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Los ojos, son uno de los órganos de los sentidos más importantes de
nuestro cuerpo humano, son un regalo de DIOS para que
contemplemos la belleza de su creación y para que caminemos sin
tropezarnos.
También sabemos que una de las consecuencias fatales
del PECADO cometido por ADAN y EVA es la CEGUERA ESPIRITUAL.
Desde ese preciso momento ellos se escondieron de la presencia
de DIOS y no volvieron a verlo físicamente, y así sigue la humanidad in-
conversa hasta hoy.
Muchos; solo oímos hablar de DIOS, pero pocos podemos decir que lo
hemos visto, espiritualmente hablando. Una de las causas de no verlo,
es que queremos verlo materializado frente a nosotros, poder palparlo y
solo así poder decirle a otros que lo hemos visto físicamente, pero los
que hemos leído la PALABRA de DIOS sabemos que a DIOS no se le
vera si antes no hemos sido transformados en SANTIDAD,
el PECADO nos impide ver su luz ya que esta es tan pura y fuerte que
a simple vista humana es IMPOSIBLE verle.
Hebreos 12:14Reina-Valera 1960 (RVR1960)
14
Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor.
Pero es de saber que esta ceguera espiritual tiene cura, así como
cuando echamos colirio a nuestros ojos una vez detectamos una
infección en ellos.
Nuestro SEÑOR JESUS CRISTO quien es nuestro sanador directo, nos
recomienda echar diariamente COLIRIO a nuestros ojos espirituales. Y
me preguntaras: ¿Cuál es el colirio espiritual? La respuesta es LA
PALABRA DE DIOS, allí encontraras la luz que tus ojos espirituales
necesitan para VER A DIOS.
Una vez inicias el tratamiento, poco a poco tus ojos ciegos comienzan a
ver como lo hizo el ciego una vez el SEÑOR JESUS le coloco el
medicamento en sus ojos.
Ceguera espiritual
35
Oyó Jesús que le habían expulsado; y hallándole, le dijo: ¿Crees tú en
el Hijo de Dios?
36
Respondió él y dijo: ¿Quién es, Señor, para que crea en él?
37
Le dijo Jesús: Pues le has visto, y el que habla contigo, él es.
38
Y él dijo: Creo, Señor; y le adoró.
39
Dijo Jesús: Para juicio he venido yo a este mundo; para que los que
no ven, vean, y los que ven, sean cegados.
40
Entonces algunos de los fariseos que estaban con él, al oír esto, le
dijeron: ¿Acaso nosotros somos también ciegos?
41
Jesús les respondió: Si fuerais ciegos, no tendríais pecado; mas ahora,
porque decís: Vemos, vuestro pecado permanece.
Cuando usted humanamente cree estar viendo 20/20, su visión es igual
a un OASIS en el desierto, solo son VISIONES FALSAS que aparentan
ser pero no son. Las religiones son eso, un OASIS en su camino, su
estado actual le hace ver y oír alucinaciones que a la postre lo conducen
a la muerte segunda que es la Espiritual y que a la postre debe
preocuparle ya que esta es eterna.
Lucas 6:39-7:10Reina-Valera Antigua (RVA)
39
Y les decía una parábola: ¿Puede el ciego guiar al ciego? ¿No caerán
ambos en el hoyo?
40
El discípulo no es sobre su maestro; mas cualquiera que fuere como el
maestro, será perfecto.
41
¿Por qué miras la paja que está en el ojo de tu hermano, y la viga que
está en tu propio ojo no consideras?
42
¿O cómo puedes decir á tu hermano: Hermano, deja, echaré fuera la
paja que está en tu ojo, no mirando tú la viga, que está en tu ojo?
Hipócrita, echa primero fuera de tu ojo la viga, y entonces verás bien
para sacar la paja que está en el ojo de tu hermano.
43
Porque no es buen árbol el que da malos frutos; ni árbol malo el que
da buen fruto.
44
Porque cada árbol por su fruto es conocido: que no cogen higos de los
espinos, ni vendimian uvas de las zarzas.
45
El buen hombre del buen tesoro de su corazón saca bien; y el mal
hombre del mal tesoro de su corazón saca mal; porque de la abundancia
del corazón habla su boca.
46
¿Por qué me llamáis, Señor, Señor, y no hacéis lo que digo?
47
Todo aquel que viene á mí, y oye mis palabras, y las hace, os
enseñaré á quién es semejante:
48
Semejante es al hombre que edifica una casa, el cual cavó y ahondó,
y puso el fundamento sobre la peña; y cuando vino una avenida, el río
dió con ímpetu en aquella casa, mas no la pudo menear: porque estaba
fundada sobre la peña.
