Está en la página 1de 4

BIOETICA: CIENCIA Y HUMANISMO

Autor: Marta Cantavella Vernia


Universidad Rómulo Gallegos

Concepto de bioética
Existen muchas definiciones de bioética, todas ellas válidas, pero ninguna
satisfactoria si la referimos a lo que es en realidad: una ciencia que pretende rescatar a
las personas humanas desde lo impersonal de la tecnología hacia su identidad universal
de humanidad. Una ciencia que plantea el valor axiológico y antológico de la vida y
acoge en su seno a todas las disciplinas, para desarrollarse como expresión
antropológica de una ética reflexiva y practica. Por eso a dicho José Luís del Barco: “Si
definir la bioética fuera asunto de palabras, apenas habría problemas. Bastaría con
recurrir a diccionarios científicos. O a enciclopedias biomédicas. O a prontuarios al día.
O a manuales modernos donde se pueden hallar cientos de definiciones (…) Hacer
justicia a la vida, dar al vivir lo que es suyo: eso es la bioética”

El concepto de bioética ha ido modificándose y enriqueciéndose, pero sigue siendo,


en esencia, un concepto de amor y equidad entre los beneficios y riesgos de opciones y
decisiones.

La definición clásica de bioética es la publicada en 1978 en la primera Enciclopedia de


Bioética. En esta obra, Reich define a la bioética como “el estudio sistemático de la
conducta humana en el área de las ciencias de la vida y la atención de salud, en cuanto esa
conducta es examinada a la luz de los principios y valores morales”.

Durant le da a la bioética un enfoque novedoso pues le atribuye las cualidades de


ser simultáneamente seglar, multidisciplinaría, contemporánea, global y sistemática.
No cabe duda que la bioética es seglar, puesto que el aspecto religioso, que sin duda se
asocia a la moral, es tan solo una de muchas perspectivas de la bioética. La bioética
también es multidisciplinaria puesto que no es exclusiva de una profesión, por el
contrario, tiene injerencia en la mayoría de las disciplinas, sean las de salud o de otro
campo del saber, tales como la filosofía, la sociología, la economía, el derecho, la
teología, etc., dentro de los cuales son validos múltiples puntos de vista.

Esto significa que la bioética es un espacio donde diferentes especialistas, en


distintas disciplinas, discuten, en un perfecto intercambio de conocimientos, situaciones
comunes a todos en mayor o menor cuantía, sin que esto signifique invasión de
territorio ajeno, sino colaboración interdisciplinaria que redunda en beneficio para
todos, pero sobre todo para la humanidad.

Esta colaboración interdisciplinaria, centrada tanto en el aporte de conocimientos y


en como compartirlos, se aprecia perfectamente en la modalidad actual de atención de
salud, donde un equipo y no una persona aislada, es el responsable de la salid del
paciente, de su familia o de la comunidad, y donde el objetivo común es el mayor
bienestar para ellos.

En este contesto, la bioética es la herramienta común para m afrontar los dilemas


éticos que surgen, tanto en relación con el paciente, su familia o la comunidad, como
entre los diferentes miembros del equipo de salud. En consecuencia, “La

1
interdisciplinariedad debe concebirse, no como una categoría de conocimientos, sino
una categoría de acción que permite el dialogo entre diferentes formas de
conocimientos, permitiendo así que pensamientos distintos se complemente uno a otro,
consolidado la ínter subjetividad.

En 1991, el doctor Tristan Engelhardt, profesor de ética en la universidad de


Texas (USA), agrega otra característica a la bioética al poner que esta “funcione
como una lógica del pluralismo, como un instrumento para la negociación pacífica de
las instituciones morales”, introduciendo así la característica pluralista fundamental
de la bioética.

Características Generales de la Bioética

1.- Es contemporánea

Puesto que afronta nuevos problemas que requieren respuestas novedosas derivadas
de reflexiones basadas en conocimientos tradicionales, pero analizados ahora a la luz
de nuevos descubrimientos y recientes experiencias sin parangón en épocas pasadas.

2.- Es global

Siendo la bioética una ciencia de la vida, es sin duda global, pues su temática abarca
prácticamente todas las situaciones relacionadas con la vida del hombre y del ambiente
que lo rodea.

