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- Ley Avellaneda 1.597/1.885
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- Ley 13.031/1.947
- Ley 14.297/1.954
- decreto-ley 477/1.955
- Decreto 6.403/1.955
- Ley 14.467/1.958
- Ley 14.557/1.958
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- Ley 17.778/1.968
- Decreto Reglamentario 1.617/1.969
- Decreto 8.472/1.969
- Ley 20.654/1.974
- Ley de Facto 22.207/1.980
- Decreto Penal 154/1.983
- Ley 23.068/1.984
- Ley 23.114/1.984
- Decreto 101/1.985
- Decreto 2.461/1.985
- Ley 23.569/1.988
- Ley 23.930/1.991
- Decreto 160/1.991
- Decreto 990/1.991
- Ley 24.049/1.992
- Decreto 438/1.992
- Ley 24.195/1.993
- Decreto 506/1.993
- Decreto 1.075/1.993
- Decreto 1.610/1.993
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- Decreto 2.330/1.993
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- Decreto 2.568/1.993
- Resolución 1.069/1.993
- Decreto 256/1.994
- Decreto 529/1.994
- Resolución 240/1.994
- Resolución 263/1.994
- Resolución 129/1.994
- Ley 24.521/1.995
- Decreto 268/1.995
- Decreto 499/1.995
- Decreto 173/1.996
- Decreto 576/1.996
- Decreto 455/1.997
- Resolución 1.807/1.997
- Decreto 705/1.997
- Resolución 1.168/1.997
- Decreto 081/1.998
TITULO XXII:
Para servir a Dios nuestro Señor, y bien público de nuestros Reinos conviene, que nuestros
vasallos, súbditos y naturales tengan en ellos Universidades y Estudios generales donde
sean instruidos y graduados en todas las ciencias y facultades, y por el mucho amor y
voluntad, que tenemos de honrar y favorecer a los de nuestras Indias, y desterrar de ellas los
temores y la ignorancia, creamos, fundamos y constituimos, en la Ciudad de Lima de los
Reinos del Perú y en la Ciudad de México de la Nueva España, Universidades y Estudios
generales, y tenemos por bien y concedemos a todas las personas, que en las dos dichas
Universidades fueran graduados que gocen en nuestras Indias, Islas y Tierrafirme del Gran
Océano de las libertades y franquezas de que gozan en estos Reinos los que se gradúan en
la Universidad y Estudios de Salamanca, así en el no pecar, como en todo lo demás y en
cuanto a la jurisdicción fe guarde la Ley XII de este título.
Ley II. Que en las Universidades particulares se guarde lo dispuesto para cada una.
En las Ciudades de Santo Domingo de la Isla Española, Santa Fe del Nuevo Reino de
Granada, Santiago de Guatemala, Santiago de Chile y Manila de las Islas Filipinas, está
permitido que haya Estudios y Universidades, y que se ganen cursos y den grados en ellas
por el tiempo que ha parecido conveniente, para lo cual hemos imperado (sic) de la Santa
Sede Apostólica Breves y Bulas, y les hemos concedido algunos privilegios y
preeminencias: Mandamos, que lo dispuesto para los dichos Estudios y Universidades se
guarde, cumpla y ejecute, sin exceder en ninguna forma, y las que fueren por tiempo
limitado, acudan a nuestro Real Consejo de las Indias a pedir las prorrogaciones donde se
proveerá lo que fuere conveniente, y no las teniendo, cese y se acabe el ministerio de
aquellos estudios, que así es nuestra voluntad.
Ley III. Que las Universidades guarden sus estatutos estando confirmados por el Rey, y los
Virreyes no los puedan alterar ni revocar sin justa causa y dando cuenta al Consejo.
Ordenamos y mandamos que las Universidades de Lima y México, sus Rectores, Doctores,
Maestros, Ministros y Oficiales guarden los Estatutos que nuestros Virreyes del Perú y
Nueva España les hubieren dado, siendo por Nos confirmados y no revocados por las Leyes
de este título, entretanto que no mandaremos otra cosa, y por ellos gobiernen, rijan y
administren todo lo que tocan las dichas Universidades y sus Estudios, y que los Virreyes
no los puedan dispensar, alterar ni mudar sin justas y legítimas causas, y dándonos cuenta
en nuestro real Consejo de las Indias; y todos nuestros Jueces y Justicias, de cualquier
grado y calidad que sean así, lo cumplan y ejecuten.
Ley IV. Que la elección del Rector en Lima se haga cuando por esta ley se dispone.
Ley V. Que los Virreyes no impidan a las Universidades la libre elección de Rectores y
Catedráticos y dar grados.
Los Virreyes del Perú y Nueva España, no impidan a las Universidades y Estudios
Generales de Lima y México, la libre elección de Rectores en las personas que les
pareciere, y deben proveer las Cátedras y conferir los grados de letras a los que conforme a
los Estatutos por Nos confirmados, se deben dar, y los guarden y cumplan.
Ley VI. Que en la Universidad de Lima sea el Rector un año Eclesiástico y otro Seglar.
Por cuanto se nos ha hecho relación, que por una de las constituciones, que tiene la
Universidad de Lima, se ordena, que el Rector de ella sea un año de los doctores Seglares
del Claustro, y otro año de los Doctores y Maestros eclesiásticos, y siempre se ha usado
hacer la elección alternativamente en esta forma, con la cual ha sido, y es bien regida y
gobernada: mandamos, que se guarde y cumpla lo que cerca de lo sobredicho está
ordenado, entretanto que Nos proveyéremos otra cosa, y si los Virreyes entendieren, que
resulta algún inconveniente, nos envíen relación dirigida a nuestro Consejo de Indias, para
que se provea en él, y provea lo que convenga.
Mandamos, que los Oidores, Alcaldes del Crimen, y Fiscales de nuestras Audiencias Reales
de las Indias, no pueden ser, ni sean Rectores de las universidades en el tiempo que
ejercieren sus oficios, aunque sean graduados en ellas.
Ley VIII. Que los Rectores de las Universidades de Lima y México puedan traer dos negros
lacayos con espadas.
Damos licencia, y facultad a los Rectores de las Universidades de Lima y México, para que
por el tiempo que lo fueren pueda cada uno traer dos negros lacayos con espadas, y nuestras
justicias no les pongan embargo, ni impedimento alguno, que así es nuestra voluntad.
Ley IX. Que el Rector nombre Alguacil, que sea uno de los de Corte.
Otrosí cada uno de los dichos Rectores de las Universidades de Lima y México, puedan
nombrar un Alguacil de Corte, o Gobierno, con cien pesos ensayados de salario, como por
el Gobierno de Lima está ordenado, y los dos pesos, que tienen de señalados de los grados
de Licenciados, sean cuatro pesos de a ocho reales, por la obligación de asistir las noches
de los exámenes secretos, y la que no asistieren pierdan los dos pesos para la casa de la
Universidad.
Ley X. Que el decano de las Universidades se dé al Doctor más antiguo, aunque sea Oidor.
Ordenamos y mandamos, que el Doctor más antiguo en la facultad de Cánones, sea decano
de las Universidades de Lima y México, aunque sea Oidor de nuestras Audiencias, que en
las dichas ciudades residen.
Ley XI. Que en la Universidad de Lima sea uno de los Consiliarios del Colegio Real.
Uno de los Consiliarios Bachilleres, que por las Constituciones de la Universidad de Lima
se eligen cada año, sea Colegial del Real Colegio Mayor de San Felipe, y San Marcos de
aquella ciudad.
Ley XII. Que los Rectores de las Universidades de Lima, y México tengan la jurisdicción,
que por esta ley se declara.
Ordenamos y mandamos que los Rectores de las Universidades de Lima, y México, y por
su ausencia los Vicerectores tengan jurisdicción en los Doctores, Maestros y Oficiales de
ellas, y en los Lectores, Estudiantes y Oyentes, que a ella concurrieren, en todos los delitos,
causas y negocios criminales que se cometieren e hicieren dentro de las Escuelas de las
Universidades, en cualquier manera tocantes a los Estudios, como no sean delitos en los
que haya que haber pena de efusión de sangre, o mutilación de miembro, u otra corporal; y
en los demás delitos, que se cometieren fuera de las Escuelas, si fuere negocio tocante, o
concerniente a los Estudios, o dependientes de ellos; o pendencia de ello, o de palabras, que
alguno de los Doctores, Maestros o Estudiantes tengan con otro, sobre disputa, o
conferencia, o paga de pupilaje, u otra cosa semejante, en estos casos los Rectores, o por su
ausencia los Vicerectores puedan conocer también de los dichos delitos. Y porque el
principal fin porque les concedemos esta jurisdicción, es la reformación de vida y
costumbres de los Estudiantes, y que vivan corregidos y virtuosamente, para mejor puedan
conseguir la pretensión de sus letras: Mandamos que asimismo puedan conocer de los
excesos, que los estudiantes tuvieren en juegos, deshonestidades y distracción de las
Escuelas, y los puedan castigar y corregir con prisiones, o como mejor pareciera que
conviene, y también puedan corregir y castigar las inobediencias , que los Doctores y
Estudiantes tuvieren con los Rectores en no cumplir y guardar sus mandatos en razón de los
Estudios, Constituciones y Ordenanzas de ellos, dentro y fuera de las Escuelas, conozcan
las demás Justicias Ordinarias de Lima, o México privativamente. Y concedemos poder y
facultad a los Rectores y Vicerectores, para que en los casos contenidos en nuestra ley,
puedan conocer conforme a derecho, leyes de estos Reinos de Castilla, y de las Indias,
Estatutos y Constituciones de dichas Universidades, fulminar y substanciar los procesos,
prender los culpados, sentenciar las causas, imponer penas ordinarias, o arbitrarias, y
mandarlas ejecutar conforme a derecho, y si las partes apelaren para ante los Alcaldes del
Crimen de Lima, o México, les otorguen las apelaciones, habiendo lugar de derecho; y en
los delitos en que se haya de dar pena ordinaria de mutilación de miembro o efusión de
sangre, u otra corporal , siendo cometidos dentro de las Escuelas, los Rectores, o
Vicerectores por su ausencia, pueden solamente prender los delincuentes, hacer
información del delito, y remitir el preso con los autos al Juez, que en la causa previniere, y
no habiendo prevención, al que los Rectores, y Vicerectores pareciere. Todo lo cual pueden
hacer, no habiendo prevenido en estas causas por otro Juez. Y mandamos a todas nuestras
Justicias Reales, que no perturben, ni impidan a los dichos Rectores, o Vicerectores la
jurisdicción, que por esta ley les concedemos, y la guarden y cumplan, pena de dos mil
pesos de oro al que lo contrario hiciere para nuestra Cámara y Fisco.
Ley XIII. Que en cuanto a las preeminencias del Maestre-Escuela, se guarde en México lo
ordenado en Lima por el Virrey Don Francisco de Toledo.
Nuestra merced y voluntad es, que los Virreyes de Nueva España, en cuanto a la
preeminencia del Maestre-Escuela, hagan guardar, y guarden en la Universidad de México
lo que en la de San Marcos de Lima ordenó Don Francisco de Toledo nuestro Virrey, que
fue del Perú y estuviere confirmado, o concedido por Nos, y no se haga novedad.
Ley XIV. Que los que recibieren grados mayores, hagan la profesión de la Fe.
Ley XV. Que el que se hubiere de graduar jure la opinión pía de Nuestra Señora, estando
jurada por la Universidad.
Mandamos, que en la Universidad, que así lo hubiere votado, ninguno pueda recibir grado
mayor de Licenciado, Maestro ni de Doctor en Facultad alguna, ni aún el de bachiller en
Teología, si no hiciere primero juramento en un libro Misal delante del que le ha de dar el
grado, y los demás, que asistieren, de que siempre tendrá, creerá y enseñará de palabra y
por escrito haber sido la siempre Virgen María Madre de Dios y Señora Nuestra, concebida
sin pecado original, en el primer instante de su ser natural, el cual juramento se pondrá,
como lo hizo, en el Título, que del grado despachare, y si sucediere haber alguno, lo cual
Dios nuestro Señor no permita, que rehusare hacer el juramento, le será por el mismo caso
denegado el grado, y el que se atreviera a dársele, incurra por el mismo caso en pena de
cien ducados de Castilla para la casa de la Universidad, que no lo denunciare ante el rector.
Y fiamos tanto de la devoción de todos para con la Madre de Dios, que nunca sucederá el
caso de obligar a la ejecución de las penas.
Ley XVI. Que los grados se den por el Maestre-Escuela en la Iglesia Mayor.
Ordenamos, que los grados de las Universidades de Lima y México, se den en la Iglesia
Mayor de aquellas Ciudades, y los den los Mestre-Escuelas en nuestro nombre, a los cuales
por ahora nombramos por Cancilleres.
Ley XVII. Que dé el vejamen el Doctor más moderno de la Facultad, y no le excuse sin
causa, ni le dé fin sin ser visto primero.
En los grados de Doctores de todas las Facultades, dará el vejamen el Doctor más moderno
de aquella facultad, que fuere el grado; y estando legítimamente excusado, pase al siguiente
en antigüedad, con orden del Rector, el cual declara si la excusa es bastante; y declarando
no serlo, y notificándolo una vez, al que se excusare, si no le quisiere dar, pierda la propina
de aquel grado para la casa de la Universidad; y pareciendo al Rector, que hay necesidad de
ver el vejamen, antes de que se de en público, lo podrá hacer por sí mismo, o remitirlo a
quien le pareciere, para que lo vea, censure y corrija, el cual lo firme, declarando lo que se
debe quitar; y el Doctor que dijere más de aquello que diere por escrito, y se aprobare,
pierde la mitad de la propina, que por dar el vejamen ha de llevar para la casa de la
Universidad.
Ley XVIII. Que el examen secreto de los Licenciados entre los Examinadores, que por ley
se declara.
Ordenamos y mandamos, que los examinadores Doctores, que se han de hallar en los actos
secretos de las Facultades de Teología, en las Universidades de Lima y de México, se
vayan reduciendo de dieciséis, como fueren saliendo los que están ya graduados, respecto
de tener ya derecho adquirido, y que en ellos sean preferidos los Catedráticos Doctores, y
luego los más antiguos, y que en las demás Facultades en que de preferente hay poco
número de Doctores y Maestros, por ahora no se haga novedad, y para adelante no excedan
de doce y que los que se gradúen de nuevo sean recibidos, y entren con calidad de que no
han de concurrir en el examen secreto, hasta que por antigüedad se incluyan en este
número.
Ley XIX. Que los Oidores, Alcaldes de Crimen, y Fiscales entren por Supernumerarios en
los exámenes.
Mandamos, que los Oidores, Alcaldes del Crimen y Fiscales de nuestras Reales Audiencias
de Lima y México, que por tiempo se graduaren, o incorporaren a sus Universidades, hayan
de entrar y entren a los exámenes secretos de Licenciados Supernumerarios a los dieciséis
Doctores, que está mandado asistan totalmente a los exámenes, y no se hayan de rebajar los
dieciséis del número, lo cual lo haya de entender y entienda con los que de nuevo se fueren
incorporando, y graduando, sin innovar los que están ya graduados, o incorporados, y por
antigüedad están inclusos en el número y asimismo con declaración, de que cuando los
Oidores, Alcaldes de Corte y Fiscales, que de nuevo se graduaren, o incorporaren, fueren
optando antigüedad, y a título de ellas les perteneciere entrar en los exámenes, como uno de
los dieciséis no entren por supernumerarios, sino incluso en los números de los dieciséis,
por el derecho de la antigüedad que les perteneciere, porque tan solamente, se ha de
entender el privilegio, de entrar, creciendo el número, con los que no les perteneciere por
antigüedad; y que si entraran, habían de quitar esta preeminencia a los Doctores más
antiguos.
Ley XX. Que al examen secreto de Licenciado no se halle quien no tenga voto.
Ley XXI. Que en los exámenes secretos arguyan los Catedráticos, o Doctores más
modernos.
Ordenamos y mandamos, que en los exámenes secretos del grado de Licenciado en todas
las Facultades arguyan cuatro Catedráticos de la Facultad, Doctores de el Claustro, los
cuales entren Supernumerarios, solamente para el efecto, la vez que les cupiere la suerte de
argüir, mientras no tuvieren antigüedad, o se ofreciere el caso en que puedan entrar en el
número de los dieciséis, prefiriendo a los más antiguos y entraran a argüir por este orden:
En los grados de Teología, el de Prima, Vísperas, Sagrada Escritura, y Segunda de
Vísperas: En los grados de Cánones y Decreto, los de Prima de Cánones y leyes, Vísperas
de Cánones y Decreto, y a falta de cualquiera; después de estos, el de Vísperas de Leyes, y
el de Instituta: en los grados de Artes, los tres Catedráticos, comenzando desde el más
antiguo Catedrático, aunque sea el menos antiguo en el grado, y en caso que falte algún
Catedrático, dos, o más, por enfermedad, ausencia, o justa causa, de suerte que no haya el
número de cuatro, no se admiten los sustitutos, y en este caso arguyan los Doctores más
modernos, que se entiende de los que entran al examen, y solamente los que fueren
menester para llenar el número de los cuatro, y suplir la falta de Catedráticos, guardando
entre sí solamente la antigüedad de el grado.
Ley XXII. Que el examen no se vote por segunda vez, pena de nulidad del grado.
En los exámenes secretos no se pueda votar por segunda vez, ni hacer segundo escrutinio,
aunque se diga por alguno, o algunos de los que hubieren votado, que se erraron en el votar,
y el grado que se diere por segundo escrutinio, sea en sí ninguno.
Ley XXIII. Que al votar no se muestren los AA. Ni las RR. So pena de esta ley.
Mandamos, que al tiempo de votar en los grados de Licenciados en cualquier Facultad, para
que se haga con la entereza debida, se guarde secreto y no se muestren las AA. ni RR. Que
cada uno echare, por los inconvenientes, que se siguen; y el Rector lo haga cumplir, pena
de que el que votare en público, o diere su letra para que otro la eche, pierda la propina de
aquel grado, y luego allí se ejecute, aplicada para la casa de la Universidad, y el votar sea
poniendo las jarras de plata, que para esto hay apartadas sobre una mesa, y levantándose
cada uno a votar, para que con esto se guarde el secreto debido.
Ley XXIV. Que el Colegio Real, que no lo hubiere sido dos años, no goce del privilegio del
grado.
Declaramos, que ningún Colegial pueda gozar del privilegio de graduarse por la mitad de
las propinas y derechos concedido al Real Colegio Mayor de la Ciudad de Lima, que por lo
menos no hubiera asistido en él como tal Colegial dos años continuos. Y porque de algún
tiempo a esta parte se ha concedido este privilegio a algunas Becas, que sustentamos en el
Colegio de San Martín, que está a cargo de los Religiosos de la Compañía de Jesús de la
dicha Ciudad, declaramos asimismo, que no puedan gozar del dicho privilegio los que por
lo menos no hubieren tenido dos años continuos una de las becas, a que está concedido,
aunque con otra haya asistido muchos años en el mismo Colegio.
Otrosí declaramos, que el privilegio de graduarle por la mitad de las propinas y derechos en
todos los grados y Facultades de que gozan en la Universidad de Lima los hijos de
Doctores, Maestros y Catedráticos de ella, y los Colegiales de el Real Colegio Mayor de
aquella Ciudad, y algunos Colegiales, que como dicho es, sustentamos en el Colegio de San
Martín, no se entiende en la cena y comida, por esto se ha de depositar, y pagar por entero.
Ley XXVI. Que ninguna persona tenga lugar entre los Doctores y Maestros en actos
públicos, ni secretos.
Nuestros Virreyes no den licencia, consientan o permitan, que ninguno sea admitido, ni
tenga lugar, ni asiento entre los Doctores y Maestros de las Universidades en los paseos,
actos públicos, ni secretos de examen, aunque sean Doctores, Maestros, o Licenciados por
otras, o tengan cualquier oficio, o cargo nuestro, ni puedan dispensar el Rector, ni todo el
Claustro, si no fuere con Obispo, Oidor, Alcalde, o Fiscal de nuestra Real Audiencia de la
misma Ciudad.
Ley XXVII. Que los Oidores, Alcaldes, o Fiscales, que se incorporen, paguen la propina,
como los demás.
Mandamos, que los Oidores, Alcaldes del Crimen, y Fiscales de nuestras Audiencias de Las
Indias, que se incorporaren en algunas de las Universidades de ellas, paguen las propinas
como los demás.
Ley XXVIII. Que los Oidores, Alcaldes y Fiscales en las Universidades tengan el lugar,
que por la antigüedad de sus grados les perteneciere.
Ordenamos y mandamos, que en las dos Universidades de Lima y México en todo lo que
tocare a los grados y cosas del Claustro, y en lo demás a los Oidores, Alcaldes y Fiscales de
las Audiencias, que residen en las dichas Ciudades, y son y fueren graduados de Doctores
de las mismas Universidades, se les guarden las antigüedades de los grados de Doctores,
que tuvieren por ellas en todos los actos que concurrieren con los demás Doctores, y por
razón de los oficios y plazas de Oidores, Alcaldes y Fiscales no tengan más prelación de la
que por antigüedad de sus grados les compete.
Ley XXIX. Que el Colegial de San Felipe, que regentare la Cátedra de su Colegio, tenga
asiento con el Claustro en actos públicos.
El Colegio Real de San Felipe de la Ciudad de Lima es de los principales que tenemos en
las Indias, y un Colegial suyo lee ordinariamente la Cátedra de él en la Universidad de San
Marcos, con la cual está unido, e incorporado en la forma en que consta por su fundación:
Mandamos, que el Colegial, que la leyere y regentare, pueda tener y tenga en todos los
actos públicos en que la Universidad concurriere, lugar y asiento con el Claustro de ella, y
en esto no se le ponga impedimento.
Ley XXXI. Que se guarde el auto de Gobierno sobre la dotación de Cátedras, y salarios de
la Universidad de Lima.
Por auto del Gobierno del Perú están señaladas y dotadas las Cátedras de la Universidad de
Lima, y salarios de los Ministros de ella, en esta forma: La de Prima de Teología en
ochocientos pesos ensayados; la de Vísperas de Teología en seiscientos pesos ensayados; la
de Sagrada Escritura en seiscientos pesos ensayados: la Segunda de Vísperas en
cuatrocientos pesos ensayados; la de Prima de Cánones en mil pesos ensayados; la de
Vísperas de Cánones en seiscientos pesos ensayados; la de Decreto en seiscientos pesos
ensayados; la de Prima de Leyes en mil pesos ensayados; la de Vísperas de Leyes en
seiscientos pesos ensayados; la de Instituta en cuatrocientos pesos ensayados; la de la
lengua de los Indios en cuatrocientos pesos ensayados; al Capellán doscientos cuarenta
pesos ensayados; la de Bedel Mayor cuatrocientos pesos ensayados, todos de la dicha plata
ensayada de a doce reales y medio el peso; Ordenamos y mandamos, que así se guarde y
cumpla.
Ley XXXII. Que en la Universidad de los Reyes se funde una Cátedra de Prima de
Teología en la Religión de Santo Domingo.
Ley XXXIV. Que los Virreyes no depositen las Cátedras, y las dejen proveer, conforme a
estatutos.
Ley XXXV. Que las Cátedras y Ministros de la Universidad de Lima se paguen de los
novenos, que se señalan.
Mandamos, que las Cátedras de la Universidad de Lima, y los salarios de los Ministros
referidos en la ley XXXI. De este título, se paguen de los novenos, que nos pertenecen en
las Iglesias Metropolitanas y Catedrales, por la forma y cantidades siguientes; en los
novenos de la Metropolitana de la dicha Ciudad de Los Reyes ocho mil pesos de a ocho
reales; en los de la Catedral de Trujillo mil pesos de a ocho reales; en los de la Ciudad del
Cuzco trescientos cuarenta y tres pesos de a ocho, y seis reales; en los de la Catedral de la
Ciudad de Quito dos mil pesos de a ocho; en los de la Metropolitana de las Charcas dos mil
pesos; en los de la Catedral de la Ciudad de La Paz seiscientos veinticinco pesos de a ocho;
en los de la Catedral de la Ciudad de Guamanga cuatrocientos sesenta y ocho pesos de a
ocho, y seis reales; en los de la Catedral de la ciudad de Arequito cuatrocientos sesenta y
ocho pesos de a ocho, y seis reales, que todos suman y montan catorce mil novecientos y
seis pesos, y dos reales, de a ocho reales el peso, con los cuales se ha de pagar la dotación
de las Cátedras y salarios de los Ministros de la dicha Universidad.
Ley XXXVI. Que a la Universidad de México le paguen los tres mil pesos situados en la
Real Casa en lo procedido de arbitrios, como solían estar en los derechos de la Veracruz.
Ley. XXXVII. Que lo que se cobrare de Cátedras y Ministros, se ratee entre todos.
Ordenamos, que todas las Cátedras se provean por oposición, como fueren vacando: la de
Prima de Teología, Cánones y Leyes en Propiedad; y las demás de Teología, Cánones y
Leyes por cuatro años, y las de Artes y Filosofía.
Mandamos, que las Cátedras, que vacaren, se provean por oposición y votos, en la forma y
como estuviere ordenado por las Constituciones de la Universidad donde vacaren.
Ley XL. Ley que da forma en la provisión de las Cátedras de Lima y México.
Ley XLI. Que asistiendo algún Oidor al acto de votar Cátedra, no prefiera al Rector, ni le
apremie a que vaya a su casa a dar los puntos.
Mandamos, que cuando se ofreciere y conviniere que alguno de los Oidores de nuestras
Reales Audiencias de Lima, o México asista y se halle presente en ocasión de votar las
Cátedras de las Universidades fundadas en aquellas Ciudades, no prefiera en el lugar y
asiento al Rector , ni le apremie a que vaya a dar los puntos con ningún pretexto, ni
preeminencia de que se pueda valer.
Ley XLII. Que los catedráticos no se ausenten sin causa y licencia, so la pena de esta ley, y
forma de ella.
Ordenamos y mandamos, que de aquí adelante cualquiera que fuere Catedrático no pueda
hacer ausencia por más de dos meses en tiempo que sea lectivo, con licencia del Rector, ni
sin ella, y pasados los dos meses, sin esperar, ni ser necesario más citación, ni llamamiento,
se le espere otros quince días más para que en ellos pueda venir a excusarse y la excusa que
diere se vea por el Rector y Claustro convocado, señaladamente para este caso, y en él se
vote, y si pareciere justa la causa, se admita y pueda dar mas tiempo de dilación; y no
pareciendo serlo, se vaque (sic) la Cátedra, y se provea y pueda ser opositor aquel a quien
se quitó, y en esto lo que la mayor parte votare, se excuse irremisiblemente, y en otro
Claustro no se pueda variar, ni alterar, y de lo dicho tan solamente se exceptúan los que se
ausentaren por servicio nuestro, y con licencia del Virrey, o de quien gobernare,
interviniendo en la dicha causa del Real Servicio, o por bien, o negocio de la misma
Universidad, que en estos dos casos, o de enfermedad, podrá el Rector, y el Claustro dar
licencia para más tiempo de dos meses.
Ley XLIII. Que la cátedra de el proveído en Oficio, o Beneficio, que requiera residencia,
vaque.
Ley XLIV. Que los Catedráticos enseñen el Misterio de la Limpia Concepción de Nuestra
Señora.
Encargamos y mandamos, que cuando los Catedráticos lleguen a tratar, o leer materias en
que suele leerle la cuestión de la Limpieza de la Serenísima Virgen María Nuestra Señora
en su Concepción, no la pasen en silencio, y especialmente lean y prueben cómo fue
concebida sin pecado original en el primer instante de su ser natural, pena de perder la
Cátedra, y los cursos que tuvieren los Estudiantes, que no denunciaren ante el Rector, el
cual, hecha información del caso, dé cuenta al Claustro, y ponga edictos de Oposición a la
Cátedra, y el que la perdiere por este causa no pueda ser admitido a la oposición.
Ley XLV. Que los Virreyes nombren personas, que averigüen y castiguen a los que
sobornan, y son sobornados en los votos de Cátedras.
Porque es justo desarraigar tan perjudicial vicio, como sobornar votos en oposición de
Cátedras: Mandamos, que antes que se de la Cátedra por vaca, ni comiencen a leer los
opositores, nuestros Virreyes de Lima y México nombren una persona, que de oficio
averigüe quien son los que cohechan, o son cohechados, o los que dan, o reciben, aunque
sean cosas de comer, o beber en poca, o mucha cantidad, de forma que así los opositores,
como los votos tengan entendido la averiguación y castigo, que se ha de hacer contra ellos,
y se consiga la plena libertad en el votar a favor del más digno: y asimismo hagan, que se
averigüen y castiguen cualquier monopolios, conciertos, o ligas, que se hicieren entre los
opositores, a fin de acomodarse, y dar lugar los unos a los otros, y en particular los dichos
Virreyes tengan cuidado de procurar, que el prelado de la Ciudad, ni ningún Eclesiástico, ni
Ministro de la Audiencia, ni otras personas poderosas se apasionen, ni soliciten votos, ni
hagan ruegos para que se vote por ninguno, sino que los dejen a su entera y plena libertad, y
si además de los medios referidos se les ofrecieren otros, que les parezcan más eficaces y
convenientes, lo ejecuten tan precisamente, que los delincuentes sean castigados, y den
ejemplo a los demás.
Ley XLVI. Que en las Universidades de Lima y México y Ciudades donde hubiere
Audiencias Reales haya Cátedras de la Lengua de los Indios.
Ley XLVII. Que a los Doctores y Maestros Catedráticos se les de casa tasada, y por su
dinero cerca de las Escuelas.
Nuestros Virreyes den las órdenes y despachen los mandamientos necesarios, para que a los
Doctores y Maestros Catedráticos de las Universidades de Lima y México se les den
posadas por sus dineros, como fueren tasadas cerca de las Escuelas.
Ley XLIX. Que en México haya Cátedra de las Lenguas de la Tierra la cual se de por
oposición a Clérigos, o Religiosos de la Compañía de Jesús, y por ellos Religiosos no se
oponen, nombre el Virrey quien los examine aparte.
Ley L. Que no se den grados en el Convento de Santo Domingo de la Ciudad de los Reyes.
Los Virreyes del Perú provean, que en el Monasterio de Santo Domingo de la Ciudad de los
Reyes no se den grados mayores ni menores en ninguna de las facultades, que se leyeren
dentro, o fuera de sus Estudios.
Ley LI. Que los Religiosos de la Compañía de Jesús puedan enseñar en su Colegio de la
Ciudad de los Reyes la lengua Latina y otras, a las horas que se declara, y los Estudiantes
no ganen curso; ni se gradúen en sus Estudios.
Es nuestra merced y voluntad que los Religiosos de la Compañía de Jesús puedan leer
libremente en su Colegio de la Ciudad de los Reyes de el Perú a todas horas Gramática,
Retórica, y la Lengua de los Indios, y las demás lenguas que quisieren. Y asimismo puedan
leer las demás facultades a las horas que en la Universidad se leen las que vulgarmente se
llaman Catedrillas, como no lean las mismas materias, y a las horas que se leen las Cátedras
de propiedad, no puedan leer, ni lean facultad alguna más que solamente las de lenguas. Y
declaramos, que también son Cátedras de propiedad las de Artes, que se leen en la
Universidad por las mañanas, para que en ellas puedan cursar los Estudiantes, y que estos
cursos basten para poderse graduar, haciendo los actos, que se disponen por los Estatutos, y
que para graduarse en Teología han de acudir a las Escuelas a cursar, y hacer los demás
actos necesarios, y para graduarse en Artes han de cursar en Simulas, Lógica y Filosofía las
horas de la mañana, que en las Escuelas se leyeren estas facultades, y que en las de el dicho
Colegio de ninguna ciencia se ha de ganar curso para poderse graduar.
Ley LII. Que no se ganen cursos, ni den grados en el Colegio de la Compañía de Jesús de
México.
Mandamos, que lo proveído sobre que en el Colegio y Escuelas de la Compañía de Jesús de
Lima no se gane curso, ni gradúe, se entienda y guarde en el Colegio de la Ciudad de
México de la Nueva España, y que en él no se den grados ningunos.
Ley LIII. Que los Religiosos de Santo Domingo en Filipinas puedan leer Gramática, Artes
y Teología.
Con licencia de el Ordinario y Gobernador de las Islas Filipinas, y Acuerdo de nuestra Real
Audiencia de ellas, los Religiosos de la Orden de Santo Domingo en la Ciudad de Manila
fundaron un Colegio, donde se lea Gramática, Artes, y Teología, en que pusieron dos
Religiosos de cada facultad, y veinte Colegiales Seglares, de que ha resultado y resulta
grande provecho a la juventud, predicación del Santo Evangelio, y enseñanza de los hijos
de vecinos: Mandamos, que por ahora, y entretanto que no ordenaremos otra cosa, usen los
dichos Religiosos de la licencia que el Gobernador les dio para fundar el Colegio, y leer en
él las dichas facultades, y que esto sea y se entienda sin derogar, ni perjudicar a lo que está
ordenado acerca de semejantes fundaciones para que no se hagan, ni comiencen, sin
expresa licencia nuestra, lo cual se ha de guardar en todas nuestras Indias sin excepción
alguna.
Porque está mandado, que en la Ciudad de Santiago de el Reino de Chile se funde una
Cátedra de Gramática, para que la juventud de él pueda aprender Latinidad, y al que la
leyere se le den en cada un año de nuestra Real Casa cuatrocientos y cincuenta pesos de
oro, y no se puso en ejecución por falta de Preceptor, y han ofrecido los Religiosos de
Santo Domingo de aquella Provincia, que en el Convento de su Orden habrá siempre gratis
lección de Artes, Filosofía, y casos de conciencia, y nos suplicaron, que atento a su
necesidad, fundaremos, e instituiremos la dicha Cátedra de Gramática en el dicho
Convento, porque en él habría siempre Preceptor muy suficiente, que la lea, y se les pagase
el salario de los derechos de Almojarifazgo: Mandamos al Gobernador de la Provincia de
Chile, que no estando proveída esta Cátedra en alguna persona, provea, que se instituya en
el Convenio de Santo Domingo, por el tiempo que fuere nuestra voluntad, y los Oficiales de
la Real Hacienda paguen el salario de ella señaladamente de lo procedido de
Almojarifazgos.
Ley LV. Que los Religiosos de Santo Domingo de Quito lean en su Convenio la Cátedra de
la Lengua.
Habiéndose mandado instituir y fundar Cátedras de la Lengua de los Indios en las Ciudades
principales de las Indias, se ordenó, que en la de San Francisco de Quito la tuviesen los
Religiosos de la Orden de Santo Domingo, los cuales por orden de nuestra Real Audiencia
la leyeron en su Convento, y después la hizo trasladar a la Iglesia Mayor, y de ello no
resultó ningún buen efecto, antes muchos inconvenientes: Declaramos, y es nuestra
voluntad que entretanto que la Orden de Santo Domingo tuviere merced nuestra, para que
los Religiosos de ella lean la dicha Cátedra, la tengan en su Convento como antes estaba. Y
mandamos a nuestra Real Audiencia, que contra ello no vaya, ni pase en ninguna forma.
Ley LVI. Que los Prelados no den Orden Sacerdotal sin aprobación de el Catedrático de la
Lengua.
Ley LVII. Sobre diferentes puntos, que se han ofrecido acerca del gobierno de la
Universidad de Lima.
Habiéndose tenido noticia en nuestro Real Consejo de Indias por diferentes cartas e
informes de algunos puntos tocantes a la reformación de la Universidad de Lima, fuimos
servido de ordenar al Conde de Castellar, Virrey del Perú, que formase una Junta de tres
Oidores de aquella Audiencia, los que eligiese, y de el Rector, Maestre-Escuela, y un
Doctor, los cuales viesen lo propuesto en los papeles referidos, y con noticia de todo, y de
lo dispuesto por las Constituciones de la Universidad, proveyese del remedio conveniente
en cada uno, y diese cuenta de lo que ejecutase, en cuyo cumplimiento formó esta junta; y
hallándose presente y conferido sobre cada uno de los puntos se acordó lo que pareció
convenir; y visto por Nos, lo aprobamos y confirmamos con las declaraciones y
limitaciones contenidas en esta nuestra ley.
En cuanto al primero, sobre que el Rector de la Universidad se elija por dos años, y no
pueda haber reelección: Pareció a la Junta, que se observe lo dispuesto por la Constitución
quinta de la universidad, Cédulas nuestras, y costumbre, que ha habido desde su elección,
de elegirle por otro, como se ha observado, siendo el Rector a propósito para el cargo.
En cuanto al segundo, de que la elección de Rector no sea por alternativa, y puedan ser
elegidos Clérigos y Seculares, Doctores graduados en Teología, Cánones, y Leyes,
excluyendo a los Médicos, Artistas y Religiosos, pareció que se guarde la Constitución
sexta, y costumbre observada en esta razón para excluir a los graduados en Medicina y
Artes, cuando la ley de la Universidad admite a todos absolutamente, y se guarde al estilo
de la Universidad de no hacer elección en los Regulares.
Y en cuento el tercero, sobre que la Universidad no concurra a los Claustros, porque siendo
más de ciento los Doctores y Maestros, se causa confusión, y bastaría hacerse con el
Rector, Vicerector, Consiliario Mayor y Catedráticos, en que pareció, que los Claustros
tocantes a las cuentas, que deben dar los Rectores y Mayordomos de la Universidad, que
requieren conferencia y determinación judicial, se formasen del Rector, Consiliarios y
Catedráticos Juristas, hasta el número de diez, y si faltasen Catedráticos, supliesen este
número los Doctores más antiguos, y en este Claustro se feneciesen y acabasen las cuentas:
y en las materias gobernativas, y en todo lo demás de libramientos extraordinarios de
cantidad considerable, concurriese todo el Claustro, como hasta ahora, guardándose las
Constituciones y estilo.
En cuanto al cuarto, sobre que los Estudiantes Gramáticos no se admitan a matricular en la
Universidad para las facultades mayores, con solo cédula del Maestro de Retórica,
Religioso de la Compañía de Jesús, y que el Rector y Catedrático de Prima de todas
facultades, los vuelvan a examinar con AA. y RR. y no admitan Mellizos, Zambos, Mulatos
y Cuarterones, con que no los admitirán a Ordenes los Obispos, en que pareció, que se
observase el estilo de la Universidad, reducido a que dos Examinadores Catedráticos
nombrados por el Rector, después de la aprobación del Maestro de Retórica, vuelvan a
examinar a los Estudiantes Gramáticos, y hallándolos suficientes, se admitan con las firmas
del Rector, y ambos Examinadores: y en cuanto a la exclusión de los Mestizos, Zambos,
Mulatos y Cuarterones se observe la Constitución.
Y en cuanto al quinto y sexto, que divide las Cátedras entre el Clero Secular y Religiones,
pareció, que no era conveniente la división, porque impedía la emulación, y pudiera
impedir el ascenso a los más eminentes, y convenía, que se observase la Constitución y
costumbre de la Universidad, de que se admitan todos generalmente a la oposición.
En cuanto al séptimo de que los Religiosos de la Orden de Predicadores se examinen para
las Cátedras, leyendo en la Universidad como los demás Opositores, pareció, que se
observase lo dispuesto por la Ley XXXII de este título y que se den las Cátedras aplicadas a
esta Religión, en cumplimiento de la dicha ley, con que no parece preciso el nuevo examen.
En cuanto al octavo, sobre que se mude la forma observada en el votar las Cátedras, por
excusar sobornos, ruidos, alborotos, escándalos y otros inconvenientes, pareció, que se
debía dar nueva forma a la provisión de Cátedras. La cual vista y considerada por Nos,
ordenamos y mandamos, que se excluya (como queda excluido) el Virrey del Perú de tener
de votar en la provisión de Cátedras, y que se guarde y observe en cuanto a esto lo que está
dispuesto por la Ley XL de este título, en que se dio la forma que se debe observar en las
dos Universidades de Lima y México en la provisión de Cátedras, y no se conceda voto al
Virrey; pero sucediendo el caso de vacar algunas, estando gobernando el Arzobispo las
Provincias del Perú, podrá votar en su provisión, como Arzobispo, y no como Virrey.