49
Más el que oyó y no hizo, semejante es al hombre que edificó su casa
sobre tierra, sin fundamento; en la cual el río dió con ímpetu, y luego
cayó; y fué grande la ruina de aquella casa.
Así como; no todo lo que brilla es oro, así no todo lo que ves es
realidad, EVA miro el árbol y le pareció agradable a sus ojos, dándonos
a entender que TODO entra por los ojos, pero no todo es lo que
aparenta ser. Tus ojos son la lámpara de tu cuerpo y si esta está
funcionando mal lo más probable es que no veas más allá de tus
narices.
Hoy muchos de los que hemos sido desordenados con el alcohol
perdemos la vista a temprana edad y por disposición médica y por
necesidad debemos colocarnos gafas o lentes de contacto, para poder
ejecutar nuestras labores.
CRISTO y sus verdaderos seguidores somos la LUZ del MUNDO, pero
así como la multitud no se percató de que JESUS pasaba por su lado
cuando se iba a bautizar, así tu no lo veras hasta que alguien
como JUAN el BAUTISTA quien no estaba ciego dijo:
Juan 1:29Reina-Valera 1960 (RVR1960)
El Cordero de Dios
El siguiente día vio Juan a Jesús que venía a él, y dijo: He aquí el
29
no se puede esconder.
La imagen de JESUS CRISTO en al Apocalipsis, es una imagen que se
manifiesta en diferentes funciones. Una de ellas, indica su papel como
responsable de la fe de su iglesia (Seguidores). Por esa razón, dirigió
mensajes a las 7 iglesias, de Éfeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardis,
Filadelfia y Laodicea.
Estos eran tiempos, en los que el Imperio Romano dominaban y
perseguían a los cristianos, e inducían a divisiones, influenciadas
malsanamente por el paganismo, entre otros males.
Jesús unge nuestros ojos con colirio
Apocalipsis 3:17-18Reina-Valera 1960 (RVR1960)
17
Porque tú dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa
tengo necesidad; y no sabes que tú eres un desventurado, miserable,
pobre, ciego y desnudo.
18
Por tanto, yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego,
para que seas rico, y vestiduras blancas para vestirte, y que no se
descubra la vergüenza de tu desnudez; y unge tus ojos con colirio, para
que veas.
JESUS era consciente de la situación de la iglesia y la de sus discípulos,
así como sucede en estos tiempos. Hay una serie de situaciones que
vivimos en nuestros tiempos que ponen a prueba la fe en CRISTO. Por
ejemplo, los asuntos económicos y los afanes de este mundo por
conseguir cosas que aparentemente son necesarias, pero pasajeras.
En tiempos actuales, el escenario económico prima ante cualquier otra
necesidad y el hombre hace lo que sea para lograr su cometido que es
la de, llenarse los bolsillos para tener seguridad de tener una buena
calidad de vida.
Veamos un poco los diferentes tipos de lentes.Cómo y cuándo fueron creados. Un(a) lente es un medio u
objeto que concentra o hace divergir rayos de luz. Muchos descubrimientos fueron realizados por personas
muy observadoras.
Por ejemplo el matemático, físico e inventor griego llamado Herón de Alejandría que vivió en el siglo I.
Él advirtió que en la naturaleza los procesos que involucraban un trabajo utilizan la menor cantidad de energía
posible; su descubrimiento derivó en el llamado principio del mínimo. Este principio sostiene que cuando una
partícula se desplaza de un lugar a otro utiliza la distancia más corta.
Tuvieron que transcurrir dieciséis siglos para que el matemático francés Pierre de Fermat (1601-1665)
demostrara que el principio del mínimo también está presente en la refracción de la luz. Por él sabemos que
la trayectoria real que sigue un rayo de luz entre dos puntos es aquella en la que emplea un tiempo mínimo
para recorrerla. La velocidad a que viaja la luz depende del medio que esté atravesando; en un medio vacío
viaja a máxima velocidad, pero dentro de un diamante, por ejemplo, viajará más lento.
En general, la velocidad de la luz es menor en sustancias de mayor densidad. Cuando un haz de luz pasa de un
medio a otro sufre modificaciones.
Parte de la luz se refleja (reflexión) al incidir sobre la superficie del segundo medio y parte penetra cambiando
de trayectoria (refracción).
Una aplicación muy importante de la reflexión y refracción de la luz se encuentra en las lentes con que
enfocamos algún objeto.
Una lente es un medio transparente limitado por dos superficies curvas. Una onda incidente sufre dos
refracciones al pasar a través de la lente, una al entrar y otra al salir. Por su forma, y por la forma en que se
comportan al ser atravesadas por un rayo de luz pueden ser convergentes y divergentes.
