Está en la página 1de 83

Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador

1
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
LA MIRADA DEL OBSERVADOR
Capítulo Uno

“¡CUIDADO!” una voz familiar grito.


Trabajando con el rastrillo del heno, Bo casi no tiene tiempo de dar media vuelta
antes de ver a un toro ir hacia él. En una fracción de segundo decidió tratar de
colocase entre los dientes del rastrillo antes de que el toro tuviera oportunidad
de empalar su duro cuerno en el. Bo grito cuando uno de las amarillos dientes se
enterró en el, preparándose para el impacto cubrió la cabeza con las manos. La
carrera del toro no se detuvo hasta que choco contra la maquina a solo
centímetros de donde estaba Bo. El resultado de impacto no solamente impulso
el delgado diente mas profundo en Bo sino que también la cara del toro fue
alanzada. El toro de una tonelada trato de liberarse del diente en su cara y movía
su cabeza de un lado a otro bañando de sangre a Bo.
Rance y dos vaqueros colocaban lazos alrededor de la cabeza de ‘Cero tolerancia’,
pero incluso con tres hombres, ellos no igualaban la fuerza del toro.
Tratando de salir del rastrillo, Bo sintió su carne desgarrada. “¡Joder!” él grito, sus
manos inmediatamente fueron al sitio. Sabiendo que no podía hacer nada sin
lastimarse más, el no tenía elección, tenia que esperar que los vaqueros trataran
de poner bajo control al gran toro premiado del rodeo. Lo único que el podía
hacer era llamar para pedir mas ayuda. Moviéndose cuanto le era posible, Bo
saco su celular de su bolsa en el cinturón y llamo a la casa principal. Incluso el
ligero movimiento le encajaba aun mas profundo el diente. Para cuando Shep
tomo la línea, Bo estaba jadeando de dolor.
“Shep.”
“Soy Bo. Necesitamos ayuda en los pastos del este. ‘Cero Tolerancia’ esta herido y
se volvió loco. Rance, Buddy y Steve están tratando de controlarlo, pero ellos
parecen estar perdiendo la pelea. Y llama a Jeb. Si el esta en el área, puede ser
capaz de salvar al maldito toro.”
“Vamos para allá.”
“Oh, y necesitas traer guantes de hule, hay una caja en el establo. Yo estoy
sangrando, y voy a necesitar algo de ayuda para lograr salir de debajo del rastrillo
de heno.”
“Mierda. ¿Debo llamar una ambulancia?”
Bo tomo una profunda respiración. Sus pulmones parecían estar bien, pero podría
tener otras lesiones internas. Con el HIV las infecciones de cualquier tipo eran
siempre peor. La sangre que sentía corriendo en un lado no era buena señal. “Si,
pienso que es lo mejor, Y asegúrate de advertirles de mi condición.”
“Lo haré, aguanta, compañero.”
Bo dejo el teléfono caer de su mano ensangrentada hacia la pastura. Dios,
Maldición. El iba a estar bien no había tenido ni siquiera un simple resfrió en
quince meses. Tratando de inclinarse para ver la lesión, Bo casi se encaja otro
diente en un ojo. Suspirando, llego a la conclusión de que seria mejor quedarse lo
mas tranquilo posible. El tomo la falda de su arruinada camisa y la mantuvo

2
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
contra la herida. Shep, Jeremy y Jim llegaron el la camioneta. Shep fue el primero
en llegar con una pistola tranquilizadora en la mano. “A un lado,” el ordeno.
“Espera,” Rance grito. “El ha perdido mucha sangre puedes matarlo con eso.”
Shep vio de Rance a Bo. “Mejor el que Bo y por lo que se ve si no sacamos a Bo y
lo ayudamos eso es exactamente lo que va a suceder.”
Tan pronto como Shep disparo el dardo tranquilizador en el toro, Rance le paso su
soga a Jimmy y corrió hacia Bo.
“No me toques,” Bo advirtió. “Supongo que Shep trajo guantes.”
Antes de que Rance pudiera dar media vuelta, Shep estaba ahí dándole guantes
de látex a todo el mundo. Con los guantes puestos, Shep y Rance se aproximaron.
Bo sabía que se veía peor de lo que estaba.
“Mucha de la sangre es del toro,” él explicó, y señalo la ensangrentada cara. “Mi
problema esta aquí abajo a un lado. Uno de los dientes parece ser que se atoro o
algo.” Rance se movió atrás del rastrillo de heno y trato de ver mejor para que
ellos pudieran manejarlo. “Supongo que debemos de cortar el diente de la
maquina y dejar que los doctores lo remuevan de ti.”
Bo trago aire, tratando de sobreponerse a la nausea. Con su sangre todavía
fluyendo a un ritmo constante, el sabia que no iba a estar consciente mucho
tiempo. El se iba a desmayar antes de que Rance cortara el diente, eso sin contar
los daños internos que pudiera tener “Apurarte, no creo que pueda aguantar.”
“Esto funcionara,” Rance grito por su caja de herramientas y busco en la caja
hasta que encontró lo que necesitaba. Cuando Shep se movió sobre él, Bo se
apoyo en él y le murmuro al oído, para que Rance no pudiera oír. “odio pedirte
esto, pero necesito que me sostengas. Mi visión esta empezando a nublarse.”
Shep envolvió sus brazos alrededor del pecho de Bo, mientras Rance trabajaba
furiosamente para liberar el diente mientras trataba de no moverlo. La cabeza de
Bo estaba en el hombro de Shep. “Lo siento, jefe.”
“No es tu culpa. Pero tan pronto como Rance te saque de aquí con vida, tu vas a
pelear por tu vida como un demonio.”
“Si lo haré dígale a...”
“¡Lo tengo!” Rance gritó. “Tengo el maldito diablo fuera de aquí.”
Shep cuidadosamente ayudo a mover a Bo, lo bastante para alejarlo del rastrillo y
acostarlo en la suave hierba. Mientras Bo luchaba por mantenerse consciente, el
oyó la sirena de la ambulancia. Dándose cuenta que los paramédicos sabrían que
hacer, Bo se permitió a si mismo cerrar los ojos.

****
Poniéndose un nuevo par de guantes, Rance se arrodillo a lado de Bo. “¿Bo?
Despierta. Vamos abre los ojos.”
“Abre la puerta para la ambulancia,” le gritó a Buddy.
Suavemente removió la sangre alrededor del diente, Rance se quito su camisa
vaquera. No queriendo mover la pieza de metal, el presiono su camisa contra la
herida en el abdomen de Bo, hasta que Zac Alben tocó su hombro.

3
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
De mala gana, Rance se aparto. Mientras Zac y el jefe de bomberos George
Manning trabajaban es estabilizar y subir a una camilla a Bo, El pensamiento de
Rance se fue a la semana anterior.

****
Bo entro a la cocina de la barraca con un humor fantástico. “Buenos días, todos.”
Rance levanto su vista del plato de sus huevos con tocino y rápidamente la bajo.
Solo que entrara ese hombre era suficiente para llevarlo a la locura, pero su
alegre humor y su sonrisa de estrella de cine era demasiado.
Con su largo cabello negro hasta los hombros, todavía húmedos por la ducha, y
las gotas de agua bajando por el esculpido pecho que mostraba, Rance casi gime
ante la imagen de Bo esa temprana mañana. El quería gritarle a Bo que cerrara el
botón de su camisa, pero no podía dejar de verlo. El debía de ser un sádico.
“¿Que es lo que te tiene tan alegre esta mañana de primavera?” Buddy preguntó.
“Yo, no estamos usando grandes palabras hoy. Tú debes saber, que hoy es mi día
favorito del año, el día de plantar. El día cuando todas las cosas son posibles y yo
soy un dios entre los mortales. Yo solo tengo el poder de convertir el suelo árido
en comida para hombres y bestias.” Bo explico con su nariz levantada.
La cocina entera estallo en carcajadas, cuando la manchada servilleta de Rance
voló por el aire y golpeo a Bo en la cara. El intento cubrir su risa. A pesar de tratar
de mantenerse alejado de la tentación, Bo era divertido como el infierno y
mantenía a todos entretenidos.
“Cuídate de ‘Cero Tolerancia’. Hasta a donde a el le concierne tienes un blanco en
tu espalda,” Rance comentó, comiendo la ultima porción de su tocino.
Bo se dejo caer en la silla a lado de Rance y negó con la cabeza. “¿Que es lo que le
pasa a ese hijo de perra? Yo nunca le he hecho una maldita cosa a ese toro, pero
parece que cuando estoy cerca se vuelve loco.”
“Quizás el oyó uno de tus chistes,” Rance contestó.
Bo se inclino e hizo un exagerado ruido de un beso. “Tu amaaas mis chistes,
¿admítelo?”
Retirando su silla, Rance llevo su plato al fregadero lavándolo con agua caliente y
jabón. “Yo no se lo que signifique la carne de ‘Cero’ para ti, pero hazte un favor a
ti mismo y mantente a una prudente distancia.”
“Oh, lo entendí. ‘Cero’. Carne. Tu eres un hombre realmente divertido.”
Sacudiendo la cabeza, Rance levanto su sombrero del gancho de la puerta y se lo
acomodo hasta media frente. “Bueno, Padre del maíz, ten un maravilloso día
plantando tu semilla. Yo tendré mis hombros insertando esperma de toro en
receptivas vacas. Vamos a ver cual de nosotros se siente como un dios al final del
día.”

****
Después de ayudar a Jeb Garza a suturar a ¿Cero Tolerancia en uno de los corrales
de contención, Rance se dirigió al hospital en Sheridan. Se había decidido tan
pronto como Zac evaluó la condición de Bo, que la clínica de Cattle Valley no
estaba equipada para tratar las lesiones del granjero. A pesar de que recorrió
4
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
todo el camino a mas de ciento treinta kilómetros por hora. Rance trato de verse
casual cuando entro en la sala de emergencia. El supo por la enfermera del
escritorio de recepción que Bo seguía en cirugía. Mas tranquilo con ese
conocimiento, al menos Bo seguía vivo, el tomo el elevador y subió a la sala de
espera. Rance diviso a Shep y Jeremy y camino derecho hacia ellos. “¿Como esta
él?”
“El sigue en cirugía. Ellos van a remover el baso y una parte del riñón izquierdo,
pero el doctor es optimista sobre su recuperación.”
Rance asintió, tratando de absorber la información. “¿Que acerca de su status de
HIV? ¿Puede eso afectarle de alguna manera?”
Shep se froto la parte de atrás de su nuca. “No directamente, pero una falla renal
siempre es una preocupación en los pacientes de HIV. Con una parte menos de su
riñón izquierdo el puede tener mayor riesgo. Ellos necesitaran ajustar la dosis de
sus medicamentos hasta que sane, pero los doctores piensan que mientras el
continué cuidando de si mismo el se recuperara satisfactoriamente.”
“Ya llame al tipo de contacto en su tarjeta de emergencia,” Jeremy agregó. “El
vuela desde Idaho.”
Aunque no tenia derecho a decir nada, Rance no quería pensar en otro hombre
sentado a lado de Bo. “¿Quien es el tipo?”
Jeremy sonrió. “Lark un viejo amigo de Bo de sus días de la comuna del norte. El y
su pareja, Kade, son quienes trajeron a Bo a Cattle Valley.”
Rance recordó la primera vez que el vio a Bo. Fue en la panadería. El estaba en la
línea cuando tres hermosos hombres entraron. El supo inmediatamente que ellos
no eran de la ciudad. Su trabajo como policía seguía en su sangre y el brevemente
se aparto de la línea para evaluar a los hombres. El pequeño no constituía una
amenaza, lo supo por la amplia sonrisa del chico, pero los otros dos se veías casi...
peligrosos. Lo que le molesto a Rance fue que el no podía apartar sus ojos de Bo.
Había algo casi animal en la mirada de ese hombre que fue directo al pene de
Rance, en lugar de a su cerebro. El odió el sentimiento y salio de la panadería
poco después. Habría que esperar que llegaran los dos hombres a la ciudad, los
mismos que el vio con Bo el primer día. Rance no sabía mucho de la vida de Bo
antes de ser contratado en el Back Breaker, pero el había oído muchos chismes de
que el había vivido en una comuna tipo amor libre en Canadá. ¿Que si los tres
habían sido amantes? “¿Entonces cuando llegan esos amigos aquí?” el preguntó.
Jeremy vio el reloj. “Dentro de una hora. ¿Porque? ¿Te ofreces para ir por ellos al
aeropuerto?”
EL no quería verlos, pero el sabía que si se rehusaba se vería como un idiota.
“Claro.”

****
Con sus brazos cruzados sobre el pecho, Rance esperaba a que Lark y Kade
cruzaran la puerta de llegada. Ya eran las nueve de la noche y el no había comido
desde el desayuno. Pensó en comprar algo de camino al hospital, pero Rance no
estaba seguro de poder estar en compañía de los amigos de Bo, sin preguntar
algo que no era su asunto preguntar. El diviso al gran tipo que parecía
5
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
motociclista y levantó la mano llamando su atención. El mas pequeño, Lark, por la
descripción debería de estar a la sombra del motociclista que se dirigía hacia
Rance. El había oído a Bo hablar acerca de que los dos hombres vendrían con él
durante el año, ¿Porque eso lo tenia repentinamente nervioso?
“¿Como esta él?” Lark preguntó, ajustándose una gran mochila al hombro.
“Salio de cirugía y esta estable, cuando deje el hospital. Vine a recoger a ambos, y
regreso al hospital.” El ofreció su mano. “Mi nombre es Rance, por cierto.”
Lark estrecho su mano antes de señalar al gran tipo. “Soy Lark y el es mi pareja,
Kade. Es agradable finalmente ponerle cara al nombre.”
Rance se sorprendió al oír que Bo hablaba de él por su nombre con Bo. El se
preguntaba que le diría. El noto a Kade mas reservado que a Lark, incluso no se
molesto en estrechar la mano de Rance. Bueno, eso estaba bien para él. El no
necesitaba jugar al encantador con esos dos tipos, él estaba ahí simplemente para
hacerle un favor a Bo y recogerlos.
“¿Es todo su equipaje?” Rance señalo hacia la gran bolsa en el hombro de Kade.
“Es todo. Lark regresa el domingo. El tiene sus exámenes finales la siguiente
semana. Y yo no necesito mas que un cambio de jeans y un par de camisetas.”
Rance se giro hacia la puerta y giro los ojos. El no le había preguntado al hombre
por el inventario de su equipaje. El se dio cuenta de una cosa, Kade
evidentemente pensaba quedarse al menos la siguiente semana. Mierda.
Después de sacar sus llaves del bolsillo, Rance señalo hacia la camioneta del
rancho. El no dijo una palabra cuando Kade tomo la maleta y la mochila de Lark y
la subió a la caja de la camioneta. Al menos Lark se sentó en medio. Rance no
sabía si sobreviviría al frió procedente de Kade todo el camino. Tan pronto como
el salio del estacionamiento, las preguntas comenzaron. Rance trato de explicar lo
mejor que pudo lo que le había dicho Shep. “Yo no he hablado directamente con
los doctores, no hablan conmigo de nada de esto,” Rance agregó.
“¿Cuanto tiempo piensan que necesitara para recuperarse?” Kade preguntó.
“El debería sentirse mejor en tres o cuatro semanas, pero no va a estar
completamente bien hasta dentro de ocho semanas.”
“¿Como va a afectar eso su trabajo? Ese tipo no planea contratar a alguien en su
lugar?” Kade preguntó. “Nosotros realmente no hemos hablado de eso. Bo es el
único agricultor que tenemos en la nomina, y el justamente estaba empezando
con la siembra, no estoy seguro lo que Shep este planeando hacer.”
“Yo puedo hacerlo,” Lark dijo. “Pase mis primeros dieciocho años de vida en
agricultura.”
“Tu no vas a dejar la escuela,” Kade le recordó.
“Si, pero puedo hacer lo posible hasta el domingo en la noche que me vaya, y
terminando los exámenes regreso.” Lark estableció, dando un beso en el cuello a
Kade. “Vamos, será una manera divertida de pasar el verano. Nosotros
planeamos mudarnos a Cattle Valley de cualquier manera, solo movemos unos
pocos meses la fecha.”
“¿Y que se supone que haré mientras tu juegas al niño-agricultor?” Kade
pregunto, haciéndole cosquillas en las costillas a Lark.

6
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Riéndose, Lark palmeo las manos de Kade. “Tu puedes construirme la cabaña de
la que no paras de hablar.”
Rance vio su oportunidad y la tomo. “Espero que tengan suerte con eso. La tierra
disponible en Cattle Valley es bastante escasa.”
“Bueno imagino que encontraremos algo” Kade agregó, besando la cima de la
rubia cabeza de Lark.
Mierda.

****
Pasaron casi tres días antes de que ellos permitieran que Bo tuviera visitas. Claro,
Lark pudo verlo enseguida, pero evidentemente Rance no tenía esa alta categoría.
Si, él tenía un humor amargo, y la tomaba contra todos los que estaban
alrededor, especialmente los trabajadores.
Después de tomar un baño para quitarse el mal olor, Rance se vistió con sus
nuevos jeans negros y una camisa vaquera. El tomo su negro Stetson y se lo
coloco, a media frente como acostumbraba, y las llaves del escritorio frente a la
puerta.
“¿Vas a ir a ver a Bo?” Steve le grito desde el establo.
“Si.”
*Stetson, Marca famosa de sombreros vaqueros, creados en la John B stetson
company. Desde mediados de mil ochocientos.
“Dile que le deseamos que se recupere. Y que esto es muy aburrido sin él.” Steve
se rió.
“Lo haré,” Rance contesto, entrando en su grande camioneta cuatro por cuatro.
Antes de dirigirse a Sheridan, él se detuvo en la panadería Brynn’s por uno de los
roles de canela favoritos de Bo. El no estaba seguro si el ya podía comer, pero si
conocía a Bo, el estaba seguro como el infierno que el trataría de salirse con la
suya. El odiaba admitirlo ante si mismo, pero el realmente extrañaba ver al
granjero en el rancho. ¿Cuantas veces había deseado que Bo no hubiera puesto
un pie en Cattle Valley? Rance sacudió la cabeza. El sabia que nada tenía que ver
con el hombre en si mismo, y todo lo que sentía cuando estaba cerca de Bo.
Desde el primer momento que lo vio en la panadería, el quería saltar sobre Bo, y
reclamarlo como su propiedad, solo que el no era el mismo hombre que antes, y
nunca lo seria. El se rió consigo mismo. No había nada que le dijera a ese hombre,
Bo nunca dejaba de intentar entrar en sus jeans. Si Bo solo supiera lo mucho que
Rance disfrutaría justo eso, solo que su orgullo no se lo permitía. Mejor mantener
la fantasía en Bo de lo que podría ser, en lugar de la realidad que Rance podría
darle. Antes de darse cuenta ya estaba abordando el elevador hacia el cuarto de
Bo, con la bolsa que contenía el rol de canela en su mano. El piso parecía bastante
tranquilo hasta que se acerco al cuarto de Bo. El oyó la acostumbrada risa de Bo,
y sintió una opresión en su pecho. Si, el extrañaba al necio hijo de perra. Tocando
en la puerta, el se quito su sombrero y trato de acomodarse su negro cabello. Bo
estaba rodeado de gente. Por lo visto Kade había hecho su residencia en la gran
silla a lado de la cama de Bo. Shep, Jeremy y una pareja de trabajadores del
rancho ‘EZ lo hace’ estaban también ahí.
7
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Nadie en el cuarto pareció darse cuenta de la entrada de Rance. El casi deja la
bolsa en el mostrador y se va, pero entonces, la alta voz de Logan Miller lo
detuvo.
“¡Hey, mira lo que trajo el gato!”
El pequeño grupo se movió y Rance pudo verlo por primera vez después del
accidente. Su corazón se hundió cuando vio la gran porción de pay casero que Bo
estaba devorando. Eso era mejor que un rol de canela comprado en la tienda.
“Hey, tu,” Bo dijo con la boca llena de comida. “Encontraste tiempo para venir a
verme.”
Rance camino hacia la mesa a lado de Bo y dejo la blanca bolsa. “Ellos no me
dejaron verte hasta ahora.”
El creyó detectar emoción en la cara de Bo ante su declaración. Bo vio hacia la
bolsa antes de regresar la vista a Rance. “¿Que me trajiste?”
Rance se encogió de hombros. “No, mucho, me detuve en la panadería de Brynn,
a comprarte un rol.”
Bo se lamió los labios. “Gracias. Lo siento, pero he comido dos porciones del pay
de manzana casero de Jax. Estoy seguro que antes de que se acabe el día lo
comeré.”
“No es gran problema,” Rance dijo.
“Bueno, nosotros nos despedimos.” Shep dijo colocando su mano en el hombro
de Bo.
“Si, nosotros también necesitamos irnos.” dijo Jax. “Logan esta trabajando en una
moto y el tipo no conoce la paciencia.”
Shep se rió. “La moto de Nate de nuevo, ¿supongo?”
Logan asintió. “Cada vez que me doy la vuelta el hombre quiere que le agregue
algo más. Ya le dije que el no es el único cliente, pero el dice que el ya ha
esperado lo suficiente para tener una moto construida para él.”
Todo el mundo en la habitación que conocía a Nate se rió. Su nuevo alcalde era
un tipo fantástico, pero un poco mimado, cuando se trata de esperar por algo.
Bo les dijo adiós a sus amigos, y ellos fueron saliendo de la habitación uno por
uno. Rance espero que Kade también saliera, pero no tuvo esa suerte.
“Ven aquí y siéntate,” Bo palmeo la cama a lado de él.
“No creo que sea buena idea,” Kade lo interrumpió, viendo receloso a Rance.
Bo vio a Kade y negó con la cabeza. “¿Me harías el favor de preguntarle a la
enfermera cuando me toca la otra pastilla para el dolor.”
“Dentro de una hora,” Kade contestó.
“Bueno. Ve. Pregunta. De cualquier manera.” La voz de Bo no dejo lugar a malos
entendidos. El quería que Kade se fuera.
Con un sonido de disgusto haciendo erupción de su garganta, Kade se puso de pie
y dejo el cuarto. Rance vio al gran tipo salir, y se dirigió a Bo.
“¡Huff! ¿Porque ese tipo me odia tanto?”
Estudiando a Rance, Bo suspiro. “Porque tu me agradas mucho.”
“Y que, ¿El tiene sus propios planes contigo?” Rance preguntó, sentándose a los
pies de la cama de Bo con su sombrero a lado de él.
Bo se rió y se sostuvo su lado. “¿Tu sabes que me duele cuando me rió, verdad?”
8
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
“Lo siento. No trataba de ser divertido.”
“Bueno, eso fue divertido. Kade no tiene ojos para nadie, solo para Lark. No, El
problema con Kade es que piensa que tu no me quieres porque mi status de
positivo. Veras, él también tiene HIV.”
“El que seas positivo no tiene nada que ver con la razón de que yo no salte a tu
cama.” Rance le informó a Bo.
“¿En serio? ¿Entonces cual es la razón, por la que no me dejas cargar ese lindo
paquete? Especialmente ¿cual es el problema que te mantiene babeando hoy?”
Rance desvió la mirada hacia la ventana. “Razones personales.”
No había manera de que el pudiera hablar de su historia delante de ese hombre.
Shep sabía acerca de su pasado, pero solo porque él se emborrachó una noche y
se lo confesó. No, él no podía hacer un viaje por sus recuerdos. Bo era el tipo de
hombre que podría decir que no era un gran problema, pero Rance sabía de
primera mano lo que en realidad era.
Una calida mano lo tocó, sacando a Rance de sus pensamientos. El vio la mano de
Bo, todavía conectada al suero. Lastima, era algo que no se podía permitir.
“No sientas lastima por mi,” Rance dijo retirándose de la mano de Bo.
“No lo hago. Al menos no por la razón que creas. Yo siento lastima de que no
creas en mi, lo suficiente para darme una oportunidad.”
“Ya te lo dije, esto no tiene nada que ver contigo.” Rance se puso de pie se
acomodo el negro sombrero en su cabeza. “¿Cuando te dejaran salir de aquí?”
“En dos días mas,” Bo murmuro rehusando hacer contacto visual.
“Puedes ir a mi casa, si piensas que es más cómoda para tu recuperación. El Señor
sabe que es un infierno más tranquila que la barraca.”
“Déjame pensarlo. Lark y Kade me ofrecieron que me quedara con ellos. Ellos
rentaron la casa de Casey la que esta junto a la iglesia, hasta que ellos encuentren
su propio lugar.”
Las noticias causaron dolor en el pecho de Rance. “Como quieras. Solo avísame
para cambiar las sabanas en el cuarto extra.”
Rance dejo el cuarto sin mirar para atrás. Probablemente era lo mejor que los
amigos de Bo cuidaran de él.
¿ Entonces porque le dolía tanto la idea?

