de los titulares). Los profesores titulares pueden presentarse a
concurso para optar a otras cátedras afines, pero si obtuviesen vacante están obligados a
renunciar a la cátedra que hubieren estado dictando.

Art. 54º. – (Plazo del llamado a concurso). Producida una vacante de profesor titular, se
llamará a concurso dentro de un plazo no mayor de tres meses, poniéndose interinamente,
la cátedra a cargo de un profesor adjunto correspondiente a la misma materia y, a falta de
este, podrá designarse otro profesor de materias afines.

Art. 55º. – (Prórroga del ejercicio de la cátedra). El consejo directivo de cada facultad
podrá anualmente, autorizar por dos tercios de sus votos, a continuar en el ejercicio de la
cátedra titular y hasta tres veces consecutivas a los que estuvieren en condiciones de
obtener su jubilación ordinaria.

Art. 56º. – (Separación de profesores). Podrán los consejos directivos promover la


separación de los profesores, por las siguientes causas:
1º Condena criminal que no sea por hecho culposo;
2º Abandono de las funciones del cargo;
3º Violación de las disposiciones del art. 47º.

2) Atribuciones y deberes de los profesores titulares

Art. 57º. – Son deberes y atribuciones de los profesores titulares:


1a Dictar el curso con arreglo a los programas y horarios oficiales;
2a Presentar anualmente su programa y proponer el plan de distribución de la
enseñanza teórico-práctica con los profesores adjuntos, según la reglamentación de cada
facultad;
3a Formar parte de las mesas examinadoras;
4a Desempeñar las comisiones relacionadas con la enseñanza;
5a Participar en las elecciones de autoridades universitarias;
6a Colaborar con las publicaciones de la universidad y con las investigaciones de los
institutos científicos;
7a Informar anualmente a la biblioteca, en colaboración con los profesores adjuntos,
sobre el movimiento bibliográfico fundamental de su materia;
8a Informar al consejo directivo sobre toda novedad científica o docente;
9a A más de su labor docente sobre la materia que enseñe, deberá realizar aquella otra
que establezca, con sus alumnos y colegas, una relación de comprensión y convivencia que
facilite, en todo momento, la creación y el sentimiento de una concepción social y
humanista de las funciones universitarias;
10a. Desempeñar las comisiones que la universidad o la facultad le encomienden.

Art. 58º. – (Obligación de colaborar oficialmente). El profesor que optare por dedicar
todo su tiempo a la universidad, estará obligado a prestar su dirección y asesoramiento
técnico cuando fuera requerido por el Poder Ejecutivo.

Art. 59º. – (Dedicación a una sola cátedra). En ningún caso podrá desempeñarse por un
mismo profesor titular, más de una cátedra.

B) Profesores adjuntos

Art. 60º. – (Funciones y designación). Los profesores adjuntos deben colaborar en la


enseñanza oficial, de acuerdo con la reglamentación de cada facultad.
Los profesores adjuntos serán nombrados por concurso por el consejo directivo, con
aprobación del consejo universitario. Podrá admitirse a los concursos para profesores
adjuntos, aun cuando no hayan seguido la carrera docente, a aquellos candidatos de
reconocida personalidad científica probada con trabajos o actuación docente. En tal caso se
requerirá ser propuesto por cuatro consejeros de la facultad.

Art. 61º. – (Designación extraordinaria). Podrá prescindirse del concurso, cuando el


candidato goce de reconocida personalidad científica, probada con trabajos o actuación
docente. En tal caso se requerirá ser propuesto por cuatro consejeros de la facultad y
aprobado por dos tercios de los votos del consejo directivo.

Art. 62º. – (Régimen de adjuntos). Cada facultad determinará, con aprobación del consejo
universitario, el número de profesores adjuntos que corresponda a cada cátedra. Todas las
ordenanzas relativas al régimen de concursos para la designación de profesores adjuntos,
requerirá aprobación del consejo universitario.

Art. 63º. – (Confirmación). Cumplidos cuatro años de su designación, el profesor adjunto,


para seguir siéndolo, deberá ser confirmado por el consejo universitario, el que tendrá para
ello en cuenta lo siguiente: su comportamiento ético y moral; haber dictado por lo menos
dos cursos complementarios, según la reglamentación de cada facultad, y haber presentado
un trabajo sobre la materia, juzgado por una comisión nombrada por el consejo directivo,
que se llamará tesis de profesorado.
Los profesores adjuntos que no hayan sido confirmados, quedarán de hecho cesantes.

Art. 64º. – (Deberes y atribuciones). Son deberes y atribuciones del profesor adjunto:
1º Reemplazar a los titulares en el desempeño de sus cátedras y demás funciones;
2º Dictar cursos complementarios o de otro orden, de acuerdo con la reglamentación de
la respectiva facultad;
3º Formar parte de los tribunales de promoción y de los jurados y desempeñar las
comisiones que las facultades creyeren necesario encomendarles;
4º Participar en las elecciones establecidas en esta ley.

Art. 65º. – (Asistentes). Se designarán, cada año, hasta dos profesores adjuntos para
actuar como asistentes del profesor titular. El profesor titular turnará entre los profesores
adjuntos la designación de los asistentes. Serán nombrados por el decano a propuesta del
profesor titular y tendrán, además de las obligaciones inherentes a su carácter de adjuntos,
las que reglamente cada facultad para su condición de docentes auxiliares de la cátedra
titular.

C) Profesores extraordinarios

Art. 66º. – (Designación). El consejo universitario, a propuesta del consejo de la facultad,


podrá designar profesores extraordinarios, con carácter de contratados, a personas de
nacionalidad argentina o extranjera, de reconocida reputación en la materia de que se trate.
El límite de duración, la remuneración y las funciones de los profesores extraordinarios,
serán determinados en cada caso por la facultad respectiva al formular la propuesta.
Al profesor extraordinario no le son aplicables las incompatibilidades y demás
disposiciones análogas establecidas para los titulares o adjuntos.

D) Profesores honorarios

Art. 67º. – (Designación). Al profesor que se retire de la enseñanza, podrá, en los casos de
haberse destacado por su actuación científica, otorgársele el título de profesor honorario,
por el consejo directivo, con el voto de las dos terceras partes de sus miembros y con la
aprobación del consejo universitario en igual forma.
El título de profesor honorario es vitalicio. Sus funciones serán determinadas por las
reglamentaciones de cada facultad, con la aprobación del consejo universitario.

E) De la retribución de los profesores

Art. 68º. – (Remuneración mensual ordinaria). Los profesores titulares gozarán de una
remuneración mensual de mil ochocientos pesos moneda nacional (m$n1.800), la que será
aumentada cada cinco años en un 10 %.

Art. 69º. – (Remuneración mensual por dedicación exclusiva). Los profesores a cargo de
cátedras de consagración exclusiva, gozarán de una remuneración mensual de tres mil
quinientos pesos moneda nacional (m$n 3.500), la que será aumentada cada diez años en un
10 %, no pudiendo percibir ninguna otra remuneración cualquiera sea la función que
desempeñen dentro de la universidad.

Art. 70º. – (Fijación de las retribuciones de los titulares). En los casos en que un profesor
titular hiciera expresa manifestación de querer consagrarse exclusivamente a la enseñanza,
los consejos directivos, por dos tercios de los votos podrán, si lo encontrasen conveniente,
aceptar este ofrecimiento, en cuyo caso gozará de la misma retribución fijada en el artículo
anterior.

Art. 71º. – ( Retribución de los adjuntos). En las cátedras establecidas por la facultad
como dedicación exclusiva, los profesores adjuntos asistentes gozarán de una remuneración
mensual de mil quinientos pesos moneda nacional (m$n 1.500); los demás profesores
adjuntos asistentes gozarán de una remuneración mensual de ochocientos pesos moneda
nacional (m$n 800).

F) De la carrera docente y científica

Art. 72º. – (Bases de la carrera docente). Cada facultad reglamentará su carrera docente
ajustándose a las siguientes bases:
a) El aspirante a profesor universitario cursará un período de “adscripción” a una
determinada cátedra, durante el cual realizará trabajos de investigación o de seminario en
materias afines, bajo la dirección del respectivo profesor, y ejercicios docentes en la
materia de su adscripción; completará su preparación con cursos obligatorios sobre
materias de cultura general. Podrán implantarse o no, según las características de cada
facultad, exámenes finales para la aprobación de las materias de adscripción;
b) Cumplido esto, el aspirante a profesor pasará a ejercer la docencia complementaria bajo
la dirección del profesor titular y durante el tiempo que fijará cada facultad para cada
asignatura;
c) Terminada esta etapa, y previo un examen o concurso general de competencia técnica y
docente sobre la materia de su dedicación, será autorizado como docente;
d) El docente autorizado tendrá las obligaciones que le fije cada facultad y un derecho de
preferencia para presentarse a los concursos de profesor adjunto.

Art. 73º. – (Venia docendi). Todo egresado de la universidad, con diez o más años de
ejercicio profesional, que reúna trabajos, títulos y antecedentes científicos suficientes podrá
solicitar al consejo directivo un permiso para enseñar, y cumplidos los requisitos exigidos
para demostrar su capacidad docente y preparación técnica, que establecerá cada facultad,
le conferirá la “venia docendi”, es decir, el permiso para enseñar en forma regular y
sistemática. Sus antecedentes serán tenidos en cuenta para autorizar su inscripción en los
concursos de profesor adjunto.
La forma regular y sistemática de la enseñanza de la “venia docendi”, será reglamentada
por cada facultad.

Art. 74º. – (Carrera de investigadores). Cada facultad organizará la formación regular y


metódica de los investigadores dedicados exclusivamente a trabajar por el progreso de la
ciencia.

G) Del claustro universitario

Art. 75º. – (Composición). Constituyen el claustro general de profesores de cada facultad


todos los catedráticos, más un número de profesores adjuntos elegidos por sorteo, en una
proporción igual a la tercera parte de los catedráticos de cada facultad. La asistencia a las
reuniones de los claustros es obligatoria.
Art. 76º. – (Reunión anual). El decano podrá citar al claustro general a fin de dar lectura a
la memoria anual. Podrán constituirse también claustros parciales de las diversas escuelas,
por separado, bajo la presidencia del decano, para considerar exclusivamente los resultados
del plan de estudios y las reformas técnicas que se sugieran.

Art. 77º. – (Facultades). Las sugestiones del claustro serán consideradas por el decano y
el consejo directivo de la facultad, para resolver sobre su viabilidad. El claustro no tratará,
bajo ningún concepto, cuestiones ajenas al plan de estudios y al desarrollo de la enseñanza.
El claustro podrá también ser consultado por escrito.

TITLO IV

De los estudiantes

A) Categorías

Art. 78º. – (Estudiantes regulares). Los estudiantes serán regulares y libres. Los primeros
deberán asistir obligatoriamente para mantener su situación de tales, a las clases prácticas y
trabajos universitarios, en la proporción que fije cada facultad. Son los únicos que pueden
obtener becas.

Art. 79º. – (Estudiantes libres). Son estudiantes libres los que inscriptos en la universidad,
no cumplan los requisitos necesarios para conservar el carácter de regulares.
El estudiante libre rendirá examen en las siguientes condiciones:
1º La prueba teórica no podrá durar menos de media hora;
2º En caso de prueba práctica, se acreditará, a satisfacción del tribunal examinador,
grado suficiente de preparación en la materia. Esta prueba es eliminatoria;
3º El examen teórico se hará con el programa oficial íntegro de la asignatura de que se
trate, pudiendo el tribunal examinador elegir el tema o temas dentro del programa sobre el
que deberá disertar el alumno.

Art. 80º. – (Estudiantes vocacionales). Todo egresado en una carrera universitaria podrá
inscribirse en cualquier asignatura de cualquier facultad sin rendir examen de ingreso. Los
estudiantes quedarán sometidos exclusivamente a las restricciones de correlación de
estudios que establecerá la universidad.

Art. 81º. – (Estudiantes vocacionales). Los estudiantes inscriptos en estas condiciones


podrán rendir examen sometiéndose a las reglamentaciones vigentes para los alumnos
regulares o libres, según la categoría que adopten; en las actas respectivas se hará constar su
calidad de alumno vocacional.

Art. 82º. – Los alumnos vocacionales podrán pedir certificado de las asignaturas
aprobadas, y si su conjunto alcanzase a una carrera completa tendrán derecho al título
profesional respectivo.
Art. 83º. – EL consejo universitario reglamentará las correlaciones de materias
indispensables para autorizar la inscripción en cada asignatura determinada, con el objeto
de evitar que se intente afrontar estudios sin bases preliminares insustituibles.
Esta correlación será dictada con la mayor liberalidad posible, tendiente a no restringir la
ampliación de técnica y de cultura que se deriva de esta libre elección de estudios
superiores.

B) De su representación

Art. 84º. – Los estudiantes tendrán representación en los consejos directivos por
intermedio de un delegado por cada escuela.

Art. 85º. – Entre los diez alumnos que hubieran obtenido las más altas calificaciones en el
transcurso de su carrera y se encuentren cursando el último año, se sorteará al que ha de
tener la representación estudiantil. Este cargo es irrenunciable, salvo causa justificada a
juicio del consejo.

Art. 86º. – El delegado será convocado a las sesiones que celebre el consejo directivo. En
dichas sesiones el delegado podrá expresar libremente el anhelo de sus representados, no
teniendo voto en las decisiones que adopte el consejo.

C) De las becas

Art. 87º. – El Estado creará becas para la enseñanza gratuita, cuya distribución entre las
diversas universidades de la Nación, se hará por el Poder Ejecutivo. Para proceder a dicha
distribución, se tendrán en cuenta las características y necesidades regionales, sociales,
económicas y culturales, referidas a cada universidad, procurando que con la concesión de
becas se cumplan, de la manera más acabada posible y con un sentido social, los fines
asignados a la universidad.
Habrá dos clases de becas: las de estudio y las de estímulo. A las primeras tendrán
derecho y serán otorgadas a los estudiantes que poseyendo aptitud universitaria sean hijos
de familias de obreros, atendidas las circunstancias de cada caso no permitan costear los
estudios universitarios ni prescindir en todo o en parte de la ayuda económica que aporte o
pudiera aportar el becado. Dicha beca consistirá en obtener gratuitamente la enseñanza
universitaria en todos sus aspectos y grados, el suministro de libros y útiles, y en el
otorgamiento del diploma o título que se obtuviere, y en conceder una compensación
económica familiar que equivalga lo más aproximadamente posible a la aportación del
alumno.
Lo anterior es aplicable a los casos en que la familia obrera, artesana o empleada,
careciera de cabeza de la misma y se hallare en análogas condiciones económicas a las
señaladas en el párrafo anterior, y a los jóvenes que, sin familia y poseyendo la aptitud
universitaria adecuada, carecieren de los recursos necesarios para ingresar y estudiar en la
universidad.
A las segundas tendrán derecho y serán otorgadas a estudiantes destacados, de familia
obrera o de empleados, para compensar la privación total o parcial de aporte económico al
hogar que les imponga el estudio.
D) Concesión y pérdida de becas

Art. 88º. – (Solicitud de becas). Las peticiones de becas serán dirigidas al Poder Ejecutivo
de la Nación, por intermedio del Ministerio de Justicia e Instrucciones Públicas, con los
antecedentes tendientes a justificarlas, y serán resueltas previas las informaciones del caso
y las circunstancias del mismo, concediendo la clase de beca que corresponda.

Art. 89º. – (Pérdida de las becas). La condición de becario se pierde:


1º Por ser aplazado más de dos veces en una misma materia o en la mitad más una de
un mismo curso;
2º Por observar mala conducta pública, dentro o fuera de la universidad, o por realizar
dentro de ella actividades políticas;
3º Por haber sido objeto de medidas disciplinarias;
4º Por inasistencias reiteradas e injustificadas a las clases o incumplimiento repetido de
las tareas universitarias;
5º Por haber falseado los elementos de juicio que invocó para solicitar la beca;
6º Por haber desaparecido las condiciones de necesidad acreditadas al solicitar la beca.
La cancelación se hará por el rector con aprobación del consejo universitario.
Al alumno a quien le fuere cancelada la beca no se le otorgará otra en ninguna de las
universidades de la Nación, salvo el caso del inc. 6º del artículo presente.

Art. 90º. – (Otras becas). Las becas otorgadas por el Estado no excluyen aquellas otras
que puedan crearse u otorgarse por otras entidades o personas. Las que fueran de entidades
o instituciones públicas oficiales o semioficiales, deberán ajustarse, en lo posible, al espíritu
de las presentes disposiciones.

Art. 91º. – (Pérdida de la condición de estudiante). Perderá la condición de estudiante


universitario, no pudiendo ingresar a ninguna otra universidad del país, todo alumno que
incurriera en la misma causal de cesantía de los profesores, especificada en el inc. 1º del art.
56º de la presente ley, sin perjuicio de las faltas y sanciones de orden disciplinario que
establezca cada facultad en su reglamento interno.

TITULO V

De la enseñanza

A) Condiciones generales de ingreso

Art. 92º. – (Admisión de alumnos). Las condiciones de admisibilidad para los estudiantes
a las universidades serán uniformes para todo el país y se fijarán por el Consejo Nacional
Universitario.

Art. 93º. – (Constancias). Todo el que solicite ingresar a los cursos o rendir examen en las
facultades, deberá acreditar tener aprobados los estudios que correspondan a la enseñanza
media, normal o especial, de acuerdo con la reglamentación que se establezca.
Art. 94º. – (Comprobación). La comprobación a que se refiere el artículo anterior, podrá
hacerse:
1º Por certificado de los colegios nacionales;
2º Por certificado de institutos de enseñanza secundaria, debidamente autorizados;
3º Por certificados o diplomas de facultades o institutos oficiales extranjeros,
debidamente legalizados, siempre que se acredite la reciprocidad con nuestra República.

Art. 95º. – (Pruebas de competencia previas). Sin perjuicio de lo establecido en los


artículos precedentes podrán exigirse estudios complementarios o pruebas de competencia,
antes de aceptar la incorporación de alumnos a las facultades.

Art. 96º. – (Exámenes, clases y vacaciones). La universidad fijará la fecha de comienzo y


terminación de las clases y duración de las vacaciones y cada facultad reglamentará la fecha
de los exámenes.

Art. 97º. – (Propiedad y responsabilidad intelectual). La responsabilidad científico-legal


de las enseñanzas y doctrinas expuestas en clase, concierne exclusivamente a los profesores
que la dicten y a ellos corresponde la propiedad científica, intelectual, artística o literaria de
su enseñanza; todo ello, sin perjuicio de las medidas que puedan adoptar los consejos
directivos, cuando se comprometa el decoro y la seriedad de los estudios o cuando se desvíe
de los fines específicos de la universidad, o comprometa el prestigio de la misma o de las
facultades.

Art. 98º. – (Terminación de estudios y tesis). No se otorgará diploma alguno a quien no


haya aprobado todas las materias del plan de estudios de la respectiva carrera.
Cuando un estudiante solicitare traslado para una facultad similar de distinta universidad,
deberá requerir su diploma en aquella universidad donde hubiera aprobado más del 50 % de
las materias de su carrera. Para obtener el título de doctor, deberá aprobarse un trabajo de
investigación, que se llamará tesis de doctorado.

B) De la enseñanza libre

Art. 99º. – (Autorización). Podrán dictar circunstancialmente cursos libres, parciales o


completos y paralelos, conferencias o lecciones sobre cualquier disciplina científica, previa
autorización de la facultad respectiva y de acuerdo con su reglamento:
1º Los profesores universitarios;
2º Los diplomados, universitarios nacionales o extranjeros o personas de reconocida
competencia.
La enseñanza libre, sistemática y regular les corresponde a los docentes autorizados y a
los “venia docendi”.
Las facultades organizarán cursos populares de extensión universitaria a cargo de
profesores y alumnos.

C) De la enseñanza para graduados

Art. 100º. – (Cursos y carreras de especialistas). Las facultades reglamentarán la


enseñanza para graduados, organizando cursos de perfeccionamiento, de especialización y
carrera de especialistas, con el objeto de propender a la formación de los técnicos que
necesita el país en cada una de las ramas de las ciencias y de actualizar los conocimientos
de los profesionales. Se le dedicará preferente atención a aquellas materias que no figuren
en el plan de estudios para estudiantes.

TITULO VI

Del patrimonio de la universidad y su administración

A) De los bienes de la universidad

Art. 101º. – (Patrimonio). Forman el patrimonio de la universidad: el fondo universitario,


los bienes inmuebles, muebles e inmateriales que en virtud de ley o por otro título, gratuito
u oneroso, pasen al dominio de la universidad, así como las colecciones científicas,
publicaciones y demás bienes que, actualmente o en el futuro, tengan las facultades,
institutos o dependencias de la universidad.

B) De los recursos, donaciones y cuentas

Art. 102º. – (Recursos en general). Son recursos de la universidad:


1º El producido de las contribuciones que se establecen en la presente ley;
2º Las sumas que en cualquier concepto y forma se asignen por el presupuesto de la
Nación a la universidad, facultades, institutos y establecimientos universitarios;
3º El producido de derechos arancelarios;
4º Los frutos, intereses y rentas de los bienes patrimoniales de la universidad;
5º Las rentas o donaciones de particulares a favor de la universidad, facultades,
institutos o establecimientos universitarios;
6º Cualquier otro fondo que corresponda a la universidad.

Art. 103º. – (Donaciones). Cuando se trate de herencias, legados o donaciones o cualquier


otra liberalidad a favor de las facultades, el consejo universitario no podrá pronunciarse sin
oír a estas y no podrá aceptar aquellas que las facultades decidan rechazar. Estas
restricciones comprenden las condiciones o cargos que puedan imponer los testadores y
benefactores. Aceptada una herencia, legado, donación u otra liberalidad, el contrato de
donación no podrá ser modificado sin oír nuevamente a la facultad beneficiada.

Art. 104º. – (Recaudación). Salvo disposición especial del consejo universitario, todas las
dependencias universitarias que recauden fondos los entregarán mensualmente a la tesorería
de la universidad, cualquiera sea su procedencia, enviando al rector los documentos
justificativos y explicativos del caso. Igual cosa se hará, aun cuando los fondos tengan un
destino especialmente determinado.

Art. 105º. – (Gastos). Ningún gasto o inversión de fondos podrá hacerse sin que se
encuentre previsto en el presupuesto de la universidad u ordenado por el consejo
universitario. Los pagos serán dispuestos por el rector, previa conformidad del contador,
bajo la responsabilidad solidaria de los mismos, si contravinieren disposiciones legales.
El consejo universitario no podrá ordenar gasto alguno fuera del presupuesto, sin crear o
tener el recurso. Será individualmente responsable de la violación de esta disposición, cada
uno de los miembros que sancione el gasto.

Art. 106º. – (Ingresos). Todas las sumas destinadas a la universidad o a cualesquiera de


sus partes integrantes, ingresarán a los recursos generales de la universidad.
Los beneficios establecidos en el art. 87º no serán satisfechos con los recursos
enumerados en el art. 102º.

TITULO VII

De la dotación económica de las universidades

Art. 107º. –(Recursos especiales). Para la realización de sus fines las universidades
nacionales contarán con los siguientes recursos:
1º Con los fondos que el Estado les asignare, respectivamente, en el presupuesto
nacional;
2º Con el impuesto del dos por ciento (2 %) que toda persona –de existencia física,
ideal, con o sin personalidad jurídica, o sucesión indivisa– que empleare trabajo de otra,
está obligado a satisfacer sobre el importe anual de los “sueldos” y “salarios” que abonare.
Los “sueldos” y “salarios” sobre los que corresponderá ingresar el impuesto a que se ha
hecho referencia precedentemente, se determinarán de acuerdo con lo establecido en el
párrafo primero del art. 2º del Decreto–Ley 33.302/45 (Ley 12.921).
Quedan exentos de este impuesto los “sueldos” y “salarios” que se paguen al servicio
doméstico y los abonados por los fiscos nacional, provinciales y municipales y los de las
entidades que en su totalidad pertenezcan a los mismos;
3º Con los ingresos obtenidos por matrículas y otros conceptos universitarios;
4º Con las donaciones o fundaciones que se hicieran a favor de las universidades;
5º Con cualquier otro ingreso.

Art. 108º. – (Aplicación, percepción y fiscalización del recurso especial). La aplicación,


percepción y fiscalización del impuesto a que se alude en el punto segundo del art. 107º
estará a cargo del Instituto Nacional de las Remuneraciones y se regirá, en lo pertinente,
por las disposiciones del Decreto–Ley 33.302/45 (Ley 12.921) y demás disposiciones que
complementen o modifiquen ese cuerpo legal, siendo facultad exclusiva del Poder
Ejecutivo determinar cuáles de las citadas disposiciones serán de aplicación para el
impuesto referido.

Art. 109º. – (Forma y plaza para el pago). Los responsables abonarán el impuesto
establecido en el punto segundo del art. 107º, mediante depósito en la cuenta “Instituto
Nacional de las Remuneraciones–Recursos Universitarios”, del Banco Central (Banco de la
Nación Argentina), o en los bancos particulares que a tales efectos habilite expresamente el
Instituto Nacional de las Remuneraciones, o mediante cheque, giro o valor postal o
bancario sobre Buenos Aires, a la orden del “Instituto Nacional de las Remuneraciones–
Recursos Universitarios”, dentro de los plazos que, anualmente o en períodos menores,
establecerá el Poder Ejecutivo.
Carecerá de valor todo pago que no se efectúe en alguna de las formas indicadas
precedentemente.
El Poder Ejecutivo queda facultado para exigir de los empleadores –en los casos que crea
oportuno– anticipos a cuenta del importe que, en definitiva, deban ingresar aquellos en
concepto del impuesto que se establece en el punto segundo del art. 107º.

Art. 110º. – (Distribución del producido del impuesto). El producido de este impuesto
será distribuido en el presupuesto nacional según las necesidades de cada universidad
nacional, atendidas las circunstancias peculiares de la región o provincia en que se hallaren,
número de alumnos y de profesores y demás factores que hubieren de tenerse en cuenta a
efecto de que se desarrollen con un sentido social las funciones que les están asignadas.

TITULO VIII

Del Consejo Nacional Universitario

Art. 111º. – Créase el Consejo Nacional Universitario, el que estará constituido por los
rectores de todas las universidades del país y será presidido por el Ministro de Justicia e
Instrucción Pública.

Art. 112º. – El Consejo Nacional Universitario tendrá los siguientes deberes:


1º Coordinar la obra docente, cultural y científica de las universidades, de modo que
consulte los intereses y problemas del país y de cada región universitaria;
2º Asesorar al gobierno en todos los asuntos relativos a la actividad universitaria,
especialmente en la creación, supresión o transformación de universidades e institutos
superiores;
3º Armonizar y uniformar los planes de estudio, condiciones de ingreso, sistemas de
promoción, número de cursos y título a otorgar para las mismas carreras.

TITULO IX

Disposiciones complementarias y transitorias

Art. 113º. – La antigüedad en la cátedra, a los efectos de las bonificaciones previstas en


los arts. 68 y 69, comenzará a contarse desde la facha del nombramiento efectuado por el
Poder Ejecutivo.

Art. 114º. – El Poder Ejecutivo dispondrá de inmediato la confección de nuevos


presupuestos para las universidades nacionales, de acuerdo con las disposiciones de la
presente ley.

Art. 115º. – El Poder Ejecutivo tomará las providencias necesarias para que las
autoridades se constituyan de acuerdo con las disposiciones de la presente ley.

Art. 116º. – Esta ley se aplicará desde su vigencia en la Universidad Nacional de La Plata,
en todo cuanto no se oponga a las disposiciones del convenio celebrado el 12 de agosto de
1905, entre el gobierno de la Nación y el de la provincia.
El Poder Ejecutivo de la Nación adoptará las medidas necesarias para la modificación del
referido convenio, en condiciones que permitan la inclusión integral de la Universidad
Nacional de La Plata en el régimen establecido por la presente ley universitaria.
Mientras tanto, las autoridades de la Universidad Nacional de La Plata procederán a la
adaptación de su organización y funcionamiento con los principios y disposiciones de la
presente ley.

Art. 117º. – Todas las universidades existentes o a crearse, salvo la excepción del art.
116º, se regirán por la presente ley, que entrará en vigencia el 1º de enero de 1948,
quedando –desde ese momento– derogada toda disposición que se oponga a su
cumplimiento.

Art. 118º. – Hasta tanto el consejo directivo de cada facultad fije la proporción de
consejeros, de conformidad con lo dispuesto en el art. 24º, se mantendrá la composición de
los mismos en la forma actualmente existente.

Art. 119º. – Comuníquese, etc.

Sanción: 26 de setiembre de 1947.


Promulgación: 9 de octubre de 1947.
LEY 14.297 – Orgánica de universidades (B. O. 18/1/54).

TITULO I

De las universidades

CAPITULO I

De la misión y organización de las universidades

Art. 1º – Las universidades argentinas cumplirán su misión con un sentido


eminentemente humanista y de solidaridad social, a cuyo efecto tendrán los siguientes
objetivos:
1) La enseñanza en el grado superior y el desarrollo de la cultura y la afirmación de la
conciencia nacional, de acuerdo con la orientación fijada por la Constitución;
2) La integral formación humana de sus docentes y estudiantes, con preferencia a toda
especialización técnica e inculcándoles la noción de su responsabilidad social y la
conciencia de que han de servir al pueblo;
3) La organización de la investigación científica, la creación y sostenimiento de institutos
de perfeccionamiento o de especialización y el fomento de publicaciones y actividades
científicas, literarias y artísticas;
4) La creación de un cuerpo de docentes altamente especializados y consagrados a la
enseñanza;
5) El otorgamiento de los títulos o diplomas para el ejercicio de las profesiones liberales y
la reglamentación de su habilitación, reválida y reconocimiento, todo ello con carácter
exclusivo;
6) La promoción de las relaciones culturales con las entidades similares de los demás
países;
7) Asegurar la gratuidad de los estudios;
8) Interesarse por los problemas nacionales;
9) Prestar a los organismos del gobierno el asesoramiento que les fuere requerido;
10) Instituir cursos de extensión universitaria y favorecer toda forma de difusión
de la cultura;
11) Organizar sus servicios asistenciales.

Art. 2º – Todos los planes de enseñanza comprenderán, además de sus materias


específicas, cursos dedicados a la cultura filosófica, al conocimiento de la doctrina nacional
y a la formación política ordenada por la Constitución.

Art. 3º – Ninguna institución pública o privada podrá otorgar, sin ley especial que lo
autorice, títulos, grados y honores que puedan ser confundidos con los universitarios.

Art. 4º – El territorio nacional se dividirá en regiones universitarias, dentro de las cuales


ejercerá jurisdicción la respectiva universidad. Corresponde a cada una de ellas organizar
dentro de una zona de influencia los estudios regionales y promover las artes técnicas y
aplicadas con vistas a la explotación de sus riquezas y al incremento de las actividades
económicas locales.
Art. 5º– Integran las universidades:
1)Las facultades y escuelas, con los organismos que establezcan sus reglamentaciones;
2)Los establecimientos que funcionen actualmente dentro de la jurisdicción
universitaria y los que se incorporen posteriormente bajo la misma dependencia;
3)Los establecimientos privados, municipales, provinciales o nacionales que fueren
puestos bajo la jurisdicción universitaria por la autoridad competente.

Art. 6º – Las universidades cuentan con autonomía docente y científica y gozan de la


autarquía que en el orden administrativo les confiere la presente ley.

Art. 7º – Las universidades poseen plena capacidad jurídica para adquirir, vender u
administrar toda clase de bienes, así como para demandar y comparecer en juicio. Su
representación compete al rector, quien podrá delegarla y otorgar, en su caso, los poderes
necesarios.

CAPITULO II

Del gobierno de la universidad

Art. 8º – El gobierno de cada universidad será ejercido por un rector y un Consejo


Universitario.

Del rector

Art. 9º – El rector será designado por el Poder Ejecutivo y durará tres años en sus
funciones.

Art. 10º. – Para ser rector se requiere ser ciudadano argentino nativo y profesor titular o
adjunto confirmado, o bien diplomado universitario y tener treinta (30) años de edad.

Art. 11º. – Sin perjuicio de las demás funciones que le atribuye la presente ley y las que le
fijen otras disposiciones legales, el rector tendrá las siguientes:
1) Representar legalmente a la universidad;
2) Designar las personas que llevarán la representación oficial de la universidad;
3) Designar y remover al secretario y prosecretario de la universidad, que deberán
tener título universitario;
4) Convocar al Consejo Universitario a reuniones ordinarias y extraordinarias;
5) Firmar los títulos, diplomas y distinciones universitarias;
6) Designar los decanos de las facultades;
7) Resolver las cuestiones que no se hallen expresamente reservadas al Consejo
Universitario o a las autoridades de las facultades;
8) Dirigir la administración general de la universidad, pudiendo recabar de las
facultades y demás organismos universitarios los informes que estime conveniente;
9) Designar y remover al personal docente, auxiliar de la docencia y técnico
profesional de cada cátedra;
10) Adoptar las medidas urgentes para el buen gobierno de la universidad, dando
cuenta de ello al Consejo Universitario;
11) Ejercer la jurisdicción policial y disciplinaria en el asiento del rectorado y
del consejo;
12) Conceder las licencias en los casos señalados por las reglamentaciones
pertinentes;
13) Publicar, dentro de primer trimestre de cada año, una memoria que consigne
la tarea docente y la gestión administrativa realizada, dando cuenta al Consejo
Universitario.

Art. 12º. – El rector tendrá voz y voto en las decisiones del Consejo, prevaleciendo el
suyo en caso de empate.

Del Vicerector

Art. 13º. – El vicerector ejercerá las funciones del rector:


a) En caso de ausencia o impedimento;
b) Cuando por cualquier causa el cargo quedare vacante;
c) Cuando le fueren delegadas.
Para el caso de ausencia o impedimento del rector y vicerector, o de vacancia, se hará
cargo del rectorado el consejero de mayor edad, quien deberá dar cuenta de ello al Poder
ejecutivo.

Del consejo universitario

Art. 14º. – El Consejo Universitario estará constituido por el rector, que lo presidirá, y
por los decanos y vicedecanos de cada facultad.

Art. 15º. – El Consejo Universitario tendrá las siguientes atribuciones, sin perjuicio de las
demás que se le acuerdan en esta ley:
1) Elegir un vicerector entre sus miembros, que durará tres (3) años en funciones;
2) Dictar su reglamento interno y las ordenanzas que requiera el funcionamiento de la
universidad;
3) Ejercer la jurisdicción superior universitaria y resolver en última instancia
universitaria las cuestiones contenciosas que hayan fallado el rector o las facultades;
4) Resolver la intervención de las facultades, cuando su funcionamiento no se ajuste a
la presente ley;
5) Decidir en última instancia las cuestiones sobre validez o equivalencia de títulos,
diplomas, estudios, asignaturas, honores y distinciones universitarias, que hubieran sido
resueltas por los consejos de las facultades;
6) Revalidar, habilitar y reconocer los títulos o diplomas expedidos por universidades
extranjeras, de acuerdo con las leyes y con los tratados internacionales, previo estudio, en
cada caso de la jerarquía de la enseñanza impartida por las mismas. Será condición
indispensable para el ejercicio de las actividades profesionales el cumplimiento de los
establecido en el párrafo precedente;
7) Resolver lo conducente al ejercicio de la personería jurídica de la universidad;
8) Aprobar o devolver observadas a las facultades las ternas formuladas por estas para
la designación de profesores titulares, así como las reglamentaciones que dicten aquellas
para el nombramiento de profesores adjuntos, extraordinarios y honorarios. El Consejo
Universitario sólo tiene facultad para considerar el aspecto formal de las ternas y las
objeciones morales a los candidatos, nunca el orden de los nombres ni la competencia
científica y didáctica, que son privativos de cada facultad;
9) Proponer al Poder Ejecutivo la creación de nuevas facultades;
10) Acordar, por iniciativa propia o a propuesta de las facultades, la creación de nuevas
escuelas o institutos;
11) Aprobar los planes de estudio y los reglamentos que dicte cada facultad sobre sus
respectivas carreras;
12) Acordar, por iniciativa propia o a propuesta de las facultades, el título de doctor
honoris causa, o de miembro honorario de la universidad, a las personas que sobresalieren
por su obra, o por su labor científica, literaria o artística;
13) Fijar la fecha de iniciación y terminación del curso lectivo y duración de las
vacaciones;
14) Aprobar el proyecto de presupuesto general de la universidad y tomar conocimiento
de la inversión de los fondos asignados a la misma;
15) Vender, con autorización del Poder Ejecutivo, los bienes inmuebles, títulos y
valores pertenecientes a la universidad;
16) Aceptar las herencias con beneficios de inventario, y los legados o donaciones que
se dejen o hagan a las universidades o a las facultades o establecimientos que las integren;
17) Dictar los reglamentos para el régimen común de los estudios y disciplina general
de los establecimientos universitarios, con sujeción a las normas que dicte el Consejo
Nacional Universitario.

TITULO II

De las facultades

Del gobierno de las facultades

Art. 16º. – El gobierno de cada facultad será ejercido por un decano y un consejo
directivo, los que durarán tres (3) años en sus funciones.

Art. 17º. – Cuando el cargo de decano quedare vacante el nuevo decano será designado
por el tiempo que faltare para completar el período.

Del consejo directivo y de la designación de decano

Art. 18º. – El consejo directivo se integrará con el decano y once (11) consejeros.
La elección de consejeros se efectuará en comicios de profesores, quienes votarán
personalmente, en forma secreta, las listas de candidatos que depositarán en dos (2) urnas
distintas; una reservada para los profesores titulares, que votarán de entre ellos, por siete (7)
candidatos a consejeros titulares e igual número de sustitutos; y otra para los profesores
adjuntos, que votarán en la misma forma que los titulares, pero solamente por cuatro (4)
candidatos a consejeros titulares y otro número igual de sustitutos.
Los consejeros que dejen de ser profesores, cesarán inmediatamente en el ejercicio del
cargo.

Art. 19º. – Para aquellas facultades que no estén en condiciones de ajustarse a las
proporciones indicadas en el artículo precedente, el consejo universitario determinará las
que hagan posible la constitución del consejo directivo y establecerá el quórum para sus
reuniones.

Art. 20º. – El escrutinio y proclamación de los candidatos elegidos serán hechos por el
decano, asistido por el vicedecano y el consejero titular de más edad.

Art. 21º. – El decano será designado por el rector. En caso de que el nombramiento del
decano recaiga en uno de los consejeros, el consejo directivo será integrado por el
consejero sustituto que corresponda a la categoría del profesor designado decano.

Art. 22º. – Las vacantes de consejeros titulares que se produzcan antes de la fecha de
renovación, serán llenadas por sorteo que se realizará entre los consejeros sustitutos de
titulares o de adjuntos, según sea la vacante producida y manteniendo la representación de
las escuelas.

Art. 23º. – Si por sucesivas vacantes o ausencias quedara agotado el número de


consejeros sustitutos, el consejo directivo –aun en minoría– designará entre los consejeros
sustitutos de titulares o de adjuntos, según sea la vacante producida y manteniendo la
representación de las escuelas.

Art. 24º. – Las sesiones del consejo directivo se realizarán con el quórum de siete (7)
consejeros.

Art. 25. – El consejo directivo tendrá las siguientes atribuciones:


1) Designar vicedecano entre sus miembros;
2) Dictar el reglamento de la facultad y las ordenanzas que requiera su funcionamiento;
3) Proponer al consejo universitario, la adopción de la estructura departamental en el
orden docente de la facultad;
4) Proponer al consejo universitario la creación, modificación o supresión de escuelas,
cono también la proporción en que estarán representadas en el consejo directivo, y la
creación de institutos o cursos de investigación y para graduados;
5) Confeccionar y modificar los planes de estudios de las carreras o cursos especiales,
aprobándolos en primera instancia;
6) Decidir en primera instancia las cuestiones contenciosas referentes al orden de los
estudios, condiciones de ingreso, pruebas de promoción, de acuerdo con lo que
reglamente en general el Consejo Nacional Universitario;
7) Organizar las actividades de extensión universitaria atinentes a cada facultad;
8) Elevar al rectorado de la universidad las ternas de profesores titulares y designar los
profesores adjuntos y honorarios, y proponer al Consejo Universitario los profesores
extraordinarios;
9) Ejercer con respecto a los profesores, la potestad disciplinaria con arreglo a la
reglamentación que dicte el Consejo Nacional Universitario;
10) Pedir al Poder Ejecutivo, por intermedio del rector la separación de los titulares o
elevar sus renuncias. Remover a los demás profesores y decidir sobre sus renuncias, con
aprobación del Consejo Universitario;
11) Proyectar el presupuesto de la facultad;
12) Organizar la distribución o venta de publicaciones y productos.

Art. 26º. – Los miembros titulares del consejo directivo no podrán desempeñar empleos
rentados dependientes de la universidad, con excepción de los cargos directivos y docentes.
Tampoco podrán ser nombrados para cátedras, dirección, empleo o comisión rentada
creados durante su mandato, hasta después de dos (2) años de fenecido este. Los aspirantes
a cátedras ya existentes podrán presentarse al concurso, previa renuncia como miembros
del consejo directivo.

Del decano

Art. 27º. – Para ser decano se requiere ser ciudadano argentino nativo, y ser profesor
titular o adjunto confirmado en la respectiva facultad.

Art. 28º. – El decano tendrá voz y coto en las decisiones del consejo, prevaleciendo el
suyo en caso de empate.

Art. 29º. – El decano tendrá las siguientes funciones:


1) Convocar y presidir las sesiones del consejo directivo;
2) Representar a la facultad;
3) Firmar, juntamente con el rector, los títulos o diplomas universitarios;
4) Dar cuenta mensualmente al consejo directivo de la asistencia de los profesores;
5) Cumplir y hacer cumplir las resoluciones de los consejos universitario y directivo y
del rector;
6) Autorizar el ingreso de alumnos y expedir certificados de promoción, con arreglo a
las ordenanzas y reglamentos correspondientes;
7) Designar y remover al personal docente, auxiliar de la docencia y técnico
profesional de cada cátedra;
8) Acordar a los profesores licencias, de conformidad con la reglamentación que dicte
el Consejo Nacional Universitario;
9) Ejercer la vigilancia de la enseñanza, y la jurisdicción policial y disciplinaria dentro
de la facultad;
10) Dirigir la administración de la facultad y rendir cuenta de la inversión de los fondos;
11) Designar y remover al secretario de la facultad, el que deberá ser egresado
universitario;
12) Fijar las fechas de examen, número de turnos y orden de los mismos;
13) Despachar los asuntos de trámite con el simple dictamen de la comisión respectiva
del consejo directivo, salvo discrepancia, en cuyo caso el asunto será tratado por el consejo.

Del vicedecano
Art. 30º. – El vicedecano durará tres (3) años en funciones. Ejercerá las del decano
durante la ausencia o impedimento de este, o las que el mismo le delegare. En caso de
vacancia del vicedecano, el consejero que se haga cargo del mismo, completará el período.

Art. 31º. – En caso de ausencia, impedimento, renuncia o fallecimiento del vicedecano en


ejercicio del decanato, asumirá las funciones de vicedecano interino el consejero profesor
titular de mayor antigüedad en la cátedra.

TITULO III

De los profesores

Disposiciones generales

Art. 32º. – las universidades tendrán cuatro categorías de profesores: titulares, adjuntos,
extraordinarios y honorarios, no pudiendo crearse nuevas categorías.

Art. 33º. – El profesor universitario, sea titular o adjunto, no podrá acumular más de uno
de estos cargos en la misma facultad, ni en otras facultades y universidades. Son
incompatibles, por lo tanto, los cargos de profesor titular con el de adjunto, y los de
profesor adjunto en más de una asignatura, en la misma o en distintas facultades o
universidades. No podrán los profesionales a favor de intereses que estén en pugna,
competencia o colisión con los de la Nación, provincias o municipios, salvo los casos de
defensa de intereses personales del profesor, su cónyuge, ascendientes o descendientes,
siendo pasible, si lo hiciere, de suspensión, cesantía o exoneración.

Art. 34º. – La responsabilidad científico legal de la enseñanza y doctrinas expuestas en


clase, concierne exclusivamente a los profesores que la dicten y a ellos corresponde la
propiedad científica, intelectual, artística o literaria de su enseñanza. Lo establecido
precedentemente no se aplicará a los casos de investigaciones organizadas por la
universidad, facultades e institutos.

Art. 35º. – Los profesores podrán ser separados por las siguientes causas:
1) Condena criminal, que no sea por hecho culposo;
2) Abandono de sus funciones o negligencia grave en el ejercicio de las mismas;
3) Inconducta manifiesta;
4) Incapacidad sobreviniente.

De los profesores titulares

Art. 36º. – Los profesores titulares tienen a su cargo la dirección y ejercicio de la


enseñanza teórico-práctica de su asignatura y el desempeño autonómico de la cátedra.

Art. 37º. – Los profesores titulares serán designados por el Poder ejecutivo de la Nación,
de una terna de candidatos elevada por la universidad, previo concurso de méritos,
aptitudes técnicas y pedagógicas. títulos, antecedentes y trabajos.
Art. 38º. – Producida una vacante de profesor titular, se llamará a concurso dentro de un
plazo no mayor de tres (3) meses, poniéndose interinamente la cátedra a cargo de un
profesor adjunto correspondiente a la misma materia y, a falta de éste, podrá designarse
otro profesor de materia afín.

Art. 39º. – El consejo directivo de cada facultad designará, en cada caso, una comisión
asesora compuesta por tres miembros, sorteados entre un mínimo de diez profesores
titulares, de la misma materia los hubiere, y de las materias afines a la cátedra, de la misma
facultad y/o de otras universidades, si no alcanzare a integrarse con los de aquélla. El orden
de afinidad entre las materias establecerá con carácter permanente por las facultades al
aprobar los respectivos planes de estudios.

Art. 40º. – La comisión asesora elevará al consejo directivo de la facultad una terna por
orden de méritos, títulos, antecedentes y trabajos, la que quedará sujeta a las siguientes
condiciones:
1) El consejo directivo de la facultad podrá observar el aspecto formal de las ternas,
variar su orden o integrarlas en forma distinta a la propuesta por la comisión asesora,
requiriéndose para esto último dos tercios de votos de los miembros presentes;
2) La terna será elevada a la universidad, que juzgará sobre los aspectos formales del
concurso. En caso de que el consejo directivo hubiere modificado el dictamen de la
comisión asesora, elevará un informa fundado al consejo universitario, exponiendo los
motivos y antecedentes que determinaron la modificación de la terna;
3) La universidad después de aprobar la terna la elevará al Poder Ejecutivo juntamente
con todos los antecedentes del concurso.

Art. 41º. – Para ser admitido al concurso... antecedentes morales inobjetables, poseer
título o diploma universitario nacional, con cinco (5) años por lo menos de antelación y
haber acreditado aptitudes docentes o trabajos científicos en la correspondiente especialidad
o en materia de íntima conexión con ella.

Art. 42º. – Las ternas para profesor titular deberán formarse previo dictamen escrito y
fundado de la comisión asesora del consejo directivo.
Para configurar la terna se tendrá en cuenta en forma preferente, el cargo de profesor
adjunto, en caso de igualdad de antecedentes. A los concursantes que no fueran profesores
adjuntos, el consejo directivo podrá exigirles una prueba complementaria. La actividad
científica y docente del candidato deberá ser continua y comprobada mediante
publicaciones y cursos que se estimarán no sólo por el número, sino también y en primer
término, por el mérito intrínseco.

Art. 43º. – Cuando se haya declarado desierto un llamado a concurso por no haberse
podido integrar la terna se procederá a un segundo llamado. En caso de repetirse la
situación anterior el consejo directivo deberá dictaminar sin el requisito de la terna.

Art. 44º. – Los profesores titulares pueden presentarse a concurso para optar a otra
cátedra, pero si la obtuvieren estarán obligados a renunciar a la cátedra que hubieren estado
dictando. Los profesores adjuntos se considerarán presentados automáticamente a los
concursos de las cátedras titulares cuya adjuntía ejercen, salvo manifestación expresa en
contrario.

Art. 45º. – Son funciones de los profesores titulares:


1) Conducir la enseñanza de la cátedra, a cuyo efecto deberán: a) Presentar anualmente
al consejo directivo, para su aprobación, el programa de la materia; b) Distribuir la
enseñanza con los profesores adjuntos; c) Formar parte de las mesas examinadoras; d)
Desempeñar las comisiones relacionadas con la enseñanza que se les encomienden; e)
Colaborar en las publicaciones de la universidad y facultad y en las investigaciones de los
institutos, Todo ello con arreglo a las reglamentaciones que se dicten;
2) Participar en las elecciones de consejeros y desempeñar este cargo en caso de ser
elegido para el mismo;
3) Establecer con sus colegas y alumnos una relación de convivencia adecuada al
sentido humanista y de solidaridad social de la universidad;
4) Prestar al Poder Ejecutivo la colaboración y asesoramiento que le fuere requerido
por conducto del consejo directivo.

De los profesores adjuntos

Art. 46º. – Los profesores adjuntos serán nombrados por concurso por el consejo
directivo, con aprobación del consejo universitario, de acuerdo con la reglamentación
pertinente.
Para ser admitido al concurso se requieren las mismas condiciones exigidas en el caso de
los profesores titulares, salvo la antigüedad como egresado que se reduce a dos (2) años.
Podrán admitirse a los concursos para profesores adjuntos, aun cuando no hayan seguido la
carrera docente, aquellos candidatos de reconocida personalidad científica, probada con
trabajos o actuación docente. En tal caso se requerirá ser propuesto por cuatro (4)
consejeros de la facultad.

Art. 47º. – Cada facultad determinará, con aprobación del Consejo Universitario, el
número de profesores adjuntos que corresponda a cada cátedra, el que no podrá exceder en
total del equivalente a un promedio de dos por cátedra. Todas las ordenanzas relativas al
régimen de concursos para la designación de profesores adjuntos, requerirán aprobación del
Consejo Universitario.

Art. 48. – Son funciones de los profesores adjuntos:


1) Colaborar en las tareas de la cátedra de acuerdo con la reglamentación que dicte la
facultad, a cuyo efecto deberán:
a) Participar en la enseñanza de acuerdo con la distribución que haga el profesor
titular;
b) Formar parte de las mesas examinadoras;
c) Reemplazar a los titulares en el desempeño de sus cátedras y demás funciones;
d) Desempeñar las comisiones relacionadas con la enseñanza, que se les encomienden;
e) Colaborar en las publicaciones de la universidad y facultad y en las investigaciones
de los institutos.
2) Participar en las elecciones de consejeros y desempeñar este cargo en caso de ser
elegido para el mismo;
3) Establecer con sus colegas y alumnos una relación de convivencia adecuada al
sentido humanista y de solidaridad social de la universidad;
4) Prestar al Poder Ejecutivo la colaboración y asesoramiento que les fuere requerido
por conducto del consejo directivo.

Art. 49º. – Cumplidos cuatro (4) años de su designación, el profesor adjunto, para seguir
siéndolo, deberá ser confirmado por el Congreso Universitario, el que tendrá para ello en
cuenta su comportamiento moral y docente y haber presentado un trabajo sobre la materia,
juzgado por una comisión nombrada por el consejo directivo, que se llamará tesis de
profesorado. Todo ello según la reglamentación que dicte la facultad. Los profesores
adjuntos que no hayan sido confirmados cesarán automáticamente en sus funciones.

De los profesores extraordinarios

Art. 50º. – El Consejo Universitario, a propuesta del consejo de la facultad, podrá


solicitar al Poder Ejecutivo la contratación de profesores extraordinarios por un plazo que
no deberá exceder de cinco (5) años. La remuneración y las funciones de los mismos serán
determinadas en cada caso por la facultad respectiva al formular la propuesta.

De los profesores honorarios

Art. 51º. – Al profesor que se retire de la enseñanza se le podrá otorgar, por el consejo
directivo, en los casos de haberse destacado por su actuación, el título de profesor
honorario, con el voto de las dos terceras partes de sus miembros y con la aprobación del
Consejo Universitario en igual forma.
El título de profesor honorario es vitalicio. Sus funciones serán determinadas por las
reglamentaciones de cada facultad, con la aprobación del Consejo Universitario.

De la carrera docente

Art. 52º. – Todo egresado de la universidad, con cinco (5) o más años de ejercicio
profesional que reúna trabajos, títulos y antecedentes científicos suficientes, podrá solicitar
al consejo directivo un permiso para enseñar, y cumplidos los requisitos exigidos para
demostrar su capacidad docente, que establecerá cada facultad, se le conferirá permiso para
enseñar en carácter de “venia docendi”. Sus antecedentes como tal serán tenidos en cuenta
con preferencia en los concursos de profesor adjunto.
El régimen de la enseñanza del “venia docendi”, será reglamentado por cada facultad.

Art. 53º. – Cada facultad reglamentará su carrera docente ajustándose a las siguientes
bases:
1) El aspirante a profesor universitario cursará un periodo de adscripción a una
determinada cátedra, durante el cual realizará trabajos de investigación o seminario, bajo la
dirección del respectivo profesor, y ejercicios docentes en la materia de su adscripción;
completará su preparación con cursos obligatorios sobre materias de cultura general.
Podrán implantarse o no, según las características de cada facultad, exámenes finales para
la aprobación de las materias de adscripción;
2) Cumplido esto, el aspirante a profesor pasará a ejercer la docencia complementaria
bajo la dirección del profesor titular y durante el tiempo que fijará cada facultad para cada
asignatura;
3) Terminada esta etapa, y previo un examen general de competencia técnica y docente
sobre la materia de su dedicación será reconocido como docente autorizado;
4) El docente autorizado tendrá las obligaciones que le fije cada facultad y sus
antecedentes serán tenidos en cuenta con preferencia en los concursos de profesor adjunto.

De los claustros universitarios

Art. 54º. – Constituyen el claustro general de profesores, todos los docentes titulares y
adjuntos de cada facultad. Podrán también constituirse claustros parciales de las diversas
escuelas, por separado, para considerar exclusivamente los resultados del plan de estudios y
las reformas que se sugieran.
Los claustros serán citados y presididos por el decano de cada facultad.

Art. 55º. – El decano citará el claustro general o parcial cuando lo considere conveniente,
pudiendo consultarlos por escrito.

TITULO IV

De las remuneraciones

Art. 56º. – El rector y el vicerector de la universidad, los decanos, directores de escuelas o


institutos y profesores, percibirán las remuneraciones uniformes para todas las
universidades argentinas, que fije la Ley General de Presupuesto de la Nación.

Art. 57. – Los profesores titulares y adjuntos y el personal diplomado auxiliar de la


docencia, gozarán de un aumento del diez por ciento (10%) en sus remuneraciones, cada
cinco (5) años de ejercicio de la docencia universitaria.

TITULO V

De los estudiantes

Art. 58º. – Los requisitos de admisión, categorías, promociones, concesión de becas,


épocas de examen y todo lo atinente al régimen del estudiante, será reglamentado por el
Consejo Nacional Universitario.

Art. 59º. – Los estudiantes tendrán una representación en los consejos directivos de cada
facultad por medio de un delegado, alumno regular de uno (1) de los tres (3) últimos años
de estudio, y proveniente de entidad gremial reconocida tendrá voto solamente en aquellas
cuestiones que directamente afecten a los intereses estudiantiles.

De la enseñanza para graduados


Art. 60º. – Las facultades reglamentarán la enseñanza para graduados, organizando
centros de graduados y cursos de perfeccionamiento o especialización.

TITULO VI

Del Consejo Nacional Universitario

Art. 61º. – El Consejo Nacional Universitario estará constituido por los rectores de todas
las universidades del país, será presidido por el Ministro Secretario de Estado de Educación
de la Nación, y tendrá además de las funciones que expresamente le acuerda la presente ley,
las siguientes:
1) Coordinar la obra docente, cultural y científica de las universidades, de modo que
consulte los intereses y problemas del país y de cada región universitaria;
2) Asesorar al gobierno en todos los asuntos relativos a la actividad universitaria,
especialmente en la creación, supresión o transformación de universidades e institutos
superiores;
3) Armonizar y uniformar los planes de estudio condiciones de ingreso, sistemas de
promoción, número de cursos y títulos a otorgar para las mismas carreras;
4) Reglamentar y aconsejar lo concerniente a la extensión universitaria de cada
universidad;
5) Coordinar, planificar y racionalizar las normas que regirán las publicaciones
universitarias;
6) Promover la realización de congresos docentes universitarios;
7) Asesorar al Poder Ejecutivo en la creación, organización y funcionamiento de las
academias nacionales, disponiendo lo conducente para que las universidades actúen en
forma coordinada con ellas.

TITULO VII

Del patrimonio y recursos de la universidad y su administración

De los bienes de la universidad

Art. 62º. – Forman el patrimonio de la universidad los bienes que en virtud de ley o por
otro título gratuito y oneroso, correspondan al dominio de la universidad, así como las
colecciones científicas y publicaciones que tengan las facultades, institutos o dependencias
universitarias.

De los recursos, donaciones y cuentas

Art. 63º. – Son recursos de las universidades:


1) Las contribuciones de rentas generales que anualmente fije el presupuesto general
de la Nación para cada organismo o en particular para sus facultades, institutos y
establecimientos;
2) Los frutos, intereses y rentas de sus bienes patrimoniales;
3) Las donaciones de terceros a su favor o en beneficio de sus facultades, institutos o
establecimientos;
4) Todo otro recurso que le corresponda o se le asigne.
Para compensar las contribuciones mencionadas en el apartado 1) del presente artículo,
incorpóranse a rentas generales los recursos a que se refiere la primera parte del art. 8º de la
Ley 13.558.

Art. 64º. – Queda facultado el Poder Ejecutivo para incorporar al presupuesto general de
la Nación, con cargo a rentas generales durante el ejercicio de 1954, de conformidad con lo
previsto por el apartado 1) del art. 63º de la presente ley los créditos que, en la medida de
las necesidades de cada organismo universitario, sean indispensables para su
desenvolvimiento en el citado ejercicio. Queda asimismo autorizado el Poder Ejecutivo
para disponer la cancelación de las deudas que al 31 de diciembre de 1953 cada universidad
no haya podido atender con las disponibilidades con que hubiere contado, inclusive los
anticipos efectuados oportunamente por el Tesoro Nacional para cubrir insuficiencias de los
ingresos universitarios. Dichos gastos serán atendidos con los recursos a que se refiere el
art. 3º de la Ley 13.654.

Art. 65º. – El uso de las atribuciones que la presente ley confiere a los organismos
universitarios no podrá traducirse en erogaciones para cuya atención no se cuente con la
pertinente autorización de crédito en sus respectivos presupuestos. En este caso, como así
también cuando el ejercicio de dichas atribuciones demande la modificación de la
estructura presupuestaria o importe un nuevo compromiso de gastos para ejercicios futuros,
deberá requerirse la previa conformidad del Poder Ejecutivo.

Art. 66º. – Cuando se trate de herencias, legados o donaciones o cualquier otra liberalidad
a favor de las facultades, el consejo universitario no podrá pronunciarse sin oír a éstas y no
podrá aceptar aquellas que las facultades decidan rechazar. Estas contribuciones
comprenden las condiciones o cargos que puedan imponer los testadores o benefactores.
Aceptada una herencia, legado, donación, no podrá ser modificado sin oír nuevamente a la
facultad beneficiada.

Art. 67º. – Salvo disposición especial del consejo universitario, todas las dependencias
universitarias que recauden fondos, los entregarán mensualmente a la tesorería de la
universidad, cualquiera sea su procedencia, enviado al rector los documentos justificativos
y explicativos del caso.

Art. 68º. – Los fondos universitarios estarán depositados a la orden del rector, quien
dispondrá de su inversión de acuerdo con el régimen financiero y contable vigente.

TITULO VIII

Art. 69º. – Queda facultado el Poder Ejecutivo para reajustar los presupuestos de gastos y
cálculos de recursos de las universidades a fin de adecuarlos a las disposiciones de la
presente ley.

Art. 70º. – Los concursos para la provisión de cargos de profesores titulares y adjuntos,
en trámite a la fecha de la sanción de la presente ley se regirán por las disposiciones de la
reglamentación bajo la cual se llamó a concurso.
Art. 71º. – Sin perjuicio de lo establecido por el art. 47º, los profesores adjuntos
designados por el consejo universitario al 31 de octubre de 1953, tendrán derecho a la
percepción de las remuneraciones a que se refieren los arts. 56º y 57º.

Art. 72º. – La presente ley entrará en vigencia el 1º de enero de 1954, quedando


derogadas la Ley 13.031 y todas las disposiciones que se opongan a la presente.
Los requisitos y procedimientos para la designación de las autoridades de las
universidades y facultades establecidos en la presente ley, no se aplicarán a las actuales
autoridades mientras ejerzan su mandato.

Art. 73º. – Comuníquese, etc.

Sanción: 18 de diciembre de 1953.


Promulgación: 11 de enero de 1954.
Decreto Ley 477, 7 de octubre de 1955 (Ed.). – Deroga las Leyes 13.031 y 14.297, y
restablece la vigencia de la Ley 1.597, sobre gobierno de las Universidades (B. O.
14/X/55).

Visto lo informado por el Ministerio de Educación; y


Considerando: Que es propósito inflexible del gobierno revolucionario establecer el pleno
ejercicio de la autonomía universitaria, necesario requisito para salvaguardar la libertad
académica y la libre actuación de los derechos de enseñar y aprender que garantiza la
Constitución Nacional;
Que para ello deben derogarse los dos instrumento legales sancionados por el gobierno
depuesto con el objeto de cercenar la autonomía universitaria volviéndose a restablecer, en
forma provisional, la plena vigencia de la Ley 1.597 (3) (Ley Avellaneda) que en su
reducido articulado establece los aproximados requisitos legales de un régimen
universitario autónomo y propio para cada Universidad;
Por todo ello, el Presidente provisional de la Nación Argentina, en ejercicio del Poder
Legislativo, decreta con fuerza de ley:

Art. 1º – Deróganse en todas sus partes las Leyes nacionales 13.031 (4) y 14.297 (5),
quedando en consecuencia restablecida la vigencia de la Ley 1.597 en todos sus efectos.

Art. 2º – Mientras no se constituyan legítimamente las autoridades regulares de cada


universidad y dicten el estatuto de las mismas, los señores interventores de las
universidades nacionales están facultados para ejercer las atribuciones que las respectivas
leyes de creación confieren a los rectores y consejeros superiores y los señores delegados
interventores en cada facultad o escuela las que dichas normas confieren a los decanos y
c2onsejos directivos.

Art. 3º – Comuníquese, etc.

Lonardi. – Dell´Oro Maini.


Decreto Ley 6.403, 23 de diciembre de 1955 (Ed.) – Organización de las Universidades
Nacionales (B. O. 3/I/56).

Visto: Las proposiciones sometidas a la consideración de la reunión de Interventores en


las universidades nacionales y el resultado de las deliberaciones producidas con ese motivo;
y
Considerando: Que el programa de recuperación de la Universidad argentina trazado por
el Gobierno de la Revolución Libertadora está fundado como es público y notorio, en el
principio de la autonomía, cuyo valor y eficacia ha proclamado reconociéndolo como el
fundamento de la responsabilidad que incumbe a dichas corporaciones para darse a sí
mismas su estructura y funcionamiento de acuerdo con las finalidades que le son propias;
Que en virtud del respeto a dicho principio ha limitado su acción a lo que es estrictamente
indispensable para reparar el agravio sufrido por la Universidad, sus profesores y alumnos
durante la dictadura, y para asentar las bases constitución de sus autoridades legítimas;
Que en virtud del respeto a dicho principio ha limitado su acción a lo que es estrictamente
indispensable para reparar el agravio sufrido por la Universidad, sus profesores y alumnos
durante la dictadura, y para asentar las bases de reestructuración de su claustro docente y la
constitución de sus autoridades legítimas;
Que a ese fin, el Gobierno de la Revolución dispuso la abrogación de las Leyes 13.031 (1)
y 14.297 (2), para volver al régimen de la llamada Ley Avellaneda (3) cuyas disposiciones
resultaban inicialmente suficientes para el cumplimiento del plan propuesto y para dejar a
cada Universidad la posibilidad de dictar su propio estatuto, según las exigencias de su
vocación particular, de su experiencia y de su ambiente local;
Que los decretos y resoluciones dictados hasta la fecha por el Gobierno de la Revolución
han aplicado severamente el plan prometido, extendiendo hasta el límite máximo su
propósito y ratificando en cada caso el aludido principio de la autonomía, no obstante
hallarse sometidas las universidades a las intervenciones de los delegados del Poder
Ejecutivo, único medio posible de volver a su cauce regular la vida de tales instituciones;
Que cumplidas ya las primeras etapas de esta labor, conviene determinar aquellas
subsiguientes que han de cumplirse de inmediato, dando a conocer el modo cómo el
Gobierno se propone anticipar la vigencia de la autonomía, en cuanto están reunidos en
cada Universidad los requisitos mínimos indispensables para el ejercicio de la enseñanza y
el establecimiento de los respectivos Consejos;
Que desde este punto de vista, es suficiente que, por lo menos, exista en las diferentes
escuelas de cada Universidad el claustro de profesores titulares, el cual unido al cuerpo de
estudiantes y al de graduados, pueden dar los elementos necesarios para la elección de las
autoridades y el subsiguiente otorgamiento de la anhelada autonomía;
Que el procedimiento de constituir previamente el claustro de profesores titulares está
determinado por la necesidad de componer los cuerpos electorales con los miembros
definitivamente incorporados al seno de la Universidad por razón de un título permanente o
incontrovertible;
Que oídas las diferentes sugestiones hechas sobre la mejor manera de realizar los
concursos, es oportuno incorporar al presente decreto las normas concernientes a su
ejecución con el fin de imprimir a los procedimientos y obtener para sus resultados la
seriedad, imparcialidad y eficacia que este Gobierno se ha propuesto asegurar;
Que conviene sobre todo en esta oportunidad en que se restablece el normal
funcionamiento de las universidades, conservar y afirmar los principios establecidos en la
Ley Avellaneda adaptándolos a la realidad de los hechos conforme a los dictados de la
experiencia que, consagrados en los últimos estatutos sancionados por las propias
universidades, constituyen, por su valor genérico, el fundamento de la corporación
universitaria;
Que organizadas las respectivas universidades, ha llegado el momento en la historia
universitaria del país de asentar en su plenitud el principio de la autonomía, abrogando los
artículos 1º inc. 6º y 3º de la Ley Avellaneda 1597, que ponen en manos del Presidente de
la Nación la designación y remoción de los profesores titulares, como un homenaje al alto
nivel de cultura alcanzado por aquellas y a la labor desplegada en la formación de tantas
generaciones argentinas;
Que una condición indispensable para asegurar en los hechos la plena autonomía consiste
en liberar a la Universidad de la dependencia financiera y burocrática que pueda trabar su
desarrollo y, particularmente, el digno ejercicio de la libertad moral e intelectual, condición
que es posible establecer sin desmedro alguno de la justa comprobación de las inversiones;
Que el incremento de la investigación científica y el desarrollo logrado en el país por la
libre vocación de la cultura, avasallada por los excesos del Estado, aconsejan la
conveniencia de aprovechar la experiencia padecida, y es, por consiguiente, oportuno y
necesario promover, por medio de la ley, el progreso decidido hacia la independencia de la
labor intelectual, el reconocimiento de sus frutos y la validez de sus resultados, como una
forma de estimular la iniciativa privada y la capacidad creadora del espíritu de la Nación, el
Presidente provisional de la Nación Argentina, en ejercicio del Poder Legislativo, decreta
con fuerza de ley:

I – Organización de las universidades nacionales

Art. 1º – Las universidades nacionales se organizan y desenvuelven dentro del régimen


jurídico de autarquía. Tienen el pleno gobierno de sus estudios y la administración de su
patrimonio conforme a las leyes respectivas, y de acuerdo con los estatutos que cada una
dicte para sí misma según las modalidades de su tradición y las conveniencias de su ámbito
local.
Se dan a sí mismas la estructura y los planes de estudios que correspondan a la triple
finalidad que las caracteriza en el orden de la profesión, de la investigación científica y de
la universidad de la cultura. Eligen y remueven a sus profesores, sin intervención del Poder
Ejecutivo, y expiden los certificados de competencia que corresponden a los estudios
realizados en su seno.

Art. 2º – Los órganos que ejercen normalmente el gobierno y la administración de las


universidades, es decir, los decanos y consejos directivos de cada facultad, y el Rector y
Consejo Superior de aquellas, se constituirán conforme a los principios establecidos en las
normas del presente decreto ley.
Las disposiciones concernientes al llamado a concurso de los profesores titulares rigen
solamente hasta tanto este constituido en los mismos el claustro de profesores de cada
facultad, con el fin de proceder inmediatamente a la constitución de sus primeras
autoridades.
Las universidades, una vez nuevamente constituidas, podrán sugerir al Poder Ejecutivo las
modificaciones o ampliaciones que estimen convenientes al presente decreto-ley.
Art. 3º – El Consejo Directivo de las facultades que componen cada universidad, está
integrado por un decano y por representantes de los profesores titulares, de los profesores
adjuntos o suplentes, de los estudiantes y de los profesores titulares, de los profesores
adjuntos o suplentes, de los estudiantes y de los egresados, en el número que determine
cada universidad –la primera vez por el interventor respectivo– según sus particulares
modalidades y conveniencias, y en una proporción que asegure la responsabilidad directa
de los representantes del claustro de profesores.

Art. 4º – El decano será elegido, entre los profesores titulares, por cada Consejo
Directivo, constituido en asamblea y, presidido la primera vez, por el delegado interventor.

Art. 5º – La representación de los estudiantes y egresados en los consejos directivos se


hará por mayoría y minoría, cuando aquélla exceda el número de dos delegados.

Art. 6º – Los delegados de los estudiantes a los consejos directivos deben ser alumnos de
los dos últimos años de estudios (carreras profesionales) o haber aprobado por lo menos, las
tres cuartas partes de los planes de estudios en aquellos institutos cuyos planes no están
divididos por años.

Art. 7º – El padrón de estudiantes, a los efectos electorales, es realizado por las facultades
y en el mismo están inscriptos todos los estudiantes que, habiendo ingresado, tengan
aprobado, por lo menos, una materia del primer año y no hayan suspendido sus exámenes
por dos años a contar desde el último.

Art. 8º – Los interventores darán instrucciones a cada facultad, para abrir el padrón de los
egresados, podrán inscribirse en dicho padrón quienes tengan título expedido por la misma
facultad.
No podrán ser delegados de los egresados quienes desempeñan cátedra universitaria.

Art. 9º – El voto será secreto y obligatorio para los profesores y los estudiantes. También
lo será para los egresados inscriptos en el padrón.

Art. 10º. – Los profesores que sin causa debidamente justificada dejaren de votar podrán
ser apercibidos o suspendidos en el ejercicio de sus funciones hasta un mes en caso de
reincidencia.

Art. 11º. – Los alumnos que dejaren de votar deberán justificar la causa determinante de
su abstención como requisito previo a la inscripción en la lista de exámenes, Los egresados
que, sin causa debidamente justificada, dejaren de votar serán eliminados definitivamente
del padrón.

Art. 12º. – El Consejo Superior está compuesto por el rector, los decanos de las
facultades; por la representación de los profesores de cada facultad y por los delegados de
los estudiantes y los de los egresados en el número que determine, para cada
representación, la respectiva universidad –haciéndolo la primera vez el interventor– según
sus particulares modalidades y conveniencias, y en una proporción que asegure la
responsabilidad directiva de los representantes del claustro de profesores.
Art. 13º. – La representación de los profesores de cada facultad al Consejo Superior será
elegida entre y por los profesores que integran el Consejo Directivo de la respectiva
facultad, presidida por el decano que corresponda.

Art. 14º. – La representación de los estudiantes en el Consejo Superior será elegida entre
y por los delegados ante los consejos directivos de las facultades que integran cada
universidad, presididos, la primera vez, por el interventor, y en lo sucesivo, por el rector o
quien éste designe.

Art. 15º. – La representación de los egresados en el Consejo superior será elegida ante los
consejos directivos de las facultades que integran cada universidad, presididos la primera
vez, por el interventor, y en lo sucesivo, por el rector.

Art. 16º. – El Rector será elegido entre los profesores titulares por la Asamblea
Universitaria.

Art. 17º. – La Asamblea Universitaria está integrada por los decanos y todos los
miembros de los consejos directivos. La primera elección de rector se hace bajo la
presidencia del interventor de cada universidad.

Art. 18º. – La elección de rector requiere mayoría absoluta. Si después de una nueva
votación no fuera alcanzada esa mayoría, la sucesiva votación se hará entre los dos
candidatos más votados y por simple mayoría. En caso de empate, se repetirá la votación, y
si ella no diera resultado, quedará elegido el de mayor edad entre los dos.

Art. 19º. – El rector, los decanos, los delegados de los profesores y de los egresados en
ambos consejos ejercerán su mandato por el período que establezca en su estatuto cada
universidad. Los elegidos, la primera vez por aplicación de las presentes disposiciones
durarán dos (2) años en sus funciones. Los delegados estudiantiles serán elegidos por un (1)
año.

Art. 20º. – La elección de decano, delegados profesores al Consejo Superior y Consejo


Directivo requiere únicamente la simple mayoría de votos de las respectivas asambleas.

Art. 21º. – Las decisiones de los órganos colegiados se tomarán por simple mayoría de
votos en quórum. El rector y los decanos tienen doble voto en caso de empate.

Art. 22º. – Al constituirse el Consejo Superior y los consejos directivos se procederá a


elegir, en la primera sesión, entre los delegados profesores titulares, al vicerector y a los
vicedecanos, respectivamente.

Art. 23º. – En caso de renuncia del rector o del decano, el vicerector o el vicedecano
convocará dentro de los treinta días, las respectivas asambleas, siempre que faltare más de
un año para la terminación del periodo para el cual fue elegido el renunciante.
Art. 24º. – En todos los casos en que deban elegirse delegados se votará por titulares y
suplentes.

Art. 25º. – Para ejercer cargos directivos en las universidades nacionales se requiere ser
argentino o naturalizado.

Art. 26º. – Las cátedras serán ejercidas por periodos limitados y los plazos y condiciones
serán reglamentados por cada universidad.

Art. 27º. – Encomiéndase a los Ministerios de Educación y de Hacienda de la Nación el


estudio de las condiciones necesarias para asegurar la autarquía financiera de las
Universidades Nacionales según lo dispone el art. 1º mediante la creación de un Fondo
Universitario Nacional y para proponer oportunamente las normas que, a tal efecto, ha de
dictar el Poder Ejecutivo.

Art. 28º. – La iniciativa privada puede crear universidades libres que estarán capacitadas
para expedir diplomas y títulos habilitantes siempre que se sometan a las condiciones
expuestas por una reglamentación que se dictará oportunamente.

