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‘Tilo dal ona francés: "La Ved sur Hoque HENRI HELLO oie, dul a De lov Hormance de Sen Vicente de Paul osifacio, Ayuda deta catedra de Itegrcion Area, TH 0 de Historia, Profeoeado Padre Antonio Saca Tratesen: MANUEL E, FERREYRA Revision: ‘ousTavo DANIEL conn! | LA VERDAD SOBRE iM OBSTAT LA INQUISICION ALG, ni pas meni rorest Inaaron ecombis 1921 Cartes ‘ver oo Torna Todos loo dorochos reservados Hecho el dersito qu maren In loy 1.722 Editorial ICTION, Inpro on te Arpaia Buenos Ares © Enonal 1criON 1681 "981 1 PREFACIO “Las verdes se han empoquetiecido de {al forms en nuest20 siglo, escribia Mons, bu 1a Boustiners, obispo de Carcasona, ‘en 1867, que es hoy una corvencion tcl ta, y como una moda, el dar en todas las, cosas raadn a la herejia centra la Tele sia. Revistas, novelas, folletines, obras de teatro, por todas partes la herelia es objeto de las sirmpatins mis erdlentes y do Jos més inagotables eloglos. Todo el x to do cierta critiea consiste en oriticar a Ja Telosia, En sus novelas, la hereiia se Atribuyo ot monopolio de Jos sentimientos ‘mis elevados y de tas mas puras virtu- dos; on ol escenario, la herejia. desem- ‘peda invarlablemente los més belles pe- eles”. ‘Padeo do Cuscnat y tor Altigeet por Mons de la Bolles ogo de Carson ‘La mala fe de unos, los prejuicios de otros, hhacen pasar al Znquisidor como un mons. truo, Sin embargo, los puoblos eristianos so encontraban reconocides a tna institucién, que protegia su fe y garantiaaha el orden. Pdblico, ¥ fue en el siglo xvi, al introducie Ja protendida Reforma sus frutos de rebellén ¥ de desorden, cuando comienzan. las reeek ‘minaciones contra un tribunal especial creado desde hacia tres siglas; y son protestantes sectarios quienes lanzan a la eirculacién esas calumnias, propagadas por todas los escrito: es revohucionatios. ¥ esto no es todo, Las fstentdress quelas de todos esos predlcado: es del bre examen no tienden solamente @ hacer odiar al tribune del Inquisidor de- logado de ta Santa Sede, snstituida en et sh ‘slo sm, sino que aleanzan al mismo tiempo al principio mismo de toda inquisicion, ex eciz, ol derecho de bicoar y de castiyur a Jos herejes que pervlerten al pueblo fiel, Abo. 1a bien, este principio era oficialmente reco. nhocido en Ia Iglesia y puesto en préctica, esde su origen, por los Pontiticas romanos ¥ por los obispos. De hecho, 1a sola pakibra inguisicién, mas que cualquier otra, suscita el horror. lla ‘evoca do inmediato essa... 30 sangriento tribunal, fe afrentoso momumento del poder ‘monacal”, Ble Julcio de Vourarse es el de ta mayorls. ‘José DE Marstar dice que “sl se exceptia a un pequenisimo mimero ‘de hombres instraidos”, casi no es posible hablar de Ja Inquisiolén ‘sin que se encuentren en cada cabeza” “errores capitales enclavades y como en- ralzados en los espiritus”, Gita los versos de Voltaire y afiade: “Bsns culpables inepcias excitan en los ‘sabios (léase entre los prudentes), la risa ineztsnguible de Homero, pero la multi ud se deja atrapar por ello ¢ insensible- ‘mento se llega a considerar la Tnquls ‘én como un club de monces estipides ¥y feroces que hacen quems: a los hom: bres para divertirse”. El término INQUISICION puede ser con- siderado: 19) en su principio, que es 1a brisqueda de Jos herejes para la defensa do ks ley y tam biéo para Ia enmienda de los culpables; 2) como sistema especial de procedimien- fo, que es la investigacién hecha en secreto; 3) puede signifioar el tribunal eclesidstico ‘que juzga los casos cle here}ie, se el del Obis. 10 meen miss 24 vena comms a gmx Po, juez ordinerio en materias de fe en su Aiscesis, Sea el dol Inquisidor de la perver. sldad herética, delegsda permanente de la Santa Sede para una determinada regién, a artis del siglo x11? Ta opinion comin, orx6nes, confusa, le He- ‘ne inguina al prinepo, al procedimiento ecrelo; Ie tlene Inqulaa espoclaimente al tr: Dunal det Inguisidor que apliea el principio ¥y usa del procedimlento. Veremos que et principio de la Inquisicién fes Justo. Recordarencos el derecho de la Iglesia y el deber de los pastores. Diremos cul fue, desde et origen, Ia préctica de la Iglesia. Lucgo de una breve explicacién acer ‘ca Gel provedimiento sccreto, nos referire- ‘mos al tribunat det uquisidor de ta perver- Siaaa neretion. amo, data por pelly be go ictrtee on mata doy deine etn y hicjesp 3 wun fete, cerns AT tate cle ede end Murata ta con apron ert palbas de Fuasn EL obit de a ogi ho ao of di pga 0 sry heen sos Pos om donde a Seas PRIMERA PARTE LA ANTIGUA INQUISICION ECLESIASTICA een a EL DERECHO DE LA IGLESIA Los herejes se hallan sometidos por el Bat ‘ismo a las leyes de Ia Iglesia. Podrén ellos ser castigados st Jas violan? Si se obstinan fen propagar la herejia, en destruir ta fe, en pperlurbar el orden en el seno de 1a sociedad fristinne, jestara impotente Ia Iglesia para proteger al pueblo fiel? ‘Sin duda, la Telesia es una madre lena de ‘misericordia dispuesta siempre al. perddn: su primera ocupacién, dice el Padre ‘Mforsaveé, consiste en obtener, mediante Ja reprosién, el arrepentimiento y la ‘ransformacién de aquéllos a quienes ella fustiga. Con un arte divino en el que se reconocen Tas inspiraclones de ta milseri cordia con 3a que Cristo ha lenado su corazén, ella grachia los castigos, no de- ldiéndose a los extremos rigores de su ‘derecho vengador sino cuando se ve obli- ged a ello por Ie orgullosa obstinacidn FY een cere seep oe 10s culpables,.. Es por la peniyénela por donde comiensa su ncelén /repre- ane { ‘Segun Santo Toms, todo aquél que tiene ‘1 dorocho do mandar Hene tambien el de reprender, y Ia mutoridad que tiene el poder de hacor ‘leyes tiene también el de daties ‘su sancién conveniente, Ahora bien, las pe nas espirituales no siempre son suficientes, Algunos las desprecian. He ahi por qué la Iglesia debe poscer y yosee el derecho de infigir también penas temporales. Es ésia, dice el Cardeas! Brot, “Ia doctrina eertisima de Ia Tglesta, con: firmada por la prictica constante de 10s Papas y de los Coneilios Beuménieos, y DPOF las manifiestas disposiciones del de echo eandnic ‘La opinidn contraria he sido reprobada por Pio VI en In Bula Auctorem fidei. En la Ene cleliea Quanta Cura, Pio TX proscribe y con- dena, por su autoridad apostdlioa, la sigulene te propostetén: La Iglesia-no tione derecho de obligar ‘mediante penas temporaies a tos viola: ores de sus leyes, 4. "De ile Chit, Np sen isqeede reneeck 1% 1 onerano Ponttcn clastica esta ont nig pte agus as que “tos los Pos Gai Iglesia Catton se hatin obliges a considerer como. reprobadas, prostsias condenadas”. TE eerecho exertion impene «quienes cometen weriog erimmenes 0 lt mala, © 1a feotsccin do os blenes, 0 Ts pristine fs precri la mutacin o ix muerte, Por ip que hico al derecho de le esp, ca princgio. es el sitiene: In autoridad Drolca tne derecho n castigar con is pent lial & les que can gravemente ol bien fenra,yaseapara spars de: cuerpo socal run migntro que lo eontaraira, yu se Pura fisiedlr « otros de iitar ee ejemplo. Es por eotsigulente muy histo aie lu pena de Ror sea aplcads a aquflbs que prope fad la bereia com btinadn erden ol Saas precione bien del pueblo eriiano que ce is fy por dvisionos prafundas, sien fran ene grovosdasfrdanes, Sin embargo, preciso es econooer quo ol ejercelo do esta Poder, te eteson de sangr soncverda ‘at En ts opinign de tos hombres con el earfo ter do mansedumbre y do maezicorda. que Alstinguo ain Iglesia de Jesrato, Por esta un, yo por deecto de juaiclon, et Jhor tolestztcn se sbstene de tsar ol dere tho doa expata, peo sbendona al culpa ietinado Ym justia secular. st 10 a tiga seri wus lees. bajo so TeSpOnee- viead. ores y de sombrar 1a anirqui! Nuestra sociedad moderna no conctbg, ni siquiera en principio, la represién de laé de- vastaciones de Ja herejia por la fuerg, En ‘uestros dias, casi todas’ las son oficlalmente apostates, herejes, o ciginéticas, Ellas no admiten et ompleo de Ia fiverza mie terial sino contra ta Tglesia Cetdllea, ‘Su pretendida logatidad, realizada contra toda verdadera Justicia, es implacable, y la Opinion publica se acomoda a ells. bastante Dien, pero esta misma opinion juzza con ‘una ‘severidad inexorable los tiempos pasa- dos, cuando siendo le sociedad eristinna, el oder elvil defendia 1a religiin. {E2 espivitu ‘modemo se halla de tal manera falseado, que considera como un progreso la plena tice: cia de propagar los venenos de todos los ers. si, se condens en bleque toda 1a legisla: eign ‘de tos emperndores y de los reyes ristienos desde Teodoso. ‘Se reprueba 10 ‘que cominmente han ensentado sobre el par- tioular los Padres de la Iglesia suis Docto- Tes. Se ignore 0 se desma la doctrina y Ia préctica de la Iglesia, que prociamé ta logitimidnd del recurso al brazo secular y Condens Ja opinién contraria, Tia ha pedi o.a menudo por Ia vox. de sus pontitices, a través de Jos siglos, 1a ayuda del poder elvil para hacer respetar los derechos de Dios y @e Ia conclencia catélica, a fin de ascgurar @l orden en el ejercicio del eulto publica y Ma pas en la cluded cristina, coer gemod readers y eae negeean. ae “el derecho innsto, proplo, independien: te de toda autoridsd humana, que poses Ia Iglesia, “de reprimir 2 sus sibittos eulpables ‘mediante penas ya espirituales, ya tem orales” (coervendt detinquentis sibi subaitos poe- nis twn spirituatibus tum etiam tempo. ralibus). La segunda porto del Moro V del Cédigo ‘trata de 2as penas en general, tego de las de vversas clases de penas y de ponltencias inti fdas por el derecho eclecidctico: muchas son temporaies, EL DEBER DE LOS PASTORES Ia herejia otaca a la Tglesia en el primer principio de su unidad, en su bien mas esen- cial, pues la fe es el fundamento del orden sobrenstural aqui abajo y e! laz0 primero de uunién det pueblo cristiano. a fia de asegurar fante todo a su Iglesia la unidad en la f6, Jo sucristo Je dio pastores. EI Sonerana Panti- fico es ol guardién de Ja fe en la Iglesia ‘universal. Los Obispos son sus 3efensores en sus respectivas didcesis y, por erde, los jueces ordinarios en los casos de herelia, Hn el APocALIPSIS, el Sefior alaba a los ppastores vigilantes y firmes en la represidn Ge los herejes (Apce. IE, 2, 6), ¥ zeprocha a ‘quienes ta deseuican (Apoc. 11, 14, 15, 20). 