Las lentes convergentes son más gruesas por el centro que por los extremos, mientras que las divergentes son
más gruesas por los extremos que por el centro.
Entre las lentes más usadas se cuentan las utilizadas para corregir los problemas de visión, los anteojos.
También se usan lentes, o combinaciones de lentes y espejos, en telescopios y microscopio
Una de las teorías más aceptadas es que la miopía es mayoritariamente hereditaria, comprobado en un 89% de
los estudios recientes que han identicado genes que pueden ser los responsables.
Es generalmente descubierto durante los años de pubertad (entre los 8 y los 12 años). Se caracteriza porque
usualmente empeora durante la adolescencia y luego se estabiliza cuando la persona alcanza la adultez.
Otra teoría es que la miopía es causada por un debilitamiento del músculo ciliar que no es capaz de ajustar la
lente lo suficiente como para enfocar a lejana distancia, causando que objetos alejados se vean borrosos. Esta
teoría afirma que el debilitamiento muscular es causado por exceso de trabajo a corta distancia, como la
lectura o el uso del monitor de la computadora. Dado que el ojo no tiene que enfocar a lejana distancia, éste
músculo tiende a usarse poco y, como consecuencia, se debilita. En vez de lentes, recomiendan el uso de
ejercicios visuales para fortalecer al músculo. Otras teorías sugieren que el ojo se fuerza por el constante
trabajo a corta distancia y se queda en esa posición, algo que los ejercicios pueden corregir mediante la
relajación de éste músculo.
Tratamiento
Un ojo miope no puede enfocar objetos situados más allá de una determinada distancia denominada punto
remoto. En una persona sin defectos ópticos el punto remoto se sitúa en el infinito. El punto más cercano en el
que un objeto puede encontrarse y ser enfocado por el ojo se denomina punto próximo y en un ojo sano y
joven se encuentra situado a 25 cm. del ojo. La miopía se corrige mediante una lente divergente capaz de
formar imágenes virtuales de objetos situados en el in nito en el punto remoto del ojo, donde éste puede
verlos.
Vamos a analizar paralelamente a la enfermedad visual llamada miopía, la enfermedad espiritual
llamada “Miopía espiritual” y el personaje bíblico sobre el que re exionaremos es: el apóstol Pedro.
Este personaje bíblico por su temperamento tan particular nos ayuda a re exionar desde muchos aspectos, en
nuestra propia vida espiritual.
Al analizar la imposibilidad de ver con claridad desde lejos, vino a mi mente una de las historias más
hermosas acerca del amor de Dios, por todas las personas, sin excepción, contrariamente a lo que creían la
mayoría de las personas judías.
En los días en que Jesús anduvo en esta tierra y aún después de su muerte y resurrección, el imperio romano
se hacía cada vez más poderoso y cada vez más odiado por los pueblos oprimidos, especialmente por Israel.
Antes de ascender al cielo Jesús había prometido su Espíritu Santo, ese poder “dúnamis” palabra griega que
significa (dinamita), para predicar a todo el mundo. Pero los discípulos no entendieron esta orden de Cristo y
predicaban en todo el mundo, mas no a todo el mundo.
Obviamente los que quedaban excluidos en primer término, eran los odiados romanos. Pero ese no era el plan
de Dios. Él tenía hijos fieles aún entre los romanos.
Uno de ellos era Cornelio, que según, Hechos capítulo 10 era de Cesarea, era un centurión y su compañía de
soldados se llamaba: “La Italiana”. Lo que sigue a continuación, antes de lo sucedido, no lo hubiese creído
ningún judío y menos aún el apóstol Pedro. En el versículo 2 se describe a Cornelio.
Escuchen bien: “Piadoso y temeroso de Dios y que hacía muchas limosnas al pueblo, y oraba a Dios
siempre”
Más increíble aún es el hecho de que este extranjero fue visitado por un ángel de cielo, quién le habló y le dio
una orden, mandar a buscar a Pedro. Le dio la dirección de Pedro con todos los detalles. (Versículos 4-6).
Pero volvamos a la miopía espiritual de Pedro. ¡Cuán lejana y distorsionada era la imagen de un Dios que
amaba a todos sin excepción! Pero el Señor mandó la cura para esa falta de visión espiritual.
Nos cuenta el versículo 9 que mientras los mensajeros de Cornelio, iban por el camino ya acercándose a la
ciudad para encontrarse con Pedro, éste, subió́ a la azotea a orar.
“Pedro estaba orando a esa hora, es claro que su meditación y su devoción abrieron la puerta para que
recibiera la visión exactamente en el momento apropiado que lo prepararía para recibir a los mensajeros
enviados por Cornelio, un gentil”. 5CBA, Hechos 10: 9.