II – Concurso para la designación de los profesores titulares que han de constituir el


primer claustro universitario

Art. 29º. – En todas las universidades nacionales se llamará a concurso de títulos y


antecedentes para la designación de profesores titulares en las cátedras de las respectivas
facultades.

Art. 30º. – El llamado a concurso se referirá a todas las cátedras actuales de las materias
fundamentales cuyo mantenimientos sea previsible en cualquier plan de estudios. Los
delegados interventores propondrán al interventor dentro del plazo de diez (10) días a partir
de este decreto-ley, la nómina de materias que serán llamadas a concurso con más de una
cátedra, propondrán el número de ellas que se proveerán actualmente con el concurso. Los
interventores quedan facultados a postergar el llamado a concurso respecto de cátedras
desempeñadas por profesores contratados, cuyos contratos deban continuar en vigencia y
respecto de cátedras que a juicio de los mismos exijan dedicación exclusiva de profesores
contratados.

Art. 31º. – Una vez recibidas las nóminas de materias y aprobadas por el interventor, este
fijará la fecha de iniciación del término de inscripción para la designación de profesores
titulares, lo que se hará conocer, por lo menos, con veinte (20) días de anticipación,
mediante la publicación, por tres (3) veces consecutivas, en dos (2) diarios de la ciudad
sede de las respectivas facultades o escuelas. Ese término de inscripción será de veinte (20)
días corridos y tendrá igual publicidad. Los aspirantes deberán acompañar en diez (10)
ejemplares sus antecedentes docentes y científicos, dentro del plazo de inscripción, no
requiriéndose que sean impresos. Los residentes en el extranjero podrán inscribirse por
escrito o por carta poder, con facultad para ejercer la defensa en caso de impugnación. El
apoderado no podrá ser otro inscripto, ni miembro del tribunal o de la comisión asesora. En
caso de que así sobreviniere deberá ser reemplazado el apoderado en el plazo de veinte (20)
días, los que no se computarán a los efectos de este reglamento. La lista de los inscriptos se
publicará durante el término de diez (10) días en los tableros de la facultad y de cinco (5)
días en dos (2) diarios, por lo menos, de la ciudad.

Art. 32º. – Los profesores que se presenten al concurso deberán satisfacer los siguientes
requisitos:
Generales: a) conducta moral inobjetable; b) título profesional universitario y el más alto
grado que esa casa de estudios otorgue, de los cuales podrá prescindirse sólo en casos en
que por las condiciones de las cátedras o por la calidad del aspirante ello quedara
justificado, pero la eventual designación como profesor, si dicho título y grado procedieran,
quedará condicionada a la obtención de los mismos dentro del plazo de dos (2) años desde
aquella designación. Para las cátedras de idiomas se admitirá también el título de profesor
diplomado expedido por institutos nacionales del profesorado; c) si la cátedra fuera de
enseñanza teórica el grado o título del candidato deberá, en principio, tener por lo menos
una antigüedad de dos (2) años y de cuatro (4) si fuera de enseñanza práctica.
Especiales: a) no serán admitidos al concurso quienes hayan realizado actos positivos y
ostensibles que prueben objetivamente la promoción de doctrinas totalitarias adversas a la
dignidad del hombre libre y a la vigencia de las instituciones republicanas; b) no serán
admitidos tampoco al concurso, quienes en el desempeño de un cargo universitario, de
funciones públicas o de cualquier otra actividad, hayan realizado actos positivos y
ostensibles de solidaridad con la dictadura, que comprometan el concepto de independencia
y dignidad de la cátedra.

Art. 33º. – Para la admisión de los candidatos a concurso regirán las siguientes
disposiciones; a) publicadas las listas de inscripción en la forma establecida, podrán
impugnarse, durante el plazo de diez (10) días, los candidatos, por no reunir los requisitos
exigidos. Las impugnaciones podrán ser formuladas por profesores, por otros inscriptos y
también por representantes de organizaciones estudiantiles o de egresados de la misma
facultad que hayan comunicado su constitución antes de la apertura del primer concurso; b)
hechas las impugnaciones, se correrá vista a los impugnados por diez (10) días para que
formulen su defensa; c) producidas estas el delegado interventor se expedirá por resolución
fundada; d) todas las actuaciones serán por escrito en papel romaní y tramitadas y decididas
en procedimiento sumario, sin audiencias, careos o incidentes; e) a la impugnación y
defensa se acompañarán las pruebas respectivas o se indicará con precisión donde ellas se
encuentren; f) el delegado interventor podrá, de oficio, eliminar del concurso a un
candidato por resolución fundada, cuando no reúna los requisitos exigidos y rechazar,
también de oficio, las impugnaciones que no se ajusten a las formalidades precedentes o
que no se refieran a los requisitos prescriptos; g) los inscriptos eliminados del concurso
deberán ser notificados por telegrama colacionado dirigido al domicilio especial que deberá
constituirse en las respectivas presentaciones; h) el impugnante deberá, asimismo, ser
notificado cuando la impugnación no hubiere prosperado; i) contra la resolución del
delegado, cabrá recurso en el término perentorio de cinco (5) días ante un tribunal especial,
constituido por el interventor y los delegados interventores en todas las facultades de la
misma universidad que dictará la resolución definitiva; j) el tribunal especial se pronunciará
sobre los recursos por mayoría de votos presentes, contando el interventor con doble voto
en caso de empate.
Art. 34º. – Todos los términos serán contados en días corridos.

Art. 35º. – Para asesorar sobre los títulos y antecedentes de los candidatos a profesores
titulares, se constituirán en cada facultad, por resolución de los interventores, y a propuesta
de los delegados interventores de cada facultad, comisiones de, por lo menos tres (3)
miembros para cada materia o materias afines, que reúnan los más satisfactorios
antecedentes científicos, intachable conducta moral y clara actitud cívica frente a la
dictadura depuesta. Las comisiones asesoras podrán integrarse con personalidades
nacionales o extranjeras. Podrán formar parte de las mismas los interventores, los delegados
interventores o delegados no podrán presentarse como aspirantes a ningún concurso.

Art. 36º. – Las comisiones asesoras no computarán como título probatorio de


competencia, el ejercicio mecánico y rutinario de la cátedra por parte de quienes la han
profesado sin destacarse en ellas por la realización de cursos intensivos, trabajos de
investigación, publicaciones u otras iniciativas de jerarquía científica y docente.

Art. 37º. – Las comisiones asesoras considerarán como un título de valor moral, el
ejemplo dado a sus alumnos por los profesores que, sacrificando su interés personal,
perdieron la legítima posesión de sus cátedras por mantener su independencia y el libre
ejercicio de las mismas, o por defender el decoro de las instituciones republicanas.

Art. 38º. – Las juntas asesoras podrán, excepcionalmente exigir una prueba de oposición.

Art. 39º. – El voto, que las comisiones asesoras presentarán a los delegados interventores,
será fundado y escrito, y expresará el orden de mérito de todos los candidatos admitidos.
Las comisiones asesoras se expedirán por mayoría de votos. También podrán aconsejar que
el concurso quede desierto.

Art. 40º. – De acuerdo con el dictamen de las comisiones asesoras, los delegados
elevarán a la intervención de la universidad una terna en orden de méritos. En los
expedientes correspondientes constará, en un cuerpo, las inscripciones, el dictamen de la
comisión asesora, y las resoluciones dictadas y, en cuerpo aparte, la impugnación, defensa
y pruebas. La secretaría general de la universidad producirá un informe y dará cuenta de lo
actuado. Los interventores elevarán al Poder Ejecutivo las ternas por orden de méritos, para
la oportuna designación de los profesores y serán acompañadas con todas las actuaciones
del concurso.

Art. 41º. – Los interventores están autorizados, conforme con una regla de vigencia
universal, para proponer al Poder Ejecutivo sin necesidad de nuevo concurso y como caso
excepcional, la designación de profesores que en posesión anterior de ese carácter ostenten
títulos de valor eminente y extraordinario, suficientes para justificar la excepción.

III – Proceso del establecimiento de la plena autarquía en las universidades nacionales

Art. 42º. – Los interventores en las universidades procederán. a llamar a concurso de


títulos y antecedentes para la designación de profesores titulares, exclusivamente, en las
cátedras de las diferentes facultades y escuelas, de acuerdo con lo dispuesto en el capítulo II
del presente decreto-ley.

Art. 43º. – Terminada la designación de profesores titulares, los interventores llamarán a


elecciones a dichos profesores titulares, a los alumnos y a los egresados para constituir los
consejos directivos de cada facultad, de acuerdo con las normas contenidas en el capítulo I
del presente decreto-ley. Los profesores titulares deberán elegir los consejeros que los
representen como tales y además, con carácter transitorio, y de su propio seno, mientras se
designen a los profesores adjuntos, a aquellos que ocuparán los cargos vacantes
correspondientes a estos últimos.

Art. 44º. – Los delegados interventores de cada facultad convocarán a los miembros
elegidos para el Consejo Directivo con el fin de que, reunidos en asamblea, designan al
decano.

Art. 45º. – Los decanos comunicarán al interventor la constitución de los consejos


directivos que presiden, y el interventor procederá a convocar a los delegados de los
estudiantes y de los egresados que integran aquellos consejos, con el fin de elegir sus
representantes en el seno del Consejo Superior.

Art. 46º. – Cuando estén designados todos los delegados que componen el Consejo
Superior de la respectiva universidad, el interventor convocará a la asamblea universitaria
con el objeto de proceder a la elección del rector.

Art. 47º. – Los consejos directivos deberán llamar a concurso para la designación de
profesores adjuntos o suplentes, de acuerdo con las normas que dicten los mismos consejos.
Sus designaciones serán hechas por las respectivas universidades conforme con las normas
que las mismas dicten.

Art. 48º. – Los profesores adjuntos que resulten designados, deberán ser convocados para
elegir a sus representantes dentro de los consejos directivos, conforma con las mismas
normas que rigieron la elección de los demás consejeros.

Art. 49º. – Las universidades nacionales dictarán su propio estatuto después de haber
integrado sus respectivos consejos directivos con los representantes de los diversos grupos
que las componen: profesores titulares, profesores adjuntos, estudiantes y egresados.

Art. 50º. – Quedan derogadas todas las disposiciones que se opongan a las del presente
decreto-ley y, en particular, las contenidas en el art. 1º. inc. 6º y art. 3º de la Ley 1.597 y las
del art. 36º del Estatuto de la Universidad Nacional de La Plata, aprobado por la ley 4.699
(1) concernientes a la designación y remoción de profesores universitarios.

Art. 51º. – El presente decreto-ley será refrendado por el Excmo. señor Vicepresidente de
la Nación y por todos los señores ministros secretarios de Estado del Poder Ejecutivo
Nacional.

Art. 52º. – Comuníquese, etc.


Aramburu, Rojas. – Podestá Costa. – Dell´Oro Maini. – Busso. – Martínez. – Ygartúa. –
Mendiondo. – Bonnet. – Blanco. – Mercier. – Alsogaray. – Alizón García. – Llamazares. –
Ossorio Arana. – Hartung. – Abrahín. – Landaburu.
LEY 14.467 – Ratificación de Decretos-leyes del Gobierno Provisional (B. O.
29/IX/58).

Art. 1º – Declárase que continúan en vigencia los decretos-leyes dictados por el Gobierno
Provisional entre el 23 de setiembre de 1955 y el 30 de abril de 1958, que no hayan sido
derogados por el Honorable Congreso de la Nación.

Art. 2º – Comuníquese, etcétera.

Sanción: 5 de setiembre de 1958.


Promulgación: 23 de setiembre de 1958.
LEY 14.557 – Régimen de universidades privadas (B. O. 24/X/58).

Art. 1º – Derógase el art. 28º del Decreto ley 6.403/55 (1) y apruébase en su reemplazo el
siguiente:
La iniciativa privada podrá crear universidades con capacidad para expedir títulos y/o
diplomas académicos.
La habilitación para el ejercicio profesional será otorgada por el Estado Nacional.
Los exámenes que habiliten para el ejercicio de las distintas profesiones serán públicos y
estarán a cargo de los organismos que designe el Estado Nacional.
Dichas universidades no podrán recibir recursos estatales y deberán someter sus estatutos,
programas y planes de estudio a la aprobación previa de la autoridad administrativa, la que
reglamentará las demás condiciones para su funcionamiento.
El Poder Ejecutivo no otorgará autorización, o la retirará si la hubiese concedido, a las
universidades privadas cuya orientación y planes de estudio no aseguren una capacitación
técnica, científica y cultural en los graduados, por lo menos equivalente a la que impartan
las universidades estatales y/o que no propicien la formación democrática de los estudiantes
dentro de los principios que informan la Constitución Nacional.

Art. 2º – Comuníquese, etcétera.

Sanción: 30 de setiembre de 1958.


Promulgación: 17 de octubre de 1958.
Decreto 1404, 11 de febrero de 1959 (Ed. y J.). – Universidades privadas;
reglamentación de la Ley 14.557 y creación de la Inspección General de Enseñanza
Universitaria Privada (B. O. 14/II/59).

Art. 1º – Créase la Inspección General de Enseñanza Universitaria Privada, que


dependerá del Ministerio de Educación y Justicia de la Nación y tendrá las siguientes
atribuciones:
a) Registrar las Universidades privadas a que alude el presente decreto;
b) Controlar el cumplimiento de las leyes, decretos y resoluciones atinentes a las
mismas;
c) Dictaminar en forma fundada en las circunstancias previstas en el presente decreto,
y en toda oportunidad que su informe le sea solicitado por el señor Ministro de Educación y
Justicia.

Art. 2º – Las Universidades privadas serán facultadas por decreto del Poder Ejecutivo
Nacional para expedir títulos y/o diplomas académicos, cuando hayan cumplido con los
requisitos establecidos por la Ley 14.557 y los que a continuación se indican, previo
dictamen fundado de la Inspección General de enseñanza Universitaria Privada:
a) Estar constituidas como entidades con personería jurídica;
b) Sancionar un estatuto constitutivo en el que se establezca:
1º El objeto, determinado con precisión y claridad.
2º El propósito de desarrollar sus actividades en consonancia con las instituciones
republicanas y democráticas del país.
3º En general, una organización adecuada a la naturaleza de la labor científica y de
los estudios que se proponga.
c) Tener un cuerpo docente idóneo, cuyos componentes posean título universitario en
la especialidad o, en su defecto, personalidad científica o cultural relevante que acredite su
aptitud para el ejercicio de la cátedra;
d) Tener un número razonable de inscriptos por curso o período de enseñanza dentro
de cada facultad, escuela o departamento;
e) Disponer de recursos, locales y elementos suficientes para su constitución y
funcionamiento;
f) Presentar a la Inspección General de Enseñanza Universitaria Privada planes de
estudio y promoción para las respectivas carreras;
g) Dar a conocer la nómina y antecedentes del personal docente y autoridades
universitarias.

Art. 3º – Las Universidades privadas justificarán encontrarse en las condiciones previstas


en el artículo anterior, haciendo las presentaciones pertinentes ante la Inspección General
de Enseñanza Universitaria Privada, la que, previo examen y comprobación de dichas
condiciones, elevará la petición, con dictamen fundado, al Poder Ejecutivo Nacional para
su resolución.
Si el Poder Ejecutivo Nacional considera que la Universidad peticionante ha cumplido
con los requisitos legales y reglamentarios dictará decreto disponiendo el registro
solicitado, en los términos de la Ley 14.557.
Art. 4º – Para obtener la habilitación para el ejercicio profesional los egresados de las
Universidades privadas deberán someterse a un examen final de capacitación profesional
que se ajustará a las siguientes normas:
a) Dicho examen será tomado por tribunales de profesionales y profesores de la
especialidad de que se trate, designados por el Poder Ejecutivo Nacional, en igual número,
entre profesores de las Universidades Nacionales; funcionarios o magistrados
especializados del Estado, profesores de Universidades privadas reconocidas y miembros
de academias, colegios o asociaciones profesionales. El tribunal estará además integrado
por un profesor designado por la Universidad privada a la que pertenezca el egresado que
se someta a examen;
b) Los integrantes de los tribunales examinadores que sean designados en su condición
de profesores de las Universidades Nacionales, Universidades privadas reconocidas o
miembros de academias, colegios o asociaciones profesionales, lo serán en base a una terna
de candidatos que presentarán al Poder Ejecutivo los mencionados organismos; los que
corresponda designar directamente al Estado, serán propuestos al Poder Ejecutivo, en terna,
por la Inspección General de Enseñanza Universitaria Privada;
c) En caso de que las Universidades privadas reconocidas tengan su sede en las
provincias, las ternas de candidatos que sean funcionarios o magistrados especializados de
las provincias y miembro de los colegios o asociaciones profesionales locales, serán
propuestos al Poder Ejecutivo nacional por los Poderes Ejecutivos provinciales y colegios o
asociaciones locales.
d) Los exámenes de habilitación serán públicos, correspondiendo al Ministerio de
Educación y Justicia fijar las fechas, la materia, el procedimiento y el lugar de realización
de los mismos.

Art. 5º – Los títulos profesionales habilitantes serán suscriptos por el Ministerio de


Educación y Justicia y por las autoridades superiores de la Universidad privada reconocida
y facultad respectiva. Esos títulos profesionales tendrán la misma validez que los expedidos
por la Universidad Nacional y habilitarán para el ejercicio profesional.

Art. 6º – Queda expresamente prohibido a las Universidades privadas reconocidas,


revalidar títulos extranjeros. Dicha atribución será privativa de las Universidades
Nacionales.

Art. 7º – Las Universidades privadas reconocidas no podrán recibir recursos estatales, y


harán conocer el origen de sus fondos y llevarán un régimen adecuado de sus ingresos y
egresos.

Art. 8º – El Poder Ejecutivo Nacional suspenderá temporariamente o, en su caso, excluirá


definitivamente del registro, a las Universidades privadas, cuando se comprobare en debida
forma legal y con audiencia de la universidad interesada, que esta ha violado las
obligaciones establecidas en las leyes, decretos y resoluciones atinentes a su
funcionamiento y a su estatuto normativo.

Art. 9º – El presente decreto será refrendado por el Señor Ministro Secretario de Estado
en el departamento de Educación y Justicia.
Art. 10º. – Comuníquese, etc.

Frondizi. – Mac Kay.


LEY N° 17.604

UNIVERSIDADES PRIVADAS

Buenos Aires, diciembre 12 de 1967

En uso de las atribuciones conferidas por el artículo 5° del Estatuto de la Revolución


Argentina.

El Presidente de la Nación Argentina,


sanciona y promulga con fuerza de Ley:

Artículo 1°- La creación y funcionamiento de establecimientos universitarios privados


requerirán el otorgamiento de la autorización pertinente por decreto del Poder Ejecutivo
Nacional. Este ejercerá la fiscalización permanente del Estado sobre dichos
establecimientos, con el objeto de verificar si se cumplen las condiciones bajo las cuales
están autorizados a funcionar. En caso contrario, adoptará las medidas que juzgue
apropiadas, pudiendo llevar hasta la clausura definitiva.

Artículo 2°- A los fines del otorgamiento de la autorización, deberán evaluarse, sobre la
base de razones de política educativa, además de las características exigibles y de los
requisitos de estructuración y de nivel, las necesidades regionales y sectoriales del
desarrollo nacional.

La autorización bajo denominación de "Universidad" exigirá variedad de Facultades,


Escuelas, Institutos o Departamentos, orgánicamente estructurados. La creación y
funcionamiento de Facultades, Escuelas, Institutos, Departamentos u otro tipo de
establecimientos universitarios aislados, serán autorizados con criterio restrictivo.

La autorización será concedida con expresa indicación de las carreras, grados y títulos que
se cursen u otorguen en el establecimiento correspondiente; y para toda modificación se
requerirá la autorización previa del Poder Ejecutivo.

Artículo 3°- Los establecimientos universitarios privados deberán observar los mismos
fines generales y funciones que los prescriptos para las universidades nacionales en los
artículos 2º y 3º de la Ley 17.245, debiendo ajustar su acción a lo establecido en el artículo
4º de dicha ley. Sin perjuicio de ello, podrán fijar las finalidades y funciones que se
justifiquen por las circunstancias particulares de su fundación.

Artículo 4°- El Estado reconoce a los establecimientos universitarios privados los


siguientes derechos:

a) Dictar y reformar sus estatutos académicos, con la aprobación del Poder Ejecutivo, en
los cuales deberán establecer la organización académica y los regímenes de Gobierno,
disciplina, profesores, alumnos, enseñanza y promoción;
b) Fijar sus planes de estudio, los cuales deberán ser aprobados por el Poder Ejecutivo en
cuanto a su estructura general;

c) Expedir títulos académicos, los que, cumplidos los requisitos que se establezcan para su
habilitación por el Poder Ejecutivo, tendrán los efectos previstos en el artículo 87º de la
Ley 17.245.

Artículo 5°- Los establecimientos universitarios privados deberán constituirse sin fines de
lucro, obteniendo personería jurídica como asociación civil o fundación, concedida por el
Poder Ejecutivo nacional o autoridad provincial. A los efectos de la presente ley deberán
asimismo cumplir los siguientes requisitos:

a) Los órganos de gobierno deberán estar integrados por mayoría absoluta de personas de
nacionalidad argentina;

b) La constitución y evolución de su patrimonio y el origen y destino de sus recursos


deberán estar sujetos a la fiscalización del Poder Ejecutivo, para el adecuado resguardo
de los intereses nacionales;

c) El número, la remuneración, la idoneidad y dedicación del personal directivo, docente,


de investigación, técnico y administrativo, deberán hacer posible el cumplimiento de las
finalidades y funciones señaladas en el Artículo tercero. Igualmente, los
establecimientos deberán contar con los medios económicos e instalaciones que
posibiliten el normal desarrollo de sus tareas.

Artículo 6°- La autorización a que se refiere el artículo 1º será provisional o definitiva.

Artículo 7°- La autorización provisional se otorgará por decreto del Poder Ejecutivo previo
cumplimiento de los requisitos establecidos por la presente ley y de acuerdo con la
reglamentación que se dicte.

Dicha autorización facultará a los establecimientos privados correspondientes para


desarrollar sus actividades mientras no se suspenda o retire aquella.

Los establecimientos autorizados provisionalmente deberán dejar constancia expresa del


carácter precario de la autorización estatal en todo documento oficial o publicidad que
realicen. El incumplimiento de esta exigencia dará motivo suficiente para proceder al
inmediato retiro de la autorización provisional; ello sin perjuicio de otras sanciones
administrativas o penales que pudieran corresponder.

Artículo 8°- La autorización definitiva se concederá o denegará por decreto del Poder
Ejecutivo, una vez cumplido un ciclo completo de estudios para todas las carreras cursadas
en el establecimiento interesado, desde la fecha de otorgamiento de la autorización
provisional.
Artículo 9°- Los profesores de todas las categorías deberán poseer título universitario, o en
su defecto, de manera estrictamente excepcional, antecedentes objetivamente evaluables,
por los que se acredite la debida competencia.

Los órganos de Gobierno de los establecimientos universitarios privados sólo podrán estar
integrados por profesores universitarios.

Artículo 10°- Para ingresar como alumno en los establecimientos universitarios privados se
requerirá haber aprobado los estudios correspondientes al nivel medio de enseñanza.

Artículo 11°- Las materias o trabajos aprobados en establecimientos universitarios


privados o universidades nacionales, gozarán de idéntica validez a los efectos
correspondientes en todas las universidades del país, salvo el derecho de exigir el examen
complementario de temas no comprendidos en el examen rendido para su aprobación. Sin
perjuicio de ello, y a los efectos de la expedición de títulos o grados, cada establecimiento
determinará el número mínimo de materias o cursos que deban ser aprobados en él.

Artículo 12°- Los establecimientos universitarios privados autorizados en forma definitiva


podrán reconocer estudios parciales aprobados en universidades del extranjero, de acuerdo
con la reglamentación que se dicte. Está prohibido a los establecimientos universitarios
privados otorgar reválida de títulos extranjeros. Los diplomados en universidades
extranjeras podrán seguir en dichos establecimientos cursos de postgrado y obtener títulos
que no podrán ser habilitados en los términos y con los efectos del artículo 4º, inciso c).

Artículo 13°- El ejercicio de cargos directivos en establecimientos universitarios privados


es incompatible con toda actividad política. Queda prohibido asimismo en los referidos
establecimientos todo acto de proselitismo o propaganda política. En caso de infracción, las
sanciones correspondientes serán aplicadas a juicio y por resolución del Poder Ejecutivo.
Según la gravedad o reiteración de aquélla, consistirán en amonestación, separación de las
autoridades -que importará inhabilitación de los responsables para ejercer la docencia por
un período de uno a cinco años- y clausura del establecimiento.

Artículo 14°- Al solo efecto devolutivo y fundado en la interpretación de la ley, procederá


recurso de apelación ante la Cámara Federal de Apelaciones de la Capital de la República:

a) Contra las resoluciones dictadas en ejercicio de las atribuciones conferidas por los
artículos 13º y 18º;

b) Contra las resoluciones que dispongan el retiro de autorización provisional y contra las
resoluciones denegatorias o de retiro de autorización definitiva.

El recurso deberá ser interpuesto dentro de los diez días hábiles de notificada la medida que
se recurre.

Artículo 15°- No habrá recurso alguno contra las resoluciones denegatorias de autorización
provisional.
Artículo 16°- Los establecimientos universitarios privados autorizados quedan exentos de
los impuestos, contribuciones y tasas que se especifiquen por decreto del Poder Ejecutivo
Nacional.

Artículo 17°- El Consejo de Rectores de las Universidades Privadas será órgano de


consulta en todo lo concerniente al régimen legal de la enseñanza universitaria privada, a la
aplicación de éste y al planeamiento educativo en dicho sector. La reglamentación
determinará su integración y funcionamiento en cuanto órgano de consulta.

Artículo 18°- Los establecimientos privados cuya creación no hubiera sido autorizada de
acuerdo con la presente ley, no podrán usar denominaciones ni expedir diplomas, títulos o
grados que a juicio del Poder Ejecutivo deban reservarse para distinguir instituciones,
actividades, competencias o profesiones de carácter universitario. La violación de esta
norma se penará con la clausura inmediata y definitiva y la inhabilitación de los
responsables para ejercer la docencia, por un período de uno a cinco años, en cualquier
establecimiento estatal o privado, y para desempeñar la función pública por idéntico plazo.

Artículo 19°- Los establecimientos que a la fecha de la sanción de la presente ley están
registrados por sendos decretos del Poder Ejecutivo, de acuerdo con el régimen de la Ley
14.557, se considerarán autorizados en forma definitiva. En el término de un año deberán
ajustarse a las exigencias establecidas en la presente ley.

Artículo 20°- Los establecimientos que a la fecha de sanción de la presente ley no


estuviesen registrados, y que hubieran denunciado la iniciación de sus actividades sin hacer
obtenido autorización para funcionar por decreto del Poder Ejecutivo, deberán, para
acogerse al régimen de esta ley, obtener la autorización provisional antes del 20 de marzo
de 1968. Respecto de tales establecimientos el artículo 18º se aplicará a partir de la fecha en
que les sea denegada la autorización provisional.

En los casos de resolución denegatoria los estudios cursados y aprobados podrán


convalidarse en universidades nacionales o establecimientos universitarios privados
autorizados definitivamente, en las condiciones que se reglamentaren.

Artículo 21°- Quedan derogados todas las disposiciones que se opongan a la presente ley.

Artículo 22°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial
y archívese.

ONGANIA - Guillermo A. Borda.


LEY 17.245 – Ley orgánica de las universidades nacionales (B. O. 25/IV/67).

TITULO I

Disposiciones generales

Art. 1º – La enseñanza universitaria en el territorio nacional estará a cargo:


a) De las universidades nacionales, las que se regirán por las disposiciones de la
presente ley;
b) De las universidades provinciales y de las universidades privadas registradas,
regidas por legislaciones específicas, hasta tanto una ley integre esas normas en un
ordenamiento general de la educación superior que respete el principio de libertad de
enseñanza.

Art. 2º – Las universidades nacionales son instituciones de derecho público cuyos fines
esenciales son:
a) La formación plena del hombre a través de la universalidad del saber y del
desarrollo armonioso de su personalidad;
b) La formación de universitarios capaces de actuar con responsabilidad y patriotismo
al servicio de la Nación;
c) La investigación de la verdad y el acrecentamiento del saber;
d) La preparación de profesionales, técnicos e investigadores necesarios para el país;
e) La preservación, difusión y transmisión de la cultura y en especial del patrimonio
común de valores espirituales de la nacionalidad.

Art. 3º – Para cumplir con sus fines las universidades nacionales deberán:
a) Procurar educación general de nivel superior, estimulando y disciplinando la
creación personal, el espíritu indagativo y las cualidades que habilitan para actuar con
idoneidad, patriotismo y dignidad moral en la vida pública y privada;
b) Realizar investigación científica, humanística y tecnológica en el más alto nivel y
estimular la creación artística;
c) Preparar profesionales, técnicos e investigadores en número y calidad adecuados a
las necesidades de la Nación;
d) Proveer a la formación y al perfeccionamiento de sus propios docentes e
investigadores, creando las condiciones para la excelencia y originalidad de su quehacer;
e) Organizar la orientación, especialización, perfeccionamiento y actualización de sus
graduados;
f) Contribuir, mediante publicaciones y todo otro tipo de actividad apropiada, a la
difusión y a la preservación de la cultura en el país;
g) Estudiar los problemas de la comunidad a la que pertenecen y proponer soluciones
cuando así lo requieran los organismos correspondientes del Gobierno nacional, provincial
o comunal.

Art. 4º – La acción de las universidades deberá realizarse con auténtico sentido social al
servicio de los intereses fundamentales de la Nación. Para ello buscará inspiración
permanente en los principios esenciales de nuestra tradición cultural y espiritual,
fortaleciendo el respeto por la dignidad de la persona y sus derechos, contribuyendo al
afianzamiento del espíritu cívico y de la conciencia nacional y atendiendo a las necesidades
generales y regionales del país en estrecha vinculación con la realidad de su medio.

Art. 5º – Para el cumplimiento de lo establecido en los artículos anteriores el Estado


confiere a las universidades autonomía académica y autarquía financiera y administrativa.

Art. 6º – Las universidades gozan de las siguientes atribuciones:


a) Adoptar y ejecutar todas las decisiones que hagan al cumplimiento de sus fines;
b) Dictar y reformar sus estatutos, con la aprobación del Poder Ejecutivo y organizarse
conforme a ellos;
c) Elegir sus autoridades;
d) Designar y remover su personal;
e) Formular y desarrollar planes de investigación, educación, enseñanza y extensión;
f) Expedir grados académicos, títulos habilitantes y de idoneidad;
g) Establecer su régimen disciplinario, extensivo a los actos que puedan realizar los
integrantes de la Universidad fuera de su ámbito y que afecten su orden y prestigio;
h) Administrar y disponer de su patrimonio y de sus recursos, así como realizar los
demás actos de gestión económica, jurídica y financiera necesarios para su
desenvolvimiento;
i) Mantener relaciones de carácter científico y docente con instituciones del país y del
extranjero, participar en reuniones internacionales e integrar asociaciones universitarias del
mismo carácter.

Art. 7º – La autonomía y la autarquía reconocidas por esta ley no se entenderán nunca


como obstáculo para el ejercicio de las atribuciones y deberes que competen a otras
autoridades nacionales o locales respecto del mantenimiento del orden público y al imperio
de la legislación común en el ámbito universitario.

Art. 8º – Se asegurará a todo docente o investigador la libertad de exponer o indagar en su


disciplina, siguiendo las orientaciones científicas con que pueda ser entendida y cultivada.

Art. 9º – Las autoridades universitarias se abstendrán de formular, en cuanto tales,


declaraciones políticas o asumir actitudes que comprometan la seriedad y el prestigio
académicos.

Art. 10º. – Prohíbese en los recintos universitarios, toda actividad que asuma formas de
militancia, agitación, propaganda, proselitismo o adoctrinamiento de carácter político. Los
conflictos sociales y los problemas ideológicos y políticos, podrán ser, sin embargo, objeto
de estudio y análisis científico en los cursos y tareas de investigación correspondientes.

Art. 11º. – No podrán usar la denominación de Universidad aquellos establecimientos


educativos, cualquiera fuera su nivel, no contemplados en el art. 1º.

TITULO II

Organización académica
CAPITULO I

De las Facultades y Departamentos

Art. 12º. – Cada Universidad podrá adoptar como base de su organización académica y
administrativa, el sistema de Facultades o una estructura departamental, atendiendo a sus
necesidades y características.

Art. 13º. – Además de las Facultades y Departamentos académicos que la puedan integrar
según el sistema adoptado, forman parte de las respectivas universidades, las escuelas,
institutos y demás establecimientos de carácter universitario, puestos bajo su jurisdicción,
cualquiera sea la denominación elegida para caracterizarlos y que no contradigan la ley
17.178.

Art. 14º. – En las universidades, organizadas según el sistema de Facultades deberán


agruparse las materias afines, sean o no de una misma facultad, en unidades pedagógicas.

CAPITULO II

De los docentes e investigadores

Art. 15º. – El personal docente de las universidades nacionales se compone de:


a) Los profesores;
b) Los auxiliares de docencia.

Art. 16º. – Los profesores serán de carácter ordinario y extraordinario.


Los profesores ordinarios pertenecerán a las siguientes categorías:
1. Profesores titulares y titulares plenarios
2. Profesores asociados
3. Profesores adjuntos
4. Profesores consultos.
Los profesores extraordinarios pertenecerán a las siguientes categorías:
1. Profesores eméritos
2. Profesores visitantes
3. Profesores honorarios.

Art. 17º. – Los investigadores serán asimilados a las categorías especificadas en el


artículo anterior.

Art. 18º. – Los docentes están obligados a realizar investigación y los investigadores a
participar en la docencia. El estatuto y las reglamentaciones contemplarán en casos
especiales la dispensa de obligaciones de uno u otro género a profesores e investigadores.

Art. 19º. – La responsabilidad de la enseñanza, investigación y gobierno dentro de las


universidades para el cumplimiento de sus fines, corresponde a los profesores ordinarios.
Art. 20º. – Los profesores titulares ejercen la dirección de la cátedra y tienen a su cargo la
orientación general de la enseñanza.

Art. 21º. – Podrán ser designados profesores titulares plenarios quienes hayan acreditado
capacidad sobresaliente en la docencia y sean autores de publicaciones o trabajos que
constituyan aportes positivos a la respectiva disciplina. Deberán acogerse al régimen de
dedicación exclusiva o de tiempo completo y tendrán carácter permanente mientras se
desempeñen con rectitud y competencia bajo las condiciones que establezcan los
respectivos estatutos.

Art. 22º. – Los profesores asociados colaboran con los titulares en el ejercicio de la
cátedra sin tener relación de dependencia docente respecto de ellos, salvo que así lo
requieran las exigencias de la enseñanza o la necesidad de coordinar los programas de
estudio. Podrán asimismo quedar a cargo de la cátedra.

Art. 23º. – Los profesores adjuntos colaboran con los titulares y asociados conforme con
lo que disponga quien se encuentre a cargo de la cátedra, con relación de dependencia
docente. Podrán estar a cargo de la cátedra sustituyendo al profesor titular o asociado.

Art. 24º. – Los profesores que hayan alcanzado el límite de edad fijado en el art. 33º,
podrán ser designados, conforme con la reglamentación que dicte el Consejo Superior de
cada universidad, profesor consulto, título que agregará al de titular, asociado o adjunto,
que tuviera al tiempo de esa designación.

Art. 25º. – Los profesores titulares que hayan alcanzado el límite de edad fijado en el
artículo 33 y probado condiciones sobresalientes en al docencia o la investigación, podrán
ser designados profesores eméritos de acuerdo con las disposiciones estatutarias
respectivas. Los profesores eméritos pueden continuar en la investigación y colaborar en la
docencia.

Art. 26º. – Los profesores visitantes son los de otras universidades del país o del
extranjero a quienes se invita a desarrollar actividades docentes de naturaleza de acuerdo
con las condiciones que reglamente cada estatuto.

Art. 27º. – Los profesores honorarios son personalidades relevantes del país o del
extranjero a quienes la Universidad otorga especialmente esa distinción.

Art. 28º. – Las universidades reglamentarán el régimen de los auxiliares de docencia.


Será requisito para desempeñar tales tareas la condición de graduado, salvo en aquellos
casos de excepción en que la modalidad particular de los estudios haga imprescindible la
colaboración de alumnos en funciones auxiliares.
Cada excepción deberá ser fundada y autorizada por resolución expresa del Consejo
Académico.

Art. 29º. – Los profesores titulares plenarios, titulares, asociados y adjuntos y los
investigadores de categorías similares, serán designados por concurso público y de acuerdo
con las formas y pruebas que el estatuto disponga, en las que deberán evaluarse los
antecedentes adquiridos en todas las universidades nacionales, provinciales y privadas
registradas del país, así como del extranjero. La reglamentación que se dicte deberá
asegurar en todos los casos:
a) La idoneidad e imparcialidad de los jurados, que deberán integrarse con profesores
de la especialidad, con jerarquía no inferior a la del cargo objeto del concurso;
b) La publicidad de los antecedentes de los candidatos, de las pruebas que se rindan y
de los dictámenes de los jurados;
c) La capacidad docente y científica, la integridad moral, la rectitud universitaria y la
observancia de las leyes fundamentares de la Nación, como únicas exigencias para el
desempeño de la cátedra universitaria.

Art. 30º. – Las designaciones de profesores asociados y adjuntos, se harán por el término
de 7 años, al vencimiento de los cuales se podrá llamarse nuevamente a concurso. La
reglamentación respectiva deberá respetar el derecho a la estabilidad del docente que se
haya desempeñado en forma satisfactoria, pudiendo ser confirmado en forma directa por
voto de las dos terceras partes de los consejos académicos. Las designaciones de profesores
titulares se harán por el término de 3 años. Los profesores titulares confirmados al cabo de
este período, por concurso o por el voto de las dos terceras partes de los consejos
académicos, adquirirán estabilidad.

Art. 31º. – Los nombramientos interinos se harán por tiempo no mayor de 2 años y
únicamente para resolver situaciones de emergencia.

Art. 32º. – Podrá también recurrirse al régimen de contrataciones cuando las necesidades
de la enseñanza a los trabajos de investigación lo exigieren.

Art. 33º. – Los profesores titulares, asociados y adjuntos serán relevados de sus funciones
a los 65 años de edad y podrán ingresar en las categorías fijadas en los arts. 24º y 25º.

Art. 34º. – Los profesores e investigadores podrán ser removidos por las siguientes
causas:
a) Manifiesto incumplimiento de las condiciones exigidas en el inc. c) del art. 29º;
b) Condena por delito que afecte el honor y la dignidad;
c) Hechos públicos de inconducta;
d) Inhabilidad física, incompatibilidad moral o deshonestidad intelectual.

Art. 35º. – En todos los casos los cargos de auxiliares docentes serán provistos por
concurso con la participación del profesor titular en la composición del jurado. Las
designaciones de los auxiliares docentes serán por un término no mayor de 2 años al
vencimiento de los cuales se llamará nuevamente a concurso, a menos que el profesor
titular aconseje prorrogar sus funciones por un nuevo período, a cuyo término se llamará
nuevamente a concurso.

Art. 36º. – La dedicación de los docentes será:


a) Exclusiva
b) De tiempo completo
c) De tiempo parcial
d) Simple.
El docente de dedicación exclusiva es aquel que desarrolla una tarea de docencia e
investigación en la Universidad durante un tiempo no menor de 45 horas semanales, con
exclusión de toda otra actividad remunerada, sea o no en relación de dependencia.
El docente de tiempo completo es aquel que desarrolla tareas docentes y de investigación
en la Universidad durante un tiempo no menor de 35 horas semanales y a quien le es
permitido desarrollar otras actividades remuneradas fuera de dicho horario.
El docente de tiempo parcial es aquel que desarrolla tareas docentes y de investigación en
la Universidad durante un tiempo no menor de 25 horas semanales.
El docente de dedicación simple es aquel que desarrolla tareas docentes y de investigación
en la Universidad, con los horarios que fijen los reglamentos respectivos en relación con la
índole de su actividad.

Art. 37º. – Las universidades reglamentarán el régimen de dedicación. Dicha


reglamentación tendrá en cuenta las modalidades propias de cada Facultad y la importancia
del régimen de dedicación exclusiva o de tiempo completo para las asignaturas básicas y la
jefatura de las unidades pedagógicas.

Art. 38º. – Cada Universidad procurará adecuar su estructura docente a fin de contar con
un mínimo del 50% de profesores pertenecientes a los tres primeros regímenes de
dedicación. Dicha adecuación contemplará las características específicas de cada Facultad.

Art. 39º. – Los estatutos reglamentarán las obligaciones de los profesores. Los profesores
titulares deberán elevar anualmente al Consejo Académico el programa de enseñanza e
investigación que se desarrollará en su cátedra e informar sobre los trabajos y actividades
de investigación realizados en ella.

Art. 40º. – Institúyese la carrera docente que tendrá como objeto capacitar a quienes
tengan vocación por la enseñanza y reglar el acceso a la docencia universitaria. Las
universidades reglamentarán la carrera docente en el plazo de un año, teniendo en cuenta
las siguientes bases:
a) Deberá respetar las modalidades de la carrera a que se aplique, e incluir cursos o
seminarios de humanidades, de metodología de la enseñanza y de la investigación y otros
de especialización referentes a la disciplina de que se trate;
b) Serán computables las tareas efectuadas por los docentes libres, así como los
estudios debidamente comprobados que se hayan realizado en otras universidades o centros
de investigación del país o del extranjero.

Art. 41º. – La carrera docente no será requisito excluyente para la designación de un


profesor, pudiendo, con los debidos recaudos que reglamente cada estatuto, designarse a
universitarios que no la hayan cursado, teniendo en cuenta sus méritos y antecedentes.

Art. 42º. – El régimen de docencia libre será admitido en las universidades nacionales
bajo las condiciones que fijen sus respectivos estatutos.

Art. 43º. – Son órganos de gobierno de cada Universidad:


a) La Asamblea;
b) El Rector o Presidente;
c) El Consejo Superior;
d) Los Decanos de Facultades o Directores de Departamentos;
e) Los Consejos Académicos.

CAPITULO I

Asamblea Universitaria

Art. 44º. – Integran la Asamblea Universitaria: El Rector o Presidente, los Decanos de


Facultades o Directores de Departamentos y los miembros de los consejos académicos de
las Facultades o Departamentos.

Art. 45º. – Son atribuciones de la Asamblea Universitaria:


a) Reglamentar el orden de sus sesiones;
b) Dictar y reformar el estatuto de las universidades de acuerdo con lo establecido en el
art. 6º;
c) Elegir el Rector y decidir sobre su renuncia;
d) Suspenderlo o separarlo por las causales establecidas en el art. 34º, o por mal
desempeño en el ejercicio de sus funciones, en sesión especial convocada al efecto y por
mayoría de dos tercios de votos;
e) Separar de sus cargos a los Decanos o Directores de Departamentos, en sesión
especial convocada el efecto por mayoría absoluta de sus miembros y de acuerdo con las
causales establecidas en el art. 34º o por mal desempeño en el ejercicio de sus funciones;
f) Conocer en el caso de intervención a Facultades o Departamentos, sobre el recurso
de apelación que hubieran interpuesto las autoridades intervenidas, las que tendrán voz,
pero no voto, en la correspondiente sesión especial.

Art. 46º. – La elección de Rector o Presidente se verificará en sesión especial, por la


mayoría absoluta de los mismos miembros que componen la Asamblea Universitaria, pero
el estatuto establecerá el mecanismo para asegurar que aquel sea designado en la segunda
citación aun por simple mayoría. El Presidente de la Asamblea sólo tendrá voto en caso de
empate.

Art. 47. – La Asamblea Universitaria será convocada en la forma y con los requisitos que
fijen los respectivos estatutos.

CAPITULO II

Del Rector o Presidente

Art. 48º. – Para ser elegido Rector o Presidente se requiere ser ciudadano argentino, tener
treinta años cumplidos, ser o haber sido Profesor en una Universidad Nacional.

Art. 49º. – El Rector durará 5 años en sus funciones y podrá ser reelecto.

Art. 50º. – Son deberes y atribuciones del Rector:


a) Ejercer la representación, gestión administrativa y la superintendencia de la
Universidad;
b) Presidir la Asamblea Universitaria y el Consejo Superior y ejecutar las resoluciones
de una y otro;
c) Convocar al Consejo Superior a sesiones ordinarias o extraordinarias;
d) Asegurar el orden y la disciplina en la Universidad y requerir en su caso el auxilio
de la fuerza pública;
e) Resolver cualquier cuestión urgente y grave, sin perjuicio de dar cuenta al Consejo
Superior cuando corresponda;
f) Proveer todo lo referente al bienestar estudiantil y al del personal;
g) Nombrar y remover al personal de la Universidad, cuya designación y remoción no
corresponda al Consejo Superior o a las Facultades o Departamentos;
h) Dirigir el planeamiento general de la Universidad;
i) Organizar las secretarías y designar y remover a sus titulares;
j) Los que de acuerdo con la presente ley le asigne el estatuto.

Art. 51º. – El Vicerector, que elegirá el Consejo Superior de entre sus miembros
reemplazará al Rector en la forma y por las causas que establezcan los respectivos
estatutos. En el caso de alejamiento definitivo del Rector, el Consejo Superior deberá
convocar en el término de 15 días a la Asamblea Universitaria para proceder a una nueva
elección con el fin de completar el mandato. Si esta eventualidad se produjera en el último
año del período ordinario correspondiente, el Vicerector lo completará.

Art. 52º. – El cargo de Rector, será de dedicación exclusiva o de tiempo completo o


parcial.

Art. 53º. – Cada Universidad organizará las Secretarías que bajo la dependencia directa
del Rector colaborarán en su gestión.

Art. 54º. – Sin perjuicio de lo que dispongan los respectivos estatutos deberá existir un
Secretario responsable de los asuntos académicos y otro de la supervisión administrativa.
Ambos serán de dedicación exclusiva o tiempo completo. Permanecerán en sus cargos por
el término de la gestión del rector y serán designados y removidos en forma directa por él.

CAPITULO III

Del Consejo Superior

Art. 55º. – Integran el Consejo Superior el Rector y los Decanos.

Art. 56º. – Corresponde al Consejo Superior:


a) La jurisdicción superior universitaria;
b) Dictar el Reglamento Interno;
c) Estructurar el planeamiento general de las actividades universitarias;
d) Determinar la orientación general de la enseñanza, homologar los planes de estudio,
fijar el alcance de los títulos y grados y establecer normas generales de reválida;
e) Aprobar, modificar y reajustar el presupuesto;
f) Resolver las propuestas de nombramientos o remoción de los profesores , salvo el
caso de los contratados, invitados e interinos, y aprobar las designaciones de los jurados;
g) Designar comisiones técnicas para el estudio de los diversos problemas sometidos a
su consideración;
h) Resolver sobre la creación o supresión de institutos escuelas que no comporten la
promoción de nuevas carreras. En este último caso, deberá expedirse el Consejo de
Rectores;
i) Establecer prioridades sobre profesiones, especialidades y áreas a fomentarse, en
concordancia con los planes generales fijados;
j) Disponer por los dos tercios de los votos la intervención de las Facultades o
Departamentos, por un término no mayor de 2 años;
k) Establecer normas generales para regular el ingreso y permanencia de los
estudiantes;
l) Dictar las reglamentaciones atinentes a la constitución y actuación en la vida
universitaria de las Asociaciones de Docentes, Investigadores, Graduados o Estudiantes;
m) Aceptar herencias, legados y donaciones con y sin cargo;
n) Fijar aranceles, derechos y tasas cuando corresponda;
o) Otorgar títulos y grados;
p) Dictar los reglamentos básicos sobre organización académica, enseñanza,
investigación, carrera docente y dedicaciones especiales;
q) Establecer el régimen disciplinario común y el electoral. Reglar a propuesta del
Rector la organización y funcionamiento de la Administración y la acción social de la
Universidad, el régimen de becas, subsidios y premios;
r) Designar a propuesta del Consejo Académico, los miembros de los Tribunales
Académicos;
s) Todo lo que explícitamente no sea atribuido por la presente ley o por los estatutos a
otros órganos de gobierno.

CAPITULO IV

De los decanos o directores de Departamentos

Art. 57º. – Para ser elegido Decano se requiere: ser ciudadano argentino, tener 30 años
cumplidos, y ser o haber sido Profesor en una Universidad Nacional.

Art. 58º. – Durarán 4 años en sus funciones y podrán ser reelectos.

Art. 59º. – Los decanos tendrán las siguientes atribuciones:


a) Ejercer la representación y la gestión administrativa de la Facultad;
b) Presidir convocar al Consejo Académico a sesiones ordinarias o extraordinarias;
c) Asegurar el orden y la disciplina en el ámbito de la Facultad y requerir en su caso el
auxilio de la fuerza pública;
d) Resolver cualquier cuestión urgente y grave sin perjuicio de dar cuenta al Consejo
Académico cuando corresponda;
e) Adoptar las decisiones y medidas que se requieran para la ejecución de las
resoluciones del Consejo Académico;
f) Nombrar y remover al personal no docente de la Facultad que revista en relación de
dependencia directa del Decanato;
g) Supervisar las actividades docentes e imponer sanciones a estudiantes hasta un
máximo de 60 días de suspensión y de acuerdo con la reglamentación que se dicte;
h) Las que de acuerdo con la presente ley le asigne el Estatuto.

Art. 60º. – El Vicedecano, que elegirá el Consejo Académico entre sus miembros,
reemplazará al Decano en la forma y condiciones que establezcan los respectivos estatutos.

Art. 61º. – El cargo de Decano será de dedicación exclusiva o de tiempo completo o


parcial.

Art. 62º. – Cada Facultad organizará las secretarias que bajo la dependencia directa del
Decano colaborarán en su gestión.
Sin perjuicio de lo que dispongan los respectivos estatutos, deberá existir un Secretario
responsable de los asuntos académicos y otro de la supervisión administrativa.
Permanecerán en sus cargos por el término de la gestión del Decano y serán designados y
removidos en forma directa por él.

CAPITULO V

De los Consejos Académicos

Art. 63º. – Los Consejos Académicos estarán integrados por el Decano y 7 consejeros de
los cuales 5 por lo menos deberán ser profesores titulares o asociados y los dos restantes
adjuntos de acuerdo con las modalidades de cada Facultad. Los profesores adjuntos tendrán
representación en el Consejo Académico siempre que su número supere en cada caso el
30% del total de profesores titulares y asociados. Para ser miembros del Consejo
Académico se requerirá ser ciudadano argentino.

Art. 64º. – El Consejo Académico será elegido por voto secreto y obligatorio de los
profesores ordinarios de las categorías correspondientes, quienes lo harán en forma
separada de acuerdo con lo establecido en el artículo anterior.

Art. 65º. – Corresponde a los Consejos Académicos:


a) Dictar su Reglamento Interno;
b) Elegir al Decano y decidir sobre su renuncia;
c) Solicitar su suspensión al Consejo Superior o requerir a este que convoque a la
Asamblea Universitaria para separarlo del cargo, en ambos casos por mayoría de las dos
terceras partes de sus miembros;
d) Suspender a cualquiera de sus miembros y proponer al Consejo Superior su
remoción por mayoría de las dos terceras partes;
e) Designar o remover profesores interinos o invitados y proponer al Consejo Superior
la designación de profesores titulares, asociados, adjuntos, consultos, eméritos, honorarios
o contratados y los jurados de los concursos;
f) Designar comisiones técnicas para el estudio de los asuntos sometidos a su
consideración, las que deberán ser presididas por un miembro titular del Consejo.
g) Proponer al Consejo Superior los planes de estudios, la creación y supresión de
carreras y títulos y las condiciones de ingreso y las bases para los concursos;
h) Decidir sobre los recursos interpuestos ante sanciones aplicadas por el decano de
acuerdo con la reglamentación de cada Facultad;
i) Aceptar herencias, legados y donaciones sin cargo;
j) Organizar la carrera docente;
k) Todo lo demás que le asigne el estatuto.

Art. 66º. – La Asamblea, el Consejo Superior y los Consejos Académicos sesionarán en


forma privada y las actas respectivas serán dadas a publicidad, conforme con las reglas que
fijen los respectivos estatutos.

CAPITULO VI

Normas especiales para la organización departamental

Art. 67º. – Lo establecido en los capítulos I, II, III, IV y V del presente título se aplicará a
las universidades estructuradas por el sistema de organización departamental con las
siguientes modificaciones:
a) La Asamblea y el Consejo Superior podrán integrarse con profesores elegidos
directamente por el Claustro, constituido en Colegio Electoral único, debiendo el estatuto
determinar su composición;
b) Podrán transferirse al Consejo Superior parte de las atribuciones fijadas por esta ley
a los Consejos Académicos;
c) Los Directores de Departamentos podrán ser designados por concurso y sus
atribuciones podrán ser transferidas parcialmente al Consejo Superior.

CAPITULO VII

Tribunales Académicos

Art. 68º. – Para la sustanciación de los juicios académicos se constituirá en cada caso un
Tribunal Académico compuesto por 3 miembros.

Art. 69º. – Los miembros se sortearán de una lista de 10 profesores o ex profesores de la


Facultad o Departamento correspondiente que tengan las condiciones requeridas para ser
Decano o Director. El Consejo Académico confeccionará la lista respectiva y la mantendrá
actualizada, elevándola para su aprobación al Consejo Superior. El ejercicio de cualquier
función en los otros órganos de gobierno de la Universidad es incompatible con la
condición de miembros del Tribunal Académico.

Art. 70º. – Cada Universidad deberá prever en sus estatutos:


a) Forma y requisitos para promover acusación;
b) Quiénes pueden deducirla;
c) Normas de sustanciación;
d) Las sanciones aplicables;
e) Los recursos correspondientes.

Art. 71º. – Sustanciada la causa el Tribunal Académico elevará sus conclusiones al


Consejo Académico.

TITULO IV

Consejo de Rectores

Art. 72º. – Los rectores o presidentes de las universidades nacionales, o sus


reemplazantes estatutarios, constituirán el Consejo de Rectores.

Art. 73º. – Anualmente los Rectores y Presidentes elegirán de entre ellos un Presidente,
que tendrá a su cargo la convocatoria y ejecución de las resoluciones del Consejo. Se
designará, también, un Vicepresidente, que reemplazará al Presidente en los casos que
establezca el Reglamento Interno.

Art. 74º. – El Consejo de Rectores tendrá su sede en la ciudad de Buenos Aires, pero
podrá reunirse en cualquiera de las universidades. Sus resoluciones serán tomadas por la
mayoría del total de sus miembros.

Art. 75º. – El Consejo de Rectores organizará una Secretaría Permanente en la que cada
Universidad tendrá su Delegado y designará al personal necesario para el cumplimiento de
sus funciones. El Secretario Administrativo de la Secretaría Permanente tendrá a su cargo la
responsabilidad de la administración de dicho organismo, para el cual regirá el sistema de
fiscalización que establece esta ley, en los términos del art. 109º. Las universidades
contribuirán a los gastos que demande el funcionamiento del Consejo de Rectores y su
Secretaría Permanente, en forma proporcional a sus presupuestos.

Art. 76º. – El Consejo de Rectores deberá realizar los siguientes estudios por intermedio
de su Secretaría, sin perjuicio de otros que considere oportuno emprender:
a) De las estructuras y planes de estudio de las distintas universidades para establecer
si se adaptan a los fines previstos;
b) De la organización y métodos de las distintas entidades universitarias a efectos de
mejorar su eficiencia;
c) De los factores de deserción y repetición estudiantiles y de los medios conducentes
a su solución;
d) De las necesidades económicas y de equipamiento de las distintas universidades.

Art. 77º. – El Consejo de Rectores tendrá las siguientes atribuciones:


a) Ejercer la representación conjunta de la universidades;
b) Elevar para su aprobación al Poder Ejecutivo los proyectos de presupuestos a que se
refiere el art. 107º, inc. b);
c) Programar el planeamiento integral de la enseñanza universitaria oficial, de acuerdo
con el planeamiento general del sistema educativo argentino, teniendo en cuenta para la
promoción, creación o supresión de facultades, departamentos o nuevas carreras, las
prioridades establecidas para el desarrollo nacional y regional. Deberá integrar
necesariamente su acción para ello en los organismos competentes del Gobierno Nacional,
a través de la Secretaría de Estado de Cultura y Educación;
d) Dictar las normas administrativas comunes a todas las universidades, en especial: el
estatuto y el escalafón del personal a que se refiere el art. 114º;
e) Fijar condiciones de admisibilidad a las universidades, de acuerdo con lo
establecido en el art. 81º;
f) Recomendar a las universidades medidas para la coordinación de sus actividades
docentes, culturales y científicas, y la correlación y sistematización de los títulos que
aquéllas expidan.

Art. 78º. – La comunicación de las universidades con el Poder Ejecutivo será mantenida
por intermedio de la Secretaría de Estado de Cultura y Educación.

TITULO V

Régimen de enseñanza

Art. 79º. – La enseñanza procurará la participación activa de profesores y alumnos en el


proceso educativo. Para ello será obligación de las universidades tomar medidas que
tiendan a asegurar dentro de sus posibilidades una adecuada proporción entre el número de
docentes y el de alumnos.
Las actividades comunitarias, artísticas, deportivas, culturales y recreativas deberán
organizarse como complemento indispensable de la enseñanza.

Art. 80º. – La enseñanza universitaria se desarrollará en dos niveles fundamentales:


a) El de alumnos;
b) El de graduados.

Art. 81º. – Será requisito indispensable para ingresar a las universidades nacionales tener
aprobados los estudios que correspondan al ciclo de enseñanza media, de acuerdo con las
reglamentaciones correspondientes. El Consejo de Rectores deberá coordinar en todo el
país las condiciones de admisión a las diversas carreras.

Art. 82º. – Sin perjuicio de lo establecido en el artículo precedente se exigirá, además, la


aprobación de pruebas de ingreso que reglamentará cada Facultad. La reglamentación
preverá la exención de dicho examen en las materias respecto de las cuales el aspirante a
ingresar ostente un título de enseñanza superior afín.

Art. 83º. – Las universidades podrán reglamentar en sus estatutos la asistencia obligatoria
a clases en aquellas materias que se dicten sin seminarios ni trabajos prácticos.

Art. 84º. – Deberá promoverse una adecuada diversificación de los planes de estudio,
estableciendo materias optativas, además de las principales y obligatorias, e incluyendo, a
los efectos de evitar una formación estrechamente profesional, un número determinado de
materias fundamentales complementarias, adecuadas a cada carrera.
Art. 85º. – En todos los casos en que ello sea posible las carreras se organizarán en ciclos,
al fin de cada uno de los cuales se otorgarán los correspondientes certificados.

Art. 86º. – Las universidades deberán fomentar y mantener regularmente los estudios para
graduados. Estos agruparán, sistemática y orgánicamente, las actividades y cursos de
perfeccionamiento, especialización y actualización de los egresados, incluyéndose en este
nivel los estudios y trabajos que se reglamenten para el acceso al Doctorado.

Art. 87º. – Los títulos profesionales, habilitantes y grados otorgados por las universidades
nacionales tendrán validez en todo el país. Acreditarán idoneidad y los de carácter
profesional habilitarán para el ejercicio de las actividades consiguientes, sin perjuicio del
poder de policía que corresponde a las autoridades locales.

TITULO VI

Alumnos

Art. 88º. – Las universidades reglamentarán el régimen de alumnos debiendo prever la


existencia de estudiantes vocacionales. Se entiende por tales a las personas que deseen
completar conocimientos, inscribiéndose en materias o grupos de ellas sin cursar en forma
completa las carreras correspondientes.

Art. 89º. – Cada Facultad reglamentará el número de insuficientes que determinará la


pérdida de la condición de alumno.

Art. 90º. – Todo alumno que en el término de un año no aprobare, sin causa justificada,
por lo menos una materia o su equivalente del correspondiente plan de estudios, perderá
automáticamente la condición de tal.

Art. 91º. – Las facultades reglamentarán las pruebas y condiciones que exigirán para
reinscribir al que haya perdido la condición de alumno.

Art. 92º. – La enseñanza será gratuita, salvo en los cursos para graduados.
Las universidades establecerán el mínimo anual de materias aprobadas con que podrá
mantenerse el derecho a esa gratuidad. Fijarán asimismo las excepciones a contemplar, los
requisitos que deberán llenarse para recuperar el referido derecho y los aranceles anuales
fijos a cobrar en los casos señalados, que no podrán ser inferiores a la asignación básica del
menor sueldo de la escala docente. Se establecerán también los derechos por exámenes
repetidos y por repetición de trabajos prácticos, los que serán progresivos en la misma
materia para el mismo alumno. La tasa inicial por examen repetido no podrá ser menor del
5%, y por trabajos prácticos del 20% de la asignación básica docente preestablecida. Los
fondos recaudados deberán destinarse íntegramente para becas estudiantiles.

Art. 93º. – Las facultades deberán mantener actualizado su Registro de Alumnos en base
a lo estipulado en los artículos anteriores.
Art. 94º. – Los alumnos elegirán, de acuerdo con las normas que establezcan los
respectivos estatutos de las universidades, un delegado estudiantil que tendrá voz en las
sesiones de los Consejos Académicos de cada Facultad. No formará quórum y podrá
integrar las comisiones de acuerdo con la reglamentación de cada Universidad.

Art. 95. – El delegado estudiantil será elegido por el voto de los alumnos que hayan
cursado regularmente sus estudios, de acuerdo con las reglamentaciones respectivas y
tengan aprobado el equivalente a la mitad del plan de estudios de su carrera. El voto será
secreto y obligatorio.

Art. 96º. – Para ser electo como representante estudiantil se requiere, además:
a) Tener aprobado el equivalente de las dos terceras partes del respectivo plan de
estudios;
b) Tener un promedio general equivalente a bueno, de acuerdo con la reglamentación
que dicte cada Facultad.

Art. 97º. – No tendrán derecho a voto ni podrán ser elegidos los alumnos extranjeros y los
de las carreras auxiliares no universitarias.

Art. 98. – Los alumnos no podrán realizar dentro de las casa de estudios ninguna clase de
actividad política en forma oral o escrita, mediante reuniones, demostraciones, asambleas o
cualquier otra forma que contradiga las disposiciones del art. 10º, siendo pasibles de
aplicación de sanciones por parte del Decano.

Art. 99º. – Los centros o agrupaciones estudiantiles que infrinjan lo dispuesto en el


artículo anterior serán privados de su personería jurídica, si la tuvieren, y de los locales
ubicados en el ámbito de las universidades. Corresponderá a los decanos la responsabilidad
de la aplicación de esta última medida.

Art. 100º. – En las universidades que no lo posean se estructurará el Departamento de


Asuntos Estudiantiles, el cual dependerá del Rectorado y cuyas funciones esenciales serán:
a) Procurar la integración de los estudiantes en el ámbito cultural y material de la
Universidad, fomentando el conocimiento, respeto mutuo y camaradería;
b) Crear y dirigir organismos de bienestar, asistencia médica, asesoramiento personal y
esparcimiento, tales como centros médico preventivos, comedores, actividades culturales y
sociales, campos de deportes, etc.;
c) Centralizar y administrar las formas de ayuda económica, préstamos de honor y
becas para estudiantes.

Art. 101º. – Se reglamentará a nivel de los Consejos Académicos la creación de una


Comisión de Asuntos Estudiantiles que deberá ocuparse de:
a) Asesorar sobre las inquietudes, reclamos, peticiones, sugerencias de los estudiantes
que en forma individual o colectiva eleven a consideración del Decano o del Consejo
Académico;
b) Asesorar en todo lo correspondiente a gestiones de bienestar y asistencia estudiantil.
Art. 102º. – Cada Universidad deberá prever en sus estatutos la proporción de su
presupuesto que destinará al fondo especial de becas, con el objeto de asegurar que el
acceso y la permanencia de los estudiantes en sus aulas esté determinado únicamente por
los requisitos de vocación y dedicación a los estudios.

TITULO VII

Régimen económico financiero

Art. 103º. – Constituyen el patrimonio de afectación de cada Universidad:


a) Los bienes que actualmente le pertenecen;
b) Los bienes, cualquiera sea su naturaleza, que siendo propiedad de la Nación, se
encuentren en posesión efectiva de las universidades o estén afectados a su uso al entrar en
vigencia la presente ley.
c) Los bienes que por cualquier título adquieran en el futuro.

Art. 104º. – Son recursos de las universidades:


a) La contribución del Tesoro Nacional;
b) Los que provienen de su Fondo Universitario, de acuerdo con el detalle del art.
105º.

Art. 105º. – Cada Universidad formará su Fondo Universitario con el aporte de los
siguientes recursos:
a) Las economías que realice en la inversión de las contribuciones y subsidios que las
contribuciones del Tesoro Nacional para destine su presupuesto general;
b) Las contribuciones y subsidios que las provincias y los municipios destinen a la
Universidad;
c) Las herencias, legados y donaciones de personas o instituciones privadas, las que
serán exceptuadas de todo impuesto nacional;
d) Las rentas, frutos o intereses de su patrimonio; los que obtenga por sus
publicaciones, por concesiones, por la explotación de sus bienes, y por toda otra actividad
similar, efectuada por sí o por intermedio de terceros;
e) Los derechos, aranceles o tasas que perciba como retribución de los servicios que
preste;
f) Los derechos de explotación de patentes de invención de derechos intelectuales que
pudieran corresponderle por trabajos realizados en su seno;
g) Las contribuciones o subsidios provenientes de organismos internacionales o
extranjeros, destinados a los fines específicos de la Universidad;
h) El producido de las ventas de bienes muebles, materiales o elementos en desuso o
en condición de rezago;
i) Todo otro recurso que les corresponda o pudiera crearse.

Art. 106º. – Las universidades podrán utilizar su Fondo Universitario de acuerdo con sus
necesidades, con la limitación de no aplicarlo para el pago de remuneraciones de cargos
permanentes.
Art. 107º. – La ley de presupuesto fijará anualmente la contribución del Tesoro Nacional
al presupuesto y plan de trabajos públicos de cada Universidad. Dicha contribución se
establecerá mediante el siguiente procedimiento:
a) Cada Universidad elevará al Consejo de Rectores los anteproyectos de su
presupuesto y de su plan de trabajos públicos, indicando por separado la parte a financiar
con recursos del Fondo Universitario;
b) El Consejo de Rectores elevará dichos anteproyectos al Poder Ejecutivo por
intermedio de la Secretaría de Estado de Cultura y Educación, con las observaciones que
ellos le merezcan. Presentará, juntamente con los presupuestos, el estado de planeamiento
de la enseñanza universitaria previsto en el art. 77º. inc. c) y las medidas recomendadas o
adoptadas para concretar sus formulaciones. Elaborará asimismo su propio presupuesto y lo
elevará al Poder Ejecutivo por intermedio de la Secretaría de Estado de Cultura y
Educación y con intervención de la Secretaría de Estado de Hacienda;
c) El Poder Ejecutivo incorporará al proyecto de presupuesto la contribución a cada
Universidad en forma global. En caso de que las posibilidades financieras no permitan
atender la totalidad de los requerimientos, las cifras definitivas serán determinadas por el
Poder Ejecutivo, previa vista al Consejo de Rectores.

Art. 108º. – El Consejo Superior de cada Universidad está facultado para ordenar, ajustar
y reajustar el presupuesto, dentro de las cifras autorizadas, dando cuenta el Poder Ejecutivo,
con intervención de la Secretaría de Estado de Haciendo, antes de los 30 días de su
aprobación y con estas únicas limitaciones:
a) Los créditos para trabajos públicos no podrán ser transferidos a ningún destino;
b) Los créditos para gastos generales e inversiones patrimoniales no podrán
transferirse a ningún otro destino;
c) No podrán efectuarse reajustes que originen incrementos automáticos o que
impliquen erogaciones por conceptos no incluidos en su proyecto original.

Art. 109º. – El Tribunal de Cuentas fiscalizará las inversiones con posterioridad a la


efectiva realización del gasto. Las universidades rendirán cuenta trimestral documentada de
la inversión de sus presupuestos.

Art. 110º. – Las universidades podrán contratar en forma directa las adquisiciones de
material docente, científico y bibliográfico:
a) Mediante resolución autorizada por los rectores o presidentes y decanos de
Facultades o directores de Departamentos hasta la suma de doscientos mil pesos moneda
nacional (m$n. 200.000).
b) Mediante resolución fundada en razones de urgencia autorizada por las mismas
autoridades, cuando se exceda de esa suma. El Consejo de Rectores podrá proponer al
Poder Ejecutivo por intermedio de la Secretaría de Estado de Cultura y Educación al 31 de
diciembre de cada año, el reajuste que pudiera corresponder al valor límite anteriormente
mencionado.
La reglamentación de la presente ley establecerá el procedimiento y características de
estas excepciones al Régimen General de Contrataciones del Estado.

Art. 111º. – Las universidades podrán destinar parte de los recursos de su Fondo
Universitario para constituir, previa aprobación del Poder Ejecutivo Nacional, sociedades y
asociaciones destinadas a facilitar el cumplimiento de sus fines, a condición de que la
dirección de tales entidades quede bajo el control de las universidades.

Art. 112º. – En lo referente al control económico financiero regirán para las universidades
nacionales la ley de contabilidad y demás disposiciones legales o reglamentarias
correlativas o afines, con las excepciones previstas en el título VII de la presente ley.

Art. 113º. – Las universidades nacionales gozarán de las mismas exenciones de


gravámenes que correspondan al Estado nacional.

TITULO VIII

Personal de la Universidad

Art. 114º. – El personal universitario comprenderá las siguientes categorías:


a) Docente y de investigación;
b) Profesional, técnico jerarquizado;
c) Administrativo;
d) Obrero, de maestranza y de servicio.
Para el ingreso de las categorías b), c) y d) se exigirán condiciones y pruebas que
reglamentará cada Universidad.
Las universidades establecerán un régimen que asegure la carrera de los profesionales del
inc. b) y su renovación mediante concursos.

Art. 115º. – Las universidades deberán procurar a sus miembros los medios que
contribuyan a su seguridad y bienestar social, coordinando su acción con los organismos
nacionales especializados, con el fin de asegurar el máximo rendimiento sin superponer
estructuras o complicar la organización administrativa.

TITULO IX

De la intervención

Art. 116º. – Las universidades nacionales podrán ser intervenidas por el Poder Ejecutivo
por tiempo determinado, debiendo a su término llamarse a elecciones de autoridades de
acuerdo con los Estatutos. Serán causales de intervención:
a) Conflicto insoluble dentro de la propia Universidad.
b) Manifiesto incumplimiento de los fines.
c) Alteración grave del orden público o subversión contra los poderes de la Nación.

TITULO X

De los recursos

Art. 117º. – Contra las resoluciones definitivas de la Universidad, impugnadas con


fundamento en la interpretación de la ley o de los estatutos, podrá interponerse recurso de
apelación ante la Cámara Federal competente dentro del término de 10 días hábiles de la
notificación de la resolución.
Será Cámara Federal competente aquella en cuya jurisdicción se halle la sede de la
respectiva Universidad.

Art. 118º. – El recurso de apelación deberá interponerse ante la Universidad, expresando


los agravios correspondientes. Dentro de los 30 días hábiles de interpuesto, la Universidad
elevará las actuaciones a la Cámara, con la contestación de los agravios formulados, y
notificará fehacientemente al interesado la elevación.

Art. 119º. – Con la elevación prevista en el artículo anterior, con o sin contestación de la
Universidad, quedarán los autos para resolver en definitiva.

TITULO XI

Disposiciones transitorias

Art. 120º. – La presente ley entrará en vigencia al día siguiente de su publicación en el


Boletín Oficial, salvo las disposiciones contenidas en el título III que regirán al constituirse
los órganos de gobierno de la universidades de acuerdo con las normas de esta ley y sus
disposiciones transitorias.
Durante ese lapso continuarán en vigor las Leyes 16.912 y 17.148.

Art. 121º. – El Rector o Presidente y los Decanos o Directores de Departamentos de cada


Universidad, adecuarán los respectivos Estatutos a la presente ley, debiendo elevarlos para
su aprobación al Poder Ejecutivo en el término de 120 días, a partir de la fecha de su
publicación en el Boletín Oficial. Una vez constituidas las respectivas Asambleas, éstas
deberán, proceder a su aprobación o reforma de acuerdo con las disposiciones de esta ley.

Art. 122º. – Aprobados los respectivos estatutos, el Poder Ejecutivo fijará la fecha en que
se llamará a elecciones para integrar los Consejos Académicos de cada Facultad o
Departamento. Participarán en ellas todos los profesores ordinarios con derecho a voto, de
acuerdo con lo establecido en el art. 64º de esta ley. Integrados que sean los Consejos
Académicos, el Poder Ejecutivo designará a los rectores y decanos de todas las
universidades nacionales correspondientes al primer período de los fijados por los arts. 49º
y 58º de la presente ley.

Art. 123º. – Los rectores y decanos designados de acuerdo con el régimen establecido por
la Ley 16.912, deberán llamar a concurso en los cargos vacantes de las diversas categorías
de profesores ordinarios, con el objeto de constituir los claustros respectivos a efectos de lo
dispuesto en el art. 122º y de acuerdo con las disposiciones de la presente ley.

Art. 124º. – Los actuales profesores de las universidades nacionales mantendrán su


categoría por el período para el que hayan sido designados, conforme con las normas de los
estatutos vigentes. Los profesores titulares plenarios conservarán su jerarquía. La
estabilidad a que se refiere el art. 30º podrá ser obtenida por los profesores titulares a partir
de la primera confirmación efectuada luego de la sanción de la presente ley.
Art. 125º. – Derógase el Decreto Ley 6.403/55, en cuanto se oponga a esta ley. Deróganse
los Decretos Leyes 3.634/56, 10.775/56, 7.361/57, 8.780/57 y toda otra disposición que se
oponga a la presente ley.

Art. 126º. – Comuníquese, etc.

Sanción y promulgación: 21de abril de 1967.


LEY N° 17.778

UNIVERSIDADES PROVINCIALES

Buenos Aires, Junio 12 de 1968

En uso de las atribuciones conferidas por el Artículo 5° del Estatuto de la Revolución


Argentina,

El Presidente de la Nación Argentina,


Sanciona y Promulga con fuerza de Ley:

Artículo 1°- Los títulos o grados otorgados por las Universidades e Institutos de enseñanza
superior universitaria provinciales tendrán la validez prevista en el Artículo 87º de la Ley
l7.245, cuando los establecimientos que los expidan hayan obtenido la previa autorización
que se otorgará por el Poder Ejecutivo Nacional una vez cumplidos los recaudos exigidos
por la presente ley.

