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HUMANIDADES TALLER 2 Docente: José Santos

Camacho V

RITMOS DEL LITORAL ATLANTICO

LA CUMBIA
La cumbia es un ritmo musical y baile folclórico tradicional de Colombia. Posee contenidos de tres vertientes
culturales, principalmente indígena y negra africana y, en menor medida, blanca (española), siendo fruto del
largo e intenso mestizaje entre estas culturas durante la Conquista y la Colonia. El investigador Guillermo
Abadía Morales en su "Compendio del folclor colombiano", volumen 3, #7, publicado en 1962, afirma que "ello
explica el origen en la conjugación zamba del aire musical por la fusión de la melancólica flauta indígena gaita
o caña de millo, es decir, Tolo o Kuisí, de las etnias Cunas y Koguis, respectivamente, y la alegre e impetuosa
resonancia del tambor africano. El ayuntamiento etnográfico ha quedado simbolizado en los distintos papeles
que corresponden en el baile de la cumbia a cada sexo". La presencia de estos elementos culturales se puede
apreciar así:

 En la instrumentación están los tambores de origen negro africano; las maracas, el guache y los pitos
(caña de millo y gaitas) de origen indígena; mientras que los cantos y coplas son aporte de la poética
española, aunque adaptadas luego.
 Presencia de movimientos sensuales, marcadamente galantes, seductores, característicos de los
bailes de origen africano.
 Las vestiduras tienen claros rasgos españoles: largas polleras, encajes, lentejuelas, candongas y los
mismos tocados de flores y el maquillaje intenso en las mujeres; camisa y pantalón blanco, pañolón rojo
anudado al cuello y sombrero en los hombres.
A partir de la década de 1940, la cumbia comercial o moderna se expandió al resto de América Latina, tras lo
cual se popularizó en todo el continente siguiendo distintas adaptaciones comerciales, como la cumbia
argentina, la cumbia boliviana, la cumbia chilena, la cumbia dominicana, la cumbia ecuatoriana, la cumbia
mexicana, la cumbia peruana, la cumbia salvadoreña, la cumbia uruguaya y la cumbia venezolana, entre
otras.
La otra cuestión que interesa a los estudiosos del folclor es el sitio o lugar de nacimiento de la cumbia. Según
el maestro José Barros (compositor de la Piragua, Navidad Negra, etc.) la cumbia nació en el país de la
cultura indígena Pocabuy (que habitaba la región del Banco, Magdalena. Otros folclorólogos y músicos
plantean que la cumbia debió nacer en Ciénaga, Magdalena (cerca de Santa Marta), o en Soledad, Atlántico
(cerca de Barranquilla), o en Cartagena, en razón de la cercanía a los puertos por donde entraron inicialmente
los conquistadores y colonizadores españoles, Santa Marta y Cartagena.

Etimología
El vocablo cumbia ha sido motivo de estudio por distintos autores que le atribuyen distintos orígenes y
significados.
En 1930, el musicólogo panameño Narciso Garay asumió que la palabra cumbia comparte la misma raíz
lingüística del vocablo cumbé, baile de origen africano registrado en el Diccionario de la Real Academia
Española como "Baile de Negros".
La folclorista colombiana Delia Zapata Olivella, en su publicación de 1962, "La Cumbia: Síntesis Musical de la
Nación Colombiana, Reseña Histórica y Coreográfica", señala que la única voz similar a cumbia que acoge la
Academia Española, es la de cumbé: "cierto baile de negros y tañido de este baile". Y que cumbes (sin tilde),
se llaman los negros que habitan en Bata, en la Guinea continental española (actual Guinea Ecuatorial).
El investigador cultural colombiano Jorge Díaz granados Villarreal en su artículo "La cumbia, el jolgorio y
sobre todo el placer", publicado en 1977 establece:
Cumbia viene de Cumbague y Cumbague era la personificación del cacique indígena pocabuyano, se dice
que Cumbague además de tener un carácter belicoso y audaz, debía ser un excelente bebedor de maco
(chicha) porque todos los de su raza eran muy borrachos y amigos del baile y la juerga.
El musicólogo y folclorólogo Guillermo Abadía Morales, en su obra de 1977 "Compendio general de folclore
colombiano", sostiene que cumbia es un apócope de cumbancha, vocablo cuya raíz es kumba,
gentilicio mandinga del occidente africano, y añade que el país del Congo y su rey se llamó rey de Cumba.
El etnólogo cubano Fernando Ortiz Fernández establece que las voces kumba, kumbé y kumbí, al
castellanizarse sustituyendo la letra "k" por "c", significan "tambores" o "bailes". Agrega
que cumbé, cumbia y cumbaeran tambores de origen africano en las Antillas. Por otro lado, establece
que cumba – kumba, palabra africana de las tribus bantú o congos, significa "rugir", "escandalizar", "gritería",
"escándalo", "regocijo". A esta teoría adhiere Manuel Zárate en su obra "Tambor y Socavón", como la raíz de
la palabra cumbia.8 Asimismo, para Ortiz, entre los congos, nkumbi es un tambor.
En relación con la voz cumbé, la versión 23.ª del Diccionario de la Real Academia Española, publicada en
2014, la registra como: «Danza de la Guinea Ecuatorial» y «Son con que se baila el cumbé».
En 2006, el músico y musicólogo colombiano Guillermo Carbó Ronderos afirmó que la etimología de la
voz cumbia es "aún controvertida", y que "parece derivar del término bantú cumbé, ritmo y danza de Guinea
Ecuatorial".

