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Revisión de las Metodologías sobre

Evaluación de Riesgos en Salud para


el Estudio de Comunidades Vulnerables
en América Latina
César A. Ilizaliturri, Donaji González-Mille, Nadia A. Pelallo, Gabriela
Domínguez, Jesús Mejía-Saavedra, Arturo Torres Dosal,
Iván Pérez-Maldonado, Lilia Batres, Fernando Díaz-Barriga
y Guillermo Espinosa-Reyes

RESUMEN

Los métodos para evaluar el riesgo en salud se basan, en al afectar la vulnerabilidad, también deben ser considerados para
general, en el monitoreo ambiental y en la estimación de la ex- la caracterización del riesgo. Estos factores de vulnerabilidad
posición a través de modelos matemáticos. La incertidumbre de pueden evaluarse a través de indicadores. Al final, con los análi-
tal estrategia es grande. En consecuencia, para incrementar la sis ambientales, el uso de biomarcadores y el manejo de indicado-
certidumbre sobre la evaluación de la exposición a los contami- res ambientales, sociales y de salud, puede evaluarse el riesgo de
nantes, se ha propuesto el empleo de biomarcadores. No obstante, manera integrada (humanos y biota). En esta revisión se presentan
la complejidad de los nuevos escenarios de riesgo obliga a evalu- las diversas estrategias empleadas por este grupo de trabajo para
ar no solamente a las poblaciones humanas sino también al resto evaluar el riesgo en sitios contaminados, comunidades marginadas
de la biota. Asimismo, factores ambientales, sociales y de salud, y en áreas afectadas por el cambio global climático.

n el campo de la salud biológicos (genética, edad, sexo, raza, tora; y iii) la población receptora. Para
ambiental, el término toxicocinética, etc.) y de estilos de vida que exista un riesgo, la población debe
riesgo significa la proba- individuales, entre otros. entrar en contacto con el tóxico, es decir,
bilidad de que un efecto no deseado ocu- En este contexto, el pro- debe haber exposición. Sin embargo, para
rra como resultado de la exposición a di- ceso de evaluación del riesgo se transfor- que ocurra un efecto biológico que puede
ferentes agentes causales (tóxicos, xeno- ma en materia de salud pública y adquiere o no terminar en un daño a la salud, nor-
bióticos, contaminantes, etc.). Sin embar- relevancia. No obstante ello, la evaluación malmente el contacto no es suficiente,
go, hay que considerar que la ocurrencia del riesgo no siempre se materializa, ya sino que se requiere de la entrada del
de un efecto adverso depende no solo de que lograrla implica contar con informa- tóxico al organismo del ser vivo expuesto.
la dosis interna que se alcance de un de- ción de tres factores: i) la fuente del agen- En los sitios contamina-
terminado tóxico tras la exposición, sino te causal (p.e., la fuente de contamina- dos es común que la problemática am-
también de otros factores como la variabi- ción); ii) el medio por el cual este agente biental involucre múltiples factores estre-
lidad interindividual asociada a factores entra en contacto con la población recep- santes y varios medios impactados. Por lo

PALABRAS CLAVE / Evaluación de riesgos / Evaluación integrada / Impacto en salud /


Recibido: 03/10/2008. Modificado: 06/10/2009. Aceptado: 07/10/2009.

César Arturo Ilizaliturri Hernández. Maestro en Ciencias Ambientales. Investigador, Universidad Autónoma
de San Luis Potosí (UASLP), México.
Donaji Josefina González Mille. Maestra en Ciencias Ambientales. Investigadora, UASLP, México.
Nadia Azenet Pelallo Martínez. Maestra en Ciencias Ambientales. Investigadora, UASLP, México.
Gabriela Domínguez. Doctora en Ciencias Ambientales. Investigadora, UASLP, México.
Jesús Mejía Saavedra. Doctor en Investigación Biomédica Básica. Profesor Investigador, UASLP, México.
Arturo Torres Dosal. Doctor en Ciencias Ambientales. Profesor Investigador, El Colegio de la Frontera
Sur, Villahermosa, (ECOSUR), México.
Iván N. Pérez-Maldonado. Doctor en Investigación Biomédica Básica. Profesor Investigador, UASLP, México.
Lilia E Batres Esquivel. Licenciada en Químico-fármaco-biología. Profesora Investigadora, UASLP, México.
Fernando Díaz-Barriga Martínez. Doctor en Biología Celular. Profesor Investigador, UASLP, México.
Guillermo Espinosa Reyes. Doctor en Ciencias Ambientales. Investigador, UASLP, México. Dirección: Aveni-
da Venustiano Carranza No. 2405, Col Lomas los Filtros, San Luis Potosí 78210, SLP, México. e-mail: espinosareyes@gmail.com

