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05 Weber

Seminario Sociología de la educación - Sociología


Obligatorio
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20 Copias Los literatos chinos*

Durante doce siglos, en China, el rango social se ha deter-


minado más de acuerdo con la calificación para el ejercicio
de cargos públicos que según la riqueza. Esta calificación ha
venido determinada, a su vez, por la educación y, sobre todo .,
por los exámenes. China ha convertido la educación litera-
ria en medida de pr1 3 igib--§aiardel modo más exclusivo,
mucho más eX-ClusiViffiéfire—q1-6-Eu- ropa durante el período
de los humanistas o, recientemente, Alemania. Inclu s o du-
rante el período de los estados guerreros, el estrato de aspi-
rantes a cargos públicos educados en la literatura —y origina-
riamente ello sólo suponía un conocimiento de la escritu-
ra— estuvo difundido en todos los estados individuales. Los
literatos fueron los depositarios del progreso hacia unaTd----
—~án-racianal...y_de_tadala «intelectualidad»:
mit
Tal como sucede con el bracmanismo en la India, en
China, los literatos han sido los exponentes decisivos de la
unidad cultural. Los territorios (así como los enclaves) no
administrados por funcionarios con una educación literaria,
de acuerdo con el modelo de la idea ortodoxa del Estado,
fueron considerados heterodoxos y bárbaros, al igual como
sucedió con los territorios, situados dentro del ámbito del
* De «Konfuzianismus und Taoismus», cap. 5, Der Literatoustand, en
Gesammelte Aufsaetze zur .Religionssoziologie, vol. I, pp. 395-430. Este capí-
tulo filiaré originariamente en la serie del Archiv, «Die Wirtschaftsethik der
Weltreligionen»; véase nota al cap. II.

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hinduismo, pero no regulados por los bracmanes, y también Hasta tiempos históricos recientes, la educación védica se
las regiones no organizadas en polis por los griegos. La es- basó en la transmisión oral; rechazó la perpetuación de la
tructura cada vez más burocrática de las comunidades políti- tradición por escrito, desdén que tienden a compartir todos
cas chinas y de sus representantes ha prestado su sello carac- los gremios de brujos profesionales organizados. En China,
terístieo a toda la tradición literaria china. En China, los lite- en cambio, la escritura de los libros rituales, del calendario y
ratos han sido decididamente el estrato dominante por más de los Anales se remonta a la época prehistórica.' Incluso en
de dos mil arios, y aún siguen siéndolo. Su dominio ha sido las tradiciones más antiguas, las antiguas escrituras fueron
ininterrumpido; a menudo ha contado con una apasionada consideradas objetos mágicos,' y portadores de un carisma
oposición; pero siempre logró renovarse y expandirse. Según mágico los hombres que las conocían. Según veremos, estos
los Anales, en 1946, el emperador concedió por primera vez a hechos han persistido en China. El prestigio de los literatos
los literatos, y sólo a éstos, el tratamiento de «Su señoría».' no ha consistido en un carisma de mágicos poderes de he-
El hecho de que este estrato dirigente de intelectuales chicería, sino más bien en un conocimiento de la escritura y
nunca poseyese el - carácter de los sacerdotes de la Cristian- la literatura como tales; es posible que, originariamente, su
dad o del Islam, o de los rabinos judíos o los bracmanes prestigio se basase además en un conocimiento de la astrolo-
indios, o de los antiguos sacerdotes egipcios, o los escribas gía. Pero su misión no ha consistido en ayudar a personas
egipcios e indios, ha tenido una importancia incalculable privadas a través de la hechicería, curar a los enfermos como
para el modo de desarrollo seguido por la cultura china. Es hace el brujo, por ejemplo. Para ello existían profesiones
significativo que, en China, el estrato de literatos, pese a especiales, a las que nos referiremos más adelante. Desde
proceder de una instrucción ritual, se formó sobre la base luego, en China, como en todas partes, la importancia de la
de una educación para laicos gentiles. Los «literatos» del magia fue un presupuesto sobreentendido. Sin embargo, en
período feudal, entonces oficialmente denominados puo che, la medida en que se trataba de los intereses de la comuni-
esto es, «biblioteca viviente», dominaron ante todo el ritua- dad, correspondía a sus representantes influir sobre los es-
lismo. Sin embargo, no procedían de una estirpe de nobleza píritus.
sacerdotal, como las estirpes de los Rishi del Rig-Veda, o de En favor de la comunidad política actuaba el emperador
un gremio de hechiceros, como es muy probable que fuese como supremo pontífice, y también los príncipes. Y en el
el caso de los bracmanes del Atharva-Veda. caso de la familia, el jefe de la estirpe y el patriarca del
En China, los literatos se remontan, al menos en lo esen- hogar intercedían ante los espíritus. Desde tiempos muy re-
cial, a los descendientes, probablemente hijos menores de motos, se había influido sobre el destino de la comunidad,
familias feudales que adquirieron una educación literaria, sobre todo en las cosechas, por medios racionales; esto es,
sobre todo un conocimiento de la escritura, y cuya posición una regulación de las aguas; por ello, el «orden» de adminis-
social se basó en este conocimiento de la escritura y la litera- tración correcto siempre ha constituido el medio fundamen-
tura. El conocimiento de la escritura también estaba al alcan- tal de ejercer influencia sobre el mundo de los espíritus.
ce de un plebeyo, aun cuando, si se tiene en cuenta el siste- Aparte del conocimiento de las escrituras como medio de
ma de escritura china, a éste le hubiese resultado dificil ne- interpretar la tradición, era preciso un conocimiento del ca-
gar a dominarlo. Pero si ello sucedía, el plebeyo compartía lendario y de las estrellas, a fin de interpretar la voluntad
el prestigio de cualquier otro erudito. Incluso durante el pe- divina y, sobre todo, para identificar los dies fasti y nefasti; y,
ríodo feudal, el estrato de literatos no fue hereditario ni ex- al parecer, la posición de los literatos deriva también de la
clusivo —otra diferencia con los bracmanes. dignificada posición que ocupó el astrólogo de la corte. 4
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Los escribas, y sólo éstos, podían interpretar ritualmente les les concedieron gran deferencia.' Su íntima relación

ese importante orden (originariamente, es probable que se con el servicio de los soberanos patrimoniales existió desde
valiesen también de horóscopos) y aconsejar, por consiguien- tiempos remotos e influyó de modo decisivo sobre el pecu-
te, a las autoridades políticas pertinentes. Una anécdota de liar carácter de los literatos.
los Anales' revela las consecuencias de modo sorprendente. Los orígenes de los literatos están rodeados de enigmas.
En el estado feudal de los Wei, un probado general —U Aparentemente, fueron los augures chinos. El carácter ponti-
KI, supuesto autor del texto sobre estrategia ritualmente co- fical cesarino-papista del poder imperial ha tenido una im-
rrecta, cuya autoridad se ha mantenido hasta la época pre- portancia decisiva para determinar su posición, así como el
sente— y un hombre de letras entraron en competencia por carácter de la literatura china. Ésta comprendió Anales ofi-
el cargo de primer ministro. Una violenta disputa surgió entre ciales, himnos de guerra y sacrificio mágicamente probados,
los dos después del nombramiento del literato. Éste admitió calendarios, así como libros de ritual y ceremonial. Con sus
con presteza que no sabía dirigir guerras ni poseía un domi- conocimientos, los literatos apoyaron el carácter del Estado,
nio de otras tareas políticas similares que pudieran compa- por naturaleza una institución eclesiástica y compulsiva; die-
rarse al del general. Pero cuando, en vistas de ello, el gene- ron el Estado por sentado, como presupuesto axiomático.
ral declaró estar mejor dotado, el literato observó que la En su literatura, los literatos crearon el concepto de
dinastía se veía amenazada por una revolución, ante lo cual «cargo», sobre todo el ethos del «deber oficial» y del «bie-
el general admitió sin vacilación que el literato estaba más nestar público». 9 Suponiendo que los Anales sean fidedig-
bien preparado para evitarla. nos, los literatos, como partidarios de la organización buro-
El que estaba versado en las escrituras y la tradición sólo crática del Estado como institución compulsiva, se opusie-
se consideró competente para organizar correctamente la ron desde el principio al feudalismo. Ello resulta bastante
administración interna y la conducta carismáticamente co- comprensible ya que, desde el punto de vista de sus intere-
rrecta, desde un punto de vista ritual y político, a seguir por ses, los administradores debían ser sólo personas con una
el soberano. En agudo contraste con los profetas judíos, inte- calificación personal adquirida a través de una educación
resados esencialmente en la política exterior, los literatos- literaria. 10 Por otra parte, se atribuían el mérito de haber
políticos chinos, instruidos en el ritual, se orientaron primor- indicado a los soberanos la vía de una administración autó-
dialmente hacia problemas de administración interna, aun noma, de la fabricación de armas y construcción de fortifica-
cuando estos problemas suponían una política de poder ab- ciones por el gobierno, modos y dios que convirtieron a los
soluto, si bien, al ocuparse de la correspondencia del sobera- príncipes en «amos y señores de sus tierras». 11
no y de la cancillería, Podían dedicarse con gran intensidad Esta íntima relación de los literatos con el servicio princi-
a la dirección personal de la diplomacia. pesco se inició en el curso de la lucha del soberano contra
Esta constante orientación en torno a problemas de «co- los poderes feudales; y diferencia a los literatos chinos de
rrecta» administración del Estado determinó un profundo los laicos educados de Hellas, así como de los de la antigua
racionalismo práctico y político entre el estrato intelectual India (kshatriya). Les asemeja a los bracmanes, de los que
del período feudal. En contraste con el estricto tradicionalis- difieren empero en su subordinación ritualista bajo un pon-
mo del período posterior, los Anales revelan de vez en cuan- tífice cesarino-papista. Además, en China, nunca ha exis-
do cualidades de audaces innovadores políticos en los litera- tido orden de castas alguno, un hecho íntimamente vin-
tos.' Su ensalzamiento de la educación no conoció límites,' culado a la eduCación literaria y a la subordinación a un
y los soberanos —al menos según la descripción de los Ana- pontífice.
