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sostenibilidad y

territorio

Análisis de
la huella ecológica
de España
CRÉDITOS

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sin expresa autorzación escrita del
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INFORME FINALIZADO
Octubre 2007

DIRECCIÓN FACULTATIVA
Secretaría de Estado de Medio Rural y Agua
Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino
Natalia Gullón Muñoz-Repiso
Directora-coordinadora del trabajo
Fernando Esteban Moratilla
Director Técnico

EQUIPO CONSULTOR
MINUARTIA, Estudis Ambientals,
David Pon. Co-director y coordinador. Licenciado en Ciencias Ambientales
Marc Fernández. Ingeniero Forestal
Vicenç Planas. Ingeniero Agrónomo
Estudio MC
Manuel Calvo. Co-director. Licenciado en Ciencias Biológicas
Soledad Martínez. Licenciada en Ciencias Ambientales
Instituto de Economía Pública
Universidad del País Vasco
Iñaki Arto. Licenciado en Ciencias Económicas

DISEÑO Y MAQUETACIÓN
Artentraç

FOTOGRAFÍAS
Imágenes de las páginas 11, 17, 23, 27, 48 y 63
cedidas por Natalia Gullón Muñoz-Repiso
Resto de imágenes, con derechos adquiridos por Artentraç

EDITA
Centro de Publicaciones. Secretaría General Técnica.
Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino

Para más información o copias adicionales


contactar con:
Natalia Gullon (ngullon@mma.es)

I.S.B.N.: 978-84-491-0913-3
NIPO.: 770-09-091-9
DEPÓSITO LEGAL.: M-XX.XXX-XXXX

IMPRESO EN PAPEL RECICLADO


2008
Análisis de la huella ecológica de España
PÁG.
ÍNDICE
07 RESUMEN

11 PRESENTACIÓN

13 1. INTRODUCCIÓN
1.1 Desarrollo sostenible y capacidad de carga
1.2 Indicadores de sostenibilidad y huella ecológica
1.3 Objetivos y alcance del trabajo
1.4 Fases del trabajo

17 2. CONCEPTO DE HUELLA ECOLÓGICA


2.1 ¿Qué es la huella ecológica?
2.2 El cálculo de la huella ecológica
2.3 Análisis del conjunto de actividades humanas y de las demandas de superficie
2.4 Biocapacidad
2.5 Déficit ecológico

25 3. ENFOQUE METODOLÓGICO
3.1 Criterios generales del enfoque metodológico
3.2 Aspectos metodológicos específicos del estudio
3.2.1 Cálculo de la huella ecológica española de productos bióticos:
cultivos, pastos, bosques y pesca
3.2.2 Cálculo de la huella ecológica energética por absorción de CO2
3.2.3 Cálculo de la huella ecológica por Comunidades Autónomas y provincias
3.2.4 Análisis de la biocapacidad
3.3 Estructuración del sistema integrado de información y matrices
de cálculo y Modelo de simulación de escenarios

31 4. HUELLA ECOLÓGICA Y DÉFICIT ECOLÓGICO DE ESPAÑA


4.1 Valor y tendencias recientes de la huella ecológica española
4.2 Evolución histórica de la huella ecológica española
4.3 Estructura de la huella ecológica por tipología de superficies
4.4 Huella ecológica energética
4.4.1 Huella ecológica energética global y por componentes
4.4.2 Huella ecológica energética por tipología de bienes y servicios finales consumidos
4.4.3 Huella ecológica debida a la generación eléctrica en España
4.5 Huella ecológica por superficie artificializada
4.6 Valor y tendencias de la biocapacidad española
4.7 Déficit ecológico español
4.8 Huella y déficit ecológico español en el contexto internacional

41 5. HUELLA ECOLÓGICA Y DÉFICIT ECOLÓGICO POR COMUNIDADES AUTÓNOMAS


5.1 Huella ecológica por Comunidades Autónomas
5.2 Biocapacidad por Comunidades Autónomas
5.3 Déficit ecológico por Comunidades Autónomas
5.4 Síntesis de la contribución de las Comunidades Autónomas a la huella
ecológica y biocapacidad española
2008
Análisis de
la huella ecológica
de España

PÁG.

47 6. ESCENARIOS Y ESTRATEGIAS PARA LA REDUCCIÓN


DE LA HUELLA ECOLÓGICA ESPAÑOLA
6.1 Formulación de los escenarios
6.2 Ámbitos y estrategias para la reducción de la huella ecológica
6.3 Disparadores socioeconómicos y escenarios de evolución de la huella ecológica
por componentes
6.4 Escenarios de evolución de la huella ecológica total y de la biocapacidad de España

57 7. CONCLUSIONES
7.1 Situación actual con respecto a la sostenibilidad ambiental
7.2 Recomendaciones para la gestión de recursos y políticas sectoriales
7.3 Aspectos metodológicos asociados al análisis e interpretación de resultados
63 REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

GRÁFICOS Y TABLAS
18 Tabla 2.1. Superficies productivas de la huella ecológica
19 Tabla 2.2. Factores de equivalencia según categoría de superficie productiva
20 Tabla 2.3. Análisis del conjunto de actividades humanas y de las demandas de superficie
19 Figura 2.1. Esquema simplificado del cálculo de la huella ecológica en hectáreas globales
26 Figura 3.1. Integración del cálculo de la huella energética según metodología estándar
(Global Footprint Network, GFN) y análisis input-output
27 Figura 3.2. Esquema del proceso de cálculo multinivel de la huella ecológica
29 Figura 3.3. Esquema del proceso de cálculo de la biocapacidad
29 Figura 3.4. Sistema de matrices de información físico-monetaria,
cálculo y modelización de la huella ecológica
31 Figura 4.1. Evolución de la huella ecológica española
32 Figura 4.2. Evolución de la huella ecológica española por componentes
33 Figura 4.3. Evolución del consumo endosomático vs consumo exosomático
en la huella ecológica española
34 Figura 4.4. Huella ecológica del consumo energético en España
35 Figura 4.5. Huella ecológica del consumo energético en España por tipología de productos, año 2000
36 Figura 4.6. Evolución del mix eléctrico español
37 Figura 4.7. Evolución de la superficie artificializada en España
38 Figura 4.8. Biocapacidad de España
39 Figura 4.9. Déficit ecológico de España
41 Figura 5.1. Huella ecológica energética (año 2000) y huella ecológica de pastos, cultivos y pesca
(año 2005) por Comunidades Autónomas
42 Figura 5.2. Biocapacidad por Comunidades Autónomas, año 2000
42 Figura 5.3. Biocapacidad por Comunidades Autónomas y categorías productivas, año 2000
43 Figura 5.4. Déficit ecológico por Comunidades Autónomas, año 2000
44 Figura 5.5. Déficit ecológico total por Comunidades Autónomas, año 2000
45 Figura 5.6. Contribución a la huella ecológica y a la biocapacidad española por Comunidades Autónomas
49 Figura 6.1. Panel global de formulación de escenarios a partir de variables de consumo,
gestión y ecoeficiencia
50 Figura 6.2. Modelo de formulación de escenarios de evolución de la huella ecológica española
53 Figura 6.3. Disparadores socioeconómicos y escenarios de evolución
de la huella ecológica por componentes
54 Figura 6.4. Escenarios de evolución de la huella ecológica por componentes
55 Figura 6.5. Evolución de la huella ecológica en los escenarios A,B y C según previsiones
económicas y con hipótesis de estado estacionario
RESUMEN

6
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

La huella ecológica es un indicador biofísico de


sostenibilidad que integra el conjunto de impactos
que ejerce una cierta comunidad humana – país,
región o ciudad - sobre su entorno. Se expresa
como el total de superficie ecológicamente pro-
ductiva necesaria para producir los recursos con-
sumidos por un habitante medio de la sociedad
analizada, así como la necesaria para absorber los
residuos que genera, independientemente de la lo-
calización de esta superficie.

De forma complementaria, se define la biocapa-


cidad de un territorio como la superficie biológi-
camente productiva (cultivos, pastos, mar produc-
tivo y bosques) disponible. La diferencia entre la
huella ecológica (demanda de recursos) y la bio-
capacidad (recursos disponibles) se define como
déficit ecológico. Éste indica si la población de un
país o región dispone de excedentes ecológicos, o
bien si consume más recursos de los que dispone.
En este caso, muestra que la comunidad se está
apropiando de superficies fuera de su territorio, o
bien que está disponiendo del capital natural, de-
gradándolo y comprometiendo su calidad y dispo-
nibilidad para la generación de rentas biológicas a
DÉFICIT ECOLÓGICO DE ESPAÑA
las generaciones futuras.
8,0
hag/hab

El análisis de la huella ecológica de España que


aquí se presenta ha incorporado los siguientes ele- 6,0

mentos de cálculo:
4,0

• Cálculo de la huella ecológica global y por 2,0


componentes a escala española para el perío-
do 1990-2005. 0,0
1990 1995 2000 2005
• Estimación de la huella ecológica global y por 5,069 5,374 6,018 6,395
componentes para el conjunto de Comunida- 2,522 2,552 2,733 2,433

des Autónomas y provincias. 1,817 1,811 1,800 1,780


2,547 2,822 3,286 3,961
• Cálculo de la biocapacidad y déficit ecológico a
escala española y para el conjunto de las Co-
munidades Autónomas y provincias.
Total huella ecológica
• Análisis input-output de la huella ecológica
Total biocapacidad
energética.
• Elaboración de un modelo de simulación de Biocapacidad mundial

escenarios de evolución de la huella ecológica Déficid ecológico

(2005-2020) según grado de aplicación de polí-


ticas públicas.

7
RESUMEN Y PRESENTACIÓN

En relación con el valor y evolución de la huella En relación al valor, evolución y distribución


ecológica, biocapacidad y déficit ecológico del de la huella ecológica según sus principa-
conjunto de España se pueden extraen como prin- les componentes se extraen como principales
cipales conclusiones: conclusiones:

• La huella ecológica por habitante medio en • Los componentes de huella más decisivos son,
España, se situó, en el año 2005, en 6,4 hectáreas con diferencia, los debidos a los consumos
globales (hag) de territorio productivo, con un energéticos, que suponen en el año 2005 el 68%
aumento del 19% desde 1995 a 2005, lo que se de la huella, y que han pasado de las casi 3,3
traduce en un aumento desde las 5,4 hectáreas a 4,3 hag/cap entre los años 1995 y 2005. Esta
en 1995 hasta las 6,4 en 2005. El ritmo medio componente es además la que más ha aumen-
de crecimiento de la huella en esos diez años tado en valor relativo en el período 1995-2005,
fue de 0,1 hectáreas al año, es decir, 2,7 metros con un incremento del 31,6%.
cuadrados diarios por persona, equivalente a • Las componentes de la pesca (24,1%) y pastos
un incremento diario de huella en el conjunto (9,2%) muestran también incrementos relativos
del país de unos 12.000 campos de fútbol. relevantes durante el período 1995-2005, que
• El déficit ecológico español alcanzó en el año se compensan por otra parte con la disminu-
2005 un valor muy próximo a las 4 hectáreas ción de la componente asociada a los cultivos
por habitante, con un aumento del 40% entre (-12,1%).
los años 1995 y 2005. • En el año 2005, la principal componente de la
• La huella ecológica española en el año 2005 fue huella energética es con diferencia la produc-
2,6 veces superior a la biocapacidad disponible ción de bienes de consumo (47,5%), una vez
en hectáreas globales. Dicho de otro modo, se imputados los consumos energéticos directos
necesitan casi tres Españas para mantener el y la energía contenida en los bienes importa-
nivel de vida y población actuales. dos. Constituye también el componente que se
ha incrementado más en valor absoluto en el
período 1995-2005 (0,407 hag).
• El transporte constituye la segunda compo-
nente de la huella energética en importancia
(23,4%), seguida a una cierta distancia por el
sector residencial (11,2%), servicios (9,2%) y
agricultura (8,7%).
• Es destacable la importancia creciente de la
huella ecológica energética asociada a la ener-
gía contenida en los bienes importados, y que
refleja el incremento notable del déficit comer-
cial de la economía española.
• La construcción de inmuebles y obras de inge-
niería civil es el principal sector generador de
huella ecológica por emisiones directas e indi-
rectas. Destaca también el impacto de los pro-
ductos energéticos – electricidad y petróleo-,
cuyos procesos productivos son muy intensivos
en consumo energético. A continuación destaca
la huella asociada a la hostelería, seguida de

8
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

los alimentos preparados. Ello refleja la impor-


tancia del sector turístico del país, así como la
relevancia creciente de la intensidad energética
de la industria agroalimentaria.

En relación con la simulación de escenarios de


evolución de la huella ecológica en el período
2005-2020 se concluye:

• El escenario tendencial (A) indica un creci-


miento de la huella ecológica hasta alcanzar
las 8 hag/cap y un déficit próximo a las 6 hag/
cap para el año 2020.
• El escenario con una aplicación notable de las
actuales políticas públicas (B) consigue tan sólo
reducir la huella ecológica para el año 2020 a los
valores que presenta en el año 2005.
• Un escenario C de cumplimiento de objetivos
ambiciosos en políticas públicas y la implica-
ción del conjunto de la sociedad permite una
reducción sustancial de la huella hasta las
5 hag/cap, equivalente al valor que presentaba
en al año 1990.

ESCENARIOS DE TENDENCIAS DE LA HUELLA ECOLÓGICA ESPAÑOLA

9,0
hag/cap

8,0

HE escenario A
7,0

6,0 HE escenario C

5,0
HE escenario B
4,0
Biocapacidad escenario A
3,0
Biocapacidad escenario B
2,0
Biocapacidad escenario B
1,0

0,0
1955 1960 1965 1970 1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005 2010 2015 2020

9
PRESENTACIÓN

10
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

La huella ecológica se va consolidando como indi-


cador de sostenibilidad a nivel internacional. En el
contexto económico, existe un indicador aceptado y
utilizado mundialmente: el Producto Interior Bruto.
Sin embargo, frente a los desafíos que presenta el
siglo XXI, resulta conveniente enriquecer la informa-
ción ofrecida por el PIB para el diseño de políticas
equilibradas con otras medidas complementarias,
en particular aquellas que reflejen la sostenibilidad
ambiental y el bienestar social.

Recientemente, la Comisión Europea a través del


Comité Económico y Social Europeo, ha publicado
un informe de investigación de instrumentos de
apoyo al PIB, en el que reconoce la huella ecoló-
gica como el mejor indicador integrado disponible
sobre sostenibilidad ambiental y que añade una
dimensión complementaria al PIB, como soporte
para la toma de decisiones. Efectivamente, la hue-
lla ecológica, a pesar de sus limitaciones, demues-
tra ser una valiosa herramienta de comunicación,
y uno de los pocos indicadores que tiene en cuenta
los impactos de nuestros patrones de consumo y
producción sobre otros países, a través de la im-
portación y la exportación.

El Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y


Marino tiene entre sus objetivos la promoción del
desarrollo sostenible, así como la protección y el
uso eficiente de los recursos naturales. En este
contexto, ha impulsado el estudio de la huella eco-
lógica y la biocapacidad de España en su conjunto
y de sus Comunidades Autónomas, como aproxi-
mación al concepto de sostenibilidad. El presente
documento, con el que el Ministerio de Medio Am-
biente y Medio Rural y Marino continúa la línea de
publicaciones sobre indicadores de sostenibilidad,
expone una radiografía de la huella ecológica aso-
ciada al consumo de España y la evolución que ha
manifestado los últimos años, recogiendo las con-
clusiones del Seminario sobre Huella Ecológica
que tuvo lugar en octubre de 2007 en el Ministerio
de Medio Ambiente en Madrid.

