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Cuando ae elvis, ra gu bri ran os sues y también att, Quin no ha oad cami eae? CONTENIDO 1. Una mafiana, 2. De paseo. 3. El charco magico, 4, Toda una aventura 5. Piedra triangular. 6. Y si sale el sol 7. Alfinal del arcofris. Regreso a casa. Una Mafiana... ‘Una mafiana soleada, el cielo azul, las nubes blancas como copos de algodén, el viento suave, las gotas de rocio, el perfume de las flores... todo el jardin parecia un lugar encantado e invitaba a jugar... Martin al escuchar el canto de los pajaros y sentir los rayos del sol acariciando su cara, se levant6 muy contento, se dirigié al bao, lavé su cara, cepill6 sus dientes, tomé una rapida ducha, desayun6 y muy animado se dispuso a salir para la escuela. Como de costumbre, se dirigié a su habitacion, corrié la cortina de su ventana y observé el hermoso jardin... Observaba con mucha atencién los movimientos y el dulce golpeteo en el cristal... imaginé que siél fuera tan pequento, fragil, tierno y astuto como el gorrién, alo mejor su recorrido a la escuela seria mas répido y emocionante. Fue tan gracioso su pensamiento que sin més comenz6 a rel, pero aquel momento magico se vio interrumpido por las palabras de su madre —jHijo! no te has dado cuenta de la hora? Pero yo solo miraba el pequefio gorrién, murmuré Marti —Se hace tarde para la escuela, debes inte ya, Martin sintié mucha tristeza en ese momento. Una vez mas deseo ser gorrién y Salir a volar, disfrutar de los aires y recorrer grandes paisajes. Sin embargo la obligacion era otra... haciendo un gesto malhumorado no tuvo otra opcién que salir camino a la uu ment cl pensamiento, no podia olvidar la imagen del pequefio gorrién, a? Pensaba el por no intenté agarrarlo... pero a su vez se fa qui arito merecia ser bre, n fe justificaba encerrarlo y mucho me maltratarlo, Caminaba lentamente, con sus fenis pateaba toda piedrecilla que hab’ suelo, de repente una de ellas rebot6 tres s y cay6 detras de un pequefio arbusto; go se movio. Martin con gran curiosidad a, cual seria ¢ acercé lentamente a la pl sa, un verde, grande y gordo sapo 10 un salto con gran impulso que alcanz6 Martin; él pegé un grito y el po aterrado lo mir6... él temblaba todavia | susto y timidamente saludé: Hola sefior sapo, :como esta usted? Croac-croac respondié el sapo, lo que empujé al sapo para quitarlo de su hombr sapo se yens6 que no era sencillo Martin asocio con un “bien gracias’ pero fue en vano, rraba mas a su camisa, Martin rar a discutir con el sapo asi que decidié seguir su camino. Ya se hacia tarde, entre patadita y patadita, recorrer lentamente el camino y el encuentro con el sapo pas6 mucho tiempo. De Pase ba ala escuela, todavia dudaba asistir 0 nsaba que habfan tanta por descubri diar era una verdadera pérdida mpo, sibien era cierto que en la escuela aprenderi lorador despertaba en él. sin pe levaba en su Caminando y ow erde profundo, t6 al y comenzé a juguetear, de repente miré a Martin como inviténdolo a jugar. Martin estaba tan cansado y acalorado, que decidié quitarse los tenis y las medias, subirse las botas del pantalén y saltar de piedra en piedra. En un pequefio descuido, se resbalé y ichiscas! Cayo al agua; se levanté con fuerte dolor en la espalda, la cabeza cubierta de rastrojos y al verse tan sucio y enlodado se eché a llorar, sintié pena por el mismo, pero tomé aire, reflexioné y se dio cuenta que el haberse metido al lago no habia sido una buena idea, empapado resolvié salir del agua y seguir el sendero. Su amigo el sapo en el agua quedé muy apenado de él y se despidio. No sabia que hacer, solo recordaba a su madre que inocente se qued6 en casa pensando que él estaba en Ja escuela, muy juicioso estudiando. ‘Siguié caminando y encontr6 un frondoso arbol, con sed y hambre se senté junto a él, sacé su merienda... un delicioso pastel y un Jugo de frutas que su mamé habia puesto en su lonchera y se dispuso a comer. Satisfecho su apetito, pensé que debia seguir explorando el sendero y con los tenis, al hombro, continué su camino, de repente sintio algo en sus pies, eran