Job 1:1

“Había en el páis de Uz un hombre llamado Job. Era un hombre perfecto y recto,

temeroso de Dios y apartado del mal.”

Dando a conocer los detalles de este libro existe debate en la autoría del libro. Hay
investigadores que afirman que la historia de este libro fue contemporánea en los tiempos de
los patriarcas, como los de Noé y Abraham, por tal razón atribuyen la autoría del libro a Moisés
que lo escribió junto al pentateuco (Génesis, Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio).

La historia de Job comienza con la descripción de sus cualidades. Las Escrituras lo indican con
estas 4 virtudes:

1) Hombre perfecto
2) Hombre recto
3) Temeroso de Dios
4) Apartado del mal

Según el Comentario Bíblico Adventista el cual es un tratado de varios eruditos de las

Escrituras afirman lo siguiente frente a estas cualidades:

“Perfecto.- Heb. tam. Esta palabra no implica necesariamente la idea de impecabilidad

absoluta. Antes bien significa plenitud, integridad, sinceridad, pero en un sentido relativo. El
hombre "perfecto" a la vista de Dios es el que ha alcanzado el grado de desarrollo que el
Creador espera de él en algún tiempo dado. El término hebreo tam equivale al griego téleios,
que a menudo se traduce como "perfecto" en el NT, pero que se traduce, mejor como
completamente crecido" o "maduro" (ver 1 Cor. 14: 20 donde téleios se tradujo "hombres" en
contraste con "niños"). Es difícil encontrar una palabra adecuada como traducción de tam.
Algunos traductores, siguiendo la LXX, han usado la palabra "intachable". Sin embargo, esta
palabra no parece suficiente para implicar la connotación positiva de totalidad presente en
tam.”

“Recto.- Heb. yashar, "derecho", "probo", "justo", "recto".

“Temeroso de Dios.- Expresión bíblico frecuente que denota lealtad y dedicación a Dios. Aquí se
busca un contraste entre Job que era fiel a Dios, y los adoradores a otras deidades.”

“Apartado.- Heb. "desviado". La idea es la de evitar el mal apartándose de él como si se tratara

de la presencia del peligro. Las cuatro ideas incluidas en este versículo no son meras
repeticiones para impresionar al lector con la idea de que Job era un hombre bueno. Más bien
se contemplan mutuamente formando un cuadro total de un personaje descollante.”

Las primeras lecciones que nos da este versículo son las siguientes:

Existen hombres y mujeres verdaderamente buenos. El hecho de que Job haya existido
reafirma esta idea. Es una idea importante en estos tiempos donde parece ser que los nobles
hombres han dejado de existir. Mientras Dios siga obrando en la tierra existirá habrá hombres
nobles y buenos.

Conclusión

Estimada Familia quiero decirles que Dios tiene un plan, el busca restaurar al hombre a su
condición original en el Edén. Job llegó a serlo. No solo él, sino muchos hombres: Rebeca, Issac,
Jacob, etc. Por lo tanto es una invitación a todos los hombres a que puedan llegar a seres
perfectos, rectos, temerosos de Dios y apartados del mal.

Un día el Señor Jesús dijo:

“Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho
fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.” Juan 15:5

“Él les dijo: Lo que es imposible para los hombres, es posible para Dios” Lucas 18:27

De aquí a pocos días veremos cómo un hombre de bien, padece bajo las circunstancias de esta
vida.

Job 1:7
“Un día acudieron a presentarse delante de Jehová los hijos de Dios, y entre ellos
vino Satanás. Dijo Jehová a Satanás:
-¿De donde vienes?
Respondiendo Satanás a Jehová, dijo:
-De rodear la tierra y andar por ella.

Una escritora llamada Elena G. White comenta este suceso con lo siguiente:

“Las Sagradas Escrituras declaran que en cierta ocasión, cuando los ángeles de Dios vinieron
para presentarse ante el Señor, Satanás vino también con ellos (Job 1:6), no para postrarse
ante el Rey eterno, sino para mirar por sus propios y malévolos planes contra los justos.”

En base a este suceso se puede acotar que Satanás tenía acceso a la presencia de Dios, la
pregunta es ¿Por qué? Cuando vamos a algunos versículos podremos comprender esta
circunstancia. Cuando Pedro escribió su epístola, trató de advertir a la iglesia sobre falsos
maestros, en uno de sus citas pondría lo siguiente: “Les prometen libertad, mientras que ellos
son esclavos de la corrupción, pues uno es esclavo de aquello que le ha vencido” 2 Pedro 2:19,
así el Apóstol Juan escribe “Todo el que practica el pecado es del diablo; porque el diablo peca
desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo” 1
Juan 3:8-10

Bajo esta misma lógica podemos ver que Adán y Eva eran libres en la tierra, mediante el ardid
de Satanás en el Edén con el fruto prohibido, los esclavizó. Adán y Eva pecaron, por tal razón
cedieron el principado a Satanás. Esta idea es confirmada en la afirmación de Jesús con
respecto a Satanás: “Y ahora os lo he dicho antes que suceda, para que, cuando suceda, a
creáis. No hablaré ya mucho con vosotros, porque viene el príncipe de este mundo, y él no tiene
nada en mí.” Juan 14:29,30 Vemos el reconocimiento de Satanás como príncipe de este
mundo. Satanás tal vez fue como representante de los hombres en esa ocasión. Es penoso
decirlo, pero así pasó. La humanidad le cedió a Satanás tal título.