2) aya sacar 4 RA Home ba ‘Saw Pasto compare a 1 berejes con 1obos ‘que asolan el rebafio de Cristo, Habla de-este modo a los jefes de Ia Iglesia de #fes0: ‘ened pues euldado do vosotres y de toda ta. grey, en medio de la cual os hia puesto el Espiritu Santo como obispos, para pastorear la Iglesia de Dios... ¥o ‘86 que, después de mi partida, se intro: ‘duecinén entze vosotres lobes rapaces que zo perdonarén al rekasio; y también que de entre vosotros se levantardn hombres quo ensofiardn doctrinas perversas, para farrastrar a los diseipalos dotris do sf. Vi tlad, pues...” (Hook, 20, 2831) ‘San Publo amenaza: ‘Hay algunos que os porturban y quieren, cambiar el Evangello de Cristo. Si ak gaien os anuncia un Evangelio diferente el que habéis recibido, sea snatema”. (Gai, 1,7, 9. EL Apéstol informa a Timoteo que ha ex ‘comulgado a muchos: “algunos han naufragado en la fe; ontre Gstos se hallan Himeneo y Alejandro, a ‘quienes eniregué a Sutonds”, (1 Tim, 1, 18, 20). 1a age migeise eestica a Desde su origen, los pastores de 1a Iglesia than usado del derecno de reprsaién ante los autores de desorden. Les ban intligido eas- tigos, ya espirituates, yn tompocales. Pero el peligro mis formidable eva el qie se escondia, ‘1 seno mismo do le Iglesia tin de minar y destruir su fundamento, la fo, En efecto, Jos fautores de herejia tienen el habito de fesconiderse. 1s en la sombra donde se juntan y 88 propagan, Su falsa doctrina se asemeja ‘a.m edincer que ejerce invisiblemente sus es- tragos. Poco a poco el mal se revela median te divisiones funestas, por yersirhaciones tanto més profundas cuanto mis grave, mis activa y més inveterada es su causa. La he- rejfa cuenta entre sus adeptos a altos per- ‘sonajes tanto en el orden eclesléstico como fon el civil: desde entonoes tien, para defen ‘derla y para extender sus eonquistas, un pode- yoco postido. Ho Io historia de todas Isa grandes herejias: Maniqueismc, Arrianismo, Nestorianismo, Eatiquianismo, otc. Los soe tarios de la Edad Media, en especial los AL bigenses, y més tarde los de la protendida Reforma, ban obrado de esta manera soste- nidos por tales ausiliares, Instruidos por tn experiencia, 10s Jefes de 1a Iglesia comprendieron pronto In necesidad e oponerse con energia a la peste herética ‘Los verdaderos pastores redoblaron la vigilan- ia, Otros, @ causa de su debilidad, dejaban que Ie gangrene se extendiese: provincias y nnaciones enteras eran entregadas a la here- 4a. Apenas s0 sentian lo suflolertemente fer- $2 msn umes 14 reas somes 1 enc tes, los seotarlos se convertien en persemt Gores de In fe, SAN TuOn x Guaxne lo Aeplorabs, en su carta a Jos obispos do Ttali, con respecto a la “impledad devastadora” de Jos Maniqueos; el Papa Inocexcio IIL, refi ridndose a Jos crimenes de los Albigenses, los eclara “peares que los Sarracenos”. Los fat- tores de lus sectas protestantes han impuesto ‘sus falsas doctrinas por el hierro y por el fuego, han sembrado el terror y la muerte, No hay por qué escandulizarse entonces de ‘yet que los pastores de In Iglesia defienden Ia fe contra las pérfidas arremetidas do los he eles, desde la antigtodad eristiana. Ms bien es menesier alabar su odo. En muchas cir eustancias, no han podido ejereorla effcaz ‘mente sino infligiendo a los criminales obsti- “nados penas incluso ter:porales, y, después del Edicto de Attn, entragindclos al brazo secular. LA DEFENSA DE LA FE DESDE LOS ORIGENES HASTA EL SIGLO XII Desde el punto de vista de lo intorvencién de Jos principes secularas para ayudar a la reprosi6n do los herejos, o¢ preciso distin. ‘guir los tres primoros siglos hasta el Edloto de Milan, de los sigios siguientes y de Ia ‘Edad Media, ‘Durante Ja era deo lee persesuolones, la Tgle- sia no podia usar del brazo secular. ““:Cudl era el Emperador, pregunta, San ‘Aoustis, que hublendo sbramdo la fe 4e Cristo pudiese, medimte leyes contra el implo, servir a le defonse do tn pie sa” “Los tres primeros siglos de Ia Tgle- sia, dice Mozzxrrzt, fueron 1a época de 1a dulzura”, ¥ he agit 1a razén: “La Omnipotencla divina queria manie festarse a s{ misma”. 31 moor mete: 14 vO ome Le gus ‘la habla comenzado Ja conguista del ‘mundo sirviéndose solamente de algunos pes- ‘eadores pobres e tgnorates. A pesar de los poderes infernales, la Tylesia se extendia, y vortia Ia sangre de sus mértires que se tor. nabs somilla de cristiaaos, Dios multiple cba los milagros, y parecia rehusarle tada ‘apoyo humano a fin de quo aparesiese divi: roa ante Ia faz €e todos, “Pero, continia Muzzareus, Tego que In Omnipotencis hubo sleanzado st obje- tivo y que Ia fe forttieada de sa brazo Ihuho lavado en ol bufio sagrado la frem te de los emperadores mismos, esta Omt- nipotencia parecié resimirse poco @ poco Y encerrarse por segunda vex en el clalo con 10s estandartes de la viciorla. Este cambio era un efecto de esta economia do In Providencla segtin ta esl Dios m0 ‘usa medios exireordinarios sino en Ins ‘ecesidades extraordinarias, empleando ‘mas bien las causns segundas y los ins- frumentos creaos a fin de procurar su storia y la salvacion de los hombres". Cuundo Ios sobersnos fueron bautimndos y sobre todo cuando hablendo penatrado el es. ‘piri: del Fvangelio Tas yes, las instituclo- Res y las costumbres, Cristo fue reconocido ‘Maestro Soberano de ius naciones, rey social, Ihe aqui Jo que sucedis: 1 soak guess meeierek 2% “Le ley erlstiana, dice ol Padre MoxsaBné, hhablendo sido espontdneamente reconock. ‘da por los pueblos regenerados como ley el Estado, vels do inmodiato 1as conse- tuencias de este revonocaniento. El po- der secular se torna el ministre de Dios para la conservacién del mas grande de los bienes: el bien de kx religidn: Dei ‘minister in bonum'; Ia majestad de Cris. to, representada por la svtoridad a quien #1 ba encargado de guarda de su verdad y de su ley, debe sor zespetada mis que Ja majestad real; ia unidad ée fo es una nevesidad de orden pubiico, no se puede erturbarla sin atentar a la vex a Ia tran- uilidad y al honor do sociedad que ‘se vanagloria de ser cristina. De donde ‘ sigue que Ia herefia, ultraje a 1a ver- ‘dad de Cristo y a la axtorldad de su {glesia, perturbacton de a unidad ae 16, llega a ser un evimen de derecho comin sometido a Jas penalidades que sanelo nan las leyes del Estado"#, Hl crimen de derecho cori, que ee de los mis graves, es, dice monsefior Dovats, el de lesa majestad divine, Tin adelante, a los sobe- anos, echos stibditos de Cristo por et bau: tismo, la Telesia Tes pide su apoyo para repr ‘mul 1a audacia de los herejes' 2 om, 134 pose del dogem cts", Cuerma do 1582, pp, 207 33 + “Las dostsae,exatbe SAN AGUSTIN, 4, ee F- | | , | mace urs 14 vei som La sng ‘Demos algunos ejemplos. os Papas San Anasrisio 1(398-402), San Inocrwcio 1 (402-417), Sen Lads: Macao (440- 461), San Howaisnas (514523), San Gancorto Macro (500-604), y varios etzos se oponen enérgicamente a los herejes. © bien los Te pprimen ellos mismos; o bien entregan al bra: 40 secitlar a quienes, conviclos de horejis, se T Safemte cen no tn pr i po Stes ere eels + BGSERIOT 2°, al Clara y ‘ema ett slang ey rae Sa en we St, a etry a ae +B CONGO BE ABULED, wunile ew dain ‘eyo Fal» Sistas an, rari Rl a aaa fos de log acres (Sua. Ambon, Ep. 10) + EE CONCTLIO DE Me non, tusin, eel ap 380, i eye Trl ent ‘Getgano y sar seston que ders te ter deta las poten, core gander oro tere de a te (Sn Areata Up.) + He'GoNCuG De CARTACD a fee in ftolnente ow effi ds en's egestas fot soemne erejaa cone opine de obnee oe Ie por seca in ert Al neds {i tnpactin de la hepa 9 de a Hatin (Ch EF ORtko Bie iua0" a 1 contd ‘tr fore del oly cn‘ Catan few al agp del fod seule + BU dele Dace enema y doom fo CONCit HCUIEAICD BE EaLEEBOn Seto al pier del bar esl, Y Stucde "rags pr gue heper 1 ano guia ees a bstinan en ella; o bien ditigan zeprimendas 1 10s obispos negligentes que dejan que sus rebaos sean infestados por la here{fa. A uno de ellos, San Iocewero Ie escribe en estos tar. sminos: “Con el objeto de gultarles [a los hereles] Ja facuitad de pecvertizse mas y de arras: trar consigo las elmas de los simples y Ae los campesinos al abisime que les esti Aestinado, contra ellos han resuelto Ios Aefensores de muestra Tglosia, que sean Gesterrados... ¥ es vos, queridisimo hermano, a quien corvesponde ejecutar untualmente esta orden, no sea que, por tun silencio culpable, viniesets a perder tos puedlos que os han sido conpiadas y ‘a dar cuenta a Dios de eu pérdida”. San Law Mano aprucha ¥ alabe fuerte: ‘mente las leyes emitidas por Ios emperadores, contra Ios herejes priscilianistas respecto de esos culpables de desdrdenes (Ep. 15). Se express ast: * Gira 4 ios gobermdoree le hi wines} do i fag (Sie) ee brant br + BVP CONGO’ Bi TOUDO stata pie fis dole doe desea Sel sla to seme avilable tn ep ow ELE 2A ROAD SOME Lk UN ‘muestros padres, que vivian cuando eparecis esta herejia abominable, con celo admirable se éedicaron por todo el mundo a desterrar de toda la Iglesia e= te furor impfo. Entonees, incluso princk pes del mundo detestaron de tal manera festa