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Estilos de La Comunicación y Su Prsencia en El Aula de Clase PDF
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Resumen
Este artículo explora la posibilidad de identificar estilos de enseñanza sobre la base de
diferencias en el comportamiento comunicativo de los profesores, diferencias que resulten
observables en el estilo lingüístico de su discurso en el aula. Para hacerlo, presenta una re-
visión de los trabajos sobre estilos comunicativos desde las perspectivas cultural, genérica e
individual. Finalmente, ubica la propuesta en el contexto de los estudios sobre la comunicación
en el aula de clase, específicamente, los trabajos sobre el discurso del profesor durante su
labor pedagógica.
Palabras claves:
Diferencias individuales, estilo de comunicación, estilo de enseñanza, discurso en el aula,
diferencias culturales.
Abstract
This paper explores the possibility of identifying teaching styles on the basis of differences
in teachers’ communicative behaviors, that have an expression in observable differences in
teachers’ linguistic styles. In order to do that, a review of papers on communicative styles from
the cultural, generic and individual perspectives is made. Finally, the proposal is considered in
the context of the studies on classroom communication, specifically, the studies on teachers’
patterns of language use in the classroom.
Keywords:
Individual differences, communicative style, teaching style, classroom discourse, cultural
differences.
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colaborativas” (Potter, 1954). Al respecto, Howden hemos encontrado indicios de un estilo lingüístico
(1994) plantea un contraste entre los estilos de asociado con un estilo comunicativo propio de
comunicación poco contextualizados de varones determinado contexto cultural.
norteamericanos, representantes de una cultura
eminentemente competitiva, y los ampliamente El estilo de comunicación
contextualizados presentes en varones japoneses, como rasgo de género
inmersos en una cultura más colaborativa. La tabla En el trabajo ya mencionado, Howden (1994) pone
1 presenta algunas de las diferencias encontradas. también de relieve la existencia de estilos de comu-
nicación ligados al género. En su comparación, la
Tabla 1. Estilos de comunicación según el tipo de cultura.
antropóloga explica cómo el estilo de comunica-
Estilo competitivo Estilo colaborativo ción de los varones japoneses tiene rasgos bastante
Habla que involucra
Habla objetiva
elementos relacionales
cercanos al estilo de comunicación de las mujeres
Actitud de confrontación Actitud amistosa colaborativa norteamericanas (estilo colaborativo) y menciona
Discurso indirecto, ambiguo, esta similitud para explicar las dificultades en los
Discurso directo, claro, preciso
dubitativo encuentros comunicativos entre varones norteame-
Punto de vista individual Punto de vista colectivo
ricanos y japoneses1.
Actitud impersonal Actitud personalizada
Habla inexpresiva Habla emocional abierta Como categoría cultural, las diferencias en gé-
nero han sido estudiadas en su dimensión comu-
Las diferencias entre culturas competitivas y nicativa. Al respecto se destaca el trabajo de Buxó
culturas colaborativas pueden caracterizarse, tanto (1988) sobre los estereotipos culturales del compor-
en términos del comportamiento comunicativo de tamiento comunicativo de hombres y mujeres y la
las personas, como en las formas lingüísticas que propuesta de Tannen (1990) de caracterización de
acompañan estos comportamientos (tabla 1). En un los llamados “generolectos”, en términos de estilos
estudio reciente, Sánchez-Burks et ál. (2003) encon- de comunicación. Tannen plantea que las mujeres
traron que individuos norteamericanos, que –como hablan “en un lenguaje de conexión e intimidad”,
ya lo mencionamos– privilegian una comunicación mientras los hombres lo hacen “en un lenguaje de
poco contextualizada, utilizan un discurso de tipo estatus e independencia” (Tannen, 1990). La tabla 2
directo; por el contrario, los individuos del oriente presenta algunas de las principales diferencias entre
asiático, que privilegian una comunicación amplia- los dos generolectos.
mente contextualizada, utilizan preferentemente
Tabla 2. Estilos de comunicación según el género.
un discurso de tipo indirecto en sus intercambios
Masculino Femenino
comunicativos.
