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LA PALABRA DE DIOS ES TU FORTALEZA Y TU SEGURIDAD DE PERDÓN.

 Dos personas conocí:   Pedro, tenía 32 años cuando le fue infiel a su esposa. La
condenación y las consecuencias que vinieron a su vida por causa de su pecado
eran desastrosas. La mayoría de la gente que se dice muy religiosa, son las que
menos están dispuestas a perdonar. Su esposa no le perdonó, sus hermanos
cristianos no le perdonaron, pero Pedro en su miseria se hincó de rodillas y le rogó
a Dios por perdón y restauración y Dios le escuchó.
Años después él vive una vida exitosa, mientras que su exesposa, y sus
"hermanos" cristianos siguen consumidos por el  odio.
 
También conocí a David. El cometió el mismo error, y también como a Pedro, ni su
esposa, ni sus hermanos cristianos quisieron perdonarle y darle otra oportunidad a
pesar de su arrepentimiento. Un día platiqué con el y le recordé que ni las
exesposas, ni los pastores, es más, ni su padre o madre representan el perdón de
Dios. De hecho, la biblia claramente nos enseña que:
 
Salmo 27:10 Aunque mi padre y mi madre me dejaran, Con todo, Jehová me
recogerá...
 
¿Lo miras? Le dije: Aun si tu madre te abandona, Dios está dispuesto a no
abandonarte.  Pero David seguía mirando hacia atrás cada día buscando el favor y
el reconocimiento de los que lo rechazaban, lo calumniaban y lo habían
abandonado.  Años después, David está inmerso en el vicio del alcohol y las  
drogas, y siempre que me lo encuentro en la calle, me recuerda que tan ingratos
fueron aquellos que lo rechazaron, y aun no puede aceptar el perdón de Dios.
 
Espero, amiga, amigo, que tu si estés dispuesto a aceptarlo. Presiona en botón
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