Formación instrumental

Niños interpretando cumbia con instrumentos tradicionales.

La forma más auténtica de la cumbia es exclusivamente instrumental, sigue patrones rítmicos que varían de
acuerdo con la instrumentación utilizada, en compás de 2/4 o 2/2, y presenta adaptaciones regionales de
acuerdo con el predominio de una población indígena o negra. Es ejecutada y seguida tradicionalmente por el
conjunto de tambores: llamador, alegre, tambora, así como la caña de millo o las gaitas, macho y hembra,
las maracas y el guache. La cumbia cantada es una adaptación relativamente cercana en la que el canto de
solistas y coros o cuartetos se alternan a la de la caña de millo o las gaitas. El conjunto de cumbia es una
ulterior evolución del originario conjunto de la tambora, estando el conjunto de tambora conformado por el
tambor alegre y el llamador y, en algunos casos, por la tambora. Es un baile meramente cantado, como el
chandé, con sus palmas y coros, al cual posteriormente se sumaron los pitos de las gaitas o los millos.
EL MAPALÉ
Este baile nació como canto y danza de labor de los pescadores de baño, que se realizaba, acompañado de
tambores, como diversión en la noche, después de terminar la jornada. Surgió en la costa del Caribe
colombiano gracias a la influencia cultural de los africanos traficados como esclavos durante la conquista de
América y que, cuando conseguían huir de sus captores fundaban quilombos o comunidades en lugares
alejados, como el Palenque de San Basilio, donde afirmaban su herencia cultural. Nacido en el Caribe, fue
introducido en tiempos pretéritos a lo largo de las orillas del río Magdalena. Actualmente se baila también en
comunidades afrocolombianas del Pacífico.
En sus orígenes la danza de labor fue ejecutada en las noches y acompañada con toques
de tambores yamaró y quitambre, las palmas de las manos y el canto. Con posterioridad se produjo una
transformación de su temática, atribuyéndole un énfasis de regocijo con carácter sexual y asignándole la
evolución frenética que hoy presenta. La coreografía actual mantiene rasgos de su esencia africana en
la parafernalia, tanto en el vestuario, que es en extremo sencillo, como en la presencia del machete,
instrumento de trabajo utilizado para el procesamiento del pescado. Hay unas definiciones difundidas, algunas
de las cuales indican que el ritmo proviene de un festival por la abundancia del pez. Es Un género musical
Tipo De La Región Caribe Colombiana. Este ritmo tiene características propias africanas que se debe a que
los españoles llevaron esclavos africanos a estas tierras, por medio de este baile se representa el erotismo
de la unión entre el hombre y la mujer. El mapalé cuenta con movimientos fuertes y alegres.