Capítulo Dos

Para la tercera semana en la pequeña casa de renta, Bo se estaba volviendo loco.


El había hecho tantos crucigramas que podría estar listo para el Jeopardy*.
Cuando veía a Lark prepararse para otro día en la granja él hervía de celos.

“Solo déjame ir al rancho un día,” le rogó.

“¿Y entonces que?” Lark preguntó. “Yo se que no serias capaz de sentarte y ver a
todo el mundo trabajar, sin sentir la necesidad de meter tus manos en la tierra.”

9
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
“Vamos, incluso si no hago nada solo sentarme en el porche, eso será mejor que
estar todo el día viendo la misma vieja pared.”

* Jeopardy, juego de concursos


Lark puso una mano en su cadera y entrecerró los ojos. “Tu llevaras sandalias. Se
que no te arriesgarías a trabajar sin los zapatos adecuados.”

Bo rápidamente estuvo de acuerdo. El no llevaría las botas y no saldría con los


otros chicos. Principalmente el quería ver a Rance. El no le había desde el día que
el capataz, lo visito en el hospital. Incluso si fuera una auto-tortura, Bo necesitaba
ver esos oscuros ojos café, ese celestial culo y ese amplio y musculoso pecho. Y si
el lograra lamer esos hoyuelos, bueno eso sería mas que mejor.

Vistiendo unos viejos shorts, y una vieja camiseta roja del concierto de Génesis,
Bo metió sus pies en un par de sandalias de dedo y empaco su comida. El se llevo
una pastilla de dolor para el día, pensó que el estaría bien alejándose de casa. Si
se cansaba el siempre podría ir a acostarse a su cama en la barraca.

Bo además esperaba hablar con Shep acerca de regresar a trabajar varias horas al
día podría ingresar información en la computadora. El podría no hacer el trabajo
duro de un granjero, pero el estaba seguro como el infierno que podía tener su
culo en una silla y teclear.

“¿Listo?” Lark preguntó, saliendo de la recamara donde todavía dormía Kade.

“Diablos si, muy listo.”

Lark se rió y tomo el lonche que había preparado el mismo antes. “Kade dijo que
el iría después a la ciudad. Si quieres regresar antes de que termine el día, solo
llámale.”
“¿El va a ir a trabajar a la tienda de Logan de nuevo?” Kade y Logan pronto se
hicieron amigos, y últimamente Kade había pasado más de un día trabajando
junto a su nuevo amigo motociclista.

“Probablemente, pero el se va a encontrar con alguien acerca de una tierra. El


oyó de una vieja pareja de tipos que están considerando mudarse al sur. Creo que
uno de ellos tiene problemas respiratorios.”

Bo trato de pensar de alguien en Cattle Valley con esa descripción. “¿Esta


hablando de Ben Zook?”

Lark se encogió de hombros. “No conozco el nombre del tipo.”

Ellos subieron al pequeño vehiculo hibrido de Lark llamado carro, y se dirigieron a


el Back Breaker. Mientras ellos pasaban por la panadería, Bo pensó en el regalo
10
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
que Rance le llevo el día que lo visito. Incluso aunque Rance lo hizo parecer que el
gesto no era gran cosa, Bo sabia la verdad. A pesar de todas sus quejas, Rance lo
quería.

“Creo que es momento de que regrese al rancho,” le informo a Lark.

“¿Porque? ¿Te estoy sacando de quicio?” Lark se rió.

“No, pero los ruidos que hacen en la recamara todas las noches es suficiente para
hacer sentir a un tipo voyeurista. Especialmente cuando ese tipo no tiene sexo en
casi un año.” Eso era difícil para creer que Bo hubiera pasado casi un año sin joder
o ser jodido. Antes de que se mudara a Cattle Valley su vida entera parecía girar
alrededor de su pene.

La cara de Lark se volvió roja. “Mierda. ¿Porque no lo dijiste antes?”

“¿Porque era invitado?” le dijo suavemente deslizando su mano por el muslo de


Lark.

“Detén eso,” Lark se rió y palmeo la mano de Bo.

“Valió la pena intentarlo.” Bo sabía muy bien como le gustaba a Lark ser jodido.
Diablos, ellos lo habían hecho tantas veces, que el conocía cada peca del cuerpo
de Lark íntimamente, pero eso había sido hace años. Lark había cumplido
dieciocho años y había dejado la comuna para irse a la universidad de Idaho
donde el había conocido a Kade.

Bo no guardaba ninguna envidia. La vida en la comuna era un infierno diferente a


cualquier cosa que el había vivido. Oh, ahora que se acordaba.

“¿Has hablado con tu familia últimamente?”

Lark se estremeció en su asiento. “No en un par de semanas. Ellos no están felices


de que este trabajando en la granja de aquí en lugar de ir a tomar mi turno en el
Sunrise Gardens. ¿Por qué?”

“Pienso que algo pasa con Jan, pero nadie quiere darme una respuesta cada que
llamo ella esta ocupada o no esta.”

“Es raro. ¿Que necesitas hablar con ella?” Lark preguntó.

“Quiero que firme los malditos papeles del divorcio que me envió hace casi un
año.”

“¿No? mierda. Pensé que serias un hombre libre para ahora.”


11
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador

“Lo deseo. No es que realmente sea importante, porque no tengo citas de


cualquier manera. Solo si Rance me da una oportunidad, me gustaría ser libre.
Empezar las cosas entre nosotros con el pie derecho. ¿Sabes?”

“Quieres que le llame a Mamá más tarde, a ver si puedo sacarle algo”

“Si no te molesta.” Bo tomó una manzana de su lonche y le dio una mordida, y el


jugo resbaló por su mentón. “Maldición, esta buena. Conseguiré más.”

“Nosotros podemos llegar a la tienda de camino a casa, y comprar mas fruta de la


manera en que tu y Kade se acaban la fruta todos pensarían que son dos chicos
vegetarianos.”

“No, solo dos chicos que saben la importante de estar sanos.” No importaba lo
que hiciera durante el día sus status de HIV no se alejaba de sus pensamientos,
especialmente ahora. Si el comer suficiente frutas frescas y vegetales le permitía
vivir otro año, eso valía la pena.

Ellos llegaron a Back Breaker y Lark estacionó junto a la fila de camionetas. “¿No
sientes que este carro esta fuera de lugar aquí?”

Lark se rió. “Si, pero cada vez que le voy a poner gasolina agradezco mi suerte a
las estrellas, Yo no puedo conducir uno de esos tragones. La primera cosa que me
comprare cuando tenga un trabajo real es un Prius*.”

Bo salio del pequeño carro. “Eso suena como un perfecto carro para ti, pero
realmente no puedo ver a Kade conducir eso.”

“Probablemente no, pero el aprenderá a adaptarse o se congelara sus huevos


tratando de manejar en invierno su maldita Harley.”

Mientras ellos llegaban al establo, Lark dijo. “nos veremos después. Debo
terminar alrededor de las cinco.”

“Me parece bien.” Bo fue al establo, ansioso ver a Rance.


*Prius vehiculo hibrido de la toyota
Buddy fue el primero en correr hacia él. Ellos estuvieron de pie hablando
tonterías por varios minutos antes de que Rance apareciera. Vistiendo sus
acostumbrados ajustados jeans y su camiseta.

“¿No tienes trabajo que hacer, Buddy?” Rance preguntó.

“Seguro, Jefe.” Buddy inclino su sombrero hacia Rance y le dijo a Bo. “Encantado
de verte de nuevo.”
12
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador

“Igualmente.” Bo se giro hacia Rance después de que Buddy salio del establo.
“¿Tienes espinas en tu trusa?”

Rance se dirigió a la oficina del rancho. “El único dolor en el culo eres tu.”

Bo giro los ojos y siguió al capataz. Parecía que Rance había regresado a su vieja
manera de ser. Sin esperar invitación, Bo se sentó en una de las viejas sillas de la
oficina y puso sus pies desnudos en el escritorio de Rance. Si el tenia duda de la
belleza de alguna parte de su cuerpo, sin duda no era de sus pies.

Rance dejo su sombrero en el archivero y vio la posición de Bo. “¿Que diablos


estas haciendo?”

“Esperando a que seas civilizado,” Bo contesto, descansando sus manos en su


pecho.

“Quita tus pies de mi escritorio.”

Bo flexiono sus perfectos dedos. “¿Porqué no te gustan mis pies?”

Rance tomo una pluma y golpeo el suave arco del pie de Bo.

“Ouch.” Bo retiro su pie con un repentino movimiento que se lastimo.

“¡Joder!” él grito, su mano se fue hacia la cicatriz.

“Mierda, lo siento,” Rance dijo, levantándose de su silla y arrodillándose a lado de


Bo. “¿Estas bien? ¿Necesitas que le hable a alguien?”

Bo vio a los profundos ojos negros de Rance. Los labios que había esperado casi
un año besar estaban ahí. Incapaz de detenerse a si mismo, Bo se inclino sellando
su boca con la de Rance. Cuando Rance no se movió, Bo estimulo los suaves labios
con su lengua.

Con un suave gemido, Rance abrió y rápidamente la lengua de Bo exploro la boca


del capataz. Bo coloco su mano en la parte de atrás del cuello de Rance y lo
acerco cuando Rance empezó a devolver el beso.

Joder. Bo se sentía en el cielo. El se deslizo de su silla quedando de rodillas frente


a Rance, jalando al hombre a sus brazos. Dios se sentía correcto.

Rance gimió de nuevo y empezó a joder la boca de Bo con su lengua. Eso era más
caliente que el cuatro de julio. Bo sentía el bulto de Rance tras su bragueta

13
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
presionando contra él. No iba a desaprovechar la oportunidad, Bo abiertamente
busco la erección atrapada en los jeans de Rance.

Como si fuera un interruptor de luz, Rance se retiro y se puso de pie. Tomo su


sombrero, se lo puso en su cabeza y dejo la oficina sin decir una sola palabra.

Bo seguía de rodillas con una erección del tamaño de un toro. ¿Que jodidos
sucedió?

****

Rance se dirigió a la seguridad de su casa, arrojo su amado sombrero al suelo de


madera y se dejo caer en el sofá. “¡Hijo de perra!” él se maldijo a si mismo,
cayendo de rodillas.

El había luchado con la maldita atracción hacia Bo tanto tiempo, para venir a
cometer un estúpido error. En un ataque de ira, el levanto su puño y golpeo su
entrepierna. En una fracción de segundos su mano conecto con el todavía
semiduro pene, sacando todo el aire de los pulmones de Rance. Cayendo a un
lado, el acuno sus manos en su ingle y abrió las piernas. ¡Jesús! Se siente como si
el contenido de su estomago estuviera tratando de salir de su boca por el dolor
que continuaba resonando de su pene.

El escupió varias veces en el piso antes de que la bilis hiciera su aparición. Todo
en lo que podía pensar cuando el vació el contenido de su estomago en el piso de
madera, era gracias a dios que no tenia alfombra.

Una vez que la nausea paso, Rance logro girarse lo bastante en dirección opuesta
para alejarse de la fetidez. Cuando el se acostó, el lloraba como un bebé,
recordando a Oren Reynolds.

Su primer encuentro en el restaurant en la calle de la estación, las siguientes


citas, donde el trataba de hacer lo mejor para atraer al pequeño rubio a su cama.
La primera noche que ellos hicieron el amor, oh dios, que noche había sido. El
hombre había sido el mejor amante que el hubiera tenido. A pesar de su pequeña
estatura el era una absoluto animal en la cama. Quien dijera que los contadores
eran aburridos no había conocido a Oren.

Con sus bolas hinchadas y doloridas, el pensar en Oren había hecho que Rance
estuviera duro de nuevo. Incluso con todo su bagaje extra, el hecho de que el
todavía era perseguido por un fantasma hacia imposible su relación con Bo.

No, eso no era exactamente la verdad. Oren realmente no era un fantasma, el


tipo incluso no estaba muerto. La última vez que lo vio fue en la corte, situado en

14
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
el lugar de los testigos confesando cada detalle de su vida amorosa con Rance
ante el juez y un cuarto lleno de gente.

Después de eso era imposible que Rance se quedara en Boston. Su cara había
aparecido plasmada en cada periódico del estado y algunos periódicos nacionales
también.

Empacar y dirigirse a Cattle Valley había sido la mejor decisión que el había
hecho, alejarse de Oren, alejarse de la especulación publica. Aquí el era solo
Rance y el necesitaba que así siguiera. Exponer su vergüenza ante Bo no era
opción, su pene haría mejor con cooperar.

****

Después del impacto de la repentina desaparición de Rance, Bo fue a buscar a


Shep. El no vio a nadie alrededor del corral, y se dirigió a la casa principal. El
sostuvo con sus manos su herida y lentamente subió los escalones del porche. El
podía aguantar la pequeña incomodidad para ver al jefe.

El toco el timbre y espero. Como nadie habría la puerta, Bo tomo asiento en la


mecedora del porche, lo mas probable es que estuviera ocupado haciendo cosas
en la mañana con Jeremy, Y quien diablos podría culparlo.

Quizás el debería olvidarse de Rance y encontraran un joven semental en la


ciudad. Quizás una pareja de insignificantes cogidas podría aliviar el dolor en sus
shorts. Demasiado mal que el estuviera enamorado del hijo de perra. Bo sabía
que el lo merecía. Después de joder con cualquiera hombre o mujer que
caminara, quizás era de una manera su karma el quererlo a el en su culo.

El todavía estaba ponderando su karma y su mala actitud cuando Shep asomo la


cabeza fuera de la puerta. “Pensé oír a alguien aquí afuera antes.”

Bo sonrió. “Muy correcto, yo imagine que deberías estar...ocupado y decidí


ponerme cómodo.”

Shep se sentó en una silla frente a la mecedora. “¿Como te sientes?”

“Mejor, muy aburrido. El doctor dice que no puedo hacer nada estresante por
otras cuatro semanas, pero yo esperaba poder hablar contigo y que me dejaras
hacer algo de trabajo en la computadora.”

Shep lo vio como si estuviera loco. “Le dije a Rance que te pagara cada semana, y
le di instrucciones especificas…”

15
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
“Si, lo ha hecho,” Bo interrumpió a Shep antes de meter en problemas a Rance.
“Es solo que no me va muy bien quedarme sentado.”

“Tomate unas vacaciones. Juro que no me estoy deshaciendo de ti, pero no


tenemos sufriente trabajo no físico para mantenerte ocupado y te conozco, si vez
que se necesita un trabajo trataras de hacerlo. Mi compañía de seguro se enojara
mucho si te encuentran.”

Bo pasó sus manos a través de su oscuro cabello castaño hasta los hombros.
“Supongo que podría hacer un viaje a Sunrise Gardens y conseguir los malditos
papeles del divorcio de mi ex-esposa.”

“¿Ves? Perfecto. Has un lindo viaje y regresa cuando estés listo para trabajar.”

La puerta se abrió y Jeremy salio con los pies y el torso desnudos. “Oh, hey, Bo.”

“Hey,” le contesto, tratando de no ver la delgada musculatura del pecho que


mostraba.

“¿Solo pasando el rato fuera?” Jeremy preguntó, tomando asiento en el regazo de


Shep.

“Quería salir de la caja de galletas que Lark y Kade están rentando. ¿Oyeron algo
de acerca de que Ben Zook se muda al sur?”
“No, pero no es de sorprender. Vivir en la base de la montaña para ellos es
realmente una tontería en invierno. Imagino que es demasiado para dos viejos
tipos seguir con eso.”

Bo asintió. “Lark dijo que Kade iría a ver el lugar. El dice que los tipos se mudan al
sur a causa de problemas de asma.”

Shep asintió. “Si, parece que son ellos. Siento no ver mas al viejo Ben cuando deje
la ciudad, pero al menos son buenas noticias para tus amigos.”

“Kade solo habla de la cabaña de sus sueños que le prometió construir a Lark.
Supongo que si al menos ya tienen la tierra ellos pueden vivir en una tienda
mientras Kade construye.”

“Asegúrate de que hable con Hal.”


“Oh, ellos ya hablaron. Kade esta ansioso por empezar el proyecto.”

“Todavía no conozco mucho a Kade, pero Lark ha sido un maldito buen trabajador
mientras tu has estado en cama.”

16
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Por alguna razón, Bo se sintió orgulloso del cumplido. “Lark es un diablo de
agricultor. El me enseño cada maldita cosa que se, El ha estado en esto desde que
el tenia la edad suficiente para caminar.” por la esquina de su ojo, Bo vio a Rance
entrar al establo. El debió no mostrarse tan indiferente como el esperaba.

“¿Todavía no progresa?” Shep preguntó.

“¿Huh?”

Shep inclino la cabeza hacia el establo. “Imagine que con el accidente y todo,
ustedes dos pudieron finalmente llegar a buenos términos con sus cosas.”

Bo gruño y negó con la cabeza. “No imagino que sucede. Yo lo bese hace un rato y
por primera vez parecía que todo iba bien. El de hecho fue muy receptivo hasta
que yo supuse que el quería ir un poco más lejos. Entonces eso fue como si
descargara un balde de agua fría.” Bo suspiro. “No se que mas hacer.”

El teléfono sonó en el interior de la casa, y Shep le dio un juguetón golpe en el


trasero a Jeremy. “Déjame ir, amor. Estoy esperando una llamada de los jinetes
profesional de rodeo.”

Jeremy se puso de pie y Shep corrió a contestar el teléfono. Después de ver hacia
el establo un momento, Jeremy se dirigió a la puerta. “No se exactamente que le
sucedió a Rance en Boston, solo que fue lo suficiente para traerlo aquí.”

Bo asintió, cuando Jeremy abrió la puerta.

“Buscar en el Internet puede ser un buen lugar para encontrar respuestas,”


Jeremy murmuro antes de cerrar la puerta.

Capítulo Tres

Bo estaba sentado en la acojinada silla viendo el juego de béisbol. Kade estaba


acurrucado en el sillón con Lark, quien tenia la nariz enterrada en la novela TA
Chase*. El sudor en la frente de Lark le decía a Bo que debería ser muy buena.

17
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
El le había estado dando vueltas toda la tarde a ese asunto. Por mucho que el
quería conocer el problema de Rance, el sentía que si seria una invasión a su
privacidad. “¿Puedo hacerles una pregunta?”
Ninguno de los hombres pareció haberle oído. “Holaaa.”

Lark finalmente levanto la vista de su lectura, “Que?”

*Novela publicada con el seudónimo de K R Dwer en 1972, y reimpresa en 1995,


del escritor Dean Ray Koontz, experto novelista de suspenso.
“Quería pedirles su opinion sobre algo.”

Lark le dio un codazo a Kade, hasta que alejo la vista de la pantella. Bo necesita
preguntarnos algo” Lark dijo.

Cuando el tuvo la atención de ambos, él repentinamente no sabía por donde


empezar. “¿Uh…Si yo quiero saber algo de alguien, estaría mal que yo buscara en
el internet?”

“Si,” Lark rápidamente dijo.

“No,” Kade contesto al mismo tiempo.

Los dos hombres se vieron uno al otro. Lark entrecerró los ojos. “No puedo creer
que digas eso.”

“¿Porque? Si esta en el internet, es que la información es libre. ¿Que tiene de


malo verla?” Kade se defendió a si mismo.

“Porque, nosotros ambos sabemos que esta hablando de Rance. Y si algo le


sucedió, es lo suficiente malo para dejarlo atrás. Estoy seguro que si Rance
quisiera que Bo conociera su pasado, el se lo diría.”

“Pero el no lo hace.” Kade elevo la voz.

Bo había pasado suficiente tiempo con esos dos hombres para saber como
terminaban las discusiones. Primero empezaban los gritos luego jodian, ninguna
de las dos cosas quería presenciar.

“Quizás el tenga razón para hacerlo,” Lark afirmó con sus manos en sus caderas.
Incluso aunque los dos hombres parecían estar atacando al otro, Bo vio el frente
de los pantalones de algodón de Lark parecían mas tienda de campaña que
nunca. Oh, niño.

Se puso de pie señalo hacia la puerta. “Voy a tomar unas cosas y voy a pasar la
noche en el rancho. Les daré un tiempo a solas.”
18
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador

El dudó que cualquiera de los dos hombres le hubiera oído, ellos continuaban
discutiendo. Bo rápidamente metió un cambio de ropa en una bolsa, tomo las
llaves de Lark y salio. “Tendrás que decirle a Kade que te lleve al rancho en la
mañana, lo siento.”

Dejando su bolsa en el asiento del pasajero, él se dirigió al rancho. Si cada simple


pregunta iba a causar esa fuerte reacción y que ese par de pájaros del amor, se
arrancaran las plumas, él ya tenía su respuesta. No. A pesar de la tentación de
conocer la vida personal de Rance. El no buscaría en el internet, pero eso no
significaba que no iba a tratar de encontrar algunas respuestas directamente del
hombre.

El llego al rancho y se estacionó a lado de la camioneta de Rance. Noto que había


luz en la cabaña del capataz, decidió que no había mejor momento que el
presente. El podría tener un enemigo después de lo que iba a decir y a hacer,
pero al menos el seria capaz de moverse.

Subiendo los escalones del porche el tocó la puerta. Espero un momento, pensó
que Rance le hablaba. Abrió la puerta, y dio un paso adentro. “Rance”

“Aquí atrás.”
Bo siguió la voz a la recamara. Cubierto con una sabana, Rance estaba acostado
en la cama con una botella de whiskey en una mano y en la otra una bolsa de
hielo sobre sus bolas.

“¿Que sucedió?” Bo preguntó.

Rance lo vio y gruño. “Aléjate.”

“¿Te lastimaste?” Bo preguntó, sentándose en la esquina de la cama.

“Maldición, dije que te alejaras,” Rance dijo poco claro, obviamente borracho.

Tomando la botella casi vacía de whisky de la mano de Rance, Bo la dejo en la


mesa. Señalo hacia el paquete de hielo. “¿Te patearon?”