demencia sacriegs, que quisleron abatir a su autor, ast como a muchos de Sus diseipulos medanto el flo tajante do In espada de las leyos publions, pues reconoeleron que seria desterrar todo pensamionto de howades, desatar todo azo matrimonlat, y subvertir el derecho ivino y las leyes Iumanas, el permitie vivir 2 esos hombres que oso profesen, Esta severidad ayuds mucho a la duu. 1a eclesiéstica, que, contenta por el Jule io sacerdotal y huyendo al castigo por cefusidn de sangre, resihié empera un ver: adero apoyo de Ja severidadl de las eyes o Jos prinvipes eristianos, cuando mie ches, por temor a Jos suplicios de esta vida, recurren nl. remedio espiritual {Bl eno SA¥ LION, oy un ta esta 9 todos ton ope etna, erenhTe set echo eet ot ovat ks Menges, para eater an felting yp near a eso sae sr ‘ Nueva dilencis eo [Fp fl-, oan tm bho ioe Wms ¢ cho? donies"> Spas in imple mnalque, mou ipl Ee he ‘Temmesrodo, aed acs ard. ovat ly hea oil canoes Sons mt feigon my doce y narra 9, on Wn ie IR PAS oi i om om go ge [ests ams, lo hems sicado ‘Je devotee Ls ba vod Tor sbuper Be Tel 1 samen guiness neslercn 2 ‘Bajo el pontiticado de San Gnecomo Mac- 1x0, el obispo de Cartago, Domingo, zeunié ‘un Sinodo contra los Donatisias. Alli se de- terminé que se debia buscar por todas partes A esos herejes y castigar, mediante 1a com fiscacién de sus bienes y privacion de las ignidades, a quienes se mostraran negligen- ‘tos en osa biisqueda, EI Soberano Pontitice reprucba solo esto excaso on In pena y alaba grandamente ol eclo dal obispo de Cartage ¥ del Sinodo: “r$0s, nos hemos alegrado por vuestro cxlo pastoral. sobre todo poraue vues ‘tra fraternidad ‘ia tretado de proservar Ja provincia de Afriea, y eon su fervor saeardotal no ha dejado de poner un fre no a Ins sactas errantes de los herejes”, ‘San Gregorio afiade que su dewu es ver a todos tos herejes reprimidos con vigor y eon justicia por los oblspos catdios (L. 5, ep. 5). Tapia. Lacs slewces, que m talon hada en ty “lta mesa gon"o telson wean {edo serati fton vrata as levee eget tine de or paper ald» pare tot ‘eg ne ects ela sey at fun, on ‘Shsedar en fc ilen ul exle aret YG fae gabe pe nite on alle et Role ee ranera aio, Be de ae Dace Selo’ Varn Sante. questa’ beans, tla'ee gee obo com is" presncat Data" econ "pra one len Sean de olay @ eucoar dor ye format ‘egos do nt docna sre Peot nase mo olonergsbemar der manere el rbal unt EL obispo de Cartago habia obtenido det ‘emperador edictos para la represtén, por 1a fuerza, de esos herejes Tia carte del Papa Sax Grrooazo sugiere a Muzzarelit las siguientes reflexiones. En efeo to, ella prusta: 1) Que tos herejes eran antiguamente ine chiso eastigados por causa do la fe; 2) Que los Pontitices mismos exhortaban 4 los principes a ejercer tales castigos; 3) Que se imponia a los eatéticos Ia oblt sgaciéa de denunclar a las herejes, y que San _. Gregorio Magno, sunque desaprobando €l ez ceto de la pena infligida a los que desdefia ben hacer In demmncia, de ninguna manera epruchn Ia orden de aenuinclar, ni Ia ther: tad que se tomaron los obispos de imponerla ‘como una obligacion, En plone Edad Media, “le berejia pulula ‘va”, En 1184, la Dieta de Verona ordena a Jos arzobispos y obispos visitar o hacer visi- tar en su nombre las parrogulas sopechosas Te ile cond sin pore com oe don''t emmys alert vs perdi 4 deeds de lesa tain no ontumet, e Laren “peak, sae, pose con el fn de ctr." dteta paa aoe vas con toe 12 en i ig aes en ome do herejia, Adomais, pide que el juramento fw diya ante el visitador por tres hombres fwoguros de Ia perroquis, o incluso mds; oF dona hacer conocer al pastor da la didcesis Jos herajes que descubrirén. sta ltima dis- posloidn ha sido tomada de un decreto del Papa Lucio 117 Esta comision parroqual, sancionada por os Concilios de Avinon y de Montpellier, se Ice obligatoria para cada parroquia; ade- fis, su funclonamiento regular esta asogu: mado. Monsefior Douais atribuyo estas me- fiidas al secreto terror que inspiraban 10s Hherejes ¥ que impedia las demuncias nece- arias. El concllio de Narbona de -227 impone, fademés, el Comisario sinodal, Bn 1228, e1 Leyado papal Romatn de Saint- Ange, preside el Concilio de Totlouse, al que fisisien los arzobispos de Narhons, de Bur oos, de Auch, y un gran nimera de obispos, “I coneilio, dice moncefior Dovais, da testimonio de un gran esfuerzo contra la herejia,.. La obra del CONCILIO DE TOULOUSE puede reducirse a tres pun tos principales: 1%) Rastablece on cada parroquis una comisicn compuesta por un sacerdote ¥ os 0 tres laicos de buena reputacion” Esta medida, como so ha visto, habia sido | impuesta por Concillos anterio-os, ~ 82 awn maiz 44 Fen sone a sgeE Tos miembros de In comision parzoquial debian ejercer una vigHancia activa y sefiar Jnr a los herejes “al obispo y al sefior del ugar” 2) El Coneilio de Toulouse “ordend ta ‘asqueda de los herejes por los sefio: res ¥ los duefes de In tlerra, dictando Pena contra sus offeiales negligentes", 3) A fin de prezenir toda injusticia y to- do error judicial, prohibié condenar @ eualquiera como ‘hereje, “a menos que el obispo del lugar u otra persona de Tile: sia con poder, Ip bubiese juzgado tal”, Este ultimo punto era de capital importan- cia, Podian producirse graves conflictos en- ‘xe el poder secular y el poder eclesiésteo, EL jue ordinario Uamado’ para “conocer la herejia” no es el rey 0 el satior temporal, ‘sino el obispo, Si los principes de la tierrn Pueden y deben denuneiar @ las personas sos echosas de herejia, no tienen ningiin poder para dictaminar sobre e30s casos; ellos de- ben deferirias al obispo, juez de Ia fe, y no pueden castigar como hereje sino sélo a aquél ‘Que, declarado tal por el poder eclesidstico, fs entregudo por el obispo al brazo secular, De hecho, hubo numerosos abnisos: Ios Jaicos quisieron origirse a menudo en jucces de la fe. La Yglesia, por medio de sus Con- cilios y sus Papus, protests siempre, “Era ‘necesario en primer lugar oponerse a una La ua gece arteasric 2 flagrante violucién el derecho de ta Iglesia fen esi materia. Monester era tambien im pedir otros desdréenes rosultantes de ese primer abuso. Principes, sefores, desprovis- os de todo eseripulo, demostraban derma slado interés en encontrar un ‘aereje en tin fenemigo personal, 0 en ef hombre cuyos Bie: hes apetecien, Por In misma época, el Conctio de Letrin mpuso nuevas y graves obligsciones a los Drincipes secutures con relacién a los herejes Que estuviesen en sus dominics, mas tuvo f2uldado de recordar con precisién que el po- er secular, para poder castigar a un hereje, bia esperar que ubiese sido declazado tal por el fulcio de In Iglesia. “Psie juez era el fobispo. El derecho era tan antigue como formal a este respecto”. LA INQUISICIGN CONSIDERADA EN SU PROCEDIMIENTO SECRETO La inguisttio Cbaisqueda) es una informa: Auoyo. Fue la Iglesia quien restablecis a [pruoba por el testimonio, o sea la investiga- jn anto sus tribunclos; después 1a adop- faron los tribunatos elves. “a Tglesia, dlco De 1 Ernvous, al adop- tor In prucha testimonial, hizo entrar a Ja Justicia por su vordadora via, 1a que conduce a Is verdad material”. 7 Monitor Dowis: “Logistin’, 114 ‘Wom MELD: Ls voAD Some 1 gem bs emcoc mesos acter a “La superioridad, dice Paustin Héue ‘Asi como en cualquier proceso 1a comple- fn su “Tralté de Tinstruction eriminelie” lw publicidad det procedimiento no es recut ['Tratedo de la instruccién criminal”), sito estrieto para que el Juisio sea justo, ‘Qstaba evidenlemente det Indo de ta jus- fampoco lo es en materia de herejia. La Hole eclesidstion”t, ‘uena Justicla depende de ta fidelidad y de ZatDESsts en una “Mémoire de VAcadé- Jn prudencia del magistrado. HI juez que po- mic des snscciptions” [Memoria de 1a fe tales cualidades evita los abusos a los Academia de las Tnseripeiones”} hace el quo podria dar iuger una investigacién secre lozio de este procedimiento, "el eunl, di fi, conduciendo ésta de manera de obtener ce, 80 halla todavia en In base de todos Jun julcto justo y equitativo, ‘Tal era el per Jos que se sigten en los tribunales moder. Jmamiento de IxceeNcto IMI enando establecia, oe ns reglas de ta inquisitio, y d» Gurcoaro TX (12271241), cuando publieaba sus Decretates fn las que consagraba In investigacién se fel, Habria que sor muy temerario para Iilreverse a ereer quo los Soberanes Pont es han carecido en esto do Justicia 0 de Jibiduria. La experiencia havin mostrado le si la publicidad del procoaimiento tiene jus ventajas, hay casos en los que presenta ves inconvenientes. En nuestros igs, 1a wyestigacién secreta del Juez ce instrucoisn, Ia Justicia civil, precede al proceso pik co, y nadie halla nada erltable en esto, La inguisitio os, en segundo término, una informacién secreia. Sin cuca, le investiga: ign secreta no estaba admitida en el dere: ‘cho romano mi, en un comienzo, en el foro clesidstico, fin Roms, dlco Fouatia étx, ol prince pio que dominiba todo el procedimmiento fa Ia publieiéad completa de todas las actas del sumario”, Es solamente a pustir de Tnooencio It (2298.1218) cuando la investigacion sccreta fue admitida en el derecho eclestésticn, y no lo fue solo en materia de here}ia, sino. para, todos los crimenes. De los tribxnales ene: sidsticos la inrutstio pass a los tribunals civiles y fue sdoplada comtinmente, © 11 ps v “EL INQUISIDOR DE LA PERVERSIDAD HERETICA” Bl inquisidor (inguisitor") no aparece eon ‘esto nombre en los textos candaloos sino en {1 sigio x, bajo el pontifioade de Gregorio . HE titulo completo es: mquisitor pravi- lis haereticae (Inquisidor de la perversidad ition). Be distingue del obispo, investigador y Jue nario en materia de fe, en que