Principales instrumentos musicales del Mapalé


Tambor alegre, tambor llamador, guache o maracas y tambora

EL PORRO

El porro es un ritmo musical de la Región Caribe colombiana, tradicional de los departamentos


de Córdoba, Bolívar y Sucre. Posee un ritmo cadencioso, alegre y fiestero, propicio para el baile en parejas.
Se ejecuta en compás de 2/2 o, como se le dice popularmente en América, compás partido. Es una música
fiestera popular que generalmente es interpretada por bandas conocidas en Colombia como "Pelayeras",
también conocidas como "Bandas de Músicos".
La teoría de W. Fortich sobre el origen del porro sostiene que nació en la época precolombina, a partir de los
grupos gaiteros de origen indígena, luego enriquecido por la rítmica africana. Más tarde evolucionó al ser
asimilado por las bandas de viento de carácter militar, que introdujeron los instrumentos de
viento europeos(trompeta, clarinete, trombón, bombardino, tuba) que se utilizan en el siglo XXI.
Según Guillermo Valencia Salgado, su principal fuente creativa se encuentra en elementos rítmicos de origen
africano, principalmente de antiguas tonadas del pueblo Yoruba, que en el Sinú y el San Jorge dieron lugar al
surgimiento del “baile cantado”. El porro también se tocó solo con tambores, acompañamiento de palmas y
cantado, lo mismo que con gaitas y pito atravesado.
Tratar de asignarle un lugar único de nacimiento en la Caribe Colombiano no ha logrado consenso. Enrique
Pérez Arbeláez sostiene que es oriundo de las riveras del Bajo Magdalena donde este nació en El Carmen de
Bolívar a causa de la inmigrantes Alemanes e Italianos por el mercado del Tabaco en la zona introdujeron en
la region el instrumento del Clarinete, de allí migró hacia otras poblaciones de la sabana, hasta llegar al Sinú.
También reclaman derechos de paternidad sobre el porro el pueblo de San Pelayo donde actualmente se
realiza el Festival Nacional del Porro y Ciénaga de Oro, ambos del departamento de Córdoba.
En cuanto al origen de la voz porro se conocen dos hipótesis principales: la de que proviene del porro,
manduco o percutor con que se golpea al tambor o bombo y su acción o porrazo (Valencia Salgado) y la que
sostiene que es derivada de un tamborcito llamado porro o porrito con que este se ejecutaba (Aquiles
Escalante).

PORRO “PALITIA'O” Y “TAPA'O”

El porro tradicional o campesino se suele clasificar en dos tipos o categorías principales: “tapa'o” y “palitia'o”.
El “palitia'o”, oriundo de las tierras del Sinú, toma su nombre según la versión más aceptada, por la forma
como se golpea con el percutor una tablilla incorporada al aro del bombo o externa a este. Esto ocurre al
momento en que el bombo queda en silencio y el clarinete toma el rol protagónico.
El porro “palitia'o” se encuentra estructurado por cuatro partes o secciones: danza, porro, “bozá”, danza. Las
danzas, de cortos compases, dan inicio y fin a la obra como en una especie de anuncio que da entrada y
salida al porro propiamente y a sus dos partes principales.
La sección porro se identifica por estar dominada por el sonido de la trompeta y la “bozá” por ser el momento
en que predomina el clarinete, y en que suele suspenderse la percusión del bombo e iniciarse el golpeteo del
palo sobre la tablilla (el paliteo).
Estos elementos característicos del porro “palitia'o” no están presentes siempre en todos lo temas. María
Varilla, por ejemplo, que se ha llamado el himno de Córdoba, no posee las danzas de entrada y final.
Igualmente El Gavilán Garrapatero, Soy Pelayero y la Mona Carolina carecen de la danza inicial, lo contrario
de un Porro “tapa'o” como Roque Guzmán, que cuenta con las danzas a su inicio y final, sin que por ello sea
uno “palitia'o”.
Por su parte el porro “tapa'o” o sabanero por ser originario de las sabanas de los departamentos
de Córdoba, Sucre y Bolívar, se llama así por la predominante forma como el ejecutante del bombo tapa con
la mano el parche opuesto al que percute, y carece de la sección “bozá”.
Musicólogos como Victoriano Valencia, han identificado otros rasgos como la improvisación, a cargo de cada
instrumento o grupo de estos, que se da en las formas viejas del porro, del fandango campesino y también de
la puya. Otros rasgos de las nuevas composiciones porristicas destacadas por el mismo Valencia son:
estrechamiento de las secciones, ampliación del coro o su supresión y aceleración del ritmo.