11
INTRODUCCIÓN

12
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

1.1 DESARROLLO re que nuestro consumo de recursos materiales,


hídricos y energéticos renovables no supere la
SOSTENIBLE Y CAPACIDAD capacidad de los sistemas naturales para repo-
DE CARGA nerlos, y que la velocidad a la que consumimos
recursos no renovables no supere el ritmo de
sustitución de los recursos renovables durade-
La preocupación por la existencia de límites físicos
ros. La sostenibilidad ambiental significa asimis-
al consumo de recursos naturales por parte de las
mo que el ritmo de emisión de contaminantes no
sociedades humanas no es nueva, y ya se plantea
supere la capacidad del aire, del agua y del suelo
por los propios economistas clásicos del siglo XIX.
de absorberlos y procesarlos. Además implica el
Sin embargo, no es hasta la segunda mitad del si-
mantenimiento de la diversidad biológica, la sa-
glo XX cuando cobra un sentido global, ya sea en
lud pública y la calidad del aire, el agua y el suelo
términos de la escala planetaria de los análisis, ya
a niveles suficientes para preservar la vida y el
sea en términos ideológicos o epistemológicos.
bienestar humanos, así como la flora y la fauna,
para siempre” (Carta de Aalborg, 1994).
La Cumbre de Estocolmo de 1972 supone el re-
conocimiento oficial de la importancia que estas
tesis van adquiriendo, que cristaliza con la publi- En este contexto, cabe preguntarse si el creci-
cación en ese mismo año del Informe “Los Límites miento en el consumo de recursos de las socie-
del Crecimiento” por parte de un grupo de investi- dades humanas puede considerarse, como hasta
gadores del MIT (Massachussets Institute of Tech- ahora, de evolución ilimitada. Un principio clásico
nology) bajo la dirección de Dennis L. Meadows. de la ciencia ecológica, el de la capacidad de car-
ga, mantiene que toda población alcanza un límite
En 1987 se publica el informe de la Comisión en su crecimiento, expresado en número de indivi-
Mundial sobre Medio Ambiente y Desarrollo de duos, de acuerdo con las características del me-
Naciones Unidas “Our Common Future” (Nues- dio donde se desarrolla. A este límite se le conoce
tro Futuro Común) que venía a sentar las bases con el nombre de capacidad de carga, que puede
de un concepto que se ha hecho popular gracias definirse como la tasa máxima de consumo de re-
a su ambigüedad y también a su pertinencia: el cursos y descarga de residuos que se puede soste-
“desarrollo sostenible”, entendiendo por tal aquel ner indefinidamente sin desequilibrar progresiva y
“desarrollo que satisface las necesidades de la permanentemente la integridad funcional y la pro-
generación presente sin comprometer la capaci- ductividad de los ecosistemas de soporte.
dad de las generaciones futuras para satisfacer
sus propias necesidades” (Brundtland, 1987). Sin embargo, el concepto de capacidad de carga
puede tener una utilidad limitada para medir la
Hay que bucear un poco en el contenido de estos sostenibilidad de las sociedades humanas, dado
documentos para comprobar realmente qué es lo que a lo largo de la historia la humanidad se ha
que esta definición quiere comunicar. Un aspecto ido zafando de los límites impuestos por el entor-
importante de la perspectiva de dicho informe fue no, importando recursos procedentes de lugares
el de vincular el bienestar de las futuras gene- lejanos, realizando movimientos de poblaciones
raciones a los costos del desarrollo económico (migraciones), aumentando la capacidad de pro-
del presente. “Los estándares de vida que sobre- ducción del medio gracias a los avances tecnoló-
pasan los niveles básicos son sostenibles sola- gicos, o controlando la población.
mente si por doquier los estándares de consumo
toman en cuenta la sostenibilidad a largo plazo.
Empero, muchos de nosotros vivimos por encima
1.2 INDICADORES
de los medios ecológicos mundiales, por ejemplo, DE SOSTENIBILIDAD
en nuestros patrones de uso de energía” (UNW-
CED, 1987).
Y HUELLA ECOLÓGICA
Pese a las décadas de preocupación constante por
Según la Carta de Aalborg, el desarrollo sosteni-
estos temas, la medición de los límites ecológicos
ble significa “preservar el capital natural, requie-
al crecimiento del consumo de recursos por par-

13
INTRODUCCIÓN

te de sociedades humanas no se ha desarrollado de las superficies necesarias para satisfacer un


como cabría esperar, esencialmente debido a las determinado nivel de consumo. De esta manera es
limitaciones de la ecología y a la complejidad teó- posible establecer el área real productiva de la que
rica de la conexión entre esta ciencia y las ciencias se está apropiando ecológicamente una determina-
económicas y humanas en general. da comunidad humana, independientemente de que
esta área se encuentre más allá de su territorio, dis-
No es hasta finales de los ochenta o mediados de tinguiendo asimismo entre las diferentes funciones
los noventa cuando comienzan a surgir toda una ecológicas que ejercen los ecosistemas y siempre
serie de indicadores para medir el impacto de la teniendo en cuenta que estos impactos han de ser
actividad humana sobre el medio. Uno de estos imputados a los consumidores finales.
indicadores es el concepto de huella ecológica. Es
éste un indicador ambiental, de carácter integra- Además, la huella ecológica es un indicador de ten-
dor, del impacto que ejerce una cierta comunidad dencia, más que un valor numérico exacto, por lo
humana (país, región, ciudad) sobre su entorno, que permite hacer un seguimiento del nivel de sos-
considerando tanto los recursos necesarios como tenibilidad física de una comunidad humana me-
los residuos generados para el mantenimiento del diante la actualización del indicador a lo largo del
modelo de producción y consumo de la comunidad. tiempo, además de posibilitar la comparación de di-
En esencia, y como puede observarse, la huella
cha sostenibilidad entre unas poblaciones y otras.
ecológica supone en realidad considerar el inverso
de la capacidad de carga, pudiendo así superar en
Sin embargo, la huella ecológica, aun permitiendo
el análisis las dificultades conceptuales que el cál-
determinar cuál es la superficie media requeri-
culo de la capacidad de carga posee desde el punto
da para satisfacer las necesidades del ciudadano
de vista práctico.
medio de un territorio, no es capaz, por sí sola, de
indicar la sostenibilidad de la región de estudio. Es
Este indicador es definido, según sus propios au-
necesario comparar este valor con la biocapacidad
tores William Rees y Mathis Wackernagel (1995),
del territorio para saber si ésta se ha sobrepasa-
como “el área de territorio ecológicamente produc-
do, produciendo por tanto una situación de déficit
tivo -cultivos, pastos, bosques o ecosistema acuáti-
ecológico o insostenibilidad física. La biocapacidad
co- necesaria para producir los recursos utilizados
mide la producción biológica de un área, y resulta
y para asimilar los residuos producidos por una
de agregar la producción de diversos ecosistemas
población definida, con un nivel de vida específico,
dentro del área: pastos, cultivos, bosques, mar
indefinidamente, independientemente de la locali-
productivo, así como la superficie artificializada o
zación de esta área”. Asimismo, se tiene en cuenta
degradada. La bioproductividad no sólo depende
el espacio ocupado por las infraestructuras, vivien-
das y equipamientos, etc. de las condiciones naturales, sino de las prácticas
agrícolas o forestales. Expresando la huella ecoló-
Cada vez es más difícil para la población asociar gica y la biocapacidad en las mismas unidades, se
su consumo de bienes y de energía, o la produc- pueden comparar para hallar la amplitud de las de-
ción de sus residuos, con el impacto que éstos mandas humanas sobre una bioproductividad (glo-
provocan sobre el medio, debido a los progresivos bal, nacional, regional, etc.) escasa; si el consumo
procesos de concentración de la población en aglo- de recursos por habitante es sostenible y equitativo
meraciones urbanas y de globalización de los flujos comparado con la biocapacidad disponible; o el po-
de materiales y de energía. Sin embargo, la huella tencial de una región para vivir dentro de los límites
ecológica, al agrupar en un solo número la intensi- de la biocapacidad disponible dentro de sus propias
dad del impacto que una determinada comunidad fronteras. Como consecuencia de todo lo anterior,
humana ejerce sobre los ecosistemas -tanto por el la medida de la biocapacidad es imprescindible
consumo de recursos como por la generación de para contextualizar el valor de la huella ecológi-
residuos-, permite definir y visualizar la dependen- ca de una población porque la refiere al territorio
cia de las sociedades humanas respecto al funcio- productivo existente y que puede ser explotado de
namiento de los ecosistemas del planeta, a partir manera viable e indefinida.

14
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

En esta línea, la Secretaría de Estado de Medio Ru- los principales resultados obtenidos y conclusiones
ral y Agua, ha abordado este estudio de la huella que se derivan. Esta publicación constituye en con-
ecológica y la biocapacidad de España en su con- secuencia un extracto adaptado de los principales
junto y de sus diversos territorios, como aproxima- contenidos de los documentos específicos genera-
ción al concepto de sostenibilidad y como análisis dos en el marco del estudio, tanto a nivel metodo-
profundo de las tendencias del deterioro ambiental lógico como de resultados.
desde el lado de la utilización de recursos natura-
les para satisfacer las demandas del consumo de 1.4 FASES DEL TRABAJO
la población española.
Las principales fases de trabajo desarrolladas han
1.3 OBJETIVOS Y ALCANCE sido:

DEL TRABAJO
• Cálculo de la huella ecológica global y por su-
perficies productivas para el conjunto de Es-
Este trabajo, cuyos principales resultados se des-
paña, así como su evolución temporal.
criben de forma sintética en este documento, se
• Estimación de la huella ecológica de las Co-
ha planteado con el objetivo general de analizar la
munidades Autónomas y la huella ecológica
huella ecológica de España en su conjunto y de sus
de las diferentes provincias atendiendo a ín-
diversas Comunidades Autónomas y provincias, y
dices basados en estadísticas de consumo y
dar respuesta a posteriori, en la medida de lo posi- uso de ciertos recursos naturales y en carac-
ble, a los siguientes objetivos específicos: terísticas de configuración de los respectivos
sistemas territoriales.
• Evaluar de forma global la intensidad y evolu- • Cálculo del territorio productivo disponible
ción del impacto ambiental del consumo de la como expresión de la biocapacidad de los te-
sociedad española y de cada una de las Comu- rritorios.
nidades Autónomas a partir de los resultados • Caracterización de la magnitud del déficit eco-
obtenidos de los diferentes componentes de la lógico a diferentes escalas realizando un es-
huella ecológica. fuerzo de localización territorial de ese déficit.
• Cuantificar y evaluar el déficit ecológico a esca- • Elaboración de un diagnóstico sintético que
la estatal y autonómica a fin de extraer conclu- permita una evaluación de la sostenibilidad
siones acerca de la sostenibilidad del metabo- para las diferentes escalas territoriales, secto-
lismo socioeconómico actual. res y su evolución temporal.
• Formular escenarios de evolución de la huella y • Formulación de escenarios prospectivos de
el déficit ecológico para los próximos quinque- las tendencias de la huella ecológica para los
próximos quinquenios teniendo en considera-
nios a partir de la evolución económica prevista
ción diferentes hipótesis de evolución del esta-
y teniendo en consideración diferentes hipótesis
do socioambiental del territorio y las políticas
de evolución de variables del modelo territorial,
públicas sectoriales.
energético, residencial, alimentario, agrofores-
• Integración de un conjunto de propuestas-obje-
tal y de movilidad durante los próximos años.
tivo a alcanzar en diversas políticas sectoriales,
• Ajustar y optimizar la metodología de cálculo
que puedan ayudar a mejorar los balances de
de la huella ecológica en el contexto español
huella ecológica y déficits ecológicos y visuali-
en relación con la calidad y accesibilidad de la zarlo mediante escenarios.
información, procurando aportar un recurso de • Evaluación de la adecuación del uso del propio
información aplicable en futuros análisis de la indicador de la huella ecológica y enunciado de
huella ecológica en los diferentes niveles de la un conjunto de recomendaciones para mejorar
organización territorial del Estado. la calidad futura de estudios de este tipo.
• Comunicación de los resultados obtenidos del
El presente documento expone de forma resumida análisis de la huella ecológica española me-
los aspectos más relevantes del enfoque y desarro- diante la organización de jornadas específicas,
llo metodológico aplicados en el estudio, así como difusión en prensa y publicación del estudio.

15
CONCEPTO
DE HUELLA ECOLÓGICA

16

2
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

2.1 ¿QUÉ ES LA HUELLA minuye con el tiempo. Obviamente, dependien-


do de las técnicas agrícolas la productividad
ECOLÓGICA? puede disminuir, a causa, entre otras, de la
erosión, contaminación, etc.
La huella ecológica es un indicador biofísico de
• No se tiene en consideración el impacto aso-
sostenibilidad que integra el conjunto de impactos
ciado al uso del agua, más que la ocupación di-
que ejerce una cierta comunidad humana – país,
recta de suelo por embalses e infraestructuras
región o ciudad - sobre su entorno, considerando
tanto los recursos necesarios como los residuos hidráulicas y la energía asociada a la gestión
generados para el mantenimiento del modelo de del ciclo del agua.
consumo de la comunidad. • Como criterio general se procura no contabili-
zar aquellos aspectos para los que existan du-
La huella ecológica se expresa como el total de das sobre la calidad del cálculo. A este respec-
superficie ecológicamente productiva necesaria to, también se tiende siempre a elegir la opción
para producir los recursos consumidos por menos abultada cuando se presentan ocasio-
un ciudadano medio de una determinada nes en las que hay que escoger entre dos posi-
comunidad humana, así como la necesaria
bilidades diferentes de realización del cálculo.
para absorber los residuos que genera,
Así, la metodología se encuentra embebida de
independientemente de la localización de éstas.
una intención manifiestamente prudente a la

2
hora de obtener resultados.
La filosofía del cálculo de la huella ecológica par-
te de los siguientes aspectos:

• Para producir cualquier bien o servicio, inde-


pendientemente del tipo de tecnología utiliza-
da, se necesita un flujo de materiales y energía,
provenientes, en última instancia, de sistemas
ecológicos o del flujo de energía directa del Sol
en sus diferentes manifestaciones.
• Se necesitan sistemas ecológicos para absor-
ber los residuos generados durante el proceso
de producción y el uso de los productos finales.
• El espacio es también ocupado con infraes-
tructuras, viviendas, equipamientos, etc. redu-
ciendo así las superficies de ecosistemas pro-
ductivos.

Aunque este indicador integra múltiples impac-


tos, hay que tener en cuenta entre otros, los si-
guientes aspectos que subestiman el impacto
ambiental real:

• No quedan contabilizados algunos impactos,


especialmente de carácter cualitativo, como
son la contaminación del suelo, la contamina-
ción del agua, la erosión, la contaminación at-
mosférica (a excepción del CO2), la pérdida de
biodiversidad o la afectación del paisaje.
• Se asume que las prácticas en los sectores
agrícola, ganadero y forestal son sostenibles,
esto es, que la productividad del suelo no dis-

17
CONCEPTO DE HUELLA ECOLÓGICA

2.2 EL CÁLCULO DE
LA HUELLA ECOLÓGICA
La metodología de cálculo de la huella ecológica al consumo energético y a la ocupación directa del
se basa en la estimación de la superficie producti- suelo. Para estos consumos se requieren superfi-
va necesaria para satisfacer los consumos asocia- cies productivas que se dividen según se muestra
dos a la alimentación, a los productos forestales, en la siguiente tabla:

SUPERFICIE DEFINICIÓN
Superficies con actividad agrícola y que constituyen la tierra más productiva ecológica-
Cultivos mente hablando, pues es donde hay una mayor producción neta de biomasa utilizable
por las comunidades humanas.

Espacios utilizados para el pastoreo de ganado, en general considerablemente menos


Pastos
productivos que los agrícolas.

Superficies forestales ya sean naturales o repobladas, pero siempre que se encuentren


Bosques
en explotación.

Superficies marinas en las que existe una producción biológica mínima para que pueda
Mar productivo
ser aprovechada por la sociedad humana.

Superficie artificializada Considera las áreas urbanizadas y las ocupadas por infraestructuras

Superficies de bosque necesarias para la absorción de las emisiones de CO 2 debidas al


Área de absorción de CO 2
consumo de combustibles fósiles para la producción de energía.

Tabla 2.1 Superficies productivas de la huella ecológica.