es tn jez jegado de a Santa Sedo para tas causas yherejia, {Cudl fue la raxdn doterminante Ja institucion de este inquisitor? Durante siglo xin, 1a here}fa, dice monsofior Dovats, “oryanizads, fuerte, influyorte”, y ejercia fl seno de ia sociedad eristana, profun- festragos”. Monsefior Douals no admite, femburyo, que la gravedsé del peligro que suficientemonte la cregclén del nue: fribunal, puesto que por todas partes ha- Ppastores, jueces ordinarios en materia de ‘Algunos autores alegan la blandura de los , ¥ eS clerto que muchos desouidaron a7 4 mun miguexi eestencn a fia (1299), al Mediodia de Franda, a Aloma- fla, a casi todos los paises de Europa. {Qué se seprocha en verdad al tribunal del Inquisidor? jAcaso la tnvestigacion pri yada? Como lo hemos visto, ella tiono su yngdn de ser, no habia sido institaida para él, fino que existia antes que él. 2Es acaso el weurso al brazo secular a tin de infllgir, or ejemplo, Ia pena de muerte? Pero este ocurso, plenamente contorme a derecho, es faba on vigencla desde hucia siglos. caso Ja tortura, infligida a voces, también por el vez secular, durante el proceso inquisitorial? Ta torture, se he dicho, fue Instituida por fl tribunal dal Inquisidor. Palso Jes pero monsor Dons on ° esa que etre Proche de inercia ha sido exz 0 ‘Obispos Se oponian a este ests of ar aa astra dldcesis y'wunian Conon ‘Teeiones infestadas por la herejia, a ‘De hecho —dice— ta 1 3a Inquisicién tue es tablecida primeramento on tas didcests ‘cuyos ebispos se contaban entre los mds celosos, los mas cumplidores, Joe igurosos" es, Jos més exonsetior Dousis piensa que Gregorio 1x, odio de sus graves coniictos con ‘Fede, ¥c0 I, se vo en 8 vio eh Is novesidad de eponr be “La tortura, cuyo uso lleg6 a ser general, cescribe LiEemvors, fue un Yeyado det do: ble procedinntento romano y germénico hecho al mmdo moderno; NO PROVE NO DEL DERECHO CANONICO. Cuan- do a consecuoncia do 10s estudlos sobre derecho romano, so admitié el tormen to, la Iglesia rechazé primero, luego Th ‘mité #1 so, como haba antes rechazado y limitado 61 uso de las ordatias (pruc. bas por ef hierro candente y el agua hir- viendo)", nse en amo tolerano pasa ig 40s heejes. al panto do decile en cuestiones de fe, Usurpaba aa! los nese R08 de Ia Teletia,acusaba de hele sane versariog persondes y confiscale eae tte "bo Inquisitor, en ah eatin 2281, en Roma, conta tos ero? & Es tal la inminonca ya wekeratignd da Pelluro ae cori a foun de a {itucicn det Inquisidor detegado de ta Sonia Sede pa olla Toren, tego an Dante (1232, 0 Themgonn dD eee ‘Anles de ser admitida por Jos Romanos, ¥y desde los tiempos més antiguas, la tortura fora empleada en Egipto y en Asiria. En la Edad Media se hallaba vigente por todas par- fes en Ia justicia seculer. Fue prohhida ante 2mm eco: 14 rok somes ta gay th nce gtd neuen a 108 tribunates eclestisticos hasta medtados el siglo xn, y el tribunal mismo del Zagul sidor fumcions veinte afios antes que el Papa. Teocencio IV* permitiese, sin ordenasla en. aie stsibulr su supresiin a ta influencia de 4a Antes, ; 1H Inguistor no persoguia al nerele “por tuna falta de coneieneia contra Ia fe", sino por sus aotos exteriores perturbadores det Sie Ei Permiston no era especial para MM) orden. publica o sembradores de_gérmenes tte anarquta, Los catdlicos no herejes y los {niles también podian sor perseguidos por fl Inquisidor a cous do faltas extertores ¥ Socks au tins retain son la her or ejemplo, cuando favorecian @ los here: Jon, Deopus doa sin dl Tl, su yertiger del orden religioso y_socinl, 10s udios caon también bajo la jarisdiceion del Inquisitor. El hereje © qulen éote persigue ts, dlce monsefior Dovais, de nereia, No que af Tngulidor pune 4 avaio ntregn al acusao fs be Galas, quien aplcaa el trmenlo 0 tones 1, Primero debi agocar todos Ibe deme ‘etlos, sobre toto le persuasy a fi a blener las confesiones necsmrns, nae Frleado o resignisdoss a apicaragusha sie 2 Hs cane oh ee nat tna $4 conten pruebas sola, capes do poser aie al Toquisaor do su vluntad oben fn oar sistematicanente, ‘De ea ‘monsefior Dovats, = un enemigo pubtion armado para la hi cha religosa y social" Digase lo mismo de su edmplice, eatstico 6 infil FEI Ingulsldor ejerelta los derechos que He- pe de Ia Santa Sedo, sin perjuicio de los del ‘obispo, quien conserva todos sus poderes pa- fa le represidn de los herejes. Por 1o demés, ‘como veremos, el Inquisidor Gelegado de Ia Banta Sedo debe, durante el transcurs0 dol Yiriclo, tomar eonsejo del obispo diocesano, TEI Inquisider delegado del Papa pertenece fp tna omen religiosa. Recfbe su delegacién ‘inas veces para wna didcesis, mas a menudo para una comarca, © para un zeino; o pars todos los erimenes, sino para ta herejfa com “ta tortura fue empleada con modera: eign 0 incluso raramente,... Los docts ‘mentos quo nos quedan, par ejemplo, de Ja Tnquisiolon de Languédoc, en donde fue tan activa, no nos ponen en presen. ‘ia mis que d» tres casos clertos”, Nunca podia Wegar hasta la mutilactén, No es a Ia Teles, ni tampoco al tribunal de la Inquisicisn, a! quion se deblé In ins- tituclon de ta torture. Por el contrario, hay. + raises (w. del By, ee 46 nee a0; 4 vn / ow 14 gum facies i pce senor be simula meen re as lees Bees aioe Gon pe ta PeRVENSDAD Neca (continuacién) EL PROCEDIMIENTO EN EL TRIBUNAL DEL INQUISIDOR I juez personalmente delegedo por 1a San- “ta Sede ha recibido la investitura mediante lune Dula pontiticis, Compon) su Corte de Justicia, y constituye 9u tribunal on tal pais © en tal provincia En este tribunal de exoepolén, tan injus tamente caiumnindo, todo el provedimiento 0 halla regulado por los Ponttices romanos. Su oédigo 0s “prudente, logic y sabio”, 1 derecho candaico, las Bulas pontificias, los JMlanales de los ‘Inquisidores, tas actas de Ja Ingulsicién dan fe de ello. El Inquisidor puede ser informado por el rumor piiblico, por denuncies, por diversos testimonios.. No debe alvidarse que Ia de- ypuncia ¢s sdmitida en todas partes en dere- ‘eho, El inguisider no se atiene @ acusacio- hes que pueden ser més interesadss que 5 Slerciin ¢ Sods pn ay ae $6 mouse van smn 1 fundadas: 1 estabiece una investigacién so. ereta con ol fin de controlar, preoiar, eof pletar las deoluraciones recibidas. ‘Meno {también Ja obligncién de consultar al obispo ¥ & hombres prudentes, competontes, aoerea al valor de ios tostigos. Antes de toda ao. eién judicial, smunein un tiempo de gracie Que dura un mes, y que esta consagrado so: ‘bre todo a la prediacicn, con el objeto do lustrar y reducir alos oulpables. zstow pie den presentarse, confesar y selvarse, push, sf Promelen renunciar a ia ‘herejia ¥ ofrecen Barantios de ello, no serén perseguidos. Fando et tempo do graci ol Tnglldor sit & comparecar a allo sobre tales Diesen seins ecusscanes, Son iment fea Sobre sus propia fli "en mala as heraa 9 do imc aoa mre aes fo rea en otros, Hutter eves nonoes las invetigaciones aun tree nesses as, Tnervino a a eon wo dato 0 en las condiciones, tne seriba, Bs preciso stad que, a a ames Se oreo persegulco or el Inculior panes sui elones agar 6 hase ie F840 roclun@ onoren atu deopasy Hacero cargo del anita, demas, eee ldo pusdo tear al Pape, ncuron sere det proceso, este quo se una pan oe 41 de un rigor exces, por ejemplo, tort | rindoto, Se esoucha a los tostigos, Sus ex eclaraeto. ‘es, consignadas por eserito, son comutioa, ps sersun seat eam as al acusado, afste tlene derecho a defen: derse, ¥ e8 invitado a ello, a "En nuestros as, In Justicia secular inftige ‘una dura prisién preventiog a personas cue, eienidas por una simple sosrecha, son 1ue- yo reconocidas inocentes, Nirguna compen: ftcidn les €3 concedida por esto. La prisién preventiva de derecho no existe en ol trib: pal de la Inquisielén; sino el Inquisidor toma fsus recnudos: puede exigit el acusudo el fjuramento de quedar a st disposiclén, y, st fs eondenado, de sufrir 1a pena. ‘tas diversas penas que puede inflizir el tefbunal son obras piadosas, rereerinaciones, forvir en In crdzada, una malta, Mevar vn feruz de género por algin tiempo sobre le ‘yestimenta, asistir a alguna ceremonia, DoF fjemplo @ una procesién, con esta oni. tras penas son: los azoies, 1a dezradaciéa, es es cree oun aise, 18 Om {Seta ae crim na bles con Sica eepoacin dal ovrzo a Tees in ncpectind, tanto para el clzale come fhe as descendent de eos un aso ce. ces el inquisidor pronuncia por sf mis- snovigpona do amit; os os acu del Frases, com sea dhe; Dore manos Uma do ln ions elm a ot stn sre del cuerpo Goi Tosi 10 orm i reco sec eno deny de hr fer eato an van tocar las totals Yo Mies tin de ena ® pentnca, Bb $9 ene iso: 4 vena soem a ang salva, futactones a Henri Bartin De iod algunos textos oitecos por Célebre historiador, demostrandk. fransorito el texio autestion de “"¥o no veo en eslo nada de terrible, y ogo proclamar ese gran objetivo de’ la enaligad, persegudo por los erlmina. listas y realizado solamente por la Tgle. Sia: 1a correccidn de los eulpahtes” Del principio al tin, el procedimienta. det ‘tribunal de ta Inguisiciin ruestra un parti Pris 0 de severidad :mplacable, como. es Costumbre decir, sino en primer liyar de mic serlcordia, luego de equidad, Antes que nada, 41 Mnguisidor desea prowarnr ta enmienda do 108 culpabies. Como primera medida, son Mamaclos a escuchar 1a predicacién. Ms tar fe, el Inquisidor traia de persuadirlos: a 8 posible, ios hace visitar por dos hombres Seguros, “flcles y prudentes”, quienes 0 eo. fuerman por itustrarios medisin te Drienos com sejos tratando do que contiesen, ‘efecto, si ol culpable lega a arrepentirse, éo i Henri Martin se ha distinguido en el cbn- Glerto de tes invectivas contra el tribunal ea