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La relación de los literatos con el cargo ha cambiado de chino, ello puso fin a la movilidad mental, originariamente
naturaleza (con el transcurso del tiempo). Durante el perío- libre, de los literatos. Este proceso ya se hallaba en pleno
do de los estados feudales, las diversas cortes compitieron vigor cuando se iniciaron los Anales y la mayor parte de los
por, el servicio de los literatos, los cuales iban en busca de escritos sistemáticos de los literatos, y cuando se «redescu-
oportunidades de poder y, no lo olvidemos, de las mejo- brieron» los libros sagrados, destruidos por Shi-Hwang-Ti. 14
res oportunidades de ingresos posibles.' 2 Se formó todo un Éstos fueron «redescubiertos» a fin de que los literatos pu-
estrato de «sofistas» ambulantes (che-she), comparable a los diesen revisarlos, retorcarlos e interpretarlos, prestándoles
caballeros y sabios andantes de la Edad Media occidental. con ello un valor canónico.
Según veremos, también hubo literatos chinos que, en prin- En los Anales resulta evidente que todo este proceso se
cipio, no ocuparon ningún cargo. Este estrato libre y móvil inició con la pacificación del Imperio o más bien que llegó a
'de literatos fue el depositario de las escuelas y antagonis- sus conclusiones durante este período. En todas partes, la
mos filosóficos, situación comparable a las que se dieron en guerra ha sido asunto de jóvenes, y la frase sexagenarios de
la India, la Antigüedad helénica y la Edad Media con sus ponte ha sido un eslogan empleado por los guerreros para
monjes y sabios. Sin embargo, los literatos, como tales, se atacar el «senado». Sin embargo, los literatos chinos fueron
consideraban integrados en un grupo de status unitario. Se «ancianos», o representaban a los ancianos. Los Anales, como
atribuían honores de status comunes ' 3 y se sentían unidos paradigmática confesión pública del príncipe Mu kong (de
como únicos depositarios de la homogénea cultura china. Tsin), transmitieron la idea de que el príncipe había pecado
La relación de los literatos chinos con el servicio princi- al escuchar a los «jóvenes» (los guerreros) y no a los «ancia-
pesco, como habitual fuente de ingresos, les distinguió, como nos», los cuales, si bien se hallaban desprovistos de fuerza,
grupo de status, de los filósofos de la Antigüedad y, al menos, poseían en cambio experiencia." De hecho, éste fue el fac-
también de los laicos instruidos de la India, los cuales, en tor decisivo de la evolución hacia el pacifismo y, con ello,
general, se situaron socialmente en sectores muy alejados hacia el tradicionalismo. El carisma fue desplazado por la
de todo cargo público. Normalmente, los literatos chinos tradición.
deseaban ingresar al servicio de un príncipe por considerar-
lo tanto una fuente de ingresos como un campo normal de
actividad. Confucio, y también Lao-tsé, fue funcionario antes 1. Confucio
de comenzar a vivir como maestro y escritor, sin relación
con ningún cargo público. Veremos que esta relación con el Incluso las partes más antiguas de los textos clásicos vin-
cargo público (o cargo en un «estado eclesiástico») tuvo una culados al nombre de Kung Tse, esto es, a Confucio como
importancia fundamental para la naturaleza de la mentalidad publicista, nos permiten identificar las condiciones de los
de ese estrato. En efecto, esta orientación se fue mostrando reyes guerreros carismáticos. (Confucio falleció el año 478
cada vez más importante y exclusiva. En el Imperio unifica- a J.C.) Los heroicos cantos del libro de himnos (Shi-king) ha-
do, los príncipes se vieron sin oportunidad de competir por blan de reyes luchando en sus carros de guerra;a1 estilo de
los literatos. Estos y sus discípulos pasaron a competir enton- las épicas helénicas e indias. Pero, si se considera su carác-
ces por los cargos existentes, y este proceso no podía dejar ter en conjunto, incluso esos cantos ya no son heraldos de
de plasmarse en una doCtrina ortodoxa unificada, adaptada un heroísmo individual y, en general, puramente humano,
a la situación. Esta doctrina sería el confucianismo. tal como sucede en las épicas homéricas y germánicas. Cuan-
A medida que se fue desarrollando el prebendarismo do fue recopilado el Shi-king, el ejército del rey ya había
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perdido todo el romance de los séquitos guerreros de las recompensada por el Cielo. La burocracia y la promoción
aventuras homéricas. El ejército ya poseía un carácter de de funcionarios de acuerdo con sus méritos constituyen tó-
burocracia disciplinada y, sobre todo, tenía «oficiales». Inclu- picos de glorificación. Los dominios'principescos siguen bajo
so en el Shi-king, los reyes ya no vencen simplemente a un gobierno hereditario; algunos cargos locales son feudos
causa de su superioridad heroica. Y ello es decisivo para el hereditarios; pero este sistema es mirado con escepticismo
espíritu del ejército. Vencen porque representan la rectitud por los clásicos, al menos en cuanto a los cargos heredita-
moral ante el Espíritu del Cielo y debido a la superioridad rios. En última instancia, consideran este sistema como algo
de sus virtudes carismáticas, en tanto que sus enemigos son meramente provisional. En teoría, ello se aplica incluso al
criminales impíos que han perjudicado el bienestar de sus carácter hereditario de la dignidad del emperador. Los em-
súbditos a través de la opresión y la violencia de las antiguas peradores ideales y legendarios (Yao y Shun) designan a sus
costumbres, y, en consecuencia, han perdido su carisma.La sucesores (Shun y Yü) sin consideraciones de cuna, selec-
victoria es motivo de reflexiones moralizantes y no de heroi- cionándolos entre el círculo de sus ministros y pasando por
co regocijo. Al contrario de las sagradas escrituras de casi encima de sus propios hijos, basándose únicamente en su
todas las demás éticas, sorprende aquí la ausencia de toda carisma personal, de acuerdo con las certificaciones de los
expresión «escandalosa», de toda imagen concebiblemente más altos funcionarios de la corte. Los emperadores designa-
«indecente». Es evidente que se ha realizado una expurga- ron del mismo modo a sus ministros, y sólo el tercer empe-
ción muy sistemática, y ésta puede haber sido perfectamen- rador, Yü, no nombra como sucesor a su primer ministro
te la aportación específica de Confucio. (Y) sino a su hijo (Ki).
Es evidente que la transformación pragmática de la anti- En contraste con los antiguos y auténticos documentos y
gua tradición de los Anales, producidos por la historiografia monumentos, es inútil buscar mentes verdaderamente he-
oficial y los literatos, fue más allá de los paradigmas sacerdo- roicas en la mayor parte de los textos clásicos. La opinión
tales introducidos en el Antiguo Testamento, en el Libro de tradicional sustentada por Confucio es que la cautela consti-
los Jueces, por ejemplo. La crónica atribuida directamente a tuye la mejor parte del valor y que al hombre prudente no le
Confucio contiene la hábil y muy recatada enumeración de aprovecha arriesgar su vida de modo inadecuado. Este espí-
las campañas militares y expediciones punitivas emprendi- ritu se vio muy ensalzado con la profunda pacificación del
das contra los rebeldes; en este sentido, se asemeja a los país, sobre todo después del dominio de los mongoles. El
protocolos jeroglíficos de Asiria. En caso de que Confucio Imperio se convirtió en un imperio de paz. Según Mencio,
expresase realmente la opinión de que su carácter se mani- no existían guerras «justas» dentro de las fronteras del Impe-
festaba con especial claridad en su obra —según afirma la rio, puesto que éste era considerado una sola unidad. El
tradición—, deberíamos suscribir las opiniones de aquellos • ejército había llegado a ser fmalmente muy reducido, en
estudiosos (chinos y europeos) que lo interpretan en el sen- relación con las dimensiones del Imperio. Una vez separada
tido de que su realización característica fue esta sistemática la instrucción de los literatos y la de los caballeros, los empe-
y pragmática corrección de hechos, desde el punto de vista radores conservaron los torneos deportivos y literarios y otor-
de la «propiedad». Así debe haber sido considerada su obra garon certificados militares," además de celebrar exámenes
por sus contemporáneos; pero lo esencial de su significa- estatales para los literatos. No obstante, durante largo tiem-
ción pragmática ha quedado velado para nosotros." po, la obtención de esos certificados militares tuvo muy poca
Los príncipes y miniltros de los clásicos obran y hablan relación con una verdadera carrera en el ejército." Y subsis-
como paradigmas de gobernantes cuya conducta ética es tió el hecho de que los militares fueron tan despreciados en
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dicho, es muy probable que, al principio, la educación litera-
China como lo serían durante doscientos años en Inglaterra ria, con algunas posibles excepciones, estuviese monopoliza-
y que un hombre de letras cultivado no establecería relacio- da de hecho, y tal vez incluso legalmente, por las «grandes
nes sociales en plano de igualdad con los oficiales del ejér- familias», del mismo modo como estuvo monopolizada la
cito. 19 educación védica en la India. Siempre subsistieron vestigios
de ello. Los miembros de la estirpe imperial, aunque no
estaban exentos de todos los exámenes, no debían exami-
2. Evolución del sistema de exámenes narse para el primer título. Y los depositarios que hasta hace
poco debía nombrar todo candidato a examinarse, debían
• Durante el período de la monarquía central, los mandari- testificar sobre los «buenos antecedentes familiares» del can-
nes pasaron a ser un grupo de status de aspirantes a cargos didato. En tiempos modernos, este testimonio sólo ha su-
prebendarios titulados. Entre ellos se reclutaban todas las puesto la exclusión de barberos, mayordomos, músicos, por-
categorías de funcionarios públicos chinos y sus calificacio- teros, porteadores y otros. Sin embargo, paralelamente a esta
nes para el ejercicio del cargo y para la atribución de rango exclusión, existía la institución de «candidatos para el man-
dependieron del número de exámenes aprobados. darinazgo», esto es, los descendientes de los mandarines
Esos exámenes consistían en tres títulos principales, 20 gozaban de una posición especial y preferente al establecer-
considerablemente aumentados por exámenes intermedios, se el cupo máximo de candidatos a examen procedentes
repetitivos y preliminares, así como por numerosas condi- de cada provincia. Las listas de promoción empleaban la
ciones especiales. Sólo para el primer título existían diez fórmula oficial «de una familia de mandarines y del pueblo». '
tipos de examen. A un extraño de rango desconocido se le Los hijos de funcionarios meritorios recibían el título infe-
solía preguntar cuántos exámenes había pasado. Por tanto, rior con carácter honorífico. Todo lo cual representaba remi-
pese al culto a los antepasados, lo decisivo -para el rango niscencias de antiguas condiciones.