“No,” Rance contestó, colocando su brazo sobre sus ojos. “Regresa con tus
amigos, Bo.”

La orden le dolió. “Divertido, pensé que tu eras mi amigo.”

“Bueno pensaste mal. Ahora devuélveme mi whisky, y déjame solo con un


demonio,” Rance farfullo.

19
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Bo estudio a Rance por un momento. ¿Ese era el resultado de un simple beso?
“¿Que jodidos sucedió para hacer de ti un frió bastardo?” él pregunto gritando.

Rance se descubrió los ojos y vio a Bo. “Tu llegaste a la ciudad.”

“¿Que se supone que significa eso? Todo lo que yo quiero de ti es amor y afecto.
La misma maldita cosa que todo el mundo quieres. Tu lo quieres también, lo veo
en tus ojos cada vez que me ves, entonces ¿porque todo el drama?”

El tono de voz de Rance se volvió sarcástico. “No necesito esas cosas y no te


necesito a ti. Ve y encuentra a alguien a quien joder.”

Bo se puso de pie y le regreso la botella de whiskey a Rance. “Si, quizás estas en lo


correcto. Quizás he desperdiciado mi tiempo enamorándome de ti. Yo solo
pensé...diablos, olvídalo.”

Bo salio de la recamara de Rance sin voltear para atrás. Tomo su bolsa del carro y
se dirigió a la barraca. Steve, Buddy y Jim estaban viendo el mismo juego de
béisbol que estaba viendo Kade.
“¿Quien va ganando?” preguntó, acomodándose en el sillón.

“Los Mariners,” Steve contestó. Notando la bolsa que el había dejado en la


puerta, Steve la señalo. “¿Eso significa que regresas?”

“Supongo. Necesito ir a Canadá a resolver unos asuntos personales, pero parece


chicos que no tienen mas remedio que aguantarme de nuevo.”

Buddy estiro una de sus piernas y rozo el muslo de Bo. “Es bueno tenerte de
regresó, hombre.”

“Gracias.”

****
Bo entro al estacionamiento de Sunrise Gardens y apago el motor. El esperaba
estar haciendo lo correcto. Visitantes sin avisar generalmente no eran recibidos,
pero Bo esperaba que los años trabajados en la granja le facilitaran las cosas.

Saliendo del carro rentado, el tomo su maleta y camino hacia el puesto del
guardia.

“Bueno estoy viendo a un sapo de dos cabezas. Bo Lawson, ¿que te trae aquí?”
Randy preguntó, palmeando la espalda de Bo.

“Vengo a ver a todo el mundo y recoger los papeles de divorcio con Jan.”

20
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Randy palideció. “Uh, ¿Jan sabe que vienes?”

¿Que jodidos? “No, Jan no sabe que vengo. ¿Porque hay un problema?”

Bo podía decir por como se comportaba su viejo amigo, que verdaderamente


había un problema. Su resolución de ver a su separada esposa aumento a nuevos
niveles.

“No estoy seguro. Tengo que hablar con Jim.”

Randy desapareció dentro de la pequeña caseta y levanto el teléfono. El hecho de


que Randy llamara a Jim no era extraordinario. Como uno de los propietarios de
Sunrise Gardens, nada sucedía sin que se le informara a Jim. El contuvo la
respiración esperando a que Randy terminara la llamada.

“Jim vendrá por ti en un minuto,” Randy le dijo.

“Gracias.”

En lugar de abrir las grandes puertas, abrió la puerta para peatones y le permitió
a Bo pasar. No se le escapo a Bo notar que Randy había cortado la pequeña
comunicación entre ellos. El no estaba seguro de lo que había hablado con Jim,
pero al parecer Randy, solo seguía órdenes del jefe.

Bo tomo su maleta del suelo y espero. En menos de diez minutos el diviso el


carrito de golf llegar por el camino. Jim llego a lado de Bo y bajo del carrito. Y
como de costumbre envolvió en un amoroso abrazo a Bo.

“¿Como te sientes?” Jim preguntó, dando un paso atrás para ver a Bo de arriba a
abajo.

Bo sabía que Lark les había informado a sus padres acerca el accidente en la
granja. El descanso su mano sobre la herida en cicatrización y asintió. “Mucho
mejor. Yo debo de ser capaz de regresar al trabajo en algunas semanas.”

“Bueno me alegra oír eso.” Jim jalo a Bo a sus brazos de nuevo y lo beso.

Ese no fue un beso de amistad, no, ese fue un beso de un anterior amante.
Diablos, Bo había sido amante de la mayoría de los hombres y mujeres que Vivian
en Sunrise Gardens. Aceptando la juguetona lengua de Jim entrar con
naturalidad. Bo empezó a sentirse endurecer.

Jim obviamente lo noto también. Retirándose pasó la mano por el frente de los
jeans de Bo. “Fue hace tiempo.”

21
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
“Así es,” Bo agregó.

Una parte de el quería inclinar a Jim sobre el carrito de golf y joderlo hasta que se
saliera su cerebro. El sabía por su experiencia pasada que Jim le daría la
bienvenida a su entrada, pero Bo necesitaba respuestas primero.

Viendo a los ojos a Jim, Le hizo la pregunta por lo que había ido. “¿Que sucede
con Jan?”

Jim lo vio no solo sorprendido ante la pregunta, sino incomodo. “Te llevare a la
casa y hablaremos. Nosotros no podemos hacerlo aquí.”
Dándole a su viejo amigo la cortesía que merecía, Bo asintió metió su maleta en la
parte de atrás de carrito de golf.

Mientras ellos recorrían el camino por la pequeña ciudad que Jim y su esposa
Lynda habían establecido, Bo inhalo. El podía oler el sol en el aire. Después de
años de cultivar productos orgánicos en la granja, Bo sabía que la mayoría de los
campos ya estaban sembrados.

Aunque Jim y Linda habían establecido una de la granja mas prospera, ellos
definitivamente habían agregado beneficios. Ahora ellos eran residentes de su
comuna de amor libre, y podían vivir su vida a su elección, mientras hacían
suficiente dinero para hacer su vida confortable.
Mientras viajaba por la ciudad, Bo saludo a varios viejos amigos. La monogamia.
No era una palabra de uso común en Sunrise Gardens. Aquí, sexo era sexo, y todo
el mundo disfrutaba del placentero pasatiempo con quien ellos hubieran elegido,
sin importar su estado marital.

En lugar de dirigirse a la casa, Jim llego frente al micro-bar. “¿Tomamos una


cerveza primero?”

Bo asintió. “Si, siento que voy a necesitarla.”

Entrar al bar era como regresar a su vieja vida. Cuantas tardes había pasado
manoseando a un incidental amante en ese mismo cuarto.

Sacudiendo la cabeza, Bo se rió solo. El únicamente había pasado en la ciudad


cinco minutos y el sexo ya estaba al frente en su cabeza. Aunque había pasado
casi un año sin joder o ser jodido, Bo no pensaba que extrañaba ese lugar. La
razón por lo que lo dejo en primer lugar era que el quería algo más que solo una
ración diaria de sexo, Incluso su matrimonio con Jan no había sido uno de amor
verdadero, tener algo como lo que tenían Lark y Kade fue lo que lo convenció a
mudarse a Cattle Valley.

“¿Estas bien?” Jim preguntó, entregándole una cerveza.


22
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador

“Si, solo hay muchos recuerdos en este lugar.”

“Algunos de ellos buenos, espero,” Jim le guiño un ojo.

“Depende de lo que definas como bueno, supongo.”

Jim, Lynda y su tercera pareja, Neil eran la excepción de la regla en Sunrise


Gardens. Aunque ellos disfrutaban el sexo con otros, ellos realmente se amaban
entre ellos. Eso era lo que quería Bo. El quería hacer el amor con su pareja no solo
joder con él.

“¿Que esta pasando en esa cabeza tuya?” Jim preguntó cubriendo su mano con la
suya.

Girando la mano, Bo entrelazo los dedos con los de Jim. “Karma, supongo. Aquí yo
tenia todo el sexo que un hombre puede desear, pero nada del amor verdadero
que anhelo. Ahora tengo el amor que anhelo, pero nada de sexo.”

Jim apretó la mano de Bo. “Si, eso es una mal Karma. Lark me hablo acerca de
Rance. Siento oír que todavía no se arreglan.”

Bo debería saber que Lark les soltaría la información a sus padres. “Quizás yo
quiero demasiado. Quiero decir, yo no estoy exactamente atrapado fuera del
siglo. Quizás sexo es todo lo que estoy destinado a hacer.”

“Tonterías. No creo eso ni nadie que te conozca.”

Bo se inclino e introdujo su lengua en la boca de Jim. El sabia, incluso que si el


chupaba la lengua de Jim, eso le daría mas comodidad que nada, pero con eso
solo estaría intentado alejar los sentimientos de soledad.

Jim tomo el largo cabello de Bo en sus manos y se sentó a horcajadas sobre Bo,
sin incluso romper el beso. Era fácil sentir la pasión de Jim crecer contra el
abdomen de Bo. Bo casi echa las preocupaciones al viento y deja que el hombre
en su regazo hiciera exactamente lo que él quería, solo que el había ido a Sunrise
Gardens con un gran propósito.

Quebrando el beso, el colocó sus manos en las caderas que aún se movían de Jim.
“Nosotros necesitamos hablar.”

Al ver la expresión en la cara de Jim, Bo se dio cuenta que el hombre había


tratado de distraerle. “¿Que te asusta tanto decirme que dejas que te joda aquí
en un lugar publico?”

23
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Jim lentamente regreso a su silla. Después de unos tragos a su cerveza, el vio
fijamente a los ojos a Bo. “Jan se está muriendo.”

Bo no sabia que esperaba oír, pero definitivamente no era eso. El se sintió


momentáneamente paralizado con la noticia. Jan era una mujer joven y saludable
cuando el la dejo, o al menos era lo que él pensaba. El recordó las llamadas
telefónicas que ellos habían compartido desde que se mudo a Cattle Valley.
Alguna cosa le estaban ocultando, incluso entonces, por la manera en que lo
había dejado. Un pensamiento cruzo por su mente y le causo dolor en el
estomago “¿Yo la enferme....lo hice?”

“¡No!” Jim rápidamente dijo. Terminando su cerveza de un trago, el señalo


pidiendo otra. “No se como empezar a decirte esto…”
“Dímelo.”

“Ella tuvo un bebé hace seis meses…un niño.”

¿Que? eso significaba que estaba embarazada cuando Bo la dejo. “¿Es mió?”

Jim negó con la cabeza. “No, pero el parto, agravo su ya problema cardiaco. Ella
esta en el hospital de Regina.”

“Discúlpame,” Bo dijo, se levanto de la mesa y se dirigió a los cuartos de baño.

Abriendo la llave del lavabo, el se mojo la cara. Viéndose fijamente al espejo el


trato d comprender lo que había sucedido. El se preguntaba porque Jan no le
había dicho acerca del bebé. ¿Había ella sabido que el bebé podría matarla?
Una de las razones por las que Bo acordó casarse con Jan era porque ella tenía
perfectamente claro que ella no quería niños. Con su status de HIV, engendrar un
hijo no era una opción con la que el podría vivir, Entonces parecía claro que ellos
tendrían el matrimonio ideal.

Apoyo su cabeza sobre sus brazos cruzados en el lavabo y permitió que las
lagrimas salieran. Sin importar que el niño fuera suyo o no, el no podría nunca
haberla dejado de haberlo sabido. ¿Quizás por eso ella no lo había dicho? ¿Ella
estaba con el padre del bebé después de que el la dejo?

La puerta se abrió y Jim entro en el pequeño cuarto. “¿Estas bien?”

“¿Porque nadie me dijo nada?”


“Jan nos pidió que no lo hiciéramos”

“¿Por qué?”

24
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Jim cruzo sus brazos y se apoyo contra el lavabo a lado de Bo. “No estoy seguro
pero tengo mis teorías.”

“¿Y cuales son?”

“Tu todavía serás técnicamente su marido. Cuando ella muera, tu no solamente


tendrás la custodia de Joey sino su seguro de vida también. Quizás ella estaba
tratando de hacer las cosas mas fáciles para ti”

Bo exploto. “¿Fáciles? ¿Que? Se supone que yo tome el teléfono y diga. Mi esposa


a muerto, y oh, por cierto, tengo un niño que cuidar?”

Jim puso sus manos en los hombros de Bo. “Esta es una fea situación, pero lo más
importante es el niño. El te necesita.”

Bo se rió. “Si, correcto. Yo nunca he sido necesario en mi vida. No se si podría


tratar con eso.”

Sacudiendo su cabeza. El vio implorante hacia Jim. “¿Hay alguien más? ¿Quien es
el padre biológico?”

“El no figura en la fotografía, nunca lo estuvo. Algún tipo que ella conoció cuando
fue a Winnepeg al concierto.”

Bo lo recordó. El la vio irse con sus amigas con una sonrisa en su cara, feliz de salir
de Sunrise Gardens por unos días. Mierda. “¿Que de alguien aquí en la ciudad?
Seguro que habría alguien que se hubiera apegado al niño.”

“Claro, Lynda esta completamente enamorada del pequeño chico, pero pienso
que necesitas pensarlo bien. Tu todavía estas en shock. Date algún tiempo para
acostumbrarte a la idea.”

Tomando la mano de Bo, Jim lo guió fuera del pequeño cuarto. “¿Te gustaría
conocerlo?”

Bo se seco las lágrimas de las mejillas. ¿Se atrevería? El pensó en su vida en Cattle
Valley. El incluso no tenia casa propia. El suponía que el seguro de vida podría
ayudarle con eso, solo que el no estaba preparado para criar a un niño. ¿Que si el
enfermaba?

“Vamos. No pienses demasiado ahora. Conoce a Joey y decide después de eso.”


Bo asintió y le permitió a Joe que lo guiara fuera del bar.

El camino hacia la casa de Jim fue el más largo de toda su vida. ¿Cuanto tiempo
había pasado desde que incluso hubiera cargado un bebé? Joder. ¡Nunca! El
25
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
practícamele había crecido en las calles de St. Louis cada vez que su puta madre
llevaba a uno de sus muchos tipos a casa.

Bo alejo sus pensamientos de su madre, el había aprendido hace mucho tiempo a


no cuestionar el amor de su madre hacia él, pero aún le deprimía.

Jim llego al frente de la casa. “¿Estas listo para esto?”

“No, pero no estoy seguro incluso que algún día lo este.”

Bo subió los escalones y siguió a Jim dentro de la casa. El fue envuelto


inmediatamente en un abrazo de oso. Neil, el tercer miembro del trío de Jim y
Lynda le daba el acostumbrado beso de bienvenida. Bo regreso el beso
diplomáticamente. Pero no tomo ninguna ventaja. Retirándose, el vio alrededor
de la sala, esperando...¿que?

Una confortable mano toco su espalda. “Voy a decirle a Lynda que estas aquí.”

Bo asintió y vio a Jim salir del cuarto. El se giro hacia Neil. “¿Como te sientes de
tener un bebe en casa?”

Neil sonrió. “Yo realmente me estoy divirtiendo. Yo no estuve cerca cuando


Meadowlark creció, todo esto es nuevo para mi.”

Bo tomo el asiento ofrecido en el sofá. “No se como cuidar a un bebé.”

“Nadie realmente, hasta que esta en la situación. Es mucho de intuición e incluso


más de paciencia. Pero la recompensa es indescriptible.”

Si Bo decía que el ex-coronel tenia una tonta sonrisa, el estaría diciendo la verdad.
Quizás Neil tenía razón. El oyó pasos por el pasillo y se puso de pie y se giro para
ver a Lynda que cargaba al pequeño infante en sus brazos.

Congelado en su lugar, Bo no podía mantener su respiración cuando ella acerco al


pequeño Joey.

“¿Quieres cargarlo?” ella preguntó.

Bo vio al niño dormido. “¿esta muy pequeño?”

Lynda sonrió y paso su dedo por la mejilla de Joey. “Un poco quizás, pero no
demasiado.”

Ella veía con dulzura al niño. “El esta sano, Bo.”

26
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Bo sintió algo de tensión deslizarse de sus hombros. El finalmente volvió a
sentarse en el sofá y extendió sus brazos. Lynda sonrió y cuidadosamente le paso
al bebé. Joey tenía largas pestañas que se movían mientras volvía a dormir. A
pesar del color del cabello, era fácil ver que Bo no era su padre. El color
bronceado oscuro de la piel era un claro signo.

Ahora que el tenía a Joey en sus brazos, Bo no podía dejar de verlo. Era perfecto.
El sonrió cuando Joey al parecer soñando, movía esos gruesos labios rojos como si
estuviera chupando un biberón.

Sus ojos empezaron a arder con las lágrimas. El no merecía algo tan inocente y
limpio sacudiendo su cabeza el trato de devolver a Joey con Lynda. “No puedo.”

“Si puedes. Nosotros vamos a comer. Encárgate de Joey hasta que regresemos.”

Antes de que Bo pudiera protestar, Lynda, Neil y Jim salían por la puerta del
frente. Lo habían dejado solo cargando a un infante que el no sabia cuidar.
Viendo que no tenía elección, Bo se acomodo en el sillón y apoyo su brazo en los
cojines. “Parece que seremos solo tu y yo por una hora mas o menos.”

Veinte minutos después de que el trío lo dejara, Joey despertó. Y empezó a gruñir
y mover sus ojos. Bo se tenso, no sabia que esperar. Esos grandes ojos negros
abiertos viéndolo fijamente.

Los dos parecían estudiarse uno al otro durante aproximadamente cinco minutos
antes de que Joey empezara a llorar. Bo movió a Joey hacia su hombro y trato de
arrullar al niño, pero no funciono. Mierda. Comida, quizás este hambriento.

Bo no tenía ni idea donde buscar el biberón. Se puso de pie asegurando a Joey


contra su pecho y se dirigió a la cocina. Fácilmente encontró los biberones y la
formula, pero la gran pregunta era ¿como prepararla, mientas sostenía a un
inquieto bebe llorando en sus brazos?

El sabía que dejar a Joey en la mesa o el mostrador era una opción, saco un par de
toallas y cuidadosamente acostó a Joey arriba de ellas.

Leyendo las instrucciones de la lata el rápidamente se puso a trabajar en


prepararla. “Estoy tratando, Joey. Dale un respiro a tu viejo.”

El se detuvo a media sacudida del biberón, dándose cuenta de lo que acababa de


decir. Bueno, joder

Bo termino de preparar el biberón y llevo a Joey a la mecedora del porche. El no


pudo evitar dejar de reírse por la manera que el niño atacaba el biberón.
“Maldición supongo, que estabas hambriento.”
27
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador

Reprendiéndose a si mismo por maldecir frente a un niño, él hizo nota mental de


cuidar su lenguaje. Mientras observaba a Jay vaciar la botella, el pensó en Jan. El
sabía que el necesitaba haber venido a verla, pero las cosas del trabajo y el mismo
estuvieron primero. No hubiera sido bueno para la condición de Jan si el llegaba
enojado.

Una lista. El necesitaba hacer una lista de todas las cosas que necesitaba hacer si
el iba a llevar a Joey a Cattle Valley con él. Claro el tenía que encontrar donde
vivir, tendría que encontrar arreglarle un cuarto, y una gran cantidad de cosas
más. Una cosa era segura, el no se llevaría a Joey hasta que su madre muriera
¿Que si ella quería ver a la hermosa cara de su hijo una vez mas antes de dar el
ultimo respiro?

Joey se termino su biberón, y Bo lo levanto sobre su hombro como veía a las


mamas de la televisión. El empezó a palmear con su mano la espalda del niño,
hasta que oyó que eructo y ese sonido que hizo al vomitar una gran cantidad.
Genial.

****

Rance vio a Lark dirigirse hacia su hibrido, Corriendo para alcanzarlo, el preguntó.
“¿Has sabido de Bo?”

Lark se giro, secando el sudor de su frente con el cuello de su camiseta. “Si,


regresa a casa la siguiente semana. ¿Por que?”

Rance pateo la tierra bajo sus botas. “Solo preguntaba.”

Lark apoyo sus caderas contra su vehiculo. “¿Puedo preguntarte algo?”

Rance estaba asustado de lo que podría ser. “Quizás.”

Dando varios pasos se puso frente a la cara de Rance. “¿Tu sientes algo por él?”

Aunque el esperaba la pregunta el todavía no estaba listo. “El es un buen tipo,


supongo. Buen trabajador.”

“Eso no es lo que pregunté y lo sabes.”

Viendo a la cara al mejor amigo de Bo, el sabía que necesitaba tratar de explicarse
que el no podía tener a Bo. “No importa lo que sienta o no por él. Yo no puedo
dejar que vaya mas allá, es mejor para él buscarse otro.”

28
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Lark asintió.“Normalmente estaría de acuerdo, solo que por alguna razón , el se
ha enamorado de ti por primera vez en su vida. Con todo lo que esta tratando de
manejar ahora, el te necesita.”

Rance decidió cambiar la dirección del comentario del amor. “¿Pensé que ya
estaba mejor?”

“El si.” Lark suspiro y bajo la mirada. “El posiblemente me mate si sabe que te dije
esto, pero su esposa murió ayer de una falla cardiaca.”

Rance escupió sintiendo que le habían dado un golpe en el estomago. “¿El estaba
casado? ¿Es una jodida broma?” Oh, Dios el estaba preocupado de vomitar. “Ese
hijo de perra,” él ladro. Rance se dirigió a su casa con Lark detrás de él.

“Espera. Eso no es lo que piensas. El le había enviado los papeles de divorcio a Jan
hace un año,” Lark trataba de explicar.

“Guárdate eso, niño. Ya me dijiste todo lo que necesitaba saber.” El subió los
escalones de a dos a la vez y cerro la puerta ante la cara del todavía protestando
de Lark.

****
“¿Están seguros que no les molesta cuidar de Joey hasta que yo consiga una
casa?” Bo preguntaba con Joey en sus brazos.

Después del encuentro inicial. Bo había aprendido mucho del cuidado del
pequeño chico. Había ayudado que ambos Lynda y Joey habían sido pacientes con
él. El vio a su pequeño hijo y sonrió. “¿Eres el niño de papi?”
Ya no importaba que Bo no fuera su padre biológico el dulce bebé había entrado
profundamente en el corazón de Bo. Por primera vez en su vida el amaba a
alguien que parecía que lo amaba. El sabía que se sentiría morir, regresar a Cattle
Valley sin él, pero era momento de regresar al trabajo.

“Papi regresara pronto, sabes eso.” Con un último beso, Bo le entrego a Joey a
Lynda. “No puedo agradecerles suficiente todo lo que han hecho por nosotros.”

Lynda beso a Bo en la mejilla. “Es mi placer. Y sabes que son bienvenidos cuando
quieras.”

El le dio un rápido beso y se despidió de Jim y Neil, antes de pasar su mano por el
negro cabello de Joey. “Te extrañare.” Subiendo al carro rentado, el vio a su hijo
por el espejo retrovisor hasta que se perdió en la distancia. Girando sus ojos en el
camino, Bo se concentro en todo lo que necesitaba hacer para la casa de su hijo.

