Administración
C.I: 26373581
Mérida-2020
Introducción
Las cuentas por cobrar constituyen tal vez uno de los activos más
importante de la empresa, los activos circulantes, representan el crédito que
concede la entidad a sus clientes con una cuenta abierta.
Las ventas a crédito, que dan como resultado las cuentas por cobrar, normalmente
incluyen condiciones de crédito que estipulan el pago en un número determinado
de días. Aunque todas las cuentas por cobrar no se cobran dentro del periodo de
crédito, la mayoría de ellas se convierten en efectivo en un plazo inferior a un año;
en consecuencia, las cuentas por cobrar se consideran como activos circulantes
de la empresa.
Políticas de crédito
Estándares de crédito
Otra variable que se afecta por los cambios en los estándares de crédito es
la estimación de cuentas incobrables. La probabilidad o riesgo de adquirir una
cuenta de difícil cobro aumenta a medida que los estándares de crédito se hacen
más flexibles y viceversa, esto dado también por el estudio que se hace de los
clientes y su capacidad de pago en el corto y en largo plazo.
Características
Antes de aceptar hacer negocios con algún cliente, la empresa lleva a cabo
un análisis de la solvencia y liquidez a corto plazo del mismo, verificando su
historial crediticio, sus estados financieros y las condiciones económicas
generales del cliente. Si es necesario, se debe solicitar referencias de otras
empresas con las que previamente el cliente haya hecho negocios.
Proceso de cobranza
Aunque las cuentas por cobrar aparecen como activos en la hoja de balance de
una empresa, la empresa puede usarlas para el capital sólo si ésta espera que los
clientes paguen sus facturas o la empresa venda las cuentas a una compañía
financiera. Por otra parte, el valor real de las cuentas suele ser inferior al total de
los saldos, ya que algunos clientes pueden declararse en quiebra o negarse a
pagar sus cuentas.
Anexos
Conclusión