social no era el número de antepasados con que se contaba. El sistema de exámenes ha existido en todos sus detalles
Sucedía exactamente lo contrario: el permiso de acceso al desde finales del siglo VIL Este sistema fue uno de los Me-
templo ancestral (o a una mera lista de antepasados, como dios empleados por el gobernante patrimonial para impedir
sucedía en el caso de los analfabetos) dependía del rango la formación de un estamento cerrado que hubiese monopo-
oficial. El rango oficial determinaba el número de antepasa- lizado los derechos a cargos prebendarios, al estilo de los
dos que a cada uno le estaba permitido mencionar. 21 Inclu- vasallos y nobles funcionarios feudales. Los primeros indi-
so el rango que ocupaba el dios de, una ciudad en el Panteón cios del sistema de exámenes surgen, aparentemente, hacia
dependía del rango del mandarín de aquélla. la época de Confucio (y Huang K'an) en el subestado de
En el período confuciano (siglos vi al V a. J.C.), aún se des:- Chin, una localidad que más tarde sería autocrática. La selec-
conocía la posibilidad de acceso a cargos oficiales, así como ción de candidatos venía determinada esencialmente por el
el sistema de exámenes. Al parecer, al menos en los estados mérito militar. Sin embargo, incluso los Li Chi y Chou Li 22
feudales, el poder estuvo, en general, en manos de las «gran- exigen, de modo bastante racionalista, que sus funcionarios
des familias». Sólo con la dinastía Han —establecida por un inferiores sean examinados periódicamente por los jefes de
advenedizo— adquirió categoría de principio la concesión de distrito a fin de que éstos puedan comprobar su moral y
cargos públicos de acuerdo con consideraciones de mérito. proponer luego al emperador aquellos que debieran ser pro-
Y hasta la dinastía Tang, en el año 690 d. J.C., no se estable- movidos. En el estado unificado de los emperadores Han, la
cieron regulaciones para el título supremo. Como ya hemos
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selección de funcionarios comenzó a estar orientada por el lucha por el patrocinio de cargos. En 1387 ya se celebraban
pacifismo. El poder de los literatos se consolidó de modo exámenes especiales para los hijos de oficiales. Los oficiales
fabuloso una vez lograron elevar al trono al correcto Kuang y funcionarios fueron empero más lejos y solicitaron el dere-
Wu, en el año 21 d. J.C., y mantenerlo frente al «usurpador» cho de designar a sus sucesores, lo que equivalía a una de-
popular Wang Mang. Los literatos se convirtieron en un manda de refeudalización. Ésta fue concedida en 1393, pero
grupo de status unificado en el curso de • la lucha por las por último sólo en forma modificada. Los candidatos pre-
prebendas, que enardeció el período siguiente y que estudia- sentados recibían trato preferente para el ingreso en los cole-
remos más adelante. gios y les estaban reservadas ciertas prebendas: en 1465 para
Hoy en día, la dinastía Tang aún irradia la gloria de haber tres hijos, en 1482 para un hijo. En 1453 encontramos com-
sido la verdadera creadora de la grandeza y la cultura de pras de plazas en los colegios, y en 1454 la compra de car-
China. La dinastía Tang reguló, por primera vez, la posi- gos. Como sucede siempre, estos hechos aparecieron, en el
ción de los literatos y estableció colegios para su educación siglo xv, debido a la necesidad de obtener fondos militares.
(en el siglo vil). También creó el Han un yuan, la llamada Estas medidas fueron abolidas en 1492, pero se reintroduje-
«academia», la cual editó primero los Anales, a fm de adqui- ron en 1529.
rir precedentes, y luego pasó a controlar la correcta actitud Los departamentos también lucharon entre sí. A partir del
del emperador. Finalmente, en el siglo xtv, después de los • ario 736, el Comité de Ritos se encargó de los exámenes,
avatares mongoles, la dinastía nacional Ming decretó estatu- pero el Comité de Cargos Públicos nombraba a los funciona-
tos que fueron definitivos, en lo esencial." En cada pueblo rios. No era raro que este último departamento boicotease a
se establecieron escuelas, una para cada veinticinco fami- los candidatos examinados, a lo cual el primero respondía
lias. Puesto que estas escuelas no estaban subvencionadas, el declarando la huelga durante los exámenes. El ministro de
decreto quedó en letra muerta —o más bien, adquirieron Ritos, desde un punto de vista formal, y el ministro de Car-
control sobre ellas los poderes ya señalados. Los funciona- gos (el mayordomo), de hecho, acabaron por ser los hom-
rios seleccionaban a los mejores alumnos e inscribían un bres más poderosos de China. Después pasaron a ocupar
número determinado de éstos en los colegios. En general, los cargos comerciantes que se esperaba fuesen menos «ava-
estos colegios están en decadencia, aunque han sido refun- ros».24 Desde luego, esta esperanza era totalmente injustifi-
dados en parte. En 1382, se reservaron prebendas, bajo forma cada. Los manchúes favorecieron las antiguas tradiciones,
de rentas de arroz, para los «estudiantes». En 1393, quedó por tanto los literatos, y, en la medida de lo posible, la «pure-
fijado el número de estudiantes. A partir de 1370, sólo las za» en la distribución de cargos. Pero entonces, como antes,
personas tituladas podían aspirar a cargos públicos. existieron tres vías paralelas de acceso a un cargo: (1) favo:
Inmediatamente surgió una lucha entre las diversas regio- res imperiales para los hijos dé fa-s familias «principescas»
nes, sobre todo entre el norte y el sur. Ya entonces, el sur (privilegios de examen); (2) exámenes fáciles (oficialmente,
presentaba a los exámenes candidatos de mayor cultura, por cada tres o seis arios) para los funcionarios inferiores, bajo la
contar con la experiencia de un medio ambiente más com- supervisión de los funcionarios superiores que controlaban
pleto. Pero el norte era la piedra de toque militar del Impe- el patrocinio; inevitablemente, ello cada vez tenía como con-
rio. En consecuencia, el emperador intervino y castigó (!) a secuencia una promoción a posiciones superiores; (3) la única
los examinadores que habían concedido el «primer puesto» vía legal: calificación efectiva y exclusiva a través de exá-
a un candidato del sur. Se establecieron listas separadas para menes.
el norte y el sur, y además se inició inmediatamente una En general, el sistema de exámenes realmente ha cumpli-
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do las funciones que le fueron atribuidas por el emperador. tante, representan los polos opuestos de los tipos de educa-
Ocasionalmente (en 1372), se sugirió al emperador —ya po- ción y forman los contrastes más radicales. Entre ambos se
demos imaginar quién lo hizo— que llegase a la conclusión encuentran todos aquellos tipos que tienen por objeto culti-
que se desprende del carisma de virtudes ortodoxas, abo- var al alumno para una conducta de vida, ya sea de carácter
liendo los exámenes, puesto que sólo la virtud legitima y mundano o religioso. En uno y otro caso, se trata de la con-
califica. Pronto se abandonó esta conclusión, de modo muy ducta propia de un grupo de status.
comprensible. En efecto, a fin de cuentas, ambas partes, El procedimiento carismático del antiguo ascetismo mági-
emperador y graduados, estaban interesados en el sistema co y las pruebas de heroicidad, impuestas a los muchachos
de exámenes, o al menos así lo creían. Des -de el punto de por hechiceros y héroes guerreros, intentaron ayudar al novi-
vista del emperador, el sistema de exámenes desempeñaba cio a adquirir un «alma nueva», en el sentido animista, y,
el mismo papel que el mjestnitshestvo, un medio técnicamen- por tanto, a renacer. En nuestros términos, ello significa que
te heterogéneo, del despotismo ruso respecto a la nobleza sólo deseaban despertar y poner a prueba una capacidad,
rusa. El sistema facilitó una lucha competitiva por las pre- considerada como un don de gracia puramente personal.
bendas y cargos entre los candidatos, lo cual les impidió En efecto, el carisma no se puede enseñar ni adquirir por
unirse para formar una nobleza feudal de funcionarios. instrucción. O bien existe in nuce, o se infiltra a través de un
Todos los que demostraban estar educacionalmente califica- milagro de renacimiento mágico —de lo contrario es imposi-
dos tenían acceso al grupo de candidatos. El sistema de exá- ble conseguirlo.
menes cumplía, por tanto, su fmalidad. La educación especializada y experta intenta instruir al
alumno para que adquiera una utilidad práctica con fines
administrativos —en la organización de las autoridades públi-
3. Posición tipológica de la educación *confuciana cas, oficinas comerciales, talleres, laboratorios científicos o
industriales, ejércitos disciplinados. En principio, puede im-
Discutiremos ahora la posición que ocupa este sistema partirse esta instrucción a todo el mundo, aunque en grado
educacional entre los grandes tipos de educación. Desde variable.
