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Hola alumn@s, espero que se encuentren bien. En esta oportunidad vamos a hacer un repaso por los contenidos que
hemos estado viendo en los trabajos anteriores para avanzar con la unidad. Ustedes estuvieron trabajando con
algunos textos: en primer lugar, trabajaron con textos sobre la mitología y tuvieron que leer un mito y un cuento
para poder realizar un análisis global de los mismos; luego, leyeron una nota de opinión sobre las ventajas de leer
literatura clásica. Hasta acá venimos y ahora yo les pregunto… ¿se dieron cuenta que en las actividades anteriores
usamos textos diferentes y que también en esas actividades les pregunté qué clase de texto les parecía que estaban
leyendo? Todo tiene un porqué: la idea era que ustedes vieran que los textos poseen características diferentes, ya
que cada uno tiene una trama, es decir, un modo de organizar o construir su contenido. Por otro lado, los textos con
los que trabajaron cumplían ciertas funciones del lenguaje que se ajustaban a una determinada situación
comunicativa. Por ejemplo: en el caso de la nota de opinión había una función principal que era la de convencernos a
nosotros como lectores de adoptar la postura del autor acerca de los clásicos.
En esta clase (que va a tener un poco de teoría y un poco de práctica) nos vamos a adentrar en lo que denominamos
“tramas textuales” y en la próxima trabajaremos con las funciones textuales. ¡¡¡¡Manos a la obra!!!!
Los invito a observar las siguientes imágenes y textos para repensar el concepto de trama textual.
Luego, encontrarán debajo una pequeña actividad para que realicen luego de la lectura.
Origen del Realismo en América:
El origen de la literatura del Realismo en América es en Europa durante el siglo XIX
cuando los artistas se propusieron a reflejar la sociedad del momento en contraposición
de los ideales románticos, su principal característica era uso de la razón por encima del
sentimiento.
Fuente: Wikipedia. org
Las instrucciones están presentes diariamente en nuestra vida cotidiana, tanto en la escuela como
fuera de ella. El desarrollo científico y tecnológico de los últimos tiempos exige cada vez más la
intervención del discurso instruccional en tareas que antes se desarrollaban en contacto con otras
personas. Pensemos en ejemplos cotidianos como el servicio de conexión a Internet, la búsqueda
de información en Google, el uso del Classroom en tiempos de cuarentena, el uso del cajero
automático, entre muchos otros casos.
Las características principales de los textos instructivos son:
tienen un formato especial, ya que el desarrollo del procedimiento está compuesto por
pasos que deben cumplirse para conseguir un determinado resultado.
se utiliza el infinitivo (verbos terminados en –AR, -ER, -IR). Por ejemplo: Mezclar, Preparar,
Prender.
También se utiliza el modo imperativo, que es el modo de los tiempos verbales en los
cuales se expresa una orden (por ej.: prender la computadora o prenda la computadora,
encender el horno). Algunos instructivos usan forman impersonales (por ej.: se prende la
computadora, se retira del horno y se deja reposar)
Para diferenciar los pasos y organizar el instructivo se utilizan marcas gráficas como
números, asteriscos o guiones
En algunas ocasiones es necesario el acompañamiento de imágenes para reforzar o
clarificar los pasos a seguir
En algunos textos instruccionales es necesario poner los elementos que se necesitan y el
tiempo que se requiere. (por ej.: en el caso de una receta de cocina).
Como actividad les voy a sugerir que realicen un texto instructivo. Pueden optar por realizar una
receta que a ustedes les guste mucho o por explicar un juego (puede ser de mesa o de cartas)
que ustedes conozcan. Para ello, deberán tener en cuenta las características de los textos
instruccionales que señalamos más arriba. Si es posible pueden mandarme alguna foto o dibujo
que acompañe el instructivo. Les voy a dejar de ejemplo uno que hice yo para ustedes.
Paso a paso
1. Realizar el postre de vainilla. Para ello, deberás volcar el contenido del paquete en una olla,
echar la leche fría y calentar a fuego moderado revolviendo con una cuchara de madera hasta que
espese. Volcar en la fuente y dejar reposar a temperatura ambiente y luego llevar a heladera.
2. Preparar un café amargo (2 cucharadas soperas) en agua fría y agregarle (a gusto) la cucharada
de licor u de oporto.
3. Embeber las vainillas con el líquido preparado y colocar sobre el postre de vainilla. El postre
tiene que estar frío para así las vainillas quedan formando una capa. Llevar a heladera.
4. Preparar el postre de chocolate y repetir la misma acción
que con el postre de vainilla. Dejar templar a temperatura
ambiente y cuando esté tibio volcarlo sobre la capa de
vainillas.
5. Llevar el postre a heladera máximo 2 horas o más.
6. Preparar la crema chantilly con el azúcar impalpable, la
esencia de vainilla y la crema de leche. Se debe batir bien
hasta que la crema quede espesa y pueda esparcirse por encima del postre.
7. Colocar la crema sobre el postre y esparcirla con una espátula para que quede pareja.
8. Rallar chocolate amargo por
encima.
9. Disfrutar sin culpa con amigos
este delicioso postre!!!!