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Nuestro país cuenta con una red de aeropuertos desde Arica a Punta Arenas,

clasificándolos en tres categorías, primera categoría, segunda categoría y


tercera categoría.

Esta clasificación se realiza dependiendo de las características propias de cada


aeropuerto o aeródromo. A grandes rasgos podríamos clasificar los
aeropuertos por la cantidad de pasajeros que podría hacer uso de esta
modalidad de transporte y si nos basamos en ese criterio, debemos definir qué
tipo de aeronaves podrán aterrizar y despegar, con qué afluencia se
desarrollaran, con qué simultaneidad, entre otras.

La cantidad de pasajeros que podrían hacer uso de un aeropuerto o


aeródromo, para vuelos comerciales, es un dato clave a la hora de definir que
características tendrá este tipo de estructura, si se considera que se construirá
un proyecto nuevo o bien visto desde una visión de expansión y modernización
del mismo.

Las aeronaves que comúnmente son utilizadas por las aerolíneas con las que
operan nuestros aeropuertos, son Airbus 319, Airbus 320, Boeing 767, Boeing
787, entre otras, donde su característica principal es la cantidad de pasajeros
que pueden transportar.

Al aumentar su capacidad de transporte también vemos un aumento de su


longitud y su peso, y es este factor el que nos indica que características tendrá
la pista de aterrizaje, tanto en su extensión como su ancho y resistencia del
hormigón al momento de recibir un aterrizaje.

En la región de Los Lagos existen 4 estructuras calificadas como aeropuerto o


aeródromo en su defecto, siendo el más importante el aeropuerto de la ciudad
de Puerto Montt, llamado El Tepual.

En un estudio realizado en el año 2018, El Tepual que corresponde a la


categoría 1, tuvo un tráfico total de 1.782.004 pasajeros, con un crecimiento de
un 8,5 % en los últimos diez años.

La ciudad de Osorno cuenta con un aeródromo llamado Cañal Bajo Carlos Hott
Siebert, que se encuentra clasificado en la categoría 2.

Nuestra ciudad ha desarrollado un crecimiento en infraestructura muy


importante, ya que contamos con una carretera internacional que conecta
nuestro país con Argentina, a través del paso fronterizo Cardenal Samoré. La
implementación de una carretera de doble vía hasta este punto, ha propuesto
un crecimiento cuantitativo del turismo, transformando a la ciudad de Osorno
en un lugar atractivo para la gente en época estival, entregando un auge a todo
el litoral costero y también a la red interlagos, así como también a la época de
invierno dando paso al uso de los refugios ubicados en los volcanes que se
encuentran en la cordillera, donde las personas practican deportes de nieve y
se toman un tiempo de descanso en esta época del año.

El indudable crecimiento del turismo en la ciudad ha provocado el aumento del


parque hotelero, generando mayor capacidad de hospedaje y por consiguiente
un crecimiento circunstancial de todo el comercio en la región.

La implementación de un casino de juegos, hace más atractivo el paso de las


personas por Osorno, posicionando a la ciudad en un sitio obligado para visitar.

Es por esto que las autoridades correspondientes implementaron un proyecto


de ampliación del aeródromo, que tiene como finalidad transformar a Osorno
en un punto de conexión obligado para los visitantes tanto chilenos como
extranjeros. Esta ampliación en todos sus aspectos tiene como objetivo
principal masificar aun más el uso del transporte aéreo, logrando subir de
categoría el aeródromo transformándolo en aeropuerto de categoría uno.

Este aeródromo tiene una capacidad de trafico anual (estudio año 2018), de
137.429 pasajeros, con un crecimiento de un 15% en los últimos 10 años.

Con el crecimiento anteriormente descrito, la capacidad de tráfico de pasajeros


proyectada en 20 años, indica que las dependencias del aeródromo de Osorno,
se vería sobrepasada por el aumento de visitantes, teniendo que generar un
proyecto que cambie la estructura original del aeródromo transformándolo en
un aeropuerto con una mayor capacidad de tráfico de pasajeros, una torre de
control más grande, ampliación de la subestación eléctrica, estanques de
combustible de 50 m2 y una pista de aterrizaje con características que puedan
alojar a aeronaves de mayor envergadura.

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