Fuente: Elaboración propia

La huella ecológica se suele expresar en hectáreas 2. Transformar estos consumos en superficie


por habitante y año (ha/hab/año) si realizamos el biológica productiva apropiada a través de índi-
cálculo para un habitante; o bien en hectáreas to- ces de productividad.
tales si se calcula para la totalidad de la población
residente en un determinado territorio. Para cal- Ello equivale a calcular la superficie necesaria
cular estas superficies, han de realizarse dos pa- para satisfacer el consumo medio por habitante
sos esenciales: de un determinado producto. Para ello se utilizan
valores de productividad:
1. Contabilizar el consumo de las diferentes ca-
tegorías en unidades físicas. HUELLA ECOLÓGICA = C/P
(C=CONSUMO, P=PRODUCTIVIDAD)
En el caso en que no existan datos directos de con-
sumo, se estiman los consumos aparentes para Los valores de productividad pueden estar refe-
cada producto con la siguiente expresión:
ridos a escala global, o bien se pueden calcular
específicamente para un determinado territorio
CONSUMO APARENTE = P - E + I
(P= PRODUCCIÓN, E= EXPORTACIÓN , I= IMPORTACIÓN) teniendo en cuenta, así, la tecnología usada y el
rendimiento bioproductivo de la tierra. En la me-
todología estándar se opta por la utilización de
factores de productividad globales porque así se

18
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

hace posible la comparación de valores de huella


ecológica a escala local y se contribuye a la nor-
malización total del indicador.
CONSUMO CONSUMO
PRODUCTOS PRODUCTOS
En lo relativo al consumo energético, la huella AGRÍCOLAS ORIGEN
ANIMAL
ecológica se obtiene de manera diferente depen-
CONSUMO
diendo de la fuente de energía considerada. Para PRODUCTOS
FORESTALES
los combustibles fósiles, que constituyen la fuen-
CONSUMO
te primaria ampliamente mayoritaria de la ener-
ENERGÉTICO SUPERFICIE
gía consumida, la huella ecológica mide el área Y BALANCE ARTIFICIALIZADA
COMERCIO
de absorción de CO2. Ésta se obtiene a partir del
consumo total de energía, tanto el directo como el
ÍNDICES
asociado a la producción y distribución de los bie- PRODUCTIVIDAD
MUNDIAL
nes y servicios consumidos, dividido por la capa-
cidad de fijación de CO2 de la superficie forestal.

HUELLA ECOLÓGICA
Una vez contabilizados los consumos y aplicados
(hectáreas)
los índices de productividad disponemos ya de
las diferentes superficies productivas considera-
FACTORES
das (cultivos, pastos, bosques, mar o superficies DE EQUIVALENCIA

artificializadas). Cada categoría dispone de pro-


ductividades biológicas diferentes (por ejemplo:
una hectárea de cultivos es más productiva que
HUELLA ECOLÓCIGA
una de mar), y antes de sumarlas es necesario (hectáreas globales)
proceder a lo que se define como normalización.
Para ello, cada superficie se pondera mediante
factores de equivalencia que expresan la relación Figura 2.1. Esquema simplificado del cálculo de la huella ecológica en
hectáreas globales. Fuente: Elaboración propia
entre la productividad biológica de cada categoría
de superficie respecto al promedio de productivi-
dad de la superficie del planeta. En este sentido,
CATEGORÍA DE FACTOR DE
el hecho de que el factor de equivalencia de los TERRENO PRODUCTIVO EQUIVALENCIA
bosques sea de 1,37 quiere decir que la produc-
Cultivos 2,18
tividad de una hectárea de bosque posee, de me-
dia, un 37% más de productividad que la media Pastos 0,49

de productividad de toda la superficie de espacio


Bosques 1,37
productivo global.
Mar productivo 1,37

Una vez aplicados los factores de equivalencia a


Superficie artificializada 2,18
cada categoría de superficie calculada dispone-
mos ya de la huella ecológica expresada en lo que Área de absorción de CO 2 0,36

se define como “hectáreas globales” (hag). Ahora


sí, se puede proceder a la suma de todas ellas, y
Tabla 2.2. Factores de equivalencia según categoría de superficie productiva.
obtener con ello la huella ecológica total. Fuente: Global Footprint Network

19
CONCEPTO DE HUELLA ECOLÓGICA

2.3 ANÁLISIS DEL


CONJUNTO
DE ACTIVIDADES
HUMANAS Y
DE LAS DEMANDAS DE
SUPERFICIE
Como ejercicio posterior al cálculo, y con el objetivo
de facilitar estrategias de intervención para la re-
ducción de la huella ecológica, se pueden comparar
las huellas ecológicas de los distintos sectores de
actividad, estudiando las demandas de superficie
asociadas a cada una de las actividades humanas,
según las siguientes categorías generales.
(Ver tabla 2.3)

En el caso de la componente energética de la hue-


lla, la aplicación del análisis input-output ha per-
mitido ampliar estas categorías generales utiliza-
das habitualmente hasta 71 categorías de bienes
y servicios de consumo final. La distribución de la
huella energética en estas 71 categorías disponi-
bles en las tablas input-output españolas aporta
una información valiosa para identificar con mayor
precisión las demandas de consumo final que más
huella generan.

SECTOR DE ACTIVIDAD SUPERFICIES DEMANDADAS

Superficies de cultivos o pastos necesarias para la producción de alimentación


Alimentación
vegetal o animal, incluyendo los costes energéticos asociados a su producción.

Superficies demandadas por el sector residencial, sea en forma de energía


Vivienda
o superficies artificializadas.

Superficies asociadas al consumo energético y superficies ocupadas por


Movilidad y transportes
infraestructuras de comunicación y transporte.

Superficies asociadas al consumo energético de actividades de servicios y


Servicios
al suelo artificializado donde se ubican estas actividades.

Superficies necesarias para la producción de bienes de consumo, sea en


Bienes de consumo forma de energía y materias primas para su producción, o bien el suelo
artificializado para la implantación de actividades industriales.

Tabla 2.3. Análisis del conjunto de actividades humanas y de las demandas de superficie.
Fuente: Elaboración propia

20
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

2.4 BIOCAPACIDAD
Una vez estimado el valor de la huella ecológica se nen determinados tanto por la calidad del suelo
calculan las superficies reales de cada tipología de como por la aplicación de diferentes tecnologías
terreno productivo (cultivos, pastos, bosques, mar, productivas. Por ejemplo, el hecho de que el factor
superficie artificializada y área de absorción de CO2) de productividad del suelo agrícola español sea 1,3
disponibles en el ámbito territorial de estudio. La significa que, de media, el suelo agrícola español
suma de todos ellos es la biocapacidad y se expresa es un 30% más productivo que la media mundial
en hectáreas por habitante. de ese tipo de suelo.

La biocapacidad de un territorio se define como 2.5 DÉFICIT ECOLÓGICO


la disponibilidad de superficie biológicamente
productiva según categorías - cultivos, pastos,
Una vez calculadas las superficies necesarias para
mar productivo y bosques - expresada en
satisfacer los consumos y absorber los vertidos
términos absolutos (ha) o per cápita (ha/cap).
asociados a la población del ámbito territorial de
estudio (huella ecológica), se comparan con las su-
Las superficies productivas aportan servicios, tanto
de producción de bienes consumidos, como de asi- perficies reales de cada tipología de terreno produc-
milación de residuos, fundamentalmente del CO2 a tivo disponibles en dicho ámbito (biocapacidad), con
través de los bosques. el objeto de conocer el nivel de autosuficiencia.

Asimismo, se supondrá que como mínimo un 12% La diferencia entre los valores de la huella ecoló-
de cada tipo de territorio se reserva exclusivamente gica y la biocapacidad permite conocer el nivel de
para la conservación de la biodiversidad, así como deuda o de reserva ecológica existente en el ámbi-
para mantener los servicios básicos aportados por
to de estudio. Si el valor de la huella ecológica es
la naturaleza y que son difícilmente cuantificables.
superior a la biocapacidad de ese territorio, la re-
El debate sobre la suficiencia de este porcentaje
gión presenta un déficit ecológico, ya que la pobla-
está abierto. En todo caso, parece que la tendencia
ción que habita ese territorio consume más recur-
actual es establecer mecanismos de consideración
de esta reserva basados en aspectos cualitativos, sos de los que dispone. Este hecho indica que esta
toda vez que existen ecosistemas, como por ejem- comunidad se está apropiando de superficies fuera
plo la dehesa, que aportan biocapacidad al mismo de su territorio, o bien, que está consumiendo re-
tiempo que suponen una reserva ambiental. servas que constituyen el capital natural, hipote-
cando, de ese modo, la posibilidad de las futuras
En suma, en el marco del análisis de la huella ecoló- generaciones de seguir disfrutando de ese capital.
gica, la biocapacidad constituye la otra componente
de evaluación de la sostenibilidad, pues referencia de
Si por el contrario, la biocapacidad es igual o ma-
manera clara los límites del consumo de territorio
yor que la huella ecológica (lo que provoca un défi-
productivo atendiendo también a las técnicas actua-
cit negativo), se puede considerar que la región es
les y habituales de explotación de dicho territorio.
autosuficiente o que la región dispone de exceden-

Al igual que en el caso de los cálculos de huella eco- te ecológico.


lógica, los resultados de biocapacidad han de ser
normalizados mediante factores de equivalencia y, HUELLA ECOLÓGICA > BIOCAPACIDAD
también, mediante factores de productividad. LA REGIÓN PRESENTA DÉFICIT ECOLÓGICO

Mediante estos últimos factores, se normalizan los


HUELLA ECOLÓGICA ≤ BIOCAPACIDAD
diferenciales de productividad biológica entre los
LA REGIÓN PRESENTA EXCEDENTE ECOLÓGICO
territorios locales y la media mundial, y que vie-

21
CONCEPTO DE HUELLA ECOLÓGICA

El déficit ecológico indica si la población de un


país o región dispone de excedentes ecológicos, o
bien si consume más recursos de los que dispone.
En este caso, indica que la comunidad se está
apropiando de superficies fuera de su territorio,
o bien que está disponiendo del capital natural,
degradándolo y comprometiendo su calidad y
disponibilidad para las generaciones futuras.

En el marco de la sostenibilidad, y desde la pers-


pectiva nacional o regional, el objetivo de una so-
ciedad tendría que ser el de disponer de una huella
ecológica que no sobrepasara su biocapacidad, y
por tanto, que no presentara déficit ecológico.

De forma complementaria, desde la perspectiva


internacional, el objetivo de sostenibilidad sería el
de disponer de una huella ecológica por habitante
que no sobrepasara la biocapacidad per cápita dis-
ponible a escala del planeta.

El déficit ecológico de un territorio es indicativo del


grado en el que se está importando biocapacidad
procedente de otros territorios, dado que el man-
tenimiento de los estándares de vida de esa comu-
nidad depende del uso de la capacidad biológica de
otros suelos, o incluso de otros países, lo cual tiene
como resultado un deterioro gradual de los ecosis-
temas lejanos, donde sea que se encuentren.

Sin embargo, la huella ecológica no es un indica-


dor absoluto de sostenibilidad, por lo que debe en-
tenderse simplemente como un criterio necesario
para la sostenibilidad. Es decir, el requisito de que
la huella ecológica de la humanidad sea menor
que la biocapacidad global disponible es una con-
dición necesaria, ineludible y prioritaria, pero no
suficiente para la sostenibilidad (Global Footprint
Network, Ecological Footprint Standards 2006).
Las decisiones políticas acerca de la gestión de los
recursos, el bienestar social y otras dimensiones
de la sostenibilidad requieren la consideración de
otros factores más allá de la huella ecológica.

22
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

23
ENFOQUE
METODOLÓGICO

24

3
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

3.1 CRITERIOS
información para futuras actualizaciones del
GENERALES DEL indicador, la accesibilidad ágil y eficiente de los
ENFOQUE METODOLÓGICO datos, y la facilidad de su procesado con una
relación coste-beneficio favorable entre los re-
Teniendo en consideración los objetivos específi- querimientos de tratamiento y el valor añadido
cos y contexto de elaboración del estudio, el en- que aporta.
foque metodológico se ha definido en base a los • Introducir instrumentos metodológicos que
siguientes criterios: faciliten un análisis de la huella ecológica por
sectores que permita la elaboración de mode-
• Aplicar una metodología estándar de cálculo los prospectivos así como recomendación de
de la huella ecológica que facilita su com- desarrollo de políticas asociadas a sectores
parabilidad con cálculos realizados en otros específicos (movilidad, energía, política fores-
países. tal, cooperación internacional, ...)
• Integrar la metodología vigente y reconocida en • Enfocar los análisis más relevantes, especial-
el ámbito internacional y las tendencias me- mente en lo referente al análisis de los esce-
todológicas actuales recopiladas en los Eco- narios, en las huellas ecológicas parciales,
logical Footprint Standards desarrolladas por donde la disponibilidad de datos actuales y
parte de la Global Footprint Network. Ello se para la elaboración de escenarios sea de ma-
complementa con la integración de las princi- yor calidad, lo que mejoraría la interpretación

3
pales aproximaciones metodológicas aplicadas de los resultados correspondientes a dichos
en el cálculo de la huella previamente por los escenarios.
miembros del equipo en el ámbito territorial
objeto de estudio (España y diversas CC.AA.).
• Incorporar de forma complementaria a la me- 3.2 ASPECTOS
todología estándar un análisis Input-Output METODOLÓGICOS
para el cálculo de la huella energética que per-
mite disponer de un modelo de cálculo global
ESPECÍFICOS DEL ESTUDIO
más robusto y completo. La integración de la
En relación a los antecedentes y el contexto del
metodología estándar y el análisis input-output
proyecto, sus objetivos y los criterios establecidos
facilita una evaluación más amplia de la huella
previamente, se plantean a continuación de forma
ecológica, el despliegue multinivel de la hue-
sintética los aspectos más relevantes de la aproxi-
lla (país, Comunidad Autónoma, provincia), y la
mación metodológica específica realizada para el
construcción de un modelo de simulación de
desarrollo del análisis de la huella ecológica de
escenarios de evolución de la huella ecológi-
España.
ca a partir de indicadores socioeconómicos y
la aplicación en diferentes grados de políticas
públicas. 3.2.1 CÁLCULO DE LA HUELLA ECOLÓGI-
• Diseñar instrumentos metodológicos que fa- CA ESPAÑOLA DE PRODUCTOS BIÓTICOS:
ciliten un análisis multinivel de la huella eco- CULTIVOS, PASTOS, BOSQUES Y PESCA
lógica permitiendo una evaluación específica El enfoque metodológico realizado se centra en la
de la huella a cada escala (estado, Comunidad aplicación de la metodología estándar de cálculo
Autónoma, provincia). de la huella ecológica, por lo que los resultados
• Adaptar la metodología estándar de cálculo son comparables internamente entre sí y con res-
de la huella a los requerimientos específicos pecto a situaciones en el ámbito internacional.
del proyecto y a las características de la infor-
mación existente. Para esta adaptación se ha El cálculo de los consumos de productos se rea-
tenido en especial consideración la calidad de liza mediante la metodología general estándar
la información disponible, la homogeneidad y de cálculo por consumos aparentes, excepto en
comparabilidad de las fuentes para los diferen- el caso de la pesca en el que se han introducido
tes ámbitos territoriales y períodos temporales datos de consumo final debido a la falta de datos
de cálculo, la disponibilidad de esas fuentes de homogéneos.

25
ENFOQUE METODOLÓGICO

El cálculo de la huella utiliza los índices de produc- se procede al cálculo de los consumos de energía
tividad mundiales establecidos y estandarizados primaria de la totalidad de sectores a partir de los
para cada categoría de productos, aplicándose a datos de la estructura específica de la producción y
continuación los factores de equivalencia definidos consumo energético nacional. En el caso del balan-
por superficies productivas para normalizar los ti- ce de energía asociado al comercio internacional
pos de territorio productivo entre sí. se procede a la agregación de los registros de co-
mercio en categorías compatibles con la metodo-
El cálculo estándar se ha completado con un cálculo logía estándar de la huella ecológica. La segunda
basado en la utilización de productividades locales aproximación se basa en la utilización de las tablas
en la formulación de la huella ecológica agrícola, Input-Output de la economía española disponibles
que puede aportar una información complementa- en unidades monetarias, y su vinculación posterior
ria a la huella ecológica estándar en términos de
para cada una de las ramas de actividad a los datos
autosuficiencia ecológica.
de emisiones de las tablas NAMEA por sectores,
obteniendo así una intensidad energética por uni-
3.2.2 CÁLCULO DE LA HUELLA ECOLÓGICA
dad monetaria de producción. Este método ha per-
ENERGÉTICA POR ABSORCIÓN DE CO2
mitido disponer de resultados de huella ecológica
Se ha considerado un cálculo mediante dos aproxi-
energética por consumo final interno de bienes y
maciones complementarias basadas por una par-
servicios. Al valor obtenido se le añade la huella
te en el cálculo estándar de la huella por energía
por la emisión asociada a combustibles utilizados
(consumo directo + balance por comercio mediante
factores de intensidad preestablecidos), y por otra directamente en los hogares y vehículos privados
mediante la aplicación de las tablas Input-Output obteniendo una huella ecológica que equivale a la
españolas y la utilización de las emisiones de las obtenida a través de la primera aproximación.
Cuentas Ambientales NAMEA1.
La combinación de ambas aproximaciones facilita
La primera aproximación metodológica, que es la un cálculo más preciso de la huella global, una ma-
utilizada en la metodología estándar, integra tanto yor segmentación de ésta según categorías de bie-
el cálculo de la huella ecológica por consumo di- nes y servicios (hasta 71 categorías), el despliegue
recto de energía, como el análisis detallado de los territorial multinivel del cálculo de la huella (país,
flujos de energía asociados a los flujos de materia- Comunidad Autónoma, provincia), así como la for-
les del comercio internacional. En el primer caso mulación posterior de escenarios (ver figura 3.1).