Actualmente eso ya cambió. Así que no pierdas la esperanza ¡Lo maravilloso de la muerte del
Señor Jesús en la cruz, fue que el Señor Jesús quitó este título a Satanás y tomo nuestra
representación! ¡Esto requiere otro estudio bíblico! Ahora el Señor Jesús es quien toma
nuestra representación en las cortes celestiales. Y no solo eso, sino también intercede por
nosotros. El Señor Jesús es la razón por la que las oraciones y peticiones nobles de todos los
hombres en todo el mundo son escuchadas por el Padre. El misterio de la salvación es un tema
muy hermoso y extenso para explicarlo en estas cortas líneas.

Esta escena es importante porque explicará los males que padecerá un hombre justo como
Job. De la misma forma existe el mismo espíritu de Satanás en los hombres hoy, es decir
piensan en hacer el mal todo el tiempo. Por lo mismo hay posibilidad a ser víctima de alguna
persona similar. En tal sentido es menester estar vigilante y por sobre todo no perder ni la
esperanza (Esperanza en Dios como libertador) ni la integridad frente a las circunstancias
adversas (Pues es la mejor forma de honrar a Dios)

Job 1:8
“Y Jehová dijo a Satanás: ¿No has considerado a mi siervo Job, que no hay otro
como él en la tierra, hombre perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del
mal?”
El Diccionario Bíblico Adventista desarrollado de investigaciones exegéticas (Explicación o
interpretación de algo, generalmente de la obra de un autor o de un texto concreto,
especialmente bíblico, es decir de investigaciones de cada palabra o versículo de la Biblia)
define a justicia como:

“(heb. tsedeq y ts e dâqâh, que significan "[lo] correcto", "rectitud", "justicia", "equidad",
"piedad"; gr. dikaiosún', "justicia". rectitud"; dík'; estos vocablos se refieren tanto a la norma
recta como a la acción ordenada y justa)”

Estado en el que existe una correcta relación entre el hombre y Dios, dentro de los límites de
la comprensión finita del hombre de la voluntad y del propósito divino. La justicia de Dios es
absoluta, y equivale a la plenitud e infinita perfección del carácter divino. Pero el hombre no
tiene absolutamente ninguna justicia por sí mismo. "Todas nuestras justicias [son] como trapos
de inmundicia" (ls. 64:6), y Pablo declara que "en mí... no mora el bien" (Ro. 7:18). En
consecuencia, cualquier justicia que el hombre tenga es de Dios, en virtud de su relación con
él, porque procede de Dios. El pecador arrepentido entra en este estado de justicia cuando por
fe la acepta como don gratuito del Cielo. Tal fue el caso de Abrahán (4:3, 20-23), quien estuvo
listo para recibir con gozo lo que Dios pudiera revelarle como su deber y hacía con alegría todo
lo que Dios le ordenaba.

Muchas veces pensamos en los hombres justos son aquellos que actúan de forma recta y
respetando las normas morales, sin embargo desde la visión bíblica. Un hombre es justo si está
en buena relación con Dios, lo que lo llevará a actuar con rectitud y guardar todo lo bueno. En
tal sentido comprendemos porqué Job era un hombre justo.

Era necesaria esta explicación preliminar sobre justicia porque en los versículos siguientes se
observará el deseo de Satanás de apartar a Job de Dios y a Dios de Job, es decir destruir la
buena relación de Job con Dios. Lo cual sigue siendo una constante en las actividades de
Satanás. Existe algo misterioso en la humanidad. Lo cual inclusive a mi parecer me llena de
constante reflexión. ¿Por qué los hombres que llevan mal en su corazón se unen contra los
hombres que desean hacer el bien? Muchas veces estos hombres de mal corazón son capaces
de la difamación, de la calumnia e inclusive del asesinato. El mejor ejemplo es el de Caín y Abel
o cuando un sub oficial de la policía denuncia a su capitán corrupto y este lo asesina. Tal vez la
respuesta del Señor Jesús responde la pregunta. “Pues todo aquel que hace lo malo aborrece
la luz y no viene a la luz, para que sus obras no sean reprendidas. Pero el que vive conforme a
la a verdad viene a la luz, para que se ponga de manifiesto que sus obras son hechas en Dios”
Juan 3:20,21

Mientras haya seres que no tengan una buena relación con Dios serán fáciles de ser usados
contra los que sí, es decir contra hombres justos.

Esto nos lleva a pensar en un concepto denominado “El conflicto cósmico” lo cual en términos
simples se denomina: “La lucha entre el mal y el bien”.

En relación con el versículo propuesto. El Señor se honra por la existencia de los hombres
justos, pues en esa pregunta que le hace a Satanás, de cierta forma le decía que a pesar de
que Él tenía una gran influencia en el mundo, existen hombres que le sirven con justicia. Eso
nos debe llevar a tener esperanza en Dios. No todo está perdido y Dios está esperando que
haya más hombres justos. ¿Desearías ser un hombre justo? “Y de todas las cosas de que no
pudisteis ser justificados por la ley de Moisés, por medio de Él (Jesucristo), todo aquel que cree
es justificado” Hechos 13:39

Conclusión

Estimada familia. Existe un gran conflicto. No lo podemos ver. Este conflicto está en todos los
niveles, es decir a nivel personal, espiritual, ideológico, político, social, etc. Hay mal en la tierra
y es una realidad sobre la que debemos resignarnos, pero nosotros podemos contribuir a
aumentar el mal o detener su avance. Para detener su avance necesitan de Dios y verán cuanto
bien hace detener el mal. Se requiere sabiduría. Por ello cuan bueno es que tengan buena
relación con Dios. En Job veremos como a pesar de tanto mal, los hombres pueden soportar y
así en Dios terminar con una grata recompensa.