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HUELGA
Monográfico Mujer | Marzo 2018
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40 ANIVERSARIO
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Monográfico Mujer | Marzo 2018
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madrid Día Internacional Vivas, libres, iguales,
marzo
HUELGA unidas a la huelga por Isabel Galvín 3
Monográfico Mujer | Marzo 2018
de las Mujeres
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Nos queremos vivas. cariedad en el empleo, los techos de cristal y las barreras
Las violencias machis- para llegar a los puestos donde se toman las decisiones, a
tas son el resultado ex- los centros de poder educativo (direcciones, planificación
tremo y más dramático estratégica, rectorados); porque queremos medidas para
de la discriminación y la la corresponsabilidad y servicios públicos de calidad que
desigualdad estructural permitan la conciliación, para que los cuidados se repartan
entre hombres y mu- equitativamente entre hombres y mujeres, y el Estado no
jeres. Las cifras de las se desentienda de la mejora que necesitamos en los Servi-
violencias machistas cios Públicos. Vamos a la huelga porque queremos acabar
son insoportables: en con la segregación laboral y la desvalorización social de los
2017, 49 mujeres murieron asesinadas (junto a 8 menores) sectores feminizados.
y más de 920 lo han sido desde 2003. Esta es la cara más
dramática de unas violencias que adoptan múltiples formas Vamos en serio y lo queremos todo: un sistema de protec-
y no figuran en ninguna estadística oficial. ción social que garantice la equidad en las condiciones de
vida de las mujeres; la igualdad en reconocimiento y repre-
Estas violencias machistas golpean día a día a millones de sentación, el fin de la brecha salarial; mejoras en el SMI, la
mujeres en nuestro entorno más cercano. Según la última RMI y las pensiones; políticas de igualdad eficaces y par-
encuesta del CIS, la preocupación social por la violencia tidas presupuestarias suficientes que atiendan las Reco-
machista se ha triplicado desde el 1,8% al 4,6%, convir- mendaciones del Informe de la CEDAW y las obligaciones
tiéndose en uno de los seis problemas que más preocupan del Convenio del Consejo de Europa sobre prevención de
a la sociedad española. Es un cambio notable. Y a pesar la violencia contra las mujeres (Estambul 2011). Queremos
de estas cifras demoledoras, para el Gobierno del Partido una educación pública, laica, feminista, de calidad, libre de
Popular la lucha contra la discriminación de las mujeres no lgtbfobia, que eduque en corresponsabilidad, sin segrega-
es una prioridad. La prueba es que no se han revertido los ción académico-laboral, con currículos que nos visibilicen,
recortes en las partidas para las políticas de igualdad ni nos valoren, posibiliten pedagogías feministas y que utilice
para la lucha contra las violencias machistas, que son, res- un lenguaje inclusivo e igualitario.
pectivamente, un 41,2% y un 10,8% menos que en 2010.
Tampoco el Pacto de Estado en materia de Violencia de No estamos solas y estamos unidas. Las movilizaciones y
Género se ha puesto en marcha. El PP solo quería hacerse la huelga del 8M están convocadas en más de 150 países,
la foto. por lo que se trata de una acción internacional. En 2017 se
inició un movimiento amplio. Este 8 de marzo puede ser un
Nos queremos libres e iguales. Libres de violencias, libres punto de inflexión en la historia. Y eso es, precisamente,
de discriminación y libres para ser lo que queramos ser y porque somos todas las mujeres, no las de un país concre-
como queramos ser. Iguales en derechos. Por eso el 8 de to, las que llamamos y estamos llamadas a transformar la
marzo vamos a una huelga laboral que quiere poner sobre realidad y a liderar este cambio. Puede ser, por fin, el punto
la mesa desigualdades como la brecha salarial, la precarie- de encuentro de todas aquellas mujeres que a lo largo y
dad laboral, las jornadas reducidas impuestas, la feminiza- ancho del mundo nos hemos encontrado con la discrimi-
ción de la pobreza o los ‘techos de cristal’ que dificultan el nación de frente. Con esa discriminación que se produce
acceso de las mujeres a los puestos de dirección. por el mero y simple hecho de ser mujeres. Como mujeres,
por todas esas mujeres que nos precedieron en la lucha
Del mismo modo, estamos llamadas a la huelga todas las por nuestra emancipación y nuestros derechos y por las
mujeres del sector educativo. Vamos a la huelga porque que vendrán después de nosotras, unidas, este ocho de
queremos medidas efectivas para eliminar las brechas la- marzo de 2018, a la huelga. Vamos a parar el mundo para
borales de género, en especial, la brecha salarial y la pre- cambiarlo ¡Viva la lucha de las mujeres! ¡Viva el 8 de Marzo!