¡Qué sublime un cristiano orando! Si había alguna “dioptría” de miopía espiritual, el Señor la iba a curar.
Veamos lo que pasó. En visión vio un lienzo, atado en las cuatro puntas (mostrar) que descendía del cielo a la
tierra. Lleno de animales cuadrúpedos terrestres, reptiles y aves. Una voz clara, que Pedro conocía muy bien,
mandó: “Mata y come” (Versículo 13) Era cierto que era hora de la comida y que Pedro estaba hambriento;
¡pero comer reptiles y otros animales inmundos! ¡Nooo!
Pedro tenía hambre, y lo que su apetito lo impulsaba a hacer fue confirmado por una voz del cielo. Pedro se
negó a comer por causa de su conciencia; aún no había aprendido que la distinción entre judío y gentil había
sido eliminada en Cristo (Gál. 3: 28-29).
Claro apareció el término INMUNDO, y no solamente daban ese calificativo a los animales, sino también a
todo el que no era de su nacionalidad. Leamos lo que dijo Pedro en el Versículo 28 “Vosotros sabéis cuán
abominable (repugnante, repulsivo, detestable, aborrecible, inmundo) es para un varón judío juntarse o
acercarse a un extranjero”.
Mientras estaba perplejo aún, Pedro volvió a escuchar la clara voz de Dios: (versículo 15) “Lo que Dios
limpió no lo llames tú inmundo” Y en ese momento en la puerta de la casa de Simón, el curtidor, los
mensajeros de Cornelio, estaban preguntando por Pedro. (Versículo 18).
La voz llena de amor del Señor se hizo escuchar nuevamente, para la salvación de los hombres. Leamos el
versículo 20. “Levántate y desciende y no dudes de ir con ellos, porque yo los he enviado”. ¿Qué crees que
respondió Pedro? ¡Pero Señor, son romanos! ¡De ninguna manera, no iré! ¿Respondió él así? Claro que no. La
miopía espiritual había sido curada. Ahora podía ver que la sangre de Jesús que nos limpia de todo pecado,
alcanza a todos, judíos y no judíos. ¡A todos!
¿Preguntan por resultados? ¿Quieren saber qué sucedió? Leamos los ver- sículos 44 y 48.
(Leer). ¡Así
sucede siempre que es curada la miopía espiritual! Podemos ver con claridad la voluntad de Dios,
que siempre redunda en la salvación de otros.
Llamado
¿Estás pudiendo ver con claridad más allá de tus necesidades? ¿Puedes pensar en alguien que tal vez esté lejos
de ti, en afectos o físicamente, que está necesitando que le compartas a Jesús? Toma el papel que recibiste a la
entrada y coloca allí dos nombres de personas por las que orarás y a quienes hablarás de Jesús, en esta
semana.
El Señor quiere que siempre veas que su maravillosa salvación alcanza a todos y tú eres un instrumento en
Sus manos.
Oración
Señor, sin duda alguna me cuesta ver a quiénes quieres salvar. Muéstrame por favor y dame tu Santo Espíritu
para que pueda hablar sólo guiado por Ti. ¡Ven pronto Jesús! Amén.
LA MIOPÍA ESPIRITUAL
Es fácil llegar a ser corto de vista en la vida, ver las cosas
únicamente como ellas aparecen en el momento, y ser
incapaz de tener una visión mas profunda de los temas. Esto
es “miopía espiritual” tal como es descrita por el apóstol
Pedro. Después de amonestarnos de que pongamos toda
diligencia añadiendo a nuestra fe virtud, conocimiento,
dominio propio, paciencia, piedad, afecto fraternal, y amor a
nuestro carácter, Pedro declara: “Porque si estas cosas
están en vosotros, y abundan, no os dejarán estar ociosos ni
sin fruto en cuanto al conocimiento de nuestro Señor
Jesucristo. Pero el que no tiene estas cosas tiene la vista
muy corta; es ciego, habiendo olvidado la purificación de sus
antiguos pecados” (2 Pedro 1:8-9).
“Tiene la vista muy corta” es del Griego moupazon, análogo
al Español miopía.
Espiritualmente hablando, mucha gente es tan corta de
vista que tienen sus ojos fijos únicamente en las cosas de
esta tierra, al grado de que ellos nunca piensan en las cosas
que están más allá. Cierran sus ojos a lo que ellos no
quieren ver, exactamente como los Fariseos ciegos que
cerraron sus ojos espirituales a su verdadera condición
(Mat. 15:14; 23:17,19; Juan 9:39-41).