millones de hormigas que atraidas por la humedad y la tierra subieron encantadas a los pies de ‘Martin; él comenzé a dar saltos, a sacudir los pies, a moverlos de un lado para otro pero todo fue en vano, la tinica opcién que se le ocurrié fue volver al lago, sumergir los pies en el agua y asi ahogar a las hormigas. Fue una gran solucién, complacido con la situacion se qued6 admirando el lago y se 15 preguntaba: zque tan profundo era? {Hasta donde Hlegaria su inmensidad? Si decidiera bafarse, ,que tal estaria el agua? ;Acaso el lago esconderia algun tesoro! Dejé la maleta en la orilla, muy animado se lanz6 al agua y comenz6 a nadar, al momento aparecié su amigo el sapo y sorprendido de ver al nifio le pregunt6: —zQue haces en mi lago? —jQuién te ha dado permiso para entrar en 61? ~ a Alo cual Martin.respondié: "él lago pertenece ala dos y todos podemos: SU tamafio nos permite a¥ ded, entonces el sapo le re —Esté bien pero para disfrutar de él deberés cumplir con tres tareas antes del medio dia de hoy, estas de acuerdo? Martin en busca de aventuras respondi , como era un gran valiente podria sseguramente resolverlas. EI sapo inicié su explicacién, la primera tarea consistia en encontrar 10 piedras del mismo color en lo profundo del lago, la segunda era encontrar la flor de estrella azul en algin lado del lago y la tercera descifrar el acertijo: “Agua clara, agua clara, brilla, brilla sin cesar, magia, magia :donde estd?, ahi te he de encontrar. Al pens6 que las tareas serian muy sencillas, pero la verdad estaba un poco equivocado... comenz6 a nadar hacia lo profundo del lago, tocaba el fondo y solo sentia rastrojos, tierra y algo parecido a 18 piedras, sacaba la mano del agua y solo era ‘mugre lo que alli habia. No perdia la esperanza, solo le afligia que el tiempo pasara, recordaba que solo tendria hasta el medio dia para cumpli con las tareas y muy seguramente ya habia pasado mucho tiempo. Definitivamente no fue posible cumplir con la tarea de las piedras, decidié entonces buscar en la orilla la flor de estrella azul Después de recorrer la orilla nadando y luego por fuera del lago se dio cuenta que muy cerca al lago habia un rbol frondoso, muy parecido al que habia visto cuando se sent6 a descansar... yal lado de sus fuertes y grandes raices estaba una planta frégil, al parecer indefensa, con unas flores azules en forma de estrella, que brillaban con el sol y sus hojas se mecian con el viento. Se acerc6 cuidadosamente, lanz6 su mano sobre ella y de repente escuché una voz: —jDetente! {Nunca hagas eso! Las flores Jamas se cortan, siempre deben permanecer en las plantas para que no mueran, ;acaso eres el Dios del lago que quieres acabar conmigo? Martin estaba muy asustado, nunca habia visto u oido a una flor que hablara. Entendi6 el mensaje y timidamente le dijo: —Perdéname pequeiia flor, no quise hacerte daiio, yo tan solo queria cumplir con las tareas del sefior sapo, o de lo contrario. tendré que irme del lago lo antes posible. El tiempo se acaba, La flor susurré: —"Agua clara, agua clara, brilla, brilla sin cesar, magia magia :dénde esta? Ahi te he de encontrar...” — Como dices? Pregunté Martin, yla flor nuevamente repiti6: eres de encontrar” De repente Martin recordé que esa era la tercera tarea, descifrar el acertijo, | entusiasmado pregunts EL CHARCO MAGICO. La flor de estrella azul levanto uno de sus pétalos y sefial6 una direccién... qué quieres decir con esas palabras? (Hablas de algin lugar en especial? Para Martin ya no era tan importante cumplir las tareas y mucho menos seguir en el lago, le atraia la gran curiosidad por lo que el acertijo le insinuaba. ‘Sin pensarlo dos veces siguié la direccién indicada, Caminé y camin6 por largo rat ‘cual no seria su sorpresa al divisar a lo lejos, algo que brillaba, chispitas de escarcha brotaban de ese lugar. A medida que se acercaba escuchaba una dulce melodia, lisica para sus ofdos, se sentia muy feliz, Eran muy pequefios, peleabiaiy sritaban lo que en realidad para Martin era como un susurro, or su tono de voz. Se acercé, bajé y extendié su mang hacia los