Artículo 2°- Las Universidades e Institutos de enseñanza superior universitaria


provinciales existentes y en funcionamiento a la fecha, para acogerse a las disposiciones de
la presente ley, deberán presentar la solicitud pertinente dentro del plazo de ciento ochenta
(180) días a partir de la promulgación de la misma.

Artículo 3°- Será facultativo del Poder Ejecutivo Nacional conceder la autorización sobre
la base de razones de política educativa previa a la evaluación de las características
exigibles, de los requisitos de estructuración y de nivel existentes y de las necesidades
regionales y sectoriales del desarrollo nacional.

Artículo 4°- Para que las Universidades o Institutos de enseñanza superior universitaria
provinciales que se creen en el futuro, puedan acogerse al régimen de la presente ley, es
necesario que la provincia respectiva obtenga con carácter previo a la fundación, un decreto
del Poder Ejecutivo Nacional en el que se preste conformidad con el proyecto de creación.
El Poder Ejecutivo Nacional podrá prestar dicho acuerdo teniendo en cuenta las razones
que abonan la misma y su concordancia con las necesidades de planeamiento educativo
nacional.

Si el establecimiento no fuera creado definitivamente y no estuviera en funcionamiento


efectivo dentro del año a partir de la fecha del respectivo decreto, el acuerdo caducará
automáticamente.

Artículo 5°- La denominación de "Universidad" exigirá la existencia de variedad de


Facultades, Escuelas, Institutos o Departamentos orgánicamente estructurados. En forma
aislada, serán restrictivamente considerados a los efectos del acuerdo pertinente.
El acuerdo será concedido con expresa indicación de las carreras, grados y títulos que se
cursen u otorguen en el establecimiento correspondiente, y para toda modificación se
requerirá nuevo acuerdo del Poder Ejecutivo Nacional.

Artículo 6°- Los establecimientos universitarios provinciales deberán observar los mismos
fines generales y funciones que los prescriptos para las Universidades Nacionales en los
artículos 2º y 3º de la Ley 17.245, debiendo ajustar su acción a lo establecido en el artículo
4° de dicha ley Sin perjuicio de ello, podrán fijar las finalidades y funciones que se
justifiquen por las circunstancias particulares de su fundación y en especial deberán atender
a los requerimientos de la región.

Artículo 7°- Los establecimientos mencionados gozarán de autonomía académica y


autarquía financiera y administrativa. Esta autonomía y autarquía no podrán obstaculizar el
ejercicio de las atribuciones y deberes que competen a otras autoridades nacionales o
locales respecto del mantenimiento del orden público y el imperio de la legislación común
en el ámbito universitario. Los órganos de Gobierno sólo podrán estar integrados por
profesores universitarios.

Artículo 8°- Los establecimientos mencionados gozarán de los siguientes derechos:

a) Dictar y reformar sus estatutos académicos, con la aprobación del Poder Ejecutivo
Provincial respectivo, en los cuales deberán establecer la organización académica y los
regímenes de gobierno, disciplina, profesores, alumnos, enseñanza y promoción,
conforme con las pautas generales establecidas en la Ley 17.245;

b) Fijar sus planes de estudio, los cuales deberán ser aprobados por el Poder Ejecutivo
Nacional en cuanto a su estructura general.

Artículo 9°- Los profesores de todas las categorías deberán poseer título universitario o en
su defecto de manera estrictamente excepcional antecedentes objetivamente evaluables por
los que se acredite la debida competencia.

Artículo 10°- Para ingresar como alumno se requerirá haber aprobado los estudios
correspondientes al nivel medio de enseñanza.

Artículo 11°- Las materias o trabajos aprobados en los establecimientos mencionados


gozarán de idéntica validez a los efectos correspondientes en todas las universidades del
país, salvo el derecho de exigir el examen complementario de temas no comprendidos en el
examen requerido para su aprobación. Sin perjuicio de ello, y a efectos de la expedición de
títulos o grados, cada establecimiento determinará el número mínimo de materias o de
cursos que deban ser aprobados en él.

Artículo 12°- Los establecimientos mencionados podrán reconocer estudios parciales


aprobados en universidades del extranjero de acuerdo con la reglamentación que se dicte.
Está prohibido a los establecimientos mencionados otorgar reválida de títulos extranjeros
con alcance nacional. Los diplomados en universidades extranjeras que no hayan obtenido
reválida podrán seguir en dichos establecimientos cursos de posgrado y obtener títulos,
pero los mismos no tendrán los efectos del artículo 87° de la Ley 17.245.

Artículo 13°- El ejercicio de cargos directivos en los establecimientos mencionados es


incompatible con toda actividad política.

Queda prohibido asimismo en los establecimientos mencionados todo acto de proselitismo


o propaganda política.

Artículo 14°- El Poder Ejecutivo Nacional podrá suspender o retirar la autorización


concedida de conformidad con el artículo 1° de la presente ley, cuando de la fiscalización
que se ejerza surja la violación a normas legales o la insuficiencia del nivel de la enseñanza
impartida.

Artículo 15°- El Consejo de Rectores de las Universidades Provinciales será órgano de


consulta en lo concerniente al régimen legal de la enseñanza universitaria impartida por
establecimientos provinciales y la aplicación de este y al planeamiento educativo de dicho
sector. Dentro de los noventa días de otorgado el acuerdo que prescribe el artículo 4º, las
universidades interesadas acordarán su integración y funcionamiento en cuanto a órgano de
consulta.

Artículo 16°- Los institutos de enseñanza superior nacionales no pertenecientes a una


universidad, podrán ser incluidos por decreto del Poder Ejecutivo Nacional en el régimen
de la presente ley, con salvedad de que para los mismos no regirán los artículos 7° y 8°.

Artículo 17°- Las disposiciones de la Ley 17.245 serán de aplicación supletoria a los
establecimientos mencionados en cuanto no se opongan a las disposiciones de la presente.

Artículo 18°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial
y archívese.

ONGANIA - Guillermo A. Borda.


DECRETO N° 1.617/69

Reglaméntase la ley 17.778

Buenos Aires, 2/4/69

VISTO la necesidad de reglamentar las disposiciones de la Ley N° 17.778 y el ejercicio de


las atribuciones conferidas por el Artículo 86º, Inciso 2° de la Constitución Nacional,

EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:

Artículo 1°- Los trámites correspondientes a la autorización, acuerdo y fiscalización de los


establecimientos comprendidos en la Ley 17.778, se efectuarán por intermedio de la
Secretaría de Estado de Cultura y Educación.

Artículo 2°- La Secretaría de Estado de Cultura y Educación tendrá las siguientes


atribuciones y deberes:

1. Entender en todo lo concerniente al otorgamiento de las autorizaciones previstas en los


artículos 3° y 16° de la ley, su suspensión y retiro, y a la prestación del acuerdo previsto
en el artículo 4° de la ley.

2. Ejercer la fiscalización permanente sobre dichos establecimientos.

3. Organizar un legajo especial para cada establecimiento con todos los antecedentes
referentes al mismo y un registro general de establecimientos. A tal efecto los
establecimientos respectivos comunicarán las modificaciones en sus autoridades y
cuerpo docente dentro de los treinta días corridos de haberse producido.

Artículo 3°- El pedido de autorización previsto en el Artículo 2° de la ley deberá ajustarse


a los siguientes requisitos:

1. Acreditación de su condición de Universidad o Instituto de Enseñanza Superior


Universitaria provincial; mediante la documentación pertinente y acreditación de la
personería del presentante.

2. Presentación de su estatutos académicos con la aprobación del P. E. Provincial


respectivo, conforme con lo establecido en el artículo 8°, inciso a) de la ley.

3. Presentación de sus planes de estudios con indicación de carreras, grados y títulos.

4. Datos personales completos de las personas integrantes de los órganos de gobierno,


títulos y cargos que desempeñan en el establecimiento.
5. Nómina completa del personal con títulos y antecedentes, cargos y dedicación.

6. Descripción de sus instalaciones para justificar su aptitud a los fines de la ley.

7. Memoria general del establecimiento, en la que conste su evolución desde su origen,


resultados obtenidos, actividad docente y de investigación desarrollada y estadísticas
con especial indicación del número de alumnos inscriptos, número de alumnos que
aprobaron el curso respectivo y el número de graduados por año académico
discriminados por carreras y títulos.

Artículo 4°- El plazo que acuerda el artículo 2° de la Ley N° 17.778 comenzará a correr a
partir de la fecha del presente decreto.

Artículo 5°- El pedido de acuerdo previsto en el artículo 4° de la ley deberá ajustarse a los
siguientes requisitos:

a) Presentación ante la Secretaría de Estado de Cultura y Educación efectuada por el P. E.


Provincial respectivo;

b) Proyecto de los estatutos académicos; de los planes de estudio con indicación de


carreras, grados y títulos;

c) Exposición de las razones que abonan el pedido y su concordancia con las necesidades
del planeamiento educativo, así como con las necesidades regionales y sectoriales del
desarrollo nacional.

Artículo 6°- Presentada la solicitud del acuerdo previsto en el artículo 4° de la ley, con los
recaudos formales debidamente cumplidos, la Secretaría de Estado correrá vista al Consejo
de Rectores de las Universidades Provinciales por treinta días hábiles perentorios a los
efectos de la consulta correspondiente al artículo 15° de la ley. Con su resultado efectuará
la evaluación señalada en el artículo 3° de la ley y correrá vista de las actuaciones a la
provincia peticionante, la que podrá presentar una memoria dentro de los treinta días
hábiles perentorios. En este estado la secretaría elevará las actuaciones al P. E. Nacional
aconsejando la resolución que corresponda.

Artículo 7°- El pedido de autorización correspondiente a los establecimientos previstos en


el artículo 4° de la ley, deberá ajustarse a los requisitos establecidos en el artículo 3° del
presente decreto e indicarse asimismo el decreto del P. E. Nacional correspondiente al
acuerdo.

Artículo 8°- Presentada la solicitud de autorización, de acuerdo con los artículos 3° ó 7°


del presente decreto, la Secretaría de Estado, inspeccionará el establecimiento y efectuará la
evaluación prevista en el artículo 3° de la ley. La Secretaría de Estado correrá vista al
establecimiento peticionante de las actuaciones por treinta días hábiles perentorios y con su
resultado elevará las actuaciones al P. E. Nacional aconsejando la resolución que
corresponda.
Artículo 9°- A los efectos de la fiscalización establecida en la ley la Secretaría de Estado
estará facultada para disponer las medidas que hagan a tal fin y en especial:

1. Examinar los libros y documentación.

2. Asistir a todas las reuniones de los órganos establecidos en el estatuto académico


cuando lo considere conveniente.

3. Realizar investigaciones en los establecimientos cuando observare o tuviere


conocimiento de irregularidades, violación de las leyes o estatutos, o cuando a su juicio
fuere necesario para mejor proveer en los asuntos que le están sometidos.

4. Solicitar al P. E. Provincial respectivo la intervención por tiempo determinado,


debiendo a su término asumir las autoridades estatutarias. Serán causales del pedido de
intervención:

a) Conflicto insoluble dentro del establecimiento;

b) Manifiesto incumplimiento de sus fines;

c) Alteración grave del orden público o subversión contra los poderes


constituidos.

5. Requerir el auxilio de la fuerza pública en caso necesario con intervención del gobierno
provincial respectivo.

6. Expedir certificaciones y testimonios en las actuaciones en que intervenga.

7. Asistir a los cursos y exámenes cuando lo considere conveniente y tomar toda otra
medida tendiente a fiscalizar el nivel académico.

8. Evacuar las consultas que formulen los Gobiernos provinciales o establecimientos


respectivos sobre cuestiones concretas de su interés referidas al régimen de la ley.

Artículo 10°- En el caso de verificarse la violación a normas legales o la insuficiencia del


nivel en la enseñanza impartida, la Secretaría de Estado notificará la imputación al
representante legal del establecimiento respectivo para que formule su descargo dentro del
plazo de treinta días corridos perentorios. Asimismo pondrá en conocimiento del gobierno
provincial respectivo la notificación precedentemente establecida, al sólo efecto
informativo. Con su resultado la Secretaría elevará las actuaciones al P. E. Nacional
aconsejando la resolución que corresponda de conformidad con el artículo 14° de la ley.

Artículo 11°- La reforma de los estatutos académicos deberá ser comunicada por el
establecimiento respectivo a la Secretaría de Estado, dentro de los treinta días corridos de
su aprobación por el P. E. Provincial respectivo, a sus efectos.
Artículo 12°- El pedido de aprobación de la estructura general de los planes de estudio y
sus modificaciones, deberá presentarse ante la Secretaría de Estado acompañándose el plan
de estudios respectivo y una exposición de motivos. La Secretaría de Estado correrá vista al
establecimiento peticionante, de las observaciones, si las hubiere, por treinta días hábiles
perentorios. Con su resultado elevará sus acciones al P. E. Nacional aconsejando la
resolución que corresponda.

Artículo 13°- A los efectos de la aprobación por el P. E. Nacional de las modificaciones a


que se refiere el artículo 5° de la ley, la Provincia en el caso del artículo 4° de la ley, o el
establecimiento respectivo, deberá efectuar la presentación ante la Secretaría de Estado
dando cumplimiento a los recaudos establecidos en el artículo 4° del presente decreto, en el
primer supuesto, y a los recaudos establecidos en los artículos 3° a 6° del presente decreto
en el segundo supuesto. La Secretaría de Estado procederá según el caso, en la forma
prevista en los artículos 5° y 6° del presente decreto.

Artículo 14°- A los efectos establecidos en el Artículo 11° de la ley, el establecimiento


respectivo presentará ante la Secretaría de Estado un certificado por duplicado en el que
deberá constar la totalidad de los exámenes rendidos, sus clasificaciones, fechas e
integrantes de las mesas examinadoras. Una vez verificado el cumplimiento de los
requisitos legales, estatutarios y reglamentario, la Secretaría de Estado visará el original
devolviéndolo al establecimiento de origen para su entrega al interesado y archivará el
duplicado. Ningún establecimiento podrá admitir la validez de materias o trabajos
aprobados en establecimientos universitarios provinciales sin el certificado antedicho
visado.

Artículo 15°- El reconocimiento de estudios aprobados en universidades del extranjero; no


podrá exceder del 70% de las asignaturas y trabajos que integren el plan de estudios
respectivo, vigente en el establecimiento que efectúe el reconocimiento. Este podrá
realizarse por niveles de conocimiento o madurez, o por materias o trabajos en particular;
previo examen de la correspondencia existente, y mediante resolución expresa para cada
caso; de ello deberá dejarse constancia en los certificados de estudios que se extiendan

Artículo 16°- A los efectos establecidos en el artículo 16° de !a ley , los institutos
respectivos efectuarán la presentación ante la Secretaría de Estado de Cultura y Educación
previa autorización de la autoridad nacional correspondiente, y dando cumplimiento a los
requisitos establecidos en el artículo 3° incisos 3° a 7° del presente decreto. Presentada la
solicitud la Secretaría de Estado inspeccionará el establecimiento y efectuará la evaluación
prevista en el artículo 3° de la ley La Secretaría de Estado correrá vista al establecimiento
peticionante de las actuaciones por treinta días hábiles perentorios y con su resultado
elevará las actuaciones al P. E. Nacional aconsejando la resolución que corresponda.

Artículo 17°- El presente decreto será refrendado por el señor Ministro del Interior y
firmado por el señor Secretario de Estado de Cultura y Educación.

Artículo 18°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial
y archívese.
ONGANIA - Guillermo A. Borda - José M. Astigueta.
UNIVERSIDADES PRIVADAS

Reglaméntase las disposiciones de la ley 17.604

DECRETO N° 8.472

Buenos Aires, 31 de diciembre de 1969

VISTO la necesidad de reglamentar las disposiciones de la Ley N° 17.604 y en


ejercicio de las atribuciones conferidas por el art. 86º de la Constitución Nacional,

El Presidente de la Nación Argentina

DECRETA:

Artículo 1º - Los trámites correspondientes a la creación, funcionamiento y creación de


los establecimientos comprendidos en la Ley 17.604, se efectuarán por intermedio del
Ministerio de Cultura y Educación.

Art. 2º - El Ministerio de Cultura y Educación a los fines indicados en el art. l°, tendrá
las siguientes atribuciones y deberes:
a) Entender en todo lo concerniente al otorgamiento de las autorizaciones
provisionales y definitivas y a su retiro.
b) Ejercer la fiscalización permanente sobre dichos establecimientos con el objeto de
verificar si se cumplen las condiciones bajo las cuales están autorizados a funcionar.
c) Controlar el cumplimiento de las normas referentes a la utilización de las
denominaciones previstas en la ley.
d) Organizar un registro general de establecimientos universitarios privados y un
legajo especial para cada uno de ellos con todos los antecedentes que se consideren
necesarios.
e) Preparar anualmente una memoria estadística y descriptiva relativa al estado de los
establecimientos sujetos al régimen de la Ley 17.604.

Art. 3º - En el pedido de autorización provisional deberá fundarse la necesidad o


conveniencia de la creación del nuevo establecimiento, conforme con las siguientes pautas:
a) Planes de desarrollo y prioridades nacionales y regionales.
b) Planes educativos y de desarrollo universitarios nacionales y regionales.
c) Necesidades en el campo de la investigación científica, tecnológica o humanística.
d) Requerimientos de recursos humanos y posibilidades ocupacionales de los
egresados de las facultades, escuelas o carreras que se propongan, en el país y en la
zona de influencia del establecimiento cuya autorización provisional se solicita.
e) Razones especiales que justifican la creación de determinadas carreras, aun cuando
estas no coincidan con los planes de desarrollo y prioridades nacionales y
regionales.
Art. 4º - Junto con la solicitud de autorización provisional deberán acompañarse los
siguientes documentos:
a) Certificación del trámite de la solicitud para la obtención de la personería jurídica de
la entidad peticionante. En caso de concederse la autorización provisional para el
establecimiento privado universitario, su funcionamiento estará condicionado al
otorgamiento previo de la personería jurídica de la entidad peticionante.
b) Acreditación de la personería del representante de la entidad peticionante.
c) Datos personales completos de las personas integrantes de los órganos de gobierno
de la entidad peticionante, con indicación de los cargos que desempeñan.
d) Inventario inicial y balance constitutivo, si lo hubiere, y balances posteriores, hasta
el ejercicio correspondiente a la fecha de presentación. Dichos balances deberán
estar certificados por contador Público Nacional.
e) Compromiso formal de acreditar un patrimonio propio estimado en su valor venal,
con indicación detallada de su origen, composición, acompañando copia autenticada
por escribano público de los títulos de propiedad de los bienes registrables, dentro
de los quince (15) días hábiles subsiguientes a la notificación que efectúe el
Ministerio de Cultura y Educación a la entidad peticionante haciéndole saber que las
actuaciones se encuentran en condiciones de ser elevadas al Poder Ejecutivo
Nacional a los efectos establecidos en el art. 8° del presente decreto. Si la entidad
peticionante no acreditase en dicho plazo el patrimonio a que se hace referencia en
el párrafo anterior, le será denegada la solicitud por el Poder Ejecutivo Nacional y
no le será reintegrado el depósito bancario que establece el inciso f) del presente
artículo.
f) Recibo de un depósito bancario a la orden del Ministerio de Cultura y Educación
por valor de dicho depósito se reintegrará en el término de quince (15) días hábiles
posteriores a la resolución de la solicitud, sea esta afirmativa o negativa, excepto en
el caso previsto en el segundo párrafo del inciso anterior.
g) Proyecto de los estatutos académicos, de la estructura funcional y de los planes de
estudio del establecimiento, con indicación de carreras, grados y títulos.
h) Nómina completa del personal directivo, docente, técnico y administrativo del
establecimiento con indicación de título, antecedentes, cargos, dedicación y
remuneración prevista.
i) Plan financiero de ingresos y egresos con indicación de su origen y destino, con el
objeto de acreditar la posibilidad del desarrollo normal de las tareas del
establecimiento, de acuerdo con los planes de estudio propuestos para dos años
subsiguientes a partir de la autorización.
j) Descripción documentada de las instalaciones disponibles para el establecimiento
con el propósito de acreditar la posibilidad del cumplimiento de sus fines.

Art. 5º - Las solicitudes de autorización provisional deberán presentarse con una


antelación no inferior a trescientos sesenta (360) días corridos de la fecha en el cual se
proyecta iniciar las actividades académicas.

Art. 6º - En caso de no ajustarse la solicitud a los recaudos precedentemente indicados,


se notificará al peticionante dentro de los treinta (30) días hábiles de presentada la solicitud,
quien podrá subsanar la omisión o el defecto dentro del término perentorio de treinta (30)
días hábiles subsiguientes a dicha notificación. Vencido ese lapso sin que se satisfagan los
requisitos establecidos, quedará desechada la solicitud mediante resolución fundada del
Ministro de Cultura y Educación. El pedido no podrá reiterarse antes de transcurridos
ciento ochenta (180) días corridos, a contar desde la fecha de la decisión denegatoria.

Art. 7º - Presentada la solicitud con los requisitos indicados, el Ministerio de Cultura y


Educación verificará la exactitud de la información producida mediante los procedimientos
que considere adecuados y solicitará la opinión del Consejo de Rectores de las
Universidades Privadas, el cual deberá expedirse en un plazo no mayor de treinta (30) días
hábiles. Obtenido este dictamen o transcurrido dicho lapso, el Ministerio efectuará la
evaluación establecida en el art. 2° de la Ley 17.604 de acuerdo con las pautas del artículo
3° del presente decreto.

Art. 8° - El Ministerio de Cultura y Educación correrá vista al peticionante de la


evaluación producida y de las observaciones, si las hubiere, para su contestación del
término perentorio de treinta (30) días hábiles, con su resultado, previo cumplimiento de lo
establecido en el inciso e) del art. 4° del presente decreto, el Ministro de Cultura y
Educación elevará las actuaciones al Poder Ejecutivo Nacional aconsejando la resolución
que a su juicio corresponda. La decisión definitiva tendrá que notificarse al peticionante
con no menos de sesenta (60) días corridos de anterioridad a la fecha proyectada para la
iniciación de las actividades académicas.

Art. 9° - Los establecimientos autorizados en forma provisional tendrán que indicar


esta circunstancia en todos sus anuncios, publicaciones y documentación, agregando,
debajo o a continuación del nombre, la siguiente leyenda: "Autorizada por el Decreto del
Poder Ejecutivo Nacional N° . . . . . ., conforme con lo establecido en el art. 7° de la Ley
17.604". En caso de incumplimiento, el establecimiento se hará pasible de las sanciones
dispuestas en los arts. 12º, inciso f), y 13º del presente decreto.

Art. 10º. - El pedido de autorización definitiva de los establecimientos podrá ser


presentado por estos una vez transcurrido el lapso establecido en el artículo 8° de la Ley
17.604, el cual no podrá ser inferior a cinco (5) años. Junto con la solicitud tendrán que
acompañarse los siguientes documentos:
a) Acreditación de la personería del representante.
b) Copia autenticada de la resolución del órgano competente del establecimiento
peticionante por el cual se decide solicitar la autorización definitiva.
c) Datos personales completos de las personas integrantes de los órganos de gobierno
de la entidad peticionante con indicación de los cargos que desempeñan.
d) Indicación detallada y actualizada de la composición del patrimonio del
establecimiento con determinación de su origen y fechas de adquisición y copia
autenticada por escribano público de los títulos de propiedad de los bienes
registrables.
e) Nómina completa del personal directivo, docente, técnico y administrativo del
establecimiento con indicación de título, antecedentes, cargos, dedicación y
remuneración.
f) Presupuesto financiero con indicación del origen y destino de los recursos, que
acredite la posibilidad del normal desarrollo de las actividades docentes y de
investigación del establecimiento.
g) Memoria general del establecimiento en la que conste su evolución desde la
fundación; los resultados obtenidos; la actividad docente y de investigación
desarrollada; las instalaciones con que cuenta; y estadísticas generales con especial
indicación de la evolución de la matrícula, del numero de alumnos aprobados y
reprobados y del numero de graduados y desertores, con discriminación por año
académico, facultades, escuelas, carreras y títulos.

Art. 11º. - Efectuada la presentación de la solicitud de autorización definitiva, esta se


sustanciará de acuerdo con e1 procedimiento y dentro de los plazos establecidos en los arts.
6°; 7° y 8° del presente decreto.

Antes de elevar la recomendación que corresponda al Poder Ejecutivo Nacional, el


Ministro de Cultura y Educación dispondrá la realización de una evaluación del
establecimiento peticionante por una comisión que designará al efecto, integrada por tres
miembros, con antecedentes destacados en actividades científicas, académicas o en la
organización y planeamiento universitario. Uno de ellos será elegido entre una terna
propuesta por el Consejo de Rectores de las Universidades Privadas. Dicha comisión podrá
hacerse asesorar para el cumplimiento de su cometido por los especialistas que considere
necesarios en relación con las áreas de estudio del establecimiento evaluado. De la
evaluación producida, que será efectuada conforme con los criterios que hará conocer el
Ministerio de Cultura y Educación se dará vista al peticionante en la forma y término del
art. 8° del presente decreto, y a los efectos allí establecidos.

Art. 12º. - A los efectos de permitir el ejercicio de las facultades de evaluación y


fiscalización determinadas por la Ley 17.604, el Ministerio de Cultura y Educación podrá
disponer las medidas que considere adecuadas y en particular las siguientes:
a) Examinar los libros, registros y documentación relacionados con la actividad
académica, administrativa y financiera de los establecimientos autorizados. Los
libros de actas de sesiones de los órganos de gobierno del establecimiento y los de
actas de exámenes, deberán ser rubricados y foliados por el órgano competente del
Ministerio de Cultura y Educación.
b) Efectuar el contralor financiero-contable de la contribución económica otorgada por
el Estado Nacional.
c) Disponer inspecciones en los establecimientos cuando observare o tuviere
conocimiento de irregularidades, de actos violatorios de las leyes, decretos y
estatutos que los rigen o cuando fuere necesario para el cumplimiento de los deberes
conferidos al Ministerio de Cultura y Educación por la Ley 17.604 y por el presente
decreto.
d) Solicitar al Poder Ejecutivo Nacional la intervención por tiempo determinado de los
establecimientos en los casos de alteración grave del orden público, subversión
contra los poderes del Estado o conflictos internos que atenten ostensiblemente
contra la actividad académica. Concluido el término de la intervención se repondrán
las autoridades estatutarias o se dispondrá la elección de estas de acuerdo con las
normas del Estatuto vigente, salvo que se haga necesaria la aplicación de la sanción
establecida en el art. 13º, inciso d) del presente decreto.
e) Requerir la colaboración de las autoridades competentes.
f) Prohibir la circulación y secuestrar las publicaciones cuyo texto no se ajuste a las
normas de los artículos 7° y 18º de la Ley 17.604.
g) Expedir certificaciones y testimonios en las actuaciones en las cuales intervenga, y
determinar las condiciones formales de los certificados y diplomas.

Art. 13º.- Los establecimientos que no den cumplimiento a las obligaciones impuestas
por la Ley 17.604, el presente decreto reglamentario o los estatutos respectivos, estarán
sujetos a las siguientes sanciones:
a) llamado de atención;
b) apercibimiento;
c) intimación al establecimiento a que suspenda sus actividades;
d) clausura definitiva, total o parcial.

Art. 14º. - Constatada la violación por el Ministerio de Cultura y Educación, se


advertirá por acta de infracción dicha circunstancia y se determinará un plazo a fin de que
el establecimiento modifique, corrija o subsane las circunstancias legales o de hecho que
contraríen el orden legal o académico, sin perjuicio de aplicarse un llamado de atención si
el caso así lo justifica. Vencido el término, sin que el establecimiento haya dado
cumplimiento a las observaciones efectuadas, se procederá a apercibirlo y a ordenarle que
subsane la irregularidad dentro del lapso que se determine, pudiendo asimismo el
Ministerio de Cultura y Educación intimar al establecimiento que suspenda sus actividades
total o parcialmente, hasta tanto se cumplimente lo dispuesto.

Una vez subsanado el vicio el establecimiento podrá, dentro de los cinco (5) días
hábiles subsiguientes, recurrir de la medida dispuesta. Si se tratare de circunstancias de
hecho, se abrirá a prueba, por un término de quince (15) días hábiles, vencido el cual o
producida la prueba ofrecida, el Ministerio de Cultura y Educación dictará la resolución
correspondiente. EI establecimiento deberá publicar en lugares visibles, el trámite seguido
y la sanción aplicada.

Art. 15º. - Sin perjuicio de lo señalado en el artículo anterior, el Ministerio de Cultura y


Educación podrá proponer al Poder Ejecutivo Nacional la clausura definitiva, total o parcial
del establecimiento, cuando este no cumpla los fines para los cuales fue creado; o haya
incurrido en transgresiones a las leyes, reglamentaciones o estatutos que afecten
gravemente las pases de su organización o los intereses públicos, o cuando sus antecedentes
justifiquen la presente medida.

De la imputación respectiva se notificará al representante legal del establecimiento, a


fin de que formule su descargo dentro del plazo de quince (15) días corridos. Si se tratare
de circunstancias de hecho, se abrirá a prueba por un término de quince (15) días hábiles,
vencido el cual o producida la prueba ofrecida, se correrá vista de las actuaciones al
Consejo de Rectores de las Universidades Privadas, a fin de que emita opinión en el
término de quince (15) días hábiles, vencido el cual o producida la prueba ofrecida se
correrá vista de las actuaciones al Consejo de Rectores de las Universidades Privadas, a fin
de que emita opinión en el término de quince (15) días hábiles. Transcurrido ese lapso, con
dicha opinión o sin ella, se elevará la propuesta al Poder Ejecutivo Nacional.

Art. 16º. - La reforma del Estatuto Académico de los establecimientos autorizados


requerirá aprobación del Ministerio de Cultura y Educación. Presentado el proyecto de
reforma, el Ministerio de Cultura y Educación correrá vista al peticionante de las
observaciones, si las hubiere, para su contestación dentro de los veinte (20) días corridos
perentorios, con su resultado, el Ministro de Cultura y Educación dictará la correspondiente
resolución aprobatoria o denegatoria, dentro de los treinta (30) días hábiles.

Art. 17º. - Los establecimientos universitarios privados comunicarán al Ministerio de


Cultura y Educación todas las modificaciones que se efectúen en sus planes de estudio y en
la composición de sus autoridades, dentro de los treinta (30) días hábiles de haberse
producido. Anualmente, antes del 30 de noviembre de cada año, se señalarán los cambios
en el cuerpo docente.

Las modificaciones en la estructura general de los planes de estudio, requerirán la


aprobación previa del Ministerio de Cultura y Educación. La presentación deberá
acompañarse de una exposición de motivos, ciento veinte (120) días antes de la fecha
prevista por el establecimiento, para que entren en vigencia. Si a los noventa (90) días de la
presentación las modificaciones no fueren observadas por el Ministerio de Cultura y
Educación, la entidad podrá hacer regir el plan modificado. Si hubiere observaciones que
efectuar, el Ministerio, antes del plazo señalado, correrá vista al peticionante para que las
conteste dentro de los quince (15) días corridos desde su modificación. Con su resultado, el
Ministerio de Cultura y Educación dictará la resolución respectiva en un término de treinta
(30) días hábiles desde el vencimiento de la vista conferida.

Art. 18º.- La habilitación de los títulos académicos expedidos por establecimientos


universitarios privados con autorización provisional o definitiva, a los efectos del artículo
4°, inciso c) de la Ley 17.604, será extendida por el Ministerio de Cultura y Educación,
previa verificación de la aprobación de las materias del plan de estudios correspondientes y
del cumplimiento de los requisitos legales, estatutarios y reglamentarios. El trámite será
efectuado por intermedio del establecimiento respectivo, el cual acompañará en cada caso
un certificado en el que consten la totalidad de las calificaciones y de las pruebas rendidas
por el interesado, con indicación de las fechas de estas últimas. Dicho certificado se
archivará en el Ministerio de Cultura y Educación. cuando los títulos otorgados
correspondan a profesiones cuyo ejercicio se encuentre reglamentado y que a juicio del
Ministerio de Cultura y Educación requieran una prueba final de capacidad profesional,
esta se ajustará a las siguientes normas:
a) La Prueba consistirá en una demostración práctica de la aptitud del egresado para el
ejercicio de la profesión de que se trate. Dicha Prueba no implicará un examen
general de las asignaturas cursadas ni tendrá por objeto un tema de especialización.
Su propósito tiende a comprobar la posesión por parte del egresado de los criterios
adecuados para establecer razonablemente los términos básicos de un caso
profesional concreto y la determinación del método correcto para su análisis y
solución.
b) La Prueba Final de Capacidad Profesional será recibida por un Tribunal integrado
por tres miembros, seleccionados entre profesores universitarios y profesionales de
la especialidad de que se trate, que designará en cada caso el Ministerio de Cultura y
Educación. Uno de ellos representará al Estado Nacional, y será elegido entre
funcionarios o magistrados estatales con grado universitario, profesores o ex
profesores universitarios, o miembros de Academias Nacionales. Los otros dos
representarán al colegio o asociación profesional que corresponda y al
establecimiento privado a que pertenezca el egresado que se somete a la prueba,
respectivamente. Los miembros serán elegidos de una terna que a tal efecto
presentarán al Ministerio de Cultura y Educación dichas Instituciones. En caso de
que las instituciones precedentemente mencionadas no propongan ternas en un
tiempo prudencial, una vez que sean invitadas a hacerlo, el Ministerio de Cultura y
Educación efectuará las designaciones en forma directa.
c) Las Pruebas Finales de Capacidad Profesional serán públicas y se rendirán en la
respectiva facultad, escuela o instituto del establecimiento peticionarte. Durante el
curso del año calendario habrá por lo menos tres llamados en las fechas que fije el
Ministerio de Cultura y Educación, de acuerdo con el establecimiento que
corresponda.

Los casos prácticos a que hace referencia el inciso a) del presente artículo, serán
establecidos por el Tribunal, debiendo responder a un temario general, que
anualmente propondrá cada establecimiento dentro de los últimos sesenta días de
cada año, para las pruebas a rendirse en el año siguiente, al Ministerio de Cultura y
Educación, quien los aprobará o rechazará por resolución fundada, dentro de los
treinta (30) días corridos inmediatos a su presentación. De no presentarse en dicho
término, se tendrá por establecido el fijado para el año inmediato anterior si lo
hubiere, y en caso contrario lo fijará de oficio el Ministerio de Cultura y Educación.
d) Si el egresado fuera reprobado la primera vez, podrá repetir la Prueba Final
transcurridos seis (6) meses. Si fuera reprobado nuevamente, en lo sucesivo deberá
esperar cada vez un (1) año para requerir la constitución de otro Tribunal.
e) El Ministerio de Cultura y Educación verificará que los casos prácticos se ajusten al
temario general y a las características descriptas en el inciso a) del presente artículo.
f) El Ministerio de Cultura y Educación determinará el procedimiento a seguir por el
Tribunal para la recepción de la Prueba de Capacitación Profesional.

Art. 19º.- El Poder Ejecutivo Nacional podrá conceder, a propuesta del Ministerio de
Cultura y Educación, la supresión de la Prueba Final de Capacidad Profesional a los
establecimientos autorizados definitivamente. Para ello deberán contar con un mínimo de
quince (15) años de funcionamiento a partir de su autorización definitiva y poseer nivel
académico y docente adecuado.

Art. 20º. - A los efectos establecidos en el art. 11º de la Ley 17.604, cada
establecimiento designará un funcionario responsable, el que acreditará la veracidad y
autenticidad del contenido y firma de los certificados donde consten las calificaciones y
pruebas rendidas por el interesado en dicho establecimiento. Ningún establecimiento
educativo podrá admitir la validez de materias, seminarios o trabajos prácticos aprobados
en establecimientos universitarios privados, sin la presentación del certificado antedicho
debidamente legalizado por el Ministerio de Cultura y Educación, a cuyo efecto el
funcionario responsable acreditará su carácter y registrará su firma ante el Departamento de
Registro de Títulos.

Art. 21º. - El reconocimiento de estudios aprobados en universidades del extranjero,


excepto los casos regidos por leyes especiales, no podrá exceder del setenta por ciento
(70%) de las asignaturas y trabajos que integren el plan de estudio respectivo, vigente en el
establecimiento que efectúe el reconocimiento. Este podrá realizarse por niveles de
conocimiento o de madurez o por materias o trabajos en particular, previo análisis de la
correspondencia existente y mediante resolución expresa para cada caso. De ello deberá
dejarse constancia en los certificados de estudios que se extiendan.

Art. 22º. - Los establecimientos universitarios privados no podrán otorgar otras


equivalencias fuera de las expresamente establecidas en las normas legales vigente, en el
presente decreto, o las que en el futuro se autoricen por el Ministerio de Cultura y
Educación.

Art. 23º. - EI Ministerio de Cultura y Educación establecerá las condiciones que


deberán reunir los estudios de nivel medio, de cualquier modalidad, requeridas por La Ley
17.604 para el ingreso a los establecimientos universitarios privados.

Art. 24º. - EI Consejo de Rectores de las Universidades Privadas a que se refiere el


articulo 17º de La Ley 17.604 estará integrado por los Rectores de los establecimientos
autorizados. Dicho Consejo dictará su propio Estatuto sin más exigencias que las
siguientes:

a) Ejercer la representación conjunta de los establecimientos autorizados.


b) Adoptar sus resoluciones por mayoría simple. Cada Rector tendrá un solo voto,
pudiendo votar por sí y por representación.
c) Emitir opinión conforme con lo establecido en los arts. 7°, 15º, 26º y 29º. En el caso
previsto en el art. 11º de este decreto sólo tendrán voto los Rectores de los
establecimientos autorizados definitivamente y en el del art. 15º deberá abstenerse el
Rector del establecimiento cuestionado.
d) Programar el planeamiento integral de la enseñanza universitaria privada, conforme
con las pautas establecidas en el artículo 3° del presente decreto y coordinar esa
labor con los órganos competentes del Ministerio de Cultura y Educación y de los
Consejos de Rectores de las Universidades Nacionales y Provinciales.
e) Asesorar a los establecimientos que representa y procurar la coordinación de sus
actividades docentes, culturales y de investigación y la correlación de sus estudios y
de los títulos que expidan.
f) Poseer una Secretaría Ejecutiva de carácter permanente.

Art. 25º. - E1 Ministerio de Cultura y Educación actuará como órgano de aplicación a


los efectos de comprobar las violaciones a la prohibición establecida en el art. 18º de La
Ley 17.604 y proponer las sanciones que correspondan de acuerdo con lo previsto en dicha
norma legal. En tal sentido determinará las denominaciones, diplomas, títulos y grados que
deban reservarse para distinguir instituciones, actividades, competencias o profesiones de
carácter universitario.

Verificada una infracción, el Ministerio de Cultura y Educación dispondrá que se labre


el acta de comprobación y la elevará al Poder Ejecutivo Nacional juntamente con la nómina
y datos personales de las autoridades del establecimiento infractor, proponiendo las
sanciones pertinentes, sin perjuicio de las responsabilidades penales que pudieran existir y
de lo dispuesto en el art. 12º, inciso f) del presente decreto.

Art. 26. - A los efectos de lo establecido en el artículo 2° de la Ley 17.604, los


establecimientos universitarios privados deberán solicitar autorización al Ministerio de
Cultura y Educación para la creación de nuevas facultades, escuelas, institutos,
departamentos, carreras, grados o títulos. Las anexiones, incorporaciones y desanexiones
serán consideradas como creaciones. EI pedido deberá presentarse ciento ochenta (180)
días antes de la fecha en que deban comenzar las actividades, y tendrá que estar
acompañado por la correspondiente exposición de motivos y por el proyecto de presupuesto
de ingresos y gastos, conforme a las pautas señaladas en el articulo 3° del presente decreto.
El Ministerio recabará la opinión del Consejo de Rectores de las Universidades Privadas, el
cual deberá expedirse en el término de treinta (30) días hábiles y dispondrá la
correspondiente intervención por parte de los órganos técnicos pertinentes, quienes se
expedirán dentro de los treinta (30) días hábiles subsiguientes. De tales dictámenes se dará
vista al peticionante, por el término de quince (15) días hábiles perentorios, para que
formule las observaciones que considere adecuadas. Con su resultado el Ministro de
Cultura y Educación dictará la resolución correspondiente.

Art. 27º. - En relación con las creaciones de nuevas facultades, escuelas, institutos,
departamentos y carreras, así como también de las anexiones, incorporaciones y
desanexiones a que se refiere el artículo precedente, además de las pautas establecidas en el
artículo 3° del presente decreto, se tendrán en cuenta los siguientes criterios:
a) Mantenimiento de condiciones que permitan un grado suficiente de interrelación de
la comunidad universitaria.
b) Restricción respecto de la dispersión geográfica de los establecimientos
universitarios, salvo que ello se justifique por razones de inmediatez de los recursos
humanos naturales o por fines de desarrollo de zonas marginales.
c) Posibilidad de contralor efectiva de tales dependencias por parte de las autoridades
centrales del establecimiento universitario peticionante.

Art. 28º. - Para el otorgamiento de la contribución económica a que se refiere el


artículo 16º de la Ley 17.604, los establecimientos interesados deberán presentar por
intermedio del Consejo de Rectores de las Universidades Privadas sus solicitudes con
anterioridad al 31 de julio de cada año, con vistas al ejercicio fiscal que comienza el 1º de
enero del año siguiente. Tales pedidos tendrán que ajustarse a los siguientes recaudos:
a) Configurar un proyecto concreto, elaborado de acuerdo con las normas de
presentación de proyectos que elaborará el Ministerio de Cultura y Educación. Se
entenderá por proyecto toda propuesta que incluya un objetivo docente o de
investigación claramente definido, sea temporario o permanente; la descripción
pormenorizada de la metodología, las etapas y los medios (personal, edificios,
equipos, etc.) que se consideren necesarios para la consecución de la finalidad
perseguida, y la estimación detallada de los costos parciales y totales.
b) Incluir en el proyecto un director que tenga carácter de profesor o investigador
universitario con dedicación suficiente y antecedentes científicos y académicos
adecuados. La función de director podrá coincidir con un cargo directivo académico
o de investigación del establecimiento peticionarte cuando el proyecto involucre la
totalidad de una facultad, escuela, departamento o instituto y siempre que se
satisfagan los recaudos precedentemente establecidos.
c) Proponer para la ejecución del proyecto el personal docente o de investigación con
el nivel científico y académico y la dedicación indispensable para la viabilidad de la
iniciativa.
d) El proyecto deberá coincidir con el interés nacional conforme con las pautas
señaladas en el artículo 3° del presente decreto, teniendo particularmente en cuenta
el carácter estratégico o de formación humanística de las carreras e investigaciones
propuestas y las necesidades regionales.

Art. 29º. - A los efectos de analizar las solicitudes presentadas por los establecimientos
universitarios privados, el Ministerio de Cultura y Educación requerirá la opinión del
Consejo de Rectores, ante quien deberán presentarse antes del 31 de mayo de cada año.
Dicho cuerpo dictaminará acerca de ellas elevando al Ministerio de Cultura y Educación
antes del 31 de julio de cada año, una recomendación final que incluirá una lista con orden
de prioridades. Formulará igualmente todas las observaciones que considere convenientes
y, en caso de disidencia, indicará las diferentes recomendaciones o listas de prioridades.
Una vez en posesión de dicho dictamen, el Ministerio de Cultura y Educación designará
una comisión asesora para la formulación de una recomendación fundada y la elaboración
de una lista de prioridades.

Esta comisión estará integrada por el Director Nacional de Altos Estudios, quien la
presidirá; el Director de la Oficina Sectorial de Desarrollo y dos o más expertos con
antecedentes destacados en la actividad científica, académica o en planeamiento y
organización universitaria.
El Ministro de Cultura y Educación propondrá al Poder Nacional el monto y la
distribución del aporte económico estatal que considere adecuado del Presupuesto General
de Gastos del Ministerio de Cultura y Educación.

La contribución del Estado podrá financiar total o parcialmente un proyecto, debiendo


indicarse en este último caso los rubros que se cubrirán. Al adoptarse estas decisiones se
tendrá en cuenta el plazo fijado para la ejecución del proyecto, pudiendo establecerse un
lapso para la contribución económica estatal.

Art. 30º. - Para efectivizar la contribución económica acordada el Ministerio de Cultura


y Educación abrirá una cuenta bancaria por cada proyecto a la orden del Rector del
establecimiento o la persona que este indique, depositándose en ella los fondos concedidos
de acuerdo con los requerimientos y plazos para su ejecución. El 30 de junio y el 31 de
diciembre de cada año el establecimiento que reciba el aporte dará cuenta al Ministerio de
Cultura y Educación de su utilización y del progreso del proyecto subsidiario, sin perjuicio
de lo establecido en los artículos 2° y 12 del presente decreto.

Art. 31º. - En caso de que el Ministerio de Cultura y Educación compruebe que los
fondos acordados no se han utilizado de acuerdo con lo previsto en el proyecto
oportunamente aprobado, el Ministro podrá proponer la cancelación de la contribución
estatal.

Art. 32º. - Por esta única vez el Ministro de Cultura y Educación con intervención de la
Dirección Nacional de Altos Estudios, podrá homologar las creaciones de facultades,
escuelas, departamentos, institutos, carreras, grados y títulos, como así también las
anexiones, incorporaciones y desanexiones, realizadas con anterioridad al presente decreto
sin autorización estatal expresa. Homológanse las aprobaciones efectuadas hasta la fecha
del presente decreto por la Dirección Nacional de Altos Estudios.

Art. 33º. - El período de quince (15) años a que se refiere el artículo 19º del presente
decreto, se contará en relación las universidades registradas de acuerdo con el régimen de la
Ley 14.557 y su decreto reglamentario, a partir de la fecha de su primera aprobación o
reconocimiento oficial como establecimiento independiente.

Art. 34º. - Por esta única vez las solicitudes a que se refiere el art. 28º del presente
decreto, podrán presentarse para el año fiscal de 1970, hasta el 31 de marzo de ese año.

Art. 35º. - Homológanse las equivalencias otorgadas por establecimientos


universitarios privados hasta la fecha del presente decreto, dentro de los límites
establecidos por éste en su art. 22º.

Art. 36º. - El plazo de trescientos sesenta (360) días establecido en el art. 5° del
presente decreto se contará para las solicitudes presentadas con anterioridad a la fecha del
presente decreto a partir del día de su presentación. En consecuencia los demás plazos y
trámites posteriores podrán abreviarse u obviarse a juicio del Ministerio de Cultura y
Educación, con el acuerdo del peticionante, sin que ello implique excepción alguna
respecto de los requisitos que la entidad peticionante y el establecimiento proyectado
deberán reunir conforme con lo dispuesto por la Ley 17.604 y el presente decreto.

Art. 37º. - El lapso establecido en el art. 10º del presente decreto deberá computarse
para los establecimientos autorizados provisionalmente por Decreto N° 2.227/68, a partir
de la fecha en que cada uno de ellos comenzó sus actividades académicas. Respecto de
dichos establecimientos, podrá sustituirse a juicio del Ministerio de Cultura y Educación, la
evaluación a que hace referencia el art. 11º del presente decreto, por un dictamen de la
Dirección Nacional de Altos Estudios, si así lo solicitara el establecimiento interesado.

Art. 38º. - Deróganse los decretos del Poder Ejecutivo Nacional, N° 1.404 del 11 de
febrero de 1959; N° 631 del 22 de enero de 1962; N° 4.227 del 24 de mayo de 1963; N°
7.703 del 16 de setiembre de 1963; N° 7.764 del 18 de setiembre de 1963; N° 7.765 del 18
de setiembre de 1963; N° 1.392 del 12 de diciembre de 1963; N° 1.674 del 6 de marzo de
1964 y N° 4.369 del 4 de junio de 1965.

Art. 39º. - El presente decreto será refrendado por el señor Ministro de Cultura y
Educación.

Art. 40º. - Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial
y archívese.

ONGANIA
Dardo Pérez Guilhou.
ANEXO

DECRETO N° 1.868 (7-4-1972). - Agrégase al final del inciso b) del artículo 18º del
Decreto N° 8.472/69 el párrafo siguiente: "Los tres miembros del Tribunal deberán estar
legalmente habilitados para el ejercicio de la profesión correspondiente a la materia de la
prueba".

DECRETO N° 939 (10-4-1975). - Agrégase al inciso b) del artículo 18º del Decreto N°
8.472/69 el texto siguiente: "Cuando el titulo otorgado por el establecimiento corresponda a
carreras cuyo contenido abarque más de una disciplina profesional, el tribunal podrá ser
integrado con representantes de aquellos consejos o asociaciones profesionales vinculados
con la orientación y posible área de acción sobre la cual tengan incidencia las incumbencias
asignadas al título. Será presidido en todos los casos por el representante del Estado
Nacional, y cuando el numero de sus integrantes no permita adoptar criterios en mayoría
prevalecerá el criterio del Presidente del Tribunal".

DECRETO N° 197 (16-1-1976).- Sustitúyese el texto del artículo 18º, inciso d) del
Decreto N° 8.472/69, por el siguiente: "Si el egresado fuera reprobado, podrá volver a
rendir la prueba cuantas veces lo solicite debiendo en todos los casos transcurrir un lapso
no menor de tres meses entre las fechas de cada examen".

DECRETO N° 2.971 (16-4-1973).- EI periodo de quince (15) años de funcionamiento


requerido en el artículo 19º del Decreto N° 8.472/69, se computará desde la iniciación de
actividades académicas regulares para los establecimientos autorizados por Decreto N°
2.227/68. Estos podrán efectuar la solicitud pertinente, cumplido dicho plazo, siempre que
además tengan por lo menos cinco (5) años de autorización definitiva y diez (10) años de
recepción de las pruebas finales establecidas en el artículo 18º del Decreto N° 8.472/69.
Los establecimientos autorizados bajo el régimen de la Ley 14.557, podrán optar por el
sistema de cómputo fijado en el artículo 33º del Decreto N° 8.472/69, o por el que se
establece en el artículo 19º del presente decreto. Los establecimientos autorizados con
posterioridad a la vigencia del Decreto N° 8.472/69, deberán cumplir también el requisito
de los diez (10) años de recepción de pruebas.
LEY 20.654

Ley orgánica de las universidades nacionales – Sustitución de la Ley 17.245.

Sanción: 14 de marzo de 1974.


Promulgación: 25 de marzo de 1974.
Publicación: B. O. 25/IV/74.

Citas legales: Ley 17.245: XXVII-A, 188.

TITULO I

De los fines, objetivos, funciones, estructura jurídico-administrativa y atribuciones de


las universidades nacionales

Art. 1º – Las universidades nacionales son comunidades de trabajo que integran el


sistema nacional de educación en el nivel superior con el fin de impartir enseñanza, realizar
investigación, promover la cultura nacional, producir bienes y prestar servicios con
proyección social y, haciendo los aportes necesarios y útiles al proceso de liberación
nacional, contribuir a la solución de los grandes problemas argentinos.

Art. 2º – Son funciones de las universidades:


a) Formar y capacitar profesionales y técnicos, con una conciencia argentina apoyada
en nuestra tradición cultural, según los requerimientos nacionales y regionales de las
respectivas áreas de influencia. Ello, mediante una educación formativa e informativa que
fomente y discipline en el estudiante su esfuerzo autodidáctico, su espíritu indagativo y las
cualidades que lo habiliten para actuar con idoneidad moral e intelectual en su profesión y
en la vida pública o privada orientada hacia la felicidad del pueblo y a la grandeza de la
Nación fundada primordialmente en valores de solidaridad social;
b) Promover, organizar y desarrollar la investigación y la enseñanza científica y
técnica, pura y aplicada, asumiendo los problemas reales nacionales y regionales,
procurando superar la distinción entre trabajo manual e intelectual. La orientación será
nacional y tendiente a establecer la independencia tecnológica y económica;
c) Elaborar, desarrollar y difundir el conocimiento y toda forma de cultura en
particular la de carácter autóctono, nacional y popular;
d) Estimular el estudio de la realidad nacional y el protagonismo que corresponde a la
Argentina dentro del orden mundial y del proceso de integración regional y continental.

Art. 3º – Las universidades tienen las siguientes atribuciones:


a) Adoptar y ejecutar todas las decisiones que hagan al cumplimiento de sus fines y
funciones;
b) Elaborar y reformar sus estatutos dentro de lo establecido por la presente ley;
c) Designar y remover su personal;
d) Formular, organizar y desarrollar planes de investigación y enseñanza;
e) Otorgar grados académicos y títulos habilitantes con validez nacional;
f) Revalidar títulos extranjeros;
g) Establecer los planes de estudios de las diferentes carreras, de tal suerte que se
prevean títulos en los niveles intermedios y finales;
h) Administrar y disponer de sus recursos y patrimonio, así como realizar los demás
actos de gestión económica, financiera y jurídica necesarios para su acción educativa,
científica y cultural;
i) Mantener y ampliar relaciones de carácter científico y educativo con instituciones
del país y del extranjero y participar en reuniones internacionales.

Art. 5º – Queda prohibido en el ámbito de la universidad el proselitismo político


partidario o de ideas contrarias al sistema democrático que es propio de nuestra
organización nacional.

TITULO II

De la organización académica

CAPITULO I

De las unidades académicas

Art. 6º – Cada universidad adoptará para su organización el sistema académico y


administrativo que considere más conveniente para sus características y necesidades.

Art. 7º – Integrarán las universidades:


a) Las unidades académicas destinadas a la enseñanza teórico-práctica e investigación
científica, que funcionan actualmente dentro de la jurisdicción universitaria y las que se
incorporen posteriormente a la misma;
b) Los establecimientos municipales; provinciales o nacionales que fuesen puestos
bajo la jurisdicción universitaria por la autoridad respectiva.

CAPITULO II

De los docentes e investigadores

Art. 8º – El personal docente de las universidades nacionales comprende:


a) Los profesores;
b) Los auxiliares de la docencia;

Los profesores serán de carácter ordinario y extraordinario. Los profesores ordinarios


tendrán las siguientes categorías:
a) Profesores titulares;
b) Profesores asociados;
c) Profesores adjuntos;

Los profesores extraordinarios tendrán las siguientes categorías:


a) Profesores eméritos;
b) Profesores visitantes;
c) Profesores honorarios;

No pueden crearse otras categorías de profesores ordinarios que las señaladas en esta
ley.

Art. 9º – Todo cargo de profesor ordinario y auxiliar docente debe obtenerse por
concurso público de antecedentes y de oposición.

Para ser designado profesor ordinario se requiere ser ciudadano argentino y poseer
título o diploma universitario reconocido en su disciplina por la Nación.

Cada universidad dictará su propio reglamento para proceder a realizar el concurso de


acuerdo con las normas fijadas en su estatuto.

Art. 10º. – Los profesores ordinarios serán designados por el Consejo Superior, de
acuerdo con la propuesta elevada por el Consejo Directivo de la respectiva unidad
académica. Estos órganos se ajustarán a las conclusiones de los jurados, sin perjuicio de su
competencia para examinar el concurso –en cuanto al respeto de las normas legales
estatutarias, y reglamento–, y su posibilidad de anulario.

Podrá interponerse recurso jerárquico contra lo resuelto por el Consejo Superior y


agotada esta vía quedará abierta la instancia judicial.

Art. 11º. – El docente universitario no podrá defender intereses que están en pugna,
competencia o colisión con los de la Nación, provincias o municipios, siendo pasible, si así
lo hiciera, de suspensión, cesentía o exoneración. Quedan excluidos los casos de defensa de
intereses personales del profesor, su cónyuge ascendientes o descendientes.

Es incompatible con el ejercicio de la docencia universitaria o funciones académicas


que le sean correlativas, el desempeño de funciones jerárquicas o de asesoramiento,
remuneradas o no, al servicio de empresas multinacionales o extranjeras, como así también
la pertenencia a organizaciones u organismos internacionales cuyos objetivos o accionar se
hallen en colisión con los intereses de la Nación.

Art. 12º. – El Consejo Superior, a propuesta de los consejos directivos, podrá resolver
la separación de los profesores que se hallen incursos en las siguientes causales:
a) Incumplimiento o violación de las disposiciones del art. 11º;
b) Condena criminal que no sea por hecho culposo;
c) La inhabilidad física que impida el ejercicio de la docencia o la inhabilidad mental
declarada por autoridad competente;
d) Abandono de las funciones;
e) Violación grave de las normas de esta ley o de los estatutos y reglamentos de las
universidades respectivas.

Art. 13º. – La estabilidad en el cargo de profesor ordinario se adecuará el siguiente


régimen:
a) La primera designación será por cuatro años;
b) La segunda designación por ocho años;
c) La tercera designación le otorgará estabilidad definitiva.

Todas estas designaciones deberán efectuarse de acuerdo con lo establecido en los arts.
17º y 18º.

Art. 14º. – El Consejo Superior, a propuesta del Consejo Directivo, podrá designar
profesores interinos por un período no mayor de un año, lapso durante el cual debe
convocarse a concurso. Asimismo puede disponer la contratación de profesores, por un
lapso que no debe exceder los dos años, para el desempeño de las funciones docentes
temporarias que no cuenten con especialistas en el cuerpo docente de las unidades
académicas.

Art. 15º. – La dedicación de los profesores puede ser:


a) Exclusiva;
b) De tiempo parcial;
c) Simple.

Art. 16º. – Los profesores ordinarios cesan automáticamente el 1º de marzo del año
siguiente a aquel en el que cumplan sesenta y cinco años de edad. En tal circunstancia
podrán ser designados profesores extraordinarios cuando medien las condiciones previstas
en el respectivo estatuto.

Art. 17º. – Cada universidad instituirá la carrera docente que estará orientada a :
a) La formación técnico didáctica del docente;
b) La actualización y profundización de su función específica y de su especialización;
c) La formación de su propio cuerpo de profesores.

Art. 18º. – La reglamentación que se dicte sobre los concursos para designar
profesores deberá asegurar en todos los casos:
a) La formación de jurados de idoneidad e imparcialidad indiscutibles, que deberán
integrarse con profesores de la disciplina, con jerarquía no inferior a la del cargo objeto del
concurso;
b) La publicidad previa de los nombres de los integrantes del jurado, la posterior de los
antecedentes de los candidatos y de los dictámenes;
c) La capacidad científica de las leyes fundamentales de la Nación con exclusión de
todo otro criterio de discriminación;
d) La asistencia de un delegado estudiante designado por los representantes respectivos
en los consejos directivos, para opinar específicamente sobre las condiciones didácticas de
los aspirantes. El delegado deberá reunir las mismas condiciones que las exigidas para ser
representante estudiantil y tener aprobada la disciplina en concurso;
e) La recusación de los miembros del jurado y los recursos administrativos que
correspondieren.

TITULO III

Gobierno
Art. 19º. – El gobierno y la administración de las universidades serán ejercidos con la
participación de todos los sectores de la comunidad universitaria: docentes, estudiantes y
personal no docente a través de:
a) La asamblea universitaria;
b) El rector;
c) El consejo superior;
d) Los decanos o directores de unidades académicas;
e) Los consejos directivos.

CAPITULO I

Asamblea universitaria

Art. 20º. – Integran la asamblea universitaria:


a) El Rector;
b) Los miembros del Consejo Superior; y
c) Los miembros de todos los Consejos Directivos de las unidades académicas.

Art. 21º. – La asamblea universitaria se reúne por convocatoria del rector, resolución
del Consejo Superior o miembros de la comunidad universitaria según la forma y los
requisitos que fijen los respectivos estatutos.

La asamblea universitaria deberá reunirse por los menos en sesión ordinaria una vez
por año.

Art. 22º. – Son atribuciones de la asamblea universitaria:


a) Reglamentar el orden de sus sesiones;
b) Elaborar y elevar al Poder Ejecutivo para su aprobación el estatuto de la
universidad, así como también su reforma;
c) La suspensión o separación del rector y vicerector por las causas previstas en el
respectivo estatuto, en sesión especial convocada a tal efecto y por la mayoría de dos
tercios de los votos;
d) Conocer en el caso de intervención a unidades académicas sobre el recurso de
apelación que hubieren interpuesto las autoridades intervenidas, las que tendrán voz pero
no voto, en la correspondiente sesión especial.

CAPITULO II

Del rector y del vicerector

Art. 23º. – El rector y el vicerector serán designados por el modo previsto en los
estatutos y durarán cuatro años en sus funciones.
Art. 24º. – Para ser designado rector o vicerector se requiere ser ciudadano argentino,
tener treinta años cumplidos, poseer el título universitario reconocido, o ser o haber sido
profesor ordinario, en una universidad nacional.

Art. 25. – Al Rector le corresponde:


a) La representación de la universidad;
b) Presidir las sesiones de la asamblea universitaria y del Consejo Superior y ejecutar
sus resoluciones con voz y voto en ambos órganos prevaleciendo el suyo en caso de
empate;
c) Convocar al Consejo Superior a sesiones ordinarias o extraordinarias;
d) Ejercer la conducción administrativa de la universidad;
e) Organizar la secretaría de la universidad y del rectorado, designar y remover a sus
titulares y demás personal no docente;
f) Resolver cualquier cuestión urgente o grave debiendo dar cuenta al Consejo
Superior oportunamente;
g) Firmar los títulos, diplomas, distinciones y honores universitarios;
h) El cargo de rector es de dedicación exclusiva, e incompatible con cualquier otra
actividad pública o privada, remunerada o no, excepto: el ejercicio de una disciplina en la
misma universidad; las actividades de investigación que haya desempeñado hasta el
momento de su designación; miembro de academia, institución, sociedad científica,
jurídica, social o cultural.

Art. 26º. – El vicerector reemplaza al rector en la forma y por las causas que
establezcan los respectivos estatutos.

CAPITULO III

Del Consejo Superior

Art. 27º. – El Consejo Superior está compuesto por el rector los decanos o directores
de unidades académicas y los representantes de los tres estamentos universitarios,
correspondiendo al docente el sesenta por ciento, al estudiante el treinta por ciento y al
personal remunerado no docente el diez por ciento.

Art. 28º. – Al Consejo Superior corresponde:


a) El gobierno de la universidad;
b) Decidir en última instancia las gestiones contenciosas que hayan resuelto las
facultades o unidades académicas equivalentes;
c) Dictar su reglamento interno y los reglamentos y ordenanzas, necesarios para el
régimen común de los estudios y disciplina general de la universidad;
d) Estructurar el planeamiento general de las actividades universitarias y determinar la
orientación general de la enseñanza;
e) Homologar los planes de estudio propuestos por las facultades o unidades
académicas equivalentes, fijar el alcance de los títulos y grados, acordar por iniciativa
propia o a propuesta de las facultades o unidades académicas equivalentes el título de
“doctor honoris causa” o de “miembro honorario de la universidad” y decidir en última
instancia la cuestión sobre equivalencia de títulos, estudios, asignaturas y distinciones
universitarias;
f) Acordar por el voto de los dos tercios de sus miembros la creación de nuevas
escuelas, institutos carreras u orientaciones;
g) Proponer al Poder Ejecutivo la creación de nuevas facultades o unidades académicas
equivalentes;
h) Aprobar o devolver observados a las facultades o unidades académicas equivalentes
y otros organismos técnico administrativos los dictámenes de provisión de cátedras de
profesores ordinarios cuando existieren irregularidades manifiestas en el trámite y
realización de los concursos así como las reglamentaciones que dicten para el régimen de
carrera docente y la designación de profesores, cualquiera fuera su categoría.
i) Modificar a propuesta de las facultades o unidades académicas equivalentes la
estructura de las escuelas, departamentos, institutos, unidades docentes o de investigación
que las integran;
j) Revalidar los diplomas expedidos por universidades extranjeras, de acuerdo con las
leyes y con los tratados internacionales previo estudio, en cada caso, del valor científico y
jerarquía de la enseñanza impartida por las mismas y consideración que merecen sus
títulos;
k) Reglamentar los juicios académicos;
l) Destituir a los profesores a pedido de los consejos directivos, por el voto fundado y
escrito de las dos terceras partes de sus componentes;
ll) Aprobar o modificar los planes de estudios presentados por los consejos directivos;
m)Reglamentar las facultades del rector para administrar y disponer, por cualquier
título que sea, los bienes raíces, los bienes inmuebles, muebles, títulos y valores
pertenecientes a la universidad;
n) Decidir qué bienes o valores que se requieran para el funcionamiento de cada
facultad o unidades académicas equivalentes pueden ser dispuestos por los consejos
directivos respectivamente;
o) Proyectar, modificar y reajustar el presupuesto anual y aprobar las cuentas
presentadas por el rector y la inversión de los fondos;
p) Dictar las reglamentaciones atinentes al funcionamiento de las asociaciones de
docentes, alumnos y personal no docente previsto en los respectivos estatutos;
q) Intervenir las facultades o unidades académicas equivalentes por el voto de los dos
tercios del total de sus miembros;
r) Requerir a la asamblea universitaria la suspensión o separación del rector o del
vicerector en pliego fundado;
s) Nombrar a los directores y profesores de los establecimientos secundarios
dependientes de la universidad, previo concurso público de antecedentes y de oposición;
t) Nombrar a los directores de los institutos de investigaciones de la universidad a
propuesta de las facultades o unidades académicas equivalentes previo concurso público de
antecedentes y de oposición;
u) Proporcionar asistencia social a la comunidad universitaria.

CAPITULO IV

Del decano a director de unidad académica


Art. 29º. – El decano y vicedecano de la facultad, o director y vicedirector de unidad
académica equivalente, será designado por el modo previsto en el respectivo estatuto y
durará cuatro años.

Art. 30º. – Para ser designado decano o vicedecano, o director o vicedirector de unidad
académica equivalente, se requieren las mismas condiciones que para ser rector.

Art. 31º. – Al decano o director corresponde:


a) La representación de la facultad o unidad académica equivalente;
b) Presidir las sesiones del Consejo Directivo;
c) Convocar al Consejo Directivo a sesiones ordinarias y extraordinarias;
d) Ejercer la conducción administrativa de la facultad o unidad académica equivalente;
e) Firmar juntamente con el rector los diplomas universitarios y los certificados de
reválida;
f) Presidir las reuniones del claustro docente, cuyas normas establece el respectivo
estatuto;
g) Adoptar las decisiones y medidas que se requieran para la ejecución de las
resoluciones del Consejo Superior y del Consejo Directivo;
h) Organizar las secretarías de la facultad o unidad académica equivalente, designar y
remover a sus titulares y demás personal no docente;
i) Fijar la época de exámenes, número de turnos y orden de los mismos;
j) Presentar al Consejo Superior el presupuesto anual de gastos, previa aprobación por
el Consejo Directivo;
k) Rendir cuentas de la inversión de los fondos;
l) Ejercer la jurisdicción disciplinaria;
ll) Resolver todas las actividades de la facultad o unidad académica equivalente.
m)Resolver cualquier cuestión urgente y grave debiendo dar cuenta al Consejo
Directivo, cuando corresponda;
n) El decano o director tiene voz y voto en las decisiones del Consejo, prevaleciendo el
suyo en caso de empate;
ñ) Las que de acuerdo con la presente ley le asigne el estatuto.

Art. 32º. – El vicedecano o vicedirector reemplaza al decano o director en la forma y


por las causas que establezcan los respectivos estatutos.

CAPITULO V

Consejos Directivos

Art. 33º. – El Consejo Directivo de cada facultad o unidad académica equivalente


estará constituido por el decano, y representantes de los tres estamentos, correpondiendo al
docente el sesenta por ciento al estudiantil el treinta por ciento y al personal remunerado no
docente el diez por ciento.

De los representantes docentes la mitad deberán ser profesores titulares.


Los representantes del personal remunerado no docente tendrán voz y voto en todos los
asuntos que se traten en el Consejo, con la sola excepción de aquellos que sean
exclusivamente académicos.

Art. 34º. – Al Consejo Directivo le corresponde:


a) Dictar su reglamento interno;
b) Ejercer la potestad disciplinaria dentro de sus respectivos establecimientos;
c) Elevar al Consejo Superior para su aprobación el reglamento de la facultad o
unidad académica equivalente;
d) Decidir en primera instancia las cuestiones contenciosas y las referentes al orden
de los estudios, condiciones de ingreso, pruebas de promoción y cumplimiento de los
deberes de profesores y auxiliares de la enseñanza;
e) Elevar al Consejo Superior los resultados de los concursos de los profesores
ordinarios;
f) Proponer al Consejo Superior la creación de nuevas escuelas, institutos, carreras y
orientaciones;
g) Elaborar y modificar los planes de estudio que deben orientarse al examen y
solución de los problemas regionales y nacionales; establecer cuáles deben ser las cátedras
que exijan de los profesores una dedicación exclusiva;
h) Aprobar y reformar los programas, planes y actividades de sus profesores y ejercer
anualmente el control de la gestión de ejecución de los mismos elevándolos al Consejo
Superior para su consideración;
i) Organizar la carrera docente;
j) Designar y remover a los profesores interinos;
k) Solicitar al Consejo Superior la suspensión o separación del decano o director,
vicedecano o vicedirector y consejeros por irregularidades manifiestas en el ejercicio de sus
funciones con el voto de las dos terceras partes de sus miembros;
l) Elevar al Consejo Superior la renuncia de los profesores ordinarios o la propuesta
de separación;
ll) Proyectar el presupuesto de la facultad o unidad académica equivalente e
intervenir en única instancia las cuestiones que se susciten en su aplicación;
m) Designar por propia iniciativa o a propuesta del decano o director, profesor
extraordinario;
n) Las demás atribuciones que le asigne el estatuto.

TITULO IV

Régimen de enseñanza

Art. 35º. – Será requisito indispensable para ingresar a las universidades nacionales,
tener aprobados el ciclo de enseñanza media o aquellos estudios que permitan deducir una
capacitación equivalente al mismo.

Art. 36º. – Sin perjuicio de lo establecido en el artículo precedente, se podrán exigir


estudios complementarios o cursos de capacitación, antes de aceptar las incorporación de
alumnos a determinadas facultades o unidades académicas equivalentes, departamentos o
carreras.
Art. 37º. – Las universidades nacionales garantizan la libertad de cátedra. La
responsabilidad científico legal de las enseñanzas y doctrinas expuestas en clase,
conciernen exclusivamente al personal docente y de investigación, sin perjuicio de las
medidas que adopten los consejos directivos cuando pueda comprometerse el decoro y la
seriedad de los estudios, o cuando exista desviación de los fines específicos de la
universidad, o se ponga en riesgo el prestigio de la misma.

Art. 38º. – Las facultades o unidades académicas equivalentes permitirán y


reglamentarán cursos libres, parciales, o completos sobre cualquier materia del plan de
estudios; asimismo, organizarán cursos de postgrado orientados a la educación y
capacitación permanente.

TITULO V

Normas comunes a la organización y gobierno de las universidades

Art. 39º. – Las universidades deben reglamentar el régimen electoral y de gobierno


instituido por esta ley, respetando los principios que la misma consagra. Deben establecer
las siguientes reglas:
a) Ningún integrante de la universidad puede figurar simultáneamente en los padrones
de dos claustros distintos, debiendo optar por uno de ellos;
b) Toda actividad electoral lo será por elección directa y voto personal, universal,
obligatorio y secreto. Los que sin causa justificada dejen de votar son pasibles de las
sanciones que se deberán fijar en los estatutos;
c) Para ejercer representaciones y cargos directivos en las universidades se requiere
ser ciudadano argentino;
d) En todos los casos en que corresponda elegir consejeros o delegados se vota por
titulares y suplentes;
e) Podrán intervenir en las elecciones los alumnos que hayan aprobado el primer año
de estudio o grupo equivalente de asignaturas;
f) Podrán ser elegidos como representantes del estamento estudiantil aquellos
alumnos que hayan aprobado un tercio de su carrera, cualquiera que sea la extensión de
esta.

Art. 40º. – Los representantes de los docentes ejercen su mandato por el término de
cuatro años.

Los representantes de los estudiantes y del personal remunerado no docente lo hacen


por dos años.

TITULO VI

Alumnos

Art. 41º. – Las universidades reglamentarán a través de sus estatutos el régimen de


alumnos.
Art. 42º. – Los alumnos elegirán, por voto obligatorios y secreto, de acuerdo con las
normas que establezca el respectivo estatuto, los delegados estudiantiles que integran los
consejos superior y directivo de las facultades o unidades académicas equivalentes.

Art. 43º. – Los delegados estudiantiles tendrán voz y voto en las sesiones de los
consejos superior y directivo.

Art. 44º. – Sólo tendrán derecho a voto y podrán ser elegidos, en las condiciones
establecidas por la presente ley, los alumnos argentinos, que sigan carreras o cursos
universitarios.

Es también requisito, haber aprobado por lo menos una materia en los dos últimos
períodos lectivos.

TITULO VII

Patrimonio y recursos

Art. 45º. – Forman el patrimonio de la universidad los bienes de cualquier naturaleza


que actualmente le pertenecen o que en virtud de la ley o por títulos gratuito u oneroso
pasen a su dominio, así como las colecciones científicas, publicaciones y demás bienes que
en la actualidad o en el futuro posean sus facultades o unidades académicas equivalentes.

Art. 46º. – Son recursos de las universidades:


a) La contribución del Tesoro Nacional;
b) Las que provienen del fondo universitario permanente. La ley de presupuesto debe
fijar los créditos correspondientes a cada universidad y que son financiados exclusivamente
por el aporte del Tesoro, reservándose todos los otros recursos que ingresen a las
universidades para constituir el referido fondo universitario permanente.

Art. 47º. – Integran el fondo universitario permanente los siguientes recursos:


a) Los frutos, intereses y rentas de los bienes patrimoniales de la universidad;
b) Las herencias, legados y donaciones de particulares a favor de la universidad y sus
establecimientos los que son exceptuados de todo impuesto;
c) Los derechos o tasas que perciba como retribución de los servicios que presta al
margen de la enseñanza;
d) La propiedad científica, intelectual, artística o literaria, de explotación de patentes
de invención u otro derecho intelectual que le corresponda por trabajos realizados en su
seno, sin perjuicio de los derechos similares de los docentes o investigadores derivados de
su esfuerzo personal;
e) Las economías que realice sobre su presupuesto anterior;
f) Cualquier otro recurso que corresponda a la universidad o pueda crearse.

Art. 48º. – Cuando se trate de herencias, legados, donaciones o cualquier otra libertad
a favor de la universidad o de sus unidades académicas u otros organismos que la integren,
antes de ser aceptadas por el Consejo Superior debe oírse al destinatario final y analizarse
exhaustivamente las condiciones o cargos que puedan imponer los testadores y
benefactores, en cuanto a las conveniencias y desventajas que puedan ocasionar a la
universidad y al establecimiento de esta que ha de recibir el beneficio.

Iguales recaudos deben tomarse en los casos de créditos y otras financiaciones, con el
fin de mantener la libertad e independencia de sus actividades docentes y de investigación.
En ningún caso se aceptan liberalidades provenientes de empresas multinacionales en
colisión con los intereses de la Nación.