luego, no podemos proporcionar aquí, al pasar, una tipolo- Por último, la pedagogía cultivada intenta educar un tipo
gía sociológica de los objetivos y medios pedagógicos, pero de hombre cultivado, cuyo carácter depende del ideal de
tal vez no estén de más algunos comentarios. cultura correspondiente al estrato decisivo. Y ello significa
Históricamente, los polos opuestos del campo de los obje- educar a una persona para determinada actitud interna y
tivos educacionales son: estimular el carisma, esto es, cuali- externa en la vida. En principio, puede darse esta educación
dades heroicas o dotes mágicas; y proporcionar una instruc- a cualquiera, sólo difiere el objetivo. Si el grupo de status
ción experta especializada. El primer tipo corresponde a la decisivo está formado por un estrato separado de guerreros
estructura carismática de dominación; el segundo corres- —como en Japón—, la educación, tendrá por objeto convertir
ponde a la estructura de dominación racional y burocrática al alumno en un caballero y cortesano estilizado, que des-
(moderna). Estos tipos no se contraponen sin que existan preciará a los hombres de letras, tal como los han desprecia-
relaciones o transiciones entre ambos. El héroe guerrero o do los samurais japoneses. El estrato puede presentar gran-
el brujo precisan también una instrucción especial, y el fun- des variaciones de tipo, en casos particulares. Si es decisivo
cionario experto en general no ha sido instruido con el ex- un estrato sacerdotal, éste intentará convertir al discípulo en
clusivo propósito de proporcionarle conocimientos. No obs- un escriba, o al menos en un intelectual, también de carác- •
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ter muy variable. En realidad, ninguno de estos tipos se pre- candidato estaba bien empapada de literatura y si éste po.
senta jamás en forma pura. Es imposible discutir en este seía un modo de pensar adecuado para un hombre culto y
contexto las numerosas combinaciones y eslabones interme- derivado del cultivo de la literatura. Estas calificaciones te-
dios. Lo importante aquí es definir la posición de la educa- nían un significado mucho más específico en China que en
ción china en términos de estas formas. el caso . del colegio humanista alemán. Actualmente, se suele
Durante largo tiempo, restos de la primitiva educación justificar el colegio humanista citando el valor práctico de
carismática para la regeneración, el nombre de leche, los ya una educación formal por medio del estudio de la Antigüe-
discutidos ritos de iniciación de la juventud, el cambio de dad. Según puede deducirse de los trabajos 25 exigidos en
nombre del esposo, y otros, fueron en China una fórmula China a los discípulos de los grados inferiores, éstos eran
(al estilo de la confirmación protestante) paralela a las prue- bastante semejantes a los temas de disertación exigidos en
bas de calificación educacional. Estas pruebas estuvieron mo; Alemania a los cursos superiores de un instituto, o más bien,
nopolizadas por las autoridades políticas. No obstante, por a la clase selecta de un colegio femenino. Todos los títulos
los medios educacionales empleados, la calificación educa- estaban destinados a representar una prueba de caligrafía,
cional fue una calificación «cultural», en el sentido de una estilo, dominio de los textos clásicos 26 y, por último —de
educación general. Tuvo un carácter similar, aunque mucho modo semejante a nuestras lecciones de religión, historia y
más específico, al de la calificación educacional del humanis- alemán—, una prueba . de conformidad con las orientaciones
ta occidental, por ejemplo. mentales prescritas. 27 Es decisivo en este contexto el hecho
En Alemania, hasta hace poco y de modo casi exclusivo, de que esta educación tuvo, por una parte, un carácter pura-
este tipo de educación fue un prerrequisito para dedicarse a mente secular, en tanto que estuvo vinculada, por otra, a la
la carrera oficial, que permite ocupar posiciones de mando norma de interpretación ortodoxa de los autores clásicos es-
dentro de la administración civil y militar. Al mismo tiem- tablecida. Se trató de una educación literaria muy exclusiva
po, esta educación humanista ha determinado que los alum- y pedante.
nos preparados para estas carreras perteneciesen socialmen- En la India, el judaísmo, la Cristiandad y el Islam, el ca-
te al grupo de status culto. Sin embargo, en Alemania —y rácter literario de la educación fue consecuencia del hecho
ello representa una diferencia muy importante entre China de hallarse completamente en manos de bracmanes y rabi-
y Occidente— esta calificación educacional de status se ha nos instruidos en la literatura, o de sacerdotes y monjes de
completado con, y en parte ha quedado desplazada por, una religiones textuales, profesionalmente instruidos en la litera-
instrucción experta racional y especializada. tura. Mientras la educación fue helénica y no «helenista», el
Los exámenes chinos no comprobaban ninguna habili- hombre culto helénico fue, y siguió siendo, ante todo un
dad especial, como sucede con nuestros exámenes burocrá- efebo y un hoplita. Las consecuencias de ello quedaron par-
ticos y racionales modernos para juristas, médicos o técni- ticularmente en evidencia en la conversación del Sympo-
cos. Los exámenes chinos tampoco ponían a prueba la pose- sium, donde se comenta que el Sócrates de Platón jamás
sión de carisma, tal como sucede en las típicas «pruebas» de «se amilanó» ante una batalla, por emplear una expresión
los hechiceros y las ligas de solteros. Desde luego, esta afir- estudiantil. Evidentemente, esta afirmación por parte de Pla-
mación debe ser matizada de la forma que . ahora veremos; tón tiene al menos tanta importancia como todo lo demás
sin embargo es válida, al menos por lo que a la técnica de que hace decir a Alcibíades.
los exámenes se refiere. La educación militar del caballero, durante la Edad Media,
En China, los exámenes comprobaban si la mente del y más tarde la educación gentil del salón renacentista, pro-
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porcionaron un suplemento equivalente, aunque socialmen-
te distinto, a la educación transmitida a través de libros, sa- música correcta» —esto es, la música empleada de acuerdo
cerdotes y monjes. En el judaísmo y en China, no existió con las antiguas normas y estrictamente adaptada a la anti-
esta contrapartida, en parte de modo absoluto, y en parte gua métrica— «mantiene encadenados los espíritus». 29 En la
porque fue como si no existiera. En la India, al igual que en Edad Media, la ballestería y las cuádrigas aún eran conside-
China, los medios literarios de educación consistían substan- radas temas educacionales generales para los hijos de los
cialmente en himnos, relatos épicos y casuística ritual y cere- gentiles.30 Pero, en lo esencial, todo era mera teoría. El libro
monial. Sin embargo, en la India, todo ello se apuntalaba áon de texto nos revela que, a partir de los siete arios, la educa-
especulaciones cosmogónicas, así como religiosas y filosófi- ción doméstica presentaba una estricta separación entre los
cas. Estas especulaciones no faltaron por completo en co- sexos; esencialmente, se trataba de inculcar un ceremonial,
mentarios transmitidos y en los clásicos chinos, pero es evi- en sentido mucho más, amplio que cualquier concepción
dente que siempre desempeñaron sólo un papel muy secun- occidental del mismo, 'sobre todo un ceremonial de piedad
dario. Los autores chinos desarrollaron sistemas racionales y respeto hacia los padres y todos los superiores y personas
de ética social. En China, el estrato educado nunca ha sido de mayor edad en general. Aparte de ello, el libro de texto
simplemente un grupo de status de sabios autónomos, como consistía exclusivamente en normas de autocontrol.
fueron los bracmanes; sino más bien un estrato de funciona- Esta educación doméstica se complementaba con una ins-
rios y aspirantes a cargos públicos. trucción escolar. En cada Hsien debía existir una escuela
La educación superior china no presentó siempre el carác- graduada. La educación superior presuponía la aprobación
ter que tiene en la actualidad. Lás instituciones educaciona- del primer examen de ingreso. Dos cosas fueron, por tanto, -
les públicas (Pan Kung) de los príncipes feudales enseñaban peculiares de la educación superior china. En primer lugar,
las artes de la danza y de las armas además de impartir cono- ésta fue totalmente no militar y puramente literaria, como
cimientos sobre los ritos y la literatura. Sólo la:pacificación lo han sido todas las educaciones establecidas por sacerdo-
del Imperio, convertido en un estado patrimonial y unifica- tes. En segundo lugar, se llevó al extremo su carácter litera-
do, y por último el sistema puro de exámenes para acceder a • rio, esto es, su carácter escrito. En parte, ello parece haber
los cargos públicos, convirtieron esa antigua educación, sido consecuencia de la peculiaridad de la escritura china y
mucho más parecida a la primitiva educación helénica, en la del arte literario de ésta derivado. 31
que ha subsistido hasta el siglo 30C. La educación medieval, Puesto que la escritura conservó su carácter pictórico y
tal como aparece en el bien fundado y ortodoxo Siao-Hio, no fue racionalizada en una forma alfabética, como las crea-
esto es, «libro de texto», aún daba considerable importancia das por los pueblos comerciantes del Mediterráneo, el pro-
a la danza y a la música. Desde luego, parece ser que la ducto literario iba dirigido a la vista y el oído a la vez, y
antigua danza guerrera sólo existió en forma rudimentaria, esencialmente más a la primera. Toda «lectura en voz alta»
pero, con esta salvedad, los niños aprendían determinadas de los textos clásicos constituía de por sí una traducción de
danzas, de acuerdo con su grupo de edad. Ello tenía por la escritura pictórica a la palabra (no escrita). Por naturaleza,
objeto el control de las malas pasiones. Cuando un niño no el carácter visual estuvo muy apartado de la palabra habla-
progresaba en su instrucción, se le dejaba bailar y cantar. La da, sobre todo en el caso de la escritura antigua. El lenguaje
música perfecciona al hombre y los ritos y la música consti- monosilábico requiere una percepción tonal, así como la
tuyen la base del autocontrol?' Un aspecto primario de todo percepción del sonido emitido. Con su sobria brevedad y su
ello fue la significación mágica atribuida a la música. «La lógica sintáctica obligatoria, presenta un contraste extremo
con el cárácter puramente visual de la escritura. Pero, pese a
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ello, o más bien —tal como ha demostrado ingeniosamente los antiguos reyes guerreros a su ejército; éstas resultan muy
Grube— debido en parte a las propias . cualidades racionales impresionantes con su vigor lapidario. Una parte de los Ana-
de su estructura, la lengua china se ha mostrado incapaz de lectos didácticos está formada por discursos, cuyo caráctei
prestar sus servicios a la poesía o al pensamiento sistemáti- corresponde a «alocuciones» pontificales. Fuera de ello, el
co. Tampoco pudo ser útil al desarrollo de las artes oratorias, lenguaje hablado no interviene en la literatura oficial. Su
como sucedió con las estructuras de las lenguas helénicas, falta de desarrollo ha venido determinada, según veremos
latina, francesa, alemana y rusa, cada una a su manera. Los ahora, por motivos sociales y políticos a la vez.