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claro la falta de interés sobre el asunto, cuando a nuestro Consejos Sociales de las Universidades, porque su repre-
sindicato le parece una cuestión fundamental. También nos sentatividad no se corresponde con el número de mujeres
dolería que los empresarios los implantasen para embol- que forman parte del colectivo universitario ni de la socie-
sarse una cantidad y no por razones de justicia hacia sus dad. Tanto la Ley de Igualdad como la LOU indican que
trabajadoras. se debe procurar la presencia equilibrada entre mujeres y
Incluso se da la paradoja de que centros que aplican la hombres en los cargos de responsabilidad, lo cual supon-
“educación diferenciada” hagan alarde de su plan de igual- dría la presencia al menos de un 40% del sexo menos re-
dad. Todo muy formal, muy atado, para que nadie pueda presentado.
tacharles de lo que son. Las universidades se han dotado de Unidades de Igualdad
La LOMCE, con su fomento de la educación por sexos y para promover la igualdad efectiva entre mujeres y hom-
su ninguneo de los consejos escolares en temas de con- bres. Desde estas unidades se elaboran los Planes de
tratación, ha supuesto un retroceso en materia de igualdad, Igualdad, se realizan estudios y acciones formativas y de
contraria precisamente a otras leyes y propuestas de las sensibilización, además de velar por la aplicación efectiva
administraciones públicas. del principio de igualdad.
Aun siendo la enseñanza un ámbito de tradición femenina, No podemos olvidar esta lacra social que sacude a las uni-
la Federación de versidades como a cualquier otra organización que es el
acoso sexual y la violencia de género. Última manifestación
Enseñanza de CCOO de Madrid y su Equipo de Enseñanza de la desigualdad entre hombres y mujeres es necesario
Privada tenemos mucho trabajo por hacer, y lo haremos. abordar los distintos tipos de acoso de los que son víctimas
las mujeres que forman parte de la comunidad universita-
UNIVERSIDAD ria. Todas nuestras universidades cuentan con Protocolos
de actuación contra el acoso sexual y el acoso por razón
En el ámbito universitario la presencia de la mujer es ma- de género. La universidad debe velar por su aplicación, la
yoritaria. Las mujeres estudiantes constituyen más del 50 protección de las víctimas y la sanción de los responsables.
% del alumnado y acaban sus estudios en un porcentaje Para evitar en la medida de lo posible estas situaciones es
aún mayor; excepto en las ingenierías donde aún son una fundamental realizar actividades de sensibilización y pre-
minoría, lo que está claramente relacionado con los roles vención del acoso
preconcebidos de hombres y mujeres y los estereotipos de
género. Nuestras universidades han de jugar un papel fundamental
en la transformación de la sociedad e impulsar el valor de
Son mayoría también las mujeres entre el Personal de Ad- la igualdad, no solo incorporándolo en los contenidos de
ministración y Servicios (PAS), especialmente en PAS fun- los planes de estudio de grados y postgrados, así como
cionario y en las escalas inferiores, igualándose el porcen- en investigaciones y estudios especializados, sino también
taje entre mujeres y hombres en cuanto se va ascendiendo respetando este valor en su funcionamiento diario.
en las escalas. En el personal laboral sí hay una presencia
mayoritaria de hombres en los servicios de mantenimiento.
