Según Nietzche la lectura requiere interpretación en el sentido fuerte.

El zaratrusta se puede
recibir como poesía, es un libro muy exigente con el lector; hay que leer cada parte de el
para poder interpretarlo.
Hay que entender que “No hay obras fáciles, y no hay autores fáciles; lo que hay son
lectores fáciles. Por eso no se debe buscar la facilidad por ningún parte.
No hay un tal código común para interpretar una lectura, el texto produce su propio código,
le asigna su propio valor; se debe descifrar el código el código de la manera como la
escritura lo revele.
Cuando se lee un texto que no somos capaces de interpretar, no lo entendemos, o lo leemos
por fuerza de voluntad; Se trata es de coger el entusiasmo y coger el ritmo.
Leer no es recibir, consumir, adquirir, leer es trabajar: que consiste en determinar el valor
que puede estar en contradicción con el que posee el mismo término en otros textos.
Toda lectura es ardua y es un trabajo de interpretación producir el código que el texto
impone. Hay que aprender a pensar; no son elementos lo que falta para leer un texto, lo que
falta es interpretación, posición activa, discusión con el texto.
El verdadero problema no es el preguntarse qué quería decir el autor; el problema es qué
dice el texto, y el texto siempre dice las cosas que se escapan al autor, a la intención del
autor.
Hay que leer desde alguna perspectiva, y esa perspectiva tiene que ser una pregunta aún no
contestada, que trabaje en nosotros, que nos ayude a interpretar y comprender cualquier
lectura.