Cuarteto de cuerda ‘The Joke’ en Mi bemol Op. 33 No. 2
Esta obra me pareció bastante ingeniosa observándola desde el punto de vista
formal de la forma sonata, ya que Haydn introduce algunas incongruencias que generan un gran atractivo y gusto como por ejemplo: implantar el mismo material temático casi durante todo el 4to movimiento (Finale – Presto) u omitir algunos submódulos en el primer movimiento (Allegro Moderato), a fin de jugar con las expectativas del oyente y así transmitirle curiosidad y un estado de interés alcanzado gracias a los contrastes y dinamicidad que se encuentran al escuchar la pieza. Vemos que en el primer movimiento el compositor no agregó la cesura medial y pasó directamente al segundo tema, o durante el desarrollo, en vez de demostrar variedad y explotar como tal todos los motivos de la exposición, se empezó a repetir casi exactamente igual el mismo material temático y a modular a diferentes tonalidades y así crear un mayor contraste. Desde el punto de vista interpretativo me pareció que en la grabación se ejecutó muy bien las partes cadenciales importantes, y de ahí capté una sensación de gran satisfacción ya que la energía transmitida en los puntos donde se hacían secuencias y se llegaban a momentos agitados se descargó adecuadamente. Otro aspecto interesante a resaltar es justo la parte final del 4to movimiento donde se exponen los motivos iniciales pero están separados por unos compases en silencio, lo que da la sensación de que la pieza ya acabó pero en realidad continua y por esta razón este cuarteto de cuerda es llamado la broma, ya que aquí se refleja muy claramente la capacidad de Hadyn para divertirnos a través del modo que juega con nuestras expectativas, aunque cabe decir que el completo significado de esta obra es solo comprensible por alguien que ya esté lo suficientemente familiarizado con la forma sonata.