29
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Hablar con Shep sería lo primero en su lista. El dudaba que a su jefe le molestara
que el viviera fuera del rancho, pero era mas que eso. El necesitaba asegurarse
que Shep entendiera cuando ocasionalmente tuviera que dejar el trabajo para
llevar a Joey al medico o a lo que necesitara. Sus presentes planes era mantener a
Joey con el tanto como fuera posible durante el día. Las mujeres de Sunrise
Gardens siempre sembraban con sus bebes en sus espaldas. Bo no veía la razón
que el no pudiera hacer lo mismo. El nunca trabajaba con ganado, y a excepción
del incidente con ‘Cero’ que quebró el corral, el dudaba que Joey estuviera en
peligro. Por días a el le preocupo, hablar con Rance, pero al ver los grandes ojos
oscuros de Joey el se dio cuenta que el no perdería tiempo ni energía amando a
alguien que no quería ser amado. El nunca podría dejar sus sentimientos por
Rance, solo que el no podría dejar que lo detuviera, el tenía que seguir su vida.
El tomo la fotografía de Joey de la bolsa de su camisa y la beso. “Parece que solo
seremos tu y yo. Compañero.”
Capítulo Cuatro

No fue hasta el segundo día de su llegada que Bo se armo de suficiente valor para
hablar con Shep. Tocando en la puerta principal, el tomo asiento en su
acostumbrada mecedora en el porche, y espero que Shep se le uniera.

El se sentía a gusto de meter sus manos en la tierra de nuevo. El odio quitarle a


Lark su trabajo, pero el sabía que el chico tenía mejores cosas que hacer de
cualquier manera.

Shep salio con Jeremy en sus brazos. “Ya era tiempo de verte por acá”

“Lo siento. Llegue un poco tarde y estaba anhelando empezar la mañana.”

“Lark nos dijo acerca de tu esposa, lo siento.”


Bo asintió. Eso todavía era difícil de recordar que Jan se fue, pero por lo que
parece, ella esta en un mejor lugar. “Aprecio eso. Supongo que el final fue muy
doloroso para ella. ¿Lark, no les dijo todo lo que sucedió?”

Shep vio hacia Jeremy, y ambos negaron con la cabeza. “No,” Shep contestó.

“Jan tuvo un bebé hace siete meses. Ella me lo dejo a mí para que lo criara. Y
antes de que pregunten, no, el no es mió por sangre, pero eso no hace diferencia
para mi. Amo a Joey como si fuera mió.”

Shep abrió ampliamente los ojos y Jeremy se quedo con la boca abierta.
“Maldición. Nosotros vamos a tener una pequeña mascota corriendo por todo el
rancho.”
Jeremy le dio un codazo a Shep. “El es un bebe no un cachorro.”

30
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Shep parecía insultado. “Yo se eso.” El le sonrió a Bo. “Soy feliz por ti. Incluso soy
feliz por mí. Yo siempre quise un sobrino a quien mimar.”

Bo no podía creer lo bien que lo había tomado su jefe. “Solo quería que supieras,
que estoy buscando una casa para los dos en la ciudad. Espero que eso, este
bien.”

“No. eso ciertamente no esta bien. ¿Que tiene de malo la barraca? Ahora que
Jeremy no esta compartiendo el cuarto hay espacio para una cuna.”

Bo se rascó la cabeza. “No estoy seguro que a los otros vaqueros les emocione
que Joy este ahí.”

“Bueno, ¿porque no vas y les preguntas, antes de correr y comprar una casa? Eso
debe funcionar por lo menos un par de años.”

El nunca había dudado de la bondad de la gente en Cattle Valley. Bo quería decirle


a Shep y Jeremy todo acerca el bebé, incluso les mostró las fotografías. Para el
final de su visita el reconoció que Jeremy estaba casi tan emocionado con la idea
de tener un bebé alrededor como Shep.

“Es martes, ¿Que opinas de ir a la ciudad a la noche del taco?”

Bo se froto su estomago, habían pasado dos meses desde que el se había sentado
a comer grasosos tacos con sus amigos. “Me encantaría. Sunrise Garden es genial
con todos esos productos frescos que produce, pero extrañe la comida chatarra,
Solo voy a la casa a limpiarme diez minutos máximo.”

Shep asintió. “Nosotros te esperamos aquí.”

Bo corrió hacia la barraca. Entrando por la puerta el casi arrolla a Rance. “Lo
siento,” dijo y siguió adelante.

Quitándose la ropa el entro al agua caliente de la ducha, y rápidamente se baño.


Era la primera vez que el recordaba, que el ver a Rance no le causara una
erección. Bo pensó que era un pequeño progreso.
El terminó de bañarse y se vistió con unos cómodos short y una blanca camiseta,
en ocho minutos. Después de ponerse sus sandalias de dedo se cepillo el cabello y
salio.

“Listo,” dijo llegando a los escalones del porche, y noto que Shep y Jeremy
estaban pasando una tarde ‘compartida’. Maldición imagino que no había
necesidad de apurarse después de todo. Una cosa que los vaqueros del rancho
habían aprendido, malditamente rápido era a no molestar al jefe cuando estaba
disfrutando algo de azúcar.
31
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador

Resignado el tomo asiento en el escalón de abajo. El se sorprendió al ver la gran


camioneta de Rance frente a él.

“¿Necesitas un ride? Parece que ellos van a tardar un rato.”


Bo no tuvo incluso que ver sobre su hombro. El sonido de los besos y los gemidos,
eran suficiente para que supiera que Rance tenía razón, Bo subió a la camioneta.
“Gracias aprecio eso.”

Mientras ellos se dirigían a la ciudad las únicas palabras que Rance le dijo fueron
de trabajo. “El heno ya debe estar listo, ¿No es así?”

“Si. Probablemente empiece a cortarlo y empaquetarlo la siguiente semana. Voy


a necesitar algo de ayuda, para trasladar las pacas. El doc. Me permitió regresar al
trabajo mientras no levante nada mas pesado de quince kilos hasta que el me lo
autorice.”

“No hay problema.”

Ellos recorrieron el resto del camino en silencio Bo finalmente prendió la radio. El


no podía evitar preguntarse si las cosas entre él y Rance siempre estarían tensas.

Una de las cosas que era seguro es que el necesitaba hablar con Rance acerca de
Joey. Bo decidió esperar hasta que le diera raid de regreso a casa para decirlo. No
tenía sentido arruinar a ambos la cena, porque no tenia duda de que ellos
probablemente pelearían por eso. Que era justamente lo que el y Rance hacían
últimamente.

Bo incluso no se sorprendió cuando Rance eligió sentarse en al final de la mesa


reservada para los trabajadores de ‘EZ lo hace’ y Back Breaker. El había oído que
ellos habían estado comiendo juntos por años.
El ordeno una jarra de cerveza, le dio una sucia mirada a Rance. Jodete. Para
cuando termino el primer vaso, Jax, Logan, Kade y Lark caminaban desde la
puerta. Finalmente, alguien con quien hablar.

Lark saludo a Bo con un gran abrazo. “Te extrañe.”

“Te extrañe, también. ¿Como va la búsqueda de trabajo?”

Lark se rio y giro los ojos. “Yo solamente he estado libre un día. Pienso que
merezco al menos un par de semanas antes de convertirme en un completo
adulto.”

Bo se inclino y desordeno el rubio cabello. “Reconozco que tienes razón.”

32
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Lark prácticamente salto a su silla. “Entonces dime acerca de Joy. Quiero oírlo
todo.”

Bo se recargo y cruzo los brazos, ese era un tema que disfrutaba hablar. “El es
hermoso. Te juro que nunca he visto a alguien más perfecto. El tiene el cabello
negro azabache y la más hermosa piel bronceada que he visto. Oh, y sus ojos son
hipnotizantes, sus largas pestañas llegan a sus mejillas cuando parpadea Te lo
digo Lark, Eso fue amor a primera vista cuando lo tuve en mis brazos.”

Un alboroto al final de la mesa capto su atención. Rance había tumbado su


cerveza y esta había caído toda sobre Ezra.

“Oh, mierda,” Bo se rio entre dientes. Derramar cerveza sobre un hombre del
tamaño de Ezra James era como golpear con un palo un grizzly
El le guiño un ojo a Lark. “Si Ezra decide matar a Rance, no tendré quien me lleve
a casa”

****

Después de disculparse ampliamente con Ezra, Rance decidió que el había bebido
bastante cerveza. Su mirada fue hacia Bo, en el lado opuesto de la mesa. El
hombre estaba bebiendo como un pez. ¿El no entendía lo malo que seria la
cerveza en su condición?

Diablos, el estaba muy ocupado, desfalleciendo por ese tipo, Joey, del que había
estado hablando antes. Rance no sabía si Bo lo había hecho a propósito pero lo
decía suficientemente alto para que Rance pudiera oír cada palabra.

Quizás el debería estar feliz de que Rance encontrara a alguien mientras estuvo
en Canadá, pero maldición, eso probaba una vez más lo fácil que lo olvido. Bo era
la segunda persona que clamaba que lo amaba, solo para hacerlo a un lado
cuando algo mejor llegaba. Bueno, bien. Eso puede definitivamente hacer mi vida
más fácil. El realmente estuvo repensando las cosas mientras Bo estuvo lejos.

“¿Estas listo?” Bo preguntó.

Rance levanto la vista más que sorprendido al ver que la mayoría de la gente ya
había pagado sus cuentas, y se habían ido. “Si.”

Dejo un par de billetes en la mesa, y se dirigió a la camioneta. El se arrepentía de


haberle ofrecido raid a Bo en primer lugar. Tal como sospechaba, Shep y Jeremy
realmente no llegaron al martes de Taco en el O’Brien’s.

****

33
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
“No vomites en mi camioneta,” Rance gruño mientras se ponía el cinturón de
seguridad.

“¿Que? ¿Porque tendría que vomitar? Yo solo tome tres cervezas.”

“Tres son demasiadas según me parece,” Rance gruño.

“¿Cual es tu problema, hombre?” Bo preguntó.

“Eso no es bueno para ti, y tu lo sabes. Pensé que se suponía que eras un experto
cuidándote.”

Bo estudio el perfil de Rance. Eso sonaba casi como que el hombre estaba
preocupado. Bo trato de alejar esa idea, pero él le preguntaría sobre Joey de
camino a casa.

Una vez que ellos llegaron a la propiedad del rancho, Bo se dio cuenta que el no le
había hablado a Rance de Joey. Oh bueno, el no estaba de humor de cualquier
modo. Quizás lo atraparía en la mañana. Claro eso quería decir que el tenía que
hablar con Steve, Buddy y Jim.
Bo salio de la camioneta y se dirigió a la barraca. El se preguntaba si seria
demasiado tarde para llamar a Lynda y preguntarle sobre Joey, Oh mierda. El
recordó que había dejado su teléfono celular en el tractor.

Cambiando de dirección Bo se dirigió a los pastizales. El tractor estaba detrás de


la segunda puerta, y el tenía que cruzar el corral del toro pero era tarde y
usualmente el gran tipo estaba calmado en la noche.

El oyó pasos detrás de el y vio sobre su hombro. Rance se estaba acercando. ¿Que
diablos querrá?

“¿A donde piensas que vas?” Rance preguntó.

Bo nunca detuvo sus grandes pasos. El subió la primera cerca y cometió el error
de saltar. Sintió un fuerte dolor en su anterior herida.

“Te hice una pregunta.”

Bo exhalo. Tratando de cruzar el corral lo más tranquilo posible con Rance


interrogándolo. “Deje mi teléfono en el tractor, voy por el, ¿Si esta bien para ti?”

El casi llegaba a la segunda puerta cuando Rance puso su mano en el hombro.


“Eres un maldito idiota, ¿Sabes eso?”

34
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Bo se encogió de hombros y retiro la mano, abrió la segunda puerta. Después del
anterior brinco idiota, él no planeaba hacer otro. El pasó a través de la puerta
abierta e iba a cerrarla cuando otra vez Rance estaba ahí.

Bo hizo su mejor esfuerzo para estar calmado, pero Rance persistía. “¿Que
diablos necesitas con el maldito teléfono para que arriesgues tu cuello caminando
a través del corral del toro?”

Girándose de cara a Rance, Bo lo empujo. “¿Cual es tu jodido problema? por un


año tu has actuado como si no fuera lo suficientemente bueno para estar
alrededor tuyo, y ahora repentinamente eres mi guardián. ¡Mierda! Quiero el
telefono para ver si Joey todavía esta despierto. ¿Esta bien para ti, Jefe?”

Rance empezó a reírse. “Oh, yo debería suponerlo un día alejado de tu nuevo


jodido compañero y tu…”

Eso fue todo lo que Rance logro decir antes de que Bo golpeara con su puño la
bonita cara de su jefe. Atrapado con la guardia baja, Rance cayó en la tierra.
Antes de que el pudiera levantarse, Bo estaba sobre él, señalando con un dedo
directamente a la cara de Rance.

“Tu incluso vuelves a decir algo parecido de nuevo acerca de mi hijo y te mato.”

Rance lo veía sorprendido. Se frotaba la mandíbula en el lugar donde Bo había


conectado el golpe. “¿Joey es tu hijo? ¿Desde cuando tienes un hijo?”

“Si el es mi hijo, ¿quien diablos piensas que era?” Bo estaba sorprendido de que
Rance incluso supiera el nombre de Joey.

“Diablos, yo no se. Yo te oí hablar en la cena con Lark acerca de lo hermoso que


era y de como te habías enamorado de él. ¿Que Supones que pensé?”

Antes de que Bo pudiera explicar más un ruido detrás de ellos capto su atención.

“¡Joder! ¡Corre!” él grito, dirigiéndose al tractor, mientras ‘Cero Tolerancia


empujaba la puerta y salía tras ellos.
Ambos apenas lograron saltar al tractor antes de que el toro de una tonelada los
alcanzara. “¿Porque no cerraste la maldita puerta?”

“Pensé que lo había hecho,” Rance gritó.

Bo pasó del neumático trasero a la cabina. Le ofreció su mano a Rance para que
entrara a la cabina. “Mejor entra, no parece que el viejo ‘Cero’ vaya a algún otro
lado pronto.”

35
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Después de varios segundos esperando la respuesta, Rance finalmente dejo que
Rance le ayudara a entrar en la cabina. Cero continuó bufando alrededor del
tractor. Bo podía decir que el hijo de perra estaba esperando su oportunidad de
atraparlos.

Bo recupero su celular de debajo del asiento. “¿Debemos llamar a alguien?”


Rance se rio. “¿En serio? ¿Tu sabes lo que nos van a molestar por esto?”

Aunque la cabina era mas grande que el neumático, era muy pequeña para que
dos personas estuvieran senadas por horas, que era lo que podía tomar que
‘Cero’ se cansara del juego.

“Toma asiento yo me sentare en la cubierta.”

“No, tu toma asiento, eres el que estas todavía en vías de recuperación.”

Bo no quería pelear con Rance sobre quien y en donde, así que tomo el asiento
ofrecido. “Gracias.”

Rance se subió a horcajadas en el volante manteniendo sus piernas tan alto como
pudo para alejarlas de ‘Cero’. Los dos hombres se quedaron en silencio cerca de
quince minutos, antes de que Rance se limpiara la garganta. “Entonces dime
acerca de tu chico.”

“Bueno, supongo que no hay mejor momento que el presente.” Bo explico a


Rance acerca de Jan su embarazo y su subsiguiente enfermedad. El aumento a
una intensidad poetica cuando hablo de su hijo y lo listo que era.

“Ya le hiciste pruebas de inteligencia?” Rance se rió.

“Claro que no, lo digo por la manera en que ve todas las cosas y parece que
pensara sobre ellas. No me sorprendería que empezara a hablar cualquier día.
Rance se rio de nuevo. “Ya y te la vas a pasar hablando con el bebé.
¿Comprendo?”

“Nunca había estado con bebes, y no mantendré alejado a Joey.”

“Entonces ¿cuando piensas traerlo aquí?”

“Pronto. Yo necesito hablar con los chicos para saber que no les molesta que el
bebé se quede en la barraca. Yo ofrecí cambiarme a una casa en la ciudad, solo
que Shep no quiere oír nada al respecto, el piensa que el podrá jugar el papel de
‘tío’.”

“No puedo esperar a ver eso.”


36
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador

Ellos estaban tan involucrados en la plática que no notaron que ‘Cero? se fue.
“Mierda. ¿A donde se fue?”
“No se,” Rance dijo. “Pero dudo que haya regresado al corral.”

“¿Que podemos hacer?” Bo preguntó. Todo lo que podía pensar era en Shep muy
enojado cuando descubriera que el toro numero uno del rodeo era un DESERTOR.

Supongo que mañana iré a buscarlo. Puede tomarme más de un día depende de
lo motivado que este en encontrar al jodido Evasor.”

Bo gruño. “Perfecto. Supongo que no hay manera de que Shep no se entere,


ahora. ¿Es así?”

“Es mi culpa, yo hablare con Shep le diré que deje la puerta abierta.”
“No puedo dejar que cargues toda la culpa. Iremos juntos tan pronto como
amanezca.”

Rance vio alrededor una vez más. “¿Estoy seguro que se tomo un descanso?”

“Mas vale. Estoy seguro que si ese gran bastardo esta en algún lugar del área, él
va a venir corriendo. Todavía no se porque me odia tanto.”

Rance se rió y bajo a la tierra. “No lo tomes personal. ‘Cero’ odia a todo el
mundo.”

“Algunos mas que a otros.”

****

Rance no se había atrevido a ver a Bo. Shep había dados a ambos tal sermón que
no lo olvidarían pronto. Les ordeno que tomaran un remolque y no regresaran sin
el toro.

“Al menos no tenemos que preocuparnos de que el toro se haya dirigido a la


ciudad,” murmuro. Toros tan grandes y pesados como ‘Cero’ tienden a tomar la
ruta más fácil a su destino.

“Si existe ese,” Bo agrego.

Ellos podrían estar agradecidos de ir en la camioneta y no en los caballo. Montar


días a caballo, no es tan divertido como suena. El todavía no podía creer haber
dejado la puerta abierta. Que cosa tan inmadura había hecho. Si el hubiera
prestado más atención al bien de los animales en lugar de sus tendencia celosa, el
nunca hubiera cometido ese error.
37
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador

El tenia que admitir eso, el estaba celoso por la manera en que Bo hablaba de
Joey. La parte realmente estupida era que a pesar de descubrir que Joey era un
bebé, él seguía celoso. Realmente se había acostumbrado a que Bo siempre
estuviera ahí, tratando de besarlo, o rozando su trasero con la mano cuando
pasaba por su lado, parecía estar vació sin él.

Bo debería ser un gran tipo para aceptar criar al niño de otro hombre. Eso era lo
más importante de todo. Ahora que el sabia la verdad, el tenia muchas dudas que
el incluso no había pensado acerca de Bo. El había oído a Bo hablar muchas veces
acerca del sexo en la comuna o como sea que se llame ese lugar, y de eso se
había forjado una opinión acerca de ese hombre que estaba probando estar
totalmente equivocada.
“¿Cuanto tiempo estuviste casado?” él se descubrió preguntando.

“Tres años legales. Dos años juntos.”

“¿La amabas?”

Bo se movió en su asiento y se apoyo contra la puerta del pasajero. “Yo cuidaba


de ella. Pero no la amaba. Y ella pensaba lo mismo.”

“Esta puede ser una tonta pregunta, pero ¿porque te casaste si no la amabas?”

Bo no contesto por un momento. Finalmente, se limpio la garganta. “Supongo


que solo quería pertenecer a alguien.”

El dolor ante la simple respuesta le lastimo el corazón a Rance. “¿Que de tu


familia?”
Bo se encogió de hombros. “Mis amigos son mi familia. Yo deje mi casa, si incluso
puedo llamarle así, cuando tenia trece años.”

“Maldición, eras solo un niño.”

“Si.”

“¿Como sobreviviste?”

Bo acomodándose a si mismo y se giro hacia la ventana. “De cualquier manera


que pude.”

Rance sabía por la manera en que lo dijo Bo que el había comercializado con su
cuerpo. “¿Es así como te contagiaste con el virus?”

38
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
“Estas siendo demasiado curioso para alguien que no quiere hablar de su propio
pasado.”

“Cierto. Lo siento, por inmiscuirme.”

Ellos recorrieron cada kilómetro tratando de cubrir cada centímetro del los pastos
el este antes de encontrar una cerca rota. “Mierda.”

Rance estaciono la camioneta y fue a investigar la cerca. Encontró un mechón de


pelo negro en una de las púas del alambre. “Al menos no se mato a si mismo.”

“Si, pero ¿A donde se fue?”

Rance suspiro. “Al área de caza.”

“Mierda.”

“Si.”
****
Después de pasar una hora al teléfono con Shep y Nate, Rance finalmente pudo
llevar la camioneta y el remolque al área de caza. La única condición era que
tenían que hacer un arreglo provisional después de que Bo pasara el remolque.

Sin herramientas apropiadas ni guantes protectores, el peligro de que Bo se


cortara era muy grande para correr ese riesgo. Rance considero que la mejor
solución era estirar el alambre quebrado.

Pasaron otros noventa minutos antes de que regresara a la camioneta. “Cruza los
dedos para que se mantenga hasta que regresemos al rancho.”

“¿Hacia donde?” Bo preguntó.


Rance vio hacia Bo. El sabía que el tipo se sentía mal por no poder ayudar con la
cerca, pero ellos no tenían opción. “Ve hacia adelante al este. ‘Cero’ no es el mas
listo del corral, así que dudo que trate de engañarnos.”

Bo asintió, y lentamente llevo la camioneta y el trailer por entre rocas y brechas.


“Si,” Bo dijo de repente.

“¿Huh?”

“Cuando yo tenia diecisiete años un hombre, Edward, me hizo su chico-juguete.


Yo viaje por el mundo, use ropa cara y contraje el virus, mientras navegábamos
por el mediterráneo. Eduard tenia su ojo puesto en un raro vino pero el
propietario lo único que quería a cambio era una noche conmigo.”

39
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Bo detuvo la camioneta y apoyo su cabeza contra el volante. “El bastardo sabía
que tenia el virus cuando hizo el trato. Edward no quería dormir con él, entonces
el infecto a Edward a través de mi.”

Rance cerró los ojos y puso la mano en la espalda de Bo. “Lo siento.”

Bo se seco las lágrimas y se giro hacia Rance. “Ya sabes, he hecho un montón de
cosas en mi vida y he conocido un montón de gente interesante. Una cosa he
aprendido, es que todo mundo tiene su historia, y cada quien piensa que la propia
es la peor.”

Bo se rió. “Es por eso que no me detengo en la mía. Es horrible. He vivido trece
años con el virus que hace que mucha gente me tenga miedo, pero yo no puedo
cambiar eso. Todo lo que yo puedo hacer es despertar cada mañana y dar gracias
a dios por otro día.”

Rance se giro alejándose de la honestidad en la mirada de Bo. ¿El se sentía


avergonzado? ¿Se había alejado de la gente y la intimidad simplemente porque
sentía lastima de si mismo?

Bo continuo conduciendo hacia el este Rance trato de enfocarse en la tarea que


tenia adelante. El sabía que el tenia que pensar mucho sobre eso. ¿Quien podría
pensar que el chico que bromeaba con todos, pudiera ser el único que le hiciera
ver la verdad tras sus acciones?

****

Porque ellos no permiten fuego en el área de reserva, Rance decidió que seria
mejor dormir en el remolque, al menos así estarían protegidos de los animales.