PÚBLICA NO UNIVERSITARIA
Respecto al Personal Docente e Investigador, las mujeres
siguen siendo una minoría, especialmente entre los titulares
Igualdad en Primaria
y sobre todo entre los catedráticos, lo que demuestra lo Lentamente se van recogiendo los frutos de las iniciativas
difícil que es para la mujer ascender en el ámbito académi- llevadas a cabo por el profesorado de Primaria de los cen-
co. En cuanto a las investigadoras, pese a ser la mitad de tros de titularidad pública de la Comunidad de Madrid. Son
los miembros de los equipos de investigación, son minoría cada vez más los claustros que han desarrollado un plan
entre los investigadores principales de los proyectos. de juegos, dirigidos o libres, para el descanso lectivo del
Hay que hacer hincapié en la necesidad de una mayor pre- alumnado a media mañana. En lugar de ocupar la práctica
sencia femenina en los órganos de gobierno de nuestras totalidad del espacio disponible para jugar al fútbol y dejar
universidades, no solo rectoras que brillan por su ausencia, la perifera para sentarse o pasear, el alumnado se distri-
sino más vicerrectoras, decanas y vicedecanas, directoras buye por el patio siguiendo un cuidadoso plan en el que
de departamento y miembros de Consejos de Gobierno y se rotan día a día espacios multiusos, actividades y ma-
teriales. Rayuelas pintadas en el suelo, zonas de arena ,
asfalto y pistas para su uso con combas, zancos, pelotas,
badminton, baloncesto, fúbol... Se recuperan juegos en los
que el alumnado participa independientemente de su sexo
o edad y se repiensan otros. Incluso el fútbol, tradicional-
mente masculino y masculinizador y en el que es fácil que
afloren emociones de diversa índole, debe ser inclusivo y
conciliador, de manera que una resolución inadecuada de
un conflicto tendrá unas consecuencias consensuadas, a
medida del aprendizaje que sea necesario reforzar.
El breve espacio de tiempo (generalmente media hora) para
la distribución de materiales, disfrute y posterior recogida,
puede hacer pensar que este tipo de operativas es inviable.
Nada más lejos: la motivación del alumnado es alta, tam-
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bién la del profesorado, y tras el caos de los Así mismo y a modo de ejemplo os ponemos una serie de bibliografía:
primeros días hasta que unxs y otrxs adquiri- PICAZO GURINA, Marina (2008), Alguien se acordará de nosotras. Mu-
mos la nueva rutina, el grado de satisfacción jeres en la ciudad griega antigua. Ed. Bellaterra, Barcelona.
aumenta exponencialmente. Se desarrollan la DÍEZ CELAYA, Rosalía (1997), La mujer en el mundo. Ed. Acento, Ma-
paciencia, la empatía, hábitos de orden y reco- drid.
gida a la vez que se disfruta con todo ello y se BALLARÍN, Pilar y Cándida MARTÍNEZ (1995), Del patio a la plaza. Las
aprende a gestionar emociones. Ciertamente, mujeres en las sociedades mediterráneas. Ed. Universidad de Gra-
el esfuerzo para ponerlo en marcha es impor- nada.
tante; los resultados, en los centro en los que HERNANDO, Almudena (2008), «Género y sexo. Mujeres, identidad y
he podido ser testigo, espectaculares. Un paso modernidad», Claves de razón práctica
más hacia la inclusión, la equidad y una socie- SEGURA, Cristina (2005), «Mujeres en el mundo urbano: instituciones
dad más justa. y trabajo», en
Isabel MORANT (coord), Historia de las Mujeres en España y América
SECUNDARIA Latina, vol.I. Ed. Cátedra, Madrid.
LORAUX, Nicole, (1991), «¿Qué es una diosa?», en DUBY, George y
El reto en secundaria es doble por un lado PERROT, Michelle
conseguir que la administración reconozca la (dir.), Historia de las Mujeres. La Antigüedad, Vol. I. Ed. Taurus, Madrid
importante labor de las tutorías en la formación TORJENSEN, Karen (1996), Cuando las mujeres eran sacerdotes. El
de nuestro alumnado y por otro lado conseguir liderazgo de las mujeres en la iglesia primitiva y el escándalo de su
la implicación de todo el profesorado a la reali- subordinación con el auge del cristianismo. Ed. El Almendro, Cór-
zación de tutorías efectivas en las que tanto las doba.
alumnas como los alumnos puedan expresarse ÁLVAREZ GONZÁLEZ, Ana Isabel (1999), Los orígenes y la celebración
en las que llegar a través del dialogo y la re- del Día Internacional de la Mujer, 1910-1945. Ed. KRK, Oviedo.
flexión a la comprensión de situaciones de falta CARRO FERNÁNDEZ, Susana (2002), Tras las huellas de “El segundo
de respeto ya sea por razones de género como sexo” en el pensamiento feminista contemporáneo. Ed. KRK, Ovie-
por razones de aceptación del diferente. do.