Inquisicién, Hn ta “Revue des Questions. ‘istorigues” (18704871), Henri de YEpinois Publles un trabajo inttulago: “Critioas y re. YEpinois ver 1 demasiado 10 que ete los alter conscientemente, Después de. haber ‘up regiamen. {© para uso de Jos inquisidores, texto muti Jado por Henri Martin, Dz 1'Eriwors afiade: wrnoen mig wesetca « {eee ree eee ek eee ere ee See teatta deh yfer 6 cole band ea cS ee renee PS Pr taco, on un tats aajto = “Para las faltas de 1os hombres no habia —dioe— sino dos clases de tribunales de J penitencia oristiana, El irconveniente fe unos era no aleanmr sino a los pecs ores que aportaban volunteriamente la ‘onfesin de sis faltas. Fl -noonvenien- ta de los otros, quo tenian Ia fuerza en sus ‘manos, era. no poseer ningin poder 50: bre el corazén de los culpables, fnpo- niésdoles una vindleta ain miserleordia, 50am wats A van sone 1, 14 ane geod retains m Entre estos dos tribunales, el Ps Jurados, a 10s que consultsba 0 cuyo eonsejo (Quiso estableoer vm tribimal inte suis” ‘un tribunal que pudiese perdonar, mod flear sneluso Ia pena ya estableoida, ex gendrar remordimientos en el criminal Giortamonte, era mejor para el horeje sor Juzgado por el tribunal de la Trquisicién que por el jues secular. No debo lvidarse que ‘segulr eso romordimiento paso a pi esce ol siglo x, la herejia era considerada ‘mediante la bondad; um tribunal que por toda 1a legislacién como an crimen de Diase el supliclo en penitencia... y qu erecho comin. De esta manera, Ia Inguist- ‘no sbandonaso 4 sus ze08 al brazo fatal lin ehorraba a los acusados 2sas ejecucto- de 1a justicia humana sino en ultimo: nes procipitedas realizadas por una multitud extremo”, clean © implaesble, con demasitda frecuencia, fexasperada por Jos excesos de los hereles. Por esta prictica, se corre al riesgo de s0- Drepasar toda medida en la represién y has- a de confundir a los inocentes con los cul pables. EI Inquisidor no es el vinleo que prontnel Ja sentencia, Tlene asesores que oom ‘su consejo permanente y que, coma él, enden de In Santa Sede, formando con ‘una persona moral. Ademés, el Inguisidor hhalla obligado a consultar al obispo Soa RO ¥ a furisconsulics experimentados. Est zo es tna simple formalidad, nl, por 10 q ‘hace al obispo, una medida ‘destinada ‘mente @ resguardar sus derechos: es un d ber impuesto al Inquisidor ante todo con fin de esegurur tode 10 posible Ia sabidt y Is inlegridad del juiclo. a sentencia n@ es emitida sino con pleno eonocimiento a ‘causa, y Iuego de madure deliberacicn. “La justicis inqulsitorial —eseribe monss- For Dovats— habia sido organizada de 1 npera de asegurar Ja sabiduria, la imparcialie ‘dad, In legatidad de las sentenoias del juez, quien tuvo siempre sensifiarios pare asst 4, y, en el siglo xr, consejos solemnes 0 “La quit’, p26 vit UN GRAN INQUISIDOR EN FUNCIONES: SAN JUAN DE CAPISIRANO SUE UN MONJE, UN GRAN [NQUISIDOR GENERAL de la eristiandad, SAN JUAN DE. CAPISTRANO, QUIEN PROHIEIO POR VEZ PRIMERA, y de manera sbsoluta, el uso de ia TORTURA. Se mcusa a los monjes de haberia inven ado! jSon ellos quienes I suprlmleron! Ta fortura era, como 10 hemos visto, tuna he reneia de 10s bérbares, e incluso de los pa ganos que se declan civilizados, Pero eran ales ta fuorza de la costumbre y Ia tenacidad e tos prejuicios que San Juan de Capistrano, para tener éxito en su cruznda contra Ia tor ura, se vio redueido a emplear una esteata- yea en donde Ja tortura misna deaerpe- fiaba su papel. Eseuchemos a ve Kenvat, en su obra sobre “San Juan de Capistrano”: mxos ME tA YAD sun LA neon ‘it se intzodujo scerotamonto en 128 cae ‘vallerizas de su propio palaclo, escogien- do al una silla de gran precio, aparen- temente adernada on oro y pedresias, ‘21 como tenian entonces los sefiores ri- 08, Ia lev sin que nadie lo supie- ra ¥ Ia escondié culdadosamente. Poco Lenpo despuds, dio orden de ensillar sus: cabalios, Naturalmente, ln silla no se ene contré, El pulafrerero fue acusado de: hhaberla robado, y Juan de Capistrano Tk: zo instruir su proceso con gran aparato. Primeramente, el servidor negé con gran cenergia el detite que ge le imputaba, pero ‘cuando tuyo que soportar Ia tortura, de: lars haber cometido el robo: la silla habia sido escondida en un lugar que designs. ‘Se hicioron busguedas minuclosas. Como no dicran resultado, ol palafre: nero fue nuevamente sometido a la tore ‘ura, y afiemé haber vendido Ja silla a ‘alguien cuyo nombre no pudo dar. ne tonoes, Capistrano dio a conocer solem: nemento la verdad, prociams la inocencia. el acusado s quion coliné de presentes, y luego probibié recurrir en adelante @ 1a tortura. “Bste eplscdio habia sorprendido vk vamnente los espisitis; su recuerdo que: 46 viviente en esa regiGn, y dosclentos: ‘incuenta afios mis tarde los encianos fin Jo recordaban’. 1 anton guint nenesCn = ‘Veremos ahora edmo San Juan de Capis- rand ejereis, dentro del espiritz de 1a Tele: sia, Ins funciones de Gran Inquisidor en’ Ttar tia, Alemania y Polonia, ‘Gna “Historia de los Judios” hecha por un judio elemdn lamado Goerte, traduclda al ‘trancés nor rablnos, con un Prefacio de Za flocKaln, aparecié & comienzos del siglo xx. ‘San Juan do Capistrano, el inquisidor, e3 re- preventado alli como un monstrio. De Kerval, en su. hermoso «studio sobre San Juan de Capistrano, su siglo y su influen- cia, hizo justicia por adelaniado a esas e& umnlas, Restimimos aqui su capftulo intitue Jado “EI Gran Inquisidor”. “Hacla fines dol siglo xxv ¥ comlenzos del xy, Italia y Alemania 0 hallabaa infestadas ‘por herejes de oostumbres abominables, fe roces y sacrilegas. ‘Wiclef y Juan Huse adoptan sus errores, propagan sus blasfemias, y legan a ser sus Jefes. En 1415, esos herejes recorsen Alemania, y Bohemia con las armas en le mano; pro- tenden imponer sus creencias por el hierro ¥ por el fuego dejando a su paso por todas partes ruina y desolacién. Saquean Iss igle- las, 1os conventos, los palucios, degiiellan a jos ‘stcerdotes y a los burgueses, explotan fa los mereaderes. En 1419, cuarenta mil de alles, reunldos fn Ia moniasa de Pilsen, fundan una eludad ‘qte lega a ser su campo atrincherado para Gevastar ol pais. En 1420 se apoderan de In os ax gemma eeusisrce a 2) Perdonaba a todo aquel que daba mues- tras do arrepentimiento; ‘Bmpero, dloe De Kenvat, en medio de if) Ons apes tn bri esta noche de tinteblas y de sangre, frente” by ee Sy eee 1 esos insurgentes fandsioos y es00 on 5 Entregaba al broso secular solamente tna ere oes co COL 2Enevtb 3 re sc ec oe anaes nedos e indultadas, Teeaian en sus crimenes, ‘papado, como el azote ée la hipocre: ccrimenes que les leyes oiviles de 1a época, sia ¥ de la rebeisn, como Ia fenaban rewrosarsents Amexpugnable de Ia verdad catélica. EL = Bs ? Papa 10 habia nombrado inquisidor ge cs “juan de Capistrano era monos sovero para rat pa toda i Cristina 4 ‘on los pequetios ¥ los pobres quo para con pe oe ee Tos poderosos que usuben de m4 utoridad © in esturo en manos de tos Hermanos do si protendida ciencia para corromper al Sere peace terse ties ‘pueblo, Corea de Roma higo eprisionar a una prudencia y de misericoraia. ES ‘Gumus noble de Ia familia de les Colonna, con- ESTE UN HECHO GUE PODEMOS victa do hereiia, ¥ no fue literada sino des- COMPROBAR CON LOS DOCUMENTOS és de haber abjurado de Sus errors ¥ EN tA MANO Y cuRArEMDD pele ene QUIENQUIERA A CONTRADECIRLO MEDIANTE DOCUMENTOS AUTENTE cos”. ‘Vease eémo anlqullé Ja secta de tos Frath cell, cue devastaba la ‘Toscana, el ducedo ‘He aqui edmo procedia el gran Inguisidor {de Florencia y 1a Marca de Ancona, y perse- ‘Juan de Capistrano: ‘guia a los eaidtions. San Juaa de Capistrano ¥ San Jacobo de la Marca s2 arman contra 2) Se esforzaba po: ilustrar a Tos herejes fllos primeramente con la espada de la pa rediante la presicacin, efwando sus objee Jabra de Dios, refutando sus errores. Mur ‘clones en piiblioo; ‘ohos extraviados se convieren; los demis Semblan y callan, Juan de Capistrano nace 2°) ucla detener a aquéllos cuyos crime: derribar las casas y Jos templos en donde nnes eran pablicos y notorios; Henen sus asambleus erlminiles. En cuanto los relapsos y a los Impenitentes que se obs- BR rane wetzo: ea venom oem CA gen 1 wna guint recs tinan en sus errores y en sus erimenes, Ios Jos entrega entonees a in justicia secular; és- entrega al jue cil, ‘ta, sogun las leyes en vigor, los condena all Frente ai judo, ese opresor de los pobres, ‘ego. gran inquisidor se levata como la Justela ‘iemos visto obrar a un gror ingusidor, fn porsona. Reclama de los principes seve: entzo del espritu de ta Telesis y bao su as medidas contra los benqueros judios que ftrecelén, Ciertamente, esto se compugina fesquilman a los necestacos. en ooo con esos monies estpidos y feroces En Jos archivos de Népoles se encuentra pilniados por Vollaire, Michelel_y_muchos tun documento ‘original rsuy curioso, repro: otros. 