Mientras Bo se deslizaba dentro de la bolsa de dormir solo con su ropa interior, él


no podía quitarse el mal humor de la conversación de su mente. ¿Porque el había
revelado su historia a un hombre que parecía no importarle? El supo la respuesta
inmediatamente, Porque Rance le importaba. Bo había visto los ojos de Rance
cuando el término la historia. Rance había mantenido los labios apretados el resto
del día hablando poco, pero el sabía que era ira lo que había detrás de ese
silencio. El se preguntaba si Rance estaba pensando en abrirse. Era muy duro para
el hombre admitir que había cometido un error. Bo sabía que eso era para
cualquiera.
“¿Puedo contestarme algo?”

“Quizás.”Rance contesto, precavidamente.

40
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
“Hay dos historias sobre ti flotando en Cattle Valley y estoy un infierno seguro
que quiero saber cual es la correcta. Una dice que tu eras profesional del circuito
de rodeo, y otra que vienes de Boston”

El a propósito hizo la pregunta que ya conocía la respuesta. Todo el mundo en la


ciudad creía que Rance era un jinete de rodeo retirado, pero muy pocos conocían
la verdadera historia. Bo necesitaba probarle a Rance que podía abrirse y contarle
la verdad.

“Nunca he participado en un rodeo real en mi vida. Yo pasaba los veranos con mi


abuelo en Oklahoma. Eso no estaba mal cuando yo era niño, ahí aprendí a
montar. Cuando los veranos terminaban yo regresaba a Boston a la lujosa vida de
mis padres.”

Bo sintió los deseos de levantar los brazos con la pequeña victoria. El se giro a un
lado y reajusto la almohada inflable bajo su cabeza. “Nunca he ido a Oklahoma.
Eso es raro ya que crecí en Missouri. Supongo que nunca tuve razón de ir allá.”

Rance giro su cara y sonrió a Bo. “No te pierdes de mucho.”

“¿Entonces porque ibas?”

“Probablemente por la misma razón por la que tu te casaste. Mis padres eran
gente muy ocupada con sus importantes carreras que consumían su tiempo. Yo
iba a Oklahoma donde parecía que le importaba a alguien.”

Bo acuno un lado de la cara de Rance. Inclinándose el murmuro contra los labios


de Rance. “Pienso que nosotros dos tenemos mas en común que lo que
admitimos.”

Rance cerró la distancia y sello sus labios con los de Bo. El beso empezó suave,
con unos juguetones apretones para aumentar la diversión. Bo gimió y deslizo su
‘cama’ más cerca de Rance.

El se sentía como una mariposa atrapada en su capullo. Medio acostado arriba de


Rance, Bo profundizo el beso, probando, y chupando. Besar a Rance era todo lo
más bueno del mundo enrollado dentro de un paquete. Con su pene duro como
una piedra, el cuerpo de Bo automáticamente empezó a frotarse contra el de
Rance. Al principio Rance parecía darle la bienvenida al aumento de actividad
sexual, pero igual que la vez anterior, él pánico en su voz le ordenaba detenerse.

“Detente. Bo, por favor detente,” gritaba empujando a Bo para alejarse.

Bo se giro sobre su espalda y se cubrió los ojos. “Jesús tu eres mas difícil de lo que
yo imagine.”
41
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador

Con un audible suspiro, Rance se movió y coloco su cabeza sobre el pecho de Bo.
“Tu sabes como dijiste antes todo el mundo tiene una historia, Bueno yo también
la tengo y pienso que finalmente es tiempo de compartirla contigo.”

Capitulo Cinco

Bo envolvió sus brazos alrededor de Rance. Si el hombre quería escapar el no se la


haría fácil el se había quitado solo las botas y el sombrero antes de meterse en la
bolsa de dormir. Cuando el trataba de poner mas cómodo a Rance para que le
fuera fácil contar su historia su mano sintió la ropa, esa estaba de más.

“Antes de empezar, porque no me haces un favor y te quitas la camiseta? Es


mejor acurrucarse piel con piel.”

“Ummm, quizás deberías oír mi historia primero.”

Bo beso la cima de la cabeza de Rance. “No hay manera deque algo que me digas
en tu historia, evite que quiera quitarte la camiseta.”
Los músculos de Rance se tensaron bajo sus manos, entre más lo pensaba, más se
daba cuenta que el nunca había visto a Rance sin su camiseta. Incluso en los días
más calientes del año, A lo más lejos que llegaba era a una camiseta de tirantes.

Retirándose, Rance se quito su camiseta sobre su cabeza y la lanzo a un lado. Con


solo la luz de luna que entraba al trailer, Bo no podía ver nada fuera de lo usual en
el pecho de Rance. Como esperaba de un duro trabajador, los músculos en el
pecho de Rance, parecían esculpidos. Mas pálidos en contraste con la cara cuello
y brazos del vaquero, El pecho de Rance se veía tan perfecto como Bo sabía que
sería.

Con una profunda respiración, Rance paso la mano de Bo hacia su bajo abdomen,
“¿sientes esto?”

Los dedos de Bo encontraron una masa de pequeñas cicatrises duras que


cruzaban el abdomen de Rance. “¿Puedo preguntar?”

“Déjame darte la versión del Reader’s Digest.*”

“Esta bien,” Bo agregó, jalando a Rance hacia sus brazos.

“Yo estaba saliendo con un tipo, Oren, cuando yo trabajaba en el departamento


de policía de Boston. Con mi loco horario, nosotros no nos veíamos mucho, pero
tratábamos de hacer tiempo para un par de citas a la semana.

42
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
*Reader’s Digest, revista americana mensual desde 1922, en México se llama
selecciones.

Siempre me pareció extraño que se rehusara a


Quedarse a dormir en las noches, pero sus excusas siempre eran creíbles.”

“Oh, mierda,” Bo murmuro. El había sentido lo que iba a venir.

“Si, oh, mierda. Cerca de siete meses de relación, una mujer camino hacia mi
cuando llegaba a la estación, llevaba un impermeable. Estaba lloviendo así que no
me pareció extraño el largo abrigo que llevaba. Ella me pregunto si yo era Rance
Benning.”

Bo trago el nudo en su garganta. A el no le gustaba la dirección que estaba


llevando la historia. El sostuvo más cerca a Rance.

“Cuando yo le dije si, ella saco una arma de perdigones y la disparo a


quemarropa. Ella disparo hacia mi pene pero los perdigones cubrieron una gran
área.”

Bo jadeo cuando sus bolas inmediatamente trataron de meterse dentro de su


cuerpo. Entonces recordó muchas cosas en este punto. El beso en la oficina de
Rance. Ellos habían estado muy calientes hasta que Bo trato de alcanzar la
erección de Rance.

Bo trato de hablar pero el no pudo. El se limpio la garganta y trato de nuevo.


“¿Que sucedió?”

“Mis compañeros oficiales, oyeron el disparo y salieron del edificio. La esposa de


Oren, Anita, ni siquiera trato de correr. Ellos llamaron a la ambulancia y llegue tan
rápido al hospital que evitó que muriera desangrado. Tuve cuatro procedimientos
para tratar de reconstruir el daño que los perdigones habían causado. Ellos
hicieron todo lo que pudieron, pero mi cuerpo estaba muy dañado. Yo perdí un
testículo, y mi pene básicamente estaba dividido en dos. Ellos volvieron a unirlo.
Incluso después de todos estos años yo no puedo verme a mi mismo.”

“¿Que le sucedió a Oren y a su esposa?”

“Anita fue a juicio. Ella todavía esta en prisión, por varios años más. Oren, ahora
esa es la parte triste. Después del disparo, regreso con su ex-amante, el tipo le
dijo a la policía que Anita los había pescado en la cama. Ella le dijo que la
siguiente vez que decidiera joder, ella le reventaría las bolas al tipo. Ni que decir,
que el tipo estaba teniendo aventuras en la región.”

“¿Entonces, el sabía que te ponía en peligro?”


43
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador

“Si, y el fiscal y yo pensamos que lo hizo a propósito. Veras, Anita era una mujer
rica. Oren sabía qué si se divorciaba el saldría perdiendo. Lo siguiente mejor era
enviarla a prisión. Y cuanto mejor si su esposa le disparaba a un policía. Si, Oren
sabía exactamente lo que estaba haciendo.”

“¿Entonces el esta también en la cárcel?”

“No. al final, el fiscal no tenia suficientes pruebas para llevar el caso a juicio.”

“¿El es un hombre libre?”

“Si. Algo que pienso cada vez que yo uso el baño.”

Bo finalmente comprendió. No solamente Rance había sido traicionado de la peor


manera, le habían dejado un recordatorio constante. El tamaño y la forma del
pene de un hombre es parte importante de su autoestima. No era de extrañar
que Rance se rehusara a dejar que alguien más se acercara.

Jalando a Rance hasta el nivel de los ojos, Bo lo beso. Otorgando toda la ternura
en esos labios, el trato de llevarla a la profundidad del dolor que Rance había
pasado. Eso debió funcionar, porque el cuerpo de Rance empezó a reaccionar
cuando el daba lo mejor de sus emociones.

Bo quebró el beso y Rance apoyo su cabeza en el hombro de Bo. Viéndose


fijamente a los ojos, Bo beso la frente de Rance. “Esto es correcto, estar aquí
contigo es mas de lo que incluso creí capaz de tener, yo estaría contento con esto
por el resto de mi vida. Mi amor por ti no tiene nada que ver con el sexo, se que
se oye extraño viniendo de mi, pero es la verdad. Solo el sentirte en mis brazos
cada noche es mas de lo que incluso espere.”

Rance comenzó a besar el pecho desnudo de Bo. “Hmmm, eso no suena muy
divertido. El equipo todavía funciona. Es solo que no me siento muy cómodo
viéndolo, al menos no todavía.”

“Puedo vivir con eso. Supongo que en esta parte de la conversación, tengo que
hablar de mi status de positivo, ¿huh?”

Rance dejo de rodear con la lengua el pezón de Bo y contestó. “Se suficiente. Para
ser honesto, poco tiempo después de tu llegada a Cattle Valley investigue todo
sobre el HIV en internet, mientras tengamos un buen suplementos de condones,
supongo que estaremos bien con eso. Aunque se que probablemente continué
fastidiando con tu dieta.”

44
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Bo se rio por primera vez en lo que sentía días. “Yo realmente como muy sano.
Claro me gusta ser indulgente de vez en cuando, pero se que mi cuerpo necesita
permanecer en buena forma.”

Rance pasó la mano sobre el pecho de Bo. “Si lo haces, nadie que te vea, sabría
que eres positivo.”

“Y es la manera que intento que siga.” La imagen de Joey apareció dentro de su


cabeza. Mierda. El ni siquiera había hablado de su hijo. “¿Puedo hacerte una
pregunta?”
Rance se rio. “Supongo que es seguro decir, si, soy un libro bastante abierto en
este momento.”

“Bueno…maldición. me siento como una chica.”

Rance pasó su mano sobre la erección de Bo atrapada bajo su ropa interior.


“Hmm, no te sientes como una.”

“Chico listo. La cosa es, tengo que pensar en mi hijo ahora. Y supongo... que
necesito saber si esto entre nosotros durara.”

Rance levanto las cejas y vio fijamente a Bo. “¿Tienes una idea de lo que significa
para mi hablarte de mi historia?” Antes de que Bo pudiera contestar, Rance lo
beso. “Te amo, estupido idiota.”

Bo sonrió de oreja a oreja. “¿Que sobre Joey? ¿Hay lugar en tu vida para él?”

“Yo no he estado mucho con bebes. Atendí un parto una vez, pero hasta ahí llega
mi conocimiento.”

“Diablos, sabes mas que yo cuando llegue a Canadá. Lynda, la mamá de Lark, ella
me enseño bastante y yo puedo enseñarte a ti si quieres.”

Girándose arriba de Bo, Rance empezó a mover sus caderas contra él. “¿Y que
obtengo si paso la lección?”

Bo metió la mano entre ellos y empezó a desabrochar los jeans de Rance. “¿Esto
esta bien?”
Después de una corta pausa, Rance asintió. “Yo acepto eso.”

El se giro fuera de Bo y empezó a desnudarse. Bo se quito su propia ropa interior


y espero a que terminara. El no se le escapo notar que Rance no se mostró en
absoluto, cuando se quito su ropa interior.

45
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Alcanzando sus jeans, Bo saco su cartera buscando el par de condones. Antes de
que Rance preguntara por la razón de que Bo llevaba eso, Bo decidió hacéroslo
fácil a su muy pronto amante. “Cuando me entere que era positivo, me jure a mi
mismo nunca salir de casa sin un suministro. No te preocupes no los he usado
desde que llegue a Cattle Valley, al menos no hasta ahora.”

Arrodillado sobre la bolsa de dormir, Rance uso su camiseta para cubrirse,


mientras comenzaba a abrir el cierre de la bolsa. “¿Porque no juntamos las
bolsas?”

Aunque el dudaba que ellos necesitaran taparse, Bo asintió y salio de su


improvisada cama. El sonrió un momento al atrapar la mirada de Rance centrada
en su palpitante pene.

“Todo tuyo,” bromeo, haciendo oscilar la erección de lado a lado con un


movimiento de cadera.

Antes incluso de que hubieran arreglado la cama. Rance estaba ocupado abriendo
uno de los paquetes de aluminio. “¿Solo tienes dos?”

Bo se rio. “Si. Lo siento.”


Rance se froto la mandíbula por unos segundos, aparentemente pensando
profundamente. “Mi semilla no es peligrosa, ¿correcto?”

“Si, pero no puedes chuparme sin un condón. Aunque el riesgo es mínimos no


vale la pena arriesgarse.”

“Esta bien, entonces, si te la chupo necesitaríamos un condón para ti, ¿correcto?”

El pene de Bo empezó a producir gran cantidad de pre-semen ante la idea. “Si.”

“Perfecto. Entonces eso no dejaría el otro para mañana.”

Riéndose, Bo empujo su pene hacia Rance. “Me parece buen plan.”


Rance saco el condón y lentamente lo deslizo por la longitud de Bo, dejando
espacio en la punta para el semen. “¿Es suficiente?”

Bo estaba perdido con la sensación de Rance masturbándolo, que encontraba


difícil contestar. “Bueno.”

Mientras batallaban por entrar a la bolsa de dormir con Rance rehusándose a


soltar la erección de Bo. Maldición, Bo no sabía si el incluso había sentido tanto
placer por una simple masturbación.

46
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Abriendo la bolsa lo bastante para exponer el pene de al aire, Rance se inclino. El
primer toque de la lengua de Rance casi envía al borde a Bo. “Joder, bebé.”

“Maldición, eres grande,” Rance observó, probando con su lengua la longitud de


Bo.

“Todo tuyo,” él murmuro, cuando Rance cubrió la corona con su boca.

Rogando porque Rance no comentara sobre el desagradable sabor del látex. En


lugar de eso, el parecía cautivado con el pene de Bo, tomando tanto como podía
dentro de su garganta. Bo sabía que habían pasado años para Rance, el no quería
que su amante fuera a ahogarse esta vez. “No te lastimes, si solo chupas la
cabeza, esta bien para mí.”

Rance rehusó la oferta y continúo tratando de que su garganta tomara toda la


longitud de Bo. Bo no pudo evitar sonreír. Rance era un hombre que necesitaba
ser el mejor en todo lo que hacia. Y por la manera en que estaba haciendo sentir
a Bo, el no necesitaba preocuparse acerca de sus habilidades para hacer una
mamada.

Una vez que Rance se sintió más cómodo, Bo enredo sus dedos en el oscuro
cabello de Rance y empezó a joder su boca. “Oh, Cristo eres bueno en esto.”

Con sus bolas preparándose, Bo le advirtió a Rance de su inminente clímax. “Casi,


estoy.”

Los dedos de Rance iban del escroto de Bo al agujero de su culo mientras


continuaba el asalto al pene de Bo. El inhalo profundo cuando el primer chorro de
semen salio de su eje al contenedor de látex.

Con su mano trabajando en la base, Rance continuo ordeñando cada gota se


semen del pene de Bo quien jaló a Rance y le dio un profundo beso.

“Eso fue...asombroso.” Bo le dio a Rance otro beso antes de cuidadosamente


retirar el condón. Sin tener idea de donde depositarlo, el busco en la bolsa con
sus cosas, tomando la bolsita del cepillo de dientes, lo sacó y deposito dentro el
condón y lo dejo a un lado.

“Wow. Tu realmente eres cuidadoso,” Rance comentó.

Bo tomo una de las toallas húmedas que siempre llevaba en su bolsa y


cuidadosamente se limpio el pene. “Realmente soy un poco obsesivo, pero no
quiero hacer a un amante lo que alguien me hizo a mí. Es un pequeño precio por
mi paz mental.”

47
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Cuando Bo dejo la toalla húmeda dentro de la bolsita con el condón, Rance gruño
y se giro sobre él. “Mi turno.”

“¿Como me quieres?” Bo preguntó.

“Justo como estas,” Rance se rio y empezó a frotarse lentamente.

Para ser honestos Bo quería tomar el pene de Rance con sus manos, pero en este
punto de su relación, él no estaba seguro que su toque fuera bienvenido. La
verdad era que el no quería sostener el pene de Rance por morbosa curiosidad, el
quería tocarlo porque era el mas sexy hombre que el había conocido.

Por la intensidad con que Rance se estaba frotando contra él, Bo podía imaginar
que hacer el amor con el capataz seria igual de intenso, A pesar de toda su
tranquila reserva, Rance lo sorprendía en cada ocasión.

Con una mano en la parte de atrás del cuello de Rance, el jalo al sexy hijo de puta
a un profundo beso, jodiendolo con su lengua.

Un gruñido que siguió al estremecimiento del cuerpo de Rance señalo el orgasmo.


“Oh, joder.”

Bo le dio la bienvenida a la calida semilla disparada entre sus cuerpos, pasando su


mano entre ellos recogiendo tanto de la esencia de Range como pudo. Llevando
sus dedos a sus labios, Bo vio fijamente a su pareja a los ojos y lentamente lamió
el blanco y pegajoso semen.

Rance gimió y se inclino para otro beso, barriendo con su lengua la boca de Bo,
probando su propio sabor.

“Mmmm,” Bo musito. “Tu sabes bien.”

Rance saco otra toallita húmeda de la bolsa de Bo. Después de rápidamente


limpiar, el colapso en el pecho de Bo. “Tu me agotaste.”

“Y eso que solo teníamos un condón. Imagina lo que podremos hacer con una
caja entera a nuestra disposición.”

****

Durante las primeras horas de la mañana, el remolque entero se movió cuando


un fuerte ruido despertó a Rance y Bo de su sueño.

“¿Que diablos?” Bo se puso de pie.

48
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
El remolque fue golpeado una vez más, según Rance por una jodida tonelada de
‘Cero Tolerancia.’

Buscando su ropa Rance se movía en círculos. “Donde esta mi maldita ropa


interior.”

“Olvídalo. Tenemos que meter al hijo de perra aquí, antes de que se aleje de
nuevo, Bo le lanzo su ropa y empezó a subir por la parte de atrás del remolque.

Otro golpe casi tumba a Bo. “Que diablos estas haciendo?” Rance preguntó.

“Tratando de salir de aquí sin matarme.”Pensé que podía llegar a la caja de la


camioneta.”
“¿Y entonces que? Vas a agarrar a ‘Cero’ tu mismo?” Rance grito.

“Supongo, a menos que logres vestirte y ayudes.”

En ese momento Rance se dio cuenta que estaba completamente desnudo,


parado en el centro del remolque. “Mierda.”

El encontró sus jeans y rápidamente se los puso, esperando que estuviera lo


suficientemente oscuro para que Bo no pudiera verlo. “Entonces ¿Como vamos a
hacer esto?” pregunto, poniéndose su camiseta.

“Uhhh, ¿lo perseguimos por atrás con un par de bat de béisbol?”

Rance giro los ojos, incluso cuando pensó que el gesto iba a pasar inadvertido.
“¿Que te parece tratar primero con los lazos y dejar los bat para un plan de
respaldo?”

“Tu amas arruinar mi diversión. ¿Has olvidado lo que esa bestia me hizo?”

Rance hizo una pausa al acto de ponerse las botas y vio a Bo. “No. Nunca olvidare
lo que te sucedió. Lo veo bastante en mis sueños esta impreso permanentemente
en mi cerebro.”

Bo le sonrió. Los primeros rayos del sol deslizándose lentamente por el horizonte
le dieron a su amante un suave resplandor. “Tengo una caja de condones en el
rancho. Que dices si subes tu dulce culo aquí y me ayudas a pelear con ese
irascible toro.”
Rance asintió dándole a Bo su bolsa, y deslizo la suya en su hombro. “¿Que sobre
las bolsas de dormir?”

49
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
‘Cero’ golpeo el remolque con un gruñido. Rance comenzó a subir la pared
opuesta. “Que se jodan las bolsas. ¿Toma el perno de aquel lado mientras yo
libero este?”

Rance tomo el perno y espero a que Bo. “A la de tres. ¡Uno, dos, tres!”

Los pernos fueron sacados simultáneamente, permitiendo a la puerta trasera caer


a la tierra. Rance sonrió. “Ahora tomamos los lazos de la caja de la camioneta.”

“O los bates de béisbol que siempre tengo detrás del asiento,” Bo agrego.

Sacudiendo la cabeza, Rance salto del remolque y fue al frente una vez que tomo
los lazos. El iba a medio camino cuando oyó a Bo bajar lentamente al piso del
remolque. Mierda. “Uh, Bo”

“¿Que?” Bo hizo una pausa con el pie en la primer madera.

Rance señalo hacia ‘Cero Tolerancia’ en la base de la rampa con mirada asesina.
“Podrías apurarte.”

****

“Y entonces, Bo subió mas rápido que el hombre araña,” Rance se doblaba de risa
junto con los otros trabajadores.

Bo giro los ojos y veía a ‘Cero’ por las rendijas del remolque. “¿Es bastante malo
lo que hiciste a mí plantación? ¿Ahora haces que sea el blanco de bromas de mi
amante y mis amigos? Estoy muuuy decepcionado de ti.”

La cabeza de ‘Cero’ golpeaba la pared del pequeño remolque tan fuerte como
para astillarla, frente a la cara de Bo, captando la atención de los otros vaqueros.
Mientras los trabajadores llevaban el remolque al corral de ‘Cero’ el animal
estaba destrozando cada cosa a su vista. pedazos de las bolsas de dormir de Bo y
Rance volaban por el aire como confeti.

Jim y Buddy subieron a los lados del remolque y liberaron los pernos. Cuando la
rampa bajo, ‘Cero’ estaba como una tormenta atacando y bufando. Bo nunca
había visto ni oído nada como eso.
La rampa se hundía bajo el tremendo peso del toro cuando entró en el corral. Bo
fue el primero que vio lo que colgaba del toro.

“Esos deben de ser tuyos,” le grito a Rance.

Con la cara roja Rance vio al toro de una tonelada con sus bóxer colgados en uno
de sus cuernos.
50
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador

Otro raund de risas surgió superando al anterior. Bo sonrió satisfecho. Su trabajo


estaba hecho.

Llegando detrás de Rance, Bo murmuro en su oído mientras casualmente rozaba


con su mano el culo de su amante. “Yo no se tu, pero yo te puedo asegurar que
necesito una ducha.”
Rance lo vio sobre el hombro con preocupación en sus ojos. “No puedo. ¿Esta
noche? ¿Quizás nosotros podamos ir a algún lado?”

La expresión de inseguridad en la cara de Rance derritió su corazón. Pese a que la


estridente risa de los vaqueros continuaba, Bo se inclino y beso suavemente el
cuello de Rance. “Tienes una cita.”

