Está en la página 1de 1

Sinfonía de los salmos (II)

La Sinfonía está escrita en 3 movimientos que se interpretan seguidos sin pausa entre ellos. La
palabra sinfonía se usa solo para decir que es un conjunto de ideas musicales, no se adhiere a la
forma tradicional de las sinfonías (algunos movimientos en forma sonata...etc.)

El segundo movimiento es una fuga doble en Do m. La primera fuga usa el mismo motivo de cuatro
notas que se usa en el primer movimiento y se basa en la repetición de esas cuatro notas con
rítmicas cambiantes y en diferentes octavas. El tema es primero introducido por el oboe y luego
respondido por la flauta. Después de exponer otra vez el sujeto y la respuesta hay un episodio
protagonizado por las flautas hasta llegar a la segunda exposición.

La segunda fuga está protagonizada por las voces que entran con el tema en el compás 29
empezando por las sopranos a las que siguen las contraltos en el compás 33, los tenores en el 39 y
los bajos en el 43. Mientras tanto, en el compás 29 se puede oír el tema de la primera fuga en los
bajos a la vez que entra el tema de la segunda fuga en las sopranos.

En el compás 53 escuchamos un estrecho basado en la segunda fuga y a partir de ahí escuchamos


fragmentos de motivos de sujeto y contrasujeto que van pasando por las voces hasta que llegamos
al máximo clímax del movimiento en el compás 71, en el cual las voces cantan el texto de una
manera homofónica mientras los demás instrumentos hacen el tema de la primera fuga en forte,
con entrada del timbal por primera vez, siendo este el momento más dramático del movimiento.

Al final asistimos a una clarificación de la textura desde el contrapunto hasta el unísono, el cual se
materializa al final a través de las voces de chelo y contrabajo hacen la cabeza del primer sujeto.

También podría gustarte