EL VALLENATO
El vallenato es un género musical autóctono de la Región Caribe de Colombia con su origen en la
antigua provincia de Padilla (actuales sur de La Guajira, norte del Cesar y oriente del Magdalena). Tiene
notable influencia de la inmigración europea, ya que el acordeón fue traído por pobladores alemanes
a Riohacha, La Guajira, a finales del siglo XIX, y tanto la organización estrófica como la métrica se valen de la
tradición española; por otra parte, el componente de los esclavos afrocolombianos hace presencia con la caja
vallenata, una especie de tambor que en gran medida le da el ritmo a la melodía del acordeón, y por último lo
indígena se evidencia con la guacharaca.
Su popularidad se ha extendido hoy a todas las regiones de Colombia, a países vecinos
como Ecuador, Panamá, Perú y Venezuela, y a más alejados como Argentina, México, Chile y Paraguay. Se
interpreta tradicionalmente con tres instrumentos: el acordeón diatónico, la guacharaca y la caja vallenata. Los
ritmos o aires musicales del vallenato son el paseo, el merengue, la puya, el son y la tambora. El vallenato
también se interpreta con guitarra y con la instrumentación de la cumbia en cumbiambas y grupos de millo. El
29 de noviembre de 2013, el vallenato tradicional fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Nación
por el Consejo Nacional de Patrimonio del Ministerio de Cultura. El 1 de diciembre de 2015 fue incluido en la
lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, en la lista de salvaguardia urgente por la Unesco.
No se sabe con exactitud de dónde proviene la palabra "vallenato", a pesar de las muchas hipótesis que han
sido expuestas. Sin embargo, a principios del siglo XX, tenía una connotación despectiva y a los propios
habitantes de Valledupar no les gustaba. Por tal motivo, en 1915 don Miguel Vence, educador de primaria,
fundó una Academia de la Lengua de Valledupar, la cual sesionó una sola vez y determinó que el gentilicio de
los nacidos en Valledupar fuera "valduparense".
Generalmente se define al vallenato como un género musical de la Costa Caribe colombiana, más
precisamente del área de influencia de Valledupar, capital del departamento de Cesar. Se sostiene que el
nombre proviene del gentilicio popular de los nacidos en la ciudad donde tiene mayor arraigo este género.
Según algunos, se trata de un neologismo que nació con los nativos viajeros en mulas, que cuando se les
preguntaba en otras tierras de dónde eran, en su decir campesino respondían "Soy nato del Valle", que es
como decir "Soy del Valle nato".
No obstante que el término "vallenato" puede referirse a los nacidos o a las cosas que se originan en
Valledupar (Valle De Upar, El Valle Del Cacique Upar, cacique indígena legendario de la región), existen
otras versiones de la denominación: según Barrameda Morán, el vocablo "ballenato" pasó a designar a todas
las personas que padecieran la contaminación sanguínea producida por el jején, fueran oriundos o no
de Valledupar y dice: "La tendencia popular a confundir V con B en su pronunciación, terminó por generar el
nuevo vocablo: Vallenato".

Instrumentos
Las melodías de estos cantos se interpretaron primero con la flauta de caña de millo o carrizo, abierta en sus
dos extremos con cuatro orificios en su longitud y una lengüeta que forma la embocadura y pisa un hilo,
sostenido por los dientes, para modular el sonido; a ella se sumaron la caja, tambor pequeño hecho
artesanalmente del tronco hueco de los árboles secos y sellado en uno de sus extremos con un pedazo
de cuerotemplado, y la guacharaca, instrumento ancestral indígena que se fabrica utilizando un pedazo de
cañabrava a la que se le hacen pequeñas ranuras sucesivas para producir un sonido raspativo al ser frotadas
con un hueso (originalmente).
A finales del siglo XIX, décadas después de su invención, el acordeón llegó a Colombia por el puerto
de Riohacha; los vaqueros y campesinos lo incorporaron a sus expresiones musicales, y paulatinamente fue
sustituyendo al carrizo hasta convertirse en el instrumento principal del conjunto típico de música vallenata.
Además de estos tres instrumentos, caja, guacharaca y acordeón, que representan la trietnia que dio origen a
la raza y cultura de la Costa Caribe colombiana, el conjunto típico vallenato presenta un cuarto elemento
básico que es el cantante, de más o menos reciente incorporación a raíz de los festivales vallenatos, ya que
hasta los años 1960 la costumbre era que el acordeonero llevaba la voz cantante e interpretara él mismo la
letra de las canciones que tocaba.