Es una condición desafortunada cuando el discernimiento
espiritual de uno es nublado con los placeres y negocios
temporales de esta vida, y ve únicamente los placeres de
este mundo corrupto y pasajero.
Como peregrinos pasando a través de este mundo
sentenciado, si no ponemos un esfuerzo diligente por crecer
en las gracias enumeradas por Pedro en los v.5 al 7, iremos a
la ceguera, sin la luz guiadora de ese conocimiento que la
Escritura trae (2 Tim. 3:15). Es una condición triste y
lastimosa ver a uno que no tiene discernimiento espiritual.
Una persona tal tropezará y caerá (2 Ped. 1:10).
No se permita usted mismo desarrollar una moral y una
visión espiritual defectuosa. No permita que este mundo (lo
presione a usted dentro de su molde) (véase Rom. 12:1-2).
No permita que Satanás (a través de asociaciones impías,
espectáculos de televisión corruptos, libros obscenos, o
música inmoral), lo desanime a usted en leer, meditar, y
estudiar las Sagradas Escrituras que lo pueden hacer a usted
salvo (2 Tim. 3:15). ¡Piense profundamente en la fuente de la
vida!
Pedro nos advierte contra el olvidarnos de la limpieza de
nuestros antiguos pecados (2 Ped. 1:9). ¡No se olvide de la
razón por la que usted fue libertado de sus pecados! Su
bautismo pasado fue un acto deliberado o una decisión de fe
para dejar el antiguo camino carnal, y entrar en un nuevo
camino (2 Cor. 5:17). La persona que no crece en las gracias
enumeradas por Pedro, ha olvidado ya, o nunca aprendió el
significado de su bautismo. Su vista es corta, ¡pero de igual
forma lo es su memoria! Volverse olvidadizo de que una de
estas bendiciones es tener nuestros pecados removidos por
la preciosa sangre del Señor es desastroso para nuestras
almas.
“Por lo cual, hermanos, tanto más procurad hacer firme
vuestra vocación y elección; porque haciendo estas cosas, no
caeréis jamás. Porque de esta manera os será otorgada
amplia y generosa entrada en el reino eterno de nuestro
Señor y Salvador Jesucristo” (2 Ped. 1:10-11).
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• UN CRISTIANO CON MIOPIA NO ALCANZA A COMPRENDER LO QUE EL
VERSICULO QUE HEMOS LEIDO NOS ENSEÑA, TODO LO QUE YO SIEMBRO
HOY, LO COSECHARE EL DIA DE MAÑANA, Y A ESA MIOPIA ESPIRITUAL LE
PODEMOS LLAMAR IRRESPONSABILIDAD, MUCHAS PERSONAS ESTAMOS
SIENDO IRRESPONSABLES CON NUESTRO FUTURO, CON EL FUTURO DE
NUESTRA FAMILIA, CON EL FUTURO DE NUESTROS HIJOS.
EN QUE AREAS DE NUESTRA VIDA NOS COMPORTAMOS CON MIOPIA DEL
FUTURO:
I) PLACERES DE HOY, DOLOR DE MAÑANA (ROMANOS GENESIS 25:27-33)
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III) TERCERA ACTITUD DE MIOPIA DEL FUTURO: TRANQUILIDAD DE HOY
AMARGURA PARA MAÑANA (PROVERBIOS 29:17)
Miopía Espiritual
Pastor Jose R. Hernandez diciembre 24, 2017 Mensajes Cristianos Deje un comentario 1,160 Vistas
Mensajes Cristianos
«…Y oró Eliseo, y dijo: Te ruego, oh Jehová, que abras sus ojos para que vea. Entonces Jehová abrió los
ojos del criado, y miró; y he aquí que el monte estaba lleno de gente de a caballo, y de carros de fuego
alrededor de Eliseo…». 2 Reyes 6:17
Para entrar a entender lo que le quiero compartir hoy, es necesario conocer el termino Miopía. La miopía es
un defecto visual que produce desenfoque de lejos.
La visión es un sentido muy importante puesto que con el podemos identificar las cosas que tengamos en
frente para no tropezar; de este modo debemos tener en cuenta que nosotros somos personas espirituales y que
también poseemos una visión espiritual.
En 2 Reyes 6:17 encontramos un suceso referente a la visión: Eliseo y su siervo fueron rodeados por el rey de
Siria (2 Reyes 6:11-16), el siervo temía mucho puesto que sus ojos no veían lo que Eliseo veía; el siervo solo
pudo ver Dios les protegía solo después de la oración de Eliseo.
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El orgullo o vanidad: cuando creemos que todo está bien, y que no necesitamos de nada nos envanecemos y
nuestra visión pierde claridad (Salmo 119:37).