Es un doble reto diferente pero para ello traba- SEGURA, Cristina (ed.) (2000), Las mujeres y el poder. Representacio-
jamos en la realización de materiales a la vez nes y prácticas de vida. Ed. Almudayna, Madrid.
que os ofrecemos en esta revista la posibilidad BOLLMANN, Stefan (2006), Las mujeres que leen son peligrosas. Ed.
de acceder a los de “yo no me trago este sapo”. Maeva, Madrid.
Tenemos conocimiento de IES en los que se FÖLSING, Ulla (1992), Mujeres Premios Nobel. Ed. Alianza, Madrid.—
están realizando trabajos que se pueden reali- (2007), Nosotras biocientíficas españolas. Ed. L’Oreal, Madrid.
zar de forma transversal en diferentes áreas en MAGALLÓN PORTOLÉS, Carmen (1998), Pioneras españolas en las
las que la presencia de la mujer es resaltada, ciencias. Las mujeres del Instituto Nacional de Física y Química.
podemos encontrar filmografía en la cual ana- C.S.I.C., Madrid.
lizar la imagen de la mujer, a modo de ejemplo WOOLF, Virginia (2005), Una habitación propia. Ed. Seix Barral, Barce-
os pongo unos títulos que ya están trabajando lona.
en algunos IES como el IES de Mejorada que ALBORCH, Carmen (2004), Libres. Ciudadanas del mundo. Ed. Santi-
ha querido compartir con nosotras sus trabajos llana, Madrid
y experiencias: LAS 13 ROSAS (2007), ÁGORA GALLEGO ABAROA, Elena (2005), Mujeres economistas, 1816-1898.
(2009), AMÉLIE (2001), ÁNGELES DE HIERRO Ed. Delta, Madrid.
(2004). AGUADO HIGÓN, Ana y otras (1994), Textos para la historia de las Mu-
jeres en España. Madrid.
ANDERSON, Bonnie S. y Judith P. ZINSSER (1991), Historia de las mu-
jeres. Una historia propia. (2 vols.). Ed. Crítica, Barcelona.
BUTLER, Judith (2007), El género en disputa. El feminismo y la subver-
sión de la identidad. Ed. Paidós, Barcelona (traducción de la edición
inglesa de 1999).
GAGO GARCÍA, Cándida (2006), Atlas de las mujeres. Ediciones SM,
Madrid.
SEAGER, Joni (2001), Atlas del Estado de la Mujer en el Mundo. Ed.
Akal, Madrid.
SEGURA GRAÍÑO, Cristina (1998), Diccionario de Mujeres célebres.
Ed. Espasa, Madrid.
VALCÁRCEL BERNALDO DE QUIRÓS, Amelia (2008), Feminismo en un
mundo global. Cátedra ediciones, Madrid.
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BRECHA SALARIAL
La brecha salarial de género y la desigualdad estructural
15,0 Tiempo
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completo
#1 El origen social y cultural 10,0
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de la brecha salarial 5,0
Tiempo
La discriminación salarial es resultado 0,0 parcial
de la mayor explotación y desigualdad 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015
que sufren las mujeres en su trayectoria
Gabinete Económico de CCOO con datos de la Encuesta Anual de
en el mercado de trabajo, que a su vez
tiene su origen en la desigualdad so-
cial, cultural, educativa, en las tareas de
cuidados,… que soportan desde niñas paña. El enfoque de análisis no es neu-
igualdad efectiva. En 2018 la desigual-
y que las predispone a asumir roles y tral ni para dimensionar y concienciar
dad de género todavía sigue aquí con
tareas desiguales durante su vida. Si el del problema, ni para señalar y actuar
toda su crudeza e intensidad, por lo que
objetivo es acabar con la brecha sala- ya toca reflexionar críticamente sobre Las mujeres sufren la desigualdad la-
rial de género hay que actuar sobre los las líneas de actuación implementadas boral: 1) en el acceso, con ocupacio-
factores estructurales del capitalismo y en las últimas décadas. nes y sectores subrepresentados; 2)
del patriarcado que determinan la des- en la promoción y trayectoria laboral,
igualdad de las mujeres. #2 La brecha salarial influido por la menor duración y mayo-
La desigualdad que sufren las mujeres de género es del 30% res interrupciones de su vida laboral; 3)
en el mercado de trabajo es una forma discriminación salarial en el puesto de
añadida de explotación contra la que se La brecha salarial entre la ganancia trabajo.
