Las soluciones basadas en Inteligencia Artificial también
tendrán su protagonismo durante la desescalada. Controlar que se mantiene la distancia de seguridad con el resto de ciudadanos es casi imposible de manera manual, pero algo relativamente fácil para la IA.
Ejemplo de cómo detecta Shoppermotion el movimiento de los clientes. Shoppermotion Omicrono
En este sentido, recientemente os hablábamos de Shoppermotion,
una compañía española que ayuda a evitar contagios en supermercados con su IA. Su algoritmo permite localizar todos los carritos de la compra en tiempo real, aportando una gran cantidad de información sobre el número de veces que un cliente está cerca de otros, el número de clientes por metro cuadrado o lo posibles focos de contagio. Partiendo de la base de que la fiebre es uno de los síntomas más frecuentes del coronavirus, otra opción inteligente es la combinación de los sistemas de control de temperatura con la Inteligencia Artificial.
El sistema es capaz de reconocer personas con fiebre. Sensetime
Así, durante la desescalada podremos ver un uso más frecuente de
los ya populares termómetros de infrarrojos o de algoritmos de Inteligencia Artificial capaces de analizar la temperatura a una mayor escala en espacios más amplios y concurridos, como aeropuertos o el transporte público. La IA usada en el metro de París es capaz de detectar si llevamos mascarilla. Datakalab Omicrono
Incluso, hace unos días conocíamos que en Francia estaban
probando una IA capaz de detectar si los pasajeros del metro llevaban mascarilla o no tras anunciar la obligatoriedad de éstas en el país galo. Digitalización forzada Algunos sectores van a tener que reinventarse para poder cumplir las normas de distanciamiento, el ejemplo perfecto es el de la restauración, un ámbito que siempre ha sido un poco reacio a adaptarse a las nuevas tecnologías. Demo de Let's Order. Alex Branco Omicrono
Los bares y restaurantes tendrán que acudir a soluciones
como Let's Order, un sistema que con solo analizar un código QR en la mesa nos permitirá ver la carta, pedir, solicitar la cuenta e incluso pagar directamente desde el móvil. Todo ello sin contacto alguno con los camareros, lo que disminuirá las posibilidades de contagiarse. Sin embargo, no solo la restauración tendrá que adaptarse a este nuevo paradigma, lo mismo tendrán que hacer numerosos tipos de establecimientos. No solo en lo que a digitalización de sus servicios se refiere, sino también evaluar la posibilidad de acudir a plataformas de envío de comida a domicilio, reserva de mesas, etcétera.