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CARMEN MENÉNDEZ
Arteterapeuta.
el juego del niño para luego albergar a la «como si fueras» o al «vamos a imaginar
experiencia cultural y al proceso creador. que somos artistas», permite reconocerse
Se trata de una zona de ilusión, «no discu- como protagonista de su propia historia,
tida respecto de su pertenencia a una rea- empezar a vislumbrar su capacidad para
lidad interna o exterior (compartida)». Por decidir sobre sí mismo.
lo tanto, puede proporcionar alivio a la El proceso creador, al igual que el jue-
tensión que conlleva la tarea de aceptar go, es una área de experiencia, un «es-
la realidad que comienza en la tempra- pacio transicional», que media entre las
na infancia del ser humano y que, según realidades internas y externas del indivi-
Winnicott, nunca queda terminada. duo, que utiliza los materiales y la obra
Héctor J. Fiorini (2006) nos habla de artística como «objetos transicionales»
ese espacio potencial como un espacio que permiten jugar y experimentar con
de terceridad donde se generan los proce- ellos, y que opera en un espacio y tiempo
sos terciarios que movilizan todo el siste- simbólico donde realidad, espacio y tiem-
ma. Es donde ocurren las producciones po se suspenden mientras dura la sesión
creadoras que relacionan, ligan y crean de arteterapia.
formas que vinculan a los objetos que Según Laing (1974) «cada producción
han sido convocados. León Grinberg de- artística original que realiza el paciente
fine el acto creativo como el resultado de representa, en cierto grado, un aspecto de
un proceso durante el cual el individuo esa persona. Nadie más puede crear el
debe pasar por estados de «desorganiza- mismo resultado sobre un papel o una
ción» temporaria y ruptura de las estruc- tela... La terapia artística ofrece una área
turas establecidas, para reintegrarse luego en la que el paciente puede proclamar su
de una manera diferente (citado en Fio- identidad y una atmósfera en la que pue-
rini, 2006). de ser él mismo... el arte brinda un medio
que supone, al mismo tiempo, una comu-
El juego y la identidad nicación con los demás y una confronta-
a través de un lenguaje propio ción con uno mismo».
P. Deegan (1988), ella misma afectada personas con trastorno mental severo
por esquizofrenia, lo define como un pro- (Greenwood, 1997; Killick, 1997; Scha-
ceso, una manera de vivir, que podría ase- verien, 1997; Seth-Smith, 1997; Charlton,
mejarse a un viaje personal, a través del 1987; Dick, 2001; Rudy & Milnes, 2006;
cual el sujeto adquiere poder sobre su vi- Odell-Miller et al., 2006), encontrar cier-
da, siempre acompañado por compañeros, tas hipótesis sobre los efectos terapéu-
familia y profesionales. ticos clínicos de esta disciplina en el tra-
El profesional cambia de lugar: pasa tamiento de esta población, lo que nos
de ser la autoridad a ser el que aporta el permite agruparlos en cinco categorías.
conocimiento, junto con el paciente que
aporta la experiencia. En este cambio de Madurez del ego (yo) o self
rol es importante señalar lo efectivo que
es para el paciente que «el otro» le vea, le El arteterapia permitiría que el yo al-
escuche, crea en él y en la posibilidad de canzara una mayor integración y madu-
cambio hacia un futuro mejor. Con esta rez. Esto implica que las defensas del pa-
nueva mirada hay un trabajo común entre ciente llegan a ser menos patológicas y
profesional y paciente que entraña ries- lentamente, las imágenes elaboradas pue-
gos, supone que el paciente «como exper- den tener propósitos simbólicos y comu-
to» interviene directamente en su trata- nicativos de la realidad interna de éste.
miento, supone que en esa experiencia Este hecho también involucra una mayor
conjunta cabe la posibilidad de fracaso; delimitación del yo o self de estos pacien-
y también supone aceptar el riesgo como tes y el desarrollo de un sentido de éste
algo con lo que nacemos e imprescindi- como separado del mundo que los rodea.
ble para experimentar cualquier cambio. De este modo, se alcanzaría una mayor
Ese cambio parte de lo que ya existe. Se consciencia de sí mismos, al reapropiarse
entra en un espacio nuevo, de búsqueda, de sentimientos y pensamientos persona-
de incertidumbre, de experimentación, de les que en otro momento eran intolerables
prueba; que te conduce a encontrar algo para el paciente. En resumen, estas perso-
nuevo, diferente a lo anterior. Supone una nas pueden llegar a surgir como sujetos a
transformación a partir de un proceso de través de la actividad plástica y en medio
creación conjunta. La mirada del profe- del espacio seguro que brinda el artetera-
sional a la persona es dentro de su narra- pia, logrando hasta reflexionar y verbali-
tiva personal, su historia y no sólo desde zar sobre su mundo interno con el tera-
la enfermedad. Se centra en lo que los peuta (Greenwood; Killick; Schaverien;
pacientes valoran más y la ayuda va diri- Seth-Smith, 1997).
gida a construir su propio camino.
