Coaching Ejecutivo y su

Alcance en la Empresa
Autor: Carlos Mora Vanegas

El Coaching ejecutivo como técnica gerencial fue creado para ayudar a mejorar el desempeño
de las organizaciones mediante la formación de directores, gerentes y personal clave que a lo
largo del tiempo va a generar valor y optimizar los procesos de los negocios como resultado
de su aplicación.

En realidad esta técnica no está siendo muy aprovechada por las empresas. Esto se debe a
varias razones. La primera es porque esta técnica quizás no está muy difundida y se
desconocen sus beneficios. También esta técnica requiere capacitación, entrenamiento, para
llevar a la persona o grupos de personas hasta donde se desea y esto requiere una inversión
de tiempo y dinero; y muchas veces los resultados no se obtienen de forma inmediata.

Existen soluciones para que las empresas interesadas en esta técnica se beneficien y no
continúen en ese modelo tradicional de gestión donde descansa en la capacidad del gerente
que es solo para especificar, ordenar, coordinar y, particularmente, controlar el desempeño de
los trabajadores.

La aplicación de esta técnica sería de gran beneficio para las empresas. El gerente estaría en
capacidad de identificar los obstáculos que limitan el desempeño de la gente y disolverlos.
Este gerente, que será a su vez un Coaching, sabrá generar confianza, sentido de
responsabilidad y compromiso, capacidad de aprendizaje, impecabilidad en el desempeño y
creatividad.

El Coaching Ejecutivo, adoptado correctamente, permite al recurso humano ser más efectivo
al coordinar acciones, desarrollar estándares de impecabilidad, ser capaz de generar en los
equipos de trabajos mayores niveles de compromiso con la misión y objetivos de la empresa,
estimular la creación de un ambiente de aprendizaje para la excelencia, aprender el correcto
manejo de los conflictos y relacionarse desde una nueva base ética, personal, empresarial.

Es una herramienta de desarrollo de Directivos que se lleva a cabo mediante un sistema de

asesoramiento personal y profesional para el posterior impacto en la organización. Dicho
sistema proporciona información, conocimientos, habilidades, referencias, colaboración y
asesoramiento.

Entre los objetivos del coaching ejecutivo se encuentran que el Directivo se desarrolle tanto
profesional como personalmente, para lograr un funcionamiento óptimo como gestor o
ejecutivo y que este desarrollo personalizado tenga un impacto a todos los niveles en la
empresa.

Algunas de las condiciones que debe cumplir el coach son las siguientes:

1. Amplio y profundo conocimiento del mundo de la empresa.

2. Capacidad de crear una relación de confianza, desde la credibilidad (que sólo se

consigue con honestidad) y comprensión.

3. Tiene que ser un buen comunicador, y tener las habilidades de comunicación bien
desarrolladas, sobre todo la de la escucha activa.

4. Capacidad de análisis y de encontrar las relaciones efecto-causa que se dan en

cualquier acción, así como de crear un plan de desarrollo personalizado y eficaz.
5. Capacidad de encontrar, no las respuestas adecuadas, sino las preguntas adecuadas
para las distintas situaciones que pueda plantearle su cliente.

6. Capacidad para encontrar las oportunidades en las acciones pequeñas del día a día, y
no en las grandes acciones empresariales.

7. Capacidad para captar y tener en cuenta las variables organizacionales que rigen la
cultura en la que se encuentra la empresa, las cuales condicionan el contexto en el que
puede desarrollar su actuación como Coach.

8. Tiene que tener en cuenta las metas y valores personales de los ejecutivos sobre los
que actúa, así como los suyos propios.

9. Capacidad de mostrarse como un modelo de confianza, comunicación, motivación y

dirección.

Por último, el Coaching es un proceso de aprendizaje para desarrollar la capacidad de acción

efectiva de un individuo. El Coaching en el contexto organizacional consiste en la creación de
espacios conversacionales que permitan procesos reflexivos, que resulten en trabajo óptimo y
resultados esperados por la organización.

El coach sabe que las emociones son determinantes en los resultados que se obtienen en las
organizaciones. Entiende las emociones como predisposición a la acción que permite que
ciertas cosas sean posibles y otras no.