Búsqueda de independencia Búsqueda de intimidad
En estos resultados encontramos una primera El habla reporta hechos El habla establece relaciones
indicación clara de la relación que hemos planteado Dar discursos Escuchar al otro
entre estilos en la comunicación y estilos lingüís- Dominancia Cooperación
ticos. En efecto, como se recordará, por “discurso
directo” se entiende una forma gramatical en la En correspondencia con las variaciones actitu-
que el mensaje se codifica verbalmente de manera dinales y comportamentales en el plano comunica-
literal y la intención se expresa de manera explícita. tivo, las diferencias por género pueden atestiguarse
En contraste, el “discurso indirecto” es una forma en también por medio de rasgos discursivo-lingüísticos
la que el mensaje se codifica de manera no literal y característicos de cada generolecto. Se ha dicho,
la intención se sugiere de manera implícita. Hemos
identificado entonces un indicador de naturaleza
1 En el sentido en que los varones norteamericanos encuentran la
eminentemente lingüística, que además es fácilmen-
forma de comunicación de los japoneses un tanto “afeminada”.
te cuantificable, en la actividad comunicativa; esto es:
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por ejemplo, que el discurso femenino posee un En el caso de la comunicación, esta dificultad no
carácter más dubitativo que el masculino, lo que se tiene que ver con el hecho de que sea complicado
manifiesta por el uso más frecuente de preguntas imaginar diferencias entre las personas –al fin y al
de confirmación2 (por ejemplo, ¿no es cierto?, ¿no cabo es claro que las personas se diferencian entre
crees?, etc.) y, en general, de oraciones interrogativas sí en la forma como hablan a otros o conversan con
(Coates, 1996; Holmes, 1995). Por su parte, el discur- otros– sino por el hecho de que la comunicación
so masculino resulta más asertivo que el femenino, entre individuos es un asunto complejo y, en esta
indicado esto por la tendencia a usar de forma más medida, la definición de un determinado estilo
frecuente expresiones confrontativas (por ejemplo, de comunicación involucra una gran variedad de
¡no creo!, ¡no estoy de acuerdo!, ¡eso no es así!) y aspectos no todos ubicables en el mismo nivel de
oraciones afirmativas. descripción.
Los estudios sobre generolectos desarrollados en Una primera forma de aclarar este punto es
la última década son una muestra de cómo una cierta observando que todo acto comunicativo tiene un
tendencia comunicativa, contextualizada en este componente de contenido y un componente de
caso en la categoría cultural, tiene manifestaciones estilo. El elemento del estilo es un componente de
lingüísticas reconocibles y susceptibles de descrip- tipo relacional que indica cómo debe interpretarse,
ción sistemática, hasta el punto que pueden plantear- filtrarse o comprenderse el mensaje literal (Norton,
se estilos lingüísticos propios de cada género. 1983). En otras palabras, en los enunciados de cada
individuo hay una serie de elementos que proporcio-
Estilo comunicativo como nan información sobre la forma como ese individuo
característica individual entiende y asume las interacciones comunicativas
Hasta el momento hemos expuesto los desarrollos entre las personas y, por tanto, proporciona informa-
del concepto de estilo de comunicación, desde una ción sobre la forma como el mensaje literal emitido
perspectiva de variación sociocultural en la que debe interpretarse.
priman concepciones, imaginarios y supuestos Norton (1983) propone que para cada persona
compartidos por grupos de personas. Sabemos, sin hay al menos un patrón habitual de comportamiento
embargo, que la noción de estilo tiene su origen, relacional que define una norma individual. Así, el
desarrollo y definición en el contexto del compor- estilo comunicativo es un constructo que describe
tamiento individual. una tendencia consistente de comportamiento co-
De acuerdo con Allport (1961) una cosa es lo municativo (Horvath, 1995). Desde este punto de
que una persona hace (comportamiento adaptativo) vista, pueden identificarse dos grandes tendencias
y otra cómo lo hace (comportamiento estilístico). comunicativas generales: la activa y la pasiva. En el
Así, un comportamiento estilístico es la manera que extremo activo se encuentran comportamientos co-
tiene cada cual de comportarse adaptativamente. municativos que enfatizan en la acción y la verbali-
Allport plantea que todo acto humano tiene una zan; en el extremo pasivo están los comportamientos
faceta expresiva que no es intencional, sino espon- que enfatizan en los aspectos receptivos, orientados
tánea y difícil de cambiar. Esa faceta es el estilo; la hacia el interlocutor.