Mientras caminaba hacia la barraca, Bo trato de calmar su respiración. “Yo voy a


quebrar ese muro, aunque sea lo ultimo que haga.”

Capitulo Seis

Bo tocó a la puerta de Rance a las siete en punto. El vestía su ropa elegante, que
no podía decirse que era muy elegante. Sin embargo él pensaba que se veía
presentable con sus jeans negros, una camisa de vestir blanca y un chaleco de piel
negra.

Rance abrió la puerta y Bo casi caí de rodillas.

“Maldición eres caliente.” No había manera que Bo pudiera competir con Rance
en apariencia. El hombre se veía bien, todo vestido de negro con una gran hebilla
de plata en su cinturón, que definitivamente llamaba la atención al gran bulto
detrás de su bragueta. Cicatrises o no, ese pene era algo para sentirse orgulloso.

Después de colocar su Stetson negro en su cabeza, Rance lo beso. “Te ves


malditamente bien.”

Bo se acerco más y abrazo a su amante. Ingle con ingle, Bo se deslizaba


lentamente. “¿Nosotros podríamos quedarnos?”

51
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Rance asintió. “Si, nosotros podríamos, pero quiero cortejarte un poco antes de
llevarte a la cama. Además, si la gente nos ve juntos, quizás se detengan algunos
de los rumores de que soy hetero.”

Riéndose, Bo beso a Rance de nuevo, esta vez su lengua probó el sabor de menta
de la pasta de dientes que obviamente uso Rance. “Cattle Valley es un pequeño
barrio comparado con la mayoría de las ciudades, pero ni por un segundo
pensaría que un hombre hetero se pudiera ocultar en la ciudad.”

“Erico inicio toda la maldita cosa.”

“¿Porque, él haría eso?” Bo preguntó.

“Hubo un momento en que yo le guste demasiado y el no podía entender porque


no podía entrar en mis pantalones. El se imagino que debería ser hetero.”

Bo beso la mandíbula de Rance. “El se lo perdió.”

“Si no salimos de aquí nuestra primer cita formal se arruinara.”

Antes de liberar al hombre de sus brazos, Bo presiono su cara en el cuello de


Rance e inhalo. Olía fantástico. Rance mezclado con algo suave y cítrico. “Tu
nunca habías usado colonia antes.”

“No mucho, atrae mosquitos,” Rance explico en un tono obvio.

Bo giro los ojos y guió a su cita hacia la puerta del frente. Cual romántico tenía en
sus manos.

Rance abrió la puerta del conductor y Bo subió, sentándose en el lugar del medio.
Una vez, que ambos se pusieron el cinturón de seguridad, Bo le dio otro beso a
Rance. “Eres adictivo.”

“Bueno. Me alegro de que te sientas de esa manera.” Rance pasó su brazo por el
respaldo del asiento y lo acerco.

“Entonces, ¿a donde vamos?” Bo preguntó.


“Bueno, pensé que podríamos disfrutar un buen filete en el bar el Grizzly. Quizás
incluso bailar una o dos piezas mientras estemos ahí.”

“Me parece bien. Yo solo he estado ahí una vez y solo tome unos tragos.”

La mano de Rance empezó a jugar con el cabello de Bo mientras subía la


montaña. “Entonces, ¿Cuando traerás a Joey a la ciudad?”

52
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
La pregunta sorprendió a Bo. “¿Porque? ¿Esperas con impaciencia reunirte con
él?”

“Claro. Quiero decir, yo nunca pensé que fuera posible tener un niño, pero desde
que hablaste acerca del niño. Yo estoy malditamente emocionado con la idea.”
Esa declaración hizo a Bo sentirse todo tierno y sentimental, algo que el
definitivamente ni podría divulgar al rudo vaquero a lado de él. “Estoy feliz que te
sientas de esa manera porque Jim, Lynda y Neil llegaran a la ciudad en su avión
privado el sábado. Yo ofrecí ir por el, pero ellos dijeron que querían ver a Lark y
Kade de cualquier manera. Ellos también fueron bastante amables, traerán todas
las cosas de bebe que ellos le compraron a Joey.”

Rance retiro su brazo del respaldo cuando ellos llegaron a la montaña. Bo podía
decir por la expresión en la cara de Rance que algo le preocupaba. “¿Algo esta
mal?” Bo preguntó.

“¿Huh? No, solo pensaba.”

“¿Acerca?”

“Nada en particular.” Rance apretó el muslo de Bo. “Es un poco de todo esto. Tu
necesitas ser paciente conmigo.”

Bo asintió. “Lo se, Lo intento.”

El dejo el tema, pero siguió preocupado. Ellos llegaron al albergue entraron y se


dirigieron al bar el Grizzly que parecía estar lleno. “¿Que diablos hace toda esta
gente aquí en una noche entre semana?” Rance preguntó.

Bo se encogió de hombros y encontró una mesa. Rance se sentó en la silla frente


a él, ordeno una jarra de cerveza y pidió ver el menú. Mientras Rance guardaba
silencio una vez más, Bo admiraba el alumbrado del techo del lugar. Era
espectacular. Su mesero, Payton, regreso con la cerveza y los menú. Sirviéndose
cerveza, Bo hojeo el menú. Aunque el Grizzly ofrecía algo diferente todas las
noches, el inmediatamente se decidió por el filete con papas. Dejando el menú a
un lado el vio el salón.

La música estaba bastante alta para una conversación, pero no lo bastante para
bailar. No era un problema. Rance no parecía inclinado por ninguna de las dos.

Bo realmente deseaba ver a Payton entre la multitud, dirigirse a su mesa y tomar


las ordenes. El quería comer rápido, y regresar lo más rápido posible a casa. Ser
paciente con Rance era una cosa, pero sentarse a lado de él con ese humor era
otra totalmente distinta.

53
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
“¿Están listos?” Payton preguntó.

“Si. Quiero el filete con papa asadas, zanahorias y una orden de espinacas, por
favor.”

Mientras Rance ordenaba, Bo lo veía cuidadosamente. Esa era la única manera de


probarle a un cuarto lleno de gente que el era realmente un hombre gay. ¿Y que
con el apasionado amante de la noche anterior? ¿Había regresado al mundo real,
y se había perdido el hechizo?

Payton se alejo llevando sus órdenes, y Bo decidió iniciar conversación con Rance.
Diablo, cualquier cosa mejor, que sentirse solo en una cita. Tratando de hablar
sobre la música, el se acerco a su amante. “¿Quieres bailar?”

Rance vio hacia la pequeña pista de baile, y negó con la cabeza. “Quizás, después.
La música es muy rápida para mi gusto.”

Bo asintió, apretando los dientes. “Necesitare ayuda la semana que viene para
cargar y descargar el heno.”

Rance asintió. “Ya lo dijiste, asigne a Steve para que te ayude.”

Bueno, no fue mucho para una conversación. El decidió tratar una vez más. “He
pensado entrar al Gym. Si estas interesado tienen descuentos para parejas.”

Rance negó con la cabeza. “Ya hago suficiente ejercicio en el trabajo. No veo el
punto de pagarle a alguien por lo que puedo hacer gratis en mi propia casa.”
Hecho. Bo no sabía que clase de gusano rastrero se había subido al culo de Rance,
pero el estaba seguro como el infierno que el no quería jugar ese juego. El diviso a
Asa Montgomery sentado a una mesa para el solo y se inclino hacia Rance. “Voy a
preguntarle a Asa si Lynda y Jim pueden usar su pista de aterrizaje.”

Rance reconoció lo que dijo Bo, pero no dijo nada.

Con un irritado gruñido el se puso de pie y camino por el laberinto de mesas.


“¿Señor. Montgomery?”

Asa levanto la vista de los papeles en la mesa. “¿Si?”

“Señor, ¿puedo hablar con usted de algo?”


Aunque el nunca se había encontrado con Asa, él había oído que era un hombre
solitario, que prefería estar en su gran mansión en la orilla de la ciudad. Cuando
Asa se unió al Gym, eso era algo fuera de su costumbre, y rápidamente levanto el
chismorreo en la ciudad.

54
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
“Claro,” Asa dijo, indicándole una silla.

Bo tomó el asiento ofrecido. “Nosotros nunca nos hemos visto, pero mi nombre
es Bo Lawson, y yo soy el agricultor en el rancho Back Breaker.”

Asa asintió. “Te he visto antes en O’Brien’s ¿Que puedo hacer por ti?”

“Bueno, señor, recientemente descubrí que tengo un hijo, un bebé su nombre es


Joey. La gente que me lo cuida, planea traérmelo desde Canadá este fin de
semana.”

“¿Si?” Asa pareció estimularlo, no dudaba que algo quería obtener Bo con esa
historia y una vez logrado alejarse de él.

“Ellos vienen en su jet privado, y me preguntaba si fuera posible que pudieran


aterrizar en su pista en lugar de llegar a Sheridan. Yo se que es mucho pedir, y
normalmente no tendría las bolas para hacer tal cosa, solo imagine que no me
haría daño preguntar.” Entonces el pensó que tendría que haber hablado con Jim
preguntarle que le parecía.

“Claro. Llama a mi oficina y ellos te darán las coordenadas para que aterricen en
mi espacio.”

“¿Solo así?” Bo estaba impactado. El pensó que debería hacer mas besa-culo
antes de que Asa aceptara tal cosa.

“¿Porque no? El ayuntamiento de la ciudad me permitió construir la maldita cosa,


porque viajo mucho. Lo menos que puedo hacer es ponerla a disposición de los
residentes de la ciudad, si la necesitan.”

“Esta bien, gracias, muchas gracias.” Bo se acerco a la mesa y extendió la mano.

Asa la acepto y estrecho su mano con una sonrisa. ¿Porque parece que me tienes
miedo?”

Sorprendido por la pregunta Bo parpadeo varias veces. “Bueno, porque usted es


Asa Montgomery, señor. Usted es un destacado inversionista.”

Asa se rió. “Yo solo soy un tipo de una pequeña ciudad de Kansas que fue
afortunado de estar en el lugar adecuado en el momento adecuado. Y mi nombre
es Asa.”

Bo se puso de pie. “Gracias, de nuevo.”

Eres bienvenido, felicitaciones por tu hijo. Cuida de él.”


55
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador

“Lo haré.” Sintiéndose bien, Bo camino a reunirse con Rance. “Eso salio bien.”

“Que bueno”

El apenas pudo sentarse cuando Payton llegaba con la comida. “Mmm, huele
bien.”
“Gracias,” Rance dijo cuando Payton coloco sus costillas asadas frente a él.

Bo empezó a comer, pensando en que vería a Joey en unos días. Si Rance quería
seguir de mal humor, bien por él. Bo no iba a permitir que su amante le
deprimiera. El comió con gusto, haciendo una nota mental de traer a Lynda, Jim y
Neil cuando estuvieran en la ciudad.

“Como esta tu comida?” le pregunto Rance.

“Buena, ¿Y la tuya?”

“La mía esta buena.”

Para cuando ambos terminaron, Bo estaba al fin de su paciencia. Era más que
obvio que Rance no estaba de humor para bailar. Bo saco su billetera, y dejo un
par de billetes en la mesa. “¿Estas listo para irte?”

“Si.” Rance dejo el dinero de su comida en la mesa y se puso de pie.

Evidentemente Bo tenía razón con respecto al baile. El no podía imaginar que


había sucedido en su camino a la montaña. Si el presionaba a Rance por
respuestas, eso le podía explotar en la cara?

El espero hasta que bajaron el camino de la montaña, antes de manifestar su


frustración. Sentado junto a la ventana, se giro hacia Rance. “No estoy seguro que
sucedió, pero tengo la sensación de que hay más de lo que revelas.”

Bo notó que Rance tensaba las manos en el volante, antes de contestar. “Yo ya
dije todo…”

“Si, lo se, yo tengo que ser paciente,” Bo interrumpió a Rance evitando que dijera
lo mismo otra vez.

“Bien, si ya lo sabes entonces porque no lo dejas ir?”

“Porque yo no creo que esto sea por cualquier cosa que tu hagas con tu pene, por
eso.”El sabia que había subido el tono de la conversación, pero maldición, el
estaba frustrado.
56
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador

“Esto no es solo por mi pene. Es todo. Tu, yo, Joey. Todo esto es mucho para un
día. Si tú no puedes darme algo de espacio mientras yo pienso acerca de todo
esto. Nosotros no tendremos mucha oportunidad de tener un futuro.”

Bo se enfureció. El estaba preparado para trabajar con los problemas de su


cuerpo con Rance, pero cuando metió a Joey en la mezcla, no había posibilidad.
Incluso aunque Rance no lo hubiera dicho, evidentemente la crianza de un niño
no era algo que le interesara. Bien, jodete, él mentalmente le dijo a Rance.

En lugar de terminar todo ahí. Bo decidió que ellos ambos necesitaban unos días
para que las cosas se enfriaran. “Te diré que tu puedes ir a cavilar, pensar o como
sea que llames, a lo que haces en tu sala. Quizás finalmente tomes una decisión,
mientras tanto quizás sea lo mejor que no nos veamos fuera del trabajo.”

Rance se rio de una amarga manera. “Seguro que cambias rápido cuando las
cosas no van a tu manera.” Rance entró al Back Breaker y estacionó la camioneta.

Bo trato de calmarse antes de decir algo de lo que pudiera arrepentirse.


“¿Rápido? esto es interesante. Yo he estado enamorado de ti por un año y tú lo
sabes. Yo he sido paciente. Yo no puedo detener mi vida indefinidamente
mientras tu consideras si valgo o no la pena.”

Cuando Rance no dijo nada, Bo gruño y se salio. Caminando hacia la barraca, el se


sentía como si hubiera sido golpeado. Jodete. El estaba cansado de sentirse como
mierda a causa de Rance.

****

Rance golpeo la almohada cambiando de posición una vez más. Cuando era más
que obvio que el no iba a poder dormir, saco las piernas de la cama, se puso de
pie y se dirigió a la cocina y tomo una cerveza.

El sabía que él había presionado las cosas. El debió ser honesto y decirle a Bo lo
que pasaba por su mente. Llevando la cerveza a la cama el prendió la televisión.

Un comercial de turismo en Montana atrapo su atención. Mostraban a un padre y


un hijo pescando y hablaban de la diversión en familia. “Maldición, esto es una
conspiración,” él murmuro, apagando la televisión.

Rance sabía que su extraño humor le había dado ideas equivocadas a Bo, ¿pero
que debería hacer? Si el confesaba que lo que el realmente estaba tratando de
decidir no era si Bo y el bebe podían mudarse con él. Era el pensar que si los dos
Vivian juntos. Significaba que Bo lo vería desnudo.

57
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
El termino su cerveza y dejo la vacía botella en la mesa. Deslizándose bajo las
sabanas el pensó en la tortura que había vivido con Bo el año anterior. ¿Cuantas
veces el había deseado a Bo en su cama? muchas más de las que podía contar.

Conforme los meses iban pasando el sentía que sus sentimientos hacia el
bohemio agricultor crecían en profundidad, el había tratado de mantener
distancia. Después de la noche de pasión, era obvio que Bo aceptaba la
deformidad física de Rance, ¿pero el estaba listo para exponerse?

En un raro movimiento Rance deslizo su mano hacia su ingle. El había hecho


hábito dormir con el pantalón del pijama después del disparo, para evitar incluso
a si mismo ver su arruinado pene.

El paso su mano sobre su carne llena de bultos y cicatrises el comenzó a


endurecerse. Rance trato de imaginar que podría sentir Bo si haría lo mismo.
Podría Bo saber acariciar las cicatrises y llevar a Rance a otro nivel de excitación.
¿Los bordos en su tejido eran más sensibles?

Rance sacudió la cabeza soltó el pene. ¿Que importa? El probablemente jodio


todo entre ellos de cualquier manera, retirando las sabanas, Rance se puso de
pie. ¿Quizás si le explicaba a Bo porque quería mas tiempo?
El casi había llegado a la puerta del frente cuando se dio cuenta de la hora. Quizás
seria mejor que esperara hasta el desayuno. Una cosa era cierta el quería a Bo y
Joy en su vida. ¿Que diferencia harían unas cuantas horas?

****

Con su nueva resolución, Rance camino hacia la barraca, esperando hablar con Bo
antes de que empezara el día. Un carro a lado de su camioneta llamo su atención.

“Hey, ¿Que haces?” Rance le pregunto a Lark.

Lark tenía una gorra de béisbol y estaba recargado contra el carro. “Acabo de
regresar de dejar a Bo al aeropuerto. El decidió volar a Canadá para traer a Joey
en lugar de esperar a que mis padres lo trajeran aquí. Espero que no te moleste
pero me dijo que lo cubriera mientras regresaba.”

El corazón de Rance se partió. “¿Como pudo irse?”

Lark se encogió de hombros. “Es Bo. Quien sabe.” camino hacia Rance. “El se veía
muy deprimido. ¿Tú no sabes por que podría ser?

Sin contestarle, Rance se dirigió a su oficina en el establo. El había oído mucho de


Sunrise Gardens el no se sentía cómodo con Bo viajando de improvisó. ¿Quizás el
debería tomar un avión y seguirlo?
58
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador

Saliendo de la oficina el casi corrió con Shep.


“Ya era hora de que estuvieras aquí. Se nos esta haciendo tarde.”

“¿Huh?” Rance preguntó.

“Nosotros tenemos una reunión en la ciudad para el comité de los días de Cattle
Valley,” Shep le recordó.

Mierda, como pudo olvidar eso se suponía que el presentaría la elección de los
toros para el rodeo. “Esta bien, déjame tomar los archivos.”

“Te veo en la camioneta.”

Cuando Rance llego a la oficina, tomo las carpetas del estante, obligándose a
tener su cabeza como capataz, el no podía presentarse ante el comité como un
vaquero enfermo de amor. Con la información en la mano, Rance corrió hacia la
camioneta de Shep. “Siento, todo esto.”

Shep se dirigió a la ciudad. “¿Necesito preguntarte como te fue en tu cita?”

“Probablemente no,” Rance murmuro.

“¿Tiene algo que ver para que pierda a mi maldito buen agricultor?”

Los archivos cayeron al piso de la camioneta cuando su corazón brinco. “¿Que


quieres decir con eso? pensé que Bo solo había ido a Canadá por Joey.”

Shep pareció estudiar un momento a Rance antes de contestar. “Todo lo que se


es que dejo un mensaje en mi celular, diciendo que se iba. El dijo que esperaba
tener trabajo cuando regresara, pero que el entendería si necesitaba contratar a
su reemplazo de tiempo completo antes de que regresara.”
Rance apoyo la cabeza contra el respaldo. “Yo realmente jodi las cosas”

“¿Quieres hablar de eso?”

“No estoy seguro de haber hecho nada bien. Nosotros...um…estuvimos muy cerca
la noche fuera.”

“Si, imagine eso cuando vi las dos destrozada bolsas de dormir unidas con los
cierres. Entonces, ¿Que estuvo mal?”

“Nada,” Rance rápidamente lo dijo, pero entre más lo pensaba más se deprimía.
“Todo.”

59
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
“Bueno, se que no lo rechazaste. Entonces fue Bo el que lo hizo.”

“No, él no me rechazo. El estuvo maravilloso cuando le dije lo que me sucedió.


Solo que yo no estaba listo para exponerme ante él. Le pedí que fuera paciente y
aceptó.”

“Entonces, ¿cual es el problema?”

“Yo. Empecé a pensar y le pregunte acerca de Joey de cuando se mudara, pero


me acobarde. Nosotros ambos sabemos que tiendo a encerrarme y quedarme
callado cuando eso sucede. Supongo que Bo lo tomó mal. Porque al fin de la cita,
él estaba enojado y con razón”

Shep llego al frente del ayuntamiento. “¿Entonces que vas a hacer?”

“Esperar que regrese y rogarle que me perdone.” Rance dijo.

“Claro, si tu quieres dejar el destino de tu relación en manos de alguien más.


Como plan alternativo ¿Porque no vas por él?”

Antes de que Rance pudiera pensar sobre eso, Nate estaba fuera del edificio.
“¿Ustedes, Vienen?” Nate grito.

Rance se inclino y tomo los caídos archivos. “Tengo que pensarlo.”

Shep se unió a Rance en el primer escalón. “No lo pienses mucho. Bo tiene mas
que su propio corazón de que preocuparse ahora. Imagino que si se preocupara
solo de sus sentimientos, él no hubiera corrido a ir por Joey en este momento.”

Rance sabía que Shep tenía razón, solo que no era el momento de pensar en eso.
El siguió a su jefe al interior del cuarto de reunión y tomo asiento. Esperando que
Carol les hiciera notar su tardanza, Rance se sorprendió cuando no lo hizo.

La mujer tenía sus propios problemas que tratar. Durante los primeros diez
minutos, ella parecía enfocada más en su celular que en la reunión. Rance no
sabía que decía el mensaje de texto, solo que cada vez que lo veía parecía mas
enojada. Después de horas de discutir los eventos del rodeo, ellos tomaron un
descanso. Rance noto la manera en que Nate dirigía a Carol tranquilamente al
cuarto de junto.

¿Que piensas que sucede?” Shep pregunto a lado de él.

“Ni idea, pero lo que sea, estoy seguro que Nate puede manejarlo.”

60
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Shep asintió. “Nunca había visto enojada a Carol antes, pienso que es sobre
alguien. Ella casi se veía triste, puede ser que ella realmente tiene un corazón
detrás de esas lindas tetas.”

Impactado Rance se quedo con la boca abierta. “Desde cuando tu notas las tetas
femeninas?”

“Desde que nací con ojos. Solo porque no me guste jugar con ellas, no significa
que no las aprecie.”

Rance no podía decir lo mismo, solo se encogió de hombros. “Yo debería tratar
mis propios problemas y dejar que Nate trate con lo de Carol.”

“Y estoy seguro que tratara con ellos en verdad Nate fashion,” Shep se rió
Capítulo Siete

Bo estaba teniendo un fantástico sueño acerca de Rance cuando una mano en su


entrepierna lo despertó. El abrió los ojos y sonrió. “¿Que diablos haces?”

“Bueno. Yo vine a decirte que la cena esta lista, pero al parecer tu tenias otras
necesidades más urgentes,” Jim se rio, apretando la erección de Bo.

Por muy bien que sintiera la presión, Bo no quería continuar. Si las cosas
funcionaran o no con Rance, era la mano de Rance la que quería frente a sus
jeans no la de Jim.

Bo se alejo de la mano de Jim. “Lo siento, pero eres el tipo equivocado para ese
trabajo.”
Jim suspiro y señalo a los pies de la hamaca. “Es una vergüenza desperdiciar esa
perfectamente buena erección por un hombre que esta muy lejos.”

“Si, Bueno mi pene esta de acuerdo contigo, pero el resto de mi esta en


desacuerdo.”

Bo se bajo de la hamaca y beso en la mejilla a Jim. “Esto no es un reflejo de tus


habilidades como amante, créeme.”

“Ahora, solo tratas de hacerme sentir mejor,” Jim hizo un puchero.

Riéndose, Bo envolvió su brazo alrededor de su viejo amigo cuando ellos se


dirigieron adentro. “Quizás.”

Antes de que pudiera sentarse en la mesa, El teléfono en la casa sonó. “¿Quieren


que conteste?”

61
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
“Si puedes,” Jim contestó, dejando su plato de carne al horno y vegetales en la
mesa.