Y en cuanto al noveno, sobre que no se hagan incorporaciones, sin que haya precedido el
examen, que disponen las Constituciones para el grado de Licenciado, pareció, que los
graduados en las Universidades de Salamanca, Alcalá, Valladolid y Bolonia, hayan de ser
admitidos a la incorporación sin examen alguno; porque en estas Universidades son
rigurosos los que se hacen; pero las de todas las demás no puedan admitirse sin examen en
la forma observada en la dicha Universidad de Lima para los grados de Licenciado.
Y en cuanto a los diez y once; que miran a que los puntos de el grado de Licenciado sean de
veinticuatro horas, y asistan todos los Catedráticos, que son Examinadores; al mismo
tiempo de tomar los puntos, por excusar los fraudes, que suelen hacerse, y las propinas de
los que no asistieren se acrezcan a los que concurren, pareció, que se guarde lo dispuesto
por las Constituciones, y lo observado por la costumbre, porque en los exámenes referidos
no es inconveniente que las lecciones sean de noche, respecto de que en ellas no suceden
disturbios, ni alborotos, y que se alguna vez acontecen, nacen de las oposiciones, y de los
que concurren con los Opositores, y por la misma Constitución se halla prevenido, que a los
puntos asistan los Catedráticos, que deben argumentar en el examen, en que se procede con
rigor y observancia de las Constituciones, y legalidad, y no hay causa para introducir
novedades.
Y en cuanto a que se acrezcan las propinas a los interferentes, se observe la Constitución,
añadiendo, que el Catedrático y Examinador, que no asistiere, pierda la propina
correspondiente al acto, en que no interviene: la cual se aplique a la Casa de la Universidad,
sino es que conste de legítimo impedimento, enfermedad, u otro grave, por certificación
jurada de Médico, o testigos examinados con juramento; y si se entregare la propina al que
faltó sin estas circunstancias, se le hará cargo de ella en la cuenta, que hubiere de dar al fin
del oficio.
En lo que toca al punto once, sobre la aplicación de las propinas de los que no asistieren,
aprobamos lo acordado por la dicha Junta, con calidad de que la propina de el Doctor, u
otro, que no asistiere, no se aplique a la Casa de la Universidad, y se vuelva al interesado.
Y en cuanto al doce, sobre que los Examinadores no excedan del número diez y seis, que se
componga de los Catedráticos, Ministros de la Real Audiencia, Doctores, y en su defecto,
de los más antiguos; pareció; que se guarde lo dispuesto por las Constituciones antiguas y
modernas; y en su conformidad se admitan por Supernumerarios los dichos Ministros, que
fueren graduados para mayor autoridad del acto.
Y en cuanto al trece y catorce, sobre que no se den los puntos para las Cátedras de Prima a
las doce de la noche, ni se permitan juntas, ni acompañamientos a los Opositores,
inhabilitando al que los tuviere; pareció, que los puntos se diesen por la mañana, como se
observa, guardando la costumbre. Y porque nuestra voluntad es, que el dicho Acuerdo se
guarde, cumpla y ejecute, conforme se limita y declara por esta nuestra ley, ordenamos y
mandamos a los Virreyes y Audiencia de Lima, y rogamos y encargamos al Arzobispo, que
para su puntual observancia den las órdenes convenientes, y no permitan que se
contravenga con ningún pretexto; y así se guarde, sin embargo de otra cualquier Ley, o
Constitución:
• Que los Clérigos y Religiosos no sean admitidos a Doctrinas sin saber la lengua de los
Indios, que han de administrar, Ley XXX título VI de este libro.
• Que los Inquisidores no den mandamientos contra las Universidades, sobre grados;
contra Estatutos, ni se entrometan en materias de gobierno; Ley XXIX número XXI
título XIX de este libro.
• Que los Virreyes informen del estado de las Universidades y Colegios, Ley IV título
XIV libro III.
• Que los Catedráticos de Prima de Medicina de las Universidades de México y Lima
sean Protomédicos, Ley III título VI libro V.
TITULO XXIII:
De los colegios y seminarios.
Ley I. Que se funden Colegios Seminarios, conforme al Santo Concilio de Trento, y los
Virreyes, Presidentes y Gobernantes los favorezcan y den el auxilio necesario.
Ley II. Que en los Seminarios se pongan las Armas Reales y puedan poner las de los
Prelados.
En los Colegios Seminarios se pongan nuestras Armas Reales, ocupando el lugar más
preeminente, en reconocimiento del Patronazgo Universal, que por derecho y autoridad.
Apostólica nos pertenece en todo el Estado de las Indias; y permitimos a los Prelados, que
puedan poner las suyas en lugar inferior.
Ley III. Que para los Seminarios sean preferidos los que se declaran y que personas no se
han de admitir.
En la provisión de sujetos, que han de hacer los Prelados para Colegiales de los Seminarios,
prefieran en igualdad de méritos a los hijos y descendientes de los primeros descubridores,
pacificadores y pobladores de aquellas Provincias, gente honrada, de buenas esperanzas y
respetos, y no sean admitidos los hijos de oficiales mecánicos, y los que no tuvieren las
calidades necesarias para Orden Sacerdotal y provisión de Doctrinas y Beneficios.
Ley IV. Que de los Seminarios asistan cada día cuatro Colegiales a los Divinos Oficios, y
en las Fiestas seis.
Porque las principales rentas de que se sustentan los Seminarios, están situadas en las de las
Iglesias Catedrales, encargamos a los Arzobispos y Obispos, que ordenen y hagan, que de
los Seminarios asistan a las Iglesias todos los días cuatro Colegiales, y en las Fiestas
solemnes seis, para que sirvan en ellas a los Divinos Oficios, no obstante que algunos
Seminarios estén a cargo y administración de cualquier Religioso.
Ley V. Que para nombrar personas en los Seminarios, y visitarlos el Prelado, se acompañe
conforme al Santo Concilio de Trento.
Por el Santo Concilio está dispuesto, que cuando los Obispos nombraren sujetos, para que
sean recibidos en los Colegios Seminarios; y cuando los visiten, se acompañen con dos
Capitulares, que el Cabildo nombrare: Mandamos a los Prelados de nuestras Indias, que así
lo guarden, cumplan y ejecuten; y los Virreyes, Presidentes y Gobernadores dejen la
nominación y elección de los Colegiales y personas, que tengan a cargo los Colegios, a
disposición de los Prelados.
Ley VI. Que los Virreyes y Prelados presenten y propongan para las Doctrinas a Colegiales
de los Seminarios, y otros Colegios, y en iguales méritos sean preferidos.
Los Virreyes, Presidentes y Gobernadores presenten para las Doctrinas a Colegiales de los
Seminarios, y otros Colegios de sus distritos, teniendo las partes de habilidad y suficiencia,
que disponen las leyes de nuestro Patronazgo Real, y en igualdad de calidades los prefieran
a otros Opositores, que no hubieren sido Colegiales. Y rogamos y encargamos a los
Prelados Eclesiásticos, que en las proposiciones de sujetos hagan lo mismo.
Ley VII. Que los tres por ciento, que se rebajan a los Religiosos Doctrineros de la Orden de
San Francisco para les Seminarios, sean en dinero, y no en especie.
Mandamos a nuestros Oficiales Reales del Perú, que rebajen de los estipendios con que
acuden a los Religiosos Doctrineros de la Orden de San Francisco los tres por ciento, que
conforme a la Ley XXXI título XV de este libro han de haber los Seminarios, en dinero, y
no en especie, y con la restante cantidad acudan a los Religiosos.
Ley VIII. Que en el Colegio de San Martín de Lima asistan dos Colegiales de cada
Seminario, que fundaren los Prelados, y graduados de Bachiller, se vuelvan, y entren otros.
Ordenamos y tenemos por bien, que de cada uno de todos los Colegios Seminarios, que
conforme a la disposición del Santo Concilio de Trento han fundado y fundaren los
Arzobispos y Obispos de las Iglesias Metropolitanas y Catedrales de las Provincias del Perú
y Tierrafirme, desde Cartagena a Chile, y Río de la Plata, nombren los Prelados, o sus
Cabildos en Sedevacante, dos Colegiales, a los cuales envíen al Colegio de San Martín de
la Ciudad de los Reyes, para que en él estudien hasta recibir el grado de Bachiller en la
Universidad de aquella Ciudad, y habiéndole obtenido, los muden y puedan nombrar los
prelados, o Cabildos Sedevacantes otros dos en su lugar, con calidad de que nunca han de
concurrir más de dos Colegiales de un Seminario, y se sustenten de las rentas de los
Seminarios de donde fueren enviados, y de esta suerte gocen de educación y doctrina en los
Estudios de las ciencias. Y mandamos al Rector, y Colegiales del Colegio de San Martín,
que reciban a los que así fueren enviados, sin ponerles impedimento.
Ley IX. Que pone las calidades, que ha de tener el Rector del Colegio de San Felipe de
Lima.
Mandamos, que para ser Rectores del Colegio de San Felipe y San Marcos de la Ciudad de
los Reyes; los Colegiados de él hayan de ser Colegiales actuales: y que lo hayan sido dos
años: y teniendo veintitrés de edad: estén graduados de Bachiller, o Licenciados en
Teología, o Derechos Canónico, o Civil: la elección sea hecha por el Gobierno: y dure el
oficio un año, que ha de comenzar desde el día de San Felipe.
Ley X. Que en cuanto a ser los Colegiales de San Martín de Lima Teólogos, o Juristas, se
cumpla la intención del Rey, y guarde la Constitución.
A Nos se ha hecho relación, que habiéndose acostumbrado desde la fundación del Colegio
de San Martín de la Ciudad de los Reyes, que todos los Colegios profesen la Sagrada
Teología, por lo mucho que importa que los naturales de aquellas Provincias la estudien,
para que se ocupen en la extirpación de las idolatrías, y se ha introducido admitir en él
Legistas, y Canonistas: Mandamos a nuestros Virreyes del Perú, que cumplan con nuestra
intención en lo que toca a la presentación de estas Becas, en la forma que las acostumbran
proveer, guardando y haciendo guardar la Constitución de el Colegio.
Ley XI. Que sean favorecidos los Colegios fundados para criar hijos de Caciques, y se
funden otros en las Ciudades principales.
Para que los hijos de Caciques, que han de gobernar a los Indios, sean desde niños
instruidos en nuestra Santa Fe Católica, se fundaron por nuestro orden algunos Colegios en
las Provincias del Perú, dotados con renta, que para este efecto se consignó. Y por lo que
importa, que sean ayudados y favorecidos, mandamos a nuestros Virreyes, que los tengan
por muy encomendados, y procuren su conservación y aumento, y en las Ciudades
principales del Perú y Nueva España se funden otros, donde sean llevados los hijos de
Caciques de pequeña edad, y encargados a personas Religiosas y diligentes, que los
enseñen, y Doctrinen en Cristiandad, buenas costumbres, policía y Lengua Castellana, y se
les consigne renta competente a su crianza y educación.
Ley XII. Que el Colegio y Hospital de Mechoacán sean del Patronazgo Real.
Ley XIII. Que el Colegio de San Pedro y San Pablo de México sea a cargo de la Compañía
de Jesús, y de el Patronazgo Real.
Ley XIV. Que se guarden las Ordenanzas del Colegio de los niños pobres de México, y sea
bien administrado.
En la Ciudad de México está fundado un Colegio, donde se recogen muchos niños pobres
Mestizos, y se les enseña la Doctrina Cristiana y buenas costumbres, procurando, que no se
críen viciosos y vagabundos. Y porque le hemos hecho algunas mercedes, y es nuestra
voluntad, que esta obra se continúe y aumente cuanto fuere posible, mandamos a los
Virreyes de la Nueva España, que hagan guardar las Ordenanzas dadas a este Colegio el
año de mil quinientos cincuenta y siete, y tengan particular cuidado de avisarnos el estado
en que se halla, y si los que en él concurren aprovechan en buena doctrina y costumbres, y
reconociendo alguna falta, o descuido, lo remedien y hagan recoger todos cuantos niños
Mestizos hubiere, y ordenen se tome la cuenta a los que la debieren dar de lo que se ha
distribuido, y con que órdenes, y cobren los alcances, y lo gasten en lo más necesario y
provechoso al Colegio.
Ley XV. Que el Colegio de San Antonio del Cuzco preceda al de San Bernardo.
Departamento de Gobierno.
Buenos Aires, marzo 26 de 1874
DECRETO.
Título I.
Del Consejo Superior
Art. 1º. El actual Rector de la Universidad continuará por cuatro años en el ejercicio de su
cargo con arreglo a las disposiciones del presente decreto.
Art. 2º. El consejo superior de la Universidad se compone del Rector, de los decanos y de
dos delegados de cada una de las facultades,
10. Examinar las cuentas que anualmente deberá rendir cada Facultad de la
administración de los fondos que le corresponden y remitirlos con su aprobación
al P.E. a los efectos que determine la ley.
11. Nombrar un Secretario general y los empleados que sean necesarios para el
servicio de la Secretaría del Consejo.
Art. 3º. Bis. El Rector es el Presidente del Consejo en cuyas deliberaciones tendrá voto
decidiendo además en caso de empate.
Art. 5º. Además de las facultades que el reglamento del Consejo le confieran, corresponde
al Rector vigilar por el cumplimiento de todas las disposiciones sobre instrucción
secundaria y superior, dirigiendo las comunicaciones y entablando las gestiones que creyera
oportunas.
TITULO II
De las facultades.
Humanidades y Filosofía.
Ciencias Médicas.
Derecho y Ciencias Sociales.
Matemáticas.
Ciencias Físico Naturales
Art. 8º. Los miembros académicos hasta el número de nueve en cada facultad serán
nombrados por primera vez por el P.E. En lo sucesivo cada facultad nombrará los
miembros académicos y honorarios en la forma que determinen las leyes y reglamentos.
Art. 9º. El empleo de profesor en cualquiera de los ramos científicos no induce la calidad de
miembro de la facultad respectiva.
Art. 10º. El número de miembros académicos de cada facultad no debe exceder de quince,
pudiendo ser indefinido el número de miembros honorarios.
Art. 11º. Para ser miembro académico de cada una de las facultades se requiere: 1) Título
académico científico expedido por una universidad o corporación científica que acredite
haber completado los estudios correspondientes a la facultad respectiva. 2) Haber rendido
las pruebas científicas que las facultades determinarán en sus Reglamentos. Los miembros
Académicos que fijen su residencia fuera de la provincia o que se ausenten de ella por más
de seis meses serán considerados como miembros honorarios, mientras dure su ausencia de
la provincia.
Art. 12º. Cada facultad podrá funcionar en una casa especial en la cual se colocarán las
oficinas, clases y útiles de su dependencia.
Art. 13º. Cada facultad será presidida por su respectivo Decano y tendrá para el servicio de
los asuntos de su recorte un Secretario y uno o más Oficiales de Secretaría, según fuese
necesario.
Art. 14º. Todos los miembros así Académicos como honorarios de cada Facultad, podrán
concurrir a sus deliberaciones, pero sólo tendrán voto los miembros Académicos.
TITULO III
De las elecciones de los cargos universitarios
Art. 17º. El empleo de Rector de la Universidad y el Decano de cada Facultad durará cuatro
años pudiendo ser reelegidos indefinidamente.
Art. 18º. La elección de Rector se hará en reunión de todas las facultades y por mayoría de
la asistencia o a lo menos de la mitad mas uno de los miembros académicos de todas las
facultades.
Art. 19º. La elección de los Decanos se hará por la Facultad respectiva en la misma forma
que la del Rector.
Art. 20º. La elección del Secretario general y de los Secretarios de las facultades se hará en
la misma forma, por el Consejo Superior y por cada Facultad.
Art. 21º. El reglamento interno del Consejo Universitario y cada Facultad determinará la
forma de la elección de los demás empleados.
Art. 22º. En falta o ausencia del Rector desempeñará sus funciones el Decano más antiguo
o el de mayor edad si no hubiera preferencia por razón de antigüedad.
El Decano presidirá también el Consejo cuando se trate de un asunto decidido por el Rector
en 1ª instancia.
En falta o ausencia del Decano desempeñará sus funciones el académico más antiguo o en
su defecto el de mayor edad.
TITULO IV
Disposiciones generales
Art. 23º. Una vez constituido el Consejo Superior, procederá a formar el reglamento
interno y el correspondiente al orden y disciplina de los establecimientos dependientes de la
Universidad.
Art. 24º. Cada una de las Facultades procederá del mismo modo a dictar su reglamento
interno y los demás que sean necesarios para llenar cumplidamente las funciones que la
Constitución y este decreto le atribuyen, procediendo igualmente a formar su respectivo
presupuesto de sueldos y gastos para ser sometido en oportunidad de la legislatura de la
Provincia.
Art. 25º. Cada una de las Facultades existentes no podrán tener mas empleados que los
autorizados por la Ley del presupuesto vigente
Art. 27º. Sométase a la aprobación de la Honorable Legislatura este decreto, con el mensaje
correspondiente, publíquese y dese al registro oficial.
Art. 1º. El Poder Ejecutivo ordenará que los Consejos Superiores de las Universidades de
Córdoba y de Buenos Aires, dicten sus estatutos en cada una de estas Universidades,
subordinándose a las reglas siguientes:
Art. 2º. Los Estatutos dictados por los Consejos Superiores con arreglo a las bases
anteriores serán sometidos a la aprobación del Poder Ejecutivo.
Art. 3º. La designación de los profesores se hará por el Poder Ejecutivo, a propuesta de las
Facultades respectivas.
25 de junio de 1885.
LEY 4.699 (560).
Art. 2º – Autorizase al Poder Ejecutivo para hacer de rentas generales y con imputación a
esta ley, los gastos que requiera la instalación y funcionamiento de la referida universidad,
mientras ella no sea incorporada al presupuesto general de la Nación.
Art. 3º – A los efectos de la ley de montepío civil, los empleados de la provincia de Buenos
Aires que, con motivo del convenio, pasasen a depender de la Nación, serán considerados
empleados nacionales, a contar de la fecha de sus respectivos nombramientos,
computándose sus servicios prestados a materia vigentes en ella.
TITULO I
De la universidades
CAPITULO I
Art. 3°- (Personería jurídica). Las universidades poseen plena capacidad jurídica para
adquirir, vender y administrar toda clase de bienes, así como para demandar y comparecer
en juicio. Su representación compete al rector, quien podrá delegarla y otorgar, en su caso,
los poderes necesarios.
CAPITULO II
A) Del Rector
Art. 10º. – (Designación). El rector será designado por el Poder Ejecutivo y durará tres
años en funciones.
Art. 11º. – (Requisitos). Para ser rector se requiere: ser ciudadano argentino, haber
cumplido 30 años de edad y 10 años de diplomado; poseer el título máximo de la facultad
nacional correspondiente o ser profesor titular o adjunto confirmado.
Art. 12º. – (Deberes y atribuciones). Sin perjuicio de las demás funciones que le impone y
otorga la presente ley y las que le asignen otras disposiciones legales, el rector tendrá los
siguientes deberes y atribuciones:
1° Representar legalmente a la universidad;
2° Designar las personas que llevarán la representación oficial de la universidad;
3° Convocar al consejo universitario a reuniones ordinarias y extraordinarias,
expresando en la convocatoria los asuntos a tratarse;
4° Firmar los títulos, diplomas, distinciones y honores universitarios;
5° Proponer a los consejos directivos de las facultades las ternas para la designación de
decano de las mismas;
6° Resolver las cuestiones que ni se hallen expresamente reservadas al consejo
universitario o a las autoridades de las facultades;
7° Dirigir la administración de la universidad, pudiendo recabar de las facultades y
demás institutos de la universidad los informes que estime conveniente;
8° Vigilar la contabilidad de la universidad y tener depositados a su orden los fondos
universitarios;
9° Decretar en el presupuesto de la universidad y autorizar los demás que el consejo
ordene;
10º. Nombrar y remover al personal de la universidad, cuya designación y remoción no
corresponda al consejo universitario o a las facultades de acuerdo con el art. 123 de la ley
12.961 y su reglamentación;
11º. Adoptar las medidas necesarias y urgentes para el buen gobierno de la universidad,
dando cuenta de ello al consejo universitario;
12º. Ejercer la jurisdicción policial y la disciplina en primera instancia, en el asiento
del rectorado y del consejo;
13º. Conceder las licencias o permisos en los casos señalados por las reglamentaciones
pertinentes;
14º. Publicar durante el primer trimestre de cada año, una memoria que consigne la
tarea docente y la gestión administrativa realizada en el período anterior.
Art. 13º. – (Voto del rector). El rector tendrá voz y voto en las decisiones del consejo,
prevaleciendo el suyo en caso de empate.
Art. 15º. – (Retribución). El rector recibirá como única retribución. la cantidad de cuatro
mil pesos moneda nacional (m$n 4.000) mensuales En el caso de ser profesor, percibirá
únicamente el sueldo de rector.
A) Del Vicerector
Art. 16º. – (Funciones, requisitos y retribución). El vicerector ejercerá las funciones del
rector en ausencia, renuncia o impedimento de éste, o las que el mismo, expresamente y
mediante la oportuna comunicación, le delegare. Para ser elegido vicerector se requerirán
las mismas condiciones que para ser rector. Percibirá para gastos de representación, la suma
de quinientos pesos moneda nacional (m$n 500) mensuales.
Art. 17º. – (Constitución). El consejo universitario estará constituido por el rector, que lo
precederá, y por los decanos y vicedecanos de cada facultad.
Art. 18º. – (Atribuciones). El consejo universitario tendrá las siguientes atribuciones. sin
perjuicio de las demás que se le acuerdan en esta ley:
1a Ejercer la jurisdicción superior universitaria y resolver en última instancia las
cuestiones contenciosas que hayan fallado el rector o las facultades, con excepción de
aquellas atribuidas expresamente por esta ley a las facultades;
2a Proponer al Poder Ejecutivo la creación de nuevas facultades;
3a Dictar los reglamentos convenientes para el régimen común de los estudios y
disciplina general de los establecimientos universitarios;
4a Aprobar los planes de estudio a propuesta de las respectivas facultades;
5a Acordar por iniciativa propia o a propuesta de las facultades el título de doctor
honoris causa, o de miembro honorario de la universidad, a las personas que sobresalieren
por sus obras, estudios o trabajos de investigación;
6a Decidir en última instancia las cuestiones sobre validez o equivalencia de títulos,
diplomas, estudios, asignaturas, honores y distinciones universitarias que hubieran sido
resueltas por los consejos de las facultades;
7a Acordar por iniciativa propia o a propuesta de las facultades la creación de nuevas
escuelas e institutos;
8a Proyectar el presupuesto anual y aprobar las cuentas presentadas por el rector, y la
inversión de los fondos asignados a la universidad, las facultades y demás establecimientos
universitarios;
9 a Resolver lo conducente al ejercicio de la personería jurídica de la universidad;
10a. Dictar su reglamento interno y las ordenanzas necesarias para la buena marcha de
la institución;
11a. Aprobar o devolver observadas a las facultades, las ternas formuladas por éstas
para la provisión de cátedras titulares, así como las reglamentaciones que dicten aquéllas
para la designación de profesores adjuntos, extraordinarios y honorarios. El consejo
universitario sólo tiene facultad para considerar el aspecto formal de las ternas y las
objeciones morales a los candidatos, nunca el orden de los nombres ni la competencia
científica y didáctica que son privativos de cada facultad;
12a. Elegir un vicerector entre sus miembros, que durará tres años en funciones;
13a. Fijar las épocas de inscripción y los aranceles universitarios, estos últimos ad
referéndum del Poder Ejecutivo;
14 a. Aceptar las herencias con beneficio de inventario, y los legados o donaciones que
se dejen o hagan a las universidades o a las facultades o establecimientos que las integren;
15a. Vender, con autorización del Poder Ejecutivo, los bienes inmuebles, títulos y
valores pertenecientes a la universidad;
16a. Modificar a propuesta de las facultades, las escuelas que las integren y sus títulos
universitarios, como asimismo fijar por su sola decisión las proporciones en que éstas
estarán representadas en los consejos directivos;
17a. Revalidar los diplomas expedidos por universidades extranjeras, de acuerdo con
las leyes y con los tratados internacionales previo estudio, en cada caso, del valor científico
y jerarquía de la enseñanza impartida por las mismas y consideración que merecen sus
títulos;
18a. Ejercer las facultades disciplinarias que determina esta ley y los reglamentos que
se dictaren;
19a. Reglamentar, a propuesta de las facultades, las incompatibilidades para el ejercicio
del cargo de profesor, según se exija o no dedicación exclusiva;
20a. Aprobar las reglamentaciones que dicte cada facultad sobre sus respectivas
carreras docentes o científicas.
Art. 21º. – (Atribuciones). El prosecretario general deberá actuar como secretario en las
comisiones del consejo universitario; tendrá a su cargo el despacho de los institutos y
establecimientos dependientes del consejo universitario y refrendará todas las resoluciones
del rector, dictadas para esas dependencias.
TITULO II
De las facultades
Art. 22º. – (Gobierno). El gobierno de la facultad estará a cargo del decano y un consejo
directivo, constituido por el decano y diez consejeros, que se designarán de entre los
profesores de la respectiva facultad.
Art. 23º. – (Duración). El decano o los consejeros durarán tres años en sus funciones no
pudiendo estos últimos ser reelectos, sino con intervalo de un período.
Art. 24º. – (Proporciones). Cuando una facultad esté formada por más de una escuela el
consejo universitario fijará la proporción de consejeros con que cada una de ellas estará
representada en el mismo.
Art. 27º. – (Elección del decano). Los consejeros elegidos se reunirán bajo la presidencia
del de mayor edad que sea profesor titular y elegirán, a su vez por el voto de la mayoría, al
decano de la terna enviada por el rector de la universidad. Si la elección recayera en un
profesor (titular o adjunto) que no formara parte del consejo, quedará eliminado de hecho el
consejero, (profesor titular o adjunto, según sea la categoría del electo) que al ser elegido
obtuvo menor número de votos. Si dos o más se encontrasen en estas condiciones, la
eliminación se hará por sorteo, manteniendo siempre la proporción señalada en el art. 25º.
Art. 28º. – (Consejeros sustitutos). Las vacantes de consejeros titulares que se produzcan
antes de la fecha de renovación, serán llenadas por sorteo, que se realizará entre los
consejeros substitutos de titulares o de adjuntos, según sea la vacante producida y
manteniendo la representación de las escuelas.
Art. 30º. – (Quórum). Las sesiones del consejo directivo se realizarán con el quórum de
siete consejeros, y sólo podrán ser presenciadas por los profesores, por periodistas y por no
más de quince estudiantes de la misma facultad, de acuerdo con la reglamentación que dicte
oportunamente cada una de ellas. Las sesiones serás secretas, cuando así lo resuelva el
consejo o el decano, en casos de excepción.
Art. 33º. – (Incompatibilidades). Los miembros titulares del consejo directivo no podrán
desempeñar empleos rentados dependientes de la universidad, con excepción de los cargos
de directivos y docentes. Tampoco podrán ser nombrados para cátedras, dirección, empleo
o comisión rentada, creados durante su mandato, hasta después de dos años de fenecido
este. Los aspirantes a cátedras ya existentes, podrán presentarse al concurso, previa
renuncia como miembros del consejo directivo.
B) Del Decano
Art. 34º. – (Requisitos).Para ser decano se requiere ser ciudadano argentino, haber
cumplido treinta años de edad y ser profesor titular, honorario o adjunto confirmado, de la
respectiva facultad.
Art. 35º. – (Duración). El decano durará tres años en su cargo, y en caso de separación,
renuncia o muerte, el nuevo decano será designado por el tiempo que faltare para completar
el período.
Art. 36º. – (Voto del decano). El decano tendrá voz y voto en las decisiones del consejo,
prevaleciendo el suyo en caso de empate.
C) Del Vicedecano
Art. 40º. – (Duración y funciones). El vicedecano durará tres años en funciones. Ejercerá
las del decano durante la ausencia o impedimento de éste, o las que el mismo expresamente
y mediante la oportuna comunicación le delegare. En caso de vacancia del vicedecano, el
consejero que lo sustituya completará el período.
Art. 41º. – En caso de ausencia, renuncia o fallecimiento del vicedecano en ejercicio del
decanato, interino el consejero profesor titulas de mayor antigüedad.
TITULO III
De los Profesores
A) Profesores titulares
Art. 45º. – (Requisitos). Para ser designado profesor titular se requiere ser ciudadano
argentino y poseer el título o diploma universitario.
Art. 46º. – (Concurso). Los profesores titulares serán designados por el Poder Ejecutivo
de la Nación, de una terna de candidatos elevada por la universidad, previo concurso de
méritos, aptitudes técnicas, títulos antecedentes y trabajos.
Art. 48º – (Comisión asesora). El consejo directivo de cada facultad designará, en cada
caso, una comisión asesora compuesta por tres miembros sorteados entre un mínimo de
diez profesores titulares de la misma materia, si los hubiere, y de las materias afines a la
cátedra, de la misma facultad o de otras universidades, si no alcanzare a integrarse con los
de aquella.
El orden de afinidad entre las materias se establecerá con carácter permanente por las
facultades al aprobar los respectivos planes de estudio.
Art. 50º. – (Requisitos para figurar en terna). – Para figurar en terna se requieren
antecedentes morales inobjetables, ser egresado con cinco años por lo menos de antelación,
poseer diploma universitario nacional y haber acreditado aptitudes docentes y trabajos
científicos en la correspondiente especialidad o en materia de íntima conexión con ella. El
título de profesor adjunto se tendrá en cuenta en forma preferente al configurar la terna. La
actividad científica y docente del candidato deberá ser continua y comprobada mediante
publicaciones y cursos que se estimarán no sólo por el número sino también y en primer
término, por el mérito intrínseco. A los concursantes que no fueran profesores adjuntos, la
respectiva facultad podrá exigirles una prueba complementaria.
Art. 51º. – (Formación de la terna). Las ternas para profesor titular deberán formarse
previo dictamen escrito y fundado de la comisión asesora del consejo directivo.
Art. 52º. – (Inscripción extraordinaria). Hasta diez días después de cerrado el concurso,
podrá proponerse al consejo directivo, por cuatro consejeros y con la conformidad del
interesado, la inscripción en el mismo de toda persona de relevante y notorio prestigio
científico, en cuyo caso, para ser considerado por la comisión asesora, necesitará contar con
la aprobación del consejo directivo por las dos terceras partes de sus votos.
Art. 53º. – (Opción de los titulares). Los profesores titulares pueden presentarse a
concurso para optar a otras cátedras afines, pero si obtuviesen vacante están obligados a
renunciar a la cátedra que hubieren estado dictando.
Art. 54º. – (Plazo del llamado a concurso). Producida una vacante de profesor titular, se
llamará a concurso dentro de un plazo no mayor de tres meses, poniéndose interinamente,
la cátedra a cargo de un profesor adjunto correspondiente a la misma materia y, a falta de
este, podrá designarse otro profesor de materias afines.
Art. 55º. – (Prórroga del ejercicio de la cátedra). El consejo directivo de cada facultad
podrá anualmente, autorizar por dos tercios de sus votos, a continuar en el ejercicio de la
cátedra titular y hasta tres veces consecutivas a los que estuvieren en condiciones de
obtener su jubilación ordinaria.
Art. 58º. – (Obligación de colaborar oficialmente). El profesor que optare por dedicar
todo su tiempo a la universidad, estará obligado a prestar su dirección y asesoramiento
técnico cuando fuera requerido por el Poder Ejecutivo.
Art. 59º. – (Dedicación a una sola cátedra). En ningún caso podrá desempeñarse por un
mismo profesor titular, más de una cátedra.
B) Profesores adjuntos
Art. 62º. – (Régimen de adjuntos). Cada facultad determinará, con aprobación del consejo
universitario, el número de profesores adjuntos que corresponda a cada cátedra. Todas las
ordenanzas relativas al régimen de concursos para la designación de profesores adjuntos,
requerirá aprobación del consejo universitario.
Art. 64º. – (Deberes y atribuciones). Son deberes y atribuciones del profesor adjunto:
1º Reemplazar a los titulares en el desempeño de sus cátedras y demás funciones;
2º Dictar cursos complementarios o de otro orden, de acuerdo con la reglamentación de
la respectiva facultad;
3º Formar parte de los tribunales de promoción y de los jurados y desempeñar las
comisiones que las facultades creyeren necesario encomendarles;
4º Participar en las elecciones establecidas en esta ley.
Art. 65º. – (Asistentes). Se designarán, cada año, hasta dos profesores adjuntos para
actuar como asistentes del profesor titular. El profesor titular turnará entre los profesores
adjuntos la designación de los asistentes. Serán nombrados por el decano a propuesta del
profesor titular y tendrán, además de las obligaciones inherentes a su carácter de adjuntos,
las que reglamente cada facultad para su condición de docentes auxiliares de la cátedra
titular.
C) Profesores extraordinarios
D) Profesores honorarios
Art. 67º. – (Designación). Al profesor que se retire de la enseñanza, podrá, en los casos de
haberse destacado por su actuación científica, otorgársele el título de profesor honorario,
por el consejo directivo, con el voto de las dos terceras partes de sus miembros y con la
aprobación del consejo universitario en igual forma.
El título de profesor honorario es vitalicio. Sus funciones serán determinadas por las
reglamentaciones de cada facultad, con la aprobación del consejo universitario.
Art. 68º. – (Remuneración mensual ordinaria). Los profesores titulares gozarán de una
remuneración mensual de mil ochocientos pesos moneda nacional (m$n1.800), la que será
aumentada cada cinco años en un 10 %.
Art. 69º. – (Remuneración mensual por dedicación exclusiva). Los profesores a cargo de
cátedras de consagración exclusiva, gozarán de una remuneración mensual de tres mil
quinientos pesos moneda nacional (m$n 3.500), la que será aumentada cada diez años en un
10 %, no pudiendo percibir ninguna otra remuneración cualquiera sea la función que
desempeñen dentro de la universidad.
Art. 70º. – (Fijación de las retribuciones de los titulares). En los casos en que un profesor
titular hiciera expresa manifestación de querer consagrarse exclusivamente a la enseñanza,
los consejos directivos, por dos tercios de los votos podrán, si lo encontrasen conveniente,
aceptar este ofrecimiento, en cuyo caso gozará de la misma retribución fijada en el artículo
anterior.
Art. 71º. – ( Retribución de los adjuntos). En las cátedras establecidas por la facultad
como dedicación exclusiva, los profesores adjuntos asistentes gozarán de una remuneración
mensual de mil quinientos pesos moneda nacional (m$n 1.500); los demás profesores
adjuntos asistentes gozarán de una remuneración mensual de ochocientos pesos moneda
nacional (m$n 800).
Art. 72º. – (Bases de la carrera docente). Cada facultad reglamentará su carrera docente
ajustándose a las siguientes bases:
a) El aspirante a profesor universitario cursará un período de “adscripción” a una
determinada cátedra, durante el cual realizará trabajos de investigación o de seminario en
materias afines, bajo la dirección del respectivo profesor, y ejercicios docentes en la
materia de su adscripción; completará su preparación con cursos obligatorios sobre
materias de cultura general. Podrán implantarse o no, según las características de cada
facultad, exámenes finales para la aprobación de las materias de adscripción;
b) Cumplido esto, el aspirante a profesor pasará a ejercer la docencia complementaria bajo
la dirección del profesor titular y durante el tiempo que fijará cada facultad para cada
asignatura;
c) Terminada esta etapa, y previo un examen o concurso general de competencia técnica y
docente sobre la materia de su dedicación, será autorizado como docente;
d) El docente autorizado tendrá las obligaciones que le fije cada facultad y un derecho de
preferencia para presentarse a los concursos de profesor adjunto.
Art. 73º. – (Venia docendi). Todo egresado de la universidad, con diez o más años de
ejercicio profesional, que reúna trabajos, títulos y antecedentes científicos suficientes podrá
solicitar al consejo directivo un permiso para enseñar, y cumplidos los requisitos exigidos
para demostrar su capacidad docente y preparación técnica, que establecerá cada facultad,
le conferirá la “venia docendi”, es decir, el permiso para enseñar en forma regular y
sistemática. Sus antecedentes serán tenidos en cuenta para autorizar su inscripción en los
concursos de profesor adjunto.
La forma regular y sistemática de la enseñanza de la “venia docendi”, será reglamentada
por cada facultad.
Art. 77º. – (Facultades). Las sugestiones del claustro serán consideradas por el decano y
el consejo directivo de la facultad, para resolver sobre su viabilidad. El claustro no tratará,
bajo ningún concepto, cuestiones ajenas al plan de estudios y al desarrollo de la enseñanza.
El claustro podrá también ser consultado por escrito.
TITLO IV
De los estudiantes
A) Categorías
Art. 78º. – (Estudiantes regulares). Los estudiantes serán regulares y libres. Los primeros
deberán asistir obligatoriamente para mantener su situación de tales, a las clases prácticas y
trabajos universitarios, en la proporción que fije cada facultad. Son los únicos que pueden
obtener becas.
Art. 79º. – (Estudiantes libres). Son estudiantes libres los que inscriptos en la universidad,
no cumplan los requisitos necesarios para conservar el carácter de regulares.
El estudiante libre rendirá examen en las siguientes condiciones:
1º La prueba teórica no podrá durar menos de media hora;
2º En caso de prueba práctica, se acreditará, a satisfacción del tribunal examinador,
grado suficiente de preparación en la materia. Esta prueba es eliminatoria;
3º El examen teórico se hará con el programa oficial íntegro de la asignatura de que se
trate, pudiendo el tribunal examinador elegir el tema o temas dentro del programa sobre el
que deberá disertar el alumno.
Art. 80º. – (Estudiantes vocacionales). Todo egresado en una carrera universitaria podrá
inscribirse en cualquier asignatura de cualquier facultad sin rendir examen de ingreso. Los
estudiantes quedarán sometidos exclusivamente a las restricciones de correlación de
estudios que establecerá la universidad.
Art. 82º. – Los alumnos vocacionales podrán pedir certificado de las asignaturas
aprobadas, y si su conjunto alcanzase a una carrera completa tendrán derecho al título
profesional respectivo.
Art. 83º. – EL consejo universitario reglamentará las correlaciones de materias
indispensables para autorizar la inscripción en cada asignatura determinada, con el objeto
de evitar que se intente afrontar estudios sin bases preliminares insustituibles.
Esta correlación será dictada con la mayor liberalidad posible, tendiente a no restringir la
ampliación de técnica y de cultura que se deriva de esta libre elección de estudios
superiores.
B) De su representación
Art. 84º. – Los estudiantes tendrán representación en los consejos directivos por
intermedio de un delegado por cada escuela.
Art. 85º. – Entre los diez alumnos que hubieran obtenido las más altas calificaciones en el
transcurso de su carrera y se encuentren cursando el último año, se sorteará al que ha de
tener la representación estudiantil. Este cargo es irrenunciable, salvo causa justificada a
juicio del consejo.
Art. 86º. – El delegado será convocado a las sesiones que celebre el consejo directivo. En
dichas sesiones el delegado podrá expresar libremente el anhelo de sus representados, no
teniendo voto en las decisiones que adopte el consejo.
C) De las becas
Art. 87º. – El Estado creará becas para la enseñanza gratuita, cuya distribución entre las
diversas universidades de la Nación, se hará por el Poder Ejecutivo. Para proceder a dicha
distribución, se tendrán en cuenta las características y necesidades regionales, sociales,
económicas y culturales, referidas a cada universidad, procurando que con la concesión de
becas se cumplan, de la manera más acabada posible y con un sentido social, los fines
asignados a la universidad.
Habrá dos clases de becas: las de estudio y las de estímulo. A las primeras tendrán
derecho y serán otorgadas a los estudiantes que poseyendo aptitud universitaria sean hijos
de familias de obreros, atendidas las circunstancias de cada caso no permitan costear los
estudios universitarios ni prescindir en todo o en parte de la ayuda económica que aporte o
pudiera aportar el becado. Dicha beca consistirá en obtener gratuitamente la enseñanza
universitaria en todos sus aspectos y grados, el suministro de libros y útiles, y en el
otorgamiento del diploma o título que se obtuviere, y en conceder una compensación
económica familiar que equivalga lo más aproximadamente posible a la aportación del
alumno.
Lo anterior es aplicable a los casos en que la familia obrera, artesana o empleada,
careciera de cabeza de la misma y se hallare en análogas condiciones económicas a las
señaladas en el párrafo anterior, y a los jóvenes que, sin familia y poseyendo la aptitud
universitaria adecuada, carecieren de los recursos necesarios para ingresar y estudiar en la
universidad.