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El conocimiento sin comunión con Dios: Este punto es muy importante, cuando hablo de conocimiento no
me refiero a la preparación sobre alguna profesión para cumplir una función en específico, me refiero al
conocimiento de la palabra de Dios; es importante prepararnos y estudiar la palabra de Dios, pero si solo nos
dedicamos a ello sin ninguna relación con Jesús en intimidad podremos caer en lo que cayeron los fariseos en
su tiempo, esto también lo dijo Pablo en 2 Corintios 3:14 en donde los Judíos poseen el velo (del Antiguo
Testamento) que les impide ver y que solo Cristo puede quitar.
El corazón duro: Este síntoma hace que el entendimiento o la visión se nuble, y esto es el extremo del punto
anterior, puesto que la falta de identificarnos con la palabra de Dios nos pude hacer perder el rumbo,
recuerde lo que dice Salmos 119:105; además es necesario entender que la ignorancia de la palabra de
Dios nos aleja de Dios, y endurece nuestro corazón (Efesios 4:18); esto nos lleva al siguiente punto.
La incredulidad: Cualquiera puede caer en incredulidad, aun nosotros como hijos de Dios. ¡Cuidado! Eso
puede ser perjudicial para nuestro espíritu, ya que es de esta manera que nos alejamos del amor de Dios. En 2
Corintios 4:4 dice que el dios de este siglo produce ceguera en el entendimiento aún más de la gente que no
conoce la verdad de Jesús, pero nosotros debemos estar firmes y atentos, esto puede ser consecuencia de dejar
endurecer nuestro corazón.
El rencor: El rencor hace que la miopía espiritual se active de forma sencilla, puesto que si decimos amar a
Dios y aborrecemos a nuestro hermano estamos mintiendo, al igual como lo dice la palabra de Dios en 1
Juan 2:11, el que aborrece a su hermano está en tinieblas y no sabe dónde va.
Los anteriores son síntomas de la miopía espiritual, como hijos de Dios debemos cuidar de nuestra salud
espiritual y más en este punto, ya que nosotros estamos llamados a guiar a otros, y no podemos estar con
deficiencia en nuestra visión espiritual, puesto que no podríamos guiar a nadie si también estamos ciegos
(Mateo 15:14).
HIPERMETROPIA Y MIOPIA
ESPIRITUAL, Un mal que afecta
nuestra Visión de la realidad
14 noviembre, 2019GabrielGil
«Unge tus ojos con colirio, para que veas» (Apocalipsis 3:18c)
El versículo de arriba está inserto dentro de lo que se conoce como “el mensaje a las siete
iglesias del Apocalipsis” (Ap. 2 y 3), siendo Laodicea la última de las iglesias a la cual Juan
dirigió un sermón; y en particular fue con ésta ––Laodicea–– especialmente fuerte, dándole un
regaño poco común en el estilo juanino llegándola incluso a llamar ‘tibia’ (3:14-21)
Laodicea es una ciudad del antiguo Imperio seléucida, establecida entre el 261 a. C. y 245 a. C.
por el rey Antíoco II Theos y nombrada en honor de su esposa Laodice. Estaba ubicada a unos
6 km al norte de la actual ciudad turca de Denizli, en la provincia del mismo nombre, cerca de
la aldea de Eskihisar. Fue una próspera ciudad comercial, ubicada en la intersección de dos
importantes rutas, y famosa por sus textiles de lana y algodón. Era un centro clave en el
comercio y el mundo bancario. Vendía una muy conocida pomada para los ojos y también
prendas de vestir de alta calidad hechas de excelente lana negra. También contaba con un
acueducto que les proveía de agua tibia (Fuente: Wikipedia, Laodicea).
La iglesia necesitaba desesperadamente la gracia que regenera, las vestimentas de la
justicia de Cristo y el Espíritu que ilumina los ojos del corazón (Earl Wesley Monroy,
Biblia de Estudio Plenitud. Página 1714).
VISIÓN 20/20
Así como los miembros de Laodicea fueron desafiados a “ungir sus ojos espirituales” nosotros
también necesitamos hacerlo, permitamos al Espíritu Santo que nos sane y nos ayude a ver
“20/20” lo que en verdad sucede a nuestro alrededor. Pero antes de continuar, ¿sabe con
exactitud qué mismo es esto de veinte-veinte? Les diré:
Una visión 20/20 no significa tener una “visión perfecta”. Cuando el optometrista
dice que tiene “visión 20/20”, se está refiriendo a su agudeza visual, que es la
claridad o nitidez de su visión. Cuando el médico aprueba una agudeza visual de
20/20, está diciendo qué tan bien pueden ver los ojos un objeto a una distancia de 20
pies. Si puede ver las letras con claridad, entonces se considera que tiene “visión
normal”. Este número indica que puede ver objetos claramente a una distancia de 20
pies, en comparación con otras personas.
