Nº17, OTOÑO 2016

BOLETÍN IEMP
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APEGO
¿QUÉ ES EL APEGO?
El apego es el lazo emocional que desarrolla el niño con sus padres (o cuidadores). Este vínculo define el modo en
que el niño se relacionará con su entorno.
Si el apego es lo suficientemente positivo y estable, le proporcionará seguridad en sí mismo, confianza para explorar
el entorno y habilidades para relacionarse con otros.

¿CUÁNDO COMIENZA EL APEGO?

Pensar en el hijo/a que está por nacer, imaginar un nombre o conversarle son acciones que permiten
fortalecer el vínculo de apego tempranamente.
Cuando el bebé está aún en gestación, los padres se imaginan cómo será y fantasean con las expectativas
que tienen en relación a su futuro. Sin embargo, muchas veces estas ideas e ilusiones no se ajustan
completamente a la realidad. Por este motivo, para poder brindar una buena acogida al bebé que nacerá,
es importante adaptarte a las necesidades y características de él o ella.
Poder aceptar a tu hijo real, con sus fortalezas y debilidades, favorece el buen apego y desarrollo de tu
bebé.
¿SABÍAS QUÉ…?
Aunque hoy en día existe mucha información en relación al apego, hay ocasiones en que se omite un
detalle muy importante: el apego se desarrolla.
La capacidad para acoger y comprender las emociones y deseos de nuestros hijos, se adquiere con las
experiencias de apego que se tuvieron en la infancia. Si a una persona le cuesta entenderse a sí misma y
contener sus emociones, es muy probable que le resulte difícil comprender las emociones de su hijo/a.
Mirarnos a nosotros mismos y comprendernos, es el primer paso para poder mirar y comprender a
nuestros hijos.

EL ROL DEL PADRE

La relación con el hijo/a que nacerá es muy evidente para las madres porque sienten los cambios en su
cuerpo y el movimiento del bebé dentro de ellas. Para el padre, en cambio, la experiencia es menos obvia,
ya que ocurre a través de lo que vive la mujer. Por este motivo, toda vivencia “directa” con el hijo (por
ejemplo, asistir a los controles prenatales), va haciendo más real su presencia.
Si un adulto responde a las sensaciones de desagrado del bebé (frío, hambre, dolor) y
lo calma, éste irá asociando el olor y la voz de ese adulto con un espacio seguro.
Si el padre está presente en estas importantes tareas diarias (mudar, sacar
‘chanchitos’), será también para ese bebé un adulto confiable. Además, más
adelante tendrá un rol fundamental en el proceso de ‘destete’ del bebé.
Por último, pero no menos importante, una tarea central del padre es dar apoyo
a la madre para que la mujer se sienta querida, cuidada, y acompañada.
Todas estas funciones, las puede hacer el padre aunque no viva en la misma casa.
Si el padre no está presente son funciones que también puede hacer un tercero.
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¿QUÉ FUNCIONES CUMPLEN EL PADRE Y LA MADRE CON SU BEBÉ?

1. FUNCIÓN NUTRICIA 2. FUNCIÓN DE CUIDADO

Consiste en alimentar al bebé en el sentido amplio de
la palabra. Esta función alude al alimento concreto,
pero también se refiere a la importancia de alimentar
al bebé con experiencias enriquecedoras que le
permitirán ir conociendo su entorno y vincularse con
él.
Son los cuidados concretos y reales que el bebé necesita.
Para ejercer esta función es importante escuchar las
necesidades de su cuerpo y responder a ellas
cariñosamente. Por ejemplo, mirarlo, hablarle
tiernamente y acariciarlo mientras lo alimentas, lo
mudas o lo bañas.

3. FUNCIÓN DE SOSTÉN 4. FUNCIÓN DE CONTENCIÓN

Es la capacidad de sostener física y emocionalmente al EMOCIONAL
bebé. Se refiere a estar muy atento/a para captar y
- Físicamente, se refiere a tomarlo con firmeza para así responder a las necesidades emocionales del bebé. Para
darle la sensación de seguridad en los brazos de quien responder adecuadamente, es importante que exista
lo sostiene. una disponibilidad afectiva, es decir, ser accesible y
- Emocionalmente, significa consolarlo y calmar esas receptivo para así poder empatizar con las molestias,
emociones que le generan malestar. llantos y emociones de tu bebé.
5. FUNCIÓN DE ESPEJO
Consiste en reflejar al bebé las emociones. La forma en que miras a tu bebé le enseñará a mirarse a sí mismo. Si
él/ella percibe una mirada de amor y de satisfacción, se sentirá querido/a y seguro/a. Del mismo modo, si te
sientes irritable y cansada, es posible que tu bebé lo perciba y se comporte de una manera que reflejará tus propias
emociones, por ejemplo, podrá estar más inquieto o llorar más.

MITOS EN RELACIÓN AL APEGO: ¿VERDADERO O FALSO?

1. SI NO LE DOY PECHO A MI BEBÉ SOY UNA MALA MADRE à FALSO

2. SI SOY UNA MAMÁ QUE TRABAJA TIEMPO COMPLETO NO PODRÉ RESPONDER A LAS
NECESIDADES DE MI BEBÉ à FALSO

3. UN NIÑO NACE DISEÑADO PARA CONECTARSE EMOCIONALMENTE CON SU MADRE

POR UNA CUESTIÓN DE SUPERVIVENCIA à VERDADERO

4. SI SIENTO RABIA O ANGUSTIA EN RELACIÓN A MI BEBÉ PORQUE NO ME DEJA

DORMIR O ME NECESITA DEMASIADO, ES PORQUE NO ESTOY PREPARADA PARA SER
UNA BUENA MADRE à FALSO

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