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tanto, no resulta extraño que los tomado- son la de mujeres embarazadas, los infan- sociales, la cuestión ambiental no es de
res de decisión requieran simplificar la tes y los niños. alta prioridad. Es decir, no es posible
complejidad a fin de ordenar, guiar o di- En un enfoque más no- arriesgar la erogación de recursos econó-
señar medidas de intervención que reduz- vedoso, el concepto de poblaciones recep- micos cuantiosos en limpieza de sitios
can los riesgos identificados. En este con- toras debe expandirse a los diferentes solo por una mala definición de riesgo. Es
texto surgen las metodologías que tienen componentes del ecosistema, por lo que así que la Organización Panamericana de
precisamente como objetivo, la identifica- en organismos de vida silvestre habría que la Salud (Díaz-Barriga, 1999) encabezó
ción de los riesgos y la determinación de considerar etapas críticas (etapas larvarias, un análisis crítico de las metodologías
las magnitudes de los riesgos identifica- huevos, crías, etc.). Mientras que en un existentes para mejorarlas, disminuyendo
dos. En esta revisión del tema se presenta enfoque bajo el concepto de paisaje se su incertidumbre. Como resultado se pro-
el estado del arte de las metodologías debe tomar en cuenta los ecosistemas frá- puso el uso de biomarcadores de exposi-
para la evaluación de los riesgos en salud giles o perturbados y, finalmente, en un ción y de biomarcadores de efecto. Los
derivados de la exposición a sustancias enfoque ecosistémico habría que tomar en primeros implican el monitoreo de las
químicas y contaminantes ambientales, cuenta la calidad de los recursos. sustancias tóxicas o sus metabolitos en
con la idea de discutir su utilidad en los En este contexto, la pre- fluidos biológicos o tejidos del individuo
países de América Latina. sente revisión se enfocará en: i) las meto- supuestamente expuesto. Por citar un
dologías tradicionales de evaluación de ejemplo, no basta en esta metodología
Escenarios que Requieren la riesgos en salud que normalmente se apli- muestrear plomo en suelo, sino que tam-
Evaluación de Riesgos can en sitios contaminados por residuos bién debe realizarse un análisis de plomo
peligrosos, ii) las metodologías de evalua- en sangre, que certificaría la absorción del
Como se señaló, los ries- ción de riesgos sanitarios que pueden apli- compuesto. Por otra parte, el empleo de
gos en salud se generan por una exposi- carse en escenarios de alta marginación biomarcadores de daño o de efecto, repre-
ción a agentes causales. En general, éstos social, iii) las novedosas metodologías de senta el hecho que el tóxico ya absorbido
pueden ser químicos (sustancias químicas evaluación integrada de los riesgos en sa- ha comenzado a afectar la función celular.
contaminantes del ambiente, fármacos, lud para sitios de alta complejidad quími- Ejemplos de estos biomarcadores de efec-
productos industriales, etc), físicos (radia- ca, y iv) una nueva propuesta metodológi- to o de daño son la actividad de enzimas
ción), o biológicos (microorganismos pa- ca para evaluar sitios climáticos, sitios (como las colinesterasas en pacientes ex-
tógenos). Si bien la naturaleza de estos donde la exposición a factores estresantes puestos a insecticidas organofosforados;
distintos peligros que pueden llegar a su- se incrementa por el cambio global climá- Joshaghani et al., 2007); la apoptosis (en
poner una amenaza para la salud humana tico. niños expuestos al DDT; Pérez-Maldonado
obligan a aproximaciones metodológicas et al., 2004) y la disminución del coefi-
muy distintas, en el presente trabajo se Evaluación de Riesgos en Salud ciente intelectual (en niños expuestos a
hará referencia exclusivamente a las eva- plomo; García-Vargas et al., 2001; Can-
luaciones por exposición a sustancias tóxi- La necesidad de realizar field et al., 2003).
cas y peligrosas. una evaluación de riesgos en salud en si- La evaluación de riesgos
Donde dichos tóxicos se tios contaminados, bajo una metodología en salud se emplea principalmente en si-
encuentren presentes, habrá la necesidad científica, surge el siglo pasado, alrededor tios contaminados. En México, los sitios
de realizar una evaluación de riesgos. Sin de los años 80s, cuando en EEUU se es- peligrosos contaminados con sustancias
embargo, es importante tomar en cuenta tablecen leyes y reglamentos para estudiar tóxicas pueden clasificarse en sitios mine-
dos factores: i) la concentración del con- áreas impactadas por elementos tóxicos. ros, regiones agrícolas, zonas industriales,
taminante y ii) la temporalidad de la ex- Entonces, tanto la Agencia de Protección campos petroleros, depósitos de residuos o
posición. Ambiental (EPA por sus siglas en inglés; basura, cuerpos de agua contaminados, y
La exposición a un agen- EPA, 2004) como la Agencia para las áreas afectadas por contaminación natural
te causal, o a una mezcla de ellos, no bas- Sustancias Tóxicas y el Registro de Enfer- (yacimientos, volcanes, incendios, etc.;
ta para que exista un efecto en salud. Para medades –(ATSDR por sus siglas en in- Díaz-Barriga, 1996). La situación en
que eso ocurra el agente debe alcanzar su glés; ATSDR, 2008) generaron opciones México, quizá con algunas modificaciones
concentración tóxica. Sin embargo, debe metodológicas. Estas opciones parten de puntuales, resulta similar a la presentes en
considerarse que la concentración tóxica una amplia evaluación ambiental (cuantifi- otras naciones latinoamericanas. En con-
puede ser muy baja si la exposición ocu- cando tóxicos en los medios involucrados secuencia, en la región nos enfrentamos a
rre en una etapa de vulnerabilidad bioló- en las rutas de exposición) para después, un problema de salud pública donde po-
gica. Estas ventanas de vulnerabilidad mediante definición de escenarios de ex- tencialmente existen riesgos a la salud hu-
pueden presentarse previas al nacimiento, posición y tratamiento probabilístico de la mana, por lo que es muy importante con-
como por ejemplo la preconcepción (que información (p.e., modelos de simulación tar con una guía para evaluar su peligro-
involucra a la madre), la etapa embriona- Montecarlo), generar estimados cuantitati- sidad. Nuestro grupo ha tenido éxito al
ria, fetal o posteriores al nacimiento: neo- vos de riesgo. Estas metodologías son úti- aplicar biomarcadores de exposición y de
natal, infancia, niñez y hasta la adolescen- les pero en mayor o menor grado se en- efecto en las metodologías de riesgo.
cia. Es importante señalar que aún cuando frentan a incertidumbres, siendo una de En una zona urbana con-
la exposición al agente tóxico ocurra en las mayores la incertidumbre relativa a la taminada con As y Pb por una metalúrgi-
alguna de estas etapas el efecto puede exposición. ca se demostró exposición infantil midien-
presentarse tiempo después, incluso en el El no definir el riesgo de do Pb en sangre y As en orina (Díaz-Ba-
individuo adulto, pues existe un periodo manera adecuada puede implicar el gasto rriga et al., 1993a; Calderón et al., 2001;
de latencia de un efecto adverso por una innecesario de recursos económicos en la Carrizales et al., 2006) y se registró daño
exposición a un contaminante (EPA, limpieza de un sitio. En América Latina, neuropsicológico asociado al As (Calderón
2006; IPCS, 2006; Gilbert y Miller, ante la pobreza, la educación insuficiente, et al., 2001); utilizando modelado se logró
2008). De manera tal que las poblaciones la falta de empleos adecuados bien remu- definir las rutas de exposición (Carrizales
receptoras que merecen mayor atención nerados, y ante otras muchas carencias et al., 2006). A partir de estos estudios,

