Reflexión crítica: Desarrollo humano, Jean Piaget

Desarrollo humano: enfoque y teoría

Lic. Ciencias sociales, grupo 1. 2019-1

Sergio Ospino Camacho

Lic. Alejandro Zuluaga Mercado

Universidad del Atlántico.

El ser humano consta de 4 etapas. Según Jean Piaget el ser humano pasa por
cuatro periodos de desarrollo para comenzar a valerse por sí mismo sabiendo que
este es un proceso lento y paulatino evidenciando que el niño tiene un modo de
ver las cosas diferentes al adulto, este proceso vuelve a un niño hombre porque se
va adaptando a las nuevas condiciones que impone la vida en cada una de las
etapas. El primer periodo es desde el momento de nacimiento hasta los dos años.
Según Pean Piaget en este periodo hay tres momentos fundamentales. El primer
momento es cuando el niño solo actúa por reflejo y que sus instintos le provoquen
hacer cosas que nosotros en nuestra ignorancia pensamos que los bebes piensan,
y no es así, el primer momento es cuando el niño actúa solo por reflejo y por
instinto. En el segundo momento es cuando los instintos o reflejos se convierten
en hábitos y cuando el niño empieza a distinguir las cosas por medio de los
sentidos.
En el tercer momento se hace ver que el niño ya coordina sus movimientos y
aparece la inteligencia. Según jean Piaget el niño ve el mundo como una película
de cine en el cual se muestran imágenes y luego desaparecen. Ya a los 2 años de
edad es capaz de buscar lo que quiere y aquí se hace más evidente la aparición
de inteligencia.
El segundo periodo comprende desde los 2 años hasta los seis años. En esta
etapa el niño ya posee inteligencia y empieza a tener hábitos imitados como la del
idioma en que se comunica, o sea que el niño aprende a decir las acciones que va
a realizar por medio del lenguaje que maneje.
Durante esta etapa, los niños aprenden cómo interactuar con su ambiente de una
manera más compleja mediante el uso de palabras y de imágenes mentales. Esta
etapa está marcada por el egocentrismo, o la creencia de que todas las personas
ven el mundo de la misma manera que él o ella.
También cree en esta etapa del desarrollo que los objetos inanimados tienen las
mismas percepciones que ellos, y pueden ver, sentir, escuchar, etc. Un segundo
factor importante en esta etapa es la conservación de la cantidad, que es la
capacidad para entender que la cantidad no cambia cuando la forma cambia.

La tercera etapa tiene lugar entre los siete y doce años aproximadamente y está
marcada por una disminución gradual del pensamiento egocéntrico y por la
capacidad creciente de centrarse en más de un aspecto de un estímulo.
Pueden entender el concepto de agrupar, sabiendo que un perro pequeño y un
perro grande siguen siendo ambos perros, o que los diversos tipos de monedas y
los billetes forman parte del concepto más amplio de dinero.

Y en la cuarta etapa, la etapa final del desarrollo cognitivo (desde los doce años
en adelante), los niños comienzan a desarrollar una visión más abstracta del
mundo y a utilizar la lógica formal. Pueden aplicar la reversibilidad y la
conservación a las situaciones tanto reales como imaginadas. También
desarrollan una mayor comprensión del mundo y de la idea de causa y efecto.
Esta etapa se caracteriza por la capacidad para formular hipótesis y ponerlas a
prueba para encontrar la solución a un problema.
Otra característica del individuo en esta etapa es su capacidad para razonar en
contra de los hechos. Es decir, si le dan una afirmación y le piden que la utilice
como la base de una discusión, es capaz de realizar la tarea.