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LINEAMIENTOS PARA GENERAR PROPUESTAS CURRICULARES ORIENTADAS A LA

FORMACIÓN DE COMPETENCIAS COMUNICATIVAS.


Autor: Ministerio de Educación Nacional.
Título: Serie lineamientos curriculares
Sentido pedagógico de los lineamientos
Fecha: junio de 1998

Elaborado por: Luis Felipe Bermúdez


Palabras claves del texto: Lineamientos curriculares, competencias comunicativas, renovación
curricular y procesos de formación docente.

La comunicación humana se logra por medio de elementos tomados tanto fuera de la


lengua, como del interior y uso de la misma, así como por el lenguaje en sus elementos orales
(habla-escucha), escritos (lectura y escritura) y gestuales. El lenguaje está constituido por
elementos formales, de contenido, forma y de uso, entre los cuales hay una característica
recíproca entre quienes comparten actos comunicativos. Estos componentes del lenguaje se
adquieren y se desarrollan como procesos tanto en el lenguaje oral como en el escrito. Por ello,
varios autores señalan dos razones por las que el lenguaje oral y el escrito, aun siendo de
naturaleza diferente, deben examinarse conjuntamente. El lenguaje es una condición necesaria,
puesto que sin el sistema de expresión simbólica que constituye el lenguaje, las operaciones
permanecerían en estado de acciones sucesivas sin jamás integrarse en sistemas simultáneos o
capaces de englobar simultáneamente un conjunto de transformaciones en estrecha relación
con el proceso de construcción del conocimiento.

Teniendo en cuenta lo anterior el Ministerio de Educación Nacional (MEN) maneja unos


lineamientos Básicos de Aprendizaje para la enseñanza de la lectoescritura de acuerdo a los
grados en los que se desarrollan unos subprocesos o microhabilidades que se ponen en
práctica en el uso del lenguaje verbal una vez adquirida la competencia y están asociadas al
aprendizaje de la lectoescritura.

Según el ex ministro de educación Jaime Niño Díez, ―Los lineamientos constituyen puntos de
apoyo y de orientación general frente al postulado de la Ley que nos invita a entender el
currículo como ―…un conjunto de criterios, planes de estudio, programas, metodologías y
procesos que contribuyen a la formación integral y a la construcción de la identidad cultural
nacional, regional y local…‖ (artículo 76 de la Ley 115 de 1994)‖. El MEN, expresa que los
lineamientos de Lenguaje se espera que los estudiantes desarrollen habilidades y destrezas
comunicativas, así como la capacidad de reflexionar crítica y éticamente sobre los contenidos y
estructuras de diferentes acciones de comunicación(leer, hablar, escuchar, escribir y
comprender),tanto en el lenguaje verbal, como en el no verbal.

Sin embargo, desde la práctica real, la manera en cómo se enseña la lengua, con sus
habilidades y microhabilidades es un proceso poco existente, pues de un concepto personal, la
intención de enseñanza del docente, y las metodologías implementadas se contraponen a las
pautas curriculares que establecen los establecimientos educativos, si bien es cierto que los
estándares como eje en la enseñanza poseen los mecanismos para que estas secuencias
habilidosas se estructuren, lo que se logra el aula difiere de su parecer, puesto que los primeros
temas de enseñanza del uso de la lengua tanto oral como escrita se determina desde el
conocimiento de fonemas, palabras y oraciones que a la lectura como tal.

Las prácticas curriculares y la noción misma de currículo varían con los momentos
históricos, dependiendo de los avances en las ciencias sociales, las investigaciones
pedagógicas, el desarrollo de las disciplinas del conocimiento y de las didácticas
correspondientes. Desde hace unas dos décadas, el currículo se ha entendido como una
selección y organización de objetivos comportamentales, o como la secuenciación de temáticas,
que se objetiva en una programación detallada en la que se hacen explícito los tiempos, los
medios, los criterios evaluativos. Este modelo está sustentado en una racionalidad derivada de
las ciencias básicas en las que “es posible” organizar y jerarquizar los conceptos y teorías
consideradas fundamentales y que deben ser parte del trabajo escolar, para de este modo
definir unidades de trabajo pedagógico. El criterio que se privilegia en este planteamiento es el
conocimiento como eje organizador del currículo. Bajo este modelo, es esperable un control
detallado del quehacer escolar y la asignación de roles y funciones claras a los diferentes
componentes del sistema educativo. En este planteamiento, los docentes saben qué deben
hacer, en qué tiempo y con qué recursos, lo mismo que las formas como deben evaluar, todo
esto se define de manera externa a la escuela y antes de iniciar las labores con sus estudiantes

Un argumento para la estructuración de estos lineamientos generales, se tuvo en cuenta


los datos recogidos a través de tres fuentes de información (expertos en educación, revisión
bibliográfica y la participación en eventos de innovaciones académicas). Como resultado, se
consideró necesario que para que los docentes obtengan mejores beneficios en su labor de
enseñar competencias en general y competencias comunicativas en particular, deberían diseñar
sus programas, unidades, clases, actividades, proyectos de aula, centros de interés y núcleos
temáticos.

Desde esta perspectiva, el mayor problema es que los docentes por desconocimiento del
tema no han aplicado las estrategias de innovación para impartir en la hora clase más bien
están utilizando recursos tradicionales realizando sus clases monótonas, con estos materiales
los estudiantes pondrán prestar mayor atención, por lo tanto la aplicación de los recursos
didácticos es de gran importancia en el proceso de aprendizaje, el serio problema es de que los
docentes no están actualizados en el área de computación algunos docentes por la edad y
algunos por desconocimiento.