BALANCE DE EMISIONES DE CO2, CALIBRACIÓN Y AJUSTE DE MODELO DE CÁLCULO

HUELLA ENERGÉTICA HUELLA ENERGÉTICA


ESCENARIOS: POR CONSUMO DIRECTO CON ANÁLISIS INPUT OUTPUT ESCENARIOS:
• Estructura Consumo directo según fuentes de • Disparadores
HUELLA INPUT-OUTPUT
energética energía y sectores (kTep) HE combustibles en socioeconómicos
hogares y vehículos • Emisiones NAMEA por ramas actividad
• Eficiencia Estructura del mix eléctrico, privados • Transporte
energética factores de emisión y rendimiento • Análisis Input-Output • Consumo final
• Hogar (tCO2 /Tep eléctrio) de bienes
• Movilidad BALANCE DE HUELLA POR COMERCIO • Intensidad
Balance huella
privada ecológica por INTERNACIONAL energética
Importación-Exportación • Actividades
de bienes y servicios • Comercio (Importación-Exportación)
económicas
de bienes y servicios
• Intensidad energética (GFN)

Despliegue por años del Despliegue multinivel


cálculo de la huella del cálculo de la huella
(1990-2005) (CC.AA.)/Provincias)

Figura 3.1. Integración del cálculo de la huella energética según metodología estándar (Global Footprint Network, GFN) y análisis
input-output. Fuentes: NAME A-inventario de GEI-Balance energético

NAMEA1: (Matriz de Contabilidad Nacional y Cuentas Ambientales). Tablas de contabilidad que extienden el formato matricial de las
cuentas nacionales incluyendo datos físicos sobre el medio ambiente (uso de recursos naturales y generación de emisiones y resi-
duos). En el caso de España se disponen de tablas NAMEA con 48 categorías diferentes de actividades.

26
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

3.2.3 CÁLCULO DE LA HUELLA


ECOLÓGICA POR COMUNIDADES
AUTÓNOMAS Y PROVINCIAS
En el momento de desarrollar este estudio, el cál-
culo de la huella por unidades territoriales subna-
CÁLCULO MULTINIVEL DE LA HUELLA
cionales presenta la dificultad de no disponer de
ECOLÓGICA CON METODOLOGÍA ESTÁNDAR
datos de comercio interior entre las CC.AA. en uni-
dades físicas, debido a que no hay ningún tipo de
HUELLA
control de flujos intra-estatales de bienes en uni-
ECOLÓGICA
dades físicas que permita cuantificarlos. Se pue- ESPAÑA ESPAÑOLA
(hectáreas • METODOLOGÍA
den conocer con precisión los flujos de materiales globales) ESTÁNDAR
entre las CC.AA. y el exterior, pero no los interiores • CONSUMOS APARENTES
• ANALISIS FLUJOS
entre CC.AA., y por tanto el cálculo ajustado del • COMERCIO EXTERIOR
• METODOLOGIA INPUT-
consumo de determinados productos presenta li- HUELLAS OUTPUT
mitaciones relevantes. En el caso de la escala pro- ECOLÓGICAS
CC.AA. REGIONALES
vincial, estas dificultades son aún más notables. (hectáreas • DATOS DE
globales) CONSUMO FINAL EN
UNIDADES FÍSICAS
En el marco de este proyecto se ha aplicado una (ALIMENTACIÓN, ...)
• DATOS ECONÓMICOS
combinación de las siguientes aproximaciones DE CONSUMO FINAL
EN HOGARES
para el cálculo de la huella de las CC.AA., ya utili-
HUELLAS • MIX ELÉCTRICO
zadas en el contexto de otros países europeos para ECOLÓGICAS REGIONAL
PROVINCIAS PROVINCIALES
cálculos regionales o municipales: (hectáreas
globales)

• Aplicación de datos de consumo final en unida-


des físicas en el ámbito territorial de análisis,
Figura 3.2. Esquema del proceso de cálculo multinivel
y específicamente del consumo de productos
de la huella ecológica.
alimentarios a partir de datos de encuestas de Fuente: Elaboración propia
consumo en el hogar.
• Cálculo de la huella ecológica regional a par-
tir de la española y aplicación de indicadores
de consumo económico en hogares para cada
unidad territorial adecuadamente ajustados
por coste de la vida.
• Ajuste de la intensidad en emisiones de CO2
de la estructura de generación eléctrica (mix
eléctrico) de cada CC.AA.

En el caso de la huella ecológica por provincias se


han asignado en la mayor parte de los casos los
valores promedio de la Comunidad Autónoma co-
rrespondiente, pudiendo disponer de información
específica tan sólo en lo referente a la superficie
artificializada y la biocapacidad.

En la figura 3.2 se muestra el enfoque metodológi-


co aplicado para el cálculo multinivel de la huella
en el marco de este proyecto.

27
ENFOQUE METODOLÓGICO

3.2.4 ANÁLISIS DE LA BIOCAPACIDAD


El enfoque metodológico utilizado se centra en la
aplicación de la metodología estándar de cálculo,
que hace plenamente comparables todos los cálcu-
los internos entre sí y con respecto a situaciones en
el ámbito internacional.

El cálculo de las superficies biológicamente pro-


ductivas se realiza a partir del análisis y tratamiento
de la información de usos del suelo disponible en
las diferentes escalas territoriales de análisis con
los criterios de selección de información planteados
previamente.

El análisis de la biocapacidad utiliza los factores


de productividad establecidos a escala española y
regional por los autores a partir de análisis biblio-
gráfico y documental, y los propios trabajos ya ela-
Figura 3.3. Esquema del proceso
borados al respecto por los miembros del equipo. A de cálculo de la biocapacidad.
Fuente: Elaboración propia
continuación se procede a la aplicación de los fac-
tores de equivalencia establecidos por superficies
productivas para transformar el cálculo de la bioca-
pacidad en hectáreas globales (ver figura 3.3)

3.3 ESTRUCTURACIÓN DEL


SISTEMA INTEGRADO
DE INFORMACIÓN
Y MATRICES
DE CÁLCULO Y MODELO
DE SIMULACIÓN DE
ESCENARIOS
El conjunto de cálculos realizados ha requerido de
la estructuración de un amplio sistema de informa-
ción física y monetaria, a partir del cual se han de-
sarrollado todo un conjunto de matrices de cálculo.
Éstas se estructuran según componentes, años y
escalas territoriales. El sistema de matrices de cál-
culo se complementa con el sistema de simulación
de escenarios de evolución futura de la huella (ver
figura 3.4).

Con la construcción de este sistema se pretende


Figura 3.4. Sistema de matrices de infor-
suministrar una base de cálculo que facilite futuras mación físico-monetaria, cálculo y mo-
actualizaciones, revisiones y despliegues comple- delización de la huella ecológica.
Fuente: Elaboración propia
mentarios.

28
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

ANALISIS BIOCAPACIDAD

INFORMACIÓN GEOGRÁFICA Y USOS DEL SUELO

MAR OCUPACIÓN
USO AGRÍCOLA USO PASTOS USO FORESTAL
PRODUCTIVO DIRECTA

FACTORES DE PRODUCTIVIDAD
FACTORES DE EQUIVALENCIA
ESPAÑA
BIOCAPACIDAD
CC.AA. (hectáreas globales)

PROVINCIAS

ANÁLISIS MULTINIVEL

(3) MATRICES DEL MODELO DE


SIMULACIÓN DE ESCENARIOS

(2) MATRICES DE CÁLCULO DE


M9 MODELO
LA HUELLA ECOLÓGICA POR ESCENARIOS
COMPONENTES, AÑOS Y ESCALAS
M9 MODELO ESCENARIOS
TERRITORIALES (40) (AÑOS 2010-2020/Escenarios)

(M3) Huella pesca Vinculación

(M2) Huella
(M5) Huella energía 1-0 (M7) Biocapacidad
(1) MATRICES DE ganadería
INFORMACIÓN
ESTRUCTURADA (200) (M1) Huella agricultura (M4) Huella energía (M6) Huella forestal

Vinculación
Encuestas de presupuestos Encuestas consumo Estadísticas de Datos población
familiares alimentación en hogares movilidad (MFOM) INE

Consumos energéticos Emisiones de CO2 según Emisiones (Inventarios GEI’s IFN-II y IFN-III para todas
según sectores y fuentes rama de actividad (NAMEA) CC.AA. y España (1990-2005)) las provincias disponibles

Producción y comercio internacional de Rendimientos y productividad Tablas simétricas Corine usos del suelo
productos agropesqueros y forestales agroforestal española y mundial Input-Output España (código 5, 1990 y 2000)

Estructuración

(0) INFORMACIÓN DE BASE NO ESTRUCTURADA

29
HUELLA ECOLÓGICA Y DÉFICIT
ECOLÓGICO DE ESPAÑA

30

4
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

A continuación se presentan los principales resul-


tados obtenidos del análisis de la huella ecológica
para el conjunto de España, haciendo un análisis
posterior por componentes, y profundizando en
mayor medida en la huella energética por su espe-
cial relevancia. A continuación se exponen los re-
sultados del análisis de la biocapacidad, así como
del déficit ecológico que se obtiene a partir del ba-
lance entre el valor de la huella y la biocapacidad.

4.1 VALOR Y TENDENCIAS


RECIENTES DE LA HUELLA
ECOLÓGICA ESPAÑOLA
• La huella ecológica por habitante se situó, en el
año 2005, en 6,4 hectáreas globales de territo-

4
rio productivo anuales, lo cual quiere decir que,
como media, cada persona en España necesita
6,4 hectáreas de territorio productivo al año
para satisfacer sus consumos.
• El indicador presenta un aumento del 19%
desde 1995 a 2005, lo que se traduce en un au-
mento desde las 5,4 hectáreas en 1995 hasta
las 6,4 en 2005. El ritmo medio de crecimiento
de la huella en esos diez años fue de 0,1 hectá-
reas al año, es decir, 2,7 metros cuadrados dia-
rios por persona, equivalente a un incremento
diario en el conjunto del país de 12.000 campos
de fútbol.
• El análisis evolutivo indica un crecimiento es-
pecialmente notable en el quinquenio 1995-
EVOLUCIÓN DE LA HUELLA ECOLÓGICA ESPAÑOLA
2000. Entre 2000 y 2005 se manifiesta una
cierta ralentización del crecimiento, propiciada
hag/cap

previsiblemente por el incremento de la pobla-


ción estadística causada por los procesos de 7,0
regularización de población. 6,0 6,395
6,018
5,0 5,069 5,374

4,0

3,0

2,0

1,0

0,0
1990 1995 2000 2005
Figura 4.1. Evolución de la huella ecológica española
(hectáreas globales/cápita).
Fuente: Elaboración propia a partir de diversas fuentes

31
HUELLA ECOLÓGICA Y DÉFICIT ECOLÓGICO DE ESPAÑA

4.2 EVOLUCIÓN HISTÓRICA


DE LA HUELLA
ECOLÓGICA ESPAÑOLA
• Un análisis evolutivo aproximado de la huella bióticos orientados al consumo energético en-
ecológica con una escala temporal más amplia dosomático de la población no varían en dema-
confirma la clara y notable tendencia al incre- sía, si bien sí se aprecia una leve subida de las
mento del valor de la huella ecológica durante huellas debido al incremento del peso de los
la mayor parte de la segunda mitad del siglo XX, productos de origen animal respecto a los de
manifestando un incremento especialmente origen vegetal en la dieta española.
notable durante el período de análisis específi- • La huella energética, aquella debida al consumo
co de este estudio (1990-2005). exosomático, presenta una clarísima tendencia
• Desde una perspectiva histórica, que se confir- al alza, atenuada sólo en momentos de crisis
ma durante el período de análisis, las huellas económica, y que en el período de análisis des-
ecológicas debidas a consumos de productos taca por su especial intensidad de crecimiento.

EVOLUCIÓN DE LA HUELLA ECOLÓGICA ESPAÑOLA POR COMPONENTES

7,0
Evolución estimada de la huella ecológica española estándar (hag/cap)
6,0 1955 1960 1965 1970 1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005

5,0 Agricultura 1,035 0,970 1,027 0,980 1,056 1,032 0,905 0,912 1,140 1,094 1,002

Ganadería 0,148 0,158 0,192 0,253 0,291 0,292 0,297 0,309 0,327 0,346 0,357
4,0
Pesca 0,271 0,255 0,242 0,217 0,222 0,240 0,223 0,309 0,277 0,323 0,344
3,0
Energía 0,422 0,640 0,886 1,630 2,515 2,813 2,619 2,931 3,291 3,888 4,330
2,0 Forestal 0,322 0,317 0,280 0,255 0,282 0,270 0,285 0,305 0,289 0,311 0,304

1,0 Artificializado 0,000 0,000 0,000 0,000 0,000 0,000 0,000 0,046 0,050 0,057 0,059

TOTAL 2,197 2,340 2,626 3,334 4,366 4,646 4,329 4,812 5,374 6,018 6,395
0,0
1955 1960 1965 1970 1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005

Artificializado Pesca
Forestal Ganadería
Energía Agricultura

Figura 4.2. Evolución de la huella ecológica española por componentes.


Fuente: Elaboración propia a partir de diversas fuentes

Nota: Los valores de la huella ecológica entre los años 1955 y 1990 proceden del trabajo realizado por Óscar Carpintero (2005), calcula-
dos originalmente con productividades locales y no estandarizada, y que han sido normalizados al rango de la serie 1990-2005 obtenido
en este proyecto. Con ello no se pretende recalcular la huella de los decenios anteriores, sino poder disponer de una serie histórica en
una base de cálculo equiparable que permita valorar de forma aproximada la tendencia en los patrones de consumo en España.