lleva décadas luchando, conciencian- anual media de hombres (25.993 euros)
El grueso de la desigualdad salarial
do, legislando,… y sin embargo, la des- y mujeres (20.052 euros) fue de 5.941
igualdad laboral y la brecha salarial de entre mujeres y hombres no se explica
euros en 2015, que es la cuantía que
género siguen existiendo sin evidencias porque una mujer con igual jornada,
tendría que aumentar el salario medio
claras de mejora. La Constitución Espa- de las mujeres para igualarse al de los contrato, ocupación, sector, antigüe-
ñola (1978) y el Estatuto de los Trabaja- hombres. Desde CCOO decimos que dad, responsabilidad,… que un hom-
dores (1980) sentaron las bases legales la brecha es del 30% porque ese es el bre cobre menos por realizar el mismo
para la igualdad real, evitando cualquier porcentaje que tendría que aumentar el trabajo y sufra discriminación salarial.
tipo de discriminación en materia de salario anual medio de las mujeres para El problema es que esa igualdad de
empleo, salarios, promociones, grupos equiparse con el de los hombres. Este partida es falsa: el perfil de inserción
profesionales,… La Ley para la igualdad porcentaje es muy superior al que ofre- y de trayectoria laboral de mujeres y
efectiva de mujeres y hombres reiteraba cen otras estimaciones de la brecha de hombres es muy diferente y determina
los mismos objetivos en 2007 y trataba género, que sirven para camuflar la di- que sus ganancias medias sean muy
de articular una serie de medidas (pla- mensión real de la desigualdad entre la distintas. Las mujeres están sometidas
nes de igualdad,…) para avanzar en la ganancia de hombres y mujeres en Es- a una carrera de obstáculos, discrimi-
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#3 La jornada parcial
explica la mitad de la
brecha salarial
El 50% de la brecha salarial de género
que existe en España se explica por
la diferente jornada laboral de muje-
res y hombres. La brecha salarial se
reduciría a la mitad (de 5.941 a 2.948
mientras que el salario base –el compo- nibilidad horaria; mientras que no se cargas entre hombres y mujeres; es ne-
nente más importante del salario- expli- retribuyen los atributos “feminizados”: cesario incluir cláusulas de acción po-
ca el 54% de la brecha salarial. En pro- atención, precisión, resistencia, etc. sitiva a favor de las mujeres en la con-
medio, los hombres cobran cada mes tratación, promoción, formación… para
613 euros en complementos salariales #5 Actuar sobre las causas aquellas actividades y ocupaciones
y las mujeres solo 427 euros. Los com- de la desigualdad de género donde están sub-representadas. En las
plementos salariales que cobran en pro- empresas tienen que negociarse y apli-
medio las mujeres tendrían que aumen- La discriminación laboral femenina tiene carse planes de igualdad contundentes
tar un 44% para equiparse con lo que que resolverse actuando desde su ori- y eficaces, para lo que es necesario
cobran los hombres. En unos casos se gen en una sociedad concienciada cuyo contar con una negociación colectiva
trata de complementos otorgados con sistema educativo promueva principios amplia y profunda. Es prioritario actuar
criterios discrecionales, sobre todo en de igualdad de género en las aulas, en sobre los dos factores que explican un
los puestos directivos, y que benefician las carreras académicas y en las salidas mayor porcentaje de la brecha salarial
menos a las mujeres. En otros casos profesionales. En la actividad laboral de género: 1) la feminización de las jor-
retribuyen aspectos “masculinizados” tiene que producirse una socialización nadas parciales y 2) la masculinización
del trabajo, como el esfuerzo físico, la plena de las tareas de cuidado y repro- de los complementos salariales.