Art. 49º. – Es atribución exclusiva del Consejo Superior de cada universidad aprobar
el presupuesto y financiar con recursos provenientes del fondo universitario permanente.

Art. 50º. – Las universidades nacionales gozan de las mismas exenciones de


gravámenes que corresponde al Estado nacional.

TITULO VIII

De la intervención

Art. 51º. – Las universidades pueden ser intervenidas por el Poder Ejecutivo, por
tiempo determinado y por las siguientes causales:
a) Manifiesto incumplimiento de la presente ley;
b) Alteración grave del orden público;
c) Conflicto insoluble dentro de la universidad;
d) Subversión contra los poderes de la Nación o conflicto grave de competencia con
otros organismos públicos.

La intervención podrá efectuarse a la universidad o a alguna de sus unidades


académicas equivalentes, esto último, previo informe de autoridad universitaria.

TITULO IX

De la coordinación interuniversitaria

Art. 52º. – El Poder Ejecutivo establecerá el sistema de coordinación interuniversitaria,


que dependerá del Ministerio de Cultura y Educación. Este sistema deberá compatibilizarse
con el sistema nacional de planificación y desarrollo.

El mismo organismo deberá hacer los estudios necesarios tendientes a redimensionar


las universidades existentes y a fijar la dimensión máxima de las que se crearen con
posterioridad, respetando los criterios de eficiencia didáctica, técnica y científica que deben
ser propios de cada universidad.

Art. 53º. – Unicamente por ley podrán crearse, fusionarse o suprimirse las
universidades nacionales.

Art. 54º. – Se reconocen como universidades nacionales a las que en tal carácter
existen al momento de sancionarse la presente ley.

TITULO X

Del régimen de becas

Art. 55º. – Las universidades establecerán un sistema de becas que contemple las
siguientes categorías:
a) Becas de ayuda económica;
b) Becas de estímulos;
c) Asignación a la familia;
d) Becas para estudiantes extranjeros;
e) Las universidades otorgarán a sus alumnos, de acuerdo con la reglamentación que
prevean sus estatutos, becas de honor consistentes en sumas de dinero u otro tipo de
asistencia o servicio reembolsable por el beneficiado, luego de obtener su título
correspondiente.

La cantidad y monto de ellos serán programados por quinquenios de modo que


permitan una efectiva orientación de los estudiantes hacia las carreras estratégicas. Estas
serán fijadas por el Consejo Superior de acuerdo con el Poder Ejecutivo nacional.

TITULO XI

De los estatutos

Art. 56º. – En los estatutos de las universidades deberán preverse normas sobre:
a) Las categorías de profesores;
b) La organización de la actividad de investigación;
c) Las incompatibilidades y el tiempo de dedicación de los cargos docentes;
d) Las condiciones para contratar docentes extranjeros;
e) La provisión de asistencia social a los miembros de la comunidad universitaria;
f) La vinculación con organismos especializados nacionales, provinciales y
municipales, la promoción cultural del medio a través de actividades de capacitación, de
perfeccionamiento, profesionales y artísticas;
g) Prever las normas reglamentarias para la vinculación de la universidad con las
provincias, los municipios, la Confederación General del Trabajo, fuerzas organizadas de la
producción, de la industria y del comercio y organizaciones profesionales y científicas, para
la consideración de asuntos específicos;
h) La creación de un departamento de graduados;
i) Todo lo necesario para garantizar la organización administrativa y académica de
las universidades;
j) Prever las normas referidas a regularidad en los estudios;
k) Organizar el departamento de consultoría y prever las normas para los acuerdos
que se puedan realizar con los gobiernos: nacional, provinciales o municipales, para su
utilización preferente;
l) Prever el régimen de puntaje para los antecedentes en los concursos para la
designación de profesores ordinarios, colocado en primer término el de antigüedad en la
docencia;
ll) Prever el modo en que –una vez normalizada la universidad–, la asamblea
universitaria elegirá rector y vicerector;
m) Prever el modo en que –una vez normalizada la universidad–, cada unidad
académico elegirá al decano y vicedecano o director y vicedirector;
n) Prever la reglamentación del juicio académico.

TITULO XII

Disposiciones transitorias

Art. 57º. – Promulgada esta ley, el Poder Ejecutivo designará los rectores de todas las
universidades nacionales. Estos y los decanos o directores de unidades académicas, que
ellos nombren, tendrán funciones normalizadoras, entendiendo por tales las propias, más las
del Consejo Superior, en el primer caso y del Consejo Directivo en el segundo.

La normalización a que se refiere este artículo, se cumplirá en el plazo de un año,


prorrogable por otro plazo no mayor de ciento ochenta días, si las circunstancias así lo
hicieren necesario.

Art. 58º. – Todos los cargos docentes designados por concurso o interinamente son
declarados en comisión y serán abiertos a concurso según las normas de la presente ley;
quedan anulados los concursos que se encuentran en trámite.

Art. 59º. – Los rectores integrarán los jurados para entender en los primeros concursos
para los cargos de profesor ordinario, con personalidades de prominentes antecedentes en
las materias respectivas y según los requisitos establecidos en el art. 18º de la presente ley.

Art. 60º. – A todos los docentes declarados cesantes por resolución expresa adoptada
por la autoridad pertinente, desde setiembre de 1955 al 25 de mayo de 1973, derivada de
razones políticas o gremiales, se les reconoce el grado académico que tenían al momento de
su cesantía. A los docentes se les computará la antigüedad hasta el momento de la
promulgación de esta ley, como si nunca hubieran sido cesantes, a los fines de los
“antecedentes” a que se refiere el art. 9º.

Art. 61º. – Dentro del plazo de normalización establecido por el art. 57º, las
universidades deberán elevar al Poder Ejecutivo Nacional un proyecto de estatuto, acorde
con las disposiciones de esta ley, que regirá hasta que la asamblea universitario –una vez
normalizada la universidad–, haga uso de la facultad que le acuerda el art. 22º, inc. b).
Art. 62º. – Derógase la llamada Ley 17.245 del 21 de abril de 1967 y toda otra
disposición que se oponga a la presente ley.

Art. 63º. – Comuníquese, etc.


LEY 22.207

Ley orgánica de las universidades nacionales – Derogación de las leyes 20.654, 21.276
y 21.533.

Sanción y promulgación: 11 de abril de 1980.


Publicación: B. O. 24/IV/80.

Citas legales: Acta del 24/III/76: XXXVI-B, 1020; Ley 21.276: XXXVI-B. 1041; Ley
20.654: XXXIV-A, 176; Ley 17.245: XXXVII-A, 188; Ley 17.604: XXVII-A, 154; Ley
17.778: XXVIII-B, 1887; Ley 21.533: XXXVII-A, 140; D. 2584/77: XXXVII-D, 3822; D.
391/77:XXXVII-A, 339; Ley 22.140 (Rég. Jurídico Básico para la Función Pública): XL-
A, 21; Ley 21.536: XXXVII-A, 144.

TITULO I

Disposiciones generales

Ambito de aplicación

Art. 1º – Las Universidades Argentinas se regirán por los siguientes ordenamientos


legales:
a) Las Universidades Nacionales por las disposiciones de esta ley.
b) Las Universidades Provinciales y las Privadas por los arts. 2º, 3º y 4º de la presente
ley y por las disposiciones de las Leyes 17.778 y 17.604 respectivamente.

Ningún otro establecimiento o instituto, cualquiera fuere el nivel, podrá emplear la


denominación de universidad ni otorgar títulos o grados académicos que requieren nivel
universitario.

Fines de la Universidad

Art. 2º – Las Universidades Argentinas tienen los siguientes fines generales:


a) La formación plena del hombre a través de la universalidad del saber, el desarrollo
armonioso de su personalidad y la transmisión de valores, conocimientos y métodos de
investigación.
b) La búsqueda desinteresada de la verdad y el acrecentamiento del saber, en un
marco de libertad académica.
c) La preservación, difusión y transmisión de la cultura y en especial del patrimonio
de valores espirituales y de los principios democráticos y republicanos que animan a la
Nación.
d) La formación y capacitación del universitario armonizando su vocación personal
con las exigencias del bien común.
Funciones de la Universidad

Art. 3º – Para cumplir con sus fines las Universidades deberán.


a) Desarrollar las cualidades que habiliten con patriotismo, dignidad moral e
idoneidad para la vida pública y privada, procurando la educación general de nivel superior
y estimulando la creación personal y el espíritu crítico.
b) Realizar investigación pura y aplicada y estimular la creación artística.
c) Formar profesionales, investigadores y técnicos adecuados a las necesidades de la
Nación.
d) Proveer a la formación y perfeccionamiento de sus propios docentes e
investigadores, acentuando la vinculación de la docencia y la investigación.
e) Organizar la orientación, especialización, perfeccionamiento y actualización de sus
graduados e investigadores.
f) Contribuir a la difusión y a la preservación de la cultura en el país.
g) Estudiar los problemas de la comunidad a que pertenecen y proponer soluciones,
como así mismo atender a los requerimientos que sobre el particular le formulen los
organismos correspondientes del gobierno nacional, provincial o comunal.

Prohibiciones

Art. 4º – Es ajena a los ámbitos universitarios toda actitud que signifique propaganda,
adoctrinamiento, proselitismo o agitación de carácter político-partidario o gremial, como
asimismo la difusión o adhesión a concepciones políticas totalitarias o subversivas.

Los cargos a que se refieren los arts. 45º, 49º, 52º, 55º y 59º de la presente ley y los de
Secretarios de Universidad Facultad o Departamento son de desempeño incompatible con
el ejercicio de cargos directivos político-partidarios o gremiales.

Quienes ocupen los cargos universitarios antes indicados deberán abstenerse de


formular declaraciones públicas vinculadas a actividades político-partidarias o gremiales.

Régimen jurídico

Art. 5º – Las Universidades Nacionales son personas jurídicas de carácter público que
gozan de autonomía académica y autarquía administrativa económico y financiera.

Ese carácter no se entenderá como obstáculo para el ejercicio de las atribuciones y


deberes que competen a otras autoridades nacionales o locales.

Atribuciones

Art. 6º – Las Universidades Nacionales tendrán las siguientes atribuciones:


a) Dictar y reformar sus estatutos con la aprobación del Poder Ejecutivo Nacional.
b) Designar y remover a su personal.
c) Formular y desarrollar planes de investigación, enseñanza y extensión
universitaria.
d) Otorgar grados académicos y títulos habilitantes.
e) Revalidar con igual alcance títulos universitarios extranjeros.
f) Administrar y disponer de su patrimonio y recursos.
g) Mantener relaciones de carácter científico y docente con instituciones similares del
país y del extranjero, y participar en reuniones y asociaciones internacionales de igual
carácter.
h) Realizar todos los demás actos conducentes al cumplimiento de sus fines.

Intervención

Art. 7º – Las Universidades Nacionales podrán ser intervenidas por el Poder Ejecutivo
Nacional para normalizar su funcionamiento, por tiempo determinado y en los siguientes
casos:
a) Manifiesto incumplimiento de la presente ley.
b) Grave alteración del orden público.
c) Conflicto insoluble dentro de la Universidad.
d) Grave conflicto con los poderes del Estado.

TITULO II

Organización académica

CAPITULO I

De las Facultades y Departamentos

Formas de organización

Art. 8º – Cada Universidad, de acuerdo con sus características y necesidades, podrá


adoptar para su organización académica y administrativa el sistema de facultades, el
sistema departamental o una combinación de ambos.

Demás establecimientos

Art. 9º – Además de las Facultades o Departamentos Académicos, forman parte de las


Universidades las Escuelas, Institutos y demás establecimientos que de ellas dependan, con
independencia de la jurisdicción territorial en que se encuentren.

CAPITULO II

Comunidad Universitaria

Profesores

Art. 10º. – Los profesores pueden ser ordinarios y extraordinarios.

Profesores ordinarios son aquellos designados de conformidad con lo dispuesto en el


art. 23º y tendrán las siguientes categorías:
a) Profesores titulares.
b) Profesores asociados.
c) Profesores adjuntos.

Son profesores extraordinarios los que revistan en las siguientes categorías:


a) Profesores eméritos.
b) Profesores consultos.
c) Profesores honorarios.
d) Profesores visitantes.

Profesor titular

Art. 11º. – Profesor titular es la máxima jerarquía del profesor ordinario que habilita
para la dirección de una cátedra y para realizar dentro de la especialidad, las actividades
académicas e investigaciones que se programen de acuerdo con las modalidades de cada
universidad.

Profesor asociado

Art. 12º. – El profesor asociado colabora con el titular en la dirección de la enseñanza,


coordinando con éste el desarrollo de los programas y las actividades docentes y de
investigación, pudiendo en su caso reemplazarlo.

Profesor adjunto

Art. 13º. – El profesor adjunto colabora con el titular y el asociado, bajo cuya
dependencia académica se desempeña, pudiendo sustituirlos en caso de vacancia o licencia.

Profesor emérito

Art. 14º. – El profesor emérito es aquel profesor titular ordinario que, habiendo
alcanzado el límite de edad establecido en el art. 26º y poseyendo condiciones
sobresalientes para la docencia o la investigación, es designado en tal carácter en
reconocimiento a sus méritos excepcionales. Podrá desempeñar funciones académicas
permanentes hasta los setenta y cinco (75) años de edad.

Profesor consulto

Art. 15º. – El profesor consulto es aquel profesor titular, asociado o adjunto ordinario
que, habiendo alcanzado el límite de edad establecido en el art. 26º y poseyendo
condiciones destacadas para la docencia o la investigación es designado en tal carácter.
Podrá desempeñar funciones académicas permanentes hasta los setenta y cinco (75) años de
edad.

Profesor honorario
Art. 16º. – El profesor honorario es la personalidad relevante del país o del extranjero
a quien la Universidad otorga especialmente esta distinción.

Profesor visitante

Art. 17º. – El profesor visitante es el de otras Universidades del país o del extranjero a
quien se invita a desarrollar actividades académicas de carácter temporario.

Docentes auxiliares

Art. 18º. – Los docentes auxiliares colaboran con los profesores bajo cuya dependencia
docente se desempeñan. Sus categorías e ingreso y funciones específicas serán establecidas
en los respectivos estatutos.

Condiciones

Art. 19º. – Para ser docente universitario se requieren las condiciones siguientes.
a) Título universitario otorgado por Universidad argentina o extranjera, excepto en el
caso de antecedentes suficientemente reconocidos en la especialidad.
b) Integridad moral.
c) Identificación con los valores de la Nación y con los principios fundamentales
consagrados en la Constitución Nacional que hacen al sistema republicano.

Auxiliares alumnos

Art. 20º. – Para desempeñar tareas auxiliares de docencia o investigación se admitirán


alumnos de los últimos años de las carreras conforme a las condiciones que cada
Universidad establezca.

Deberes

Art. 21º. – Los docentes tendrán los siguientes deberes:


a) Mantener una conducta acorde con las exigencias del art. 19º.
b) Observar esta ley, el estatuto, las disposiciones internas y los planes de estudio e
investigación de la Universidad.
c) Prestar a la docencia y a la investigación la dedicación correspondiente al cargo.
d) Cuidar el decoro de su función, la seriedad de los estudios y la objetividad
científica de la enseñanza y de la investigación.
e) No difundir ni adherir a concepciones políticas totalitarias o subversivas.

Libertad académica

Art. 22º. – Los docentes gozarán de plena libertad para enseñar e investigar según los
propios criterios científicos y pedagógicos, sin otras limitaciones que las establecidas en la
presente ley.
Designación de profesores y docentes

Art. 23º. – La designación de profesores ordinarios se efectuará previo concurso


público de títulos, antecedentes y oposición de conformidad con las modalidades y
requisitos que establezcan los estatutos de cada Universidad y lo estipulado por el art. 8º del
Régimen Jurídico Básico de la Función Pública en tanto no se oponga a lo normado por la
presente ley. Los docentes auxiliares serán designados por concurso con los caracteres y
requisitos que se determinen en los respectivos estatutos.

La segunda designación se hará del mismo modo o por confirmación de las dos
terceras partes de los votos del Consejo Superior, a propuesta del correspondiente Consejo
Académico.

Término de designación

Art. 24º. – La designación de profesor ordinario se hará por un período de siete años.
La segunda designación otorgará estabilidad definitiva. Los docentes auxiliares serán
designados por un período no mayor de dos años, pudiendo renovarse esta designación.

Impugnaciones y recursos

Art. 25º. – Las impugnaciones y recursos que se articulan por los concursantes sólo
podrán versar sobre aspectos vinculados con la legitimidad del procedimientos o del acto.
El hecho de introducir argumentaciones sólo referidas al mérito del dictamen impedirá dar
trámite a la impugnación o recurso.

Los recursos judiciales que puedan interponerse contra la decisión definitiva que
rechazare la impugnación o recurso administrativo, serán concedidos al solo efecto
devolutivo.

Cesación

Art. 26º. – Los profesores ordinarios e interinos y los docentes auxiliares cesarán en
sus cargos el 1 de abril siguiente a la fecha en que cumplan sesenta y cinco (65) años de
edad.

Remoción

Art. 27º. – Los profesores ordinarios y extraordinarios sólo podrán ser removidos
previo juicio académico ante un tribunal integrado por profesores de categoría no inferior a
la del cuestionado, y los profesores interinos y los auxiliares de docencia previo sumario
administrativo.

Son causales de remoción:


a) Incumplimiento grave o reiterado de los deberes establecidos en esta ley.
b) Condena penal por acto doloso.
c) Deshonestidad intelectual.
d) Inhabilidad física que impida el ejercicio de la docencia o la inhabilidad mental
declarada por autoridad competente.
e) Inconducta notoria en el desempeño de la profesión.
f) Pérdida de cualquiera de las condiciones establecidas en el art. 19º.

Designaciones interinas

Art. 28º. – Mientras un cargo no sea provisto por concursos podrá cubrirse
interinamente por un periodo no mayor de tres (3) años durante el cual el docente gozará de
estabilidad pudiendo ser removido por las causales y en la forma dispuesta en el art. 27º.

Contratación de profesores y docentes

Art. 29º. – Cuando las necesidades de la enseñanza o los trabajos de investigación así
lo exigieren podrá recurrirse al régimen de contratación.

Régimen de dedicación

Art. 30º. – Los docentes podrán tener las siguientes dedicaciones:


a) Exclusiva, con una exigencia de dedicación total a la labor académica.
b) Plena, con una exigencia de cuarenta y cinco (45) horas semanales de labor
académica.
c) De tiempo completo, con una exigencia de treinta y cinco (35) horas semanales de
labor académica.
d) De tiempo parcial, con una exigencia de veinticinco (25) horas semanales de labor
académica.
e) Simple con las menores exigencias horarias que establezca cada Universidad de
acuerdo con sus propias modalidades.

Carrera docente

Art. 31º. – Las Universidades Nacionales deberán organizar la carrera docente.

Investigación

Art. 32º. – En cumplimiento con lo establecido en los arts. 2º y 3º de esta ley, las
Universidades organizarán actividades de investigación de acuerdo con sus características y
modalidades particulares. En todos los casos los docentes que las realizan cumplirán las
tareas de enseñanza que les sean encomendadas.

Alumnos universitarios

Art. 33º. – Son alumnos universitarios los que, una vez satisfechas las condiciones de
ingreso, se inscriban con el objeto de cursar el plan de estudios de una carrera. Cada
Universidad reglamentará en sus estatutos las condiciones a cumplir para conservar el
carácter de alumno, las causales por las que se pierde y las formas y demás requisitos para
lograr la readmisión.

Admisión de alumnos

Art. 34º. – Será requisito indispensable para ingresar a las Universidades Nacionales:
a) Tener aprobados los estudios que correspondan al ciclo de enseñanza media.
b) Cumplir las condiciones que establezca cada Universidad y satisfacer las pruebas
de admisión que las mismas fijen con ajuste a las normas generales que determine el
Ministerio de Cultura y Educación.

Equivalencias nacionales

Art. 35º. – Las materias aprobadas en las universidades argentinas sean nacionales,
provinciales o privadas, gozarán de idéntica validez en todas ellas con las siguientes
limitaciones:
a) Podrán exigirse exámenes complementarios sobre temas no comprendidos en los
programas de la universidad de origen.
b) Cada Universidad podrá fijar un mínimo de materias o cursos que deberán
aprobarse necesariamente en ella, así como de conocimientos que deberán poseer para tener
derechos al título o grado correspondiente.

Participación estudiantil

Art. 36º. – Las Universidades Nacionales promoverán la participación de los alumnos


en la vida universitaria preparándolos para su integración responsable en la comunidad
nacional estimulando y orientando sus inquietudes culturales sociales y cívicas.

Organización

Art. 37º. – Las Universidades Nacionales crearán las secretarías o dependencias que
estimen convenientes, las que tendrán participación estudiantil, a cuyo fin las incorporará a
sus estructuras orgánicas, con el objeto de:
a) Promover la participación e integración estudiantil prevista en el art. 36º.
b) Canalizar las inquietudes, peticiones y sugerencias de los alumnos.
c) Informar con respecto a los asuntos estudiantiles.
d) Dirigir y participar en los servicios de orientación vocacional, asesoramiento
pedagógico, asistencia médica, integración cultural, educación física y deportiva,
recreación y demás servicios de bienestar y asistencia estudiantil.

Igualdad de oportunidades

Art. 38º. – Regirá un sistema de becas, subsidios, y créditos educativos para asegurar
la igualdad de oportunidades, de manera tal que la falta o insuficiencia de recursos
económicos no sea obstáculo para la realización de estudios universitarios por quienes
tienen capacidad probada para ellos.
Aranceles y tasas

Art. 39º. – Respetando el principio de igualdad de oportunidades, la enseñanza podrá


arancelarse conforme con una reglamentación general, dentro de excepciones o de
aranceles diferenciales.

Las Universidades podrán disponer la percepción de tasas por la prestación de servicios


administrativos.

Cursos para graduados

Art. 40º. – Las Universidades Nacionales impartirán de manera orgánica y sistemática,


enseñanza para graduados, y sus cursos serán arancelados.

TITULO III

Régimen de gobierno

Organos de gobierno

Art. 41º. – El gobierno de las Universidades Nacionales estará a cargo de:


a) La Asamblea Universitaria.
b) El Rector.
c) El Consejo Superior.
d) Los Decanos o Directores de Departamento.
e) Los Consejos Académicos.

CAPITULO I

Asamblea Universitaria

Integración

Art. 42º. – Integran la Asamblea Universitaria el Rector, el Vicerector, los Decanos,


los Vicedecanos y representantes de los profesores. A esta último efecto, los Consejos
Académicos de las Facultades que integran cada Universidad, elegirán de entre sus
miembros representantes a la Asamblea, en número que determinará cada Estatuto y que no
podrá exceder de tres por cada Facultad.

Atribuciones

Art. 43º. – La Asamblea Universitaria tendrá las siguientes atribuciones:


a) Dictar y reformar el estatuto de la Universidad y elevarlo al Poder Ejecutivo
Nacional para su aprobación definitiva.
b) Proponer al Poder Ejecutivo Nacional la creación, división, fusión o supresión de
facultades o unidades académicas equivalentes.
c) Solicitar al Poder Ejecutivo Nacional, en sesión especial convocada al efecto y por
mayoría de dos tercios de votos, la suspensión o separación de su cargo del Rector por las
causales establecidas en el art. 27º por mal desempeño en el ejercicio de sus funciones.
d) Solicitar al Ministerio de Cultura y Educación, en sesión especial convocada al
efecto y por mayoría de dos tercios de votos, la suspensión o separación de sus cargos del
Vicerector o los Decanos, por las causales establecidas en el art. 27º o por mal desempeño
en el ejercicio de sus funciones.
e) Conocer en el caso de intervención a Facultades o Departamentos sobre el recurso
de apelación que hubieran interpuesto las autoridades intervenidas, las que tendrán voz pero
no voto en la correspondiente sesión especial.
f) Dictar su reglamento interno.

Convocatoria

Art. 44º. – La Asamblea Universitaria –sin perjuicio de lo establecido en el art. 48º inc.
e)– será convocada en la forma y con los requisitos que fijen los respectivos estatutos.

CAPITULO II

Del Rector

Condiciones

Art. 45º. – Para ser designado Rector se requiere ciudadanía argentina, haber cumplido
treinta (30) años de edad y ser o haber sido profesor en una Universidad Argentina.

Designación

Art. 46º. – El Rector será designado por el Poder Ejecutivo Nacional a propuesta del
Ministerio de Cultura y Educación. Durará tres (3) años en sus funciones, pudiendo
renovarse su designación por iguales períodos.

Cargo docente

Art. 47º. – El cargo de Rector será docente con dedicación exclusiva.

Atribuciones

Art. 48º. – Son atribuciones del Rector:


a) Representar a la Universidad y ejercer la jurisdicción superior universitaria.
b) Dirigir la gestión administrativa, económica y financiera de la Universidad y
supervisar la de las unidades académicas.
c) Dirigir las actividades académicas de la Universidad.
d) Proponer al Ministerio de Cultura y Educación la designación de Vicerectores y de
los Decanos.
e) Convocar a la Asamblea Universitaria y al Consejo Superior, presidir sus
deliberaciones y ejecutar sus resoluciones.
f) Designar y remover al personal cuyo nombramiento no corresponda a otros
órganos de acuerdo con los respectivos estatutos.
g) Firmar los diplomas correspondientes a los títulos, grados y distinciones
académicos.
h) Ejercer la jurisdicción disciplinaria.
i) Adoptar las medidas necesarias en caso de urgencia o gravedad, dando cuenta,
cuando corresponda, al Consejo Superior.
j) Organizar las Secretarías y designar y remover a sus titulares, cuyos cargos serán
docentes.
k) Ejercer las demás que de acuerdo con esta ley, le asigne el estatuto.

Vicerector

Art. 49º. – El Vicerector deberá reunir las condiciones del art. 45º. Será designado por
el Ministerio de Cultura y Educación a propuesta del Rector. Ejercerá las funciones fijadas
en los respectivos estatutos reemplazando al Rector en la forma, y por las causas que
estipulen los mismos. Además, desempeñará las funciones que dentro de las que son
propias del Rector este le delegare. Su cargo será docente.

CAPITULO III

Consejo Superior

Integración

Art. 50º. – Integran al Consejo Superior el Rector, el Vicerector, los Decanos y


representantes de los profesores.

A este último efecto, los Consejos Académicos de las Facultades que integran cada
Universidad elegirán de entre sus miembros un consejero superior titular y un suplente.

Atribuciones

Art. 51º. – Corresponde al Consejo Superior.


a) Reglar la organización y funcionamiento de la Universidad.
b) Proponer al Poder Ejecutivo Nacional, a iniciativa del respectivo Consejo
Académico, la creación o supresión de carreras y doctorados.
c) Orientar la gestión académica, homologar los planes de estudio y establecer
normas generales de reválida.
d) Proponer al Ministerio de Cultura y Educación la fijación y el alcance de los títulos
y grados y, en su caso, las incumbencias profesionales de los títulos correspondientes a las
carreras.
e) Designar, a propuesta del Consejo Académico respectivo, a los miembros del
Tribunal Académico y a los jurados para los concursos.
f) Aprobar, a propuesta del rector el presupuesto de la Universidad, sus ajustes y
modificaciones, en los casos que corresponda para su posterior elevación al Poder
Ejecutivo Nacional.
g) Disponer, por voto de los dos tercios de sus integrantes, la intervención de
Facultades o unidades académicas equivalentes, por el plazo de un (1) año, que podrá ser
prorrogado una sola vez y por idéntico período.
h) Resolver las propuestas de nombramiento y remoción de profesores ordinarios y
extraordinarios y decidir respecto de sus renuncias.
i) Aceptar herencias, legados y donaciones.
j) Dictar su reglamento interno.

CAPITULO IV

De los Decanos

Condiciones

Art. 52º. – Para ser designado Decano se requiere ciudadanía argentina, haber
cumplido treinta (30) años de edad y ser o haber sido profesor de una Universidad
Argentina.

Designación

Art. 53º. – Los Decanos serán designados por el Ministerio de Cultura y Educación a
propuesta del Rector. Durarán tres (3) años en sus funciones pudiendo renovarse su
designación por iguales períodos. Su cargo será docente.

Atribuciones

Art. 54º. – El Decano tendrá las siguientes atribuciones:


a) Representar a la Facultad.
b) Convocar al Consejos Académico, presidir sus deliberaciones y ejecutar sus
resoluciones.
c) Proponer al Rector la designación del Vicedecano.
d) Dirigir la gestión administrativa, económica y financiera con arreglo a los
estatutos.
e) Dirigir, coordinar y supervisar la actividad académica.
f) Organizar las Secretarías y designar y remover a sus titulares, cuyos cargos serán
docentes.
g) Designar y remover a los funcionarios y empleados que corresponda de acuerdo
con los estatutos.
h) Adoptar las medidas necesarias en caso de urgencia o gravedad, dando cuenta
cuando corresponda al Consejo Académico.
i) Ejercer la jurisdicción disciplinaria.
j) Ejercer las demás atribuciones que, de acuerdo con esta ley, le asigne el estatuto.

Vicedecano
Art. 55º. – El Vicedecano deberá reunir las condiciones del art. 52º y será designado
por el Rector a propuesta del Decano de su respectiva Facultad. Reemplazará al Decano en
la forma y por las causas que establezcan los estatutos debiendo analizar las funciones que
aquél le delegue. Su cargo será docente. Percibirá remuneración cuando su cargo sea
incluido en la distribución de cargos correspondiente al presupuesto de la respectiva
Universidad: caso contrario, solamente cuando sustituye al Decano por ausencia o licencia.

CAPITULO V

Del Consejo Académico

Integración

Art. 56º. – Los Consejos Académicos, están integrados por:


a) El Decano.
b) El Vicedecano.
c) Profesores ordinarios que tengan a su cargo la dirección de docencia e
investigación en áreas académicas según las modalidades de cada Facultad.

Elección

Art. 57º. – Los directores de docencia e investigación serán elegidos cada dos (2) años
de entre los profesores ordinarios de las áreas respectivas, por el voto obligatorio y secreto
de los profesores ordinarios que las integran. En esta votación los profesores titulares y
asociados tendrán doble voto y simple los adjuntos. El estatuto preverá la forma de elección
de los profesores integrantes del Consejo Académico para el caso de que no existiera
organización por áreas.

Atribuciones

Art. 58º. – El Consejo Académico tendrá las siguientes atribuciones:


a) Orientar la gestión académica.
b) Proponer al Consejo Superior los planes de estudio, la creación y supresión de
carreras y doctorados y el alcance de los títulos.
c) Aprobar los programas de estudio.
d) Proponer al Consejo Superior el nombramiento y la remoción de profesores
ordinarios y extraordinarios y decidir sobre la promoción de juicios académicos.
e) Designar y remover a los profesores interinos contratados y a docentes auxiliares.
f) Proponer al Consejo Superior la designación de los miembros del Tribunal
Académico y Jurados para los concursos docentes.
g) Dictar su reglamento interno.

CAPITULO VI

Normas especiales para las Universidades con organización departamental


Organización Departamental

Art. 59º. – Las Universidades estructuradas por el sistema de organización


departamental deberán prever en sus estatutos con ajustes a las normas de la presente ley, la
forma de integración de la Asamblea, el Consejo Superior y de los Consejos Académicos.
Los Directores de Departamento y los Subdirectores serán designados en loforma y con
funciones análogas a las previstas en esta ley en los arts. 52º a 55º.

TITULO IV

Grados académicos e incumbencias

Grados y títulos

Art. 60º. – Los títulos profesionales habilitantes y los grados académicos otorgados por
las Universidades Nacionales tendrán validez en todo el país. Acreditarán idoneidad y los
de carácter profesional habilitará para el ejercicio de las correspondientes profesiones sin
perjuicio del poder de policía que corresponde a las autoridades locales

Incumbencias

Art. 61º. – Las incumbencias correspondientes a los títulos profesionales otorgados por
las Universidades Nacionales serán reglamentadas por el Ministerio de Cultura y
Educación.

Doctorado

Art. 62º. – Las Universidades Nacionales determinarán las condiciones para obtener el
grado de doctor. Serán requisitos mínimos:
a) Poseer título universitario.
b) Aprobar cursos especiales que incluyan estudios de formación general y filosófica.
c) Aprobar un curso especial de análisis de la problemática nacional desde el enfoque
de la especialidad de que se trate.
d) Presentar y defender una tesis que deberá ser aprobada por el tribunal respectivo.

TITULO V

Régimen económico-financiero

Patrimonio

Art. 63º. – Constituyen el patrimonio de afectación de cada Universidad, los siguientes


bienes:
a) Los que actualmente le pertenecen y los que adquiera en el futuro por cualquier
título.
b) Los que, siendo propiedad de la Nación, se encuentran en posesión efectiva de la
Universidad o están afectados a su uso al entrar en vigencia la presente ley.
Recursos

Art. 64º. – Cada Universidad Nacional tendrá los siguientes recursos:


a) La contribución anual del Tesoro Nacional.
b) Los provenientes de su Fondo Universitario.

Ordenamiento presupuestario

Art. 65º. – El presupuesto podrá ser reajustado y ordenado por el Consejo Superior de
cada Universidad a nivel de partida principal, sin alterar los montos de los respectivos
programas. No podrán incrementarse las partidas para financiar gastos de personal, ni
disminuirse en monto total de las destinadas a obras públicas, sin autorización del Poder
Ejecutivo Nacional.

El Consejo Superior de cada Universidad podrá reajustar la planta de cargos docentes


siempre que no altere el monto total del crédito de la respectiva partida y no se disminuya
el número establecido de docentes con dedicación exclusiva, ni tampoco el de aquellos con
dedicación plena. No podrá, en cambio, modificar la planta asignada de personal
comprendido en el Régimen Jurídico Básico para la Función Pública.

Fondo Universitario

Art. 66º. – El Fondo Universitario de cada Universidad se formará con los siguientes
recursos:
a) Las economías que realicen cada año de la contribución del Tesoro Nacional.
b) Contribuciones y subsidios.
c) Herencias, legados y donaciones.
d) Las rentas, frutos e intereses de su patrimonio.
e) Los beneficios que obtenga por sus publicaciones, concesiones, explotación de
patentes de invención, y demás derechos de propiedad intelectual que puedan
corresponderle por trabajos realizados en su seno.
f) Los derechos y tasas que perciba por los servicios que presta.
g) Los aranceles universitarios.
h) El producido de las ventas de bienes muebles e inmuebles, materiales o elementos
en desuso o rezago.
i) Cualquier otro recurso o beneficio provenientes, por cualquier título, de otras
personas e instituciones, las Universidades Nacionales deberán tomar los recaudos para no
comprometer, por el hecho de recibirlos, el cumplimiento de las finalidades que les son
propias.

Tratándose de subsidios o contribuciones provenientes de entidades extranjeras –se


requiere previamente– la aprobación del Ministerio de Cultura y Educación.

Inversiones transitorias
Art. 68º. – Cuando las Universidades Nacionales recibieran contribuciones, subsidios,
herencias, legados o donaciones, para un destino determinado podrán invertir los fondos
recibidos en títulos del Estado Nacional durante el período que medie entre su percepción o
realización y su utilización.

Destino y distribución del Fondo Universitario

Art. 69º. – Las Universidades Nacionales podrán emplear su Fondo Universitario para
cualquiera de sus finalidades excepto para sufragar gastos de personal.

Es facultad del Consejo Superior de cada Universidad incorporar y reajustar su


presupuesto mediante la distribución de su Fondo Universitario, pero no podrán asumirse
compromisos que generen erogaciones permanentes o incrementos automáticos. Su
utilización no podrá exceder el monto de los recursos que efectivamente se produzcan.

Comunicación

Art. 70º. – Cuando el Consejo Superior decida el reajuste u ordenamiento de las


partidas presupuestarias de acuerdo con lo previsto en el art. 65º, o la distribución y
ampliación del Fondo Universitario de acuerdo con lo establecido en el art. 69º, deberá
comunicarlo a los Ministerios de Cultura y Educación y de Economía y al Tribunal de
Cuentas de la Nación dentro de los quince (15) días del dictado de la medida.

El Consejo Superior de cada Universidad, una vez confeccionada la cuenta general del
ejercicio, podrá incorporar a sus presupuesto hasta el setenta y cinco por ciento (75%) de
las economías de ejecución que pasarán a integrar el Fondo Universitario y el veinticinco
por ciento (25%) restante podrá ser incorporado al ser aprobada dicha cuenta por la
Contaduría General de la Nación.

Contador fiscal

Art. 71º. – El Tribunal de Cuentas de la Nación fiscalizará las inversiones de las


Universidades Nacionales con posterioridad a la efectiva realización del gasto a cuyo efecto
se rendirá cuenta trimestral documentada de la ejecución de su presupuesto.

Exenciones impositivas

Art. 72º. – Las Universidades Nacionales gozarán de las mismas exenciones de


gravámenes que el Estado Nacional.

TITULO VI

Coordinación interuniversitaria

Política universitaria
Art. 73º. – Corresponde al Poder Ejecutivo Nacional la definición y orientación de la
política universitaria programando en general la actividad del sector mediante su
compatibilización con el planeamiento nacional, el sistema educativo y los planes de
investigación científica y tecnológica.

Consejo de Rectores

Art. 74º. – Los Rectores de las Universidades Nacionales integran el Consejo de


Rectores de Universidades Nacionales (C.R.U.N.) que asesorará al Ministerio de Cultura y
Educación, a su requerimiento, con relación a los asuntos mencionados en el art. 73º y en
todo lo vinculado a la coordinación interuniversitaria.

Creación y supresión de Universidades

Art. 75º. – La creación, división, fusión y supresión de Universidades Nacionales se


efectuará únicamente por ley.

Disposiciones transitorias

Art. 76º. – El Ministerio de Cultura y Educación dentro del año de sancionada esta ley
procederá al reordenamiento del sistema universitario.

Régimen de transición

Art. 77º. – La transición al régimen establecido por esta ley se ajustará a las siguientes
normas:
a) Durante el proceso de transición el Ministerio de Cultura y Educación ejercerá las
atribuciones de la Asamblea Universitaria; los Rectores, las que le son propias y las del
Consejo Superior y los Decanos las que le son propias y las del Consejo Académico.
b) Dentro de los treinta (30) días de la vigencia de esta ley se constituirán en cada
Universidad un Consejo Asesor integrado por los Decanos y en cada Facultad un Consejo
Asesor de la misma integrado por profesores de reconocido prestigio académico designados
por el Rector a propuesta del Decano.
Dichos Consejos asesorarán al Rector y a los Decanos en las materias que son de
competencia del Consejo Superior y del Consejo Académico respectivamente.
c) Sin perjuicio de lo establecido en el inc. a), dentro de los ciento veinte (120) días
de la vigencia de esta ley los Rectores elevarán al Ministerio de Cultura y Educación el
proyecto de estatuto de sus respectivas Universidades para su aprobación por el Poder
Ejecutivo nacional.
d) Dentro de los ciento veinte (120) días de aprobados los estatutos las autoridades
universitarias comenzarán el proceso de designar profesores ordinarios de conformidad a
lo prescripto en el art. 23. El plan de concursos y la integración de los jurados serán
aprobados por los Rectores.

Normalización
Art. 78º. – Cuando en una Universidad la mayoría de sus Facultades tenga cubierto por
concurso o confirmación el sesenta por ciento (60%) de los cargos de profesores ordinarios,
el Poder Ejecutivo Nacional dispondrá la constitución de la Asamblea y de los Consejos
Superior y Académico.

Constituidos dichos órganos finalizará el período de transición.

Art. 79º. – La confirmación dispuesta por aplicación de la ley 21.536 será tenida como
segunda designación a los efectos de los dispuesto en el art. 24º de la presente ley.

Los profesores ordinarios que no hayan sido confirmados en virtud de aquel régimen
cesarán en pleno derecho en sus funciones al entrar en vigencia esta ley.

Art. 80º. – Deróganse las Leyes 20.654, 21.276 y 21.533.

Art. 81º. – Comuníquese, etc.


DECRETO 154

Universidades Nacionales – Intervención – Aplicación de los estatutos vigentes al


29/7/76 – Consejos Superiores Provisorios – Consejos Académicos Normalizadores
Consultivos – Suspensión de concursos – Reconocimiento de centros de estudiantes.

Fecha: 13 diciembre 1983.


Publicación: B. O. 16/12/83.

Citas legales: ley 22.207: XL-B, 997.

Art. 1º – Interviénense las Universidades Nacionales a cuyo fin se designarán rectores


normalizadores.

Art. 2º – Los rectores normalizadores tendrán las atribuciones que otorga el art. 48º de
la ley 22.207.

Art. 3º – Los decanos normalizadores de cada facultad serán designados por el


Ministerio de Educación y Justicia a propuesta del rector normalizador, y tendrán las
atribuciones otorgadas por los arts. 54º y 58º de la Ley 22.207.

Art. 4º – Decláranse de aplicación los estatutos universitarios vigentes al 29 de julio de


1966; debiendo las universidades creadas con posterioridad a esa fecha adoptar, entre ellos,
el que resulte más apropiado a sus fines.

Art. 5º – Se constituirán Consejos Superiores Provisorios en cada universidad, los que


estarán integrados por el rector normalizador y los decanos normalizadores juntamente con
el presidente y dos delegados de la Federación de Estudiantes correspondientes. Tendrán
las atribuciones otorgadas por los arts. 43º y 51º de la Ley 22.207. El Consejo Superior
Provisorio de cada universidad dictará una reglamentación especial, la que deberá ser
aprobada por el Ministerio de Educación y Justicia, a los fines de establecer como se
constituirán los respectivos claustros durante este proceso de normalización.

Art. 6º – Se constituirán Consejos Académicos Normalizadores Consultivos en cada


Facultad, los que estarán integrados por el decano, el presidente y los delegados del centro
de estudiantes reconocido y uno o más docentes por cada departamento (o unidad
académica equivalente), en número no menor de seis (6) ni mayor de diez (10), elegidos
por el decano de una lista propuesta por el claustro correspondiente. Podrá incorporarse
también un delegado del Centro de Graduados reconocido por la facultad.

La decisión final de las materias adoptadas compete al decano normalizador a quien se


le reconocen las atribuciones otorgadas por los arts. 54º y 58º de la Ley 22.207.

Art. 7º – Suspéndese la sustanciación de todos los concursos universitarios.

Art. 8º – El Consejo Superior Provisorio de cada universidad dictará normas


especiales, las que deberán ser aprobadas por el Ministerio de Educación y Justicia, a los
fines de revisar la aparente validez de los concursos realizados bajo el imperio de la Ley
22.207.

Art. 9º – Reconócense los centros de estudiantes que hubieren realizado elecciones


durante el último año, y en consecuencia la legalidad de su constitución. Reconócese un
solo centro por facultad y una sola Federación de Centros por Universidades, y la
Federación Universitaria Argentina, como órganos de representación de los estudiantes.

Art. 10º – Elimínanse todas las cláusulas discriminatorias y proscriptivas, de todo tipo,
para la provisión de cargos docentes y no docentes.

Art. 11º – Comuníquese, etc.

ALFONSIN. – Alconada Aramburu.


LEY N° 23.068 (*)

NORMALIZACION DE UNIVERSIDADES NACIONALES

Sancionada: Junio, 13 de 1984.


Promulgada: Junio, 26 de 1984.

El Senado y la Cámara de Diputados


de la Nación Argentina reunidos en Congreso, etc;
sancionan con Fuerza de ley:

Artículo 1°- Declárase como régimen provisorio de normalización de las universidades


nacionales, hasta tanto se dicte la correspondiente ley de fondo, el establecido en el Decreto
N°154/83 con las modificaciones establecidas en la presente ley
La normalización a que se refiere este régimen se cumplirá en el plazo de un año;
prorrogable por otro plazo no mayor de ciento ochenta días, si las circunstancias así lo
hicieren necesario, a contar desde la vigencia de la presente ley.

Artículo 2°- Se restablece la vigencia de los estatutos que regían en las universidades
nacionales al 29 de julio de 1966, en tanto sus disposiciones no se opongan a la presente
ley.

Artículo 3°- Derógase la Ley de facto N° 22.207.

Artículo 4°- El Poder Ejecutivo podrá intervenir las universidades nacionales durante el
tiempo que determine la presente ley y en los siguientes casos:

a) Notorio incumplimiento de la presente ley;

b) Riesgo inminente de alteración del orden público;

c) Conflicto insoluble dentro de la universidad;

d) Grave conflicto de competencia con los poderes del Estado.

Artículo 5°- Al rector normalizador le corresponde:

a) La representación de la universidad y el ejercicio de la jurisdicción superior


universitaria;

b) Convocar al Consejo Superior Provisorio a sesiones ordinarias o extraordinarias,


presidir sus deliberaciones y ejecutar sus resoluciones;

c) Ejercer la conducción administrativa, económica y financiera de la universidad y


supervisar la de las unidades académicas;
d) Organizar la secretaría de la universidad y del rectorado, designar y remover a sus
titulares, cuyos cargos serán docentes;

e) Resolver cualquier cuestión urgente o grave debiendo dar cuenta oportunamente al


Consejo Superior Provisorio;

f) Firmar los títulos, diplomas, distinciones y honores universitarios;

g) Conducir las actividades académicas de la universidad;

h) Designar y remover al personal cuyo nombramiento no corresponda a otros órganos, de


acuerdo con los respectivos estatutos vigentes;

i) Ejercer la jurisdicción disciplinaria;

j) Ejercer las demás atribuciones que, de acuerdo con esta ley, le asigne el estatuto.

Artículo 6°- Al Consejo Superior Provisorio corresponde:

a) Establecer las modificaciones que se consideran necesarias a los estatutos universitarios


puestos en vigencia, los que serán elevados a los fines de su aprobación al Ministerio de
Educación y Justicia;

b) Proponer al Ministerio de Educación y Justicia la creación, división, fusión o supresión


de facultades o unidades académicas equivalentes;

c) La suspensión o separación del rector, vicerector o de los decanos por las causas
previstas en el respectivo estatuto, en sesión especial convocada al efecto y por la
mayoría de dos tercios de votos;

d) Conocer en el caso de intervención a unidades académicas, sobre el recurso de


apelación que hubieran interpuesto las autoridades intervenidas, las que tendrán voz
pero no voto, en la correspondiente sesión especial;

e) Dictar su reglamento interno y aquellos reglamentos y ordenanzas necesarios para el


régimen común de los estudios y disciplinas generales de la universidad;

f) Orientar la gestión académica, homologar los planes de estudio y establecer normas


generales de reválida;

g) Proponer al Ministerio de Educación y Justicia la fijación y el alcance de los títulos y


grados y, en su caso, las incumbencias profesionales de los títulos correspondientes a
las carreras;

h) Designar, a propuesta del decano normalizador respectivo, a los miembros del tribunal
académico y a los jurados para los concursos;
i) Aprobar, a propuesta del rector, el presupuesto de la universidad, sus ajustes y
modificaciones, en los casos que corresponda, para su posterior elevación al Poder
Ejecutivo Nacional;

j) Resolver las propuestas de nombramientos y remoción de profesores ordinarios y


extraordinarios y decidir respecto de sus renuncias;

k) Aceptar herencias, legados y donaciones.

Artículo 7°- El decano normalizador tendrá las siguientes atribuciones:

a) Representar a la facultad o unidad académica equivalente;

b) Presidir el Consejo Académico Normalizador Consultivo y convocarlo a sesiones


ordinarias y extraordinarias;

c) Ejercer la conducción administrativa, económica y financiera de la facultad con arreglo


a los estatutos vigentes;

d) Dirigir, coordinar, supervisar y orientar la actividad académica;

e) Organizar las secretarías de la facultad; designar y remover a sus titulares y demás


personal no docente, de acuerdo con los estatutos vigentes, siempre que no se opongan
a las disposiciones de la presente ley;

f) Proponer al Consejo Superior Provisorio:

1. Los planes de estudio, la creación y supresión de carreras y doctorados y el


alcance de los títulos.

2. El nombramiento y la remoción de profesores ordinarios y extraordinarios y


decidir sobre la promoción de juicios académicos.

3. La designación de los miembros del tribunal académico y jurado para los


concursos docentes;

g) Aprobar los programas de estudio;

h) Designar y remover a los profesores interinos, contratados y a los docentes auxiliares;

i) Adoptar las decisiones y medidas necesarias para la ejecución de las resoluciones


emanadas del Consejo Superior Provisorio;

j) Ejercer la jurisdicción disciplinaria;

k) Presentar al Consejo Superior Provisorio el presupuesto anual de gastos, previa


notificación al Consejo Académico Normalizador Consultivo;
l) Determinar la época de exámenes, número de turnos y su respectivo orden;

m) Resolver cualquier cuestión de carácter urgente y grave, debiendo informar


posteriormente al Consejo Académico Normalizador Consultivo:

n) Las que de acuerdo con la presente ley le asigne el estatuto vigente.

Artículo 8°- Cada Universidad asegurará la participación de los docentes en los Consejos
Superiores Provisorios, determinando su número y forma de elección por los respectivos
claustros. La incorporación de los docentes designados se hará dentro de los sesenta (60)
días de promulgada esta ley.

Artículo 9°- Los concursos sustanciados durante el gobierno de facto podrán ser
impugnados a pedido de parte interesada dentro de los sesenta (60) días de promulgada la
presente ley

Artículo 10°- Dentro de los sesenta (60) días de promulgada la presente ley, cada
universidad asegurará la existencia de un régimen de reincorporación que contemple la
situación del personal docente y no docente cesanteado, prescindido u obligado a renunciar
por motivos políticos; gremiales o conexos, reconociendo las categorías al momento de las
cesantías y computándosele la antigüedad hasta el momento de su reincorporación, que no
deberá exceder los noventa (90) días de promulgada la presente ley

Artículo 11°- Comuníquese al Poder Ejecutivo.

Roberto P. SILVA - Edison OTERO - Carlos A. Bejar - Antonio J. Macris

(*) Promulgada por Decreto N°1.975’/84.


LEY N° 23.114

Sancionada: setiembre 30 de 1984.


Promulgada: octubre 23 de 1984.

EL SENADO Y LA CÁMARA DE DIPUTADOS


DE LA NACIÓN ARGENTINA
REUNIDOS EN CONGRESO, ETC.,
SANCIONAN CON FUERZA DE LEY:

ARTICULO 1º – Convócase a un Congreso Pedagógico, que se efectuará con la más


amplia participación de todos los niveles de enseñanza, estudiantes, padres, cooperadoras
escolares, gremialistas, docentes, estudiosos del quehacer educativo y el conjunto del
pueblo a través de los partidos políticos y organizaciones sociales representativas.

ARTICULO 2º – Serán objetivos del congreso:


a) Crear un estado de opinión en torno de la importancia y trascendencia de la
educación en la vida de la República;
b) Recoger y valorar las opiniones de las personas y sectores interesados en el
ordenamiento educativo y su desenvolvimiento;
c) Plantear, estudiar y dilucidar los diversos problemas, dificultades, limitaciones y
defectos que enfrenta la educación;
d) Divulgar la situación educativa y sus alternativas de solución, asegurando la
difusión necesaria a fin de que el pueblo participe activamente en el hallazgo de las
soluciones;
e) Proporcionar el asesoramiento que facilite la función de el gobierno en sus esferas
legislativas y ejecutiva;
f) Estrechar lazos de fraternidad entre educadores argentinos y de otros países
latinoamericanos, con vista a un intercambio fructífero de experiencias y
conocimiento.

ARTICULO 3º – La conducción de las actividades del Congreso Pedagógico estará a


cargo de una comisión organizadora presidida por el Ministro de Educación y Justicia e
integrada por el Secretario de Educación, el presidente y un miembro de la Comisión de
Educación del Senado, el presidente y un miembro de la Comisión de Educación de la
Cámara de Diputados, la Subsecretaría de la Conducción Educativa, el Subsecretario de la
Actividad Profesional Docente, los otros miembros del Comité Ejecutivo del Consejo
Federal de Cultura y Educación y la secretaría permanente del mismo. Una comisión
honoraria de asesoramiento será designada por el Poder Ejecutivo, a propuestas de la
comisión organizadora, entre personalidades del quehacer educativo.

ARTICULO 4º – Las provincias, la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires y el


Territorio Nacional de la Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, organizarán
en sus respectivas jurisdicciones educativas las actividades del Congreso Pedagógico.

ARTICULO 5º – El Poder Ejecutivo proveerá los fondos necesarios a fin de atender


los gastos emergentes para cumplimiento de la presente ley.
ARTICULO 6º – Comuníquese al Poder Ejecutivo.
Dada en la Sala de Sesiones del Congreso Argentino, en Buenos Aires, a los treinta
días del mes de setiembre del año mil novecientos ochenta y cuatro.

J. C. PUGLIESE – E. OTERO – Hugo Belnicoff – Antonio J. Macris


DECRETO N° 101/85

Deléganse facultades en Ministros, Secretarios Ministeriales y Secretarios y Jefe de la


Casa Militar de la Presidencia de la Nación

Buenos Aires, 16/01/85

...................................................................................................................................................

Por ello;

EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:

Artículo 1°- Delégase en los señores ministros, secretarios ministeriales y secretarios y jefe
de la Casa Militar de la Presidencia de la Nación, la facultad para resolver sobre los asuntos
de su jurisdicción relativos a:

a) Designación, asignación de funciones, promoción y reincorporación de personal en


cargos correspondientes a todas las categorías de los estatutos, escalafones o
convenios que rijan, con excepción de las vinculadas con funcionarios del Servicio
Exterior de la Nación comprendidos en el art. 86º, inc. 10, primera parte, de la
Constitución Nacional.

b) Designación de personal no permanente (contratado y transitorio) de acuerdo


con las dotaciones aprobadas por el Poder Ejecutivo.

c) Aceptación de renuncias, limitación de servicios (bajas por fallecimiento,


jubilación, retiro, razones de salud que imposibiliten para la función, etc.), cesantía y
exoneración de personal hasta la jerarquía de subsecretario, inclusive, sin distinción
alguna en razón de la autoridad que hubiere dispuesto su nombramiento y el ámbito
en que revistare el agente (organismos centralizados, descentralizados, autárquicos,
empresas y sociedades del Estado, cualquiera fuere su naturaleza jurídica, etc.) salvo
la remoción de funcionarios del Servicio Exterior de la Nación aludidos en el art. 86,
inc. 10, primera parte, de la Constitución Nacional.

d) Reclamos de actualización de los importes nominales abonados en mora a


agentes de la administración, en los casos contemplados por el art. 6°, párrafo
primero, de la ley 22.328.

e) Multas administrativas aplicables según los regímenes vigentes.

f) Cancelación de hipotecas sobre bienes inmuebles del Estado concedidos en


uso a su jurisdicción.
g) Contribuciones y subsidios, incluidas becas, con cargo a las partidas
presupuestarias correspondientes a la administración central, cuentas especiales y
organismos descentralizados de su jurisdicción, con intervención del Ministerio de
Salud y Acción Social, cuando corresponda de acuerdo con la ley 17. 502 y sus
modificatorias.
h) Cesión sin cargo de materiales y elementos declarados en desuso o en condiciones
de rezago, a solicitud de organismos públicos o instituciones privadas legalmente
constituidas en el país para el desarrollo de actividades de interés general (art. 53,
párrafo tercero, de la ley de contabilidad). Cuando el valor de dichos materiales y
elementos fuere superior al cuádruple de la suma hasta la que autoriza a contratar
directamente el art. 56º, inc. 3, apart. a), de la ley de contabilidad, será necesaria la
intervención previa favorable de la Secretaría de Hacienda.

i) Aceptación de legados y donaciones de bienes muebles con cargo. Cuando


signifique la realización de erogaciones por cuenta del Estado, deberá mediar
intervención previa favorable de la Secretaría de Hacienda.

j) Aceptación de legados, donaciones y transferencias de bienes inmuebles con


o sin cargo, previa intervención favorable de la Secretaría de Hacienda.

k) Edición y venta de las publicaciones oficiales, fijación de su precio o de su


distribución gratuita.

l) Actualización de montos -máximos o mínimos-, multas, aranceles, tasas,


cauciones, etc., encomendada al Poder Ejecutivo por normas legales, con la
periodicidad y sobre la base de cálculo que en cada caso las mismas leyes
especifiquen.

ll) Otorgamiento de auspicio oficial o declaración de interés nacional referidos a


reuniones, conferencias, congresos o acontecimientos similares que se lleven acabo
en el país, en tanto ello no signifique costo fiscal.
Cuando dichos acontecimientos tengan carácter internacional o, aun no
poseyéndolo, participen en ellos representantes de instituciones extranjeras o
internacionales o personas provenientes del exterior, será necesaria la opinión previa
favorable del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto. Si el otorgamiento a la
declaración se acompañara con beneficios que representen un justificado costo
fiscal (subsidio, franquicias, créditos de bancos oficiales, cesión de locales, espacios
de publicidad, etc.), deberá contarse con la intervención previa favorable de la
Secretaría de Hacienda.
En el supuesto de que el o los motivos del acontecimiento estuvieren vinculados con
las competencias de más de un ministerio o secretaría, la decisión será adoptada por
resolución conjunta de los titulares de las áreas involucradas. Además, cuando
corresponda, se dará intervención al Ministerio de Salud y Acción Social, de
acuerdo con lo previsto en la Ley 17.502 y sus modificatorias.
m) La aprobación y rectificación de estructuras orgánicas de las empresas del Estado;
con intervención previa favorable de la Secretaría de Hacienda y de la Secretaría de
la Función Pública de la Presidencia de la Nación en los siguientes supuestos:

1. Cuando las creaciones o modificaciones de dependencias y plantas de


personal que resulten de las nuevas estructuras no se financien con las partidas
presupuestarias aprobadas y determinen un incremento de los gastos de la
empresa;

2. Cuando se aumente la planta de personal existente;


3. Cuando la modificación implique la promoción escalafonaria automática de
agentes;

4. Cuando el personal especializado de que carezca la empresa por razones de


cantidad o experiencia, deba ser contratado por tiempo determinado, no superior
a los seis (6) meses.

n) Aprobación de convenios celebrados por las sociedades del Estado,


empresas del Estado y organismos descentralizados, salvo que fueren de carácter
internacional.

Artículo 2°- Delégase la facultad para resolver sobre los siguientes asuntos de sus
respectivas competencias:

.......................................................................................................................................

f) Al señor Ministro de Educación y Justicia:

1) La decisión de no computar las inasistencias del personal docente, administrativo,


profesional y técnico-docente de los establecimientos de enseñanza y de los
organismos de conducción educativa de su jurisdicción y del Consejo Nacional de
Educación Técnica, en los casos en que dicho personal asista a conferencias,
congresos, simposios, etc., que se celebren en el país con auspicio oficial o declarados
de interés nacional. Lo dispuesto precedentemente regirá también en iguales casos,
respecto de los alumnos de los establecimientos educativos citados.

2) Autorización para el funcionamiento transitorio de institutos culturales o de enseñanza


oficiales o privados sin fines de lucro en edificios de establecimientos educativos
dependientes del Ministerio de Educación y Justicia.

3) Aprobación y modificación de planes de estudio de todos los niveles, ciclos y


modalidades, salvo los correspondientes a Universidades Nacionales.

4) Creación de establecimientos educacionales o de secciones de los niveles pre-primario,


primario, medio y terciario no universitario.

5) Imposición de nombres a establecimientos educativos de su jurisdicción.


6) Aprobación y modificación del régimen de calificaciones, exámenes y promociones
aplicable en los establecimientos educativos de su jurisdicción.

7) Aprobación de estudios parciales realizados en el exterior por hijos o familiares a cargo


del personal del Servicio Exterior de la Nación y de las Fuerzas Armadas y
funcionarios nacionales, provinciales, municipales o dependientes de organismos
internacionales que cumplieren misiones oficiales en el extranjero (artículo 90 de la
Ley N° 20.957 y Ley N° 21.462).

8) Aprobación y modificación de los reglamentos orgánicos de establecimientos e


institutos educativos de los niveles de pre-primario, primario, medio y terciario no
universitario.

9) Incorporación al régimen de la Ley N° 17.778, de institutos de enseñanza superior


nacionales no pertenecientes a una universidad.

10) Las atribuciones reservadas al Poder Ejecutivo por la Ley N° 17. 604 (de Universidades
Privadas) y su reglamentación.

11) Aprobación de las tarifas mínimas de los aranceles de enseñanza correspondientes a los
institutos privados incorporados a la enseñanza oficial (artículo 22º de la Ley N°
13.047).

12) La distribución de los créditos asignados con destino a bibliotecas populares,


cooperadoras escolares y entidades similares.

13) Declaración de monumentos; lugares, bienes inmuebles y muebles, documentos y


sepulcros históricos, con sujeción a lo determinado por la Ley N° 12.665 y su
reglamentación. Autorización para colocar placas conmemorativas u otros objetos
permanentes en edificios públicos de la Nación, templos y monumentos declarados
históricos (artículo 1° del Decreto N° 3.541/44, modificado por su similar N°
31.454/45).

14) Los nombramientos, promociones, remociones y convocatoria del personal superior del
Servicio Penitenciario Federal (artículo 102º, inciso a), de la Ley N° 20.416).

15) Retiros, bajas, declaración en disponibilidad y reincorporaciones del personal del


Servicio Penitenciario Federal y la fijación de su haber de retiro.

16) La modificación del reglamento aplicable a los procesados que se alojen en


establecimientos dependientes del Servicio Penitenciario Federal.

17) Actualización del monto del capital social establecido por el artículo 299º, inciso 2°, de
la Ley N° 19.550, sustituido por la Ley N° 21.304.

18) Designación y remoción de los Escribanos Nacionales de Registro y sus adscriptos.


19) La aprobación de los textos de los formularios para contratos de prenda (artículo 6° del
Decreto Ley N° 15.348/46).

20) El nombramiento de los Inspectores de Protocolos a que alude el artículo 54º del
Decreto N° 26.655/51.

21) La designación de un profesor universitario de Derecho Penal y de un representante del


Patronato de Liberados y Excarcelados de la Capital Federal, a fin de que integren la
Junta Asesora de Egresos Anticipados de la Dirección Nacional del Servicio
Penitenciario Federal, prevista en el artículo 24º de la Ley N° 20.416.

22) La creación, modificación o supresión de los aranceles por servicios que prestan los
Registros Nacionales de la Propiedad del Automotor y de Créditos Prendarios y del
porcentaje de retribución de los encargados como asimismo la determinación de los
gastos que deberán afrontar obligatoriamente estos últimos.
.......................................................................................................................................

Artículo 9°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial y
archívese.

ALFONSIN - Antonio Tróccoli


DECRETO N° 2.461/85

Créase el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN)

Buenos Aires, 26/12/85

VISTO el estado actual de la Normalización Institucional de las Universidades Nacionales


Argentinas producto del Decreto N° 154/83 y de la Ley N° 23.068, y

CONSIDERANDO:

Que en la actualidad la función de coordinación universitaria la ejerce el Ministerio de


Educación y Justicia de la Nación de acuerdo con la Ley de Ministerios N° 22.520 y sus
modificaciones según texto ordenado por el Decreto N° 132/83.

Que una vez que las Universidades Nacionales recobren el ejercicio pleno de su autonomía
universitaria se hará menester contar con otro mecanismo de coordinación del que hasta el
momento existe.

Que todo ello deberá hacerse sin menoscabo alguno de la autonomía universitaria y del
dictado de la ley definitiva sobre universidades por el Honorable Congreso Nacional.

Que es necesario tener un ámbito adecuado de discusión y coordinación de políticas entre


las universidades y de ellas con el resto del Sistema Educativo Nacional, Científico y
Cultural.

Que es necesario que las universidades puedan coordinar acciones para sus relaciones
internacionales.

Que el organismo a crearse tendrá las atribuciones y el poder de decisión que las propias
Universidades resuelvan conferirle en el estatuto a elaborarse.

Que como surge de lo anterior la constitución de este organismo deberá efectivizarse


cuando las Universidades obtengan la autonomía plena.

Por ello,

ELPRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:

Artículo 1°- Créase el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) al que podrán adherir
libremente las Universidades Nacionales en ejercicio de su autonomía.

Artículo 2°- El Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) tendrá como misión la


coordinación de las políticas entre las Universidades Nacionales y de ellas con los distintos
niveles y jurisdicciones de la educación en la República Argentina; la cultura y los
organismos de investigación científica y técnica.
Tendrá a su cargo las relaciones con otros organismos públicos y privados, nacionales o
extranjeros que constituyan un intercambio beneficioso para las Universidades Nacionales.

Todo lo anterior se realizará en el marco de las atribuciones conferidas al organismo


Interuniversitario Nacional por las Universidades en el Estatuto para la entidad.

En el caso de las relaciones con el extranjero se deberán respetar las normas en vigencia
para nuestras relaciones internacionales.

Artículo 3°- El Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) podrá prever dentro de su


estatuto la formación de organismos regionales de coordinación.

Artículo 4°- El Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) podrá coordinar, compatibilizar


propuestas sobre validez nacional de estudios y títulos; habilitaciones e incumbencias de
títulos profesionales con validez nacional, a los efectos de su elevación al Poder Ejecutivo
Nacional en un todo de acuerdo con la Ley de Ministerios N° 22.520 y sus modificaciones
según texto ordenado por el Decreto N° 132/83.

Artículo 5°- Integrará el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) un representante del


Ministerio de Educación y Justicia de la Nación, con voz y sin voto a los efectos de la
coordinación antes mencionada.

Artículo 6°- El Ministerio de Educación y Justicia de la Nación convocará a la primera


reunión de Rectores para que de entre los participantes, surja una Comisión encargada de
elaborar el Estatuto del organismo, que deberá expedirse dentro del término de sesenta días
y ser aprobada en una nueva reunión de todos los Rectores de aquellas Universidades que
resuelvan adherirse al Consejo.

Artículo 7°- Atento a lo establecido en el artículo 1°, la respuesta a la convocatoria a la que


se refiere el artículo precedente, queda a decisión libre de cada universidad.

Artículo 8°- La reunión a la que se refiere el artículo 6° será convocada por el Ministro de
Educación y Justicia de la Nación cuando las Universidades Nacionales tengan autoridades
elegidas por los claustros normalizados según la Ley N° 23.068.

Artículo 9°- Comuníquese al Honorable Congreso de la Nación a los efectos de su


tratamiento con la Ley de Fondo.

Artículo 10°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial
y archívese

ALFONSIN - Carlos R. S. Alconada Aramburú


LEY N° 23.569 (*)

REGIMEN ECONOMICO FINANCIERO DE LAS UNIVERSIDADES NACIONALES.

Sancionada: Junio 15 de 1988.


Promulgada: Julio 5 de 1988.

El Senado y la Cámara de Diputados de la


Nación Argentina reunidos en Congreso, etc.,
sancionan con fuerza de Ley:

Artículo 1°- Las universidades nacionales ajustarán su régimen económico financiero a las
disposiciones de esta ley, hasta tanto se dicte la correspondiente ley universitaria.

Del patrimonio

Artículo 2°- Constituyen el patrimonio de afectación de cada universidad, los siguientes


bienes:

a) Los que actualmente le pertenecen y, los que adquiera en el futuro por cualquier título;

b) Los que, siendo propiedad de la Nación, se encuentren en posesión efectiva de la


universidad o estén afectados a su uso al entrar en vigencia la presente ley

A los fines del presente artículo, la universidad comprende el Rectorado, las Facultades o
Departamentos, Escuelas, Institutos y demás establecimientos o instituciones que de ella
dependan.

De los recursos

Artículo 3°- Son recursos de las universidades nacionales:

a) Las sumas que se asignen en el Presupuesto General de la Administración Nacional, ya


sea con cargo a "Rentas Generales" o con el producido de impuestos nacionales u otros
recursos que se afecten especialmente;

b) Los créditos que se incluyan a su favor en el plan de trabajos públicos;

c) Los provenientes de la venta de bienes, locaciones de obra o prestaciones de servicios;

d) Las contribuciones y subsidios; herencias, legados y donaciones oficiales o privadas;

e) Las rentas, frutos o intereses de su patrimonio;

f) Los beneficios que se obtengan por sus publicaciones, concesiones, explotación de


patentes de invención o derechos intelectuales que pudieran corresponderles por
trabajos realizados en su seno;
g) Los derechos o tasas que perciban como retribución de los servicios que presten al
margen de la enseñanza de grado;

h) Cualquier otro recurso que le corresponda o pudiere crearse.

Artículo 4°- Cuando se trate de herencias, legados, donaciones o cualquier otra liberalidad
en favor de la universidad, de sus unidades académicas o de otros organismos que la
integran, antes de ser aceptadas por el Consejo Superior debe recabarse la opinión del
destinatario final y analizarse exhaustivamente las condiciones o cargos que puedan
imponer los testadores y benefactores en cuanto a las conveniencias o desventajas que
pueda ocasionar la recepción del beneficio de acuerdo con los fines de los respectivos
estatutos universitarios. El Consejo Superior de cada universidad será la instancia última de
decisión en lo que atañe a la aceptación o rechazo del beneficio.

Del fondo universitario

Artículo 5°- Cada universidad nacional constituirá su fondo universitario con el aporte de:

a) Las economías que realice cada año de las contribuciones del Tesoro Nacional;

b) Con el producido de los recursos enumerados en los incisos c), d), e), f), g) y h) del
artículo 3º de esta ley

Del presupuesto

Artículo 6°- Los Consejos Superiores de las universidades nacionales, remitirán


anualmente el anteproyecto de presupuesto al Ministerio de Educación y Justicia en los
plazos que este determine. Los anteproyectos de presupuesto contendrán las
especificaciones de los gastos e inversiones en que se utilizarán las contribuciones del
Tesoro Nacional, remanentes, recursos propios y uso del crédito.

Artículo 7°- El Consejo Superior de cada universidad podrá reordenar y ajustar su


presupuesto a nivel de incisos. No podrán incrementar los montos de las partidas para
financiar gastos de personal, ni disminuir el monto total de las destinadas a obras públicas
sin previa autorización del Poder Ejecutivo.

Artículo 8°- Es facultad del Consejo Superior de cada universidad nacional incrementar y
reajustar el presupuesto respectivo, mediante la distribución de su fondo universitario, para
cualquiera de sus finalidades, excepto para sufragar gastos en personal permanente.
Tampoco podrá asumir compromisos que generen erogaciones permanentes o aumentos
automáticos.

El Consejo Superior, una vez confeccionada la cuenta general del ejercicio, podrá
incorporar a su presupuesto hasta el setenta y cinco por ciento (75%) de los recursos que
componen el fondo universitario y el veinticinco por ciento (25%) restante podrá ser
incorporado, al ser aprobada dicha cuenta por la Contaduría General de la Nación. La
ordenanza o resolución respectiva será suficiente para que el organismo pueda afectar los
créditos aprobados y solicitar los fondos correspondientes.

Artículo 9°- Cuando el Consejo Superior de cada universidad nacional decida el reajuste u
ordenamiento de los recursos presupuestarios de acuerdo con lo previsto en el artículo 7° o
la distribución o ampliación del fondo universitario de acuerdo con lo establecido en el
artículo 8°, deberá comunicarlo a los Ministerios de Educación y Justicia, y de Economía
(Secretaría de Hacienda) y al Tribunal de Cuentas de la Nación, dentro de los quince (15)
días del dictado de la medida.

Artículo 10°- El consejo Superior de cada universidad nacional podrá reajustar y/o
reordenar la respectiva planta de personal en cuanto la medida responda a necesidades
fundadas en la programación académica, de investigación, extensión y/o administrativas,
siempre que no se altere el monto total del crédito presupuestario asignado para su
financiamiento ni se afecten los derechos laborales del personal.

Artículo 11°- Las universidades nacionales podrán disponer de su patrimonio para la


realización de los fines que, en el marco de la legislación vigente prevean sus estatutos.

De la organización

Artículo 12°- Las universidades nacionales aprobarán sus estructuras orgánicas y la


dotación de su personal sin alterar el presupuesto asignado, previa consulta al organismo
técnico que corresponda del Poder Ejecutivo, el que deberá expedirse en un plazo de treinta
(30) días, transcurridos el cual se entenderá que no formula observaciones.

De las inversiones transitorias

Artículo 13°- El fondo universitario y las contribuciones, subsidios, herencias, legados o


donaciones para un destino determinado que reciban las universidades nacionales podrán
invertirse, transitoriamente, en títulos del Estado Nacional o depositados en cuentas
remuneradas de cualquier naturaleza, abiertas en entidades financieras oficiales.

De las contrataciones

Artículo 14°- Toda compra o venta que realicen las universidades nacionales así como todo
contrato sobre locaciones, arrendamientos, trabajos o suministros, se hará mediante
licitación pública de acuerdo con lo que establezca la presente ley y, supletoriamente, la
Ley de Contabilidad de la Nación.

El Consejo Superior de cada universidad nacional decidirá en qué casos son necesarias
tasaciones para comprar o vender. Las tasaciones serán requeridas por las universidades a
un tasador oficial.

Artículo 15°- Podrán contratar también mediante:


a) Licitación privada: cuando el valor tasado, de la operación no exceda de treinta mil
australes (A30.000).

b) Concurso de precios: las cotizaciones deberán ser presentadas por escrito pudiendo ser
simultáneas o no. Se pedirán a no menos de tres (3) proveedores del rubro a contratar.
Podrá invitarse a mejorar precios a todos los oferentes si el Rector o Presidente, en su caso,
lo considerare conveniente a los intereses de la respectiva universidad.

Se podrá recurrir a concurso de precios cuando el valor no exceda de quince mil australes
(A15.000) y, además cuando, se trate de los siguientes casos:

1) Por razones de urgencia en que a mérito de circunstancias imprevistas no pueda


esperarse la licitación.

2) La locación de inmuebles con destino académico.

3) La compra de libros, o material informativo que se utilice exclusivamente en apoyo


de las actividades universitarias.

c) Compra directa: cuando el valor fijado de la operación no exceda de los mil quinientos
australes ($ l.500) y además en los siguientes casos:

1) Cuando la operación se realice con organismos oficiales o mixtos,


nacionales, provinciales, municipales o instituciones sin fines de lucro autorizadas
e inscriptas como tales en los registros correspondientes.

2) Cuando las licitaciones públicas o privadas resultaren desiertas o no se


presentaren ofertas válidas o admisibles.

3) Cuando, mediando probadas razones de urgencia, no sea posible el concurso


de precios, o que su realización resienta seriamente el servicio.

4) Las prórrogas o renovaciones de locación de inmuebles, si así resultare


conveniente.

5) La adquisición de bienes cuya fabricación o propiedad sea exclusiva de


quienes tengan privilegios para ello y no hubiere sustituto.

6) Las compras y locaciones que sea menester efectuar en países extranjeros,


siempre que no sea posible o conveniente realizar en ellos la licitación o concurso
de precios.

