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Cómo combatir la anemia con una dieta equilibrada

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Martes, 12 de Enero de 2016 - 18:39

Redacción CuidatePlus

La anemia es una enfermedad que aparece debido a una disminución de la hemoglobina


en los glóbulos rojos. Esta afección, que puede ser causada por una pérdida de
sangre, por la falta de producción de glóbulos rojos por la destrucción de los
mismos, afecta aproximadamente a 1.620 millones de personas en todo el mundo, lo
que corresponde al 24,8 por ciento de la población, según datos de la Organización
Mundial de la Salud (OMS).

Aunque puede afectar a cualquier persona, su incidencia es mayor en los niños en


edad escolar (un 47,4 por ciento), sobre todo la causada por la falta de hierro,
también denominada anemia ferropénica, ya que los bebés y los niños en edad de
crecimiento necesitan más de este mineral que el resto de personas.

Esta falta de hierro puede afectar a múltiples órganos del cuerpo y suele estar
causada, en mayor medida, por la ausencia de dicho mineral en la dieta. Según la
Sociedad Española de Cardiología, la solución principal a este problema recae en la
ingesta oral de hierro, pero también en un cambio en la nutrición que puede residir
en la introducción de los siguientes alimentos en la dieta diaria:

Desayuno
El desayuno se considera la comida más importante del día por lo que es esencial
aprovisionar a nuestro cuerpo de la mayor cantidad de energía que sea posible para
la jornada.

Café o infusión con leche desnatada o leche desnatada con cereales: La leche no es
sólo rica en calcio, sino que también es importante para la función nerviosa, la
contracción muscular y la coagulación de la sangre, ésta última primordial
disminuir las pérdidas de sangre.

Pan con aceite.

Pan con una loncha de jamón de york o jamón serrano.

Pieza de fruta: Desde la sociedad destacan la importancia del consumo de cítricos,


como naranja, mandarina, kiwi, pomelo o fresa, que aportan vitamina C y que ayudan
a la absorción del hierro.

Yogur líquido: En términos generales y sin necesidad estar enfermo, es conveniente


que incluyamos este alimento en la dieta, sobre todo después de haber tomado
antibióticos para reforzar el sistema inmunológico.

Compota de manzana.

Galletas tipo María.

Zumo de naranja: Bajo en calorías pero muy rico en vitamina C.

Media mañana
Para evitar el “picoteo” entre horas, motivado por la ansiedad si se ha desayunado
temprano. La SEC recomienda una gran variedad de alimentos que se pueden ingerir a
estas horas:

Yogur desnatado de frutas.


Barrita de cereales.
Queso desnatado.
Biscotes.
Zumo de naranja.
Yogur desnatado con cereales.
Pan con queso fresco.
Café o infusión con leche desnatada.
Galletas tipo María.

Comida
Las legumbres representan una de las mayores fuentes naturales de hierro, por lo
que deben ser piezas clave en la dieta. Las lentejas en especial tienen una
cantidad mayor y además están enriquecidas con proteínas y son bajas en grasas.

En cuanto a los alimentos de origen animal, contienen hierro que se absorbe un 30


por ciento más que los de origen vegetal.

Las verduras también se caracterizan por su alto contenido en hierro, fibra,


vitamina A, B9 y E y son una fuente significativa de calcio.

De primer plato se pueden incluir las siguientes recetas:

Plato de lentejas.Lentejas guisadas.

Plato de arroz con verduras. Arroz con berberechos.

Crema de verduras.Judías al pimentón.

En el caso del segundo plato, éstas pueden ser posibles opciones:

Dorada al horno.Dorada al ajillo.

Pollo al curry.Pollo a la naranja.

Pollo con verduras.Pollo con espárragos a la plancha.

Es recomendable también, acompañar cada comida con pan y de postre una fruta de
temporada o cítricos, cuya aportación de vitaminas resulta crucial para combatir la
anemia.

Merienda
Café o infusión con leche desnatada.
Galletas tipo María o integrales.
Yogur líquido.
Barrita de cereales.
Panecillos con jamón york.
Yogur líquido.
Pan con queso y membrillo.

Cena
El huevo puede aportar hasta un miligramo de hierro, por lo que incluirlo con
frecuencia aumenta el consumo de nutrientes con un bajo nivel calórico.

En lo que respecta a los tomates, estos son una fuente muy rica en vitamina C, E y
betacaroteno, nutrientes esenciales para el tratamiento de la anemia.

La cena también puede dividirse en primer y segundo plato.


Primer plato:

Plato de fideos con gambas.Sopa de fideos.

Plato de ensalada con hinojo.Ensalada de soja, maíz y rúcula.

Cuenco de gazpacho.Gazpacho.

Segundo plato:

Pepino cortado en lonchas.Ensalada de tomate.

Pulpo con tomate.Bonito con tomate.

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