símbolos escritos fueron siempre mucho más abundantes Pese a las cualidades lógicas del lenguaje, el pensamiento
que las palabras monosilábicas, cuyo número se veía inevi- chino se quedó bastante encallado en lo pictórico y lo des-
tablemente bastante limitado. En consecuencia, el pobre criptivo. El poder del logos, de la definición y del razona-
intelectualismo formalista de la palabra hablada perdió toda miento, no ha sido accesible a los chinos. Sin embargo, por
fantasía y ardor frente a la serena belleza de los símbolos otra parte, esta educación puramente gráfica separó el pensa-
escritos. El habitual discurso poético se pronunciaba subor- miento del gesto y del movimiento expresivo, más aún de lo
dinándolo fundamentalmente a la escritura. Escribir y leer, y que es habitual en el caso del carácter literario de una educa-
no hablar, era lo que tenía valor artístico y era considerado ción cualquiera. Antes de ser iniciado en su significado, el
digno de un caballero, pues con ello se mostraba receptivi- alumno pasaba dos arios aprendiendo meramente a pintar
dad hacia los refinados productos de la escritura. La conver 7 unos 2.000 caracteres. Además, los examinadores prestaban
sación fue realmente un asunto de plebeyos. Ello revela un atención al estilo, al arte de la versificación, a un firme domi-
agudo contraste con el helenismo, para el cual la conversa- nio de los clásicos y, por último, a la mentalidad expresada
ción lo fue todo y una traducción al estilo del diálogo fue la por el candidato.
forma adecuada para toda experiencia y contemplación. En La ausencia de toda instrucción en el cálculo, incluso en
China, los productos más perfectos y refinados de la cultura las escuelas graduadas, constituye un rasgo muy sorpren-
literaria languidecieron, por decirlo así, sordos y mudos en dente de la educación china. No obstante, la idea de núme-
su esplendor de seda. Fueron mucho más apreciados que el ros posicionales fue desarrollada" durante el siglo vi a. J.C.,
arte dramático, el cual floreció, de modo característico, du- esto es, durante el período de los estados guerreros. Una
rante el período de los mongoles. actitud calculadora en las relaciones comerciales ha impreg-
Entre los famosos filósofos sociales, Meng Tse (Mencio) nado todos los estratos de la población, y los balances de las
empleó la forma de diálogo de modo sistemático. Precisa- oficinas administrativas fueron tan detallados como difíciles
mente a ello se debe que le consideremos fácilmente como de comprobar, por los motivos ya citados. El libro de texto
el único representante del confucianismo, que maduró hasta medieval (Siao-Hio 1, 29) cita el cálculo como una de las seis
alcanzar plena «lucidez». El poderoso impacto que han teni- «artes». Y, en época de los estados guerreros, existieron unas
do sobre nosotros los «Analectos confucianos» (como les matemáticas que, según se dice, incluían la trigonometría,
llamó Legge) se basa también en el hecho de que en China así como la regla de tres y cálculo comercial. Presumible-
(como en todas partes) la doctrina reviste la forma (proba- mente, esta literatura, excepto algunos fragmentos, se per-
blemente auténtica, en parte) de respuestas sentenciosas del dió en la quema de los libros de Shi-Hwang-Ti. 33 En todo
maestro a preguntas formuladas por los discípulos. En con- caso, en la pedagogía posterior ni siquiera se menciona el
secuencia, para nosotros, queda trasvasada a da forma de cálculo. Y, en el curso de la historia, el cálculo fue perdien-
discurso. Además, la literatura épica contiene las arengas de do constantemente importancia en la educación de los man-
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darines gentiles, hasta desaparecer por completo. Los co- todo interés directo por la obtención de prebendas, y dedica-
merciantes educados aprendían cálculo en sus negocios. Des- da exclusivamente a la educación de «gentlemen» helénicos
pués de la unificación del Imperio y de la debilitación de la (Caloicagathoi).
tendencia hacia una administración racional del Estado, el La educación china favorecía el interés por las prebendas
mandarín se convirtió en un hombre de letras gentil, poco y estaba vinculada a una escritura, pero al mismo tiempo
inclinado a ocuparse del «o-xoM» del cálculo. era una educación puramente laica, de carácter en parte ri-
El carácter mundano de esta educación contrasta con otros tualista y ceremonial, y en parte tradicionalista y ético. Las
sistemas educacionales, que se hallan empero relacionados escuelas no se interesaban por las matemáticas, ni las cien-
con ésta por su aspecto literario. En China, los exámenes cias naturales, tampoco por la geografía *ni la gramática. La
literarios fueron asuntos puramente políticos, La instrucción misma filosofía china no poseía un carácter especulativo,
era impartida, en parte, por tutores individuales y privados, sistemático, a semejanza del que poseyó la filosofía helénica
y en parte por el personal docente de instituciones escola- y al que presentó, en parte y en sentido distinto, la educa-
res. Pero ningún sacerdote formaba parte de éste. ción teológica india y occidental. La filosofía china tampoco
Las universidades cristianas de la Edad Media nacieron tuvo un carácter racional formalista, a semejanza del que
de la necesidad práctica e ideal de una doctrina legal racio- presenta la jurisprudencia occidental. Ni un carácter empíri-
nal, mundana y eclesiástica, y de una teología racional (dia- co casuístico, a semejanza de la filosofía rabínica, la islámica
léctica). Las universidades del Islam practicaron la jurispru- y, en parte, la india. La filosofía china no engendró un esco-
dencia sagrada y la doctrina de la fe, siguiendo el modelo de lasticismo, ya que no se dedicó profesionalmente a la lógica,
las últimas escuelas de derecho romanas y de la teología a diferencia de las filosofías de Occidente y del Oriente
cristiana; las escuelas de filósofos de los bracmanes se dedi- Medio, las cuales se hallaban basadas en el pensamiento
caron a la filosofia especulativa, al ritual y al derecho sagra- helenístico. El propio concepto de lógica fue completamen-
do. En todos estos casos, el cuerpo docente estuvo formado te ajeno a la filosofía china, la cual se hallaba ligada a la
exclusivamente por dignatarios eclesiásticos o teólogos, o escritura, no era dialéctica y siempre se orientó hacia proble-
éstos constituyeron al menos su núcleo básico. A este nú- mas puramente prácticos, así como hacia los intereses de
cleo se agregaron profesores mundanos, a quienes se confia- status de la burocracia patrimonial.
ron las otras ramas de estudio. En la Cristiandad, en el Islam Ello significa que los problemas que han sido fundamen-
y en el hinduismo, el objetivo a conseguir fueron las pre- tales para toda la filosofia occidental siempre fueron desco-
bendas, y con este fin se deseaba obtener certificados educa- nocidos para la filosofía china, un hecho que queda de relie-
cionales. Desde luego, el aspirante deseaba calificarse, ade- ve en el modo de pensamiento categórico de todos los filóso-
más, para el ejercicio de la actividad ritual y la cura de almas. fos chinos y, sobre todo, en Confucio. Con sumo positivismo
Para los antiguos maestros judíos (precursores de los rabi- práctico, los instrumentos intelectuales conservaron la forma
nos), que trabajaban «gratis», el objetivo era únicamente ca- de parábolas, que recuerdan más bien el modo de expresión
lificarse para impartir una instrucción jurídica a los laicos, de los caudillos indios y no el de un argumento racional.
pues ésta era religiosamente indispensable. Pero, en todos Ello puede aplicarse precisamente a algunas de las declara-
estos casos, la educación siempre estaba regulada por las ciones realmente ingeniosas atribuidas a Confucio. Resulta
escrituras sagradas o cúlticas. Sólo las escuelas de filósofos palpable la carencia de lenguaje hablado, esto es, del discur-
helénicas se ocuparon de una educación exclusivamente para so como medio racional para la obtención de efectos políti-
laicos y completamente desvinculada de las escrituras y de cos y forenses, de la oratoria tal como fue cultivada en la

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polis helénica. Dicha oratoria no podía desarrollarse en un incluso se suicidasen en las recluidas celdas de examen de
estado patrimonial burocrático sin una justicia formalizada. las localidades. De acuerdo con la interpretación carismáti-
En parte, la justicia china siempre se quedó en un procedi- ca de los exámenes como «pruebas» mágicas, estos hechos
miento sumario de la Cámara de Astrólogos (de los altos se consideraban prueba de la perversa conducta de la perso-
funcionarios) y, en parte, se basó únicamente en documen- na en cuestión. El candidato permanecía toda su vida bajo
tos. No existieron causas orales, sólo peticiones escritas y el control de la escuela, incluso una vez aprobados felizmen-
testimonios orales de las partes afectadas. A la burocracia te los exámenes para el título superior, con su rigurosa reclu-
china le interesaba el decoro convencional y estos condicio- sión, y después de pasar a ocupar, por fin, un cargo público
namientos prevalecieron y también contribuyeron a obsta- correspondiente al número y nivel de los exámenes aproba-
culizar la oratoria forense. La burocracia rechazó la argu- dos, y subordinado a las recomendaciones de cada cual. Y,
mentación de problemas especulativos «definitivos» por con- además de estar bajo la autoridad de sus superiores, era so-
siderarla estéril desde un punto de vista práctico. Estos metido a constante vigilancia y críticas por parte de los cen-
argumentos fueron tachados de incorrectos por la burocra- sores. Esta crítica alcanzaba incluso la corrección ritualista
cia, y ésta los rechazó por considerarlos demasiado delica- del propio Hijo del Cielo. La denuncia de los funcionarios 35
dos para la propia posición, debido al peligro de que se intro- fue implantada desde tiempos muy antiguos y se le atribuía
dujesen innovaciones. 'un mérito parecido al de la confesión católica de pecados.