Surgen entonces características de los lineamientos como el uso del entorno y de


aspectos socioculturales, consonancia con los pilares de la educación, uso de los componentes
y dimensiones de las competencias y presencia de los principios pedagógicos para la formación
por competencias a partir de este rasgo, dar un giro considerable al uso que se hace de la
herencia cultural de las comunidades a las que pertenecen los sujetos educandos en las
propuestas curriculares. Esta característica consiste en tomar, o retomar, aquellos elementos
presentes en la memoria colectiva de las comunidades, ya que forman parte de su cotidianidad,
de sus expresiones culturales, además de estar involucrados directamente con sus antepasados
y terminan siendo un símbolo que representa esa comunidad o región geográfica. Al referirnos a
los componentes citamos específicamente los esquemas Cognitivos, el desempeño, la
aplicación y la evidencia. Al referirnos a las dimensiones hablamos de la intención y el
significado, la función y los procesos y el condicionamiento.

En cuanto a los componentes, se asume el conocimiento como el producto o resultado


de la acción intencionada del sujeto por saber más de los objetos que lo rodean y de los hechos
y situaciones de su entorno. De esta manera él va construyendo y alimentando sus esquemas
mentales, que le permitirán acercarse a otros conocimientos ya sean simples o complejos. La
razón de ser de estas ideas es brindar elementos para la comprensión de los procesos del
lenguaje y sus implicaciones en la pedagogía; pero es claro que estos procesos se dan en los
actos reales de comunicación, de manera compleja, e incluso simultánea. Por tanto, resulta
necesario aclarar que de lo que se trata, en el trabajo pedagógico, es de saber en qué momento
se pone el énfasis en ciertas competencias o procesos.

Se propone con estos lineamientos que se haga uso y se aproveche de cada uno de los
tipos de esquemas cognitivos y los conocimientos que tiene o por los que pasa el niño, como el
pensamiento mágico, el conocimiento cotidiano, el conocimiento procedimental, y el
conocimiento ingenuo. Al acercarnos más a estos rasgos propios de la edad infantil, estaremos
más cerca del mundo de los educandos, lo que permitirá hacer mejor uso de la situación y
aprovechar y diseñar adecuadas herramientas pedagógicas que nos lleven a un mejor logro de
los objetivos propuestos.

Los siguientes elementos se convierten en el eje vertebral de los lineamientos que


pretenden un trabajo que facilite un mejor desempeño de las competencias en general, y las
competencias comunicativas en particular, aun cuando es claro que en el nivel preescolar es
donde más se suele integrar las disciplinas en campos temáticos.

- Contextualización en el propio entorno, es decir que el sujeto integre los conocimientos a su


cotidianidad, y relacione la escuela con el mundo real en el que se desarrolla.

- Uso de la herencia cultural de su zona, municipio o departamento. En la medida que el niño


conozca más sobre las costumbres, tradiciones y valores de su comunidad, se sentirá más
como parte de ella.

- La lúdica. Se ha demostrado a lo largo de la historia y especialmente en los estudios


pedagógicos sobre los procesos de aprendizaje, que el juego es la experiencia más
significativa y enriquecedora para estos sujetos de corta edad.

- La participación activa de los sujetos. En la medida en que el niño esté presente en todas
las actividades que se programan, y que lo haga de manera consciente, dinámica y
participativa, las experiencias que tengan serán mucho más significativas facilitando el
aprendizaje de cualquier saber.

Para facilitar la integración de los principios pedagógicos anteriores se hace preciso ubicar las
actividades dentro de espacios y ambientes de aprendizaje constituidos por vivencias lúdicas,
medios activadores de motricidad y expresiones simbólicas dentro de un ámbito flexible y
adecuado a los ritmos de descanso y actividades de los niños. De igual manera los contenidos
deben ser organizados de manera integrada y teniendo en cuenta los principios antes
expuestos.

Entre los mecanismos y estrategias empleados para dar validez y aplicabilidad a estos
lineamientos se propone el uso de:

- Desarrollo de proyectos pedagógicos, los cuales por su naturaleza dinámica, flexible e


integradora facilitan espacios para la enseñanza y fortalecimiento de competencias
comunicativas.
- Creación de textos gráficos (icónicos), orales y escritos. Se requiere que sus productos
sean susceptibles de interpretación por otras personas y que además él mismo pueda
sustentarlos o explicarlos de manera pertinente.

Es importante adquirir conciencia, por parte de los responsables de diseñar las propuestas
curriculares, que la evaluación no debe dejarse para el final. Cuando decimos monitoreo
permanente nos referimos a que con valoraciones parciales se puedan tomar decisiones (de
mantener, reformar o replantear actividades y estrategias) en procura de tener óptimos
resultados.

ROL DEL DOCENTE

El docente que asume la función de enseñar competencias responsablemente, se debe


caracterizar porque es quien crea situaciones de aprendizaje adecuadas para facilitar la
construcción de saberes, propone actividades variadas y graduadas, orienta y conduce las
tareas, promueve la reflexión, ayuda a obtener conclusiones, etc. El docente como mediador
debe asumir un papel dinámico, reflexivo y analítico en la práctica pedagógica, tomando en
cuenta las características, necesidades, experiencias e intereses del niño y la niña, la
cotidianidad del aula y el entorno.
MAESTRÍA EN DESARROLLO DE PROCESOS COMUNICATIVOS EN
EDUCACIÓN: LECTOESCRITURA

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