Por tanto el término “visión perfecta” no existe, es una ilusión; la realidad es tener una “visión
normal”. Y de eso es lo que trata mi artículo. Siga conmigo, quizá algo bueno encuentre hoy y
pueda servirle.
DE LEJOS Y DE CERCA
MIOPÍA: Anomalía o defecto del ojo que produce una visión borrosa o poco clara de los
objetos lejanos; a veces los pacientes ven mejor de cerca.
CONCLUSIÓN
La iglesia de Laodicea necesitaba ver con claridad, ¿será que nosotros también? En estos
tiempos de convulsión social se han levantado muchos profetas para enjuiciar los hechos tanto
del gobierno y de los manifestantes, opiniones de las más diversas ––y confrontativas––
podemos hallar en las voces de algunos cristianos. Una suerte de angustia, desespero, clamor y
quejas se oyen en distintas agrupaciones eclesiales: algunas oran, otras hacen acción social,
mientras que algunas salen a marchar de manera pacífica con el pueblo. TODO ESO ESTÁ
BIEN, pero nunca se debe olvidar que “toda historia tiene dos versiones”, quedarse sólo con
una (la que me conviene, la que me gusta, la que me contaron) es padecer de hipermetropía o
miopía. Mejor pidamos a Dios ser una iglesia con una visión clara de la realidad inmediata y de
la realidad remota, así podremos al igual que los profetas del Antiguo Testamento “condenar al
corrupto de afuera y condenar al corrupto de adentro, consolar a los que sufren en las lejanías y
dar consuelo a los que sufren de cerca”.
Sí Señor, dame una visión normal, no perfecta, unge mis ojos con el colirio del Espíritu para
ver como tú ves la vida, sin fanatismo, sin ideas preconcebidas, sin prejuicios, sin anticipar
conclusiones, sin preferencias ni tendencias. Ayúdanos buen Dios a mirar lo que pasa allá lejos
y lo que pasa acá cerca, y danos el impulso de orar-hacer lo que demandas de nosotros: «Oh
hombre, Él te ha declarado lo que es bueno, y qué pide Jehová de ti: solamente hacer justicia, y
amar misericordia, y humillarte ante tu Dios» (Miqueas 6:8).
La ciudad de Laodicea
Laodicea fue fundada por Antíoco II (261-245 a.C.), y llamada así en
honor de su esposa Laodice.
Esto no quiere decir, por supuesto, que Cristo fue creado antes que
todo lo demás, tal como enseñaron los arrianos en el pasado, o los
Testigos de Jehová y los Mormones en el presente.
(Col 1:16): "Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay
en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean
tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue
creado por medio de él y para él".
Por eso, aunque tuviéramos todas las cosas que pudiéramos desear de
este mundo, pero si no le tenemos a él, entonces seríamos
inmensamente pobres, tal como le estaba pasando a la iglesia en
Laodicea.
En este caso, lo que Cristo reprocha a esta iglesia es que no eran "ni
fríos ni calientes". Ni amaban ni odiaban. No se apasionaban por nada,
ni por lo bueno ni por lo malo. Eran indiferentes. El agua caliente es
útil para el baño, y el agua fría sirve para calmar la sed en un día
caluroso, pero beber agua tibia es muy desagradable.
Otra pregunta que nos debemos hacer es cómo habían llegado a esta
situación.
Pero era difícil que cambiaran, porque para ello, en primer lugar,
tendrían que ver la gravedad de su verdadero estado espiritual. Y aquí
estaba el problema: la opinión de la iglesia difería radicalmente de lo
que el Señor decía sobre ellos. Mientras que ellos se creían "ricos" y
pensaban que no tenían necesidad de nada, el Señor los veía como
"desventurados, miserables, pobres, ciegos y desnudos". Aquí
radicaba uno de sus más graves problemas; estaban "ciegos".
(Is 55:1) "A todos los sedientos; Venid a las aguas; y lo que no tienen
dinero, venid, comprad y comed. Venid, comprad sin dinero y sin
precio, vino y leche".
No cabe duda que es muy importante tener una buena vista. Por otro
lado, hay personas que no sólo ven bien, sino que además tienen
"buen ojo" para el arte, los negocios, la comida... Pero de lo que se
trata aquí, lo que de verdad es importante que veamos bien y lo
sepamos apreciar, es la belleza que hay en la persona de Cristo. Y
este era el problema de la iglesia en Laodicea; sólo tenían ojos para
ver las cosas materiales. Pero si en este momento no somos capaces
de percibir la belleza que hay en Cristo, ¿qué haremos cuando
vayamos al cielo? Ellos necesitaban comprar colirio para que pudieran
ver las cosas bellas y de valor eterno que se encuentran en Cristo.