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la empresa responsable actuó y ahora los parámetros toxicocinéticos; por ejemplo, canzan su desarrollo potencial (OMS,
niveles de Pb en sangre y As en orina en en niños se mostró que la exposición a 2008), más de cinco millones de infantes
los niños son menores a los de hace 20 deltametrina solo puede medirse antes de de 0-14 años mueren cada año por enfer-
años (Carrizales et al., 2006). Este tipo de los tres días posteriores al contacto con medades relacionadas con condiciones
trabajo se implementó en otras zonas me- este insecticida piretroide (Ortiz-Pérez et ambientales adversas, principalmente en
talúrgicas, y en una de ellas se evaluó el al., 2005). países en desarrollo, lo que significa en
riesgo retrospectivo utilizando modelado y En conclusión, la modi- promedio 13000 muertes infantiles por día
valores de Pb en sangre (Díaz-Barriga et ficación metodológica de la evaluación de (UNICEF/OMS, 2002).
al., 1997a); en otra zona las investigacio- riesgos en salud utilizando biomarcadores Asimismo, la Organiza-
nes fueron la base de la restauración de de exposición y de efecto disminuye las ción Mundial de la Salud (OMS) ha esti-
un pasivo ambiental (Hicks et al., 2006). incertidumbres, permite generar instru- mado que en todo el mundo el 24% de la
La contaminación natu- mentos de gestión que llevan al diseño carga de morbilidad (años de vida sana
ral de acuíferos por flúor es un problema de medidas para la reducción de los ries- perdidos) y ~23% de todas las defuncio-
de varios países en América Latina. Des- gos, así como para redefinir y orientar de nes (mortalidad prematura) se encuentran
tacan, sin embargo, los casos de Argenti- forma más efectiva estudios epidemioló- relacionadas con factores ambientales,
na y México. Solamente en México más gicos subsiguientes, permitiendo estable- pero en los niños de 0-14 años, el porcen-
de seis millones de individuos viven en cer mejores hipótesis de relación causal taje de muertes atribuibles al medio am-
áreas dónde el agua potable tiene valores entre la exposición a un determinado biente es de hasta un 36% (Prüss-Üstün y
altos de este elemento (Díaz-Barriga et al., tóxico y el efecto en la salud. No obstan- Corvalán, 2006). Entre las enfermedades
1997c). Señalar que el F puede represen- te, esta metodología debe tomar en cuen- con mayor carga absoluta atribuible a fac-
tar un riesgo no es fácil, ya que este ele- ta las principales limitaciones en el uso tores ambientales modificables figuran la
mento ha sido utilizado ampliamente para de biomarcadores, como pueden ser los diarrea, las infecciones de las vías respi-
la protección contra la caries; en conse- costos (acorde a la complejidad del esce- ratorias inferiores y el paludismo. La car-
cuencia, definir su toxicidad ha implicado nario de exposición y a la elección de los ga de morbilidad por diarrea está asociada
realizar estudios de efectos en la salud. biomarcadores), la necesidad de equipa- en ~94% con factores de riesgo ambienta-
Nuestro grupo en una ciudad afectada por miento y capacidad técnica, y su aplica- les tales como el consumo de agua no po-
este elemento, demostró la exposición in- bilidad en función de su toxicocinética y table, el saneamiento y la higiene insufi-
fantil a través de la cuantificación del F toxicodinamia (p.e., respuesta del biomar- cientes (Cifuentes et al., 2002; Morris,
en orina (Grimaldo et al., 1995), el daño cador contra la duración e intensidad del 2004; Prüss-Üstün y Corvalán, 2006). Por
por fluorosis dental (Grimaldo et al., la exposición). su parte, las infecciones de las vías respi-
1995), fluorosis esquelética (Calderón et ratorias inferiores se asocian a la conta-
al., 1995), daño reproductivo (Ortíz-Pérez Evaluación de Riesgos Sanitarios minación del aire en locales cerrados, re-
et al., 2003) y alteraciones neuropsicoló- lacionada en gran medida con la utiliza-