idiosincrasia personal que marca el comportamiento Estas dos grandes tendencias comunicativas
de las personas. Si bien la dimensión estilística de permiten agrupar los diez estilos del comunicador
algunos comportamientos resulta obvia –la forma definidos desde esta perspectiva. En el extremo
de caminar, la forma de vestir, la forma de sonreír–, activo se ubican: a) dominante, caracterizado por
el estilo de otros comportamientos puede ser difícil la tendencia a asumir la responsabilidad de las
de precisar. situaciones sociales, a hablar más que los otros
participantes y a controlar las situaciones; b) dra-
2 Llamadas tag questions en inglés.
mático, en el que se actúa de manera ostensiva para
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expresar las ideas y las emociones por medio de en la caracterización de más de un estilo de comu-
chistes, historias o exageraciones; c) el polemista, nicador y, por esta razón, que un individuo puede
en el que el hablante tiene la tendencia a retar a sus estar caracterizado por más de un estilo. Esta es
interlocutores; d) animado, caracterizado por su ges- una clara debilidad de la propuesta de Norton, en la
tualidad permanente; e) penetrante, caracterizado medida en que se diluye la capacidad diferenciadora
por el intento de producir una impresión duradera de la tipología, capacidad que resulta connatural
y memorable en los interlocutores; y, finalmente, f) a la definición de un marco estilístico cualquiera
abierto, que se identifica por la tendencia a revelar (Hederich, 2007).
información personal y a expresar emociones. Por Por otro lado, de acuerdo con Norton, el estilo
su parte, la tendencia pasiva incluye cuatro estilos del comunicador es claramente observable a partir
comunicativos específicos: g) relajado, en el que se de comportamientos comunicativos como gestos,
destaca una forma sobria y ecuánime de interactuar; expresiones faciales o movimientos, por ejemplo. A
h) atento, que se caracteriza por escuchar a los demás pesar de ello, su instrumento para la identificación
haciendo contacto visual y asintiendo con la cabeza del estilo de comunicador, el CSM (Communicator
para mantener la conexión con el interlocutor; i) Style Measure), es una encuesta de autorreporte que
amigable, que proporciona respuestas positivas a mide la percepción personal del estilo propio de
su interlocutor para reconocer, motivar o reforzar comunicación. La CSM mide diez características
su comportamiento; y j) preciso, que se caracteriza correspondientes a los diez estilos definidos (cuatro
por ser específico y claro a fin de no dar pie a am- preguntas por estilo) y además la autovaloración
bigüedades (Norton, 1983). como buen o mal comunicador. Esta podría no ser,
Esta propuesta de identificación de estilos en desde nuestro punto de vista, la mejor forma de ope-
la actividad comunicativa humana, mediante la racionalizar un estilo de comunicación que, por su
clasificación de tipos de comunicadores, posee un naturaleza, siempre aparece frente a un interlocutor
fundamento conceptual relevante y ha tenido cierto que lo desencadena.
eco en el plano de la investigación aplicada al aula Volvemos al punto de la comunicación como un
de clase3. Las categorías resultantes y la forma como fenómeno complejo en el que convergen diversos
se propone su identificación tienen, sin embargo, niveles de descripción, para proponer una segunda
algunos problemas. forma de concebir los estilos de comunicación. Nues-
En primer lugar, en la definición de estos estilos tra propuesta es que podemos ir un poco más allá
se advierte que un mismo rasgo puede estar presente de la formulación de tipos de comunicadores, para
proponer estilos lingüísticos asociados con patrones
estilísticos de funcionamiento comunicativo. Para
3 Los desarrollos de Norton sobre el concepto de estilo de comuni- ello, nos apoyamos en estudios recientes que han
cador, y en especial su instrumento para identificarlo, han tenido
aplicaciones en el contexto educativo para establecer el estilo de mostrado que la selección de un término en parti-
comunicación como variable influyente en los procesos acadé- cular, de un giro gramatical determinado, o de una
micos. Carrell (1992), por ejemplo, realizó una investigación para
establecer las relaciones entre el estilo de comunicación y el estilo
combinación de palabras específica tiene la suficiente
cognitivo de profesores y estudiantes de secundaria y los efectos estabilidad intercontextual como para ser indicador
de la interacción entre estos dos estilos sobre la evaluación de
del estilo lingüístico de una persona. Sin ir más lejos,
los estudiantes acerca de la labor de sus profesores. Junto con la
tipología de Norton, para la identificación del estilo de comunicación los profesores pueden reconocer la identidad de sus
de estudiantes y profesores, Carrell adoptó la tipología de Gregory estudiantes leyendo escritos anónimos de los mismos,
para lo concerniente al estilo cognitivo y su CSD (Cognitive Style
Delineator). Los resultados indicaron que las relaciones predichas simplemente por su uso idiosincrásico de palabras o
entre el estilo cognitivo y el estilo de comunicación se verificaban frases; una especie de huella digital lingüística difícil
para los estudiantes pero no para los profesores, que el estilo “con-
creto secuencial” del profesor logra mejores evaluaciones por parte de esconder (Pennebaker y King, 1999).
de los estudiante que los otros, y que existían correspondencias Pennebaker y King (1999) proponen el siguiente
entre el estilo comunicativo del profesor y el estilo comunicativo
de los estudiantes que lo evalúan positivamente (Carrel, 1992).