Bo entro a la sala y levanto el teléfono. “¿Hola?”

“Hey, justo el tipo que estaba buscando,” Randy, el guardia de la puerta del
frente, dijo.

Sonriendo, Bo dijo. “Les dije cuando llegue que este era un viaje de negocios, no
de placer.”

“Divertido. Yo no estoy detrás de tu pene, bueno, si lo estoy, pero no te llamó por


eso. Llamo, porque aquí hay un tipo que dice que necesita hablar contigo.”
Bo se quedo con la boca abierta, La primera persona que paso por su mente fue
el padre biológico de Joey que repentinamente se había presentado. “¿Quien
es?”

“Un vaquero caliente, todo vestido de negro, dice que se llama Rance.”

El corazón de Bo salto de alegría. “Esta bien voy por él.”

Colgó el teléfono, y corrió a la cocina. “Ese era Randy al teléfono. Rance esta en la
puerta.”

Jim silbo. “El debe ser obviamente el del sueño de antes.”

Girando los ojos. Bo beso la cima de la cabeza de Jim. “No me esperen a cenar.
Tengo muchas cosas que tratar con Rance antes e presentarle a Joey.”

Lynda sonrió y beso su mejilla. “Buena suerte, cariño.”

“Gracias.”

Bo se dirigió corriendo al carrito de Golf, mientras pasaba sus dedos entre su


cabello. Habían pasado cuatro días desde la última vez que vio a Rance. ¿Quizás el
debería detenerse y rasurarse?

Rápidamente rechazo la idea, subió al carrito de golf y salio. El esperaba que, el


que Rance se mostrara fuera buena señal. Seguramente si lo hubieran despedido,
Shep le hubiera llamado.

Cuando el se acerco a la puerta, al ver al guapo vaquero su pene se endureció de


nuevo, Maldición, eso es solo con ver al hombre.

62
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
“Hey,” saludo, deteniéndose. El no se atrevió a hacer ningún movimiento hacia
Rance.

“Lo siento, por presentarme así, pero necesito hablar contigo.” Rance señalo
hacia la pequeña bolsa de viaje a sus pies. “¿Te molesta?”

“No para nada. Sube.”

Tan pronto como Rance se sentó, Bo se dirigió hacia su lugar favorito en el lago.
Como Rance no decía nada, Bo decidió iniciar la conversación. “Entonces, ¿que te
trajo a Canadá?”

“No te hagas el tonto . Tu sabes a que vine.”


Bo detuvo el carro y apago la batería. “Yo realmente pienso que no soy el único
que se hace el tonto aquí, ¿No lo crees?”

Rance se quito el sombrero y lo dejo en el asiento trasero. “Si. yo se


perfectamente bien quien es el idiota. Pero en mi propia defensa, pienso que mi
mal humor de la otra noche , no significaba lo que piensas.”

“¿Que diablos se supone que pensara? Tú me pediste salir, y entonces


prácticamente me ignoraste toda la noche. Yo hice mas conversación con el
maldito mesero que contigo.”

“Lo se, pero yo tenia un montón de cosas en mi cabeza.” Antes de que Bo pudiera
decir algo más, Rance levanto la mano. “Y si, yo debería discutirlo contigo, pero
antes de que pudiera hacerlo tu tuviste la audacia de enojarte y volar hasta aquí.”

Bo negó con la cabeza. “Eso no fue por lo que yo me enoje, quizás estaba dolido
pero no enojado.”

Ahora que Bo tenía la oportunidad de llevar la conversación con Rance a la cita él


no lo iba a dejar pasar. “Entiendo que necesitas tiempo, pero me lastima que te
cierres completamente.”

“Lo se y lo supe esa noche. Pensé en ser capaz de hablar contigo a la siguiente
mañana, pero ya te habías ido.”

Bo se encogió de hombros. “Sentí la necesidad de estar alrededor de la gente que


me ama.”

Rance puso su mano en el muslo de Bo. “Podrías haberte quedado en el rancho y


lo hubieras recibido si solo hubieras creído en mi.”

63
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Cerrando sus ojos Bo se inclino sobre Rance y rozo los labios de su amante con los
suyos. “¿Me estas diciendo que me amas?”

Jalando a Bo más cerca, Rance le dio un profundo beso. Bo se derritió ante la


ternura de los dedos de Rance en su cabello.

Rompiendo el beso Rance vio fijamente a Bo a los ojos. “Te he amado desde hace
mucho tiempo. Yo solo estoy muy asustado de admitirlo.”

Bo puso su mano sobre el bulto en los jeans de Rance. “¿Y esto?”

“Eso es amor por ti, demasiado.”

Bo sonrió. “Sabes que no estoy hablando de eso.”

“Si, lo se.”

“¿Entonces?” Bo insistió.

“Esta bien. Así están las cosas. Te quiero a ti y a Joey de regreso en el rancho para
que vivan conmigo. El problema es, que no estoy seguro de estar listo para
exponerme ante ti.” Rance tomo una profunda respiración. “Eso es lo que iba a
decir.”

Finalmente tenía sentido para Bo que Rance actuara como un idiota en la cita. Su
amante había tenido cosas muy difíciles que pensar. Bo quería pasar el resto de
su vida con Rance, pero…

“Hasta que no confíes en mi lo bastante para mostrarte en cuerpo y alma yo no


puedo vivir contigo.”

“Esto no es cuestión de confianza,” Rance trato de argumentar.

“Si, si lo es. Tu pene es feo, y que. Si tu piensas que eso es lo que mas me
importa, entonces tu realmente no me conoces.”

“¿En serio? ¿Con cuantos hombres diferentes has jodido en tu vida?” Rance dijo.

Bo se sintió como si lo hubieran golpeado, Sabiendo que él le había dicho a Rance


todo sobre su pasado, él no podía creer que el hombre tuviera la audacia de
preguntar eso. “Jodete, hijo de perra...”

Rance levanto la mano, deteniendo el reproche de Bo. “Todo lo que quiero decir,
es que estas acostumbrado a tener sexo de cierta manera. Una manera que no
estoy seguro de poder darte.”
64
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador

“Hiciste una buena imitación la otra noche.”

Rance negó con la cabeza. “Yo puedo lograr una erección, incluso correrme,
gracias a Dios, pero yo no he jodido a nadie desde el disparo. Yo…”

Bo detuvo a Rance con un beso. ¿Porque el tipo insiste en presionarse más? Bo


termino el beso y bajo del carrito de golf Caminó a la orilla del lago, se cruzo de
brazos y se giro hacia Rance.

“¿Que le dices a alguien que es tirado por un caballo?”

“¿Huh? le digo que vuelva a subirse, pero eso no tiene que ver con esto, yo no me
caí del maldito caballo, a mi me dispararon.”

“Es la misma cosa, si te tomas un momento para pensarlo,” Bo trato de hacerlo


entender.

La expresión en la cara de Rance le decía a Bo, que él no creía eso. “Mira, me


gusta joder, incluso más que ser jodido, pero ese no es el punto. Que tú puedas o
no puedas no me importa. Pienso que estas haciendo una montaña de un grano
de arena. Solo con una jodida, ¡desnúdate!”
Rance abrió ampliamente los ojos. “¿Que?”

“Ya lo has oído, desnúdate. Da el salto. Deja de tratar de hablar de salirte de esta
relación.”

“No trato de hacer eso,” Rance argumentó.

“Maldición, estoy seguro que lo haces. Y yo no puedo ver como pones trabas
entre nosotros. Entonces desnúdate. Si solo confías en mí. Solo hazlo.”

Rance tenso las mandíbulas, salio del carrito y se dirigió hacia Bo. “¿Tu quieres ver
lo que yo mismo incluso no puedo ver? Bien, solo no digas que no te lo advertí.”

Rance se desabrocho sus jeans, y bajo la mezclilla junto con su ropa interior hasta
sus tobillos. Con una expresión que Bo no pudo leer, cruzo los brazos.

A pesar de que el pidió eso, Bo no estaba mentalmente preparado para ver el


pene de Rance. El rápidamente controlo su shock. Y se arrodillo frente a su
amante, tomo el flácido eje en sus manos, viendo los tensos músculos de Rance.

El sentía que le debía a Rance inspeccionar completamente el dañado miembro.


La cicatriz estaba insertada en medio de toda la longitud, dando al pene la
apariencia de que fue unido quirúrgicamente.
65
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador

Inclinándose, el comenzó a besar las cicatrises mas prominentes. Cuando lo hizo,


el pene en su mano comenzó a enlongarse. Bo sonrió y continúo calmando la
bestia salvaje frente a él.
Duro, era fácil ver porque Rance estaba preocupado por sus habilidades para
joder. La cabeza y cerca de seis centímetros del eje destacaban en un inusual
ángulo. Viendo a Rance a los ojos, Bo sonrió. El sabía que el no podía mentirle a
Rance, entonces, decidió decirle a su pareja exactamente lo que pensaba.

“Bueno, tienes razón, esta jodidamente feo, pero y ¿eso que?”

Rance continuó de pie sin decir ni una palabra.

“Eso no cambia mis sentimientos hacia ti, ni un poco.”

El jalo a Rance a sus rodillas. Con los ojos de su amante en el mismo nivel que los
suyos, Bo lo beso, esperando como el infierno que pasara cualquier examen que
Rance necesitara para probar sus sentimientos.

El barrido de la lengua de Rance en sus labios le dio la respuesta que el buscaba.


Poniendo todo el amor que sentía en ese beso, Bo abrió y gimió. El problema de
la imagen del cuerpo de Rance podría llevar tiempo. Pero por ahora su amante
confiaba en él. El tomaría ese una vez perfecto pene algún día.

****

Rance presiono su erección contra Bo. “Tómame en algún lugar y hazme el amor.”

Liberándolo, Bo sonrió. “Yo puedo hacer eso.”

Cuando Rance vio a Bo rápidamente quitarse su ropa le preguntó. “¿Que estas


haciendo?”
Sacando un condón de su cartera, Bo le quitaba la camisa a Rance. “¿Pensé que
dijiste que hiciéramos el amor?”

“¿Aquí?”

Bo se rió. “Este es un lugar perfecto. Lo descubrirás cuando te presente a los


otros, Sunrise Garden es especial.”

Después de asegurarse de que no había nadie alrededor. Rance se quito las botas,
jeans y ropa interior. El nunca había tenido sexo en un lugar semi-publico, y la
idea secretamente le excitaba. El se estiro en el suave césped y espero a que Bo
se le uniera.

66
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
La erección oscilaba más que nunca probando que Bo no estaba molesto o
asustado. Abriendo sus piernas, invitándolo, Rance abrió los brazos y le dio la
bienvenida al fuerte cuerpo de su amante cuando lo cubrió. Rance no le tuvo que
recordar a Bo que el tenía años sin sexo. Su amante puso sus dedos frente a la
boca de Rance. Abriéndola Rance baño perfectamente en saliva los largos y
hermosos dedos en su boca.

Bo levanto una ceja. “Maldición si sigues así yo voy a explotar antes incluso de de
entrar.”

Riéndose, Rance libero los dedos de Bo. “No puedes hacer eso.”

Bo lo beso mientras sus dedos empezaban a explorar el agujero de Rance. Joder.


Rance había olvidado lo bueno que se sentía ser estirado. Su cuerpo se abrió para
la penetración, mientras el suavemente mordía el labio inferior de su amante.
Agregando otro dedo, Bo tenía una expresión de preocupación en su rostro. “Tu
probablemente no debas hacer eso. Tu puedes dejarte llevar y causar que
sangre.”

Pasando sus dedos por el sedoso cabello de Bo, Rance negó con la cabeza. “Yo no
voy a dejar de vivir mi vida asustado por tocarte y hacerte el amor. Yo no haré
intencionalmente nada estúpido, pero tampoco voy a vigilar cada acción entre
nosotros.”

“¿Tienes una idea de lo que seria para mi si contrajeras el maldito virus?” Bo


preguntó.

“Nosotros necesitamos dejar las cosas claras entre nosotros, antes de ir mas lejos.
Yo estoy eligiendo hacer el amor contigo, Se todo lo que puede suceder. Si por
alguna razón, yo contraigo el HIV, yo no quiero que te sientas culpable. Yo soy
mayor. Y se los riesgos involucrados, y puedo aceptarlos para que estés
conmigo.”

Bo negó con la cabeza. “No deberías tener que hacerlo.”

“Pero lo hago y lo quiero. Entonces abre el condón y ¡jodeme!”

Bo se apoyo en sus talones entre las piernas de Rance. Abriendo el paquete de


aluminio, deslizo el condón en su erección. Rance sabía que su amante seguía
preocupado, pero Rance también sabía que el tenia toda una vida para
convencerlo que el aceptaba las consecuencias.

Posicionando la corona en la entrada de Rance empezó a empujar la dura


erección hasta que la cabeza penetro el agujero de Rance. La vacilación en Bo, le
dijo a Rance que su amante todavía estaba demasiado preocupado.
67
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador

“Después del disparo pensé que mi vida había terminado. Vivía cada día como si
ya estuviera muerto. Tú cambiaste eso para mí. Un solo año contigo y con Joey
significa más que toda una vida de soledad.”

Con un empuje de sus caderas, Bo se enterró dentro del cuerpo de Rance. El


ardor le quito la respiración, espero pacientemente a que su cuerpo se
acostumbrara al pene de Bo.

Cerrando los ojos, Rance gimió cuando el dolor se convirtió en puro placer. “Dios,
te siente tan bueno.”
“Ni la mitad de bueno como tu,” Bo jadeo, saliéndose lentamente antes de volver
a entrar.

Ganchando sus brazos bajo sus rodillas, Rance se abrió a si mismo más. Sin
lubricante, el no dudaba que estaría tan lastimado como el infierno una vez que
Bo terminara con él, pero eso lo tenia sin cuidado. Hacer verdaderamente el amor
por primera vez en su azarosa vida, bien valía la pena algo de incomodidad.

Viendo fijamente los ojos oscuros de Bo, él se preguntaba como el pudo incluso
haber sido engañado por Oren. Nunca su ex-novio lo había visto de la manera en
que lo hacia Bo.

Bo lo sorprendió cuando tomo el pene de Rance en su puño.

“Tu no tienes que hacerlo,” Rance rápidamente dijo.

“Relájate, yo quiero hacerlo,” Bo moviendo sus caderas con el ritmo de su mano.

¿Cuanto tiempo había pasado desde que el había sido tocado? Diablos, de hecho,
¿cuanto tiempo había pasado incluso desde que tuviera el valor de darse placer a
si mismo?

“Sigue conmigo,” Bo jadeo, aumentando la velocidad.

Rance sintió el pulgar de Bo presionando contra la cicatriz bajo la cabeza de su


pene “¡Joder!” él grito cuando su eje hizo erupción, lanzando el pegajoso y blanco
semen, pintando no solo su pecho, sino también el de Bo.
Levantando su cara hacia el sol, Bo grito cuando alcanzo el clímax. Rance estaba
asombrado del poder que su amante exhibía en el músculo que bombeaba y los
tendones que mostraba. Maldición, soy un afortunado hijo de perra se dijo a si
mismo, Bo comenzó a lamer el camino en el abdomen de Rance, probando la
semilla derramada. Agarrando el cabello de Bo en un puño, la boca de Rance se
hacia agua al ver a Bo disfrutar ruidosamente el sabor de su semen. “Te deseo…”

68
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Los labios de Bo cubrieron los labios de Rance. “Shhh, compartiendo con el su
propia semilla.”

Rance parpadeo, no estaba acostumbrado a que alguien fuera capaz de leerlo tan
claramente. Si, el deseaba lamer cada centímetro de ese hombre que estaba
sobre él incluyendo la esencia que pondría en riesgo su vida. Rance se
preguntaba si hacer el amor con un hombre HIV positivo lo haría que se sintiera
que se estaba perdiendo de algo.

El sexo era fantástico, pero era más, antes y después de jugar era estar uno a lado
del otro. ¿Que el pudiera tener el pene desnudo de Bo en su boca, ese placer no
tendría comparación? Rance sabía que eso nunca sucedería. Con Bo, ellos nunca
tendrían sexo de ningún tipo sin protección, incluyendo mamada o rimming*. El
había oído acerca de usar un papel plástico, pero eso no seria lo mismo que ser
capaz de probar al hombre que amaba.

“¿Que esta mal?” Bo preguntó, besando el cuerpo de Rance.

*Rimming, bordear, es juego sexual de lamer alrededor del ano.


“Nada,” Rance contesto, lamiendo los labios de Bo.

“Mentiroso.”

Rance sabía que el necesitaba ser honesto con Bo. “Solo me daba cuenta de todas
las implicaciones de hacer el amor con un hombre HIV.”

El cuerpo de Bo se tenso. “¿Puede el peligro ser demasiado para ti?”

Rance negó con la cabeza. “No. Esto parece unilateral. Hay muchas cosas que me
gustaría hacer contigo, pero se que no puedo. Supongo que soy como un niño en
una tienda de dulces. Que quiere todo pero se le dijo que solo puede tomar cierta
cantidad.”
Bo se separo de Rance y se quito el condón, lo anudo y lo dejo en la bolsa de sus
shorts, se puso de pie y se dirigió al carrito de Golf y saco del centro del tablero
unas toallitas húmedas.

Rance vio a su amante, tratando de descifrar su humor. “No quise herir tus
sentimientos o que te enojaras”

Bo regreso a su posición a lado de Rance. “No hiciste ninguna de las dos, Yo solo
estoy preocupado.”

“¿Por qué?” Rance pregunto.

69
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
“¿Por no ser suficiente? ¿Por no ser capaz de darte lo suficiente?”

El corazón de Rance se derritió. El estaba atrapado en lo que no podía hacer con


Bo, que el olvido lo más importante que recibiría.

Rance jalo a Bo a sus brazos y lo beso. “Te amo, voy a empezar una familia
contigo y con Joey eso es mas importante para mi que cualquier cosa. Por favor
no dejes que mis quejas te hagan creer algo diferente. Esta es una nueva manera
de hacer el amor para mí, eso es todo. Yo deseo darte a ti el mismo placer que tu
me das.”

Bo sonrió. “No te preocupes por eso.”

Parecía que Bo quería decir algo pero se detuvo, cerró la boca y negó con la
cabeza.

“¿Que?”
Después de un largo momento, Bo enterró su cara contra el cuello de Rance. “El
día que descubrí que era positivo, fue el peor día de mi vida.”

“Eso es entendible,” Rance interrumpió.

Bo asintió. “Supongo, pero no era el miedo a tener SIDA. Lo que me asustaba. Yo


estaba dañado. ¿Que hombre decente podría querer a alguien como yo, como
pareja? Entonces, jodi, y jodi y jodi aun más. Siempre de una manera segura, pero
nunca me permitía a mi mismo ser atrapado.”

“Oh, bebé,” Rance dijo calmadamente, besando la cima de la cabeza de Bo.

“Cuando Lark y Kade llegaron de visita el año pasado, yo los vi juntos y sabía que
yo quería lo que ellos tenían. Yo sabía que era más que un sueño imposible, pero
decidí que el sexo no era suficiente para mi, ya no más.”

Bo vio fijamente a los ojos a Rance. “Tu eres la primera persona que incluso he
amado verdaderamente.”

Rance sintió necesidad de abrir su alma al hombre en sus brazos. Por mucho
tiempo el se había permitido vivir la vida como una victima, siempre asustado de
lo que pudieran pensar de él. “Yo pienso que nosotros tenemos más en común de
lo que nos damos cuenta. Para ti fue el contraer HIV, para mi fue el disparo.
Ambos pensamos que estábamos demasiado dañados para ser amados.”

“Y ahora nos tenemos el uno al otro.”


“Y a Joey,” Rance agregó. “Y hablando de él, ¿cuando voy a tener la oportunidad
de conocer a la mas reciente incorporación a nuestra familia?”
70
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador

La cara entera de Bo se ilumino. “Ahora mismo.”

Ambos tomaron sus ropas al mismo tiempo y empezaron a vestirse. Bo estaba


casi temblando de la emoción mientras se ponía su camisa.

“Espera a verlo, es absolutamente perfecto.”

Rance se rio y subió al carrito de golf. “Como ya me has demostrado, lo perfecto


esta en los ojos del observador. Entonces no tengo ninguna duda que Joey es
perfecto.”
****
Después de lavarse muy bien sus manos en el fregadero de la cocina, Bo llevo a
Rance a la sala. Sentado frente a la televisión estaba Neil con su bóxer en los
tobillos mientras Jim le estaba chupando el pene.

Girando los ojos, Bo se limpio la garganta. Jim finalmente separo su boca del eje
de Neil y sonrió.

“Tu debes ser Rance,” Jim saludo.

“Si,” Rance contestó.

Bo envolvió su brazo alrededor de Rance. Su amante parecía un poco nervioso


por la aparente falta de modestia de Jim y Neil. Bo tendría que recordar decirles a
Jim y Neil que mantuvieran las cosas un poco más frías mientras Rance estuviera
en casa.
“¿Donde esta Joey?” Bo preguntó.

“Subiendo la escalera. Lynda esta poniéndole su pijama.” Neil señalo hacia una
silla. “Tomen asiento.”

Bo negó con la cabeza. “Gracias, pero voy a presentar a Rance con Joey y Lynda.”

El guió a Rance fuera de la sala. Se detuvo a lado del sofá y el murmuro al oído a
Jim. “Me harías el favor de tratar de terminar antes de que regresemos.”

Riéndose, Jim asintió. “No hay problema.”

Cuando salieron Bo abrazo y beso a Rance. “Siento, que te hayas sentido


incomodo. Las cosas aquí son un poco diferente.”

“Supongo. Quiero decir, oí historias, pero...wow.”

71
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Riéndose, Bo continuo guiando a Rance hacia arriba de las escaleras. Entrando al
cuarto, Bo sintió que su corazón se derretía como cada vez que veía a su hijo.

“¿Esta dormido?” Bo pregunto a Lynda.

“No, pero el no tarda en estarlo.” Lynda se levanto de la mecedora y suavemente


le paso el niño a Bo.

“Me gustaría presentarte a Rance,” Bo lo presento sin quitar la vista de la dulce


cara del Joey.

“Encantada de conocerte, finalmente.” En lugar de estrechar la mano de Rance,


Lynda acuno su mejilla en saludo.

“Lo mismo dijo. Gracias por cuidar a Bo y a Joey por mi.”

Bo probablemente debería de haberse ofendido por la manera en que Rance lo


dijo, pero el solo sintió la calidez de las palabras.

“Eso fue un absoluto placer para mi,” Lynda contesto. “Los dejare solos a los tres.
Bajen cuando Joey este en la cama, a comer algo.”

Bo asintió en agradecimiento, cuando Lynda dejo el cuarto se giro hacia Rance, y


le mostró a su hijo. “¿Te gustaría cargarlo?”

Rance se mordió el labio y asintió. “déjame sentarme primero.”

Después de sentarse en la mecedora, Bo dejo a Joey en brazos de Rance. Joey en


un momento abrió los ojos y los volvió a cerrar.

“El es hermoso,” Rance murmuro, pasando su dedo índice por las largas y negras
pestañas de Joey.

“¿Que no me creías cuando te dije que era perfecto?” Bo bromeo, de rodillas


frente a Rance y Joey.

Rance se inclino y deposito un suave beso en la frente de Joey. “¿Puedo hacerte


una pregunta personal?”