7) La compra y venta de bienes en remate público. En el caso de la venta de


bienes inmuebles siempre que el acto de remate público se realice con intervención
de entidades oficiales.
8) La venta de productos perecederos o de aquellos que, a juicio debidamente
fundamentado de la comisión técnica designada al efecto, sea necesario incluir en
dicho procedimiento.

9) La venta de bienes o servicios producidos o prestados por la universidad.

10) La publicidad oficial.

11) Las reparaciones de maquinarias, equipos, rodados o motores cuyo desarme,


traslado o examen resulte oneroso o dificultoso en caso de llamarse a licitación o
concurso de precios.
12) La compra de semovientes por selección y semillas, plantas o cualquier otro
objeto que sea ejemplar único o sobresaliente.

13) Cuando hubiere notoria escasez de elementos a adquirir, circunstancia que


deberá ser acreditada por las oficinas técnicas competentes.

14) La adquisición, ejecución, conservación y restauración de obras artísticas,


científicas o técnicas que deben confiarse a empresas, personas o artistas
especializados.

15) La compra de revistas, diarios y publicaciones periodísticas.

16) Los gastos de cortesía y homenaje cuando no excedan el monto establecido


para la contratación directa.

Los limites establecidos en el presente artículo a los valores expresados en australes serán
actualizados por el Consejo Superior, en función del índice de precios al por mayor nivel
general o el que lo reemplace en el futuro que determine el organismo técnico nacional
correspondiente.

Artículo 16°- En los casos en que se considere conveniente se podrán adquirir bienes
usados, previo dictamen de una comisión técnica designada al efecto por el Rector o
Presidente en su caso.

Artículo 17°- Las formas de pago serán las siguientes:

a) Pago anticipado;

b) Anticipos a cuenta;

c) Contra entrega;

d) Hasta treinta (30) o más días.

Artículo 18°- Las universidades nacionales podrán adjudicar sus contrataciones a cualquier
proveedor aún cuando el mismo no estuviese inscripto en el Registro de Proveedores del
Estado. En este último caso y cuando la contratación exceda el monto establecido para la
compra directa, la universidad requerirá una garantía en efectivo del diez por ciento (10%)
del monto adjudicado, aval bancario, o certificación de inscripción en cualquier registro
oficial de proveedores nacionales, provinciales o municipales.

Artículo 19°- La adjudicación se hará en base a la oferta más conveniente y no


necesariamente a la de menor precio, a juicio fundado de la comisión de preadjudicaciones
de la facultad o universidad y aprobación del Rector, Presidente o Decano según
corresponda.

Artículo 20°- Facúltase a las universidades para contratar la adquisición de material


bibliográfico importado afín con las distintas especialidades de las carreras que se cursan en
cada casa de altos estudios (libros, revistas, publicaciones) mediante el pago anticipado o
contra presentación de factura proforma y, en caso de efectuarse la compra en el exterior,
de las correspondientes contragarantías.

Artículo 21°- Los Rectores o Consejos Superiores podrán solicitar al Poder Ejecutivo la
reconsideración de las observaciones de aquellos actos que hayan sido observados por el
Tribunal de Cuentas de la Nación. La solicitud deberá formularse, con las
fundamentaciones del caso, dentro de los treinta (30) días de su expresa notificación.

De los subsidios

Artículo 22°- Los Consejos Superiores tendrán competencia exclusiva para atender lo
referente a la iniciación, tramitación y otorgamiento de los subsidios y subvenciones que se
sufraguen con fondos del presupuesto de las universidades destinados a esos fines.

De los viajes y misiones al exterior

Artículo 23°- La realización de visitas o viajes al exterior de docentes, estudiantes, no


docentes y funcionarios, financiados total o parcialmente por la Universidad, con el objeto
de concurrir a congresos, cursos de perfeccionamiento, misiones oficiales y toda otra
actividad académico científica, estará supeditada a la expresa autorización del Rector y/o
Consejo Superior. En todos los casos deberá informarse al Ministerio de Relaciones
Exteriores y Culto.

Del contralor fiscal

Artículo 24°- El Tribunal de Cuentas de la Nación fiscalizará las erogaciones de las


universidades con posterioridad a la efectiva realización de las mismas, a cuyo efecto se
rendirá cuenta documentada trimestralmente.

De las exenciones tributarias

Artículo 25°- Las universidades nacionales gozarán de las mismas exenciones de


gravámenes que el Estado Nacional.
Igual tratamiento se les dispensará con relación a los derechos de importación o de
exportación y demás tributos que gravaren la importación o la exportación de bienes de
consumo o de capital.

Esta exención alcanza a la tasa de estadística que gravare la importación o exportación


temporaria.

El beneficio que se concede por el presente artículo queda sujeto a la condición que las
mercaderías, cuya exención del pago de gravámenes se acuerda, sean afectadas
exclusivamente al destino invocado no pudiéndose transferir su propiedad, posesión ni
tenencia hasta transcurrido un lapso no menor de tres (3) años a contar desde el primero de
enero del año siguiente a aquel en que se efectuó la importación para consumo;
circunstancias que deberán acreditarse ante la Administración Nacional de Aduanas, cada
vez que esta lo requiera.

Las herencias, legados, donaciones, contribuciones y subsidios privados, destinados a las


universidades nacionales estarán exentos de todo gravamen que correspondiera a la
transmisión gratuita.

Artículo 26°- El Poder Ejecutivo invitará a los gobiernos de las provincias, del Territorio
Nacional de la Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, de la Municipalidad de
la Ciudad de Buenos Aires y las demás municipalidades para que propicien ante las
legislaturas y consejos respectivos, leyes y ordenanzas de análogas características a las
previstas en esta ley.

Artículo 27°- Derógase la ley 23.151.

Artículo 28°- Comuníquese al Poder Ejecutivo.

Juan Carlos PUGLIESE, Víctor H. MARTÍNEZ.


Carlos A. Bejar. - Antonio J. Macris.

(*) Promulgada por Decreto N° 823/88.


LEY N° 23.930 (*)

PODER EJECUTIVO NACIONAL: MINISTERIOS

Sancionada: 18 de abril de 1991


Promulgada: 22 de abril de 1991

El Senado y la Cámara de Diputados de la


Nación Argentina reunidos en Congreso, etc.,
sancionan con fuerza de ley:

Artículo 1°- Sustitúyese el artículo 1° de la Ley de Ministerios (texto ordenado 1983), por
el siguiente:

“Artículo 1°- El despacho de los negocios de la Nación estará a cargo de los siguientes
ministerios:

- Del Interior

- De Relaciones Exteriores y Culto

- De Defensa

- De Economía y Obras y Servicios Públicos

- De Justicia

- De Cultura y Educación

- De Trabajo y Seguridad Social

- De Salud y Acción Social”.

Artículo 2°- Sustitúyese el artículo 7° de la Ley de Ministerios (texto ordenado 1983 ) por
el siguiente:

“Artículo 7°- Los actos del Poder Ejecutivo serán refrendados por el Ministerio que sea
competente en razón de la materia que se trate. Cuando esta sea atribuible a más de un
ministro, el Poder Ejecutivo determinará la forma y el plazo en que cada uno de ellos
tomará intervención en lo que hace a la parte o partes del acto relativos a su competencia.
En caso de dudas acerca del Ministerio a que corresponda un asunto, este será tramitado por
el que designare el Presidente de la Nación.
Los originados en un Ministerio, pero que tengan relación con las funciones específicas
atribuidas por esta ley a otro, son de competencia de este último.
En caso de ausencia transitoria, por cualquier motivo o vacancia, los ministros serán
reemplazados en la forma que determine el Poder Ejecutivo”.
Artículo 3°- Derógase el artículo 8° de la Ley de Ministerios (texto ordenado 1983).
Artículo 4°- Sustitúyese el artículo 10° de la Ley de Ministerios (texto ordenado 1983), por
el siguiente:

“Artículo 10°- Las tareas necesarias para posibilitar la actividad del Presidente de la Nación
serán atendidas por las siguientes secretarías presidenciales:

1. General

2. Legal y Técnica

3. de Planificación

4. de Inteligencia de Estado

5. de Medios de Comunicación

6. de la Función Pública

7. de Ciencia y Tecnología

8. de Programación para la Prevención de la Drogadicción y la Lucha Contra el


Narcotráfico.

Las secretarías enunciadas precedentemente asistirán al Poder Ejecutivo en forma directa.


Análoga asistencia prestarán las demás secretarías y organismos que en el futuro se
crearen”.

.......................................................................................................................................
.............

Artículo 8°- Sustitúyese el artículo 22 de la Ley de Ministerios (texto ordenada 1983 ), por
el siguiente:

“Artículo 22°- Compete al Ministerio de Cultura y Educación asistir al Presidente de la


Nación en todo lo inherente a la cultura y a la educación y, en particular:

1. Entender en la determinación de los objetivos y políticas del área de su competencia;

2. Ejecutar los planes, programas y proyectos del área de su competencia elaborados


conforme a las directivas que imparta el Poder Ejecutivo;

3. Entender en la actualización de los programas educativos para todos los niveles de su


jurisdicción, así como también en la elaboración de las pautas para la confección de los
programas de otras jurisdicciones;
4. Entender en la orientación de la oferta educativa mediante la diversificación de la
enseñanza secundaria y terciada teniendo en cuenta los requerimientos del desarrollo
nacional;

5. Entender en las relaciones con los institutos del sector privado y establecer las normas
de supervisión y el reconocimiento de su enseñanza cuando corresponda;
6. Entender en la fiscalización de las actividades culturales y educativas realizadas por los
institutos estatales de otras jurisdicciones o dependencias, en cuanto se relacionen con
la validez nacional de estudios y títulos;

7. Intervenir en la elaboración y entender en la aplicación de normas destinadas a regular


las acciones médicas, odontológicas y paramédicas en el ámbito educacional;

8. Entender en la coordinación del sistema universitario;

9. Entender en la determinación de la tarea a desarrollar por los organismos públicos y


privados con capacidad para realizar investigación básica evitando duplicación de
esfuerzos y asegurando plena utilización;

10. Entender en la determinación de la validez nacional de estudios y títulos;

11. Entender en las habilitaciones e incumbencias de títulos profesionales con validez


nacional;

12. Entender en la recreación, el turismo, la educación física y el deporte escolar en todos


los niveles del sistema educativo;

13. Intervenir en la utilización de la radiodifusión, la televisión, la cinematografía y demás


medios de comunicación masiva, con fines educativos, en coordinación con los
organismos que correspondan;

14. Entender en lo concerniente a becas y préstamos vinculados con la educación;

15. Entender en la administración de la cuenta especial "Fondo Escolar Permanente";

16. Entender en la adopción de medidas tendientes a erradicar la deserción escolar;

17. Entender en la ejecución y elaboración de planes para la educación sanitaria en las


escuelas primarias, secundarias o especiales, para crear desde la niñez conciencia
sanitaria en la población;

18. Intervenir en la elaboración de la política para el desarrollo de áreas y zonas de frontera


y entender en su ejecución, en el área de su competencia”.

......................................................................................................................................
Artículo 13°- Facúltase al Poder Ejecutivo a ordenar la disposiciones de la Ley de
Ministerios (texto ordenado 1983) y sus modificatorias incluidas las que se introducen por
la presente.

...................................................................................................................................................

Artículo 15°- Comuníquese al Poder Ejecutivo.

Alberto R. PIERRI - Eduardo MENEM


Esther H. Pereyra Arandia de Pérez Pardo - Hugo R.
Flombaum

(*) Decreto de promulgación N° 782/91.


DECRETO N° 160/91

Establécese que las Universidades Nacionales deberán elevar al Ministerio de


Educación y Justicia, todos los recursos que contra sus actos hayan sido o sean
interpuestos

Buenos Aires, 21/1/91

VISTO el expediente n° 38.910/89 del registro del MINISTERIO DE EDUCACION Y


JUSTICIA y,

CONSIDERANDO:

Que existen Universidades Nacionales que por intermedio del Consejo Superior de las
mismas se excluyen del ámbito de aplicación del artículo 94º del Reglamento aprobado por
Decreto N° 1.759 del 3 de abril de 1972, que importa la imposibilidad de interponer recurso
de alzada según lo previsto en el artículo citado, privando al administrado del ejercicio del
derecho concedido por la Ley de Procedimientos Administrativos y su reglamentación.

Que la vigencia plena de la Constitución Nacional, obliga al PODER EJECUTIVO por


aplicación de lo dispuesto en el artículo 86º, inciso 1°, de la misma, a ejercer el control de
los actos de las entidades públicas estatales que integran la Administración Pública.

Que tal control, limitado a verificar la legitimidad de los actos, y previo agotamiento de la
cuestión ante la propia Universidad, no lesiona la necesaria autonomía científica y docente
que debe asegurarse a las Casas de Estudios en resguardo de la libertad de cátedra y de su
nivel académico.

Que la llamada autonomía universitaria se refiere a la posibilidad de poder realizar


libremente su tarea propia, en tanto las decisiones adoptadas respeten los derechos y
garantías constitucionales, ya que las decisiones universitarias no escapan al ámbito de
aplicación de las leyes de la Nación, ni confieren privilegios a los integrantes de sus
claustros. En consecuencia la autonomía de las Universidades Nacionales en el orden
científico y docente no impide que el PODER EJECUTIVO, y otros órganos a quienes se
les hubiere atribuido competencia al efecto, controlen la legitimidad de sus actos y que el
Estado les exija el cumplimiento de las Leyes.

Que en igual sentido a lo expuesto precedentemente se ha expedido la PROCURACION


DEL TESORO DE LA NACION en dictamen de fecha 13 de noviembre de 1986, en el
expediente N° 680.071/84 (anexos 4 y 5 ) y expediente N° 680.071/82 y sus anexos, arribos
del registro de la UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES.

Que la presente medida se dicta en uso de las atribuciones conferidas por el artículo 86º,
inciso 1° de la CONSTITUCION NACIONAL.
Por ello,

EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:

Artículo 1°- Las Universidades Nacionales elevarán al MINISTERIO DE EDUCACION Y


JUSTICIA, con los antecedentes respectivos, todos los recursos que contra sus actos hayan
sido o sean interpuestos en función del artículo 94º, siguientes y concordantes del
reglamento aprobado por Decreto N° 1.759 del 3 de abril de 1972 y su modificatorio.

Artículo 2°- Déjase sin efecto toda disposición que se oponga al presente Decreto.

Artículo 3°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial y
archívese.

MENEM - Antonio F. Salonia.-


DECRETO N° 990/91

Créase la Comisión de Concertación de las Universidades Estatales con el Poder


Ejecutivo Nacional

Buenos Aires, 24/05/91

VISTO las leyes Nros 23.696 y 23.697, de Reforma del Estado y de Emergencia
Económica, respectivamente, y los Decretos Nros 435/90, 612/90, 1.757/90, 1.930/90 y
2.476/90, y

CONSIDERANDO:

Que por el Protocolo de Concertación Universitaria, las casas estatales de altos estudios
asumieron el compromiso de racionalizar su organización, optimizando el uso de sus
recursos y estableciendo mecanismos de evaluación de sus rendimientos para mejorar la
calidad del sistema.

Que las Universidades por sus múltiples actividades, y en particular por su quehacer
científico y de investigación, deben considerarse agentes esenciales de cambio y de
desarrollo económico, social y cultural.

Que las metas de racionalización fijadas por el PODER EJECUTIVO NACIONAL deben
contemplar las especiales particularidades de la realidad del Sistema Universitario
Nacional, sus objetivos y acciones.

Que resulta necesario y conveniente trabajar de consuno para lograr estos objetivos.

Que la presente medida se dicta en uso de las atribuciones conferidas por el Art. 86º, Inciso
1° de la CONSTITUCION NACIONAL.

Por ello,

EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:

Artículo 1°- Créase una Comisión de Concertación que tendrá como misión analizar y
formular propuestas tendientes a concretar la reforma estructural de las Universidades
Estatales y sus organismos dependientes, en orden a las metas planteadas por el PODER
EJECUTIVO NACIONAL en materia de reforma administrativa del Estado, teniendo en
cuenta los objetivos propuestos en el Protocolo de Concertación Universitaria.

Artículo 2°- La Comisión creada por el Artículo anterior será coordinada por el
Subsecretario de coordinación Educacional, Científica y Cultural del MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION e integrada por los rectores de las Universidades Nacionales
de Buenos Aires, Cuyo. Litoral y Luján, en representación de todas las Universidades
Nacionales según propuesta del Consejo Interuniversitario Nacional, el Director Nacional
de Asuntos Universitarios en representación de la SUBSECRETARÍA DE EDUCACION,
DOS (2) representantes del MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS
PUBLICOS Y UN (1) representante de la SECRETARÍA DE LA FUNCION PUBLICA de
la PRESIDENCIA DE LA NACION, con nivel no inferior a Director General o Nacional.

Artículo 3°- Establécese un plazo de TREINTA (30) días corridos, contados a partir de la
fecha de publicación, del presente Decreto, para la constitución de la Comisión creada por
el Artículo 1°

Artículo 4°- Otórgase a la citada Comisión un plazo máximo de NOVENTA (90) días
unidos a partir de su constitución, para elevar al PODER EJECUTIVO NACIONAL, a
través del MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, sus conclusiones y propuestas.

Artículo 5°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial y
archívese.

MENEM - Antonio F. Salonia.- Domingo F. Cavallo.


LEY 24.049

Educación – Autorización al Poder Ejecutivo Nacional para transferir, a las


provincias y a la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires, servicios educativos.

Sanción: 6 de diciembre de 1991.


Promulgación: 2 de enero de 1992.
Publicación: B. O. 7/1/92.

Citas legales: Ley 23.548: XLVII-A, 53.

CAPITULO I – De la transferencia

Art. 1º – Facúltase al Poder Ejecutivo Nacional a transferir, a partir del 1 de enero de


1992, a las provincias y a la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires, los servicios
educativos administrados en forma directa por el Ministerio de Cultura y Educación y por
el Consejo Nacional de Educación Técnica, así como también las facultades y funciones
sobre los establecimientos privados reconocidos en las condiciones que prescribe esta ley.

Se exceptúan las escuelas superiores normales e institutos superiores, tanto estatales


como privados, y la ENET N° 1 “Otro Krausse”, la Telescuela Técnica y los Centros de
Recursos Humanos y Capacitación Nros. 3, 8 y 10 de Capital Federal dependientes del
CONET. Queda a criterio del Poder Ejecutivo Nacional la oportunidad de transferir estos
servicios en forma total o parcial previa garantía de financiamiento.

Art. 2º – Los requisitos específicos de las transferencias se establecerán mediante


convenios a celebrarse entre el Poder Ejecutivo Nacional y cada una de las jurisdicciones,
en los que se acordará toda otra cuestión no prevista en la presente ley de acuerdo con las
particularidades de cada jurisdicción. Dichos convenios serán refrendados, según la
normativa vigente en cada una de las jurisdicciones, por medio de las legislaturas
provinciales.

Art. 3º – Las jurisdicciones receptoras, con el apoyo sostenido del Poder Ejecutivo
Nacional, deberán cumplir todos los derechos y obligaciones vigentes en materia educativa.
El Estado Nacional garantizará que los servicios transferidos sean prestados con óptima
cobertura cuantitativa, alta calidad pedagógica y equidad en todas las jurisdicciones.

Art. 4º – Las transferencias que se convengan se efectuarán sin otro cargo que los que
establece la presente ley e importarán la sucesión a título universal de los derechos y
obligaciones.

CAPITULO II – De los bienes transferidos

Art. 5º – La transferencia de los servicios educativos a cada una de las jurisdicciones,


comprenderá los bienes de todo gravamen actualmente afectados al Ministerio de Cultura y
Educación y al Consejo Nacional de Educación Técnica, a saber:
a) El dominio y todo otro derecho que el Gobierno Nacional tenga sobre los bienes
inmuebles y sus accesorios, cualquiera sea el origen de sus derechos, con destino actual o
previsto para establecimientos educacionales y organismos de apoyo al sistema educativo;
b) Los bienes muebles de todo tipo, incluyendo equipos, semovientes y elementos de
uso y consumo regular;
c) La documentación y todo otro antecedente relativo a los inmuebles y muebles
transferidos que sean de utilidad a las jurisdicciones receptoras;
d) Los contratos de locación de cosas, obras y servicios, sin perjuicio de las
adecuaciones contractuales necesarias a fin de mantener la continuidad de los servicios.

Art. 6º – No serán transferidos los juicios pendientes ni las deudas que por cualquier
causa hubiera contraído la Nación a la fecha de la transferencia.

Art. 7º – En el caso de que el dominio o la propiedad de los bienes inmuebles o


muebles o derechos que se transfieran provengan de donaciones o de legados con cargo, la
jurisdicción receptora garantizará su cumplimiento y los derechos de quienes resulten
beneficiarios de tales cargos.

CAPITULO III – Del personal transferido

Art. 8º – El personal docente, técnico, administrativo y de servicios generales que se


desempeñe en los servicios que se transfieren quedará incorporado a la administración
provincial o municipal en su caso, de conformidad con las siguientes bases:
a) Identidad o equivalencia en la función, jerarquía y situación de revista en que se
encontrare a la fecha de la transferencia;
b) Retribución por todo concepto no inferior a la que se perciba al momento de la
transferencia y equiparación a la escala salarial jurisdiccional durante 1992;
c) Reconocimiento de la antigüedad en la carrera y en el cargo, ya sea en carácter de
titular, interino o suplente;
d) Reconocimiento a la estabilidad en el cargo u horas cátedra que desempeñe al
tiempo de la transferencia cuando revistiere en calidad de titular interino o suplente según
la normativa vigente en cada jurisdicción;
e) Reconocimiento de títulos y antecedentes profesionales valorables para concurso de
la carrera docente en equivalencia de condiciones con las vigentes para los docentes de la
jurisdicción receptora.

Art. 9º – Las jurisdicciones podrán convenir mecanismos para facilitar al personal


transferido optar por continuar en la Obra Social para la Actividad Docente (OSPLAD), en
cuyo caso el gobierno de la jurisdicción deberá actuar como agente de retención de los
correspondientes aportes, o incorporarse a la obra social de la jurisdicción receptora.

Art. 10º. – A los efectos previsionales, las jurisdicciones receptoras reconocerán los
servicios prestados por el personal en el orden nacional. Los docentes transferidos que no
reúnan los requisitos exigidos en la jurisdicción receptora, podrán continuar efectuando
aportes al sistema nacional de previsión; las jurisdicciones serán agentes de retención de los
mencionados aportes.
Art. 11º. – El personal docente transferido continuará en la Caja Complementaria de
Previsión para la Actividad Docente; el gobierno de la jurisdicción receptora actuará como
agente de retención de los aportes.

Art. 12º. – Las cuestiones disciplinarias referidas al personal transferido suscitadas


hasta el momento de efectivizarse la transferencia, serán resueltas según la normativa
vigente al momento de ocurrir los hechos que las motivaron y en la jurisdicción de origen
en un plazo no mayor de un año con posterioridad a la firma del convenio; las
jurisdicciones receptoras aplicarán las sanciones y/o medidas que la jurisdicción de origen
hubiera resuelto.

Art. 13º. – Los concursos de docentes a ser transferidos, como así también los
procedimientos de traslados, titularizaciones y jubilaciones, pendientes de resolución que
pudieren existir al momento de promulgarse esta ley, deberán ser resueltos según la
normativa de origen con el alcance y en tiempos y modos que establezcan los respectivos
convenios bilaterales.

CAPITULO IV – Del financiamiento

Art. 14º. – A partir del 1 de enero de 1992 y hasta tanto se modifique la ley 23.548 la
Secretaría de Hacienda de la Nación retendrá de, la participación correspondiente a las
provincias en el régimen de la citada ley, previamente a la distribución secundaria un
importe equivalente al monto total que se incluye en planilla anexa 1 A, con detalle para
cada jurisdicción, con destino al financiamiento de los servicios educativos que se
transfieren por la presente ley y los correspondientes al costo de servicios de Hospitales e
Institutos Nacionales, Políticas Sociales Comunitarias y Programa Social Nutricional a
transferir a las provincias según se convenga oportunamente.

Dicha retención será operativa en la medida que el incremento de la recaudación de los


gravámenes a que se refiere la ley 23.548 para 1992 respecto del promedio mensual
analizado del período abril-diciembre de 1991 sea superior al monto mencionado en el
párrafo anterior.

Art. 15º. – Cuando el monto mensual recaudado no alcanzare a cubrir el nivel


promedio mensual del período abril-diciembre de 1991, el Gobierno Nacional cubrirá
totalmente y en forma automática el costo mensual de los servicios transferidos.

Si al cierre de cada mes lo recaudado fuere superior al nivel promedio abril-diciembre


de 1991, pero no alcanzare a cubrir el costo de los servicios, el Gobierno Nacional
financiará automáticamente la diferencia.

Art. 16º. – Al momento de efectivizarse la transferencia de los servicios prevista en el


art. 14º se transferirán en las proporciones correspondientes los recursos afectados según el
primero de dicho artículo a la respectiva provincia y por hasta los montos mencionados en
el mismo.
Art. 17º. – El Poder Ejecutivo Nacional deberá fijar el marco general y los criterios
particulares a seguir a efectos de brindar un tratamiento equivalente a lo dispuesto por los
arts. 14º, 15º y 16º de la presente, a la provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del
Atlántico Sur y a la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires con anterioridad a la
firma del convenio previsto en el art. 2º de esta ley. Ello, sin afectar la participación de las
provincias según la Ley 23.548.

Art. 18º. – Las obras públicas que se encuentran en ejecución en los servicios a
transferir, serán continuadas y finalizadas por la Nación. A su término dichos inmuebles
serán transferidos a la jurisdicción en los términos de la presente ley.

Art. 19º. – El Poder Ejecutivo Nacional asignará un monto global para reparaciones de
los edificios transferidos cuyo estado de conservación o antigüedad afecte el
desenvolvimiento de los servicios educativos. Los montos serán acordados en los
respectivos convenios bilaterales.

CAPITULO V – Aspectos pedagógicos

Art. 20º. – El Poder Ejecutivo Nacional, a través del Ministerio de Cultura y


Educación, ejecutará las políticas y estrategias del Sistema Educativo Nacional en consulta
permanente con el Consejo Federal de Cultura y Educación, y coordinará, compatibilizará y
evaluará el funcionamientos interjurisdiccional.

Art. 21º. – El Poder Ejecutivo Nacional, a través del Ministerio de Cultura y


Educación en ejercicio de su competencia, realizará el análisis, evaluación y seguimiento de
la situación educativa; de la consistencia, congruencia y calidad educativas de los planes y
programas en la materia en relación con las prioridades establecidas; brindará asistencia
técnica y financiera para el desarrollo de estrategias y programas educativos; atenderá y
gestionará los asuntos de naturaleza internacional que se relacionen con la educación y la
cultura; determinará los requerimientos y condiciones para el reconocimiento de títulos y
certificados nacionales y extranjeros; organizará y administrará un sistema de información
cualitativa y cuantitativa en materias educativa y cultural e instrumentará planes y
programas de interés nacional.

Art. 22º. – El Ministerio de Cultura y Educación promoverá concertadamente con el


Consejo Federal de Cultura y Educación la adecuación de la estructura común del sistema
educativo, la actualización de planes generales con objetivos y contenidos curriculares
básicos y comunes con aportes que consideran las particularidades regionales, provinciales
y de las escuelas y su comunidad, a fin de establecer un marco de coherencia, unidad e
integración educativa y cultural del país en un pleno respeto del federalismo.

CAPITULO VI - De la enseñanza privada

Art. 23º. – Los servicios educativos de gestión privada que se transfieren quedan
garantizados para que se sigan prestando con respeto de los principios de la libertad de
enseñanza y los derechos emergentes de la normativa nacional sobre la materia.
Consecuentemente, podrán mantener sus características doctrinarias, modalidades
curriculares y pedagógicas y el estilo ético formativo propios, en el ámbito de las
jurisdicciones receptoras.

Estas mantendrán el régimen de aportes a la enseñanza privada en concordancia con el


fijado en el orden nacional, en lo que hace a montos, proporciones y destino a los servicios
transferidos.

CAPITULO VII - Disposiciones transitorias

Art. 24º. – El Poder Ejecutivo Nacional, a través del Ministerio de Cultura y


Educación podrá celebrar los actos jurídicos necesarios para el eficaz cumplimiento de la
presente ley.

Art. 25º. – Cuando por razones operativas alguna provincia lo requiera expresamente
el Poder Ejecutivo Nacional podrá atender por cuenta y orden de la misma los gastos
emergentes de los servicios transferidos según el art. 1º.

Art. 26º. – Los participantes en el sistema de la Ley 23.548, deberán presentar en el


período legislativo de 1992 un proyecto de ley sustitutiva del régimen vigente de
coparticipación federal de impuestos.

Art. 27º. – Comuníquese, etc.


DECRETO N° 438/92

Sustitúyese el texto ordenado de la Ley de Ministerios

Buenos Aires, 12/03/92

VISTO la “Ley de Ministerios-t.o. 1983'', y

CONSIDERANDO:

Que dicho texto ordenado fue objeto de modificaciones a través de las Leyes N° 23.317 y
23.930.

Que por lo tanto se considera necesario elaborar un nuevo ordenamiento tomando como
base el que se encuentra vigente.

Que la Ley N° 20.004 en su artículo 1° faculta al Poder Ejecutivo Nacional para llevar a
cabo dicho cometido.

Que la presente medida se dicta en ejercicio de las atribuciones emergentes de la norma


legal precitada y del artículo 13º de la Ley N° 23.930.

Por ello,

EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:

Artículo 1°- Sustitúyase el texto ordenado de la Ley de Ministerios (Leyes Nros. 22. 520,
22.641 y 23.023) aprobado por el Decreto N° 132 del 10 de diciembre de 1983, por el que,
como anexo I, integra el presente.

Artículo 2°- El ordenamiento que conforma el citado Anexo I, elaborado según el índice
que figura agregado como Anexo II, se denominará: “Ley de Ministerios - t.o. 1992 -“.

Artículo 3°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial y
archívese.

MENEM - León C. Arslanian.


LEY N° 24.195

FEDERAL DE EDUCACION
Sancionada: abril 14 de 1993
Promulgada: abril 29 de 1993

El Senado y la Cámara de Diputados de la


Nación Argentina reunidos en Congreso, etc.
sancionan con fuerza de Ley:

TÍTULO I

Derechos, obligaciones y garantías

Artículo 1°- El derecho constitucional de enseñar y aprender queda regulado, para su


ejercicio en todo el territorio argentino, por la presente ley que, sobre la base de principios,
establece los objetivos de la educación en tanto bien social y responsabilidad común,
instituye las normas referentes a la organización y unidad del Sistema Nacional de
Educación, y señala el inicio y la dirección de su paulatina reconversión para la continua
adecuación a las necesidades nacionales dentro de los procesos de integración.

Artículo 2°- El Estado nacional tiene la responsabilidad principal e indelegable de fijar y


controlar el cumplimiento de la política educativa, tendiente a conformar una sociedad
argentina justa y autónoma, a la vez que integrada a la región, al continente y al mundo.

Artículo 3°- El Estado nacional, las provincias y la Municipalidad de la Ciudad de Buenos


Aires, garantizan el acceso a la educación en todos los ciclos, niveles y regímenes
especiales, a toda la población, mediante la creación, sostenimiento, autorización y
supervisión de los servicios necesarios, con la participación de la familia, la comunidad, sus
organizaciones y la iniciativa privada.

Artículo 4°- Las acciones educativas son responsabilidad de la familia, como agente
natural y primario de la educación, del Estado nacional como responsable principal, de las
provincias, los municipios, la Iglesia Católica, las demás confesiones religiosas
oficialmente reconocidas y las organizaciones sociales.

TÍTULO II
Principios Generales

Capítulo I

De la política educativa

Capítulo II

Del sistema educativo nacional


Artículo 6°- El sistema educativo posibilitará la formación integral y permanente del
hombre y la mujer, con vocación nacional, proyección regional y continental y visión
universal , que se realicen como personas en las dimensiones cultural, social, estética, ética
y religiosa, acorde con sus capacidades, guiados por los valores de vida, libertad, bien,
verdad, paz, solidaridad, tolerancia, igualdad y justicia. Capaces de elaborar, por decisión
existencial, su propio proyecto de vida. Ciudadanos responsables, protagonistas críticos,
creadores y transformadores de la sociedad, a través del amor, el conocimiento y el trabajo.
Defensores de las instituciones democráticas y del medio ambiente.

Artículo 7°- El sistema educativo está integrado por los servicios educativos de las
jurisdicciones nacional, provincial y municipal, que incluyen los de las entidades de gestión
privada reconocidas.

Artículo 8°- El sistema educativo asegurará a todos los habitantes del país el ejercicio
efectivo de su derecho a aprender, mediante la igualdad de oportunidades y posibilidades,
sin discriminación alguna.

Artículo 9°- El sistema educativo ha de ser flexible, articulado, equitativo, abierto,


prospectivo y orientado a satisfacer las necesidades nacionales y la diversidad regional.

TÍTULO III

Estructura del sistema educativo nacional

Capítulo I

Descripción general

Artículo 10°- La estructura del sistema educativo, que será implementada en forma gradual
y progresiva, estará integrada por:

a) Educación inicial, constituida por el jardín de infantes para niños/as de 3 a 5 años de


edad; siendo obligatorio el ultimo año. Las provincias y la Municipalidad de la Ciudad
de Buenos Aires establecerán, cuando sea necesario, servicios de jardín maternal para
niños/as menores de 3 años y prestarán apoyo a las instituciones de la comunidad para
que estas los brinden y ayuda a las familias que los requieran.

b) Educación General Básica, obligatoria, de 9 años de duración a partir de los 6 años de


edad, entendida como una unidad pedagógica integral y organizada en ciclos, según lo
establecido en el Artículo 15º.

c) Educación Polimodal, después del cumplimiento de la Educación General Básica,


impartida por instituciones específicas de tres años de duración como mínimo.

d) Educación Superior, profesional y académica de grado, luego de cumplida la Educación


Polimodal su duración será determinada por las instituciones universitarias y no
universitarias, según corresponda.
e) Educación Cuaternaria

Artículo 11°- El sistema educativo comprende, también, otros regímenes especiales que
tienen por finalidad atender las necesidades que no pudieran ser satisfechas por la
estructura básica, y que exijan ofertas específicas diferenciadas en función de las
particularidades o necesidades del educando o del medio.

Las provincias y la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires acordarán en el seno del


Consejo Federal de Cultura y Educación, ofertas educativas de menor duración y con
preparación ocupacional específica; para quienes hayan terminado la Educación General
Básica y Obligatoria. Ello no impedirá a los educandos proseguir estudios en los siguientes
niveles del sistema.

Artículo 12°- Los niveles, ciclos y regímenes especiales que integren la estructura del
sistema educativo deben articularse, a fin de profundizar los objetivos, facilitar el pasaje y
continuidad, y asegurar la movilidad horizontal y vertical de los alumnos/as.

En casos excepcionales, el acceso a cada uno de ellos no exigirá el cumplimiento


cronológico de los anteriores sino la acreditación, mediante evaluación por un jurado de
reconocida competencia, de las aptitudes y conocimientos requeridos.

Capitulo V

Educación superior

Artículo 18°- La etapa profesional de grado no universitario se cumplirá en los institutos


de formación docente o equivalentes y en institutos de formación técnica que otorgarán
títulos profesionales y estarán articulados horizontal y verticalmente con la universidad.

Artículo 19°- Los objetivos de la formación docente son:

a) Preparar y capacitar para un eficaz desempeño en cada uno de los niveles del sistema
educacional y en las modalidades mencionadas posteriormente en esta ley

b) Perfeccionar con criterio permanente a graduados y docentes en actividad en los


aspectos científico, metodológico, artístico y cultural. Formar investigadores y
administradores educativos.

c) Formar al docente como elemento activo de participación en el sistema democrático.

d) Fomentar el sentido responsable de ejercicio de la docencia y el respeto por la tarea


educadora.

Artículo 20°- Los institutos de formación técnica tendrán como objetivo el de brindar
formación profesional y reconversión permanente en las diferentes áreas del saber técnico y
práctico de acuerdo con los intereses de los alumnos y la actual y potencial estructura
ocupacional.

Artículo 21°- La etapa profesional y académica de grado universitario se cumplirá en


instituciones universitarias entendidas como comunidades de trabajo que tienen la finalidad
de enseñar, realizar investigación, construir y difundir bienes y prestar servicios con
proyección social y contribuir a la solución de los problemas argentinos y continentales.

Artículo 22°- Son funciones de las universidades:

a) Formar y capacitar técnicos y profesionales, conforme a los requerimientos nacionales y


regionales, atendiendo las vocaciones personales y recurriendo a los adelantos
mundiales de las ciencias; las artes y las técnicas que resulten de interés para el país.

b) Desarrollar el conocimiento en el más alto nivel con sentido critico, creativo e


interdisciplinario, estimulando la permanente búsqueda de la verdad.

c) Difundir el conocimiento científico-tecnológico para contribuir al permanente


mejoramiento de las condiciones de vida de nuestro pueblo y la competividad
tecnológica del país

d) Estimular una sistemática reflexión intelectual y el estudio de la cultura y la realidad


nacional, latinoamericana y universal.

e) Ejercer la consultoría de organismos nacionales y privados.

Artículo 23º- Las universidades gozan de autonomía académica y autarquía administrativa


y económico-financiera en el marco de la legislación específica.

Artículo 24°- La organización y autorización de universidades alternativas, experimentales,


de posgrado, abiertas, a distancia, institutos universitarios tecnológicos, pedagógicos y
otros creados libremente por iniciativa comunitaria, se regirán por una ley específica.

Capítulo VI

Educación cuaternaria

Artículo 25°- La educación cuaternaria estará bajo la responsabilidad de las universidades


y de las instituciones académicas, científicas y profesionales de reconocido nivel, siendo
requisito para quienes se inscriban el haber terminado la etapa de grado o acreditar
conocimiento y experiencia suficientes para el cursado del mismo.

Artículo 26°- El objetivo de la educación cuaternaria es profundizar y actualizar la


formación cultural, docente, científica, artística y tecnológica mediante la investigación, la
reflexión critica sobre la disciplina y el intercambio sobre los avances en las especialidades.

TÍTULO VI
Gratuidad y asistencialidad

Artículo 39°- El Estado nacional, las provincias y la Municipalidad de la Ciudad de


Buenos Aires se obligan, mediante la asignación en los respectivos presupuestos educativos
a garantizar el principio de gratuidad en los servicios estatales, en todos los niveles y
regímenes especiales.

El Estado nacional realizará el aporte financiero principal al sistema universitario estatal


para asegurar que ese servicio se preste a todos los habitantes que lo requieran. Las
universidades podrán disponer de otras fuentes complementarias de financiamiento que
serán establecidas por una ley específica, sobre la base de los principios de gratuidad y
equidad.

El Estado nacional, las provincias y la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires


establecerán un sistema de becas para alumnos/as en condiciones socioeconómicas
desfavorables, que cursen ciclos y/o niveles posteriores a la Educación General Básica y
Obligatoria, las que se basarán en el rendimiento académico.

TÍTULO IX

De la calidad de la educación y su evaluación

Artículo 48°- El ministerio de Cultura y Educación de la Nación, las provincias y la


Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires, deberán garantizar la calidad de la formación
impartida en los distintos ciclos, niveles y regímenes especiales mediante la evaluación
permanente del sistema educativo, controlando su adecuación a lo establecido en esta ley, a
las necesidades de la comunidad, a la política educativa nacional, de cada provincia y de la
Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires y a las concertadas en el seno del Consejo
Federal de Cultura y Educación.

A ese fin deberá convocar junto con el Consejo Federal de Cultura y Educación a
especialistas de reconocida idoneidad e independencia de criterio para desarrollar las
investigaciones pertinentes por medio de técnicas objetivas aceptadas y actualizadas.

El Ministerio de Cultura y Educación deberá enviar un informe anual a la Comisión de


Educación de ambas Cámaras del Congreso de la Nación donde se detallen los análisis
realizados y las conclusiones referidas a los objetivos que se establecen en la presente ley

Artículo 49°- La evaluación de la calidad en el sistema educativo verificará la adecuación


de los contenidos curriculares de los distintos ciclos, niveles y regímenes especiales a las
necesidades sociales y a los requerimientos educativos de la comunidad, así como el nivel
de aprendizaje de los alumnos/as y la calidad de la formación docente.

Artículo 50°- Las autoridades educativas de las provincias y de la Municipalidad de la


Ciudad de Buenos Aires evaluarán periódicamente la calidad y el funcionamiento del
sistema educativo en el ámbito de su competencia.
TÍTULO X

Gobierno y administración

Capítulo I

Del Ministerio de Cultura y Educación

Artículo 53°- El Poder Ejecutivo Nacional, a través del ministerio específico, deberá:

a) Garantizar el cumplimiento de los principios, objetivos y funciones del Sistema


Nacional de Educación.

b) Establecer, en acuerdo con el Consejo Federal de Cultura y Educación, los objetivos y


contenidos básicos comunes de los currículos de los distintos niveles, ciclos y
regímenes especiales de enseñanza -que faciliten la movilidad horizontal y vertical de
los alumnos/as- dejando abierto un espacio curricular suficiente para la inclusión de
contenidos que respondan a los requerimientos provinciales, municipales, comunitarios
y escolares.

c) Dictar normas generales sobre equivalencia de títulos y de estudios, estableciendo la


validez automática de los planes concertados en el seno del Consejo Federal de Cultura
y Educación.

d) Favorecer una adecuada descentralización de los servicios educativos y brindar a este


efecto el apoyo que requieran las provincias y la Municipalidad de la Ciudad de Buenos
Aires.

e) Implementar programas especiales para garantizar el ingreso, permanencia y egreso de


los alumnos/as en todos los ciclos y niveles del sistema educativo nacional, en
coordinación con el Consejo Federal de Cultura y Educación.

f) Desarrollar programas nacionales y federales de cooperación técnica y financiera a fin


de promover la calidad educativa y alcanzar logros equivalentes a partir de las
heterogeneidades locales, provinciales y regionales.

g) Promover y organizar concertadamente en el ámbito del Consejo Federal de Cultura y


Educación, una red de formación, perfeccionamiento y actualización del personal
docente y no docente del sistema educativo nacional.

h) Coordinar y ejecutar programas de investigación y cooperación con universidades y


organismos nacionales específicos.

i) Administrar los servicios educativos propios y los de apoyo y asistencia técnica al


sistema -entre ellos, los de planeamiento y control; evaluación de calidad; estadística,
investigación, información y documentación; educación a distancia, informática,
tecnología, educación satelital, radio y televisión educativas- en coordinación con las
provincias y la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires.

j) Alentar el uso de los medios de comunicación social estatales y privados para la


difusión de programas educativos-culturales que contribuyan a la afirmación de la
identidad nacional y regional.

k) Evaluar el funcionamiento del sistema educativo en todas las jurisdicciones, niveles,


ciclos y regímenes especiales, a partir del diseño de un sistema de evaluación y control
periódico de la calidad, concertado en el ámbito del Consejo Federal de Cultura y
Educación.

l) Dictar las normas generales sobre revalidación de títulos y certificados de estudios en el


extranjero.

m) Coordinar y gestionar la cooperación técnica y financiera internacional y bilateral.

n) Contribuir con asistencia técnica para la formación y capacitación técnico-profesional


en los distintos niveles del sistema educativo, en función de la reconversión laboral en
las empresas industriales, agropecuarias y de servicios.

o) Elaborar una memoria anual donde consten los resultados de la evaluación del sistema
educativo, la que será enviada al Congreso de la Nación.

Capítulo II

Del Consejo Federal de Cultura y Educación

Artículo 54°- El Consejo Federal de Cultura y Educación es el ámbito de coordinación y


concertación del Sistema Nacional de Educación y está presidido por el ministro nacional
del área e integrado por el responsable de la conducción educativa de cada jurisdicción y un
representante del Consejo Interuniversitario.

Artículo 55°- La misión del Consejo Federal de Cultura y Educación es unificar criterios
entre las jurisdicciones, cooperar en la consolidación de la identidad nacional y en que a
todos los habitantes del país se les garantice el derecho constitucional de enseñar y aprender
en forma igualitaria y equitativa.

Artículo 56°- El Consejo Federal de Cultura y Educación tiene las funciones establecidas
por las normas de su constitución y cumplirá además las siguientes:

a) Concertar dentro de los lineamientos de la política educativa nacional los contenidos


básicos comunes, los diseños curriculares, las modalidades y las formas de evaluación
de los ciclos; niveles y regímenes especiales que componen el sistema.

b) Acordar los mecanismos que viabilicen el reconocimiento y equivalencia de estudios,


certificados y títulos de la educación formal y no formal en las distintas jurisdicciones.
c) Acordar los contenidos básicos comunes de la formación profesional docente y las
acreditaciones necesarias para desempeñarse como tal en cada ciclo, nivel y régimen
especial.
d) Acordar las exigencias pedagógicas que se requerirán para el ejercicio de la función
docente en cada rama artística en los distintos niveles y regímenes especiales del
sistema.

e) Promover y difundir proyectos y experiencias innovadoras y organizar el intercambio


de funcionarios, especialistas y docentes mediante convenios, la constitución de equipos
técnicos interjurisdiccionales y acciones en común, tendientes a lograr un efectivo
aprovechamiento del potencial humano y de los recursos tecnológicos disponibles en el
sistema educativo nacional.

f) Considerar y proponer orientaciones que tiendan a la preservación y desarrollo de la


cultura nacional en sus diversas manifestaciones, mediante la articulación de las
políticas culturales con el sistema educativo en todos sus niveles y regímenes
especiales.

g) Garantizar la participación en el planeamiento educativo de los padres, las


organizaciones representativas de los trabajadores de la educación y de las instituciones
educativas privadas reconocidas oficialmente.

h) Cooperar en materia de normativa educacional y mantener vínculos con el Congreso de


la Nación y con las legislaturas de las provincias y de la Municipalidad de la Ciudad de
Buenos Aires.

Artículo 57°- El Consejo Federal de Cultura y Educación se compone de los siguientes


órganos:

a) La Asamblea Federal, órgano superior del Consejo, estará integrada por el ministro del
área del Poder Ejecutivo nacional como presidente nato, y por los ministros o
responsables del Area Educativa de las provincias y de la Municipalidad de la Ciudad
de Buenos Aires y el representante del Consejo Interuniversitario Nacional.

b) El Comité Ejecutivo, desenvolverá sus actividades en el ramo de las resoluciones


adoptadas por la Asamblea Federal. Estará presidido por el ministro del Poder Ejecutivo
Nacional integrado por los miembros representantes de las regiones que lo componen,
designados por la Asamblea Federal cada dos años.

c) La Secretaría General, tendrá la misión de conducir y realizar las actividades, trabajos y


estudios según lo establezcan la Asamblea Federal y el Comité Ejecutivo. Su titular será
designado cada dos años por la Asamblea Federal.

Artículo 58°- El Consejo de Cultura y Educación tendrá el apoyo de dos consejos


consultivos:
a) El Consejo Económico Social, integrado por representantes de las organizaciones
gremiales empresarias de la producción de los servicios, la Confederación General del
Trabajo y el Consejo Interuniversitario Nacional.

b) El Consejo Técnico Pedagógico estará integrado por especialistas designados por


miembros del Consejo Federal de Cultura y Educación (artículo 54º) y dos especialistas
designados por la organización gremial de trabajadores de la educación de
representación nacional mayoritaria.

TÍTULO XI

Financiamiento

Artículo 60°- La inversión en el sistema educativo por parte del Estado es prioritaria y se
atenderá con los recursos que determinen los presupuestos nacional, provinciales y de la
Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires, según corresponda.

Artículo 61°- La inversión pública consolidada total en educación (base


992:6.120.196.000), será duplicada gradualmente y como mínimo a razón del 20 por ciento
anual a partir del presupuesto 1993; o se considerará un incremento del 50 por ciento en el
porcentaje (base 1992. 4 por ciento) del producto bruto interno (base 1992:
153.004.900.000), destinado a educación en 1992. En cualquiera de los dos casos, se
considerará a los efectos de la definición de los montos la cifra que resultare mayor.

TÍTULO XII

Disposiciones transitorias y complementarias

Artículo 66°- El Ministerio de Cultura y Educación y las autoridades educativas de las


provincias y de la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires, acordarán en el seno del
Consejo Federal de Cultura y Educación, inmediatamente de producida la promulgación de
la presente ley y en un plazo no mayor a un año:

a) La adecuación progresiva de la estructura educativa de las jurisdicciones a la indicada


por la presente ley, determinando sus ciclos, y los contenidos básicos comunes del
nuevo diseño curricular.

b) Las modalidades del Ciclo Polimodal atendiendo a las demandas del campo laboral, las
prioridades comunitarias, regionales y nacionales y la necesaria articulación con la
educación superior.

c) La implementación gradual de la obligatoriedad y la asistencialidad señaladas para los


alumnos/as de la Educación Inicial, la Educación Especial y la Educación General
Básica y Obligatoria.

d) La implementación de programas de formación y actualización para la docencia que


faciliten su adaptación a las necesidades de la nueva estructura.
e) La equivalencia de los títulos docentes y habilitantes actuales en relación con las
acreditaciones que se definan necesarias para la nueva estructura.

Artículo 67°- El presupuesto de la administración pública nacional 1993 con destino a las
Universidades Estatales en su conjunto, no será inferior al Presupuesto 1992, más la suma
anualizada de los incrementos del mencionado año.

Artículo 68°- Las disposiciones de esta ley son aplicables a todos los niveles y regímenes
especiales educativos con excepción de las establecidas en los artículos 48º, 53º, incisos: b),
e), 1), k), ll), 54ºy 56º, inciso a) en relación con las universidades, aspectos que se rigen por
la legislación especifica o la que la reemplace.

Artículo 69°- Las provincias se abocarán a adecuar su legislación educativa en


consonancia con la presente ley, y a adoptar los sistemas administrativos de control y de
evaluación, a efectos de facilitar su óptima implementación.

Artículo 70°- Deróganse todas las disposiciones que se opongan a la presente ley

Artículo 71°. Comuníquese al Poder Ejecutivo Nacional.

Alberto R. PIERRI - Eduardo MENEM


DECRETO N° 506/93

Apruébase la organización provisoria del MCE y créase el Consejo Nacional de


Educación Superior

Buenos Aires, 24/3/93

VISTO la ley de Ministerios (t.o. 1992), la ley N°24.049, los Decretos Nros. 1.691/91,
793/92, 2.730/92, y lo propuesto por el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, y

CONSIDERANDO:

...........................................................................................................................
.............

Que la presente medida se dicta en virtud de las facultades otorgadas por el Artículo 86º,
inciso 1) de la Constitución Nacional y el Artículo 7° de la Ley N° 24.191.

Por ello,

EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:

...........................................................................................................................
.............

Artículo 4°- Créase en el ámbito del MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION el


CONSEJO NACIONAL DE EDUCACION SUPERIOR que tendrá como objetivos
asesorar al Ministro en la determinación de las orientaciones adecuadas para el desarrollo
de niveles de excelencia en la educación superior.

...........................................................................................................................
.............

Artículo 11°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro oficial y
archívese.

MENEM - Jorge A. Rodríguez - Domingo F. Cavallo.


DECRETO N° 1.075/93

Reglaméntase el Consejo Nacional de Educación Superior

Buenos Aires, 24/5/93

VISTO el Decreto N° 506 de fecha 24 de marzo de 1993, y

CONSIDERANDO:

Que por el artículo 4° de esa norma se creó en el ámbito del MINISTERIO DE CULTURA
Y EDUCACION el CONSEJO NACIONAL DE EDUCACION SUPERIOR con la
finalidad de asesorar al Ministro en la determinación de las orientaciones adecuadas para el
desarrollo de niveles de excelencia en la educación superior.

Que resulta necesario dictar las normas básicas que permitan articular la integración del
nuevo organismo, su organización y funciones.

Que para llevar a cabo los propósitos enunciados y hasta tanto se establezca su
estructuración, el consejo estará integrado por personalidades con reconocida trayectoria
pública en las áreas académicas, científicas, productivas, tecnológicas y culturales.

Que es necesario que dichas personalidades constituyan la expresión de diferentes


concepciones en el campo de las ideas que, sin renunciar a sus propias convicciones y
manteniendo su independencia de criterio, puedan como cuerpo presentar propuestas y
sugerencias al MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION.

Que a los fines de que el cuerpo cuente con la mayor apoyatura y nivel de información debe
existir una fluida vinculación con la SECRETARÍA DE POLITICAS UNIVERSITARIAS.

Que el COMITE EJECUTIVO DE CONTRALOR DE LA REFORMA


ADMINISTRATIVA ha tomado la intervención que le compete expidiéndose
favorablemente.

Que la presente medida se dicta en virtud de las facultades otorgadas por el Artículo 86,
inciso 1°) de la Constitución Nacional.

Por ello,

EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:

Artículo 1°- El CONSEJO NACIONAL DE EDUCACION SUPERIOR tendrá la misión


de asesorar al Ministro de Cultura y Educación en todos los aspectos que tiendan a la
mejora sistemática de la excelencia y organización del sistema de educación superior.
Artículo 2°- Para el cumplimiento de su misión el Consejo tendrá la facultad de consultar a
diferentes sectores de la comunidad, encomendar la realización de estudios, realizar
reuniones y seminarios, y organizar comisiones de trabajo sobre temas vinculados a su
misión.

Artículo 3°- El Consejo estará integrado con personas de destacada y reconocida actuación
en las áreas académicas, científicas, productivas, tecnológicas y culturales, quienes serán
designados por el Ministro de Cultura y Educación con carácter ad-honorem.

Artículo 4°- El Consejo procurará producir sus dictámenes por consenso. Cuando este no
se logre deberá consignar todas las opiniones disidentes con los fundamentos que las
avalen.

Artículo 5°- La SECRETARÍA DE POLITICAS UNIVERSITARIAS brindará


información y realizará los estudios que el Consejo determine.

Artículo 6°- Los gastos que demande el funcionamiento del Consejo serán atendidos con
cargo a los créditos correspondientes al presupuesto de la SECRETARÍA DE POLITICAS
UNIVERSITARIAS del MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION.

Artículo 7°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional de Registro Oficial y


archívese.

MENEM - Jorge A. Rodríguez - Domingo F. Cavallo


DECRETO N° 1.610/93

Establécese un adicional mensual para docentes con dedicación simple y semiexclusiva

Buenos Aires, 30/7/93.

VISTO lo propuesto por el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, y

CONSIDERANDO:

Que resulta necesario considerar la situación salarial del personal docente y auxiliar de la
docencia que se desempeña con dedicación semiexclusiva y simple y la del personal
comprendido en el escalafón para el personal no docente universitario (Decreto N° 2..213
del 30 de diciembre de 1987) en las Universidades Nacionales, teniendo en cuenta que han
quedado relegados frente a otras áreas de la Administración Pública.

Que el personal docente con dedicación semiexclusiva y simple tendrá derecho a la


percepción del beneficio siempre que se cumplimenten los requisitos fijados en el anexo II
del presente decreto.

Que los aumentos deben tender a la recomposición del nomenclador salarial del personal
docente, de modo que las remuneraciones según tipo de dedicación guarden una cierta
proporcionalidad.

Que dentro de los niveles presupuestarios fijados por la Ley N° 24.191 las Universidades
Nacionales estarían en condiciones de financiar la mejora propuesta durante lo que resta del
presente ejercicio.

Que el cumplimiento de tal situación posibilita que las sumas necesarias para cubrir las
diferencias del costo anualizado de la medida propuesta, se incorporen, en forma
proporcional a los montos otorgados en el proyecto de la Ley de Presupuesto General de la
Administración Nacional para el ejercicio 1994.

Que es necesario establecer un sistema de información que permita al PODER


EJECUTIVO NACIONAL, a través del MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION,
fiscalizar el cumplimiento de las disposiciones que en materia salarial se adopten.

Que en consecuencia corresponde dictar el acto que autorice a las Universidades


Nacionales para efectivizar la propuesta fijando al efecto los importes máximos del
beneficio en cuestión.

Que la COMISION TECNICA ASESORA DE POLITICA SALARIAL DEL SECTOR


PUBLICO ha tomado la intervención que le compete.

Que la presente medida encuadra en las facultades conferidas por el artículo 86º, inciso 1°),
de la Constitución Nacional.
Por ello,

EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:

Artículo 1°- Establécese, a partir del 1º de agosto de 1993 los importes máximos del
adicional mensual remunerativo no bonificables consignados en el Anexo I del presente
decreto, aplicable a los cargos docentes y auxiliares de la docencia, que se desempeñan con
dedicación semiexclusiva y dedicación simple en las Universidades Nacionales, siempre
que el personal involucrado reúna las condiciones exigidas en el Anexo II, que forman
parte del presente decreto.

Artículo 2°- Establécese, a partir del 1° de agosto de 1993, un adicional mensual


remunerativo no bonificable de hasta PESOS NOVENTA ($90) para los agentes
comprendidos en el Escalafón para el Personal No Docente de las Universidades
Nacionales, aprobado por el decreto N° 2.213 del 30 de diciembre de 1987.

Artículo 3°- Lo dispuesto en los artículos precedentes podrá ser otorgado por los Consejos
Superiores de las Universidades Nacionales sin alterar el total del aporte del Tesoro
Nacional previsto en la Ley N° 24.191 de Presupuesto de la Administración Nacional.

Artículo 4°- Los recursos presupuestarios asignados al MINISTERIO DE CULTURA Y


EDUCACION en la Planilla Anexa N° 12 del artículo 27º de la Ley N° 24.191 de
Presupuesto General de la Administración Nacional para 1993, podrán aplicarse para la
atención de los gastos que demande lo dispuesto por los artículos 1° y 2° del presente
decreto. EL MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION distribuirá los citados recursos
de acuerdo con las facultades vigentes.

Artículo 5°- Los beneficios otorgados en el marco del decreto N° 1.215/92, podrán ser
adecuados en función de los aumentos autorizados por los artículos 1° y 2° del presente
decreto.

Artículo 6°- La diferencia necesaria para cubrir el financiamiento anualizado por la


presente medida -SIETE (7) meses del ejercicio 1994 y la parte proporcional del sueldo
anual complementario- será considerada proporcionalmente a los montos otorgados por
cada Universidad en el proyecto de Ley del Presupuesto General de la Administración
Nacional para dicho ejercicio. EL MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION
distribuirá durante el ejercicio 1994, previa comprobación de las condiciones previstas en
los artículos 7º, 8° y 9° del presente decreto, el importe señalado precedentemente.

Artículo 7°- A los efectos de que se concrete lo dispuesto en el artículo anterior las
Universidades deberán efectivizar los pagos de los adicionales respectivos durante el
período agosto/diciembre de 1993 y la parte proporcional del sueldo anual complementario.
La SINDICATURA GENERAL DE LA NACION será el organismo encargado de verificar
lo dispuesto en el presente artículo.
Artículo 8°- Las resoluciones dictadas por los Consejos Superiores, derivadas de las
disposiciones de los artículos 1° y 2° del presente decreto, serán comunicadas por las
Universidades Nacionales al MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION.

Artículo 9°- El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION será el órgano de


interpretación de las condiciones a que alude el Anexo II y emitirá las resoluciones
aclaratorias que correspondieren.
Las Universidades Nacionales elevarán a la SECRETARÍA DE POLITICAS
UNIVERSITARIAS del MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION un listado del
personal designado en cargos docentes por categoría y dedicación ordenados por orden
alfabético y por unidad académica en que se desempeña.
Las Secretarías Académicas, de Investigación y Extensión de las Universidades Nacionales
suministrarán la información de las actividades y/o proyectos académicos, de investigación
o extensión aprobados por los órganos de la Universidad que corresponda, indicando el
personal involucrado en cada uno.
La información a la que alude el presente artículo será la vigente al 30 de abril y 31 de
agosto y deberá ser recibida por la SECRETARÍA DE POLITICAS UNIVERSITARIAS
no más allá del 31 de mayo y del 30 de setiembre de cada año.

Artículo 10°- Las remuneraciones resultantes de la aplicación del presente decreto serán
objeto de los aportes y contribuciones previstos por las leyes previsionales y asistenciales y
de las retenciones por cuotas sindicales ordinarias. En caso de aportes y contribuciones a
obras sociales y entidades similares, los mismos se limitarán a los previstos en la Ley de
obras sociales N° 23.660.

Artículo 11°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial
y archívese.

MENEM - Jorge A. Rodríguez - Domingo F. Cavallo


ANEXO I

PERSONAL DOCENTE DE UNIVERSIDADES NACIONALES

Adicional remunerativo no bonificable


- Importes Máximos-

CATEGORIAS DEDICACION DEDICACION


DOCENTES SEMIEXCLUSIVA SIMPLE

Adicional Adicional
$ $

TITULAR 123,00 52,00


ASOCIADO 108,00 48,00
ADJUNTO 73,00 39,00
JEFE T. PRAC. 46,00 32,00
AYUDANTE 1a. 27,00 27,00
AYUDANTE 2ª. --- 24,00
ANEXO II

CONDICIONES QUE DEBEN REUNIR LOS DOCENTES CON DEDICACION


SIMPLE Y SEMIEXCLUSIVA

A. CONDICIONES NECESARIAS

A.1. Que el docente se encuadre dentro de las normas del Régimen Básico de
Incompatibilidades que adopta el PODER EJECUTIVO NACIONAL para los
docentes de Universidades Nacionales.

A.2. Que el docente esté frente a alumnos en, por lo menos, UNA (1) asignatura de
duración cuatrimestral o anual.
Asimilase al concepto "frente a alumnos", la jefatura o dirección de grupos de
profesores y auxiliares.

A.3. Que los alumnos que se desempeñen como ayudantes deberán haber aprobado la
materia en que se desempeñen como auxiliar con una calificación mayor de SEIS
(6) y haber aprobado al menos DOS (2) materias en el cuatrimestre anterior al
ejercicio de la ayudantía.

B. CONDICIONES SUFICIENTES

Reunir una u otra de las condiciones siguientes:

B.1. Docente con dedicación simple

Opción (a): Estar frente a alumnos en DOS (2) cursos, si son cuatrimestrales, o en
UNA (1) asignatura en el caso de que la misma sea de duración anual.

Opción (b): Estar frente a los alumnos en UNA (1) asignatura de duración
cuatrimestral siempre que en el otro cuatrimestre el docente esté afectado
a otra actividad docente o proyecto de investigación, creación artística o
extensión aprobado por el órgano que corresponda de la Universidad y
reconocido por las secretarías Académica, de Investigación o Extensión
de la Universidad, según corresponda.

B.2. Docentes con dedicación semiexclusiva:

Opción (a): Estar frente a alumnos en DOS (2) asignaturas o cursos en cada
cuatrimestre o en UNA (1) asignatura en cada uno de ellos con un total de
DIEZ (10) o más horas semanales teóricas y/o frente a los alumnos.

Opción (b): Estar frente a los alumnos en UNA (1) asignatura en cada cuatrimestre y
adicionalmente estar afectados por una equivalencia anual a DIEZ (10)
horas semanales a otras actividades docentes o proyecto de investigación,
creación artística o extensión, aprobado por los órganos de la Universidad
que correspondan y reconocido por las secretarías Académica, de
Investigación o Extensión de la Universidad, según corresponda.
DECRETO N° 2282/93

Reglaméntase la creación de nuevas sedes de Universidades Nacionales

Buenos Aires, 8/11/93.

VISTO la presentación efectuada en el expediente N° 20.994-2/93 del registro del


MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION.

CONSIDERANDO:

Que se advierte la tendencia creciente entre las Universidades Nacionales de crear y


multiplicar el número de sus sedes.

Que ello distorsiona la coordinación del sistema Universitario, generando en muchos casos
superposiciones innecesarias de la oferta educativa en una misma jurisdicción.

Que es necesario disponer mecanismos que permitan coordinar en este aspecto tales
iniciativas a fin de que respondan a una planificación adecuada a las reales necesidades del
país.

Que el artículo 2° del Decreto N° 2.461 de fecha 26 de diciembre de 1985 asigna al


CONSEJO INTERUNIVERSIARIO NACIONAL (CIN), como misión primordial, la
coordinación de la políticas entre las Universidades Nacionales.

Que la presente medida se encuadra en las facultades otorgadas al PODER EJECUTIVO


NACIONAL por Artículo 86, inciso 1°) de la CONSTITUCION NACIONAL.

Por ello,

EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:

Artículo 1°- Establécese que la creación por parte de las Universidades Nacionales de
nuevas sedes o unidades académicas equivalentes deberá contar con dictamen favorable del
CONSEJO INTERUNIVERSITARIO NACIONAL.

Artículo 2°- Cuando la nueva unidad académica debiera funcionar en la jurisdicción de


otra Universidad Nacional, o a una distancia considerable de su sede central, la autorización
sólo se acordará si median razones excepcionales que así lo justifique.

Artículo 3°- Comuníquese, publíquese, dese a la DIRECCION NACIONAL DE


REGISTRO OFICIAL y archívese.

MENEM - Jorge A. Rodríguez


DECRETO N° 2330/93

Reglaméntase la ley 17.604

Buenos Aires, 11/11/93

VISTO, la Ley N° 17.604 de establecimientos universitarios privados, y

CONSIDERANDO:

Que resulta necesario actualizar y perfeccionar la reglamentación de dicha ley en función


de la experiencia recogida a lo largo de VEINTICINCO (25) años de aplicación y de los
nuevos desafíos que la realidad actual plantea.

Que para ello se hace necesario establecer normas reglamentarias más precisas, que
permitan resolver las solicitudes de autorización de nuevos establecimientos universitarios
de gestión privada sobre la base de la calidad académica y la relevancia que caracterice a
sus propuestas, protegiendo de este modo la fe pública que la sociedad deposita en las
instituciones universitarias.

Que además de los requisitos de nivel y pertinencia que deben caracterizar al proyecto
institucional inicial, se hace necesario que los establecimientos cuyo funcionamiento se
autorice provisoriamente, presenten un informe anual donde se haga constar los avances
realizados con respecto al plan de desarrollo aprobado, el cual debe ser evaluado por el
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION.

Que para una adecuada consideración de los pedidos de autorización provisoria y definitiva
se hace conveniente prever la constitución, en el ámbito del MINISTERIO DE CULTURA
Y EDUCACION, de una COMISION CONSULTIVA que actuará con independencia de
criterio y que deberá integrarse con personas que posean antecedentes destacados en
actividades científicas, académicas o de conducción universitaria, ello sin perjuicio de la
intervención que legalmente le cabe al CONSEJO DE RECTORES DE LAS
UNIVERSIDADES PRIVADAS.

Que es también conveniente distinguir más nítidamente entre las exigencias que se imponen
a las instituciones nuevas, que recién comienzan su experiencia como establecimientos
universitarios formalmente autorizados a operar como tales, y las que regulan el
funcionamiento de instituciones ya consolidadas, especialmente aquellas que cuentan con
autorización definitiva y han sido liberadas de la Prueba Final de Capacidad Profesional, lo
que necesariamente implica más de VEINTE (20) años de funcionamiento.

Que para estas últimas resulta conveniente ampliar su capacidad de decisión, eximiéndolas
de los trámites de autorización previa, a excepción de los relativos a la creación de nuevas
sedes, validez nacional de títulos y fijación de incumbencias.

Que ese mayor grado de autonomía para las instituciones con autorización definitiva, debe
ir acompañado de una correlativa obligación de rendir cuentas periódicamente de los
resultados alcanzados en el campo de la enseñanza y la investigación científica, a cuyo fin
se prevé la puesta en marcha de procedimientos de autoevaluación y evaluación externa, lo
mismo que la presentación de planes quinquenales de desarrollo que orienten su accionar y
faciliten esa evaluación.

Que la presente medida se dicta en uso de las atribuciones conferidas al PODER


EJECUTIVO NACIONAL por el Artículo 86º, inciso 2°), de la CONSTITUCION
NACIONAL.

Por ello;

EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:

CAPITULO I

De las facultades del Ministerio

Artículo 1°- Los trámites correspondientes a la creación, funcionamiento y fiscalización de


los establecimientos comprendidos en la Ley N° 17.604, se efectuarán por intermedio del
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION.

Artículo 2°- Delégase en el señor Ministro de Cultura y Educación todas las atribuciones
reservadas al PODÉR EJECUTIVO NACIONAL por la Ley N° 17.604, con excepción de
la establecida en el artículo 7° de la misma.

Artículo 3°- El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION tendrá a los fines


indicados en el artículo 1°, además de las facultades que se le delegan, las siguientes
atribuciones y deberes:

a) Entender en todo lo concerniente al otorgamiento de las autorizaciones provisionales y


definitivas, y a su retiro.

b) Ejercer la fiscalización permanente sobre dichos establecimientos con el objeto de


verificar si se cumplen todas y cada una de las condiciones bajo las cuales están
autorizados a funcionar.

c) Controlar el cumplimiento de las normas referentes a la utilización de las


denominaciones previstas en la ley.

d) Organizar un registro general de establecimientos universitarios privados y un legajo


especial para cada uno de ellos, con todos las antecedentes que se consideren
necesarios.

e) Preparar anualmente una memoria estadística y descriptiva relativa al estado de los


establecimientos sujetos al régimen de la Ley N° 17.604.
CAPITULO II

De la autorización de nuevas Universidades Privadas

Artículo 4°- La autorización provisional de Universidades Privadas será otorgada por


decreto del PODER EJECUTIVO NACIONAL sobre la base de la calidad y pertinencia de
la propuesta educativa contenida en el proyecto presentado mediante solicitud a tal efecto.

La autorización bajo la denominación de ''Universidad'' exigirá variedad de Facultades,


Escuelas, Institutos o Departamentos, orgánicamente estructurados. La creación y
funcionamiento de Facultades, Institutos, Departamentos u otro tipo de establecimientos
universitarios aislados, serán autorizados con criterio restrictivo, bajo la denominación de
''Institutos Universitarios''.

La autorización será concedida con expresa indicación de las carreras, grados y títulos que
se cursen u otorguen en el establecimiento correspondiente.

Artículo 5°- La solicitud de autorización provisional deberá presentarse de conformidad


con las formalidades que establezca el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, y
deberá contener la documentación necesaria para determinar el cumplimiento de los
requisitos establecidos por la Ley N° 17.604. Necesariamente la solicitud deberá integrarse
con:

a) Certificación de la personería jurídica de la entidad peticionante.

b) Acreditación de la personería del representante de la entidad peticionante.

c) Datos personales y antecedentes educativos, académicos y de investigación completos


de las personas integrantes de sus órganos de Gobierno, con indicación de los cargos
que desempeñan.

d) Inventario inicial y balance constitutivo, si lo hubiere, y balances posteriores, hasta el


ejercicio correspondiente a la fecha de presentación. Dichos balances deberán estar
certificados por Contador Público Nacional.

e) Compromiso formal de acreditar, en el caso de Universidades, un patrimonio propio de


PESOS UN MILLON ($ l.000.000) o más, con indicación detallada de su origen y
composición, y de PESOS TRESCIENTOS MIL ($ 300.000) o más, en el caso de
Institutos Universitarios.

f) Proyecto institucional que fundamente el programa de formación de unidades docentes,


de investigación, de extensión a la comunidad, de bienestar estudiantil, de
publicaciones, u otras si fueren pertinentes al proyecto.

g) Proyecto del estatuto académico, el cual deberá determinar los siguientes aspectos
mínimos: fines u objetivos generales; organización interna; forma de gobierno y
designación de autoridades; categorías de personal docente y de investigación;
categorías de alumnos, con exclusión de la de libres, y régimen económico financiero.

h) Plan de desarrollo para CINCO (5) años, derivado del proyecto institucional, en el que
se indicará la previsión con respecto a la expansión de la planta física y del
equipamiento, del personal docente y auxiliar, de la matricula estudiantil, de la apertura
de nuevos programas de docencia e investigación, y la previsión de los recursos
económicos necesarios para estos fines.

i) Las carreras ofrecidas inicialmente para las cuales se solicita autorización, incluyendo
en cada caso información tal como el título que otorgará, el plan de estudios, el numero
de vacantes, los requisitos de ingreso, el perfil profesional, las expectativas
ocupacionales y las incumbencias.

j) Programa de desarrollo de los recursos humanos que serán necesarios para cumplir con
el proyecto institucional, en particular el desarrollo del cuerpo de docentes e
investigadores, los mecanismos de ingreso, evaluación y perfeccionamiento y las
normas que regularán la carrera docente en el establecimiento.

k) Descripción documentada de las instalaciones disponibles para el establecimiento con el


propósito de acreditar la posibilidad del cumplimiento de sus fines, según el siguiente
detalle:

I. Habilitación de los edificios por los organismos pertinentes.


II. Bibliotecas actualizadas y especializadas conforme con las carreras
propuestas y salas de lectura.
III. Aulas que favorezcan por sus características el proceso de enseñanza-
aprendizaje.
IV. Laboratorios propios o cedidos por convenios con instituciones
reconocidas, por un período no menor de CINCO (5) años y que cumplan con
los requisitos reglamentarios.
V. Oficinas adecuadas para el desenvolvimiento académico y
administrativo.
VI. Sanatorios adecuados en cantidad y calidad.
VII. Servicios de información y comunicación.
VIII. Servicios informáticos para las áreas académica y administrativa.
IX. Equipamiento y material didáctico.

I) Plan financiero de ingresos y egresos con indicación de su origen y destino, con el


objeto de acreditar la posibilidad del desarrollo normal de las tareas del
establecimiento, de acuerdo con los planes de estudio propuestos para una
promoción completa de las carreras propuestas.

II ) Garantía a la orden del MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION por la suma


de PESOS SESENTA MIL ($ 60.000), la que podrá ser integrada en depósito
bancario, seguro de caución o títulos públicos. La misma se reintegrará al término
de la primera promoción de las carreras autorizadas si la resolución de la solicitud
es afirmativa y a los QUINCE (15) días si fuese negativa.

Artículo 6°- Las solicitudes de autorización provisional deberán presentarse con una
antelación no inferior a TRESCIENTOS SESENTA (360) días corridos de la fecha en la
cual se proyecta iniciar las actividades académicas.

Artículo 7°- En caso de no ajustarse la solicitud a los recaudos precedentemente indicados,


se notificará al peticionante dentro de los TREINTA (30) días hábiles de presentada la
solicitud, quien podrá subsanar la omisión o el defecto dentro del término perentorio de
TREINTA (30) días hábiles subsiguientes a dicha notificación. Vencido ese plazo sin que
se satisfagan los requisitos establecidos, quedará desechada la solicitud mediante resolución
del señor Ministro de Cultura y Educación. El pedido no podrá reiterarse antes de
transcurridos CIENTO OCHENTA (180) días corridos, a contar desde la fecha de la
notificación de la decisión denegatoria. En caso de una segunda denegación se dará por
desechado definitivamente el proyecto.