ejemplo para ilustrar la existencia de estilos lingüís-
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ticos. Suponga que se le pide a un grupo de modelos conteo de palabras, junto con el análisis del discurso
que responda a la siguiente pregunta general: “Dí- frase a frase. Igualmente, requiere del manejo de
game algo sobre usted”. Aunque muchos de ellos más de una muestra de discurso por persona a fin
contesten a la pregunta con algunas similitudes de de asegurar la estabilidad en la caracterización de
contenido, la forma como cada uno de ellos cons- cada estilo. En este punto es importante considerar
truye sus descripciones variará en términos de qué eventos discursivos en su contexto de enunciación.
tanto dice y también de las palabras precisas que Si bien es posible identificar patrones regulares de
utilice. El qué de las respuestas será muy similar, pero usos léxicos y gramaticales, muchos de ellos deben
el cómo variará entre unos y otros. En suma, lo que su aparición a condiciones de la situación comuni-
se propone desde esta perspectiva es que sobre la cativa específica en la que son producidos. Es por
dimensión de forma de un enunciado, operan carac- ello de gran importancia proceder a la identificación
terísticas de la particularidad individual que hacen de diferencias estilísticas, de cara a una situación de
del uso personal de la lengua un hecho característico comunicación claramente definida. Nos interesa
y estable y, por tanto, clasificable estilísticamente aquí una situación particular: la comunicación en
(Hederich, 2007). el aula de clase.
Esta forma de definir el estilo de comunicación,
por la vía del estilo lingüístico, es un campo de tra- El estilo de comunicación
bajo relativamente reciente que ha mostrado ya al- del profesor en el aula
gunos avances. Así, se han encontrado correlaciones Ya hace algunas décadas que el proceso de ense-
entre marcadores de estilo lingüístico con algunos ñanza dejó de verse solamente como un asunto
factores psicológicos interesantes. Por ejemplo, se exclusivamente psicopedagógico, para comenzar a
ha encontrado que las personas deprimidas y con considerarlo también como un proceso comunica-
baja autoestima tienden a utilizar más pronombres tivo. Esta ampliación de la mirada significó también
de primera persona (yo, me, mí) que personas no la consideración de variables de naturaleza socio y
deprimidas y con alta autoestima (Rude, Gortner psicolingüística, como la competencia comunicativa
y Pennebaker, 2004). El uso de la primera persona de estudiantes y profesores, los patrones sociales de
también ha sido relacionado con la honestidad. En participación en un evento comunicativo como una
varias investigaciones sobre la detección de mentiras sesión de clase y las reglas de intercambio conversa-
utilizando marcadores lingüísticos, se encontró que cional con roles de participación claramente estable-
cuando la gente está siendo honesta era más proba- cidos. Estas variables han sido consideradas desde
ble que utilicen la primera persona, mencionen más entonces como parte importante en la compresión
a otra gente y utilicen más palabras de exclusión y explicación del aprendizaje de los alumnos en la
(por ejemplo, excepto, pero, sin) y menos palabras situación del aula (Green y Harker, 1982).
que expresan emociones negativas (triste, llanto, La inclusión de todos estos aspectos como parte
pérdida, soledad, etc.) (Newmann, Pennebaker, de la ecuación del logro académico, ha obligado a
Berry y Richards, 2003). El estilo lingüístico puede los investigadores, por un lado, a reconocer la ne-
también ser una clave para la predicción del des- cesidad de una conceptualización del proceso de
empeño académico de un estudiante. Por ejemplo, enseñanza en términos comunicativos y, por otro, a
el uso de palabras referidas a procesos mentales reunir un fundamento empírico lo suficientemente
(pensar, comprender, inferir) y a relaciones causales sólido como para construir modelos descriptivos y
(porque, causa, efecto) ha sido asociado con notas comprensivos de lo que ocurre en una situación de
más altas en estudiantes universitarios (Pennebaker enseñanza-aprendizaje en el aula de clase. Ya por los
y Francis, 1996). años setenta, Gumperz planteaba:
Esta perspectiva de identificación del estilo de The question of how actors communicate in-
comunicación de cada individuo utiliza técnicas de formation and influence and persuade others in
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actual situations is still far from being resolved. el aula (Green y Harker, 1982). Es en el contexto
Yet, an understanding of teaching as a process of de estos trabajos que han aparecido las primeras
verbal communications depends on a solution to ideas alrededor de la existencia de estilos de ense-
this question (Gumperz, 1975, p. 1)4. ñanza desde una perspectiva comunicativa. En su
En esa empresa de considerar la enseñanza como trabajo de comparación de los patrones de uso de