1 representa la Justicia alemperada ducido iniagramente por Dz erva.” Hs un Dor la misericordia, ecreto do Ta roina do Népoles, Juana 11, fe- cchado en Aversa ol 3 de mayo de 1427, Tih é1 confiere 1os més amplics poderes al gran ‘nguisidor Juan de Capistrano para proceder contra Jos judfos y reprimir sus usuras. La Reina les prohibe oporer al gran inquisidor os privilegios que les hatrian sido otorgudos ‘en el pasado, so pena de la confiscacién de todos sus bienes muebles ¢ inmuebles. Esas prerrogativas y privilegio, “deberda ser des- truidos o quemades”. La Reina autoriza a Juan de Capistrano imponer a los judios 6rdenes ¥ prohibiciones Yajo los ponas mis severas que a él le agrade fijar. Gusndo Juan de Capistrano ejerce en Po- Jonia sus funciones inquistoriales, una mujer udia es testigo do un milagro’ euearistica Iientras asistis a esconas saorilegas de pro: fnnacién efeotuadas por sus correigionarios. Bila se declara cristiana, os asesinada, los udfos esconden su eadiver y 1o hacen’ des: ‘aparecer. El Gran tnouisidor ordena una in- ‘vestigacidn. Los cadévores san eneontradoss Jos asesinos confiesan. Juan de Capistrana A PROPOSITO DE LA INQUISICION LA IGLESIA Y LOS ALBIGENSES “La cuestion de los Albigsnses —dlce monsefor Dr 1a Boonemre— es una de ‘Gas en que la historia ms ia comspira- do contra Ia verdad”. Henri Marto se eomplace en mostrar, on ‘memo de un eusero de Jos mas somprioS, a Santo Domingo y a “su obra sangrionta’ ‘Santo Domingo, dice, “pasa como el genio de In Ingulsicién en earnada”, 11 ofrece “uno de Jos més to ribles ejemplos de 1o que al fanatismo ‘puede hacer de tos mejores espiritus" I, ‘Uno so imaginsria a Santo Domingo, blan- diendo un hacha y conduciende una legién do inquisidores para masscrar irofensivos al- ‘bigenses. “ano Domings vino a bias a sets en dont In logue denn inbryi san de st ce todo la ajuda doa Sentnine Va fn cuyo honor insuy al acta o, determinaron sue tran mister ‘Notad — Alon cue. surto Domtgg Iioro oF JE, ie complemen eS roa ta tngubién ea Gios despuds” 13, ics Satan oe hae teens aa 1 "Poko de Cuscaa”, 8 “Rove es Que ial Baetivery sok 2X, p. aa mov quinads reusses Jos albigenses, como Io hace suponer Henri ‘Martin, 1a Iglesia us6 de extrema paclencia para con estos sectarios. Treinta ofios antes del establecimiento de J Tnquisiciéa contra los albigemes, el Papa Tnovenclo TH, espantado por los esteagos de Ja seeta en el Mediodia de Rranvia, trats de salvar ia fe de los pueblos y de vener la herejfa, no por la violencia y Ins suplicios, ‘sino por la predicacion y tambizn mediante Ja excomuni6n de los sefiores que favorecian 10 os herojes. En su obra sobre Pedro de Castelnau y Jos Albigensos en el siglo x11, monsefior de Ja Boullerie pinta el estado lamentable de la Francia meridional; muestra a la seota al: Digense invadiendo’cludades y aldeas, sub- ‘yugando tanto @ los ricos como a los pobres, fencontrando alisdos poderosos como Rah mundo VI, conde de Toulouse, Rainnndo oer, vigconde de Careasona, y numerosos ‘confidentes en el clero misma, “La herejia reinaba por doquier, domina- a por todas partes —escrive el obispo ‘de Carcasona— y asi como en el sigio 1, después del Conciisbulo d> Rimini, el ‘mundo se habia despertado, sorprendido {de ser arriano, del mismo mado permita ‘Senos decir quie en el siglo xazt nuestras ‘comarca meridionales se despertaron es ‘upefactas, asombradas al ver que en ‘medio de élias uns herejia impura se hu- ‘ieee sustituido a la Iglesia”. FP 90 eam ro: 24 vem some 14 qe EL arzobispo de Narbons, Bérenger, soste- nia a los herejes. tro Bérenger, obiapo de Careasona, detendia por el contrario Ia fe fatdlica y'velaba sobre su rebafo, pero los Albigenses Jo desterraron do su eltdad eple “Inocencio 111 —dice monsefior mn uw HoctuizEs— vio ia liaga profunda que de ‘Yoruba e! Mediocia de Francia, y decide {mara Como primera medida ens huestras ecmarcas a legados y mi. fHoneros con el choo de lear de naw Ye a e808 puchlos a tn pureza de ln fey Juego, st la influencta do 10s legados y Ja pelubra de los misioneros no: surisn tecto, para defender al menos ‘contra {esos lobos ambrientos el pequeto reba. fo fel, so resolvid m recurrir & a autor Ga Ge aauélos que no Levan ta espada Eslus ultimas palabras no aluden a la Ine Quisicida sino a Ia cruzada contra los alibi, genses, y tendria lugar s6lo en el caso en Aue la precescién las anman ‘no bastaran. % aoe “Dies —sontinda ot mt smo. autor, a {in do servis tos deigios te su Poms eo, sucks en Ta Isle 9 os homes do aie tent oven” don sation Biouvomiraao Petro Castenas anto Domingo de Guzmén; 5 tn hero ‘Simén de Montfort”. iris 4 axmes gunned rerstmok © ue en 1209 cusndo Pedro de Castelnau, relt sloso eisterolense, deleyado por Inocencto 11, Comienza, en le misina Toulouse, una de Ins ‘capitales do ln svcta, sus prediexciones para Ihacer retornar al pucblo a la fe. En un prin cetpto, st palshra no deja de surtir efecto, pero fen sequida la herejia vino a ser mas amensz- dora que nunca. Padro de Casisinan y Rail, su solexe, conti ‘fan slendo Tegados en los paisos entregados a a herejia, En sus conferencias pablicas eon- funden a los herejes de Carcasoms. Pero obis- [POS y Principes ganados por la secta les hacen {imposible su tara, Podro de Castelnau. pide entonces al Papa retornar a su monasterio. Tnooenio HIE, en una carta Mena de vigor ‘apostalico, Jo insta 2 cumplir hasta el fin el ‘inisterio’ que le ha confiado. Pedro de Castelnau depone a obispo Ral- ‘mundo de Rabastens, pastidarlo de Ie ero fa, recorre Ins provinclas de Arles y de ‘Vienne y se encuentra, en 1208, en Montpe- Iler, deplorando, junto con su colega Rail, 1a esteritided de sus esfuerzos, En julio de 1206 recibe, en Montpellier, 1a visita de Diego de Azebes, obispo de sms, ‘acompafado do un canénigo regular, sub- prior de su iglesia. Este subprior no es sino Domingo de Guzmén. Fl obispo, el subprior, Pedro de Castal: nau y Raul unen sus esfuerzos, practican Ia pobreza apostélloa, predican In verdad y ob- tienen numerosas conversiones, Pedro de ins inarlo una y otra vez, EI 16 de enero de 1209, Pedro cae en una Qelads habilmente aispuesta por el conde de Toulouse. Va a erwar el Rédano en Salat, Gilles, cuando dos hombres se le aproximan, ho de ellos lo atrariesa de un lanzaso, Pe. so cae exclamendo: “Sefior, perdénalo eo. ‘mo yo to perdono”. Poco después, muere, La Iglesia ha beatitiady a Pedro de Castelnau, ‘mictir do Ja fe, Mientras, Domingo de Gusmén, relirado en Fanjeaux, convierte a una multitud de here, 288 por su predicacién y por el poder del Santo Roserio. No hay todavia ni inqulsi- ion, ni eruzada, Pero después del crimen de Saint Giles ‘ta media estaba colmada y paresis a Tnocencio TI que habia Hegado et mo ‘mento pore la Tglesia de pensar en una legitima defensa”, Fue entonces cuando 1 Soberano Pontifice Mamé a tos principes cristianos pera tne rusada contra los Altigenses. “Esos hombres do pestilencia —esor- be—, después de haber saquendo nues- ros bienes, odian ahora nuestras perso. as; ellos ya no se Umitan a aguear sus Jenguas contre. nuestras almaa: rman ‘Sus manos contra nuestros cuerpos, sien, Go a In vex enemigos felones de nuestras almas y asesinos d> nuestros cuerpos a ocean echeacn o umes, pus, eros Ons: aie ‘alerenos cempoones dela mein erst: wa cue a gomigo cee iglesia co pov aap ove) fe a pnt i aod oy to Gone munca neceldad do nosotros, be ae ne en yuastras manos: fu empero ue pn ce ioc pom mrs es a Sone se an fuss, a Tee ano eS ok ce ee 2 foie et date taste Coe wie ee taote do a beeline a de hn ic cen oe me nee ote a ae ooo ae iin bere Sem ipecin en ot roe Se pee rs Se on echoes yo, CrdermrDn inplawo en esta apre- ‘Gato to porn do Cxso mm sin fn eu a leis coast oe renin ea cee x sou «on ee Sie once ook ee ole agpantin ‘sean, “sugeridos por Dios, con el objeto Sian pra nore 9 eae Dl ees oomnce oe te Deletes cence oes Ce been one 6 Bul, Bp 6 19) mon maa ta enn wan ca mega ‘Asi hobla el Papa tnocencio 112, Los principes eatdioos acuden & su ama- do, toman ins armas, sitian a Béslors ¥ se ‘apoderan de clia. EI 1? de agosto do 1209 Megan ante Carcasora, al dia siguiente dan et aoalto al primer barrio, La. batalla es Tuds. Los obispos y los sacerdotes, en el ‘campo de los eruzados, cantan el “Veni Crea. for’'y elevan sus manos al ciclo. Después de dos horas do Tucha un arrlesgado caballore @scala el primero Ia mural, Es Simon de ‘Montfort, un héroe al que los eseritores his, fonotes han convertigo en tirano, pera all que El 15.de agosto, Ia ciudad es tomada por asalto. I 12 de setiombre de 1213, Simon de Montfort gana Ia batalla de Muret, que ase. gra el triunfo de la iglesia, Ais tarde, a fin de impedir que Ia. secta tos estuerzos, se esiatloce en el Mediodie de Francia el tribunal de la Tnquisicién, ‘Se ve entonces 10 que valen las eslumntis de Henri Martin contra Domingo, “la Ingut, sicidn encarnada”, Santo Domingo, ‘mauerto fen 1221, y contra su “cbra sangrienta, SEGUNDA PARTE LA NUEVA INQUISIGION DE ESPANA Ayudante de la exten de Integracién Area, aio de Historia, Profesorado Padre Antonio Saenz 1 POR QUE FUE INSTITUIDA LA NUEVA INQUISICION Ta nueva InguisiciOn fue snstitulda para salvaguardar la fo de Hspafia ¢ impedir la rina de la naoién emploundo uns justicia roota y loal, La antigua Tnquisicién existia en Espafia, en el reino de Aragén, desde el siglo x4, La herejia de los ATbigenses de- vyastabe la regién y las Ordenanzas del Con: illo de Toulouse fueron puestas en préction Alli desde 1229. En 1252, Gregorio 1X reco- ‘mend6 al arzobispo de ‘Tarragona y a sus ssufragiineos que hiclesen buscar a los here: 485 por los Dominlcos, si no lo hacian ellos mismos. En 1268, Inocenolo TIE informé a San Rate mundo de Pefiafort, de Is Orden de Santo Domingo, que habia resuelto conflar a 103 Hermanos Predicadores 1a misiin de deste- rar In herejia, Se establecteron entonces trfbunales de la Inguisicidn en Aragda, en Castilla, en Navarra y en Portugal, confiados 1 los religiosos de esta Orden. 