hombrecillos, DYKE _" y por que se sentia tan atraido |! por ese lugar? ,De qué ¢ra tse reflejo tan espeshaailar? Avanz6 -sllencio§®. jad repenteyyo nos jereonaes bien. extrafios or, certo penso que quizés serfan gnomes, Flos sacaron sus @spadas para defenderse del “ataeainte™, ‘ para ellos el nifto era Wy realidad era sencillg Martin. Quiero ser su amigo. Estoy paseando por el sendero y me senti atraido por el resplandor que sale de este lugar Y que buscas? preguntaron los. hombrecillos, —Vienes de parte del malo grufién? {Malo grufién? —{Quién es 61? Pregunté Martin. Es un gigante como ti que todos los dias viene a llevarse las fresas silvestres que nosotros con tanto esmero cultivamos; 1 viste con botas café, es un sefior gordo y barrigon, pantalon negro y camisa blanca, lleva puesto un sombrero arrugado y cuando abre su boca se le ven los dientes rotos Coge las fresas y se las come, la altima vez que vino llené una bolsa con ellas. —Ya veo, dijo Martin, al igual que todos los hombres piensan que son duefios de toda la naturaleza y de lo que alli existe, pero no piensan en cuidarla 0 preservarla, 26 {por eso dices qué es malo y grufion? —No solo por eso, respondieron los hombrecillos, el viene utilizando palabritas, palabrotas S#"_}*j*72= bastante feas, grita y ademas le da patadas a todo lo que ve. —Ustedes creen que yo les puedo ayudar? Pregunté Martin. —Bueno, tino eres ni tan grande ni tan fuerte como él, pero si puedes ayudarnos con, Jos otros nifios para que amen la naturaleza ycuiden de ella. Los hombrecillos le dijeron a Martin, —ya te contamos nuestro problema pero tunno nos has dicho aiin que buscas acé, —Veran, desde lejos vi un resplandor, escuché una linda melodia, y cuando me acerqué los descubri a Ustedes, me podrian contar ¢por qué aqui brilla tanto? 28 —Es un secreto, respondieron los hombrecillos, estas en el lindero del charco magico. —iCharco magico? Pregunt6 Martin. {Qué tiene de magico? —En el fondo del charco vive un pececito dorado, pocas veces sale a la superficie y cuando lo hace concede deseos @ quien lo merece. —1Qué clase de deseos? Pregunté Martin —Depende lo que pidas. —Bueno la verdad si saliera no se que le pediria, coment Martin. —Eso si, tienes que pensarlo bien debes merecer lo que pidas, ser justo 0 de lo contrario podria causar un efecto contrario. Agregaron los hombrecillos. Como asi? Pregunté intrigado Martin, 29 —Si ti pides por ejemplo riquezas y no la mereces se te dara pobreza. Estaban en esa conversacion cuando se escuché el acertijo: \gua clara, agua clara, brilla, brilla sin cesar, magia magia :dénde esta? Ahi te he de encontrar...” Martin rapidamente pregunté al hombrecillo: —1Qué significa este acertijo? Los hombrecillos sin decir palabra dieron media vuelta y desaparecieron entre las plantas. TODA UNA AVENTURA. Martin a medida que recorria su camino encontraba mas cosas que lo inquietaban, situaciones poco usuales para la vida normal, de un chico como él. El tiempo pasaba y el no se daba cuenta de ello, su cabecita llena de dudas, su amigo el sapo, las tareas, el acertijo, los hombrecillos y ahora el charco magico y el pececito dorado. Debia elegir entre dos opciones: volver casa prontamente o continuar el sendero para ver lo que sucedia, pero, jEstaba preparado para una nueva aventura? (Se olvidaria de todo? Era una dificil decision para un niilo de tan solo 7 altos. Miro hacia el cielo azul como el mar, mubes blancas y fresco viento, no es tarde ens6, no sé que hora es pero con seguridad podré seguir andando. Estaba cansado pero su curiosidad le podia mas. De repente, al alzar su mirada, noté que elresplandor atin continuaba, que el brillo y destello de luces magicas se divisaban atin no tan lejos de donde estaba, {Entonces qué era eso? ‘Siguio el camino y por frente suyo pas6 una ardilla, se quedé mirando al nifio y le Pregunté: —yQuién eres? —Soy Martin, y tit gc6mo te llamas? —Sally, respondié ella, vivo con muchas 3 sendero y ahora voy e1 busca de comida ¢y para donde vas? —No tengo un destino fijo, respondio Martin, lo nico que sé, es que quiero saber qué