A las segundas tendrán derecho y serán otorgadas a estudiantes destacados, de familia
obrera o de empleados, para compensar la privación total o parcial de aporte económico al
hogar que les imponga el estudio.
D) Concesión y pérdida de becas
Art. 88º. – (Solicitud de becas). Las peticiones de becas serán dirigidas al Poder Ejecutivo
de la Nación, por intermedio del Ministerio de Justicia e Instrucciones Públicas, con los
antecedentes tendientes a justificarlas, y serán resueltas previas las informaciones del caso
y las circunstancias del mismo, concediendo la clase de beca que corresponda.
Art. 90º. – (Otras becas). Las becas otorgadas por el Estado no excluyen aquellas otras
que puedan crearse u otorgarse por otras entidades o personas. Las que fueran de entidades
o instituciones públicas oficiales o semioficiales, deberán ajustarse, en lo posible, al espíritu
de las presentes disposiciones.
TITULO V
De la enseñanza
Art. 92º. – (Admisión de alumnos). Las condiciones de admisibilidad para los estudiantes
a las universidades serán uniformes para todo el país y se fijarán por el Consejo Nacional
Universitario.
Art. 93º. – (Constancias). Todo el que solicite ingresar a los cursos o rendir examen en las
facultades, deberá acreditar tener aprobados los estudios que correspondan a la enseñanza
media, normal o especial, de acuerdo con la reglamentación que se establezca.
Art. 94º. – (Comprobación). La comprobación a que se refiere el artículo anterior, podrá
hacerse:
1º Por certificado de los colegios nacionales;
2º Por certificado de institutos de enseñanza secundaria, debidamente autorizados;
3º Por certificados o diplomas de facultades o institutos oficiales extranjeros,
debidamente legalizados, siempre que se acredite la reciprocidad con nuestra República.
B) De la enseñanza libre
TITULO VI
Art. 104º. – (Recaudación). Salvo disposición especial del consejo universitario, todas las
dependencias universitarias que recauden fondos los entregarán mensualmente a la tesorería
de la universidad, cualquiera sea su procedencia, enviando al rector los documentos
justificativos y explicativos del caso. Igual cosa se hará, aun cuando los fondos tengan un
destino especialmente determinado.
Art. 105º. – (Gastos). Ningún gasto o inversión de fondos podrá hacerse sin que se
encuentre previsto en el presupuesto de la universidad u ordenado por el consejo
universitario. Los pagos serán dispuestos por el rector, previa conformidad del contador,
bajo la responsabilidad solidaria de los mismos, si contravinieren disposiciones legales.
El consejo universitario no podrá ordenar gasto alguno fuera del presupuesto, sin crear o
tener el recurso. Será individualmente responsable de la violación de esta disposición, cada
uno de los miembros que sancione el gasto.
TITULO VII
Art. 107º. –(Recursos especiales). Para la realización de sus fines las universidades
nacionales contarán con los siguientes recursos:
1º Con los fondos que el Estado les asignare, respectivamente, en el presupuesto
nacional;
2º Con el impuesto del dos por ciento (2 %) que toda persona –de existencia física,
ideal, con o sin personalidad jurídica, o sucesión indivisa– que empleare trabajo de otra,
está obligado a satisfacer sobre el importe anual de los “sueldos” y “salarios” que abonare.
Los “sueldos” y “salarios” sobre los que corresponderá ingresar el impuesto a que se ha
hecho referencia precedentemente, se determinarán de acuerdo con lo establecido en el
párrafo primero del art. 2º del Decreto–Ley 33.302/45 (Ley 12.921).
Quedan exentos de este impuesto los “sueldos” y “salarios” que se paguen al servicio
doméstico y los abonados por los fiscos nacional, provinciales y municipales y los de las
entidades que en su totalidad pertenezcan a los mismos;
3º Con los ingresos obtenidos por matrículas y otros conceptos universitarios;
4º Con las donaciones o fundaciones que se hicieran a favor de las universidades;
5º Con cualquier otro ingreso.
Art. 109º. – (Forma y plaza para el pago). Los responsables abonarán el impuesto
establecido en el punto segundo del art. 107º, mediante depósito en la cuenta “Instituto
Nacional de las Remuneraciones–Recursos Universitarios”, del Banco Central (Banco de la
Nación Argentina), o en los bancos particulares que a tales efectos habilite expresamente el
Instituto Nacional de las Remuneraciones, o mediante cheque, giro o valor postal o
bancario sobre Buenos Aires, a la orden del “Instituto Nacional de las Remuneraciones–
Recursos Universitarios”, dentro de los plazos que, anualmente o en períodos menores,
establecerá el Poder Ejecutivo.
Carecerá de valor todo pago que no se efectúe en alguna de las formas indicadas
precedentemente.
El Poder Ejecutivo queda facultado para exigir de los empleadores –en los casos que crea
oportuno– anticipos a cuenta del importe que, en definitiva, deban ingresar aquellos en
concepto del impuesto que se establece en el punto segundo del art. 107º.
Art. 110º. – (Distribución del producido del impuesto). El producido de este impuesto
será distribuido en el presupuesto nacional según las necesidades de cada universidad
nacional, atendidas las circunstancias peculiares de la región o provincia en que se hallaren,
número de alumnos y de profesores y demás factores que hubieren de tenerse en cuenta a
efecto de que se desarrollen con un sentido social las funciones que les están asignadas.
TITULO VIII
Art. 111º. – Créase el Consejo Nacional Universitario, el que estará constituido por los
rectores de todas las universidades del país y será presidido por el Ministro de Justicia e
Instrucción Pública.
TITULO IX
Art. 115º. – El Poder Ejecutivo tomará las providencias necesarias para que las
autoridades se constituyan de acuerdo con las disposiciones de la presente ley.
Art. 116º. – Esta ley se aplicará desde su vigencia en la Universidad Nacional de La Plata,
en todo cuanto no se oponga a las disposiciones del convenio celebrado el 12 de agosto de
1905, entre el gobierno de la Nación y el de la provincia.
El Poder Ejecutivo de la Nación adoptará las medidas necesarias para la modificación del
referido convenio, en condiciones que permitan la inclusión integral de la Universidad
Nacional de La Plata en el régimen establecido por la presente ley universitaria.
Mientras tanto, las autoridades de la Universidad Nacional de La Plata procederán a la
adaptación de su organización y funcionamiento con los principios y disposiciones de la
presente ley.
Art. 117º. – Todas las universidades existentes o a crearse, salvo la excepción del art.
116º, se regirán por la presente ley, que entrará en vigencia el 1º de enero de 1948,
quedando –desde ese momento– derogada toda disposición que se oponga a su
cumplimiento.
Art. 118º. – Hasta tanto el consejo directivo de cada facultad fije la proporción de
consejeros, de conformidad con lo dispuesto en el art. 24º, se mantendrá la composición de
los mismos en la forma actualmente existente.
TITULO I
De las universidades
CAPITULO I
Art. 3º – Ninguna institución pública o privada podrá otorgar, sin ley especial que lo
autorice, títulos, grados y honores que puedan ser confundidos con los universitarios.
Art. 7º – Las universidades poseen plena capacidad jurídica para adquirir, vender u
administrar toda clase de bienes, así como para demandar y comparecer en juicio. Su
representación compete al rector, quien podrá delegarla y otorgar, en su caso, los poderes
necesarios.
CAPITULO II
Del rector
Art. 9º – El rector será designado por el Poder Ejecutivo y durará tres años en sus
funciones.
Art. 10º. – Para ser rector se requiere ser ciudadano argentino nativo y profesor titular o
adjunto confirmado, o bien diplomado universitario y tener treinta (30) años de edad.
Art. 11º. – Sin perjuicio de las demás funciones que le atribuye la presente ley y las que le
fijen otras disposiciones legales, el rector tendrá las siguientes:
1) Representar legalmente a la universidad;
2) Designar las personas que llevarán la representación oficial de la universidad;
3) Designar y remover al secretario y prosecretario de la universidad, que deberán
tener título universitario;
4) Convocar al Consejo Universitario a reuniones ordinarias y extraordinarias;
5) Firmar los títulos, diplomas y distinciones universitarias;
6) Designar los decanos de las facultades;
7) Resolver las cuestiones que no se hallen expresamente reservadas al Consejo
Universitario o a las autoridades de las facultades;
8) Dirigir la administración general de la universidad, pudiendo recabar de las
facultades y demás organismos universitarios los informes que estime conveniente;
9) Designar y remover al personal docente, auxiliar de la docencia y técnico
profesional de cada cátedra;
10) Adoptar las medidas urgentes para el buen gobierno de la universidad, dando
cuenta de ello al Consejo Universitario;
11) Ejercer la jurisdicción policial y disciplinaria en el asiento del rectorado y
del consejo;
12) Conceder las licencias en los casos señalados por las reglamentaciones
pertinentes;
13) Publicar, dentro de primer trimestre de cada año, una memoria que consigne
la tarea docente y la gestión administrativa realizada, dando cuenta al Consejo
Universitario.
Art. 12º. – El rector tendrá voz y voto en las decisiones del Consejo, prevaleciendo el
suyo en caso de empate.
Del Vicerector
Art. 14º. – El Consejo Universitario estará constituido por el rector, que lo presidirá, y
por los decanos y vicedecanos de cada facultad.
Art. 15º. – El Consejo Universitario tendrá las siguientes atribuciones, sin perjuicio de las
demás que se le acuerdan en esta ley:
1) Elegir un vicerector entre sus miembros, que durará tres (3) años en funciones;
2) Dictar su reglamento interno y las ordenanzas que requiera el funcionamiento de la
universidad;
3) Ejercer la jurisdicción superior universitaria y resolver en última instancia
universitaria las cuestiones contenciosas que hayan fallado el rector o las facultades;
4) Resolver la intervención de las facultades, cuando su funcionamiento no se ajuste a
la presente ley;
5) Decidir en última instancia las cuestiones sobre validez o equivalencia de títulos,
diplomas, estudios, asignaturas, honores y distinciones universitarias, que hubieran sido
resueltas por los consejos de las facultades;
6) Revalidar, habilitar y reconocer los títulos o diplomas expedidos por universidades
extranjeras, de acuerdo con las leyes y con los tratados internacionales, previo estudio, en
cada caso de la jerarquía de la enseñanza impartida por las mismas. Será condición
indispensable para el ejercicio de las actividades profesionales el cumplimiento de los
establecido en el párrafo precedente;
7) Resolver lo conducente al ejercicio de la personería jurídica de la universidad;
8) Aprobar o devolver observadas a las facultades las ternas formuladas por estas para
la designación de profesores titulares, así como las reglamentaciones que dicten aquellas
para el nombramiento de profesores adjuntos, extraordinarios y honorarios. El Consejo
Universitario sólo tiene facultad para considerar el aspecto formal de las ternas y las
objeciones morales a los candidatos, nunca el orden de los nombres ni la competencia
científica y didáctica, que son privativos de cada facultad;
9) Proponer al Poder Ejecutivo la creación de nuevas facultades;
10) Acordar, por iniciativa propia o a propuesta de las facultades, la creación de nuevas
escuelas o institutos;
11) Aprobar los planes de estudio y los reglamentos que dicte cada facultad sobre sus
respectivas carreras;
12) Acordar, por iniciativa propia o a propuesta de las facultades, el título de doctor
honoris causa, o de miembro honorario de la universidad, a las personas que sobresalieren
por su obra, o por su labor científica, literaria o artística;
13) Fijar la fecha de iniciación y terminación del curso lectivo y duración de las
vacaciones;
14) Aprobar el proyecto de presupuesto general de la universidad y tomar conocimiento
de la inversión de los fondos asignados a la misma;
15) Vender, con autorización del Poder Ejecutivo, los bienes inmuebles, títulos y
valores pertenecientes a la universidad;
16) Aceptar las herencias con beneficios de inventario, y los legados o donaciones que
se dejen o hagan a las universidades o a las facultades o establecimientos que las integren;
17) Dictar los reglamentos para el régimen común de los estudios y disciplina general
de los establecimientos universitarios, con sujeción a las normas que dicte el Consejo
Nacional Universitario.
TITULO II
De las facultades
Art. 16º. – El gobierno de cada facultad será ejercido por un decano y un consejo
directivo, los que durarán tres (3) años en sus funciones.
Art. 17º. – Cuando el cargo de decano quedare vacante el nuevo decano será designado
por el tiempo que faltare para completar el período.
Art. 18º. – El consejo directivo se integrará con el decano y once (11) consejeros.
La elección de consejeros se efectuará en comicios de profesores, quienes votarán
personalmente, en forma secreta, las listas de candidatos que depositarán en dos (2) urnas
distintas; una reservada para los profesores titulares, que votarán de entre ellos, por siete (7)
candidatos a consejeros titulares e igual número de sustitutos; y otra para los profesores
adjuntos, que votarán en la misma forma que los titulares, pero solamente por cuatro (4)
candidatos a consejeros titulares y otro número igual de sustitutos.
Los consejeros que dejen de ser profesores, cesarán inmediatamente en el ejercicio del
cargo.
Art. 19º. – Para aquellas facultades que no estén en condiciones de ajustarse a las
proporciones indicadas en el artículo precedente, el consejo universitario determinará las
que hagan posible la constitución del consejo directivo y establecerá el quórum para sus
reuniones.
Art. 20º. – El escrutinio y proclamación de los candidatos elegidos serán hechos por el
decano, asistido por el vicedecano y el consejero titular de más edad.
Art. 21º. – El decano será designado por el rector. En caso de que el nombramiento del
decano recaiga en uno de los consejeros, el consejo directivo será integrado por el
consejero sustituto que corresponda a la categoría del profesor designado decano.
Art. 22º. – Las vacantes de consejeros titulares que se produzcan antes de la fecha de
renovación, serán llenadas por sorteo que se realizará entre los consejeros sustitutos de
titulares o de adjuntos, según sea la vacante producida y manteniendo la representación de
las escuelas.
Art. 24º. – Las sesiones del consejo directivo se realizarán con el quórum de siete (7)
consejeros.
Art. 26º. – Los miembros titulares del consejo directivo no podrán desempeñar empleos
rentados dependientes de la universidad, con excepción de los cargos directivos y docentes.
Tampoco podrán ser nombrados para cátedras, dirección, empleo o comisión rentada
creados durante su mandato, hasta después de dos (2) años de fenecido este. Los aspirantes
a cátedras ya existentes podrán presentarse al concurso, previa renuncia como miembros
del consejo directivo.
Del decano
Art. 27º. – Para ser decano se requiere ser ciudadano argentino nativo, y ser profesor
titular o adjunto confirmado en la respectiva facultad.
Art. 28º. – El decano tendrá voz y coto en las decisiones del consejo, prevaleciendo el
suyo en caso de empate.
Del vicedecano
Art. 30º. – El vicedecano durará tres (3) años en funciones. Ejercerá las del decano
durante la ausencia o impedimento de este, o las que el mismo le delegare. En caso de
vacancia del vicedecano, el consejero que se haga cargo del mismo, completará el período.
TITULO III
De los profesores
Disposiciones generales
Art. 32º. – las universidades tendrán cuatro categorías de profesores: titulares, adjuntos,
extraordinarios y honorarios, no pudiendo crearse nuevas categorías.
Art. 33º. – El profesor universitario, sea titular o adjunto, no podrá acumular más de uno
de estos cargos en la misma facultad, ni en otras facultades y universidades. Son
incompatibles, por lo tanto, los cargos de profesor titular con el de adjunto, y los de
profesor adjunto en más de una asignatura, en la misma o en distintas facultades o
universidades. No podrán los profesionales a favor de intereses que estén en pugna,
competencia o colisión con los de la Nación, provincias o municipios, salvo los casos de
defensa de intereses personales del profesor, su cónyuge, ascendientes o descendientes,
siendo pasible, si lo hiciere, de suspensión, cesantía o exoneración.
Art. 35º. – Los profesores podrán ser separados por las siguientes causas:
1) Condena criminal, que no sea por hecho culposo;
2) Abandono de sus funciones o negligencia grave en el ejercicio de las mismas;
3) Inconducta manifiesta;
4) Incapacidad sobreviniente.
Art. 37º. – Los profesores titulares serán designados por el Poder ejecutivo de la Nación,
de una terna de candidatos elevada por la universidad, previo concurso de méritos,
aptitudes técnicas y pedagógicas. títulos, antecedentes y trabajos.
Art. 38º. – Producida una vacante de profesor titular, se llamará a concurso dentro de un
plazo no mayor de tres (3) meses, poniéndose interinamente la cátedra a cargo de un
profesor adjunto correspondiente a la misma materia y, a falta de éste, podrá designarse
otro profesor de materia afín.
Art. 39º. – El consejo directivo de cada facultad designará, en cada caso, una comisión
asesora compuesta por tres miembros, sorteados entre un mínimo de diez profesores
titulares, de la misma materia los hubiere, y de las materias afines a la cátedra, de la misma
facultad y/o de otras universidades, si no alcanzare a integrarse con los de aquélla. El orden
de afinidad entre las materias establecerá con carácter permanente por las facultades al
aprobar los respectivos planes de estudios.
Art. 40º. – La comisión asesora elevará al consejo directivo de la facultad una terna por
orden de méritos, títulos, antecedentes y trabajos, la que quedará sujeta a las siguientes
condiciones:
1) El consejo directivo de la facultad podrá observar el aspecto formal de las ternas,
variar su orden o integrarlas en forma distinta a la propuesta por la comisión asesora,
requiriéndose para esto último dos tercios de votos de los miembros presentes;
2) La terna será elevada a la universidad, que juzgará sobre los aspectos formales del
concurso. En caso de que el consejo directivo hubiere modificado el dictamen de la
comisión asesora, elevará un informa fundado al consejo universitario, exponiendo los
motivos y antecedentes que determinaron la modificación de la terna;
3) La universidad después de aprobar la terna la elevará al Poder Ejecutivo juntamente
con todos los antecedentes del concurso.
Art. 41º. – Para ser admitido al concurso... antecedentes morales inobjetables, poseer
título o diploma universitario nacional, con cinco (5) años por lo menos de antelación y
haber acreditado aptitudes docentes o trabajos científicos en la correspondiente especialidad
o en materia de íntima conexión con ella.
Art. 42º. – Las ternas para profesor titular deberán formarse previo dictamen escrito y
fundado de la comisión asesora del consejo directivo.
Para configurar la terna se tendrá en cuenta en forma preferente, el cargo de profesor
adjunto, en caso de igualdad de antecedentes. A los concursantes que no fueran profesores
adjuntos, el consejo directivo podrá exigirles una prueba complementaria. La actividad
científica y docente del candidato deberá ser continua y comprobada mediante
publicaciones y cursos que se estimarán no sólo por el número, sino también y en primer
término, por el mérito intrínseco.
Art. 43º. – Cuando se haya declarado desierto un llamado a concurso por no haberse
podido integrar la terna se procederá a un segundo llamado. En caso de repetirse la
situación anterior el consejo directivo deberá dictaminar sin el requisito de la terna.
Art. 44º. – Los profesores titulares pueden presentarse a concurso para optar a otra
cátedra, pero si la obtuvieren estarán obligados a renunciar a la cátedra que hubieren estado
dictando. Los profesores adjuntos se considerarán presentados automáticamente a los
concursos de las cátedras titulares cuya adjuntía ejercen, salvo manifestación expresa en
contrario.
Art. 46º. – Los profesores adjuntos serán nombrados por concurso por el consejo
directivo, con aprobación del consejo universitario, de acuerdo con la reglamentación
pertinente.
Para ser admitido al concurso se requieren las mismas condiciones exigidas en el caso de
los profesores titulares, salvo la antigüedad como egresado que se reduce a dos (2) años.
Podrán admitirse a los concursos para profesores adjuntos, aun cuando no hayan seguido la
carrera docente, aquellos candidatos de reconocida personalidad científica, probada con
trabajos o actuación docente. En tal caso se requerirá ser propuesto por cuatro (4)
consejeros de la facultad.
Art. 47º. – Cada facultad determinará, con aprobación del Consejo Universitario, el
número de profesores adjuntos que corresponda a cada cátedra, el que no podrá exceder en
total del equivalente a un promedio de dos por cátedra. Todas las ordenanzas relativas al
régimen de concursos para la designación de profesores adjuntos, requerirán aprobación del
Consejo Universitario.
Art. 49º. – Cumplidos cuatro (4) años de su designación, el profesor adjunto, para seguir
siéndolo, deberá ser confirmado por el Congreso Universitario, el que tendrá para ello en
cuenta su comportamiento moral y docente y haber presentado un trabajo sobre la materia,
juzgado por una comisión nombrada por el consejo directivo, que se llamará tesis de
profesorado. Todo ello según la reglamentación que dicte la facultad. Los profesores
adjuntos que no hayan sido confirmados cesarán automáticamente en sus funciones.
Art. 51º. – Al profesor que se retire de la enseñanza se le podrá otorgar, por el consejo
directivo, en los casos de haberse destacado por su actuación, el título de profesor
honorario, con el voto de las dos terceras partes de sus miembros y con la aprobación del
Consejo Universitario en igual forma.
El título de profesor honorario es vitalicio. Sus funciones serán determinadas por las
reglamentaciones de cada facultad, con la aprobación del Consejo Universitario.
De la carrera docente
Art. 52º. – Todo egresado de la universidad, con cinco (5) o más años de ejercicio
profesional que reúna trabajos, títulos y antecedentes científicos suficientes, podrá solicitar
al consejo directivo un permiso para enseñar, y cumplidos los requisitos exigidos para
demostrar su capacidad docente, que establecerá cada facultad, se le conferirá permiso para
enseñar en carácter de “venia docendi”. Sus antecedentes como tal serán tenidos en cuenta
con preferencia en los concursos de profesor adjunto.
El régimen de la enseñanza del “venia docendi”, será reglamentado por cada facultad.
Art. 53º. – Cada facultad reglamentará su carrera docente ajustándose a las siguientes
bases:
1) El aspirante a profesor universitario cursará un periodo de adscripción a una
determinada cátedra, durante el cual realizará trabajos de investigación o seminario, bajo la
dirección del respectivo profesor, y ejercicios docentes en la materia de su adscripción;
completará su preparación con cursos obligatorios sobre materias de cultura general.
Podrán implantarse o no, según las características de cada facultad, exámenes finales para
la aprobación de las materias de adscripción;
2) Cumplido esto, el aspirante a profesor pasará a ejercer la docencia complementaria
bajo la dirección del profesor titular y durante el tiempo que fijará cada facultad para cada
asignatura;
3) Terminada esta etapa, y previo un examen general de competencia técnica y docente
sobre la materia de su dedicación será reconocido como docente autorizado;
4) El docente autorizado tendrá las obligaciones que le fije cada facultad y sus
antecedentes serán tenidos en cuenta con preferencia en los concursos de profesor adjunto.
Art. 54º. – Constituyen el claustro general de profesores, todos los docentes titulares y
adjuntos de cada facultad. Podrán también constituirse claustros parciales de las diversas
escuelas, por separado, para considerar exclusivamente los resultados del plan de estudios y
las reformas que se sugieran.
Los claustros serán citados y presididos por el decano de cada facultad.
Art. 55º. – El decano citará el claustro general o parcial cuando lo considere conveniente,
pudiendo consultarlos por escrito.
TITULO IV
De las remuneraciones
TITULO V
De los estudiantes
Art. 59º. – Los estudiantes tendrán una representación en los consejos directivos de cada
facultad por medio de un delegado, alumno regular de uno (1) de los tres (3) últimos años
de estudio, y proveniente de entidad gremial reconocida tendrá voto solamente en aquellas
cuestiones que directamente afecten a los intereses estudiantiles.
TITULO VI
Art. 61º. – El Consejo Nacional Universitario estará constituido por los rectores de todas
las universidades del país, será presidido por el Ministro Secretario de Estado de Educación
de la Nación, y tendrá además de las funciones que expresamente le acuerda la presente ley,
las siguientes:
1) Coordinar la obra docente, cultural y científica de las universidades, de modo que
consulte los intereses y problemas del país y de cada región universitaria;
2) Asesorar al gobierno en todos los asuntos relativos a la actividad universitaria,
especialmente en la creación, supresión o transformación de universidades e institutos
superiores;
3) Armonizar y uniformar los planes de estudio condiciones de ingreso, sistemas de
promoción, número de cursos y títulos a otorgar para las mismas carreras;
4) Reglamentar y aconsejar lo concerniente a la extensión universitaria de cada
universidad;
5) Coordinar, planificar y racionalizar las normas que regirán las publicaciones
universitarias;
6) Promover la realización de congresos docentes universitarios;
7) Asesorar al Poder Ejecutivo en la creación, organización y funcionamiento de las
academias nacionales, disponiendo lo conducente para que las universidades actúen en
forma coordinada con ellas.
TITULO VII
Art. 62º. – Forman el patrimonio de la universidad los bienes que en virtud de ley o por
otro título gratuito y oneroso, correspondan al dominio de la universidad, así como las
colecciones científicas y publicaciones que tengan las facultades, institutos o dependencias
universitarias.
Art. 64º. – Queda facultado el Poder Ejecutivo para incorporar al presupuesto general de
la Nación, con cargo a rentas generales durante el ejercicio de 1954, de conformidad con lo
previsto por el apartado 1) del art. 63º de la presente ley los créditos que, en la medida de
las necesidades de cada organismo universitario, sean indispensables para su
desenvolvimiento en el citado ejercicio. Queda asimismo autorizado el Poder Ejecutivo
para disponer la cancelación de las deudas que al 31 de diciembre de 1953 cada universidad
no haya podido atender con las disponibilidades con que hubiere contado, inclusive los
anticipos efectuados oportunamente por el Tesoro Nacional para cubrir insuficiencias de los
ingresos universitarios. Dichos gastos serán atendidos con los recursos a que se refiere el
art. 3º de la Ley 13.654.
Art. 65º. – El uso de las atribuciones que la presente ley confiere a los organismos
universitarios no podrá traducirse en erogaciones para cuya atención no se cuente con la
pertinente autorización de crédito en sus respectivos presupuestos. En este caso, como así
también cuando el ejercicio de dichas atribuciones demande la modificación de la
estructura presupuestaria o importe un nuevo compromiso de gastos para ejercicios futuros,
deberá requerirse la previa conformidad del Poder Ejecutivo.
Art. 66º. – Cuando se trate de herencias, legados o donaciones o cualquier otra liberalidad
a favor de las facultades, el consejo universitario no podrá pronunciarse sin oír a éstas y no
podrá aceptar aquellas que las facultades decidan rechazar. Estas contribuciones
comprenden las condiciones o cargos que puedan imponer los testadores o benefactores.
Aceptada una herencia, legado, donación, no podrá ser modificado sin oír nuevamente a la
facultad beneficiada.
Art. 67º. – Salvo disposición especial del consejo universitario, todas las dependencias
universitarias que recauden fondos, los entregarán mensualmente a la tesorería de la
universidad, cualquiera sea su procedencia, enviado al rector los documentos justificativos
y explicativos del caso.
Art. 68º. – Los fondos universitarios estarán depositados a la orden del rector, quien
dispondrá de su inversión de acuerdo con el régimen financiero y contable vigente.
TITULO VIII
Art. 69º. – Queda facultado el Poder Ejecutivo para reajustar los presupuestos de gastos y
cálculos de recursos de las universidades a fin de adecuarlos a las disposiciones de la
presente ley.
Art. 70º. – Los concursos para la provisión de cargos de profesores titulares y adjuntos,
en trámite a la fecha de la sanción de la presente ley se regirán por las disposiciones de la
reglamentación bajo la cual se llamó a concurso.
Art. 71º. – Sin perjuicio de lo establecido por el art. 47º, los profesores adjuntos
designados por el consejo universitario al 31 de octubre de 1953, tendrán derecho a la
percepción de las remuneraciones a que se refieren los arts. 56º y 57º.
Art. 1º – Deróganse en todas sus partes las Leyes nacionales 13.031 (4) y 14.297 (5),
quedando en consecuencia restablecida la vigencia de la Ley 1.597 en todos sus efectos.
Art. 4º – El decano será elegido, entre los profesores titulares, por cada Consejo
Directivo, constituido en asamblea y, presidido la primera vez, por el delegado interventor.
Art. 6º – Los delegados de los estudiantes a los consejos directivos deben ser alumnos de
los dos últimos años de estudios (carreras profesionales) o haber aprobado por lo menos, las
tres cuartas partes de los planes de estudios en aquellos institutos cuyos planes no están
divididos por años.
Art. 7º – El padrón de estudiantes, a los efectos electorales, es realizado por las facultades
y en el mismo están inscriptos todos los estudiantes que, habiendo ingresado, tengan
aprobado, por lo menos, una materia del primer año y no hayan suspendido sus exámenes
por dos años a contar desde el último.
Art. 8º – Los interventores darán instrucciones a cada facultad, para abrir el padrón de los
egresados, podrán inscribirse en dicho padrón quienes tengan título expedido por la misma
facultad.
No podrán ser delegados de los egresados quienes desempeñan cátedra universitaria.
Art. 9º – El voto será secreto y obligatorio para los profesores y los estudiantes. También
lo será para los egresados inscriptos en el padrón.
Art. 10º. – Los profesores que sin causa debidamente justificada dejaren de votar podrán
ser apercibidos o suspendidos en el ejercicio de sus funciones hasta un mes en caso de
reincidencia.
Art. 11º. – Los alumnos que dejaren de votar deberán justificar la causa determinante de
su abstención como requisito previo a la inscripción en la lista de exámenes, Los egresados
que, sin causa debidamente justificada, dejaren de votar serán eliminados definitivamente
del padrón.
Art. 12º. – El Consejo Superior está compuesto por el rector, los decanos de las
facultades; por la representación de los profesores de cada facultad y por los delegados de
los estudiantes y los de los egresados en el número que determine, para cada
representación, la respectiva universidad –haciéndolo la primera vez el interventor– según
sus particulares modalidades y conveniencias, y en una proporción que asegure la
responsabilidad directiva de los representantes del claustro de profesores.
Art. 13º. – La representación de los profesores de cada facultad al Consejo Superior será
elegida entre y por los profesores que integran el Consejo Directivo de la respectiva
facultad, presidida por el decano que corresponda.
Art. 14º. – La representación de los estudiantes en el Consejo Superior será elegida entre
y por los delegados ante los consejos directivos de las facultades que integran cada
universidad, presididos, la primera vez, por el interventor, y en lo sucesivo, por el rector o
quien éste designe.
Art. 15º. – La representación de los egresados en el Consejo superior será elegida ante los
consejos directivos de las facultades que integran cada universidad, presididos la primera
vez, por el interventor, y en lo sucesivo, por el rector.
Art. 16º. – El Rector será elegido entre los profesores titulares por la Asamblea
Universitaria.
Art. 17º. – La Asamblea Universitaria está integrada por los decanos y todos los
miembros de los consejos directivos. La primera elección de rector se hace bajo la
presidencia del interventor de cada universidad.
Art. 18º. – La elección de rector requiere mayoría absoluta. Si después de una nueva
votación no fuera alcanzada esa mayoría, la sucesiva votación se hará entre los dos
candidatos más votados y por simple mayoría. En caso de empate, se repetirá la votación, y
si ella no diera resultado, quedará elegido el de mayor edad entre los dos.
Art. 19º. – El rector, los decanos, los delegados de los profesores y de los egresados en
ambos consejos ejercerán su mandato por el período que establezca en su estatuto cada
universidad. Los elegidos, la primera vez por aplicación de las presentes disposiciones
durarán dos (2) años en sus funciones. Los delegados estudiantiles serán elegidos por un (1)
año.
Art. 21º. – Las decisiones de los órganos colegiados se tomarán por simple mayoría de
votos en quórum. El rector y los decanos tienen doble voto en caso de empate.
Art. 23º. – En caso de renuncia del rector o del decano, el vicerector o el vicedecano
convocará dentro de los treinta días, las respectivas asambleas, siempre que faltare más de
un año para la terminación del periodo para el cual fue elegido el renunciante.
Art. 24º. – En todos los casos en que deban elegirse delegados se votará por titulares y
suplentes.
Art. 25º. – Para ejercer cargos directivos en las universidades nacionales se requiere ser
argentino o naturalizado.
Art. 26º. – Las cátedras serán ejercidas por periodos limitados y los plazos y condiciones
serán reglamentados por cada universidad.
Art. 28º. – La iniciativa privada puede crear universidades libres que estarán capacitadas
para expedir diplomas y títulos habilitantes siempre que se sometan a las condiciones
expuestas por una reglamentación que se dictará oportunamente.
Art. 30º. – El llamado a concurso se referirá a todas las cátedras actuales de las materias
fundamentales cuyo mantenimientos sea previsible en cualquier plan de estudios. Los
delegados interventores propondrán al interventor dentro del plazo de diez (10) días a partir
de este decreto-ley, la nómina de materias que serán llamadas a concurso con más de una
cátedra, propondrán el número de ellas que se proveerán actualmente con el concurso. Los
interventores quedan facultados a postergar el llamado a concurso respecto de cátedras
desempeñadas por profesores contratados, cuyos contratos deban continuar en vigencia y
respecto de cátedras que a juicio de los mismos exijan dedicación exclusiva de profesores
contratados.
Art. 31º. – Una vez recibidas las nóminas de materias y aprobadas por el interventor, este
fijará la fecha de iniciación del término de inscripción para la designación de profesores
titulares, lo que se hará conocer, por lo menos, con veinte (20) días de anticipación,
mediante la publicación, por tres (3) veces consecutivas, en dos (2) diarios de la ciudad
sede de las respectivas facultades o escuelas. Ese término de inscripción será de veinte (20)
días corridos y tendrá igual publicidad. Los aspirantes deberán acompañar en diez (10)
ejemplares sus antecedentes docentes y científicos, dentro del plazo de inscripción, no
requiriéndose que sean impresos. Los residentes en el extranjero podrán inscribirse por
escrito o por carta poder, con facultad para ejercer la defensa en caso de impugnación. El
apoderado no podrá ser otro inscripto, ni miembro del tribunal o de la comisión asesora. En
caso de que así sobreviniere deberá ser reemplazado el apoderado en el plazo de veinte (20)
días, los que no se computarán a los efectos de este reglamento. La lista de los inscriptos se
publicará durante el término de diez (10) días en los tableros de la facultad y de cinco (5)
días en dos (2) diarios, por lo menos, de la ciudad.
Art. 32º. – Los profesores que se presenten al concurso deberán satisfacer los siguientes
requisitos:
Generales: a) conducta moral inobjetable; b) título profesional universitario y el más alto
grado que esa casa de estudios otorgue, de los cuales podrá prescindirse sólo en casos en
que por las condiciones de las cátedras o por la calidad del aspirante ello quedara
justificado, pero la eventual designación como profesor, si dicho título y grado procedieran,
quedará condicionada a la obtención de los mismos dentro del plazo de dos (2) años desde
aquella designación. Para las cátedras de idiomas se admitirá también el título de profesor
diplomado expedido por institutos nacionales del profesorado; c) si la cátedra fuera de
enseñanza teórica el grado o título del candidato deberá, en principio, tener por lo menos
una antigüedad de dos (2) años y de cuatro (4) si fuera de enseñanza práctica.
Especiales: a) no serán admitidos al concurso quienes hayan realizado actos positivos y
ostensibles que prueben objetivamente la promoción de doctrinas totalitarias adversas a la
dignidad del hombre libre y a la vigencia de las instituciones republicanas; b) no serán
admitidos tampoco al concurso, quienes en el desempeño de un cargo universitario, de
funciones públicas o de cualquier otra actividad, hayan realizado actos positivos y
ostensibles de solidaridad con la dictadura, que comprometan el concepto de independencia
y dignidad de la cátedra.
Art. 33º. – Para la admisión de los candidatos a concurso regirán las siguientes
disposiciones; a) publicadas las listas de inscripción en la forma establecida, podrán
impugnarse, durante el plazo de diez (10) días, los candidatos, por no reunir los requisitos
exigidos. Las impugnaciones podrán ser formuladas por profesores, por otros inscriptos y
también por representantes de organizaciones estudiantiles o de egresados de la misma
facultad que hayan comunicado su constitución antes de la apertura del primer concurso; b)
hechas las impugnaciones, se correrá vista a los impugnados por diez (10) días para que
formulen su defensa; c) producidas estas el delegado interventor se expedirá por resolución
fundada; d) todas las actuaciones serán por escrito en papel romaní y tramitadas y decididas
en procedimiento sumario, sin audiencias, careos o incidentes; e) a la impugnación y
defensa se acompañarán las pruebas respectivas o se indicará con precisión donde ellas se
encuentren; f) el delegado interventor podrá, de oficio, eliminar del concurso a un
candidato por resolución fundada, cuando no reúna los requisitos exigidos y rechazar,
también de oficio, las impugnaciones que no se ajusten a las formalidades precedentes o
que no se refieran a los requisitos prescriptos; g) los inscriptos eliminados del concurso
deberán ser notificados por telegrama colacionado dirigido al domicilio especial que deberá
constituirse en las respectivas presentaciones; h) el impugnante deberá, asimismo, ser
notificado cuando la impugnación no hubiere prosperado; i) contra la resolución del
delegado, cabrá recurso en el término perentorio de cinco (5) días ante un tribunal especial,
constituido por el interventor y los delegados interventores en todas las facultades de la
misma universidad que dictará la resolución definitiva; j) el tribunal especial se pronunciará
sobre los recursos por mayoría de votos presentes, contando el interventor con doble voto
en caso de empate.
Art. 34º. – Todos los términos serán contados en días corridos.
Art. 35º. – Para asesorar sobre los títulos y antecedentes de los candidatos a profesores
titulares, se constituirán en cada facultad, por resolución de los interventores, y a propuesta
de los delegados interventores de cada facultad, comisiones de, por lo menos tres (3)
miembros para cada materia o materias afines, que reúnan los más satisfactorios
antecedentes científicos, intachable conducta moral y clara actitud cívica frente a la
dictadura depuesta. Las comisiones asesoras podrán integrarse con personalidades
nacionales o extranjeras. Podrán formar parte de las mismas los interventores, los delegados
interventores o delegados no podrán presentarse como aspirantes a ningún concurso.
Art. 37º. – Las comisiones asesoras considerarán como un título de valor moral, el
ejemplo dado a sus alumnos por los profesores que, sacrificando su interés personal,
perdieron la legítima posesión de sus cátedras por mantener su independencia y el libre
ejercicio de las mismas, o por defender el decoro de las instituciones republicanas.
Art. 38º. – Las juntas asesoras podrán, excepcionalmente exigir una prueba de oposición.
Art. 39º. – El voto, que las comisiones asesoras presentarán a los delegados interventores,
será fundado y escrito, y expresará el orden de mérito de todos los candidatos admitidos.
Las comisiones asesoras se expedirán por mayoría de votos. También podrán aconsejar que
el concurso quede desierto.
Art. 40º. – De acuerdo con el dictamen de las comisiones asesoras, los delegados
elevarán a la intervención de la universidad una terna en orden de méritos. En los
expedientes correspondientes constará, en un cuerpo, las inscripciones, el dictamen de la
comisión asesora, y las resoluciones dictadas y, en cuerpo aparte, la impugnación, defensa
y pruebas. La secretaría general de la universidad producirá un informe y dará cuenta de lo
actuado. Los interventores elevarán al Poder Ejecutivo las ternas por orden de méritos, para
la oportuna designación de los profesores y serán acompañadas con todas las actuaciones
del concurso.
Art. 41º. – Los interventores están autorizados, conforme con una regla de vigencia
universal, para proponer al Poder Ejecutivo sin necesidad de nuevo concurso y como caso
excepcional, la designación de profesores que en posesión anterior de ese carácter ostenten
títulos de valor eminente y extraordinario, suficientes para justificar la excepción.
Art. 44º. – Los delegados interventores de cada facultad convocarán a los miembros
elegidos para el Consejo Directivo con el fin de que, reunidos en asamblea, designan al
decano.
Art. 46º. – Cuando estén designados todos los delegados que componen el Consejo
Superior de la respectiva universidad, el interventor convocará a la asamblea universitaria
con el objeto de proceder a la elección del rector.
Art. 47º. – Los consejos directivos deberán llamar a concurso para la designación de
profesores adjuntos o suplentes, de acuerdo con las normas que dicten los mismos consejos.
Sus designaciones serán hechas por las respectivas universidades conforme con las normas
que las mismas dicten.