Artículo 8°- Presentada la solicitud con los requisitos indicados, el MINISTERIO DE


CULTURA Y EDUCACION verificará la exactitud de la información producida mediante
los procedimientos que considere adecuados y solicitará la opinión del CONSEJO DE
RECTORES DE LAS UNIVERSIDADES PRIVADAS, el cual deberá expedirse en un
plazo no mayor de SESENTA (60) días hábiles, que se podrá prorrogar por TREINTA (30)
días más ante un pedido debidamente justificado. Simultáneamente, el MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION efectuará la evaluación establecida en el artículo 2° de la Ley
N° 17.604 de acuerdo con las pautas de los artículos 4° y 5° del presente decreto, en un
plazo de NOVENTA (90) días. Finalizada dicha evaluación y obtenido el dictamen del
CONSEJO DE RECTORES DE LAS UNIVERSIDADES PRIVADAS, se requerirá la
opinión de la COMISION CONSULTIVA a la que alude el artículo 11º.

Artículo 9°- El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION correrá vista al


peticionante de la evaluación producida y de las observaciones, si las hubiere, para su
contestación en el término perentorio de TREINTA (30) días hábiles. Completados los
trámites previstos precedentemente, el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION los
elevará al PODER EJECUTIVO NACIONAL aconsejando la resolución que a su juicio
corresponda.

Artículo 10°- La institución que hubiere obtenido la autorización provisional no podrá


comenzar la matriculación de los artículos hasta tanto el MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION verifique el cumplimiento de todas las exigencias establecidas en el artículo
5° del presente decreto.

Artículo 11 °- A los efectos previstos en los artículos 8° y 19º, el MINISTERIO DE


CULTURA Y EDUCACION constituirá una COMISION CONSULTIVA, con la función
de asesorar a la SECRETARIA DE POLITICAS UNIVERSITARIAS en todo lo
concerniente al otorgamiento de autorizaciones provisionales y definitivas de
establecimientos universitarios privados.
Artículo 12°- Los miembros de la COMISION CONSULTIVA, desempeñarán sus
funciones a título personal, gozando de independencia de criterio; deberán tener
antecedentes destacados en actividades científicas, académicas o de dirección universitaria.
El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION reglamentará la forma de constitución y
funcionamiento de la COMISION CONSULTIVA.

CAPITULO III

De las Universidades con autorización provisional

Artículo 13°- Los establecimientos autorizados en forma provisional tendrán que indicar
esta circunstancia en todos sus anuncios, publicaciones y documentación, agregando debajo
o a continuación del nombre, la siguiente leyenda. ''Autorizada provisionalmente por
DECRETO del PODER EJECUTIVO NACIONAL N°......, conforme con lo establecido
en el artículo 7° de la Ley N° 17.604''. En caso de incumplimiento, el establecimiento se
hará pasible de las sanciones dispuestas en los artículos 37º, inciso f) y 38º del presente
decreto.

Artículo 14°- Dichos establecimientos no podrán ampliar el plan de desarrollo para los
primeros CINCO (5) años aludido en el artículo 5°, inciso h), hasta tanto no obtengan su
autorización definitiva. Las modificaciones parciales en los planes de estudio y en carreras
y grados ofrecidos, debidamente justificadas dentro del proyecto original aprobado,
requerirán de la autorización previa del MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION,
para lo cual los establecimientos deberán solicitarlo de acuerdo con las pautas y
procedimientos establecidos en los artículos 26º y 27º del presente decreto.

Artículo 15°- Los establecimientos universitarios con autorización provisional deberán


elevar un informe anual al MINISTERIO DE CULTURA y EDUCACION a los TRES (3)
meses de finalizado cada año lectivo, señalando los avances realizados y evaluándolos con
respecto al plan de desarrollo aprobado.

Dicho informe contendrá datos fehacientes sobre la evolución de la matrícula, del cuerpo
docente, de las instalaciones y del equipamiento, de las bibliotecas, del patrimonio y otros
elementos de juicio de acuerdo con las pautas que serán oportunamente elaboradas por el
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION.

Artículo 16°- El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION verificará la veracidad de


dicha información mediante los procedimientos que considere necesarios y estudiará su
adecuación a las condiciones en que fue otorgada la autorización provisional. En caso
necesario, dispondrá los correctivos que deberán adoptarse.

CAPITULO IV

De las Universidades con autorización definitiva

Artículo 17°- El pedido de autorización definitiva de los establecimientos podrá ser


presentado por éstos una vez transcurrido el lapso establecido en el artículo 8° de la Ley N°
17.604, el cual no podrá ser inferior a CINCO (5) años. Junto con la solicitud tendrán que
acompañarse los siguientes documentos:

a) Acreditación de la personería del representante.

b) Copia autenticada de la resolución del órgano competente del establecimiento


peticionante, por el cual decide solicitarse la autorización definitiva.

c) Datos personales y antecedentes educativos, académicos y de investigación completos


de las personas integrantes de los órganos de gobierno de la entidad peticionante, con
indicación de los cargos que desempeñan.

d) Indicación detallada y actualizada de la composición del patrimonio del


establecimiento, con determinación de su origen y fechas de adquisición y copia
autenticada por escribano público de los títulos de propiedad de los bienes registrables.

e) Nómina completa del personal directivo, docente, técnico y administrativo del


establecimiento con indicación de título, antecedentes, cargos, dedicación y
remuneración.
f) Copias autenticadas del estatuto académico y de las reglamentaciones internas.

g) Presupuesto financiero con indicación de origen y destino de los recursos; que acredite
la posibilidad del normal desarrollo de las actividades docentes y de investigación del
establecimiento.

h) Memoria general del establecimiento en la que conste su evolución desde la fundación;


los resultados obtenidos; la actividad docente y de investigación desarrollada; las
instalaciones según el detalle establecido en el inciso k) del artículo 5° del presente
decreto, y estadísticas generales con especial indicación de la evolución de la matrícula,
del número de alumnos aprobados y reprobados y del número de graduados y
desertores, con discriminación por año académico, facultades, escuelas, carreras y
títulos.
Asimismo deberán acreditar relaciones institucionales con universidades e instituciones
académicas nacionales y del extranjero.

i) Copia de los informes anuales indicados en el artículo 15º, presentados desde su


autorización provisional.

j) Los resultados de una autoevaluación institucional realizada dentro del año anterior a la
presentación de la solicitud de autorización definitiva.

k) Un proyecto de desarrollo institucional para los CINCO (5) años siguientes, en el que se
detallará, entre otros, los cambios que serán introducidos en las unidades docentes o de
investigación y la apertura o cierre de programas previstos para ese período.

Artículo 18°- Efectuada la presentación de la solicitud de autorización definitiva, esta se


sustanciará de acuerdo con el procedimiento y dentro de los plazos establecidos en los
artículos 7°, 8° y 9° del presente decreto. Al expediente se le incorporarán los informes
anuales producidos por el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION durante sus
inspecciones y los informes técnicos del CONSEJO DE RECTORES DE LAS
UNIVERSIDADES PRIVADAS si los hubiere.

Antes de dictar la resolución que corresponda, el señor Ministro de Cultura y Educación


dispondrá la realización de una evaluación del establecimiento peticionante por un Comité
que designará al efecto, integrado por TRES (3 ) miembros, con antecedentes destacados en
actividades científicas, académicas o en la organización y planeamiento universitario. Uno
de ellos será propuesto por el CONSEJO DE RECTORES DE LAS UNIVERSIDADES
PRIVADAS. Dicho Comité podrá hacerse asesorar para el cumplimiento de su cometido
por los especialistas que considere necesarios en relación con las áreas de estudio del
establecimiento evaluado. De la evaluación producida, que será efectuada conforme con los
criterios establecidos por el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION en consulta
con el CONSEJO DE RECTORES DE LAS UNIVERSIDADES PRIVADAS, se dará vista
al peticionante en la forma y término del artículo 9° del presente decreto y a los efectos allí
establecidos.

Artículo 19°- Completados los trámites previstos precedentemente, la SECRETARIA DE


POLITICAS UNIVERSITARIAS requerirá la opinión de la COMISION CONSULTIVA y
elevará las actuaciones con la recomendación que estime corresponder al señor Ministro de
Cultura y Educación para la resolución definitiva.

Artículo 20°- Las Universidades con autorización definitiva deberán presentar cada
CINCO (5) años al MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION un informe de
actividades detallado, respecto de la evolución de la matrícula estudiantil, del número de
ingresantes por año y la distribución anual para todas sus carreras, el numero de egresados
y los resultados de las Pruebas Finales de Capacidad Profesional cuando ello sea pertinente,
la composición del cuerpo docente con información actualizada sobre sus antecedentes y
producción académica, el estado de las instalaciones, del equipamiento y de las bibliotecas,
el desarrollo de los recursos financieros y de la situación patrimonial y la adecuación al
proyecto institucional de los cambios introducidos en las unidades y programas de docencia
e investigación durante el quinquenio anterior. Dicho informe será acompañado de una
autoevaluación institucional y de un nuevo proyecto de desarrollo para los CINCO (5) años
siguientes.

Artículo 21°- El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION dispondrá la realización


de una evaluación externa del establecimiento siguiendo el procedimiento establecido en el
artículo 18º. Con base en los antecedentes precitados el MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION producirá un informe final, con las recomendaciones que considere
necesarias, que comunicará al establecimiento universitario.

Artículo 22°- El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION podrá ordenar la


fiscalización de un establecimiento universitario con autorización definitiva fuera del plazo
establecido en el artículo 20º, por resolución fundada, cuando graves razones lo justifiquen
para lo cual solicitará al establecimiento que prepare el informe al que hace referencia
dicho artículo dentro de un plazo de TRES (3) meses. El procedimiento de fiscalización
seguirá en estos casos los mismos pasos indicados en los artículos anteriores.

CAPITULO V

De las modificaciones y reformas

Artículo 23°- La reforma del Estatuto Académico de los establecimientos autorizados


provisional o definitivamente, sujetos a Pruebas Finales de Capacidad Profesional,
requerirá aprobación del MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION. Presentado el
proyecto de reforma el MINISTERIO correrá vista al peticionante de las observaciones, si
las hubiere, para su contestación dentro de los VEINTE (20) días corridos perentorios. Con
su resultado el señor Ministro de Cultura y Educación dictará la correspondiente resolución
aprobatoria o denegatoria, dentro de los TREINTA (30) días hábiles. Las universidades
liberadas de la Prueba Final de Capacidad Profesional deberán comunicar al MINISTERIO
DE CULTURA Y EDUCACION las modificaciones introducidas a sus estatutos, con copia
de las mismas.

Artículo 24°- Los establecimientos universitarios privados comunicarán al MINISTERIO


DE CULTURA Y EDUCACION todas las modificaciones en la composición de su plantel
de autoridades, dentro de los TREINTA (30) días hábiles de haberse producido.

Artículo 25°- Los establecimientos universitarios autorizados deben concentrar sus


actividades en la jurisdicción territorial para la cual solicitaron la autorización.
Excepcionalmente, cuando fundadas razones así lo justifiquen, podrá permitirse a los
establecimientos que cuenten con autorización definitiva crear sedes o unidades académicas
equivalentes fuera de la jurisdicción que les es propia, a cuyo efecto se aplicará el
procedimiento previsto en el artículo 27º del presente decreto.

Artículo 26°- Las modificaciones a los planes de estudio producidas por los
establecimientos con autorización provisional o definitiva sujetas a Pruebas Finales de
Capacidad Profesional, requerirán la aprobación previa del MINISTERIO DE CULTURA
Y EDUCACION. La presentación deberá acompañarse de una exposición de motivos,
CIENTO VEINTE (120) días antes de la fecha prevista por el establecimiento, para que
entren en vigencia. Si a los NOVENTA (90) días de la presentación, las modificaciones no
fueren observadas por el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, la entidad podrá
hacer regir el plan modificado. Si hubiere observaciones que efectuar, el MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION, antes del plazo señalado, correrá vista al peticionante para
que las conteste dentro de los QUINCE (15) días corridos desde su notificación. Con su
resultado, el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION dictará la resolución
respectiva en un término de TREINTA (30) días hábiles desde el vencimiento de la vista
conferida. Los establecimientos liberados de las Pruebas Finales de Capacidad Profesional
sólo deberán comunicar al MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION las
modificaciones que introduzcan a sus planes de estudio, con copia de las mismas, antes de
aplicarlas.
Artículo 27°- A los efectos de lo establecido en el artículo 2° de la Ley N° 17.604, los
establecimientos universitarios privados con autorización definitiva sujetos a Pruebas
Finales de Capacidad Profesional deberán solicitar autorización al MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION para la creación de nuevas facultades, escuelas, institutos,
departamentos, carreras, grados o títulos. Las anexiones, incorporaciones y desanexiones
serán consideradas como creaciones. El pedido deberá presentarse CIENTO OCHENTA
(180) días antes de la fecha en que deban comenzar las actividades, y tendrá que estar
acompañado por la correspondiente exposición de motivos y por el proyecto de presupuesto
de ingresos y gastos, conforme con las pautas señaladas en el artículo 5° del presente
decreto. EL MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION recabará la opinión del
CONSEJO DE RECTORES DE LAS UNIVERSIDADES PRIVADAS, el cual deberá
expedirse en el término de TREINTA (30) días hábiles y dispondrá la correspondiente
intervención por parte de los órganos técnicos pertinentes, quienes se expedirán dentro de
los TREINTA (30) días hábiles subsiguientes. De tales dictámenes se dará vista al
peticionante, por el término de QUNCE (15) días hábiles perentorios, para que formule las
observaciones que considere adecuadas. Con su resultado el señor Ministro de Cultura y
Educación dictará la resolución correspondiente.

Artículo 28°- Las Universidades Privadas con autorización definitiva que hubieren sido
liberadas de las Pruebas Finales de Capacidad Profesional deberán comunicar al
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION la creación de nuevas facultades, escuelas,
institutos, departamentos, carreras, grados o títulos, acompañando copia de todos los
antecedentes que hagan a la creación. Sin perjuicio de ello deberán dar cumplimiento a lo
previsto en los incisos 10) y 11) del artículo 21º de la Ley de Ministerios (t.o.1992) antes de
comenzar las actividades académicas respectivas.

CAPITULO VI

De las habilitaciones de títulos académicos, reconocimiento de estudios, equivalencias y


condiciones de ingreso

Artículo 29°- La habilitación de los títulos académicos expedidos por establecimientos


universitarios privados con autorización provisional o definitiva sujetos a Pruebas Finales
de Capacidad Profesional, a los efectos del artículo 4°, inciso c) de la Ley N° 17.604, será
extendida por el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, previa verificación de la
aprobación de las materias del plan de estudios correspondiente y del cumplimiento de los
requisitos legales, estatutarios y reglamentarios. El trámite será efectuado por intermedio
del establecimiento respectivo, el cual acompañará en cada caso un certificado en el que
conste la totalidad de las calificaciones y de las pruebas rendidas por el interesado, con
indicación de las fechas de estas últimas. Dicho certificado se archivará en el MINISTERIO
DE CULTURA Y EDUCACION. Cuando los títulos otorgados correspondan a profesiones
cuyo ejercicio se encuentre reglamentado y que a su juicio del MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION requieran una Prueba Final de Capacidad Profesional, esta se
ajustará a las siguientes normas:

a) La prueba consistirá en una demostración práctica de la aptitud del egresado para el


ejercicio de la profesión de que se trate. Dicha prueba no implicará un examen general
de las asignaturas cursadas, ni tendrá por objeto un tema de especialización. Su
propósito tiende a comprobar la posesión por parte del egresado de los criterios
adecuados para establecer razonablemente los términos básicos de un caso profesional
concreto y la determinación del método correcto para su análisis y solución.

b) La Prueba Final de Capacidad Profesional será recibida por un tribunal integrado por
TRES (3) miembros, seleccionadas entre profesores universitarios y profesionales de la
especialidad de que se trate, que designará en cada caso el MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION. Uno de ellos representará al Estado Nacional, y será
elegido entre funcionarios o magistrados estatales con grado universitario, profesores o
ex profesares universitarios, o miembros de academias nacionales. Las otros DOS (2)
representarán al colegio o asociación profesional que corresponda y al establecimiento
privado a que pertenezca el egresado que se somete a la prueba, respectivamente. Los
miembros serán elegidos de una terna que a tal efecto presentarán al MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION dichas instituciones. En caso de que las Instituciones
precedentemente mencionadas no propongan ternas en un tiempo prudencial, una vez
que sean invitadas a hacerlo, el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION
efectuará la designación en forma directa.

Los TRES (3) miembros del tribunal deberán estar legalmente habilitados para el
ejercicio de la profesión correspondiente a la materia de la prueba.

Cuando el título otorgado por el establecimiento corresponda a carreras cuyo contenido


abarque más de una disciplina profesional, el tribunal podrá ser integrado con
representantes de aquellos consejos o asociaciones profesionales vinculados con la
orientación y posible área de acción sobre la cual tengan incidencia las incumbencias
asignadas al título. Será presidido en todos los casos por el representante del Estado
Nacional, y cuando el numero de sus integrantes no permita adoptar criterios en
mayoría prevalecerá el criterio del presidente del tribunal.

c) Las Pruebas Finales de Capacidad Profesional serán públicas y se rendirán en la


respectiva facultad, escuela o instituto del establecimiento peticionante. Durante el
curso del año calendario, habrá por lo menas TRES (3) llamados en las fechas que fije
el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, de acuerdo con el establecimiento
que corresponda.
Los casos prácticos a que hace referencia el inciso a) del presente artículo, serán
establecidos por el Tribunal, debiendo responder a un temario general, que anualmente
propondrá cada establecimiento dentro de los últimos SESENTA (60) días de cada año,
para las pruebas a rendirse en el año siguiente, al MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION, quien los aprobará o rechazará por resolución fundada, dentro de los
TREINTA (30) días corridos inmediatos a su presentación.

De no presentarse en dicho término, se tendrá por establecido el fijado para el año


inmediato anterior, si lo hubiere, y en caso contrario lo fijará de oficio el MINISTERIO
DE CULTURA Y EDUCACION.
d) Si el egresado fuera reprobado la primera vez, podrá repetir la prueba final transcurridos
SEIS (6) meses. Si fuera reprobado nuevamente, en lo sucesivo deberá esperar cada vez
UN (1) año para requerir la constitución de otro tribunal.

e) EL MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION verificará que los casos prácticos


se ajusten al temario general y a las características descriptas en el inciso a) del presente
artículo.

f) El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION determinará el procedimiento a


seguir por el tribunal, para la recepción de la Prueba Final de Capacidad Profesional.

Artículo 30°- EL MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACIÓN, podrá conceder la


supresión de la Prueba Final de Capacidad Profesional a los establecimientos autorizados
definitivamente. Para ello deberán contar con un mínimo de DIEZ (10) años de
funcionamiento a partir de su autorización definitiva y poseer nivel académico y docente
debidamente comprobado.

Artículo 31°- Los establecimientos privados con autorización definitiva que hubieren sido
liberados de la Prueba Final de Capacidad Profesional, podrán expedir los diplomas de sus
egresados sin intervención previa del MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION,
dando cuenta al mismo de los diplomas que se expidan con los datos de los egresados,
dentro de los TREINTA (30) días otorgados. Tendrán como único requisito para su validez
la autenticación por parte del MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION de las firmas
de las autoridades que los expidan.

Artículo 32°- A los efectos establecidos en el artículo 11º de la Ley N° 17.604, cada
establecimiento designará un funcionario responsable, el que acreditará la veracidad y
autenticidad del contenido y firma de los certificados donde consten las calificaciones y
pruebas rendidas por el interesado en dicho establecimiento. Ningún establecimiento
educativo podrá admitir la validez de materias, seminarios o trabajos prácticos aprobados
en establecimientos universitarios privados, sin la presentación del certificado antedicho
debidamente legalizado por el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, a cuyo
efecto el funcionario responsable acreditará su carácter y registrará su firma ante el
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION.

Artículo 33°- El reconocimiento de estudios aprobados en Universidades del extranjero,


excepto los casos regidos por leyes especiales, no pondrá exceder del SETENTA POR
CIENTO (70%) de las asignaturas y trabajos que integren el plan de estudio respectivo,
vigente en el establecimiento que efectúe el reconocimiento. Este podrá realizarse por
niveles de conocimiento o de madurez o por materias o trabajos en particular, previo
análisis de la correspondencia existente y mediante resolución expresa para cada caso. De
ello deberá dejarse constancia en los certificados de estudios que se extiendan.

Artículo 34°- Los establecimientos universitarios privados no podrán otorgar otras


equivalencias fuera de las expresamente establecidas en las normas legales vigentes, en el
presente decreto, o las que en el futuro se autoricen por el MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION.
Artículo 35°- El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION establecerá las
condiciones que deberán reunir los estudios de cualquier modalidad previstos por la Ley N°
24.195 y requeridos por la Ley N° 17.604 para el ingreso a los establecimientos
universitarios privados.

CAPITULO VII

Del Consejo de Rectores de las Universidades Privadas

Artículo 36°- EL CONSEJO DE RECTORES DE LAS UNIVERSIDADES PRIVADAS a


que se refiere el artículo 17º de la Ley N° 17.604 estará integrado por los rectores de los
establecimientos autorizados. Dicho Consejo dictará su propio estatuto sin más exigencias
que las siguientes:

a) Ejercer la representación conjunta de los establecimientos autorizados.

b) Adoptar sus resoluciones por mayoría simple. Cada rector tendrá UN (1) solo voto,
pudiendo votar por sí y por representación.

c) Emitir opinión en todos los casos previstos en este decreto. En los supuestos de los
artículos 8° y 18º sólo votarán los establecimientos con autorización definitiva, y en el
del artículo 40º deberá abstenerse el rector del establecimiento cuestionado.

d) Asesorar a los establecimientos que representa y procurar la coordinación de sus


actividades docentes, culturales y de investigación y la correlación de sus estudios y de
los títulos que expidan.

e) Poseer una Secretaría Ejecutiva de carácter permanente.

CAPITULO VIII

De la fiscalización

Artículo 37°- A los efectos de permitir el ejercicio de las facultades de evaluación y


fiscalización determinadas por la Ley N° 17.604 para las universidades autorizadas, el
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION podrá disponer las medidas que considere
adecuadas y en particular de las siguientes:
a) Examinar los libros, registros y documentación relacionados con la actividad
académica, administrativa y financiera de los establecimientos autorizados. Los libros
de actas de sesiones de los órganos de gobierno del establecimiento y los de actas de
exámenes, deberán ser rubricados y foliados por el órgano competente del
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION.

b) Efectuar el contralor financiero contable de la contribución económica otorgada por el


Estado Nacional.
c) Disponer inspecciones en los establecimientos cuando observare o tuviere conocimiento
de irregularidades, de actos violatorios de las leyes, decretos, y estatutos que los rigen o
cuando fuere necesario para el cumplimiento de los deberes conferidos al
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, por la Ley N° 17.604 y por el presente
decreto.

d) Disponer la intervención por tiempo determinado de los establecimientos en los casos


de alteración grave del orden público; subversión contra los poderes del Estado o
conflictos internos que atenten ostensiblemente contra la actividad académica.
Concluido el término de la intervención se repondrán las autoridades estatutarias o se
dispondrá la elección de éstas de acuerdo con las normas del Estatuto vigente, salvo que
se haga necesaria la aplicación de la sanción establecida en el artículo 38º, inciso d) del
presente decreto.

e) Requerir la colaboración de las autoridades competentes.

f) Prohibir la circulación y secuestrar las publicaciones cuyo texto no se ajuste a las


normas de los artículo 7° y 18º de la Ley N° 17.604.

g) Expedir certificaciones y testimonios en las actuaciones en las cuales intervenga, y


determinar las condiciones formales de los certificados y diplomas.

Artículo 38°- Los establecimientos autorizados que no den cumplimiento a las


obligaciones impuestas por la Ley N° 17.604, el presente decreto reglamentario o los
estatutos respectivos, estarán sujetos a las siguientes sanciones:

a) llamado de atención;

b) apercibimiento;

c) intimación al establecimiento para que suspenda sus actividades;

d) clausura definitiva, total o parcial.

Artículo 39°- Constatada la violación por el MINISTERIO DE CULTURA Y


EDUCACION, se advertirá por acta de infracción dicha circunstancia y se determina un
plazo a rinde que el establecimiento modifique, corrija o subsane las circunstancias legales
o de hecho que contraríen el orden legal o académico, sin perjuicio de aplicarse un llamado
de atención, si el caso así lo justifica. Vencido el término, sin que el establecimiento haya
dado cumplimiento a las observaciones efectuadas, se procederá a apercibirlo y a ordenarle
que subsane la irregularidad dentro del lapso que se determine, pudiendo asimismo el
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION intimar al establecimiento que suspenda
sus actividades total o parcialmente, hasta tanto se cumplimente lo dispuesto.
Una vez subsanado el vicio, el establecimiento podrá, dentro de los CINCO (5) días hábiles
subsiguientes, recurrir de la medida dispuesta. Si se tratare de circunstancias de hecho, se
abrirá a prueba, por un término de QUINCE (15) días hábiles, vencido el cual o producida
la prueba ofrecida, el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION dictará la resolución
correspondiente. El establecimiento deberá publicar en lugares visibles, el trámite seguido y
la sanción aplicada.

Artículo 40°- Sin perjuicio de lo señalado en el artículo anterior, el MINISTERIO DE


CULTURA Y EDUCACION podrá disponer la clausura definitiva, total o parcial del
establecimiento, cuando este no cumpla con los fines para los cuales fue creado, o haya
incurrido en transgresiones a las leyes, reglamentaciones o estatutos que afecten
gravemente las bases de su organización o los intereses públicos, o cuando sus antecedentes
justifiquen la presente medida.
De la imputación respectiva se notificará al representante legal del establecimiento, a fin de
que formule su descargo dentro del plazo de QUINCE (15) días corridos. Si se tratara de
circunstancias de hecho, se abrirá a prueba por un término de QUINCE (15) días hábiles,
vencido el cual o producida la prueba ofrecida se correrá vista de las actuaciones al
CONSEJO DE RECTORES DE LAS UNIVERSIDADES PRIVADAS, a fin de que emita
opinión en el término de QUINCE (15) días hábiles. Transcurrido este lapso, con dicha
opinión o sin ella, se tomará la resolución que corresponda.

Artículo 41°- El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION actuará como órgano de


aplicación a los efectos de comprobar las violaciones a la prohibición establecida en el
artículo 18º de la Ley N° 17.604 y dictará las sanciones que correspondan de acuerdo con
lo previsto en dicha norma legal, siguiendo el procedimiento que a esos efectos determine,
sin perjuicio de las responsabilidades penales que pudieran existir y de lo dispuesto en el
artículo 37º, inciso f) del presente decreto. En tal sentido determinará las denominaciones,
diplomas, títulos y grados que deban reservarse para distinguir instituciones, actividades,
competencias o profesiones de carácter universitario.

CAPITULO IX

De las tasas de servicios y contribuciones económicas

Artículo 42°- A los fines de la realización de los trámites que se indican a continuación, las
instituciones privadas deberán abonar las siguientes tasas:

a) Solicitud de autorización provisional y definitiva: PESOS DIEZ MIL ($10.000).

b) Solicitud de autorización para la creación de una nueva sede, facultad, escuela, instituto,
departamento, carrera; grado y título: PESOS DOS MIL ($2.000).

c) Tramitación de informe quinquenal: PESOS CINCO MIL ($5.000).

d) Solicitud de modificación de planes de estudio: PESOS UN MIL ($1.000).

Se faculta al MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION a modificar los


montos indicados precedentemente.
Las tasas se abonarán mediante depósito bancario efectuado en una cuenta que
deberá habilitar al efecto el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION.
Artículo 43°- Para el otorgamiento de la contribución económica a que se refiere el artículo
16º de la Ley N° 17.604, los establecimientos interesados deberán presentar por intermedio
del CONSEJO DE RECTORES DE LAS UNIVERSIDADES PRIVADAS sus solicitudes
con anterioridad al 31 de julio de cada año, con vistas al ejercicio fiscal que comienza el 1°
de enero del año siguiente. Tales pedidos tendrán que ajustarse a los siguientes recaudos:

a) Configurar un proyecto concreto, elaborado de acuerdo con las normas de presentación


de proyectos que elaborará el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION. Se
entenderá por proyecto toda propuesta que incluya un objetivo docente o de
investigación claramente dentado, ya sea temporario o permanente; la descripción
pormenorizada de la metodología, las etapas y los medios (personal, edificios, equipos,
etc.) y que se consideren necesarios para la consecución de la finalidad perseguida, y la
estimación detallada de los costos parciales y totales.

b) Incluir en el proyecto UN (1) director que tenga carácter de profesor o investigador


universitario con dedicación suficiente y antecedentes científicos y académicos
adecuados. La función de director podrá coincidir con un cargo directivo académico o
de investigación del establecimiento peticionante cuando el proyecto involucre la
totalidad de una facultad, escuela, departamento o instituto y siempre que se satisfagan
los recaudos precedentemente establecidos.

c) Proponer para la ejecución del proyecto el personal docente o de investigación con el


nivel científico y académico y la dedicación indispensable para la viabilidad de la
iniciativa.

d) El proyecto deberá coincidir con el interés nacional conforme con las pautas señaladas
en el artículo 2° de la Ley N° 17.604, teniendo particularmente en cuenta el carácter
estratégico o de formación humanística de las carreras e investigaciones propuestas y
las necesidades regionales.

Artículo 44°- A los efectos de analizar las solicitudes presentadas por los establecimientos
universitarios privados, el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION requerirá la
opinión del CONSEJO DE RECTORES DE LAS UNIVERSIDADES PRIVADAS, ante
quien deberán presentarse antes del 31 de mayo de cada año. Dicho cuerpo dictaminará
acerca de ellas elevando al MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION antes del 31 de
julio de cada año, una recomendación final que incluirá una lista con orden de prioridades.
Formulará igualmente todas las observaciones que considere convenientes y, en caso de
disidencia, indicará las diferentes recomendaciones o listas de prioridades. Una vez en
posesión de dicho dictamen, el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION designará
una comisión asesora para la formulación de una recomendación fundada y la elaboración
de una lista de prioridades.
Esta comisión estará integrada por los representantes que designe el MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION y DOS (2) y o más expertos con antecedentes destacados en
la actividad científica, académica o en planeamiento y organización universitaria.
El señor Ministro de Cultura y Educación propondrá al PODER EJECUTIVO NACIONAL
el monto y la distribución del aporte económico estatal que considere adecuado dentro del
PRESUPUESTO GENERAL DE GASTOS del MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION.
La contribución del Estado podrá financiar total o parcialmente un proyecto, debiendo
indicarse en este último caso los rubros que se cubrirán. Al adoptarse estas decisiones se
tendrá en cuenta el plazo fijado para la ejecución del proyecto, pudiendo establecerse un
lapso para la contribución económica estatal.

Artículo 45°- Para efectivizar la contribución económica acordada el MINISTERIO DE


CULTURA Y EDUCACION abrirá una cuenta bancaria por cada proyecto a la orden del
Rector del establecimiento o la persona que este indique, depositándose en ella los fondos
concedidos de acuerdo con los requerimientos y plazos para su ejecución. El 30 de junio y
el 31 de diciembre de cada año el establecimiento que reciba el aporte dará cuenta al
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION de su utilización y del progreso del
proyecto subsidiado, sin perjuicio de lo establecido en los artículos 3° y 37º del presente
decreto.

CAPITULO X

Disposiciones transitorias

Artículo 46°- Las Universidades con autorización definitiva y eximidas de las Pruebas
Finales de Capacidad Profesional deberán adecuar su infraestructura e instalaciones a las
exigencias establecidas en el presente decreto, en el término de CINCO (5) años.

Artículo 47°- Las Universidades Privadas con autorización definitiva otorgada con
anterioridad a la vigencia de este decreto deberán presentar el informe al que hace
referencia el artículo 20º dentro del plazo de UN (l) año a partir de la publicación del
presente decreto.

Artículo 48°- Las Universidades Privadas con autorización provisional otorgada con
anterioridad a la vigencia de este decreto deberán presentar el plan de desarrollo a que hace
referencia el artículo 5°, inciso h), junto con el primer informe anual al que se refiere el
artículo 15º del presente decreto.

Artículo 49°- El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION dispondrá de un plazo de


TRES (3) meses a partir de la publicación del presente decreto para elaborar las pautas de
solicitud para obtener autorización provisional o definitiva y para la creación de nuevas
sedes, facultades, escuelas, institutos, departamentos, carreras, grados o títulos. Las
instituciones que hubieren presentado solicitudes de autorización provisional o definitiva
deberán ajustar las mismas a dichas pautas y a las disposiciones del presente decreto.

Artículo 50°- Deróganse los Decretos Nros. 8.472 del 31 de diciembre de 1969; 1.868 del
7 de abril de 1972; 197 del 16 de enero de 1976; 451 del 5 de julio de 1973; 2.971 del 16 de
abril de 1973 y toda otra norma que se oponga al presente.

Artículo 51°- Comuníquese, publíquese, dese a la DIRECCION NACIONAL DEL


REGISTRO OFICIAL y archívese.
MENEM - Jorge A. Rodríguez - Domingo F. Cavallo
DECRETO N° 2.427/93

Fíjanse incentivos al personal docente que participe en proyectos de investigación

Buenos Aires, 19/11/93.

VISTO que resulta necesario promover el desarrollo integrado de la carrera académica en


las Universidades Nacionales, y

CONSIDERANDO:

Que esa promoción debe darse en el marco de un enroque integrado de la carrera


académica, docencia, investigación, extensión y gestión.

Que de una planta global de docentes del sistema de Universidades Nacionales del orden de
los CIEN MIL (100.000) cargos, menos del QUINCE POR CIENTO (15%) participa en
actividades de investigación científica y tecnológica.

Que el desarrollo científico y tecnológico constituyen una condición necesaria para transitar
por un sendero de crecimiento económico y justicia social.

Que en el marco del paradigma científico-tecnológico dominante a escala mundial, basado


en la microelectrónica, la biotecnología y los nuevos materiales, las Universidades son
destacadas protagonistas en la investigación científica y en el desarrollo de nuevas
tecnologías de productos y procesos.

Que en el campo de las Ciencias Sociales las Universidades concentran la mayor capacidad
instalada de recursos humanos para desarrollar tareas analíticas tendientes al diagnóstico e
interpretación de los fenómenos sociales.

Que la creación de un incentivo a los docentes de las Universidades Nacionales que


participen en proyectos de investigación contribuirá en forma simultánea a aumentar las
tareas de investigación y desarrollo a nivel nacional, fomentar la reconversión de la planta
docente, motivando una mayor dedicación a la actividad universitaria y a la creación de
grupos de investigación.

Que es necesaria la constitución de grupos de investigación en las Universidades más


jóvenes, para lo cual es conveniente impulsar el desarrollo de proyectos de investigación
interuniversitarios con participación de docentes de distintas Universidades Nacionales.

Que el incentivo significará una mejora en los ingresos de los docentes universitarios
durante el período en que participen en proyectos de investigación.

Que esta iniciativa a su vez se inscribe en un enfoque de asignación de recursos a las


Universidades en función de programas específicos basados en criterios objetivos que
favorezcan el rendimiento del trabajo académico.
Que los fondos necesarios para atender el costo de programa han sido previstos en el
proyecto de Ley de Presupuesto de la Administración Pública Nacional para 1994, en
jurisdicción del MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, función Ciencia y
Técnica, a distribuir a las Universidades Nacionales.

Que la COMISION TECNICA ASESORA DE POLITICA SALARIAL DEL SECTOR


PUBLICO ha intervenido y se ha manifestado favorablemente.

Que en consecuencia corresponde dictar el acto que autorice al MINISTERIO DE


CULTURA Y EDUCACION para que a través de la SECRETARÍA DE POLITICAS
UNIVERSITARIAS efectivice la propuesta, fijando al efecto la modalidad con que se
operará para la adjudicación del incentivo.

Que la presente medida encuadra en las facultades conferidas por el artículo 86, inciso lº ),
de la Constitución Nacional.

Por ello,

EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:

Artículo 1°- Establécese, a partir del ejercicio presupuestado 1994, un incentivo al personal
docente de las Universidades Nacionales, que lo soliciten y participen en proyectos de
investigación y cumplan funciones docentes en los términos, condiciones y normativas
definidos en el Anexo I.

Artículo 2°- El incentivo será otorgado por las Universidades Nacionales con cargo a la
partida presupuestaria que la Ley de Presupuesto de la Administración Pública Nacional de
cada año especifique en jurisdicción del MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION,
función Ciencia y Técnica, a distribuir.

Artículo 3°- El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, a través de la


SECRETARÍA DE POLITICAS UNIVERSITARIAS, calculará y determinará el valor
índice del incentivo correspondiente a cada año, con base en el crédito presupuestario
especificado anualmente en la Ley de Presupuesto, el numero de docentes participantes, su
categoría, dedicación y lapso de duración de los proyectos de investigación que figuren en
las solicitudes que presenten las Universidades Nacionales de acuerdo a las normas sobre
los incentivos que se indican en el ANEXO II y los procedimientos especificados en el
Anexo III del presente decreto.

Artículo 4°- Autorízase a la SECRETARÍA DE POLITICAS UNIVERSITARIAS del


MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION a emitir las resoluciones aclaratorias
necesarias para la efectivización de lo dispuesto en el presente decreto.

Artículo 5°- La SECRETARÍA DE POLITICAS UNIVERSITARIAS, determinará, por


única vez, y para el ejercicio 1994, un valor tope del índice del incentivo, definido en el
artículo 3° del presente decreto, antes del 30 de noviembre de 1993, previa intervención de
la SECRETARÍA DE HACIENDA DEL MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y
SERVICIOS PUBLICOS.

Artículo 6°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional de Registro Oficial y


archívese

MENEM - Jorge A. Rodríguez - Domingo F. Cavallo


DECRETO N° 2.568/93

Apruébase la estructura organizativa del MINISTERIO DE CULTURA Y


EDUCACION

Buenos Aires, 14/12/93

VISTO la Ley de Ministerios (t.o. 1992), las Leyes Nros. 24.049 y 24.195, el Decreto N°
506 del 24 de marzo de 1993, lo propuesto por el MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION, y

CONSIDERANDO:

Que por la norma citada en segundo término se transfirieron a las provincias y a la


MUNICIPALIDAD DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES, los servicios educativos
administrados en forma directa por el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, así
como también las facultades y funciones sobre los establecimientos privados reconocidos.

Que por la Ley N° 24.195, el gobierno y administración del sistema educativo es una
responsabilidad concurrente y concertada del PODER EJECUTIVO NACIONAL, de los
Poderes Ejecutivos de las Provincias y de la MUNICIPALIDAD DE LA CIUDAD DE
BUENOS AIRES.

Que por el Decreto N°506/93 se aprobó la organización provisoria del citado Departamento
de Estado, estableciéndose un plazo para que este eleve el proyecto de estructura
organizativa de su jurisdicción.

Que es necesario reestructurar organizativamente al MINISTERIO DE CULTURA Y


EDUCACION, como consecuencia de los profundos cambios acaecidos en el sistema
educativo.

Que, dado que aún no ha finalizado el proceso de transferencia de los servicios educativos a
los que hace mención la Ley N° 24.049, resulta necesario prever, en el ámbito de la
SECRETARIA TECNICA Y DE COORDINACION OPERATIVA, que funciona en
jurisdicción del citado Ministerio, una Unidad de Administración y Gestión de Servicios
No Transferidos encargada de realizar transitoriamente todas aquellas actividades
relacionadas con la gestión de dichos servicios.

Que en virtud de lo dispuesto por las Leyes Nros. 24.049 y 24.195, el MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION no administrará en forma directa servicios educativos, por lo
que no cabe prever cargos contemplados en la Ley N° 14.473 -ESTATUTO DEL
DOCENTE-, sus decretos reglamentarios y/o complementarios, con excepción de los
asignados a la unidad a la que se refiere el párrafo precedente y los correspondientes a
aquellos agentes que en el lapso de DOCE (12) meses se encuentren en condiciones de
acogerse al beneficio jubilatorio.
Que se estima pertinente prever ajustes como consecuencia de la puesta en marcha de una
reestructuración de la magnitud de la presente.

Que resulta conveniente ubicar organizativamente en la SECRETARIA DE CULTURA a


la COMISION NACIONAL DE LA MANZANA DE LAS LUCES, a la BANDA
SINFONICA DE CIEGOS y al CORO POLIFONICO DE CIEGOS, ya que sus funciones
específicas se relacionan estrechamente con los objetivos y acciones asignados a dicha
Secretaría.

Que la igualdad de oportunidades para el acceso a la educación constituye una meta de


cumplimiento ineludible, exigido además por la Ley Federal de Educación.

Que, en tal sentido, resulta conveniente que en su nuevo rol, el MINISTERIO DE


CULTURA Y EDUCACION tenga a su cargo las competencias que en la materia eran
cumplidas hasta ahora por el INSTITUTO NACIONAL DE CREDITO EDUCATIVO
PARA LA IGUALDAD DE OPORTUNIDADES.

Que resulta necesario, dado el actual proceso de transformación en el que se encuentra


inmerso el sistema educativo en su conjunto, exceptuar al MINISTERIO DE CULTURAY
EDUCACION de las limitaciones previstas por los artículos 12º del capítulo II y 16º del
Capítulo III del Decreto N° 1.669/93.

Que a los efectos de la consecución de los objetivos expuestos, corresponde autorizar al


MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION a la cobertura transitoria de las vacantes
originadas por la reorganización en cuestión hasta tanto se efectúen las selecciones
previstas por las normas en vigor.

Que el COMITÉ EJECUTOR DE CONTRALOR DE LA REFORMA


ADMINISTRATIVA ha tomado la intervención que le compete expidiéndose
favorablemente.

Que la presente medida se dicta en virtud de las facultades otorgadas por el artículo 86º
inciso I de la Constitución Nacional, el artículo 8° de la Ley de Ministerios (t.o. 1992), el
artículo 61º de la Ley 23.696 y el artículo 7° de la Ley 24.191.

Por ello,

EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:

Artículo 1°- Sustitúyese del Decreto N°1.691/91 y sus modificatorios según texto del
Decreto N° 506/93, el apartado VI del artículo 1°, en lo atinente a la conformación del
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, el que quedará constituido de la siguiente
forma:
VI- MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION

- SECRETARIA TECNICA Y DE COORDINACION OPERATIVA


SUBSECRETARIA DE RELACIONES SECTORIALES
SUBSECRATARIA DE COORDINACION ADMINISTRATIVA Y TECNICA
- SECRETARIA DE CULTURA
SUBSECRETARIA DE ARTES Y ACCION CULTURAL
SUBSECRETARIA DE PATRIMONIO CULTURAL
- SECRETARIA DE PROGRAMACION Y EVALUACION EDUCATIVA
SUBSECRETARIA DE PROGRAMACION Y GESTION EDUCATIVA
SUBSECRETARIA DE EVALUACION DE LA CALIDAD EDUCATIVA
SUBSECRETARIA DE POLITICAS COMPENSATORIAS
- SECRETARIA DE POLITICAS UNIVERSITARIAS
SUBSECRETARIA DE PROGRAMACION Y EVALUACION UNIVERSITARIA
SUBSECRETARIA DE COORDINACION UNIVERSITARIA

Artículo 2°- Apruébase la estructura organizativa del MINISTERIO DE CULTURA Y


EDUCACION, de conformidad con el organigrama, objetivos, responsabilidad primaria y
acciones, planta permanente y planta permanente y gabinete que, como anexos Ia, Ib, Ic, Id,
Ie, II, III, IVa y IVb forman parte integrante del presente decreto.

Artículo 3°- Reemplázase, de acuerdo con el detalle que como anexo IVc se acompaña, la
composición de la planta no permanente de personal transitorio del MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION, aprobada oportunamente por el Decreto N°1.249/92,
prorrogada por los dictámenes C.E.C.R.A. Nros. 103/92 y 35/93, adecuándolas de
conformidad con el resultado del reencasillamiento de los distintos cargos, efectuado por la
Resolución S.F.P. y M.C.Y E.N° 39/92.

Artículo 4°- Transfiérase a la SUBSECRETARIA DE PATRIMONIO CULTURAL de la


SECRETARIA DE CULTURA la COMISION NACIONAL DE LA MANZANA DE LAS
LUCES, incluyendo sus bienes muebles, inmuebles, cargos, dotación y créditos
presupuestarios asignados, actualmente dependiente en forma directa del MINISTRO DE
CULTURA Y EDUCACION.

Artículo 5°- Establécese que la BANDA SINFONICA DE CIEGOS y el CORO


POLIFONICO DE CIEGOS, realizarán sus actividades en jurisdicción de la
SUBSECRETARIA DE ARTES Y ACCION CULTURAL dependiente de la
SECRETARIA DE CULTURA. Esta transferencia incluye bienes muebles, cargos,
dotación y créditos presupuestarios asignados.

Artículo 6°- Establécese que la SECRETARIA DE CULTURA mantendrá los objetivos,


unidades organizativas, responsabilidad primaria y acciones vigentes a la fecha,
independientemente de las transferencias a las que se refieren los artículos 4° y 5° del
presente decreto.
Artículo 7°- Disuélvese el INSTITUTO NACIONAL DE CREDITO EDUCATIVO PARA
LA IGUALDAD DE OPORTUNIDADES, cuyas competencias específicas serán
desarrolladas en lo sucesivo por el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION.

Artículo 8°- Transfiérese el personal, los bienes muebles, inmuebles, derechos,


obligaciones, recursos y fondos del ex INSTITUTO NACIONAL DE CREDITO
EDUCATIVO PARA LA IGUALDAD DE OPORTUNIDADES a la DIRECCION
NACIONAL DE RELACIONES INTERJURISDICCIONALES dependiente de la
SECRETARIA TECNICA Y DE COORDINACION OPERATIVA del MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION.

Artículo 9°- Apruébase el financiamiento de los cargos docentes que se detallan anexos al
presente artículo correspondientes a los agentes que a la fecha del presente decreto o en el
lapso de DOCE (12) meses a partir del dictado del mismo, se encuentren en condiciones de
acogerse a los beneficios jubilatorios. Dichos cargos serán eliminados automáticamente de
la distribución administrativa de recursos humanos, una vez que se produzca la baja de
dicho personal. Las bajas deberán ser comunicadas a la SECRETARIA DE HACIENDA
del MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS, dentro de los
TREINTA (30) días de producidas.

Artículo 10°- El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION deberá elevar, si así


correspondiere, antes del 31 de diciembre de 1993, los ajustes necesarios a la estructura
organizativa que se aprueba por el presente acto, que resulten de la puesta en marcha
integral de la misma.

Artículo 11°- Exceptúase, por esta única vez, al MINISTERIO DE CULTURA Y


EDUCACION de las limitaciones establecidas por los artículos 12º del capítulo II y 16º del
capitulo III, ambos del Decreto 1.669/93, 18º del Decreto N° 2.043/80 y 27 del Decreto N°
435/90, sustituido por el artículo 5° de su similar N° 1.887/91.

Artículo 12°- La habilitación de los cargos y horas de cátedra aprobados por el artículo 2°
del presente, quedará supeditada a los previstos en la Ley de Presupuestos General de
Gastos y Recursos de la Administración Nacional para el ejercicio 1994.

Artículo 13°- Las autoridades competentes del MINISTERIO DE CULTURA Y


EDUCACION podrán efectuar designaciones de personal a fin de cubrir las vacantes
generadas por el presente. Estas designaciones caducarán en forma indefectible y
automática el 30 de junio de 1994, o con anterioridad a esa fecha cuando asuma el titular
del cargo elegido a través de los mecanismos de selección vigentes. A estos efectos
decláranse aplicables los artículos 4°, 5°, 6°, 7°, 8° y 9° del Decreto N° 847/93.

Artículo 14°- El gasto que demande la aplicación de la presente medida será atendido con
los créditos previstos para tal fin en el Presupuesto General para la Administración Pública
Nacional vigente.

Artículo 15°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial
y archívese.
MENEM - Jorge A. Rodríguez - Domingo F. Cavallo.
RESOLUCION N° 1.069/93

Créase el Sistema de Información Universitaria

Buenos Aires, 14/5/93

VISTO el grado de desactualización y escasez o ausencia de información estadística sobre


las principales dimensiones y variables del sistema universitario nacional, y lo estatuido por
las Leyes 17.622 (Sistema Estadístico Nacional) y 24.195 (Ley de Educación) en su
artículo 36, inciso b), y

CONSIDERANDO:

Que la existencia de un buen sistema de información es una condición básica, no sólo para
conocer fundadamente las características y problemáticas que cada situación plantea, sino
también para garantizar la pertinencia y solidez de las decisiones consecuentes.

Que tal información resulta por ello de indiscutible utilidad, no sólo para quienes deben
actuar en el nivel central, sino para todas las instancias del sistema donde se deben adoptar
decisiones.

Que hace ya más de dos décadas las universidades nacionales, conscientes de esta
necesidad, acordaron sentar las bases de un sistema de información estadística que, a partir
de normas, definiciones metodológicas y cronogramas comunes, haga posible contar con
información confiable y comparable en tiempo oportuno.

Que tal sistema se fue perfeccionando y funcionó razonablemente bien en sus primeros
tiempos, pero luego, por distintos motivos, dejó de prestársele la atención que requería y
entró en una fase de progresiva desactualización y deterioro, que explica la actual situación
de verdadera emergencia informativa en que se encuentra el sector.

Que es necesario, en consecuencia, crear un Sistema de Información Universitaria, como


parte de la Red Federal de Información Educativa, que sea capaz de generar un insumo que
es básico para una adecuada coordinación y transformación del sistema universitario.

Que con ese objeto, la Secretaría de Políticas Universitarias impulsada, con la participación
de todas las universidades, un trabajo común de análisis y redefinición de las bases de tal
Sistema, para recuperar los elementos y resultados positivos de la experiencia pasada e
incorporar las nuevas dimensiones, metodologías y formas de operación que la
transformación de la realidad universitaria y la actual tecnología de la información
imponen.

Que, paralelamente a ese trabajo de mayor envergadura que se pondrá en marcha, se hace
imprescindible en lo inmediato actualizar la información básica que las oficinas de
estadística de las universidades deben proveer regularmente al Ministerio.
Que tal información, lo mismo que la que se determine a partir de la redefinición de las
bases del Sistema, se debe entender destinada a generar datos agregados, que una vez
disponibles serán puestos a disposición de las propias universidades y de otros usuarios
para quienes puedan resultar de interés.
Que es también oportuno incorporar al Sistema de Información que por esta resolución se
crea, a las universidades privadas y provinciales, que como es sabido forman parte del
sistema universitario nacional, respetando como es obvio las particularidades y
singularidades que las caracterizan.

Por ello,

EL MINISTRO
DE CULTURA Y EDUCACION
RESUELVE:

Artículo 1°- Créase, en el ámbito de la SECRETARÍA DE POLITICAS


UNIVERSITARIAS, el SISTEMA DE INFORMACION UNIVERSITARIA, articulado
con la Red Federal de Información Educativa, que a su vez integra el Sistema Estadístico
Nacional.

Artículo 2°- La SECRETARÍA DE POLITICAS UNIVERSITARIAS establecerá las


pautas necesarias para la implementación del SISTEMA DE INFORMACION
UNIVERSITARIA.

Artículo 3°- Las autoridades de las Universidades Nacionales, Provinciales y Privadas,


deberán tomar las medidas que consideren apropiadas para que, a través de las respectivas
Oficinas de Estadística, remitan a la SECRETARÍA DE POLITICAS UNIVERSITARIAS,
dentro de los CUARENTA Y CINCO (45) días corridos de la presente, la información
básica que se solicita en las tablas que como Anexo integran la presente resolución.

Artículo 4°- Regístrese, comuníquese y archívese.

Jorge Alberto RODRIGUEZ


DECRETO N° 256/94

Reglaméntase el perfil, alcances, incumbencias y validez nacional de los títulos


universitarios

Buenos Aires, 18/2/94

VISTO, lo dispuesto en los incisos 10 y 11 del artículo 21 de la Ley de Ministerios (t.o.


1992 ), por los que se asigna al MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION la
atribución para entender “en la determinación de la validez nacional de estudios y títulos” y
en “las habilitaciones e incumbencias de títulos profesionales con validez nacional”, y

CONSIDERANDO:

Que la falta de una reglamentación que precise los alcances de las atribuciones
ministeriales genera serios inconvenientes en su aplicación.

Que por ello se hace necesario el dictado de una norma que defina ambas cuestiones
precisas y alcances jurídicos y determine las modalidades de implementación a las que
deberán ajustarse el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION y las instituciones
implicadas.

Que a esos fines es necesario precisar lo que se entenderá a los efectos legales por “validez
nacional”, “perfil y alcances del título” e “incumbencias”, por tratarse de una terminología
cuya utilización pueda generar confusión a la hora de aplicar las consecuencias y jurídicas
que se le asignan.

Que por “perfil” debe entenderse el conjunto de los conocimientos y capacidades que cada
título acredita, y por “alcances” aquellas actividades para las que resulta competentes un
profesional en función del perfil del título respectivo; el término "incumbencia" debe
reservarse exclusivamente para aquellas actividades profesionales cuyo ejercicio pudiera
comprometer al interés público.

Que atento a la distinta naturaleza de los intereses comprometidos en la determinación del


"perfil y alcances del título'' por una parte, y los involucrados en la fijación
“incumbencias”, por otra, se justifica una diferenciación sustancial en cuanto a los efectos
jurídicos emergentes de dicha determinación.

Que el efecto propio de la determinación de ''perfil y alcances del título'' es el de acreditar


oficialmente la formación académica recibida por el egresado de acuerdo al contenido y
créditos horarios de los estudios realizados conforme con el respectivo plan de estudios; el
de las ''incumbencias'', por el interés público comprometido, es el de limitar el ejercicio de
las actividades comprendidas en las mismas a quienes acrediten la obtención del título
respectivo, como garantía para la sociedad.
Que la determinación del “perfil y alcances de los títulos” debe surgir de las propias
Universidades como un requisito para el otorgamiento de la validez nacional de los
mismos; por el contrario, la determinación de las “incumbencias”, por el interés público
comprometido, constituye un deber indelegable del Estado.

Que así mismo no se justificaría dotar de un efecto jurídico tan importante como el que se
asigna a las “incumbencias”, si el Estado a su vez no exigiera, para establecer determinados
contenidos que garanticen la formación necesaria del profesional.

Que también se justifica marcar una diferencia en la actividad del Estado respecto a la
determinación de la validez nacional, entre aquellas carreras conducentes a títulos de grado
universitario de Licenciado, Ingeniero, Abogado, Médico y otros equivalentes en las que es
necesario garantizar una carga académica adecuada al nivel y jerarquía de esos títulos, y
aquellas otras que conduzcan a títulos de menor jerarquía.

Que a los fines de garantizar el nivel de los títulos de grado universitario su otorgamiento
debe quedar reservado a instituciones autorizadas debidamente para funcionar como
universidades o institutos universitarios.

Que la presente medida se dicta en uso de las atribuciones conferidas al PODER


EJECUTIVO NACIONAL por el artículo 86º, inciso 2) de la CONSTITUCION
NACIONAL.

Por ello,

EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:

Artículo 1°- A los fines del presente decreto denominase “perfil del título” al conjunto de
los conocimientos y capacidades que cada título acredita; "alcances del título'', a aquellas
actividades para las que resulta competente un profesional en función del perfil del título y
de los contenidos curriculares de la carrera, e "incumbencias", a aquellas actividades
comprendidas en los alcances del título cuyo ejercicio pudiese comprometer al interés
público.

Artículo 2°- El otorgamiento de validez nacional de un título universitario acreditará


oficialmente el perfil y alcance del mismo. A esos fines las universidades deberán
acompañar a la solicitud pertinente el perfil y alcances del título, los que sólo podrán ser
observados por el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION cuando no se adecuen a
sus contenidos curriculares.

Artículo 3°- A partir de la fecha del presente decreto sólo se fijarán incumbencias a
aquellos títulos cuyo ejercicio profesional pudieran comprometer al interés público y
únicamente respecto a las actividades que efectivamente lo comprometan. El MINISTERIO
DE CULTURA Y EDUCACION determinará por resolución ministerial los títulos que
requieran incumbencias. A esos fines reglamentará los plazos y el procedimiento para
hacerlo.

Artículo 4°- El ejercicio de aquellas actividades comprendidas en las incumbencias que se


determinen de conformidad con lo dispuesto en el artículo anterior queda reservado
exclusivamente para quienes hayan obtenido el título correspondiente en una universidad
legalmente autorizada.

Artículo 5°- Las incumbencias fijadas con anterioridad previstas en el artículo 3°, sólo
tendrán los alcances y efectos previstos en el artículo 2°.

Artículo 6°- Para otorgar validez nacional a los títulos a que se alude en el artículo 3°, se
requerirán, además de lo exigido en el artículo 2°, que los respectivos planes de estudio
respeten los contenidos mínimos que a esos efectos establezca el MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION, en consulta con el sistema universitario.

Artículo 7°- Para otorgarle validez nacional a los títulos de grado universitario de
Licenciado, Ingeniero, Abogado, Médico y equivalentes, para los que corresponda la
fijación de incumbencia, se requerirá, además de la exigencia establecida en el artículo 2°,
que la carga académica prevista en los respectivos planes de estudio sea adecuada a un
título de esa jerarquía. A esos fines, el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION,
previa consulta con el sistema universitario reglamentará las exigencias mínimas necesarias
para lograrla.

Artículo 8°- La determinación de la validez nacional de títulos de menor jerarquía que los
mencionados en el artículo anterior requerirá además del cumplimiento de lo dispuesto en
el artículo 2°, que se prevea como condición de ingreso la aprobación del nivel polimodal;
excepcionalmente será de aplicación lo previsto en el 2° apartado del artículo 12 de la Ley
N° 24.195.

Artículo 9°- A los efectos del presente decreto, las modificaciones de los planes de estudio
deberán ser comunicadas al MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, quien las
podrá observar cuando no se respeten los contenidos mínimos fijados, en el supuesto del
artículo 3°, o importen una reducción de la carga académica mínima en el supuesto del
artículo 7°.

Artículo 10°- La facultad de otorgar títulos conducentes a grados universitarios de


Licenciado, Ingeniero, Abogado, Médico y otros equivalentes queda reservado
exclusivamente a las instituciones autorizadas para funcionar como universidades o
institutos universitarios.

Artículo 11°- El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION: será órgano de


interpretación y aplicación del presente decreto, quedando facultado para dictar las normas
pertinentes a tal fin.

Artículo 12°- Derógase el Decreto N° 939 del 1° de abril de 1975 y toda otra norma que se
oponga al presente.
Artículo 13°- Comuníquese, publíquese, dese a la DIRECCION NACIONAL DEL
REGISTRO OFICIAL y archívese.

MENEM - Jorge A. Rodríguez


DECRETO N° 529/94

Régimen de incompatibilidades para el personal universitario

Buenos Aires, 14/3/94

VISTO el Decreto N° 933 de fecha 4 de mayo de 1971, y

CONSIDERANDO:

Que dicha norma dispuso que el ejercicio de la docencia universitaria en Universidades


Nacionales o Provinciales y Privadas reconocidas no creaba incompatibilidad de ninguna
naturaleza con el desempeño de cargos en la Administración Pública, salvo los casos de
superposición horaria con otro cargo o puesto público o privado.

Que de la experiencia recogida surge la conveniencia de modificar la normativa vigente en


función de propender a mejorar la eficacia del desempeño en la docencia universitaria.

Que en virtud de ello resulta oportuno establecer disposiciones más precisas en relación con
el ejercicio de la docencia en Universidades Nacionales.

Que asimismo se hace necesario establecer el régimen básico de incompatibilidades a fines


de la aplicación del Anexo II del Decreto N° 1610 del 30 de julio de 1993.

Que las autoridades superiores de las universidades han sido consultadas sobre esta norma.

Que la presente medida encuadra en las facultades conferidas por el artículo 86º inciso l) de
la CONSTITUCION NACIONAL.

Por ello,

EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:

Artículo 1°.- Determínase que el ejercicio de la docencia en una Universidad Nacional crea
incompatibilidad con el desempeño de cargos o contratos de prestación de servicios en la
Administración Pública Nacional, Provincial y Municipal, centralizada y descentralizada,
entes autárquicos y empresas públicas y con el desempeño de cargos no docentes o
docentes, en una misma Universidad o en distintas Universidades Nacionales, Privadas y
Provinciales, cuando la acumulación de los mismos implique una dedicación superior a las
CINCUENTA (50) horas semanales.

Artículo 2°.- Los CONSEJOS SUPERIORES de las Universidades Nacionales podrán


reglamentar su propio régimen de incompatibilidades, respetando la pauta establecida en el
presente decreto.
Artículo 3°.- Los docentes de las Universidades Nacionales deberán presentar, en cada una
de las dependencias universitarias en las que se desempeñen, una declaración jurada de
cargos y contratos de prestación de servicios, con sus respectivas dedicaciones horarias. El
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION determinará las características a las que
deberán ajustarse los formularios respectivos.

Artículo 4°.- Sin perjuicio de las consecuencias civiles y penales que pudieran
corresponder, la falsedad o inexactitud de los datos consignados en la declaración jurada
hará pasible al agente de la sanción de cesantía.

Artículo 5°.- Las Universidades Nacionales elevarán a la SECRETARÍA DE POLITICAS


UNIVERSITARIAS del MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION el listado de su
personal docente y no docente, indicando individualmente la dedicación y la unidad
académica en la que se desempeñan. Dichos listados serán remitidos el 30 de abril y el 31
de agosto de cada año,

Artículo 6°.- Facúltese al MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, a través de la


SECRETARÍA DE POLITICAS UNIVERSITARIAS para dictar las normas
complementarias y de aplicación del presente decreto.

Artículo 7°.- Comuníquese, publíquese, dese a la DIRECCION NACIONAL DEL


REGISTRO OFICIAL y archívese.

MENEM - Jorge A. Rodríguez


RESOLUCION N° 240/94

Reglaméntase la presentación de solicitudes de autorización provisional de nuevas


Universidades Privadas

Buenos Aires, 01/02/94

VISTO el artículo 5° del Decreto N° 2..330 del 11 de noviembre de 1993, y

CONSIDERANDO:

Que conforme lo dispuesto en dicha norma este Ministerio debe establecer las formalidades
que deberán reunir las solicitudes de autorización provisional de Universidades Privadas
que pretendan incorporarse al régimen de la Ley 17.604.

Que en consecuencia corresponde dictar el instrumento legal que determine tales


formalidades.

Que asimismo debe establecerse el plazo dentro del cual deben adecuarse las solicitudes ya
presentadas a las disposiciones del Decreto N° 2..330/93.

Por ello,

EL MINISTRO
DE CULTURA Y EDUCACION
RESUELVE:

Artículo 1°- Las solicitudes de autorización provisional de nuevas universidades privadas a


las que se alude en los artículos 5° y concordantes del Decreto n° 2.330/93, deberán
presentarse en cuatro ejemplares respetándose las formalidades que se detallan en el Anexo
I de la presente resolución.

Artículo 2°- En el caso en que la solicitud no guarde las formalidades previstas en el


referido Anexo, o no contenga la documentación acreditante exigida por la normativa
reglamentaria se aplicará lo previsto en el artículo 7° del Decreto N° 2330/93.

Artículo 3°- Los datos consignados en la solicitud tendrán el carácter de declaración jurada
y su inexactitud o falsedad hará pasible al firmante de las penalidades y responsabilidades
legales.

Artículo 4°- Las instituciones que hubieren presentado solicitudes de autorización


provisional con anterioridad a la vigencia del Decreto N° 2330/93, deberán ajustar las
mismas a las pautas y exigencias previstas en dicha norma y en la presente resolución en el
plazo de sesenta días de ser formalmente notificadas. Tal notificación se hará bajo
apercibimiento de tenerlas por desistidas de la presentación.
Artículo 5°- La metodología indicada en el Anexo I de esta resolución no será exigida a
aquellas instituciones que ya hubieran adecuado sus proyectos al Decreto 2.330/93, en tanto
cumplimenten todas las exigencias establecidas en el mismo.

Artículo 6°- Regístrese, comuníquese y archívese.

Jorge Alberto RODRIGUEZ


RESOLUCION N° 263/94

Reconocimiento de estudios de nivel medio realizados en el exterior

Buenos Aires, 1º de febrero de 1994

VISTO la situación de los ciudadanos argentinos y sus hijos quienes habiendo completado
estudios de nivel medio o su equivalente en el extranjero, desean iniciar estudios de nivel
terciario, universitario y no universitario, en nuestro país y,

CONSIDERANDO:

Que en las últimas décadas gran cantidad de ciudadanos argentinos se han visto en la
necesidad de abandonar nuestro país por motivos de índole política, económica y/o social, y
que muchos de ellos lo han hecho con su grupo familiar o lo han conformado en el
extranjero, y que ellos y o sus hijos, de nacionalidad argentina o no, han completado
estudios de nivel medio fuera del país

Que la estabilidad, tanto política como económica y el crecimiento sostenido de los últimos
tres años son condiciones favorables para su retomo a la República Argentina.

Que al regreso a nuestro país, manifiestan la necesidad de iniciar estudios de nivel terciario
universitario y no universitario para su formación y capacitación.

Que es política del Gobierno Nacional posibilitar el retomo de ciudadanos argentinos, con
sus grupos familiares, establecidos en otros países.

Que resulta necesario favorecer el ingreso a las respectivas instituciones educacionales y así
facilitar su formación e integración a la sociedad argentina.

Que el artículo 53º, inc. l) de la Ley 24.195 establece que el Ministerio de Cultura y
Educación deberá dictar las normas generales sobre revalidación de títulos y certificados de
estudios en el extranjero.

Por ello,

EL MINISTRO
DE CULTURA Y EDUCACION
RESUELVE:

Artículo 1°.- Autorizar a los ciudadanos argentinos y a sus hijos, que acrediten haber
completado en otros países estudios de nivel medio o su equivalente, a cursar estudios
terciarios universitarios y no universitarios, sin, obligación de rendir las materias nacionales
u otras equivalencias.

Artículo 2°.- Regístrese, comuníquese y archívese.


Jorge Alberto RODRIGUEZ
RESOLUCION N° 129/94

Reglaméntase la constitución de la Comisión Consultiva asesora de la Secretaría de


Políticas Universitarias

Buenos Aires, 24/2/94

VISTO el Decreto N° 2.330 del 11 de noviembre de 1993, y

CONSIDERANDO:

Que en su artículo 11º dicha norma prevé la constitución de una Comisión Consultiva con
la función de asesorar a la Secretaría de Políticas Universitarias en todo lo concerniente al
otorgamiento de autorizaciones provisionales y definitivas de establecimientos
universitarios privados.

Que por el artículo 12º del mencionado decreto se encomienda a este Ministerio la
reglamentación de la forma de constitución y funcionamiento de la Comisión aludida.

Por ello,

EL MINISTRO
DE CULTURA Y EDUCACION
RESUELVE:

Artículo 1°- La Comisión Consultiva prevista en el artículo 11º del Decreto 2.330/93 estará
integrada por cinco miembros designados por este Ministerio, los que deberán tener
antecedentes destacados en actividades científicas, académicas o de dirección universitaria.

Artículo 2°- Los miembros de la Comisión serán designados por el término de un año,
gozando de independencia de criterio en el ejercicio de sus funciones y percibirán un
honorario de trescientos pesos ($300) por cada dictamen que emitan con relación a los
supuestos previstos en los artículos 8° y 19° del Decreto 2.330/93.

Artículo 3°- La Comisión Consultiva tendrá como misión especifica la de asesorar a la


Secretaría de Políticas Universitarias en todo lo concerniente al análisis de autorizaciones
provisionales y definitivas de establecimientos universitarios privados.

Artículo 4°- Los dictámenes producidos por la Comisión en los casos de los artículos 8° y
19° del Decreto 2.330/93, deberán estar suscriptos, por lo menos, por tres de sus miembros,
aún cuando las opiniones de los mismos no fueran coincidentes.

Artículo 5°- La comisión deberá expedir su dictamen en un plazo de treinta días a contar
de la fecha en que reciban formalmente las actuaciones, el que podrá ser prorrogado por
razones fundadas. Vencido dicho plazo sin que se haya producido el dictamen de la
Comisión o dispuesto su prórroga, el trámite continuará conforme con lo previsto en la
normativa reglamentaria.

Artículo 6°- La SECRETARIA DE POLITICAS UNIVERSITARIAS prestará a la


comisión el apoyo técnico necesario y toda la información que sus miembros le solicitaren
a los fines de cumplir su cometido.

Artículo 7°- Regístrese, comuníquese y archívese.

Jorge Alberto RODRIGUEZ


LEY NACIONAL DE EDUCACION SUPERIOR

Nro. 24.521

Sancionada: 20 de julio de 1995


Promulgada: 7 de agosto de 1995 (Decreto 268/95)
Publicada: 10 de agosto de 1995 (Boletín Oficial Nro. 28.204)
INDICE

DEPARTAMENTO DE GOBIERNO...........................................................................................24

ART. 5º. ADEMÁS DE LAS FACULTADES QUE EL REGLAMENTO DEL CONSEJO LE


CONFIERAN, CORRESPONDE AL RECTOR VIGILAR POR EL CUMPLIMIENTO DE
TODAS LAS DISPOSICIONES SOBRE INSTRUCCIÓN SECUNDARIA Y SUPERIOR,
DIRIGIENDO LAS COMUNICACIONES Y ENTABLANDO LAS GESTIONES QUE
CREYERA OPORTUNAS............................................................................................................25

TITULO II......................................................................................................................................25

ART. 1º – APRUÉBASE EL CONVENIO CELEBRADO ENTRE EL PODER EJECUTIVO DE LA NACIÓN Y EL DE LA


PROVINCIA DE BUENOS AIRES, CON FECHA 12 DE AGOSTO DE 1905, SOBRE ESTABLECIMIENTO DE UNA
UNIVERSIDAD NACIONAL EN LA CIUDAD DE LA PLATA, CON LA SUPRESIÓN DE LAS PALABRAS “LOS CUALES
TENDRÁN VALIDEZ EN TODA LA REPÚBLICA”, EN EL ART. 20..................................................................31

LEY N° 13.031 - ESTABLECE UN NUEVO RÉGIMEN UNIVERSITARIO (BOL. OF.,


4/11/947)..........................................................................................................................................32

DE LA UNIVERSIDADES........................................................................................................................32
DE LAS FUNCIONES, TAREAS, ORGANIZACIÓN EN GENERAL Y CAPACIDAD JURÍDICA DE LAS UNIVERSIDADES.....32

DE LAS FACULTADES................................................................................................................57

TITULO I......................................................................................................................................262

DISPOSICIONES PRELIMINARES.........................................................................................262

ARTÍCULO 1. ................................................................................................................................262
ARTÍCULO 2..................................................................................................................................262

TITULO II....................................................................................................................................262

DE LA EDUCACIÓN SUPERIOR............................................................................................................262
CAPÍTULO 1: DE LOS FINES Y OBJETIVOS............................................................................................262
ARTÍCULO 3..................................................................................................................................262
ARTÍCULO 4..................................................................................................................................262
CAPÍTULO 2: DE LA ESTRUCTURA Y ARTICULACIÓN.............................................................................263
ARTÍCULO 5..................................................................................................................................263
ARTÍCULO 6..................................................................................................................................263
ARTÍCULO 7..................................................................................................................................263
ARTÍCULO 8..................................................................................................................................263
ARTÍCULO 9..................................................................................................................................264
ARTÍCULO 10................................................................................................................................264
CAPÍTULO 3: DERECHOS Y OBLIGACIONES..........................................................................................264
ARTÍCULO 11................................................................................................................................264
ARTÍCULO 12. .............................................................................................................................264
ARTÍCULO 13. ..............................................................................................................................264
ARTÍCULO 14. ..............................................................................................................................265

TITULO III...................................................................................................................................265

DE LA EDUCACIÓN SUPERIOR NO UNIVERSITARIA.....................................................265

CAPÍTULO 1: DE LA RESPONSABILIDAD JURISDICCIONAL.......................................................................265


ARTÍCULO 15. ..............................................................................................................................265
ARTÍCULO 16. .............................................................................................................................266
CAPÍTULO 2: DE LAS INSTITUCIONES DE EDUCACIÓN SUPERIOR NO UNIVERSITARIA..................................266
ARTÍCULO 17................................................................................................................................266
ARTÍCULO 18................................................................................................................................266
ARTÍCULO 19................................................................................................................................266
ARTÍCULO 20................................................................................................................................267
ARTÍCULO 21................................................................................................................................267
ARTÍCULO 22................................................................................................................................267
CAPÍTULO 3: DE LOS TÍTULOS Y PLANES DE ESTUDIO...........................................................................267
ARTÍCULO 23................................................................................................................................267
ARTÍCULO 24................................................................................................................................267
CAPÍTULO 4: DE LA EVALUACIÓN INSTITUCIONAL................................................................................268
ARTÍCULO 25................................................................................................................................268

TITULO IV...................................................................................................................................268

DE LA EDUCACIÓN SUPERIOR UNIVERSITARIA............................................................268

CAPÍTULO 1: DE LAS INSTITUCIONES UNIVERSITARIAS Y SUS FUNCIONES................................................268


ARTÍCULO 26................................................................................................................................268
ARTÍCULO 27. ..............................................................................................................................268
ARTÍCULO 28. .............................................................................................................................268
CAPÍTULO 2: DE LA AUTONOMÍA, SU ALCANCE Y SUS GARANTÍAS..........................................................269
ARTÍCULO 29................................................................................................................................269
ARTÍCULO 30................................................................................................................................270
ARTÍCULO 31................................................................................................................................270
ARTÍCULO 32................................................................................................................................270
CAPÍTULO 3: DE LAS CONDICIONES PARA SU FUNCIONAMIENTO.............................................................270
SECCIÓN 1: REQUISITOS GENERALES..................................................................................................270
ARTÍCULO 33................................................................................................................................270
ARTÍCULO 34................................................................................................................................270
ARTÍCULO 35................................................................................................................................271
ARTÍCULO 36................................................................................................................................271
ARTÍCULO 37................................................................................................................................271
ARTÍCULO 38................................................................................................................................271
ARTÍCULO 39................................................................................................................................271
SECCIÓN 2: RÉGIMEN DE TÍTULOS.....................................................................................................271
ARTÍCULO 40................................................................................................................................271
ARTÍCULO 41................................................................................................................................271
ARTÍCULO 42................................................................................................................................272
ARTÍCULO 43................................................................................................................................272
SECCIÓN 3: EVALUACIÓN Y ACREDITACIÓN.........................................................................................272
ARTÍCULO 44................................................................................................................................272
ARTÍCULO 45................................................................................................................................272
ARTÍCULO 46................................................................................................................................273
ARTÍCULO 47................................................................................................................................273
CAPÍTULO 4: DE LAS INSTITUCIONES UNIVERSITARIAS NACIONALES.......................................................273
SECCIÓN 1: CREACIÓN Y BASES ORGANIZATIVAS.................................................................................273
ARTÍCULO 48................................................................................................................................273
ARTÍCULO 49................................................................................................................................273
ARTÍCULO 50................................................................................................................................274
ARTÍCULO 51................................................................................................................................274
SECCIÓN 2: ÓRGANOS DE GOBIERNO..................................................................................................274
ARTÍCULO 52................................................................................................................................274
ARTÍCULO 53................................................................................................................................274
ARTÍCULO 54................................................................................................................................275
ARTÍCULO 55................................................................................................................................275
ARTÍCULO 56................................................................................................................................275
ARTÍCULO 57................................................................................................................................275
SECCIÓN 3: SOSTENIMIENTO Y RÉGIMEN ECONÓMICO-FINANCIERO........................................................275
ARTÍCULO 58................................................................................................................................275
ARTÍCULO 59................................................................................................................................275
ARTÍCULO 60................................................................................................................................276
ARTÍCULO 61................................................................................................................................276
CAPÍTULO 5: DE LAS INSTITUCIONES UNIVERSITARIAS PRIVADAS...........................................................277
ARTÍCULO 62................................................................................................................................277
ARTÍCULO 63................................................................................................................................277
ARTÍCULO 64................................................................................................................................277
ARTÍCULO 65................................................................................................................................278
ARTÍCULO 66................................................................................................................................278
ARTÍCULO 66................................................................................................................................278
ARTÍCULO 67................................................................................................................................278
ARTÍCULO 68................................................................................................................................278
CAPÍTULO 6: DE LAS INSTITUCIONES UNIVERSITARIAS PROVINCIALES.....................................................278
ARTÍCULO 69................................................................................................................................278
CAPÍTULO 7: DEL GOBIERNO Y COORDINACIÓN DEL SISTEMA UNIVERSITARIO.........................................279
ARTÍCULO 70................................................................................................................................279
ARTÍCULO 71................................................................................................................................279
ARTÍCULO 72................................................................................................................................279
ARTÍCULO 73................................................................................................................................279
TÍTULO V....................................................................................................................................280

DISPOSICIONES COMPLEMENTARIAS Y TRANSITORIAS............................................280

ARTÍCULO 74................................................................................................................................280
ARTÍCULO 75................................................................................................................................280
ARTÍCULO 76................................................................................................................................280
ARTÍCULO 77................................................................................................................................280
ARTÍCULO 78................................................................................................................................280
ARTÍCULO 79................................................................................................................................280
ARTÍCULO 80................................................................................................................................280
ARTÍCULO 81................................................................................................................................281
ARTÍCULO 82. ..............................................................................................................................281
ARTÍCULO 83................................................................................................................................281
ARTÍCULO 84................................................................................................................................281
ARTÍCULO 85................................................................................................................................281
ARTÍCULO 86................................................................................................................................281
ARTÍCULO 87................................................................................................................................282
ARTÍCULO 88................................................................................................................................282
ARTÍCULO 89................................................................................................................................282
TITULO I
Disposiciones Preliminares
Artículo 1.
Están comprendidas dentro de la presente ley las instituciones de formación superior, sean
universitarias o no universitarias, nacionales, provinciales o municipales, tanto estatales
como privadas, todas las cuales forman parte del Sistema Educativo Nacional regulado por
la ley 24.195.
Artículo 2.
El Estado, al que le cabe responsabilidad indelegable en la prestación del servicio de
educación superior de carácter público, reconoce y garantiza el derecho a cumplir con ese
nivel de la enseñanza a todos aquellos que quieran hacerlo y cuenten con la formación y
capacidad requeridas.