es lo que brilla allé al fondo, esas lucecitas escarchadas me atraen mucho, {ti sabes que es? —Dicen los animalitos que viven por aqui, que es algo muy hermoso, pero que nadie ha podido Megar hasta alla, —Wor qué? Pregunt6 Martin, Dicen también que se pierden en el camino y todo aquel que vaya para alla nnunca regresa, —iUpsss! Exclamé Martin... ser que solo los valientes pueden legar y algo especial van a encontrar —Sélo ti sabras qué hacer, si por tu irresponsabilidad irds 0 no, exclamé la ardilla. —;Sabes? Seguiré buscando comida, std visto que ti, nifio aventurero, nada me daras y la ardilla siguié su camino, La ardilla siguié su camino. Otra pregunta més para la cabecita de Martin... ;Ser verdad lo que la ardilla le dijo? {Seria envidia? Se sintié un poco triste, reconocié que no habia sido muy inteligente de su parte haber iniciado semejante aventura; avanzando encontré una pequefia salida, hizo un gran esfuerzo, pas6 por abi y salié al otro lado, apretando el estémago y encogiendo las piemnas. ;Que hermoso paisaje! Un Jardin bellisimo, muchas flores a su alrededor, amarillas, rojas, rosadas y naranja también, un verde césped y un delicioso aroma. 38 LA PIEDRA TRIANGULAR Estando en ese maravilloso lugar, en medio del brillo del sol, el trinar de las aves, y de mariposas revoleteando de un lado ara otro, una vez mas Martin pensé en su gorri6n... y si pudiera volar veria mas cosas a su alrededor, podria divisar a lo lejos el sendero que debia seguir para poder llegar al sitio que resplandecia. Martin se empefiaba enalcanzarsu objetivo, sucuriosidad se veria recompensada al encontrar la respuesta a su inquietud, caminé lentamente con mucho cuidado, avanzando sin saber a donde llegar y mirando el camino encontré una piedra ‘triangular, la tomo entre sus manos y tin- tin-tin-tin-tin la miisica sali6 de la piedra. 39 jEstoy sofando? Se pregunté Martin. iEsto no puede ser! La arTojé al piso, reboté en sus pies y volvié a su mano. Yo creo que el cansancio me hace pensar y sentir cosas que en realidad no son. La imaginacion me juega alguna broma. De nuevo Ja piedra triangular emitié las notas musicales tin-tin-tin-tin-tin, Martin miré fijamente a la piedra, la tocé con su dedo indice, de repente vio que en el piso habjan mas piedras como esa, se agach6 y tomé varias de ellas, al cogerlas se repetia una y otra vez el tin-tin-tin-tin-tin, ;por qué las piedras producian musica? Miraba a su alrededor y nadie habia por alli, ;quién descifraria el misterio? Se sent6 en el césped y contemplaba sin parar las piedras en su mano; se preguntaba 40 —2Y si les hablo a las piedras ellas me contestaran? Solo lo sabré si lo hago. —eOuién les enseié a cantar? Les pregunt6. Esperé unos minutos y cual no seria su sorpresa al escuchar: “Agua clara, agua clara, brilla, brilla sin cesar, magia magia :dénde esta? Ahi te he de encontrar..." ‘Suaz! |Que sorpresa! Otros dicen este acertijo. —iPor qué dicen ustedes esto? Le dijo a las piedras —Levo todo el dia caminando, ‘me han sucedido muchas cosas y en cada lugar o circunstancia lo escucho. Algo empezaba a entender Martin. ese lugar debia estar encantado... desde el encuentro con el sapo una mision debia ‘cumplir, seguramente encontrar ese lugar tan especial. 4a Martin incrédulo de lo que ofa y veia dijo: podrian ustedes ayudar a llegar a de luces escarchadas? De repente no solo las piedras, sino todas 2s flores susurraban: Agua clara, agua clara, brilla, brilla sin sar, magia magia ;dénde esta? Ahi te he Una florecilla con voz amable le dijo: 4 ese lugar donde quieres ir seguro te has de sent pero tienes que saber, que bien te has de comportar y asi poder disfrutar, De nada sirve ir si no sabes respetar, A la madre naturaleza siempre hay que Martin aterrado, casi sin respirar murmuré: —No se preocupe sefiora flor, nole haré ningin dafio, se que la naturaleza es de todos pero no por eso Ja vamos a dafiar. Es Glerto que hay personas que no la cuidan pero este no es mi caso, he sido educado con muchos valores, mi mamé siempre me ha ensefiado a respetar. la florecita complacida con la respuesta