“Claro. Yo no tengo secreto.”


“¿Su padre biológico es un nativo americano?”

“Según Jan lo era, pero ella no sabia de que tribu ni nada. Diablos ella no sabia ni
su apellido solamente que se llamaba Hawk*, y fue en una fiesta de sexo,

72
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
realmente estaba avergonzada. Joey probablemente nunca conozca sus
verdaderos orígenes.”

Negó con la cabeza. “Si llega el momento en que Joey quiera saber, nosotros le
ayudaremos. Imagino que habrá exámenes o algo que quedamos hacer. Mientras
tanto le daremos al niño todo el amor y la confianza que cualquier niño pueda
necesitar.”

“Tienes razón.”

*Hawk, halcón

Capítulo Ocho

Después de acomodar la última paca de heno, Bo se dirigió a la casa. Aunque


todavía faltaban dos horas para el bautizo, Bo esperaba poder detenerse en el
salón de la recepción para ver si Tyler necesitaba ayuda en arreglar el salón.

Todo había salido perfectamente, cuando él y Rance estaban con Tyler y Hearn en
O’Brien’s el martes. Ellos mencionaron que querían bautizar a Joey y Tyler sugirió
un bautizo doble con Gracie el siguiente sábado en la noche.

“Estoy en casa,” Bo gritó, al entrar en la casa que él y Joey compartían con Rance.

“Aquí atrás.”
Bo se quito la camiseta por su cabeza y entro en la recamara. “Yo solo voy a
tomar una ducha…”

La voz de Bo se apago cuando vio lo que tenia delante. Rance estaba desnudo con
las piernas abiertas y tenia en su mano su pene erecto. Lo que mas le impresiono
fue el ver que Rance aceptaba mostrarle su propio cuerpo, eso le decía a Bo lo
mucho que confiaba en el.

“Bueno, hola.” Bo veía el desnudo pene de Rance.

“Esperamos por ti.”

“Puedo ver eso. Dame un segundo que me quite la peste, y estaré más que feliz
de estar sobre ti.”
“No me molesta la peste,” Rance le informo abriendo más sus piernas.

Bo sonrió. “¿Donde esta Joey?”

“Los chicos lo tienen en la barraca.”


73
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador

Cuanto quería tener enterrado en él ese pene que le mostraba, Bo estaba más
interesado en el pene que estaba siendo acariciado en toda su dureza. Ellos
habían regresado de Canadá hacia una semana y el todavía no había sido llenado
por ese particular miembro, pero el no había dicho nada. El sabía que la última
cosa que Rance necesitaba era que le recordaran su lesión, pero Bo podía hacer
que valiera la pena.

Tomando la botella de lubricante y dos condones de la cómoda, el se fue a lado


de la cama.
“Jodeme,” finalmente le rogó a su amante.

Los ojos de Rance se abrieron enormemente. “¿Que?”

“Me oíste.”

Rance parpadeo varias veces, antes de verlo avergonzado. “No creo que pueda.”

Bo vio la recién formada auto-confianza de Rance empezar a desaparecer. No, esa


definitivamente no era una opción. Abrazando a su amante Bo le dio a Rance un
apasionado beso. “Creo que puedes. pero incluso si no funciona, nosotros
estaremos bien.”

Rance asintió con un leve movimiento de su cabeza aceptando, pero Bo podía


decir que su socio todavía estaba preocupado. Posicionándose a si mismo en la
cama, Bo tomo algo de lubricante en sus dedos y saco un tapón de entre sus
piernas.

Para Bo eso no era extraño el a menudo se colocaba un tapón anal, antes de irse
a trabajar todo el día sobre el tractor, entonces el proceso de estiramiento para el
fue rápido y fácil. El vio a Rance tomar el condón y tratar de deslizarlo en su
propio eje. Bo tenía la sensación de que lo que preocupaba mas a Rance no era el
sostener la erección, sino la curva en su pene.

Bo le quito el condón de las temblorosas manos a Rance. “Déjame ayudarte.”

El empezó a pasar sus dedos por arriba y abajo de la longitud de Rance tomando
su tiempo para apreciar las pesadas bolas que colgaban entre las piernas de su
pareja. Con la corona del pene de Rance seguramente cubierta, Bo se inclino y
metió en su boca la cabeza. sonrió cuando la erección reapareció y suavemente
deslizo el resto del condón pasando el feo ángulo y bajándolo todo lo que fue
posible.

74
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Con la tarea completa, el se coloco su propio condón en su eje, nunca serian
demasiadas las precauciones para proteger a su propia familia. “Supongo que
será mejor si estoy en cuatro patas.”

Bo tomo su posición y Rance se arrodillo detrás de él. Con su culo bien lubricado,
la primera mitad del pene de Rance se deslizo sin mucha dificultad. Las cicatrises
que Rance tenia en su pene eran mas gruesas que el tapón que Bo había usado,
pero eso le causaba un placentero dolor.

Cuando Rance alcanzo el principal sitio de la lesión, él se movió detrás de Bo y


empujo. “Dime si te lastimo.”

Rance lentamente enterró su pene. Sosteniendo la respiración, Bo casi se corría


cuando el pene golpeaba su próstata.

“Joder, bebé, creo que acabamos de descubrir el cielo,” él señalo cuando más del
pene de Rance entraba en él.

Rance incluso no estaba totalmente dentro cuando Bo perdió la pelea del control
y su cuerpo entero empezó a estremecerse con la intensidad de su orgasmo. A
pesar del temblor, el pene de Rance continuaba golpeando la próstata de Bo.

Con su culo todavía en el aire, Bo tomo la base del condón, sabiendo que el
todavía no había terminado. Maldición. ¿Porque no se habían dado cuenta que el
pene de Rance tenía el ángulo perfecto ahora para dar tanto placer?

La pregunta le llego inmediatamente. Porque ambos se habían enfocado en la


apariencia estética del pene de Rance y ellos no habían visto mas allá. Si incluso
alguien se lo hubiera dicho, ‘El hubiera creído que lo estaban engañando’ pero era
cierto, en cuanto a las cicatrises en el pene de Rance.

“¿Estas bien?” Rance preguntó, cuando la respiración de Bo regreso a lo normal.

“Joder. No. No estoy bien,” Bo contestó. “Nunca en mi vida he sentido nada como
esto.”

“¿Quieres que me salga?”

“Diablos, no. Lo que quise decir, es que me gusta como me jodes.”

Rance puso su mano en el duro culo de Bo. “Tu lo has pedido.”

Para cuando Rance aumento el ritmo, Bo parecía que no podía meter suficiente
aire a sus pulmones. El constante estimulo a su próstata era abrumador, casi al
punto del dolor.
75
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador

Rance grito el nombre de Bo cuando se empujo una vez más y se corrió. Incapaz
de respirar, Bo le dio un codazo a Rance, que tomo la indicación y salio de su
amante antes de colapsar a su lado.

Cerrando los ojos, Bo trataba como loco de recuperar sus facultades. Jesús Cristo
el nunca había experimentado nada semejante a eso.

El no estaba seguro cuanto tiempo estuvo acostado pero finalmente el giro su


cara hacia Rance. Su amante parecía estar dormido. Evidentemente el no era el
único afectado por la intensa sesión.

Su mano alrededor de su pene el necesitaba desechar el condón. Con lo mucho


que el odiaba moverse, él camino con dificultad hacia el baño.

Después de limpiarse a si mismo, el tomo una toalla húmeda y la llevo a la


recamara y removió el condón del flácido pene de Rance. El no pudo evitar
sonreír al ver la cantidad de semen presente. “Pobre bebé probablemente estés
deshidratado ahora.”

Rance se agitó cuando Bo limpiaba su ingle. “Mierda, ¿que fue eso?”

“Relájate. Nosotros tenemos una hora antes de tener que irnos.”

Acostándose de nuevo, Rance suspiro. “Eso fue lindo.”

Riéndose, Bo se inclino y beso la sien de Rance. “Eso mi amor, fue el cielo y el


infierno combinados. Yo no se si mi corazón pueda tomar eso todo el tiempo,
pero definitivamente planeo tenerlo de nuevo.”

****
Rance silbo, cuando vio a Bo salir del cuarto de baño con su nuevo traje negro. La
única cosa que no le gustaba era el cabello de Bo amarrado en la nuca. El sabía
que su pareja quería verse respetable, pero entonces, no se veía como el hombre
que amaba de la cabeza a los pies.

“Te ves como para comerte,” Rance le dijo a Bo, dándole un abrazo.

“Me siento como tonto,” Bo admitió jalando su blanco cuello.

“Quizás esto ayude.” Rance jalo la tira de piel que sostenía el cabello de Bo. El
suave cabello se desplegó en los hombros de Bo. “Si, esta mejor.”

Bo sonrió. “Me siento mucho mejor, también.”

76
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
“¿Estas listo?” Rance preguntó. Pasando su mano por el duro trasero de Bo. El
todavía no estaba totalmente recuperado del placer de haberse enterrado en Bo.

“Si. Tengo la esperanza que los chicos hayan logrado ponerle a Joey su traje.”

“Yo no contaría con eso.”

Ellos caminaron hacia la barraca, solo deteniéndose dos veces para besarse.
Rance no podía mantener sus manos lejos del trasero de Bo. Maldición, el se
había convertido en un maniático sexual en las ultimas horas.

La manera en que Bo continuaba rozando con su mano el frente de la bragueta de


Rance, le daba la sensación que el no era el único convertido.
Entrando en la barraca, Race se quedo con la boca abierta, Joey estaba con el
blanquísimo traje que Lynda había mandado desde Canadá. No solamente estaba
inmaculado, pero al parecer los vaqueros estaban tomando su trabajo de niñeras
muy en serio.

Joey estaba sentado en el centro de un cobertor con almohadas alrededor de él.


Jim, Steve y Buddy estaban vestidos con sus trajes, sentados con las piernas
cruzadas con él en el suelo. Steve tenía una toalla a la mano lista para levantar
cualquier saliva que se le escapara, Buddy tenia la rana de peluche en la mano,
tratando de entretener al pequeño, y Jim tenia el biberón y los pañales listos en
caso necesario.

Bo le dio un codazo a Rance. “¿Ves? No necesitabas preocuparte.”


Rance se rió ante la tonta sonrisa pegada en la cara de los rudos vaqueros.
“Nunca pensé que viviría para ver este día.” Entrando en el círculo de almohadas
que funcionaba como barricada, Rance levanto a Joey. “¿Como esta el niño de
papi?”

Joey sonrió y trato de alcanzar el sombrero de Rance. Rance hizo la cabeza hacia
atrás lo suficiente para mantener el sombrero en su cabeza. “¿Estas listo para tu
primer fiesta?”

Los vaqueros se pusieron de pie y cepillaron sus trajes. “Lo cambiamos hace
veinte minutos,” Jim le informó a Rance.

“Bueno. Gracias chicos. Pueden cuidarlo cuando quieran.”

“Nosotros lo haremos,” Buddy dijo.


****
Excepto por Joey que lleno su pañal a mitad del servicio, todo transcurrió sin
tropiezos. Bo y Rance se turnaban para cargar a Joey, mientras sus padrinos
estaban detrás de ellos. Bo sabía que Joey era afortunado, en lugar de un padrino
77
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
el tenía siete hombres dispuestos a cuidar de él en caso de que algo les pasara a
Rance y a él.

Mientras los amigos de Cattle Valley empezaban a llenar el salón de la recepción,


Bo le paso el niño a su tío Lark. “Puedes cuidarlo un rato.”

Lark asintió y orgulloso llevo a Joey a su fiesta. Bo jalo a Rance a sus brazos.
Parado frente a la iglesia lo beso. “Después de la farsa de mi matrimonio con Jan,
Me prometí nunca hacerlo de nuevo. Pero el amor hizo cambiar mi manera de
pensar.”

Rance separo su cabeza un poco. “¿Estas diciendo que quieres que nos casemos?”

“Si. Aquí y ahora. No necesitamos nada solo tú, yo y Dios, para hacerlo. Una
ceremonia tradicional, es todo acerca de la ceremonia. Yo quiero que esto sea
solo acerca de nosotros dos y nuestro amor por el otro.”

Rance pasó sus dedos por el cabello de Bo, y le dio un beso suave como ala de
ángel. “Yo Rance Benning, te tomo a ti, Bo Lawson, como mi marido. Para tenerte
en mi corazón y protegerte todos los días de mi vida.”

Aunque eso fue corto y dulce, Bo sintió que sus ojos se inundaban. “El día que te
vi en la panadería fue el día que mi corazón comenzó a palpitar por primera vez
en mi vida. No se que hice para merecerlo, y para ser honesto, probablemente
nunca sepa que fue lo que hice, pero gracias. Tu, Rance Benning, eres el único
amante y pareja que necesito.”

El beso que siguió a la improvisada ceremonia, fue más sexual que dulce. Bo no
podía jalar a Rance lo suficientemente cerca para satisfacerse. Sus lenguas tenían
un duelo y ambos jodian la boca del otro, cuando Rance subió la pierna para
envolver la cadera de Bo.

“No sexo en la iglesia,” el Reverendo Sharp se reía desde la puerta.

Quebrando el beso, Bo vio sobre su hombro a Casey. “Danos un descanso,


acabamos de casarnos.”
“¿Que?” Casey camino hacia el santuario. “Felicitaciones.”

“¿No te vas a enojar porque lo hicimos sin ti?” Rance preguntó.

El Reverendo Sharp negó con su cabeza. Casey les dio a ambos un abrazo y un
beso en la mejilla. “Ustedes tuvieron al testigo más importante. Eso es lo que
cuenta.”

78
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
“Pienso exactamente lo mismo.” Bo tomo la mano de Rance y lo guió hacia la
puerta del salón. “Vamos a celebrar.”

Debido a sus anteriores actividades Bo no pudo ir al salón antes del servicio. Al


entrar se asombró de la decoración de Tyler. Vio alrededor de los cuartos telas
colgadas en blanco con toques de azul y rosa por todo el cuarto. “¿Ese hombre no
hace nada a medias?”

“No seria Tyler si lo hiciera,” Rance comentó, tomando la mano de Bo.

Ellos se unieron a la multitud en busca de su hijo. Rance fue el primero en ver a


Joey, señalándolo. “Ahí esta.”

Bo giro sus ojos. “Diablo, nosotros nunca lograremos recuperarlo.”

Joey estaba seguro, acomodado en el fuerte antebrazo de Gill, jalándole una de


las orejas al hombre ante la riza de todo el mundo alrededor. incluyendo al ex-
jugador de fútbol.

“Mira parece que hay línea,” Rance dijo señalando a la izquierda de Gill.
Resignado a compartir a su hijo, Bo guió a Rance a la mesa de comida. Sean
O’Brien estaba parado frente a una olla de lasaña cuando Bo tomo un plato. “Se
ve bien, Sean.”

“Esto lo hizo Jay es un maldito buen cocinero. Un infierno mejor que yo.”

Bo vio hacia el tranquilo hombre en la cocina. El no sabía mucho acerca del


recién llegado, aunque dudaba que alguien supiera. Excepto claro, Nate, Jay
tendía a encerrarse en si mismo. Aunque tenía que admitir, que el chico se veía
mucho más feliz que cuando llego a la ciudad.

Llenando su plato, Bo encontró dos lugares vacíos en la mesa junto a Isaac, Matt y
Sam. “¿Les molesta si nos unimos?”

“No para nada,” Sam contesto.

Rance señalo hacia los tres hombres. “Es raro verlos a los tres juntos.”

Isaac termino de tragar su comida, antes de contestar. “Si. Nosotros finalmente


decidimos contratar a alguien que cubra los fines de semanas por nosotros.”

“¿En serio? ¿Alguien de Cattle Valley?” Bo preguntó.

79
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
“No. Daniel era uno de mis maestros. Nosotros nos mantuvimos en contacto
después de la graduación, y cuando menciono que dejaba la universidad, sugerí
que viniera aquí,” Matt les informo.

“Bueno, nosotros siempre necesitamos otro medico en la ciudad.” Señalando


hacia la lasaña, Bo giro los ojos. “Esto es un pedazo de cielo en un plato.”

“No has probado todavía el tiramisu,” Rance dijo llevándose un pedazo a su boca.

“No, pero lo haré.” Bo se inclino y empujo su lengua dentro de la boca de Rance.


El sabor del café mezclado con el chocolate, despertó sus papilas gustativas.
“Mmm, mas.”

Riéndose, Rance lo alimento con un pedazo de su postre. “Esto es como nuestro


pastel de bodas.”

“¿Qué? ¿Ustedes dos de casaron?” Isaac preguntó.

* postre italiano, sin receta única, pero cuyos ingredientes principales son pastel
de chocolate embebido en vainilla y licor de café, cubierto de salsa de chocolate y
crema dulce
Bo trago el delicioso dulce antes de contestar. “Hace unos minutos. realmente.”

“¿Porque no le dijeron a nadie?” Isaac probó ir más allá.

Bo vio hacia Rance y se encogió de hombros. “Era solo la manera en la que la


queríamos solo nosotros dos.”

Isaac asintió. “Entonces, felicidades.”

“Gracias.” Bo apretó el muslo de Rance por debajo de la mesa.

El sonido de un llanto cruzo el salón. Ambos Rance y Bo se pusieron de pie. Los


hombres en la mesa empezaron a reírse. Bo se alejo, y Rance detrás de él. El
problema era evidente llegar con Joey.
Su dulce niño estaba desesperadamente tratando de salir de los brazos de Erico.
Antes de que Bo pudiera alcanzarlo, Jay había llegado y le había quitado el gritón
niño a Erico. Joey inmediatamente se acomodo contra el delgado pecho de Jay y
metió su pulgar a la boca.

Rance iba a pasar a Bo, pero el detuvo a su nuevo esposo. “¿Tienes que ver, que
incluso Jay se ve feliz?”

Rance pareció estudiar al androgino hombre. “No, puedo creer que lo hizo.”

80
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
Jay beso la cima de la cabeza de Joey y camino con el bebe hacia la esquina del
salón. Erico lo siguió con la mirada, ligeramente nervioso. Bo se preguntaba si al
maestro chef. incluso lo habían puesto en su lugar tan claramente y por alguien
tan dulce y tranquilo como Jay.

“Dejémoslos solos por ahora,” Bo le murmuro al oído a Rance.

Rance asintió. “Creo que encontramos la niñera perfecta.”

“¿Mas perfecta que una barraca llena de rudos trabajadores?” Bo se rio.

“Bueno, quizás nosotros podemos reservarlo para ocasiones especiales, cuando


los vaqueros estén festejando en la ciudad.”

“Si, como la siguiente semana en el rodeo. Mierda, nosotros mejor vamos a


ofrecérselo. Yo ya vi la manera en que Hearn, vio a Jay rescatar al bebé de Erico.
No voy a dejar que ese hombre cambie los planes de nuestra niñera.”

Rance se rio y le dio a Bo un fuerte beso. “Adelante tigre.”

Cruzando el salón, llego a la tranquila esquina en donde se encontraba Jay, Bo se


acerco suavemente. El jovencito parecía asustarse fácilmente por cualquier razón,
y lo último que Bo quería era que Jay soltara a Joey.

El se puso de pie como a tres metros y espero a que Jay lo notara. Aunque era
difícil oírlo con el ruido de la multitud en la fiesta, Bo alcanzo a captar que
cantaba ‘Hush, Little Baby’*, Jay tenia una suave y calmada voz.

*Canción de cuna, tranquilo pequeño niño, no digas una palabra tu papa te va a


comprar un cenzontle, si el cenzontle no quiere cantar, tu papa te va a comprar
un anillo de diamantes, si el anillo de diamantes resulta de latón, tu papa te va a
comprar un espejo, si el espejo se quiebra, tu papa te va a comprar un carro y un
carnero, si el carnero no quiere jalar tu papa te va a comprar un carretón y un
toro, si el carretón y el toro se voltean , tu papa te va a comprar un perro llamado
rover, si el perro llamado rover no quiere ladrar tu papá te va a comprar un
caballo y una carreta si el caballo y la carreta se caen. Tú seguirás siendo el
pequeño más dulce de la ciudad.

El tono era perfecto, los ojos de Bo se llenaron de lágrimas. ¿Que diablos estaba
haciendo ese niño en un bar como cocinero?

La canción termino sacando a Bo de su trance. Cuando levanto la vista Jay estaba


junto a él. “Lo siento. Espero que este bien. El estaba llorando y…”

81
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador
“Esta bien. Mas que bien realmente. eres asombroso con él.” Bo se acerco y paso
la mano por la espalda de Joey. Su pobre pequeño chico estaba dormido. “Rance
y yo, nos preguntábamos si estarías interesado en cuidarlo para nosotros
ocasionalmente.”

“¿Yo?”

Bo sonrió ante la expresión impactada de la cara de Jay. “Si, tu. Lo que te puedo
decir es que Joey ya confía en ti, Entonces ¿porque nosotros no lo haríamos?”

Jay vio hacia la dormida cara presionada contra su pecho. “Me gustaría mucho.”

“Bueno. No se si alguien te lo haya dicho, los días de Cattle Valle comienzan el


primero de julio, el sábado en la noche hay un baile en la calle que a rance y a mi
nos gustaría asistir, si estas libre para quedarte con Joey.”

Jay asintió. “Yo puedo hacerlo. Yo no había planeado asistir de todos modos.”

Fuertes brazos envolvieron la cintura de Bo. “¿Estas listo para regresar a casa? Ya
me despedí y les dije que estoy caliente por iniciar la luna de miel.”

Bo giro su cabeza y beso a su pareja. “En un momento.”

Regresando la atención una vez más hacia Jay, Bo se acerco. “Es hora de llevar a
este niño a casa.”

Jay beso la frente de Joey una vez más, antes de dárselo a Bo. “Si me esperas un
minuto, te apunto mi numero telefónico en un papel.”

“Claro.” Bo apoyo a Joey contra su hombro. Mientras Jay buscaba una hoja de
papel, Bo camino hacia Rance. “Deberías oír como le canto a Joey.”

“¿Bien?”

“Mejor que bien.” Bo guió a su familia a la puerta. El odiaba ser un aguafiestas,


pero su día había empezado muy temprano, y el empezaría el otro a las seis de la
mañana. El viaje a Canadá había atrasado su horario por unos días. Lark estuvo
bien, pero el simplemente no tenía la fuerza de Bo.

Jay los encontró cerca de la puerta. “Este es el numero de O’Brien’s. Yo trabajo


para el la mayoría de las noches, ahí pueden encontrarme. Espero tener teléfono
pronto, cuando lo tenga, les daré el numero.”

Bo le dio las gracias y se dirigió a la camioneta. “¿Tu incluso no has oído a Jay
hablar mucho?”
82
Cattle Valley – Libro 11 La Mirada del Observador

“No, puede decirse que no lo he hecho,” Rance contestó.

Después de acomodar a Joey en su asiento y abrochar el cinturón de seguridad.


Rance salio del estacionamiento. “Por cierto, Shep dijo que duermas mañana, que
los domingos significan no trabajar.”

Bo sonrió. El sabía que esa era la razón por la que le agradaba su jefe. “Me
pregunto si encontraremos quien cuide a Jay por un par de horas en la tarde.”

“Probablemente, ¿porque? ¿que tienes en mente?”

Moviéndose en el asiento el paso su brazo por el cuello de su pareja. “Oh, todavía


me quedan algunos trucos bajo la manga.”

83

También podría gustarte