La cultura india, es una de las culturas más místicas del mundo. Basan su religión en el hinduismo,
religión y mitología del subcontinente indio. Se originó tras la entrada de pueblos europeos a la
India, sin embargo los escritos más antiguos provienen de los años 1300 a 1000 Antes de Cristo. El
hinduismo, es la tercera religión más extendida en el mundo, tras el cristianismo y el islam.
Dentro de sus características principales se encuentra la existencia de una realidad suprema, única
e infinita, basada en un principio único que es el brahman. Este principio, tiene un significado
infinito y existente, es eterno y es la razón de ser de todo lo que pasa. Para los hindúes, la
sabiduría se basa en la identidad que posee el brahman entre el universo y el ser humano
existente. El hinduismo es una religión sagrada; las personas son cien por ciento fieles a sus
creencias y dios supremo.
El hinduismo tiene características culturales importantes, como por ejemplo la antigua división de
sociedad en clases sociales, donde se encontraban los sacerdotes, los nobles, la gente común y los
sirvientes.
Sus rituales, son también otra cosa que los diferencia. Los vedas son parte de los rezos que los
hindú hacen para todo tipo de acontecimientos, los que procuran en mantener el orden y el
movimiento del universo. Además, gran parte de sus creencias se basan en doctrinas que nunca
mueren, incorporadas al cuerpo y al infinito.
El hinduismo ha ido evolucionando con el tiempo. A partir del siglo XX, ha ido dejando de lado
las creencias estrictas de castas y el trato extremadamente restrictivo de la mujer.
Por otro lado, la religión se ha ido amoldando a los pensamientos e idiosincrasia de cada país,
generándose una apertura de mentalidad en todos los países pertenecientes a esta cultura y
religión.
El término hinduismo proviene de la palabra hindú, una adaptación persa del nombre del río
Sindhu. Sin embargo, fue solo en el siglo XIX de nuestra era que se acuñó el término para englobar
el conjunto de prácticas religiosas de los pueblos del valle del Indo.
Se estima que su origen se remonta hacia el año 1750 a. de C. Proviene de la religión monoteísta
brahmánica. Poco a poco se fueron incorporando otros dioses al sistema de creencias como Visnú,
Indra, Shiva, Saravasti, Lakshmi, Kali, Krishna y Ganesha, entre muchos otros, de lo que deriva su
diversidad.
Para los creyentes de esta espiritualidad, es muy importante tener en cuenta los libros sagrados,
entre los que destacan los Vedas en primer lugar. Seguido de estos están los Upanishad, el Mahā
Bhārata, el Rāmāyan, los Sūtras, las Brahmánicas y los Aranyakas.
El hinduismo no tiene un fundador ni posee una estructura institucional semejante a las de las
religiones monoteístas. Esto, sumado a su carácter politeísta, permite que exista gran diversidad
de orientaciones. Así, el hinduismo aglutina muchas corrientes metafísicas, espirituales, filosóficas,
costumbres, cultos y rituales diversos.
Dadas estas características, sus practicantes prefieren llamarlo "Sanatana Dharma", que quiere
'tradición o camino eterno', en lugar de religión. Este término resulta más amplio y justo para
ellos, pues la diversidad de creencias que están envueltas en el hinduismo no permite identificarlo
como sistema unificado, sino más bien como un estilo de vida.
Existen variantes del hinduismo tanto monoteístas como politeístas, y tanto las primeras como las
últimas pueden venerar a diferentes dioses y deidades, entre los que destacan:
Visnú. Es el dios que preserva o mantiene la estabilidad del universo y forma parte de
la trimurti junto a Brahma y a Shiva. Según los textos hindúes, se manifiesta en el mundo
bajo distintas encarnaciones, que pueden ser Krishna, Rama, Hari o Narayana. Se le
representa como un hombre azulado de cuatro brazos tocando una flauta o sosteniendo
elementos simbólicos como caracoles y flores de loto.
Kali. Se trata de una de las consortes del dios Shiva, tenida en el hinduismo como la madre
universal: destructora de la maldad y de los demonios. Sus representaciones apuntan a
una mujer de tez azul con cuatro, seis u ocho brazos, en uno de los cuales empuña una
espada ensangrentada.
Dado que no posee un cuerpo único y central de creencias, el hinduismo tampoco tiene un texto
único sagrado, como ocurre en otras religiones. En cambio, venera a un conjunto de escrituras
antiguas, distinguidas en dos grupos o conjuntos:
Shruti. Su nombre viene del sánscrito y traduce “lo escuchado”, y el hunduismo sigue sus
instrucciones al pie de la letra. A su vez, se divide en dos grandes conjuntos de textos:
Smriti. Su nombre viene del sánscrito y traduce “lo recordado”. Se trata de textos sagrados que, al
contrario de los anteriores, requieren de interpretación o de una lectura inspiradora o alegórica, y
que son:
El Majabhárata, texto épico del siglo III a. C. que abarca al texto religioso Bhagavad-guita.
El Ramaiana, una narración épica del rey-Dios Rama, que data del siglo III a. C.
En base a esos cuatro preceptos básicos, se comprenden los áshram o las etapas de la vida de un
brahmán, miembro de la casta sacerdotal de la antigua religión brahmánica:
Como se verá, el número cuatro es muy importante en esta tradición, lo cual explica la presencia
de los cuatro brazos en las representaciones de sus dioses. De hecho, existen cuatro corrientes
principales de la misma: vaisnavismo, shivaísmo, shaktismo y smartismo, dependiendo de sus
dioses tutelares elegidos.
Por otro lado, el hinduismo no maneja la noción de pecado judeocristiana, aunque sí plantea una
serie de mandamientos tradicionales, como son:
6. Hinduismo y budismo
Estas dos religiones se suelen pensar como religiones hermanas, ya que poseen una raíz común.
Ambas provienen de la India, como una reinterpretación de muchos de los preceptos de la religión
védica o brahmánica. Sin embargo, sus caminos divergieron bastante, al punto tal de que hoy
presentan importantes y marcadas diferencias, como:
El hinduismo posee un panteón de deidades muy diverso, mientras que el budismo es no-
teísta, o sea, no propone la existencia de dioses o seres superiores, pero sí de un camino
hacia la iluminación.
A diferencia del hinduismo, que carece de profetas y fundadores, el budismo se rige por
las enseñanzas del Buda Siddarta Gautama, el iluminado.