14 enn miso: £4 vemnan sens wot one ae a A mediados del sigio xy, dlc lo xx, dichos tribur Ya no fumeionabes, sobre todo en Cast embargo, Jn fe y la naclonatidad de 19 Puoblos de 1a Penfasula se hallaban zadas por los falscs convertidos del. jad ‘mo y del islamisms, Uamados los pr ‘marranos, los otzos moriscos, meede ols. varios sels, los jutfos y mumarocos en Esta, Los Visigoda ‘duefios del pais antes de Ia invasion musa ‘do con los Sarracenos de Africa y urdieron luna conspiraciéa eontra los reyes Visigodos. “Los judios —dice ol vx? concrts0 mz ‘roumso—, después de haber mancilla Go 1a tinica de la fe con que 1a Santa Madre Telesia los revisti6 en el bautismo, se hen esforzado, con audacia tirénica, en arruinar ta patria y la nacién toda y Mas el complot fue desbaratado los Sarr cenos rechazados y 10s eulpsbles castigades. En los siglos siguientes 10s Judos espafio- tes y sobre todo los falsos convertidos del Judaismo desempefian el mismo papel que ta tiempos dal reino vsigdtico, ea ‘Durante la congulsta, musulmena, reeupe (teredon cies, Mos pleon hideran ran us righezas, au poder, sus cargos. En Timale «1 beutismo, pero continsaron TTeleas, en Cérdobs, en Barcelo, poseen Corruptor y cietyenetamente su sooidl ccousias y universidades. ae ‘A medida que la Espafia cristina se reco i ‘bra y rechaza a la metia luna, los judios, Siempre actives, se snsinian er todos 1s fectores de la sociedad, Ta gran mayoria de ftlos son economos, administradores, teso- eros; como fermaoscticos y médicos enfran fn os seoretos de las faralias, Se vuelven fQuefos de Tes fnanzas en Ia catlica Espada. Por estos medios consiguen poder y se hacen conceder privilegios. “Ningtin judio aioe ot rv cones roumpo— “doberd en adelante sora endo @ abrizar el cristianismo; ‘aquellos que han sido convertidos de No contentos con insuttar tana, 2 insultar ta fe crit 4s antiguos marranos se pusteron de acuer: Bes... M0: £4 ROAD mm ‘spor eso —aleo Het ert, yor esha as Cores on os inistovon sobre laced ¥ muchas conmocione: : Beri 33 Populares pus iva lus las lsposiciones del en pee Sc | List eos Bios de Catia, | eee sce converte ju ' Palo la ya pa | 2 17, 10s marrnosintentan aoe tregar, mediante dinero, a ‘do Gk tregr|mslanle dro, in fora ce Gh “Aci tum tego x7 —esrt9 Jo (ule era’ Sanat al Schado tan profndas rales on Espa | er nacional, El manne er aon ati entaon prodiiramente ct pelgro fe trataba do ber abel ae tac epi 7 aia mals) jt befberie dotenda at eta Tobie vorta soe fen i AL igual que los jucfos i aise on 10s marranos, tos | 808 convertidos del Islam legeban alos 3 iar dal Carden Gace Lo nul gems EASA 7 més altos cargos, aspiraban @ gobernas spaga y Ia tralcionaben. Flos fueron céra pices de Jos Gibraltar, Su sudacia llegd al punto de in- juriar Cristiana, El pueblo exasperado se sublevS ‘contra ellos repetidas voces marranos en. su teatativa en ‘publicamente en Crdobe. ala religion ‘De Maisie coloca entre los axomas poll ticos mas fneontestables, és: “pe ninguna forma — gravemente peli ara Jn moral pdbc, por elerplo, ls , In usura, Ia brujeria y cierias price aborinables. ‘stats, as tlsnas 0 ea das por los inquisidores eles! sion Por los asesores seculares. ee Los AUTODATE: Esta palabra acide Jo. La ignorant, el prels,| pasién no han sabids hacer otra cosa ¢ Inventar'y presenta, jo este nose, fiers permanente, shorando sangre Bie De Mnsthe cla, en su teroera cart, las ores dei tiie de niles aha ue habia vstado Espata hala 1876, Este Giérigo cuenta sis imprestones. Vi, de, tm editicio “que su imaginaclin te representaba fom rodeaso de lamas ardletes™ Lege os wo gus Han so entera de que una mujer culpable de enor. ‘mes erimenes habia sido quemda en ose (quemadero cuatro afios antes. ‘Dz Maisnee hace notar las grotescas com tradiecfones quo pululan en este relato, ‘ayfe aqui —diee— Jas necedades con Ins que se hartaba Europa”. ‘Europa s0\harta todavia con somejantes cuentos @ propésiio del AUTODAFE. Bste fra simplemente In ceremonia ce la reconci Iiacién Ge 10s culpables arrepentidos. Pues foto terrible tribninal admitia el arzepentt: niento, igual que todos 20s ‘ribunsles do 1a Tnquisicién, pero « diferencia de tos tribur rales civifes, que no Ta admiten en ninguna ‘parte. Se imnponia penitencia lviana, en Te faci6n con el crimen. El penitente era recom: Ciliado 0 sbsuelta en publico. Se to revestia. Ghtomiees con et sambenito © nsbito de peni- encia. Por esa 6poca, los candenados se pre feeataban ante los tribunales con vostimenta special, Durante el AUTODATE, los crit: inales obstinados eran excomtilgados, mas no ‘se quemala allf a nacie. “ailt no ardian —dloe el abbé Waowr— mis que los olrios evades por los pe: nitentes”. ‘Lo pena del fuego ern aplicada por el brazo secular a ciertoe culpables smocnitentes, des- pués de Ia sentoncia del tribunal de 1a In- Guisickin, Este castigo no fue una invencién ee ee ee wo migealy me HPA o Gaxs tampoco toma en serio a Lorente. jemplo: Llorente afirma que Torauemada ‘quemé a 2.000 herejes en Sevtla solamente fn 1481, Ahora bien, Torquemada no fue he- cho Inquisidor sino en ol afio 1188. Llorente pretende citar a Mariana. ¥ tien, éste dice ‘que 2,000 eJeeueiones so levara a cabo di ante el ejercieio do las funclones de Tor- ‘quemada, ¢s decir, durante quince afios, y fen diversas ciudades de Espaiin en donde ‘existia 1a'Inquisicién, ‘Ademas, Gass ha controlado las cifras da- ‘das por Liorente: en lugar de 31.912 personas ‘quemadas, cuenta 1 4.000 conderados a muer- te en, 320 adios de existencia de la Inquisieién ‘espifiola, o sea, una media de 12 ejectciones fanuales en todo el reino. ‘Recordemos que muchos erimenes custign: aos con Ia nmuerte por todas Ins logisiaciones, sobre (odo en esa époce, eniran en esa cifra ‘Hlorente nizo oilculos fantisticos, pero hoy en dia la palma co la leva sin lugar a dudas “el honorable Tsovn.Lor’. Podremos apreciar, mejor que al comienza do este estudio, estas palabras resonantes, limzadas como us trueno desde a tribune de la Cémara, y reproducidas por toda la prensa: ‘ZES, por ventura un suet la obra en Espatia de este espantosa Orden, que de 41475 @ 1800 quemo, por ertmen de here ia, una media, calculada por Liorente, de 1.100 seres humanos por afio, 0 seq, 365.000 viotimes?”. do los inquisidores de Espafia, ni de los sores seculnres que la infligian, Esta existia desde tiempo mmemorial en todos paises, pura castigar determinados cri Ixonmrre, en su “Historia eritica de la ‘Quisicion espafioin”, consigna una estads Condensdos quemados en efigie: 176 Indultados con penas soverss: 2014 ‘Total: 341.021 Llorente, sacerdate apéstata, ha allzado los hechos, Después ‘de Baber crito su pretendida “Historia”, quemé ‘archivos a fin de hacer imposible todo tol Sus cifras se hellan de tal modo abull que Ios mismosprotestantes no ereen. cellas. PercHE. dice que las cuentas de rente son un “frivolo eéleulo do prot de, Prescors, en su "storia de Pete ““Debe desconfierse de las indicaciones Lorente, pues en otras elrounstanctas ‘dmitido con ligereza tas est ‘mas inverosimiles” ITRESCIENTAS S3SENTA ¥ CINCO ‘VICTIMAS! ‘Tal 1s cifra dada on la Camara por el lator de 1a Ley contra ins Congrogacionest ‘Ast como Llorente invoes el tastimonio ‘Marlana, Trouillot invoca el de Liorente, ‘con ms aplomo. ‘Y pregunia: “Hs esto un suefio?”, He aq ‘un efecto cratorio quo, en ol pensamlento ‘Troulllot, debe fortifear la convieeldn de foyentes. No consienta en que se tenga la minima’ duda, Pero, precissmente, {ESTO ES UN Notese bien que soamente fa here, el “honorable relator", es la que hizo ‘nar a tantas victimes inocentes y ence tantas hogueras por asta “espantoss Ordan! Lo que es falso, como se ha vist. CCanfrontemns shorn Ins cifras dadas ps ‘Trouillot y por Liorente con las que Ihistoriadores catélices y protestantes, ‘mas bien superlores que inferiores a la dad: Cire Trowiliot ——‘Llorente —_reotifioada 365.000 sag12 4.000 De esta manera, ol brazo seoular habe fecutado, después éel juicio de la eign, a afis, ‘Pues bien, en algunos afios, Ia Revolucion hizo perecer a varios centenars de miles de victimes, In mayor parte inocentes. ‘La “Sociedad Etbtiogrdfiea” publicé, en 1880, un folleto Ltulado “Quizes aos de re ‘yoluoin’, ‘Tomamos do él lo siguiente: La weana mig me MAS 10. 1000 eriminsles, a 1o sumo, en 380 ‘Serfan monester muchos volimenes pa- ra enumerar los crimenes de esta temi- ble época. Un republicano, el cfudadano Puupiomare, tuvo el triste coraje de ha- cer esta historia, clasificando asf Ins vic- timas de la revolucion: ‘Ex nobles we 128 Mujeres ae la nobleza .. 750 Mujeres de campesines y fe artesanos ast Religions... 880 Sacordotes 1135 No nobles do’ diversas capas sociales . 13.683, ‘Total de guitiotinades . 18.613 Mujeresmucrtesde tenor © por partos prema tuzos 3.148 Mujeres. muertas et 1a Vendée .......-'.-, 16.000 ‘Nifios muerios en Ja Yen: a Tes Se 22.000 108 mcm meas 14 van sn 4 D4 ‘Otros muertos en la Ven 60 eceesee soe 900.900 Viotimas en Lyon ‘31,000 Victimas de Carrier ‘en Nantes ‘3.000 ‘Entre los cuales cuenta: Nifios fusilades 500 Nifios ahogados |... 1.500 ‘Mujeres fusiladas 264 Mujeres ahogsdas a Sacordotes fusilados 6 ahogados aa Nobles ahogados 1.400 ‘Artesanos ahcgados | 5.300 En oste nimero de victimas no se ha- lan comprendidos lss masaeres de Ver: salles, en los Carmelitas, en la Abadia, en Ja Glaciére de Avignon, los fusilados de Marcella y de Tolin después del sitio a ambas chudades; los degoliados de ta cite ad provenaal de Reéoin, exya poblacién precio toda entera porque habian derri- ‘bado et drbol de ia libertad. Marat habla pedido, al comienso de tn Convencion, 300.000 oabezas; jla Conver. ida habia ‘cumplido su desea! a Revolucldn es también responsable de Jos millones de victimas de las querras he: ‘chas por la Convencién, el Directorio y et oo sng mF ARAB 1 Imperio, tan bien larado por Des champs “la Revolucién a exballo”, En la & Carta sobre la Inquisieion espatio- 1a, ox Marsri convoca, contra fos enemigos dg la Inquisicién, a la experierela y a ta his. toria, Snumera los innumerables erimenes ¥ a serie do masacres que ensaxgrentaron, et joa aiglos xvt 5 x01, toa Inglaterra ¢ Irland, toda Alemania, Francis, Flantes y muchos btros paises. De Mater pone en boca de tn fgentilhombre espafol les siguientes palabras Eomo respuesta a las calumniss de los ndver- ssariog de la Inquistciém: syostros sols mioges; no ves mis abe Cinta punto, Nuestros esindores mi Maan aga Io alto y ves et eoalun. Enos omfonzos del sigh 31, ello ve Ee. numecr pr sat doc, = FuroDN: CON ST shlelo de sustrasrse al condo ge Set rerurrieron in Inqusicin,.. 