TITULO II
De la Educación Superior
Capítulo 1: De los fines y objetivos
Artículo 3.
La educación superior tiene por finalidad proporcionar formación científica, profesional,
humanística y técnica en el más alto nivel, contribuir a la preservación de la cultura
nacional, promover la generación y desarrollo del conocimiento en todas sus formas, y
desarrollar las actitudes y valores que requiere la formación de personas responsables, con
conciencia ética y solidaria, reflexivas, críticas, capaces de mejorar la calidad de vida,
consolidar el respeto al medio ambiente, a las instituciones de la República y a la vigencia
del orden democrático.
Artículo 4.
Son objetivos de la Educación Superior, además de los que establece la ley 24.195 en sus
artículos 5, 6, 1 9 y 22:

a) Formar científicos, Profesionales y técnicos, que se caractericen por la solidez de su


formación y por su compromiso con la sociedad de la que forman parte;

b) Preparar para el ejercicio de la docencia en todos los niveles y modalidades del


sistema educativo;

c) Promover el desarrollo de la investigación y las creaciones artísticas, contribuyendo


al desarrollo científico, tecnológico y cultural de la Nación;

d) Garantizar crecientes niveles de calidad y excelencia en todas las opciones


institucionales del sistema;

e) Profundizar los procesos de democratización en la Educación Superior, contribuir a la


distribución equitativa del conocimiento y asegurar la igualdad de oportunidades;

f) Articular la oferta educativa de los diferentes tipos de instituciones que la integran;


g) Promover una adecuada diversificación de los estudios de nivel superior, que atienda
tanto a las expectativas y demandas de la población como a los requerimientos del
sistema cultural y de la estructura productiva;

h) Propender a un aprovechamiento integral de los recursos humanos y materiales


asignados;

i) Incrementar y diversificar las oportunidades de actualización, perfeccionamiento y


reconversión para los integrantes del sistema y para sus egresados;

j) Promover mecanismos asociativos para la resolución de los problemas nacionales,


regionales, continentales y mundiales.

Capítulo 2: De la estructura y articulación


Artículo 5.
La Educación Superior está constituida por instituciones de educación superior no
universitaria, sean de formación docente, humanística, social, técnico-profesional o
artística, y por instituciones de educación universitaria, que comprende universidades e
institutos universitarios.
Artículo 6.
La Educación Superior tendrá una estructura organizativa abierta y flexible, permeable a la
creación de espacios y modalidades que faciliten la incorporación de nuevas tecnologías
educativas.
Artículo 7.
Para ingresar como alumno a las instituciones de nivel superior, se debe haber aprobado el
nivel medio o el ciclo polimodal de enseñanza. Excepcionalmente, los mayores de 25 años
que no reúnan esa condición, podrán ingresar siempre que demuestren, a través de las
evaluaciones que las provincias, la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires o las
universidades en su caso establezcan, que tienen preparación y/o experiencia laboral acorde
con los estudios que se proponen iniciar, así como aptitudes y conocimientos suficientes
para cursarlos satisfactoriamente.
Artículo 8.
La articulación entre las distintas instituciones que conforman el Sistema de Educación
Superior, que tienen por fin facilitar el cambio de modalidad, orientación o carrera, la
continuación de los estudios en otros establecimientos, universitarios o no, así como la
reconversión de los estudios concluidos, se garantía conforme a las siguientes
responsabilidades y mecanismos:

a) Las provincias y la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires son las responsables


de asegurar, en sus respectivos ámbitos de competencia, la articulación entre las
instituciones de educación superior que de ellas dependan.

b) La articulación entre instituciones de educación superior no universitaria


pertenecientes a distintas jurisdicciones, se regula por los mecanismos que éstas
acuerden en el seno del Consejo Federal de Cultura y Educación.
c) La articulación entre instituciones de educación superior no universitaria e
instituciones universitarias, se establece mediante convenios entre ellas, o entre las
instituciones universitarias y la jurisdicción correspondiente si así lo establece la
legislación local.

d) A los fines de la articulación entre diferentes instituciones universitarias, el


reconocimiento de los estudios parciales o asignaturas de las carreras de grado
aprobados en cualquiera de esas instituciones, se hace por convenio entre ellas,
conforme a los requisitos y pautas que se acuerden en el Consejo de Universidades.
Artículo 9.
A fin de hacer efectiva la articulación entre instituciones de educación superior no
universitaria pertenecientes a distintas jurisdicciones, prevista en el inciso b) del artículo
anterior, el Ministerio de Cultura y Educación invitará al Consejo Federal de Cultura y
Educación a que integre una comisión especial permanente, compuesta por un representante
de cada una de las jurisdicciones.
Artículo 10.
La articulación a nivel regional estará a cargo de los Consejos Regionales de Planificación
de la Educación Superior, integrados por representantes de las instituciones universitarias y
de los gobiernos provinciales de cada región.

Capítulo 3: Derechos y obligaciones


Artículo 11.
Son derechos de los docentes de las instituciones estatales de educación superior, sin
perjuicio de lo dispuesto por la legislación específica:

a) Acceder a la carrera académica mediante concurso público y abierto de antecedentes


y oposición.

b) Participar en el gobierno de la institución a la que pertenecen, de acuerdo a las


normas legales pertinentes.

c) Actualizarse y perfeccionarse de modo continuo a través de la carrera académica.

d) Participar en la actividad gremial.


Artículo 12.
Son deberes de los docentes de las instituciones estatales de educación superior:

a) Observar las normas que regulan el funcionamiento de la institución a la que


pertenecen.

b) Participar en la vida de la institución, cumpliendo con responsabilidad su función


docente, de investigación y de servicio.

c) Actualizarse en su formación profesional y cumplir con las exigencias de


perfeccionamiento que fije la carrera académica.
Artículo 13.
Los estudiantes de las instituciones estatales de educación superior tienen derecho:
a) Al acceso al sistema sin discriminaciones de ninguna naturaleza.

b) A asociarse libremente en centros de estudiantes, federaciones nacionales y


regionales, a elegir sus representantes y a participar en el gobierno y en la vida de la
institución, conforme a los estatutos, lo que establece la presente ley y, en su caso, las
normas legales de las respectivas jurisdicciones.

c) A obtener becas, créditos y otras formas de apoyo económico y social que garanticen
la igualdad de oportunidades y posibilidades, particularmente para el acceso y
permanencia en los estudios de grado, conforme a las normas que reglamenten la
materia.

d) A recibir información para el adecuado uso de la oferta de servicios de educación


superior.

e) A solicitar, cuando se encuentren en las situaciones previstas en los artículos 1ro. y


2do. de la ley 20.596, la postergación o adelanto de exámenes o evaluaciones
parciales o finales cuando las fechas previstas para los mismos se encuentren dentro
del período de preparación y/o participación.
Artículo 14.
Son obligaciones de los estudiantes de las instituciones estatales de educación superior:

a) Respetar los estatutos y reglamentaciones de la institución en la que estudian.

b) Observar las condiciones de estudio, investigación, trabajo y convivencia que estipule


la institución a la que pertenecen.

c) Respetar el disenso, las diferencias individuales, la creatividad personal y colectiva y


el trabajo en equipo.

TITULO III
De la Educación Superior No Universitaria
Capítulo 1: De la responsabilidad jurisdiccional
Artículo 15.
Corresponde a las provincias y a la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires el
gobierno y organización de la educación superior no universitaria en sus respectivos
ámbitos de competencia, así como dictar normas que regulen la creación, competencia,
modificación y cese de instituciones de educación superior no universitaria y el
establecimiento de las condiciones a que se ajustará su funcionamiento, todo ello en el
marco de la ley 24.195, de lo que establece la presente y de los correspondientes acuerdos
federales. Las jurisdicciones atenderán en particular a las siguientes pautas:

a) Estructurar los estudios en base a una organización curricular flexible y que facilite
a sus egresados una salida laboral;
b) Articular las carreras afines estableciendo en lo posible núcleos básicos comunes y
regímenes flexibles de equivalencia y reconversión;

c) Prever como parte de la formación la realización de residencias programadas,


sistemas de alternancia u otras formas de prácticas supervisadas, que podrán
desarrollarse en las mismas instituciones o en entidades o empresas públicas o
privadas;

d) Tender a ampliar gradualmente el margen de autonomía de gestión de las


instituciones respectivas, dentro de los lineamientos de la política educativa
jurisdiccional y federal;

e) Prever que sus sistemas de estadística e información educativa incluyan un


componente específico de educación superior, que facilite el conocimiento,
evaluación y reajuste del respectivo subsistema;

f) Establecer mecanismos de cooperación interinstitucional y de recíproca asistencia


técnica y académica;

g) Desarrollar modalidades regulares y sistemáticas de evaluación institucional, con


arreglo a lo que estipula el artículo 25 de la presente ley.
Artículo 16.
El Estado nacional podrá apoyar programas de educación superior no universitaria, que se
caractericen por la singularidad de su oferta, por su sobresaliente nivel de excelencia, por su
carácter experimental y/o por su incidencia local o regional.

Capítulo 2: De las instituciones de educación superior no universitaria


Artículo 17.
Las instituciones de educación superior no universitaria, tienen por funciones básicas:

a) Formar y capacitar para el ejercicio de la docencia en los niveles no universitarios del


sistema educativo;

b) Proporcionar formación superior de carácter instrumental en las áreas humanísticas,


sociales, técnico-profesionales y artísticas.

Las mismas deberán estar vinculadas a la vida cultural y productiva local y regional.
Artículo 18.
La formación de docentes para los distintos niveles de la enseñanza no universitaria, debe
realizarse en instituciones de formación docente reconocidas, que integren la Red Federal
de Formación Docente Continua prevista en la ley 24.195, o en universidades que ofrezcan
carreras con esa finalidad.
Artículo 19.
Las instituciones de educación superior no universitaria podrán proporcionar formación
superior de ese carácter, en el área de que se trate y/o actualización, reformulación o
adquisición de nuevos conocimientos y competencias a nivel de postítulo. Podrán
asimismo desarrollar cursos, ciclos o actividades que respondan a las demandas de
calificación, formación y reconversión laboral y profesional.
Artículo 20.
El ingreso a la carrera docente en las instituciones de gestión estatal de educación superior
no universitaria, se hará mediante concurso público y abierto de antecedentes y oposición,
que garantice la idoneidad profesional para el desempeño de las tareas específicas. La
estabilidad estará sujeta a un régimen de evaluación y control de la gestión docente, y
cuando sea el caso, a los requerimientos y características de las carreras flexibles y a
término.
Artículo 21.
Las provincias y la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires arbitrarán los medios
necesarios para que sus instituciones de formación docente garanticen el perfeccionamiento
y la actualización de los docentes en actividad, tanto en los aspectos curriculares como en
los pedagógicos e institucionales, y promoverán el desarrollo de investigaciones educativas
y la realización de experiencias innovadoras.
Artículo 22.
Las instituciones de nivel superior no universitario que se creen o transformen, o las
jurisdicciones a las que ellas pertenezcan, que acuerden con una o más universidades del
país mecanismos de acreditación de sus carreras o programas de formación y capacitación,
podrán denominarse colegios universitarios.
Tales instituciones deberán estar estrechamente vinculadas a entidades de su zona de
influencia y ofrecerán carreras cortas flexibles y/o a término, que faciliten la adquisición de
competencias profesionales y hagan posible su inserción laboral y/o la continuación de los
estudios en las universidades con las cuales hayan establecido acuerdos de articulación.

Capítulo 3: De los títulos y planes de estudio


Artículo 23.
Los planes de estudio de las instituciones de formación docente de carácter no universitario,
cuyos títulos habiliten para el ejercicio de la docencia en los niveles no universitarios del
sistema, serán establecidos respetando los contenidos básicos comunes para la formación
docente que se acuerden en el seno del Consejo Federal de Cultura y Educación. Su
validez nacional estará sujeta al previo reconocimiento de dichos planes por la instancia
que determine el referido Consejo.
Igual criterio se seguirá con los planes de estudio para la formación humanística, social,
artística o técnico-profesional, cuyos títulos habiliten para continuar estudios en otros
ciclos, niveles o establecimientos, o para el desempeño de actividades reguladas por el
Estado, cuyo ejercicio pudiere poner en riesgo de modo directo la salud, la seguridad, los
derechos o los bienes de los habitantes.
Artículo 24.
Los títulos y certificaciones de perfeccionamiento y capacitación docente expedidos por
instituciones de educación superior oficiales o privadas reconocidas, que respondan a las
normas fijadas al respecto por el Consejo Federal de Cultura y Educación, tendrán validez
nacional y serán reconocidos por todas las jurisdicciones.
Capítulo 4: De la evaluación institucional
Artículo 25.
El Consejo Federal de Cultura y Educación acordará la adopción de criterios y bases
comunes para la evaluación de las instituciones de educación superior no universitaria, en
particular de aquellas que ofrezcan estudios cuyos títulos habiliten para el ejercicio de
actividades reguladas por el Estado, que pudieren comprometer de modo directo el interés
público, estableciendo las condiciones y requisitos mínimos a los que tales instituciones se
deberán ajustar.
La evaluación de la calidad de la formación docente se realizará con arreglo a lo que
establece la ley 24.195 en sus artículos 48 y 49.

TITULO IV
De la Educación Superior Universitaria
Capítulo 1: De las instituciones universitarias y sus funciones
Artículo 26.
La enseñanza superior universitaria estará a cargo de las universidades nacionales, de las
universidades provinciales y privadas reconocidas por el Estado nacional y de los institutos
universitarios estatales o privados reconocidos, todos los cuales integran el Sistema
Universitario Nacional.
Artículo 27.
Las instituciones universitarias a que se refiere el artículo anterior, tienen por finalidad la
generación y comunicación de conocimientos del más alto nivel en un clima de libertad,
justicia y solidaridad, ofreciendo una formación cultural interdisciplinaria dirigida a la
integración del saber así como una capacitación científica y profesional específica para las
distintas carreras que en ellas se cursen, para beneficio del hombre y de la sociedad a la que
pertenecen. Las instituciones que responden a la denominación de «Universidad» deben
desarrollar su actividad en una variedad de áreas disciplinarias no afines, orgánicamente
estructuradas en facultades, departamentos o unidades académicas equivalentes. Las
instituciones que circunscriben su oferta académica a una sola área disciplinaria, se
denominan «Institutos Universitarios».
Artículo 28.
Son funciones básicas de las instituciones universitarias:

a) Formar y capacitar científicos, profesionales, docentes y técnicos, capaces de actuar


con solidez profesional, responsabilidad, espíritu crítico y reflexivo, mentalidad
creadora, sentido ético y sensibilidad social, atendiendo a las demandas individuales
y a los requerimientos nacionales y regionales;

b) Promover y desarrollar la investigación científica y tecnológica, los estudios


humanísticos y las creaciones artísticas;

c) Crear y difundir el conocimiento y la cultura en todas sus formas;

d) Preservar la cultura nacional;


e) Extender su acción y sus servicios a la comunidad, con el fin de contribuir a su
desarrollo y transformación, estudiando en particular los problemas nacionales y
regionales y prestando asistencia científica y técnica al Estado y a la comunidad.

Capítulo 2: De la autonomía, su alcance y sus garantías


Artículo 29.
Las instituciones universitarias tendrán autonomía académica e institucional, que
comprende básicamente las siguientes atribuciones:

a) Dictar y reformar sus estatutos, los que serán comunicados al Ministerio de Cultura y
Educación a los fines establecidos en el artículo 34 de la presente ley;

b) Definir sus órganos de gobierno, establecer sus funciones, decidir su integración y


elegir sus autoridades de acuerdo a lo que establezcan los estatutos y lo que
prescríbela presente ley;

c) Administrar sus bienes y recursos, conforme a sus estatutos y las leyes que regulan la
materia;

d) Crear carreras universitarias de grado y de posgrado;

e) Formular y desarrollar planes de estudio, de investigación científica y de extensión y


servicios a la comunidad incluyendo la enseñanza de la ética profesional;

f) Otorgar grados académicos y títulos habilitantes conforme a las condiciones que se


establecen en la presente ley;

g) Impartir enseñanza, con fines de experimentación, de innovación pedagógica o de


práctica profesional docente, en los niveles preuniversitarios, debiendo continuar en
funcionamiento los establecimientos existentes actualmente que reúnan dichas
características;

h) Establecer el régimen de acceso, permanencia y promoción del personal docente y no


docente;

i) Designar y remover al personal;

j) Establecer el régimen de admisión, permanencia y promoción de los estudiantes, así


como el régimen de equivalencias;

k) Revalidar, solo como atribución de las universidades nacionales, títulos extranjeros;

l) Fijar el régimen de convivencia;

m) Desarrollar y participar en emprendimientos que favorezcan el avance y aplicación de


los conocimientos;
n) Mantener relaciones de carácter educativo, científico y cultural con instituciones del
país y del extranjero;

ñ) Reconocer oficialmente asociaciones de estudiantes, cumplidos que sean los


requisitos que establezca la reglamentación, lo que conferirá a tales entidades
personaría jurídica.
Artículo 30
Las instituciones universitarias nacionales sólo pueden ser intervenidas por el Honorable
Congreso de la Nación, o durante su receso y ad referéndum del mismo, por el Poder
Ejecutivo nacional por plazo determinado -no superior a los seis meses- y sólo por alguna
de las siguientes causales:

a) Conflicto insoluble dentro de la institución que haga imposible su normal


funcionamiento;

b) Grave alteración del orden público;

c) Manifiesto incumplimiento de la presente ley.

La intervención nunca podrá menoscabar la autonomía académica.


Artículo 31
La fuerza pública no puede ingresar en las instituciones universitarias nacionales si no
media orden escrita previa y fundada de juez competente o solicitud expresa de la autoridad
universitaria legítimamente constituida.
Artículo 32
Contra las resoluciones definitivas de las instituciones universitarias nacionales,
impugnadas con fundamento en la interpretación de las leyes de la Nación, los estatutos y
demás normas internas, sólo podrá interponerse recurso de apelación ante la Cámara
Federal de Apelaciones con competencia en el lugar donde tiene su sede principal la
Institución universitaria.

Capítulo 3: De las condiciones para su funcionamiento


Sección 1: Requisitos generales
Artículo 33
Las instituciones universitarias deben promover la excelencia y asegurar la libertad
académica, la igualdad de oportunidades y posibilidades, la jerarquización docente, la
corresponsabilidad de todos los miembros de la comunidad universitaria, así como la
convivencia pluralista de corrientes, teorías y líneas de investigación. Cuando se trate de
instituciones universitarias privadas, dicho pluralismo se entenderá en un contexto de
respeto a las cosmovisiones y valores expresamente declarados en sus estatutos.
Artículo 34
Los estatutos, así como sus modificaciones, entrarán en vigencia a partir de su publicación
en el Boletín Oficial, debiendo ser comunicados al Ministerio de Cultura y Educación a
efectos de verificar su adecuación a la presente ley y ordenar, en su caso, dicha publicación.
Si el Ministerio considerara que los mismos no se ajustan a la presente ley, deberá plantear
sus observaciones dentro de los diez días a contar de la comunicación oficial ante la
Cámara Federal de Apelaciones, la que decidirá en un plazo de veinte días, sin más trámite
que una vista a la institución universitaria. Si el Ministerio no planteara observaciones en
la forma indicada dentro del plazo establecido, los estatutos se considerarán aprobados y
deberán ser publicados. Los estatutos deben prever explícitamente: su sede principal, los
objetivos de la institución, su estructura organizativa, la integración y funciones de los
distintos órganos de gobierno, así como el régimen de la docencia y de la investigación y
pautas de administración económico-financiera.
Artículo 35
Para ingresar como alumno a las instituciones universitarias, sean estatales o privadas,
deberá reunirse como mínimo la condición prevista en el artículo 79 y cumplir con los
demás requisitos del sistema de admisión que cada institución establezca.
Artículo 36
Los docentes de todas las categorías deberán poseer título universitario de igual o superior
nivel a aquel en el cual ejercen la docencia, requisito que sólo se podrá obviar con carácter
estrictamente excepcional cuando se acrediten méritos sobresalientes. Quedan exceptuados
de esta disposición los ayudantes-alumnos. Gradualmente se tenderá a que el título
máximo sea una condición para acceder a la categoría de profesor universitario.
Artículo 37
Las instituciones universitarias garantizarán el perfeccionamiento de sus docentes, que
deberá articularse con los requerimientos de la carrera académica. Dicho perfeccionamiento
no se limitará a la capacitación en el área científica o profesional específica y en los
aspectos pedagógicos, sino que incluirá también el desarrollo de una adecuada formación
interdisciplinaria.
Artículo 38
Las instituciones universitarias dictarán normas y establecerán acuerdos que faciliten la
articulación y equivalencias entre carreras de una misma universidad o de instituciones
universitarias distintas, conforme a las pautas a que se refiere el artículo 89, inciso d.
Artículo 39
Para acceder a la formación de posgrado se requiere contar con título universitario de
grado. Dicha formación se desarrollará exclusivamente en instituciones universitarias, y
con las limitaciones previstas en el artículo 40 podrá también desarrollarse en centros de
investigación e instituciones de formación profesional superior de reconocido nivel y
jerarquía, que hayan suscripto convenios con las universidades a esos efectos. Las carreras
de posgrado -sean de especialización, maestría o doctorado- deberán ser acreditadas por la
Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria, o por entidades privadas
que se constituyan con ese fin y que estén debidamente reconocidas por el Ministerio de
Cultura y Educación.

Sección 2: Régimen de títulos


Artículo 40.
Corresponde exclusivamente a las instituciones universitarias otorgar el título de grado de
licenciado y títulos profesionales equivalentes, así como los títulos de posgrado de magister
y doctor
Artículo 41.
El reconocimiento oficial de los títulos que expidan las instituciones universitarias será
otorgado por el Ministerio de Cultura y Educación. Los títulos oficialmente reconocidos
tendrán validez nacional.
Artículo 42.
Los títulos con reconocimiento oficial certificarán la formación académica recibida y
habilitarán para el ejercicio profesional respectivo en todo el territorio nacional, sin
perjuicio del poder de policía sobre las profesiones que corresponde a las provincias. Los
conocimientos y capacidades que tales títulos certifican, así como las actividades para las
que tienen competencia sus poseedores, serán fijados y dados a conocer por las
instituciones universitarias, debiendo los respectivos planes de estudio respetar la carga
horaria mínima que para ello fije el Ministerio de Cultura y Educación, en acuerdo con el
Consejo de Universidades.
Artículo 43.
Cuando se trate de títulos correspondientes a profesiones reguladas por el Estado, cuyo
ejercicio pudiera comprometer el interés público poniendo en riesgo de modo directo la
salud, la seguridad, los derechos, los bienes o la formación de los habitantes, se requerirá
que se respeten, además de la carga horaria a la que hace referencia el artículo anterior, los
siguientes requisitos:

a) Los planes de estudio deberán tener en cuenta los contenidos curriculares básicos y
los criterios sobre intensidad de la formación práctica que establezca el Ministerio de
Cultura y Educación, en acuerdo con el Consejo de Universidades;

b) Las carreras respectivas deberán ser acreditadas periódicamente por la Comisión


Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria o por entidades privadas
constituidas con ese fin debidamente reconocidas.

El Ministerio de Cultura y Educación determinará con criterio restrictivo, en acuerdo con el


Consejo de Universidades, la nómina de tales títulos, así como las actividades profesionales
reservadas exclusivamente para ellos.

Sección 3: Evaluación y acreditación


Artículo 44.
Las instituciones universitarias deberán asegurar el funcionamiento de instancias internas
de evaluación institucional, que tendrán por objeto analizar los logros y dificultades en el
cumplimiento de sus funciones, así como sugerir medidas para su mejoramiento. Las
autoevaluaciones se complementarán con evaluaciones externas, que se harán como
mínimo cada seis (6) años, en el marco de los objetivos definidos por cada institución.
Abarcará las funciones de docencia, investigación y extensión, y en el caso de las
instituciones universitarias nacionales, también la gestión institucional. Las evaluaciones
externas estarán a cargo de la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación
Universitaria o de entidades privadas constituidas con ese fin, conforme se prevé en el
artículo 45, en ambos casos con la participación de pares académicos de reconocida
competencia. Las recomendaciones para el mejoramiento institucional que surjan de las
evaluaciones tendrán carácter público.
Artículo 45.
Las entidades privadas que se constituyan con fines de evaluación y acreditación de
instituciones universitarias, deberán contar con el reconocimiento del Ministerio de Cultura
y Educación, previo dictamen de la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación
Universitaria. Los patrones y estándares para los procesos de acreditación, serán los que
establezca el Ministerio previa consulta con el Consejo de Universidades.
Artículo 46.
La Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria es un organismo
descentralizado, que funciona en jurisdicción del Ministerio de Cultura y Educación, y que
tiene por funciones:

a) Coordinar y llevar adelante la evaluación externa prevista en el artículo 44;

b) Acreditar las carreras de grado a que se refiere el artículo 43, así como las carreras de
posgrado, cualquiera sea el ámbito en que se desarrollen, conforme a los estándares
que establezca el Ministerio de Cultura y Educación en consulta con el Consejo de
Universidades;

c) Pronunciarse sobre la consistencia y viabilidad del proyecto institucional que se


requiere para que el Ministerio de Cultura y Educación autorice la puesta en marcha
de una nueva institución universitaria nacional con posterioridad a su creación o el
reconocimiento de una institución universitaria provincial;

d) Preparar los informes requeridos para otorgar la autorización provisoria y el


reconocimiento definitivo de las instituciones universitarias privadas, así como los
informes en base a los cuales se evaluará el período de funcionamiento provisorio de
dichas instituciones.
Artículo 47.
La Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria estará integrada por
doce (12) miembros, designados por el Poder Ejecutivo nacional a propuesta de los
siguientes organismos: tres (3) por el Consejo Interuniversitario Nacional, uno (1) por el
Consejo de Rectores de Universidades Privadas, uno (1) por la Academia Nacional de
Educación, tres (3) por cada una de las Cámaras del Honorable Congreso de la Nación, y
uno (1) por el Ministerio de Cultura y Educación. Durarán en sus funciones cuatro años,
con sistema de renovación parcial. En todos los casos deberá tratarse de personalidades de
reconocida jerarquía académica y científica. La Comisión contará con presupuesto propio.

Capítulo 4: De las instituciones universitarias nacionales


Sección 1: Creación y bases organizativas
Artículo 48.
Las instituciones universitarias nacionales son personas jurídicas de derecho público, que
sólo pueden crearse por ley de la Nación, con previsión del crédito presupuestario
correspondiente y en base a un estudio de factibilidad que avale la iniciativa. El cese de
tales instituciones se hará también por ley. Tanto la creación como el cierre requerirán
informe previo del Consejo Interuniversitario Nacional.
Artículo 49.
Creada una institución universitaria, el Ministerio de Cultura y Educación designará un
rector-organizador, con las atribuciones propias del cargo y las que normalmente
corresponden al Consejo Superior. El rector-organizador conducirá el proceso de
formulación del proyecto institucional y del proyecto de estatuto provisorio y los pondrá a
consideración del Ministerio de Cultura y Educación, en el primer caso para su análisis y
remisión a la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria, y en el
segundo a los fines de su aprobación y posterior publicación. Producido el informe de la
Comisión, y adecuándose el proyecto de estatuto a las normas de la presente ley, procederá
el Ministerio de Cultura y Educación a autorizar la puesta en marcha de la nueva
institución, la que deberá quedar normalizada en un plazo no superior a los cuatro (4) años
a partir de su creación.
Artículo 50.
Cada institución dictará normas sobre regularidad en los estudios, que establezcan el
rendimiento académico mínimo exigible, debiendo preverse que los alumnos aprueben por
lo menos dos (2) materias por año, salvo cuando el plan de estudios prevea menos de cuatro
(4) asignaturas anuales, en cuyo caso deben aprobar una (1) como mínimo. En las
universidades con más de cincuenta mil (50.000) estudiantes, el régimen de admisión,
permanencia y promoción de los estudiantes será definido a nivel de cada facultad o unidad
académica equivalente.
Artículo 51.
El ingreso a la carrera académica universitaria se hará mediante concurso público y abierto
de antecedentes y oposición, debiéndose asegurar la constitución de jurados integrados por
profesores por concurso, o excepcionalmente por personas de idoneidad indiscutible
aunque no reúnan esa condición, que garanticen la mayor imparcialidad y el máximo rigor
académico. Con carácter excepcional, las universidades e institutos universitarios
nacionales podrán contratar, al margen del régimen de concursos y sólo por tiempo
determinado, a personalidades de reconocido prestigio y méritos académicos sobresalientes
para que desarrollen cursos, seminarios o actividades similares. Podrán igualmente prever
la designación temperarla de docentes interinos, cuando ello sea imprescindible y mientras
se sustancie el correspondiente concurso.
Los docentes designados por concurso deberán representar un porcentaje no inferior al
setenta por ciento (70%) de las respectivas plantas de cada institución universitaria.

Sección 2: Órganos de gobierno


Artículo 52.
Los estatutos de las instituciones universitarias nacionales deben prever sus órganos de
gobierno, tanto colegiados como unipersonales, así como su composición y atribuciones.
Los órganos colegiados tendrán básicamente funciones normativas generales, de definición
de políticas y de control en sus respectivos ámbitos, en tanto los unipersonales tendrán
funciones ejecutivas.
Artículo 53.
Los órganos colegiados de gobierno estarán integrados de acuerdo a lo que determinen los
estatutos de cada universidad, los que deberán asegurar:

a) Que el claustro docente tenga la mayor representación relativa, que no podrá ser
inferior al cincuenta por ciento (50%) de la totalidad de sus miembros;

b) Que los representantes de los estudiantes sean alumnos regulares y tengan aprobado
por lo menos el treinta por ciento (30%) del total de asignaturas de la carrera que
cursan;
c) Que el personal no docente tenga representación en dichos cuerpos con el alcance que
determine cada institución;

d) Que los graduados, en caso de ser incorporados a los cuerpos colegiados, puedan
elegir y ser elegidos si no tienen relación de dependencia con la institución
universitaria.

Los decanos o autoridades docentes equivalentes serán miembros natos del Consejo
Superior u órgano que cumpla similares funciones. Podrá extenderse la misma
consideración a los directores de carrera de carácter electivo que integren los cuerpos
académicos, en las instituciones que por su estructura organizativa prevean dichos cargos.
Artículo 54.
El rector o presidente, el vicerector o vicepresidente y los titulares de los demás órganos
unipersonales de gobierno, durarán en sus funciones tres (3) años como mínimo. El cargo
de rector o presidente será de dedicación exclusiva y para acceder a él se requerirá ser o
haber sido profesor por concurso de una universidad nacional.
Artículo 55.
Los representantes de los docentes, que deberán haber accedido a sus cargos por concurso,
serán elegidos por docentes que reúnan igual calidad. Los representantes estudiantiles
serán elegidos por sus pares, siempre que éstos tengan el rendimiento académico mínimo
que establece el artículo 50.
Artículo 56.
Los estatutos podrán prever la constitución de un Consejo Social, en el que estén
representados los distintos sectores e intereses de la comunidad local, con la misión de
cooperar con la institución universitaria en su articulación con el medio en que está inserta.
Podrá igualmente preverse que el Consejo Social esté representado en los órganos
colegiados de la institución.
Artículo 57.
Los estatutos preverán la constitución de un tribunal universitario, que tendrá por función
sustanciar juicios académicos y entender en toda cuestión ético-disciplinaria en que
estuviera involucrado personal docente. Estará integrado por profesores eméritos o
consultas, o por profesores por concurso que tengan una antigüedad en la docencia
universitaria de por lo menos diez (10) años.

Sección 3: Sostenimiento y régimen económico-financiero


Artículo 58.
Corresponde al Estado nacional asegurar el aporte financiero para el sostenimiento de las
instituciones universitarias nacionales, que garantice su normal funcionamiento, desarrollo
y cumplimiento de sus fines. Para la distribución de ese aporte entre las mismas se tendrán
especialmente en cuenta indicadores de eficiencia y equidad. En ningún caso podrá
disminuirse el aporte del Tesoro nacional como contrapartida de la generación de recursos
complementarios por parte de las instituciones universitarias nacionales.
Artículo 59.
Las instituciones universitarias nacionales tienen autarquía económico-financiera, la que
ejercerán dentro del régimen de la ley 24.156 de Administración Financiera y Sistemas de
Control del Sector Público Nacional. En ese marco corresponde a dichas instituciones:
a) Administrar su patrimonio y aprobar su presupuesto. Los recursos no utilizados al
cierre de cada ejercicio, se transferirán automáticamente al siguiente;

b) Fijar su régimen salarial y de administración de personal;

c) Podrán dictar normas relativas a la generación de recursos adicionales a los aportes


del Tesoro nacional, mediante la venta de bienes, productos, derechos o servicios,
subsidios, contribuciones, herencias, derechos o tasas por los servicios que presten,
así como todo otro recurso que pudiera corresponderles por cualquier título o
actividad. 'Los recursos adicionales que provinieren de contribuciones o tasas por los
estudios de grado, deberán destinarse prioritariamente a becas, préstamos, subsidios o
créditos u otro tipo de ayuda estudiantil y apoyo didáctico; estos recursos adicionales
no podrán utilizarse para financiar gastos corrientes. Los sistemas de becas,
préstamos u otro tipo de ayuda estarán fundamentalmente destinados a aquellos
estudiantes que demuestren aptitud suficiente y respondan adecuadamente a las
exigencias académicas de la institución y que por razones económicas no pudieran
acceder o continuar los estudios universitarios, de forma tal que nadie se vea
imposibilitado por ese motivo de cursar tales estudios;

d) Garantizar el normal desenvolvimiento de sus unidades asistenciales, asegurándoles


el manejo descentralizado de los fondos que ellas generen, con acuerdo a las normas
que dicten sus Consejos Superiores y a la legislación vigente;

e) Constituir personas jurídicas de derecho público o privado, o participar en ellas, no


requiriéndose adoptar una forma jurídica diferente para acceder a los beneficios de la
ley 23.877;

f) Aplicar el régimen general de contrataciones, de responsabilidad patrimonial y de


gestión de bienes reales, con las excepciones que establezca la reglamentación.

El rector y los miembros del Consejo Superior de las instituciones universitarias nacionales
serán responsables de su administración según su participación, debiendo responder en los
términos y con los alcances previstos en los artículos 130 y 131 de la ley 24.156. En ningún
caso el Estado nacional responderá por las obligaciones asumidas por las instituciones
universitarias que importen un perjuicio para el Tesoro nacional.
Artículo 60.
Las instituciones universitarias nacionales podrán promover la constitución de fundaciones,
sociedades u otras formas de asociación civil, destinadas a apoyar su labor, a facilitar las
relaciones con el medio, a dar respuesta a sus necesidades y a promover las condiciones
necesarias para el cumplimiento de sus fines y objetivos.

Artículo 61
El Congreso Nacional debe disponer de la partida presupuestaria anual correspondiente al
nivel de educación superior, de un porcentaje que será destinado a becas y subsidios en ese
nivel, otorgabas por el Congreso de la Nación y ejecutables en base a lo dispuesto por el
artículo 75, inciso 19 de la Constitución Nacional, por parte del Tesoro de la Nación.
Capítulo 5: De las instituciones universitarias privadas
Artículo 62.
Las instituciones universitarias privadas deberán constituirse sin fines de lucro, obteniendo
personaría jurídica como asociación civil o fundación. Las mismas serán autorizadas por
decreto del Poder Ejecutivo nacional, que admitirá su funcionamiento provisorio por un
lapso de seis (6) años, previo informe favorable de la Comisión Nacional de Evaluación y
Acreditación Universitaria, y con expresa indicación de las carreras, grados y títulos que la
institución puede ofrecer y expedir.
Artículo 63.
El informe de la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria a que se
refiere el artículo anterior, se fundamentará en la consideración de los siguientes criterios:

a) La responsabilidad moral, financiera y económica de los integrantes de las


asociaciones o fundaciones;

b) La viabilidad y consistencia del proyecto institucional y académico, así como su


adecuación a los principios y normas de la presente ley;

c) El nivel académico del cuerpo de profesores con el que se contará inicialmente, su


trayectoria en investigación científica y en docencia universitaria;

d) La calidad y actualización de los Planes de enseñanza e investigación propuestos;

e) Los medios económicos, el equipamiento y la infraestructura de que efectivamente se


disponga para posibilitar el cumplimiento de sus funciones de docencia, investigación
y extensión;

f) Su vinculación internacional y la posibilidad de concretar acuerdos y convenios con


otros centros universitarios del mundo.
Artículo 64.
Durante el lapso de funcionamiento provisorio:

a) El Ministerio de Cultura y Educación hará un seguimiento de la nueva institución a


fin de evaluar, en base a informes de la Comisión Nacional de Evaluación y
Acreditación Universitaria, su nivel académico y el grado de cumplimiento de sus
objetivos y planes de acción;

b) Toda modificación de los estatutos, creación de nuevas carreras, cambio de planes de


estudio o modificación de los mismos, requerirá autorización del citado Ministerio;

c) En todo documento oficial o publicidad que realicen, las instituciones deberán dejar
constancia expresa del carácter precario de la autorización con que operan.

El incumplimiento de las exigencias previstas en los incisos b) y c), dará lugar a la


aplicación de sanciones conforme lo establezca la reglamentación de la presente ley, la que
podrá llegar al retiro de la autorización provisoria concedida.
Artículo 65.
Cumplido el lapso de seis (6) años de funcionamiento provisorio, contados a partir de la
autorización correspondiente, el establecimiento podrá solicitar el reconocimiento
definitivo para operar como institución universitaria privada, el que se otorgará por decreto
del Poder Ejecutivo nacional, previo informe favorable de la Comisión Nacional de
Evaluación y Acreditación Universitaria.
Artículo 66.
El Ministerio de Cultura y Educación fiscalizará el funcionamiento de dichas instituciones
con el objeto de verificar si cumplen las condiciones bajo las cuales están autorizadas a
funcionar. Su incumplimiento dará lugar a la aplicación de sanciones conforme lo
establezca la reglamentación de la presente ley, la que podrá llegar hasta la clausura
definitiva.
Artículo 66.
El Estado nacional podrá acordar a las instituciones con reconocimiento definitivo que lo
soliciten, apoyo económico para el desarrollo de proyectos de investigación que se generen
en las mismas, sujeto ello a los mecanismos de evaluación y a los criterios de elegibilidad
que rijan para todo el sistema.
Artículo 67.
Las resoluciones denegatorias del reconocimiento definitivo, así como aquellas que
dispongan su retiro o el de la autorización provisoria, serán recurribles ante la Cámara
Federal correspondiente a la jurisdicción de la institución de que se trate, dentro de los
quince (1 5) días hábiles de notificada la decisión que se recurre.
Artículo 68
Los establecimientos privados cuya creación no hubiere sido autorizada conforme a las
normas legales pertinentes no podrán usar denominaciones ni expedir diplomas, títulos o
grados de carácter universitario. La violación de esta norma dará lugar a la aplicación de
sanciones conforme lo establezca la reglamentación de la presente ley, la que podrá llegar a
la clausura inmediata y definitiva de la entidad y a la inhabilitación de los responsables para
ejercer la docencia, así como para desempeñar la función pública o integrar órganos de
gobierno de asociaciones civiles dedicadas a la educación superior.

Capítulo 6: De las instituciones universitarias provinciales


Artículo 69.
Los títulos y grados otorgados por las instituciones universitarias provinciales tendrán los
efectos legales previstos en la presente ley, en particular los establecidos en los artículos 41
y 42, cuando tales instituciones:

a) Hayan obtenido el correspondiente reconocimiento del Poder Ejecutivo nacional, el


que podrá otorgarse previo informe de la Comisión Nacional de Evaluación y
Acreditación Universitaria, siguiendo las pautas previstas en el artículo 63;

b) Se ajusten a las normas de los capítulos 1, 2, 3 y 4 del presente título, en tanto su


aplicación a estas instituciones no vulnere las autonomías provinciales y conforme a
las especificaciones que establezca la reglamentación.
Capítulo 7: Del gobierno y coordinación del sistema universitario
Artículo 70
Corresponde al Ministerio de Cultura y Educación la formulación de las políticas generales
en materia universitaria, asegurando la participación de los órganos de coordinación y
consulta previstos en la presente ley y respetando el régimen de autonomía establecido para
las instituciones universitarias.
Artículo 71.
Serán órganos de coordinación y consulta del sistema universitario, en sus respectivos
ámbitos, el Consejo de Universidades, el Consejo Interuniversitario Nacional, el Consejo de
Rectores de Universidades Privadas y los Consejos Regionales de Planificación de la
Educación Superior.
Artículo 72.
El Consejo de Universidades será presidido por el Ministro de Cultura y Educación, o por
quien éste designe con categoría no inferior a Secretario, y estará integrado por el Comité
Ejecutivo del Consejo Interuniversitario Nacional, por la Comisión Directiva del Consejo
de Rectores de Universidades Privadas, por un representante de cada Consejo Regional de
Planificación de la Educación Superior que deberá ser rector de una institución
universitaria- y por un representante del Consejo Federal de Cultura y Educación. Serán
sus funciones:

a) Proponer la definición de políticas y estrategias de desarrollo universitario, promover


la cooperación entre las instituciones universitarias, así como la adopción de pautas
para la coordinación del sistema universitario;

b) Pronunciarse en aquellos asuntos sobre los cuales se requiera su intervención


conforme a la presente ley,

c) Acordar con el Consejo Federal de Cultura y Educación criterios y pautas para la


articulación entre las instituciones educativas de nivel superior;

d) Expedirse sobre otros asuntos que se les remita en consulta por la vía
correspondiente.
Artículo 73.
El Consejo Interuniversitario Nacional estará integrado por los rectores o presidentes de las
instituciones universitarias nacionales y provinciales reconocidas por la Nación, que estén
definitivamente organizadas, y el Consejo de Rectores de Universidades Privadas estará
integrado por los rectores o presidentes de las instituciones universitarias privadas. Dichos
consejos tendrán por funciones:

a) Coordinar los planes y actividades en materia académica, de investigación científica


y de extensión entre las instituciones universitarias de sus respectivos ámbitos;

b) Ser órganos de consulta en las materias y cuestiones que prevé la presente ley;

c) Participar en el Consejo de Universidades.


Cada Consejo se dará su propio reglamento conforme al cual regulará su funcionamiento
interno.
Título V
Disposiciones complementarias y transitorias
Artículo 74
La presente ley autoriza la creación y el funcionamiento de otras modalidades de
organización universitaria previstas en el artículo 24 de la ley 24.195 que respondan a
modelos diferenciados de diseño de organización institucional y de metodología
pedagógica, previa evaluación de su factibilidad y de la calidad de su oferta académica,
sujeto todo ello a la reglamentación que oportunamente dicte el Poder Ejecutivo nacional.
Dichas instituciones, que tendrán por principal finalidad favorecer el desarrollo de la
educación superior mediante una oferta diversificada pero de nivel equivalente a la del
resto de las universidades, serán creadas o autorizadas según corresponda conforme a las
previsiones de los artículos 48 y 62 de la presente ley y serán sometidas al régimen de
títulos y de evaluación establecido en ella.
Artículo 75.
Las instituciones universitarias reguladas de conformidad con la presente ley, podrán ser
eximidas parcial o totalmente de impuestos y contribuciones provisionales de carácter
nacional, mediante decreto del Poder Ejecutivo nacional.
Artículo 76.
Cuando una carrera que requiera acreditación no la obtuviere, por no reunir los requisitos y
estándares mínimos previamente establecidos, la Comisión Nacional de Evaluación y
Acreditación Universitaria podrá recomendar que se suspenda la inscripción de nuevos
alumnos en la misma, hasta que se subsanen las deficiencias encontradas, debiéndose
resguardar los derechos de los alumnos ya inscriptos que se encontraron cursando dicha
carrera.
Artículo 77.
Las instituciones constituidas conforme al régimen del artículo 16 de la ley 17.778, que
quedan por esta ley categorizadas como institutos universitarios, establecerán su sistema de
gobierno conforme a sus propios regímenes institucionales, no siéndoles de aplicación las
normas sobre autonomía y sobre gobierno de las instituciones universitarias nacionales que
prevé la presente ley.
Artículo 78.
Las instituciones universitarias nacionales deberán adecuar sus plantas docentes de acuerdo
a lo previsto en el segundo párrafo del artículo 51 de la presente ley dentro del plazo de tres
(3) años contados a partir de la promulgación de ésta y de hasta diez (10) años para las
creadas a partir del 10 de diciembre de 1983. En estos casos, los docentes interinos con
más de dos (2) años de antigüedad continuados podrán ejercer los derechos consagrados en
el artículo 55 de la presente ley.
Artículo 79.
Las instituciones universitarias nacionales adecuarán sus estatutos a las disposiciones de la
presente ley, dentro del plazo de ciento ochenta (180) días contados a partir de la
promulgación de ésta.
Artículo 80.
Los titulares de los órganos colegiados y unipersonales de gobierno de las instituciones
universitarias nacionales, elegidos de acuerdo a los estatutos vigentes al momento de la
sanción de la presente ley, continuarán en sus cargos hasta la finalización de sus respectivos
mandatos. Sin perjuicio de ello, las autoridades universitarias adecuarán la integración de
sus órganos colegiados de gobierno, a fin de que se respete la proporción establecida en el
artículo 53, inciso a), en un plazo de ciento ochenta (180) días contados a partir de la fecha
de publicación de los nuevos estatutos, los que deberán contemplar normas que faciliten la
transición.

Artículo 81.
Las instituciones universitarias que al presente ostenten el nombre de universidad, por
haber sido creadas o autorizadas con esa denominación, y que por sus características deban
encuadrarse en lo que por esta ley se denomina institutos universitarios, tendrán un plazo de
un (1) año contado a partir de la promulgación de la presente para solicitar la nueva
categorización.
Artículo 82.
La Universidad Tecnológica Nacional, en razón de su significación en la vida universitaria
del país, conservará su denominación y categoría institucional actual.
Artículo 83.
Los centros de investigación e instituciones de formación profesional superior que no sean
universitarios y que a la fecha desarrollen actividades de posgrado, tendrán un plazo de dos
(2) años para adecuarse a la nueva legislación. Durante ese período estarán no obstante
sometidos a la fiscalización del Ministerio de Cultura y Educación y al régimen de
acreditación previsto en el artículo 39 de la presente ley.
Artículo 84.
El Poder Ejecutivo nacional no podrá implementar la organización de nuevas instituciones
universitarias nacionales, ni disponer la autorización provisoria o el reconocimiento
definitivo de instituciones universitarias privadas, hasta tanto se constituya el órgano de
evaluación y acreditación que debe pronunciarse sobre el particular, previsto en la presente
ley.
Artículo 85.
Sustitúyese el inciso 1l) del artículo 21 de la Ley de Ministerios (t. o. 1992) por el
siguiente transcripto:

Entender en la habilitación de títulos profesionales con validez nacional.


Artículo 86.
Modifícanse los siguientes artículos de la ley 24.195:

a) Artículo 10, inciso e), y artículos 25 y 26, donde dice: “cuaternaria” dirá: “de posgrado”.

b) Artículo 54: donde dice “un representante del Consejo Interuniversitario Nacional”, dirá:
“y tres representantes del Consejo de Universidades”.

c) Artículo 57: inciso a), donde dice: “y el representante del Consejo Interuniversitario
Nacional”, dirá: “los representantes del Consejo de Universidades”.

d) Artículo 58: inciso a), donde dice: “y el Consejo Interuniversitario Nacional”, dirá “y el
Consejo de Universidades”.
Artículo 87.
Deróganse las leyes 17.604, 17.778, 23.068 y 23.569, así como toda otra disposición que se
oponga a la presente.
Artículo 88.
Todas las normas que eximen de impuestos, tasas y contribuciones a las universidades
nacionales al momento de la promulgación de la presente ley, continuarán vigentes.
Artículo 89.
Comuníquese al Poder Ejecutivo.
DECRETO P.E.N. N° 268

BUENOS AIRES, 7 AGOSTO 1995

VISTO el Proyecto de Ley N° 24.521 sancionado por el HONORABLE


CONGRESO DE LA NACIÓN el 20 de julio de 1995, y

CONSIDERANDO
Que en el inciso e) del artículo 29 del mencionado Proyecto de Ley se establece,
como una de las atribuciones de las Instituciones Universitarias, la de "formular y
desarrollar planes de estudio, de investigación científica y de extensión y de servicios a la
comunidad incluyendo la enseñanza de la ética profesional como materia autónoma".

Que la ética profesional constituye un aspecto fundamental que debe estar


presente en todo programa de estudio y en cada una de sus asignaturas, por lo que no
resulta conveniente se imponga como materia autónoma.

Que el artículo 61 de Proyecto de Ley, al atribuir al HONORABLE CONGRESO


DE LA NACIÓN la facultad de otorgar las becas que en él se prevén, avanza sobre
atribuciones que por sus características corresponden a los organismos pertinentes del
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACIÓN y a las Universidades.

Que tales aspectos pueden ser observados sin que ello altere el espíritu ni la
unidad del Proyecto de Ley sancionado por el HONORABLE CONGRESO DE LA
NACIÓN.

Que la presente medida se dicta en uso de las atribuciones conferidas por el


artículo 80 de la Constitución Nacional.

Por ello,

EL PRESIDENTE DE LA NACIÓN ARGENTINA


EN ACUERDO GENERAL DE MINISTROS
DECRETA:

Artículo 1. Obsérvase en el artículo 29, inciso e) del Proyecto de Ley registrado bajo el
N° 24.521, la frase que dice "como materia autónoma".

Artículo 2. Obsérvase en el artículo 61 del Proyecto de Ley registrado bajo el N°


24.521, la frase que dice: "otorgables por el Congreso de la Nación y
ejecutables en base a lo dispuesto por el artículo 75, inciso 19) de la
Constitución Nacional, por parte del Tesoro de la Nación".
Artículo 3. Con la salvedad establecida en los artículos precedentes, cúmplase,
promúlgase y téngase por Ley de la Nación el Proyecto de Ley registrado
bajo el N° 24.521.

Artículo 4.Dese cuenta al HONORABLE CONGRESO DE LA NACIÓN a los efectos


previstos en el artículo 99 inciso 3) de la Constitución Nacional.

Artículo 5.Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial y


archívese.

MENEM, Eduardo Bauzá, Domingo F. Cavallo, Guido Di Tella, José A. Caro Figueroa,
Alberto J. Mazza, Rodolfo C. Barra, Oscar H. Camilión, Jorge A. Rodríguez, Carlos V.
Corach
DECRETO P.E.N. N° 499

BUENOS AIRES, 22 SETIEMBRE 1995


VISTO, la Ley N° 24.521, y

CONSIDERANDO:

Que sin perjuicio de la normativa especial que debe dictarse en cada caso para
regular distintas instituciones contenidas en la ley aludida, resulta necesario fijar pautas
sobre aspectos puntuales de la misma, indispensables para su correcta implementación.

Que, asimismo, el CONSEJO INTERUNIVERSITARIO NACIONAL, en


oportunidad del tratamiento de dicha ley por la HONORABLE CAMARA DE
SENADORES DE LA NACION, efectuó diversas propuestas, tendientes en su gran
mayoría a aclarar y precisar los alcances de varios de los dispositivos previstos en la
misma.

Que la mayoría de esas propuestas pueden ser receptadas por vía reglamentaria,
contribuyendo de esa forma a facilitar la interpretación de la nueva normativa.

Que la presente medida se dicta de conformidad con lo establecido por el artículo


99º, inciso 2°) de la CONSTITUCION NACIONAL.

Por ello,

EL PRESIDENTE DE LA NACION ARGENTINA


DECRETA:

TITULO I
DISPOSICIONES GENERALES

Artículo 1º. Todo dispositivo de la Ley N° 24.521 cuyo cumplimiento no hubiere sido
diferido por la misma, o condicionado expresamente por la propia ley al
dictado de una normativa reglamentaria, se entenderá operativo y de
aplicación inmediata.

Artículo 2º. A los fines de implementar el apoyo previsto en el artículo 16º de la Ley N°
24.521, se deberá contar con el acuerdo previo de la jurisdicción
correspondiente.

Artículo 3º. Las Instituciones de Educación Superior deberán disponer, por los
mecanismos legales correspondientes, las medidas necesarias para posibilitar
a partir del próximo ciclo lectivo, la inscripción de los mayores de
VEINTICINCO (25) años que se encuentren en las condiciones previstas en
el artículo 7º de la Ley N° 24.521.

TITULO II
DISPOSICIONES RELACIONADAS CON
LA EVALUACION Y LA ACREDITACION

Artículo 4º. Las entidades privadas a las que se refiere el artículo 45º de la Ley N°
24.521 deberán constituirse sin fines de lucro y cumplimentar los
instructivos que dicte el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION.
Durante un período de TRES (3) años contados a partir de la fecha del
presente decreto, sólo podrán reconocerse aquellas entidades constituidas por
asociaciones de universidades o de facultades. Cuando se trate de
asociaciones de facultades, el reconocimiento sólo autorizará a efectuar
acreditaciones de carreras de grado y posgrado correspondientes a áreas
disciplinarias afines con las de la asociación.

Artículo 5º. La acreditación de una carrera de posgrado efectuada por la COMISION


NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA
(CONEAU), o por una entidad privada legalmente autorizada a esos fines, y
sus efectos jurídicos y académicos consecuentes, tendrá una validez de
TRES (3) años, a cuyo término se deberá peticionar una nueva acreditación,
la que tendrá una vigencia de SEIS (6) años. Las instituciones podrán
solicitar la nueva acreditación aún antes del vencimiento de los plazos
aludidos.

Artículo 6º. Las carreras de grado a que se refiere al artículo 43º de la Ley N° 24.521
deberán ser acreditadas cada SEIS (6) años.

Artículo 7º. Es condición necesaria para el reconocimiento oficial y la consecuente


validez nacional de los títulos correspondientes a carreras de grado
comprendidas en el artículo 43º de la Ley N° 24.521 o de posgrado, la previa
acreditación de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU), o por una entidad
legalmente reconocida a esos fines.

TITULO III
DISPOSICIONES RELACIONADAS CON
EL CONSEJO DE UNIVERSIDADES

Artículo 8º. La representación del CONSEJO INTERUNIVERSITARIO NACIONAL y


la del CONSEJO DE RECTORES DE UNIVERSIDADES PRIVADAS ante
el CONSEJO DE UNIVERSIDADES, no podrá exceder de SIETE (7)
miembros cada una, cualquiera fuera el número de integrantes previstos para
sus órganos ejecutivos por las reglamentaciones respectivas.

Artículo 9º. Las decisiones del CONSEJO DE UNIVERSIDADES se expresarán en


acuerdos, que deberán procurarse por consenso, y cuando ello no resultara
posible, se requerirá el voto mayoritario de sus miembros, debiendo dejarse
constancia de las disidencias que se hubieren planteado.
Artículo 10º. El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION sólo podrá apartarse de
los dictámenes producidos por el CONSEJO DE UNIVERSIDADES como
consecuencia de las consultas efectuadas en virtud de lo previsto en los
artículos 45º y 46º, inciso b) de la Ley N° 24.521, por razones debidamente
fundamentadas. En los supuestos en que la ley requiere el acuerdo de dicho
organismo para la toma de decisiones, el Ministerio no podrá prescindir del
mismo por ninguna circunstancia.

Artículo 11º. En la reglamentación que el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION


dicte para la organización y funcionamiento de los CONSEJOS
REGIONALES DE PLANIFICACION DE LA EDUCACION SUPERIOR,
deberá preverse el procedimiento de elección de los representantes de esos
cuerpos ante el CONSEJO DE UNIVERSIDADES, así como la duración de
sus mandatos.

TITULO IV
DISPOSICIONES RELACIONADAS
CON UNIVERSIDADES NACIONALES

Artículo 12º. Los Rectores o Presidentes de las Instituciones Universitarias Nacionales


deberán convocar con la necesaria antelación, a las respectivas Asambleas
Universitarias a fin de proceder a la adecuación de sus estatutos dentro del
plazo previsto por el artículo 79º de la Ley N° 24.521.

Artículo 13º. Si agotados los procedimientos que prevean los estatutos respectivos, la
Asamblea convocada a los fines indicados en el artículo anterior no pudiera
constituirse por no lograrse el quórum necesario, se deberá proceder a
efectuar una nueva convocatoria bajo la prevención de que se sesionará
válidamente con los asambleístas que concurrieran. Las resoluciones para
adecuar los estatutos a la Ley N° 24.521 deberán adoptarse en todos los
casos por el voto de la mitad más uno de los asambleístas presentes.

Artículo 14º. A fin de posibilitar que la elección de los integrantes de los órganos de
gobierno de las Universidades Nacionales se efectúe de conformidad con lo
prescripto en la Ley N° 24.521, sus Consejos Superiores podrán disponer la
prórroga de los mandatos que concluyeran antes del vencimiento del plazo
previsto en el artículo 79º de dicha Ley.

Artículo 15º. Los Decanos o autoridades docentes equivalentes no serán computados a los
efectos de determinar el porcentaje previsto por el inciso a) del artículo 53º
de la Ley N° 24.521.

Artículo 16º. Los derechos que se reconocen en el artículo 78º de la Ley N° 24.521 a los
docentes interinos con más de DOS (2) años de antigüedad continuados,
comprenden los de sufragar en las elecciones en las que se elijan
representantes de los mismos ante los órganos de gobierno de la universidad.
Artículo 17º. Las Instituciones constituidas conforme al régimen del artículo 16º de la Ley
N° 17.778 y las Instituciones Universitarias Nacionales que se encuentren en
etapa de normalización, integrarán el CONSEJO INTERUNIVERSITARIO
NACIONAL con voz pero sin voto. Igual limitación regirá para las
Instituciones Universitarias Provinciales, respecto de aquellos asuntos
exclusivamente vinculados a la problemática de las Instituciones
Universitarias Nacionales.

Artículo 18º. A los fines de dar cumplimiento a lo dispuesto en el artículo 48º de la Ley
N° 24.521, los proyectos de leyes de creación de nuevas Instituciones
Universitarias Nacionales deben contemplar, en el estudio de factibilidad que
las fundamente, el conjunto de recursos que hagan viable la iniciativa, la
necesidad de formar recursos calificados en el área que la nueva institución
se propone cubrir y los lineamientos generales del proyecto institucional que
resulten indispensables para evaluar su justificación.

Artículo 19º. En los supuestos en que las Universidades Nacionales, haciendo uso de las
facultades conferidas por el artículo 59º, inciso c), establezcan derechos o
tasas por los estudios de grado, deberán necesariamente prever un régimen
de exención para aquellos estudiantes que por su situación económica o la de
su núcleo familiar no se encuentren en condiciones de afrontarlas sin serios
sacrificios, de forma tal que se asegure que nadie se vea imposibilitado de
iniciar, continuar o concluir sus estudios de grado universitario como
consecuencia directa o indirecta de las contribuciones que se impongan.

Artículo 20º. Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial
y archívese.
DECRETO P.E.N. N° 173
CON LAS MODIFICACIONES
INTRODUCIDAS POR EL DECRETO P.E.N. N° 705

BUENOS AIRES, 21 DE FEBRERO DE 1996

VISTO, los artículos 44º, 46º y 47º de la Ley N° 24.521, y

CONSIDERANDO:

Que dichas normas prevén la existencia de la COMISION NACIONAL DE


EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA, como un organismo
descentralizado que funciona en jurisdicción del MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION.

Que en consecuencia es necesario dictar una normativa reglamentaria mínima


que fije los aspectos formales para la designación de los integrantes de aquel organismo, su
estructura interna básica y algunas pautas fundamentales para su funcionamiento.

Que la presente medida se dicta de conformidad con lo establecido por el artículo


99º, inciso 2º) de la CONSTITUCION NACIONAL.

Por ello,
EL PRESIDENTE DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:

TITULO I
DE LA COMISION NACIONAL DE
EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA

Artículo 1º. La COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION


UNIVERSITARIA (CONEAU), cuya creación, jurisdicción, misiones y
atribuciones determinan los artículos 44º, 46º y 47º de la Ley N° 24.521,
funcionará de acuerdo con lo que determinan las cláusulas siguientes.

TITULO II
DEL CONSEJO DIRECTIVO

CAPITULO 1
DE SU INTEGRACION

Artículo 2º. El gobierno de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y


ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) estará a cargo de los
miembros designados por el procedimiento establecido por el artículo 47º de
la Ley N° 24.521, los que deberán ser personalidades de reconocida jerarquía
en el campo académico, científico o de gestión institucional y ejercerán sus
funciones a título personal y con total independencia de criterio.1

Artículo 3º. Los organismos que de conformidad con lo dispuesto en el artículo 47º de la
Ley N° 24.521 deban nominar a más de UN (1) miembro de la
COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION
UNIVERSITARIA (CONEAU), deberán procurar que la propuesta se
integre con especialistas de distintas áreas del conocimiento y vinculados a
distintas regiones del país.

Artículo 4º. El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION podrá convocar a la


primera reunión constitutiva de la COMISION NACIONAL DE
EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU)
cuando se hubiera designado un mínimo de SIETE (7) miembros, sin
perjuicio de la posterior incorporación de los restantes una vez que fueran
nominados y designados.2

Artículo 5º. En la primera reunión de la Comisión que se realice con el total de sus
miembros, se procederá a determinar por sorteo aquél los que cesarán a los
DOS (2) años a fin de posibilitar el sistema de renovación parcial.3

Artículo 6º. Las retribuciones de los miembros de la COMISION NACIONAL DE


EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) serán
fijadas por Resolución Conjunta de los Ministros de Cultura y Educación y
de Economía y Obras y Servicios Públicos de acuerdo con lo dispuesto por
el artículo 3º, inciso i) del Decreto N° 101 de fecha 16 de enero de 1985,
incorporado por su similar N° 1716 del 15 de septiembre de 1992.4

1
Texto según Decreto N° 705/97.(Texto anterior: artículo 2º. El gobierno de la COMISION
NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA estará a cargo de un
Consejo Directivo integrado en la forma establecida por el artículo 47º de la Ley N° 24.521. Los
miembros de ese Consejo deberán ser personalidades de reconocida jerarquía en el campo
académico, científico o de gestión institucional y ejercerán sus funciones a título personal y con
total independencia de criterio).
2
Texto según decreto N° 705/97. (Texto anterior: artículo 4º. EL MINISTERIO DE CULTURAY
EDUCACION podrá convocar a la primera reunión constitutiva del Consejo Directivo de la
COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA
(CONEAU) cuando se hubiera designado un mínimo de SIETE (7) miembros, sin perjuicio de la
posterior incorporación de los consejeros restantes una vez que fueran nominados y designados.
3

Texto según decreto N° 705/97. Texto Anterior: artículo 5º. En la primera reunión del Consejo
Directivo que se realice con el total de sus miembros, se procederá a determinar por sorteo aquél los
que cesarán a los DOS (2) años a fin de posibilitar el sistema de renovación parcial.
4

Texto según decreto N° 705/97. Texto Anterior: artículo 6º. Una vez constituido el Consejo
Directivo de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION
UNIVERSITARIA (CONEAU) propondrá al PODER EJECUTIVO NACIONAL la dedicación y
retribución de sus miembros, dentro del marco del presupuesto que le hubiere sido asignado.
Artículo 7º. El miembro que dejara de concurrir a TRES (3) sesiones consecutivas de la
COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION
UNIVERSITARIA (CONEAU) sin causa justificada, será considerado
renunciante, debiendo ser reemplazado por otro elegido según el
procedimiento previsto en el artículo 47º de la Ley N° 24.521. Asimismo la
COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION
UNIVERSITARIA (CONEAU), por el voto de los DOS TERCIOS (2/3) del
total de sus miembros, podrá solicitar por razones fundadas que se reemplace
a UNO (1) de sus integrantes que no diera debido cumplimiento a sus
obligaciones, en cuyo caso la institución que lo nominó deberá proponer un
nuevo candidato.5

CAPITULO 2
DE SU FUNCIONAMIENTO

Artículo 8º. La COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION


UNIVERSITARIA (CONEAU) sesionará los días que el propio cuerpo
establezca de conformidad con las necesidades de trabajo. Podrá convocarse,
asimismo, a sesión extraordinaria a petición de cualquiera de sus miembros.
Para sesionar válidamente se requerirá la presencia de por lo menos la mitad
más uno de sus integrantes, exigiéndose mayoría absoluta de los presentes
para adoptar resoluciones, salvo cuando se trate de resoluciones que
aprueben dictámenes finales vinculantes, en cuyo caso deben ser adoptadas
con el voto de la mitad más uno del total de sus miembros. En los casos en
que la Ley N° 24.521 requiere una opinión no vinculante, la COMISION
NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA
(CONEAU) emitirá un dictamen donde conste el punto de vista mayoritario
y las disidencias totales o parciales.6
5
Texto según decreto N° 705/97. Texto Anterior: artículo 7º. El consejero que dejara de concurrir a
TRES (3) sesiones consecutivas del Consejo sin causa justificada, será considerado renunciante,
debiendo ser reemplazado por otro elegido según el procedimiento previsto en el artículo 47º de la
Ley N° 24.521. Asimismo el Consejo Directivo, por el voto de los DOS TERCIOS (2/3) del total de
sus miembros, podrá solicitar por razones fundadas que se reemplace a un consejero que no diera
debido cumplimiento a sus obligaciones, en cuya caso la institución que lo nominó deberá proponer
un nuevo candidato.
6

Texto según decreto N° 705/97. Texto anterior artículo 8º. El Consejo Directivo de la COMISION
NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) sesionará
los días que el propio cuerpo establezca de conformidad con las necesidades de trabajo. Podrá
convocarse, asimismo, a sesión extraordinaria a petición de cualquiera de sus miembros. Para
Sesionar válidamente se requerirá la presencia de por lo menos la mitad más uno de sus integrantes,
exigiéndose mayoría absoluta de los presentes para adoptar resoluciones, salvo cuando se trate de
resoluciones que aprueben dictámenes finales vinculantes, en cuyo caso deben ser adoptadas con el
voto de la mitad más uno del total de sus miembros. En los casos en que la Ley N° 24.521 requiere
una opinión no vinculante, la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION
Artículo 9º. Derogado por artículo 3º del Decreto N° 705/97.7

Artículo 10º. La presidencia de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y


ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) será ejercida por UNO
(1) de sus integrantes designado por el voto de la mitad más uno del total de
sus miembros, quien ejercerá la representación de la Comisión y conducirá
las reuniones del cuerpo. El cargo será ejercido por el término de UN (1)
año, pudiendo su presidente ser reelegido. Por el mismo procedimiento y
término se designará UN (1) Vicepresidente que sustituirá al Presidente en
caso de ausencia de éste.8

TITULO III
DEL DIRECTOR EJECUTIVO

Artículo 11º. La COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION


UNIVERSITARIA (CONEAU) deberá proceder a la presentación de su
estructura organizativa dentro del plazo de NOVENTA (90) días a partir de
su constitución. Dicha estructura se completará con UN (1) Director
Ejecutivo, que se desempeñará con un cargo de Nivel A del SISTEMA
NACIONAL DE LA PROFESION ADMINISTRATIVA aprobado por
Decreto N° 993/91 y con personal de apoyo técnico y administrativo, todos
los cuales deberán ser designados por concurso de conformidad con las
normas que rigen el mencionado sistema.

Artículo 12º. El Director Ejecutivo, quien deberá contar con antecedentes académicos y de
gestión adecuados y suficientes para dicho cargo, tendrá básicamente las
siguientes funciones:

a) asistir a las reuniones de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y


ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU), con voz pero sin voto;9
UNIVERSITARIA (CONEAU) emitirá un dictamen donde conste el punto de vista mayoritario y
las desidencias totales o parciales.
7

Texto Anterior artículo 9º. Contra las resoluciones de la COMISION NACIONAL DE


EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) no habrá más recursos que el
de reconsideración ante el mismo órgano. Resuelto el mismo, quedará expedita la vía judicial
correspondiente.
8

Texto según decreto N° 705/97. Texto Anterior: artículo 10º. La presidencia del Consejo Directivo
de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA
(CONEAU) será ejercida por UNO (1) de sus integrantes designado por el voto de la mitad más uno
del total de sus miembros, quién ejercerá la representación de la Comisión y conducirá las reuniones
del Consejo. El cargo será ejercido por el término de UN (1) año, no pudiendo su presidente ser
reelegido. Por el mismo procedimiento y término se designará UN (1) Vicepresidente que sustituirá
al Presidente en caso de ausencia de éste.
9
Texto según decreto N° 705/97. Texto anterior: a) asistir a las reuniones del Consejo Directivo,
con voz pero sin voto;
b) organizar los procesos de evaluación y acreditación;
c) apoyar la labor integral de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU);
d) organizar, dirigir y supervisar las tareas del personal que integre la estructura;
e) prestar asistencia a los miembros de la Comisión;
f) organizar y coordinar cursos y seminarios de especialización obligatorios para los
integrantes del Comité de Pares;
g) presentar anualmente a la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) el proyecto de presupuesto para el
año entrante;10
h) realizar las demás actividades que le asigne la reglamentación.

Artículo 13º. EL MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION procederá a designar


UN (1) Director Ejecutivo interino, que cubrirá el cargo hasta que el mismo
sea provisto por concurso.

TITULO IV
DE LAS COMISIONES ASESORAS
Y DE LOS COMITE DE PARES

Artículo 14º. La COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION


UNIVERSITARIA (CONEAU) formará Comisiones Asesoras para cada una
de sus funciones específicas, compuestas por un número variable de
miembros, todos ellos personas de reconocido prestigio y experiencia
académica, profesional o en gestión institucional, escogidos en consulta con
los organismos universitarios, académicos, científicos, administrativos,
profesionales y empresariales pertinentes. Los miembros de las Comisiones
rotarán periódicamente. En cada Comisión participará necesariamente por lo
menos UN (1) miembro de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION
Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU), quien la coordinará.
Las Comisiones Asesoras emitirán opiniones respecto de cada uno de los
asuntos sometidos a su consideración por la COMISION NACIONAL DE
EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU), sin
que ellas tengan carácter vinculante.11

10
Texto según decreto N° 705/97. Texto anterior: g) presentar anualmente al Consejo Directivo el
proyecto de presupuesto para el año entrante;
11

Texto según decreto N° 705/97. Texto Anterior artículo 14º. La COMISION NACIONAL DE
EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) formará Comisiones
Asesoras para cada una de sus funciones específicas, compuestas por un número variable de
miembros, todos ellos personas de reconocido prestigio y experiencia académica, profesional o en
gestión institucional, escogidos en consulta con los organismos universitarios, académicos,
científicos, administrativos, profesionales y empresariales pertinentes. Los miembros de las
Comisiones rotarán periódicamente. En cada Comisión participará necesariamente por lo menos UN
(1) miembro del Consejo Directivo, quien la coordinará. Las Comisiones Asesoras emitirán
opiniones respecto de cada uno de los asuntos sometidos a su consideración por el Consejo
Directivo, sin que ellas tengan carácter vinculante.
Artículo 15º. A los fines de contar con recomendaciones técnicas en los distintos trámites
sobre los que corresponda la participación de la COMISION NACIONAL
DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU),
ésta constituirá en forma ad-hoc Comité de Pares que estarán integrados por
expertos y se organizarán en base a áreas disciplinarias o profesionales para
cada trámite de que se trate. Los pares evaluadores aplicarán en cada caso los
criterios, estándares y procedimientos aprobados por la COMISION
NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA
(CONEAU), en los cuales serán debidamente instruidos.