penosidad, la nocturnidad, o la dispo- ducción y un reparto igualitario de sus
Hoy el reto es
conseguir que la
igualdad legal
se convierta en
Igualdad real
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LAS MUJERES EN LA
EDUCACIÓN DE ADULTOS Eduardo Cabornero
Profesor del CEPA de Entrevías y
Delegado de CCOO-FREM responsable
de EPA
Mujeres, trabajadoras y estudiantes, veces hasta las 3h no logra llegar a casa. Le cuesta muchísimo
llegar puntual a clase. Como Sonia, Edna estudia Secundaria
día a día en los cepas en el CEPA de Entrevías, pero en turno de mañana. A las nueve
Cinco y cuarto de la mañana. Jueves de finales de enero. Sue- de la mañana Sonia ya lleva casi tres horas trabajando. Con
na el despertador. Sonia, 36 años a punto de cumplir 37, madre Edna llegan a clase Estefanía C 28 años, madre de dos niños
de una chica de 15 años, empieza un nuevo día aunque aún no y encargada en una empresa de comida rápida y con horarios
ha amanecido, un nuevo día que a quien no está acostumbra- tan cargados que a veces no puede llegar a clase; Zakia que
do podrá parecer una locura. Sonia ni se para a pensarlo, lo ahora no está trabajando, tiene tres hijos, el mayor 12 años, los
otros dos en el colegio, deja a los pequeños en el colegio, va al
afronta. Está acabando enero y, claro, hace frío. Sonia procura
cepa mientras están en clase los niños y después continúa con
que no se despierte nadie más en casa, aún les queda alguna
su trabajo diario en casa. En el mismo grupo, por la mañana,
hora para descansar, ella a las 6.15h tiene que estar trabajando
están Noemi H, Faustina, Noemi C, L uz… son más jovencitas,
en Manuel Becerra, para llegar tendrá que utilizar dos medios
rondan los veinte años, y alguna de ellas a veces “no llegan”
de transporte público. Pero antes saca a su perra que la saluda a clase, pero cuando están trabajan y aprovechan el tiempo,
el nuevo día. Sonia trabaja en una empresa de limpieza, limpia incluso reconducen a algún que otro revoltoso de la clase. Tie-
oficinas y portales. A las 8h Estefanía G, 25 años, empieza su nen interés por aprender y progresar, esta es una caracterís-
primer servicio de Ayuda a Domicilio “que consiste en ayudar tica prácticamente generalizada en las mujeres que estudian
a las personas con capacidad reducida o con deterioro cogni- en los cepas. En el cepa son más del 60%, proporción que se
tivo”, según explica ella misma. “El primer servicio es asear a mantiene en la mayoría de los grupos.
una mujer para ir al Centro de Día; El segundo movilizar a otra
A las 10h ha empezado su jornada Estafenía N, 25 años, en
mujer para asearla; El tercero ayudar a los usuarios a limpiar la
una conocida tienda de ropa en la Gavia, ha empezado a traba-
casa; El cuarto, muy parecido al tercero. Porque a partir de las jar “diez horas a la semana por 200 euros al mes, es muy triste,
10 empiezo con las limpiezas…”. pero espero que me suban de horas ya que me dijeron que me
Nueve de la mañana. Edna, 35 años, llega a clase. Ha estado subirían”, hace las tareas de la casa, limpia, cocina, friega y si
trabajando hasta la 1.15h de la mañana. Llegó a casa sobre las la da tiempo y “no tengo muchos deberes” se echa una cabe-
2h, no ha sido un día malo y ha ganado una hora de sueño, a zada antes de irse al cepa …
13h cuando acaba sus clases el grupo de la mañana Sonia se Después de Sociedad, examen de Lengua. Algunas tienen di-
dirige a Quintana, para seguir limpiando oficinas y portales, ficultades con la ortografía e incluso con la estructuración del
después de pasar dos horas trabajando en San Sebastián de lenguaje, pero se afanan en corregirlo. Y a las 21.30h salen del
los Reyes. Me abruma solo leerlo. Mientras, Estefanía G sobre cepa y a casa. A Edna que ya está trabajando le faltan como
las 15h termina y a las 16h llega a casa. cuatro horas para volver a casa. Sonia, Estefanía y alguna otra
A las 17.30h empieza la clase de Sociedad, es jueves. Están aún bajarán a sus perros a que les de algo el aire y hagan sus
con la unidad didáctica de Urbanismo, diseñando un campo de necesidades. Y a casa, a preparar la ropa del día siguiente y…
refugiadas/os para mil personas, y de eso sí que entienden So- puedes volver a empezar a leer estas líneas.