gicas (Rocha-Amador et al., 2007). En El abordaje de la evalua- ción de combustible sólido en los hogares
forma paralela se demostró la contamina- ción de los riesgos sanitarios que enfren- y posiblemente con la exposición pasiva al
ción, identificando las principales rutas de tan las poblaciones humanas conduce no humo del tabaco, así como con la conta-
exposición, así como la estimación del solo a la evaluación de la exposición a minación del aire exterior (Riojas et al.,
riesgo por consumo de F en agua, bebi- sustancias tóxicas y/o nocivas y a sus res- 2001; Smith, 2003; Balakrishnan et al,,
das, sal, etc. (Díaz-Barriga et al., 1997b; pectivos efectos sobre su salud, sino tam- 2004: Schei et al., 2004; Prüss-Üstün y
Grimaldo et al., 1997). bién a la identificación y análisis de otros Corvalán 2006; Deherani et al., 2008).
Como resultado de los factores ambientales adversos relacionados En países desarrollados, ~20% de las in-
datos obtenidos, ahora las embotelladoras con la falta de agua potable y de servicios fecciones respiratorias son atribuibles a
de esa ciudad cuentan con sistemas de po- de saneamiento básicos, la falta de infra- causas ambientales, y en los países en de-
tabilización (como ósmosis inversa); tam- estructura, así como a la falta de educa- sarrollo ese porcentaje llega hasta un 42%
bién se propusieron reformas a la norma- ción y hábitos de higiene en poblaciones (Prüss-Üstün y Corvalán, 2006). Final-
tiva para flúor en agua potable, cambio que, además, viven bajo condiciones de mente, la prevalencia de paludismo atri-
que aparecerá para su revisión en la alta marginación y pobreza. Estas comu- buible a factores ambientales modificables
próxima modificación de las normas mexi- nidades son, entonces, altamente vulnera- es de un 42%, y está asociado a las polí-
canas para agua potable. Pero quizá la bles no solo por las múltiples exposiciones ticas y prácticas de aprovechamiento de
mejor prueba de que los biomarcadores ambientales, sino por el ambiente social tierras, deforestación, ordenación de los
funcionan es un estudio de exposición que les rodea (Lee, 2002). recursos hídricos, ubicación de los asenta-
efectuado entre trabajadores de un confi- El análisis de temas de mientos, y modificación del diseño de las
namiento para residuos industriales (Díaz- salud pública bajo esta perspectiva condu- viviendas (Prüss-Üstün y Corvalán, 2006).
Barriga et al., 1993b; Gonsebatt et al., ce al problema de enfrentarse a múltiples El agua contaminada y
1995). La caracterización ambiental era factores (sociales, ambientales, culturales, el uso de biomasa al interior de las vi-
imposible, dado que en el sitio a estudiar de salud) cuya interrelación acentúa los viendas son dos prioridades ambientales
había miles de toneladas de residuos in- riesgos que se manifiestan a través de en- que urge atender (Balakrishnan et al,
dustriales de procedencia y contenido des- fermedades como diarreas, infecciones 2004; Prüss-Üstün y Corvalán, 2006; De-
conocidos. Se optó por evaluar la geno- respiratorias, enfermedades infecto-conta- herani et al, 2008). Las enfermedades
toxicidad en los trabajadores expuestos y giosas y transmisibles, así como intoxica- diarreicas asociadas a la falta de acceso al
los resultados fueron alentadores, ya que ciones por exposición a plaguicidas y ali- agua potable y a un saneamiento insufi-
los trabajadores de mayor antigüedad y mentos contaminados. De aquí que, desde ciente ocasionan ~1,7 millones de defun-
potencialmente más expuestos presentaron una perspectiva internacional, en los paí- ciones cada año. En tanto, el uso domésti-
los mayores efectos. Ahora bien, el uso ses pobres, un niño muere cada 15seg por co de combustibles de biomasa y carbón
indiscriminado de biomarcadores puede enfermedades diarreicas (Morris, 2004), por más de la mitad de la población mun-
traer falsos resultados si no se consideran 200 millones de niños en el mundo no al- dial causa 1,5 millones de muertes al año