recibida indico con su ramita un lado del sendero, el nifio se despidio y agradecido siguié su andar. Y SI SALE EL SOL Caminé y camin6... estaba realmente exhausto, sus pies le dolian... decidid sentarse al pie de un rbol y dormido se quedo. Pas6 toda la noche sin darse cuenta, Drillaron las estrellas y la luna salié, las aves volaron la noche cayé. Al amanecer escuché el canto de los Pajaritos, asustado se despert6, en ese instante no recordaba mucho de lo sucedido cl dia anterior, el sol pegaba en su cara de una forma resplandeciente! Sofocaba el calor, Martin tenia hambre y sed (recordaba que no habia comido desde el dia anterior). De la merienda escolar no quedaba sino el Se sent a pensar sobre la magia del color que vela y el recuerdo de un programa de television que explicaba sobre el imperioInca para quienes el arcoiris era definitivamente muy importante, a tal punto que habian dado significado a cada uno de los colores, de tal suerte que el rojo para ellos representa Ja madre tierra, el naranja Ia sociedad en general y su cultura, el amarillo la energia, la fuerza y los principios morales del ser humano, la solidaridad y la hermandad, el verde la economia y las riquezas naturales, Ja flora y la fauna, el color azul representaba para ellos la astronomfa, el universo y el firmamento, y el color afil el agua como fuente de vida y de riqueza. Miraba el paisaje y comparaba la clasificacion que daban los Incas sobre los colores y muy desde su corazén asentia que él también estaba de acuerdo, se puso de pie y siguid en direccién del arcoiris; a decir verdad no sabia en realidad si estaba lejos o cerca de tan majestuosa obra, lo tinico seguro es que buscaria el final del arcoiris. 48 AL FINAL DEL ARCOIRIS Camin6 por largas horas, a veces se acostaba, descansaba y admiraba la belleza natural a su alrededor, pensaba; sel arcofris era un fendmeno dptico, zentonces no habia magia alli? 2Y el resplandor? {Y las luces escarchadas? ,Qué pasaba entonces con todo aquello? De repente, el acertijo lleg6 ‘a su mente interrumpiendo sus preguntas. “Agua clara, agua clara, brilla, brilla sin cesar, magia magia :dénde esta? Ahi te he de encontrar...” ‘Alguna relacién debe tener el acertijo con todo esto, pens6... emprendié una vez mas el camino, avanz6 paso a paso, descubrié que una mariposa de multiples colores le acompaftaba, volaba cerca a su cuerpo y quizas cansada, se pos6 en su hombro, Martin de reojo la miré y alli la dejo. Luego de caminar por otro largo rato sintié, una miisica que susurraba en sus oldos, parecia magica y sofadora, sintié que su corazén se aceleraba, palpitaba rapidamente, la emocién le embargaba, sus piernas apuraban el caminar, las manos le sudaban, su respiracion se agitaba, y de nuevo una vez mas oi: \gua clara, agua clara, brilla, brilla sin cesar, magia magia :dénde esta? Ahi te he de encontrar...” —iYeah! —Grité emocionado Martin. jFantastico! jLo supuse! Algo en mi corazon sabia que lo encontraria, el final del arcoiris era el acertijo! Saltaba_y saltaba, reia y refa, al piso se botaba y otra vez se levantaba. No podia creer Jo que veian sus ojos, ‘anta belleza junta, el manantial de agua mas impresionante que no habia imaginado gua cristalina de color azul profundo destellaba sin cesar, la escarcha protaba desde lo profundo, el sol hacia el brillo fuera incalculable, era tan majestuoso que Martin no sabia si acercarse ain més, si beber de esa agua, bafiarse en ella o simplemente detenerse a admirarla. fa el aroma de las flores, el tierno susurro del viento, el revolotear de clentos de mariposas que ‘elosas cuidaban del manantial, la paz interior que experimentaba ante este sspectaculo trascendfa por todo su cuerpo, no habia tiempo, ni lugar, ni pensamiento alguno que le quitara esta sensacion tan maravillosa. Levanto sus ojos y ala orilla vio elfinal del arcoiris, en esta fuente de agua se perdian o fundian los colores del arcofris. sin mas se sent6 a admirarlos y tan solo por un instante quiso contarlos, saber st los 7 colores estaban ain juntos el rojo, naranja, amarillo, verde, azul, afil