32
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

4.3 ESTRUCTURA DE LA
HUELLA ECOLÓGICA
POR TIPOLOGÍA
DE SUPERFICIES
• Según los resultados obtenidos, los compo-
nentes de huella más decisivos son los debi-
dos a los consumos energéticos, que suponen EVOLUCIÓN DEL CONSUMO ENDOSOMÁTICO VS
en el año 2005 el 68% de la huella, y que han CONSUMO EXOSOMÁTICO
pasado de las casi 3,3 a 4,3 hag/cap entre los

hag/cap
años 1995 y 2005. Esta componente es además
la que más ha aumentado en valor relativo en
el período 1995-2005, con un incremento del 7,0
31,6%.
6,0
• Las componentes de la pesca (24,1%) y pastos
(9,2%) muestran también incrementos relativos 5,0
relevantes durante el período 1995-2005, que 4,0
se compensan por otra parte con la disminu-
3,0
ción de la componente asociada a los cultivos
(-12,1%). 2,0
• El porcentaje de huella ecológica asociada
1,0
al consumo endosomático (pesca, cultivos y
pastos dedicados a la alimentación) suponía 0,0
1990 1995 2000 2005
aproximadamente el 65% del total de la huella
en el año 1955, mientras que el consumo exo-
somático (huella asociada al consumo energé- 100%
tico) suponía para el mismo año el 20%. Para 90%
el año 1990 las huellas por consumo endoso- 80%
mático y exosomático representaban el 35% y 70%
58% respectivamente, mientras que para el 60%
2005 estos valores suponían ya un 26% y 68% 50%
respectivamente. 40%
30%
20%
10%
0%
1990 1995 2000 2005

Artificializado Pesca

Forestal Ganadería

Energía Agricultura

Figura 4.3. Evolución del consumo endosomático vs consumo


exosomático en la huella ecológica española.
Fuente: Elaboración propia a partir de diversas fuentes

33
HUELLA ECOLÓGICA Y DÉFICIT ECOLÓGICO DE ESPAÑA

4.4 HUELLA ECOLÓGICA


HUELLA ECOLÓGICA DEL CONSUMO ENERGÉTICO
ENERGÉTICA EN ESPAÑA POR COMPONENTES

5,0
4.4.1 HUELLA ECOLÓGICA ENERGÉTICA

hag/cap
GLOBAL Y POR COMPONENTES
4,0
• En el año 2005, la principal componente de la
huella energética es con diferencia la produc-
3,0
ción de bienes de consumo (47,5%), una vez
imputados los consumos energéticos directos 2,0
y la energía contenida en los bienes importa-
dos. Constituye también el componente que se 1,0

ha incrementado más en valor absoluto en el


período 1995-2005 (0,407 hag). 0,0
1995 2000 2005
• El transporte constituye la segunda componen-
Agricultura 0,227 0,210 0,378
te en importancia (23,4%), seguida a una cierta Servicios 0,299 0,373 0,396
distancia por el sector residencial (11,2%), ser- Vivienda 0,369 0,455 0,484
Transaporte
vicios (9,2%) y agricultura (8,7%). y movilidad
0,746 0,905 1,013

• La totalidad de componentes de la huella ma- Bienes de


1,615 1,945 2,058
consumo
nifiestan incrementos superiores al 25% en el
período 1995-2005, destacando especialmente
HUELLA ECOLÓGICA DEL
el transporte (36%, 0,267 hag) y la agricultu-
CONSUMO ENERGÉTICO (2005)
ra (66,5%, 0,151 hag), en este último caso por
23%
la importancia creciente de la importación de
preparados alimenticios para animales y otros 11%

productos alimentarios.
• Es destacable la importancia creciente de la
huella ecológica energética asociada a la ener-
gía contenida en los bienes importados, y que
refleja el incremento notable del déficit comer-
9%
cial de la economía española. 48%

9%

HUELLA ECOLÓGICA DEL CONSUMO


ENERGÉTICO EN ESPAÑA POR ORIGEN
2,5
hag/cap

2,0

1,5

1,0

0,5

0,0
1995 2000 2005

Balance
comercio 0,678 0,800 0,999

Producción 0,972 1,146 1,059


local
Figura 4.4. Huella ecológica del consumo energético en España.
Fuente: Elaboración propia a partir de diversas fuentes

34
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

4.4.2 HUELLA ECOLÓGICA ENERGÉTICA


POR TIPOLOGÍA DE BIENES
Y SERVICIOS FINALES CONSUMIDOS
• La aplicación complementaria de la metodo-
logía Input-Output para el cálculo de la huella
ecológica por demanda de bienes y servicios
ha permitido un análisis pormenorizado del
impacto en términos de huella ecológica para
71 tipos de productos integrando todo su ciclo
de vida.
• La construcción de inmuebles y obras de
ingeniería civil es el principal generador de
huella ecológica por emisiones directas e in-
directas. Ello refleja en buena medida la rele-
vancia del sector de la construcción durante
los últimos años.
• Destaca también el impacto de los productos
energéticos - electricidad y petróleo-, cuyos
procesos productivos son muy intensivos en
consumo energético. A continuación destaca la
huella asociada a la hostelería, seguida de los
alimentos preparados. Ello refleja la importan-
cia del sector turístico del país, así como la re-
Figura 4.5. Huella ecológica del consumo energético en
levancia creciente de la intensidad energética
España por tipología de productos, año 2000.
de la industria agroalimentaria. Fuente: Elaboración propia a partir de diversas fuentes

HUELLA ECOLÓGICA DEL CONSUMO ENERGÉTICO DE LAS CATEGORÍAS DE


BIENES Y SERVICIOS CON MAYOR IMPACTO (2000)

Maquinaria y equipo mecánico

Servicio inmobiliarios

Servicios sanitarios, veterinarios y sociales de no mercado

Vehículos de motor, remolques y semirremolques

Administración Pública, defensa y seguridad social

Servicios de comercio al por menor

Productos químicos

Coque, productos de refino de petróleo y combustible nuclear

Alimentos preparados para animales y otros

Servicio de hostelería

Servicios de producción y distribución de electricidad

Construcción de inmuebles e ingeniería civil


hag/cap
0

5.000.000

10.000.000

15.000.000

20.000.000

2 5.000.000

30.000.000

35
HUELLA ECOLÓGICA Y DÉFICIT ECOLÓGICO DE ESPAÑA

4.4.3 HUELLA ECOLÓGICA DEBIDA


A LA GENERACIÓN ELÉCTRICA EN ESPAÑA
• La evolución de la estructura de generación • La mayor contribución del gas natural en ciclo
eléctrica en el período 1995-2005 se ha carac- combinado en el mix eléctrico ha contribui-
terizado por un incremento sustancial en valor do positivamente a disminuir la intensidad de
absoluto del consumo de gas natural, así como emisiones de CO2 equivalentes en términos de
por un aumento también de las energías reno-
huella ecológica por unidad de energía eléctri-
vables.
ca consumida en un 20% entre el 1995 y 2005.
• A pesar del incremento en valor absoluto de la
• No obstante, en términos de impacto global,
contribución de las energías renovables, el in-
cremento notable de la demanda y generación el incremento del consumo de electricidad ha
total de electricidad ha provocado que la con- anulado el aumento paralelo de la eficiencia en
tribución de las renovables en el mix eléctrico el mix eléctrico español, que se ha producido
no haya variado de forma significativa en el pe- por la utilización creciente de energías renova-
ríodo analizado. bles y gas natural.

EVOLUCIÓN DEL MIX ELÉCTRICO ESPAÑOL (kWh)

2005

2000

1995

0 50.000 100.000 150.000 200.000 250.000 300.000

2005

2000

1995

0 % 20% 40% 60% 80% 100%

1995 2000 2005


Renovables 25.224 37.892 47.202
Nuclear 55,445 62.206 57.539
Ciclo combinado 0 0 48.840
Gas natural 8.935 28.049 29.430
Fuel 1.263 6.583 1.929
Carbón 64.737 79.949 78.086

Figura 4.6. Evolución del mix eléctrico español. Fuente: Red Eléctrica Española

36
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

4.5 HUELLA ECOLÓGICA


POR SUPERFICIE
ARTIFICIALIZADA
• La huella ecológica por superficie artificializada
constituye junto a la energética la que manifies-
SUPERFICIE ARTIFICIALIZADA EN ESPAÑA
ta un mayor incremento porcentual durante el
período analizado. Entre los años 1990 y 2000,

ha/cap
y según los datos disponibles de Corine Land
Cover, la superficie ocupada directamente au-
mentó en un 29,58%, valor prácticamente igual 1.200.000

al incremento manifestado por la huella ener-


1.000.000
gética (31,9%).
• Este incremento refleja la intensa actividad del 800.000
sector de la construcción durante este período
600.000
que se ha visto extendido durante los años pos-
teriores. No obstante, en términos absolutos, la 400.000
huella por suelo artificializado es poco relevan-
te, y alcanzaba el año 2000 un valor de 0,057 hag 200.000

por habitante.
0
• A pesar del escaso valor relativo, cabe decir que 1990 2000

el proceso de artificialización del suelo a través


del proceso de urbanización que ha experimen-
tado el país ha inducido, como se ha comenta- Figura 4.7. Evolución de la superficie artificializada en España.
do en el apartado correspondiente, una huella Fuente: Elaboración propia a partir de datos del Corine Land Cover
y otras fuentes
ecológica por consumo energético del sector de
la construcción muy significativa. Asimismo, el
tipo de proceso urbanizador que se ha manifes-
tado en determinados sectores de la geografía
española, caracterizado por la baja densidad y
la dispersión territorial, ha contribuido sin duda
al incremento de la huella ecológica energética
debida a la movilidad.
• Cabe señalar también que una parte impor-
tante de los impactos de la artificialización del
suelo tienen una componente cualitativa que no
se ve reflejada en la huella ecológica (paisaje,
biodiversidad y fragmentación de hábitats, ciclo
del agua, ...).
• Cabe destacar finalmente que los valores en los
que se basa la huella artificializada son aque-
llos aportados por datos del Corine Land Cover.
En relación con su aún baja resolución, puede
existir un porcentaje relevante de superficie ar-
tificializada en el país que no quede reflejada en
los datos, tal y como se ha podido comprobar en
algunas CC.AA. con los datos de catastro urba-
no y la estadística de infraestructuras. Por tan-
to, hay que considerar que los datos aquí pre-
sentados infravaloran la dimensión del proceso
de artificialización producido.

37
HUELLA ECOLÓGICA Y DÉFICIT ECOLÓGICO DE ESPAÑA

4.6 VALOR Y TENDENCIAS


DE LA BIOCAPACIDAD
ESPAÑOLA
• El resultado obtenido de biocapacidad para
2005 es de alrededor 2,6 hectáreas de territorio BIOCAPACIDAD DE ESPAÑA
productivo medido en hectáreas globales por
persona y año. Restando el 12% que se consi-
3,5

ha/hab
dera necesario para la conservación de la bio-
3,0
diversidad, el valor finalmente disponible es de
aproximadamente 2,4 hectáreas. Esta cifra es 2,5
superior al reparto de biocapacidad global, es 2,0
decir, la que resulta de dividir la biocapacidad
1,5
disponible global entre el total de los habitan-
tes del Planeta, que se encontraba en ese mis- 1,0

mo año en unas 1,8 hectáreas (WWF, 2007). 0,5


• Durante el período de análisis la biocapacidad
0,0
de territorio forestal se ha visto incrementada 1990 1995 2000 2005
tanto en valor absoluto (hag) como por habitan-
te (hag/cap), debido al aumento de la superficie
Artificializado
forestal arbolada y a la productividad observada
de los bosques a lo largo de los últimos quince Forestal

años. Globalmente, atendiendo a la informa- Pesca


ción disponible en los Inventarios Forestales Ganadería
Nacionales, se estima que la capacidad de asi-
Agricultura
milación de CO2 por los bosques españoles se
ha incrementado alrededor de un 50% entre los 12% reserva para la
biodiversidad
años 1990 y 2000.
• En las demás categorías la tendencia general
es hacia la disminución, especialmente cuando
Figura 4.8. Biocapacidad de España.
se analiza como biocapacidad per cápita, debi- Fuente: Elaboración propia a partir de diversas fuentes
do al aumento comentado de la población que
no se ha visto acompañado por un incremento
en la superficie agrícola y de pastos, sino más
bien al contrario. Esa disminución es especial-
mente considerable en el territorio agrícola 4.7 DÉFICIT ECOLÓGICO
(15%) y de pastos (14%). ESPAÑOL
• En relación a la superficie agrícola es previ-
sible que los datos presentados, procedentes • El déficit ecológico español alcanza en el año
de las categorías establecidas por Corine Land 2005 un valor muy próximo a las 4 hag/cap.,
Cover como agrícolas, estén sobrevalorando que supone alrededor de 175.000.000 hectá-
su auténtica dimensión. Esta hipótesis parece reas globales, y que equivale a un aumento del
verse avalada al contrastar los datos con otras 40% entre los años 1995 y 2005.
fuentes disponibles de estadística agraria. No • La huella ecológica española en el año 2005
obstante, la falta de otras fuentes de informa- es 2,6 veces superior a la biocapacidad dis-
ción homogéneas y suficientemente precisas ponible en hectáreas globales. Dicho de otro
de datos de uso del suelo según categorías, modo, se necesitan casi tres Españas para
escalas territoriales y años de análisis del pre- mantener el nivel de vida y población actua-
sente estudio, ha llevado a optar por el uso de les. Con ello, el déficit ecológico de España
la información de Corine Land Cover. se situaría por encima de la media de los paí-

38
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

4.8 HUELLA Y DÉFICIT


ECOLÓGICO ESPAÑOL
EN EL CONTEXTO
INTERNACIONAL
ses de la Unión Europea. Así pues, la situación
• La huella ecológica de España es elevada, ocu-
española en cuanto a sostenibilidad ambiental
pando, según datos internacionales, los pri-
de estos consumos es comprometida.
meros puestos entre los países europeos. La
• La huella ecológica debida a los productos
tendencia se manifiesta claramente hacia una
bióticos (huella alimentaria y forestal consi-
evolución muy negativa del indicador (la huella
deradas conjuntamente) varía en mucha me-
ecológica) y aún más del déficit ecológico co-
nor cuantía, si bien es muy similar a la bioca-
pacidad disponible tomada en su globalidad. rrespondiente, que se ha incrementado desde

Este hecho es particularmente importante, las 2,5 hectáreas hasta alrededor de 4 en un


pues con la biocapacidad actual en España período de tan sólo 15 años, lo que supone un
únicamente habría suficiente espacio para incremento próximo al 55%.
proveer de alimentos y productos forestales • Si se tiene en cuenta la biocapacidad mundial,
a la población existente, teniendo en cuenta situada en unas 1,78 hectáreas per cápita, el re-
una dieta y unos usos forestales iguales a los sultado es que, si todos los habitantes del mun-
actuales. do consumieran como el promedio de los habi-
tantes en España, se necesitarían dos planetas y
medio, además del actual, vacíos de habitantes.
Como conclusión, nuestro nivel de vida no es ex-
DÉFICIT ECOLÓGICO DE ESPAÑA portable al resto de la humanidad.
• Estos resultados son generalizables a todos los
hag/cap

países de mayor renta per cápita mundial, si


bien la diferencia entre España y muchos de es-
8,0
tos países, sobre todo de la UE, es que las ten-
6,0 dencias siguen caminos justamente opuestos.

4,0

2,0

0,0
1990 1995 2000 2005

5,069 5,374 6,018 6,395

2,522 2,552 2,733 2,433

1,817 1,811 1,800 1,780

2,547 2,822 3,286 3,961

Total huella ecológica Biocapacidad mundial

Total biocapacidad Déficid ecológico

Figura 4.9. Déficit ecológico de España.


Fuente: Elaboración propia a partir de diversas fuentes

39
HUELLA ECOLÓGICA Y DÉFICIT
ECOLÓGICO POR COMUNIDADES
AUTÓNOMAS

40

5
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

A continuación se muestran los principales resulta-


dos del análisis de la huella ecológica, biocapacidad HUELLA ECOLÓGICA DEL CONSUMO
y déficit ecológico por comunidades autónomas. Tal ENERGÉTICO, AÑO 2000
y como se detalla en la propia interpretación de los
datos, la escasa calidad y homogeneidad de la in-
formación disponible afecta sustancialmente a la
precisión y comparabilidad de los resultados obte-
nidos por Comunidades Autónomas. No obstante,
los cálculos realizados permiten obtener ya ciertas
conclusiones relevantes sobre la sostenibilidad am-
biental de las diferentes Comunidades Autónomas y
los patrones de consumo.