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debido a enfermedades respiratorias rela- como la contaminación del aire interior Evaluación Integrada de Riesgos
cionadas con la contaminación. (CO y PAH). Lo anterior redundó en la
Según lo anterior, surgen mejora de aspectos de tipo ambiental, so- Una buena salud am-
los siguientes cuestionamientos: ¿Cómo cial y de salud de una manera más articu- biental supone una buena calidad de vida
evaluar riesgos sanitarios? ¿Cómo evaluar lada. Cabe aclarar que esta aproximación bajo un enfoque ecosistémico; esto es,
riesgos que tienen que ver con la contami- metodológica, no busca las relaciones cau- que el ser humano debe ser tomado en
nación, con la marginación, con la pobreza sales de tipo lineal entre uno u otro factor cuenta como un participante más de todo
y con tantos otros factores de desigualdad de riesgo, sino más bien persigue la iden- un ecosistema. En consecuencia, los fac-
social? Obviamente no cabe seguir un mé- tificación de factores adversos que de ma- tores ambientales que pueden afectar a la
todo tradicional, y tampoco es posible em- nera sinérgica condicionan la salud y cali- población no se reducen a las sustancias
plear las metodologías de evaluación de dad de vida de la población. químicas, físicas o biológicas que direc-
salud que se han planteado en países desa- No obstante, profundi- tamente pueden afectar a la salud, sino
rrollados tales como Australia (Beer y Zio- zando aspectos de la salud comunitaria, también a aquellos factores que al afectar
lkowski, 1995) o los de la Unión Europea se llevó a cabo otro estudio que tuvo al ecosistema, afectan la calidad de vida.
(Ferguson et al., 1998). En nuestro caso es como objetivo central identificar y compa- Entre otros cabe mencionar al cambio
preferible seguir la evaluación a través del rar los principales problemas de salud climático, la ruptura y adelgazamiento de
uso de indicadores, valorando indicadores asociados a la injusticia ambiental en tres la capa de ozono, la desertificación, y la
sociales, ambientales y de salud, seleccio- sitios del área metropolitana de San Luis deforestación.
nándolos a partir de un análisis detallado Potosí. Se realizó una evaluación integral Por razones prácticas, las
de indicadores ya existentes y ampliamente de salud a nivel comunitario, mediante la metodologías de evaluación de riesgo para
utilizados (Eyles y Furgal, 2000; CONA- aplicación de 36 diferentes indicadores salud humana y para biota (riesgo ecoló-
PO, 2000; OMS, 2000; OPS-OMS 2000, (sociales, ambientales, salud) en población gico) se han desarrollado de manera inde-
2001; SSA-PRASA, 2001; DGSA, 2002; infantil que habita en Milpillas (comuni- pendiente; sin embargo, se reconoce cada
PNUMA-OPS, 2003). dad pepenadora suburbana con alto nivel vez más la necesidad de establecer mejo-
En un ejercicio real, de marginación), en Tercera Chica (comu- res niveles de protección tanto para el ser
nuestro grupo de trabajo llevó a cabo, en nidad ladrillera urbana con muy alto nivel humano como para los otros componentes
primer término, la obtención de informa- de marginación) y en Zona Centro (comu- del ambiente. Por ello surge la necesidad
ción de algunos indicadores de importan- nidad urbana con baja marginación y con de diseñar una metodología de evaluación
cia local, identificando sus posibles rela- tráfico vehicular). integrada de riesgo que contemple tanto a
ciones. Por ejemplo, nivel de marginación, Los indicadores fueron la población humana como a otros recep-
acceso a servicios médicos, uso de fogo- organizados y clasificados según su natu- tores ecológicos en un solo proceso. En
nes y leña en interiores, daño respiratorio raleza en cuatro grupos: morbilidad, de- materia ambiental las decisiones no pue-
y/o genotóxico, y enfermedad pulmonar terminantes directos de salud, determinan- den ser completamente adecuadas si úni-
crónica obstructiva. Así, recientemente se tes sociales, y determinantes abientales, y camente se considera de forma parcial la
aplicó la metodología en una comunidad se aplicaron criterios de calidad, conside- protección a los humanos o a otras espe-
indígena de la región Huasteca (Torres- rándolos factores de riesgo reales y/o po- cies de fauna y flora. En muchos casos la
Dosal et al., 2008), donde todos los habi- tenciales (Domínguez, 2009). contaminación ambiental afecta más a los
tantes empleaban leña para la preparación A partir de un análisis receptores no humanos, debido a una ma-
de sus alimentos en fogatas interiores. El epidemiológico (prevalencias, razones de yor exposición o dado que estos indivi-
uso de leña genera contaminación en inte- momios de prevalencias-RMP, riesgo atri- duos resultan ser los más sensibles a los
riores a través del humo (partículas sus- buible proporcional-RAP y vulnerabilidad efectos negativos (Suter, 1993; Aylward et
pendidas, monóxido de carbono, etc.) y a total-VT) y del empleo de técnicas de es- al., 1996). La falta de integración frecuen-
través del hollín (hidrocarburos aromáti- tadística multivariada de tipo exploratorio, temente conduce a que tanto los evaluado-
cos policíclicos tales como PAH, formal- se construyeron escenarios multidimensio- res de riesgo humano como de riesgo eco-
dehído, etc.). Al aplicar la metodología nales de riesgo en salud, y se identificaron lógico generen evidencias que podrían pa-
fueron detectadas las fuentes contaminan- factores determinantes y condicionantes recer contradictorias acerca de la natura-
tes y además, se pudo controlar la princi- de salud y vulnerabilidad en esas comuni- leza de los riesgos asociados a un sitio
pal fuente por medio de estufas con chi- dades. contaminado.
menea (esquema normal de múltiples pro- Dichos escenarios no Resulta entonces clara la
gramas en comunidades indígenas). Se solo mostraron evidencia de la compleja necesidad de establecer una metodología
mejoraron las condiciones de la vivienda problemática de salud que enfrentan es- de evaluación integrada de riesgo, cuyos
limpiando el hollín en techos y pavimen- tas comunidades, principalmente en las objetivos: i) mejorar la calidad y la efi-
tando los pisos de tierra. Al evaluar la ex- de mayor marginación y pobreza (Milpi- ciencia del proceso de evaluación por me-
posición (PAH y CO) y los efectos bioló- llas y Tercera Chica), sino que mediante dio del intercambio de información entre
gicos (síntomas respiratorios y genotoxici- la ponderación, jerarquización y priori- la salud humana y los estudios ecotoxico-
dad) antes y después de la intervención, zación de los factores de riesgo identifi- lógicos, y ii) proveer mejores argumentos
se mostró que el programa resultó efectivo cados bajo esta perspectiva holística, se para el proceso de toma de decisiones
y el gobierno estatal lo ha venido instru- generaron diagnósticos integrales de sa- ambientales. El esquema que sigue nuestra
mentando en varias comunidades. lud y vulnerabilidad comunitaria expre- propuesta integrada no pretende conjuntar
En este primer abordaje, sados cuantitativamente mediante la ge- las metodologías ya existentes de la Eva-
se logró atacar un problema de salud, neración de un “Índice de Salud Comuni- luación del Riesgo en Salud (Díaz-Barri-
considerando algunos determinantes socia- taria” que proporciona información para ga, 1999; EPA, 2004) y de la Evaluación
les tales como marginación y pobreza, re- la toma de decisiones y diseño e imple- del Riesgo Ecológico (Suter, 1993; EPA,
flejados en pisos de tierra y uso de leña mentación de programas de intervención 1994a, b, 1998, 1999) debido a que, de
como biocombustible en las viviendas, así acordes con las necesidades reales de cada seguir ese camino, se tendría una metodo-
como determinantes ambientales tales comunidad (Domínguez, 2009). logía larga, complicada y costosa. Por el

