La película describe la historia desde el nacimiento de Riley y las emociones de alegría, miedo, tristeza, rabia y desagrado, aquí vemos reflejado el conocimiento innato, ya que, las emociones son innatas; dichas emociones están en la mente de la niña, determinan sus actos y se almacenan en la memoria. Estas emociones son generadas y enviadas por medio de una consola cada emoción se representa con esferas de un color (Alegría/Amarillo, Miedo/Morado, Tristeza/Azul, Rabia/Rojo, Desagrado/ verde). Las emociones pueden ser modificadas por otras que en su mayoría generan alegría, una gran emoción se almacena en otra estructura llamada pensamiento central, estos pensamientos son los más importante en la vida de la niña y cada pensamiento central impulsa un aspecto diferente de la personalidad de Riley, que las denominan islas y a medida que va creciendo se presentan características en el área psicomotriz como sus habilidades hacia el deporte que en el caso de ella es el hockey y se refleja como la isla del hockey, en cuanto a su área afectiva lo vemos reflejada en la islas de la amistad, de la familia y las bobadas que hacen que tenga una relación mucho más cálida con sus padres , por su parte la área cognitiva se muestra desde que la niña empieza a percibir por sus sentidos y se va ampliando con otros elementos de la cognición, como lo es el lenguaje, la memoria ( que es muy nombrada en la película) aprender a manejar la inteligencia emocional, la intuición, y sus habilidades psicomotrices que van de la mano; con la isla de la honestidad ella muestra una conducta anticipada que fue percibida por sus emociones. Al cumplir los 11 años, se tienen que mudar y ocurre su primer duelo por separación, sus emociones se confunden, aunque trata de mantenerse alegre, solo están el temor, el miedo y la rabia, y enfrenta un estrés por tener que afrontar cosas nuevas. Su comportamiento es de forma extraña delante de sus padres y en su nueva escuela, llegando a pensar en huir a la ciudad donde vivía anteriormente pero interviene su Meta cognición y es cuando recapacita y decide volver a casa contándole a sus padres con mucha tristeza todo lo que siente, alegando que extraña su antigua casa, sus amigos y su equipo de hockey, obteniendo así el consuelo de sus padres. Al transcurrir un año se va adaptando a su nuevo hogar y ya en el pre- adolescencia aparecen una diversidad de emociones y nuevos pensamientos. La película expresa claramente los procesos de aprendizaje que se perciben a través de los sentidos, la familia, las amistades, el deporte y de avanzar progresivamente en la escuela. En este caso las experiencias de alegría estimulan el aprendizaje, y la adquisición del conocimiento y afianzamiento de lo aprendido con la colaboración de las dos figuras de autoridad que son sus padres, por ejemplo en el momento que le dieron el brócoli y ella lo rechazo la acción positiva del padre fue simular un avión y que la niña lo viera con agrado y así poder comerlo. Se observa otro ejemplo, cuando hace su primer gol en el hockey de manera accidental y sus padres lo celebran como un logro de la niña; cabe destacar también que en el momento que la niña pierde el control le llama la atención, imponiendo su autoridad sin maltratarla y luego sube a conversar con ella. Se ha visto que nuestras identidades están definidas por emociones específicas, que determinan como percibimos al mundo, cómo nos expresamos y como otras personas responden hacia nosotros. La película nos deja claro que las emociones son las encargadas de regular el pensamiento racional, también guían nuestras percepciones del mundo, nuestros recuerdos del pasado y recalca lo importante que son nuestras emociones en la vida social y la forma en la que interactuamos con nuestra familia, amigos y desconocidos. Por otro lado, la inteligencia puede ni tener la menor importancia cuando dominan las emociones. Todas las emociones son impulsos para actuar, es decir, la forma que demostramos las emociones o se contienen de intimidad son moldeados por la cultura. Asimismo en un sentido real, tenemos dos mentes, u na que piensa y otra que siente. Goleman concuerda con otros especialistas, al señalar que tenemos dos mentes. Una, la mente racional de la que somos típicamente más conscientes: más destacada en cuanto a la conciencia, reflexiva, capaz de analizar y razonar. Pero, junto a esta existe otro sistema de conocimiento, impulsivo y poderoso, aunque a veces ilógico: la mente emocional. Cuanto más intenso es el sentimiento, más dominante se vuelve la mente emocional y más ineficaz la racional. En pocas palabras, las emociones descontroladas pueden hacer estúpido al inteligente. La inteligencia emocional es muy importante hoy día, puesto que si la sabemos aplicar en nuestra vida cotidiana, podremos obtener mejores resultados con respecto a los conflictos que se nos presentan en nuestro entorno. Sin embargo, la inteligencia es la clave para determinar nuestra forma de pensar, haciendo que muchos de nosotros nos demos cuenta de detalles que tuvieron tanta importancia e influencia en nuestra forma de actuar. La inteligencia emocional es saber controlar los impulsos y saber cómo obtener un bien de ellos. Lo importante es saber dónde aplicar esa inteligencia emocional, un ejemplo sería que las personas que son consideradas como serias y tímidas al momento de estar en un trabajo donde es importante socializar lo pueden hacer sin problemas, pero en circunstancias donde no es necesario son más reservadas, y eso no siempre quiere decir que son inseguros, simplemente tienen su forma de ser y la inteligencia para saber dónde deben aplicar todo lo que es la inteligencia emocional, ya sea estar en contacto con los sentimientos de los demás, socializar, saber controlar los sentimientos y estar en contactos con ellos. Sin duda para mí la forma de ser no siempre tiene que determinar la seguridad o inseguridad de una persona, hay personas abiertas que se supone que por el simple hecho de ser así son seguras pero en situaciones de verdad importancia donde deben mostrar su seguridad y un buen control de sentimientos e instintos, dejan al descubierto su inseguridad para actuar en situaciones de importancia. Cada persona puede tener buena inteligencia emocional, independientemente de su forma de ser, hay gente que es totalmente agresiva, pero en determinadas circunstancias, por ejemplo en la calle, son totalmente tolerantes y saben controlar sus impulsos, y su agresividad la desahogan en otros lados o en otras actividades. La inteligencia emocional trata de que podamos entender donde debemos aplicar esa inteligencia, y no tener que cambiar nuestra forma de ser, sino más bien aprender a controlar nuestras emociones, nuestros sentimientos, puesto que los sentimientos son esenciales para el pensamiento y el pensamiento lo es para el sentimiento. Finalmente se diría más bien, que la inteligencia emocional trata de entender, controlar y modificar estados emocionales propios y ajenos. Es tal vez, dirigir y equilibrar las situaciones humanas. Aparentemente, la experiencia indica que todos debemos estar en un proceso de cambio y, sobretodo hoy, donde la innovación tecnológica, y la comunicación están produciendo los grandes cambios en las relaciones sociales. De acuerdo a cada experiencia, la inteligencia emocional comprende la visión, misión, valores personales, familiares y profesionales de cada uno de nosotros. Se debe hacer tareas diarias para obtener resultados concretos y todo ello es posible si hay constancia y emotividad.