Haciendo un resumen de este versículo, podemos decir que Cristo es
todo lo que el hombre necesita:
Riquezas divinas para nuestra pobreza espiritual.
Vestiduras blancas de justicia para nuestra pecaminosidad.
Vista espiritual para nuestra ceguera.
4. "Yo reprendo y castigo a todos los que amo"
Los canteros cortan las grandes piedras a base de golpear con la maza
en sus punteros; el escultor va quitando trozos de piedra con martillo
y cincel para elaborar su figura; para elaborar el vino hay que pisar las
uvas; para extraer el aceite de las aceitunas es necesario exprimirlas,
y un buen atleta debe someterse primero a rigurosos entrenamientos.
No hay método más seguro para conseguir que un chico acabe en la
ruina que dejarle hacer lo que le dé la gana. Y por supuesto, la
disciplina y el sufrimiento son necesarios también para producir un
carácter santo.
5. "Sé, pues, celoso, y arrepiéntete"
Una exhortación
(Ap 3:20) "He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz
y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo."
Como hemos visto, la situación era realmente grave. Tal era así, que
el Señor ya no estaba "en medio de la iglesia" (Ap 1:12-13), sino que
estaba fuera, llamando a la puerta para poder entrar. Esto describe
una situación insólita, una iglesia que piensa que no necesita a Cristo
y lo deja fuera.
Así que, como no podía ser de otra manera, el Señor los trata como
incrédulos, y desde fuera, en su inmensa misericordia, los llama al
arrepentimiento. Sigue buscándolos porque sabe que sin él seguirán
estando desnudos y no dejarán de ser pobres y ciegos.
Constantemente los llama esperando una respuesta, porque la puerta
ha de ser abierta desde dentro, el Señor nunca entra por la fuerza en
la vida de nadie.
Notemos que dice "si alguno". Hasta este momento el Señor se había
dirigido a la iglesia en su conjunto, pero la conversión es una cuestión
personal, por eso aquí apela a cada individuo. Para el Señor no hay
distinción de personas, todos por igual son llamados.
El Señor quiere entrar para tener una cálida comunión con cada
persona: "Entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo". Todo esto
sugiere una relación familiar, disfrutando con calma de una buena
cena después del duro día de trabajo. Quizá como un anticipo del
glorioso banquete celestial que tendrá lugar en las bodas del
Cordero (Ap 19:7-9).
Ahora, desde esa posición de supremo honor, quiere que aquellos que
también vencen al mundo por medio de la fe en él (1 Jn 5:5), se
sienten con él en su trono, un privilegio que no merecemos y que
recibimos por la gracia de Dios. Pero ¿cuál es la finalidad de esto?
Pues no puede ser otra que la de reinar con Cristo sobre este vasto
universo de Dios. Esto es lo que Dios desea para cada creyente.
Gobernar con Cristo es el más alto honor al que un ser humano puede
aspirar. Ser dirigente por algunos años en una ciudad como Laodicea
habría resultado algo de mucho prestigio para cualquiera de los
creyentes allí, pero no comparable con lo que Cristo promete a sus
hijos fieles.
Al final, cada una de las iglesias que recibieron estas siete cartas eran
diferentes unas de otras, y la razón estaba en que cada una de ellas
tenía una disposición diferente a escuchar la Palabra de Dios.
Conclusiones
La iglesia en Laodicea refleja una parte importante del cristianismo del
siglo veintiuno. Aquí se describe una iglesia respetable, pero
superficial y anémica. Como muchos cristianos en nuestros días, que
sólo parecen emocionarse con los deportes, el cine o la política, pero
no por conocer más del Señor o por compartir el evangelio con otros.
Cristianos que se entregan por completo a los negocios o a los
estudios, pero poco o nada a la causa de Cristo. Cristianos
obsesionados con sus cuerpos y su apariencia física, pero
despreocupados por su vida espiritual. Cristianos entregados a los
placeres de este mundo y que no ven la necesidad de negarse a sí
mismos y crucificar el yo. Cristianos solícitos en la búsqueda de
nuevas experiencias, pero sin un verdadero anhelo de conocer más de
la Palabra de Dios. Cristianos que ya no defienden la doctrina bíblica
porque no la conocen y porque han abrazado el relativismo de este
mundo. Iglesias con una perfecta organización y atractivos programas
que pueden funcionar muy bien sin la presencia del Señor Jesús. Un
cristianismo, por lo tanto, que ha dejado de ser relevante para el
mundo.