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contrario, para el diseño del bases sólidas para apoyar en
método integral solamente se la toma de decisiones. Cuan-
han tomado los puntos clave do se obtienen resultados in-
de ambas; es decir, este es- consistentes derivados de eva-
fuerzo integrado debe ser luaciones realizadas de mane-
considerado como una pro- ra independiente, su interpre-
puesta diferente y no como tación resulta muy compleja.
un substituto de las metodo- Los resultados obtenidos de-
logías ya existentes. Asimis- muestran que existe el mismo
mo, este nuevo diseño se ha efecto adverso en dos recep-
gestado tomando en cuenta tores ecológicos distintos (hu-
las limitaciones principal- manos y roedores). 2) Inter-
mente económicas, de infor- dependencia. Una de las ra-
mación y personal capacitado zones por las cuales se rela-
generalmente prevalecientes ciona el riesgo ecológico con
en los países en desarrollo. la salud humana se debe a
En el esquema de la Fi- que todas las actividades del
gura 1 se muestran las dife- ser humano dependen de los
rentes etapas que componen recursos bióticos. Por lo tan-
la metodología. En la prime- to, si la biota se encuentra
ra etapa se genera un modelo afectada y/o en riesgo de es-
de sitio, tomando en cuenta tarlo, la salud de la población
las condiciones del área y los también puede verse perjudi-
tóxicos presentes. Se estable- cada. 3) Organismos centine-
cen las rutas y se definen las la. Debido a sus hábitos de
poblaciones receptoras. Para conducta los roedores se en-
Figura 1. Diseño para la evaluación integrada de riesgos.
los humanos la definición cuentran más expuestos que
como población receptora es los humanos y por ello es po-
más sencilla, ya que se basa en los puntos Enseguida se realiza la sible evaluar otros efectos adversos en la
de exposición a los contaminantes, pero caracterización del riesgo en los diferentes biota antes que éstos se presenten en el
para la biota, dado el gran número de es- escenarios Es aquí donde se propone la ser humano. Con los resultados obtenidos
pecies susceptibles al riesgo, la determi- caracterización integrada del riesgo que se puede afirmar que existe riesgo en sa-
nación de las especies críticas es un punto permite la asignación conjunta de las lud humana y un potencial riesgo ecológi-
clave. Tomamos como criterios de selec- magnitudes de los efectos adversos en el co; sin embargo, en el proceso de integra-
ción: facilidad de captura, tipo de conta- sitio de estudio. ción es deseable el estudio de diversas es-
minante, rutas y vías potenciales de expo- Esta metodología fue pecies en diferentes sistemas, preferente-
sición, biología conocida de las especies, aplicada en el sitio minero de Villa de la mente pertenecientes a distintos niveles
posición en la red trófica, estatus de con- Paz, en el Estado de San Luis Potosí, el tróficos. Aún es necesaria la implementa-
servación y carisma. cual ha sido explotado por más de 200 ción de la evaluación ecológica con mayor
En la siguiente etapa se años (Razo et al., 2004). El material que profundidad.
evalúa la exposición en los diferentes re- se extrae del subsuelo, rico en sulfuros
ceptores a través de: i) un monitoreo am- polimetálicos, ha provocado que se haya Evaluación de Riesgos en Sitios
biental, con el fin de determinar concen- depositado un gran volumen de residuos Afectados por Cambio Climático
traciones de los contaminantes presentes mineros tipo terreros y jales en los alre-
en el sitio (una vez seleccionadas las es- dedores del poblado, ricos en As y Pb, La exposición infantil en
pecies, es importante establecer el grado siendo éstos los principales contaminantes los sitios contaminados o en las comuni-
de contaminación en su hábitat) y ii) bio- del área (Razo et al, 2004). Los estudios dades marginadas son tópicos que nume-
marcadores de exposición. Ambos casos realizados en el área (Jasso et al., 2007) rosos grupos han venido trabajando en
son de utilidad para el establecimiento de indicaron que la contaminación (As) pre- distintas regiones del mundo. Pero ahora
un gradiente de concentración y/o para la sente estaba relacionada con el daño al la salud ambiental enfrenta nuevos retos.
elección de sitios de referencia. Para el ADN encontrado tanto en niños habitantes Uno de ellos, quizá el de mayor riesgo, es
caso de la biota, en muchos de los casos del lugar, como en roedores (Dipodomys el originado por el calentamiento del pla-
no es posible encontrar valores de referen- merriami y Chaetodipus nelsoni) cuyo há- neta. Una descripción del concepto de
cia, y por lo tanto se deben generar me- bitat se encuentra en las zonas de mayor cambio global climático esta fuera de los
diante modelos toxicológicos. concentración de metales. Además se de- objetivos de este trabajo, pero baste seña-
Posteriormente se eva- mostró: i) una relación entre la exposición lar que el incremento en la temperatura
lúan los efectos en las poblaciones en y el efecto genotóxico en ambos grupos promedio del planeta ha sido asociado a
riesgo, para lo cual se utilizan biomarca- (niños y roedores), y ii) que los efectos, diversos fenómenos, algunos de los cuales
dores de efecto (genotóxicos, disruptores tanto en humanos como en roedores, eran tienen que ver con la salud de todos los
endócrinos, etc). Para la evaluación de los muy superiores a los encontrados en las seres vivos (IPCC, 2007).
efectos en niveles de organización biológi- poblaciones de baja exposición utilizadas Entre los fenómenos aso-
ca superiores en el escenario ecológico como referencia. ciados a la salud que más llaman la aten-
(individuo, población y comunidad) se to- La evaluación integrada ción en el contexto del presente trabajo
man en cuenta características generales de de riesgo realizada en Villa de la Paz pre- están cuatro: i) el aumento en la frecuen-
los individuos, parámetros poblacionales e senta las siguientes ventajas: 1) Coheren- cia de los desastres naturales (incendios
índices bióticos para la comunidad. cia en los resultados. Esto permite tener forestales, huracanes, inundaciones, etc);