nia, Estefanía, Edna… Marlene, trabajadora doméstica en Pinar Es admirable el buen gesto con que lo llevan todo. “Estudio, me
de Chamartin de 9 a 17h llega con un poco de retraso pero no lo paso bien aprendiendo todo y cuando termina la clase me
falta prácticamente nunca y se pone a la tarea. Por supuesto voy a casa volando”, como explica L.Joanna
que entienden de organizar espacios y tiempos. Mientras las administraciones reconocen que:
“El nivel de formación de la población adulta (de 25 a 64 años) es un indicador relacionado con el desarrollo y los niveles de
empleo de la sociedad actual y futura. La Estrategia Europa 2020, como continuación de la Estrategia de Lisboa, pretende
alcanzar el desarrollo de una sociedad con alto nivel de empleo, sostenible y con cohesión social.
El objetivo de crecimiento integrador se propone garantizar el acceso y las oportunidades para todos en la sociedad de los
próximos años, utilizando plenamente el potencial laboral invirtiendo en las cualificaciones de la población.
Se incluye información de los porcentajes de población según rangos de edad y nivel de formación alcanzado: 1ª etapa
de educación secundaria e inferior, 2ª etapa de educación secundaria y educación postsecundaria no superior, educación
superior y doctorado. Se considera la población adulta (de 25 a 64 años) y los siguientes rangos de edad en esta población:
de 25 a 34 años, de 35 a 44 años, de 45 a 54 y de 55 a 64 años.
El porcentaje de población de 25 a 64 años que sólo ha completado la 1ª etapa de educación secundaria e inferior forma
parte de los Indicadores de Desarrollo Sostenible de la Unión Europea en el apartado de Inclusión Social, como indicador
complementario.”
http://www.ine.es/ss/Satellite?c=INESeccion_C&p=1254735110672&pagename=ProductosYServicios%2FPYSLayout&cid
=1259925481659&L=0
Pues que las administraciones implicadas escuchen un poco y unas condiciones de vida dignas, estos contactos ayudaron
y empiecen a hacer algo. Hay mucho que mejorar y en buena mucho a nuestra sociedad a entender que era una labor de
parte depende de ellos. todas y todos contar con la Educación de las Personas Adultas
Ah, en el CEPA de Entrevías, como en otros, la directora es una (EPA) para construir un mundo más justo. A estas mujeres y
mujer. Este es un aspecto importante pues también las profe- hombres se les debe una estructura de Educación de Personas
soras tienen, generalmente, una carga mayor en las tareas de Adultas avanzada y moderna para su tiempo, la que se asentó
sus casas y esto hace que conozcan y valoren mejor el esfuer- en los años 80, un poco desfasada hoy en día por la dejadez
zo de las alumnas que los hombres, en general para que no se y desidia de las administraciones responsables. Es necesa-
me ofenda nadie. En los cepas se integran mujeres desde los rio actualizar la estructura de la EPA a las necesidades de la
18 años hasta con más de setenta y esto hace que todas, y población actual, con estructura específica, con currículums
todos, entiendan mejor el mundo actual. Y también enriquece específicos, con centros específicos integrales... Estructurar la
a todas y a todos la diversidad de nacionalidades. EPA a las necesidades de las Sonia, Estefanía, Edna, Marlene,
Estefanía G, Luz, Noemí, Claudia, Estefanía C, Claudia, Yolan-
Todas estas mujeres son dignas herederas de aquellas que en
da… que pueblan los cepas.
los años setenta consiguieron con sus ganas de aprender, su
pundonor y su buen criterio organizar clases para personas A todas las citadas el mayor agradecimiento, reconocimiento y
adultas en los barrios, casi siempre eran mayoritarias las mu- admiración de, como dicen ellas, su profe. Espero acercarme
jeres, como ahora, también había hombres que después de a estar a vuestra altura. Muchas gracias por vuestra colabora-
trabajar perseguían lo mismo que ellas un mundo más justo ción chicas, mejor grandes porque sois muy grandes.