Si bien la técnica y la substancia de los exámenes poseye- Periódicamente, en general cada tres arios, se publicaba en
ron un carácter puramente mundano y representaron una la Gaceta Imperia136 su boletín de conducta, esto es, una
especie de «examen cultural para los literatos», su imagen lista de sus méritos y defectos determinados por las investi-
popular fue muy distinta: les prestó un significado mágico gaciones oficiales de los censores y por sus superiores. De
carismático. Para las masas chinas, un candidato que había las valoraciones publicadas dependía que se le permitiese
pasado ,con éxito sus exámenes no era en modo alguno un conservar su cargo, se le promoviese o se le degradase." En
mero futuro funcionario calificado por sus conocimientos. general, el resultado de estos boletines de conducta no venía
Era el probado depositario de cualidades mágicas, las cua- determinado sólo por factores objetivos. Lo importante era .
les, según veremos, se atribuían al mandarín titulado en el el «espíritu», y este espíritu consistía en un penalismo vitali-
mismo concepto en que se atribuyen al sacerdote examina- cio en manos de la autoridad oficial.
do y ordenado de una institución de gracia eclesiástica, o a
un hechicero sometido a prueba y aceptado por su gremio»
La posición de un funcionario y de un candidato que había 4. Honor de status de los literatos
pasado con éxito sus exámenes correspondió en aspectos
importantes a la de un capellán católico, por ejemplo. Para Como grupo de status, los literatos gozaban de privile-
el discípulo, haber completado su período de instrucción y gios, incluso cuando sólo se habían examinado pero aún no
sus exámenes no suponía la conclusión de su inmadurez. tenían empleo. Una vez reforzada su posición, los literatos
Una vez aprobado el «bachillerato», el candidato era someti- recibían privilegios de status. Entre éstos, los más importan-
do a la disciplina del director de la escuela y los examinado- tes fueron: primero, exención de la sordida munera, la cor-
res. En caso de mala conducta, se borraba su nombre de las vée; segundo, exención del castigo corporal; tercero, preben-
listas. En determinadas condiciones recibía palmetazos. No das (estipendios). Durante largo tiempo, se redujo mucho la
era raro que los candidatos cayeran gravemente enfermos o importancia de este tercer privilegio, debido a la situación

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financiera del Estado. Los Seng (bachilleres) seguían reci- base de certificados_de examen como calificación de status,
biendo estipendios de 10,00 'dólares al año, bajo condición posibles degradaciones, castigos corporales durante la juven-
de someterse cada tres o seis arios a los exámenes del Chu tud, y casos frecuentes de degradación incluso en la vejez.
jen o Maestro. Pero, naturalmente, ello no era algo decisivo. Pero, en el pasado, estas nociones feudales de honor habían
Según hemos visto, los costes de la educación y de los perío- dominado la vida china con gran intensidad.
dos de paga nominal correspondían de hecho a la familia. Los antiguos Anales ensalzan la «sinceridad» y la «leal-
Ésta esperaba recuperar sus gastos cuando su miembro in- tad» como virtudes cardinales." «Morir con honor» era el
gresase por fin en la seguridad de un cargo. Los dos pri- antiguo lema. «Ser desgraciado y no saber morir es muestra
meros privilegios siempre tuvieron importancia; en efecto, de cobardía.» Ello se refería sobre todo al funcionario que
la corvée siguió en vigor, aunque en grado decreciente. La no luchaba «hasta la muerte». 4° El suicidio era un tipo de
vara, en cambio, continuó siendo el medio nacional de casti- muerte valorada como privilegio por el general que había
go. Su uso se iniciaba en la terrible pedagogía de castigo perdido una batalla. Permitirle cometer suicidio equivalía a
corporal de las escuelas elementales chinas. Se dice que su renunciar al derecho a castigarle y, por tanto, era objeto de
carácter único consistió en las siguientes características, que titubeos.'" La idea patriarcal del hiao modificó el significado
recuerdan nuestra Edad Media, pero que evidentemente se de los conceptos feudales. El hiao representaba el deber de
desarrollaron hasta extremos aún mayores." Los jefes de sufrir calumnias, e incluso aceptar la muerte como conse-
las familias o de los pueblos compilaban las «tarjetas rojas», cuencia de éstas, si ello servía al honor del señor. Un servi-
esto es, la lista de alumnos (Kuan-tan). Después contiata- cio leal podía, y en general debía, compensar todos los erro-
ban, por cierto período, un maestro procedente de las filas res del señor. El kotow respecto al padre, al hermano mayor,
del excedente de literatos sin cargo, que siempre los había. al acreedor, al funcionario y al emperador ciertamente no
El templo ancestral (u otras habitaciones desocupadas) fue denotaba la existencia de un honor feudal. En cambio, hu-
el aula favorita. De la mañana a la noche se oía gritar a coro biese sido completamente inaceptable que un chino correcto
los «versos» escritos. El alumno pasaba el día entero en un se arrodillase ante su amada. Todo ello era exactamente lo
estado de aturdimiento mental, para el cual existe un carác- contrario de lo que sucedía en el caso de los caballeros y
ter chino, cuyas partes componentes representan un cerdo cortegiani de Occidente.
en la maleza (meng). El estudiante y el graduado eran golpea- El honor del funcionario conservó en gran medida un
dos en la palma de la mano y no ya en aquella parte conside- elemento del honor estudiantil, regulado por resultados de
rada, en la terminología de las madres alemanas a la antigua examen y censuras públicas de los superiores. Ello seguía
usanza, «expresamente preparada por Dios». ocurriendo incluso una vez aprobado el examen máximo.
Los graduados de alto rango estaban totalmente exentos En cierto sentido, lo mismo se aplica a toda burocracia (al
de este castigo, mientras no fuesen degradados. Y en la Edad menos en sus grados inferiores; y en Württemberg, con su
Media quedó firmemente establecida la exención de la cor- famoso «Grade A. Fischen>, incluso en los cargos más eleva-
vée. Sin embargo, a pesar y también a causa de estos privile- dos); pero en China tuvo un alcance distinto.
gios, fue imposible desarrollar ideas feudales de honor basa-
das en éstos. Además, como ya se ha comentado, estos privi-
legios eran precarios, puesto que quedaban suprimidos de
inmediato en caso de degradación, lo cual era frecuente.
Fue imposible que se desarrollase un honor feudal sobre la
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5. El ideal del caballero fo dotado de gran pericia, y de ser capaz de recitar de memo-
ria los clásicos, sobre todo «la primavera y el otoño» de Con-
El peculiar espíritu de los letrados, cultivado por el sistema fucio. Gracias a esta habilidad, una vez demostrada, su tío le
de exámenes, estuvo íntimamente vinculado a los presu- perdonó sus faltas de juventud, y le consiguió un cargo ofi-
puestos básicos de que derivaron las teorías chinas ortodo- cial. Li Hung Chang consideraba todas las otras ramas del
xas y también, dicho sea de paso, casi todas las heterodoxas. conocimiento (ef álgebra, la astronomía) como meros me-
El dualismo del shen y lcwei, de los espíritus buenos y malos, dios indispensables para «llegar a ser un gran poeta». La
de la substancia celestial yang contrapuesta a la substancia perfección clásica del poema que concibió en nombre de la
terrenal yin, y también en el alma del individuo, convirtie- emperatriz madre, como oración en el templo de la diosa
ron necesariamente en tarea exclusiva de la educación, in- tutelar de la sericultura, le permitió gozar de los favores de
cluida la autoeducación, el desarrollo de la substancia yang ésta.
en el espíritu del hombre. 42 En efecto, el hombre cuya subs- Juegos de palabras, eufemismos, alusiones a citas clásicas
tancia yang ha triunfado por completo sobre los demoníacos y un refinado intelectualismo puramente literario eran con-
poderes del kwei anidados en él también ejerce poder sobre siderados el nivel de conversación ideal para un gentilhom-
los espíritus; esto es, según la antigua noción, ha adquirido bre. La política de actualidad estaba completamente exclui-
un poder mágico. No obstante, los buenos espíritus son aque- da de dicha conversación. 45 Puede parecemos curioso que
llos que protegen el orden y la belleza y la armonía del esta cultura de «salón» sublimada, vinculada a los clásicos,
mundo. Alcanzar la perfección personal y lograr reflejar, por capacitase a una persona para la administración de grandes
tanto, esta armonía constituye el medio supremo y único de territorios. Y, de hecho, incluso en China, la administración
conseguir dicho poder. Durante la época de los literatos, el no se llevaba a cabo sólo a base de poesía. Pero el funciona-
Kiün-tse, «hombre regio» y antaño el «héroe», fue una per- rio prebendario chino demostraba su calidad de status, esto
sona que había logrado la autoperfección total, que se había es, su carisma, por medio de la corrección canónica de sus
convertido en una «obra de arte» en el sentido de un canon formas literarias. En consecuencia, en las comunicaciones
clásico, eternamente válido, de belleza psíquica, impartida oficiales se dio considerable importancia a estas formas.
al espíritu de los discípulos por la tradición literaria. Por Numerosas declaraciones importantes de los emperadores,
otra parte, al menos a partir del período Han, 43 entre los sumos sacerdotes del arte literario, adoptaron la forma de
literatos prevaleció firmemente la convicción de que los es- poemas didácticos. Por otra parte, el funcionario debía de-
píritus recompensan la «beneficencia», en el sentido de ex- mostrar su carisma en el desarrollo «armonioso» de su admi-
- celencia social y ética. En consecuencia, la benevolencia tem- nistración; esto es, no debían producirse perturbaciones pro-
plada por la belleza clásica (canónica) fue el objetivo de la vocadas por los espíritus inquietos de la naturaleza o de los
autoperfección. hombres. El verdadero «trabajo» administrativo podía con-
Realizaciones canónicamente perfectas y bellas constitu- fiarse a funcionarios subordinados. Hemos observado que
yeron la aspiración de todo estudioso, así como la evalua- el funcionario dependía del pontífice imperial, de su acade-
ción definitiva de la calificación más elevada certificada por mia de literatos y de su cuerpo colegiado de censores. És-
los exámenes. En su juventud, Li Hung Chang ambicionaba tos recompensaban, castigaban, reconvenían, exhortaban,
convertirse en un hombre de letras perfecto," esto es, un alentaban o alababan públicamente a los funcionarios.