Art. 48º. – Los profesores adjuntos que resulten designados, deberán ser convocados para
elegir a sus representantes dentro de los consejos directivos, conforma con las mismas
normas que rigieron la elección de los demás consejeros.
Art. 49º. – Las universidades nacionales dictarán su propio estatuto después de haber
integrado sus respectivos consejos directivos con los representantes de los diversos grupos
que las componen: profesores titulares, profesores adjuntos, estudiantes y egresados.
Art. 50º. – Quedan derogadas todas las disposiciones que se opongan a las del presente
decreto-ley y, en particular, las contenidas en el art. 1º. inc. 6º y art. 3º de la Ley 1.597 y las
del art. 36º del Estatuto de la Universidad Nacional de La Plata, aprobado por la ley 4.699
(1) concernientes a la designación y remoción de profesores universitarios.
Art. 51º. – El presente decreto-ley será refrendado por el Excmo. señor Vicepresidente de
la Nación y por todos los señores ministros secretarios de Estado del Poder Ejecutivo
Nacional.
Art. 1º – Declárase que continúan en vigencia los decretos-leyes dictados por el Gobierno
Provisional entre el 23 de setiembre de 1955 y el 30 de abril de 1958, que no hayan sido
derogados por el Honorable Congreso de la Nación.
Art. 1º – Derógase el art. 28º del Decreto ley 6.403/55 (1) y apruébase en su reemplazo el
siguiente:
La iniciativa privada podrá crear universidades con capacidad para expedir títulos y/o
diplomas académicos.
La habilitación para el ejercicio profesional será otorgada por el Estado Nacional.
Los exámenes que habiliten para el ejercicio de las distintas profesiones serán públicos y
estarán a cargo de los organismos que designe el Estado Nacional.
Dichas universidades no podrán recibir recursos estatales y deberán someter sus estatutos,
programas y planes de estudio a la aprobación previa de la autoridad administrativa, la que
reglamentará las demás condiciones para su funcionamiento.
El Poder Ejecutivo no otorgará autorización, o la retirará si la hubiese concedido, a las
universidades privadas cuya orientación y planes de estudio no aseguren una capacitación
técnica, científica y cultural en los graduados, por lo menos equivalente a la que impartan
las universidades estatales y/o que no propicien la formación democrática de los estudiantes
dentro de los principios que informan la Constitución Nacional.
Art. 2º – Las Universidades privadas serán facultadas por decreto del Poder Ejecutivo
Nacional para expedir títulos y/o diplomas académicos, cuando hayan cumplido con los
requisitos establecidos por la Ley 14.557 y los que a continuación se indican, previo
dictamen fundado de la Inspección General de enseñanza Universitaria Privada:
a) Estar constituidas como entidades con personería jurídica;
b) Sancionar un estatuto constitutivo en el que se establezca:
1º El objeto, determinado con precisión y claridad.
2º El propósito de desarrollar sus actividades en consonancia con las instituciones
republicanas y democráticas del país.
3º En general, una organización adecuada a la naturaleza de la labor científica y de
los estudios que se proponga.
c) Tener un cuerpo docente idóneo, cuyos componentes posean título universitario en
la especialidad o, en su defecto, personalidad científica o cultural relevante que acredite su
aptitud para el ejercicio de la cátedra;
d) Tener un número razonable de inscriptos por curso o período de enseñanza dentro
de cada facultad, escuela o departamento;
e) Disponer de recursos, locales y elementos suficientes para su constitución y
funcionamiento;
f) Presentar a la Inspección General de Enseñanza Universitaria Privada planes de
estudio y promoción para las respectivas carreras;
g) Dar a conocer la nómina y antecedentes del personal docente y autoridades
universitarias.
Art. 9º – El presente decreto será refrendado por el Señor Ministro Secretario de Estado
en el departamento de Educación y Justicia.
Art. 10º. – Comuníquese, etc.
UNIVERSIDADES PRIVADAS
Artículo 2°- A los fines del otorgamiento de la autorización, deberán evaluarse, sobre la
base de razones de política educativa, además de las características exigibles y de los
requisitos de estructuración y de nivel, las necesidades regionales y sectoriales del
desarrollo nacional.
La autorización será concedida con expresa indicación de las carreras, grados y títulos que
se cursen u otorguen en el establecimiento correspondiente; y para toda modificación se
requerirá la autorización previa del Poder Ejecutivo.
Artículo 3°- Los establecimientos universitarios privados deberán observar los mismos
fines generales y funciones que los prescriptos para las universidades nacionales en los
artículos 2º y 3º de la Ley 17.245, debiendo ajustar su acción a lo establecido en el artículo
4º de dicha ley. Sin perjuicio de ello, podrán fijar las finalidades y funciones que se
justifiquen por las circunstancias particulares de su fundación.
a) Dictar y reformar sus estatutos académicos, con la aprobación del Poder Ejecutivo, en
los cuales deberán establecer la organización académica y los regímenes de Gobierno,
disciplina, profesores, alumnos, enseñanza y promoción;
b) Fijar sus planes de estudio, los cuales deberán ser aprobados por el Poder Ejecutivo en
cuanto a su estructura general;
c) Expedir títulos académicos, los que, cumplidos los requisitos que se establezcan para su
habilitación por el Poder Ejecutivo, tendrán los efectos previstos en el artículo 87º de la
Ley 17.245.
Artículo 5°- Los establecimientos universitarios privados deberán constituirse sin fines de
lucro, obteniendo personería jurídica como asociación civil o fundación, concedida por el
Poder Ejecutivo nacional o autoridad provincial. A los efectos de la presente ley deberán
asimismo cumplir los siguientes requisitos:
a) Los órganos de gobierno deberán estar integrados por mayoría absoluta de personas de
nacionalidad argentina;
Artículo 7°- La autorización provisional se otorgará por decreto del Poder Ejecutivo previo
cumplimiento de los requisitos establecidos por la presente ley y de acuerdo con la
reglamentación que se dicte.
Artículo 8°- La autorización definitiva se concederá o denegará por decreto del Poder
Ejecutivo, una vez cumplido un ciclo completo de estudios para todas las carreras cursadas
en el establecimiento interesado, desde la fecha de otorgamiento de la autorización
provisional.
Artículo 9°- Los profesores de todas las categorías deberán poseer título universitario, o en
su defecto, de manera estrictamente excepcional, antecedentes objetivamente evaluables,
por los que se acredite la debida competencia.
Los órganos de Gobierno de los establecimientos universitarios privados sólo podrán estar
integrados por profesores universitarios.
Artículo 10°- Para ingresar como alumno en los establecimientos universitarios privados se
requerirá haber aprobado los estudios correspondientes al nivel medio de enseñanza.
a) Contra las resoluciones dictadas en ejercicio de las atribuciones conferidas por los
artículos 13º y 18º;
b) Contra las resoluciones que dispongan el retiro de autorización provisional y contra las
resoluciones denegatorias o de retiro de autorización definitiva.
El recurso deberá ser interpuesto dentro de los diez días hábiles de notificada la medida que
se recurre.
Artículo 15°- No habrá recurso alguno contra las resoluciones denegatorias de autorización
provisional.
Artículo 16°- Los establecimientos universitarios privados autorizados quedan exentos de
los impuestos, contribuciones y tasas que se especifiquen por decreto del Poder Ejecutivo
Nacional.
Artículo 18°- Los establecimientos privados cuya creación no hubiera sido autorizada de
acuerdo con la presente ley, no podrán usar denominaciones ni expedir diplomas, títulos o
grados que a juicio del Poder Ejecutivo deban reservarse para distinguir instituciones,
actividades, competencias o profesiones de carácter universitario. La violación de esta
norma se penará con la clausura inmediata y definitiva y la inhabilitación de los
responsables para ejercer la docencia, por un período de uno a cinco años, en cualquier
establecimiento estatal o privado, y para desempeñar la función pública por idéntico plazo.
Artículo 19°- Los establecimientos que a la fecha de la sanción de la presente ley están
registrados por sendos decretos del Poder Ejecutivo, de acuerdo con el régimen de la Ley
14.557, se considerarán autorizados en forma definitiva. En el término de un año deberán
ajustarse a las exigencias establecidas en la presente ley.
Artículo 21°- Quedan derogados todas las disposiciones que se opongan a la presente ley.
Artículo 22°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial
y archívese.
TITULO I
Disposiciones generales
Art. 2º – Las universidades nacionales son instituciones de derecho público cuyos fines
esenciales son:
a) La formación plena del hombre a través de la universalidad del saber y del
desarrollo armonioso de su personalidad;
b) La formación de universitarios capaces de actuar con responsabilidad y patriotismo
al servicio de la Nación;
c) La investigación de la verdad y el acrecentamiento del saber;
d) La preparación de profesionales, técnicos e investigadores necesarios para el país;
e) La preservación, difusión y transmisión de la cultura y en especial del patrimonio
común de valores espirituales de la nacionalidad.
Art. 3º – Para cumplir con sus fines las universidades nacionales deberán:
a) Procurar educación general de nivel superior, estimulando y disciplinando la
creación personal, el espíritu indagativo y las cualidades que habilitan para actuar con
idoneidad, patriotismo y dignidad moral en la vida pública y privada;
b) Realizar investigación científica, humanística y tecnológica en el más alto nivel y
estimular la creación artística;
c) Preparar profesionales, técnicos e investigadores en número y calidad adecuados a
las necesidades de la Nación;
d) Proveer a la formación y al perfeccionamiento de sus propios docentes e
investigadores, creando las condiciones para la excelencia y originalidad de su quehacer;
e) Organizar la orientación, especialización, perfeccionamiento y actualización de sus
graduados;
f) Contribuir, mediante publicaciones y todo otro tipo de actividad apropiada, a la
difusión y a la preservación de la cultura en el país;
g) Estudiar los problemas de la comunidad a la que pertenecen y proponer soluciones
cuando así lo requieran los organismos correspondientes del Gobierno nacional, provincial
o comunal.
Art. 4º – La acción de las universidades deberá realizarse con auténtico sentido social al
servicio de los intereses fundamentales de la Nación. Para ello buscará inspiración
permanente en los principios esenciales de nuestra tradición cultural y espiritual,
fortaleciendo el respeto por la dignidad de la persona y sus derechos, contribuyendo al
afianzamiento del espíritu cívico y de la conciencia nacional y atendiendo a las necesidades
generales y regionales del país en estrecha vinculación con la realidad de su medio.
Art. 10º. – Prohíbese en los recintos universitarios, toda actividad que asuma formas de
militancia, agitación, propaganda, proselitismo o adoctrinamiento de carácter político. Los
conflictos sociales y los problemas ideológicos y políticos, podrán ser, sin embargo, objeto
de estudio y análisis científico en los cursos y tareas de investigación correspondientes.
TITULO II
Organización académica
CAPITULO I
Art. 12º. – Cada Universidad podrá adoptar como base de su organización académica y
administrativa, el sistema de Facultades o una estructura departamental, atendiendo a sus
necesidades y características.
Art. 13º. – Además de las Facultades y Departamentos académicos que la puedan integrar
según el sistema adoptado, forman parte de las respectivas universidades, las escuelas,
institutos y demás establecimientos de carácter universitario, puestos bajo su jurisdicción,
cualquiera sea la denominación elegida para caracterizarlos y que no contradigan la ley
17.178.
CAPITULO II
Art. 18º. – Los docentes están obligados a realizar investigación y los investigadores a
participar en la docencia. El estatuto y las reglamentaciones contemplarán en casos
especiales la dispensa de obligaciones de uno u otro género a profesores e investigadores.
Art. 21º. – Podrán ser designados profesores titulares plenarios quienes hayan acreditado
capacidad sobresaliente en la docencia y sean autores de publicaciones o trabajos que
constituyan aportes positivos a la respectiva disciplina. Deberán acogerse al régimen de
dedicación exclusiva o de tiempo completo y tendrán carácter permanente mientras se
desempeñen con rectitud y competencia bajo las condiciones que establezcan los
respectivos estatutos.
Art. 22º. – Los profesores asociados colaboran con los titulares en el ejercicio de la
cátedra sin tener relación de dependencia docente respecto de ellos, salvo que así lo
requieran las exigencias de la enseñanza o la necesidad de coordinar los programas de
estudio. Podrán asimismo quedar a cargo de la cátedra.
Art. 23º. – Los profesores adjuntos colaboran con los titulares y asociados conforme con
lo que disponga quien se encuentre a cargo de la cátedra, con relación de dependencia
docente. Podrán estar a cargo de la cátedra sustituyendo al profesor titular o asociado.
Art. 24º. – Los profesores que hayan alcanzado el límite de edad fijado en el art. 33º,
podrán ser designados, conforme con la reglamentación que dicte el Consejo Superior de
cada universidad, profesor consulto, título que agregará al de titular, asociado o adjunto,
que tuviera al tiempo de esa designación.
Art. 25º. – Los profesores titulares que hayan alcanzado el límite de edad fijado en el
artículo 33 y probado condiciones sobresalientes en al docencia o la investigación, podrán
ser designados profesores eméritos de acuerdo con las disposiciones estatutarias
respectivas. Los profesores eméritos pueden continuar en la investigación y colaborar en la
docencia.
Art. 26º. – Los profesores visitantes son los de otras universidades del país o del
extranjero a quienes se invita a desarrollar actividades docentes de naturaleza de acuerdo
con las condiciones que reglamente cada estatuto.
Art. 27º. – Los profesores honorarios son personalidades relevantes del país o del
extranjero a quienes la Universidad otorga especialmente esa distinción.
Art. 29º. – Los profesores titulares plenarios, titulares, asociados y adjuntos y los
investigadores de categorías similares, serán designados por concurso público y de acuerdo
con las formas y pruebas que el estatuto disponga, en las que deberán evaluarse los
antecedentes adquiridos en todas las universidades nacionales, provinciales y privadas
registradas del país, así como del extranjero. La reglamentación que se dicte deberá
asegurar en todos los casos:
a) La idoneidad e imparcialidad de los jurados, que deberán integrarse con profesores
de la especialidad, con jerarquía no inferior a la del cargo objeto del concurso;
b) La publicidad de los antecedentes de los candidatos, de las pruebas que se rindan y
de los dictámenes de los jurados;
c) La capacidad docente y científica, la integridad moral, la rectitud universitaria y la
observancia de las leyes fundamentares de la Nación, como únicas exigencias para el
desempeño de la cátedra universitaria.
Art. 30º. – Las designaciones de profesores asociados y adjuntos, se harán por el término
de 7 años, al vencimiento de los cuales se podrá llamarse nuevamente a concurso. La
reglamentación respectiva deberá respetar el derecho a la estabilidad del docente que se
haya desempeñado en forma satisfactoria, pudiendo ser confirmado en forma directa por
voto de las dos terceras partes de los consejos académicos. Las designaciones de profesores
titulares se harán por el término de 3 años. Los profesores titulares confirmados al cabo de
este período, por concurso o por el voto de las dos terceras partes de los consejos
académicos, adquirirán estabilidad.
Art. 31º. – Los nombramientos interinos se harán por tiempo no mayor de 2 años y
únicamente para resolver situaciones de emergencia.
Art. 32º. – Podrá también recurrirse al régimen de contrataciones cuando las necesidades
de la enseñanza a los trabajos de investigación lo exigieren.
Art. 33º. – Los profesores titulares, asociados y adjuntos serán relevados de sus funciones
a los 65 años de edad y podrán ingresar en las categorías fijadas en los arts. 24º y 25º.
Art. 34º. – Los profesores e investigadores podrán ser removidos por las siguientes
causas:
a) Manifiesto incumplimiento de las condiciones exigidas en el inc. c) del art. 29º;
b) Condena por delito que afecte el honor y la dignidad;
c) Hechos públicos de inconducta;
d) Inhabilidad física, incompatibilidad moral o deshonestidad intelectual.
Art. 35º. – En todos los casos los cargos de auxiliares docentes serán provistos por
concurso con la participación del profesor titular en la composición del jurado. Las
designaciones de los auxiliares docentes serán por un término no mayor de 2 años al
vencimiento de los cuales se llamará nuevamente a concurso, a menos que el profesor
titular aconseje prorrogar sus funciones por un nuevo período, a cuyo término se llamará
nuevamente a concurso.
Art. 38º. – Cada Universidad procurará adecuar su estructura docente a fin de contar con
un mínimo del 50% de profesores pertenecientes a los tres primeros regímenes de
dedicación. Dicha adecuación contemplará las características específicas de cada Facultad.
Art. 39º. – Los estatutos reglamentarán las obligaciones de los profesores. Los profesores
titulares deberán elevar anualmente al Consejo Académico el programa de enseñanza e
investigación que se desarrollará en su cátedra e informar sobre los trabajos y actividades
de investigación realizados en ella.
Art. 40º. – Institúyese la carrera docente que tendrá como objeto capacitar a quienes
tengan vocación por la enseñanza y reglar el acceso a la docencia universitaria. Las
universidades reglamentarán la carrera docente en el plazo de un año, teniendo en cuenta
las siguientes bases:
a) Deberá respetar las modalidades de la carrera a que se aplique, e incluir cursos o
seminarios de humanidades, de metodología de la enseñanza y de la investigación y otros
de especialización referentes a la disciplina de que se trate;
b) Serán computables las tareas efectuadas por los docentes libres, así como los
estudios debidamente comprobados que se hayan realizado en otras universidades o centros
de investigación del país o del extranjero.
Art. 42º. – El régimen de docencia libre será admitido en las universidades nacionales
bajo las condiciones que fijen sus respectivos estatutos.
CAPITULO I
Asamblea Universitaria
Art. 47. – La Asamblea Universitaria será convocada en la forma y con los requisitos que
fijen los respectivos estatutos.
CAPITULO II
Art. 48º. – Para ser elegido Rector o Presidente se requiere ser ciudadano argentino, tener
treinta años cumplidos, ser o haber sido Profesor en una Universidad Nacional.
Art. 49º. – El Rector durará 5 años en sus funciones y podrá ser reelecto.
Art. 51º. – El Vicerector, que elegirá el Consejo Superior de entre sus miembros
reemplazará al Rector en la forma y por las causas que establezcan los respectivos
estatutos. En el caso de alejamiento definitivo del Rector, el Consejo Superior deberá
convocar en el término de 15 días a la Asamblea Universitaria para proceder a una nueva
elección con el fin de completar el mandato. Si esta eventualidad se produjera en el último
año del período ordinario correspondiente, el Vicerector lo completará.
Art. 53º. – Cada Universidad organizará las Secretarías que bajo la dependencia directa
del Rector colaborarán en su gestión.
Art. 54º. – Sin perjuicio de lo que dispongan los respectivos estatutos deberá existir un
Secretario responsable de los asuntos académicos y otro de la supervisión administrativa.
Ambos serán de dedicación exclusiva o tiempo completo. Permanecerán en sus cargos por
el término de la gestión del rector y serán designados y removidos en forma directa por él.
CAPITULO III
CAPITULO IV
Art. 57º. – Para ser elegido Decano se requiere: ser ciudadano argentino, tener 30 años
cumplidos, y ser o haber sido Profesor en una Universidad Nacional.
Art. 60º. – El Vicedecano, que elegirá el Consejo Académico entre sus miembros,
reemplazará al Decano en la forma y condiciones que establezcan los respectivos estatutos.
Art. 62º. – Cada Facultad organizará las secretarias que bajo la dependencia directa del
Decano colaborarán en su gestión.
Sin perjuicio de lo que dispongan los respectivos estatutos, deberá existir un Secretario
responsable de los asuntos académicos y otro de la supervisión administrativa.
Permanecerán en sus cargos por el término de la gestión del Decano y serán designados y
removidos en forma directa por él.
CAPITULO V
Art. 63º. – Los Consejos Académicos estarán integrados por el Decano y 7 consejeros de
los cuales 5 por lo menos deberán ser profesores titulares o asociados y los dos restantes
adjuntos de acuerdo con las modalidades de cada Facultad. Los profesores adjuntos tendrán
representación en el Consejo Académico siempre que su número supere en cada caso el
30% del total de profesores titulares y asociados. Para ser miembros del Consejo
Académico se requerirá ser ciudadano argentino.
Art. 64º. – El Consejo Académico será elegido por voto secreto y obligatorio de los
profesores ordinarios de las categorías correspondientes, quienes lo harán en forma
separada de acuerdo con lo establecido en el artículo anterior.
CAPITULO VI
Art. 67º. – Lo establecido en los capítulos I, II, III, IV y V del presente título se aplicará a
las universidades estructuradas por el sistema de organización departamental con las
siguientes modificaciones:
a) La Asamblea y el Consejo Superior podrán integrarse con profesores elegidos
directamente por el Claustro, constituido en Colegio Electoral único, debiendo el estatuto
determinar su composición;
b) Podrán transferirse al Consejo Superior parte de las atribuciones fijadas por esta ley
a los Consejos Académicos;
c) Los Directores de Departamentos podrán ser designados por concurso y sus
atribuciones podrán ser transferidas parcialmente al Consejo Superior.
CAPITULO VII
Tribunales Académicos
Art. 68º. – Para la sustanciación de los juicios académicos se constituirá en cada caso un
Tribunal Académico compuesto por 3 miembros.
TITULO IV
Consejo de Rectores
Art. 73º. – Anualmente los Rectores y Presidentes elegirán de entre ellos un Presidente,
que tendrá a su cargo la convocatoria y ejecución de las resoluciones del Consejo. Se
designará, también, un Vicepresidente, que reemplazará al Presidente en los casos que
establezca el Reglamento Interno.
Art. 74º. – El Consejo de Rectores tendrá su sede en la ciudad de Buenos Aires, pero
podrá reunirse en cualquiera de las universidades. Sus resoluciones serán tomadas por la
mayoría del total de sus miembros.
Art. 75º. – El Consejo de Rectores organizará una Secretaría Permanente en la que cada
Universidad tendrá su Delegado y designará al personal necesario para el cumplimiento de
sus funciones. El Secretario Administrativo de la Secretaría Permanente tendrá a su cargo la
responsabilidad de la administración de dicho organismo, para el cual regirá el sistema de
fiscalización que establece esta ley, en los términos del art. 109º. Las universidades
contribuirán a los gastos que demande el funcionamiento del Consejo de Rectores y su
Secretaría Permanente, en forma proporcional a sus presupuestos.
Art. 76º. – El Consejo de Rectores deberá realizar los siguientes estudios por intermedio
de su Secretaría, sin perjuicio de otros que considere oportuno emprender:
a) De las estructuras y planes de estudio de las distintas universidades para establecer
si se adaptan a los fines previstos;
b) De la organización y métodos de las distintas entidades universitarias a efectos de
mejorar su eficiencia;
c) De los factores de deserción y repetición estudiantiles y de los medios conducentes
a su solución;
d) De las necesidades económicas y de equipamiento de las distintas universidades.
Art. 78º. – La comunicación de las universidades con el Poder Ejecutivo será mantenida
por intermedio de la Secretaría de Estado de Cultura y Educación.
TITULO V
Régimen de enseñanza
Art. 81º. – Será requisito indispensable para ingresar a las universidades nacionales tener
aprobados los estudios que correspondan al ciclo de enseñanza media, de acuerdo con las
reglamentaciones correspondientes. El Consejo de Rectores deberá coordinar en todo el
país las condiciones de admisión a las diversas carreras.
Art. 83º. – Las universidades podrán reglamentar en sus estatutos la asistencia obligatoria
a clases en aquellas materias que se dicten sin seminarios ni trabajos prácticos.
Art. 84º. – Deberá promoverse una adecuada diversificación de los planes de estudio,
estableciendo materias optativas, además de las principales y obligatorias, e incluyendo, a
los efectos de evitar una formación estrechamente profesional, un número determinado de
materias fundamentales complementarias, adecuadas a cada carrera.
Art. 85º. – En todos los casos en que ello sea posible las carreras se organizarán en ciclos,
al fin de cada uno de los cuales se otorgarán los correspondientes certificados.
Art. 86º. – Las universidades deberán fomentar y mantener regularmente los estudios para
graduados. Estos agruparán, sistemática y orgánicamente, las actividades y cursos de
perfeccionamiento, especialización y actualización de los egresados, incluyéndose en este
nivel los estudios y trabajos que se reglamenten para el acceso al Doctorado.
Art. 87º. – Los títulos profesionales, habilitantes y grados otorgados por las universidades
nacionales tendrán validez en todo el país. Acreditarán idoneidad y los de carácter
profesional habilitarán para el ejercicio de las actividades consiguientes, sin perjuicio del
poder de policía que corresponde a las autoridades locales.
TITULO VI
Alumnos
Art. 90º. – Todo alumno que en el término de un año no aprobare, sin causa justificada,
por lo menos una materia o su equivalente del correspondiente plan de estudios, perderá
automáticamente la condición de tal.
Art. 91º. – Las facultades reglamentarán las pruebas y condiciones que exigirán para
reinscribir al que haya perdido la condición de alumno.
Art. 92º. – La enseñanza será gratuita, salvo en los cursos para graduados.
Las universidades establecerán el mínimo anual de materias aprobadas con que podrá
mantenerse el derecho a esa gratuidad. Fijarán asimismo las excepciones a contemplar, los
requisitos que deberán llenarse para recuperar el referido derecho y los aranceles anuales
fijos a cobrar en los casos señalados, que no podrán ser inferiores a la asignación básica del
menor sueldo de la escala docente. Se establecerán también los derechos por exámenes
repetidos y por repetición de trabajos prácticos, los que serán progresivos en la misma
materia para el mismo alumno. La tasa inicial por examen repetido no podrá ser menor del
5%, y por trabajos prácticos del 20% de la asignación básica docente preestablecida. Los
fondos recaudados deberán destinarse íntegramente para becas estudiantiles.
Art. 93º. – Las facultades deberán mantener actualizado su Registro de Alumnos en base
a lo estipulado en los artículos anteriores.
Art. 94º. – Los alumnos elegirán, de acuerdo con las normas que establezcan los
respectivos estatutos de las universidades, un delegado estudiantil que tendrá voz en las
sesiones de los Consejos Académicos de cada Facultad. No formará quórum y podrá
integrar las comisiones de acuerdo con la reglamentación de cada Universidad.
Art. 95. – El delegado estudiantil será elegido por el voto de los alumnos que hayan
cursado regularmente sus estudios, de acuerdo con las reglamentaciones respectivas y
tengan aprobado el equivalente a la mitad del plan de estudios de su carrera. El voto será
secreto y obligatorio.
Art. 96º. – Para ser electo como representante estudiantil se requiere, además:
a) Tener aprobado el equivalente de las dos terceras partes del respectivo plan de
estudios;
b) Tener un promedio general equivalente a bueno, de acuerdo con la reglamentación
que dicte cada Facultad.
Art. 97º. – No tendrán derecho a voto ni podrán ser elegidos los alumnos extranjeros y los
de las carreras auxiliares no universitarias.
Art. 98. – Los alumnos no podrán realizar dentro de las casa de estudios ninguna clase de
actividad política en forma oral o escrita, mediante reuniones, demostraciones, asambleas o
cualquier otra forma que contradiga las disposiciones del art. 10º, siendo pasibles de
aplicación de sanciones por parte del Decano.
TITULO VII
Art. 105º. – Cada Universidad formará su Fondo Universitario con el aporte de los
siguientes recursos:
a) Las economías que realice en la inversión de las contribuciones y subsidios que las
contribuciones del Tesoro Nacional para destine su presupuesto general;
b) Las contribuciones y subsidios que las provincias y los municipios destinen a la
Universidad;
c) Las herencias, legados y donaciones de personas o instituciones privadas, las que
serán exceptuadas de todo impuesto nacional;
d) Las rentas, frutos o intereses de su patrimonio; los que obtenga por sus
publicaciones, por concesiones, por la explotación de sus bienes, y por toda otra actividad
similar, efectuada por sí o por intermedio de terceros;
e) Los derechos, aranceles o tasas que perciba como retribución de los servicios que
preste;
f) Los derechos de explotación de patentes de invención de derechos intelectuales que
pudieran corresponderle por trabajos realizados en su seno;
g) Las contribuciones o subsidios provenientes de organismos internacionales o
extranjeros, destinados a los fines específicos de la Universidad;
h) El producido de las ventas de bienes muebles, materiales o elementos en desuso o
en condición de rezago;
i) Todo otro recurso que les corresponda o pudiera crearse.
Art. 106º. – Las universidades podrán utilizar su Fondo Universitario de acuerdo con sus
necesidades, con la limitación de no aplicarlo para el pago de remuneraciones de cargos
permanentes.
Art. 107º. – La ley de presupuesto fijará anualmente la contribución del Tesoro Nacional
al presupuesto y plan de trabajos públicos de cada Universidad. Dicha contribución se
establecerá mediante el siguiente procedimiento:
a) Cada Universidad elevará al Consejo de Rectores los anteproyectos de su
presupuesto y de su plan de trabajos públicos, indicando por separado la parte a financiar
con recursos del Fondo Universitario;
b) El Consejo de Rectores elevará dichos anteproyectos al Poder Ejecutivo por
intermedio de la Secretaría de Estado de Cultura y Educación, con las observaciones que
ellos le merezcan. Presentará, juntamente con los presupuestos, el estado de planeamiento
de la enseñanza universitaria previsto en el art. 77º. inc. c) y las medidas recomendadas o
adoptadas para concretar sus formulaciones. Elaborará asimismo su propio presupuesto y lo
elevará al Poder Ejecutivo por intermedio de la Secretaría de Estado de Cultura y
Educación y con intervención de la Secretaría de Estado de Hacienda;
c) El Poder Ejecutivo incorporará al proyecto de presupuesto la contribución a cada
Universidad en forma global. En caso de que las posibilidades financieras no permitan
atender la totalidad de los requerimientos, las cifras definitivas serán determinadas por el
Poder Ejecutivo, previa vista al Consejo de Rectores.
Art. 108º. – El Consejo Superior de cada Universidad está facultado para ordenar, ajustar
y reajustar el presupuesto, dentro de las cifras autorizadas, dando cuenta el Poder Ejecutivo,
con intervención de la Secretaría de Estado de Haciendo, antes de los 30 días de su
aprobación y con estas únicas limitaciones:
a) Los créditos para trabajos públicos no podrán ser transferidos a ningún destino;
b) Los créditos para gastos generales e inversiones patrimoniales no podrán
transferirse a ningún otro destino;
c) No podrán efectuarse reajustes que originen incrementos automáticos o que
impliquen erogaciones por conceptos no incluidos en su proyecto original.
Art. 110º. – Las universidades podrán contratar en forma directa las adquisiciones de
material docente, científico y bibliográfico:
a) Mediante resolución autorizada por los rectores o presidentes y decanos de
Facultades o directores de Departamentos hasta la suma de doscientos mil pesos moneda
nacional (m$n. 200.000).
b) Mediante resolución fundada en razones de urgencia autorizada por las mismas
autoridades, cuando se exceda de esa suma. El Consejo de Rectores podrá proponer al
Poder Ejecutivo por intermedio de la Secretaría de Estado de Cultura y Educación al 31 de
diciembre de cada año, el reajuste que pudiera corresponder al valor límite anteriormente
mencionado.
La reglamentación de la presente ley establecerá el procedimiento y características de
estas excepciones al Régimen General de Contrataciones del Estado.
Art. 111º. – Las universidades podrán destinar parte de los recursos de su Fondo
Universitario para constituir, previa aprobación del Poder Ejecutivo Nacional, sociedades y
asociaciones destinadas a facilitar el cumplimiento de sus fines, a condición de que la
dirección de tales entidades quede bajo el control de las universidades.
Art. 112º. – En lo referente al control económico financiero regirán para las universidades
nacionales la ley de contabilidad y demás disposiciones legales o reglamentarias
correlativas o afines, con las excepciones previstas en el título VII de la presente ley.
TITULO VIII
Personal de la Universidad
Art. 115º. – Las universidades deberán procurar a sus miembros los medios que
contribuyan a su seguridad y bienestar social, coordinando su acción con los organismos
nacionales especializados, con el fin de asegurar el máximo rendimiento sin superponer
estructuras o complicar la organización administrativa.
TITULO IX
De la intervención
Art. 116º. – Las universidades nacionales podrán ser intervenidas por el Poder Ejecutivo
por tiempo determinado, debiendo a su término llamarse a elecciones de autoridades de
acuerdo con los Estatutos. Serán causales de intervención:
a) Conflicto insoluble dentro de la propia Universidad.
b) Manifiesto incumplimiento de los fines.
c) Alteración grave del orden público o subversión contra los poderes de la Nación.
TITULO X
De los recursos
Art. 119º. – Con la elevación prevista en el artículo anterior, con o sin contestación de la
Universidad, quedarán los autos para resolver en definitiva.
TITULO XI
Disposiciones transitorias
Art. 122º. – Aprobados los respectivos estatutos, el Poder Ejecutivo fijará la fecha en que
se llamará a elecciones para integrar los Consejos Académicos de cada Facultad o
Departamento. Participarán en ellas todos los profesores ordinarios con derecho a voto, de
acuerdo con lo establecido en el art. 64º de esta ley. Integrados que sean los Consejos
Académicos, el Poder Ejecutivo designará a los rectores y decanos de todas las
universidades nacionales correspondientes al primer período de los fijados por los arts. 49º
y 58º de la presente ley.
Art. 123º. – Los rectores y decanos designados de acuerdo con el régimen establecido por
la Ley 16.912, deberán llamar a concurso en los cargos vacantes de las diversas categorías
de profesores ordinarios, con el objeto de constituir los claustros respectivos a efectos de lo
dispuesto en el art. 122º y de acuerdo con las disposiciones de la presente ley.
UNIVERSIDADES PROVINCIALES
Artículo 1°- Los títulos o grados otorgados por las Universidades e Institutos de enseñanza
superior universitaria provinciales tendrán la validez prevista en el Artículo 87º de la Ley
l7.245, cuando los establecimientos que los expidan hayan obtenido la previa autorización
que se otorgará por el Poder Ejecutivo Nacional una vez cumplidos los recaudos exigidos
por la presente ley.
Artículo 3°- Será facultativo del Poder Ejecutivo Nacional conceder la autorización sobre
la base de razones de política educativa previa a la evaluación de las características
exigibles, de los requisitos de estructuración y de nivel existentes y de las necesidades
regionales y sectoriales del desarrollo nacional.
Artículo 4°- Para que las Universidades o Institutos de enseñanza superior universitaria
provinciales que se creen en el futuro, puedan acogerse al régimen de la presente ley, es
necesario que la provincia respectiva obtenga con carácter previo a la fundación, un decreto
del Poder Ejecutivo Nacional en el que se preste conformidad con el proyecto de creación.
El Poder Ejecutivo Nacional podrá prestar dicho acuerdo teniendo en cuenta las razones
que abonan la misma y su concordancia con las necesidades de planeamiento educativo
nacional.
Artículo 6°- Los establecimientos universitarios provinciales deberán observar los mismos
fines generales y funciones que los prescriptos para las Universidades Nacionales en los
artículos 2º y 3º de la Ley 17.245, debiendo ajustar su acción a lo establecido en el artículo
4° de dicha ley Sin perjuicio de ello, podrán fijar las finalidades y funciones que se
justifiquen por las circunstancias particulares de su fundación y en especial deberán atender
a los requerimientos de la región.
a) Dictar y reformar sus estatutos académicos, con la aprobación del Poder Ejecutivo
Provincial respectivo, en los cuales deberán establecer la organización académica y los
regímenes de gobierno, disciplina, profesores, alumnos, enseñanza y promoción,
conforme con las pautas generales establecidas en la Ley 17.245;
b) Fijar sus planes de estudio, los cuales deberán ser aprobados por el Poder Ejecutivo
Nacional en cuanto a su estructura general.
Artículo 9°- Los profesores de todas las categorías deberán poseer título universitario o en
su defecto de manera estrictamente excepcional antecedentes objetivamente evaluables por
los que se acredite la debida competencia.
Artículo 10°- Para ingresar como alumno se requerirá haber aprobado los estudios
correspondientes al nivel medio de enseñanza.
Artículo 17°- Las disposiciones de la Ley 17.245 serán de aplicación supletoria a los
establecimientos mencionados en cuanto no se opongan a las disposiciones de la presente.
Artículo 18°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial
y archívese.
EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:
3. Organizar un legajo especial para cada establecimiento con todos los antecedentes
referentes al mismo y un registro general de establecimientos. A tal efecto los
establecimientos respectivos comunicarán las modificaciones en sus autoridades y
cuerpo docente dentro de los treinta días corridos de haberse producido.
Artículo 4°- El plazo que acuerda el artículo 2° de la Ley N° 17.778 comenzará a correr a
partir de la fecha del presente decreto.
Artículo 5°- El pedido de acuerdo previsto en el artículo 4° de la ley deberá ajustarse a los
siguientes requisitos:
c) Exposición de las razones que abonan el pedido y su concordancia con las necesidades
del planeamiento educativo, así como con las necesidades regionales y sectoriales del
desarrollo nacional.
Artículo 6°- Presentada la solicitud del acuerdo previsto en el artículo 4° de la ley, con los
recaudos formales debidamente cumplidos, la Secretaría de Estado correrá vista al Consejo
de Rectores de las Universidades Provinciales por treinta días hábiles perentorios a los
efectos de la consulta correspondiente al artículo 15° de la ley. Con su resultado efectuará
la evaluación señalada en el artículo 3° de la ley y correrá vista de las actuaciones a la
provincia peticionante, la que podrá presentar una memoria dentro de los treinta días
hábiles perentorios. En este estado la secretaría elevará las actuaciones al P. E. Nacional
aconsejando la resolución que corresponda.
5. Requerir el auxilio de la fuerza pública en caso necesario con intervención del gobierno
provincial respectivo.
7. Asistir a los cursos y exámenes cuando lo considere conveniente y tomar toda otra
medida tendiente a fiscalizar el nivel académico.
Artículo 11°- La reforma de los estatutos académicos deberá ser comunicada por el
establecimiento respectivo a la Secretaría de Estado, dentro de los treinta días corridos de
su aprobación por el P. E. Provincial respectivo, a sus efectos.
Artículo 12°- El pedido de aprobación de la estructura general de los planes de estudio y
sus modificaciones, deberá presentarse ante la Secretaría de Estado acompañándose el plan
de estudios respectivo y una exposición de motivos. La Secretaría de Estado correrá vista al
establecimiento peticionante, de las observaciones, si las hubiere, por treinta días hábiles
perentorios. Con su resultado elevará sus acciones al P. E. Nacional aconsejando la
resolución que corresponda.
Artículo 16°- A los efectos establecidos en el artículo 16° de !a ley , los institutos
respectivos efectuarán la presentación ante la Secretaría de Estado de Cultura y Educación
previa autorización de la autoridad nacional correspondiente, y dando cumplimiento a los
requisitos establecidos en el artículo 3° incisos 3° a 7° del presente decreto. Presentada la
solicitud la Secretaría de Estado inspeccionará el establecimiento y efectuará la evaluación
prevista en el artículo 3° de la ley La Secretaría de Estado correrá vista al establecimiento
peticionante de las actuaciones por treinta días hábiles perentorios y con su resultado
elevará las actuaciones al P. E. Nacional aconsejando la resolución que corresponda.
Artículo 17°- El presente decreto será refrendado por el señor Ministro del Interior y
firmado por el señor Secretario de Estado de Cultura y Educación.
Artículo 18°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial
y archívese.
ONGANIA - Guillermo A. Borda - José M. Astigueta.
UNIVERSIDADES PRIVADAS
DECRETO N° 8.472
DECRETA:
Art. 2º - El Ministerio de Cultura y Educación a los fines indicados en el art. l°, tendrá
las siguientes atribuciones y deberes:
a) Entender en todo lo concerniente al otorgamiento de las autorizaciones
provisionales y definitivas y a su retiro.
b) Ejercer la fiscalización permanente sobre dichos establecimientos con el objeto de
verificar si se cumplen las condiciones bajo las cuales están autorizados a funcionar.
c) Controlar el cumplimiento de las normas referentes a la utilización de las
denominaciones previstas en la ley.
d) Organizar un registro general de establecimientos universitarios privados y un
legajo especial para cada uno de ellos con todos los antecedentes que se consideren
necesarios.
e) Preparar anualmente una memoria estadística y descriptiva relativa al estado de los
establecimientos sujetos al régimen de la Ley 17.604.