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Apenas unas horas antes de que el destino me zamos la andadura. Ese era nuestro plan. Acabar...
arroje a la vida en esta engañosa mañana de luz, y escapar.
las pocas hojas que aún quedan del roble del patio Una semana después, con los apuntes desorde-
principal acarician insistentemente el ventanal, y yo nadamente apilados sobre el frío suelo de la habi-
supongo que quizá quieran llamar la atención y chi- tación del hostal —y con más valor del que jamás
varme que tengo tiempo para que mis malgastados mis padres pudieran sospechar—, salí a comerme
sentidos se despidan de tantos recuerdos, y pueda ese pequeño mundo de no más de doscientos ha-
constatar que, cuando parta, ya no seré la misma. bitantes. Pero antes necesitaba comprobar que
Abro el balcón con más ira que fuerza, convenci- Aurora seguía convencida de lo que, durante años,
da de que el insolente viento del recién estrenado su familia y la mía no dejaron de llamar «esa loca
otoño de este olvidado pueblo castigará por última decisión de ser maestras de escuela en el fin del
vez mi rostro y mi memoria. De pronto, sin previo mundo». Compré una ficha en el estanco y la llamé
aviso, retumba en mi cabeza mi propio discurso: por teléfono:
“... y es que tiende a confundirse la longevidad con —¿Aurora, tienes miedo?
el envejecimiento. Pero ser una persona longeva —No te entiendo, Mamen.
necesariamente no siempre significa ser vieja...”. Y —¿Que si estás segura?
esta última palabra se me clava en las sienes hasta —Vaya, vaya... —me respondió en un tono
hacerme daño: VI-E-JA. ¿Cómo puede ser, si juro burlón que entonces no entendí—. Escucha lo que
que hace nada que llegué hasta aquí más carga- te digo, guapa: confío más en ti que en mí. Así que,
da de ilusión que de libros, y de imaginación más olvídate de ñoñerías. Pon ahora mismo un pie en la
que de verdad? No, no, imposible. Yo soy longeva, clase, y deja que el otro se apoye siempre en tres
como mi madre. Está claro. pilares: lo que sabes, lo que vas a ir aprendiendo, y
Me recompongo al instante y, cuando mis ojos lo que tu imaginación haga con todo ello. Esa es la
buscan perderse tras el horizonte que hoy mismo clave.
me espera, reparo en el camino que me llevará a la Y aquí estoy, rememorando mi primer día, ayuda-
estación. Mi gesto cambia. Sonrío: las anémonas da por la suave melodía del rumor del agua bajando
de sus márgenes volverán también hoy, como en- por los aleros del tejado de esta escuela que tanto
tonces, a mostrar con insolencia su flamante gama me ha dado. Recuerdo que entré serena en el aula,
de lilas, rojos y azules. Cómo olvidar la colorida simulando seguridad, porque solo yo debía conocer
vereda que me acompañó hasta mi nuevo hogar. la verdad. Me presenté con voz firme y, de pronto,
Mi primer empleo. una luz lo inundó todo. Más de treinta ojillos radian-
Aquel 20 de septiembre, de hace algo más de cua- tes me observaban atentos esperando algo de mí.
renta años pisé por primera vez estas tierras, con Y entonces comprendí: todas ellas necesitaban sa-
las suelas de mis camperas sucias aún por el barro ber, conocer lo que los libros decían, pero también
de una universidad de protestas, manifestaciones lo que la vida les iba a brindar o robar más allá de
y huelgas. Conseguí plaza en esta escuela que ya esos montes y esos valles: sus sueños, sus renun-
empiezo a echar de menos, y Aurora —mi compa- cias, sus temores... Y ellas me habían elegido.
ñera de clase y de sueños — a casi cuatrocientos Lo dejé todo, y me puse a ello hasta hoy, que sé
kilómetro de distancia, en un pueblo perdido del que el camino de anémonas no va ser suficiente
sur. Yo salía entonces con Toni, y ella vivía encandi- para salvar obstáculos, ni saltar vallas que logren
lada con las promesas de Luismi, un chaval de Ca- frenar tanto barrizal de indiferencia. Y aunque Au-
nillas que más que ilusiones le daba disgustos. Sin rora y yo hoy salimos de nuevo al mundo cargadas
embargo, la vocación venció al arrebato impetuoso de años, juntas seguiremos en ello. Compañeras, y
de nuestro primer amor, y en julio de 1976 comen- amigas para siempre.
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