Mejora de la autoestima
Por otro lado, el arteterapia también dor, la pulsión creadora, tiene la capaci-
cubre aquellas necesidades vinculadas a dad de ensanchar en nuestro psiquismo
la rehabilitación psicosocial de este gru- espacios de trascendencia, libertad y de
po. En este plano, las intervenciones se sentido.» (Héctor Fiorini, 1996.)
centran en estimular o desarrollar faculta-
des en los pacientes que les permitan fo-
4. EFECTIVIDAD
mentar una autoimagen positiva, general-
DEL ARTETERAPIA
mente muy mermada en ellos producto
EN LA REHABILITACIÓN
de la enfermedad. Además, en el área de
DE PERSONAS
la rehabilitación, se pretende promover la
CON TRASTORNOS
interacción social en estos pacientes y así
MENTALES GRAVES
compensar la conducta alienada que pre-
senta la mayoría de ellos. Por último, el La corriente llamada de «psiquiatría
desarrollo de la concentración en la reali- basada en las pruebas» intenta utilizar el
zación de ciertas tareas, es importante de resultado de estudios empíricos controla-
promover en la rehabilitación de los pa- dos para tomar decisiones respecto al
cientes a través del establecimiento de tratamiento de los pacientes mentales. La
objetivos interesantes y atractivos para evaluación de psicoterapias, en especial
ellos (Charlton, 1987). de orientación dinámica, es la más difícil
Por último, podemos aventurar que la porque exige un compromiso entre los
terapia artística también puede jugar un procedimientos habituales de los terapeu-
papel importante en el proceso de recupe- tas habituales y las exigencias de la cien-
ración. Explorar, experimentar y asumir cia experimental. Existen sesgos como la
riesgos es una dimensión del arteterapia personalidad del paciente y del terapeuta,
que relaciona creatividad y juego. Jugar y el eclecticismo de los procedimientos y el
representar tiene importantes beneficios sesgo de selección que limitan los resul-
terapéuticos y son actos universales en el tados (Guimón, 2008).
hombre. Además ni el deseo ni la creati- Teniendo en cuenta las anteriores salve-
vidad están sujetos al paso del tiempo, no dades, mencionaremos los estudios empí-
tienen edad. Siempre, bajo cualquier cir- ricos realizados, y en concreto los metaná-
cunstancia, albergamos esa capacidad. lisis publicados en los últimos años sobre
En el tratamiento de personas con en- la eficacia de las terapias artísticas.
fermedad mental, activar procesos creati- Una revisión Cochrane (Rudy & Mil-
vos en los que se ponga en juego relacio- nes, 2006) encontró que, entre 61 estudios
nar, integrar y dar sentido, puede facilitar de terapia artística con enfermos de psico-
la construcción de pedazos de la historia sis, sólo 2 estudios eran controlados y que
escindida, recuperar momentos y perso- los datos que aportaban eran difíciles de
nas no recordadas, conformar y restaurar valorar, aunque dejaba la puerta abierta
emociones y crear lazos con el pasado. a la posibilidad de evaluar en el futuro la
Puede ayudar a encontrar eslabones per- efectividad y que ésta fuera positiva.
didos que restauren su biografía, la enri- Otra revisión (Crawford & Paterson,
quezcan en experiencias, les genere nue- 2007) sí encontró una incipiente base de
vos horizontes y mayor sentido del self. evidencia de efectividad de las terapias
Se puede volver a narrar una historia per- artísticas en la mejora del estado mental
sonal y única que disminuya la escisión, de la esquizofrenia, especialmente en re-
facilite la continuidad existencial y re- ducciones de síntomas generales y nega-
duzca el sufrimiento. «El psiquismo crea- tivos de la enfermedad.
ración. Explorar, experimentar y asumir Dick T. Brief group art therapy for acute
riesgos es una dimensión del arteterapia psychiatric inpatients [Versión electróni-
que relaciona creatividad y juego. ca]. America Journal of Art Therapy 2001;
En los últimos años, una serie de estu- 4(39):108-112.
dios empíricos controlados están empe-
Fiorini H. El psiquismo creador. Teoría y
zando a mostrar de forma clara efectos Clínica de Procesos Terciarios. Buenos Ai-
beneficiosos del arteterapia en el estado res, Nueva Visión; 2006.
mental de personas con esquizofrenia,
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