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ii) la aparición de nuevas plagas (langos- tante, el primer paso es lograr la partici- con el uso de indicadores es un camino
ta); iii) la extensión o recrudecimiento de pación de la comunidad, para con ella para lograr la flexibilidad requerida en
la presencia de vectores (malaria, dengue, obtener un listado inicial de preocupacio- este tipo de estudios.
etc); y, por supuesto, iv) el incremento en nes, en materia de salud, ambiente, so-
la temperatura promedio. ciedad y ecología. Este listado, junto con América Latina
Estos fenómenos impli- la información de fuentes diversas, per-
can una amplia gama de nuevos escena- mite generar una propuesta inicial de tra- Evaluar el riesgo en sa-
rios de exposición, tales como la inhala- bajo. lud en sitios contaminados, comunidades
ción del humo proveniente de incendios marginadas, ecosistemas en peligro o du-
2. Caracterización integrada del riesgo.
forestales, el contacto con sedimentos rante eventos de emergencia ambiental,
Teniendo como protocolo el plan desarro-
contaminado procedente de las inundacio- implica realizar una actividad cuyo objeti-
llado en la sección anterior, el evaluador
nes, el uso de nuevos plaguicidas (fipro- vo es la protección de la salud pública.
procederá a obtener información cuantita-
nil) o de nuevas mezclas de plaguicidas Esto es relevante para una región como la
tiva que servirá como base de la decisión
ya en el comercio (mezclas de piretroides de América Latina donde aún coexisten
para establecer programas que lleven a la
con organofosforados), y el incremento en dentro de un mismo país una amplia
reducción de los riesgos identificados. En
la volatilidad, sobre todo de los compues- gama de realidades culturales con diver-
esta etapa se trabaja en los aspectos de i)
tos semivolátiles. Al respecto, es de lla- sos niveles de desarrollo económico y di-
vulnerabilidad social (educación, servicios
mar la atención que en el sureste de ferente grado de aplicación de programas
médicos, condiciones socioeconómicas,
México, donde no se aplica DDT desde el en materia de salud ambiental.
etc.); ii) vulnerabilidad comunitaria (con-
2000, se ha venido observando un cons- Tomando en cuenta los
diciones de los espacios infantiles y tóxi-
tante aumento de este insecticida en el múltiples escenarios que requieren de la
cos prioritarios), monitoreo ambiental de
aire (Alegria et al., 2006) y en la sangre evaluación de riesgos, una prioridad lati-
contaminantes químicos y micoorganis-
de la población (Pérez-Maldonado et al., noamericana debería ser la formación de
mos en rutas de exposición; iii) salud en
2006). Una posible explicación del fenó- cuadros académicos con la capacidad de
aspectos clínicos (toxicología clínica), de
meno es que las inundaciones han permi- integrar conceptos de distintas disciplinas.
salud mental (psicología comunitaria, pun-
tido remover el suelo y el incremento en Nuevos problemas añadidos a los habitua-
to fundamental para la evaluación después
la temperatura facilita la volatilización del les requieren de una nueva organización,
de un desastre) y monitoreo (biomarcado-
insecticida. para que así las problemáticas ambientales
res de exposición y de efecto); y iv) eco-
Los escenarios generados sean manejadas de forma coordinada no
logía, donde se valorarán aspectos de ex-
por el cambio global climático son los solo por las autoridades ambientales sino
posición y evaluación toxicológica en es-
más complejos, dado que abarcan áreas también y en conjunto con aquellas, por
pecies críticas.
de por sí ya contaminadas y/o ya margi- las autoridades de salud. Los escenarios
Con toda la información
nadas, pero donde, además, ahora se pre- son complejos y la multidisciplinaridad es
puede definirse el nivel de riesgo. Para
sentan nuevos riesgos y donde necesaria- la herramienta para evaluarlos.
ésto pueden utilizarse las herramientas y
mente deben estudiarse de manera simul- En este escenario, la Or-
fórmulas de las metodologías tradiciona-
tánea los efectos en humanos y en biota. ganización Panamericana de la Salud ha
les de evaluación de riesgo (dosis de ex-
Por lo tanto, para evaluar estos sitios, se jugado un importante papel desde hace ya
posición, cocientes de riesgo, etc.), pero
han conjuntado las metodologías de eva- más de 20 años. Ha promovido cursos de
en igual importancia deben plantearse los
luación integrada del riesgo en salud y la capacitación, integrado equipos internacio-
esquemas de escenarios de riesgo, enfati-
metodología de evaluación de riesgos sa- nales de expertos para estudiar sitios con-
zando la integración de los indicadores
nitarios, con lo cual se ha creado una taminados en diferentes naciones, apoyado
(de salud, ambiente, sociedad y ecología)
nueva que ha sido denominada como me- la publicación de manuales y, en fin, ha
con los marcadores (ambientales y bioló-
todología para evaluar de manera integra- estado en la frontera del desarrollo del
gicos) y el peso de la evidencia científi-
da la salud ambiental en niveles de emer- área en la región. Sin embargo, la OPS
ca. Dos factores son críticos: i) la identi-
gencia (Metodología SANE). deberá mantener su ritmo dado que, como
ficación y priorización de las rutas de
Un nivel de emergencia se ha planteado en el presente trabajo, la
exposición, y ii) la priorización de los
asociado al cambio climático puede refe- evaluación de riesgo ha evolucionado y
padecimientos relacionados con los ries-
rirse a inundaciones, incendios, aplicación ello ha ocurrido porque cada día los pro-
gos identificados, punto para el cual el
masiva de insecticidas por la aparición de blemas ambientales son de mayor comple-
cálculo de los años perdidos por la carga
una plaga, o cualquier otro evento que por jidad, afectando más y más no solo a los
de enfermedad sería una herramienta de-
períodos limitados de tiempo afectan de humanos sino también al resto de los se-
cisiva. Como toda metodología de riesgo,
manera importante a comunidades rurales, res vivos. Pero no todo será responsabili-
ésta concluye con un documento que por
áreas naturales protegidas, reservas de la dad de la OPS. Al interior de cada país y
su información puede utilizarse como
biósfera, regiones indígenas, etc. Es decir, de cada institución académica deben ge-
instrumento de gestión.
zonas de vulnerabilidad reconocida. La nerarse nuevas reflexiones que lleven a es-
En conclusión, nuevos
metodología adaptada al cambio climático quemas de trabajo inéditos en el área y
retos como el cambio climático están
básicamente consta de dos fases: por ende, a la integración de nuevos equi-
provocando novedosos escenarios de ex-
pos de profesionales.
1. Descripción del escenario de riesgo. posición a factores estresantes (químicos,
El objetivo de esta fase es diseñar un físicos y biológicos) y, así, las metodolo-
Agradecimientos
plan de estudio para evaluar los riesgos gías de evaluación de riesgo deberán
que hubieren sido identificados en la co- adaptarse para estudiar vulnerabilidad El presente trabajo contó
munidad, a partir de datos oficiales y de comunitaria, salud humana y efectos eco- con el apoyo del Consejo Nacional de
información comunitaria. Es obvio que lógicos, tanto en eventos de urgencia am- Ciencia y Tecnología de México (CONA-
se requiere la visita al sitio y la identifi- biental como en situaciones de más largo CYT-SEMARNAT-2004-01-0238) y la co-
cación de rutas de exposición. No obs- plazo. La integración de biomarcadores laboración con de la Organización Pana-