y violeta. Al darse cuenta que si estaban con timida voz pregunt6 al manantial: —jC6mo tienes tanta belleza? De d6nde obtienes tanta fuerza y majestuosidad? {Qué deberiamos hacer los hombres para irradiar tanta hermosura? Elmanantial con voz musical le respondié — La belleza no es el exterior, la belleza sale del verdadero interior, cada ser humano leva consigo un hermoso arcoiris y en algunos de ellos brilla mas que en otros. eso depende del mismo ser. — Eso esta un poco enredado. Pens6 Martin, EI manantial sigui6 explicando al nino, — verds, si cada persona busca en su interior encontrar “su arcoftis” pero para lucirlo debe en primera instancla desearlo, sa no es suficiente que “parezca” un arcoiris, debe sencillamente “serlo”, cada colorrefleja Ja fortaleza interior, el amor, la esperanza, la tolerancia, el respeto, la alegria, el servicio, la solidaridad , con tan solo una gota de arcoiris de cada ser humano todo seria diferente... hoy tu eres muy afortunado, has descifrado el acertijo: “Agua clara, agua clara, brilla, brilla sin cesar, magia magia :dénde estd? Ahi te he de encontrar...” —Ydéjamedecirte quelo has descubierto Porque eres un ser muy bonito, tu inocencia, alegria y ternura hicieron posible este gran acontecimiento, cada impase de este viaje por el sendero era la preparacién para recibir hoy esta gran leccién, no todos son dignos de reconocer tanta belleza; pero todos en la vida tenemos una gran mision y la tuya es seguir entregando y viviendo “tu arcofris". En la medida que las personas que te rodean lo descubran podrén muy 55 seguramente irradiar como tii lo que has vivido ayer y hoy quedara para siempre en tu ‘mente y coraz6n, la magnitud y grandeza de la naturaleza confian en ti... y yo manantial supremo os concedo ese poder, ve por tu camino, y recuerda * brlla,brilla sin cesar”, vive a plenitud cada instante de tu vida, y ahora regresa a casa. REGRESO A CASA Martin estaba extasiado. Era muy impresionante la experiencia que habia vivido, atin su corazén palpitaba, la alegria y emocién le invadian, por un momento pensaba que al final del arcofris habia una gran vasija llena de monedas de oro como en los cuentos pero a decir verdad ni siquiera todo el oro del mundo le hubiera generado tanta emocién y paz como la que lo invadia. Emprendi6 el viaje de regreso, tom6 de nuevo el sendero_y en un par de horas legé a su casa, su ropa sucia y enlodada, su cabello mojado, su cara con tierra y algo de 37 escarcha, sus zapatos un poco rotos por tan, incansable aventura, no se sabia cual era el color de sus medias, la camisetaarayas habia perdido sus tonalidades, su codo raspado, las manos sucias, su maleta arrastrada pero su coraz6n fel su mamé, lo abrazé y Ie dijo: Al timbrar en su casa salié —Hijo, al fin regresaste, —Estaba muy preocupada, hay muchas personas buscéndote y nadie te encontraba, —,dénde estuviste? —{No estabas en la escuela? {Por qué legas tan sucio? {Qué te sucedi6? Eran tantas las preguntas que Martin solo respondié: Fue una gran aventura, sali por el sendero, Conté la historia paso a paso pero de repente su mama le dijo: —Basta yal No més mentiras y fantasias! Ese lugar “magico” no existe ni existira jamas! Ya me tienes bastante enojada con tu desobediencia, ve a darte un baio y vienes a cenar iYa es tarde! Hay que descansar. cy Brel coaziny ment de Notn dud awa experiencia sll podria decd gue hacer cn ele sumadr no lecrey paro tenia acerca gue habia sid rel FLOR E IMAGINACION ba pel de clr rocun lo Bye CSTs gtn dia lo que hay al final del otis? Si quieres saberlo sumeérgete con Martin en est ascinante viaje eno de aventura, conoceris lugares méglcos, floes y nimales que hablan,acertjos por resolver y muchas sorpresas més. tale interior de cada ser humano esti plasma la grandeza de la Yais Alewing, maestra escrito de descendencia alemana con 32 ais de experiencia, dedicada alos ifs, a su mundo de fantasia, creatividade imaginacién que se convierten en la principal fuente de inspiracin de sus obras, BID tower B00ks... BO ecm nconsnt

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