“Decisión de vida o muerte”

“ Dicen que el amor es el sentimiento más frágil”, sin embargo este es también la base
de la unión de dos personas, pues el hombre quiere ser feliz, cuando las personas
deciden unir sus vidas muchas de ellas tienen dentro de su proyecto de vida el sueño de
poder un día formar una familia, numerosa, unida, cimentada en valores, como la
honestidad, fidelidad, el respeto , entre otros, sin embargo hay ocasiones en el que este
anhelo se ve truncado por diversas razones , en el caso de Mónica y su esposo la razón
es la infertilidad de él. La Infertilidad del hombre puede llegar a afectarlo gravemente
psicológicamente, pues es sabido que frente a estas situaciones debido al deseo tan
grande de poder tener hijos las parejas experimentan frustración, angustia, e incluso
pueden rondar pensamientos de culpa. La tecnología cada vez avanza con mayor
rapidez brindándonos grandes aportes, y el tema de la reproducción humana no le es
indiferente, puesto que a lo largo de los años se han ido desarrollando diversos métodos
tanto para quedar embarazada como para “evitarlo”, el hombre mediante su
conocimiento ha logrado conseguir dichas metas. Uno de los métodos para poder
concebir es mediante el congelamiento de los embriones, pero ¿esta acción es
moralmente correcta? La procreación tiene un fin en sí bueno, pues se da vida a un
nuevo ser humano, un ser digno, el hombre sabe que esta acción es buena y dirige su
voluntad mediante el acto realizado libremente para conseguir este fin, y como tal la
sociedad reconoce que esta nueva persona humana es un sujeto de derechos y deberes,
debemos recordar también que el Estado promueve a la familia, pero, congelar
embriones ¿no estaría yendo en contra de la naturaleza humana?

Cuando se realiza el congelamiento de embriones los pacientes “dueños” de estos son

notificados cada dos años, esto con el fin de poder saber si es que desean mantenerlos o
no,1 este “mantenimiento” o “conservación” por supuesto implica un costo, lo cual ya
nos da indicio de que en este caso la vida de la persona humana dependería
directamente del valor monetario que se le otorga, de esta forma se le estaría
“cosificando”. Los argumentos a favor del congelamiento de embriones señalan que este
método ayuda a cumplir el sueño de las parejas de poder tener hijos, al conservar los
embriones en buen estado, estas podrían seleccionar además a los “mejores”, es decir
1
CLÍNICA EUGIN, “¿Cómo funciona la congelación de embriones (criopreservación)?”. Disponible en:<
https://www.eugin.es/preguntas/congelacion-de-embriones/>. Consultado: 2 de junio de 2018
aquellos que no contengan alteraciones cromosómicas , adicional a ello sería un gran
aporte para la planificación familiar óptima, pues se estaría evitando la generación de un
embarazo múltiple, el cual en muchos casos representa una fuerte carga económica y
un gran desgaste físico y psicológico en los padres.

Frente a estos argumentos encontramos aquellos que se oponen fuertemente a esta

técnica de reproducción, como por ejemplo el autor Luis Ramón nos recuerda que a la
vida humana no debemos verla como un mero instrumento del cual podemos disponer
con facilidad. Ya nos advierte la bioética al señalar que manipularla no es su finalidad,
sino por el contrario contribuir a su preservación 2. Se debe reflexionar y advertir con
sinceridad cual es el fin que les depara a aquellos embriones que no logran ser
fecundados, la respuesta es una serie de posibilidades, pues estos podría ser donados,
utilizados con fines científicos, o incluso podrían ser descartados, correrán la suerte
dependiente de la voluntad de sus “propietarios”, la persona humana no es un objeto que
puede ser utilizado con fines científicos; otro dato a tomar en cuenta es que el número
de embriones empleado para realizar dicha técnica supera la cifra que realmente es
necesaria para poder lograr el objetivo. En el ámbito del derecho este tema tampoco es
indiferente, si no por el contrario genera controversia, pues existen vacíos, sobre si
alguno de estos embriones fuese donado, e implantados en otra mujer, saber quién es la
madre es complicado, sobre todo si un derecho fundamental es la identidad, el niño
tiene derecho a conocer su origen, incluso podría darse una situación en la que el niño
requiera de dicha información necesaria por motivos de salud. Un caso polémico es la
disputa llevada a cabo por Sofía Vergara, ella se encontraba muy enamorada de su hasta
entonces pareja el joven Nick Loeb, con quien tomó la decisión de congelar embriones
para en un futuro poder convertirse en padres, sin embargo este deseo de formar una
familia se desvaneció luego de que la relación entre los dos llegara a su fin, debido a
ello se produjo el conflicto que mencionábamos al principio, puesto que estas dos
personas abrían celebrado un contrato, el cual los tenía como “propietarios” de dichos
embriones, permitiéndoles así disponer de ellos, pero como en todo contrato pactaron
clausulas específicas, una de ellas fue acordar la disposición acerca del futuro del
embrión congelado, ya fecundado, si es que uno de los dos feneciera, pero a pesar de
estar impuesta esta cláusula establecida en el contrato, no se estableció que efectos
produciría la ruptura amorosa sobre dichos embriones, es así como se produce el