3.- Es un debate relacional

Puesto que no existe la armonía total entre la experiencia y la razón, ya que esta
no se concibe de la misma manera en todas las personas ni es totalmente
esclarecedora porque es limitada.
El objetivo del debate relacional es encontrar un nivel de razonabilidad que permita
una discusión fructífera, basada en la humildad de reconocer que la realidad no se
conoce en su totalidad, que siempre hay zonas en penumbra y que en todas las
personas existen perjuicios, creencias, vivencias y emociones que indicenen los juicios
emitidos con relación a una determinada situación.
En consecuencia, en el debate bioético no tiene cabida las posiciones extremas
donde algo es blanco o es negro, verdadero o falso, pues existe una infinidad de matices
grises que caracterizan las mayorías de las situaciones.

4.-Es un debate plural

Ninguna persona puede aspirar a tener la verdad absoluta ni una perspectiva que
anule todas las demás; por lo tanto, el debate en bioética es necesariamente debe ser
plural, abierto a la deliberación en donde intervienen distintas y encontradas posiciones.
Este pluralismo debe basarse en la tolerancia hacia las perspectivas de los demás, lo
cual no siempre es aceptado con agrado, especialmente en el mundo latino por razones
históricas, pues durante mucho tiempo la tolerancia se considero un signo de debilidad y
por ente un vicio, explicito incluso en el Evangelio de San Lucas; mientras que la
intolerancia era una virtud manifestada ampliamente en le Inquisición cuando se

2
obligaba aceptar la fe cristiana y los Inquisidores eran absolutamente intolerantes
con los hejeres.
Actualmente la tolerancia esta considerada como una virtud y la intolerancia un
vicio; por eso es especialmente importante mantener la pluralidad en el debate, cultivar
la tolerancia y no permitir deslices en estos aspectos ya que los pequeños errores
conducen generalmente a grandes desatinos. Las posiciones absolutistas no tienen
cabida en la bioética puesto que pudiera transformarla en un “martillo de herejes”.
Desde luego que la tolerancia tiene un límite, pero este límite debe definirse mediante
la participación de todos los deliberantes y nunca establecerse de modo definitivo,
puesto que la realidad es cambiante.

5.- Es un debate crítico

Si bien cierto que debatir los asuntos bioéticos debe aceptarse la pluralidad, ello no
excluye que se pierda el sentido critico. Todas las propuestas nacidas de la pluralidad
deben aceptarse; pero también debe analizarse críticamente, ya que cada propuesta
racional representada el inicio de un debate critico del cual surgirá probablemente una
nueva propuesta, y así sucesivamente, hasta lograr una solución prudente que reporte el
mayor beneficio para todos. Estos representan la tradicional secuencia de Tesis, Síntesis
y Antitesis.

El debate en bioética sigue, hasta cierto punto, el modelo socrático de la mayéutica.


Sóbrate se compara con una comadrona que ayuda a dar a luz pero que no impone
nada; por eso se llamaba así mismo partero de ideas, porque ayudaba a que cada quien
sacara al exterior lo que llevaba dentro de si.

Es necesario recordar que la acción de ayudar a encontrar las ideas que conduzcan
a la solución de la situación planteada, no significa manipular para que la solución sea
la que uno desea que sea

En definitiva, el debate en la bioética es abierto y amplio, admite propuestas aun


contradictorias entre si, puesto que todas tienen espacios dentro de ellas, y analiza
rigurosa y sistemáticamente los hechos en busca de una solución acorde con los
principios morales imperantes. Este análisis parte de criterios científicos y
humanísticos y se realizan a la luz de los conocimientos de diferentes profesionales, en
un dialogo interdisciplinario que permite adoptar una decisión justa y prudente en
resguardo de la dignidad de las personas.

En el área de salud, la bioética tiene una particular relevancia e importancia, pues


el asombroso desarrollo de la tecnología, que muchos califican de peligrosa, ha traído
como consecuencia un cierto desorden en atención medica tradicional y, en algunas
ocasiones, ha producido desestabilizaciones cercanas al caos. Para enfrentar estos
desafíos es imprescindible la reflexión bioética dirigida a restablecer el orden, conduce
al mayor bienestar del hombre y, frente a la permanente adquisición de nuevos
conocimientos científicos y nuevas tecnologías de consecuencias impresidibles, esta
reflexión no puede ser puntual y temporal, sino permanente y continua.

También podría gustarte