5.1 HUELLA ECOLÓGICA


POR COMUNIDADES
AUTÓNOMAS
Inferior a 3,5 hag/cap
• En el caso de las CC.AA., la base estadística Entre 3,5 y 3,9 hag/cap

5
sólo ha permitido realizar un cálculo media- Entre a 3,9 y 4,1 hag/cap
Superior a 4,1 hag/cap
namente satisfactorio, por presencia de todos
los componentes, para el año 2000. En lo re-
lativo a huellas alimentarias, las estimaciones
y recomposiciones de la información básica
han sido constantes debido a los déficits de la HUELLA ECOLÓGICA DE PASTOS, CULTIVOS
base estadística disponible, lo que explica en
Y PESCA, AÑO 2005
gran parte las diferencias encontradas en los
valores finales. Otro factor metodológico im-
portante en el momento de realizar el estudio
ha sido la carencia de información homogénea
sobre balances energéticos para las diferentes
CC.AA. y de los flujos de comercio interno, lo
que no ha permitido tampoco realizar un cál-
culo de huella energética plenamente satisfac-
torio.
• La huella ecológica alimentaria parece indicar
una cierta pauta de mayor impacto por consu-
mo de alimentos (vegetal, cárnico y pesquero)
en las CC.AA. ubicadas en el norte de la Penín-
sula, y decrecientes en el sur y mediterráneo.
No obstante, la falta de calidad y plena com- Inferior a 1,4 hag/cap
parabilidad de los datos no pueden garantizar Entre 1,4 y 1,7 hag/cap
de forma suficiente la precisión de los valores Entre a 1,7 y 1,9 hag/cap
Superior a 1,9 hag/cap
obtenidos.
• La huella ecológica energética parece indicar
una cierta pauta de mayor huella en las CC.AA.
ubicadas en el norte de la Península, con ma-
yor capacidad de consumo en los hogares, y Figura 5.1. Huella ecológica energética (año 2000) y huella
ecológica de pastos, cultivos y pesca (año 2005) por Comuni-
con estructuras de generación eléctrica en ge-
dades Autónomas.
neral más intensivas en CO2. Fuente: Elaboración propia a partir de diversas fuentes

41
HUELLA ECOLÓGICA Y DÉFICIT ECOLÓGICO POR COMUNIDADES AUTÓNOMAS

5.2 BIOCAPACIDAD
POR COMUNIDADES
AUTÓNOMAS
• Se manifiestan diferencias muy significativas en rre exactamente lo contrario, como por ejemplo
la biocapacidad disponible por habitante entre Andalucía, Comunidades que presentan núme-
las diversas CC.AA. Destacan por el alto valor ros elevados en ambos aspectos, como Castilla
de biocapacidad (superiores a 7,7 hag/cap) las y León y, por último, Comunidades que carecen
dos Castillas, y en menor medida Extremadura de ambos, como Madrid.
y Aragón. Por el contrario las CC.AA. de Madrid,
Canarias, Comunidad Valenciana, Cataluña,
BIOCAPACIDAD, AÑO 2000
País Vasco y Baleares en orden de menor a ma-
yor son las que disponen de valores inferiores,
por debajo de 1,5 hag/cap en todos los casos.
• La gran diferencia entre valores de la bioca-
pacidad refleja la distribución marcadamente
asimétrica de la densidad de población entre
CC.AA., y tiene como consecuencia la existencia
de CC.AA. con reservas significativas de bioca-
pacidad y en otros casos de CC.AA. con valores
muy reducidos e inferiores a la media mundial.
• La diversidad de situaciones territoriales se ma-
nifiesta ampliamente en las diferencias existen-
Inferior a 1,5 hag/cap
tes en la biocapacidad presente en las diferentes
Entre 1,5 y 5 hag/cap
CC.AA., no sólo por su cuantía, sino también por Entre a 5 y 7,7 hag/cap
su naturaleza. Así, existen comunidades, como Superior a 7,7 hag/cap
Cantabria, que son líderes en biocapacidad fo-
restal mientras que poseen muy poca biocapa- Figura 5.2. Biocapacidad por Comunidades Autónomas, año 2000.
cidad agrícola, comunidades a las que les ocu- Fuente: Elaboración propia a partir de diversas fuentes

MUNDO
BIOCAPACIDAD
ESPAÑA
MELILLA POR COMUNIDADES
CEUTA AUTÓNOMAS, AÑO 2000
LA RIOJA
PAÍS VASCO
NAVARRA
MURCIA
MADRID Agricultura y ganadería
GALICIA
Pesca
EXTREMADURA
COMUNIDAD VALENCIANA Forestal
CATALUÑA
Artificializado
CASTILLA-LA MANCHA
CASTILLA Y LEÓN
CANTABRIA
CANARIAS
BALEARES
ASTURIAS
ARAGÓN
ANDALUCIA
0,0 1,0 2,0 3,0 4,0 5,0 6,0 7,0 8,0 9,0 10,0 hag/cap

Figura 5.3. Biocapacidad por Comunidades Autónomas y categorías productivas, año 2000.
Fuente: Elaboración propia a partir de diversas fuentes

42
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

5.3 DÉFICIT ECOLÓGICO


POR COMUNIDADES
AUTÓNOMAS
• El déficit ecológico presenta una distribución
también marcadamente asimétrica como con-
secuencia de las diferencias en disponibilidad
de biocapacidad previamente comentadas, y
condicionadas fundamentalmente por la ma-
yor o menor densidad de población en cada una
de ellas.
• Las CC.AA. de Castilla-León, Castilla-La Man-
cha, Extremadura y Aragón poseen excedentes
ecológicos, al conjugar un gran tamaño y un
bajo nivel poblacional (aunque existen acu-
sadas diferencias provinciales), es decir, en
donde la huella ecológica total es reducida y el
territorio disponible es extenso. Castilla-León
(-3,3 hag/cap) constituye la comunidad con
mayor excedente, seguida de Castilla-La Man-
cha (-2,5), Extremadura (–2,2) y Aragón (-0,5).
• Por el contrario el conjunto de CC.AA. del lito-
ral mediterráneo (Cataluña, Comunidad Valen-
ciana, Murcia e Islas Baleares), Canarias, País
Vasco y Madrid presentan déficits ecológicos
acusados superiores a 4 hag/cap al conjugar
en mayor o menor medida, según el caso, al-
tas densidades de población, mayores valores
de huella ecológica y valores más reducidos de
productividad forestal.
• En valor absoluto, los principales déficits eco- DÉFICIT ECOLÓGICO, AÑO 2000
lógicos se presentan de forma destacada en
la Comunidad de Madrid (31.409.551 hag) y en
Cataluña (31.142.466 hag), seguidas de la Co-
munidad Valenciana (23.407.372 hag) y Anda-
lucía (22.720.870 hag). En el otro extremo las
CC.AA. con mayores excedentes ecológicos
son Castilla-León (6.129.132 hag) y Castilla-La
Mancha (5.642.573 hag).

Excedente ecológico
Déficit inferior a 2,5 hag/cap
Déficit entre 2,5 y 4 hag/cap
Déficit superior a 4 hag/cap
Figura 5.4. Déficit ecológico por comunidades autónomas, año 2000.
Fuente: Elaboración propia a partir de diversas fuentes

43
HUELLA ECOLÓGICA Y DÉFICIT ECOLÓGICO POR COMUNIDADES AUTÓNOMAS

DÉFICIT ECOLÓGICO
POR COMUNIDADES AUTÓNOMAS, AÑO 2000

MADRID 31.409.557

CATALUÑA 31.142.466

COMUNIDAD VALENCIANA 23.407.372

ANDALUCÍA 22.720.870

PAÍS VASCO 9.068.971

CANARIAS 7.446.096

MURCIA 5.522.658

GALICIA 4.703.166

ASTURIAS 4.029.801

BALEARES 3.637.461

CANTABRIA 1.509.525

NAVARRA 1.329.684

LA RIOJA 510.864

CEUTA 402.385

MELILLA 349.022

ARAGÓN -569.138

EXTREMADURA -2.330.272

CASTILLA-
-5.642.573
LA MANCHA
hag
CASTILLA Y
-6.129.132
LEÓN

-10.000.000 -5.000.000 0 5.000.000 10.000.000 15.000.000 20.000.000 25.000.000 30.000.000 35.000.000

Figura 5.5. Déficit ecológico total por Comunidades Autónomas, año 2000.
Fuente: Elaboración propia a partir de diversas fuentes

Nota: El déficit ecológico se define como la diferencia entre la huella ecológica y la biocapacidad. En consecuencia cuando la
huella es inferior a la biocapacidad, el déficit tiene un signo negativo que significa que existe superávit ecológico.

44
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

5.4 SÍNTESIS DE LA
CONTRIBUCIÓN DE LAS
COMUNIDADES AUTÓNOMAS
A LA HUELLA ECOLÓGICA
Y BIOCAPACIDAD ESPAÑOLA

DISTRIBUCIÓN DE LA HUELLA ECOLÓGICA


POR COMUNIDADES AUTÓNOMAS, AÑO 2000
8
hag/cap

7
6
5
4
3
2
1
0
ANDALUCÍA

ARAGÓN

MADRID
ASTURIAS
BALEARES

COMUNIDAD VALENCIANA

EXTREMADURA

GALICIA

MURCIA
CANTABRIA
CASTILLA Y LEÓN

CASTILLA -LA MANCHA

CATALUÑA

NAVARRA
PAÍS VASCO
LA RIOJA
CEUTA
MELILLA
CANARIAS

Promedio huella ecológica


1.000.000 habitantes per cápita española

DISTRIBUCIÓN DE LABIOCAPACIDAD
POR COMUNIDADES AUTÓNOMAS, AÑO 2000
10
hag/cap

9
8
7
6
5
4
3
2
1
0
ANDALUCÍA

ARAGÓN
ASTURIAS
BALEARES

MADRID
CANTABRIA
CASTILLA Y LEÓN

COMUNIDAD VALENCIANA

EXTREMADURA
CASTILLA -LA MANCHA

CATALUÑA

GALICIA

MURCIA
NAVARRA
PAÍS VASCO
LA RIOJA
CEUTA
MELILLA
CANARIAS

Promedio huella ecológica


1.000.000 habitantes per cápita española

Figura 5.6. Contribución a la huella ecológica y a la biocapacidad española por Comunidades Autónomas.
Fuente: Elaboración propia a partir de diversas fuentes

45
ESCENARIOS Y ESTRATEGIAS
PARA LA REDUCCIÓN DE LA HUELLA
ECOLÓGICA ESPAÑOLA

46

6
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

6.1 FORMULACIÓN
DE LOS ESCENARIOS
La formulación de escenarios se desarrolla según
el siguiente esquema de tareas:

1. Identificación de ámbitos y subámbitos de 4. Desarrollo de un modelo informático de simu-


intervención para la reducción del déficit lación de escenarios a partir de la integración
ecológico. de la totalidad de matrices de cálculo y vincu-
2. Evaluación inicial de sensibilidad del valor de
lación a objetivos cuantitativos por variables y
la huella a cada ámbito de intervención y análi-
a los disparadores socioeconómicos2.
sis de viabilidad técnica de integración de cada
ámbito en el modelo. 5. Identificación e inclusión de disparadores so-
3. Análisis de políticas y tendencias para cada cioeconómicos a partir de escenarios de refe-
ámbito: rencia3.
• Tendencias 1990-2005 6. Formulación de 3 escenarios diferenciados
(o bien 1955-2005 cuando ha sido posible). 2005-2020 mediante la asignación de un va-
• Identificación de políticas y programas pre-
lor numérico a cada una de las variables del
vistos y objetivos cuantitativos más rele-
vantes previstos (escala europea, estatal). modelo para cada uno de los años conside-
• Formulación de objetivos complementarios rados - 2010, 2015 y 2020 - y definidos de la
de mejora. siguiente forma.

Escenario A (Ea) - “Tendencial”: Este escenario


asume que las principales variables que determi-
nan la huella ecológica evolucionan de la misma
forma que lo han hecho en años precedentes.

Escenario B (Eb) - “Políticas públicas” o “Proba-


ble”: Escenario inspirado en el cumplimiento de
un porcentaje relevante de los objetivos estableci-
dos en los plazos previstos en las políticas
públicas y en un supuesto de mejora de la evolu-
ción de otras variables sin objetivos establecidos.

Escenario C (Ec) - “Cambio social” u “Optimista”:


en este escenario se supone una mejora muy
relevante en los objetivos establecidos en
las políticas públicas actuales y un supuesto
de mejora notable en la evolución de otras
variables sin objetivos establecidos, facilitado
por cambio en pautas de consumo.

47
ESCENARIOS Y ESTRATEGIAS PARA LA REDUCCIÓN DE LA HUELLA ECOLÓGICA ESPAÑOLA

7. Integración de los disparadores socioeconó- tos subyacentes son susceptibles de sufrir cam-
micos (población e indicadores económicos de bios. Por tanto, los escenarios no son predicciones
consumo) y los valores de variables en el mo- de futuro, sino evaluaciones de cuáles serían las
delo de simulación. Extracción de resultados consecuencias en cuanto a huella ecológica si se
numéricos y gráficos de evolución de la huella dan una serie de condiciones.
global y por componentes según escenario. En este sentido, la evolución reciente de los indi-
cadores económicos señala una acusada tenden-
En el marco de este proyecto, la formulación de los cia a la anulación del crecimiento del PIB previsto
escenarios no se ha realizado sobre la base de un por los escenarios de referencia manejados en el
análisis de viabilidad para alcanzar los objetivos de
momento de realizar este ejercicio de prospección.
las diferentes variables y años, y por tanto tan sólo
La crisis económica, usualmente entendida, tiene
tiene vocación de reflejar un patrón de tendencia ge-
como consecuencia una reducción del consumo
neral de la huella durante los próximos años en fun-
en general, lo que apareja, normalmente, una me-
ción del grado de modificación de las variables selec-
nor huella. En todo caso, el ejercicio de escenarios
cionadas que condicionan la evolución del indicador.
aporta conclusiones sumamente interesantes so-
En este contexto, los escenarios son análisis de la bre las dinámicas subyacentes a un sistema eco-
evolución de la huella en situaciones hipotéticas, nómico basado en el crecimiento y las posibilida-
basadas en supuestos de partida explícitos, que des reales de hacer, desde una acción coordinada y
pueden ser más o menos válidos, de forma que los consecuente, que este crecimiento se produzca con
escenarios son especulativos, porque los supues- huellas ecológicas inferiores a las actuales.

2
En el contexto del modelo de simulación los disparadores
socioeconómicos hacen referencia a variables sociales (por
ejemplo: población) o económicas (por ejemplo: consumo pú-
blico, consumo privado, …) cuyo incremento o disminución pro-
voca una modificación del valor de la huella ecológica.

3
Los escenarios económicos de referencia utilizados son los
elaborados por el Centro de Predicción Económica (CEPREDE)
y disponibles en el momento de elaborar el proyecto (2007).

48
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

6.2 ÁMBITOS Y
ESTRATEGIAS PARA
LA REDUCCIÓN DE LA
HUELLA ECOLÓGICA
A partir de un análisis previo de sensibilidad y via- A3. AGRICULTURA, GANADERÍA, PESCA Y
bilidad de su modelización, se han considerado ALIMENTACIÓN
los siguientes ámbitos que condicionan de forma A4. GESTIÓN DE RECURSOS NATURALES
más significativa la evolución de la huella y del
déficit ecológico y que son modelizables a partir
del sistema de matrices de cálculo desarrollado
previamente. En la figura 6.2 se muestra en forma de flujograma
la estructura de formulación del modelo de simu-
A1. ORDENACIÓN DEL TERRITORIO Y lación explicitando la totalidad de variables consi-
TRANSPORTE deradas y el orden de integración para cada uno de
A11. Ordenación del territorio y urbanismo
los ámbitos citados.
A12. Movilidad y transporte
A2. ENERGÍA
Se ha procedido a asignar valores para cada una de
A21. Estructura energética (mix energético
y mix eléctrico) las variables y subvariables según año (2010, 2015
A22. Eficiencia energética y 2020) y escenario (Ea, Eb y Ec). Una vez integrados
A22a. Economía estos valores y aplicadas las operativas del modelo,
(producción de bienes y servicios) se han generado los escenarios de evolución de la
A22b. Sector residencial huella global y por componentes que se describen
A22c. Movilidad en el siguiente apartado.