Artículo 16º. A los fines de la conformación de las Comisiones Asesoras y de los Comité
de Pares, la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) formará y mantendrá
actualizado un registro de expertos, por áreas disciplinarias y profesionales,
que reúnan las condiciones necesarias a esos efectos, procurando que la
misma esté integrada también por potenciales evaluadores del exterior. Para
conformar dicho registro la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) consultará a las
universidades y a las asociaciones científicas y profesionales
correspondientes a fin de recibir sugerencias al respecto.

Artículo 17º. La COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION


UNIVERSITARIA (CONEAU) definirá las condiciones y requisitos que
deberán reunir los miembros de las Comisiones Asesoras y de los Comité de
Pares, garantizando el necesario nivel intelectual de los mismos, su
independencia de criterio y su aceptación de los reglamentos.

Artículo 18º. Los miembros de las Comisiones Asesoras y de los Comité de Pares
percibirán las sumas compensatorias que, para cada caso y de conformidad
con las particularidades del trabajo que se les encomiende, fije el señor
Ministro de Cultura y Educación, con intervención de la COMISION
TECNICA ASESORA DE POLITICA SALARIAL DEL SECTOR
PUBLICO, cuando corresponda.12

TITULO V
DE LAS FUNCIONES

CAPITULO 1
DE LA EVALUACION

12
Texto según decreto N° 705/97. Texto anterior: artículo 18º. Los miembros de las Comisiones
Académicas y de los Comité de Pares percibirán las sumas compensatorias que, para cada caso y de
conformidad con las particularidades del trabajo que se les encomiende, fije el señor Ministro de
Cultura y Educación, con intervención de la COMISION TECNICA ASESORA DE POLITICA
SALARIAL DEL SECTOR PUBLICO.
Artículo 19º. A los efectos de dar comienzo a los procesos de evaluación institucional
externa previstos en el artículo 44º de la Ley N° 24.521, la COMISION
NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA
(CONEAU) preparará una agenda escalonada procurando contemplar los
requerimientos y propuestas de cada universidad, la que no podrá extenderse
a más de DIECIOCHO (18) meses computados desde la constitución del
cuerpo.

Artículo 20º. Los procesos de evaluación externa que se encuentren actualmente en


trámite o concluidos, en función de convenios entre las universidades y el
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, se considerarán válidos a
los fines previstos en la Ley N° 24.521.13

Artículo 21º. El proceso de evaluación externa de las instituciones universitarias deberá


alcanzar, en los casos que así corresponda, a las instituciones que aquéllas
hayan acreditado en virtud del artículo 22º de la Ley N° 24.521.

CAPITULO 2
DE LA ACREDITACION

Artículo 22º. El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION acordará con la


COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION
UNIVERSITARIA (CONEAU) la oportunidad para la transferencia de todos
los trámites de acreditación de posgrados que se sustancian por ante la
COMISION DE ACREDITACION DE POSGRADO, dependiente de la
SECRETARIA DE POLITICAS UNIVERSITARIAS del mencionado
Ministerio, debiendo continuarse los mismos a partir del estado en que se
encuentren, con reconocimiento de los pasos cumplidos.

CAPITULO 3
DE LOS DICTAMENES PARA EL
FUNCIONAMIENTO DE UNIVERSIDADES ESTATALES
Y LA AUTORIZACION DE UNIVERSIDADES PRIVADAS

Artículo 23. El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION no podrá, sin el dictamen


favorable de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA autorizar la puesta en marcha de una
nueva institución universitaria nacional o el reconocimiento de una
provincial, ni otorgar la autorización provisoria o el reconocimiento
definitivo a una institución universitaria privada. El dictamen favorable no
obliga al citado Ministerio a otorgar las autorizaciones aludidas cuando
tuviera razones fundadas para apartarse del mismo.
13

Texto según decreto N° 705/97. Texto anterior: artículo 20º. Los procesos de autoevaluación y
evaluación externa que se encuentren actualmente en trámite o concluidos, en función de convenios
entre las universidades y el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, se considerarán
válidos a los fines previstos en la Ley N" 24.521.
Artículo 24º. Los expedientes en los que se tramitan solicitudes de autorización provisoria
para el funcionamiento de universidades privadas que se encontraban, a la
fecha de sanción de la Ley N° 24.521, en condiciones de pasar a la Comisión
Consultiva prevista por los artículos 11º y 12º del Decreto N° 2.330/93,
deberán ser remitidos a la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) a los fines de su
tratamiento directo por el cuerpo, teniendo por válidos los trámites
cumplidos. En los demás trámites le imprimirá el tratamiento que se estime
conveniente.14

TITULO VI
DE LAS NORMAS COMPLEMENTARIAS

Artículo 25º. La COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION


UNIVERSITARIA (CONEAU) deberá asegurar a las partes interesadas la
posibilidad de ser oída antes de dictarse una resolución o emitirse un
dictamen que pudiera afectarlas.

Artículo 26º. La COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION


UNIVERSITARIA (CONEAU) aprobará un Código de Etica para todos los
miembros de sus organismos de gobierno, Comisiones Asesoras, y Comité
de Pares, que regulará su intervención en los trámites bajo consideración de
la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION
UNIVERSITARIA (CONEAU), recomendando la abstención cuando su
vinculación académica o institucional directa con los mismos pudiera
comprometer su imparcialidad.

Artículo 27º. Sin perjuicio del cumplimiento de los trámites que prevea la reglamentación
específica, el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION deberá
efectuar, antes de remitir los antecedentes respectivos a la COMISION
NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA
(CONEAU) en los casos en que correspondiera su intervención, un juicio de
admisibilidad a fin de comprobar que se hayan cumplimentado los requisitos
formales indispensables.

Artículo 28º. El Director Ejecutivo deberá someter a la COMISION NACIONAL DE


EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) para
su consideración y aprobación, dentro de los SESENTA (60) días de
14

Texto según decreto N° 705/97. Texto Anterior artículo 24º. Los expedientes en los que se tramitan
solicitudes de autorización provisoria para el funcionamiento de universidades privadas que se
encontraban, a la fecha de sanción de la Ley N° 24.521, en condiciones de pasar a la Comisión
Consultiva prevista por los artículos 11º y 12º del Decreto N° 2.330/93, deberán ser remitidos a la
COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA
(CONEAU) a los fines de su tratamiento directo por el Consejo Directivo, teniendo por válidos los
trámites cumplidos. En los demás trámites se imprimirá el tratamiento que se estime conveniente.
constituido el cuerpo, un proyecto de reglamento interno compatible con las
disposiciones de la Ley N° 24.521 y las del presente decreto.15

Artículo 29º. Hasta tanto se incorpore en el Presupuesto General de la Nación una partida
especial para la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU), los gastos que demande
su funcionamiento serán financiados con cargo al presupuesto del
MINISTERIO DE CULTURAY EDUCACION. Artículo 2º, Decreto N°
705/97.- Establécese que el desempeño como miembro de la COMISION
NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA
(CONEAU) no resulta incompatible con ninguna otra actividad educativa o
en instituciones de educación superior, públicas o privadas y de la
investigación científica.

Artículo 30º. Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial
y archívese.

15
Texto según decreto N° 705/97. Texto anterior: artículo 28º. El Director Ejecutivo deberá someter
al Consejo Directivo para su consideración y aprobación, dentro de los SESENTA (60) días de
constituido el cuerpo, un proyecto de reglamento interno compatible con las disposiciones de la Ley
N° 24.521 y las del presente decreto.
DECRETO P.E.N. N° 576

BUENOS AIRES, 30 MAYO 1996

VISTO la Ley N° 24.521, y

CONSIDERANDO:

Que resulta necesario reglamentar las previsiones de dicha ley relacionadas con
la creación, seguimiento y fiscalización de instituciones universitarias privadas.

Que a tal fin, además de la normativa específica relacionada con los nuevos
institutos creados por la Ley N° 24.521, se ha tomado en consideración la valiosa
experiencia arrojada por la aplicación del Decreto N° 2.330 del 11 de noviembre de 1993.

Que la presente medida se dicta de conformidad con lo establecido por el artículo


99º, inciso 2º) de la CONSTITUCION NACIONAL.

Por ello,

EL PRESIDENTE DE LA NACION ARGENTINA


DECRETA:

CAPITULO I
DE LAS FACULTADES DEL MINISTERIO

Artículo 1º. Los trámites correspondientes a la creación, seguimiento y fiscalización de


las instituciones universitarias privadas comprendidas en el Título IV,
Capítulo 5 de la Ley N° 24.521 se efectuarán, con los alcances allí
establecidos, ante el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION.

Artículo 2º. El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION tendrá a los fines


indicados en el artículo 1º, además de las establecidas en los artículos 64º,
65º y concordantes de la Ley N° 24.521, las siguientes facultades y deberes:

a) Entender en todo lo concerniente al otorgamiento de las


autorizaciones provisorias y definitivas.
b) Controlar el cumplimiento de las normas referentes a la utilización de
las denominaciones previstas en los artículos 64º inciso c), 68º y
concordantes de la Ley N° 24.521.
c) Organizar un registro general de instituciones universitarias privadas
y un legajo especial para cada una de ellas, con todos los antecedentes
que se consideren necesarios.
CAPITULO II
DE LA AUTORIZACION DE NUEVAS
INSTITUCIONES UNIVERSITARIAS PRIVADAS

Artículo 3º. La autorización provisoria de instituciones universitarias privadas será


otorgada por decreto del PODER EJECUTIVO NACIONAL sobre la base
de la calidad y pertinencia de la propuesta educativa contenida en el proyecto
presentado mediante solicitud a tal efecto, previo informe favorable de la
COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION
UNIVERSITARIA (CONEAU).
La autorización bajo la denominación de "Universidad" exigirá variedad de
facultades, escuelas, institutos o departamentos, orgánicamente
estructurados. La creación y funcionamiento de facultades, institutos,
departamentos u otro tipo de establecimientos universitarios aislados, serán
autorizados bajo la denominación "Institutos Universitarios".
La autorización será concedida con expresa indicación de las carreras,
grados y títulos que se cursen u otorguen en la institución correspondiente y
de la jurisdicción territorial dentro de la que deberá concentrar sus
actividades. Excepcionalmente, cuando fundadas razones así lo justifiquen y
se acredite además, capacidad de gestión suficiente, podrá permitirse crear
sedes o unidades académicas fuera de la jurisdicción que les es propia.

Artículo 4º. La solicitud de autorización para el funcionamiento provisorio de una nueva


institución universitaria privada deberá presentarse de conformidad con las
formalidades que establezca el MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION e integrarse con:
a) Certificación de la personería jurídica de la entidad peticionante.
b) Acreditación de la personería del representante de la entidad
peticionante.
c) Elementos que evidencien la responsabilidad moral, financiera y
económica de los integrantes de la asociación o fundación.
d) Datos personales y antecedentes educativos, académicos y de
investigación completos de las personas integrantes de los órganos de
gobierno de la institución universitaria, con indicación de los cargos que
desempeñarán.
e) Inventario inicial y balance constitutivo, si lo hubiere, y balances
posteriores, hasta el ejercicio correspondiente a la fecha de presentación,
debidamente certificados por Contador Público Nacional.
f) Compromiso formal de acreditar, en el caso de Universidades, un
patrimonio propio de PESOS UN MILLON ($1.000.000) o más, con
indicación detallada de su origen y composición, y de PESOS
TRESCIENTOS MIL ($300.000) o más, en el caso de Institutos
Universitarios.
g) El proyecto institucional de la institución universitaria, con
descripción de objetivos y planes de acción para su desarrollo por SEIS
(6) años, con justificación de su ecuación económico financiera;
proyectos educativos completos y planes de investigación y extensión.
h) Proyecto del estatuto académico o su normativa equivalente, el cual
deberá determinar explícitamente los siguientes aspectos mínimos: la
sede en la que desarrollará sus actividades, de acuerdo al criterio
establecido en el artículo 3º; los objetivos de la institución; su estructura
organizativa; la integración y funciones de los distintos órganos de
gobierno, así como el régimen de la docencia y de la investigación y
pautas de administración económico-financiera.
i) Las carreras que se ofrecerán inicialmente y para las cuales se solicita
autorización, incluyendo en cada caso la información que requiera la
reglamentación que dicte el MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION.
j) Descripción documentada de las instalaciones disponibles para la
institución con el propósito de acreditar la posibilidad de cumplimiento
de sus fines, de acuerdo a los requisitos que establezca la reglamentación
que dicte el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION.
k) Garantía a la orden del MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION por la suma de PESOS SESENTA MIL ($60), la que
podrá ser integrada en depósito bancario, seguro de caución o títulos
públicos. Esta suma será reintegrada una vez que se otorgue a la
institución universitaria la autorización definitiva, o bien dentro de los
QUINCE (15) días posteriores a la denegación de la autorización
provisoria.

Artículo 5º. Presentada la solicitud, el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION


verificará que se ajuste a los requisitos establecidos en el artículo precedente
y, en su caso, formulará las observaciones que correspondan.

Artículo 6º. Presentada la solicitud con sujeción a los requisitos indicados, el


MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION realizará un análisis
preliminar de la congruencia de la presentación, que constate si el proyecto
institucional y académico se adecua a los principios y normas que surgen de
los artículos 27º, 28º, 62º, 74º y concordantes de la Ley N° 24.521 por los
procedimientos que considere adecuados, y elaborará una evaluación
provisoria de la que dará vista al peticionante por el plazo de TREINTA (30)
días hábiles. Cumplido dicho plazo, cualquiera sea el resultado de la vista, e1
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION remitirá las actuaciones,
junto con un informe técnico ampliatorio, a la COMISION NACIONAL DE
EVALUAICION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) a los
fines previsto; en los artículos 62º y 63º de la Ley N° 24.521.

Artículo 7º. Si el informe de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y


ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) fuera desfavorable, el
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION dictará resolución
disponiendo la conclusión del trámite con notificación al peticionante. En
caso de informe favorable, el MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION elevará lo actuado al PODER EJECUTIVO NACIONAL
aconsejando la resolución que a su juicio corresponda.

Artículo 8º. La institución que hubiere obtenido la autorización provisoria no podrá dar
comienzo a las actividades académicas hasta tanto se cumplimenten los
siguientes recaudos a través del MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION:
a) Aprobación de los estatutos.
b) Aprobación de los planes de estudio de las carreras autorizadas en el
decreto de habilitación.
c) Acreditación del cumplimiento de todas las exigencias establecidas
en el artículo 4º del presente decreto y de los compromisos asumidos. así
como de la habilitación de los edificios por los organismos pertinentes y
verificación de dichos extremos por parte del Ministerio.

CAPITULO III.
DE LAS INSTITUCIONES UNIVERSITARIAS
CON AUTORIZACION PROVISORIA

Artículo 9º. Las instituciones universitarias autorizadas en forma provisoria tendrán que
indicar dicha circunstancia en todos sus anuncios, publicaciones y
documentación, agregando debajo o a continuación del nombre la siguiente
leyenda: "Autorizada provisoriamente por DECRETO del PODER
EJECUTIVO NACIONAL N°..., conforme a lo establecido en el artículo 64º
inciso c) de la Ley N° 24.521". En caso de incumplimiento, la institución se
hará pasible de las sanciones dispuestas en los artículos 22º inciso e) y 24º
del presente.

Artículo 10º. Las instituciones universitarias con autorización provisoria deberán elevar al
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION un informe anual dentro de
los TRES (3) meses de finalizado cada año lectivo, señalando los avances
realizados y evaluándolos con respecto al grado de cumplimiento de sus
objetivos institucionales y académicos y planes de acción. Dicho informe se
elaborará conforme a las pautas que establezca el MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION.

Artículo 11º. El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION verificará la veracidad


de la información a que hace referencia el artículo anterior mediante los
procedimientos que considere necesarios y elevará los antecedentes a la
COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION
UNIVERSITARIA (CONEAU) a los fines previstos en el artículo 64º inciso
a) de la Ley N° 24.521. Con su informe hará el seguimiento de la institución
y evaluará su adecuación a las condiciones en que fue otorgada la
autorización provisoria. En caso necesario, dispondrá los correctivos que
deberán adoptarse.
CAPITULO IV
DE LA AUTORIZACION DEFINITIVA

Artículo 12º. Una vez transcurrido el lapso previsto en el artículo 65º de la Ley N° 24.521,
el establecimiento podrá solicitar el reconocimiento definitivo para operar
como institución universitaria privada, a cuyo fin deberá acompañar la
siguiente documentación:
a) Acreditación de la personería del representante.
b) Copia autenticada de la resolución del órgano competente de la
institución pertinente, por la cual se decide solicitar la autorización
definitiva.
c) Datos personales y antecedentes educativos, académicos y de
investigación completos de las personas integrantes de los órganos de
gobierno de la entidad peticionante, con indicación de los cargos que
desempeñan.
d) Indicación detallada y actualizada de 1a composición del patrimonio
del establecimiento, con determinación de su origen y fechas de
adquisición y copia autenticada por Escribano Público de los títulos de
propiedad de los bienes registrables.
e) Nómina completa del personal directivo, docente, técnico y
administrativo del establecimiento, con indicación de título,
antecedentes, cargos y dedicación.
f) Copias autenticadas del estatuto académico y de las reglamentaciones
internas.
g) Presupuesto financiero con indicación de origen y destino de los
recursos, que acredite la posibilidad del normal desarrollo de las
actividades docente y de investigación de la institución.
h) Informe con la evaluación de los logros alcanzados en los SEIS (6)
años de gestión, en relación con el proyecto institucional inicial; copia de
las evaluaciones externas efectuadas en ese lapso; copia de los informes
de las fiscalizaciones efectuadas por el MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION.
i) Memoria general de la institución en 1a que conste su evolución
desde la fundación; los resultados obtenidos; 1a actividad docente y de
investigación desarrollada; las instalaciones, y estadísticas generales con
especial indicación de la evolución de la matricula, del número de
alumnos aprobados y reprobados y del número de graduados y
desertores, con discriminación por año académico, facultades, escuelas,
carreras y títulos. Asimismo deberán acreditar relaciones institucionales
con universidades e instituciones académicas nacionales y del extranjero.
j) Los resultados de una autoevaluación institucional realizada dentro
del año anterior a la presentación de la solicitud definitiva.
k) Evaluación externa de la COMISION NACIONAL DE
EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) o
una entidad privada de evaluación y acreditación reconocida.
l) Copia de los informes anuales presentados según lo dispuesto en el
artículo 10º desde su autorización provisoria.
m) Un proyecto de desarrollo institucional para los SEIS (6) años
siguientes, en el que se detallará, entre otros, los cambios que serán
introducidos en las unidades docentes o de investigación y la apertura o
cierre de los programas previstos para ese período.

Artículo 13º. Efectuada la presentación de la solicitud de autorización definitiva, ésta se


substanciará de acuerdo con el procedimiento establecido en los artículos 5°,
6° y 7° del presente decreto. Al expediente se le incorporarán los informes
anuales producidos por la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU), los informes técnicos
del CONSEJO DE RECTORES DE UNIVERSIDADES PRIVADAS
(CRUP) si los hubiere, y las evaluaciones del MINISTERIO DE CULTURA
Y EDUCACION.

CAPITULO V.
DE LAS MODIFICACIONES Y REFORMAS

Artículo 14º. Las instituciones universitarias privadas comunicarán al MINISTERIO DE


CULTURA Y EDUCACION todas las modificaciones en la composición de
sus órganos de gobierno.

Artículo 15º. Sólo podrá autorizarse a las instituciones universitarias privadas a crear
sedes o unidades académicas equivalentes fuera de la jurisdicción que les es
propia, cuando se den las circunstancias de excepción previstas en el artículo
3° del presente decreto.

Artículo 16º. Durante el período de autorización provisoria, toda modificación de los


estatutos, creación de nuevas carreras, grados o títulos y cambios en los
planes de estudio, deberá ser autorizada por el MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION. Si tal propuesta no encuadrara en el plan de
acción a que refiere el inciso g) del artículo 4° deberá contarse, además, con
informe favorable de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA.

Artículo 17º. En los casos en que las instituciones privadas con autorización provisoria
soliciten autorización para la creación de nuevas carreras, facultades,
institutos, escuelas, departamentos, grados o títulos y cambio de planes de
estudio el MINISTERIO IJE CULTURA Y EDUCACION recabará la
opinión del CONSEJO DE RECTORES DE UNIVERSIDADES
PRIVADAS (CRUP), el cual deberá expedirse en el término de TREINTA
(30) días hábiles y de expertos convocados al electo los que se expedirán
dentro del mismo plazo. De tales dictámenes se dará vista al peticionante por
el término perentorio de QUINCE (15) días hábiles, para que formule las
observaciones que considere adecuadas. Con su resultado, el señor Ministro
de Cultura y Educación dictará la resolución correspondiente.
Artículo 18º. Las instituciones universitarias privadas con autorización definitiva deberán
comunicar al MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION las
modificaciones introducidas a sus estatutos académicos o normativa
equivalente, con copia de las mismas, a los fines previstos en el artículo 34º
de la Ley N° 24.521.

Artículo 19º. Las instituciones universitarias con autorización definitiva deberán


comunicar al MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION la creación de
nuevas facultades, escuelas, institutos, departamentos, carreras, grados o
títulos, acompañando las copias y antecedentes que determine la normativa
que dicte el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION. Sin perjuicio
de ello deberán dar cumplimiento a lo previsto en los artículos 41º, 42º y 43º
de la Ley N° 24.521 y 21, incisos 10) y 11 ), de la Ley de Ministerios
(t.o.1992) antes de comenzar las actividades académicas respectivas.

CAPITULO VI
DE LAS CERTIFICACIONES DE TITULOS

Artículo 20º. La certificación de los títulos académicos expedidos por instituciones


universitarias privadas con autorización provisoria, será extendida por el
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, previa verificación de la
aprobación de las materias del plan de estudios correspondiente y del
cumplimiento de los requisitos legales, estatutarios y reglamentarios. El
trámite será efectuado por intermedio de la institución respectiva, la cual
acompañará en cada caso un certificado en el que conste la totalidad de las
calificaciones y de las pruebas rendidas por el interesado, con indicación de
las fechas de estas últimas. Dicho certificado se archivará en el
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION.

Artículo 21º. Las instituciones universitarias privadas con autorización definitiva podrán
expedir los diplomas de sus egresados sin intervención previa del
MINISTERICO DE CULTURA Y EDUCACION, dando cuenta al mismo
de los diplomas que se expidan con los datos de los egresados, dentro de los
TREINTA (30) días de otorgados. Tendrán como único requisito para su
validez la autenticación por parte del MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION de las firmas de las autoridades que los expidan.

CAPITULO VII
DE LA FISCALIZACION Y SEGUIMIENTO ACADEMICO

Artículo 22º. A los electos del seguimiento académico y fiscalización de las instituciones
el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION podrá disponer las
medidas que considere adecuadas y en particular las siguientes:
a) Examinar los libros, registros y documentación relacionados con la
actividad académica, administrativa y financiera de las instituciones
autorizadas. Los libros de actas de sesiones de los órganos de gobierno
del establecimiento y de actas de exámenes, deberán ser rubricados y
foliados por e1 órgano competente del MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION.
b) Disponer inspecciones en los establecimientos cuando observare o
tuviere conocimiento de irregularidades, de actos violatorios de las leyes,
decretos y estatutos que los rigen o cuando fuere necesario para el
cumplimiento de los deberes conferidos al MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION, por la ley N° 24.521 y por su normativa
reglamentaria.
c) Disponer las medidas necesarias para dar cumplimiento a lo previsto
en el artículo 64º inciso a) de la Ley N° 24.521, a cuyo efecto el
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION dictará la normativa
pertinente en cuanto a requisitos y procedimientos.
d) Requerir la colaboración de las autoridades competentes.
e) Prohibir la circulación y secuestrar las publicaciones cuyo texto no se
ajuste a las normas del artículo 64º inciso c) de la Ley N° 24.521.
f) Expedir certificaciones y testimonios en las actuaciones en las cuales
intervenga, y, determinar las condiciones formales de los certificados y
diplomas.

Artículo 23º. El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION podrá ordenar la


fiscalización de una institución universitaria con autorización definitiva con
los alcances previstos en el artículo 65º de la Ley N° 24.521, o su evaluación
fuera de los plazos previstos en el artículo 44º de la Ley N° 24.521, mediante
resolución fundada y cuando graves razones lo justifiquen.

Artículo 24º. Las instituciones privadas autorizadas que no den cumplimiento a las
obligaciones impuestas por la Ley N° 24.521, su normativa reglamentaria o
los estatutos respectivos, estarán sujetas a las siguientes sanciones:
a) Llamado de atención.
b) Apercibimiento.
c) Intimación al establecimiento a que suspenda sus actividades.
d) Intervención por tiempo determinado.
e) Clausura definitiva, total o parcial.

Las sanciones previstas en los incisos a), b) y c) podrán ser dispuestas por el
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION. Las previstas en los incisos
d) y e) deberán ser dispuestas por decreto del PODER EJECUTIVO
NACIONAL.

Artículo 25º. El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION dictará las normas de


procedimiento necesarias para la aplicación de las sanciones previstas
precedentemente, garantizando el derecho de defensa de las partes.
Artículo 26º. EL MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION actuará como órgano de
aplicación a los efectos de comprobar las violaciones a la prohibición
establecida en el artículo 68º de la Ley N° 24.521 y dictará las sanciones que
correspondan, siguiendo para ello el procedimiento que a esos efectos
determine.
Constatada la violación, el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION
intimará a la entidad a que suspenda sus actividades. El incumplimiento hará
pasible a la entidad de la aplicación de las siguientes sanciones:
a) Clausura inmediata y definitiva.
b) Inhabilitación de los responsables de la entidad para ejercer la
docencia, así como para desempeñar la función pública o integrar órganos de
gobierno de asociaciones civiles dedicadas a la educación superior, por el
término de DOS (2) a cinco (5) años.

CAPITULO VIII
DE LAS TASAS DE SERVICIOS Y CONTRIBUCIONES ECONOMICAS

Artículo 27º. A los finés de la realización de los trámites que se indican a continuación, las
instituciones privadas deberán abonar las siguientes tasas:
a) Solicitud de autorización provisoria y definitiva: Pesos DIEZ MIL
($10.000)
b) Solicitud de autorización para la creación de una nueva sede,
facultad, escuela, instituto, departamento, carrera, grado y título: Pesos
DOS MIL ($2.000)

Se faculta al MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION a modificar los


montos indicados precedentemente.
Las tasas se abonarán mediante depósito bancario efectuado en una cuenta
que deberá habilitar al efecto el MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION.

CAPITULO IX
DISPOSICIONES TRANSITORIAS

Artículo 28º. Las instituciones universitarias privadas cuya funcionamiento ha sido


autorizado provisoria o definitivamente deberán adecuar sus estatutos
académicos o normativa equivalente a las previsiones de la Ley N" 24.521
dentro de los CIENTO OCHENTA (180) días de la publicación del presente,
y comunicarlos al MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION a los
fines previstos en el artículo 34º de la norma de mención. Las
modificaciones se ajustarán a lo previsto en los artículos 16º y 18º del
presente decreto. Hasta tanto se complete dicho trámite continuarán en
vigencia los estatutos oportunamente aprobados.

Artículo 29º. Las instituciones universitarias privadas con autorización otorgada con
anterioridad a la vigencia de este decreto, deberán presentar los objetivos
institucionales y plan de acción a que hace referencia el artículo 4° inciso g),
en el plazo que establezca la normativa que dicte el MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION.

Artículo 30º. Las instituciones universitarias a las que se hubiera otorgado autorización
provisoria por resolución ministerial en virtud de la delegación de facultadas
establecidas en el Decreto N° 101/85, darán cumplimiento a la exigencia del
artículo 64º inciso c) de la Ley N° 24.521 consignando esa circunstancia y el
número de la resolución respectiva.

Artículo 31º. Las solicitudes de autorización para la reforma de los estatuto, creación de
nuevas carreras, facultades, escuelas, institutos, departamentos, grados,
títulos y modificación de planes de estudio presentadas con anterioridad a la
entrada en vigencia de la Ley N° 24.521 por las instituciones universitarias
con autorización definitiva que se hallaban sujetas a la Prueba Final de
Capacidad Profesional, se entenderán como comunicaciones en los término;
de los artículos 18º y 19º del presente decreto.

Artículo 32º. La previsión del artículo 2º1 del presente decreto será de aplicación a los
títulos expedidos por las instituciones universitarias con autorización
definitiva que se hallaban sujetas a la Prueba Final de Capacidad Profesional
con anterioridad a la entrada en vigencia de la Ley N° 24.521.

Artículo 33º. Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial
y archívese.
DECRETO P.E.N. N° 455

BUENOS AIRES, 21 de MAYO de 1997

VISTO el artículo 22 de la Ley N° 24.521, y

CONSIDERANDO:

Que la norma mencionada incorpora a nuestra legislación la figura de los


Colegios Universitarios, concebidos como una instancia académica nueva para la educación
superior, que no sólo su distingue por tener mecanismos de acreditación y eventualmente de
articulación de sus carreras o programas de formación con una o más universidades, sino
también por ofrecer un proyecto institucional y pedagógico innovador, claramente definido,
con capacidad para establecer un dinámico conjunto de relaciones con su medio y para
responder a las necesidades y requerimientos que surgen de los procesos de transformación
y desarrollo que tienen lugar en su área de influencia.

Que el legislador ha puesto énfasis en señalar que se trata efectivamente de


instituciones diferentes a los institutos de educación superior no universitaria tradicionales,
actualmente existentes, toda vez que el propio artículo 22º de la mencionada ley supone,
para que se configure un Colegio Universitario, que debe crearse una institución nueva o
bien transformarse una que ya existe.

Que dichos establecimientos educativos están insertos en un marco institucional


complejo, ya que, por un lado, se trata de instituciones de educación superior no
universitaria, sujetas en consecuencia a la legislación provincial de conformidad con lo
establecido por el artículo 15º de la Ley N° 24.521, un tanto que, por el otro, no puede
desconocerse que la calificación de <<universitarios>> otorgada por el legislador a estos
establecimientos educativos resulta precisamente de su vinculación con las universidades.

Que si bien el gobierno y organización de la educación superior no universitaria,


a la que pertenecen las instituciones a las que se refiere el artículo 22º de la Ley N° 24.521,
corresponde como se ha expresado a las provincias o al GOBIERNO DE LA CIUDAD DE
BUENOS AIRES, su articulación con el nivel universitario -y en particular la posibilidad
de que los estudios cursados en estas instituciones sean reconocidos por una universidad
para ser continuados en ella- exige que la creación de Colegios Universitarios o la
transformación de los actuales institutos terciarios en Colegios Universitarios, se ajuste a
ciertas pautas mínimas que faciliten la vinculación y garanticen la calidad de la formación
que ellos se proponen ofrecer.

Que a los efectos de evitar que cualquier institución educativa de nivel terciario
utilice la denominación de Colegio Universitario, sin respetar las pautas que garanticen los
niveles de calidad que se pretenda que tales instituciones tengan, resulta necesario y
conveniente que el PODER EJECUTIVO NACIONAL ejerza la potestad reglamentaria
establecida en el artículo 99º, inciso 2°) de la CONSTITUCION NACIONAL.

Por ello,

EL PRESIDENTE DE LA NACION ARGENTINA


DECRETA:

Artículo 1º. A los electos de ser categorizadas como Colegios Universitarios, y de poder
usar tal denominación, las instituciones de nivel superior no universitario o
la jurisdicción a la que ellas pertenezcan deberán cumplimentar ante la
autoridad de aplicación los siguientes requisitos:

a) Acreditar la autorización para funcionar como institución de nivel


superior no universitario otorgada por la respectiva jurisdicción
educativa provincial o por el GOBIERNO DE LA CIUDAD DE
BUENOS AIRES.
b) Cumplir, en tanto institución de nivel superior no universitario, con la
normativa de la jurisdicción a 1a que pertenezca.
c) Registrar en el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION el o
los convenios de acreditación previstos en el artículo 22º de la ley N°
24.521. Se entenderá que existe acreditación de una institución de
educación superior no universitaria, por parte de una universidad, cuando
ésta reconoce, luego de un proceso de evaluación, la calidad de las
carreras y programas de formación desarrollados por aquella.

Artículo 2º. El convenio a que se refiere el artículo anterior deberá ajustarse a las
siguientes pautas:
a) Las instituciones de educación superior no universitaria que pretendan ser categorizadas
como Colegios Universitarios, podrán celebrar el convenio por sí o a través de la
jurisdicción educativa competente de conformidad con las normas jurisdiccionales.
b) El convenio deberá ser firmado con una o más universidades integrantes del Sistema
Universitario Nacional. En ningún caso se admitirá que los convenios sean celebrados
por facultades, departamentos u otras unidades académicas de las universidades.
c) En el caso de que el convenio sea suscripto con una universidad privada que cuente con
autorización provisoria o con una universidad nacional en proceso de organización, se
requerirá que la institución universitaria cuente con autorización específica previa del
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, el que para su otorgamiento evaluará
los procedimientos y mecanismos previstos en el convenio, en especial los que se
estipulan en el presente decreto.
d) Las partes deberán acordar expresamente un procedimiento de acreditación periódica,
de asistencia académica y de seguimiento, por parte de la universidad, de todas las
carreras y programas de formación de la institución de educación superior no
universitaria. Dichas carreras y programas de formación no podrán tener una duración
superior a TRES (3) años.
e) Las partes deberán acordar mecanismos y compromisos concretos tendientes a asegurar
el respeto de las pautas y criterios de calidad establecidos por el CONSEJO DE
UNIVERSIDADES y el CONSEJO FEDERAL DE CULTURA Y EDUCACION.
f) El convenio deberá prever que, en caso de denuncia del mismo por alguna de las partes,
se respetará el derecho de los alumnos que hubieren comenzado sus estudios en la
institución conformada como Colegio Universitario, a concluirlos en el mismo carácter
con que los iniciaron.

Artículo 3º. Cuando, en virtud de lo acordado en el convenio a que se refiere el presente


decreto, los estudios cursados en las instituciones acreditadas sean
reconocidos como créditos académicos a los fines de ser continuados en la
universidad firmante del acuerdo, se aplicarán las siguientes reglas:
a) Solo se podrán articular contenidos curriculares equivalentes a no
más de la mitad de la duración de la carrera universitaria respectiva.
b) El personal docente de la institución acreditada deberá satisfacer los
requisitos exigidos en el artículo 36 de la Ley N° 24.521.
c) En los casos que corresponda, será de estricta aplicación lo dispuesto
en el artículo 43º de la Ley N° 24.521.

Artículo 4º. Las instituciones categorizadas como Colegios Universitarios, estarán


sujetas al proceso de evaluación externa de la universidad que las haya acreditado, previsto
en el artículo 21º del Decreto N° 173/96.

Artículo 5º. El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION como autoridad de


aplicación del presente decreto, deberá llevar un registro de los convenios
suscriptos en los términos del artículo 22º de la Ley N° 24.521. Luego de
registrados, dichos convenios serán remitidos a la COMISION NACIONAL
DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) a
los fines establecidos en el artículo 21º del Decreto N° 173/96, y a la
jurisdicción respectiva a los fines de su conocimiento.

Artículo 6º. El acto administrativo emanado de la autoridad de aplicación, en virtud del


cual se haga lugar a la registración solicitada, importará la categorización de
la institución como Colegio Universitario y la autorización para utilizar
dicha denominación.

Artículo 7º. El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION podrá rechazar la


registración solicitada mediante resolución fundada en alguna de las
siguientes causas:
a) Incumplimiento de la normativa vigente por parte del solicitante.
b) Manifiesta inconveniencia de la creación del Colegio Universitario
en el caso de que la institución de educación superior no universitaria se
encuentre ubicada en una región distinta a la de la universidad
acreditante. En ese supuesto el MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION deberá consultar previamente al CONSEJO REGIONAL
DE PLANIFICACIÓN DE LA EDUCACION SUPERIOR de la región
en la que se propone funcionar la nueva institución, el que deberá
expedirse en un plazo no superior a los SESENTA (60) días. Vencido
dicho plazo, sin que el Consejo Regional respectivo se hubiere expedido,
el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION resolverá sin más
trámite. Se entenderá por regiones, a los fines del presente artículo, a las
que define la normativa que regula el funcionamiento de los
mencionados Consejos

Artículo 8º. En todos los casos los Colegios Universitarios deberán agregar, en sus
anuncios, publicaciones y documentación, abajo o a continuación del
nombre con que se identifican, la leyenda <<ESTABLECIMIENTO DE
NIVEL TERCIARIO>>, debiéndose hacer constar asimismo el número de
resolución que hace lugar a la registración del convenio. El MINISTERIO
DE CULTURA Y EDUCACION fijará las sanciones que corresponda por la
violación de la presente norma, las que podrán llegar al retiro del registro
efectuado.

Artículo 9º. Las instituciones que no cuenten con convenios debidamente registrados en
la forma prevista en el artículo 5° del presente decreto, no podrán usar la
denominación de Colegios Universitarios. La violación de esta norma dará
lugar a la aplicación de las sanciones previstas en el artículo 68º de la Ley N°
24.521.

Artículo 10º. Las instituciones que, con anterioridad al presente decreto, hubieren
suscripto convenios con universidades a los fines indicados en el artículo 22º
de la Ley N° 24.521, deberán adecuarlos a las exigencias previstas en los
artículos precedentes en un plazo no superior a los CIENTO VEINTE (120)
días.

Artículo 11º. El MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION será la autoridad de


aplicación del presente decreto, a cuyos efectos se encuentra autorizado para
el dictado de normas aclaratorias, interpretativas y complementarias que se
consideren necesarias.

Artículo 12º. Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial
y archívese.
RESOLUCIÓN MCyE N° 1807

BUENOS AIRES, 25 de SETIEMBRE de 1997

VISTO los artículos 45º de la Ley N° 24.521 y 4° del Decreto N° 499 del 22 de
septiembre de 1995, y

CONSIDERANDO:

Que la última de las normas citadas encomienda a este Ministerio el dictado de


los instructivos a los que deberán ajustarse para su constitución las entidades privadas a las
que refiere el artículo 45º de la Ley N° 24.521.

Que esos instructivos deben contribuir a garantizar la fe pública, permitiendo


verificar el alcance, la responsabilidad ética, financiera, académica y administrativa de tales
agencias y la coincidencia de sus objetivos con los propósitos de mejoramiento de la
calidad y pertinencia de la enseñanza, la investigación, la extensión y los servicios, para lo
cual deben contar con el personal y los recursos adecuados.

Que al mismo tiempo, salvaguardados los principios indicados, resulta


imprescindible facilitar la creatividad y la libertad de acción de las agencias privadas, que
deberán establecer programas de revisión y perfeccionamiento de sus modalidades de
acción.

Que, dada la especial responsabilidad social que la función de evaluación y


acreditación universitaria exige, se impone establecer un mecanismo de renovación
periódica de la autorización concedida.

Que las facultades para dictar el presente acto resultan de lo dispuesto en el


referido artículo 4° del Decreto N° 499/95.

Por ello,

LA MINISTRA DE CULTURA Y EDUCACION


RESUELVE:

CAPITULO I
DEL RECONOCIMIENTO DE ENTIDADES
PRIVADAS DE ACREDITACIÓN Y EVALUACION UNIVERSITARIA

Artículo 1º. El reconocimiento de entidades privadas de acreditación y evaluación


universitaria constituidas a los fines previstos por el artículo 45º de la Ley
N° 24.521, será otorgado por el MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION, previo dictamen de la COMISION NACIONAL DE
EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU).
Artículo 2º. Las entidades privadas de acreditación y evaluación universitaria deberán
constituirse como fundaciones o asociaciones civiles sin fines de lucro, que
tengan como objeto exclusivo dichas actividades y gocen de autonomía
académica, administrativa y financiera. Deberán contar asimismo con
patrimonio e infraestructura suficiente para llevar a cabo sus objetivos, según
los requerimientos enumerados; en el ANEXO de la presente resolución y
estar integradas por personas de reconocida responsabilidad moral.

Artículo 3º. La solicitud de reconocimiento para funcionar como entidad privada de


acreditación y evaluación universitaria, de conformidad con lo previsto por
los artículos 45º de la Ley N° 24.521 y 4° del Decreto N° 499/95, deberá
presentarse en TRES (3) ejemplares, de acuerdo a los requisitos y
formalidades que se detallan en e1 ANEXO de la presente resolución.

Artículo 4º. Presentada la solicitud, el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, a


través de la DIRECCION NACIONAL DE GESTION UNIVERSITARIA,
verificará que se ajuste a los requisitos establecidos en el artículo precedente
y, en su caso, formulará las observaciones que correspondan dentro de los
SESENTA (60) días de presentada.

Artículo 5º. Si la solicitud no se ajustara a los requisitos indicados, la DIRECCION


NACIONAL DE GESTION UNIVERSITARIA, dará vista al peticionante
por una única vez, por el plazo de TREINTA (30) días corridos, a efectos de
que subsane las deficiencias que existieran. Cumplido dicho plazo,
cualquiera sea el resultado de la vista, el MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION remitirá las actuaciones, junto con un informe técnico, a la
COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION
UNIVERSITARIA (CONEAU), la que producirá el dictamen previsto en el
artículo 45º de la Ley N° 24.521 en un plazo máximo de CIENTO VEITE
(120) días.

Artículo 6º. La COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION


UNIVERSITARIA (CONEAU) podrá efectuar observaciones o sugerencias
a la presentación a los fines de la adecuación del proyecto por la entidad
peticionante en un plazo de TREINTA (30) días, de considerarlo pertinente,
en cuyo caso se suspenderá el plazo previsto en el artículo anterior hasta
tanto se subsanen las observaciones o se responda a las sugerencias. Vencido
el plazo indicado, se haya o no adecuado el proyecto, la Comisión expedirá
su dictamen.

Artículo 7º. EL MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION sólo podrá apartarse del


dictamen de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) por razones debidamente
fundadas.
Artículo 8º. El reconocimiento de las entidades privadas de evaluación y acreditación
universitaria se otorgará por el MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION, por un lapso de TRES (3) años la primera vez y SEIS (6)
años en las sucesivas.

Artículo 9º. El reconocimiento oficial previsto en el artículo 45º de la Ley N° 24.521, se


otorgará según requerimiento de la entidad y conforme lo establecido en el
artículo 4° del Decreto N° 499/95, para funcionar en una o varias de las
siguientes áreas:
a) Evaluación externa de instituciones universitarias.
b) Acreditación de las carreras de grado a que se refiere el artículo 43º
de la Ley N° 24.521 y de aquellas que sin estar comprendidas en dicha
norma sean sometidas a ese proceso voluntariamente por una institución
universitaria.
c) Acreditación de las carreras de posgrado –sean de especialización,
maestría o doctorado- . Cuando la entidad solicitante se constituyere por
iniciativa de un conjunto de facultades , deberán contar con la
autorización pertinente de las universidades a las cuales pertenecen y el
reconocimiento sólo autorizará a efectuar acreditaciones de carreras de
grado y posgrado correspondientes a áreas disciplinarias afines con las de
dichas facultades.

Artículo 10º. Las entidades privadas de acreditación y evaluación universitaria que


hubiesen obtenido reconocimiento no podrán dar comienza a las actividades
respectivas hasta que la DIRECCION NACIONAL DE GESTION
UNIVERSITARIA certifique que se han contemplado todos aquellos
requisitos establecidos en la presente resolución, aún cuando su
cumplimiento no hubiera sido necesario para el reconocimiento.

Artículo 11º. Todo proceso de evaluación o acreditación de instituciones universitarias,


realizado por una entidad que no haya cumplido con todos los trámites y
exigencias previstas en la presente resolución, carecerá de los efectos
jurídicos y alcances académicos previstos para dichos trámites en la Ley N°
24.521.

CAPITULO II
DEL SEGUIMIENTO DE LAS ACTIVIDADES
DE LAS ENTIDADES PRIVADAS
DE ACREDITACION Y EVALUACION UNIVERSITARIA

Artículo 12º. La DIRECCION NACIONAL DE GESTION UNIVERSITARIA efectuará


la fiscalización y el seguimiento de las entidades privadas de acreditación y
evaluación universitaria.

Artículo 13º. A esos fines dichas entidades deberán presentar ante la DIRECCION
NACIONAL DE GESTION UNIVERSITARIA, en caso de serles requerida,
copia de todos sus dictámenes, incluyendo las evaluaciones de los comités de
pares y los dictámenes de las Comisiones Asesoras. Deberán asimismo
confeccionar y publicar anualmente una memoria con los resultados de sus
actividades, con indicación de las instituciones evaluadas y las carreras
acreditadas, la composición de los Comités de Pares respectivos y las
modificaciones que se hubieran producido en su patrimonio e infraestructura.

Artículo 14º. La memoria mencionada en el artículo precedente será remitida por la


DIRECCION NACIONAL DE GESTION UNIVERSITARIA a la
COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION
UNIVERSITARIA (CONEAU) a fin de que emita opinión.

Artículo 15º. La DIRECCION NACIONAL DE GESTION UNIVERSITARIA podrá


efectuar inspecciones a las entidades privadas de acreditación y evaluación
universitaria y requerirles otro tipo de documentación o informes, además de
los mencionados en el artículo anterior.

Artículo 16º. Como resultado de las opiniones producidas por la COMISION NACIONAL
DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) y
de los procedimientos de fiscalización previstos en los artículos anteriores, la
DIRECCION NACIONAL DE GESTION UNIVERSITARIA podrá
efectuar recomendaciones a la institución o proponer a la superioridad en
casos graves, los correctivos que deban adoptarse.

CAPITULO III
DE LOS ORGANOS DE CONDUCCION DE LAS ENTIDADES PRIVADAS
DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA

Artículo 17º. Las entidades privadas de evaluación y acreditación universitaria contarán


con un órgano colegiado, independiente del Consejo da Administración de la
Fundación o Asociación Civil, el cual tendrá a su cargo exclusivo las
funciones de evaluación y acreditación para las que dichas entidades fueron
autorizadas.

Artículo 18º. Los integrantes del órgano colegiado de las entidades privadas de evaluación
y acreditación universitaria serán personalidades de reconocida jerarquía
académica, científica o profesional, y ejercerán sus funciones a título
personal y con total independencia de criterio.

Artículo 19º. Por lo menos un tercio de los integrantes de dicho órgano serán escogidos
entre personalidades nominadas por Academias Nacionales a solicitud de la
entidad.

Artículo 20º. Por lo menos un tercio de los integrantes de dicho órgano deberán ser
personalidades que, contando con los antecedentes indicados en el artículo
18º de esta reglamentación, no tengan durante su actuación en ese órgano
vinculación laboral o contractual con ninguna institución universitaria
argentina.
Artículo 21º. Los integrantes del órgano colegiado gozarán, durante el período por el que
fueron elegidos, que no podrá ser inferior a TRES (3) años, de estabilidad en
sus cargos y no podrán ser destituidos sino por decisión del propio órgano, o
por causas debidamente fundadas que justifiquen la medida.

Artículo 22º. El órgano colegiado de la entidad aprobará un Código de Etica al que


deberán sujetarse todos sus integrantes, incluyendo normas sobre la
obligación de abstenerse de participar en decisiones que afectaren a
instituciones con las que los integrantes estuvieren vinculados y sobre la
confidencialidad de la información proporcionada por las instituciones
universitarias.

CAPITULO IV
DE LOS PATRONES Y ESTANDARES
PARA LOS PROCESOS DE EVALUACION Y ACREDITACION

Artículo 23º. Las entidades privadas de acreditación y evaluación universitaria deberán


respetar y aplicar en los procesos de evaluación o acreditación para los
cuales hubieran sido habilitadas, los patrones y estándares que establezca el
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION previa consulta con el
CONSEJO DE UNIVERSIDADES. Las evaluaciones externas y las
correspondientes a procesos de acreditación serán llevadas a cabo con la
participación de pares académicos de reconocida competencia.

Artículo 24º. Las entidades privadas de evaluación y acreditación universitaria deberán


aplicar criterios y procedimientos para la acreditación y la evaluación que
efectúen, que aseguren la vigencia de los patrones y estándares a que alude el
artículo anterior, a cuyo fin redactarán manuales de operaciones donde se
especificarán dichos criterios y procedimientos. La existencia de dichos
manuales debidamente aprobados por el Ministerio, será condición necesaria
para dar comienzo a las actividades. Sin perjuicio de ello, para lograr la
autorización deberán incorporar a su proyecto las pautas generales a que
ajustarán los procesos de evaluación y acreditación.

Artículo 25º. Regístrese, comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del


Registro Oficial y archívese.
ANEXO
REQUISITOS Y FORMALIDADES PARA LA PRESENTACION
DE SOLICITUDES DE RECONOCIMIENTO DE ENTIDADES PRIVADAS
DE ACREDITACION Y EVALUACION UNIVERSITARIA

Las solicitudes deberán presentarse en un cuerpo general y tantos cuerpos


especiales como áreas de actuación en las que se solicita autorización. Deberá darse
cumplimiento a los requisitos y formalidades que se indican a continuación.

El CUERPO GENERAL deberá contener:


1.1. SOLICITUD: La misma deberá estar suscripta por el representante legal de la
entidad peticionante y deberá consignar:
1.1.1. El nombre bajo el que funcionará la nueva institución.
1.1.2. Un resumen de las características generales de la institución, y una
exposición fundada del área o las áreas para las cuales se solicita
autorización y de los principios generales, éticos y educativos que guiarán
sus actividades de evaluación y acreditación.
l.1.3. Un cuadro de la estructura administrativa y organización de las áreas
técnicas de la entidad.
1.1.4. Descripción de la composición del órgano directivo.
1.1.5. Un índice del contenido del cuerpo general con referencia a su foliatura.

1.2. REQUISITOS JURIDICOS


1.2.1. Certificación de la personería jurídica de la entidad peticionante. Se deberá
acompañar la documentación por la cual se le otorga la personería jurídica
como Fundación o Asociación Civil sin fines de lucro y los estatutos
respectivos, los que deberán prever como objeto específico de la entidad la
evaluación y/o acreditación universitaria. Si no se acompañaran los
originales, la documentación deberá estar certificada por Escribano
Público.
1.2.2. Acreditación de la personería del representante de la entidad peticionante.
Si dicha personería no resultara de los mismos estatutos, se deberán
acompañar las actas o la documentación en la cual conste ese carácter, o
copias certificadas por Escribano Público.
1.2.3. Proyecto de reglamento. Deberá determinar explícitamente los siguientes
aspectos mínimos: la sede en la que desarrollará su actividad la entidad
solicitante; la forma en que será integrado el órgano de dirección regulado
en el CAPITULO III de la presente resolución, cantidad de miembros,
duración de sus mandatos y las funciones que llevará a cabo; previsión de
las áreas técnicas responsables de organizar los procesos de evaluación y
acreditación, y pautas de administración económico financiera. Este
reglamento es independiente del estatuto de la Fundación.

1.3. REQUISITOS ECONOMICOS


1.3.1. Compromiso formal de acreditar un patrimonio propio de PESOS CIEN
MIL ($ 100.000.-) como mínimo, con indicación detallada de su
origen y composición.
1.3.1.1. Si el patrimonio se encontrara integrado a la fecha de
presentación de la solicitud, deberán acompañarse los elementos
acreditantes del mismo y aquellos que faciliten la comprobación
de los valores en que ha sido estimado.
1.3.1.2. Si el patrimonio no se encontrara integrado a esa fecha, el
compromiso que debe asumir la institución deberá contener las
modalidades y los tiempos en que será instrumentada la
integración. Esta deberá producirse en la ocasión prevista en el
artículo 10º de la presente resolución. Sólo excepcionalmente,
cuando fundadas razones así lo justifiquen, se autorizará que
parte de la integración se efectúe con posterioridad a esa fecha y
siempre que la institución dé garantías suficientes para su
cumplimiento.
1.3.1.3. Unicamente se computarán como integrando el patrimonio a
aquellos bienes de propiedad de la institución peticionante. El
dominio de los bienes inmuebles deberá acreditarse con copias
certificadas por Escribano Público de las respectivas escrituras
públicas en las que conste su adquisición. El dominio de los
bienes muebles se acreditará mediante la verificación de la
posesión efectiva por parte de la entidad, salvo que se trate de
bienes registrables, en cuyo caso la propiedad se acreditará con
las constancias de inscripción.
1.3.1.4. En la oportunidad prevista en el artículo 10º el Ministerio
verificará los valores asignados por la entidad a los bienes que
integran el patrimonio denunciado, y en caso de considerar que
los mismos no son suficientes para cubrir el monto mínimo
exigido, se emplazará a la institución para que los complemente.
La entidad peticionante deberá acompañar todos los elementos
que puedan resultar útiles para justipreciar el valor de los bienes.
1.3.2. Inventario inicial y balance constitutivo (en el supuesto del apartado
1.1.1.3). El inventario deberá contener una descripción mínima de aquellos
bienes cuyas características no se puedan apreciar mediante su sola
designación. El balance debe estar firmado por Contador Público y
contener la debida certificación.
1.3.3. Descripción de las instalaciones y equipamiento que estarán disponibles
para el cumplimiento de sus funciones.
1.3.3.1. El equipamiento y las instalaciones no podrán ser compartidos
con ninguna de las universidades o facultades constitutivas de la
entidad.
l.3.4. Proyección presupuestaria para los primeros TRES (3) años de actividades,
incluyendo previsiones sobre los ingresos y egresos, su fuente y magnitud
de acuerdo con las tareas proyectadas.

2. DATOS QUE DEBEN SER INFORMADOS DESPUES DE SER CONCEDIDA LA


AUTORIZACION

2.1. MANUALES DE PROCEDIMIENTO.


Manuales de Procedimiento previstos para los procesos de evaluación y acreditación
correspondientes a cada una de las funciones para las cuales se solicita el
reconocimiento provisorio. Se incluirán las modalidades que se prevé adoptar en
cada caso para las distintas actividades, como la selección de Pares Evaluadores,
reuniones de los mismos, periodicidad y formalidades de las visitas a las
instituciones, entre otros aspectos.
2.2. DATOS PERSONALES Y ANTECEDENTES EDUCATIVOS, ACADEMICOS
Y DE INVESTIGACION COMPLETOS DE LAS PERSONAS INTEGRANTES
DEL ORGANO DIRECTIVO DE LA ENTIDAD.

2.2.1. Datos personales: nombre completo, fecha de nacimiento, nacionalidad y


número de documento de identidad.
2.2.2. Antecedentes educativos, académicos y de investigación: Se deberá
acompañar un currículum sintético de cada uno de los integrantes y el
cargo que ocuparán en el gobierno de la entidad.
2.2.3. Nóminas recibidas de Academias Nacionales según lo establecido en el
artículo 19 de la presente resolución
2.3. DATOSPERSONALES YANTECEDENTES EDUCATIVOS,
PROFESIONALES, ACADEMICOS Y DE INVESTIGACION DEL PERSONAL
TECNICO PROPUESTO PARA LA ORGANIZACION DE LOS PROCESOS
DE EVALUACION Y ACREDITACION.
2.3.1. Datos personales: nombre completo, fecha de nacimiento, nacionalidad y
número de documento de identidad.
2.3.2. Antecedentes educativos, académicos y de investigación: Se deberá
acompañar un currículum sintético de cada uno de los integrantes y la
función que desempeñarán en la organización de los procesos.
2.4. MODIFICACIONES EN LA COMPOSICION DEL ORGANO DIRECTIVO.
Toda modificación en la composición del órgano directivo será informada al
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, con los requisitos enumerados
en el punto 2.2 del presente ANEXO.
2.5. MODIFICACIONES EN LA COMPOSICION DEL EQUIPO TECNICO. Las
modificaciones en la composición del equipo técnico serán informadas al
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, con los requisitos enumerados
en el punto 2.3 del presente ANEXO.
2.6. MODIFICACIONES EN EL PATRIMONIO E INFRAESTRUCTURA. Las
modificaciones en el patrimonio de las entidades privadas de evaluación y
acreditación universitaria, deben ser informadas al MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION siguiendo los requisitos enumerados en el
Apartado 1.3 del presente ANEXO.
DECRETO N° 705

BUENOS AIRES, 30 JULIO 1997

VISTO el Decreto N° 173 del 21 de febrero de 1996, y

CONSIDERANDO:

Que la mencionada norma prevé como órgano de conducción de la COMISION


NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU),
organismo descentralizado dependiente del MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION, un Consejo Directivo integrado por los miembros designados por el
procedimiento establecido en el artículo 47º de la Ley N° 24.521, aludiendo al mismo en
varios de sus artículos.

Que en la reunión constitutiva de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y


ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) sus miembros resolvieron por
unanimidad gestionar una norma que modifique parcialmente los artículos del Decreto N°
173/96 que modifique parcialmente los artículos del decreto, por considerar que la
introducción de esa figura contribuye a crear confusión sobre la verdadera naturaleza del
cuerpo, que crea la Ley N° 24.521.

Que con la finalidad de lograr una mayor precisión respecto de la fijación de sus
retribuciones, los miembros de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) solicitan la sustitución del artículo 6°
del Decreto N° 173/96 por una norma que determine los organismos competentes para ello.

Que, asimismo, el artículo 47º de la Ley N° 24.521 ya mencionado, establece que los
miembros de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION
UNIVERSITARIA (CONEAU) “serán personalidades de reconocida jerarquía académica y
científica”, lo que supone que deben tener actuación en gestión educativa en instituciones
de la educación superior, públicas o privadas y de la investigación científica.

Que en virtud de ello el carácter de miembro de la COMISION NACIONAL DE


EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) no resulta
incompatible con ninguna de las actividades mencionadas precedentemente a los fines
funcionales y remunerativos.

Que, asimismo, y de acuerdo con a lo solicitado por sus propios miembros, resulta
oportuno eliminar el impedimento que para la reelección del Presidente del cuerpo
establece el artículo 10º del Decreto N° 173/96 ya citado.
Que las modificaciones solicitadas por el propio cuerpo a la norma que reglamenta su
funcionamiento no alteran sustancialmente el criterio que la inspirara, por lo que, si con ello
se entiende contribuir a su mayor precisión, resulta razonable acceder a lo peticionado.

Que, teniendo en cuenta que la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y


ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) emite dictámenes los que, por su propia
naturaleza, son irrecurribles, corresponde derogar el artículo 9° del Decreto N° 173/96, a
los efectos de eliminar imprecisiones sobre el carácter de los pronunciamientos del
organismo.

Que, con idéntica finalidad, resulta necesario introducir modificaciones en los artículos
18º y 20º de aquella norma.

Que, en consecuencia, corresponde modificar el Decreto N° 173/96 sustituyendo la


expresión “Consejo Directivo” por “COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA”; determinar los organismos competentes para la
fijación de las retribuciones de sus miembros; establecer el régimen de incompatibilidades
que les resulta aplicable; eliminar el impedimento para la reelección de su Presidente,
derogar el artículo 9° y modificar la redacción de los artículos 18º y 20º de la norma citada.

Que la presente medida se dicta de conformidad con lo establecido en el artículo 99º,


inciso 2°) de la CONSTITUCION NACIONAL.

Por ello,

EL PRESIDENTE DE LA NACION ARGENTINA

DECRETA:

ARTICULO 1°.- Sustitúyense los artículos 2°, 4°, 5°, 6°, 7°, 8°, 10º, 12º incisos a) y g),
14º, 18º, 20º, 24º y 28º del Decreto N° 173 del 21 de febrero de 1996, los que quedarán
redactados de la siguiente forma:

¨ARTICULO 2°.- El gobierno de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y


ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) estará a cargo de los miembros
designados por el procedimiento establecido por el artículo 47º de la Ley N° 24.521, los
que deberán ser personalidades de reconocida jerarquía en el campo académico, científico o
de gestión institucional y ejercerán sus funciones a título personal y con total independencia
de criterio¨.

¨ARTICULO 4°.- EL MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION podrá convocar a la


primera reunión constitutiva de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) cuando se hubiera designado un
mínimo de SIETE (7) miembros, sin perjuicio de la posterior incorporación de los restantes
una vez que fueran nominados y designados¨.
¨ARTICULO 5°.- En la primera reunión de la Comisión que se realice con el total de sus
miembros, se procederá a determinar por sorteo aquéllos que cesarán a los DOS (2) años a
fin de posibilitar el sistema de renovación parcial¨.

“ARTICULO 6°.- Las retribuciones de los miembros de la COMISION NACIONAL DE


EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) serán fijadas por
Resolución Conjunta de los Ministros de Cultura y Educación y de Economía y Obras y
Servicios Públicos de acuerdo con lo dispuesto por el artículo 3°, inciso i) del Decreto N°
101 de fecha 16 de enero de 1985, incorporado por su similar N° 1716 del 15 de septiembre
de 1992”.

“ARTICULO 7°.- El miembro que dejara de concurrir a TRES (3) sesiones consecutivas de
la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA
(CONEAU) sin causa justificada, será considerado renunciante, debiendo ser reemplazado
por otro elegido según el procedimiento previsto en el artículo 47º de la Ley N° 24.521.
Asimismo la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION
UNIVERSITARIA (CONEAU), por el voto de los DOS TERCIOS (2/3) del total de sus
miembros, podrá solicitar por razones fundadas que se reemplace a UNO (1) de sus
integrantes que no diera debido cumplimiento a sus obligaciones, en cuyo caso la
institución que lo nominó deberá proponer un nuevo candidato”.

“ARTICULO 8°.- La COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION


UNIVERSITARIA (CONEAU) sesionará los días que el propio cuerpo establezca de
conformidad con las necesidades de trabajo. Podrá convocarse, asimismo, a sesión
extraordinaria a petición de cualquiera de sus miembros. Para sesionar válidamente se
requerirá la presencia de por lo menos la mitad más uno de sus integrantes, exigiéndose
mayoría absoluta de los presentes para adoptar resoluciones, salvo cuando se trate de
resoluciones que aprueben dictámenes finales vinculantes, en cuyo caso deben ser
adoptadas con el voto de la mitad más uno del total de sus miembros. En los casos en que la
Ley N° 24.521 requiere una opinión no vinculante, la COMISION NACIONAL DE
EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) emitirá un dictamen
donde conste el punto de vista mayoritario y las disidencias totales o parciales”.

“ARTICULO 10º.- La presidencia de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y


ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) será ejercida por UNO (1) de sus
integrantes designado por el voto de la mitad más uno del total de sus miembros, quien
ejercerá la representación de la Comisión y conducirá las reuniones del cuerpo. El cargo
será ejercido por el término de UN (1) año, pudiendo su presidente ser reelegido. Por el
mismo procedimiento y término se designará UN (1) Vicepresidente que sustituirá al
Presidente en caso de ausencia de éste”.

“ARTICULO 12.- El Director Ejecutivo, quien deberá contar con antecedentes académicos
y de gestión adecuados y suficientes para dicho cargo, tendrá básicamente las siguientes
funciones:
a) asistir a las reuniones de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU), con voz pero sin voto;
b) organizar los procesos de evaluación y acreditación;
c) apoyar la labor integral de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU);
d) organizar, dirigir y supervisar las tareas del personal que integre la estructura;
e) prestar asistencia a los miembros de la Comisión;
f) organizar y coordinar cursos y seminarios de especialización obligatorios para los
integrantes del Comité de Pares;
g) presentar anualmente a la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) el proyecto de presupuesto para el
año entrante;
h) realizar las demás actividades que le asigne la reglamentación.

“ARTICULO 14º.- La COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION


UNIVERSITARIA (CONEAU) formará Comisiones Asesoras para cada una de sus
funciones específicas, compuestas por un número variable de miembros, todos ellos
personas de reconocido prestigio y experiencia académica, profesional o en gestión
institucional, escogidos en consulta con los organismos universitarios, académicos,
científicos, administrativos, profesionales y empresariales pertinentes. Los miembros de las
Comisiones rotarán periódicamente. En cada Comisión participará necesariamente por lo
menos UN (1) miembro de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU), quien la coordinará. Las Comisiones
Asesoras emitirán opiniones respecto de cada uno de los asuntos sometidos a su
consideración por la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION
UNIVERSITARIA (CONEAU), sin que ellas tengan carácter vinculante”.

“ARTICULO 18º.- Los miembros de las Comisiones Asesoras y de los Comités de Pares
percibirán las sumas compensatorias que, para cada caso y de conformidad con las
particularidades del trabajo que se les encomiende, fije el señor Ministro de Cultura y
Educación, con intervención de la COMISION TECNICA ASESORA DE POLITICA
SALARIAL DEL SECTOR PUBLICO, cuando corresponda”.

“ARTICULO 20º.- Los procesos de evaluación externa que se encuentren actualmente en


trámite o concluidos, en función de convenios entre las universidades y el MINISTERIO
DE CULTURA Y EDUCACION, se considerarán válidos a los fines previstos en la Ley N°
24.521”.

“ARTICULO 24º.- Los expedientes en los que se tramitan solicitudes de autorización


provisoria para el funcionamiento de universidades privadas que se encontraban, a la fecha
de sanción de la Ley N° 24.521, en condiciones de pasar a la Comisión Consultiva prevista
por los artículos 11º y 12º del Decreto N° 2.330/93, deberán ser remitidos a la COMISION
NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) a
los fines de su tratamiento directo por el cuerpo, teniendo por válidos los trámites
cumplidos. En los demás trámites se imprimirá el tratamiento que se estime conveniente”.

“ARTICULO 28º.- El Director Ejecutivo deberá someter a la COMISION NACIONAL DE


EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) para su
consideración y aprobación, dentro de los SESENTA (60) días de constituido el cuerpo, un
proyecto de reglamento interno compatible con las disposiciones de la Ley N° 24.521 y las
del presente decreto”.

ARTICULO 2°.- Establécese que el desempeño como miembro de la COMISION


NACIONAL DE EVALUCACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU)
no resulta incompatible con ninguna otra actividad educativa o en instituciones de
educación superior, públicas o privadas y de la investigación científica.

ARTICULO 3°.- Derógase el artículo 9° del Decreto N° 173 del 21 de febrero de 1996.

ARTICULO 4°.- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro


Oficial y archívese.

MENEM – Jorge Alberto Rodríguez – Susana Beatriz Decibe


RESOLUCION N° 1.168

BUENOS AIRES, 11 de JULIO de 1997

VISTO los artículos 45º y 46º inciso b) de la Ley N° 24.521 y el Acuerdo Plenario N°
6 del CONSEJO DE UNIVERSIDADES de fecha 1° de julio de 1997, y

CONSIDERANDO:

Que conforme lo disponen los referidos artículos 45º y 46º, inciso b), corresponde a
este Ministerio fijar, en consulta con el CONSEJO DE UNIVERSIDADES, los estándares
que deben aplicar en los procesos de acreditación de carreras de posgrado la COMISION
NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) y
las entidades privadas que se constituyan con fines de evaluación y acreditación de
instituciones universitarias.

Que mediante Acuerdo Plenario N° 6 de fecha 1° de julio de 1997 el CONSEJO DE


UNIVERSIDADES elevó la propuesta respectiva, para cuya elaboración se tuvieron en
cuenta tanto los aportes del CONSEJO INTERUNIVERSITARIO NACIONAL (CIN) y de
instituciones universitarias privadas como la opinión de reconocidos expertos.

Que la propuesta referida contiene criterios y estándares mínimos que resultan


suficientes para orientar los procesos de acreditación de carreras de posgrado, conforme a
lo requerido por la Ley N° 24.521.

Que las facultades para dictar el presente acto resultan de lo dispuesto en los
mencionados artículos 45º y 46º inciso b) de la Ley N° 24.521.

Por ello,

LA MINISTRA DE CULTURA Y EDUCACIONRESUELVE:


ARTICULO 1°.- Establecer como estándares y criterios a aplicar en los procesos de
acreditación de carreras de posgrado, tanto por la COMISION NACIONAL DE
EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) como por las
entidades privadas que se constituyan a los fines previstos en el artículo 45º de la Ley N°
24.521, los propuestos por el CONSEJO DE UNIVERSIDADES mediante Acuerdo
Plenario N° 6, de fecha 1° de julio de 1997, que obra como ANEXO de la presente
resolución.

ARTICULO 2°.- Aprobar las pautas de organización propuestas por el CONSEJO DE


UNIVERSIDADES mediante el Acuerdo Plenario mencionado en el artículo anterior.

ARTICULO 3°.- Regístrese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial,


comuníquese a la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION
UNIVERSITARIA (CONEAU) y archívese.

Lic. Susana Beatriz Decibe


DECRETO 081/98

BUENOS AIRES, 22 DE ENERO DE 1998

VISTO los artículos 24º de la Ley Federal de Educación N° 24.195 y 74º de la Ley
de Educación Superior N° 24.521, y

CONSIDERANDO:

Que la primera de esas normas establece que "la organización y autorización de


universidades alternativas, experimentales, de posgrado, abiertas, a distancia, institutos
universitarios tecnológicos, pedagógicos y otros creados libremente por iniciativa
comunitaria, se regirán por una ley especifica".

Que, con posterioridad, la Ley específica para toda la Educación Superior N°


24.521, precisó, en su artículo 74º, el alcance de aquella norma al referirla expresamente a
"modelos diferenciados de organización institucional y de metodología pedagógica"
adoptados por instituciones de "nivel equivalente al de las demás universidades", a las que
extendió las disposiciones sobre procedimientos de creación o autorización y los regímenes
de títulos y de evaluación comunes a todas las instituciones universitarias, encomendando
al Poder Ejecutivo Nacional únicamente la reglamentación de los restantes aspectos de su
organización y funcionamiento.

Que una interpretación armónica de las normas citadas conduce a la conclusión de


que la reglamentación encomendada al Poder Ejecutivo Nacional, es innecesaria en el caso
de los institutos "tecnológicos" o "pedagógicos", cuya única peculiaridad consiste en la
limitación de las áreas disciplinarias que cultivan, aspecto que los asimila a los restantes
institutos universitarios, e igualmente innecesaria en el de las universidades de "posgrado",
cuya especificidad reside en el nivel de su oferta educativa, característica que no las
diferencia, ni en su organización ni en su metodología pedagógica, de las demás
universidades, que en su mayoría tienen, carreras, departamentos o escuelas de posgrado.

Que tampoco corresponde dictar reglamentación general alguna con relación a las
universidades "alternativas" o "experimentales", también mencionadas en el artículo citado,
pues tales denominaciones no remiten a ningún tipo especifico de organización
institucional o metodología pedagógica, por lo cual las normas que eventualmente pudieran
aplicárseles serán las correspondientes a las instituciones universitarias afines o bien tener
alcance necesariamente particular.

Que, en cambio, en lo que respecta a instituciones de "educación a distancia" y las


denominadas abiertas caracterizadas por el empleo de recursos tecnológicos y
procedimientos metodológicos innovadores que no requieren la presencia física permanente
del alumno en las aulas u otras dependencias universitarias, la notoria complejidad de su
organización y funcionamiento justificaría una reglamentación específica.
Que no obstante, la diversidad de carreras que pueden cursarse mediante tal
modalidad y la falta de antecedentes nacionales suficientemente experimentados dificultan
la sanción de normas generales, capaces de prever la multiplicidad de situaciones posibles.

Que por ello la solución más conveniente, al menos mientras no se cuente con una
mayor experiencia, es la de facultar al MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION
para dictar las normas necesarias de acuerdo con la realidad de los casos concretos que
vayan presentándose, todo ello sin perjuicio de las atribuciones propias del Poder Ejecutivo
Nacional, en el acto de la puesta en marcha de una institución universitaria nacional, de
autorización de una institución universitaria privada, o de reconocimiento de una institución
universitaria provincial.

Que sin perjuicio de ello, corresponde precisar por vía reglamentaria del artículo 74º
de la Ley N° 24.521 algunos aspectos fundamentales que resultan de aplicación a cualquier
modalidad innovadora, a fin de que sean tenidos en cuenta en las disposiciones que dicte el
referido ministerio.

Que la presente medida se dicta en función de lo dispuesto por el artículo 74º de la


Ley N° 24.521 y de conformidad con lo establecido por el artículo 99º, inciso 2°) de la
CONSTITUCION NACIONAL.

Por ello,

EL PRESIDENTE DE LA NACION ARGENTINA


DECRETA:

Artículo 1°.- EL MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION será órgano de


aplicación de las disposiciones del artículo 74º de la Ley N° 24.521 en los supuestos de
creación, reconocimiento o autorización de Instituciones Universitarias que adopten como
modalidad exclusiva o complementaria la conocida como "educación a distancia" o se
organicen según otras modalidades especiales que pudieran requerir por ello un tratamiento
que contemple sus particulares características.

Artículo 2°.- Las instituciones universitarias que se creen, se autoricen o se reconozcan


bajo el régimen del artículo 74º de la Ley N° 24.521, deberán ajustar su funcionamiento a
las pautas e instructivos específicos que dicte el MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION en los aspectos en que la organización y funcionamiento se aparten del
régimen general previsto para las instituciones universitarias, siéndole aplicables en lo
demás las normas generales del sistema universitario.

Artículo 3°.- Las pautas e instructivos que dicte el MINISTERIO DE CULTURA Y


EDUCACION tenderán a asegurar, en todos los casos:

a) Que se trate efectivamente de ofertas de carácter universitario, que se propongan


desarrollar experiencias innovadoras, y a las que no resulte aplicable en su totalidad la
normativa universitaria general.
b) Que tales instituciones tengan como principal finalidad la de favorecer el desarrollo de
la educación universitaria mediante modelos diferenciados de organización institucional
y de metodología pedagógica.

c) Que la factibilidad, así como la calidad y la excelencia de la oferta educativa, propias


del nivel universitario, queden debidamente aseguradas.

d) Que la organización, funcionamiento y propuesta académica de las instituciones de que


se trate, se ajusten en todo lo posible a las disposiciones de la Ley N° 24.521, pudiendo
apartarse de ellas sólo en aquellos aspectos en los que se requiera una regulación
especial y siempre que ello no desvirtúe principios fundamentales contenidos en aquella
norma.

e) Que cualquiera sea la modalidad adoptada, las instituciones a las que se refiere el
artículo 2° queden sometidas al régimen de títulos y de evaluación institucional
previstos por la Ley N° 24.521.

Artículo 4°.- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial y
archívese.

MENEM – Jorge Alberto Rodríguez – Susana Beatriz Decibe

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