Art. 13º.- Los establecimientos que no den cumplimiento a las obligaciones impuestas
por la Ley 17.604, el presente decreto reglamentario o los estatutos respectivos, estarán
sujetos a las siguientes sanciones:
a) llamado de atención;
b) apercibimiento;
c) intimación al establecimiento a que suspenda sus actividades;
d) clausura definitiva, total o parcial.
Una vez subsanado el vicio el establecimiento podrá, dentro de los cinco (5) días
hábiles subsiguientes, recurrir de la medida dispuesta. Si se tratare de circunstancias de
hecho, se abrirá a prueba, por un término de quince (15) días hábiles, vencido el cual o
producida la prueba ofrecida, el Ministerio de Cultura y Educación dictará la resolución
correspondiente. EI establecimiento deberá publicar en lugares visibles, el trámite seguido
y la sanción aplicada.
Los casos prácticos a que hace referencia el inciso a) del presente artículo, serán
establecidos por el Tribunal, debiendo responder a un temario general, que
anualmente propondrá cada establecimiento dentro de los últimos sesenta días de
cada año, para las pruebas a rendirse en el año siguiente, al Ministerio de Cultura y
Educación, quien los aprobará o rechazará por resolución fundada, dentro de los
treinta (30) días corridos inmediatos a su presentación. De no presentarse en dicho
término, se tendrá por establecido el fijado para el año inmediato anterior si lo
hubiere, y en caso contrario lo fijará de oficio el Ministerio de Cultura y Educación.
d) Si el egresado fuera reprobado la primera vez, podrá repetir la Prueba Final
transcurridos seis (6) meses. Si fuera reprobado nuevamente, en lo sucesivo deberá
esperar cada vez un (1) año para requerir la constitución de otro Tribunal.
e) El Ministerio de Cultura y Educación verificará que los casos prácticos se ajusten al
temario general y a las características descriptas en el inciso a) del presente artículo.
f) El Ministerio de Cultura y Educación determinará el procedimiento a seguir por el
Tribunal para la recepción de la Prueba de Capacitación Profesional.
Art. 19º.- El Poder Ejecutivo Nacional podrá conceder, a propuesta del Ministerio de
Cultura y Educación, la supresión de la Prueba Final de Capacidad Profesional a los
establecimientos autorizados definitivamente. Para ello deberán contar con un mínimo de
quince (15) años de funcionamiento a partir de su autorización definitiva y poseer nivel
académico y docente adecuado.
Art. 20º. - A los efectos establecidos en el art. 11º de la Ley 17.604, cada
establecimiento designará un funcionario responsable, el que acreditará la veracidad y
autenticidad del contenido y firma de los certificados donde consten las calificaciones y
pruebas rendidas por el interesado en dicho establecimiento. Ningún establecimiento
educativo podrá admitir la validez de materias, seminarios o trabajos prácticos aprobados
en establecimientos universitarios privados, sin la presentación del certificado antedicho
debidamente legalizado por el Ministerio de Cultura y Educación, a cuyo efecto el
funcionario responsable acreditará su carácter y registrará su firma ante el Departamento de
Registro de Títulos.
Art. 27º. - En relación con las creaciones de nuevas facultades, escuelas, institutos,
departamentos y carreras, así como también de las anexiones, incorporaciones y
desanexiones a que se refiere el artículo precedente, además de las pautas establecidas en el
artículo 3° del presente decreto, se tendrán en cuenta los siguientes criterios:
a) Mantenimiento de condiciones que permitan un grado suficiente de interrelación de
la comunidad universitaria.
b) Restricción respecto de la dispersión geográfica de los establecimientos
universitarios, salvo que ello se justifique por razones de inmediatez de los recursos
humanos naturales o por fines de desarrollo de zonas marginales.
c) Posibilidad de contralor efectiva de tales dependencias por parte de las autoridades
centrales del establecimiento universitario peticionante.
Art. 29º. - A los efectos de analizar las solicitudes presentadas por los establecimientos
universitarios privados, el Ministerio de Cultura y Educación requerirá la opinión del
Consejo de Rectores, ante quien deberán presentarse antes del 31 de mayo de cada año.
Dicho cuerpo dictaminará acerca de ellas elevando al Ministerio de Cultura y Educación
antes del 31 de julio de cada año, una recomendación final que incluirá una lista con orden
de prioridades. Formulará igualmente todas las observaciones que considere convenientes
y, en caso de disidencia, indicará las diferentes recomendaciones o listas de prioridades.
Una vez en posesión de dicho dictamen, el Ministerio de Cultura y Educación designará
una comisión asesora para la formulación de una recomendación fundada y la elaboración
de una lista de prioridades.
Esta comisión estará integrada por el Director Nacional de Altos Estudios, quien la
presidirá; el Director de la Oficina Sectorial de Desarrollo y dos o más expertos con
antecedentes destacados en la actividad científica, académica o en planeamiento y
organización universitaria.
El Ministro de Cultura y Educación propondrá al Poder Nacional el monto y la
distribución del aporte económico estatal que considere adecuado del Presupuesto General
de Gastos del Ministerio de Cultura y Educación.
Art. 31º. - En caso de que el Ministerio de Cultura y Educación compruebe que los
fondos acordados no se han utilizado de acuerdo con lo previsto en el proyecto
oportunamente aprobado, el Ministro podrá proponer la cancelación de la contribución
estatal.
Art. 32º. - Por esta única vez el Ministro de Cultura y Educación con intervención de la
Dirección Nacional de Altos Estudios, podrá homologar las creaciones de facultades,
escuelas, departamentos, institutos, carreras, grados y títulos, como así también las
anexiones, incorporaciones y desanexiones, realizadas con anterioridad al presente decreto
sin autorización estatal expresa. Homológanse las aprobaciones efectuadas hasta la fecha
del presente decreto por la Dirección Nacional de Altos Estudios.
Art. 33º. - El período de quince (15) años a que se refiere el artículo 19º del presente
decreto, se contará en relación las universidades registradas de acuerdo con el régimen de la
Ley 14.557 y su decreto reglamentario, a partir de la fecha de su primera aprobación o
reconocimiento oficial como establecimiento independiente.
Art. 34º. - Por esta única vez las solicitudes a que se refiere el art. 28º del presente
decreto, podrán presentarse para el año fiscal de 1970, hasta el 31 de marzo de ese año.
Art. 36º. - El plazo de trescientos sesenta (360) días establecido en el art. 5° del
presente decreto se contará para las solicitudes presentadas con anterioridad a la fecha del
presente decreto a partir del día de su presentación. En consecuencia los demás plazos y
trámites posteriores podrán abreviarse u obviarse a juicio del Ministerio de Cultura y
Educación, con el acuerdo del peticionante, sin que ello implique excepción alguna
respecto de los requisitos que la entidad peticionante y el establecimiento proyectado
deberán reunir conforme con lo dispuesto por la Ley 17.604 y el presente decreto.
Art. 37º. - El lapso establecido en el art. 10º del presente decreto deberá computarse
para los establecimientos autorizados provisionalmente por Decreto N° 2.227/68, a partir
de la fecha en que cada uno de ellos comenzó sus actividades académicas. Respecto de
dichos establecimientos, podrá sustituirse a juicio del Ministerio de Cultura y Educación, la
evaluación a que hace referencia el art. 11º del presente decreto, por un dictamen de la
Dirección Nacional de Altos Estudios, si así lo solicitara el establecimiento interesado.
Art. 38º. - Deróganse los decretos del Poder Ejecutivo Nacional, N° 1.404 del 11 de
febrero de 1959; N° 631 del 22 de enero de 1962; N° 4.227 del 24 de mayo de 1963; N°
7.703 del 16 de setiembre de 1963; N° 7.764 del 18 de setiembre de 1963; N° 7.765 del 18
de setiembre de 1963; N° 1.392 del 12 de diciembre de 1963; N° 1.674 del 6 de marzo de
1964 y N° 4.369 del 4 de junio de 1965.
Art. 39º. - El presente decreto será refrendado por el señor Ministro de Cultura y
Educación.
Art. 40º. - Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial
y archívese.
ONGANIA
Dardo Pérez Guilhou.
ANEXO
DECRETO N° 1.868 (7-4-1972). - Agrégase al final del inciso b) del artículo 18º del
Decreto N° 8.472/69 el párrafo siguiente: "Los tres miembros del Tribunal deberán estar
legalmente habilitados para el ejercicio de la profesión correspondiente a la materia de la
prueba".
DECRETO N° 939 (10-4-1975). - Agrégase al inciso b) del artículo 18º del Decreto N°
8.472/69 el texto siguiente: "Cuando el titulo otorgado por el establecimiento corresponda a
carreras cuyo contenido abarque más de una disciplina profesional, el tribunal podrá ser
integrado con representantes de aquellos consejos o asociaciones profesionales vinculados
con la orientación y posible área de acción sobre la cual tengan incidencia las incumbencias
asignadas al título. Será presidido en todos los casos por el representante del Estado
Nacional, y cuando el numero de sus integrantes no permita adoptar criterios en mayoría
prevalecerá el criterio del Presidente del Tribunal".
DECRETO N° 197 (16-1-1976).- Sustitúyese el texto del artículo 18º, inciso d) del
Decreto N° 8.472/69, por el siguiente: "Si el egresado fuera reprobado, podrá volver a
rendir la prueba cuantas veces lo solicite debiendo en todos los casos transcurrir un lapso
no menor de tres meses entre las fechas de cada examen".
TITULO I
TITULO II
De la organización académica
CAPITULO I
CAPITULO II
No pueden crearse otras categorías de profesores ordinarios que las señaladas en esta
ley.
Art. 9º – Todo cargo de profesor ordinario y auxiliar docente debe obtenerse por
concurso público de antecedentes y de oposición.
Para ser designado profesor ordinario se requiere ser ciudadano argentino y poseer
título o diploma universitario reconocido en su disciplina por la Nación.
Art. 10º. – Los profesores ordinarios serán designados por el Consejo Superior, de
acuerdo con la propuesta elevada por el Consejo Directivo de la respectiva unidad
académica. Estos órganos se ajustarán a las conclusiones de los jurados, sin perjuicio de su
competencia para examinar el concurso –en cuanto al respeto de las normas legales
estatutarias, y reglamento–, y su posibilidad de anulario.
Art. 11º. – El docente universitario no podrá defender intereses que están en pugna,
competencia o colisión con los de la Nación, provincias o municipios, siendo pasible, si así
lo hiciera, de suspensión, cesentía o exoneración. Quedan excluidos los casos de defensa de
intereses personales del profesor, su cónyuge ascendientes o descendientes.
Art. 12º. – El Consejo Superior, a propuesta de los consejos directivos, podrá resolver
la separación de los profesores que se hallen incursos en las siguientes causales:
a) Incumplimiento o violación de las disposiciones del art. 11º;
b) Condena criminal que no sea por hecho culposo;
c) La inhabilidad física que impida el ejercicio de la docencia o la inhabilidad mental
declarada por autoridad competente;
d) Abandono de las funciones;
e) Violación grave de las normas de esta ley o de los estatutos y reglamentos de las
universidades respectivas.
Todas estas designaciones deberán efectuarse de acuerdo con lo establecido en los arts.
17º y 18º.
Art. 14º. – El Consejo Superior, a propuesta del Consejo Directivo, podrá designar
profesores interinos por un período no mayor de un año, lapso durante el cual debe
convocarse a concurso. Asimismo puede disponer la contratación de profesores, por un
lapso que no debe exceder los dos años, para el desempeño de las funciones docentes
temporarias que no cuenten con especialistas en el cuerpo docente de las unidades
académicas.
Art. 16º. – Los profesores ordinarios cesan automáticamente el 1º de marzo del año
siguiente a aquel en el que cumplan sesenta y cinco años de edad. En tal circunstancia
podrán ser designados profesores extraordinarios cuando medien las condiciones previstas
en el respectivo estatuto.
Art. 17º. – Cada universidad instituirá la carrera docente que estará orientada a :
a) La formación técnico didáctica del docente;
b) La actualización y profundización de su función específica y de su especialización;
c) La formación de su propio cuerpo de profesores.
Art. 18º. – La reglamentación que se dicte sobre los concursos para designar
profesores deberá asegurar en todos los casos:
a) La formación de jurados de idoneidad e imparcialidad indiscutibles, que deberán
integrarse con profesores de la disciplina, con jerarquía no inferior a la del cargo objeto del
concurso;
b) La publicidad previa de los nombres de los integrantes del jurado, la posterior de los
antecedentes de los candidatos y de los dictámenes;
c) La capacidad científica de las leyes fundamentales de la Nación con exclusión de
todo otro criterio de discriminación;
d) La asistencia de un delegado estudiante designado por los representantes respectivos
en los consejos directivos, para opinar específicamente sobre las condiciones didácticas de
los aspirantes. El delegado deberá reunir las mismas condiciones que las exigidas para ser
representante estudiantil y tener aprobada la disciplina en concurso;
e) La recusación de los miembros del jurado y los recursos administrativos que
correspondieren.
TITULO III
Gobierno
Art. 19º. – El gobierno y la administración de las universidades serán ejercidos con la
participación de todos los sectores de la comunidad universitaria: docentes, estudiantes y
personal no docente a través de:
a) La asamblea universitaria;
b) El rector;
c) El consejo superior;
d) Los decanos o directores de unidades académicas;
e) Los consejos directivos.
CAPITULO I
Asamblea universitaria
Art. 21º. – La asamblea universitaria se reúne por convocatoria del rector, resolución
del Consejo Superior o miembros de la comunidad universitaria según la forma y los
requisitos que fijen los respectivos estatutos.
La asamblea universitaria deberá reunirse por los menos en sesión ordinaria una vez
por año.
CAPITULO II
Art. 23º. – El rector y el vicerector serán designados por el modo previsto en los
estatutos y durarán cuatro años en sus funciones.
Art. 24º. – Para ser designado rector o vicerector se requiere ser ciudadano argentino,
tener treinta años cumplidos, poseer el título universitario reconocido, o ser o haber sido
profesor ordinario, en una universidad nacional.
Art. 26º. – El vicerector reemplaza al rector en la forma y por las causas que
establezcan los respectivos estatutos.
CAPITULO III
Art. 27º. – El Consejo Superior está compuesto por el rector los decanos o directores
de unidades académicas y los representantes de los tres estamentos universitarios,
correspondiendo al docente el sesenta por ciento, al estudiante el treinta por ciento y al
personal remunerado no docente el diez por ciento.
CAPITULO IV
Art. 30º. – Para ser designado decano o vicedecano, o director o vicedirector de unidad
académica equivalente, se requieren las mismas condiciones que para ser rector.
CAPITULO V
Consejos Directivos
TITULO IV
Régimen de enseñanza
Art. 35º. – Será requisito indispensable para ingresar a las universidades nacionales,
tener aprobados el ciclo de enseñanza media o aquellos estudios que permitan deducir una
capacitación equivalente al mismo.
TITULO V
Art. 40º. – Los representantes de los docentes ejercen su mandato por el término de
cuatro años.
TITULO VI
Alumnos
Art. 43º. – Los delegados estudiantiles tendrán voz y voto en las sesiones de los
consejos superior y directivo.
Art. 44º. – Sólo tendrán derecho a voto y podrán ser elegidos, en las condiciones
establecidas por la presente ley, los alumnos argentinos, que sigan carreras o cursos
universitarios.
Es también requisito, haber aprobado por lo menos una materia en los dos últimos
períodos lectivos.
TITULO VII
Patrimonio y recursos
Art. 48º. – Cuando se trate de herencias, legados, donaciones o cualquier otra libertad
a favor de la universidad o de sus unidades académicas u otros organismos que la integren,
antes de ser aceptadas por el Consejo Superior debe oírse al destinatario final y analizarse
exhaustivamente las condiciones o cargos que puedan imponer los testadores y
benefactores, en cuanto a las conveniencias y desventajas que puedan ocasionar a la
universidad y al establecimiento de esta que ha de recibir el beneficio.
Iguales recaudos deben tomarse en los casos de créditos y otras financiaciones, con el
fin de mantener la libertad e independencia de sus actividades docentes y de investigación.
En ningún caso se aceptan liberalidades provenientes de empresas multinacionales en
colisión con los intereses de la Nación.
Art. 49º. – Es atribución exclusiva del Consejo Superior de cada universidad aprobar
el presupuesto y financiar con recursos provenientes del fondo universitario permanente.
TITULO VIII
De la intervención
Art. 51º. – Las universidades pueden ser intervenidas por el Poder Ejecutivo, por
tiempo determinado y por las siguientes causales:
a) Manifiesto incumplimiento de la presente ley;
b) Alteración grave del orden público;
c) Conflicto insoluble dentro de la universidad;
d) Subversión contra los poderes de la Nación o conflicto grave de competencia con
otros organismos públicos.
TITULO IX
De la coordinación interuniversitaria
Art. 53º. – Unicamente por ley podrán crearse, fusionarse o suprimirse las
universidades nacionales.
Art. 54º. – Se reconocen como universidades nacionales a las que en tal carácter
existen al momento de sancionarse la presente ley.
TITULO X
Art. 55º. – Las universidades establecerán un sistema de becas que contemple las
siguientes categorías:
a) Becas de ayuda económica;
b) Becas de estímulos;
c) Asignación a la familia;
d) Becas para estudiantes extranjeros;
e) Las universidades otorgarán a sus alumnos, de acuerdo con la reglamentación que
prevean sus estatutos, becas de honor consistentes en sumas de dinero u otro tipo de
asistencia o servicio reembolsable por el beneficiado, luego de obtener su título
correspondiente.
TITULO XI
De los estatutos
Art. 56º. – En los estatutos de las universidades deberán preverse normas sobre:
a) Las categorías de profesores;
b) La organización de la actividad de investigación;
c) Las incompatibilidades y el tiempo de dedicación de los cargos docentes;
d) Las condiciones para contratar docentes extranjeros;
e) La provisión de asistencia social a los miembros de la comunidad universitaria;
f) La vinculación con organismos especializados nacionales, provinciales y
municipales, la promoción cultural del medio a través de actividades de capacitación, de
perfeccionamiento, profesionales y artísticas;
g) Prever las normas reglamentarias para la vinculación de la universidad con las
provincias, los municipios, la Confederación General del Trabajo, fuerzas organizadas de la
producción, de la industria y del comercio y organizaciones profesionales y científicas, para
la consideración de asuntos específicos;
h) La creación de un departamento de graduados;
i) Todo lo necesario para garantizar la organización administrativa y académica de
las universidades;
j) Prever las normas referidas a regularidad en los estudios;
k) Organizar el departamento de consultoría y prever las normas para los acuerdos
que se puedan realizar con los gobiernos: nacional, provinciales o municipales, para su
utilización preferente;
l) Prever el régimen de puntaje para los antecedentes en los concursos para la
designación de profesores ordinarios, colocado en primer término el de antigüedad en la
docencia;
ll) Prever el modo en que –una vez normalizada la universidad–, la asamblea
universitaria elegirá rector y vicerector;
m) Prever el modo en que –una vez normalizada la universidad–, cada unidad
académico elegirá al decano y vicedecano o director y vicedirector;
n) Prever la reglamentación del juicio académico.
TITULO XII
Disposiciones transitorias
Art. 57º. – Promulgada esta ley, el Poder Ejecutivo designará los rectores de todas las
universidades nacionales. Estos y los decanos o directores de unidades académicas, que
ellos nombren, tendrán funciones normalizadoras, entendiendo por tales las propias, más las
del Consejo Superior, en el primer caso y del Consejo Directivo en el segundo.
Art. 58º. – Todos los cargos docentes designados por concurso o interinamente son
declarados en comisión y serán abiertos a concurso según las normas de la presente ley;
quedan anulados los concursos que se encuentran en trámite.
Art. 59º. – Los rectores integrarán los jurados para entender en los primeros concursos
para los cargos de profesor ordinario, con personalidades de prominentes antecedentes en
las materias respectivas y según los requisitos establecidos en el art. 18º de la presente ley.
Art. 60º. – A todos los docentes declarados cesantes por resolución expresa adoptada
por la autoridad pertinente, desde setiembre de 1955 al 25 de mayo de 1973, derivada de
razones políticas o gremiales, se les reconoce el grado académico que tenían al momento de
su cesantía. A los docentes se les computará la antigüedad hasta el momento de la
promulgación de esta ley, como si nunca hubieran sido cesantes, a los fines de los
“antecedentes” a que se refiere el art. 9º.
Art. 61º. – Dentro del plazo de normalización establecido por el art. 57º, las
universidades deberán elevar al Poder Ejecutivo Nacional un proyecto de estatuto, acorde
con las disposiciones de esta ley, que regirá hasta que la asamblea universitario –una vez
normalizada la universidad–, haga uso de la facultad que le acuerda el art. 22º, inc. b).
Art. 62º. – Derógase la llamada Ley 17.245 del 21 de abril de 1967 y toda otra
disposición que se oponga a la presente ley.
Ley orgánica de las universidades nacionales – Derogación de las leyes 20.654, 21.276
y 21.533.
Citas legales: Acta del 24/III/76: XXXVI-B, 1020; Ley 21.276: XXXVI-B. 1041; Ley
20.654: XXXIV-A, 176; Ley 17.245: XXXVII-A, 188; Ley 17.604: XXVII-A, 154; Ley
17.778: XXVIII-B, 1887; Ley 21.533: XXXVII-A, 140; D. 2584/77: XXXVII-D, 3822; D.
391/77:XXXVII-A, 339; Ley 22.140 (Rég. Jurídico Básico para la Función Pública): XL-
A, 21; Ley 21.536: XXXVII-A, 144.
TITULO I
Disposiciones generales
Ambito de aplicación
Fines de la Universidad
Prohibiciones
Art. 4º – Es ajena a los ámbitos universitarios toda actitud que signifique propaganda,
adoctrinamiento, proselitismo o agitación de carácter político-partidario o gremial, como
asimismo la difusión o adhesión a concepciones políticas totalitarias o subversivas.
Los cargos a que se refieren los arts. 45º, 49º, 52º, 55º y 59º de la presente ley y los de
Secretarios de Universidad Facultad o Departamento son de desempeño incompatible con
el ejercicio de cargos directivos político-partidarios o gremiales.
Régimen jurídico
Art. 5º – Las Universidades Nacionales son personas jurídicas de carácter público que
gozan de autonomía académica y autarquía administrativa económico y financiera.
Atribuciones
Intervención
Art. 7º – Las Universidades Nacionales podrán ser intervenidas por el Poder Ejecutivo
Nacional para normalizar su funcionamiento, por tiempo determinado y en los siguientes
casos:
a) Manifiesto incumplimiento de la presente ley.
b) Grave alteración del orden público.
c) Conflicto insoluble dentro de la Universidad.
d) Grave conflicto con los poderes del Estado.
TITULO II
Organización académica
CAPITULO I
Formas de organización
Demás establecimientos
CAPITULO II
Comunidad Universitaria
Profesores
Profesor titular
Art. 11º. – Profesor titular es la máxima jerarquía del profesor ordinario que habilita
para la dirección de una cátedra y para realizar dentro de la especialidad, las actividades
académicas e investigaciones que se programen de acuerdo con las modalidades de cada
universidad.
Profesor asociado
Profesor adjunto
Art. 13º. – El profesor adjunto colabora con el titular y el asociado, bajo cuya
dependencia académica se desempeña, pudiendo sustituirlos en caso de vacancia o licencia.
Profesor emérito
Art. 14º. – El profesor emérito es aquel profesor titular ordinario que, habiendo
alcanzado el límite de edad establecido en el art. 26º y poseyendo condiciones
sobresalientes para la docencia o la investigación, es designado en tal carácter en
reconocimiento a sus méritos excepcionales. Podrá desempeñar funciones académicas
permanentes hasta los setenta y cinco (75) años de edad.
Profesor consulto
Art. 15º. – El profesor consulto es aquel profesor titular, asociado o adjunto ordinario
que, habiendo alcanzado el límite de edad establecido en el art. 26º y poseyendo
condiciones destacadas para la docencia o la investigación es designado en tal carácter.
Podrá desempeñar funciones académicas permanentes hasta los setenta y cinco (75) años de
edad.
Profesor honorario
Art. 16º. – El profesor honorario es la personalidad relevante del país o del extranjero
a quien la Universidad otorga especialmente esta distinción.
Profesor visitante
Art. 17º. – El profesor visitante es el de otras Universidades del país o del extranjero a
quien se invita a desarrollar actividades académicas de carácter temporario.
Docentes auxiliares
Art. 18º. – Los docentes auxiliares colaboran con los profesores bajo cuya dependencia
docente se desempeñan. Sus categorías e ingreso y funciones específicas serán establecidas
en los respectivos estatutos.
Condiciones
Art. 19º. – Para ser docente universitario se requieren las condiciones siguientes.
a) Título universitario otorgado por Universidad argentina o extranjera, excepto en el
caso de antecedentes suficientemente reconocidos en la especialidad.
b) Integridad moral.
c) Identificación con los valores de la Nación y con los principios fundamentales
consagrados en la Constitución Nacional que hacen al sistema republicano.
Auxiliares alumnos
Deberes
Libertad académica
Art. 22º. – Los docentes gozarán de plena libertad para enseñar e investigar según los
propios criterios científicos y pedagógicos, sin otras limitaciones que las establecidas en la
presente ley.
Designación de profesores y docentes
La segunda designación se hará del mismo modo o por confirmación de las dos
terceras partes de los votos del Consejo Superior, a propuesta del correspondiente Consejo
Académico.
Término de designación
Art. 24º. – La designación de profesor ordinario se hará por un período de siete años.
La segunda designación otorgará estabilidad definitiva. Los docentes auxiliares serán
designados por un período no mayor de dos años, pudiendo renovarse esta designación.
Impugnaciones y recursos
Art. 25º. – Las impugnaciones y recursos que se articulan por los concursantes sólo
podrán versar sobre aspectos vinculados con la legitimidad del procedimientos o del acto.
El hecho de introducir argumentaciones sólo referidas al mérito del dictamen impedirá dar
trámite a la impugnación o recurso.
Los recursos judiciales que puedan interponerse contra la decisión definitiva que
rechazare la impugnación o recurso administrativo, serán concedidos al solo efecto
devolutivo.
Cesación
Art. 26º. – Los profesores ordinarios e interinos y los docentes auxiliares cesarán en
sus cargos el 1 de abril siguiente a la fecha en que cumplan sesenta y cinco (65) años de
edad.
Remoción
Art. 27º. – Los profesores ordinarios y extraordinarios sólo podrán ser removidos
previo juicio académico ante un tribunal integrado por profesores de categoría no inferior a
la del cuestionado, y los profesores interinos y los auxiliares de docencia previo sumario
administrativo.
Designaciones interinas
Art. 28º. – Mientras un cargo no sea provisto por concursos podrá cubrirse
interinamente por un periodo no mayor de tres (3) años durante el cual el docente gozará de
estabilidad pudiendo ser removido por las causales y en la forma dispuesta en el art. 27º.
Art. 29º. – Cuando las necesidades de la enseñanza o los trabajos de investigación así
lo exigieren podrá recurrirse al régimen de contratación.
Régimen de dedicación
Carrera docente
Investigación
Art. 32º. – En cumplimiento con lo establecido en los arts. 2º y 3º de esta ley, las
Universidades organizarán actividades de investigación de acuerdo con sus características y
modalidades particulares. En todos los casos los docentes que las realizan cumplirán las
tareas de enseñanza que les sean encomendadas.
Alumnos universitarios
Art. 33º. – Son alumnos universitarios los que, una vez satisfechas las condiciones de
ingreso, se inscriban con el objeto de cursar el plan de estudios de una carrera. Cada
Universidad reglamentará en sus estatutos las condiciones a cumplir para conservar el
carácter de alumno, las causales por las que se pierde y las formas y demás requisitos para
lograr la readmisión.
Admisión de alumnos
Art. 34º. – Será requisito indispensable para ingresar a las Universidades Nacionales:
a) Tener aprobados los estudios que correspondan al ciclo de enseñanza media.
b) Cumplir las condiciones que establezca cada Universidad y satisfacer las pruebas
de admisión que las mismas fijen con ajuste a las normas generales que determine el
Ministerio de Cultura y Educación.
Equivalencias nacionales
Art. 35º. – Las materias aprobadas en las universidades argentinas sean nacionales,
provinciales o privadas, gozarán de idéntica validez en todas ellas con las siguientes
limitaciones:
a) Podrán exigirse exámenes complementarios sobre temas no comprendidos en los
programas de la universidad de origen.
b) Cada Universidad podrá fijar un mínimo de materias o cursos que deberán
aprobarse necesariamente en ella, así como de conocimientos que deberán poseer para tener
derechos al título o grado correspondiente.
Participación estudiantil
Organización
Art. 37º. – Las Universidades Nacionales crearán las secretarías o dependencias que
estimen convenientes, las que tendrán participación estudiantil, a cuyo fin las incorporará a
sus estructuras orgánicas, con el objeto de:
a) Promover la participación e integración estudiantil prevista en el art. 36º.
b) Canalizar las inquietudes, peticiones y sugerencias de los alumnos.
c) Informar con respecto a los asuntos estudiantiles.
d) Dirigir y participar en los servicios de orientación vocacional, asesoramiento
pedagógico, asistencia médica, integración cultural, educación física y deportiva,
recreación y demás servicios de bienestar y asistencia estudiantil.
Igualdad de oportunidades
Art. 38º. – Regirá un sistema de becas, subsidios, y créditos educativos para asegurar
la igualdad de oportunidades, de manera tal que la falta o insuficiencia de recursos
económicos no sea obstáculo para la realización de estudios universitarios por quienes
tienen capacidad probada para ellos.
Aranceles y tasas
TITULO III
Régimen de gobierno
Organos de gobierno
CAPITULO I
Asamblea Universitaria
Integración
Atribuciones
Convocatoria
Art. 44º. – La Asamblea Universitaria –sin perjuicio de lo establecido en el art. 48º inc.
e)– será convocada en la forma y con los requisitos que fijen los respectivos estatutos.
CAPITULO II
Del Rector
Condiciones
Art. 45º. – Para ser designado Rector se requiere ciudadanía argentina, haber cumplido
treinta (30) años de edad y ser o haber sido profesor en una Universidad Argentina.
Designación
Art. 46º. – El Rector será designado por el Poder Ejecutivo Nacional a propuesta del
Ministerio de Cultura y Educación. Durará tres (3) años en sus funciones, pudiendo
renovarse su designación por iguales períodos.
Cargo docente
Atribuciones
Vicerector
Art. 49º. – El Vicerector deberá reunir las condiciones del art. 45º. Será designado por
el Ministerio de Cultura y Educación a propuesta del Rector. Ejercerá las funciones fijadas
en los respectivos estatutos reemplazando al Rector en la forma, y por las causas que
estipulen los mismos. Además, desempeñará las funciones que dentro de las que son
propias del Rector este le delegare. Su cargo será docente.
CAPITULO III
Consejo Superior
Integración
A este último efecto, los Consejos Académicos de las Facultades que integran cada
Universidad elegirán de entre sus miembros un consejero superior titular y un suplente.
Atribuciones
CAPITULO IV
De los Decanos
Condiciones
Art. 52º. – Para ser designado Decano se requiere ciudadanía argentina, haber
cumplido treinta (30) años de edad y ser o haber sido profesor de una Universidad
Argentina.
Designación
Art. 53º. – Los Decanos serán designados por el Ministerio de Cultura y Educación a
propuesta del Rector. Durarán tres (3) años en sus funciones pudiendo renovarse su
designación por iguales períodos. Su cargo será docente.
Atribuciones
Vicedecano
Art. 55º. – El Vicedecano deberá reunir las condiciones del art. 52º y será designado
por el Rector a propuesta del Decano de su respectiva Facultad. Reemplazará al Decano en
la forma y por las causas que establezcan los estatutos debiendo analizar las funciones que
aquél le delegue. Su cargo será docente. Percibirá remuneración cuando su cargo sea
incluido en la distribución de cargos correspondiente al presupuesto de la respectiva
Universidad: caso contrario, solamente cuando sustituye al Decano por ausencia o licencia.
CAPITULO V
Integración
Elección
Art. 57º. – Los directores de docencia e investigación serán elegidos cada dos (2) años
de entre los profesores ordinarios de las áreas respectivas, por el voto obligatorio y secreto
de los profesores ordinarios que las integran. En esta votación los profesores titulares y
asociados tendrán doble voto y simple los adjuntos. El estatuto preverá la forma de elección
de los profesores integrantes del Consejo Académico para el caso de que no existiera
organización por áreas.
Atribuciones
CAPITULO VI
TITULO IV
Grados y títulos
Art. 60º. – Los títulos profesionales habilitantes y los grados académicos otorgados por
las Universidades Nacionales tendrán validez en todo el país. Acreditarán idoneidad y los
de carácter profesional habilitará para el ejercicio de las correspondientes profesiones sin
perjuicio del poder de policía que corresponde a las autoridades locales
Incumbencias
Art. 61º. – Las incumbencias correspondientes a los títulos profesionales otorgados por
las Universidades Nacionales serán reglamentadas por el Ministerio de Cultura y
Educación.
Doctorado
Art. 62º. – Las Universidades Nacionales determinarán las condiciones para obtener el
grado de doctor. Serán requisitos mínimos:
a) Poseer título universitario.
b) Aprobar cursos especiales que incluyan estudios de formación general y filosófica.
c) Aprobar un curso especial de análisis de la problemática nacional desde el enfoque
de la especialidad de que se trate.
d) Presentar y defender una tesis que deberá ser aprobada por el tribunal respectivo.
TITULO V
Régimen económico-financiero
Patrimonio
Ordenamiento presupuestario
Art. 65º. – El presupuesto podrá ser reajustado y ordenado por el Consejo Superior de
cada Universidad a nivel de partida principal, sin alterar los montos de los respectivos
programas. No podrán incrementarse las partidas para financiar gastos de personal, ni
disminuirse en monto total de las destinadas a obras públicas, sin autorización del Poder
Ejecutivo Nacional.
Fondo Universitario
Art. 66º. – El Fondo Universitario de cada Universidad se formará con los siguientes
recursos:
a) Las economías que realicen cada año de la contribución del Tesoro Nacional.
b) Contribuciones y subsidios.
c) Herencias, legados y donaciones.
d) Las rentas, frutos e intereses de su patrimonio.
e) Los beneficios que obtenga por sus publicaciones, concesiones, explotación de
patentes de invención, y demás derechos de propiedad intelectual que puedan
corresponderle por trabajos realizados en su seno.
f) Los derechos y tasas que perciba por los servicios que presta.
g) Los aranceles universitarios.
h) El producido de las ventas de bienes muebles e inmuebles, materiales o elementos
en desuso o rezago.
i) Cualquier otro recurso o beneficio provenientes, por cualquier título, de otras
personas e instituciones, las Universidades Nacionales deberán tomar los recaudos para no
comprometer, por el hecho de recibirlos, el cumplimiento de las finalidades que les son
propias.
Inversiones transitorias
Art. 68º. – Cuando las Universidades Nacionales recibieran contribuciones, subsidios,
herencias, legados o donaciones, para un destino determinado podrán invertir los fondos
recibidos en títulos del Estado Nacional durante el período que medie entre su percepción o
realización y su utilización.
Art. 69º. – Las Universidades Nacionales podrán emplear su Fondo Universitario para
cualquiera de sus finalidades excepto para sufragar gastos de personal.
Comunicación
El Consejo Superior de cada Universidad, una vez confeccionada la cuenta general del
ejercicio, podrá incorporar a sus presupuesto hasta el setenta y cinco por ciento (75%) de
las economías de ejecución que pasarán a integrar el Fondo Universitario y el veinticinco
por ciento (25%) restante podrá ser incorporado al ser aprobada dicha cuenta por la
Contaduría General de la Nación.
Contador fiscal
Exenciones impositivas
TITULO VI
Coordinación interuniversitaria
Política universitaria
Art. 73º. – Corresponde al Poder Ejecutivo Nacional la definición y orientación de la
política universitaria programando en general la actividad del sector mediante su
compatibilización con el planeamiento nacional, el sistema educativo y los planes de
investigación científica y tecnológica.
Consejo de Rectores
Disposiciones transitorias
Art. 76º. – El Ministerio de Cultura y Educación dentro del año de sancionada esta ley
procederá al reordenamiento del sistema universitario.
Régimen de transición
Art. 77º. – La transición al régimen establecido por esta ley se ajustará a las siguientes
normas:
a) Durante el proceso de transición el Ministerio de Cultura y Educación ejercerá las
atribuciones de la Asamblea Universitaria; los Rectores, las que le son propias y las del
Consejo Superior y los Decanos las que le son propias y las del Consejo Académico.
b) Dentro de los treinta (30) días de la vigencia de esta ley se constituirán en cada
Universidad un Consejo Asesor integrado por los Decanos y en cada Facultad un Consejo
Asesor de la misma integrado por profesores de reconocido prestigio académico designados
por el Rector a propuesta del Decano.
Dichos Consejos asesorarán al Rector y a los Decanos en las materias que son de
competencia del Consejo Superior y del Consejo Académico respectivamente.
c) Sin perjuicio de lo establecido en el inc. a), dentro de los ciento veinte (120) días
de la vigencia de esta ley los Rectores elevarán al Ministerio de Cultura y Educación el
proyecto de estatuto de sus respectivas Universidades para su aprobación por el Poder
Ejecutivo nacional.
d) Dentro de los ciento veinte (120) días de aprobados los estatutos las autoridades
universitarias comenzarán el proceso de designar profesores ordinarios de conformidad a
lo prescripto en el art. 23. El plan de concursos y la integración de los jurados serán
aprobados por los Rectores.
Normalización
Art. 78º. – Cuando en una Universidad la mayoría de sus Facultades tenga cubierto por
concurso o confirmación el sesenta por ciento (60%) de los cargos de profesores ordinarios,
el Poder Ejecutivo Nacional dispondrá la constitución de la Asamblea y de los Consejos
Superior y Académico.
Art. 79º. – La confirmación dispuesta por aplicación de la ley 21.536 será tenida como
segunda designación a los efectos de los dispuesto en el art. 24º de la presente ley.
Los profesores ordinarios que no hayan sido confirmados en virtud de aquel régimen
cesarán en pleno derecho en sus funciones al entrar en vigencia esta ley.
Art. 2º – Los rectores normalizadores tendrán las atribuciones que otorga el art. 48º de
la ley 22.207.
Art. 10º – Elimínanse todas las cláusulas discriminatorias y proscriptivas, de todo tipo,
para la provisión de cargos docentes y no docentes.
Artículo 2°- Se restablece la vigencia de los estatutos que regían en las universidades
nacionales al 29 de julio de 1966, en tanto sus disposiciones no se opongan a la presente
ley.
Artículo 4°- El Poder Ejecutivo podrá intervenir las universidades nacionales durante el
tiempo que determine la presente ley y en los siguientes casos:
j) Ejercer las demás atribuciones que, de acuerdo con esta ley, le asigne el estatuto.
c) La suspensión o separación del rector, vicerector o de los decanos por las causas
previstas en el respectivo estatuto, en sesión especial convocada al efecto y por la
mayoría de dos tercios de votos;
h) Designar, a propuesta del decano normalizador respectivo, a los miembros del tribunal
académico y a los jurados para los concursos;
i) Aprobar, a propuesta del rector, el presupuesto de la universidad, sus ajustes y
modificaciones, en los casos que corresponda, para su posterior elevación al Poder
Ejecutivo Nacional;
Artículo 8°- Cada Universidad asegurará la participación de los docentes en los Consejos
Superiores Provisorios, determinando su número y forma de elección por los respectivos
claustros. La incorporación de los docentes designados se hará dentro de los sesenta (60)
días de promulgada esta ley.
Artículo 9°- Los concursos sustanciados durante el gobierno de facto podrán ser
impugnados a pedido de parte interesada dentro de los sesenta (60) días de promulgada la
presente ley
Artículo 10°- Dentro de los sesenta (60) días de promulgada la presente ley, cada
universidad asegurará la existencia de un régimen de reincorporación que contemple la
situación del personal docente y no docente cesanteado, prescindido u obligado a renunciar
por motivos políticos; gremiales o conexos, reconociendo las categorías al momento de las
cesantías y computándosele la antigüedad hasta el momento de su reincorporación, que no
deberá exceder los noventa (90) días de promulgada la presente ley
...................................................................................................................................................
