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En un Hogar

Narrador: Cuán hermoso es el sol al ponerse, hermoso también al salir, pero mucho más
bello es el AMOR, cuyo don disfrutamos los hijos de Dios. Y movidos por este dos es que
un grupo de jóvenes hace un plan del culto del sábado. Esuchémosles…

Mary: Muchachitas, ¿dónde vamos a hacer obra misionera?

Tere: Creo que debemos ir a visitar a Verena, pues ella no puede asistir hoy ya que está
muy enferma.

Martha: Buena idea, y después vamos a celebrar con ella la Escuela Sabática.

Rosy: Oh, sí, se va a poner muy contenta, ¿a qué hora vamos a salir?

Lely:Creo que a las dos seria buena hora, pues así podemos estar a tiempo para el ensayo
del coro.

Martha: Bueno, Lely, busca una bienvenida para que la cantes con Esther cuando
lleguemos. Hasta ahorita.

Todos: Hasta luego.

Narrador: Trasladémonos hasta el hogar de VErena y veamos que ocurre.

Todos: Buenas tardes, Verena.

Verena: Buenas tardes, pasen, pase, y siéntense. ¿Qué las trae por acá?

Martha: Pues decidimos venir para saber cómo sigues, y al mismo tiempo celebrar contigo
la Escuela Sabática.

Verena: Magnífico, muy buena idea.

Lely y Esther: (Cantan un himno de bienvenida)

Martha: Creo que no debemos continuar sin antes pedir la bendición de Dios. Oremos de
rodillas.

VErena: ¿Qué les parece si cantamos todos un himno? Busquemos el 337.

Esther: Siempre nos es grato hacer un recuento de la reunión del sábado pasado, podemos
decir … (cuenta el informe)

Lely: Verena, tú siempre nos traes buenos consejos para la Escuela Sabática, ¿por qué no
nos hablas algo de mejoramiento en estos momentos?
Verena: Con mucho gusto ….. (tiene la promoción)

Martha: Creo que no debe faltar una parte especial en nuestro programa.

Mary: Sí, traigo una poesía, la cual espero que les agrade, y que al mismo tiempo sea para
la gloria y la honra de Dios.

Rosy: Ha llegado el tiempo del misionero, y sin más demora te relataré el mismo que
dijimos esta mañana en la iglesia.

Esther: Ahora tendremos una oración y después pasaremos al comedor a repasar la lección.

Martha: Repasar la lección debe ser el ministro.

Doble dúo. “Yo te seguiré o Cristo”.

Verena: Estoy muy agradecida por el programa tan hermoso con que me han deleitado.
Que el Señor las bendiga siempre.

Todos: Hasta luego. (Se retiran).

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