Escenari A (Ea)- Escenari B (Eb)- Escenari C (Ec)-


Tendencial Políticas públicas Cambio social
2010 2015 2020 2010 2015 2020 2010 2015 2020
PRODUCCIÓN DE BIENES Y SERVICIOS
Intensidad energética
Mix energético (%)
PRODUCCIÓN DE ELECTRICIDAD
Pérdidas en transporte (%)
Autoabastecimiento (%)
Mix eléctrico (%)
Rendimiento eléctrico (%)
Ratio de emisión importaciones
CONSUMO ENERGÉTICO RESIDENCIAL
Incremento del consumo energético residencial (%)
Incremento eficiencia residencial (%) ASIGNACIÓN
Mix energético residencial (%) DE VALORES
MOVILIDAD Y TRANSPORTE
Incremento de la demanda final de movilidad (%)
Escenarios A/B/C
Incremento de la intensidad de transporte (%) 2010/2015/2020
Reparto modal (%)
Incremento de la distancia media recorrida (%)
Incremento de la ocupación media (%)
Mix energético del transporte (%)
Incremento de la intensidad energética del transporte (%)
AGRICULTURA, GANADERÍA, PESCA Y ALIMENTACIÓN
Estructura consumo alimentario
GESTIÓN FORESTAL
Estructura de la superficie forestal (%)
Incremento de la productividad forestal (IFN)

Figura 6.1. Panel global de formulación de escenarios a partir de variables de consumo, gestión y ecoeficiencia.
Fuente: Elaboración propia

49
ESCENARIOS Y ESTRATEGIAS PARA LA REDUCCIÓN DE LA HUELLA ECOLÓGICA ESPAÑOLA

A21. ESTRUCTURA ENERGÉTICA Emisiones de CO2 (tCO2)


A22. EFICIENCIA ENERGÉTICA (RESIDENCIAL)

hag/ha HE de combustión
hogares (hag)
Factores de emisión
(tCO2 /ktep) Capacidad absorción
Mix energético (%) Inversa precios CO2 (tCO2 /ha)
energía (ktep/E)
Consumo
Gasto residencial Gasto residencial residencial de energía
de energía tras de energía por por fuente (ktep) Consumo
eficiencia (E) fuente (E) electricidad
(ktep)
A41. GESTIÓN
DE RESIDUOS
Incremento Gasto energía
eficiencia A21. ESTRUCTURA
residencial (E) ENERGÉTICA Pérdidas (%)
residencial (%)
A22. EFICIENCIA
ENERGÉTICA
Resto demanda (ECONOMÍA) Consumo
final (E) electricidad
Consumo final (ktep)
Mix energético(%) de energía por
fuente (ktep) Emisiones de CO2 (tCO2)
Intensidad ener-
gética por rama de Consumo final de
Demanda actividad (ktep/E) Factores de hag/ha
energía (ktep) emisión
final (E) Capacidad
(tCO2 /ktep)
absorción C0 2
Total empleos (E) (tC0 2 /ha)
Matriz Demanda de transporte Demanda de
simétrica (t-km y pasajeros-km) transporte por modo Demanda de
interior (E) Intensidad trans- (t-km y pasajeros-km) transporte
porte (t-km/ E y por modo
pasajeros-km/ E) Reparto modal (%) (t pasajeros)
Distancias
medias (km) Tasas de ocupación
(t/vehículo,
pasajeros/vehículo)

A12. MOVILIDAD Y TRANSPORTE


A22.EFICIENCIA ENERGÉTICA
Rendimiento (TRANSPORTE)
Consumo
energético biocombustibles
por tipo de cultivo por tipo (ktep)
(ktep/t)

Demanda de cul- A11. ORDENACIÓN DEL


tivos industriales TERRITORIO Y URBANISMO
energéticos (t)

Matriz consumo
aparente cultivos Consumo
industriales (t) productos cultivos
industriales (t) (M1) Huella
cultivos (hag)
Factores productividad (t/ha)
Matriz consumo
aparente cultivos Consumo
alimentarios (t) productos cultivos
alimentarios (t)
Estructura consumo
alimentario (% cárnico Factores productividad (t/ha)
y pescado/vegetal) Consumo
productos (M2) Huella
ganaderos (t) ganadera
Matriz consumo
aparente ganadero (hag)
Factores productividad (t/ha)
Consumo
productos
Matriz consumo pesqueros (t) (M3) Huella
directo pesca pesca (hag)
Factores productividad (t/ha)

Estructura
superficies
A3. AGRICULTURA, GANADERÍA, forestales
PESCA Y ALIMENTACIÓN

Matriz superficies
forestales IFN-Corine

Figura 6.2. Modelo de formulación de escenarios de evolución de la huella ecológica española.


Fuente: Elaboración propia

50
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

Capacidad
absorción CO2
Ratios de emisión (tCO2 /ha)
importaciones HE de la
(tCO2 /ktep) hag/ha electricidad
importada (hag)
Importaciones
electricidad (ktep) Emisiones
de CO2 (tC0 2)
Exportaciones
electricidad
(ktep)
Balance exterior Eficienca
transformación Consumo
electricidad (ktep) primario de
por tecnología(%)
energía por
Autoabastecimiento (%) Mix eléctrico (%) fuente (ktep) Emisiones de
Producción
electricidad por CO2 (tCO2)
Demanda Factores HE del
Producción tecnología (ktep) de emisión
electricidad electricidad (ktep) consumo
(tCO2 /ktep) hag/ha primario de
(ktep)
energía (hag)
Ratios de emisión Capacidad
electricidad nacional absorción
HE del (tCO2 /ktep) C0 2 (tCO2 /ha)
consumo
final de
energía (hag)
A21. ESTRUCTURA ENERGÉTICA

Huella
Nacional
(hag)

Demanda de
transporte Demanda de Déficit
(vehículos) transporte ecológico
(vehículos-km) (hag)
Distancias Consumo final de
medias (km) Intensidad energía (ktep)
energética
transporte
(ktep/v-km)

Aumento de la HE por suelo Biocapacidad


superficie artificializado (hag)
urbanizada (hag)

Varianza en las
densidades de
población

Productividades
superficie arbolada Incremento
(m 3/ha) anual total de
corteza (m 3) Superficies
forestales
Superficies Densidad arboladas
forestales arboladas (t/m 3) densas y
densas y ralas (ha) ralas (ha) Productividad
forestal
Superficie CORINE (tCO2 /ha)
tC0 2 /t corteza
CORINE
forestal (ha)

A5. GESTIÓN RECURSOS


NATURALES

51
ESCENARIOS Y ESTRATEGIAS PARA LA REDUCCIÓN DE LA HUELLA ECOLÓGICA ESPAÑOLA

6.3 DISPARADORES
SOCIOECONÓMICOS
Y ESCENARIOS DE
EVOLUCIÓN DE LA
HUELLA ECOLÓGICA
POR COMPONENTES
• Para los 3 escenarios considerados se han • La huella ecológica ganadera y pesquera pre-
aplicado previsiones disponibles de evolución senta disminuciones significativas a medida
de indicadores de consumo en España, que que es mayor la sustitución de ingesta de ori-
muestran un crecimiento notable para el pe- gen animal por aquella de origen vegetal. Es
ríodo considerado, con tan sólo un período de destacable la alta sensibilidad del valor de la
desaceleración en las tasas de crecimiento huella a esta variable, aunque también lo es
en el quinquenio 2010-2015. Es evidente en la por otro lado que la tendencia que ha manifes-
actualidad que este período se ha adelantado tado esta variable ha sido la opuesta durante
en el tiempo y que parece que va a ser más los últimos decenios.
profundo que el pronosticado. La evolución • La huella ecológica agrícola presenta un cre-
prevista en los escenarios económicos consul- cimiento significativo, no tanto por el incre-
tados favorecía a priori tasas de incremento mento citado de la ingesta vegetal en la dieta
mayores de huella ecológica en los quinque- española, sino por la significativa aportación
nios 2005-2010 y 2015-2020. del aumento de uso de los biocombustibles y
• A pesar de la modificación radical de las pre-
las superficies agrícolas requeridas. Es desta-
visiones económicas ocurrida en sólo un año
cable que a pesar del incremento del porcen-
desde la elaboración del estudio, parte de las
taje de uso de biocombustibles en el escenario
principales conclusiones obtenidas de la si-
C para el año 2020, éste se ve sobradamente
mulación no dejan de estar vigentes, a pesar
compensado por la reducción muy notable de
de que los valores de evolución de la huella
la demanda de combustibles para la movilidad
previsiblemente se verán significativamente
para este escenario y año. En consecuencia
modificados en el corto plazo.
ello provoca que la componente de huella
• Será oportuno en un futuro actualizar los da-
agrícola disminuya en el escenario C entre los
tos previstos de evolución de los disparadores
años 2015 y 2020, reduciéndose incluso por
socioeconómicos y desplegar el modelo de
debajo del escenario B, que mantiene una ma-
nuevo. El espíritu de la aplicación informática
generada es precisamente el de ser fácilmen- yor demanda global de combustibles.
te actualizable de forma periódica. No obstan- • Aplicando las previsiones económicas vigentes
te, teniendo en cuenta la acusada variabilidad en el momento de la elaboración del estudio,
e incertidumbre que presentan las previsiones la huella ecológica por fijación de CO2 mani-
económicas en el momento de elaborar esta fiesta un crecimiento sostenido en el escena-
publicación, se ha considerado oportuno no rio A que provoca que para el año 2020 alcance
realizar por el momento una actualización. prácticamente las 6 hag/cap. En el escenario
• En relación con la población, y según las pre- B, el cumplimiento casi pleno de los objetivos
visiones disponibles, se prevé un crecimiento de políticas actuales y la incorporación de me-
demográfico sostenido durante el conjunto didas complementarias permite que en el año
del período considerado. Ello contribuye a una 2020 la huella se reduzca al nivel del año 2000.
disminución progresiva de la biocapacidad per Y finalmente en el escenario C la huella se re-
cápita y en consecuencia a un incremento pro- duce de forma significativa hasta alcanzar las
gresivo del déficit ecológico, a falta de incorpo- 3 hag/cap., similar al valor que presentaba en
rar el resto de variables. el año 1990.

52
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

PREVISIONES DE EVOLUCIÓN
PREVISIONES DE EVOLUCIÓN
DE INDICADORES DE CONSUMO ESPAÑOLES
DE LA POBLACIÓN ESPAÑOLA 2000-2020
2000-2020 (BASE 100)
300 60.000.000
280
260 55.000.000
240
220 50.000.000
200
180 45.000.000
160
140 40.000.000
120
100 35.000.000
2000 2005 2010 2015 2020

FUENTE: CEPREDE
30.000.000
2000 2005 2010 2015 2020

Consumo privado Exportaciones FUENTE: INE


Consumo público Importaciones
Inversión fija

ESCENARIOS DE TENDENCIAS DE LA HUELLA ESCENARIOS DE TENDENCIAS DE LA HUELLA


ECOLÓGICA AGRÍCOLA (hag/cap) ECOLÓGICA GANADERA (hag/cap)

1,40 0,40
1,20 0,35
1,00 0,25
0,80 0,20
0,60
0,15
0,40
0,10
0,20
0,00
0,00 1955 1960 1965 1970 1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005 2010 2015 2020
1955 1960 1965 1970 1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005 2010 2015 2020

ESCENARIOS DE TENDENCIAS DE LA HUELLA ESCENARIOS DE TENDENCIAS DE LA HUELLA


ECOLÓGICA PESQUERA (hag/cap) ECOLÓGICA POR FIJACIÓN C02 (hag/cap)

7,00
6,00
0,40 5,00
0,35 4,00
0,30 3,00
0,25 2,00

0,15 1,00
0,00
0,10
1955 1960 1965 1970 1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005 2010 2015 2020
0,05
0,00 HE escenario A
1955 1960 1965 1970 1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005 2010 2015 2020
HE escenario B
HE escenario C

Figura 6.3. Disparadores socioeconómicos y escenarios de evolución de la huella ecológica por componentes.
Fuente: Elaboración propia a partir de diversas fuentes

53
ESCENARIOS Y ESTRATEGIAS PARA LA REDUCCIÓN DE LA HUELLA ECOLÓGICA ESPAÑOLA

6.4 ESCENARIOS
DE EVOLUCIÓN DE LA TENDENCIA DE LA HUELLA ECOLÓGICA
HUELLA ECOLÓGICA TOTAL (hag/cap) ESCENARIO A

Y DE LA BIOCAPACIDAD 10,00
9,00
DE ESPAÑA 8,00
7,00
6,00
• El escenario A, que supone el mantenimiento 5,00
4,00
de las tendencias actuales y del valor de algu-
3,00
nas de las variables actuales muestra una evo- 2,00
lución claramente creciente de la huella, sólo 1,00
0,00
atenuada en el período 2010-2015 por la des- 1955 1950 1965 1970 1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005 2010 2015 2020

aceleración económica prevista. Para el año


2020 alcanza un valor superior a las 8 hag/cap
y un déficit próximo a las 6 hag/cap. TENDENCIA DE LA HUELLA ECOLÓGICA
• El escenario B, que supone el cumplimiento de (hag/cap) ESCENARIO B
los objetivos establecidos en algunas políticas 10,00
públicas actualmente planteadas, y la incorpo- 9,00
8,00
ración de medidas complementarias en aque-
7,00
llas variables que no disponen de objetivos, 6,00
consigue tan sólo reducir la huella ecológica 5,00
4,00
para el año 2020 a los valores que presenta en 3,00
el año 2005, con un valor de déficit ecológico de 2,00
4 hag/cap. 1,00
0,00
• Finalmente para el escenario C, la incorpora- 1955 1950 1965 1970 1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005 2010 2015 2020

ción de objetivos ambiciosos de mejora en la


práctica totalidad de los ámbitos de actuación
considerados permite una reducción en este TENDENCIA DE LA HUELLA ECOLÓGICA
caso sustancial de la huella hasta las 5 hag/ (hag/cap) ESCENARIO C
cap., equivalente al valor que presentaba en el 10,00
año 1990. El déficit ecológico alcanzaría para el 9,00
8,00
mismo año las 2,6 hag/cap. Estos resultados 7,00
subrayan que sólo una intervención ambiciosa 6,00
5,00
y multisectorial puede permitir una disminu-
4,00
ción relevante de la huella ecológica. 3,00
• La incorporación de una hipótesis de escenario 2,00
1,00
económico estacionario, con un mantenimien-
0,00
to de los índices de consumo a partir del año 1955 1950 1965 1970 1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005 2010 2015 2020

2012, implica una reducción aún más signifi-


cativa de la huella, que en el escenario C y año
2020 supone un valor de 4,5 hag/cap. Artificializado

Forestal

Energía
Pesca

Ganaderia
Agricultura

Figura 6.4. Escenarios de evolución de la huella ecológica


por componentes.
Fuente: Elaboración propia a partir de diversas fuentes

54
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

ESCENARIOS DE EVOLUCIÓN
ESCENARIOS DE EVOLUCIÓN DE LA HUELLA ECOLÓGICA
DE LA HUELLA ECOLÓGICA (hag/cap) EN ESTADO ESTACIONARIO (hag/cap)

9,0 8,0
8,0 7,0
7,0 6,0
6,0
5,0
5,0
4,0
4,0
3,0
3,0
2,0 2,0
1,0 1,0
0,0 0,0
1955 1960 1965 1970 1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005 2010 2015 2020 1955 1960 1965 1970 1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005 2010 2015 2020

HE escenario A Biocapacidad escenario A HE escenario A Biocapacidad escenario A


HE escenario B Biocapacidad escenario B HE escenario B Biocapacidad escenario B
HE escenario C Biocapacidad escenario C HE escenario C Biocapacidad escenario C

Figura 6.5. Evolución de la huella ecológica en los escenarios A, B y C según previsiones económicas y con hipótesis
de estado estacionario.
Fuente: Elaboración propia a partir de diversas fuentes

EVOLUCIÓN DE LA HUELLA ECOLÓGICA SEGÚN ESCENARIOS (hag/cap)

Evolución Huella ecológica Escenario A (Ea)- Escenario B (Eb)- Escenario C (Ec)-


Tendencial Probable Cambio social

1990 1995 2000 2005 2010 2015 2020 2010 2015 2020 2010 2015 2020

Agricultura 1,234 1,140 1,094 1,002 1,094 1,092 1,090 1,206 1,300 1,319 1,262 1,325 1,193

Ganaderia 0,313 0,327 0,346 0,357 0,346 0,354 0,360 0,340 0,319 0,299 0,330 0,289 0,258

Pesca 0,246 0,277 0,323 0,344 0,323 0,334 0,342 0,316 0,289 0,263 0,302 0,250 0,210

Energía 2,947 3,291 3,888 4,330 5,217 5,370 5,975 4,502 4,152 4,090 3,814 3,312 2,951

Forestal 0,282 0,289 0,311 0,304 0,321 0,328 0,335 0,321 0,328 0,335 0,321 0,328 0,335

Artificializado 0,046 0,050 0,057 0,059 0,060 0,062 0,064 0,060 0,062 0,064 0,060 0,062 0,064

TOTAL 5,069 5,374 6,018 6,395 7,362 7,540 8,166 6,745 6,451 6,369 6,089 5,566 5,011

Nota: La evolución de los valores de la huella forestal y artificializada (marcados en gris) tan sólo se han sometido a extrapolación
lineal y no han sido objeto de modelización.

