EDUCACIÓN EN CAOS

Ante la cuarentena que vive el país a causa de la pandemia covid-19, el Ministerio de Educación
Nacional, promueve bajo la modalidad virtual clases para continuar con el desarrollo académico
que venían cursando estudiantes tanto de escuelas, colegios y universidades. Pero ¿Colombia está
preparada para la virtualidad? Más que una pregunta, planteo una hipótesis que vale la pena
llevarla a la opinión pública, y es que en los hogares de los colombianos, tanto de las zonas
rurales como de las urbanas, es donde se halla la respuesta, y pareciera un tema contradictorio, el
motivo de dicha discusión se centra en la premura con la que se dio la aplicación de la virtualidad
y las carentes herramientas para que sea un adecuado modelo educativo.

Son varios los aspectos que valen la pena tener en cuenta para hablar de una adecuada modalidad
virtual, uno el ambiente propicio para recibir las clases, dos el acceso a internet, tres la
posibilidad de quipos de cómputo, tables, o simplemente dispositivos celulares o smartphones
como medios necesarios para la participación virtual. Son otros los puntos en contra, y debemos
recurrir a las cifras: “según estudios del año 2019, el 38% de las personas no usa internet y el
50% de los hogares, ni siquiera lo tiene” 1, estas cifras se unen desesperanzadoramente con la
noticia de que “la falta de internet afecta a 1’969.969 estudiantes rurales y urbanos dispersos, es
decir que no habitan en la cabecera municipal y que, por lo general, no cuentan con servicios
públicos”.2

¿Cómo pretender una educación virtual en medio de esta pandemia, si hay una inminente crisis
en el acceso virtual? El Ministerio de Educación se lanzó apresuradamente mediante resolución
N° 0007 del 16 de abril de 2020, con la cual promueve bajo la modalidad virtual clases para
continuar con el desarrollo académico que venían cursando estudiantes tanto de escuelas,
colegios y universidades. Creo que el desarrollo que se espera es confuso, una salida mediática
que tiene en aprietos a los estudiantes de los estratos 1 y 2, que según la encuesta antes
mencionada no están los recursos en un año lectivo que atiborra de contenidos y desvela a padres
de familia pensado la forma de obtener desesperadamente lo necesario para que niños, jóvenes y
universitarios este “on line”.

Y la educación en caos también se sustenta en que, ni docentes ni alumnos, mucho menos padres
de familia se han capacitado para la educación virtual. En la era de las comunicaciones, la
pandemia y los mecanismos de contingencia si bien han aislado a la población académica para
prevenir su contagio, el acceso a la virtualidad evidencia que, a Colombia, y desde los entes
gubernamentales como el Ministerio de Educación Nacional, la inversión en educación, que para
el 2020 asciende a los 44,1 billones de pesos, no es suficiente. Aunque se quiera mostrar como el
presupuesto más alto en los últimos años, en realidad es el 11 % frente al 2018 cuya cifra fue de
38,5 billones de pesos. Y este presupuesto que generó paros y luchas estudiantiles y el poco
apoyo de la ciudadanía en general, pareciera que fuera hoy un panfleto que en realidad nos debe
cuestionar.

1
FUENTE:
Fecha: 15 abril, 2020 Categoría: Opinión, Videos: http://ail.ens.org.co/opinion/colombia-no-esta-preparada-para-
la-educacion-virtual/.
2
Mauricio Alvarado - El Espectador: https://www.elespectador.com/coronavirus/no-existe-la-educacion-virtual-en-
la-ruralidad-colombiana-articulo-913527