Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
En la siguiente figura se puede ver que cuando se cierra el interruptor la corriente (representada por las
flechas) comienza a circular por el circuito y la lámpara conectada al mismo se enciende con toda su
intensidad, pero a medida que el capacitor se carga con la energía eléctrica que le aporta la batería, la
lamparita reduce paulatinamente su intensidad lumínica hasta que se apaga completamente cuando el
capacitor alcanza su carga máxima, momento en que también la corriente deja de circular.
En un capacitor cargado se crea una diferencia de potencial entre sus dos placas, representadas por
un campo de fuerza eléctrica en sus superficies metálicas, creado por dos cargas diferentes: una
positiva (+) en una y otra negativa (–) en la otra. Esa diferencia de potencial induce en el dieléctrico un
campo electrostático, cuya misión es retener momentáneamente la carga eléctrica almacenada en el
capacitor desde el mismo momento que lo desconectamos de la fuente suministradora de energía
eléctrica.
Cuando se provoca este corto circuito, aparece una chispa generada por la súbita descarga que se
produce debido al violento desplazamiento que se manifiesta en la corriente de electrones
acumulados en exceso en la placa negativa, que al poder dirigirse libremente en dirección a la
placa positiva, provocan un intenso flujo de corriente eléctrica destinado a restablecer el equilibrio
electrónico en ambas placas