00 anno fotara sobre In angre que Wits tim novadoreshicieren derrmar... A onotos ignoratas presninosos, qe 20 ov ann y qe tani ae Europe, nosotros 0 toca, onsiar ues reyes. e2 Be Zaqusiin. a tive salvo 0 Depa eng En In misma carta, ox Marsrar cita un eto andnimo apareeido en 1797 en. Chris opie: APENDICE “EI Santo Oticio —se dice alli—, eon sesenta proceso en tun siglo, 08 ahorrado el especiéculo de ‘un mont de cadaveres que superaria 1a altura 10s Alpes y detenduia al Rin en su curso”. Ia historia verdadera de Espafia y del mun: do justifica las observaciones de José de Mais- tre. Qué diria ahora, jh cietol, si viviese en ‘nuestros dias! Si todos los muerlos de In guerra mundial fuesen amontonados uno s0- ‘bre otro, gcusl seria la altura de tna tal mons ‘afia de caddveres? Porque Ia causa princi- al de esta guerra de exterminio, como de- ‘fa S. S, Benodicto XV, os ta guerra hecha a ‘Dioe. Fi Santo Oficio ta ubiese smpedido ‘a ésta, y por ende a equdlla, y también Jos horrores que, bajo nuestros ojos, son su eon: ‘secueneia. ISABEL DE CASTILLA. EL CARDENAL CISNEROS. TORQUEMADA. FELIPE Il. Fue la relna Tsaer pe Casrmts, lena de sabiduria y de dulzura, 1a qus provood la fundaeién de Ta nueva Inquisicon de Espa fin, En st testamento, ella la defenaié como ‘ig obra eapital de su zeinado' fel Cardenal Jiménon de Ciswrnos, al anc. ‘ueuse de su muerte, hizo de ela el stgulen= to cloxio: ‘jamés verd el mundo una reina de tal ‘grandeza de elma, de tal purcza de co fasdn, do tan ferviente pledad y de wna fequidad tan escrupulo ‘Bl Cardona Cissxnos fue un gran hombre ‘de Estado. Fue también, dice Carlos de Sain feFoi, “un obispo cabal, un pladoso religio- So”, ‘Escribié al joven Carlos V una carta ‘para suplicarle remmeiase al designio que s@ Dpabja formaco de hacor mod.ficar ol proce: dimiento de la Inquisiclon, All se Teen estes notables palabras: eh eee Te 108 “Todes las objecioaes formuladas por adversarios de la Inquisicion moderna sido resueltas bajo los Reyes Catéli de gloriosa memoria, y no seria ‘modificar ia menor de sus leyes sin te ‘el honor de Dios”. ‘Tomés de Torgumsina, al quo ta y la Jgnorancla han transformado en go implacable, fue un religioso admirable py su piedad, por si profunda inumilldad, por ‘mortificaciGn, Relusd obstinadamente el zobispado de Sevilla propuesto por Isabel, ro acepté el cargo de Gran Inguisidor si a causa del peligro a que esta funcién exponia 4 El nombre de Pouirs IE recierda a la quisicion funcionanéo «1 maximo bajo st nado. Para los liberales, él es “el de {921 mecioaia”, et “rarufo eoronado” co ol abbé Mor, “sl consultdls a los santos que por of tenares vivian bujo su cotro, Felipe 1 el rey catsiieo por exeoloncia. Santa Teresa, que es considerada igual qx Jun Doctor por Ia Iglesia 1o veneraba. Al ral de su vida, lena de las luces de lo alto ‘madura por la experiercia, 1a gran Santa rresa lo lama “nuestro santo rey Felipe 1 Finalmente, ast como a Inguisicién ‘mana habia tenido sus miértires, Pedro 10 ‘Verona en Tislia y Podro de Castelnan en ranela, Ia nuevs Incuisicion de Hspatia tuvo también el suyo: Pedro Arbus de Bplla, nombrado por Torquemada Tnquisidor en Zaregora. Beatiticado por Alejantro Vit, os: te nuevo Pedro fue cenonizado por Pio IX. ‘Tal fue, en verdad, Ia Inquisieion de Es afi. ‘Bonifacio, Ayudante de la eatedra de Integracién. Aral ee dena, Prforaie Poke Acca ‘CONCLUSION ‘Deside 10s primeros siglos do 1a Iglesia bi ‘po soviedaites secretas cue ensefaron a sus fniclados los princtpios de I anarquio, De thi, profundas pervurbaciones en los impe- Hos. Batonees, los soberanos paganos, cieuos ‘cuando perseguian a la Iglesia, dieron prue- ‘ba de clarividencia castigando a los sectss maniqueas, euya dectrina secreta autorizaba Y animaba 1a rebelion contra la autoridad ci: ily ensefiba el comunismo, Proseritas por Jos emperadores, tanto poganos evanto cris: ‘anos, Ins sectas continuaron su propoganda seereta ¢ invadieron poco a poco Europa oo: ‘ldental bajo nombres diversos, La secta de fos Albigenses lleg® a ser en Francia, en I Edad Media, la mis influyente y la mas per niclosa. "Es para defender 1s fe contra esos pértidos ‘ataques gue se estableco, en Ia mayoria do Jos paises de Europa, el tribunal det Inquist dor, Bra jegitimo, era necessrio, Sirvi6 eft eaamente Ia causa de Iq religi6n, Ia do soberanos ¥ la de lcs pueblos: tales ‘los, desconocidos en nuestros dias, no ‘Ton por eso menos rele, Gracias a su Inquisci6n espectal, que pplla plenamente los deseos de San Pio V, solamente Espefia puto oponerse a toda netraclén de os prinopios deletéreos del lsiantismo. ‘ila salvo de osta manor vunidad, Espatia carees hoy de una Inquisicidn oon: ‘tra el judio y el horeje, corruptores, conspi- adores y sembradoms’ de anarquia, ‘sus Logias masnicas y sus escuelas moder. nas en donde, en nombre de los princi de 1789, se ensefia a hacar las revoluciones, No tiene ya a Torquenada; tiene sus Ferrer, ¥ la secta que ia sadido engendrarios sabe tambien glorificarios y proponerlos como mo- alos los pucblos de los nuevos Uieinpus: Pero Espaiia no est soln en esto. El poder oculto quo personifien y dirige 1a contracelesia ha sustituido al antiguo Te uisidor por su propla Inquisicién. Una aso- eincion intermacionsl de consumados corms. tores conspira por todas partes contra. Ia religion y la sociedad. Su cabera invisible tiene por doquier ojos, para sorprender a faquslios que se oponen «sus designios, y armas, para abatizios Ta Inquisicién mocema es una hidra ge tgantesca que absorhe y devora todas las fuer zas vivas de las naciones, 2 Ins que enlags fea sus innumerables tentéeulos, La antigua tia numana rebelads tra su Cristo. ‘Santo Tomés 1 ‘Dot lara. diab! see, sabo desensa- Senor os fngolos, croar Tas risers Dlotarlas, miontras acuse 4 Mo ser sus sutores. Bila ene 1 ospl dor y $4 am0. Sntanés, su engendra er 2 Proce or cos 38 De pandiraento 6 OAD, 27 te we iar a Simei a nar "No seria ouestidn de resuett Inquisicion contra la hereiia y Js ane ‘convulsions, jar Ia antigua quia, 34 mxne mrt: C4 venoaD som tegen Comprobar esta imposibilidad no slgnith confesar un progreso cualquiera, ya en el 0 ‘den moral y religioso, ya en el orden politi ¥ Social; muy por el contrario, Pero si i © posible, bajo al reinado del Xah, b Ja dominsciin do la Bestia, restablecer tribunal det Inguisidor, se debe, empero, te ner el coraje de decir la verdad y retutar alumnia. De todos 125 tribunales, e3 el In Inquisicién et que supo dar Jas mej ‘garantias de justiola y de equldad. Hizo @e fo que pueden hacer tos otros: eferclé I miserieordla. Se prodijeron abusos en olor tos casos particuleres, porque se desea ron las intenciones de la Iglesia y se gicron las reglas establecidas por los Po Hlces Tomanos: estos exossos provienen 8 4a fragilidad de los hombres y de sus full ‘personales. La Iglesia no es responsable dl ‘ellos. Es convenionte hucerle justicia y {estas la sabiduria do sus insituciones, ¥ no es una de las monores glorias de Orden de Santo Domingo ol haber rect e Jos Pontifices romanos la muy neve ¥ muy saludable misiéa de combatir Ia Ma, ese céncer de In cristiandad. Ta Orden de los Hermanos Predicad no tiene por qué avergonzarse do ello, impropio abogar por Jas olzcunstanetss ate ‘uantes, como si se hubiese estado en falta La Orden de Predicadares ha eolaborado en ‘una obra execlente ante Dios y ante Ios hombres, INDICE PREFACIO PRIMERA PARTE La antigua Inquisicion eclesiditica . 1 1 mm, van EL derecho dle la Iglesia. El deber de los pastores ia defensa de Ia fo desée os ort ‘genes al siglo xr La Inguisioién oonsidercda en su pprocedimicnto secreto “BL Inguisidor de la perversidad nerética” ...... "EL Inquisidor de la. perversidad herétiea” (continuaclén) - EL pro- cedimiento en el tribural del In- quisider . {Un gran inguicidor en tunclones: Sun Juan de Capistrano 3 39 45 Arixoree ari Se einen Taga y los Albigenses Ba ct SEGUNDA PARTE La nueva Inquisicion de Espatia....... 1 T. Por gus fue insitulda 1a nueva In- sleién, a II, Carécier de la nuova Inquisteiém . 61 IIT, Testimonios de los Pontitices ro: manos ..... a6 TV. Ofeada. sobre los procedtmientos. Ta prisién y la tortura, El auto de fe, Fl fuego. Excesos reprochados ‘1a Inquisicién espafiola ........ 98 Avtsoice ‘Isabel de Castilla - 1 Cardenal Cisneros - ‘Torquemada - Felipe I 107 ee al PHONE soca us TITULOS DE EDITORIAL ICTION Paul AULAGNIE: La mise catélica Mateo CRAWLEY: Jestis, Rey de Amor Hora Santa Maree! D€ conTE: ‘Nicea y ol Concillo Vaticano i ‘CRUZADA DEL SANTO ROSARIO: Culto a los Segrados Corazones do Jesis 9 Maria EI Diario de Conchita rd DES LAURIEAS, Joseph 0: SAINTENARIE, Era Geli oA PbCARoICo Antonie PACIOS, LM SON 1a concelebracton umn de morn on TecperinIeproens, Aveda Dis a0, oo by cit do's Seton eed Prt de Santa New de os Boeon Ales 8 de tara de 10sh, frivdad ‘Ge SAN JOAN DE CA PisTwANO (13551558), mane. fuctenns et "pil, pr ac ‘hte etc here aacncl ina ‘ronal de Sats Teas ee ees Oe earn nr ere iee Donan eat eerie OU cnn eke Sian) pee er eee eter ane ree tees Cee i eer ret iene tern So ene eo te Soiree re cme ey Pa cca ore oR ee meter retro at re Cane Pier arc at e oe Crna htr mee} nerd en eet

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