«poeta laureado», por haber alcanzado los títulos más eleva- Puesto que se publicaban los «archivos personales» y los •
dos. Estaba orgulloso, y siempre lo estuvo, de ser un calígra- informes, peticiones y memoriales, toda la administración y
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las azarosas carreras de los funcionarios, con sus (supues- rros familiares, como los citados más arriba, a dedicarse a
tas) causas, se desarrollaban a la vista del público, mucho todo tipo de ocupaciones prácticas, desde comerciante hasta
más de lo que sucede en el caso de nuestras administracio- curandero, antes de completar su carrera. En ese caso, no
nes sometidas a control parlamentario, un modo de adminis- llegaban al estudio directo de los clásicos, sino sólo del últi-
tración que da enorme importancia a la conservación de mo (sexto) libro de texto, el «texto» (Siao Hioh), 46 consagra-
«secretos oficiales». Al menos según la ficción oficial, en do por los arios y que contenía muchas citas de los autores
China, la Gaceta oficial era una especie de constante rendir
clásicos. Estos círculos sólo caían fuera de la burocracia de-
cuentas del emperador ante el Cielo y ante sus súbditos. bido a esta diferencia de nivel de educación, y no a diferen-
Esta Gaceta fue la expresión clásica del tipo de responsabili-
cias en el carácter de la misma. En efecto, existía una sola
dad que emanaba de la calificación carismática del empera- educación clásica.
dor. Por discutible que pueda haber sido en realidad la argu- El porcentaje de candidatos que no aprobaban los exáme-
mentación oficial y la integridad de la publicación —al fin y nes era sumamente elevado. La fracción de graduados de los
al cabo, lo mismo puede decirse de los comunicados de nues- exámenes superiores era proporcionalmente reducida debi-
tra burocracia al parlamento—, el procedimiento chino ten- do a los cupos establecidosf pero siempre era varias veces
día a abrir al menos una válvula de escape bastante podero- superior a los cargos prebendarios disponibles. Los graduados
sa, y con frecuencia eficaz, para la presión de la opinión debían competir por las prebendas recurriendo a recomen-
pública en lo que a las actividades administrativas del funcio- daciones personales," pagos en dinero propio, o a base de •
nario se refería.
préstamos. La venta de prebendas funcionó del mismo modo
que en Europa; fue un medio de,obtener capital para fman-
6. El prestigio de los funcionarios ciar el Estado y, con gran frecuencia, sustituyó a la evalua-
ción de méritos.'" Las protestas de los reformadores contra
la venta de cargos públicos persistieron hasta los últimos
En China, como en todas partes, el odio y desconfianza días del antiguo sistema, según demuestran las numerosas
de los súbditos, común a todos los patrimonialismos, se diri- peticiones de este tipo publicadas en la Gaceta de Pekín.
gió sobre todo contra los niveles inferiores de la jerarquía, Los breves períodos de servicio de los funcionarios (tres
los cuales tenían mayor contacto práctico con la población. arios), equivalentes a los de instituciones islámicas simila-
En China, como en cualquier otro sistema patrimonial, fue res, sólo permitían el ejercicio intermitente de una influen-
c—arac- rerís—ti—
co que los 'súbditos evitasen de modo ap—olitia:7- cia intensiva y racional sobre la economía, a través de la
todo contacto no absolutamente necesario con «el Eárad(»>. administración como tal. Ello sucedió pese a la teórica omni-
Pero esta actitud apolítica no menoscabó la significación de potencia de la administración. Es sorprendente cuán reduci-
la educación oficial para la formación del carácter del pue-
blo chino. do es el número de funcionarios permanentes considerado
suficiente por la administración. Este número ya deja perfec-
Las grandes exigencias formuladas durante el período de tamente claro que, en general, se debía haber permitido que
instrucción se debieron, en parte, a la peculiaridad de la las cosas siguiesen su curso natural, en la medida en que no
escritura china y, en parte, a la peculiaridad del tema de afectasen los intereses del poder estatal y del erario, y en
estudio. Esas exigencias, así como los períodos de espera, tanto las fuerzas de la tradición, las familias, pueblos, gre-
con frecuencia bastante largos, obligaron a aquellos que no mios y otras asociaciones ocupacionales, siguiesen siendo
podían vivir de una fortuna propia, o de préstamos o aho- los normales agentes del orden.
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No obstante, pese a la actitud apolítica de las masas, que influencia conjunta de los escribas y sacerdotes de Egipto.
acabamos de mencionar, las opiniones del estrato de aspi- Sin embargo, la autoridad de los ancianos supuso un pode-
rantes á un cargo público ejercieron una influencia muy con- roso contrapeso dentro de la familia, como ya se ha señala-
siderable sobre el modo de vida de las clases medias. En do. Independientemente de la «valía» de los funcionarios
primer lugar, y sobre todo, ello fue consecuencia de la con- individuales, ridiculizados con frecuencia en los dramas po-
cepción popular mágico-carismática de la calificación para el pulares, el prestigio de esta educación literaria, como tal,
ejercicio de un cargo oficial, según quedaba probada en los estuvo profundamente enraizado en la población hasta que
exámenes. Al aprobar el examen, el graduado demostraba quedó minado por la influencia de los modernos miembros
ser portador de shen en grado eminente. Los grandes man- del estrato de mandarines, dotados de una educación occi-
darines eran considerados mágicamente calificados. Siem- dental.
pre podían pasar a ser objetos de un culto, una vez falleci-
dos y también en vida, a condición de que se hubiese «de-
mostrado» su carisma. La primitiva importancia mágica de 7.- Consideraciones sobre política económica
las obras escritas y de los documentos prestaron una signifi-
cación apotropaica y terapéutica a sus sellos y su caligrafía, y El carácter social del estrato educado determinó su postu-
ello podía extenderse al atavío que lucía el candidato en los ra respecto a la política económica. Según su propia leyen-
exámenes. Las provincias consideraban un honor y una ven- da, la comunidad política tuvo durante siglos un carácter
taja que uno de sus propios hijos fuese seleccionado por el que concuerda con muchos otros rasgos característicos de
emperador como el mejor graduado del nivel superior," y las estructuras burocráticas patrimoniales con un sello teo-
todos aquellos cuyos nombres eran expuestos públicamen- crático.
te después de aprobados sus exámenes gozaban de «un nom- Desde luego, desde tiempos muy remotos, por los moti-
bre en el pueblo». Todos los gremios y otros clubs de algu- vos citados más arriba, la verdadera politica del Estado se
na importancia tenían que contar con un hombre de- letras mantuvo, repetidamente, apartada de la vida económica, al
corno secretario, y estos y otros cargos parecidos se ofrecían menos por lo que a la producción y la economía de benefi-
a los graduados, para quienes faltaban cargos prebendarios. cios se refiere. Ello sucedió en China al igual que en el anti-
En virtud de su carisma mágico y de sus relaciones de pro- guo Oriente, a no ser que entrasen en escena nuevos pobla-
tección, los funcionarios y los aspirantes diplomados —sobre mientos, mejoras a través de la irrigación e intereses fiscales
todo cuando procedían de círculos pequeñoburgueses— pa- o militares. Pero los intereses militares y los intereses por
saban a ser «directores espirituales» y consejeros de sus fa- las finanzas militares siempre provocaron intervenciones li-
milias para todos los asuntos importantes. En este sentido, túrgicas en la vida económica. Estas intervenciones estuvie-
se asemejaron a los bracmanes (gurus) que realizaban la ron monopolistica o financieramente determinadas y, con
misma función en la India. frecuencia, fueron bastante incisivas. Se trató, en parte, de
Como hemos visto, el funcionario fue el personaje que regulaciones mercantilistas, y en parte, de determinaciones
gozó de más oportunidades para acumular posesiones, junto del carácter de las regulaciones concernientes a la estratifica-
con el proveedor del Estado y el gran comerciante. En cón- ción por status. Este tipo de «política económica» planifica-
secuencia, la influencia económica y personal que ejerció da posteriormente cayó en desuso, hacia finales del militaris-
ese estrato sobre la población, tanto fuera como dentro de mo nacional. El gobierno, consciente de la debilidad de su
sus propias familias, fue aproximadamente equivalente a la aparato administrativo, se limitó a ocuparse de las crecidas y

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de la conservación de las vías fluviales, indispensables para una diferenciación social demasiado acusada, tal como la
el aprovisionamiento de arroz de las principales provincias; que viene determinada de modo puramente económico a
por lo demás, se dedicó a la política de esterilidad y consu- través del libre cambio en el mercado. Desde luego, esta
mo típicamente patrimonial. No tuvo una «política comer- aversión se sobreentiende en toda burocracia. La creciente
cial» en el moderno sentido de la expresión." Que se sepa, estabilidad de la situación económica bajo las condiciones
los peajes establecidos por los mandarines a lo largo de los del gran Imperio, económicamente autosuficiente y con una
canales presentaron un carácter mero -dente fiscal, y nunca composición social homogénea, no permitió que se plantea-
estuvieron al servicio de una polític¿ , tconómica. En gene- sen problemas económicos del tipo discutido por la literatu-
ral, el gobierno sólo persiguió intereses fiscales y mercanti- ra inglesa del siglo )(vil. No existió un estrato burgués auto-
les, exceptuando las situaciones de emergencia, las cuales consciente que no pudiese ser ignorado políticamente por
siempre resultaban politicamente peligrosas, en vistas del el gobierno, y de cuyos intereses se ocuparon primordial-
carácter carismático de la autoridad. Según la información mente los «panfletistas» ingleses de la época. Como ocurre
de que dispongo, los intentos más grandiosos encaminados siempre bajo condiciones burocráticas patrimoniales, la ad-
a establecer una organización económica unificada fueron ministración sólo tuvo que ocuparse seriamente de la acti-
planeados por Wang An Shi, quien, en el siglo x[, intentó tud de los gremios mercantiles en un sentido «estático», y
establecer un monopolio comercial del Estado sobre toda la únicamente cuando se vio amenazada la conservación de la
cosecha. Además de ventajas fiscales, el plan pretendía pro- tradición y de los privilegios especiales de aquéllos. Sin em-
mover la nivelación de precios, y estaba relacionado con bargo, los gremios mercantiles no tuvieron una participa-
una reforma de los impuestos agrarios. El intento fracasó. ción dinámica en las condiciones de equilibrio, debido a la
Puesto que la economía quedó en gran medida abandona- • ausencia de intereses capitalistas expansivos (idesaparecidos!)