55
CONCLUSIONES

56
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

7.1 SITUACIÓN ACTUAL CON RESPECTO


A LA SOSTENIBILIDAD AMBIENTAL

El análisis realizado de la huella ecológica y la biocapacidad del país ha permitido obtener un


diagnóstico global del estado y evolución de la sostenibilidad ambiental de España. Los hábitos de
consumo y generación de residuos de la población española están muy lejos de ser sostenibles, por
lo que no podrán ser mantenidos en el tiempo ni ser exportados al resto del mundo.

En España, la huella ecológica es 2,6 veces mayor que la biocapacidad, es decir, se necesitan casi
tres Españas para mantener el nivel de vida y población actuales. La situación española en cuanto
a sostenibilidad es pues comprometida. En tan sólo quince años, nuestro déficit ecológico se ha
incrementado más de un 50%, y presenta una tendencia continua al crecimiento.

Si los 6.000 millones de habitantes del planeta tuvieran unos patrones de consumo similares a los
nuestros, teniendo en cuenta el reparto global de la biocapacidad mundial, se necesitarían el equi-
valente a los recursos naturales de tres planetas y medio para sustentarnos.

Estos consumos se están manteniendo a base de importación de territorio productivo (en forma
de productos) de otros países y también haciendo uso de reservas de capital natural, lo que puede
comprometer en el medio plazo la calidad de los sistemas de soporte y la viabilidad de las produc-
ciones biológicas para las generaciones futuras.

Este resultado está ocasionado fundamentalmente por la evolución ascendente de la huella ecoló-
gica debida al consumo energético, si bien también se ha hallado un incremento leve de la huella
ecológica debida al consumo de productos cárnicos. En este sentido, la huella ecológica de la ali-
mentación y madera equivale prácticamente a la biocapacidad disponible, con lo que el territorio
productivo sobrante debe considerarse un recurso escaso. Desde luego, éste no es suficiente para
destinarlo a la producción energética a gran escala.

Pese a lo que suele pensarse, el consumo de energía indirecta mediante la adquisición y uso de
bienes de consumo es el gran factor responsable de la huella energética. Este hecho es muy inte-
resante, dado que la metodología de cálculo de la huella ecológica imputa estos consumos al con-
sumidor final. A este respecto, la contabilidad habitual de emisiones de CO 2 no lo hace así, puesto
que imputa las emisiones al punto o territorio de producción del bien.

57
CONCLUSIONES

En los últimos años han adquirido una importancia notable los consumos energéticos directos de-
bidos al consumo de electricidad en edificios y, principalmente, a la movilidad y el transporte. La
influencia de ambos factores al incremento de la huella en los últimos quince años es muy notable,
algo que ha ido aparejado al incremento de la superficie urbanizada en todo el país.

El ejercicio prospectivo realizado se ve afectado significativamente por la evolución que ha tomado


la economía durante los últimos 2 años, muy alejada de lo que apuntaban las previsiones económi-
cas disponibles en el momento de elaborar el estudio. No obstante, el ejercicio realizado revela la
conexión directa entre la huella ecológica y un comportamiento económico que viene determinado
por el nivel de consumo de recursos. En el período analizado, el crecimiento económico español ha
sido fuertemente dependiente de un incremento paralelo del consumo de recursos naturales, que
ha crecido incluso a tasas superiores. Este hecho contrasta con los últimos datos de las huellas
ecológicas de algunos países del entorno europeo, que presentan una contención del valor de la
huella ecológica, presentando en muchos casos mejores indicadores de riqueza que el nuestro.

58
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

No obstante lo anterior, parece que, en todos los casos y especialmente en España, el crecimiento
económico lleva asociado un incremento de la huella ecológica, hecho que cuestiona una supuesta
desmaterialización de la sociedad española. Sólo se consiguen reducciones significativas del in-
dicador si se conjugan, de alguna manera, estados económicos estacionarios junto con mejoras
sustanciales en la eficiencia ecológica de los sistemas productivos y de consumo.

En lo que respecta a los resultados obtenidos en las CCAA, y teniendo en cuenta las salvedades
metodológicas comentadas, se han revelado marcadas diferencias en el déficit ecológico de los di-
ferentes territorios de España. Existen comunidades con poca población y mucha biocapacidad que
poseen, a día de hoy, superávits físicos, y otras, cuyo déficit es más que acusado. Esta realidad se
debe más a la distribución poblacional que a las diferencias entre las potenciales pautas de consu-
mo, que no han podido ser detectadas de manera fehaciente debido, sobre todo, a la dudosa calidad
de la base estadística existente en unidades físicas.

La huella ecológica de la totalidad de las CCAA se encuentra muy por encima de la biocapacidad media
del planeta, y en consecuencia todas son deficitarias desde el punto de vista global.

Desde un punto de vista metodológico, la medición de la sostenibilidad física en sus diferentes com-
ponentes es esencial para poder diagnosticar la situación actual, intervenir en la realidad y evaluar el
efecto de dicha intervención. A este respecto, la tarea que debe acometerse es ingente, sobre todo en
lo relativo a la generación de una base estadística y de información básica en unidades físicas. La defi-
ciente calidad de los datos o su inexistencia y su desigual estructuración y nivel de agregación son los
factores que más limitan, hoy por hoy, el cálculo y utilización de indicadores como la huella ecológica y
similares. Esta carencia de información es más patente conforme se desciende en la escala territorial
analizada, hasta el punto de que, hoy por hoy, es imposible conocer, por ejemplo, consumos físicos tan
importantes como el energético a niveles municipales si no es realizando estimaciones que, a veces,
son de dudosa calidad y utilidad.

59
CONCLUSIONES

7.2 RECOMENDACIONES PARA LA GESTIÓN DE RECURSOS


Y POLÍTICAS SECTORIALES

La relevancia de la huella ecológica energética asociada a bienes y servicios indica la necesidad de integrar
cada vez más el análisis físico y energético del ciclo de vida de los productos, con el fin de reducir la inten-
sidad energética de los procesos productivos. La concepción y determinación del ciclo de los materiales,
más allá de la consideración sectorial y parcial de los residuos sólidos, es quizás un elemento conceptual
clave que está pendiente de materializarse en la planificación y gestión ambiental actual. Es necesario co-
menzar con políticas que ayuden a gestionar la demanda de bienes de consumo y a fomentar la reducción
del consumo y al aumento de la reutilización.

En lo relativo al consumo directo de energía, es urgente una revisión de los hábitos de consumo en los
sectores de movilidad, servicios y residencial. La reducción de la demanda energética se torna, también
con el análisis de huella realizado, en un asunto de capital importancia en los próximos años. Ello debe
ser fomentado, en primer lugar, desde una política de inversiones en infraestructura coherente con este
objetivo y que prime la gestión de la infraestructura existente antes que la nueva dotación.

En este sentido será esencial mejorar los estándares del diseño y la gestión urbana habituales, lo que po-
dría reflejarse, en primer lugar, en la revisión de la legislación vigente a este respecto y en la priorización
de las inversiones previstas en la planificación actual de infraestructuras.

El fomento del ahorro de energía y del aumento de eficiencia energética en procesos y aparatos y disposi-
tivos, siempre en un contexto de reducción de la demanda absoluta de recursos primarios, deberían con-
vertirse en una política de importancia capital para asegurar la viabilidad y la competitividad del sistema
socioeconómico español.

Las políticas de fomento de las energías renovables son muy valiosas porque éstas en general generan
poca huella ecológica. No obstante, el uso de las energías renovables sólo tendrá suficiente repercu-
sión en el balance energético global si se produce en un contexto de reducción de la demanda energé-
tica primaria.

La aportación de los biocombustibles en la sustitución de huella ecológica por emisiones de CO2 se ve com-
pensada negativamente por un incremento de la superficie agrícola requerida para su producción. Desde
un punto de vista de análisis del déficit ecológico, la aportación de los biocombustibles sólo es relevante
si ello contribuye a la preservación o incremento de la biocapacidad agrícola al facilitar el mantenimiento
de una actividad agrícola viable económicamente y con carácter local. Una evaluación consistente de este

60
LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

aspecto requeriría de un análisis que integre el conjunto de factores sociales, económicos y ambientales
que intervienen, y una acotación a una escala territorial concreta, pues su evaluación a escala mundial pue-
de diferir significativamente del análisis a escala estatal, regional o incluso comarcal. Así pues, un análisis
detallado de biocapacidad muestra las limitaciones notables, por insuficiencia de territorio disponible, de
la generalización del cultivo agrícola destinado a la fabricación de combustibles de origen agrícola.

En cuanto a los temas de alimentación, la huella ecológica no parece advertir cambios en la dieta, pues
éstos no se producen más que en el medio plazo. Análisis paralelos de mayor escala temporal (1955-2005)
han logrado poner de manifiesto que este cambio se está verificando hacia el aumento del consumo de
productos cárnicos, a la par que se pierden los habituales estándares de alimentación mediterráneos.
Todas las políticas de salud pública destinadas a mejorar la alimentación e incrementar o mantener los
niveles de consumo de productos de origen vegetal son también políticas de sostenibilidad física.

Destaca el incremento porcentual del territorio artificializado producido en los dos últimos quinquenios.
La importancia de este resultado es cualitativa más que cuantitativa puesto que es en este territorio donde
se verifican la mayoría de los consumos de materiales y energía. La situación actual de crisis en el sector
podría aprovecharse para repensar los hábitos de intervención actuales detectando líneas de actuación
que primen la rehabilitación y recalificación del tejido urbano existente, adaptándolo a estándares de sos-
tenibilidad que permitan reducir la demanda energética.

En términos de biocapacidad, puede decirse que el valor ecológico y de bioproductividad de la tierra de


cultivo es más que considerable, dado que constituye más de la mitad de la biocapacidad presente en el
territorio español en términos de huella ecológica. Por ello, las políticas agropecuarias deben tener en
cuenta que gestionan la mayoría del capital natural del país, más allá de un sector económico que produce
rentas y productos. En ese sentido, debe dejar de considerarse que el suelo agrícola no es interesante
desde el punto de vista ambiental por el hecho de no albergar ecosistemas apreciados tradicionalmente
como valiosos. Las políticas que fomentan la agricultura ecológica o la gestión del suelo como un capital
de singular importancia, deben considerarse como de primer nivel de importancia dentro de una gestión
sostenible de los recursos.

El reto más importante es internalizar estos razonamientos basados en la huella ecológica, u otros indi-
cadores sintéticos (por ejemplo: huella climática y huella hídrica), en las políticas sectoriales y en las de
carácter horizontal, fundamentalmente en la planificación económica, la gestión de recursos naturales,
la gestión de los ciclos metabólicos (energía, materiales y agua) y en la ordenación del territorio y polí-
ticas urbanas.

61
CONCLUSIONES

7.3 ASPECTOS METODOLÓGICOS ASOCIADOS


AL ANÁLISIS E INTERPRETACIÓN DE RESULTADOS

Las fuentes de información (disponibilidad, calidad y formato) son el principal problema para el cálculo de
la huella ecológica. La metodología interna de cálculo de la huella ecológica posee, hoy por hoy, un bajo
grado de incertidumbre y disfruta de una aceptable normalización internacional.

Las adaptaciones metodológicas realizadas en el presente trabajo han sido causadas por el deficiente es-
tado y disponibilidad de la información estadística existente. La conclusión metodológica más importante
es, precisamente, la precariedad, e incluso inexistencia, de una base estadística sistematizada en unida-
des físicas para llevar a cabo un análisis acertado de la realidad biofísica del sistema socio-económico
español y de sus componentes.

Esta precariedad y déficit de información se incrementan conforme se desciende en la escala del análisis.
Hasta tal punto ello es así, que hace que en algunos casos sea estéril el cálculo de componentes impor-
tantes a nivel de Comunidad Autónoma si se pretende que sea razonablemente homogéneo y compara-
ble. A escala provincial el cálculo se ha tenido que circunscribir a la consideración de la biocapacidad, que
sí ha podido ser calculada con relativa precisión.

Es necesaria una continuación del esfuerzo realizado hasta el momento por éste y otros trabajos para
poner a punto la metodología y continuar con cálculos de huella ecológica y otros indicadores físicos
de carácter sintético, que permitan establecer una demanda permanente y dirigida de estadísticas en
unidades físicas. Sin este tipo de información es imposible evaluar políticas dirigidas a una gestión
sostenible de los recursos y de los sistemas y sectores de demanda.

La incorporación de metodologías input-output en el análisis de la huella ecológica supone una apor-


tación muy notable en la aplicación de este indicador. La consideración del input-output ha permitido
en primer lugar disponer de un sistema de cálculo más completo, consistente y robusto que el que
permite la metodología estándar. Asimismo ha facilitado la integración del modelo económico y los
flujos de materiales y energía, a partir de la cual se ha podido desarrollar un modelo de simulación
físico-monetario de la evolución de la huella ecológica y de evaluación de la eficacia de las políticas.

Uno de los aspectos más útiles de la huella ecológica como indicador sintético es su transversalidad,
lo que permite integrar sectores productivos dentro del análisis de la sostenibilidad general en España,
orientando también posibles políticas estratégicas sectoriales.

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LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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Sevilla. Dirección General de Ordenación del Territorio y Urbanismo. Consejería de Obras Públicas y Transportes.
Junta de Andalucía. Sevilla, 2001.

•        Carpintero, O., 2005. El metabolismo de la economía española. Recursos naturales y huella ecológica (1955-2000).
Fundación César Manrique. Teguise.

•        Chambers, N., Simmons, C. and Wackernagel, M. 2000. Sharing Natures Interest: Ecological Footprints as an
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•        Ewing B., S. Goldfinger, M. Wackernagel, M. Stechbart, S. M. Rizk, A. Reed and J. Kitzes. 2008. The Ecological
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•        Ewing B., A. Reed, S.M. Rizk, A. Galli, M. Wackernagel, and J. Kitzes. 2008. Calculation Methodology for the National
Footprint Accounts, 2008 Edition. Oakland: Global Footprint Network.

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2008 Edition. Oakland: Global Footprint Network.

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Departament for Environmental, Food and Rural Affairs. London.

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•        Wiedmann, T. and Barrett, J. (2005); The use of input-output análisis in REAP to allocate ecological footprints
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•        W iedmann, T., Minx J., Barrett, J., Wackernagel, M. Allocating ecological footprints to final consumption categories
with input–output análisis. Ecological Economics 56 (2006) 28– 48

•      WWF, 2008. Informe Planeta Vivo 2008. World Wildlife Fund Internacional. Switzerland.

63
AGRADECIMIENTOS:
Los autores agradecen a todas aquellas personas que han contribuido al desarrollo del trabajo facilitando
información o aportando criterios: Luís Hilario Alonso (Dirección General de Política Energética y Minas.
Ministerio de Industria, Turismo y Comercio), Natalia Alonso (Dirección General de Calidad y Evaluación
Ambiental. Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino), Gustavo Bada (Dirección General de
Desarrollo Sostenible del Medio Rural. Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino), Oscar Carpintero
(Universidad de Valladolid), Ángeles Cristóbal (Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental.
Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino), Pablo Deza (Dirección General de Industria y Mercados
Alimentarios. Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino), José Ignacio Elorrieta (Instituto
para la Sostenibilidad de los Recursos), Jesús Pedro García Montes (Instituto para la Diversificación y el
Ahorro de la Energía. Ministerio de Industria, Turismo y Comercio), José Miguel Herrero Velasco (Dirección
General de Industria y Mercados Alimentarios. Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino),
Miguel Ángel Mena Garrido (Dirección General del Agua. Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino),
José Luís Mosquera (Agencia Tributaria), Rafaela Otero (Instituto Nacional de Estadística), Jorge Saralegui
(Instituto Nacional de Estadística), Salvador Senent (Agencia Tributaria), Carmen Ureña (Instituto Nacional
de Estadística), Roberto Vallejo (Dirección General de Medio Natural y Política Forestal. Ministerio de Medio
Ambiente y Medio Rural y Marino).

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LA HUELLA ECOLÓGICA DE ESPAÑA

2008
Análisis de la huella ecológica de España

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