Por ello;
EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:
Artículo 1°- Delégase en los señores ministros, secretarios ministeriales y secretarios y jefe
de la Casa Militar de la Presidencia de la Nación, la facultad para resolver sobre los asuntos
de su jurisdicción relativos a:
Artículo 2°- Delégase la facultad para resolver sobre los siguientes asuntos de sus
respectivas competencias:
.......................................................................................................................................
10) Las atribuciones reservadas al Poder Ejecutivo por la Ley N° 17. 604 (de Universidades
Privadas) y su reglamentación.
11) Aprobación de las tarifas mínimas de los aranceles de enseñanza correspondientes a los
institutos privados incorporados a la enseñanza oficial (artículo 22º de la Ley N°
13.047).
14) Los nombramientos, promociones, remociones y convocatoria del personal superior del
Servicio Penitenciario Federal (artículo 102º, inciso a), de la Ley N° 20.416).
17) Actualización del monto del capital social establecido por el artículo 299º, inciso 2°, de
la Ley N° 19.550, sustituido por la Ley N° 21.304.
20) El nombramiento de los Inspectores de Protocolos a que alude el artículo 54º del
Decreto N° 26.655/51.
22) La creación, modificación o supresión de los aranceles por servicios que prestan los
Registros Nacionales de la Propiedad del Automotor y de Créditos Prendarios y del
porcentaje de retribución de los encargados como asimismo la determinación de los
gastos que deberán afrontar obligatoriamente estos últimos.
.......................................................................................................................................
Artículo 9°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial y
archívese.
CONSIDERANDO:
Que una vez que las Universidades Nacionales recobren el ejercicio pleno de su autonomía
universitaria se hará menester contar con otro mecanismo de coordinación del que hasta el
momento existe.
Que todo ello deberá hacerse sin menoscabo alguno de la autonomía universitaria y del
dictado de la ley definitiva sobre universidades por el Honorable Congreso Nacional.
Que es necesario que las universidades puedan coordinar acciones para sus relaciones
internacionales.
Que el organismo a crearse tendrá las atribuciones y el poder de decisión que las propias
Universidades resuelvan conferirle en el estatuto a elaborarse.
Por ello,
ELPRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:
Artículo 1°- Créase el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) al que podrán adherir
libremente las Universidades Nacionales en ejercicio de su autonomía.
En el caso de las relaciones con el extranjero se deberán respetar las normas en vigencia
para nuestras relaciones internacionales.
Artículo 8°- La reunión a la que se refiere el artículo 6° será convocada por el Ministro de
Educación y Justicia de la Nación cuando las Universidades Nacionales tengan autoridades
elegidas por los claustros normalizados según la Ley N° 23.068.
Artículo 10°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial
y archívese
Artículo 1°- Las universidades nacionales ajustarán su régimen económico financiero a las
disposiciones de esta ley, hasta tanto se dicte la correspondiente ley universitaria.
Del patrimonio
a) Los que actualmente le pertenecen y, los que adquiera en el futuro por cualquier título;
A los fines del presente artículo, la universidad comprende el Rectorado, las Facultades o
Departamentos, Escuelas, Institutos y demás establecimientos o instituciones que de ella
dependan.
De los recursos
Artículo 4°- Cuando se trate de herencias, legados, donaciones o cualquier otra liberalidad
en favor de la universidad, de sus unidades académicas o de otros organismos que la
integran, antes de ser aceptadas por el Consejo Superior debe recabarse la opinión del
destinatario final y analizarse exhaustivamente las condiciones o cargos que puedan
imponer los testadores y benefactores en cuanto a las conveniencias o desventajas que
pueda ocasionar la recepción del beneficio de acuerdo con los fines de los respectivos
estatutos universitarios. El Consejo Superior de cada universidad será la instancia última de
decisión en lo que atañe a la aceptación o rechazo del beneficio.
Artículo 5°- Cada universidad nacional constituirá su fondo universitario con el aporte de:
a) Las economías que realice cada año de las contribuciones del Tesoro Nacional;
b) Con el producido de los recursos enumerados en los incisos c), d), e), f), g) y h) del
artículo 3º de esta ley
Del presupuesto
Artículo 8°- Es facultad del Consejo Superior de cada universidad nacional incrementar y
reajustar el presupuesto respectivo, mediante la distribución de su fondo universitario, para
cualquiera de sus finalidades, excepto para sufragar gastos en personal permanente.
Tampoco podrá asumir compromisos que generen erogaciones permanentes o aumentos
automáticos.
El Consejo Superior, una vez confeccionada la cuenta general del ejercicio, podrá
incorporar a su presupuesto hasta el setenta y cinco por ciento (75%) de los recursos que
componen el fondo universitario y el veinticinco por ciento (25%) restante podrá ser
incorporado, al ser aprobada dicha cuenta por la Contaduría General de la Nación. La
ordenanza o resolución respectiva será suficiente para que el organismo pueda afectar los
créditos aprobados y solicitar los fondos correspondientes.
Artículo 9°- Cuando el Consejo Superior de cada universidad nacional decida el reajuste u
ordenamiento de los recursos presupuestarios de acuerdo con lo previsto en el artículo 7° o
la distribución o ampliación del fondo universitario de acuerdo con lo establecido en el
artículo 8°, deberá comunicarlo a los Ministerios de Educación y Justicia, y de Economía
(Secretaría de Hacienda) y al Tribunal de Cuentas de la Nación, dentro de los quince (15)
días del dictado de la medida.
Artículo 10°- El consejo Superior de cada universidad nacional podrá reajustar y/o
reordenar la respectiva planta de personal en cuanto la medida responda a necesidades
fundadas en la programación académica, de investigación, extensión y/o administrativas,
siempre que no se altere el monto total del crédito presupuestario asignado para su
financiamiento ni se afecten los derechos laborales del personal.
De la organización
De las contrataciones
Artículo 14°- Toda compra o venta que realicen las universidades nacionales así como todo
contrato sobre locaciones, arrendamientos, trabajos o suministros, se hará mediante
licitación pública de acuerdo con lo que establezca la presente ley y, supletoriamente, la
Ley de Contabilidad de la Nación.
El Consejo Superior de cada universidad nacional decidirá en qué casos son necesarias
tasaciones para comprar o vender. Las tasaciones serán requeridas por las universidades a
un tasador oficial.
b) Concurso de precios: las cotizaciones deberán ser presentadas por escrito pudiendo ser
simultáneas o no. Se pedirán a no menos de tres (3) proveedores del rubro a contratar.
Podrá invitarse a mejorar precios a todos los oferentes si el Rector o Presidente, en su caso,
lo considerare conveniente a los intereses de la respectiva universidad.
Se podrá recurrir a concurso de precios cuando el valor no exceda de quince mil australes
(A15.000) y, además cuando, se trate de los siguientes casos:
c) Compra directa: cuando el valor fijado de la operación no exceda de los mil quinientos
australes ($ l.500) y además en los siguientes casos:
Los limites establecidos en el presente artículo a los valores expresados en australes serán
actualizados por el Consejo Superior, en función del índice de precios al por mayor nivel
general o el que lo reemplace en el futuro que determine el organismo técnico nacional
correspondiente.
Artículo 16°- En los casos en que se considere conveniente se podrán adquirir bienes
usados, previo dictamen de una comisión técnica designada al efecto por el Rector o
Presidente en su caso.
a) Pago anticipado;
b) Anticipos a cuenta;
c) Contra entrega;
Artículo 18°- Las universidades nacionales podrán adjudicar sus contrataciones a cualquier
proveedor aún cuando el mismo no estuviese inscripto en el Registro de Proveedores del
Estado. En este último caso y cuando la contratación exceda el monto establecido para la
compra directa, la universidad requerirá una garantía en efectivo del diez por ciento (10%)
del monto adjudicado, aval bancario, o certificación de inscripción en cualquier registro
oficial de proveedores nacionales, provinciales o municipales.
Artículo 21°- Los Rectores o Consejos Superiores podrán solicitar al Poder Ejecutivo la
reconsideración de las observaciones de aquellos actos que hayan sido observados por el
Tribunal de Cuentas de la Nación. La solicitud deberá formularse, con las
fundamentaciones del caso, dentro de los treinta (30) días de su expresa notificación.
De los subsidios
Artículo 22°- Los Consejos Superiores tendrán competencia exclusiva para atender lo
referente a la iniciación, tramitación y otorgamiento de los subsidios y subvenciones que se
sufraguen con fondos del presupuesto de las universidades destinados a esos fines.
El beneficio que se concede por el presente artículo queda sujeto a la condición que las
mercaderías, cuya exención del pago de gravámenes se acuerda, sean afectadas
exclusivamente al destino invocado no pudiéndose transferir su propiedad, posesión ni
tenencia hasta transcurrido un lapso no menor de tres (3) años a contar desde el primero de
enero del año siguiente a aquel en que se efectuó la importación para consumo;
circunstancias que deberán acreditarse ante la Administración Nacional de Aduanas, cada
vez que esta lo requiera.
Artículo 26°- El Poder Ejecutivo invitará a los gobiernos de las provincias, del Territorio
Nacional de la Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, de la Municipalidad de
la Ciudad de Buenos Aires y las demás municipalidades para que propicien ante las
legislaturas y consejos respectivos, leyes y ordenanzas de análogas características a las
previstas en esta ley.
Artículo 1°- Sustitúyese el artículo 1° de la Ley de Ministerios (texto ordenado 1983), por
el siguiente:
“Artículo 1°- El despacho de los negocios de la Nación estará a cargo de los siguientes
ministerios:
- Del Interior
- De Defensa
- De Justicia
- De Cultura y Educación
Artículo 2°- Sustitúyese el artículo 7° de la Ley de Ministerios (texto ordenado 1983 ) por
el siguiente:
“Artículo 7°- Los actos del Poder Ejecutivo serán refrendados por el Ministerio que sea
competente en razón de la materia que se trate. Cuando esta sea atribuible a más de un
ministro, el Poder Ejecutivo determinará la forma y el plazo en que cada uno de ellos
tomará intervención en lo que hace a la parte o partes del acto relativos a su competencia.
En caso de dudas acerca del Ministerio a que corresponda un asunto, este será tramitado por
el que designare el Presidente de la Nación.
Los originados en un Ministerio, pero que tengan relación con las funciones específicas
atribuidas por esta ley a otro, son de competencia de este último.
En caso de ausencia transitoria, por cualquier motivo o vacancia, los ministros serán
reemplazados en la forma que determine el Poder Ejecutivo”.
Artículo 3°- Derógase el artículo 8° de la Ley de Ministerios (texto ordenado 1983).
Artículo 4°- Sustitúyese el artículo 10° de la Ley de Ministerios (texto ordenado 1983), por
el siguiente:
“Artículo 10°- Las tareas necesarias para posibilitar la actividad del Presidente de la Nación
serán atendidas por las siguientes secretarías presidenciales:
1. General
2. Legal y Técnica
3. de Planificación
4. de Inteligencia de Estado
5. de Medios de Comunicación
6. de la Función Pública
7. de Ciencia y Tecnología
.......................................................................................................................................
.............
Artículo 8°- Sustitúyese el artículo 22 de la Ley de Ministerios (texto ordenada 1983 ), por
el siguiente:
5. Entender en las relaciones con los institutos del sector privado y establecer las normas
de supervisión y el reconocimiento de su enseñanza cuando corresponda;
6. Entender en la fiscalización de las actividades culturales y educativas realizadas por los
institutos estatales de otras jurisdicciones o dependencias, en cuanto se relacionen con
la validez nacional de estudios y títulos;
......................................................................................................................................
Artículo 13°- Facúltase al Poder Ejecutivo a ordenar la disposiciones de la Ley de
Ministerios (texto ordenado 1983) y sus modificatorias incluidas las que se introducen por
la presente.
...................................................................................................................................................
CONSIDERANDO:
Que existen Universidades Nacionales que por intermedio del Consejo Superior de las
mismas se excluyen del ámbito de aplicación del artículo 94º del Reglamento aprobado por
Decreto N° 1.759 del 3 de abril de 1972, que importa la imposibilidad de interponer recurso
de alzada según lo previsto en el artículo citado, privando al administrado del ejercicio del
derecho concedido por la Ley de Procedimientos Administrativos y su reglamentación.
Que tal control, limitado a verificar la legitimidad de los actos, y previo agotamiento de la
cuestión ante la propia Universidad, no lesiona la necesaria autonomía científica y docente
que debe asegurarse a las Casas de Estudios en resguardo de la libertad de cátedra y de su
nivel académico.
Que la presente medida se dicta en uso de las atribuciones conferidas por el artículo 86º,
inciso 1° de la CONSTITUCION NACIONAL.
Por ello,
EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:
Artículo 2°- Déjase sin efecto toda disposición que se oponga al presente Decreto.
Artículo 3°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial y
archívese.
VISTO las leyes Nros 23.696 y 23.697, de Reforma del Estado y de Emergencia
Económica, respectivamente, y los Decretos Nros 435/90, 612/90, 1.757/90, 1.930/90 y
2.476/90, y
CONSIDERANDO:
Que por el Protocolo de Concertación Universitaria, las casas estatales de altos estudios
asumieron el compromiso de racionalizar su organización, optimizando el uso de sus
recursos y estableciendo mecanismos de evaluación de sus rendimientos para mejorar la
calidad del sistema.
Que las Universidades por sus múltiples actividades, y en particular por su quehacer
científico y de investigación, deben considerarse agentes esenciales de cambio y de
desarrollo económico, social y cultural.
Que las metas de racionalización fijadas por el PODER EJECUTIVO NACIONAL deben
contemplar las especiales particularidades de la realidad del Sistema Universitario
Nacional, sus objetivos y acciones.
Que resulta necesario y conveniente trabajar de consuno para lograr estos objetivos.
Que la presente medida se dicta en uso de las atribuciones conferidas por el Art. 86º, Inciso
1° de la CONSTITUCION NACIONAL.
Por ello,
EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:
Artículo 1°- Créase una Comisión de Concertación que tendrá como misión analizar y
formular propuestas tendientes a concretar la reforma estructural de las Universidades
Estatales y sus organismos dependientes, en orden a las metas planteadas por el PODER
EJECUTIVO NACIONAL en materia de reforma administrativa del Estado, teniendo en
cuenta los objetivos propuestos en el Protocolo de Concertación Universitaria.
Artículo 2°- La Comisión creada por el Artículo anterior será coordinada por el
Subsecretario de coordinación Educacional, Científica y Cultural del MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION e integrada por los rectores de las Universidades Nacionales
de Buenos Aires, Cuyo. Litoral y Luján, en representación de todas las Universidades
Nacionales según propuesta del Consejo Interuniversitario Nacional, el Director Nacional
de Asuntos Universitarios en representación de la SUBSECRETARÍA DE EDUCACION,
DOS (2) representantes del MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS
PUBLICOS Y UN (1) representante de la SECRETARÍA DE LA FUNCION PUBLICA de
la PRESIDENCIA DE LA NACION, con nivel no inferior a Director General o Nacional.
Artículo 3°- Establécese un plazo de TREINTA (30) días corridos, contados a partir de la
fecha de publicación, del presente Decreto, para la constitución de la Comisión creada por
el Artículo 1°
Artículo 4°- Otórgase a la citada Comisión un plazo máximo de NOVENTA (90) días
unidos a partir de su constitución, para elevar al PODER EJECUTIVO NACIONAL, a
través del MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, sus conclusiones y propuestas.
Artículo 5°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial y
archívese.
CAPITULO I – De la transferencia
Art. 3º – Las jurisdicciones receptoras, con el apoyo sostenido del Poder Ejecutivo
Nacional, deberán cumplir todos los derechos y obligaciones vigentes en materia educativa.
El Estado Nacional garantizará que los servicios transferidos sean prestados con óptima
cobertura cuantitativa, alta calidad pedagógica y equidad en todas las jurisdicciones.
Art. 4º – Las transferencias que se convengan se efectuarán sin otro cargo que los que
establece la presente ley e importarán la sucesión a título universal de los derechos y
obligaciones.
Art. 6º – No serán transferidos los juicios pendientes ni las deudas que por cualquier
causa hubiera contraído la Nación a la fecha de la transferencia.
Art. 10º. – A los efectos previsionales, las jurisdicciones receptoras reconocerán los
servicios prestados por el personal en el orden nacional. Los docentes transferidos que no
reúnan los requisitos exigidos en la jurisdicción receptora, podrán continuar efectuando
aportes al sistema nacional de previsión; las jurisdicciones serán agentes de retención de los
mencionados aportes.
Art. 11º. – El personal docente transferido continuará en la Caja Complementaria de
Previsión para la Actividad Docente; el gobierno de la jurisdicción receptora actuará como
agente de retención de los aportes.
Art. 13º. – Los concursos de docentes a ser transferidos, como así también los
procedimientos de traslados, titularizaciones y jubilaciones, pendientes de resolución que
pudieren existir al momento de promulgarse esta ley, deberán ser resueltos según la
normativa de origen con el alcance y en tiempos y modos que establezcan los respectivos
convenios bilaterales.
Art. 14º. – A partir del 1 de enero de 1992 y hasta tanto se modifique la ley 23.548 la
Secretaría de Hacienda de la Nación retendrá de, la participación correspondiente a las
provincias en el régimen de la citada ley, previamente a la distribución secundaria un
importe equivalente al monto total que se incluye en planilla anexa 1 A, con detalle para
cada jurisdicción, con destino al financiamiento de los servicios educativos que se
transfieren por la presente ley y los correspondientes al costo de servicios de Hospitales e
Institutos Nacionales, Políticas Sociales Comunitarias y Programa Social Nutricional a
transferir a las provincias según se convenga oportunamente.
Art. 18º. – Las obras públicas que se encuentran en ejecución en los servicios a
transferir, serán continuadas y finalizadas por la Nación. A su término dichos inmuebles
serán transferidos a la jurisdicción en los términos de la presente ley.
Art. 19º. – El Poder Ejecutivo Nacional asignará un monto global para reparaciones de
los edificios transferidos cuyo estado de conservación o antigüedad afecte el
desenvolvimiento de los servicios educativos. Los montos serán acordados en los
respectivos convenios bilaterales.
Art. 23º. – Los servicios educativos de gestión privada que se transfieren quedan
garantizados para que se sigan prestando con respeto de los principios de la libertad de
enseñanza y los derechos emergentes de la normativa nacional sobre la materia.
Consecuentemente, podrán mantener sus características doctrinarias, modalidades
curriculares y pedagógicas y el estilo ético formativo propios, en el ámbito de las
jurisdicciones receptoras.
Art. 25º. – Cuando por razones operativas alguna provincia lo requiera expresamente
el Poder Ejecutivo Nacional podrá atender por cuenta y orden de la misma los gastos
emergentes de los servicios transferidos según el art. 1º.
CONSIDERANDO:
Que dicho texto ordenado fue objeto de modificaciones a través de las Leyes N° 23.317 y
23.930.
Que por lo tanto se considera necesario elaborar un nuevo ordenamiento tomando como
base el que se encuentra vigente.
Que la Ley N° 20.004 en su artículo 1° faculta al Poder Ejecutivo Nacional para llevar a
cabo dicho cometido.
Por ello,
EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:
Artículo 1°- Sustitúyase el texto ordenado de la Ley de Ministerios (Leyes Nros. 22. 520,
22.641 y 23.023) aprobado por el Decreto N° 132 del 10 de diciembre de 1983, por el que,
como anexo I, integra el presente.
Artículo 2°- El ordenamiento que conforma el citado Anexo I, elaborado según el índice
que figura agregado como Anexo II, se denominará: “Ley de Ministerios - t.o. 1992 -“.
Artículo 3°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial y
archívese.
FEDERAL DE EDUCACION
Sancionada: abril 14 de 1993
Promulgada: abril 29 de 1993
TÍTULO I
Artículo 4°- Las acciones educativas son responsabilidad de la familia, como agente
natural y primario de la educación, del Estado nacional como responsable principal, de las
provincias, los municipios, la Iglesia Católica, las demás confesiones religiosas
oficialmente reconocidas y las organizaciones sociales.
TÍTULO II
Principios Generales
Capítulo I
De la política educativa
Capítulo II
Artículo 7°- El sistema educativo está integrado por los servicios educativos de las
jurisdicciones nacional, provincial y municipal, que incluyen los de las entidades de gestión
privada reconocidas.
Artículo 8°- El sistema educativo asegurará a todos los habitantes del país el ejercicio
efectivo de su derecho a aprender, mediante la igualdad de oportunidades y posibilidades,
sin discriminación alguna.
TÍTULO III
Capítulo I
Descripción general
Artículo 10°- La estructura del sistema educativo, que será implementada en forma gradual
y progresiva, estará integrada por:
Artículo 11°- El sistema educativo comprende, también, otros regímenes especiales que
tienen por finalidad atender las necesidades que no pudieran ser satisfechas por la
estructura básica, y que exijan ofertas específicas diferenciadas en función de las
particularidades o necesidades del educando o del medio.
Artículo 12°- Los niveles, ciclos y regímenes especiales que integren la estructura del
sistema educativo deben articularse, a fin de profundizar los objetivos, facilitar el pasaje y
continuidad, y asegurar la movilidad horizontal y vertical de los alumnos/as.
Capitulo V
Educación superior
a) Preparar y capacitar para un eficaz desempeño en cada uno de los niveles del sistema
educacional y en las modalidades mencionadas posteriormente en esta ley
Artículo 20°- Los institutos de formación técnica tendrán como objetivo el de brindar
formación profesional y reconversión permanente en las diferentes áreas del saber técnico y
práctico de acuerdo con los intereses de los alumnos y la actual y potencial estructura
ocupacional.
Capítulo VI
Educación cuaternaria
TÍTULO VI
Gratuidad y asistencialidad
TÍTULO IX
A ese fin deberá convocar junto con el Consejo Federal de Cultura y Educación a
especialistas de reconocida idoneidad e independencia de criterio para desarrollar las
investigaciones pertinentes por medio de técnicas objetivas aceptadas y actualizadas.
Gobierno y administración
Capítulo I
Artículo 53°- El Poder Ejecutivo Nacional, a través del ministerio específico, deberá:
o) Elaborar una memoria anual donde consten los resultados de la evaluación del sistema
educativo, la que será enviada al Congreso de la Nación.
Capítulo II
Artículo 55°- La misión del Consejo Federal de Cultura y Educación es unificar criterios
entre las jurisdicciones, cooperar en la consolidación de la identidad nacional y en que a
todos los habitantes del país se les garantice el derecho constitucional de enseñar y aprender
en forma igualitaria y equitativa.
Artículo 56°- El Consejo Federal de Cultura y Educación tiene las funciones establecidas
por las normas de su constitución y cumplirá además las siguientes:
a) La Asamblea Federal, órgano superior del Consejo, estará integrada por el ministro del
área del Poder Ejecutivo nacional como presidente nato, y por los ministros o
responsables del Area Educativa de las provincias y de la Municipalidad de la Ciudad
de Buenos Aires y el representante del Consejo Interuniversitario Nacional.
TÍTULO XI
Financiamiento
Artículo 60°- La inversión en el sistema educativo por parte del Estado es prioritaria y se
atenderá con los recursos que determinen los presupuestos nacional, provinciales y de la
Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires, según corresponda.
TÍTULO XII
b) Las modalidades del Ciclo Polimodal atendiendo a las demandas del campo laboral, las
prioridades comunitarias, regionales y nacionales y la necesaria articulación con la
educación superior.
Artículo 67°- El presupuesto de la administración pública nacional 1993 con destino a las
Universidades Estatales en su conjunto, no será inferior al Presupuesto 1992, más la suma
anualizada de los incrementos del mencionado año.
Artículo 68°- Las disposiciones de esta ley son aplicables a todos los niveles y regímenes
especiales educativos con excepción de las establecidas en los artículos 48º, 53º, incisos: b),
e), 1), k), ll), 54ºy 56º, inciso a) en relación con las universidades, aspectos que se rigen por
la legislación especifica o la que la reemplace.
Artículo 70°- Deróganse todas las disposiciones que se opongan a la presente ley
VISTO la ley de Ministerios (t.o. 1992), la ley N°24.049, los Decretos Nros. 1.691/91,
793/92, 2.730/92, y lo propuesto por el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, y
CONSIDERANDO:
...........................................................................................................................
.............
Que la presente medida se dicta en virtud de las facultades otorgadas por el Artículo 86º,
inciso 1) de la Constitución Nacional y el Artículo 7° de la Ley N° 24.191.
Por ello,
EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:
...........................................................................................................................
.............
...........................................................................................................................
.............
Artículo 11°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro oficial y
archívese.
CONSIDERANDO:
Que por el artículo 4° de esa norma se creó en el ámbito del MINISTERIO DE CULTURA
Y EDUCACION el CONSEJO NACIONAL DE EDUCACION SUPERIOR con la
finalidad de asesorar al Ministro en la determinación de las orientaciones adecuadas para el
desarrollo de niveles de excelencia en la educación superior.
Que resulta necesario dictar las normas básicas que permitan articular la integración del
nuevo organismo, su organización y funciones.
Que para llevar a cabo los propósitos enunciados y hasta tanto se establezca su
estructuración, el consejo estará integrado por personalidades con reconocida trayectoria
pública en las áreas académicas, científicas, productivas, tecnológicas y culturales.
Que a los fines de que el cuerpo cuente con la mayor apoyatura y nivel de información debe
existir una fluida vinculación con la SECRETARÍA DE POLITICAS UNIVERSITARIAS.
Que la presente medida se dicta en virtud de las facultades otorgadas por el Artículo 86,
inciso 1°) de la Constitución Nacional.
Por ello,
EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:
Artículo 3°- El Consejo estará integrado con personas de destacada y reconocida actuación
en las áreas académicas, científicas, productivas, tecnológicas y culturales, quienes serán
designados por el Ministro de Cultura y Educación con carácter ad-honorem.
Artículo 4°- El Consejo procurará producir sus dictámenes por consenso. Cuando este no
se logre deberá consignar todas las opiniones disidentes con los fundamentos que las
avalen.
Artículo 6°- Los gastos que demande el funcionamiento del Consejo serán atendidos con
cargo a los créditos correspondientes al presupuesto de la SECRETARÍA DE POLITICAS
UNIVERSITARIAS del MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION.
CONSIDERANDO:
Que resulta necesario considerar la situación salarial del personal docente y auxiliar de la
docencia que se desempeña con dedicación semiexclusiva y simple y la del personal
comprendido en el escalafón para el personal no docente universitario (Decreto N° 2..213
del 30 de diciembre de 1987) en las Universidades Nacionales, teniendo en cuenta que han
quedado relegados frente a otras áreas de la Administración Pública.
Que los aumentos deben tender a la recomposición del nomenclador salarial del personal
docente, de modo que las remuneraciones según tipo de dedicación guarden una cierta
proporcionalidad.
Que dentro de los niveles presupuestarios fijados por la Ley N° 24.191 las Universidades
Nacionales estarían en condiciones de financiar la mejora propuesta durante lo que resta del
presente ejercicio.
Que el cumplimiento de tal situación posibilita que las sumas necesarias para cubrir las
diferencias del costo anualizado de la medida propuesta, se incorporen, en forma
proporcional a los montos otorgados en el proyecto de la Ley de Presupuesto General de la
Administración Nacional para el ejercicio 1994.
Que la presente medida encuadra en las facultades conferidas por el artículo 86º, inciso 1°),
de la Constitución Nacional.
Por ello,
EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:
Artículo 1°- Establécese, a partir del 1º de agosto de 1993 los importes máximos del
adicional mensual remunerativo no bonificables consignados en el Anexo I del presente
decreto, aplicable a los cargos docentes y auxiliares de la docencia, que se desempeñan con
dedicación semiexclusiva y dedicación simple en las Universidades Nacionales, siempre
que el personal involucrado reúna las condiciones exigidas en el Anexo II, que forman
parte del presente decreto.
Artículo 3°- Lo dispuesto en los artículos precedentes podrá ser otorgado por los Consejos
Superiores de las Universidades Nacionales sin alterar el total del aporte del Tesoro
Nacional previsto en la Ley N° 24.191 de Presupuesto de la Administración Nacional.
Artículo 5°- Los beneficios otorgados en el marco del decreto N° 1.215/92, podrán ser
adecuados en función de los aumentos autorizados por los artículos 1° y 2° del presente
decreto.
Artículo 7°- A los efectos de que se concrete lo dispuesto en el artículo anterior las
Universidades deberán efectivizar los pagos de los adicionales respectivos durante el
período agosto/diciembre de 1993 y la parte proporcional del sueldo anual complementario.
La SINDICATURA GENERAL DE LA NACION será el organismo encargado de verificar
lo dispuesto en el presente artículo.
Artículo 8°- Las resoluciones dictadas por los Consejos Superiores, derivadas de las
disposiciones de los artículos 1° y 2° del presente decreto, serán comunicadas por las
Universidades Nacionales al MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION.
Artículo 10°- Las remuneraciones resultantes de la aplicación del presente decreto serán
objeto de los aportes y contribuciones previstos por las leyes previsionales y asistenciales y
de las retenciones por cuotas sindicales ordinarias. En caso de aportes y contribuciones a
obras sociales y entidades similares, los mismos se limitarán a los previstos en la Ley de
obras sociales N° 23.660.
Artículo 11°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial
y archívese.
Adicional Adicional
$ $
A. CONDICIONES NECESARIAS
A.1. Que el docente se encuadre dentro de las normas del Régimen Básico de
Incompatibilidades que adopta el PODER EJECUTIVO NACIONAL para los
docentes de Universidades Nacionales.
A.2. Que el docente esté frente a alumnos en, por lo menos, UNA (1) asignatura de
duración cuatrimestral o anual.
Asimilase al concepto "frente a alumnos", la jefatura o dirección de grupos de
profesores y auxiliares.
A.3. Que los alumnos que se desempeñen como ayudantes deberán haber aprobado la
materia en que se desempeñen como auxiliar con una calificación mayor de SEIS
(6) y haber aprobado al menos DOS (2) materias en el cuatrimestre anterior al
ejercicio de la ayudantía.
B. CONDICIONES SUFICIENTES
Opción (a): Estar frente a alumnos en DOS (2) cursos, si son cuatrimestrales, o en
UNA (1) asignatura en el caso de que la misma sea de duración anual.
Opción (b): Estar frente a los alumnos en UNA (1) asignatura de duración
cuatrimestral siempre que en el otro cuatrimestre el docente esté afectado
a otra actividad docente o proyecto de investigación, creación artística o
extensión aprobado por el órgano que corresponda de la Universidad y
reconocido por las secretarías Académica, de Investigación o Extensión
de la Universidad, según corresponda.
Opción (a): Estar frente a alumnos en DOS (2) asignaturas o cursos en cada
cuatrimestre o en UNA (1) asignatura en cada uno de ellos con un total de
DIEZ (10) o más horas semanales teóricas y/o frente a los alumnos.
Opción (b): Estar frente a los alumnos en UNA (1) asignatura en cada cuatrimestre y
adicionalmente estar afectados por una equivalencia anual a DIEZ (10)
horas semanales a otras actividades docentes o proyecto de investigación,
creación artística o extensión, aprobado por los órganos de la Universidad
que correspondan y reconocido por las secretarías Académica, de
Investigación o Extensión de la Universidad, según corresponda.
DECRETO N° 2282/93
CONSIDERANDO:
Que ello distorsiona la coordinación del sistema Universitario, generando en muchos casos
superposiciones innecesarias de la oferta educativa en una misma jurisdicción.
Que es necesario disponer mecanismos que permitan coordinar en este aspecto tales
iniciativas a fin de que respondan a una planificación adecuada a las reales necesidades del
país.
Por ello,
EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:
Artículo 1°- Establécese que la creación por parte de las Universidades Nacionales de
nuevas sedes o unidades académicas equivalentes deberá contar con dictamen favorable del
CONSEJO INTERUNIVERSITARIO NACIONAL.
CONSIDERANDO:
Que para ello se hace necesario establecer normas reglamentarias más precisas, que
permitan resolver las solicitudes de autorización de nuevos establecimientos universitarios
de gestión privada sobre la base de la calidad académica y la relevancia que caracterice a
sus propuestas, protegiendo de este modo la fe pública que la sociedad deposita en las
instituciones universitarias.
Que además de los requisitos de nivel y pertinencia que deben caracterizar al proyecto
institucional inicial, se hace necesario que los establecimientos cuyo funcionamiento se
autorice provisoriamente, presenten un informe anual donde se haga constar los avances
realizados con respecto al plan de desarrollo aprobado, el cual debe ser evaluado por el
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION.
Que para una adecuada consideración de los pedidos de autorización provisoria y definitiva
se hace conveniente prever la constitución, en el ámbito del MINISTERIO DE CULTURA
Y EDUCACION, de una COMISION CONSULTIVA que actuará con independencia de
criterio y que deberá integrarse con personas que posean antecedentes destacados en
actividades científicas, académicas o de conducción universitaria, ello sin perjuicio de la
intervención que legalmente le cabe al CONSEJO DE RECTORES DE LAS
UNIVERSIDADES PRIVADAS.
Que es también conveniente distinguir más nítidamente entre las exigencias que se imponen
a las instituciones nuevas, que recién comienzan su experiencia como establecimientos
universitarios formalmente autorizados a operar como tales, y las que regulan el
funcionamiento de instituciones ya consolidadas, especialmente aquellas que cuentan con
autorización definitiva y han sido liberadas de la Prueba Final de Capacidad Profesional, lo
que necesariamente implica más de VEINTE (20) años de funcionamiento.
Que para estas últimas resulta conveniente ampliar su capacidad de decisión, eximiéndolas
de los trámites de autorización previa, a excepción de los relativos a la creación de nuevas
sedes, validez nacional de títulos y fijación de incumbencias.
Que ese mayor grado de autonomía para las instituciones con autorización definitiva, debe
ir acompañado de una correlativa obligación de rendir cuentas periódicamente de los
resultados alcanzados en el campo de la enseñanza y la investigación científica, a cuyo fin
se prevé la puesta en marcha de procedimientos de autoevaluación y evaluación externa, lo
mismo que la presentación de planes quinquenales de desarrollo que orienten su accionar y
faciliten esa evaluación.
Por ello;
EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:
CAPITULO I
Artículo 2°- Delégase en el señor Ministro de Cultura y Educación todas las atribuciones
reservadas al PODÉR EJECUTIVO NACIONAL por la Ley N° 17.604, con excepción de
la establecida en el artículo 7° de la misma.
La autorización será concedida con expresa indicación de las carreras, grados y títulos que
se cursen u otorguen en el establecimiento correspondiente.
g) Proyecto del estatuto académico, el cual deberá determinar los siguientes aspectos
mínimos: fines u objetivos generales; organización interna; forma de gobierno y
designación de autoridades; categorías de personal docente y de investigación;
categorías de alumnos, con exclusión de la de libres, y régimen económico financiero.
h) Plan de desarrollo para CINCO (5) años, derivado del proyecto institucional, en el que
se indicará la previsión con respecto a la expansión de la planta física y del
equipamiento, del personal docente y auxiliar, de la matricula estudiantil, de la apertura
de nuevos programas de docencia e investigación, y la previsión de los recursos
económicos necesarios para estos fines.
i) Las carreras ofrecidas inicialmente para las cuales se solicita autorización, incluyendo
en cada caso información tal como el título que otorgará, el plan de estudios, el numero
de vacantes, los requisitos de ingreso, el perfil profesional, las expectativas
ocupacionales y las incumbencias.
j) Programa de desarrollo de los recursos humanos que serán necesarios para cumplir con
el proyecto institucional, en particular el desarrollo del cuerpo de docentes e
investigadores, los mecanismos de ingreso, evaluación y perfeccionamiento y las
normas que regularán la carrera docente en el establecimiento.
Artículo 6°- Las solicitudes de autorización provisional deberán presentarse con una
antelación no inferior a TRESCIENTOS SESENTA (360) días corridos de la fecha en la
cual se proyecta iniciar las actividades académicas.
CAPITULO III
Artículo 13°- Los establecimientos autorizados en forma provisional tendrán que indicar
esta circunstancia en todos sus anuncios, publicaciones y documentación, agregando debajo
o a continuación del nombre, la siguiente leyenda. ''Autorizada provisionalmente por
DECRETO del PODER EJECUTIVO NACIONAL N°......, conforme con lo establecido
en el artículo 7° de la Ley N° 17.604''. En caso de incumplimiento, el establecimiento se
hará pasible de las sanciones dispuestas en los artículos 37º, inciso f) y 38º del presente
decreto.
Artículo 14°- Dichos establecimientos no podrán ampliar el plan de desarrollo para los
primeros CINCO (5) años aludido en el artículo 5°, inciso h), hasta tanto no obtengan su
autorización definitiva. Las modificaciones parciales en los planes de estudio y en carreras
y grados ofrecidos, debidamente justificadas dentro del proyecto original aprobado,
requerirán de la autorización previa del MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION,
para lo cual los establecimientos deberán solicitarlo de acuerdo con las pautas y
procedimientos establecidos en los artículos 26º y 27º del presente decreto.
Dicho informe contendrá datos fehacientes sobre la evolución de la matrícula, del cuerpo
docente, de las instalaciones y del equipamiento, de las bibliotecas, del patrimonio y otros
elementos de juicio de acuerdo con las pautas que serán oportunamente elaboradas por el
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION.
CAPITULO IV
g) Presupuesto financiero con indicación de origen y destino de los recursos; que acredite
la posibilidad del normal desarrollo de las actividades docentes y de investigación del
establecimiento.
j) Los resultados de una autoevaluación institucional realizada dentro del año anterior a la
presentación de la solicitud de autorización definitiva.
k) Un proyecto de desarrollo institucional para los CINCO (5) años siguientes, en el que se
detallará, entre otros, los cambios que serán introducidos en las unidades docentes o de
investigación y la apertura o cierre de programas previstos para ese período.
Artículo 20°- Las Universidades con autorización definitiva deberán presentar cada
CINCO (5) años al MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION un informe de
actividades detallado, respecto de la evolución de la matrícula estudiantil, del número de
ingresantes por año y la distribución anual para todas sus carreras, el numero de egresados
y los resultados de las Pruebas Finales de Capacidad Profesional cuando ello sea pertinente,
la composición del cuerpo docente con información actualizada sobre sus antecedentes y
producción académica, el estado de las instalaciones, del equipamiento y de las bibliotecas,
el desarrollo de los recursos financieros y de la situación patrimonial y la adecuación al
proyecto institucional de los cambios introducidos en las unidades y programas de docencia
e investigación durante el quinquenio anterior. Dicho informe será acompañado de una
autoevaluación institucional y de un nuevo proyecto de desarrollo para los CINCO (5) años
siguientes.
CAPITULO V
Artículo 26°- Las modificaciones a los planes de estudio producidas por los
establecimientos con autorización provisional o definitiva sujetas a Pruebas Finales de
Capacidad Profesional, requerirán la aprobación previa del MINISTERIO DE CULTURA
Y EDUCACION. La presentación deberá acompañarse de una exposición de motivos,
CIENTO VEINTE (120) días antes de la fecha prevista por el establecimiento, para que
entren en vigencia. Si a los NOVENTA (90) días de la presentación, las modificaciones no
fueren observadas por el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, la entidad podrá
hacer regir el plan modificado. Si hubiere observaciones que efectuar, el MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION, antes del plazo señalado, correrá vista al peticionante para
que las conteste dentro de los QUINCE (15) días corridos desde su notificación. Con su
resultado, el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION dictará la resolución
respectiva en un término de TREINTA (30) días hábiles desde el vencimiento de la vista
conferida. Los establecimientos liberados de las Pruebas Finales de Capacidad Profesional
sólo deberán comunicar al MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION las
modificaciones que introduzcan a sus planes de estudio, con copia de las mismas, antes de
aplicarlas.
Artículo 27°- A los efectos de lo establecido en el artículo 2° de la Ley N° 17.604, los
establecimientos universitarios privados con autorización definitiva sujetos a Pruebas
Finales de Capacidad Profesional deberán solicitar autorización al MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION para la creación de nuevas facultades, escuelas, institutos,
departamentos, carreras, grados o títulos. Las anexiones, incorporaciones y desanexiones
serán consideradas como creaciones. El pedido deberá presentarse CIENTO OCHENTA
(180) días antes de la fecha en que deban comenzar las actividades, y tendrá que estar
acompañado por la correspondiente exposición de motivos y por el proyecto de presupuesto
de ingresos y gastos, conforme con las pautas señaladas en el artículo 5° del presente
decreto. EL MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION recabará la opinión del
CONSEJO DE RECTORES DE LAS UNIVERSIDADES PRIVADAS, el cual deberá
expedirse en el término de TREINTA (30) días hábiles y dispondrá la correspondiente
intervención por parte de los órganos técnicos pertinentes, quienes se expedirán dentro de
los TREINTA (30) días hábiles subsiguientes. De tales dictámenes se dará vista al
peticionante, por el término de QUNCE (15) días hábiles perentorios, para que formule las
observaciones que considere adecuadas. Con su resultado el señor Ministro de Cultura y
Educación dictará la resolución correspondiente.