da a sus propios recursos, la aversión contra la «interyen- dotados de la fuerza suficiente para obligar a la administra-
ción estatal» en cuestiones económicas se convirtió en un ción estatal a ponerse a su servicio, tal como sucedió en
sentimiento permanente y fundamental. Se dirigió particu- Inglaterra.
larmente contra los privilegios monopolistas, 52 los cuales,
en forma de medidas fiscales, son habituales a todo patri-
monialismo. Sin embargo, este sentimiento fue sólo una 8. El sultanismo y los eunucos como oponentes
de tantas actitudes muy diversas provocadas por la convic- políticos de los literatos
ción de que el bienestar de los súbditos dependía del caris-
ma del gobernante. Con frecuencia, estas ideas coexistieron Sólo una comprensión de las fuerzas que éstos tuvieron
sin relación de continuidad con la básica aversión contra la que combatir permite apreciar la situación política total de
intervención estatal, y continúa —o al menos ocasionalmen- los literatos. Podemos prescindir aquí de las heterodoxias,
te— favoreciendo un entrometimiento burocrático en todo, puesto que se tratará de ellas 'más adelante.
que también es típico del patrimonialismo. Además, lógica- Al principio, los principales adversarios de los literatos
mente, la administración se reservaba el derecho a regular fueron las «grandes familias» del período feudal, las cuales
el consumo en tiempos de escasez —una política que tam- no deseaban ser desplazadas de su monopolio de cargos
bién forma parte de la teoría del confucianismo (según se oficiales. Al imponerse la necesidad de adaptarse a las exi-
refleja) en numerosas normas especiales referentes a todo gencias del patrimonialismo y a la superioridad del conoci-
tipo de gastos. Sobre todo, existió una típica aversión contra miento de la escritura, éstas encontraron sistemas y medios
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para abrir camino a sus hijos gracias al favor imperial. clásico, salvaguardado por los literatos y representado por
Después aparecieron los compradores de cargos capitalis- los censores y la «Academia Hanlin». En todos esos casos,
tas: consecuencia natural de la nivelación de los grupos de se concedía el derecho de «libertad de discusión», se pedía
status y de la economía monetaria fiscal. En este caso, la consejo al trono y el resultado era siempre la conclusión de
lucha no pudo presentar un vencedor constante y absoluto, la forma no clásica de gobierno, la ejecución o prohibición
sino sólo triunfos relativos, debido a que toda exigencia de de los eunucos, un retraimiento de la conducta a los esque-
guerra obligaba a la empobrecida administración central a mas clásicos, en resumen, una adaptación a las exigencias
recurrir al truco de los cargos prebendarios corno único medio de los literatos.
de financiar la guerra. Así sucedió hasta hace poco. El sistema del harén suponía un peligro considerable, de-
Los literatos también tuvieron que enfrentarse con los bido a la organización de la sucesión al trono. Los empera-
intereses racionalistas de una administración dirigida por una dores menores de edad estaban sometidos a la tutela de las
burocracia experta. Funcionarios expertos, especializados, mujeres; a veces, este gobierno de las faldas se convirtió en
ya existieron en el ario 601 bajo Wen Ti. En 1068, durante la el gobierno en sí. La última emperatriz madre, Tsu hsi,
dificil época de las guerras defensivas, bajo el reinado de intentó gobernar con ayuda de eunucos." No discutiremos
Wang An Shi, éstos llegaron a triunfar plenamente durante aquí la intervención de taoístas y budistas en estas luchas,
un breve período. Pero la tradición prevaleció de nuevo y que aparecen a lo largo de toda la historia china —por qué y
esta vez de modo definitivo. cómo éstos fueron especificamente aliados naturales, de los
Sólo subsistió un importante y permanente enemigo de eunucos, y en qué medida fueron aliados debido a su situa-
los literatos: el sultanismo y el sistema de eunucos en que ción relativa.
se basaba." Por ello, los confucianos mostraron profundo Dicho sea de paso, la astrología fue juzgada una supersti-
recelo ante la influencia del harén. Resulta muy dificil com- ción no clásica, al menos desde el punto de vista del confu-
prender la historia china sin una perspectiva de este enfren- cianismo moderno." Se consideró que competía por la orien-
tación del gobierno con la exclusiva significación del caris-
tamiento. ma Tao del emperador. Al principio no existió esta situación.
La constante lucha entre los literatos y el sultanismo, que
duraría dos milenios, se inició bajo el reinado de Shi-Hwang- Es posible que la competencia departamental entre la Aca-
Ti; y continuó bajo todas las dinastías, puesto que, natural- demia Hanlin y el cuerpo colegiado de astrólogos tuviese
mente, siempre hubo gobernantes enérgicos empeñados en una importancia decisiva;" tal vez intervino también el ori-
romper los vínculos que les ataban al culto grupo de status gen jesuítico de las medidas astronómicas..
de los literatos, contando para ello con el apoyo de eunucos Los confucianos estaban convencidos de que la confianza
en la magia, cultivada por los eunucos, era causa de todas
y advenedizos plebeyos. Numerosos literatos que se enfren- las desgracias. En su memorial del ario 1901, Tao Mo repro-
taron a esta forma de absolutismo tuvieron que perder la
vida a fin de mantener a su grupo de status en el poder. chaba a la Emperatriz que por su culpa se hubiese elimina-
Pero, a la larga, los literatos prevalecieron una y otra vez." do, en 1875, al verdadero heredero del trono, pese a la pro-
Cualquier sequía, inundación, eclipse solar, derrota militar testa de los censores, ya que el censor Wu Ko 'Tu había
u otro acontecimiento generalmente amenazador restituía dado testimonio de ello al suicidarse. El memorial póstumo
de inmediato el poder a los literatos. En efecto, esos he- de Tao Mo a la emperatriz, y la carta que dirigió a su hijo,
chos fueron considerados consecuencias de un quebranta- destacaban por su viril belleza." No puede caber la menor
miento de la tradición y un abandono del modo de vida duda en cuanto a. la sinceridad y profundidad de su convic-
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ción. También debe atribuirse con toda certeza a la influen- ceremoniales; sólo en ese caso se han adaptado y han adop-
cia de los eunucos la confianza de la emperatriz y de nume- tado una postura «realista», como diríamos en lenguaje
rosos príncipes en el carisma mágico de los bóxeres." En su moderno.
lecho de muerte, esta impresionante mujer formuló el si- «Constitucionalmente» —y ésta fue la teoría de los con-
guiente consejo: (1) que jamás se volviese a permitir que fucianos— el emperador sólo podía gobernar empleando lite-
una mujer gobernase China y (2) que se aboliese para siem- ratos titulados como funcionarios; «clásicamente» sólo podía
pre el sistema de eunucos. 6° Este consejo fue seguido de gobernar empleando funcionarios confucianos ortodoxos.
modo distinto a lo que sin duda fue su intención —suponien- Se consideraba que toda desviación de esta norma era sus-
do que los informes sean exactos. Pero no cabe duda de ceptible de provocar un desastre y, en caso de obstinación,
que, para el auténtico confuciano, todo lo sucedido a partir la caída del emperador y la ruina de la dinastía.
de entonces, sobre todo la «revolución» y la caída de la •

dinastía, sólo confirma lo acertado de su convicción sobre la


importancia del carisma de la virtud clásica de la dinastía.
En este sentido se explotaría esta creencia, en el caso im-
probable, pero posible, de una restauración confuciana. Los
confucianistas, en última instancia literatos pacifistas orien-
tados hacia el bienestar politico interno, naturalmente mos-
traron aversión o falta de comprensión ante los poderes
militares. Ya hemos comentado su relación con los oficiales y
hemos visto que todos los Anales se ocupan paradigmática-
mente de ésta. En los Anales pueden encontrarse protestas
contra el nombramiento de «pretores» como censores (y fun-
cionarios). 6' Puesto que los eunucos fueron especialmente
populares como favoritos y generales, al modo de Narses,
ello sugería una mala disposición hacia el ejército patrimo-
nial puramente sultanista. Los literatos se enorgullecían de
haber destituido al popular usurpador militar Wang Mang.
El peligro de un gobierno con la colaboración de plebeyos
siempre ha sido grande en el caso de los dictadores, pero
ése es el único intento conocido en China. No obstante, los
literatos se sometieron al poder establecido de facto, incluso
cuando fue creado por mera usurpación, como el poder de
los Han, o por conquista, como el poder de los manchúes
mongoles. Se sometieron aunque ello les impusiese sacrifi-
cios —los manchúes se apoderaron del cincuenta por ciento
de los cargos públicos sin poseer las calificaciones educacio-
nales necesarias. Los literatos se han sometido al gobernante
si éste se ha sometido, a su vez, a sus exigencias ritualistas y
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