EL ORIGEN
El vallenato nace en una vasta región enmarcada por los ríos Magdalena, Cesar y Ranchería, el mar Caribe,
la Sierra Nevada de Santa Marta y las estribaciones de la serranía del Perijá, en la primera mitad del Siglo
XIX.
Los cantos de vaquería con que los peones de las grandes haciendas acompañaban sus jornadas vespertinas
para recoger y encerrar el ganado, fueron la base de lo que más tarde se convertiría en las historias cantadas
que derivaron en las canciones vallenatas.
Los primeros acordeoneros de que se tiene memoria fueron a la vez autores de los cantos que interpretaban;
cantos que ya tenían una clara diferencia rítmica y una estructura musical propia que les valieron ser
clasificados como paseos, merengues, puyas, tamboras y sones. Entonces no había, como hoy, una persona
especializada únicamente en componer el canto, otra en ejecutar la melodía en el acordeón y una tercera que
los cantara. El acordeonero era un músico integral que con igual destreza hacía sonar el acordeón como
interpretaba cantos de su propia inspiración o, en ocasiones, de un tercero. Y hechos los primeros cantos, los
acordeoneros se convirtieron en correos cantados, en periodistas musicales, juglares, que iban de pueblo en
pueblo y de vereda en vereda llevando la información de los últimos sucesos narrados en los merengues,
paseos, puyas, sones y tamboras que cantaban cuando se reunían a descansar y, en ocasiones especiales, a
bailar en cumbiambas que se formaban con motivo de las fiestas patronales, entre otras ocasiones.

EL GARABATO

Origen

La Danza o Baile del Garabato es una danza típica de la costa atlántica en Colombia que caricaturiza un
enfrentamiento entre la vida y la muerte. La palabra garabato es el nombre dado al palo de madera con forma
de gancho en uno de sus extremos, que lleva colgadas unas cintas de colores rojo, amarillo y verde (colores
de la bandera de Barranquilla), y que llevan los integrantes masculinos de la danza. Este integra los diferentes
aspectos que se demuestra en las creencias que representa en garabato. La música que acompaña este
género musical es el chandé.

Del garabato, se sabe que se trata de una expresión folclórica negra trasladada desde Ciénaga (Magdalena)
durante la segunda mitad del siglo pasado. La danza es de la misma familia del Torito y del Congo, y en ella
se escenifica, con ironía y sarcasmo, la lucha entre la vida y la muerte. Es una de las danzas tradicionales del
Carnaval de Barranquilla.

En un sentido filosófico, demuestra en cada movimiento y coreografía cómo la alegría es más fuerte y ante
sus pies se rinde la tristeza. La tintura del color rojo por encima del blanco en el rostro del danzante es una de
esas demostraciones simbólicas de la superioridad de la felicidad.

Con la danza, los negros esclavos de las bananeras no sólo se burlaban de sus amos, sino de su propia
desgracia, de la naturaleza, del trabajo, de los dioses, de la muerte, y en fin, de todo lo encontraban a su
paso.

Al final de cada cosecha, cuando los amos les regalaban un día de descanso, los esclavos en medio de la
fiesta --generalmente de la Candelaria-- representaban su mundo de infortunio, animándose con tambores y
bailes rituales.

Un elemento del Carnaval aunque no sea parte del mismo es el público o espectador, el espectador en el
carnaval a diferencia del teatro, en el sentido estricto no es necesario, en la medida en que todos pueden
participar, y en el caso de las danzas tradicionales, como las de Congo o como la del Garabato, el danzante
no busca ser observado ni tiene nada que decirle distinto de lo que expresa o muestra, al que no participa de
manera activa, lo que presenta lo asume solo para él.

Este proceso muy importante, en estos tiempos donde solo se piensa en mostrar un espectáculo, debe ser
conocido por la comunidad para que sea esta la que asigne a nuestra danza el valor que representa para la
misma comunidad.

El Garabato es un coqueteo entre la pareja, hasta que aparece la muerte a querer dañarlo, y le sale tiro por la
culata , porque el varón con su bastón de mano --el garabato pintado de blanco y adornado con cintas de
colores-- le gana la partida, demostrando así la perpetuidad de su orgullo.

OTROS RITMOS DESTACADOS DE LA COSTA ATLANTICA

Pajarito, Zambapalo, fandango, chande, pilón, abozao, son negro, merecumbe..etc

IMÁGENES DE ALGUNOS INTRUMENTOS DEL LITORAL ATLÁNTICO COLOMBIANO

Flauta de Millo Tambor Llamador Gaitas (macho y Hembra) Maracón/ Caja Vallenata
El Guache Tambor Allegre Acordeón Tambora del Litoral Norte

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