Artículo 28°- Las Universidades Privadas con autorización definitiva que hubieren sido
liberadas de las Pruebas Finales de Capacidad Profesional deberán comunicar al
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION la creación de nuevas facultades, escuelas,
institutos, departamentos, carreras, grados o títulos, acompañando copia de todos los
antecedentes que hagan a la creación. Sin perjuicio de ello deberán dar cumplimiento a lo
previsto en los incisos 10) y 11) del artículo 21º de la Ley de Ministerios (t.o.1992) antes de
comenzar las actividades académicas respectivas.
CAPITULO VI
b) La Prueba Final de Capacidad Profesional será recibida por un tribunal integrado por
TRES (3) miembros, seleccionadas entre profesores universitarios y profesionales de la
especialidad de que se trate, que designará en cada caso el MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION. Uno de ellos representará al Estado Nacional, y será
elegido entre funcionarios o magistrados estatales con grado universitario, profesores o
ex profesares universitarios, o miembros de academias nacionales. Las otros DOS (2)
representarán al colegio o asociación profesional que corresponda y al establecimiento
privado a que pertenezca el egresado que se somete a la prueba, respectivamente. Los
miembros serán elegidos de una terna que a tal efecto presentarán al MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION dichas instituciones. En caso de que las Instituciones
precedentemente mencionadas no propongan ternas en un tiempo prudencial, una vez
que sean invitadas a hacerlo, el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION
efectuará la designación en forma directa.
Los TRES (3) miembros del tribunal deberán estar legalmente habilitados para el
ejercicio de la profesión correspondiente a la materia de la prueba.
Artículo 31°- Los establecimientos privados con autorización definitiva que hubieren sido
liberados de la Prueba Final de Capacidad Profesional, podrán expedir los diplomas de sus
egresados sin intervención previa del MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION,
dando cuenta al mismo de los diplomas que se expidan con los datos de los egresados,
dentro de los TREINTA (30) días otorgados. Tendrán como único requisito para su validez
la autenticación por parte del MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION de las firmas
de las autoridades que los expidan.
Artículo 32°- A los efectos establecidos en el artículo 11º de la Ley N° 17.604, cada
establecimiento designará un funcionario responsable, el que acreditará la veracidad y
autenticidad del contenido y firma de los certificados donde consten las calificaciones y
pruebas rendidas por el interesado en dicho establecimiento. Ningún establecimiento
educativo podrá admitir la validez de materias, seminarios o trabajos prácticos aprobados
en establecimientos universitarios privados, sin la presentación del certificado antedicho
debidamente legalizado por el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, a cuyo
efecto el funcionario responsable acreditará su carácter y registrará su firma ante el
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION.
CAPITULO VII
b) Adoptar sus resoluciones por mayoría simple. Cada rector tendrá UN (1) solo voto,
pudiendo votar por sí y por representación.
c) Emitir opinión en todos los casos previstos en este decreto. En los supuestos de los
artículos 8° y 18º sólo votarán los establecimientos con autorización definitiva, y en el
del artículo 40º deberá abstenerse el rector del establecimiento cuestionado.
CAPITULO VIII
De la fiscalización
a) llamado de atención;
b) apercibimiento;
CAPITULO IX
Artículo 42°- A los fines de la realización de los trámites que se indican a continuación, las
instituciones privadas deberán abonar las siguientes tasas:
b) Solicitud de autorización para la creación de una nueva sede, facultad, escuela, instituto,
departamento, carrera; grado y título: PESOS DOS MIL ($2.000).
d) El proyecto deberá coincidir con el interés nacional conforme con las pautas señaladas
en el artículo 2° de la Ley N° 17.604, teniendo particularmente en cuenta el carácter
estratégico o de formación humanística de las carreras e investigaciones propuestas y
las necesidades regionales.
Artículo 44°- A los efectos de analizar las solicitudes presentadas por los establecimientos
universitarios privados, el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION requerirá la
opinión del CONSEJO DE RECTORES DE LAS UNIVERSIDADES PRIVADAS, ante
quien deberán presentarse antes del 31 de mayo de cada año. Dicho cuerpo dictaminará
acerca de ellas elevando al MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION antes del 31 de
julio de cada año, una recomendación final que incluirá una lista con orden de prioridades.
Formulará igualmente todas las observaciones que considere convenientes y, en caso de
disidencia, indicará las diferentes recomendaciones o listas de prioridades. Una vez en
posesión de dicho dictamen, el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION designará
una comisión asesora para la formulación de una recomendación fundada y la elaboración
de una lista de prioridades.
Esta comisión estará integrada por los representantes que designe el MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION y DOS (2) y o más expertos con antecedentes destacados en
la actividad científica, académica o en planeamiento y organización universitaria.
El señor Ministro de Cultura y Educación propondrá al PODER EJECUTIVO NACIONAL
el monto y la distribución del aporte económico estatal que considere adecuado dentro del
PRESUPUESTO GENERAL DE GASTOS del MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION.
La contribución del Estado podrá financiar total o parcialmente un proyecto, debiendo
indicarse en este último caso los rubros que se cubrirán. Al adoptarse estas decisiones se
tendrá en cuenta el plazo fijado para la ejecución del proyecto, pudiendo establecerse un
lapso para la contribución económica estatal.
CAPITULO X
Disposiciones transitorias
Artículo 46°- Las Universidades con autorización definitiva y eximidas de las Pruebas
Finales de Capacidad Profesional deberán adecuar su infraestructura e instalaciones a las
exigencias establecidas en el presente decreto, en el término de CINCO (5) años.
Artículo 47°- Las Universidades Privadas con autorización definitiva otorgada con
anterioridad a la vigencia de este decreto deberán presentar el informe al que hace
referencia el artículo 20º dentro del plazo de UN (l) año a partir de la publicación del
presente decreto.
Artículo 48°- Las Universidades Privadas con autorización provisional otorgada con
anterioridad a la vigencia de este decreto deberán presentar el plan de desarrollo a que hace
referencia el artículo 5°, inciso h), junto con el primer informe anual al que se refiere el
artículo 15º del presente decreto.
Artículo 50°- Deróganse los Decretos Nros. 8.472 del 31 de diciembre de 1969; 1.868 del
7 de abril de 1972; 197 del 16 de enero de 1976; 451 del 5 de julio de 1973; 2.971 del 16 de
abril de 1973 y toda otra norma que se oponga al presente.
CONSIDERANDO:
Que de una planta global de docentes del sistema de Universidades Nacionales del orden de
los CIEN MIL (100.000) cargos, menos del QUINCE POR CIENTO (15%) participa en
actividades de investigación científica y tecnológica.
Que el desarrollo científico y tecnológico constituyen una condición necesaria para transitar
por un sendero de crecimiento económico y justicia social.
Que en el campo de las Ciencias Sociales las Universidades concentran la mayor capacidad
instalada de recursos humanos para desarrollar tareas analíticas tendientes al diagnóstico e
interpretación de los fenómenos sociales.
Que el incentivo significará una mejora en los ingresos de los docentes universitarios
durante el período en que participen en proyectos de investigación.
Que la presente medida encuadra en las facultades conferidas por el artículo 86, inciso lº ),
de la Constitución Nacional.
Por ello,
EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:
Artículo 1°- Establécese, a partir del ejercicio presupuestado 1994, un incentivo al personal
docente de las Universidades Nacionales, que lo soliciten y participen en proyectos de
investigación y cumplan funciones docentes en los términos, condiciones y normativas
definidos en el Anexo I.
Artículo 2°- El incentivo será otorgado por las Universidades Nacionales con cargo a la
partida presupuestaria que la Ley de Presupuesto de la Administración Pública Nacional de
cada año especifique en jurisdicción del MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION,
función Ciencia y Técnica, a distribuir.
VISTO la Ley de Ministerios (t.o. 1992), las Leyes Nros. 24.049 y 24.195, el Decreto N°
506 del 24 de marzo de 1993, lo propuesto por el MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION, y
CONSIDERANDO:
Que por la Ley N° 24.195, el gobierno y administración del sistema educativo es una
responsabilidad concurrente y concertada del PODER EJECUTIVO NACIONAL, de los
Poderes Ejecutivos de las Provincias y de la MUNICIPALIDAD DE LA CIUDAD DE
BUENOS AIRES.
Que por el Decreto N°506/93 se aprobó la organización provisoria del citado Departamento
de Estado, estableciéndose un plazo para que este eleve el proyecto de estructura
organizativa de su jurisdicción.
Que, dado que aún no ha finalizado el proceso de transferencia de los servicios educativos a
los que hace mención la Ley N° 24.049, resulta necesario prever, en el ámbito de la
SECRETARIA TECNICA Y DE COORDINACION OPERATIVA, que funciona en
jurisdicción del citado Ministerio, una Unidad de Administración y Gestión de Servicios
No Transferidos encargada de realizar transitoriamente todas aquellas actividades
relacionadas con la gestión de dichos servicios.
Que en virtud de lo dispuesto por las Leyes Nros. 24.049 y 24.195, el MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION no administrará en forma directa servicios educativos, por lo
que no cabe prever cargos contemplados en la Ley N° 14.473 -ESTATUTO DEL
DOCENTE-, sus decretos reglamentarios y/o complementarios, con excepción de los
asignados a la unidad a la que se refiere el párrafo precedente y los correspondientes a
aquellos agentes que en el lapso de DOCE (12) meses se encuentren en condiciones de
acogerse al beneficio jubilatorio.
Que se estima pertinente prever ajustes como consecuencia de la puesta en marcha de una
reestructuración de la magnitud de la presente.
Que la presente medida se dicta en virtud de las facultades otorgadas por el artículo 86º
inciso I de la Constitución Nacional, el artículo 8° de la Ley de Ministerios (t.o. 1992), el
artículo 61º de la Ley 23.696 y el artículo 7° de la Ley 24.191.
Por ello,
EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:
Artículo 1°- Sustitúyese del Decreto N°1.691/91 y sus modificatorios según texto del
Decreto N° 506/93, el apartado VI del artículo 1°, en lo atinente a la conformación del
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, el que quedará constituido de la siguiente
forma:
VI- MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION
Artículo 3°- Reemplázase, de acuerdo con el detalle que como anexo IVc se acompaña, la
composición de la planta no permanente de personal transitorio del MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION, aprobada oportunamente por el Decreto N°1.249/92,
prorrogada por los dictámenes C.E.C.R.A. Nros. 103/92 y 35/93, adecuándolas de
conformidad con el resultado del reencasillamiento de los distintos cargos, efectuado por la
Resolución S.F.P. y M.C.Y E.N° 39/92.
Artículo 9°- Apruébase el financiamiento de los cargos docentes que se detallan anexos al
presente artículo correspondientes a los agentes que a la fecha del presente decreto o en el
lapso de DOCE (12) meses a partir del dictado del mismo, se encuentren en condiciones de
acogerse a los beneficios jubilatorios. Dichos cargos serán eliminados automáticamente de
la distribución administrativa de recursos humanos, una vez que se produzca la baja de
dicho personal. Las bajas deberán ser comunicadas a la SECRETARIA DE HACIENDA
del MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS, dentro de los
TREINTA (30) días de producidas.
Artículo 12°- La habilitación de los cargos y horas de cátedra aprobados por el artículo 2°
del presente, quedará supeditada a los previstos en la Ley de Presupuestos General de
Gastos y Recursos de la Administración Nacional para el ejercicio 1994.
Artículo 14°- El gasto que demande la aplicación de la presente medida será atendido con
los créditos previstos para tal fin en el Presupuesto General para la Administración Pública
Nacional vigente.
Artículo 15°- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial
y archívese.
MENEM - Jorge A. Rodríguez - Domingo F. Cavallo.
RESOLUCION N° 1.069/93
CONSIDERANDO:
Que la existencia de un buen sistema de información es una condición básica, no sólo para
conocer fundadamente las características y problemáticas que cada situación plantea, sino
también para garantizar la pertinencia y solidez de las decisiones consecuentes.
Que tal información resulta por ello de indiscutible utilidad, no sólo para quienes deben
actuar en el nivel central, sino para todas las instancias del sistema donde se deben adoptar
decisiones.
Que hace ya más de dos décadas las universidades nacionales, conscientes de esta
necesidad, acordaron sentar las bases de un sistema de información estadística que, a partir
de normas, definiciones metodológicas y cronogramas comunes, haga posible contar con
información confiable y comparable en tiempo oportuno.
Que tal sistema se fue perfeccionando y funcionó razonablemente bien en sus primeros
tiempos, pero luego, por distintos motivos, dejó de prestársele la atención que requería y
entró en una fase de progresiva desactualización y deterioro, que explica la actual situación
de verdadera emergencia informativa en que se encuentra el sector.
Que con ese objeto, la Secretaría de Políticas Universitarias impulsada, con la participación
de todas las universidades, un trabajo común de análisis y redefinición de las bases de tal
Sistema, para recuperar los elementos y resultados positivos de la experiencia pasada e
incorporar las nuevas dimensiones, metodologías y formas de operación que la
transformación de la realidad universitaria y la actual tecnología de la información
imponen.
Que, paralelamente a ese trabajo de mayor envergadura que se pondrá en marcha, se hace
imprescindible en lo inmediato actualizar la información básica que las oficinas de
estadística de las universidades deben proveer regularmente al Ministerio.
Que tal información, lo mismo que la que se determine a partir de la redefinición de las
bases del Sistema, se debe entender destinada a generar datos agregados, que una vez
disponibles serán puestos a disposición de las propias universidades y de otros usuarios
para quienes puedan resultar de interés.
Que es también oportuno incorporar al Sistema de Información que por esta resolución se
crea, a las universidades privadas y provinciales, que como es sabido forman parte del
sistema universitario nacional, respetando como es obvio las particularidades y
singularidades que las caracterizan.
Por ello,
EL MINISTRO
DE CULTURA Y EDUCACION
RESUELVE:
CONSIDERANDO:
Que la falta de una reglamentación que precise los alcances de las atribuciones
ministeriales genera serios inconvenientes en su aplicación.
Que por ello se hace necesario el dictado de una norma que defina ambas cuestiones
precisas y alcances jurídicos y determine las modalidades de implementación a las que
deberán ajustarse el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION y las instituciones
implicadas.
Que a esos fines es necesario precisar lo que se entenderá a los efectos legales por “validez
nacional”, “perfil y alcances del título” e “incumbencias”, por tratarse de una terminología
cuya utilización pueda generar confusión a la hora de aplicar las consecuencias y jurídicas
que se le asignan.
Que por “perfil” debe entenderse el conjunto de los conocimientos y capacidades que cada
título acredita, y por “alcances” aquellas actividades para las que resulta competentes un
profesional en función del perfil del título respectivo; el término "incumbencia" debe
reservarse exclusivamente para aquellas actividades profesionales cuyo ejercicio pudiera
comprometer al interés público.
Que así mismo no se justificaría dotar de un efecto jurídico tan importante como el que se
asigna a las “incumbencias”, si el Estado a su vez no exigiera, para establecer determinados
contenidos que garanticen la formación necesaria del profesional.
Que también se justifica marcar una diferencia en la actividad del Estado respecto a la
determinación de la validez nacional, entre aquellas carreras conducentes a títulos de grado
universitario de Licenciado, Ingeniero, Abogado, Médico y otros equivalentes en las que es
necesario garantizar una carga académica adecuada al nivel y jerarquía de esos títulos, y
aquellas otras que conduzcan a títulos de menor jerarquía.
Que a los fines de garantizar el nivel de los títulos de grado universitario su otorgamiento
debe quedar reservado a instituciones autorizadas debidamente para funcionar como
universidades o institutos universitarios.
Por ello,
EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:
Artículo 1°- A los fines del presente decreto denominase “perfil del título” al conjunto de
los conocimientos y capacidades que cada título acredita; "alcances del título'', a aquellas
actividades para las que resulta competente un profesional en función del perfil del título y
de los contenidos curriculares de la carrera, e "incumbencias", a aquellas actividades
comprendidas en los alcances del título cuyo ejercicio pudiese comprometer al interés
público.
Artículo 3°- A partir de la fecha del presente decreto sólo se fijarán incumbencias a
aquellos títulos cuyo ejercicio profesional pudieran comprometer al interés público y
únicamente respecto a las actividades que efectivamente lo comprometan. El MINISTERIO
DE CULTURA Y EDUCACION determinará por resolución ministerial los títulos que
requieran incumbencias. A esos fines reglamentará los plazos y el procedimiento para
hacerlo.
Artículo 5°- Las incumbencias fijadas con anterioridad previstas en el artículo 3°, sólo
tendrán los alcances y efectos previstos en el artículo 2°.
Artículo 6°- Para otorgar validez nacional a los títulos a que se alude en el artículo 3°, se
requerirán, además de lo exigido en el artículo 2°, que los respectivos planes de estudio
respeten los contenidos mínimos que a esos efectos establezca el MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION, en consulta con el sistema universitario.
Artículo 7°- Para otorgarle validez nacional a los títulos de grado universitario de
Licenciado, Ingeniero, Abogado, Médico y equivalentes, para los que corresponda la
fijación de incumbencia, se requerirá, además de la exigencia establecida en el artículo 2°,
que la carga académica prevista en los respectivos planes de estudio sea adecuada a un
título de esa jerarquía. A esos fines, el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION,
previa consulta con el sistema universitario reglamentará las exigencias mínimas necesarias
para lograrla.
Artículo 8°- La determinación de la validez nacional de títulos de menor jerarquía que los
mencionados en el artículo anterior requerirá además del cumplimiento de lo dispuesto en
el artículo 2°, que se prevea como condición de ingreso la aprobación del nivel polimodal;
excepcionalmente será de aplicación lo previsto en el 2° apartado del artículo 12 de la Ley
N° 24.195.
Artículo 9°- A los efectos del presente decreto, las modificaciones de los planes de estudio
deberán ser comunicadas al MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, quien las
podrá observar cuando no se respeten los contenidos mínimos fijados, en el supuesto del
artículo 3°, o importen una reducción de la carga académica mínima en el supuesto del
artículo 7°.
Artículo 12°- Derógase el Decreto N° 939 del 1° de abril de 1975 y toda otra norma que se
oponga al presente.
Artículo 13°- Comuníquese, publíquese, dese a la DIRECCION NACIONAL DEL
REGISTRO OFICIAL y archívese.
CONSIDERANDO:
Que en virtud de ello resulta oportuno establecer disposiciones más precisas en relación con
el ejercicio de la docencia en Universidades Nacionales.
Que las autoridades superiores de las universidades han sido consultadas sobre esta norma.
Que la presente medida encuadra en las facultades conferidas por el artículo 86º inciso l) de
la CONSTITUCION NACIONAL.
Por ello,
EL PRESIDENTE
DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:
Artículo 1°.- Determínase que el ejercicio de la docencia en una Universidad Nacional crea
incompatibilidad con el desempeño de cargos o contratos de prestación de servicios en la
Administración Pública Nacional, Provincial y Municipal, centralizada y descentralizada,
entes autárquicos y empresas públicas y con el desempeño de cargos no docentes o
docentes, en una misma Universidad o en distintas Universidades Nacionales, Privadas y
Provinciales, cuando la acumulación de los mismos implique una dedicación superior a las
CINCUENTA (50) horas semanales.
Artículo 4°.- Sin perjuicio de las consecuencias civiles y penales que pudieran
corresponder, la falsedad o inexactitud de los datos consignados en la declaración jurada
hará pasible al agente de la sanción de cesantía.
CONSIDERANDO:
Que conforme lo dispuesto en dicha norma este Ministerio debe establecer las formalidades
que deberán reunir las solicitudes de autorización provisional de Universidades Privadas
que pretendan incorporarse al régimen de la Ley 17.604.
Que asimismo debe establecerse el plazo dentro del cual deben adecuarse las solicitudes ya
presentadas a las disposiciones del Decreto N° 2..330/93.
Por ello,
EL MINISTRO
DE CULTURA Y EDUCACION
RESUELVE:
Artículo 3°- Los datos consignados en la solicitud tendrán el carácter de declaración jurada
y su inexactitud o falsedad hará pasible al firmante de las penalidades y responsabilidades
legales.
VISTO la situación de los ciudadanos argentinos y sus hijos quienes habiendo completado
estudios de nivel medio o su equivalente en el extranjero, desean iniciar estudios de nivel
terciario, universitario y no universitario, en nuestro país y,
CONSIDERANDO:
Que en las últimas décadas gran cantidad de ciudadanos argentinos se han visto en la
necesidad de abandonar nuestro país por motivos de índole política, económica y/o social, y
que muchos de ellos lo han hecho con su grupo familiar o lo han conformado en el
extranjero, y que ellos y o sus hijos, de nacionalidad argentina o no, han completado
estudios de nivel medio fuera del país
Que la estabilidad, tanto política como económica y el crecimiento sostenido de los últimos
tres años son condiciones favorables para su retomo a la República Argentina.
Que al regreso a nuestro país, manifiestan la necesidad de iniciar estudios de nivel terciario
universitario y no universitario para su formación y capacitación.
Que es política del Gobierno Nacional posibilitar el retomo de ciudadanos argentinos, con
sus grupos familiares, establecidos en otros países.
Que resulta necesario favorecer el ingreso a las respectivas instituciones educacionales y así
facilitar su formación e integración a la sociedad argentina.
Que el artículo 53º, inc. l) de la Ley 24.195 establece que el Ministerio de Cultura y
Educación deberá dictar las normas generales sobre revalidación de títulos y certificados de
estudios en el extranjero.
Por ello,
EL MINISTRO
DE CULTURA Y EDUCACION
RESUELVE:
Artículo 1°.- Autorizar a los ciudadanos argentinos y a sus hijos, que acrediten haber
completado en otros países estudios de nivel medio o su equivalente, a cursar estudios
terciarios universitarios y no universitarios, sin, obligación de rendir las materias nacionales
u otras equivalencias.
CONSIDERANDO:
Que en su artículo 11º dicha norma prevé la constitución de una Comisión Consultiva con
la función de asesorar a la Secretaría de Políticas Universitarias en todo lo concerniente al
otorgamiento de autorizaciones provisionales y definitivas de establecimientos
universitarios privados.
Que por el artículo 12º del mencionado decreto se encomienda a este Ministerio la
reglamentación de la forma de constitución y funcionamiento de la Comisión aludida.
Por ello,
EL MINISTRO
DE CULTURA Y EDUCACION
RESUELVE:
Artículo 1°- La Comisión Consultiva prevista en el artículo 11º del Decreto 2.330/93 estará
integrada por cinco miembros designados por este Ministerio, los que deberán tener
antecedentes destacados en actividades científicas, académicas o de dirección universitaria.
Artículo 2°- Los miembros de la Comisión serán designados por el término de un año,
gozando de independencia de criterio en el ejercicio de sus funciones y percibirán un
honorario de trescientos pesos ($300) por cada dictamen que emitan con relación a los
supuestos previstos en los artículos 8° y 19° del Decreto 2.330/93.
Artículo 4°- Los dictámenes producidos por la Comisión en los casos de los artículos 8° y
19° del Decreto 2.330/93, deberán estar suscriptos, por lo menos, por tres de sus miembros,
aún cuando las opiniones de los mismos no fueran coincidentes.
Artículo 5°- La comisión deberá expedir su dictamen en un plazo de treinta días a contar
de la fecha en que reciban formalmente las actuaciones, el que podrá ser prorrogado por
razones fundadas. Vencido dicho plazo sin que se haya producido el dictamen de la
Comisión o dispuesto su prórroga, el trámite continuará conforme con lo previsto en la
normativa reglamentaria.
Nro. 24.521
DEPARTAMENTO DE GOBIERNO...........................................................................................24
TITULO II......................................................................................................................................25
DE LA UNIVERSIDADES........................................................................................................................32
DE LAS FUNCIONES, TAREAS, ORGANIZACIÓN EN GENERAL Y CAPACIDAD JURÍDICA DE LAS UNIVERSIDADES.....32
DE LAS FACULTADES................................................................................................................57
TITULO I......................................................................................................................................262
DISPOSICIONES PRELIMINARES.........................................................................................262
ARTÍCULO 1. ................................................................................................................................262
ARTÍCULO 2..................................................................................................................................262
TITULO II....................................................................................................................................262
DE LA EDUCACIÓN SUPERIOR............................................................................................................262
CAPÍTULO 1: DE LOS FINES Y OBJETIVOS............................................................................................262
ARTÍCULO 3..................................................................................................................................262
ARTÍCULO 4..................................................................................................................................262
CAPÍTULO 2: DE LA ESTRUCTURA Y ARTICULACIÓN.............................................................................263
ARTÍCULO 5..................................................................................................................................263
ARTÍCULO 6..................................................................................................................................263
ARTÍCULO 7..................................................................................................................................263
ARTÍCULO 8..................................................................................................................................263
ARTÍCULO 9..................................................................................................................................264
ARTÍCULO 10................................................................................................................................264
CAPÍTULO 3: DERECHOS Y OBLIGACIONES..........................................................................................264
ARTÍCULO 11................................................................................................................................264
ARTÍCULO 12. .............................................................................................................................264
ARTÍCULO 13. ..............................................................................................................................264
ARTÍCULO 14. ..............................................................................................................................265
TITULO III...................................................................................................................................265
TITULO IV...................................................................................................................................268
ARTÍCULO 74................................................................................................................................280
ARTÍCULO 75................................................................................................................................280
ARTÍCULO 76................................................................................................................................280
ARTÍCULO 77................................................................................................................................280
ARTÍCULO 78................................................................................................................................280
ARTÍCULO 79................................................................................................................................280
ARTÍCULO 80................................................................................................................................280
ARTÍCULO 81................................................................................................................................281
ARTÍCULO 82. ..............................................................................................................................281
ARTÍCULO 83................................................................................................................................281
ARTÍCULO 84................................................................................................................................281
ARTÍCULO 85................................................................................................................................281
ARTÍCULO 86................................................................................................................................281
ARTÍCULO 87................................................................................................................................282
ARTÍCULO 88................................................................................................................................282
ARTÍCULO 89................................................................................................................................282
TITULO I
Disposiciones Preliminares
Artículo 1.
Están comprendidas dentro de la presente ley las instituciones de formación superior, sean
universitarias o no universitarias, nacionales, provinciales o municipales, tanto estatales
como privadas, todas las cuales forman parte del Sistema Educativo Nacional regulado por
la ley 24.195.
Artículo 2.
El Estado, al que le cabe responsabilidad indelegable en la prestación del servicio de
educación superior de carácter público, reconoce y garantiza el derecho a cumplir con ese
nivel de la enseñanza a todos aquellos que quieran hacerlo y cuenten con la formación y
capacidad requeridas.
TITULO II
De la Educación Superior
Capítulo 1: De los fines y objetivos
Artículo 3.
La educación superior tiene por finalidad proporcionar formación científica, profesional,
humanística y técnica en el más alto nivel, contribuir a la preservación de la cultura
nacional, promover la generación y desarrollo del conocimiento en todas sus formas, y
desarrollar las actitudes y valores que requiere la formación de personas responsables, con
conciencia ética y solidaria, reflexivas, críticas, capaces de mejorar la calidad de vida,
consolidar el respeto al medio ambiente, a las instituciones de la República y a la vigencia
del orden democrático.
Artículo 4.
Son objetivos de la Educación Superior, además de los que establece la ley 24.195 en sus
artículos 5, 6, 1 9 y 22:
c) A obtener becas, créditos y otras formas de apoyo económico y social que garanticen
la igualdad de oportunidades y posibilidades, particularmente para el acceso y
permanencia en los estudios de grado, conforme a las normas que reglamenten la
materia.
TITULO III
De la Educación Superior No Universitaria
Capítulo 1: De la responsabilidad jurisdiccional
Artículo 15.
Corresponde a las provincias y a la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires el
gobierno y organización de la educación superior no universitaria en sus respectivos
ámbitos de competencia, así como dictar normas que regulen la creación, competencia,
modificación y cese de instituciones de educación superior no universitaria y el
establecimiento de las condiciones a que se ajustará su funcionamiento, todo ello en el
marco de la ley 24.195, de lo que establece la presente y de los correspondientes acuerdos
federales. Las jurisdicciones atenderán en particular a las siguientes pautas:
a) Estructurar los estudios en base a una organización curricular flexible y que facilite
a sus egresados una salida laboral;
b) Articular las carreras afines estableciendo en lo posible núcleos básicos comunes y
regímenes flexibles de equivalencia y reconversión;
Las mismas deberán estar vinculadas a la vida cultural y productiva local y regional.
Artículo 18.
La formación de docentes para los distintos niveles de la enseñanza no universitaria, debe
realizarse en instituciones de formación docente reconocidas, que integren la Red Federal
de Formación Docente Continua prevista en la ley 24.195, o en universidades que ofrezcan
carreras con esa finalidad.
Artículo 19.
Las instituciones de educación superior no universitaria podrán proporcionar formación
superior de ese carácter, en el área de que se trate y/o actualización, reformulación o
adquisición de nuevos conocimientos y competencias a nivel de postítulo. Podrán
asimismo desarrollar cursos, ciclos o actividades que respondan a las demandas de
calificación, formación y reconversión laboral y profesional.
Artículo 20.
El ingreso a la carrera docente en las instituciones de gestión estatal de educación superior
no universitaria, se hará mediante concurso público y abierto de antecedentes y oposición,
que garantice la idoneidad profesional para el desempeño de las tareas específicas. La
estabilidad estará sujeta a un régimen de evaluación y control de la gestión docente, y
cuando sea el caso, a los requerimientos y características de las carreras flexibles y a
término.
Artículo 21.
Las provincias y la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires arbitrarán los medios
necesarios para que sus instituciones de formación docente garanticen el perfeccionamiento
y la actualización de los docentes en actividad, tanto en los aspectos curriculares como en
los pedagógicos e institucionales, y promoverán el desarrollo de investigaciones educativas
y la realización de experiencias innovadoras.
Artículo 22.
Las instituciones de nivel superior no universitario que se creen o transformen, o las
jurisdicciones a las que ellas pertenezcan, que acuerden con una o más universidades del
país mecanismos de acreditación de sus carreras o programas de formación y capacitación,
podrán denominarse colegios universitarios.
Tales instituciones deberán estar estrechamente vinculadas a entidades de su zona de
influencia y ofrecerán carreras cortas flexibles y/o a término, que faciliten la adquisición de
competencias profesionales y hagan posible su inserción laboral y/o la continuación de los
estudios en las universidades con las cuales hayan establecido acuerdos de articulación.
TITULO IV
De la Educación Superior Universitaria
Capítulo 1: De las instituciones universitarias y sus funciones
Artículo 26.
La enseñanza superior universitaria estará a cargo de las universidades nacionales, de las
universidades provinciales y privadas reconocidas por el Estado nacional y de los institutos
universitarios estatales o privados reconocidos, todos los cuales integran el Sistema
Universitario Nacional.
Artículo 27.
Las instituciones universitarias a que se refiere el artículo anterior, tienen por finalidad la
generación y comunicación de conocimientos del más alto nivel en un clima de libertad,
justicia y solidaridad, ofreciendo una formación cultural interdisciplinaria dirigida a la
integración del saber así como una capacitación científica y profesional específica para las
distintas carreras que en ellas se cursen, para beneficio del hombre y de la sociedad a la que
pertenecen. Las instituciones que responden a la denominación de «Universidad» deben
desarrollar su actividad en una variedad de áreas disciplinarias no afines, orgánicamente
estructuradas en facultades, departamentos o unidades académicas equivalentes. Las
instituciones que circunscriben su oferta académica a una sola área disciplinaria, se
denominan «Institutos Universitarios».
Artículo 28.
Son funciones básicas de las instituciones universitarias:
a) Dictar y reformar sus estatutos, los que serán comunicados al Ministerio de Cultura y
Educación a los fines establecidos en el artículo 34 de la presente ley;
c) Administrar sus bienes y recursos, conforme a sus estatutos y las leyes que regulan la
materia;
a) Los planes de estudio deberán tener en cuenta los contenidos curriculares básicos y
los criterios sobre intensidad de la formación práctica que establezca el Ministerio de
Cultura y Educación, en acuerdo con el Consejo de Universidades;
b) Acreditar las carreras de grado a que se refiere el artículo 43, así como las carreras de
posgrado, cualquiera sea el ámbito en que se desarrollen, conforme a los estándares
que establezca el Ministerio de Cultura y Educación en consulta con el Consejo de
Universidades;
a) Que el claustro docente tenga la mayor representación relativa, que no podrá ser
inferior al cincuenta por ciento (50%) de la totalidad de sus miembros;
b) Que los representantes de los estudiantes sean alumnos regulares y tengan aprobado
por lo menos el treinta por ciento (30%) del total de asignaturas de la carrera que
cursan;
c) Que el personal no docente tenga representación en dichos cuerpos con el alcance que
determine cada institución;
d) Que los graduados, en caso de ser incorporados a los cuerpos colegiados, puedan
elegir y ser elegidos si no tienen relación de dependencia con la institución
universitaria.
Los decanos o autoridades docentes equivalentes serán miembros natos del Consejo
Superior u órgano que cumpla similares funciones. Podrá extenderse la misma
consideración a los directores de carrera de carácter electivo que integren los cuerpos
académicos, en las instituciones que por su estructura organizativa prevean dichos cargos.
Artículo 54.
El rector o presidente, el vicerector o vicepresidente y los titulares de los demás órganos
unipersonales de gobierno, durarán en sus funciones tres (3) años como mínimo. El cargo
de rector o presidente será de dedicación exclusiva y para acceder a él se requerirá ser o
haber sido profesor por concurso de una universidad nacional.
Artículo 55.
Los representantes de los docentes, que deberán haber accedido a sus cargos por concurso,
serán elegidos por docentes que reúnan igual calidad. Los representantes estudiantiles
serán elegidos por sus pares, siempre que éstos tengan el rendimiento académico mínimo
que establece el artículo 50.
Artículo 56.
Los estatutos podrán prever la constitución de un Consejo Social, en el que estén
representados los distintos sectores e intereses de la comunidad local, con la misión de
cooperar con la institución universitaria en su articulación con el medio en que está inserta.
Podrá igualmente preverse que el Consejo Social esté representado en los órganos
colegiados de la institución.
Artículo 57.
Los estatutos preverán la constitución de un tribunal universitario, que tendrá por función
sustanciar juicios académicos y entender en toda cuestión ético-disciplinaria en que
estuviera involucrado personal docente. Estará integrado por profesores eméritos o
consultas, o por profesores por concurso que tengan una antigüedad en la docencia
universitaria de por lo menos diez (10) años.
El rector y los miembros del Consejo Superior de las instituciones universitarias nacionales
serán responsables de su administración según su participación, debiendo responder en los
términos y con los alcances previstos en los artículos 130 y 131 de la ley 24.156. En ningún
caso el Estado nacional responderá por las obligaciones asumidas por las instituciones
universitarias que importen un perjuicio para el Tesoro nacional.
Artículo 60.
Las instituciones universitarias nacionales podrán promover la constitución de fundaciones,
sociedades u otras formas de asociación civil, destinadas a apoyar su labor, a facilitar las
relaciones con el medio, a dar respuesta a sus necesidades y a promover las condiciones
necesarias para el cumplimiento de sus fines y objetivos.
Artículo 61
El Congreso Nacional debe disponer de la partida presupuestaria anual correspondiente al
nivel de educación superior, de un porcentaje que será destinado a becas y subsidios en ese
nivel, otorgabas por el Congreso de la Nación y ejecutables en base a lo dispuesto por el
artículo 75, inciso 19 de la Constitución Nacional, por parte del Tesoro de la Nación.
Capítulo 5: De las instituciones universitarias privadas
Artículo 62.
Las instituciones universitarias privadas deberán constituirse sin fines de lucro, obteniendo
personaría jurídica como asociación civil o fundación. Las mismas serán autorizadas por
decreto del Poder Ejecutivo nacional, que admitirá su funcionamiento provisorio por un
lapso de seis (6) años, previo informe favorable de la Comisión Nacional de Evaluación y
Acreditación Universitaria, y con expresa indicación de las carreras, grados y títulos que la
institución puede ofrecer y expedir.
Artículo 63.
El informe de la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria a que se
refiere el artículo anterior, se fundamentará en la consideración de los siguientes criterios:
c) En todo documento oficial o publicidad que realicen, las instituciones deberán dejar
constancia expresa del carácter precario de la autorización con que operan.
d) Expedirse sobre otros asuntos que se les remita en consulta por la vía
correspondiente.
Artículo 73.
El Consejo Interuniversitario Nacional estará integrado por los rectores o presidentes de las
instituciones universitarias nacionales y provinciales reconocidas por la Nación, que estén
definitivamente organizadas, y el Consejo de Rectores de Universidades Privadas estará
integrado por los rectores o presidentes de las instituciones universitarias privadas. Dichos
consejos tendrán por funciones:
b) Ser órganos de consulta en las materias y cuestiones que prevé la presente ley;
Artículo 81.
Las instituciones universitarias que al presente ostenten el nombre de universidad, por
haber sido creadas o autorizadas con esa denominación, y que por sus características deban
encuadrarse en lo que por esta ley se denomina institutos universitarios, tendrán un plazo de
un (1) año contado a partir de la promulgación de la presente para solicitar la nueva
categorización.
Artículo 82.
La Universidad Tecnológica Nacional, en razón de su significación en la vida universitaria
del país, conservará su denominación y categoría institucional actual.
Artículo 83.
Los centros de investigación e instituciones de formación profesional superior que no sean
universitarios y que a la fecha desarrollen actividades de posgrado, tendrán un plazo de dos
(2) años para adecuarse a la nueva legislación. Durante ese período estarán no obstante
sometidos a la fiscalización del Ministerio de Cultura y Educación y al régimen de
acreditación previsto en el artículo 39 de la presente ley.
Artículo 84.
El Poder Ejecutivo nacional no podrá implementar la organización de nuevas instituciones
universitarias nacionales, ni disponer la autorización provisoria o el reconocimiento
definitivo de instituciones universitarias privadas, hasta tanto se constituya el órgano de
evaluación y acreditación que debe pronunciarse sobre el particular, previsto en la presente
ley.
Artículo 85.
Sustitúyese el inciso 1l) del artículo 21 de la Ley de Ministerios (t. o. 1992) por el
siguiente transcripto:
a) Artículo 10, inciso e), y artículos 25 y 26, donde dice: “cuaternaria” dirá: “de posgrado”.
b) Artículo 54: donde dice “un representante del Consejo Interuniversitario Nacional”, dirá:
“y tres representantes del Consejo de Universidades”.
c) Artículo 57: inciso a), donde dice: “y el representante del Consejo Interuniversitario
Nacional”, dirá: “los representantes del Consejo de Universidades”.
d) Artículo 58: inciso a), donde dice: “y el Consejo Interuniversitario Nacional”, dirá “y el
Consejo de Universidades”.
Artículo 87.
Deróganse las leyes 17.604, 17.778, 23.068 y 23.569, así como toda otra disposición que se
oponga a la presente.
Artículo 88.
Todas las normas que eximen de impuestos, tasas y contribuciones a las universidades
nacionales al momento de la promulgación de la presente ley, continuarán vigentes.
Artículo 89.
Comuníquese al Poder Ejecutivo.
DECRETO P.E.N. N° 268
CONSIDERANDO
Que en el inciso e) del artículo 29 del mencionado Proyecto de Ley se establece,
como una de las atribuciones de las Instituciones Universitarias, la de "formular y
desarrollar planes de estudio, de investigación científica y de extensión y de servicios a la
comunidad incluyendo la enseñanza de la ética profesional como materia autónoma".
Que tales aspectos pueden ser observados sin que ello altere el espíritu ni la
unidad del Proyecto de Ley sancionado por el HONORABLE CONGRESO DE LA
NACIÓN.