2
L. RAMÓN. “Explícame la Bioética”, Ediciones Palabras, Madrid, 2013.
conflicto, el cual posteriormente llega a un juicio3. En este caso podríamos decir que lo
que se está disputando en este juicio ¿Es la propiedad respecto a ellos?, pues mientras
que Nick manifiesta su deseo de conservarlos pues el descartarlos habiendo sido ya
fecundados, va en contra de los valores que lo identifican como persona, y por el lado
de Sofía, implantarlos o destruirlo no son opciones que estén en sus planes.

Antes de realizar cualquier acto debemos pensar que consecuencias traerá consigo, sean
esta deseadas o no.

Mi posición ética coincide con aquellos argumentos en contra de esta técnica

reproductiva, puesto que cuando una persona recurre a este método es consciente de
que ese embrión es una vida humana que debe desarrollarse según el ciclo natural y es
por eso que lo “conserva” porque sabe que puede llegar a desarrollarse, para
posteriormente nacer, y así poder cumplir el fin que desea, sin embargo al momento de
descartar y dejar a su “suerte” a los demás embriones, o simplemente dejarlo en
abandono, estaría cayendo en un relativismo, pues algo no puede ser y no ser al mismo
tiempo, con esto me refiero a que no podemos ver vida en un embrión congelado y en el
otro no y simplemente cosificarlo para así poder desecharlo, esto no debe ser así pues la
persona es un ser racional capaz de distinguir lo bueno de lo malo.

No podemos permitir que el mejor argumento gane, tanto la pareja que decida optar por
esta técnica como el médico que la lleve a cabo debe reconocer aquello que es
verdadero, moralmente correcto, y ético, pues no todo lo que es técnicamente posible lo
es de la misma manera en el ámbito moral, no existe una ética privada como sugiere
John Rawls, en la que permitamos que se realicen prácticas como la criopreservación.
En el caso de la señora Mónica, ella decidió conservar seis gametos, uno de ellos logró
fertilizar, pero como insistimos, que destino es el que les espera a aquellos que siguen
congelados, el tiempo transcurrido también es tiempo que se traduce en cifras
monetarias, pues además esta técnica implica una inversión considerable.

A manera de conclusión, podemos decir que la criopreservación es una técnica que

atenta contra la dignidad humana, cosificándola, ocultando un fin económico,
moralmente incorrecto, bajo el velo del deseo de la persona de poder tener hijos, no
podemos ser indiferente a esta realidad, pues la verdad es solo una , en consecuencia la
3
Cfr. NEWS MUNDOS. ”La Batalla Judicial por los embriones congelados de Sofía
Vergara”<http://www.bbc.com/mundo/noticias/2015/04/150422_eeuu_salud_sofia_vergara_nick_loeb_e
mbriones_disputa_jg> Consultado : 2 de junio de 2018
vida humana no está sujeta a la disposición de la voluntad humana, es preferible asumir
el dolor de no tener hijos de manera natural , a realizar de manera artificial, pues ser
libre no es hacer lo que queramos sin importar las consecuencias, antes no debemos
olvidar que hay muchos niños y niñas que anhelan poder encontrar un hogar.