un evento comunicativo han surgido diversas líneas la lengua para propósitos didácticos y conversacio-
de investigación con diferentes grados de desarrollo. nales de dos profesores de escuela primaria, Green
Entre ellas vale la pena mencionar, en primer lugar, y Harker (1982) identifican diferencias entre estos
aquellas que entienden el contenido del aprendizaje dos profesores respecto de una serie de estrategias
como un discurso en sí mismo; es decir, que lo que comunicativas presentes en el manejo de grupos de
el alumno aprende en el aula de clase, no es más que escolares durante una sesión de clase. Algunas de
una forma de hablar y escribir acerca del tema. Des- esas estrategias son el control del comportamiento
de esta perspectiva, cualquier clase, sin importar su de los estudiantes en el aula, la focalización de la
tema, es una clase de lenguaje en la que se pretende atención sobre ciertos contenidos del discurso, la
que el aprendiz logre una competencia comunicativa aprobación o desaprobación de las respuestas de los
en un tipo de discurso específico. Esta perspectiva ha estudiantes, la aclaración de mensajes previos, etc. En
tenido gran desarrollo especialmente para el caso del el análisis cuantitativo se encontraron, por ejemplo,
aprendizaje y la enseñanza de las ciencias (Lemke, diferencias entre los profesores en la frecuencia de
1997; Sutton, 2003). uso de expresiones de control del comportamiento
Una segunda línea de investigación sobre la del escolar o de enunciados clarificadores. Por su
situación del aula de clase en su acepción comu- parte, en el análisis cualitativo se encontró, por ejem-
nicativa se centra en el estudio de los intercambios plo, que mientras un profesor utilizaba expresiones
comunicativos profesor-alumno, a la manera de una imperativas directas para indicar comportamien-
conversación que debe cumplir con ciertas condi- tos, otro privilegiaba formas no verbales y matices
ciones particulares especificadas en lo que algunos prosódicos (tono, entonación, etc.) para hacer lo
han llamado “contrato didáctico” (Brousseau, 1991). mismo. Sobre la base de esta comparación, Green
Dentro de esta línea, la situación del aula de clase se y Harker identifican dos patrones comunicativos
entiende como un escenario en el cual los actores diferenciados en estos profesores y sugieren la exis-
(profesor y estudiantes) asumen unos roles prede- tencia de diferentes “estilos de interacción” propios
terminados por el papel que les ha sido asignado. de estos sujetos.
Así, en tanto el papel del maestro comporta mayor En el mismo sentido, Nussbaum y Tusón (1996)
autoridad, por ejemplo, se espera de él que sea quien plantean que, siendo “la lengua un instrumento de
decida el tema, dé las órdenes, inicie el intercambio relación y de expresión de las identidades indivi-
comunicativo y asigne los turnos conversacionales, duales y colectivas en ese sistema social que es el
entre otras funciones (Gumperz y Hymes, 1972; aula”, es posible identificar el “estilo del docente”
Stubbs, 1983; Cazden, 1991). mediante la identificación del tipo de género dis-
Podría identificarse una tercera línea de inves- cursivo (expositivo, narrativo, argumentativo, etc.)
tigación sobre el aula de clase en su dimensión co- que el profesor privilegia en su clase. Cada uno de
municativa que postula y define patrones regulares estos géneros se podría definir por los roles propios
del comportamiento comunicativo del profesor en de cada participante (por ejemplo en el género
argumentativo, los roles tienden a ser simétricos),
ciertas regularidades en el comportamiento comu-
4 El interrogante sobre cómo los individuos comunican información
e influencian y persuaden a otros en situaciones reales está toda- nicativo (en el género narrativo, el uso del suspenso)
vía lejos de haberse resuelto. Sin embargo, la comprensión de la y mediante el uso idiosincrático de ciertas formas
enseñanza como un proceso de comunicación verbal depende de
una solución a este interrogante.
verbales específicas (en el género expositivo, el
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primer lugar, implica que cualquier tipología que se idiosincráticos que constituirán la identidad propia
construya debe, en principio, ser especificada para del docente.
un contexto cultural de referencia. En segundo lugar, Y es el reflejo de esta identidad docente el que
abre la posibilidad de que esta hipotética tipología buscamos en su forma de relacionarse con sus estu-
se nutra de las diferencias comunicativas presentes diantes, de asumir su función formadora, de ejercer
entre los grupos de género. Así, las diferencias en su autoridad académica y, en suma, de lograr que
la personalidad individual deberán reflejarse en sus alumnos lleguen a saber lo que él tiene para
comportamientos comunicativos y lingüísticos decir.
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