Por ello,
Artículo 1. Obsérvase en el artículo 29, inciso e) del Proyecto de Ley registrado bajo el
N° 24.521, la frase que dice "como materia autónoma".
MENEM, Eduardo Bauzá, Domingo F. Cavallo, Guido Di Tella, José A. Caro Figueroa,
Alberto J. Mazza, Rodolfo C. Barra, Oscar H. Camilión, Jorge A. Rodríguez, Carlos V.
Corach
DECRETO P.E.N. N° 499
CONSIDERANDO:
Que sin perjuicio de la normativa especial que debe dictarse en cada caso para
regular distintas instituciones contenidas en la ley aludida, resulta necesario fijar pautas
sobre aspectos puntuales de la misma, indispensables para su correcta implementación.
Que la mayoría de esas propuestas pueden ser receptadas por vía reglamentaria,
contribuyendo de esa forma a facilitar la interpretación de la nueva normativa.
Por ello,
TITULO I
DISPOSICIONES GENERALES
Artículo 1º. Todo dispositivo de la Ley N° 24.521 cuyo cumplimiento no hubiere sido
diferido por la misma, o condicionado expresamente por la propia ley al
dictado de una normativa reglamentaria, se entenderá operativo y de
aplicación inmediata.
Artículo 2º. A los fines de implementar el apoyo previsto en el artículo 16º de la Ley N°
24.521, se deberá contar con el acuerdo previo de la jurisdicción
correspondiente.
Artículo 3º. Las Instituciones de Educación Superior deberán disponer, por los
mecanismos legales correspondientes, las medidas necesarias para posibilitar
a partir del próximo ciclo lectivo, la inscripción de los mayores de
VEINTICINCO (25) años que se encuentren en las condiciones previstas en
el artículo 7º de la Ley N° 24.521.
TITULO II
DISPOSICIONES RELACIONADAS CON
LA EVALUACION Y LA ACREDITACION
Artículo 4º. Las entidades privadas a las que se refiere el artículo 45º de la Ley N°
24.521 deberán constituirse sin fines de lucro y cumplimentar los
instructivos que dicte el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION.
Durante un período de TRES (3) años contados a partir de la fecha del
presente decreto, sólo podrán reconocerse aquellas entidades constituidas por
asociaciones de universidades o de facultades. Cuando se trate de
asociaciones de facultades, el reconocimiento sólo autorizará a efectuar
acreditaciones de carreras de grado y posgrado correspondientes a áreas
disciplinarias afines con las de la asociación.
Artículo 6º. Las carreras de grado a que se refiere al artículo 43º de la Ley N° 24.521
deberán ser acreditadas cada SEIS (6) años.
TITULO III
DISPOSICIONES RELACIONADAS CON
EL CONSEJO DE UNIVERSIDADES
TITULO IV
DISPOSICIONES RELACIONADAS
CON UNIVERSIDADES NACIONALES
Artículo 13º. Si agotados los procedimientos que prevean los estatutos respectivos, la
Asamblea convocada a los fines indicados en el artículo anterior no pudiera
constituirse por no lograrse el quórum necesario, se deberá proceder a
efectuar una nueva convocatoria bajo la prevención de que se sesionará
válidamente con los asambleístas que concurrieran. Las resoluciones para
adecuar los estatutos a la Ley N° 24.521 deberán adoptarse en todos los
casos por el voto de la mitad más uno de los asambleístas presentes.
Artículo 14º. A fin de posibilitar que la elección de los integrantes de los órganos de
gobierno de las Universidades Nacionales se efectúe de conformidad con lo
prescripto en la Ley N° 24.521, sus Consejos Superiores podrán disponer la
prórroga de los mandatos que concluyeran antes del vencimiento del plazo
previsto en el artículo 79º de dicha Ley.
Artículo 15º. Los Decanos o autoridades docentes equivalentes no serán computados a los
efectos de determinar el porcentaje previsto por el inciso a) del artículo 53º
de la Ley N° 24.521.
Artículo 16º. Los derechos que se reconocen en el artículo 78º de la Ley N° 24.521 a los
docentes interinos con más de DOS (2) años de antigüedad continuados,
comprenden los de sufragar en las elecciones en las que se elijan
representantes de los mismos ante los órganos de gobierno de la universidad.
Artículo 17º. Las Instituciones constituidas conforme al régimen del artículo 16º de la Ley
N° 17.778 y las Instituciones Universitarias Nacionales que se encuentren en
etapa de normalización, integrarán el CONSEJO INTERUNIVERSITARIO
NACIONAL con voz pero sin voto. Igual limitación regirá para las
Instituciones Universitarias Provinciales, respecto de aquellos asuntos
exclusivamente vinculados a la problemática de las Instituciones
Universitarias Nacionales.
Artículo 18º. A los fines de dar cumplimiento a lo dispuesto en el artículo 48º de la Ley
N° 24.521, los proyectos de leyes de creación de nuevas Instituciones
Universitarias Nacionales deben contemplar, en el estudio de factibilidad que
las fundamente, el conjunto de recursos que hagan viable la iniciativa, la
necesidad de formar recursos calificados en el área que la nueva institución
se propone cubrir y los lineamientos generales del proyecto institucional que
resulten indispensables para evaluar su justificación.
Artículo 19º. En los supuestos en que las Universidades Nacionales, haciendo uso de las
facultades conferidas por el artículo 59º, inciso c), establezcan derechos o
tasas por los estudios de grado, deberán necesariamente prever un régimen
de exención para aquellos estudiantes que por su situación económica o la de
su núcleo familiar no se encuentren en condiciones de afrontarlas sin serios
sacrificios, de forma tal que se asegure que nadie se vea imposibilitado de
iniciar, continuar o concluir sus estudios de grado universitario como
consecuencia directa o indirecta de las contribuciones que se impongan.
Artículo 20º. Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial
y archívese.
DECRETO P.E.N. N° 173
CON LAS MODIFICACIONES
INTRODUCIDAS POR EL DECRETO P.E.N. N° 705
CONSIDERANDO:
Por ello,
EL PRESIDENTE DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:
TITULO I
DE LA COMISION NACIONAL DE
EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA
TITULO II
DEL CONSEJO DIRECTIVO
CAPITULO 1
DE SU INTEGRACION
Artículo 3º. Los organismos que de conformidad con lo dispuesto en el artículo 47º de la
Ley N° 24.521 deban nominar a más de UN (1) miembro de la
COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION
UNIVERSITARIA (CONEAU), deberán procurar que la propuesta se
integre con especialistas de distintas áreas del conocimiento y vinculados a
distintas regiones del país.
Artículo 5º. En la primera reunión de la Comisión que se realice con el total de sus
miembros, se procederá a determinar por sorteo aquél los que cesarán a los
DOS (2) años a fin de posibilitar el sistema de renovación parcial.3
1
Texto según Decreto N° 705/97.(Texto anterior: artículo 2º. El gobierno de la COMISION
NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA estará a cargo de un
Consejo Directivo integrado en la forma establecida por el artículo 47º de la Ley N° 24.521. Los
miembros de ese Consejo deberán ser personalidades de reconocida jerarquía en el campo
académico, científico o de gestión institucional y ejercerán sus funciones a título personal y con
total independencia de criterio).
2
Texto según decreto N° 705/97. (Texto anterior: artículo 4º. EL MINISTERIO DE CULTURAY
EDUCACION podrá convocar a la primera reunión constitutiva del Consejo Directivo de la
COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA
(CONEAU) cuando se hubiera designado un mínimo de SIETE (7) miembros, sin perjuicio de la
posterior incorporación de los consejeros restantes una vez que fueran nominados y designados.
3
Texto según decreto N° 705/97. Texto Anterior: artículo 5º. En la primera reunión del Consejo
Directivo que se realice con el total de sus miembros, se procederá a determinar por sorteo aquél los
que cesarán a los DOS (2) años a fin de posibilitar el sistema de renovación parcial.
4
Texto según decreto N° 705/97. Texto Anterior: artículo 6º. Una vez constituido el Consejo
Directivo de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION
UNIVERSITARIA (CONEAU) propondrá al PODER EJECUTIVO NACIONAL la dedicación y
retribución de sus miembros, dentro del marco del presupuesto que le hubiere sido asignado.
Artículo 7º. El miembro que dejara de concurrir a TRES (3) sesiones consecutivas de la
COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION
UNIVERSITARIA (CONEAU) sin causa justificada, será considerado
renunciante, debiendo ser reemplazado por otro elegido según el
procedimiento previsto en el artículo 47º de la Ley N° 24.521. Asimismo la
COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION
UNIVERSITARIA (CONEAU), por el voto de los DOS TERCIOS (2/3) del
total de sus miembros, podrá solicitar por razones fundadas que se reemplace
a UNO (1) de sus integrantes que no diera debido cumplimiento a sus
obligaciones, en cuyo caso la institución que lo nominó deberá proponer un
nuevo candidato.5
CAPITULO 2
DE SU FUNCIONAMIENTO
Texto según decreto N° 705/97. Texto anterior artículo 8º. El Consejo Directivo de la COMISION
NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) sesionará
los días que el propio cuerpo establezca de conformidad con las necesidades de trabajo. Podrá
convocarse, asimismo, a sesión extraordinaria a petición de cualquiera de sus miembros. Para
Sesionar válidamente se requerirá la presencia de por lo menos la mitad más uno de sus integrantes,
exigiéndose mayoría absoluta de los presentes para adoptar resoluciones, salvo cuando se trate de
resoluciones que aprueben dictámenes finales vinculantes, en cuyo caso deben ser adoptadas con el
voto de la mitad más uno del total de sus miembros. En los casos en que la Ley N° 24.521 requiere
una opinión no vinculante, la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION
Artículo 9º. Derogado por artículo 3º del Decreto N° 705/97.7
TITULO III
DEL DIRECTOR EJECUTIVO
Artículo 12º. El Director Ejecutivo, quien deberá contar con antecedentes académicos y de
gestión adecuados y suficientes para dicho cargo, tendrá básicamente las
siguientes funciones:
Texto según decreto N° 705/97. Texto Anterior: artículo 10º. La presidencia del Consejo Directivo
de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA
(CONEAU) será ejercida por UNO (1) de sus integrantes designado por el voto de la mitad más uno
del total de sus miembros, quién ejercerá la representación de la Comisión y conducirá las reuniones
del Consejo. El cargo será ejercido por el término de UN (1) año, no pudiendo su presidente ser
reelegido. Por el mismo procedimiento y término se designará UN (1) Vicepresidente que sustituirá
al Presidente en caso de ausencia de éste.
9
Texto según decreto N° 705/97. Texto anterior: a) asistir a las reuniones del Consejo Directivo,
con voz pero sin voto;
b) organizar los procesos de evaluación y acreditación;
c) apoyar la labor integral de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU);
d) organizar, dirigir y supervisar las tareas del personal que integre la estructura;
e) prestar asistencia a los miembros de la Comisión;
f) organizar y coordinar cursos y seminarios de especialización obligatorios para los
integrantes del Comité de Pares;
g) presentar anualmente a la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) el proyecto de presupuesto para el
año entrante;10
h) realizar las demás actividades que le asigne la reglamentación.
TITULO IV
DE LAS COMISIONES ASESORAS
Y DE LOS COMITE DE PARES
10
Texto según decreto N° 705/97. Texto anterior: g) presentar anualmente al Consejo Directivo el
proyecto de presupuesto para el año entrante;
11
Texto según decreto N° 705/97. Texto Anterior artículo 14º. La COMISION NACIONAL DE
EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) formará Comisiones
Asesoras para cada una de sus funciones específicas, compuestas por un número variable de
miembros, todos ellos personas de reconocido prestigio y experiencia académica, profesional o en
gestión institucional, escogidos en consulta con los organismos universitarios, académicos,
científicos, administrativos, profesionales y empresariales pertinentes. Los miembros de las
Comisiones rotarán periódicamente. En cada Comisión participará necesariamente por lo menos UN
(1) miembro del Consejo Directivo, quien la coordinará. Las Comisiones Asesoras emitirán
opiniones respecto de cada uno de los asuntos sometidos a su consideración por el Consejo
Directivo, sin que ellas tengan carácter vinculante.
Artículo 15º. A los fines de contar con recomendaciones técnicas en los distintos trámites
sobre los que corresponda la participación de la COMISION NACIONAL
DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU),
ésta constituirá en forma ad-hoc Comité de Pares que estarán integrados por
expertos y se organizarán en base a áreas disciplinarias o profesionales para
cada trámite de que se trate. Los pares evaluadores aplicarán en cada caso los
criterios, estándares y procedimientos aprobados por la COMISION
NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA
(CONEAU), en los cuales serán debidamente instruidos.
Artículo 16º. A los fines de la conformación de las Comisiones Asesoras y de los Comité
de Pares, la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) formará y mantendrá
actualizado un registro de expertos, por áreas disciplinarias y profesionales,
que reúnan las condiciones necesarias a esos efectos, procurando que la
misma esté integrada también por potenciales evaluadores del exterior. Para
conformar dicho registro la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) consultará a las
universidades y a las asociaciones científicas y profesionales
correspondientes a fin de recibir sugerencias al respecto.
Artículo 18º. Los miembros de las Comisiones Asesoras y de los Comité de Pares
percibirán las sumas compensatorias que, para cada caso y de conformidad
con las particularidades del trabajo que se les encomiende, fije el señor
Ministro de Cultura y Educación, con intervención de la COMISION
TECNICA ASESORA DE POLITICA SALARIAL DEL SECTOR
PUBLICO, cuando corresponda.12
TITULO V
DE LAS FUNCIONES
CAPITULO 1
DE LA EVALUACION
12
Texto según decreto N° 705/97. Texto anterior: artículo 18º. Los miembros de las Comisiones
Académicas y de los Comité de Pares percibirán las sumas compensatorias que, para cada caso y de
conformidad con las particularidades del trabajo que se les encomiende, fije el señor Ministro de
Cultura y Educación, con intervención de la COMISION TECNICA ASESORA DE POLITICA
SALARIAL DEL SECTOR PUBLICO.
Artículo 19º. A los efectos de dar comienzo a los procesos de evaluación institucional
externa previstos en el artículo 44º de la Ley N° 24.521, la COMISION
NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA
(CONEAU) preparará una agenda escalonada procurando contemplar los
requerimientos y propuestas de cada universidad, la que no podrá extenderse
a más de DIECIOCHO (18) meses computados desde la constitución del
cuerpo.
CAPITULO 2
DE LA ACREDITACION
CAPITULO 3
DE LOS DICTAMENES PARA EL
FUNCIONAMIENTO DE UNIVERSIDADES ESTATALES
Y LA AUTORIZACION DE UNIVERSIDADES PRIVADAS
Texto según decreto N° 705/97. Texto anterior: artículo 20º. Los procesos de autoevaluación y
evaluación externa que se encuentren actualmente en trámite o concluidos, en función de convenios
entre las universidades y el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, se considerarán
válidos a los fines previstos en la Ley N" 24.521.
Artículo 24º. Los expedientes en los que se tramitan solicitudes de autorización provisoria
para el funcionamiento de universidades privadas que se encontraban, a la
fecha de sanción de la Ley N° 24.521, en condiciones de pasar a la Comisión
Consultiva prevista por los artículos 11º y 12º del Decreto N° 2.330/93,
deberán ser remitidos a la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) a los fines de su
tratamiento directo por el cuerpo, teniendo por válidos los trámites
cumplidos. En los demás trámites le imprimirá el tratamiento que se estime
conveniente.14
TITULO VI
DE LAS NORMAS COMPLEMENTARIAS
Artículo 27º. Sin perjuicio del cumplimiento de los trámites que prevea la reglamentación
específica, el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION deberá
efectuar, antes de remitir los antecedentes respectivos a la COMISION
NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA
(CONEAU) en los casos en que correspondiera su intervención, un juicio de
admisibilidad a fin de comprobar que se hayan cumplimentado los requisitos
formales indispensables.
Texto según decreto N° 705/97. Texto Anterior artículo 24º. Los expedientes en los que se tramitan
solicitudes de autorización provisoria para el funcionamiento de universidades privadas que se
encontraban, a la fecha de sanción de la Ley N° 24.521, en condiciones de pasar a la Comisión
Consultiva prevista por los artículos 11º y 12º del Decreto N° 2.330/93, deberán ser remitidos a la
COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA
(CONEAU) a los fines de su tratamiento directo por el Consejo Directivo, teniendo por válidos los
trámites cumplidos. En los demás trámites se imprimirá el tratamiento que se estime conveniente.
constituido el cuerpo, un proyecto de reglamento interno compatible con las
disposiciones de la Ley N° 24.521 y las del presente decreto.15
Artículo 29º. Hasta tanto se incorpore en el Presupuesto General de la Nación una partida
especial para la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU), los gastos que demande
su funcionamiento serán financiados con cargo al presupuesto del
MINISTERIO DE CULTURAY EDUCACION. Artículo 2º, Decreto N°
705/97.- Establécese que el desempeño como miembro de la COMISION
NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA
(CONEAU) no resulta incompatible con ninguna otra actividad educativa o
en instituciones de educación superior, públicas o privadas y de la
investigación científica.
Artículo 30º. Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial
y archívese.
15
Texto según decreto N° 705/97. Texto anterior: artículo 28º. El Director Ejecutivo deberá someter
al Consejo Directivo para su consideración y aprobación, dentro de los SESENTA (60) días de
constituido el cuerpo, un proyecto de reglamento interno compatible con las disposiciones de la Ley
N° 24.521 y las del presente decreto.
DECRETO P.E.N. N° 576
CONSIDERANDO:
Que resulta necesario reglamentar las previsiones de dicha ley relacionadas con
la creación, seguimiento y fiscalización de instituciones universitarias privadas.
Que a tal fin, además de la normativa específica relacionada con los nuevos
institutos creados por la Ley N° 24.521, se ha tomado en consideración la valiosa
experiencia arrojada por la aplicación del Decreto N° 2.330 del 11 de noviembre de 1993.
Por ello,
CAPITULO I
DE LAS FACULTADES DEL MINISTERIO
Artículo 8º. La institución que hubiere obtenido la autorización provisoria no podrá dar
comienzo a las actividades académicas hasta tanto se cumplimenten los
siguientes recaudos a través del MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION:
a) Aprobación de los estatutos.
b) Aprobación de los planes de estudio de las carreras autorizadas en el
decreto de habilitación.
c) Acreditación del cumplimiento de todas las exigencias establecidas
en el artículo 4º del presente decreto y de los compromisos asumidos. así
como de la habilitación de los edificios por los organismos pertinentes y
verificación de dichos extremos por parte del Ministerio.
CAPITULO III.
DE LAS INSTITUCIONES UNIVERSITARIAS
CON AUTORIZACION PROVISORIA
Artículo 9º. Las instituciones universitarias autorizadas en forma provisoria tendrán que
indicar dicha circunstancia en todos sus anuncios, publicaciones y
documentación, agregando debajo o a continuación del nombre la siguiente
leyenda: "Autorizada provisoriamente por DECRETO del PODER
EJECUTIVO NACIONAL N°..., conforme a lo establecido en el artículo 64º
inciso c) de la Ley N° 24.521". En caso de incumplimiento, la institución se
hará pasible de las sanciones dispuestas en los artículos 22º inciso e) y 24º
del presente.
Artículo 10º. Las instituciones universitarias con autorización provisoria deberán elevar al
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION un informe anual dentro de
los TRES (3) meses de finalizado cada año lectivo, señalando los avances
realizados y evaluándolos con respecto al grado de cumplimiento de sus
objetivos institucionales y académicos y planes de acción. Dicho informe se
elaborará conforme a las pautas que establezca el MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION.
Artículo 12º. Una vez transcurrido el lapso previsto en el artículo 65º de la Ley N° 24.521,
el establecimiento podrá solicitar el reconocimiento definitivo para operar
como institución universitaria privada, a cuyo fin deberá acompañar la
siguiente documentación:
a) Acreditación de la personería del representante.
b) Copia autenticada de la resolución del órgano competente de la
institución pertinente, por la cual se decide solicitar la autorización
definitiva.
c) Datos personales y antecedentes educativos, académicos y de
investigación completos de las personas integrantes de los órganos de
gobierno de la entidad peticionante, con indicación de los cargos que
desempeñan.
d) Indicación detallada y actualizada de 1a composición del patrimonio
del establecimiento, con determinación de su origen y fechas de
adquisición y copia autenticada por Escribano Público de los títulos de
propiedad de los bienes registrables.
e) Nómina completa del personal directivo, docente, técnico y
administrativo del establecimiento, con indicación de título,
antecedentes, cargos y dedicación.
f) Copias autenticadas del estatuto académico y de las reglamentaciones
internas.
g) Presupuesto financiero con indicación de origen y destino de los
recursos, que acredite la posibilidad del normal desarrollo de las
actividades docente y de investigación de la institución.
h) Informe con la evaluación de los logros alcanzados en los SEIS (6)
años de gestión, en relación con el proyecto institucional inicial; copia de
las evaluaciones externas efectuadas en ese lapso; copia de los informes
de las fiscalizaciones efectuadas por el MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION.
i) Memoria general de la institución en 1a que conste su evolución
desde la fundación; los resultados obtenidos; 1a actividad docente y de
investigación desarrollada; las instalaciones, y estadísticas generales con
especial indicación de la evolución de la matricula, del número de
alumnos aprobados y reprobados y del número de graduados y
desertores, con discriminación por año académico, facultades, escuelas,
carreras y títulos. Asimismo deberán acreditar relaciones institucionales
con universidades e instituciones académicas nacionales y del extranjero.
j) Los resultados de una autoevaluación institucional realizada dentro
del año anterior a la presentación de la solicitud definitiva.
k) Evaluación externa de la COMISION NACIONAL DE
EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) o
una entidad privada de evaluación y acreditación reconocida.
l) Copia de los informes anuales presentados según lo dispuesto en el
artículo 10º desde su autorización provisoria.
m) Un proyecto de desarrollo institucional para los SEIS (6) años
siguientes, en el que se detallará, entre otros, los cambios que serán
introducidos en las unidades docentes o de investigación y la apertura o
cierre de los programas previstos para ese período.
CAPITULO V.
DE LAS MODIFICACIONES Y REFORMAS
Artículo 15º. Sólo podrá autorizarse a las instituciones universitarias privadas a crear
sedes o unidades académicas equivalentes fuera de la jurisdicción que les es
propia, cuando se den las circunstancias de excepción previstas en el artículo
3° del presente decreto.
Artículo 17º. En los casos en que las instituciones privadas con autorización provisoria
soliciten autorización para la creación de nuevas carreras, facultades,
institutos, escuelas, departamentos, grados o títulos y cambio de planes de
estudio el MINISTERIO IJE CULTURA Y EDUCACION recabará la
opinión del CONSEJO DE RECTORES DE UNIVERSIDADES
PRIVADAS (CRUP), el cual deberá expedirse en el término de TREINTA
(30) días hábiles y de expertos convocados al electo los que se expedirán
dentro del mismo plazo. De tales dictámenes se dará vista al peticionante por
el término perentorio de QUINCE (15) días hábiles, para que formule las
observaciones que considere adecuadas. Con su resultado, el señor Ministro
de Cultura y Educación dictará la resolución correspondiente.
Artículo 18º. Las instituciones universitarias privadas con autorización definitiva deberán
comunicar al MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION las
modificaciones introducidas a sus estatutos académicos o normativa
equivalente, con copia de las mismas, a los fines previstos en el artículo 34º
de la Ley N° 24.521.
CAPITULO VI
DE LAS CERTIFICACIONES DE TITULOS
Artículo 21º. Las instituciones universitarias privadas con autorización definitiva podrán
expedir los diplomas de sus egresados sin intervención previa del
MINISTERICO DE CULTURA Y EDUCACION, dando cuenta al mismo
de los diplomas que se expidan con los datos de los egresados, dentro de los
TREINTA (30) días de otorgados. Tendrán como único requisito para su
validez la autenticación por parte del MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION de las firmas de las autoridades que los expidan.
CAPITULO VII
DE LA FISCALIZACION Y SEGUIMIENTO ACADEMICO
Artículo 22º. A los electos del seguimiento académico y fiscalización de las instituciones
el MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION podrá disponer las
medidas que considere adecuadas y en particular las siguientes:
a) Examinar los libros, registros y documentación relacionados con la
actividad académica, administrativa y financiera de las instituciones
autorizadas. Los libros de actas de sesiones de los órganos de gobierno
del establecimiento y de actas de exámenes, deberán ser rubricados y
foliados por e1 órgano competente del MINISTERIO DE CULTURA Y
EDUCACION.
b) Disponer inspecciones en los establecimientos cuando observare o
tuviere conocimiento de irregularidades, de actos violatorios de las leyes,
decretos y estatutos que los rigen o cuando fuere necesario para el
cumplimiento de los deberes conferidos al MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION, por la ley N° 24.521 y por su normativa
reglamentaria.
c) Disponer las medidas necesarias para dar cumplimiento a lo previsto
en el artículo 64º inciso a) de la Ley N° 24.521, a cuyo efecto el
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION dictará la normativa
pertinente en cuanto a requisitos y procedimientos.
d) Requerir la colaboración de las autoridades competentes.
e) Prohibir la circulación y secuestrar las publicaciones cuyo texto no se
ajuste a las normas del artículo 64º inciso c) de la Ley N° 24.521.
f) Expedir certificaciones y testimonios en las actuaciones en las cuales
intervenga, y, determinar las condiciones formales de los certificados y
diplomas.
Artículo 24º. Las instituciones privadas autorizadas que no den cumplimiento a las
obligaciones impuestas por la Ley N° 24.521, su normativa reglamentaria o
los estatutos respectivos, estarán sujetas a las siguientes sanciones:
a) Llamado de atención.
b) Apercibimiento.
c) Intimación al establecimiento a que suspenda sus actividades.
d) Intervención por tiempo determinado.
e) Clausura definitiva, total o parcial.
Las sanciones previstas en los incisos a), b) y c) podrán ser dispuestas por el
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION. Las previstas en los incisos
d) y e) deberán ser dispuestas por decreto del PODER EJECUTIVO
NACIONAL.
CAPITULO VIII
DE LAS TASAS DE SERVICIOS Y CONTRIBUCIONES ECONOMICAS
Artículo 27º. A los finés de la realización de los trámites que se indican a continuación, las
instituciones privadas deberán abonar las siguientes tasas:
a) Solicitud de autorización provisoria y definitiva: Pesos DIEZ MIL
($10.000)
b) Solicitud de autorización para la creación de una nueva sede,
facultad, escuela, instituto, departamento, carrera, grado y título: Pesos
DOS MIL ($2.000)
CAPITULO IX
DISPOSICIONES TRANSITORIAS
Artículo 29º. Las instituciones universitarias privadas con autorización otorgada con
anterioridad a la vigencia de este decreto, deberán presentar los objetivos
institucionales y plan de acción a que hace referencia el artículo 4° inciso g),
en el plazo que establezca la normativa que dicte el MINISTERIO DE
CULTURA Y EDUCACION.
Artículo 30º. Las instituciones universitarias a las que se hubiera otorgado autorización
provisoria por resolución ministerial en virtud de la delegación de facultadas
establecidas en el Decreto N° 101/85, darán cumplimiento a la exigencia del
artículo 64º inciso c) de la Ley N° 24.521 consignando esa circunstancia y el
número de la resolución respectiva.
Artículo 31º. Las solicitudes de autorización para la reforma de los estatuto, creación de
nuevas carreras, facultades, escuelas, institutos, departamentos, grados,
títulos y modificación de planes de estudio presentadas con anterioridad a la
entrada en vigencia de la Ley N° 24.521 por las instituciones universitarias
con autorización definitiva que se hallaban sujetas a la Prueba Final de
Capacidad Profesional, se entenderán como comunicaciones en los término;
de los artículos 18º y 19º del presente decreto.
Artículo 32º. La previsión del artículo 2º1 del presente decreto será de aplicación a los
títulos expedidos por las instituciones universitarias con autorización
definitiva que se hallaban sujetas a la Prueba Final de Capacidad Profesional
con anterioridad a la entrada en vigencia de la Ley N° 24.521.
Artículo 33º. Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial
y archívese.
DECRETO P.E.N. N° 455
CONSIDERANDO:
Que a los efectos de evitar que cualquier institución educativa de nivel terciario
utilice la denominación de Colegio Universitario, sin respetar las pautas que garanticen los
niveles de calidad que se pretenda que tales instituciones tengan, resulta necesario y
conveniente que el PODER EJECUTIVO NACIONAL ejerza la potestad reglamentaria
establecida en el artículo 99º, inciso 2°) de la CONSTITUCION NACIONAL.
Por ello,
Artículo 1º. A los electos de ser categorizadas como Colegios Universitarios, y de poder
usar tal denominación, las instituciones de nivel superior no universitario o
la jurisdicción a la que ellas pertenezcan deberán cumplimentar ante la
autoridad de aplicación los siguientes requisitos:
Artículo 2º. El convenio a que se refiere el artículo anterior deberá ajustarse a las
siguientes pautas:
a) Las instituciones de educación superior no universitaria que pretendan ser categorizadas
como Colegios Universitarios, podrán celebrar el convenio por sí o a través de la
jurisdicción educativa competente de conformidad con las normas jurisdiccionales.
b) El convenio deberá ser firmado con una o más universidades integrantes del Sistema
Universitario Nacional. En ningún caso se admitirá que los convenios sean celebrados
por facultades, departamentos u otras unidades académicas de las universidades.
c) En el caso de que el convenio sea suscripto con una universidad privada que cuente con
autorización provisoria o con una universidad nacional en proceso de organización, se
requerirá que la institución universitaria cuente con autorización específica previa del
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION, el que para su otorgamiento evaluará
los procedimientos y mecanismos previstos en el convenio, en especial los que se
estipulan en el presente decreto.
d) Las partes deberán acordar expresamente un procedimiento de acreditación periódica,
de asistencia académica y de seguimiento, por parte de la universidad, de todas las
carreras y programas de formación de la institución de educación superior no
universitaria. Dichas carreras y programas de formación no podrán tener una duración
superior a TRES (3) años.
e) Las partes deberán acordar mecanismos y compromisos concretos tendientes a asegurar
el respeto de las pautas y criterios de calidad establecidos por el CONSEJO DE
UNIVERSIDADES y el CONSEJO FEDERAL DE CULTURA Y EDUCACION.
f) El convenio deberá prever que, en caso de denuncia del mismo por alguna de las partes,
se respetará el derecho de los alumnos que hubieren comenzado sus estudios en la
institución conformada como Colegio Universitario, a concluirlos en el mismo carácter
con que los iniciaron.
Artículo 8º. En todos los casos los Colegios Universitarios deberán agregar, en sus
anuncios, publicaciones y documentación, abajo o a continuación del
nombre con que se identifican, la leyenda <<ESTABLECIMIENTO DE
NIVEL TERCIARIO>>, debiéndose hacer constar asimismo el número de
resolución que hace lugar a la registración del convenio. El MINISTERIO
DE CULTURA Y EDUCACION fijará las sanciones que corresponda por la
violación de la presente norma, las que podrán llegar al retiro del registro
efectuado.
Artículo 9º. Las instituciones que no cuenten con convenios debidamente registrados en
la forma prevista en el artículo 5° del presente decreto, no podrán usar la
denominación de Colegios Universitarios. La violación de esta norma dará
lugar a la aplicación de las sanciones previstas en el artículo 68º de la Ley N°
24.521.
Artículo 10º. Las instituciones que, con anterioridad al presente decreto, hubieren
suscripto convenios con universidades a los fines indicados en el artículo 22º
de la Ley N° 24.521, deberán adecuarlos a las exigencias previstas en los
artículos precedentes en un plazo no superior a los CIENTO VEINTE (120)
días.
Artículo 12º. Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial
y archívese.
RESOLUCIÓN MCyE N° 1807
VISTO los artículos 45º de la Ley N° 24.521 y 4° del Decreto N° 499 del 22 de
septiembre de 1995, y
CONSIDERANDO:
Por ello,
CAPITULO I
DEL RECONOCIMIENTO DE ENTIDADES
PRIVADAS DE ACREDITACIÓN Y EVALUACION UNIVERSITARIA
CAPITULO II
DEL SEGUIMIENTO DE LAS ACTIVIDADES
DE LAS ENTIDADES PRIVADAS
DE ACREDITACION Y EVALUACION UNIVERSITARIA
Artículo 13º. A esos fines dichas entidades deberán presentar ante la DIRECCION
NACIONAL DE GESTION UNIVERSITARIA, en caso de serles requerida,
copia de todos sus dictámenes, incluyendo las evaluaciones de los comités de
pares y los dictámenes de las Comisiones Asesoras. Deberán asimismo
confeccionar y publicar anualmente una memoria con los resultados de sus
actividades, con indicación de las instituciones evaluadas y las carreras
acreditadas, la composición de los Comités de Pares respectivos y las
modificaciones que se hubieran producido en su patrimonio e infraestructura.
Artículo 16º. Como resultado de las opiniones producidas por la COMISION NACIONAL
DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) y
de los procedimientos de fiscalización previstos en los artículos anteriores, la
DIRECCION NACIONAL DE GESTION UNIVERSITARIA podrá
efectuar recomendaciones a la institución o proponer a la superioridad en
casos graves, los correctivos que deban adoptarse.
CAPITULO III
DE LOS ORGANOS DE CONDUCCION DE LAS ENTIDADES PRIVADAS
DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA
Artículo 18º. Los integrantes del órgano colegiado de las entidades privadas de evaluación
y acreditación universitaria serán personalidades de reconocida jerarquía
académica, científica o profesional, y ejercerán sus funciones a título
personal y con total independencia de criterio.
Artículo 19º. Por lo menos un tercio de los integrantes de dicho órgano serán escogidos
entre personalidades nominadas por Academias Nacionales a solicitud de la
entidad.
Artículo 20º. Por lo menos un tercio de los integrantes de dicho órgano deberán ser
personalidades que, contando con los antecedentes indicados en el artículo
18º de esta reglamentación, no tengan durante su actuación en ese órgano
vinculación laboral o contractual con ninguna institución universitaria
argentina.
Artículo 21º. Los integrantes del órgano colegiado gozarán, durante el período por el que
fueron elegidos, que no podrá ser inferior a TRES (3) años, de estabilidad en
sus cargos y no podrán ser destituidos sino por decisión del propio órgano, o
por causas debidamente fundadas que justifiquen la medida.
CAPITULO IV
DE LOS PATRONES Y ESTANDARES
PARA LOS PROCESOS DE EVALUACION Y ACREDITACION
CONSIDERANDO:
Que con la finalidad de lograr una mayor precisión respecto de la fijación de sus
retribuciones, los miembros de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) solicitan la sustitución del artículo 6°
del Decreto N° 173/96 por una norma que determine los organismos competentes para ello.
Que, asimismo, el artículo 47º de la Ley N° 24.521 ya mencionado, establece que los
miembros de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION
UNIVERSITARIA (CONEAU) “serán personalidades de reconocida jerarquía académica y
científica”, lo que supone que deben tener actuación en gestión educativa en instituciones
de la educación superior, públicas o privadas y de la investigación científica.
Que, asimismo, y de acuerdo con a lo solicitado por sus propios miembros, resulta
oportuno eliminar el impedimento que para la reelección del Presidente del cuerpo
establece el artículo 10º del Decreto N° 173/96 ya citado.
Que las modificaciones solicitadas por el propio cuerpo a la norma que reglamenta su
funcionamiento no alteran sustancialmente el criterio que la inspirara, por lo que, si con ello
se entiende contribuir a su mayor precisión, resulta razonable acceder a lo peticionado.
Que, con idéntica finalidad, resulta necesario introducir modificaciones en los artículos
18º y 20º de aquella norma.
Por ello,
DECRETA:
ARTICULO 1°.- Sustitúyense los artículos 2°, 4°, 5°, 6°, 7°, 8°, 10º, 12º incisos a) y g),
14º, 18º, 20º, 24º y 28º del Decreto N° 173 del 21 de febrero de 1996, los que quedarán
redactados de la siguiente forma:
“ARTICULO 7°.- El miembro que dejara de concurrir a TRES (3) sesiones consecutivas de
la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA
(CONEAU) sin causa justificada, será considerado renunciante, debiendo ser reemplazado
por otro elegido según el procedimiento previsto en el artículo 47º de la Ley N° 24.521.
Asimismo la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION
UNIVERSITARIA (CONEAU), por el voto de los DOS TERCIOS (2/3) del total de sus
miembros, podrá solicitar por razones fundadas que se reemplace a UNO (1) de sus
integrantes que no diera debido cumplimiento a sus obligaciones, en cuyo caso la
institución que lo nominó deberá proponer un nuevo candidato”.
“ARTICULO 12.- El Director Ejecutivo, quien deberá contar con antecedentes académicos
y de gestión adecuados y suficientes para dicho cargo, tendrá básicamente las siguientes
funciones:
a) asistir a las reuniones de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU), con voz pero sin voto;
b) organizar los procesos de evaluación y acreditación;
c) apoyar la labor integral de la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU);
d) organizar, dirigir y supervisar las tareas del personal que integre la estructura;
e) prestar asistencia a los miembros de la Comisión;
f) organizar y coordinar cursos y seminarios de especialización obligatorios para los
integrantes del Comité de Pares;
g) presentar anualmente a la COMISION NACIONAL DE EVALUACION Y
ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) el proyecto de presupuesto para el
año entrante;
h) realizar las demás actividades que le asigne la reglamentación.
“ARTICULO 18º.- Los miembros de las Comisiones Asesoras y de los Comités de Pares
percibirán las sumas compensatorias que, para cada caso y de conformidad con las
particularidades del trabajo que se les encomiende, fije el señor Ministro de Cultura y
Educación, con intervención de la COMISION TECNICA ASESORA DE POLITICA
SALARIAL DEL SECTOR PUBLICO, cuando corresponda”.
ARTICULO 3°.- Derógase el artículo 9° del Decreto N° 173 del 21 de febrero de 1996.
VISTO los artículos 45º y 46º inciso b) de la Ley N° 24.521 y el Acuerdo Plenario N°
6 del CONSEJO DE UNIVERSIDADES de fecha 1° de julio de 1997, y
CONSIDERANDO:
Que conforme lo disponen los referidos artículos 45º y 46º, inciso b), corresponde a
este Ministerio fijar, en consulta con el CONSEJO DE UNIVERSIDADES, los estándares
que deben aplicar en los procesos de acreditación de carreras de posgrado la COMISION
NACIONAL DE EVALUACION Y ACREDITACION UNIVERSITARIA (CONEAU) y
las entidades privadas que se constituyan con fines de evaluación y acreditación de
instituciones universitarias.
Que las facultades para dictar el presente acto resultan de lo dispuesto en los
mencionados artículos 45º y 46º inciso b) de la Ley N° 24.521.
Por ello,
VISTO los artículos 24º de la Ley Federal de Educación N° 24.195 y 74º de la Ley
de Educación Superior N° 24.521, y
CONSIDERANDO:
Que tampoco corresponde dictar reglamentación general alguna con relación a las
universidades "alternativas" o "experimentales", también mencionadas en el artículo citado,
pues tales denominaciones no remiten a ningún tipo especifico de organización
institucional o metodología pedagógica, por lo cual las normas que eventualmente pudieran
aplicárseles serán las correspondientes a las instituciones universitarias afines o bien tener
alcance necesariamente particular.
Que por ello la solución más conveniente, al menos mientras no se cuente con una
mayor experiencia, es la de facultar al MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION
para dictar las normas necesarias de acuerdo con la realidad de los casos concretos que
vayan presentándose, todo ello sin perjuicio de las atribuciones propias del Poder Ejecutivo
Nacional, en el acto de la puesta en marcha de una institución universitaria nacional, de
autorización de una institución universitaria privada, o de reconocimiento de una institución
universitaria provincial.
Que sin perjuicio de ello, corresponde precisar por vía reglamentaria del artículo 74º
de la Ley N° 24.521 algunos aspectos fundamentales que resultan de aplicación a cualquier
modalidad innovadora, a fin de que sean tenidos en cuenta en las disposiciones que dicte el
referido ministerio.
Por ello,
e) Que cualquiera sea la modalidad adoptada, las instituciones a las que se refiere el
artículo 2° queden sometidas al régimen de títulos y de evaluación institucional
previstos por la Ley N° 24.521.
Artículo 4°.- Comuníquese, publíquese, dese a la Dirección Nacional del Registro Oficial y
archívese.