OCT 2009, VOL. 34 Nº 10 715


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HEALTH RISK ASSESSMENT METHODOLOGIES FOR THE STUDY OF VULNERABLE COMMUNITIES IN LATIN
AMERICA
César A. Ilizaliturri, Donaji González-Mille, Nadia A. Pelallo, Gabriela Domínguez, Jesús Mejía-Saavedra, Arturo Torres Dosal,
Iván Pérez-Maldonado, Lilia Batres, Fernando Díaz-Barriga and Guillermo Espinosa-Reyes
SUMMARY
The most commonly used methods for risk assessment are addition to biomarkers, social, health and environmental indica-
based on environmental analysis and the use of mathematical tors have to be applied for risk characterization, as different fac-
models for the estimation of exposure. However, the uncertainty tors of vulnerability can modify the extent of health risks in some
of this approach is high, as the models are based on scenarios communities. At the end, with environmental monitoring and the
that may be not the correct ones. In order to decrease the uncer- use of biomarkers and indicators of vulnerability, health risks in
tainty, the use of biomarkers has been proposed. Furthermore, humans and biota (integrated risk assessment) can be assessed
considering the complexity of pollution in some sites, these bio- in different scenarios. In this paper we present the strategies that
markers can be used both in humans and biota in order to ob- our group developed for the study of hazardous waste sites, vul-
tain better information for the definition of risks at those sites. In nerable communities and areas impacted by climate change.

RevisÃO das Metodologias sobre AvalIaÇÃO de RisCos NA SaÚdE para O Estudo de


Comunidades VulneráVEIs NA América Latina
César A. Ilizaliturri, Donaji González-Mille, Nadia A. Pelallo, Gabriela Domínguez, Jesús Mejía-Saavedra, Arturo Torres Dosal,
Iván Pérez-Maldonado, Lilia Batres, Fernando Díaz-Barriga e Guillermo Espinosa-Reyes
RESUMO

Os métodos para avaliar o risco na saúde se baseiam, em ge- dade, também devem ser considerados para a caracterização do
ral, no monitoramento ambiental e na estimação da exposição risco. Estes fatôres de vulnerabilidade podem avaliar-se através
através de modelos matemáticos. A incerteza de tal estratégia de indicadores. Finalmente, com as análises ambientais, o uso
é grande. Em consequência, para incrementar a certeza sobre de biomarcadores e o manejo de indicadores ambientais, sociais
a avaliação da exposição aos contaminantes, tem sido proposta e de saúde, pode-se avaliar o risco de maneira integrada (huma-
a utilização de biomarcadores. No entanto, a complexidade dos nos e biota). Nesta revisão se apresentam as diversas estratégias
novos cenários de risco obriga a avaliar não somente as popula- empregadas por este grupo de trabalho para avaliar o risco em
ções humanas mas também ao resto da biota. Da mesma forma, lugares contaminados, comunidades marginalizadas e em áreas
fatôres ambientais, sociais e de saúde, ao afetar a vulnerabili- afetadas pela mudança global climática.

OCT 2009, VOL. 34 Nº 10 717

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